Memorias Jornadas Derecho Constitucional
Memorias Jornadas Derecho Constitucional
Memorias Jornadas Derecho Constitucional
de las
Jornadas académicas
“Derecho Constitucional
para operadores de justicia”
Jornadas académicas:
“Derecho Constitucional
para operadores de justicia”
Jornadas académicas:
“Derecho Constitucional para operadores de justicia”
Dra. María del Carmen Maldonado
Presidenta del Consejo de la Judicatura
ISBN: 978-9942-8567-3-9
Diseño y Diagramación: José Luis Paucar
Impreso en La Gaceta Judicial, Quito - Ecuador
Contenido
Presentación
Dr. Pablo Sarzosa Játiva 8
Director Nacional de la Escuela de la Función Judicial
Acto inaugural 11
Intervenciones 12
Bienvenida Dr. Jhoel Escudero, Vicerrector IAEN (E) 12
Ofrecimiento del Acto por el Dr. José María Vázquez, Rector UNIR 14
Conferencia Magistral 16
Dra. María del Carmen Maldonado Sánchez, Presidenta del Consejo
de la Judicatura
Los Principios Constitucionales, en el Marco Normativo del Ecuador
Ponencias 35
Dr. Pedro Serna Bermúdez 36
Neoconstitucionalismo e Interpretación Judicial
Agendas 319
Acto de inauguración 320
Académica 321
Presentación
Dr. Pablo Sarzosa Játiva
Director Nacional de la Escuela de la Función Judicial
l
a educación es un derecho de las tradicionales de la justicia
personas a lo largo de su vida y constitucional.
un deber ineludible e inexcusable
del Estado, tal y como se plasma en el Este acto académico que se llevó a
artículo 26 de la Constitución; por lo cabo el 17 y 18 de febrero de 2020, en
cual, el Consejo de la Judicatura y la el Auditorio del Instituto de Altos
Universidad de La Rioja – UNIR aunaron Estudios-IAEN en Quito - Ecuador,
esfuerzos para desarrollar las Jornadas contó con la asistencia de operadores
Académicas «Derecho Constitucional de justicia entre otros, jueces de la Corte
para operadores de justicia», las Nacional, de las Cortes Provinciales y
mismas que se efectuaron en el de primer nivel; defensores públicos;
marco del Convenio de Cooperación y, fiscales, quienes fortalecieron sus
Interinstitucional suscrito por las dos conocimientos gracias a las destacadas
instituciones en el mes de julio del año ponencias de expertos de alto nivel de
2019. España, Italia y Ecuador.
entre otras cosas, la independencia quien señaló que todos los derechos
judicial, tan necesaria para que se previstos en la Constitución, así
cumplan los preceptos constitucionales como los que constan en tratados
y principios fundamentales de todo internacionales, son exigibles. “Esta
Estado de Derecho, promovida por la exigibilidad será de manera individual
actual administración del Consejo de la o colectiva ante las autoridades
Judicatura. competentes, quienes garantizarán su
efectivo cumplimiento. Así los jueces se
El ofrecimiento del acto fue realizado convierten en garantistas de derechos.
por el Dr. José María Vázquez, Rector de
UNIR, quien empoderado de la gestión Las Memorias ofrecen ser un material
académica internacional del encuentro, de consulta e investigación para la
agradeció la confianza entregada por comunidad jurídica del país, es así
el Consejo de la Judicatura de Ecuador como cada uno de los lectores podrán
en permitir la colaboración de UNIR; profundizar sus conocimientos en
así como, la participación de ponentes las dieciséis temáticas que fueron
internacionales. impartidas por los ponentes nacionales
e internacionales:
En el presente documento también se 1. Neoconstitucionalismo e
invita a revisar la Conferencia Magistral interpretación - Dr. Pedro Serna
“Los Principios Constitucionales, en Bermúdez, Catedrático de la
el Marco Normativo del Ecuador” Universidad de la Coruña.
desarrollada por la Dra. María Del 2. Interpretación y mutación
Carmen Maldonado, Presidenta del constitucional - Prof. Carlos
Consejo de la Judicatura de Ecuador, Vidal Prado, Catedrático de
Acto
Inaugural
Intervención
Bienvenida
E
l Instituto de Altos Estudios en los que la gestión académica es de
Nacionales contribuye en la trascendental importancia, asimismo
formación y capacitación de se reconoce la labor de todas las
los servidores públicos del Ecuador, Universidades del país, en pro del
y se complace en dar la bienvenida y desarrollo constitucional para la
prestar sus espacios para la ejecución Justicia ecuatoriana.
de esta cita académica a que convoca
el Consejo de la Judicatura en el marco Los jueces y operadores de justicia
de acción de sus ejes fundamentales, son quienes escuchan las voces de
12
Intervención: Dr. Jhoel Escudero, Vicerrector IAEN (E)
Construyendo un servicio de justicia para la paz social
Jornadas académicas “Derecho Constitucional para operadores de justicia”- Memorias
Intervención
Ofrecimiento del Acto
S
e agradece la confianza del del Derecho, sin embargo la
Consejo de la Judicatura en evidente importancia de su objeto
permitir la colaboración de de estudio ha hecho que en el
UNIR en este evento, así como último Siglo se hayan formado
la participación de ponentes grandes constitucionalismos,
nacionales e internacionales (…) tomando para su análisis el
estudio del derecho comparado;
La ciencia del Derecho es decir, se ha venido tonando
Constitucional es un saber en un nivel científico, y la
relativamente reciente sobre todo jurisprudencia de las corte y
si se compara con otros ámbitos tribunales constitucionales son
Conferencia Magistral
Los Principios Constitucionales, en el Marco
Normativo del Ecuador
A
partir de la aprobación de intercultural, plurinacional y laico,
la Constitución en el año tal como lo define el artículo 1 de la
2008, se establece una nueva normativa suprema.
concepción de Estado, pasando del
tradicional Estado social de derecho a Bajo este principio fundamental se
un Estado constitucional de derechos revaloriza la dignidad de las personas,
y justicia social, democrático, por medio del reconocimiento de la
soberano, independiente, unitario, supremacía del texto constitucional
Por lo tanto, una vez que los derechos ejercicio de sus cargos.
han sido reconocidos y adquiridos no
pueden ir en retroceso o disminuir, es Este principio guarda relación con lo
decir ser retroactivos. que determina el artículo 426 de la
Constitución, puesto que todos los
9. Principio del respeto por los ciudadanos nos encontramos llamados
derechos.- a ejercer y garantizar los derechos
consagrados en la Norma Suprema.
La concepción de que el Estado ya no
sea de derecho sino constitucional de Un Estado Constitucional se
derechos, involucra un cambio radical, fundamenta en que los actos
tanto en la parte orgánica como en la públicos y privados están sometidos
parte dogmática de la Constitución. a la Constitución, incluso la ley y
El fin del Estado ya no es la ley ni el las sentencias a través del control de
Estado en sí mismo, el objetivo del constitucionalidad y el rol activo y
Estado son las personas y la obligación creativo de los jueces que en un primer
de garantizar y respetar sus derechos. escenario son los primeros en garantizar
(González Calle, 2013). el reconocimiento de los derechos y
el efectivo ejercicio de las garantías
De tal manera que el Estado, sus constitucionales. Un segundo control
delegatarios, concesionarios y toda se lo ejerce con la internacionalización
persona que actúe en ejercicio de una del derecho constitucional, siendo su
potestad pública, están obligados a fuente los diferentes tratados que se
reparar las violaciones a los derechos suscriban entre los sujetos de derecho
de los ciudadanos por la falta o internacional.
ausencia en la prestación de los
servicios públicos o por las acciones En una sociedad fundamentada en
u omisiones de sus funcionarios en el base a derechos, tanto la sociedad
como el derecho del que esta emana, una adecuada corrección de la falta
están sometidos a los derechos de y el correspondiente amparo del
las personas; además, se reconocen derecho, se pierde toda funcionalidad
los diferentes sistemas normativos, y disminuye la eficacia normativa.
distintos al derecho producido por
el Parlamento o Asamblea, y se Este principio estableció dos ejes,
multiplican, en consecuencia, las por un lado la responsabilidad del
fuentes de derecho. (Ávila Santamaría, Estado frente a las actuaciones de
2009, pág. 773). sus funcionarios, y por otro lado el
derecho de repetición, puesto que
Al ser el más alto deber del Estado no resulta justo que del presupuesto
el respetar y hacer respetar los del Estado, que es de todos los
derechos, es lógico de colegir ecuatorianos, se tenga que pagar las
que todos los servidores públicos indemnizaciones a las que se diere
tienen la responsabilidad objetiva o lugar por el actuar de funcionarios,
contractual frente a esta obligación, considerando que cuando se asume
y por tanto, son responsables tanto un puesto en el sector público, se
por su acción como por su omisión. debe estar consciente que su actuar
Es decir, por haber cometido una puede generar ciertas implicaciones
violación de derechos, así como legales, por lo que al momento
por no haber impedido que esta de tomar una decisión, ésta debe
violación ocurra en primer lugar. El tomarse como si de su patrimonio
resarcimiento de los derechos es una propio o la afectación de sus propios
calidad básica para su ejecución. Sin derechos se tratare.
Ponencias
Neoconstitucionalismo e
interpretación
D
eseo comenzar agradeciendo uno subjetivo y otro objetivo: el
en primer lugar al Consejo de concepto de constitución que posea
la Judicatura de la República el intérprete y el tipo de materiales
del Ecuador y a la Universidad normativos que deba interpretar. Los
Internacional de La Rioja la amable y denomino respectivamente subjetivo
generosa invitación a participar en este y objetivo porque el primero se refiere
evento, y, en segundo lugar, pidiendo al sujeto de la actividad interpretativa,
disculpas por no poder encontrarme es decir, al intérprete constitucional, a
presente entre ustedes esta mañana, su propia subjetividad, y puede operar
debido a circunstancias familiares. incluso de manera inconsciente. El
segundo, por su parte, es objetivo
El argumento principal o tesis de en la medida en que depende de la
fondo de mi ponencia será el siguiente: estructura misma de las disposiciones
tanto la teoría como la práctica de la constitucionales.
1
He ofrecido un breve panorama en P. SERNA, “Presentación”, en L. M. CRUZ, La Constitución como
orden de valores. Problemas jurídicos y políticos. Un estudio sobre los orígenes del neconstitucionalismo,
Granada, Comares, 2005, pp. XIII-XIX.
2
Cfr. L. M. CRUZ, La Constitución como orden de valores…, cit., passim.
3
Cfr., entre otros lugares, R. ALEXY, “Sistema jurídico y razón práctica”, traducción de Jorge M. Seña,
Barcelona, Gedisa, 1994, pp. 159-161.
4
Cfr., entre otros lugares, L. PRIETO SANCHÍS, “Sobre el neoconstitucionalismo y sus implicaciones”,
en Justicia constitucional y derechos fundamentales, Madrid, Trotta, 2003, pp. 116-117.
5
Cfr. L. FERRAJOLI, “Pasado y futuro del Estado de Derecho”, en M. CARBONELL (ed.),
Neconstitucionalismo(s), Madrid, Trotta, 2003, pp. 13-31.
6
Cfr. G. ZAGREBELSKY, El derecho dúctil. Ley, derechos, justicia, traducción de Marina Gascón, Madrid,
Trotta, 1995.
7
Cfr. Ibid, p. 7.
8
Forsthoff habla de “desformalización de la Constitución” (Entformalisierung der Verfassung). La
rematerialización sería consecuencia de ello u otra forma de enunciar el fenómeno desde una perspectiva
más amplia. Cfr. E. FORSTHOFF, “Die Umbildung des Verfassungsgesetzes”, en Festschrift für Carl
Schmitt zum 70. Geburtstag, Berlin, Duncker & Humblot, 1959, pp. 35-62.
9
Cfr. R. DWORKIN, Freedom’s Law. The Moral Reading of American Constitution, New York, Oxford
University Press, 1996.
10
Cfr. R. SMEND, “Constitución y Derecho constitucional”, en Constitución y Derecho constitucional,
traducción de J. M. Pérez Beneyto, Madrid, Centro de Estudios Constitucionales, 1985, pp. 37-245.
11
Cfr. R. ALEXY, Teoría de la argumentación jurídica. La teoría del discurso racional como teoría de la
fundamentación jurídica, traducción de Manuel Atienza e Isabel Espejo, Madrid, Centro de Estudios
Constitucionales, 1989, en particular pp. 205-213, 311-318; también, en un contexto más amplio, “La
institucionalización de la razón”, traducción de José Antonio Seoane, Persona y Derecho 43 (2000), pp.
247-249.
12
Cfr. J. CIANCIARDO, El principio de razonabilidad. Del debido proceso sustantivo al moderno juicio de
proporcionalidad, Buenos Aires, Ábaco de Rodolfo Depalma, 2004, en particular capítulos III y IV.
42 Construyendo un servicio de justicia para la paz social
Jornadas académicas “Derecho Constitucional para operadores de justicia”- Memorias
13
Cfr. R. ALEXY, Teoría de los derechos fundamentales, versión castellana de E. Garzón Valdés y revisión de
R. Zimmerling, Madrid, Centro de Estudios Constitucionales, 1993, pp. 141 ss.
Cfr., por ejemplo, P. SERNA, “La interpretación constitucional del principio de dignidad de la
14
15
Sobre el concepto de discurso práctico general, cfr. R. ALEXY, Teoría de la argumentación jurídica. La
teoría del discurso racional como teoría de la fundamentación jurídica, cit., pp. 173-202. Un análisis, en
J. A. SEOANE, “Un código ideal y procedimental de la razón práctica. La teoría de la argumentación
jurídica de Robert Alexy”, en P. SERNA (dir.), De la argumentación jurídica a la hermenéutica. Revisión
crítica de algunas teorías contemporáneas, 2ª edición aumentada, Granada, Comares, 2005, especialmente
pp. 120-138. En cuanto a la posibilidad de que el discurso teorético se integre en el discurso práctico, no
plantea mayores problemas, siempre que no todas las proposiciones que integran un razonamiento
práctico sean teoréticas o empíricas. En todo caso, en la teoría de la argumentación de Alexy una
de las reglas del discurso práctico general prevé explícitamente la posibilidad de pasar del discurso
práctico al teórico. Cfr. R. ALEXY, Teoría de la argumentación jurídica. La teoría del discurso racional como
teoría de la fundamentación jurídica, cit., pp. 200-201.
Desde el punto de vista del contenido, A lo anterior debe añadirse que unos
la concepción de los principios que principios conviven dentro de un mismo
juzgo más acertada es la propuesta por texto legal o constitucional con otros
Francisco Laporta y seguida, entre otros, principios que apuntan a estados de
16
Cfr. F. LAPORTA, “Legal Principles”, en Action, Norms and Values. Discussions with Georg Henrik
von Wright, Georg Meggle, 1999, pp. 279 ss.; y A. AARNIO, “Reglas y principios en el ordenamiento
jurídico”, traducción de P. Serna, Anuario da Facultade de Dereito da Universidade da Coruña 4 (2000),
p. 598.
cosas que, en determinados contextos como propone Alexy, sino que su tarea
prácticos, aparecen como incompatibles ha de orientarse más bien a tratar de
con aquellos a los que obligan los alcanzar un estado de cosas donde todos
primeros. La respuesta tradicional a esta los principios en presencia alcancen
cuestión es la ponderación o el balancing su más alto grado de vigencia posible,
test, esto es, una operación consistente puesto que todos ellos son vinculantes
en “pesar” los principios que entran para él. A favor de esto pueden ofrecerse
en colisión para determinar cuál debe múltiples razones; baste señalar ahora
ser aplicado en el caso como si fuera que la aludida armonización es lo más
una regla. Ponderar es, según Alexy, coherente con la idea de optimización
establecer una regla que determine las que, para algunos, entre ellos el propio
condiciones bajo las cuales un principio Alexy, se sitúa en la naturaleza misma
debe ser preferido a otro17. En otros del principio jurídico19.
lugares he desarrollado una crítica
detallada a este modo de proceder18. A mi En todo caso, el enfoque que acabo
juicio, el juez que aplica un principio no de proponer comporta una tarea que
debe ponderar, en el sentido de aplicar puede considerarse propiamente como
alternativamente uno u otro de los constructiva, arquitectónica en cierto
principios que protagonizan la colisión sentido, pero no absolutamente libre
dependiendo de las circunstancias, o desprovista de vínculos para el juez.
17
Cfr. R. ALEXY, “Sistema jurídico y razón práctica”, cit., pp. 163–164; Teoría de los derechos fundamentales,
traducción de Ernesto Garzón Valdés, Madrid, Centro de Estudios Constitucionales, 1993, pp. 87 ss.
Con posterioridad, Alexy ha vuelto sobre el tema en “Epílogo a la Teoría de los derechos fundamentales”,
traducción de C. Bernal Pulido, Revista Española de Derecho Constitucional 66 (2002), pp. 13-64., sobre
todo pp. 23 ss.; “Kollision und Abwägung als Grundprobleme der Grundrechtsdogmatik“, en M.
LA TORRE, A. SPADARO (eds.), La ragionevolezza nel diritto, Torino, Giappichelli, 2002, pp. 9-26;
“On Balancing and Subsumption. A Structural Comparation”, Ratio Juris 16/4 (2003), pp. 433-449;
“Die Gewichtsformel”, en J. JICKELI, P. KREUTZ, D. REUTER (Hrsg.), Gedächtnisschrift für Jürgen
Sonnenschein, Berlin, Walter de Gruyter, 2003, pp. 771-792.
18
Cfr. P. SERNA y F. TOLLER, La interpretación constitucional de los derechos fundamentales, Buenos
Aires, La Ley, 2000, por todas, pp. 10-35, 56-64 y 78-80.
19
Sobre los principios como mandatos del optimización cfr. R. ALEXY, “Zum Begriff des
Rechtsprinzips” Rechtstheorie Beiheft 1 (1979), pp. 79 y ss.; Teoría de los derechos fundamentales, cit.,
pp. 86 y ss.; y “Sistema jurídico, principios jurídicos y razón práctica”, Doxa 5 (1988), pp. 130-131.
20
He expuesto esto en la introducción de la obra colectiva P. SERNA (dir.), De la argumentación jurídica
a la hermenéutica. Revisión crítica de algunas teorías contemporáneas, cit., pp. 5-6.
21
Al respecto, considero desatinados ciertos planteamientos de la discusión sobre el punto de vista
en la Jurisprudencia que insisten en la posibilidad de “describir” un sistema neoconstitucional
desde el punto de vista externo. En mi opinión, se puede no compartir los valores o principios de
un sistema jurídico, pero si el sistema jurídico es visto al modo del neoconstitucionalismo, es decir,
como un sistema u orden de valores, entonces quien ha de decidir dentro de él no tiene más remedio
que adoptar el punto de vista interno en forma idéntica a como lo haría alguien completamente
identificado con los valores que se expresan en dicho orden jurídico.
22
Esta limitación, unida a la representada por el sistema jurídico mismo, puede también exagerarse,
hasta presentar lo que es fruto de la imaginación creadora del órgano decisor como resultado de una
tarea estrictamente interpretativa. Cfr. al respecto P. RICOEUR, “Interpretazione e/o argumentazione”,
Ars Interpretandi 1 (1986), pp. 77-93, especialmente p. 93. Sobre la creatividad en la aplicación de los
principios, con referencia al pensamiento de Betti, cfr. G. ZACCARIA, Questioni de interpretazione,
Padova, Cedam, 1996, pp. 145-155 y 157-175.
25
Cfr. V. VILLA, “Inclusive Legal Positivism e Neo–giusnaturalismo: Lineamenti di una analisi
comparativa”, Persona y Derecho 43 (2000), p. 59. En definitiva, se desplaza fuertemente el peso de la
legalidad formal, en beneficio de la supremacía constitucional, es decir, de un conjunto de principios,
como explica G. ZAGREBELSKY, El derecho dúctil, cit., pp. 37-41. La validez, en tanto que existencia
de las normas, queda, así, determinada por elementos de contenido, sustantivos y no únicamente
formales. Cfr. también L. FERRAJOLI, “La semantica nella teoria del diritto”, en V. SCARPELLI
(ed), La teoría generale del diritto. Problemi e tendenze attuali. Studi in onore di Norberto Bobbio, Milán,
Comunità, 1983, pp. 123-124; del mismo autor Derecho y razón. Teoría del garantismo penal, Madrid,
Trotta, 1997, pp. 353-362, 373-381, entre otros lugares.
26
Cfr. L. LOMBARDI VALLAURI, Corso di Filosofia del diritto, Padova, Cedam, 1982, pp. 111-112; W.
HASSEMER, “Sistema jurídico y codificación: la vinculación del juez a la ley”, en El pensamiento jurídico
contemporáneo, A. KAUFMANN, W. HASSEMER (eds.), G ROBLES (ed. para versión castellana),
Madrid, Debate, 1992, pp. 205-207. Más recientemente, inciden en este punto los críticos del control de
constitucionalidad. Cfr., por ejemplo, J. WALDRON, Law and Disagreement, Oxford University Press,
1999, especialmente pp. 209-312; F. J. LAPORTA, “Materiales para una reflexión sobre racionalidad y
crisis de la ley”, Doxa 22 (1999), pp. 321-330; “El ámbito de la Constitución”, Doxa 24 (2001), pp. 459-484;
y “Filosofía del Derecho y norma constitucional: una aproximación preliminary” en F. J. LAPORTA
(ed.), Constitución: problemas filosóficos, Madrid, Centro de Estudios Políticos y Constitucionales, 2003,
pp. 15-42.
27
N. MACCORMICK, “Defeasibility in Law and Logic”, en Z. BANKOWSKI, J. WHITE, U. HANN
(eds.), Informatics and the Foundations of Legal Reasoning, Dordrecht, Kluwer, 1995, p. 115.
28
G. SARTOR, “Defeasibility in Legal Reasoning”, en BANKOWSKI, J. WHITE, U. HANN (eds.)
Informatics and the Foundations of Legal Reasoning, cit., p. 144.
29
Ibidem.
30
A. AARNIO, “Reglas y principios en el ordenamiento jurídico”, cit., p. 595.
31
Ibidem. Cfr. también A. AARNIO, “Taking Rules seriously”, ARSP Beiheft 42 (1990), pp. 180 ss.
32
A. AARNIO, “Reglas y principios en el ordenamiento jurídico”, cit., p. 596. Cfr. también A. AARNIO,
“Taking Rules seriously”, cit., pp. 186 ss.
33
A. AARNIO, “Reglas y principios en el ordenamiento jurídico”, cit., pp. 596-597.
34
La expresión es de N. P. SAGÜÉS, “Interpretación constitucional y alquimia constitucional. (El
arsenal argumentativo de los Tribunales Supremos)”, Revista Iberoamericana de Derecho Procesal
Constitucional 1 (2004), pp. 151-170.
Entre 1990 y 1993 fue Profesor Adjunto de Filosofía del Derecho y Derechos Humanos
en la Universidad de Navarra, de cuyo Instituto de Derechos Humanos fue Vicedirector
desde su fundación en 1992 hasta diciembre de 1997. En noviembre de 1993 se incorporó
a la Universidad de A Coruña como Profesor Titular de Filosofía del Derecho, Moral y
Política en la Universidad de A Coruña, continuando como visitante en la de Navarra
hasta 1997. En 2002 obtuvo la Cátedra de Filosofía del Derecho en la Universidad de A
Coruña, que ocupa hasta la actualidad.
E
s evidente que la teoría y el tienen una significación política clara,
análisis de la interpretación pero ¿hasta dónde puede llegar en sus
constitucional, su concepto, apreciaciones?, este es el ámbito en el
sus fines, sus límites, ocupan el núcleo que encuadraré mis reflexiones.
central de la teoría de la Constitución
y vinculado últimamente con este Partiré sobre un breve repaso
problema está el del análisis del papel sobre métodos de interpretación
de los Tribunales Constitucionales, es constitucional para a continuación
decir, los competentes para determinar abordar la necesidad de conciliar el
¿cuál es la interpretación correcta de Derecho Constitucional con el cambio
la Constitución en última instancia de histórico, la íntima relación entre
los más altos intérpretes de la Carta interpretación y posibles mutaciones
Magna?, el papel de los tribunales va más constitucionales, finalizando con unas
allá de un mero órgano jurisdiccional consideraciones sobre el papel de los
puesto que muchas de sus decisiones Tribunales Constitucionales.
Autor de numerosas monografías y más de 100 publicaciones sobre: sistema electoral, derechos
fundamentales - educación, relaciones entre jurisdicciones nacionales y Tribunal de Justicia de
las Comunidades Europeas, Estado autonómico español, entre otros.
C
omo ya se ha comentado, lo sean. En el fondo es un aspecto
tenemos, en el caso español, más de ese carácter de legislación
un sistema concentrado de negativa, que atribuía al control de
control de constitucionalidad, aunque constitucionalidad Hans Kelsen, que
pienso que sería más exacto decir un -como se sabe- es el creador de ese
sistema concentrado de control de modelo.
inconstitucionalidad. Digo esto porque,
si se afirma que determinada solución El Tribunal Constitucional, o la Corte
a un problema es constitucional, Constitucional, no pone Derecho, sino
podría pensarse que se trata de la que lo quita. Extrae normas positivas,
única solución constitucional sobre el purificando el ordenamiento jurídico.
particular; sin embargo, si afirmamos Para crear Derecho ya está el legislador
que no es inconstitucional, admitimos y -como ya se ha dicho esta mañana
que puede haber otras que tampoco y seguiremos viendo- también, en
1
Transcripción de la exposición oral realizada por el autor.
frecuencia con que en ellas se recurre leyes; al contrario, las leyes se están
a dicho término. El propio Díez- justificando en sus exposiciones de
Picazo -en un intento de mantener la motivos, apelando a esos principios
fórmula arcaica continúa afirmando preexistentes que están intentando
que la igualdad sería “igualdad plasmar. Nos encontramos por tanto
en la ley positiva y significa que a ante una situación muy distinta. Estos
igualdad de hechos hay igualdad de principios constitucionales, incluso en
consecuencias jurídicas”. El peligro su versión menos incisiva, informarán
radicaría en que “no es posible reducir -según el artículo 53.3 de la Constitución
cada uno de los supuestos de hecho o española- “la legislación positiva, la
cada una de las normas en cuestión a práctica judicial y la actuación de los
un principio general de Derecho no poderes públicos”.
expresamente formulado por la ley,
para decidir la igualdad en él o con Luis Prieto Sanchís -a mi modo de ver,
arreglo a él, porque entonces no se en España, el filósofo del Derecho más
trata de igualdad ante la ley, sino de interesante de los últimos cuarenta
igualdad ante los principios”; cosa que años- se plantea esta cuestión y nos
a él le parecía “perfecta en términos dice que el “papel que desempeñaba
valorativos, pero no como aplicación antes el Derecho natural respecto
del artículo 14 de la Constitución ni del soberano, lo desempeña ahora la
como tarea general del Tribunal”. Constitución respecto del legislador”.
“La Constitución es una ley del Estado,
El citado artículo 14 se refiere a la pero actúa como si fuera una norma
igualdad y a la no discriminación. El está superior a cualquier norma dictada
hablando de esos principios generales por un órgano del Estado; en cierto
del Derecho que he presentado como modo, desempeña la función del
legalidad en “spray”; pero existen Derecho natural”. En consecuencia, la
unos principios constitucionales muy imagen del Estado Constitucional de
distintos. Son principios prelegales, Kelsen, como legislador estrictamente
que no los hemos sacado de las negativo, debe ser revisada; ya no basta
es contrario a lo que se tiende a dar cada uno lo suyo, pero quien determina
por bueno. Muchos piensan que el lo que es suyo de cada uno es el Derecho.
Derecho es un brazo coactivo para Lo jurídico no tiene demasiado que ver
defender los principios morales con virtudes morales; si acaso, tendría
más importantes. No comparto ese más relación con la prudencia, que
planteamiento. Quizá se recordaban ayuda a determinar lo suyo de cada
las Tablas del Sinaí, que nos dicen: uno, que con la justicia, que anima
no robar, no matar, no mentir. Los a respetarlo. Lo que los sistemas
consideran por ello preceptos morales, jurídicos incorporan con frecuencia,
que luego el Derecho deberá positivar. en la identificación y la aplicación
No estoy de acuerdo. Se trata de del Derecho, no son consideraciones
exigencias jurídicas tan relevantes que morales, sino consideraciones jurídicas
también han sido reveladas. Es lógico aún no formalmente homologadas.
que esa revelación incluya elementos
jurídicos, precisamente porque no cabe La consecuencia sería que el
una convivencia realmente humana Derecho realmente es interpretación
mintiéndose, robándose o matándose argumentada. Ha de ser la jurisdicción
unos a otros. Suele ocurrir cuando la ordinaria, la primera en asumir la
atracción de los maximalismos morales interpretación de la Constitución,
lleva a olvidarse del mínimo ético. siendo su tarea la primera también en
experimentar el cambio de paradigma
El Derecho confluye con la moralidad que hemos analizado. Lo decisivo no
en lo que se refiere a la vida de la fue tanto la entrada en juego de la
persona en sociedad. Esas confluencias Constitución, con el consiguiente
llevan en ocasiones al Derecho a constitucionalismo teórico, sino el
generar exigencias morales; por tratarse giro hermenéutico y argumentativo
de una exigencia jurídica -mínima e experimentado por la filosofía jurídica
indispensable- genera una obligación y su inevitable incidencia tanto sobre
moral; no al revés. Sin incurrir en los planteamientos positivistas como
fundamentalismos, la justicia es dar a sobre los iusnaturalistas.
En 2010 fue investido Doctor honoris causa por la Universidad “1 Dezembrie 1918” de
Alba Iulia en Rumanía, asimismo ha recibido merecimientos honoríficos por parte
de varios países. Cabe mencionar que también se desempeñó como Diputado por
Granada desde la III a la VII Legislatura.
JUSTICIA CONSTITUCIONAL Y
DEMOCRACIA
V
arias pistas de lo que me nos encontramos precisamente en un
referiré en estos veinte contexto de complejidad entre dos
minutos que dispongo, han nociones; en principio -como ustedes
sido ya delineadas por los profesores bien conocen- la idea de democracia
que hablaron antes que mi persona; supone el autogobierno del pueblo,
en ese sentido, por ejemplo, para y en principio, que por la regla de
poder relacionar con la exposición mayoría, se puede discutir cualquier
inmediatamente anterior hecha cosa; por otro lado, cuando hablamos
por el profesor González Trevijano, de los derechos, o de la justicia
podríamos hablar del control político constitucional, sabemos que hay
por parte de los entes jurisdiccionales temas que no pueden ser discutidos
de aquellas decisiones dadas por el dentro de un régimen democrático,
poder político. por muy fuertes que sean las
mayorías y las presiones de los grupos
Cuando hablamos de la relación entre mayoritarios para que sean discutidos,
justicia constitucional y democracia en ese conjunto de coordenadas es
a dar luz verde a esta iniciativa para Finalmente, hay una iniciativa que fue
hablar de temas mineros porque no se promovida por un colectivo ciudadano
incluyó los considerandos. en Cuenca igual, que tiene el N°009-
19-2019, la constitución que señala
Posteriormente, el dictamen N°010- este dictamen es muy importante, no
19-2019, corresponde a una iniciativa prohíbe que se pueda consultar sobre
del GAD (Gobierno Autónomo cualquier asunto a los ciudadanos,
Descentralizado) del Cantón Ponce y en ese sentido, se puede consultar
Enríquez en el Azuay; en este caso, sin problema sobre temas mineros,
como ustedes saben los ciudadanos de hecho se hace una relación de
pueden solicitar de forma individual una interpretación orgánica de la
o pueden hacerlo también los GAD Constitución y se da cuenta que
siempre que conste una resolución incluso en el régimen desarrollo, o sea
del cuerpo colegiado del pleno para la constitución económica, se da cuenta
someter este tipo de iniciativas a que todo el procedimiento debe ser
consulta. La particularidad en este incluso contando con la participación
caso no era oponerse al tema minero, de los posiblemente afectados.
sino alentar a que se lleven este tipo
de actividades; igual que ocurrió en En resumen, la justicia constitucional
el caso de la iniciativa ciudadana, no puede buscar aquellos lazos que
se incluyeron los considerandos, con permitan que la democracia funcione,
lo cual, no se garantiza la libertad ¿cuál es un medio de estos?, por
del elector, la idea de que posea medio del control constitucional de
amplios conceptos de qué es lo que las iniciativas popular normativa o
se va a discutir en esta consulta de estos instrumentos de democracia
popular, y no pueda tomar una directa cuando se trata de consultas
decisión informada, por tanto, en populares. Teniendo en consideración
este dictamen se rechazó. que lo que se debe buscar ante todo
Cuenta con varias publicaciones, como: Los derechos humanos como norma y decisión;
Manual de Justicia Constitucional ecuatoriana en coordinación con el Dr. Jhoel
Escudero; Participación democrática y reforma constitucional. Un análisis del caso
ecuatoriano; entre otros.
D
ar satisfacción a la cuestión una Constitución con mayúsculas,
de si son susceptibles o no cuando ésta lleva indisolublemente
de control los denominados aparejada la noción de tal control.
actos de gobierno o actos políticos, Constitución y control son por tanto
es una de las problemáticas más conceptos epistemológicamente
relevantes, tanto por razones interdependientes en las democracias
teóricas como prácticas, de la teoría constitucionales actuales. De
constitucional y administrativa un control entendido como un
moderna. Y ello, al menos, por tres indefectible sistema de checks
razones. and balances, predicable de lo que
Loewenstein llamaba “Constituciones
En primer lugar, porque una normativas”. Si no existe un control
recta comprensión del control efectivo, o si este es meramente
implica ineludiblemente asumir formal, podrán argumentarse razones
una noción previa: sólo hay una varias, formularse entelequias
Constitución de verdad, sólo hay constitucionales, pero no estamos,
Ha desempeñado altos cargos académicos y docentes, desde 2002 hasta 2013 fue
Rector de la Universidad Rey Juan Carlos de Madrid; por tres años, desde 2006 fue
Presidente de la Conferencia de Rectores de las Universidades Públicas Madrileñas
(CRUMA); desde el 2008 hasta el 2013 se desempeñó como Vocal y Vicepresidente de la
Conferencia de Rectores de las Universidades Españolas (CRUE).
L
a mayoría de los textos discriminación por diversas causas
constitucionales más garantistas que se consideran incompatibles con
del constitucionalismo moderno la dignidad humana. De todas ellas
convierten el principio de igualdad me corresponde centrarme en la
en piedra angular de todo el edificio discriminación sufrida por las mujeres,
constitucional; confiriéndole una en particular, en el ámbito judicial.
eficacia trascendente y determinando,
en consecuencia, que toda situación de Por ello, dividiré mi trabajo en dos
desigualdad sea incompatible con su partes: en la primera, analizaré la
orden de valores. La igualdad es “una configuración constitucional de
idea que sin duda subyace a toda la la igualdad y la prohibición de
estructura constitucional y, a través de discriminación. Para ello, me centraré
1
RUBIO LLORENTE (Francisco), “La igualdad en la jurisprudencia del Tribunal Constitucional”,
Revista Española de Derecho Constitucional, núm. 31, 1991, p. 9.
2
Díaz Revorio (Francisco Javier)” Las dimensiones constitucionales de la igualdad”, en Estudio
Integral de la Violencia de Género: un análisis teórico-práctico desde el Derecho y las Ciencias Sociales /
María Martín Sánchez (dir.), Tirant lo Blanch, Valencia, 2018, págs. 31-78
3
“Todas las personas serán consideradas iguales y gozarán de los mismos derechos, libertades y
oportunidades, sin discriminación en razón de nacimiento, edad, sexo, etnia, color, origen social,
idioma; religión, filiación política, posición económica, orientación sexual; estado de salud,
discapacidad, o diferencia de cualquier otra índole”. Así como en el artículo 34, cuando ampara
la igualdad de oportunidades, el Estado garantizará la igualdad de derechos y oportunidades de
mujeres y hombres, pero referida al acceso a recursos y decisión en cuestiones económicas en la
administración conyugal y de la propiedad.
4
REY MARTÍNEZ (Fernando), “El derecho fundamental a no ser discriminado por razón de sexo”, en
La discriminación por razón de sexo tras 25 años de la Constitución española, AAVV, Cuadernos de Derecho
Judicial, Consejo General del Poder Judicial, Madrid, 2004
5
Vid. SSTC 166/1988, de 26 de septiembre; 173/1994, 7 de junio; 136/1996, de 23 de julio; 20/2001, de 29
de enero; 41/2002.
6
SSTC 128/1987, de 16 de julio; 19/1989, de 31 de enero; 229/1992, de 14 de diciembre.
7
SSTC 126/1997, de 3 de julio, FJ 8, 229/1992, de 14 de diciembre, FJ 4; 75/1983, de 3 de agosto, FFJJ 6 y 7;
209/1988, de 10 de noviembre, 81/1982, de 21 de diciembre, FJ 2).
8
SSTC 22/1981, de 2 de julio, FFJJ 3 y 9; 49/1982, de 14 de julio, FJ 2; 2/1983, de 24 de enero, FJ 4; 23/1984,
de 20 de febrero, FJ 6; 209/1987, de 22 de diciembre, FJ 3; 209/1988, de 10 de noviembre, FJ 6; 20/1991,
de 31 de enero, FJ 2; 110/1993, de 25 de marzo, FJ 6; 177/1993, de 31 de mayo, FJ 2; 340/1993, de 16 de
noviembre, FJ 4; 117/1998, de 2 de junio, FJ 8; y 200/2001, de 4 de octubre, FJ 4.
9
RUBIO LLORENTE (Francisco), Derechos fundamentales y principios constitucionales, Ariel Derecho,
Barcelona, 1995.
(STC168/1989). Así, ante dos sentencias otra en una situación análoga a causa
de órganos judiciales distintos –no de su género, sin que exista justificación
susceptibles de ulterior recurso- que objetiva y razonable. Dentro de lo que
deciden de modo contradictorio casos constituyen discriminaciones directas
idénticos en relación con la misma podemos encontrarnos con un amplio
persona, no cabe la invocación de la abanico, que no es ni excluyente ni
igualdad (STC 134/1991). taxativo:
10
En la Sentencia 7/1983, de 14 de febrero declara que el art. 107.c de la Reglamentación de Trabajo
de 1958 de la Compañía Telefónica Nacional de España es discriminatoria por razón de sexo,
deviniendo incompatible con la Constitución española de 1978, y, por tanto, derogada por oposición
al artículo 14. Dicha Reglamentación establecía la excedencia forzosa por razón de matrimonio para
el personal femenino, con reconocimiento de la posibilidad de solicitar el reingreso cuando cada una
de las mujeres se constituyera en cabeza de familia. Posición que reitera en numerosas sentencias
(86/1983, de 26 de octubre; 15/1983, de 4 de marzo; 58/1984, de 9 de mayo; 13/1983, de 23 de febrero;
8/1983, de 18 de febrero) En la Sentencia 67/1982, de 15 de noviembre aborda la discriminación de la
mujer al contraer matrimonio en el ámbito funcionarial. Los Estatutos de Personal de 1949, 54 y 59 del
extinguido Servicio de Mutualismo Laboral establecían el pase forzoso a la situación de excedencia
por matrimonio, pase que traía consigo la baja en los Seguros Sociales y en el Mutualismo Laboral;
con percibo de una dote y la facultad de volver al servicio activo al convertirse en cabezas de familia.
Y en la Sentencia 317/1994 declara igualmente discriminatoria el derecho a percibir una determinada
cantidad de dinero, como contrapartida a la rescisión de su contrato de trabajo subsiguiente a su
matrimonio, tal y como se reconocía a la mujer en el art. 56 Ordenanza de Seguros. Y en la Sentencia
39/2002, de 14 de febrero, declara la inconstitucionalidad del artículo 9.2 del Código Civil –en su
redacción anterior a la Ley 11/1990, de 15 de octubre, por considerarlo contrario a los artículos 14 y
32 de la Constitución. Dicho artículo determinaba la ley aplicable a las relaciones personales entre
los cónyuges. Establecía la nacionalidad del marido al tiempo de contraer matrimonio como punto
de conexión para determinar las relaciones personales del matrimonio y también a las relaciones
patrimoniales en defecto de capitulaciones matrimoniales o por insuficiencia de las mismas.
11
LOUSADA AROCHENA (José Fernando), “Jurisprudencia española sobre igualdad retributiva entre
mujeres y hombres”, Nueva Revista Española de Derecho del Trabajo, núm. 181, 2015, pp. 49-68
12
STJUE en el Asunto Brunnhofer, de 26 de junio de 2001, asunto C-381/99
13
Al objeto de proteger el embarazo, la maternidad y la filiación, la UE ha desarrollado un amplio
conjunto de normas; además, el propio TJUE, la protección del derecho al embarazo y a la maternidad
no solo se traduce en el favorecimiento de una igualdad material entre hombres y mujeres, sino que
también promueve la salud de la madre tras el parto y el vínculo entre esta y el recién nacido.
14
SSTC 94/1984, de 16 de octubre; 166/ 1988, de 26 de septiembre; 173/1994, de 7 de junio; 136/1996, de
23 de julio.
15
El Tribunal Constitucional al fijar esta línea interpretativa, se basa en el Ordenamiento
comunitario: Directiva 76/207/CEE, de la que se desprende que el despido de una trabajadora
por razón de su embarazo constituye una discriminación directa basada en el sexo (Sentencia del
TJCE de 8 de noviembre de 1990, asunto «Hertz»), como también lo es la negativa a contratar a una
mujer embarazada (Sentencia de la misma fecha recaída en el asunto «Dekker» ), y cuyo párrafo 21
declara que la discriminación por embarazo o maternidad es una discriminación directa en la que
se excluye la posibilidad de justificar la razonabilidad y proporcionalidad de la medida), y la ruptura
del contrato ni siquiera puede justificarse por el hecho de que una prohibición legal, impuesta
por causa del embarazo, impida temporalmente a la trabajadora desempeñar un trabajo nocturno
(Sentencia del TJCE de 5 de mayo de 1994, asunto «Habermann-Beltermann»). Posteriormente, el
art. 10.1 de la Directiva 92/85/CEE estableció la prohibición de despedir a la trabajadora embarazada,
que haya comunicado su estado al empresario, durante el período comprendido entre el comienzo
del embarazo y el final del permiso de maternidad (espacio temporal sobre el que en su totalidad se
extiende la protección: Sentencia del TJCE de 30 de junio de 1998, asunto «Brown»).
16
RIDAURA MARTÍNEZ (Mª Josefa), “El sentido actual de la Ley Orgánica de medidas de protección
integral contra la violencia de género”, en Estudio Integral de la Violencia de Género: un análisis teórico-
práctico desde el Derecho y las Ciencias Sociales, MARTÍN SÁNCHEZ (María) (dir.), Tirant lo Blanch,
Valencia, 2018.
17
El STC 229/1992, de 14 de diciembre (trabajo de la mujer en la mina). El Tribunal en varias de sus
Sentencias declara que estas medidas son discriminatorias; especialmente significativo es el caso
de la Sentencia 216/1991, de 14 de noviembre, sobre la inadmisión de la mujer a las pruebas para el
ingreso en la Academia General del Aire; o también el de la Sentencia 207/1987, de 22 de diciembre,
en la que se declara que es una medida protectora y, por tanto, discriminatoria, el retiro anticipado
de las auxiliares de vuelo mayores de treinta y cinco años y menores de cuarenta, pero se les deniega
a los varones; 28/1982, de 26 de mayo, en la que el Tribunal considera que el plus de transporte que
recibían, en principio, solo las mujeres trabajadoras de Telefónica es una medida paternalista.
18
SERRA CRISTÓBAL (Rosario), “La discriminación indirecta por razón de sexo”, en Discriminación
versus diferenciación: especial referencia a la problemática de la mujer RIDAURA MARTÍNEZ (Mª Josefa)
y AZNAR GÓMEZ (Mariano) (coords.), Tirant lo Blanch, Valencia, 2004, pp. 365-398.
19
Defrenne II (43/75, sentencia de 8 de abril de 1976), seguido de los casos Macarthys Ltd. vs. Wendy
Smith en 1980; STJCE de 31 de marzo de 1981, el caso Jenkins vs. Kingsgate (Clothing Productions) Ltd.;
Bilka-Kaufhaus GmbH vs. Weber Von Hartz, recogido en la STJCE de 13 de mayo de 1986. Categoría
que se incorporó paulatinamente a las sucesivas Directivas.
20
Doctrina que se reiterará en las SSTC 58/1994, de 28 de febrero; 286/1994, de 28 de noviembre;
147/1995, de 16 de octubre; 250/2000, de 30 de octubre; 253/2004, de 22 de diciembre.
21
El BARRERE UNZUETA, M.: “Problemas del Derecho Antidiscriminatorio: subordinación versus
discriminación y acción positiva versus igualdad de oportunidades” Cuadernos electrónicos de
filosofía del derecho, núm. 9, 2003.
22
RUIZ MIGUEL (Alfonso), «Discriminación inversa e igualdad», Cuadernos de Filosofía del Derecho,
núm. 19, 1996; GIMÉNEZ GLUCK (David), Una manifestación polémica del principio de igualdad:
acciones positivas moderadas y medidas de discriminación inversa, Valencia, Tirant lo Blanch, 1999.
23
LÓPEZ GUERRA (Luís), “Igualdad, no discriminación y acción positiva en la Constitución de 1978,
en VVAA, Mujer y Constitución en España, Centro de Estudios Políticos y Constitucionales, Madrid,
2000.
24
La STC 12/2008, de 29 de enero, en relación con el artículo 44 bis y concordantes de la Ley Orgánica
5/1985, del Régimen Electoral General, redactados por la disposición adicional segunda de la Ley
Orgánica 3/2007, para la igualdad efectiva de mujeres y hombres.
En los últimos años, las mujeres superan • Solo dos de las diecisiete
sistemáticamente a los hombres presidencias de Tribunales
que consiguen sacarse la oposición. Superiores de Justicia están
Respecto al acceso a la Carrera Judicial ocupadas por mujeres –que sin
por el turno libre de oposición, el 71,2 embargo sí suponen ya el 45,2 por
por ciento de los 188 nuevos jueces y ciento de las presidencias de Sala
juezas que ingresaron en 2018 eran en esos mismos órganos judiciales.
mujeres, confirmando así la tendencia • Mientras que el Tribunal Supremo,
Estos datos los hemos obtenido del Documento” II Plan de Igualdad de la Carrera Judicial”, aprobado
26
por el Pleno del Consejo General del Poder Judicial, el 30 de enero de 2020.www.poderjudicial.es
27
Torres 25 sept. 2019
28
Art. 179.- “El Consejo de la Judicatura se integrará por nueve vocales con sus respectivos suplentes,
que durarán en el ejercicio de sus funciones seis años y no podrán ser reelegidos; para su conformación
se propenderá a la paridad entre hombres y mujeres. El Consejo designará, de entre sus integrantes,
una presidenta o presidente y una vicepresidenta o vicepresidente, para un período de tres años”.
Y el Art. 183. Establece que “Las juezas y jueces de la Corte Nacional de Justicia serán elegidos por
el Consejo de la Judicatura conforme a un procedimiento con concurso de oposición y méritos,
impugnación y control social. Se propenderá a la paridad entre mujer y hombre”.
El trasfondo psicológico en el
ejercicio del Poder Jurisdiccional
L
es voy a hablar de una temática les voy a explicar ahora y sobre las
que aunque pueda no parecerlo que habrá que estar muy atentos en
por el título de la ponencia, el futuro, fundamentalmente porque
es netamente jurídica. Se trata del son estas “nuevas” circunstancias, y no
trasfondo psicológico de la actividad las que la doctrina ha explicado hasta
judicial, sobre todo en aquello que ahora, las que verdaderamente afectan
afecta a la independencia judicial. a la independencia de los jueces, es
decir, ese objetivo máximo que todos
Estamos muy acostumbrados a queremos conseguir en un Estado
hablar de la independencia de los que se pueda llamar legítimamente de
jueces en relación al resto de poderes Derecho.
del Estado, o con respecto a poderes
fácticos de cualquier territorio. Pero hay Para ello no hay otro remedio que
una serie de circunstancias de diferente recurrir a la ciencia del pensamiento. A
cariz en las que no se acostumbra ese fin, podría realizar una exposición
reparar demasiado, y que son las que de epistemología que sería interesante
en todo caso. Pero el problema de la años setenta y ochenta del siglo XX,
epistemología es que no es una ciencia y que le valió a Daniel Kahneman el
habitualmente empírica. Es decir, Premio Nobel de economía en el año
no contrasta sus resultados con la 2003.
realidad, y es por eso por lo que no hay
más remedio que acudir a otra ciencia Kahneman describió el pensamiento
llamada la psicología del pensamiento de una manera que resulta muy
si se desea averiguar realmente la próxima y que se entiende muy
afectación del ánimo del juez a la fácilmente. El ser humano, cuando
hora de decidir con esa deseada toma una decisión, intenta hacer
independencia. siempre un cálculo estadístico de
éxito, es decir, trata de recordar
Tenemos la enorme fortuna de que uno qué es lo que le ha salido bien en
de los autores clave en esta materia es otras ocasiones. Consiste en un
Daniel Kahneman, que publicó en 2011 cálculo estadístico muy superficial
un libro de divulgación relativamente porque no solemos tener datos
largo, que es absolutamente empíricos suficientes para proceder
recomendable para dejar de concebir a una labor más cuidadosa en este
el pensamiento humano como sentido. Esta es nuestra forma
un silogismo, es decir, como algo básica de decidir.
potencialmente muy complejo que
nos separa del resto de animales y que Siguiendo esta premisa, Tversky,
por ello mismo haría de nosotros seres Kahneman y más tarde Slovic,
superiores. Al contrario, traten de hacer describieron cuatro entidades que
descender el nivel de complejidad de llamaron “heurísticos” y que los juristas
nuestro pensamiento, que es lo que podríamos llamar principios de
hace este autor, y lean la descripción conducta, es decir, sistematizaciones
que del mismo hizo con su colega Amos del pensamiento para ser más
Tversky -fallecido en 1996- durante los descriptivos.
con el objeto del juicio. Así pierden los como el pánico, el asco o la sorpresa.
jueces su independencia, siguiendo Todas ellas pueden tener un impacto
las opiniones de la sociedad que importante en materia judicial.
nada tienen que ver con lo que están
juzgando. Cualquier juez que ingresa en la carrera
judicial piensa que quizás algún día
Pero queda por considerar el problema podría llegar al Tribunal Supremo. Es
de las emociones del juez, puesto que la simple ilusión de prosperar. Pero
aunque pertenezcan al fuero interno esa opción de ascender depende de
judicial, pueden atenazarle de tal situaciones fácticas que muchas veces
forma hasta hacer de él un esclavo de pasan por tener una buena posición
las mismas, es decir, alguien que no es social dentro del propio estamento
independiente. judicial que le va a elegir a uno. Esa
voluntad de posicionarse puede influir
Las emociones son mecanismos en cómo un juez decide, si piensa
de supervivencia que nos hacen que con una determinada sentencia
acercarnos o alejarnos de aquello que puede llegar a agradar, o a desairar al
es peligroso. Las más básicas son el poder fáctico que podría apoyarle para
afecto y el odio. Las personas suelen ascender. A partir de ahí, el juez vuelve
tener afecto por aquello que creen a perder su independencia. Y la razón
inconscientemente que les puede de esa pérdida es pura y simplemente
garantizar mejor su supervivencia, el miedo a no prosperar en la carrera
una buena comida, una buena casa, judicial.
un buen vestido, o una buena amistad;
y en cambio sienten odio por todo lo Otra circunstancia que también
contrario porque no garantizaría su depende de las emociones del juez,
supervivencia sino que podría asegurar también de la emoción miedo, es
su aniquilación. A partir de ahí se van la que podríamos calificar como la
desarrollando el resto de emociones, “razón de estado”.
Sumario:
1. Introducción
2. La Jurisprudencia del TEDH
2.1. Carácter declarativo de las sentencias del TEDH
2.2. Sentencias piloto
2.3. Otros efectos de las sentencias que exceden el
carácter declarativo
2.4. Las opiniones consultivas
2.5. Síntesis conclusiva
3. La Jurisprudencia del TJUE que afecta a derechos
fundamentales
4. Consideraciones finales
5. Referencias bibliográficas
L
a Constitución española Europa ha adoptado otro sistema de
en el artículo 10.2 recoge la protección de los derechos sociales: el
prescripción siguiente: “Las texto normativo que los garantiza es la
normas relativas a los derechos Carta Social europea de 1961 (revisada
fundamentales y a las libertades que la en 1996), y el seguimiento de su respeto
Constitución reconoce se interpretarán en los Estados que lo han adoptado
de conformidad con la Declaración se realiza mediante informes ante el
Universal de Derechos Humanos y los Comité Europeo de Derechos Sociales.
tratados y acuerdos internacionales
sobre las mismas materias ratificados España, además de pertenecer al
por España”. De ahí que tenga una Consejo de Europa, pertenece a la
especial relevancia la jurisprudencia Unión Europea. La pertenencia a esta
del Tribunal Europeo de Derechos organización supranacional supone la
Humanos (TEDH) en el ordenamiento cesión de competencias derivadas de la
jurídico español1. Los derechos soberanía (art. 93 CE), y también incide
sociales, en principio, están fuera de la en la jurisdicción relativa a los derechos
1
FRANCISCO PÉREZ DE LOS COBOS ORIHUEL, “El diálogo entre el Tribunal Europeo De
Derechos Humanos y el Tribunal Constitucional español: una relación fructífera”, accesible en
https://www.tribunalconstitucional.es/ActividadesDocumentos/2016-05-17-00-00/Ponencia%20
del%20Presidente%20del%20Tribunal%20Constitucional.pdf [Última consulta del 26-VI-2020],
“Esta ratificación tuvo una singular trascendencia, porque el art. 10.2 de nuestro texto constitucional
estableció y establece que los derechos fundamentales y las libertades públicas que la Constitución
reconoce se deben interpretar de conformidad con los tratados y acuerdos internacionales sobre
derechos humanos ratificados por España. De resultas, por consiguiente, de la ratificación del
Convenio de Roma, todo el acervo doctrinal elaborado por el Tribunal europeo en torno a los
derechos reconocidos en el mismo se convirtió en un canon hermenéutico principal para la lectura
de nuestro texto constitucional”.
2
JAVIER GARCÍA ROCA, La transformación constitucional del Convenio Europeo de Derechos Humanos,
ed. Civitas, Cizur (Navarra), 2019, p. 163. No obstante, hay efectos indirectos sobre derechos sociales,
con ocasión de la interpretación de los derechos civiles, vid.: LUIS LÓPEZ GUERRA, “La protección
de derechos económicos y sociales en el Convenio Europeo de Derechos Humanos”, en Parlamento
y Constitución, n. 14, 2011, pp. 9-30.
3
ALEJANDRO SÁINZ ARNÁIZ, “El convenio de Roma, el Tribunal europeo de Derechos Humanos
y la cultura común de los derechos fundamentales en Europa, en AA. VV. Estudios sobre la Constitución
Española. Homenaje al Profesor Jordi Solé Tura, vol. II, CEC, 2008, p. 2047, p. 2047.
4
Entre la abundante bibliografía, vid.: SANTIAGO MUÑOZ MACHADO, “Los tres niveles de
garantías de los derechos fundamentales en la Unión Europea: problemas de articulación”, en Revista
de Derecho Comunitario Europeo, n. 50, 2015, pp. 195-230. MONTESINOS PADILLA, CARMEN, “Tutela
multinivel de los derechos: concepto, marco teórico y desafíos actuales”, en Eunomía: Revista en
Cultura de la Legalidad, n. 11, 2016, pp. 211-220. MONTESINOS PADILLA, CARMEN, La tutela multinivel
de los derechos desde una perspectiva jurídico-procesal. El caso español, Valencia, 2017. M. OLAYA GODOY,
“Sistemas europeos de garantía de los derechos fundamentales y protección multinivel. Especial
referencia a la influencia del diálogo jurisdiccional en su configuración”, en GERMÁN M. TERUEL
LOZANO / ANTONIO PÉREZ MIRAS / EDOARDO C. RAFFIOTTA, (dirs.), Constitución e integración
Europea.: ciudadanía, derechos fundamentales y garantías jurisdiccionales, Dykinson, Madrid, 2017, pp. 101-
120.
5
ENRIQUE GUILLÉN LÓPEZ, “Ejecutar en España las sentencias del Tribunal Europeo de Derechos
Humanos. Una perspectiva de Derecho Constitucional Europeo”, en Teoría y Realidad Constitucional,
n. 42, 2018, p. 338.
6
JAVIER GARCÍA ROCA, / ENCARNACIÓN CARMONA CUENCA, (coords.), ¿Hacia una
globalización de los derechos?: el impacto de las sentencias del Tribunal Europeo y de la Corte Interamericana,
Aranzadi Thomson Reuters, 2017. ANAMARI GARRO VARGAS, “La influencia del Tribunal europeo
de Derechos Humanos en la actividad consultiva de la Corte”, en Cuestiones Constitucionales. Revista
mexicana de Derecho Constitucional, accesible en https://revistas.juridicas.unam.mx/index.php/
cuestiones-constitucionales/article/view/5865/7775 [Consulta del 26-VI-2020]
7
Aprobada el 27 de julio de 1981, durante la XVIII Asamblea de Jefes de Estado y Gobierno de la
Organización de la Unidad Africana, reunida en Nairobi, Kenya, entró en vigor el 21 de octubre de
1986.
8
ANDREAS VOSSKUHLE, “Der europäische Verfassungsgerichtsverbund”, en Neue
Verwaltungszeitschrift, 2010, p. 1.
9
Art. 46. 1. “Las Altas Partes Contratantes se comprometen a acatar las sentencias definitivas del
Tribunal en los litigios en que sean partes.
2. La sentencia definitiva del Tribunal será transmitida al Comité de Ministros, que velará por su
ejecución.
3. Cuando el Comité de Ministros considere que la supervisión de la ejecución de una sentencia
definitiva resulta obstaculizada por un problema de interpretación de dicha sentencia, podrá remitir
el asunto al Tribunal con objeto de que éste se pronuncie sobre dicho problema de interpretación.
La decisión de remisión al Tribunal se tomará por mayoría de dos tercios de los votos de los
representantes que tengan derecho a formar parte del Comité.
4. Si el Comité considera que una Alta Parte Contratante se niega a acatar una sentencia definitiva
sobre un asunto en que es parte, podrá, tras notificarlo formalmente a esa Parte y por decisión
adoptada por mayoría de dos tercios de los votos de los representantes que tengan derecho a formar
parte del Comité, remitir al Tribunal la cuestión de si esa Parte ha incumplido su obligación en virtud
del párrafo 1.
5. Si el Tribunal concluye que se ha producido una violación del párrafo 1, remitirá el asunto
al Comité de Ministros para que examine las medidas que sea preciso adoptar. En caso de que el
Tribunal concluya que no se ha producido violación alguna del párrafo 1, remitirá el asunto al Comité
de Ministros, que pondrá fin a su examen del asunto”.
10
Todas las personas serán consideradas iguales y gozarán de los mismos derechos, libertades y o
JOANA ABRISKETA URIARTE, “Las sentencias piloto: el Tribunal Europeo de Derechos Humanos,
de juez a legislador”, en Revista Española de Derecho Internacional, vol. 55, 2013, pp. 73-99. DOMINIK
HEIDER, The Pilot-Judgment Procedure of the European Court of Human Rights, Leiden-Boston,
2013. QUERAL JIMÉNEZ, ARGELIA, “Las sentencias piloto como ejemplo paradigmático de la
transformación del Tribunal Europeo de Derechos Humanos”, en Teoría y Realidad Constitucional, n.
42, 2018, pp. 395-424.
11
Sentencia de la Gran Sala de 22-IV-2004, accesible en https://hudoc.echr.coe.int/fre#{%22ite-
mid%22:[%22001-66387%22]} [Última consulta del 26-VI-2020].
Sobre esta sentencia, en la doctrina alemana: MARTEN BREUER, “Urteilsfolgen bie strukturellen
Problemen: Das erste Piloturteil des EGMR”, en Europäische Grundrechte-Zeitschrift, 3, 2004, pp. 445-
451.
12
Otros ejemplos de sentencias piloto son: Rumpf contra Alemania, de 2 de septiembre de 2010, en este
caso el problema sistémico fue la larga duración de los procesos judiciales en Alemania, lo que llevó a
que se acumulasen 55 demandas contra Alemania ante el TEDH. Athanasiou y otros contra Grecia, de
21 de diciembre de 2010, el problema también fue la larga duración en los procedimientos judiciales
en materia administrativa. Dimitrov y Hamanov contra Bulgaria y Finger contra Bulgaria, de 10 de
mayo de 2011, debido igualmente a deficiencias en el sistema de justicia en los procedimientos civiles
y penales. En materia de deficiencias del sistema judicial, hay muchas más. En otros ámbitos, es muy
representativa la sentencia Greens y M.T. contra el Reino Unido, de 23 de noviembre de 2010, por
exclusión de los ingresos en prisión del derecho de elección tanto activo como pasivo y la sentencia
Anayev y otros contra Rusia, de 10 de enero de 2012, por condiciones inhumanas o degradantes en las
cárceles. Sobre este último problema sistémico, vid.: SARA TURTURRO PÉREZ DE LOS COBOS,
“Las sentencias piloto del TEDH sobre tratos inhumanos y degradantes en las cárceles europeas”, en
Eunomía. Revista en Cultura de la Legalidad, 18, 2020, pp. 130-147.
13
LIZE R. GLAS, “The functioning of the pilot-judgment procedure of the European Court of Human
Rights in practice”, en 34 Netherland Quarterly of Human Rigths, 41 (2016), https://heinonline.org/
HOL/LandingPage?handle=hein.journals/nethqur49&div=6&id=&page= [Consulta del 18-IV-2020],
pp. 41-70.
14
MARIO HERNÁNDEZ RAMOS, El nuevo trámite de admisión del recurso de amparo constitucional,
Reus, Madrid, 2009.
15
FRANCISCO JAVIER MATIA PORTILLA, “La ‘especial trascendencia constitucional’ y la
inadmisión del recurso de amparo”, en Revista española de derecho constitucional, n. 86, 2009, pp. 343-
368. PABLO PÉREZ TREMPS, “La especial trascendencia constitucional del recurso de amparo
como categoría constitucional: entre ‘morir de éxito’ o ‘vivir en el fracaso’”, en Teoría y Realidad
Constitucional, n. 41, 2018, pp. 253-270.
2.3. Otros efectos de las sentencias del TEDH, es decir efectos que no
del TEDH que exceden el carácter están contenidos expresamente
declarativo en las sentencias de Estrasburgo,
pero que se requieren para acatar
Además de las sentencias piloto, hay lo expresado en el fallo. Así, debido
otros efectos en la jurisprudencia de a una condena contra España del
Estrasburgo que nos llevan a considerar TEDH, y a la Sentencia posterior del
que sus sentencias son algo más que TC español17, fue necesario modificar
declarativas. Conviene tener presente, la Ley de enjuiciamiento criminal.
en primer término, que un número Asimismo, el cumplimiento de otra
no irrelevante de decisiones exigen sentencia condenatoria ha llevado a
al Estado demandado la “restitutio in la promulgación de un Real Decreto
integrum”16. Obviamente, esta exigencia relativo a la Seguridad Social de los
impone al Estado una obligación y, ministros de culto. El TEDH apreció
por consiguiente, no tiene un carácter discriminación de los ministros
meramente declarativo. evangélicos, y condenó a España.
Ahora bien, las medidas adoptadas,
En otros casos se produce lo que se para eliminar la discriminación
denomina “impacto” de las sentencias entran dentro del margen de
16
SANTIAGO RIPOLL CARULLA, “Un nuevo marco de relación entre el Tribunal Constitucional y el
Tribunal Europeo de Derechos Humanos”, en Revista Española de Derecho Internacional, vol. 64, 2014,
pp. 11-53. ANA SALADO OSUNA, “La responsabilidad internacional del Estado por violaciones de
derechos humanos la obligación de reparar en los sistemas regionales de protección”, en MARINA
VARGAS GÓMEZ-URRUTIA, ANA SALINAS DE FRÍAS, coord., Soberanía del Estado y derecho
internacional: homenaje al profesor Juan Antonio Carrillo Salcedo, Vol. 2, 2005, pp. 1251-1272.
17
STC 245/1991, de 16 de diciembre ECLI:ES:TC:1991:245.
18
Así, el Real Decreto 839/2015, de 21 de septiembre, por el que se modifica el Real Decreto 369/1999,
de 5 de marzo, sobre términos y condiciones de inclusión en el Régimen General de la Seguridad
Social de los ministros de culto de las Iglesias pertenecientes a la Federación de Entidades Religiosas
Evangélicas de España, trae causa de la Sentencia del TEDH contra España, de 3 de abril de 2012.
En el preámbulo del R.D. se menciona expresamente que “un pastor evangélico interpuso demanda
contra el Reino de España en reclamación de pensión de jubilación, que ha culminado en la sentencia
emitida por el Tribunal Europeo de Derechos Humanos en fecha 3 de abril de 2012, en la que se
reconoce que en la falta de una regulación que permita el reconocimiento de períodos como cotizados
anteriores a la inclusión en el Régimen General de la Seguridad Social de los ministros de culto
de las iglesias pertenecientes a FEREDE, ha existido una vulneración del artículo 14 del Convenio
Europeo para la Protección de los Derechos Humanos y las Libertades Fundamentales que prohíbe
la discriminación por motivos religiosos. Por ello, y con el fin de evitar tratamientos desiguales, se
considera conveniente llevar a cabo una modificación del Real Decreto 369/1999, de 5 de marzo,
procediendo a incluirse una nueva disposición adicional equiparable, en lo que al reconocimiento
inicial de las prestaciones de jubilación, incapacidad permanente y muerte y supervivencia se refiere,
a la que se dictó en su día para el clero diocesano de la Iglesia católica en la Orden de 19 de diciembre
de 1977” (BOE de 22 de septiembre de 2015, p. 83710).
19
ALMUT WITTLING-VOGEL, “The Role of the Legislative Branch in the implementation of
the judgments of the European Court of Human Rigths”, en ANJA SEIBERT-FOHR / MARCK
VILLIGER (eds.), Judgments of the European Court of Human Rights - Effects and Implementation,
Nomos Verlag, 2014, pp. 59-74.
Dictamen del TEDH, Gran Sala, de 10-IV-2019 (demanda n. P16-2018-001). Accesible en https://
20
21
Sobre el régimen jurídico de la maternidad subrogada en España, vid.: MARÍA OLAYA GODOY,
Régimen jurídico de la tecnología reproductiva y la investigación biomédica con material humano embrionario.
Dykinson, Madrid, 2014. M. OLAYA GODOY, “La gestación subrogada en la jurisprudencia del
TEDH, TJUE y
Tribunal Supremo”, en Anuario de la Facultad de Derecho. Universidad de Extremadura, n. 34, 2018, pp.
111-131.
22
ATS 335/2015, de 2-II-2015 - ECLI:ES:TS:2015:335A.
23
Ya desde la STC 35/1987, de 18 de marzo - ECLI:ES:TC:1987:35.
24
ANTONIO LÓPEZ CASTILLO / JÖRG POLAKIEWICZ, “De la cuestión prejudicial de
convencionalidad en marcha”, en Teoría y Realidad Constitucional, n. 44, 2019, p. 497.
25
JOAQUÍN GARCÍA MURCIA, “Virtualidad en el ordenamiento laboral de la Jurisprudencia del
TEDH (1)”, en Actualidad Laboral, n. 6, Sección estudios, 2014, p. 2,
26
JOAQUÍN GARCÍA MURCIA, “Virtualidad en el ordenamiento laboral de la Jurisprudencia del
TEDH…”, p. 2,
27
ENRIQUE GUILLÉN LÓPEZ, “Ejecutar en España las sentencias del Tribunal Europeo de Derechos
Humanos…”, p. 346.
28
AUSRA PADSKOCIMAITE, “Constitutional Courts and (Non)execution of Judgments of
the European Court of Human Rights: A Comparison of Cases from Russia and Lithuania”, en
Zeitschrift für ausländisches öffentliches Recht und Völkerrecht, Band 77, 2017, pp. 651-684. MARIKE
PIETROWICZ, Die Umsetzung der zu Art. 6 Abs. 1 EMRK ergangenen Urteile des EGMR in der
Russische Föderation, Reihe Schriftenreihe zum Osteuropäischen Recht, Band-Nr. 15, Berliner
Wissenschaft Verlag, 2010.
29
ENRIQUE GUILLÉN LÓPEZ, “Ejecutar en España las sentencias del Tribunal Europeo de
Derechos Humanos…”, p. 343.
30
JAVIER GARCÍA ROCA, “Prólogo” en GIUSEPPE DE VERGOTTINI, Más allá del diálogo entre
tribunales. Comparación y relación entre jurisdicciones, Ed. Civitas, Pamplona, 2010, p. 14, la expresión
diálogo entre Tribunales proviene del ámbito anglosajón, de disciplinas como la ciencia política, la
sociología, o la filosofía, no es de elaboración jurídica.
31
JAVIER GARCÍA ROCA, “Prólogo” en GIUSEPPE DE VERGOTTINI, Más allá del diálogo entre
tribunales…, p. 15 advierte que la forma (el mecanismo procesal: cuestión de inconstitucionalidad,
cuestión prejudicial, amparo constitucional…) en el diálogo entre tribunales se produce “deviene
determinante de sus contenidos y cuando varía el cauce, lo hacen también la perspectiva y los
resultados”. En consecuencia, habrá de tenerse también en cuenta además del argumento la vía
procesal.
32
DAVID KOSAŘ /JAN PETROV, “The Architecture of the Strasbourg System of Human Rights:
The Crucial Role of the Domestic Level and the Constitutional Courts in Particular”, Zeitschrift für
ausländisches öffentliches Recht und Völkerrecht, 77, 2017, pp.585-621. Resalta la figura del juez nacional
como pieza clave en la aplicación de la Carta de DFUE, BUSTOS GISBERT, RAFAEL, “La aplicación
judicial de la CDFUE; un decálogo a partir de la jurisprudencia del Tribunal de Justicia de la Unión
Europea”, en Teoría y Realidad Constitucional, n. 39, 2017, pp. 350-353.
33
Art. 5.2. “Cuando un órgano judicial considere, en algún proceso, que una norma con rango de ley,
aplicable al caso, de cuya validez dependa el fallo, pueda ser contraria a la Constitución, planteará la
cuestión ante el Tribunal Constitucional, con arreglo a lo que establece su Ley Orgánica”.
34
Artículo 5 bis introducido por el apartado tres del artículo único de la L.O. 7/2015, de 21 de julio, por
la que se modifica la L.O. 6/1985, de 1 de julio, del Poder Judicial.
35
LUIS LÓPEZ GUERRA, “El Tribunal Europeo de Derechos Humanos, el Tribunal de Justicia de
la UE y le mouvement nécessaire des choses”, en Teoría y Realidad Constitucional, n. 39, 2017, p. 164,
advierte sobre esta dualidad de jurisdicciones en el mismo ámbito geográfico y sobre las mismas
materias.
36
GIUSEPPE DE VERGOTTINI, Más allá del diálogo entre tribunales. Comparación y relación entre
jurisdicciones, Ed. Civitas, Pamplona, 2010, p. 103, también las sentencias de la Corte Interamericana
de Derechos humanos requieren ejecución.
37
ANDRÉS OLLERO TASSARA, “La aplicación del Derecho comunitario como cuestión
infraconstitucional en el ordenamiento jurídico español”, Revista de las Cortes Generales, 76, 2009, pp.
117-133.
38
PEDRO CRUZ VILLALÓN, “El valor de la posición de la Carta de Derechos Fundamentales en la
Comunión constitucional europea” en Teoría y Realidad Constitucional, n. 39, 2017, p. 88.
39
PEDRO CRUZ VILLALÓN, “El valor de la posición de la Carta de Derechos Fundamentales…”
p. 88.
40
PEDRO CRUZ VILLALÓN, “El valor de la posición de la Carta de Derechos Fundamentales…”,
p. 90.
41
Declaración del TC 1/2004, FJ 6.
42
PEDRO CRUZ VILLALÓN, “El valor de la posición de la Carta de Derechos Fundamentales…”,
p. 91.
43
CRISTINA HERMIDA DEL LLANO, “Una salida a los conflictos entre el Tribunal de
Estrasburgo y el Tribunal de Luxemburgo”, en Persona y derecho, n. 63, 2010, p. 132, auguraba una
mayor seguridad jurídica en la protección de los derechos humanos. Sin embargo, como no se ha
producido la adhesión de la Unión Europea al CEDH, la situación es bien distinta.
44
Vid.: JUAN GONZÁLEZ AYESTA, Autonomía de las Iglesias y sindicatos de ministros de culto. Contexto,
análisis e implicaciones de las sentencias del Tribunal Europeo de Derechos Humanos en el caso ‘Sinticatul
Păstorul cel Bun c. Rumanía’, ed. Thomson Reuters Aranzadi, Pamplona, 2019, pp. 57-61.
45
Puede verse en http://curia.europa.eu/juris/liste.jsf?language=es&num=C-68/17
46
“ Esta opinión está fundada en la jurisprudencia del TC español. Baste como ejemplo la siguiente
cita: “La interpretación a que alude el citado art. 10.2 del texto constitucional no convierte a tales
tratados y acuerdos internacionales en canon autónomo de validez de las normas y actos de los
poderes públicos desde la perspectiva de los derechos fundamentales” STC 64/1991, FJ 4 a).
47
Expresión tomada de GARCÍA VITORIA, IGNACIO, “La participación de los Tribunales
constitucionales en el Sistema europeo de Derechos Fundamentales (a propósito del diálogo entre
la Corte Constitucional italiana y el Tribunal de Justicia en el Asunto Taricco)”, en Revista española de
Derecho europeo, n. 67, 2018, p. 142.
5. Referencias bibliográficas.
Catedrática de Derecho Eclesiástico del Estado desde 1999 hasta el 2017; actualmente
Catedrática de Derecho Constitucional de la Facultad de Derecho de la Universidad
Complutense de Madrid.
La importancia de la argumentación
en el Estado constitucional: especial
consideración a la argumentación judicial
SUMARIO:
R
esulta evidente que la como todos aquellos funcionarios y
argumentación tiene una colaboradores que están vinculados a
relevancia excepcional en el la administración de justicia (fiscales,
marco de los procesos discursivos de letrados de la administración de
naturaleza política y jurídica que se justicia, abogados…).
desenvuelven en nuestros Estados
constitucionales. Argumentan, desde La actividad argumentativa, en
luego, los tres poderes del Estado. Así suma, compromete y recorre
sucede cuando el legislativo propone transversalmente el ejercicio del
y delibera la elaboración de las leyes y poder público estatal en sus diversas
también cuando desarrolla su acción de manifestaciones al efecto de satisfacer
control al Ejecutivo -tan necesaria para el cumplimiento constitucional
la salvaguarda de la salud democrática del deber de interdicción de la
de cualquier Estado que se precie arbitrariedad de los Poderes públicos.
de ser una democracia-. Igualmente, Además, esa misma argumentación
argumenta el Poder Ejecutivo, tanto tan propia del Estado constitucional
en su dación de cuentas de la acción se proyecta más allá de la estructura
de gobierno ante el Poder Legislativo, de Poder, implicando una perspectiva
como en su actividad cotidiana de dialéctica entre los poderes del Estado y
justificación de las diversas acciones la ciudadanía, así como una diversidad
de gobierno y en la resolución -de de actores de naturaleza privada
obligada motivación- de todas aquellas (v. gr.: personas jurídicas, grupos
controversias que surgen por doquier de afectados, masas patrimoniales
en los más diversos niveles en donde transitoriamente sin titular), sin olvidar
se proyecta el Derecho administrativo la relevante actividad argumentativa
y el Derecho fiscal. Asimismo, de los medios de comunicación, que
1
Vid. STEDH de 22 de diciembre de 1994, caso Jersild vs. Dinamarca y, entre las más recientes, la STEDH
de 24 de julio de 2012, caso Ziembinski vs. Polonia. Sobre el particular, adviértase la importancia del
debate constitucional entre Poder Judicial y los medios de comunicación de masas en un clima social
y político cada vez más dominado por el fenómeno de la posverdad (vid., ALISTE SANTOS, «Poder
judicial, justicia penal y medios de comunicación en un contexto comunicativo de posverdad», en
VVAA., Justicia penal pública y medios de comunicación, ed. Tirant lo Blanch, Valencia, 2018, pp. 50 y 51.
2
En este sentido, véanse los informes estadísticos que anualmente publica el Consejo General del
Poder Judicial en su web bajo el título La Justicia Dato a Dato. El último informe publicado hasta la
fecha de redacción de este trabajo es de 2018, e indica que en ese año hubo una litigiosidad en todos
los órdenes jurisdiccionales de 5.993.828 asuntos ingresados, resolviéndose en el mismo período
5.781.677 asuntos, y dictándose un total de 1.488.782 sentencias. Además, se ejecutaron 1.238.147
sentencias. El volumen de asuntos indica, cuando menos, la extraordinaria relevancia de la actividad
argumentativa en sede jurisdiccional, garantizándose la misma con la necesaria publicidad de
las sentencias motivadas tanto coram partibus como coram populo. Vid. La Justicia Dato a Dato, año
2018, Estadística Judicial, en la web: http://www.poderjudicial.es/cgpj/es/Temas/Estadistica-Judicial/
Estudios-e-Informes/Justicia-Dato-a-Dato/
3
Para una síntesis doctrinal sobre el tema de la motivación judicial en general puede consultarse
ALISTE SANTOS, La motivación de las resoluciones judiciales, Madrid, 2º ed., 2018.
Vid. AJANI, Sistemas jurídicos comparados, ed. española, Barcelona, 2010, p 257-260.
4
5
ORMAZABAL SÁNCHEZ, Iura novit curia, Madrid, 2007, p. 83.
6
ALISTE SANTOS, Sistema de Common Law, Salamanca, 2013, p 136: “la práctica de la motivación,
aunque sigue siendo discrecional en nuestros días, es general en los órganos colegiados, y se
fundamenta en una inveterada costumbre de los tribunales de common law de razonar sus decisions.
Práctica muy natural y arraigada en estos tribunales, sin necesidad de texto legal que ordene el
cumplimiento del deber de motivar, porque como tal práctica está íntimamente vinculada al
seguimiento de la regla del stare decisis (pensemos que sin fundamentación alguna no habría
precedentes). No obstante, esta motivación, cuando la hay, nada tiene que ver con aquella que
practican los tribunales colegiados de civil law”.
7
Vid. DAMAŜKA, The Faces of Justice and State Authority. A Comparative Approach to the Legal Process,
New Haven and London, Yale University Press, 1986.
8
Desde la perspectiva netamente filosófica jurídica, véase SERNA BERMÚDEZ, Filosofía del Derecho
y paradigmas epistemológicos, 2º ed., México, 2012, pp. 64 y ss.
9
Vid. RIERA AISA, «voz garantía», en Nueva Enciclopedia Jurídica, t. X, Barcelona, 1960, pp 533-441.
Cfr. IDEM, p 534.
10
11
Cfr. DEL CASTILLO ALONSO, voz «garantías constitucionales», en Enciclopedia Jurídica Española, t.
XVII, Barcelona, 1910, p 33.
12
LUCAS VERDÚ, voz «garantías constitucionales», en Nueva Enciclopedia Jurídica, t. X, Barcelona,
1960, p546.
13
RAMOS MÉNDEZ, Derecho y proceso, Barcelona, 1979, p 17, cuando razona sobre el problema de las
relaciones entre Derecho y proceso, profundiza en el significado de esta dirección sobre la noción de
proceso como processus iudicii, expresando que tanto la actividad de las partes como la actuación del
órgano jurisdiccional, es decir, tanto la acción como la jurisdicción, inexorablemente van dirigidas
a la formación del juicio jurisdiccional, porque la noción más evidente del proceso es la de processus
iudicii, entendiéndose la propia disciplina procesal como método de juicio.
14
Muy bien expresa este pensamiento el gran procesalista italiano Piero CALAMANDREI, cuando
dice que el individuo, privado por el Estado del poder de hacerse justicia a sí mismo tiene, en
contrapartida, la facultad de dirigirse al Estado para obtener justicia contra el obligado, porque al
faltar el voluntario cumplimiento del obligado, el titular del derecho se dirige al Estado a fin de que,
como garante de la observancia del Derecho, convierta la obligación en sujeción, entendiéndose así la
acción como in iure condito de la jurisdicción. Vid. CALAMANDREI, Instituciones de Derecho Procesal
Civil, vol. I, trad. esp. SENTIS MELENDO, Buenos Aires, 1962, pp 221 y ss.
15
Cfr. CARNELUTTI, «Torniamo al giudizio», en RDProc., 1949, p 165 y ss.
El termino resoluciones utilizado aquí en su más amplio sentido, englobando, por ello, tanto las de
16
17
Cfr. DÍEZ-PICAZO, Sistema de Derechos fundamentales, Madrid, 2003, p 70.
18
Cfr. NIETO, El arbitrio judicial, Barcelona, 2000, p 153. También, si bien de forma menos explícita,
COLOMER HERNÁNDEZ, Op. cit, p 21 y p 71; y RODRÍGUEZ BOENTE, Op. cit, p 204-206. El marco
general de este paradigma es la jurisdicción moderna, fruto de la tripartición de poderes públicos
efectuada por el pensamiento liberal conforme a un sistema de organización social bien conocido
por todos y magníficamente sintetizado por SATTA, «Voz Giurisdizione (nociones generales)», en
Enciclopedia del Diritto, t. XIX, Milano, 1970, p 223, en tres momentos: “uno es la manifestación de la
voluntad en términos generales; otro es la concreta acción en que dicha voluntad general encuentra
su razón y su legitimación; el tercero es la afirmación de la voluntad general en el caso concreto. A
estos tres momentos corresponden la legislación, la administración y la jurisdicción”.
19
PÉREZ ROYO, Curso de Derecho constitucional, 11º ed., Madrid, 2007, p 760.
20
IDEM, p 760-761.
democrática del Poder Judicial debido Por tanto, puede entenderse fácilmente
a la ausencia de intervención de los que de los diversos principios que
ciudadanos en la designación y cese conforman el Poder Judicial, a saber:
de los jueces y magistrados. Mal independencia, imparcialidad,
se concilia, pues, la afirmación de responsabilidad, exclusividad y unidad
la legitimación democrática con la jurisdiccional, la sujeción al principio
realidad del Poder Judicial, que no de legitimación democrática a través
se sujeta directamente a la voluntad de la referencia motivada de los hechos
de los ciudadanos. Y, sin embargo, en relación a unos fundamentos
esto no quiere decir que no exista un jurídicos que encuentren acomodo
mecanismo efectivo de sujeción a dicha visible en nuestro sistema normativo,
voluntad: la estrecha vinculación del es el principio determinante y fuente
juez a las leyes, las cuales sí encuentran de todos los demás, erigiéndose en un
una efectiva justificación en el principio poderoso instrumento de integración
de legitimación democrática, plasmada del Derecho. Hecho fundamental, y
al más alto rango en el art. 117.1 de decisivo, para entender la moderna
nuestra norma constitucional cuando, jurisdicción, que, sin embargo, no deja
finalmente, establece que los jueces de ser problemático.
únicamente estarán sometidos al
imperio de la ley. ¿Y cómo se garantiza Así las cosas, y reconociendo la
la efectiva sujeción de los jueces a la importancia que tiene una necesaria
ley? a través, sin duda, de la exigencia sujeción del juez a la ley, como garantía
de motivación, que también encuentra visible de vinculación de éste a través
acomodo constitucional más adelante de sus decisiones al principio de
cuando el art. 120.3 CE proclama que las legalidad democrática, dicha sujeción
sentencias serán siempre motivadas21. debe entenderse en sus justos términos
21
PÉREZ ROYO, Op. cit, p 762, advierte la importancia que tiene el uso del adverbio temporal
“siempre” en el mencionado artículo. De ahí deriva la visibilidad de la legitimación democrática del
Poder Judicial, afirmándose necesariamente en las sentencias.
22
Cfr. BRAVO LIRA, «Judex, minister aequitatis. La integración del derecho antes y después de la
codificación», en AHDE, t. LXI, 1991, p 147.
23
RECASENS-SICHES, «La logique matérielle du raisonnement juridiche», en HUBIEN, Le
raisonnement juridique, 1971, p 140, rechaza muy bien esta concepción cuando sostiene que “lo que
expresa la ley no adquiere nunca su sentido completo antes de haberse conectado a los hechos
concretos. El derecho completo, acabado es únicamente el de las decisiones judiciales… Hay que
abandonar la falsa idea de la llamada “aplicación judicial del derecho”, que supone que el Derecho
está encerrado en las leyes y reglamentos y que el papel del juez consiste en hacer descender los
textos legales sobre los hechos”.
24
Vid. NIETO, El arbitrio judicial, Barcelona, 2000, pp 19-72.
25
Vid. NIETO, Op. cit, pp. 154-155-
26
Vid. ALISTE SANTOS, La motivación de las resoluciones judiciales, 2º ed., Madrid, 2018, p. 240.
27
PERELMAN, Éthique et Droit, Bruselles, 1990, pp. 213-214.
28
Cfr. ALISTE SANTOS, Op. cit., p. 241.
29
Vid. LLOBEL TUSET, Historia de la motivación de la sentencia canónica, Zaragoza, 1985.
30
Sobre el desarrollo histórico de la motivación judicial en Occidente, véase ALISTE SANTOS, Op.
cit, pp. 31-134.
signo del Derecho común, el juez La desconfianza hacia los jueces del
se elevó a una altura incomparable. Derecho común32, abonada por el
Llegó a ser el eje de todo el derecho pensamiento ilustrado del XVIII,
vigente. La codificación lo destronó. germina en la codificación procesal
Lo arrancó de este sitial e hizo posible del XIX, fijándose la ley como remedio
su subordinación a la legalidad. Lo frente a la supuesta arbitrariedad de
que equivale a maniatarlo, a reducir la unos jueces, que hasta ese momento
función judicial a la mínima expresión, operaban en conformidad a un
a una mera aplicación de los dictados sistema judicial de arbitrio33, que no
de los gobernantes”31. Así las cosas, la arbitrariedad34; es decir, de acuerdo a la
motivación judicial, entendida como llamada aequitas nondum constituta35, tan
instrumento de sujeción del juez a diferente de la aequitas constituta en
la legalidad, pretende ofrecer una torno a la ley. Se trata, en suma, de una
respuesta adecuada al problema de la restricción de la capacidad integradora
integración del Derecho. del Derecho común, ejemplificada en
31
Vid. BRAVO LIRA, «Iudex, minister aequitatis. La integración del derecho antes y después de la
codificación», en AHDE, t. LXI, Madrid, 1991, p 111.
32
Siguiendo a la profesora ALONSO ROMERO, «Las reglas de juego: herencia procesal y
constitucionalismo», en Cuadernos de Derecho Judicial, VI-2006, p 226 y ss, es importante subrayar que
no se cuestiona el modelo procesal vigente sino a los propios jueces que lo aplicaban. La profesora
ALONSO señala al efecto que “fuera cual fuera su historia anterior, lo cierto es que tanto en el siglo
XVIII como en el período gaditano, las críticas al proceso se plantearon mayoritariamente como
críticas a una mala práctica del proceso, a un mal uso, achacado a un problema de incumplimiento
de unas leyes que, en líneas generales, se dieron por buenas. No hay duda, igualmente, de que en
ambos momentos el dedo acusador apuntó como principales culpables a los jueces, a quienes por
impericia –y de ahí la antipatía generalizada hacia la justicia lega-, negligencia, abandono de deberes
o prevaricación, se hizo responsables de que tantas buenas leyes alumbradas a lo largo de nuestra
historia no se aplicaran” p 226.
33
Arbitrio judicial rigurosamente estudiado por MECCARELLI, Arbitrium. Un aspetto sistematico
degli ordeniamenti giuridici in età di Diritto Comune, Milano, 1998; sirvan para aproximarnos al concepto
las primeras notas caracterizadoras que este jurista hace del mismo: “l’arbitrium appare come un dispositivo
sistematico consistente in una capacità di valutazione e qualificazione giuridica di fatti e situazioni, applicabile
indiferentemente ai settori dell’ordinamento dedotti dalla funzione cui è oggettivamente destinato, sempre in
coordinamento con un sistema superiore di principi ispiratori e di orientamento, dai quali, o, in base ai quali,
resulta disciplinato”, p 40.
34
ALONSO ROMERO, Op. cit, p 215, escribe al respecto que “en un orden de Derecho plural, en un
orden de jurisdicciones plural, en un orden de estados plural como aquél, donde con frecuencia
se admitía una múltiple variedad de soluciones, y de reglas y excepciones componían de modo
complementario el derecho válido, el arbitrio judicial era instrumento necesario tanto a la hora de
proceder como a la hora de juzgar. Hay que huir, sin embargo, de la automática equiparación a la
arbitrariedad con que se contempló pro el ojo crítico de la Ilustración, pues, lejos de aquélla, el arbitrio
se concebía igualmente como un arbitrio letrado, al que alcanzaban los mismos condicionantes del
modelo procesal y en torno al cual se desarrolló una sólida elaboración doctrinal que lo sometía a
límites, exigía causas y señalaba reglas para su ejercicio, con la intención de apartar de él toda idea
de despotismo. Al invocarlo se apelaba a la prudencia del jurista profesional, no a la libre voluntad
del hombre”.
35
BRAVO LIRA, Op. cit, p 119 y 120, explica la función jurisdiccional de la aequitas nondum costituta,
caracterizadora de la aplicación e integración judicial del Derecho durante los siglos del Derecho
común y fundamentada en la razón y la argumentación. Noción de equidad fruto de la obra de los
glosadores medievales que la contraponían a la denominada aequitas constituta, contenida en las leyes
y en las costumbres, por ello, de raíz más positivizada que aquella otra aequitas nondum constituta,
y que finalmente sirvió de fundamento a la propia codificación, erigida en torno al dogma de la
primacía de la ley.
36
Cfr. ALONSO ROMERO, Op. cit, p 216.
37
Vid. D. J. C. A, Reflexiones sociales o idea para la Constitución española que un patriota ofrece a los
representantes de las Cortes, Madrid, 1811, p 83.
38
GUTIÉRREZ, Práctica Criminal de España, t. III, 5º ed., Madrid, 1828, p 35: “Para evitar pues tamaños
males como causaría el arbitrio de los jueces o magistrados, después de haber examinado estos
atentamente el proceso criminal para pronunciar su sentencia, deberán limitarse sus facultades a la
formación de un silogismo o raciocinio, compuesto tan sólo de tres proposiciones. La primera o mayor
de ellas ha de serla disposición general de la ley; la segunda o menor el hecho porque se procede,
como que es contrario o conforme a la misma ley; y la tercera, o la consecuencia deducida de las otras
dos proposiciones, ha de ser la absolución o condenación del procesado. Formada, por ejemplo, una
causa sobre homicidio el juez de ella para determinarla formará este argumento; la ley manda que el
homicida voluntario muera por ello: F. ha sido homicida voluntario de S. (según el resultado de los
autos), luego F. debe morir por ello; o F. no ha sido homicida voluntario de S., luego debe ser absuelto.
Las proposiciones del silogismo podrán tener más o menos palabras y aún más oraciones conforme
sean los acasos; pero en ninguna manera habrán de formar los jueces dos silogismos ni argumentos,
ni por su voluntad, ni porque se vean precisados a ello, pues de lo contrario se abrirá a la duda, a la
oscuridad y a la incertidumbre”. La fórmula mágica de contención a la interpretación judicial será la
aplicación literal de la ley.
39
JUAN FRANCISCO DE CASTRO, Discursos críticos sobre las leyes y sus intérpretes, t. I, Madrid, 1765,
ed. 1829, p 183. El arbitrio, como nos dice, se concibe como facultad del juez en algunos casos, sin ser
un arbitrio libre y absoluto, sino regulado por las leyes y la ciencia del Derecho, “quien no poseyere
esta ciencia jamás se halará en estado de arbitrar según debe”, p 181.
40
MACAREL, Curso completo de Derecho Público General, t. II, trad. esp., París, 1835, p 183.
otra regla que la ley, y que nunca se ciudadanos. La única gran diferencia
desvía de sus disposiciones, le agrada entre la época anterior y la posterior
relatar sus motivos, pues estando a la codificación parece estar en que
seguro de merecer la aprobación de entonces los males se atribuían al
los que examinan imparcialmente, arbitrio de los jueces y hoy hay que
de convencer a los que dudan de atribuirlos a la arbitrariedad de los
su capacidad o de su rectitud, y de gobernantes, bajo la forma de abusos
confundir a los que se atreven a legislativos o la mil veces más temible,
inculparle, el juez, repito, encuentra por más directa y asfixiante, de los
en la explanación de las razones que abusos administrativos”42.
le han inducido a dar su fallo honrosa
recompensa y justificación completa”41. 3.3. Funciones de la motivación
judicial
No obstante, pronto se vieron las
profundas insuficiencias de esta La motivación judicial, entendida como
concepción. Sirvan como aguda garantía de argumentación jurídica,
síntesis crítica del paradigma judicial aglutina en su seno dos importantes
tradicional las siguientes palabras de funciones43. Por un lado, la función
BRAVO LIRA: “Hogaño como antaño, la endoprocesal, cuyos fines son motivar
multitud de las leyes, sus oscuridades, coram proprio iudice, facultándose
contradicciones y defectos, la entonces el control judicial tanto por
proliferación de comentarios y de el juez a quo como por el eventual juez
opiniones, que se hacen fuego entre ad quem, y motivar coram partibus,
sí, terminan de igual manera: en facilitando de esta forma que las partes
incertidumbre e inseguridad para los tengan el conocimiento preciso de la
41
IDEM, p. 185.
42
Vid. BRAVO LIRA, Op. cit, p 115.
43
Vid. TARUFFO, «L’obbligo di motivazione della sentenza civile tra Diritto comune e illuminismo»,
en Rivista di Diritto Processuale, 1974, pp. 271-275.
44
Vid. al respecto VVAA., La globalización jurídica. Líneas de manifestación en el derecho contemporáneo,
ed. Atelier, Barcelona, 2017.
45
Vid. VVAA., Justicia Informal, ed. Atelier, Barcelona, 2018.
46
Vid. CHASE, Derecho, cultura y ritual. Sistemas de resolución de controversias en un contexto intercultural,
trad. esp., Madrid, 2011, pp 133-155.
47
Este camino conduce a una subversión de la garantía constitucional de motivación, en tanto que
se trenza una falsa analogía entre jurisdicción y medios alternativos, inaceptable absolutamente al
no obedecer a un mismo fin. Vid. ALISTE SANTOS, La motivación de las resoluciones judiciales, 2º ed.,
2018, pp. 148-155.
EL VALOR DE LA LEY
y
o había propuesto un tema que sino que con frecuencia la Ley trata
creo que enlaza con todo lo que de auspiciar un proyecto político, la
ustedes habrán escuchado y pregunta que tengo es, si ese proyecto
con lo que acabo de escuchar ahora en político que se pretende expresar en
una ponencia bien interesante; y parto la Ley es realmente un proyecto de
de una apreciación que puede resultar la comunidad, yo me temo que no
subjetiva por mi parte; yo me temo que siempre es así, y pongo un ejemplo
estamos asistiendo a la devaluación concreto:
de la Ley, por eso he planteado como
tema de conversación precisamente El Ecuador aprobó en un referéndum
el tema del valor de la Ley, y creo en septiembre del año 2008 una nueva
que la devaluación de la Ley viene Constitución, es decir, el conjunto
de varios ángulos, el ángulo político de las leyes sobre las leyes, pregunta,
por cierto, ya sea porque la Ley no ¿cuántos conocían realmente el
trata de expresar los valores sociales, contenido de la Constitución, las
el sentido de justicia, el sentido de implicaciones de la Constitución, o
equidad, el sentido de solidaridad, los proyectos políticos o los intereses
Sistemi di giustizia costituzionale, Giappichelli, Torino, 2019, trad. esp. Sistemas de justicia
constitucional, in L. PEGORARO, A. RINELLA (directores), Derecho constitucional comparado,
tomo IV, Giappichelli, Torino - Astrea, Buenos Aires-Bogotá-Porto Alegre, 2020
Sumario:
R
especto de los primeros que usa un criterio fundamental para
esquemas clasificatorios de los la identificación de los elementos
distintos sistemas de justicia determinantes, identificados con la
constitucional1 –apelando, por una naturaleza concentrada o difusa del
parte, a la distinción entre control modelo, las modalidades de acceso,
político y control jurisdiccional, y, de la eficacia (declarativa o constitutiva)
otra, a la estructura de los Tribunales, del pronunciamiento. Por otra parte,
a la fase de control, a la eficacia de la algunos –pocos– han radicalmente
decisión– muchas cosas han cambiado subvertido dicho esquema para
en la sistemática de dichos modelos. la identificación de los elementos
determinantes, asumiendo diferentes
Las claves de lectura propuestas hasta criterios para construir clases2.
ahora por la doctrina comparada
son básicamente de dos tipos. Por El elemento representado por la
una parte, una vez diferenciados naturaleza jurisdiccional o no del
los modelos en base al carácter órgano está en la base, por ejemplo,
jurisdiccional del órgano encargado de la primera dicotomía identificada
de realizarla y a la fase del control, por Calamandrei y Cappelletti3, pero
1
Véase M. Cappelletti, Il controllo giudiziario di costituzionalità delle leggi nel diritto comparato, Giuffrè,
Milano, 1968; Id., Giudici legislatori?, Giuffrè, Milano, 1984 (también en Id., Le pouvoir des juges, Puf,
Paris, 1990), e Id., The Judicial Process in Comparative Perspective, Oxford U.P., Oxford, 1989 y 1991.
2
V. las consideraciones de F. Fernández Segado, La evolución de la justicia constitucional, Dykinson,
Madrid, 2013.
3
P. Calamandrei, La illegittimità costituzionale delle leggi nel processo civile, Cedam, Padova, 1950, p. 5 ss.,
y M. Cappelletti, Il controllo giudiziario di costituzionalitá delle leggi nel diritto comparato, cit., p. 49 ss.
4
N.P. Sagüés, El desarrollo del derecho procesal constitucional: logros y obstáculos, en Rev. iberoam. der. proc.
const., n. 2, 2004, p. 179 ss.; Id., Derecho procesal constitucional: logros y obstáculos, Cec Trib. Const. del
Perú, Lima, 2008; Id., Compendio de derecho procesal constitucional, Astrea, Buenos Aires, 2018.
5
C. Blanco De Morais, Justiça Constitucional, I, Garantia da Constituçâo e controlo da constitucionalidade,
Coimbra ed., Coimbra, 2002, p. 281 ss.
6
Entre otros, L. Favoreu, Les Cours constitutionnelles, Puf, Paris, 1986 y ediciones posteriores,
distingue los modelos preventivos de los a posteriori; M. Fromont, La justice constitutionnelle dans
le monde, Dalloz, Paris, 1996, individualiza tres fases de desarrollo de la justicia constitucional,
acentúa la yuxtaposición entre procedimientos concretos y abstractos, ejercitados respectivamente
por Tribunales ordinarias o especiales; y D. Rousseau, La justice constitutionnelle en Europe, 3ª ed.,
Montchrestien, Paris, 1998 y ediciones posteriores, también clasifica la justicia constitucional desde
una perspectiva temporal, anclándose en las categorías tradicionales, y subraya la diferencia entre
control a priori y a posteriori.
7
P. Calamandrei, La illegittimità costituzionale delle leggi nel processo civile, cit., y otros muchos autores
hasta A. Ruggeri, A Spadaro, Lineamenti di giustizia costituzionale, 5a ed., Giappichelli, Torino, 2014.
8
H. Nogueira Alcalá, La jurisdicción constitucional y los tribunales constitucionales de Sudamerica en la
alborada del siglo XXI, Porrúa, México, 2004, p. 61 ss.
9
F. Fernández Segado, La giustizia costituzionale nel XXI secolo. Il progressivo avvicinamento dei sistemi
americano ed europeo-kelseniano – La justicia constitucional ante el siglo XXI. La progresiva convergencia de
los sistemas americano y europo-kelseniano, Bonomo, Bologna, 2003; Id., La jurisdicción constitucional ante
el siglo XXI. La quiebra de la bipolaridad “sistema americano-sistema europeo-kelseniano” y la búsqueda de
nuevas variables explicativas de los sistemas de control de constitucionalidad, Tecnos, Madrid, 2001; Id., La
búsqueda de una nueva tipología explicativa de los sistemas de justicia constitucional, en Rev. gen. der. públ.
comp., n. 12, 2013, p. 1 ss.
10
E. McWhinney, Supreme courts and judicial law-making: Constitutional Tribunals and Constitutional
Review, Martinus Nijhoff, Dordrecht, 1986.
11
D. García Belaúnde, La acción de incostitucionalidad en el Derecho comparado, en Lecturas
Constitucionales Andinas, I, Lima, 1991, p. 183 ss. (y espec. p. 196).
12
... como lo propuse en La Justicia Constitucional. Una perspectiva comparada, Dykinson, Madrid, 2004,
p. 164 s., y progresivamente en otros artículos [A justiça constitucional no quadro do constitucionalismo
contemporâneo, en A. Almeida Filho, F. Bilac Moreira Pinto Filho (orgs), Constitucionalismo e Estado,
Forense, Rio de Janeiro, 2007, p. 430 ss., y en Propuestas de clasificación de los sistemas de justicia
constitucional y sus relaciones con la denominación de la materia ‘derecho procesal constitucional’, Forense,
Rio de Janeiro, 2007, p. 11 ss.].
13
Vid. A.R. Brewer Carías, Instituciones políticas y constitucionales, VI, Justicia constitucional, Ed. Jurídica
Venezolana, Caracas, 1996.
14
Además de N.P. Sagüés, Compendio de derecho procesal constitucional, cit., v. A. von Brünneck,
Le contrôle de constitutionnalité et le legislateur dans les democraties occidentales – The Check of
Constitutionality and the Lawmaker in Democracies, en Ann. int. just. const., n. 4, 1988, p. 15 ss., y L.
Favoreu, Les Cours constitutionnelles, 3a ed., Puf, Paris, 1996, p. 16 ss.
15
Por ej., Compendio de derecho procesal constitucional, cit., y H. Nogueira Alcalà, La jurisdicción
constitucional y los tribunales constitucionales de Sudamerica en la alborada del siglo XXI, cit.
P. Pasquino, Tipologia della giustizia costituzionale in Europa, en Riv. trim. dir. pubbl., n. 2, 2002, p. 360 ss.
16
A. Pizzorusso, I sistemi di giustizia costituzionale: dai modelli alla prassi, en Quad. cost., n. 3, 1982, p. 522.
17
18
P. Pasquino, Tipologia della giustizia costituzionale in Europa, en Riv. trim. dir. pubbl., n. 2, 2002, p. 360 ss.
19
A. Pizzorusso, I sistemi di giustizia costituzionale: dai modelli alla prassi, en Quad. cost., n. 3, 1982, p. 522.
20
V. Constantinesco, S. Pierré Caps, Droit constitutionnel, 4a ed., Puf, Paris, 2009.
21
... lo que permitiría colocar a Italia, cuando ello no es posible sin la intervención del legislador
o de la autoridad administrativa, en una clase por separado, puesto que en el sistema italiano los
elementos de concreción son relegados a la fase instaurativa del proceso constitucional ante la Corte
pero no, por lo menos desde esta perspectiva, en aquella descendente de la misma: v. S. Bagni, La
questione incidentale nel controllo di costituzionalità. I sistemi italiano e spagnolo a confronto nel quadro dei
“modelli” dottrinali, 2a ed., Clueb, Bologna, 2007. Sobre la falta de ejecución de las sentencias, por parte
de los Parlamentos, en algunos países de la Europa centro-oriental, v. W. Sadurski, “La crescita delle
Corti costituzionali nei paesi dell’Europa centrale e orientale dopo la caduta del comunismo”, en
Ann. dir. comp. st. legisl. 2011, p. 320 ss.
22
«Sí existe un modelo mínimo de justicia constitucional en los sistemas que solamente proporcionan
formas de control de constitucionalidad sobre actos normativos (primarios y superprimarios,
directamente subordinados a la Constitución). Se trata del objeto originario de la justicia
constitucional, tanto en la forma del conflicto de competencias en el seno de ordenamientos
descentralizados, como en la de garantía del contenido substancial de las normas constitucionales
en materia de derechos. Este modelo se define como mínimo porque se dirige solo a la garantía de
la relación entre poder constituyente y poder legislativo»; «Hablamos, por el contrario de un modelo
máximo de justicia constitucional para referirnos a aquellos ordenamientos que establecen formas de
control de constitucionalidad también frente a otros tipos de actos: jurisdiccionales, administrativos
y de sujetos privados. En este caso, la primacía de la Constitución, obra del poder constituyente, se
afirma frente a diversos poderes del Estado: judicial, ejecutivo, electoral, de revisión constitucional,
popular. Siempre que el ordenamiento incluya institutos de control frente a todos los poderes
podemos decir que se trata de un modelo total de justicia constitucional»: S. Bagni, Oltre i modelli e i
sistemi di giustizia costituzionale e convenzionale, en Dir. pubbl. comp. eur., n. 4, 2017, p. 1067 ss.; S. Bagni, M.
Nicolini, Giustizia costituzionale comparata, Wolters Kluwer-Cedam, Padova, en proceso de impresión.
23
Mi crítica a las clasificaciones tradicionales y la construcción de nuevas propuestas se encuentran, entre los
escritos de la última década, en Taxinomias tradicionais e classificações “fracas” dos sistemas de justiça constitucional, en
R. Romboli, M. Labanca Corrêa De Araújo (eds), Justiça constitucional e tutela jurisdicional dos direitos fundamentais,
Arraes, Belo Horizonte, 2015, p. 223 ss.; Concentrado/difuso: una dicotomía agotada, en Rev. der. empresarial, n. 3, 2015, p.
119 ss., y en Aa.Vv., Studi in onore di Gaetano Silvestri, 3 vols, Giappichelli, Torino, 2016, II, p. 1725 ss.; Hacia una nueva
sistemática de los modelos de justicia constitucional, en Rev. gen. der. públ. comp., n. 18, 2015, en L. Pegoraro, Teoría y
modelos de la comparación. Ensayos de Derecho constitucional comparado, Olejnik, Santiago de Chile, 2016, p. 257 ss., y
en L. Estupiñán Achury, C.A. Hernández, W.G. Jiménez (eds), Tribunales y Justicia Constitucional. Homenaje a la Corte
Constitucional Colombiana, Un. Libre, Bogotà, 2017, p. 31 ss.; Control jurisdiccional vs control político: la erosión de una
categoría dicotómica (y el progresivo alcance de éste último), en Rev. der. const. comp., n. 1, 2018 (Costa Rica), y finalmente
en las voces Jurisdicción constitucional (clasificaciones), Justicia constitucional (modelos), Justicia constitucional (tipología),
en E. Ferrer Mac-Gregor, F. Martínez Ramírez, G. Figueroa Mejía (eds), Diccionario de Derecho Procesal Constitucional
y Convencional, Unam-Iij, México, 2014 (2ª ed., 2 vols, 2014), pp. 800 ss., 849 ss., 851 ss., en Giustizia costituzionale
comparata. Dai modelli ai sistemi, Giappichelli, Torino, 2014, y en Sistemi di giustizia costituzionale, Giappichelli, Torino,
2019, trad. esp. Sistemas de justicia constitucional, en L. Pegoraro, A. Rinella (eds), Derecho constitucional comparado,
tomo IV, Giappichelli, Torino - Astrea, Buenos Aires-Bogotá-Porto Alegre, 2020.
24
G. Tusseau, Modelli di giustizia costituzionale. Saggio di critica metodologica – Contre les «modeles» de
justice constitutionnelle. Essai de critique metodologique, Bup, Bolonia, 2009, trad esp. Para acabar con los
“modelos” de jurisdicción constitucional. Un ensayo de crítica, Porrúa-Imdpc, México, 2011; vid. también Id.,
Au-delà des ‘modèles’ de justice constitutionnelle, pour un comparatisme pragmatiste, en Rev. gen. der. públ.
comp., n. 12, 2013, trad. it. Oltre i “modelli” di giustizia costituzionale, verso una comparazione pragmatista,
en S. Bagni (ed.), Giustizia costituzionale comparata. Proposte classificatorie a confronto, Bup, Bologna,
2013; Id., Les causes du choix d’un modèle de contrôle de constitutionnalité. Observations critiques sur un
dogme explicatif de l’étude du contentieux constitutionnel, en Jus politicum, n. 13, 2014, y en http://www.
juspoliticum.com/IMG/pdf/jp13_tusseau.pdf. La cursiva es mía.
G. Sacerdoti Mariani, en G. Sacerdoti Mariani, A. Reposo, M. Patrono (eds), Guida alla Costituzione
25
degli Stati Uniti d’America. Duecento anni di storia, lingua e diritto, Sansoni, Firenze, p. 106, nt. 88, señala
que «con el uso de one se quiere insistir sobre la unicidad de la Corte Suprema».
26
Cfr. A. Reposo, The Federalist, Judicial Review e Stato federale, en Il Politico, 1987, p. 37 ss.
27
La frase: «the Constitution means what the Courts say it means» fue pronunciada por el Chief Justice Charles Evans Huges (1907),
sin explícita referencia a la Corte Suprema, aunque, tal y como recuerda S. Bagni en la voz Interpretación comparada, en E. Ferrer Mac-
Gregor, F. Martínez Ramírez, G. Figueroa Mejía (eds), Diccionario de Derecho Procesal Constitucional y Convencional, cit., p. 729, la Corte
Suprema de EE.UU. en el caso Cooper v. Aaron (358 US 1 - 1958), afirmó: «La interpretación de la Enmienda Decimocuarta enunciada por
esta Corte en el caso Brown es la ley suprema del país».
28
Sin querer remontar hasta los mismos orígenes en la antigua jurisdicción del Sacro Imperio Romano (Reichsgerichtsbarkeit), se
ha señalado que en las Constituciones de los Estados alemanes aprobadas después de 1830 la jurisdicción constitucional de las
controversias entre órganos del Estado o en todo caso en materia de derecho estatal (Staatsgerichtsbarkeit) no pudo arraigar en defecto
de instancias federales [J. Luther, Idee e storie di giustizia costituzionale nell’Ottocento, Giappichelli, Torino, 1990, p. 95; y anteriormente E.
Friesenhahn, Die Staatsgerichtsbarkeit, en G. Anschütz, R. Thoma (ed.), Handbuch des deutschen Staatsrechts, 2 vols, Tübingen, 1932, II]. Es
en cambio en la estructura federal de la Confederación alemana del 1815 donde se puede hallar el germen de la justicia constitucional,
y justo en materia de regulación de competencias entre los Estados partícipes de la Confederación misma, y también de conflictos
entre Federación y Estados confederados. Tal esquema fue recogido luego en la Constitución suiza de 1874, en la de Weimar de 1919 y
por fin –racionalizado por Kelsen– en la Constitución austríaca de 1920 (donde el núcleo central de la Verfassungsgerichtsbarkeit fue y es
hoy representado por la regulación de las competencias de Bund y Länder).
29
La elección clasificatoria dicotómica (que evoca la visión simplificada del mundo de John Wayne) es la más difusa hoy entre los
comparatistas estadounidenses: como escribe P.G. Monateri, Critique et différence: le droit comparé en Italie, en Rev. int. dr. comp.,
n. 4, 1999, p. 999, «Aux États-Unis aujourd’hui on a une préférence pour des classements axés sur l’opposition entre la Western Legal
Tradition et les autres. Que c’est américain et que c’est simple!». Y, citando a U. Mattei, Comparative Law and Economics, Un. of
Michigan Press, Ann Arbor, 1997 (Chap. 3: “The Distinction between Common Law and Civil Law: Doing Away with Legal Positivism”),
p. 69 ss., añade: «Les distinctions entre droit français et allemand sont tenues par des nuances, et face à la grandeur des valeurs
communes exprimées par la WLT, aussi bien la common law que la civil law ne déviennent que des variantes locales de la même
tradition, plus ou moins perfectionnées, selon l’idéologie ou les préférences des auteurs. Quant au droit des Etats-Unis, ayant reçu la
common law anglaise, les valeurs des lumières françaises, des suggestions bien sélectionnés de la théorie allemande, et ayant développé
un système judiciaire sans équivalent, il est bien suggéré qu’il mérite la place d’honneur». (Véase U. Mattei, Why the Wind Changed:
Intellectual Leadership in Western Law, en Am. journ. comp. law, n. 42, 1994, p. 195.) En perspectiva cognitiva v. S.L. Winter, A Cleaning
in the Forest: Law, Life, and Mind, Chicago U.P., Chicago, 2001.
30
El efecto que consigue a este exceso de detalles se extiende del material jurídico al intérprete, como lo afirma G. Bognetti en dos
ensayos (que fueron voces enciclopédicas) titulados: Federalismo, Utet, Torino, 2009: es decir, el comparatista se transforma en
«entomólogo que padece pedantería».
31
El efecto que consigue a este exceso de detalles se extiende del material jurídico al intérprete, como
lo afirma G. Bognetti en dos ensayos (que fueron voces enciclopédicas) titulados: Federalismo, Utet,
Torino, 2009: es decir, el comparatista se transforma en «entomólogo que padece pedantería».
32
Cfr. A. Marradi, Classificazioni, tipologie, tassonomie, en Enc. sc. soc., II, Istituto Enc. italiana, Roma,
1992, p. 22 ss.
33
Vid. R. Needham, Polythetic Classification: Convergence and Consequences, en Man, n. 3, 1975, p. 358; T.
Brennan, Classification: An Overview of Selected Methodological Issues, en Crime and Justice. A Review of
Research, n. 9, 1987, p. 216.
34
S. Baldin, Riflessioni sull’uso consapevole della logica fuzzy nelle classificazioni fra epistemologia del diritto
comparato e interdisciplinarietà, en Rev. gen. der. públ. comp., n. 10, 2011, p. 3 ss.
Y cita, refiriendo a A. Sangalli, L’importanza di essere fuzzy. Matematica e computer, Bollati Boringhieri,
Torino, 2000, p. 23, el concepto de personas anziana: a los cinco años una persona con seguridad
no es anciana (y su grado de pertenencia al conjunto será 0), mientras que a los noventa y cinco se
puede considerar, con toda certeza, anciana (y tendrá un grado de pertenencia 1). Entre los cinco
y los noventa y cinco años existe una zona gris, representada numéricamente por los grados de
pertenencia mayores a 0 e inferiores que uno, que crecen en función del avance de la edad.
35
Subrayan que las clases sono dúctiles F. Hamon, M. Troper, Droit constitutionnel, 29a ed., Lgdj, Paris,
2005, p. 66 ss.
36
La teoría se explica en L.-J. Constantinesco, Einfhürung in die Rechtsvergleichung, I, Rechtsvergleichung,
C. Heymanns, Khöln, 1971, trad. esp. Introducción al Derecho comparado, en Tratado de Derecho comparado,
I, Tecnos, Madrid, 1981, trad. it. Introduzione al diritto comparato (al cuidado de A. Procida Mirabelli di
Lauro, R. Favale), Giappichelli, Torino, 1996, p. 223 ss.
37
Véase L. Pegoraro, A. Rinella, Sistemi costituzionali comparati, Giappichelli-Astrea, Torino-Buenos
Aires, 2017, trad. esp. Derecho constitucional comparado, II, Sistemas constitucionales, 2 vols, Giappichelli-
Astrea, Torino-Buenos Aires, 2018, vol. A, cap. II, secc. II, p. 134 ss.
38
U. Mattei, Verso una tripartizione non eurocentrica dei sistemi giuridici, en Aa.Vv., Scintillae iuris. Studi
in memoria di Gino Gorla, I, Giuffrè, Milano, 1994, p. 775 ss. y espec. 782. En una sucesiva contribución
en inglés, el juicio de prevalencia ha sido traducido con “impression of hegemony”: Id., Three Patterns of
Law: Taxonomy and Change in the World’s Legal Systems, en Am. journ. comp. law, n. 45, 1997, p. 21.
39
Por ejemplo, no ponen en duda el papel político de la Corte Suprema estadounidense G. Halpern,
C. Lamb (eds), Supreme Court Activism and Restraint, Lexington Boocks, Lexington, 1982. A la deference,
o mejor a la falta de una tradición cultural en el plantear incidentes de constitucionalidad, se conecta
en Hungría el escaso uso que los jueces ordinarios hacen de la cuestión prejudicial: cfr. K. Kelemen,
L’accesso individuale indiretto alla Corte costituzionale ungherese, en Dir. pubbl. cost. eur., n. 1, 2014, p. 435.
Sobre el concepto de “deference” v. G. Lawson, G. Seidman, Deference and National Courts in the Age of
Globalization: Learning, Applying and Deferring to Foreign Law, en C.A. d’Alessandro, C. Marchese (eds),
Ius dicere in a Globalized World: A Comparative Overview, 2 vols, Roma TrE Press, Roma, 2018, I, p. 431 ss.
40
Cfr. G. Tusseau, Para acabar con los “modelos” de jurisdicción constitucional. Un ensayo de crítica, cit., p. 92 ss.
41
A parte de la doctrina estadounidense (ver E. Andreoli, Dialogo o judicial interpretation? La political question doctrine, tra giurídico
e opportunità politica, en D. Butturini, M. Nicolini (eds), Giurisdizione costituzionale e potere democraticamente legittimato, 2 vols, Bup,
Bologna, 2017, II, Dialoghi “esemplari”: le esperienze straniere, p. 75 ss.), v. por ej., sobre Brasil, M.L. Silva Ribeiro, Doctrina das questões
politicas e jurisdição constitucional: análise da actuação do Supremo Tribunal Federal à luz da teoria discursiva do direito e da democracia, en Rev.
inform. legisl., n. 173, 2007, p. 209 ss.; sobre Argentina, R. Haro, El proceso de acrecentamiento de la Corte Suprema de la Nación Argentina, en la
revisión judicial de las “cuestiones políticas”. Cuatro materias paradigmáticas, en Aa.Vv., Constitución y democracia: ayer y hoy. Libro homenaje a
Antonio Torres del Moral, 3 vols, Universitas, Madrid, 2012, I, p. 1057 ss. Se puede afirmar sin embargo que el recurso a la political question
esconde una precisa elección política de los Tribunales, que pueden decidir de no decidir y de “salvar” la opción del legislador, o
viceversa, analizar el fondo de la cuestión y anular la ley. Siendo ellos los que pueden elegir si decidir o no decidir (y cambiar de idea
al respecto, como entre en Baker v. Carr entre miles de casos más), “political question” no significa solo respectar la voluntad política del
poder legislativo, sino incluso hacer una elección política acerca de respectar tal voluntad o imponer la propia.
42
Vid. A. BURATTI, Veti presidenziali, Presidenti e maggioranze nell’esperienza costituzionale statunitense,
Carocci, Roma, 2012, pp. 54 ss., 85 ss.
43
Vid. Muskrat vs United States, 219 US 346.
44
Sobre la concepción del Jefe de Estado como defensor de la Constitución, v. C. Schmitt, Der
Hüter der Verfassung (1931), rist., Dunker & Umblot, Berlin, 1969, trad. it. Il custode della costituzione,
Giuffrè, Milano, 1981. El control político asume varias facetas: además que al Jefe del Estado, puede
ser atribuido a órganos internos, al Parlamento, a órganos dependientes o derivados de este, y al
mismo Gobierno. Para ver varias hipótesis ampliamente documentadas remito a mis libros Giustizia
costituzionale comparata. Dai modelli ai sistemi, cit., parte I, cap. I, § 2, y Sistemas de justicia constitucional,
cit., p. 35 ss.
45
V. A.S. Bruno, Constitutional fidelity. Saggio comparativo su una “figurazione” statunitense, Giappichellli,
Torino, 2011, y de la misma Autora la voz Deference (fidelidad constitucional), en L. Pegoraro (ed.),
Glosario de Derecho Público Comparado, trad. esp. al cuidado de E. Ferrer Mac-Gregor, M. Nuñez, C.
Astudillo, G. Enríquez Fuentes, P. Torres Estrada, Porrúa, México, 2012, p. 74.
46
Véase S. Cassese, Global standards for national democracies?, en Riv. trim. dir. pubbl., n. 3, 2011, p. 701 ss.
Cfr. asimismo L. Pegoraro, Costituzioni e democrazia: definizioni e classificazioni nel costituzionalismo
contemporaneo, en Aa.Vv., Categorie e terminologie del diritto nella prospettiva della comparazione, en Rass.
parl., aprile-giugno 2014, p. 249 ss., y en Rev. latino-am. est. const., n. 16, 2014.
47
S. Baldin, Le “altre funzioni” delle Corti costituzionali con particolare riferimento agli ordinamenti dell’Europa
centro-orientale, Eut, Trieste, 2000; G.F. Ferrari, Le forme di controllo di costituzionalità “anomale”, en Dir.
pubbl. comp. eur., 2000, p. 351 ss.; T. Ginsburg, Z. Elkins, Ancillary Powers of Constitutional Courts, en
Texas L.R., n. 87, 2009, p. 1431 ss.
48
Cfr. con anterioridad General Theory of Law and State, Harvard U.P., Cambridge, 1945, trad. it. Teoria
generale del diritto e dello stato, Etas-Kompass, Milano, 1966, espec. p. 332 ss.
49
Para una reconstrucción y varios ejemplos v. E. Ferrer Mac-Gregor, Panorámica del derecho procesal
constitucional y convencional, Marcial Pons, Madrid et al., 2013, espec. p. 647 ss. Por último S. Ragone,
Las tres vertientes del impacto de la jurisprudencia de la Corte IDH en el continente americano: itinerarios
para investigaciones multidisciplinarias, en P. Santolaya Machetti, I. Wences Simón (eds), La América de
los derechos, Cepc, Madrid, 2016, p. 435 ss.
50
En la inmensa biografía sobre el control de convencionalidad v., entre las más recientes, H.
Nogueira Alcalá (ed.), El diálogo transjudicial de los Tribunales Constitucionales entre sí y con las Cortes
Internacionales de Derechos Humanos, Librotecnia, Santiago de Chile, 2012 ; Id., Diálogo judicial
multinivel y principios interpretativos favor persona y de proporcionalidad, Librotecnia, Santiago de Chile,
2013; Id., Derechos fundamentales, bloque constitucional de derechos, diálogo interjurisdiccional y control
de convencionalidad, Ubijus, México, 2014; E. Ferrer Mac-Gregor, A. Herrera García (eds), Diálogo
jurisprudencial en Derechos Humanos entre Tribunales Constitucionales y Cortes Internacionales, Tirant Lo
Blanch México, México, 2013.
51
L. Pegoraro, Il Governo in Parlamento. L’esperienza della Va Repubblica francese, Cedam, Padova, 1983.
52
Para Canadá un análisis de la jurisprudencia (en base a la cual, si bien la violación de convenciones
no puede ser sancionada, las Cortes pueden conocer del asunto), se encuentra en J. Frémont, Le fonti
del diritto costituzionale canadese, en J. Frémont, A. Lajoie et al., L’ordinamento costituzionale del Canada,
Giappichelli, Torino, 1997, p. 35 ss. Sobre Italia G. Razzano, Il parametro delle norme non scritte nella
giurisprudenza costituzionale, Giuffrè, Milano, 2002.
53
V. al respecto L. Pegoraro, Le leggi organiche. Profili comparatistici, Cedam, Padova, 1990, espec. p. 37 ss.
54
A. Lajoie, Jugements de valeurs, Puf, Paris, 1997.
L. Pegoraro, La tutela della certezza giuridica in alcune costituzioni contemporanee, en Dir. soc., n. 1, 1994,
p. 21 ss., y en Scritti per U. Scarpelli, Giuffrè, Milano, 1997; Id., Certezza del diritto e diritto costituzionale.
55
Comparazioni diacroniche e sincroniche sui testi normativi, en Rev. latino-am. est. const., n. 20, 2017, p. 91.
56
Un análisis comparativo, aunque se remonte en el tiempo, en S.M. Cicconetti, Regolamenti
parlamentari e giudizio di costituzionalità nel diritto italiano e comparato (Stati Uniti, Germania federale,
Italia), Cedam, Padova, 1979; más recientemente, en G.G. Floridia, Il regolamento parlamentare nel
sistema delle fonti, Giuffrè, Milano, 1986.
57
Sobre este punto S. Ragone, I controlli giurisdizionali sulle revisioni costituzionali. Profili teorici e
comparativi, Bup, Bologna, 2011, trad. esp. El control judicial de la reforma constitucional. Aspectos teóricos
y comparativos, Porrúa, México, 2012; Id., ¿Cómo compaginar control judicial y participación popular en
las reformas constitucionales?, en S. Bagni, G. Figueroa Mejía, G. Pavani (eds), La ciencia del derecho
constitucional comparado. Estudios en homenaje a Lucio Pegoraro, 3 vols, Tirant lo Blanch-México, México,
2017, I, p. 1213 ss.; Id., El control material de las reformas constitucionales en perspectiva comparada, en
Teoría y realidad const., n. 31, 2013, p. 391 ss.; Id., El control de las reformas constitucionales en el derecho
comparado: cuestiones metodológicas, en S. Bagni (ed.), Justicia constitucional comparada, cit., p. 319 ss.;
Id., Función judicial y reforma constitucional, en Id., Desafíos de la función judicial. Un acercamiento desde
el derecho público comparado, Olejnik, Santiago de Chile, 2018, p. 99 ss.; S. Bagni, Justicia constitucional
y procesos constituyentes, Olejnik, Santiago de Chile, 2017. Sobre la importancia que tiene este control
(siempre más frecuente) sobre la revisión constitucional cfr. K. Gözler, Judicial Review of Constitutional
Amendments. A Comparative Study, Ekin Press, Bursa (Turchia), 2008; D. Góngora Pimentel, El control
de la reforma constitucional, en J. Vega Gómez, E. Corzo Sosa (eds), Tribunales y justicia constitucional.
Memoria del VII Congreso Iberoamericano de Derecho Constitucional, Unam, México, 2002, p. 239 ss.
(con particular referencia al contexto iberoamericano); Aa.Vv., Reforma de la Constitución y control
de constitucionalidad, Fac. Ciencias Jur. de la Pontificia Un. Javeriana, Bogotá, 2005; G.A. Ramírez
Cleves, Límites de la reforma constitucional en Colombia: el concepto de Constitución como fundamento de
la restricción, Un. Externado de Colombia, Bogotá, 2005; F. Zúñiga Urbina, Control de constitucionalidad
de la reforma constitucional, en Est. const., 2006, p. 429 ss.; D. García Belaúnde, Sobre el control de la
reforma constitucional (con especial referencia a la experiencia jurídica peruana), en Rev. der. pol., n. 66,
2006, p. 477 ss.; I.B. Flores, Sobre la (in)constitucionalidad de “reformas constitucionales”: a propósito de los
casos de Chiapas, Michoacán y Oaxaca, en Cuest. Const., n. 17, 2007, p. 259 ss. Si se quiere, L. Pegoraro,
Tribunales constitucionales y revisión de la Constitución, en Pensamiento const., n. 6, 1999, p. 221 ss., en
Rev. Cortes Gen., n. 47, 1999, p. 7 ss., y en Id., Ensayos sobre justicia constitucional, la descentralización y
las libertades, Porrúa, México, 2006, p. 209 ss. Finalmente, varios contenidos del cap. VII (“Temas de
reforma constitucional”) del t. II de P. Häberle, D. García Belaúnde (eds), El control del poder. Homenaje
a Diego Valadés, 2 vols, Unam, México, 2011, p. 383 ss. y Iidc-Un. Inca Garcilaso de la Vega-Iustitia, Lima,
2012 (con contribución de F. Zúñiga Urbina, R.G. Ferreyra, H. Nogueira Alcalá, P. Salazar Ugarte, R.
Hernández Valle, J.V. Haro García, R. Haro), y en el libro di P.R. Torres Estrada, M.G. Nuñez Torres
(eds), La reforma constitucional. Sus implicaciones jurídicas y políticas en el contexto comparado, Porrúa,
México, 2010.
una deformación de la idea misma hoy hace), sino más bien «¿puede
de control: desde el control sobre los el mismo pueblo soberano, incluso
abusos de la mayoría, en nombre de la con los procedimientos establecidos
supremacía constitucional, se convierte por el pacto constituyente, modificar
en el control del poder constituyente el mismo en su núcleo duro?» y, en
sobre el poder constituido, en todas consecuencia, “«¿quién es el custodio
sus manifestaciones. Se desplaza de tal pacto?».
a otro lugar, entonces, la pregunta
inicial puesta por Hamilton, por la En definitiva, se debilita la misma
filosofía política francesa y luego por idea de Sieyès sobre la distinción
Schmitt y por Kelsen: la pregunta entre los dos diversos poderes, si
hoy no es (sólo) «¿quién controla la la imparable expansión del objeto
ley?» o «¿qué legitimación tienen del control no mira a poner las
los jueces para anular los actos del leyes y otros actos al imperio de
pueblo soberano, decisiones de la la Constitución, sino a someter a
mayoría de sus representantes?» control el mismo poder de revisión,
(Cuestión que ni siquiera en algunos por parte de un órgano del poder
ordenamientos latinoamericanos constituido 58.
teñidos de populismo y socavados
por una tradición caudillista nadie Ulteriores factores que pueden
58
De la aceptación de la teoría sustancial de la Constitución –como la de C. Schmitt, que la concibe
como un todo orgánico de valores éticos y políticos (C. Schmitt, Verfassungslehre, Duncker & Humblot,
Berlin, 1928, trad. it. Dottrina della Costituzione, Giuffrè, Milano, 1984, p. 109 ss.)– o de teorías formalistas
y normativistas de la misma (por todos H. Kelsen, Reine Rechtslehre, Franz Deuticke, Wien, 1960, trad. it.
La dottrina pura del diritto, Einaudi, Torino, 1966, p. 251 ss.) dependen importantes consecuencias en lo
referido a la relación entre poder constituyente y poder de revisión, y en definitiva los límites a los que
estaría sometido este último. Simplificando: quien acoge a la primera tesis, luego de haber decidido
qué forma parte del “espíritu” de la Constitución, considerará ejercicio de poder constituyente –y por
tanto extra ordinem – todas las modificaciones que entrañan tal “espíritu”; quien parte de la visión
antiética, no haciéndose condicionar por lo que resulta difícilmente medible (que cosa es “espíritu”
y que cosa no lo es), considerará ilegal la revisión hecha contraviniendo el procedimiento previsto.
Las visiones opuestas sobre los límites al poder constituyente tienen raíces antiguas, y se juntan al
debate, surgido en el ’700 en Europa sobre todo por Condorcet, y en America por Jefferson e Paine,
sobre el (denegado) derecho de una generación a vincular a la sucesiva, «de los muertos de vincular
a los vivos». Entre los libros más intensos sobre esta materia v. C. Klein, Théorie et pratique du pouvoir
constituant, Puf, Paris, 1996, espec. p. 141 ss.
59
Desde otro punto de vista –el temporal– pueden ser más o menos objeto de control las normas
preconstitucionales. Normalmente, lo son, si no desde un punto de vista de su formación, desde
el sustancial. V. a propósito el análisis comparado de V. Orozco Solano, La fuerza normativa de la
Constitución frente a las normas preconstitucionales, Ead-Ubijus, México, 2012.
60
Véase M. Calamo Specchia, L. Montanari, Introduzione, en Id., L’accesso in via indiretta alle Corti
costituzionali: un modello per l’Europa?, sección monográfica de Dir. pubbl. comp. eur., n. 1, 2014, p. 333.
61
Vid. K. Kelemen, L’accesso individuale indiretto alla Corte costituzionale ungherese, cit., p. 433 y p. 438 s.
62
El control sucesivo resulta más ventajoso desde el punto de vista de la economía jurídica: en primer
lugar, permite a los jueces salvar la vigencia de las disposiciones que, de otra manera, podrían en vía
preventiva ser susceptibles de sentencias de inconstitucionalidad. Además y sobre todo: de una parte,
se evita que cuestiones abstractas, relativas a asuntos que no se realizan en la vida cotidiana, que no
afectan a intereses justiciables, sean debatidos por las Cortes Constitucionales; por otra parte, impide
que interpretaciones inconstitucionales de una disposición escapen del control.
Argumentos a favor del control previo en C. Blanco de Morais, Justiça Constitucional, II, O direito do
Contencioso Constitucional, 2ª ed., Coimbra ed., Coimbra, 2011, p. 26 ss., y en O. Duhamel, G. Tusseau,
Droit constitutionnel et Institutions politiques, 3a ed., Seuil, Paris, 2013, p. 788 ss. (también ccon la
admisión de sus límites: p. 794 ss.).
63
Ver entre tantos, sobre la inconstitucionalidad por omisión, M. Gómez Puente, La inactividad del
legislador: una realidad susceptible de control, MacGrawHill, Madrid, 1997; I. Villaverde Menéndez,
La inconstitucionalidad por omisión, MacGrawHill, Madrid, 1997; J.J. Fernández Rodríguez, La
inconstitucionalidad por omisión. Teoría general. Derecho comparado. Derecho español, Civitas, Madrid,
1998; V. Bazán (ed.) Inconstitucionalidad por omisión, Temis, Santa Fe de Bogotá, 1997. Sobre los efectos
temporales, recientemente D. Butturini, M. Nicolini (eds), Tipologie ed effetti temporali delle decisioni di
incostituzionalità. Percorsi di diritto costituzionale interno e comparato, Esi, Napoli, 2014.
64
Ver G.A. Figueroa Mejía, Las sentencias constitucionales atípicas en el derecho comparado y en la acción
de inconstitucionalidad mexicana, Porrúa, México, 2011.
65
Esta medición poco tiene que ver con la propuesta de Tushnet, que –basándose solo en la experiencia
estadounidense, sin verificar sobre el campo– distingue una strong-form judicial review de una weak,
individualizándola sustancialmente por el hecho que la prevalencia en tema de interpretación de la
Constitución sea confiada a los órganos judiciales propuestos, o a una especie de diálogo entre ellos
y los Parlamentos: M. Tushnet, Weak Court, Strong Rights. Judicial Review and Social Welfare Rights in
Comparative Constitutional Law, Princeton U.P., Princeton, 2008; Id., The rise of weak-form of judicial
review, en T. Ginsburg, R. Dixon (eds), Comparative Constitutional Law, E. Elgar, Cheltenham, 2011, p.
321 ss.; anteriormente Id., Weak-Form Judicial Review and “Core” Civil Liberties, en Harvard Civil Liberties
Civil Rights L.R., 2006, p. 1 ss. (además de otros artículos).
L
os requisitos para la admisión ejemplo improcedencia no es lo
de la acción de protección, todos mismo que inadmisión y el legislador
sabemos que estos requisitos las confunde en este artículo porque
están en el artículo 42 de la Ley Orgánica finalmente habla de la improcedencia
(de Garantías Jurisdiccionales y de la acción cuando ahí están
Control Constitucional) y ahí también mezclados criterios de inadmisión
hay una confusión, una primera y criterios de improcedencia.
confusión, yo sí creo que también Cuando hablamos de procedibilidad,
el legislador debería entender que evidentemente, de una acción, una
el derecho procesal es un derecho, acción es procedente o es improcedente
digamos que podemos comparar el cuando tiene problemática de fondo
derecho procesal como una operación y por lo tanto, no se puede declarar
quirúrgica, y por lo tanto, es un derecho la improcedencia en una primera
muy específico y hay que poner mucha audiencia, inmediatamente en auto,
atención cuando se dan definiciones no se puede porque necesariamente
porque, como todos sabemos, por el juez tiene que entrar al fondo, ya
porque si nosotros leemos cuáles más sencillos que hay en este artículo
son los requisitos, los requisitos son 42 que es el punto 2 que dice que el
completamente informales, uno hasta juez puede declarar la improcedencia
puede ir contando los hechos sin citar cuando los actos hayan sido revocados
normas, etc., por lo tanto, me parece un o extinguidos salvo que de tales
poco restrictiva esta sentencia pero está actos se deriven daños susceptibles
y por lo tanto, si se constituye como un de reparación. ¿Qué significa esto?
requisito de inadmisión. Por lo tanto en Significa que el punto 2 relativiza
todos los otros casos que no son estos la temporalidad y el principio de
que, puntualmente, yo he descrito, en inmediatez ¿Por qué? Porque,
todos los demás casos, evidentemente, efectivamente, el objeto fundamental
el pronunciamiento tiene que ser sobre de la acción de protección es, la
el fondo y por lo tanto, tiene que haber finalidad de la acción de protección,
una primera audiencia, es decir, yo es reparar integralmente y por lo
solo puedo declarar la improcedencia tanto, el legislador dice, miren señores,
después de una primera audiencia aquí no es importante en la acción de
porque el juez tiene que entrar de protección la inmediatez, lo que es
alguna manera en el fondo. Entonces, importante es establecer si subsiste
vamos a ver cuáles son según la ley, o no el daño; y, por lo tanto, en ese
realmente, es muy poco clara, yo sí creo sentido la Corte lo dijo explícitamente
que si algo complejo han tenido que en la sentencia 109-14-SEP CC que el
hacer los jueces es descifrar la Ley de Juez no puede declarar improcedente
Garantías Jurisdiccionales y Control una AP bajo el argumento de que la
Constitucional porque, especialmente, vulneración haya ocurrido hace algún
en estos requisitos en el objeto de tiempo atrás, ya que la inmediatez
la acción de protección no ha sido no es un requisito de la AP y, por
clara y por lo tanto, le ha botado el lo tanto, repito, cae el principio de
problema a los operadores judiciales, inmediatez a la hora de admitir; lo que
de alguna manera; y, de hecho los es importante verificar es si subsiste o
requisitos, empezaré con los requisitos no subsiste el daño y en ese sentido,
hasta podemos cuestionar actos que que podamos reflexionar sobre algo,
han sido revocados ¿por qué? Porque sobre el que luego también pondré el
lo hacemos en función de lo que es acento, los derechos constitucionales
más importante que es la finalidad de en Ecuador, además, tienen todos el
la acción de protección que es reparar mismo nivel de protección, por lo tanto,
el daño. todos los derechos que están en la
constitución son derechos que pueden
Dicho eso, pasamos a los dos puntos ser objeto de la acción de protección,
más complejos del artículo 42 pero al mismo tiempo si nosotros
que son el 1 y el 4, son los que han bajamos a la justicia ordinaria, el
creado más problema, porque no juez civil ¿de qué se encarga? De la
hay claridad, no hay claridad en la garantía de derechos, los derechos
ley y lamentablemente no ha habido civiles, propiedad; el juez de familia
claridad en la doctrina y no ha habido y adolescencia ¿de qué se encarga?
claridad en la jurisprudencia de la De la garantía de derechos, derechos
Corte Constitucional. El primer punto de la niñez y adolescencia y todos los
nos dice que también se tiene que derechos que están reconocidos en el
declarar improcedente la acción de Código de la Niñez y Adolescencia; el
protección cuando de los hechos no juez penal ¿de qué se encarga? De los
se desprenda que existe una violación derechos más importantes que son el
de derechos constitucionales; aquí, derecho a la vida, el derecho al respeto
el problema ha sido la intervención de la integridad física, etc., también
de la doctrina y en algún momento en algunos casos a la salvaguarda
también de la jurisprudencia ¿Qué del derecho de propiedad; entonces,
ha pasado respecto de esta definición claro, ahí tenemos un gran problema
de derechos constitucionales? ¿Qué porque, cuando nos dice que la acción
son los derechos constitucionales? no procede cuando de los hechos no
Pues, los derechos constitucionales, se desprenda que existe una violación
son todos los derechos que están en de derechos constitucionales. Siempre
la Constitución; ahora, yo quiero que haya una discusión, siempre
se me devuelva el alquiler con los señor el día que yo le pago los intereses
intereses, los mismos intereses que usted está reparado completamente.
me hubiese dado el banco teniendo
ese dinero en el banco; el mismo Rápidamente, esto quiere decir, que
contrato de alquiler, es un señor todas las clasificaciones que hemos
que ha alquilado su departamento tenido, no sirven realmente para tener
para irse a vivir con su hijo porque el una justicia garantista en la acción de
alquiler del departamento le permite protección, por lo tanto ¿Qué hay que
comprar la medicina que necesita ir a ver en este caso? Yo sí creo que
para sobrevivir porque tiene una el requisito no es tanto el contenido
enfermedad en el corazón y no puede constitucional o legal del derecho
comprar la medicina. La violación sino es la urgencia y la afectación
es la misma, pero ¿los efectos son los más bien indirecta de derechos como
mismos? ¿La urgencia es la misma? Por la dignidad, la vida que podríamos
supuesto que no. El señor, si nosotros entender, aunque en Ecuador no
no admitimos esa demanda en acción tenemos derechos fundamentales,
de protección, el señor va a morir pero podemos entender que son
porque no va a poder comprar su los derechos axiológicamente
medicamento, entonces, ¿Cuál es esta fundamentales, porque sin vida no
diferencia de contenido patrimonial y tengo ningún derecho y si me muero
contenido no patrimonial del derecho? mientras espero la sentencia no voy a
Hay veces en que el patrimonio poder ser reparado por la violación del
también es importante ¿Por qué? derecho. Respecto al otro requisito que
Porque está relacionado con la vida, es el punto 4 y que es cuando el acto
con la dignidad de las personas, con administrativo pueda ser impugnado
el proyecto de vida de las personas y en la vía judicial, salvo que se
otras veces no, otras veces el resultado demuestre que esta no fuere adecuada
se puede reparar también en la vía ni eficaz, todos sabemos que esa ya es
ordinaria, por lo tanto, no es necesario una tarea del juez, es el juez y no las
ir a acción de protección porque el partes que tienen que explicar en su
1) El control de la constitucionalidad
L
a Constitución Española de 1978 de las leyes y disposiciones
(en adelante, CE) ha establecido normativas con fuerza de ley, bien
en su Título IX (arts. 159 a 165, por la vía directa del recurso de
fuera por tanto del título dedicado inconstitucionalidad [arts. 161.1, a)
al Poder Judicial, que es el Título CE y 31 y ss. de la Ley Orgánica del
VI) al Tribunal Constitucional como Tribunal Constitucional (en adelante,
intérprete supremo de la propia LOTC)]; bien por la vía de la cuestión
Constitución. A tal fin, se le atribuyen de inconstitucionalidad (arts. 163 CE
1
Estudio realizado en el Marco del Proyecto de Investigación, Asignaturas pendientes del sistema procesal
español (DER2017-83125-P), Ministerio de Economía, Industria y Competitividad (Gobierno de
España); cofinanciado con FEDER.
y 35 y ss. LOTC); o bien, finalmente, es, con carácter general, de tres meses
mediante la llamada cuestión interna a partir de la publicación de la norma
de inconstitucionalidad (o autocuestión impugnada (art. 33.1 LOTC)3.
de inconstitucionalidad) que, en
el supuesto de que el recurso de Por su parte, la cuestión de
amparo debiera ser estimado porque inconstitucionalidad encuentra el
la ley aplicada lesione derechos fundamento de su existencia en el
fundamentales o libertades públicas, doble sometimiento de los jueces y
la Sala o Sección del Tribunal tribunales a la Constitución y a la
Constitucional elevará al Pleno, con ley: al ser la Constitución la norma
suspensión del plazo para dictar suprema de nuestro ordenamiento,
sentencia (art. 55.2 LOTC). no pueden aplicar una ley contraria
a la misma; pero, por otra parte,
El recurso de inconstitucionalidad tampoco tienen el poder de inaplicarla
constituye un medio de control directamente. Por ello, el artículo 163 de
directo y abstracto de la conformidad la CE establece que cuando un órgano
con la Constitución de las leyes, judicial, de oficio o a instancia de parte,
disposiciones normativas o actos considere que una norma con rango de
con fuerza de ley, por lo que dicho ley, aplicable al caso y de cuya validez
control lo promueven, en este caso, dependa el fallo, pueda ser contraria a
los sujetos participantes del poder la Constitución, planteará la cuestión
público2. El plazo para interponerlo ante el Tribunal Constitucional, una
2
Según el artículo 32 de la LOTC, están legitimados para el ejercicio del recurso de inconstitucionalidad:
el Presidente del Gobierno, el Defensor del Pueblo, cincuenta Diputados o cincuenta Senadores.
También están legitimados para impugnar normas del Estado que puedan afectar a su propio ámbito
de autonomía, los órganos colegiados ejecutivos y las Asambleas Legislativas de las Comunidades
Autónomas, previo acuerdo adoptado al efecto.
3
Por Ley Orgánica 1/2000, de 7 de enero, se ha modificado el artículo 33 de la LOTC, estableciendo la
posibilidad de que el Presidente del Gobierno y los órgano colegiados ejecutivos de las Comunidades
Autónomas puedan interponer el recurso de inconstitucionalidad en el plazo de nueve meses,
siempre que cumplan los requisitos que el propio precepto establece, con el fin de permitir a las
Comisiones Bilaterales de Cooperación entre el Estado y cada una de las Comunidades Autónomas
alcanzar un acuerdo que evite la interposición del recurso.
4
Nueva modalidad de conflicto constitucional, en defensa de la autonomía local, introducida por la
Ley Orgánica 7/1999, de 21 de abril, de modificación de la LOTC.
5
Últimamente, por Ley Orgánica 1/2010, de 19 de febrero, se ha atribuido al Tribunal Constitucional el
conocimiento de los recursos interpuestos contra Normas Forales fiscales de los territorios de Álava,
Guipúzcoa y Vizcaya, y de los conflictos con normas del Estado con rango de ley en defensa de la
autonomía foral de los Territorios Históricos de la Comunidad Autónoma del País Vasco (Disposición
Adicional Quinta de la LOTC), reforma que ha sido declarada compatible con la CE por la Sentencia
del Tribunal Constitucional nº 118/2016, de 23 de junio, en la medida en que se interprete en los
términos de su fundamento jurídico 3 d). Y mediante la Ley Orgánica 12/2015, de 22 de septiembre,
se ha recuperado el recurso previo de inconstitucionalidad para los Proyectos de Ley Orgánica de
Estatutos de Autonomía o su modificación (art. 79 LOTC).
6
Cfr. DÍEZ-PICAZO GIMÉNEZ, “El artículo 53.2 de la Constitución: interpretación y alternativas
de desarrollo”, en DE LA OLIVA SANTOS y DÍEZ-PICAZO GIMÉNEZ, Tribunal Constitucional,
Jurisdicción ordinaria y derechos fundamentales, McGraw-Hill, Madrid, 1996, págs. 117-122.
9
Real Decreto de 14 de septiembre de 1882, por el que se aprueba la Ley de Enjuiciamiento Criminal.
10
En el ámbito civil han de tenerse en cuenta, además, la Ley Orgánica 1/1982, de 5 de mayo, de
protección civil del derecho al honor, a la intimidad personal y familiar y a la propia imagen, y la Ley
Orgánica 2/1984, de 26 de marzo, reguladora del derecho de rectificación.
11
Así lo concreta expresamente para la vía judicial civil de tutela de los derechos fundamentales la
Exposición de Motivos de la LEC, apartado X.
12
Ley 36/2011, de 10 de octubre, reguladora de la Jurisdicción Social.
13
Las conclusiones reflejadas en este epígrafe están tomadas de GÓMEZ AMIGO, La sentencia
estimatoria del recurso de amparo, Aranzadi, Pamplona, 1998.
14
Cfr. las Sentencias del Tribunal Constitucional nº 129/1989, de 17 de julio; 245/1991, de 16 de diciembre
y 71/1994, de 3 de marzo; y el Auto del Tribunal Constitucional nº 382/1996, de 18 de diciembre.
15
Sobre este tema puede verse BILBAO UBILLOS, La eficacia de los derechos fundamentales frente
a particulares. Análisis de la jurisprudencia del Tribunal Constitucional, Centro de Estudios Políticos y
Constitucionales, Madrid, 1997.
Cfr. la Sentencia del Tribunal Constitucional nº 56/2019, de 6 de mayo, con cita de las Sentencias del
16
deben informar los procesos judiciales LOTC y se concreta en los artículos 42,
(art. 24); el principio de legalidad penal 43.1 y 44.1 a) y c) de la LOTC para cada
(art. 25); el derecho a la educación y una de las modalidades del recurso17.
la libertad de enseñanza (art. 27); los
derechos a la libre sindicación y a la Sobre esta característica de la
huelga (art. 28); el derecho de petición, subsidiariedad del recurso de
individual y colectiva (art. 29). En amparo, debemos hacer las siguientes
cuanto a la objeción de conciencia consideraciones:
al servicio militar obligatorio (art.
30.2), este derecho no tiene aplicación 1) Su razón de ser reside en respetar
práctica en el momento presente, ya el papel de primeros garantes de
que desde el 1 de enero de 2002 en los derechos fundamentales y las
España no es obligatorio la realización libertades públicas de los tribunales
del servicio militar. ordinarios.
17
Sobre el carácter subsidiario del recurso de amparo, véanse SENÉS MOTILLA, La vía judicial previa
al recurso de amparo, Civitas, Madrid, 1994; CORDÓN MORENO, El proceso de amparo constitucional,
La Ley, Madrid, 1992, págs. 62 y ss. Específicamente, sobre la subsidiariedad del recurso de amparo
contra actos u omisiones de los órganos judiciales, FERNÁNDEZ FARRERES, El derecho a la tutela
judicial y el recurso de amparo (con BORRAJO INIESTA y DÍEZ-PICAZO GIMÉNEZ), Civitas, Madrid,
1995, págs. 119 y ss.
18
Ley Orgánica 6/1985, de 1 de julio, del Poder Judicial.
19
Y así lo ha establecido claramente el Tribunal Constitucional en su Sentencia nº 125/1990, de 5 de
julio: «Ha de señalarse que este Tribunal ha declarado en diversas ocasiones que para poder ser recurrida en
amparo una decisión o acto sin valor de ley de cualesquiera de los órganos de las Cortes Generales o de las
Asambleas Legislativas de las Comunidades Autónomas es menester, conforme a lo dispuesto en el art. 42 de la
LOTC, que dichos actos parlamentarios hayan alcanzado firmeza; lo que sólo se alcanza una vez que se hayan
agotado las instancias internas y las jurisdiccionales establecidas contra tales actos; esto es, la contencioso-
administrativa cuando la cuestión afecte a materia de personal de las Cámaras (AATC 241/1984 y 296/1985).
Pero es evidente que la necesidad de que el acto parlamentario recurrido alcance firmeza no permite crear
recursos inexistentes en la vía parlamentaria, ni obliga a intentar, previamente al amparo, una vía judicial
manifiestamente improcedente». En el mismo sentido, la Sentencia del Tribunal Constitucional nº
136/1989, de 19 de julio y el Auto del Tribunal Constitucional nº 334/1993, de 10 de noviembre.
20
Se expresa en idénticos términos, la Sentencia del Tribunal Constitucional nº 131/2018, de 12 de diciembre.
En cuanto a las excepciones a la regla de la subsidiariedad en el proceso penal, expresa el Auto del Tribunal Constitucional nº 404/2004, de 2
de noviembre:
«El rigor de este principio (precisa la STC 247/1994, de 19 de septiembre, y reiteran las SSTC 318/1994, de 28 de noviembre; 31/1995, de 6 de febrero; y 27/1997,
de 11 de febrero), se modera, sin embargo, en concretos supuestos excepcionales establecidos en nuestra doctrina, en los que el seguimiento exhaustivo del
itinerario procesal previo, con todas sus fases y etapas o instancias, implica un gravamen adicional, una extensión o una mayor intensidad de la lesión del
derecho por su mantenimiento en el tiempo. Son casos en los que, de obligar a agotar la vía judicial ordinaria, se produciría una injustificada perpetuación
en el tiempo de la lesión de su derecho fundamental o se consumaría definitivamente dicha violación, haciéndose imposible o dificultándose gravemente el
restablecimiento in integrum por el Tribunal Constitucional del derecho fundamental vulnerado.
Así, una de las excepciones está relacionada con aquellas resoluciones que, por referirse a la situación personal del encausado, fundamentalmente acordando
su prisión provisional, pueden afectar de manera irreparable a la libertad personal del mismo (SSTC 247/1994, de 19 de septiembre; 27/1997, de 11 de febrero;
73/1999, de 26 de abril; 155/2000, de 12 de junio; 236/2001, de 18 de diciembre; y ATC 173/1995, de 6 de junio, entre otros).
Una segunda razón para excepcionar la aplicación de la regla general es el efecto actual o inmediato de la lesión denunciada. Como menciona la STC 236/2001,
de 18 de diciembre, FJ 2, en las SSTC 161/1995, de 7 de noviembre, y 27/1997, de 11 de febrero, ello se produce en los casos en que la lesión “hace sentir sus efectos
de inmediato -en todos y cada uno de los actos que lleve a cabo el juez- y por ello ha de ser denunciada cuando se produce y no cuando recae resolución que pone
fin al proceso....”; y ello por cuanto, “obligar al particular a agotar la vía judicial ordinaria produciría una injustificada perpetuación en el tiempo de la lesión
de su derecho fundamental o se consumaría definitivamente la violación, haciéndose imposible o dificultándose gravemente el restablecimiento in integrum
por el Tribunal Constitucional del derecho fundamental vulnerado”.
Son casos en que, de esperar al desarrollo total del proceso en todas sus correspondientes y eventuales etapas o instancias, se consumaría definitivamente
la violación del derecho fundamental sin posibilidad de restitución in integrum ulterior en el mismo proceso o en el eventual recurso de amparo contra la
sentencia definitiva porque, aunque el proceso siga en cuanto al fondo de la decisión, la cuestión está ya definitivamente resuelta (porque se reclama la
constitución de un juez ordinario frente a la jurisdicción militar -STC 161/1995-; o porque la cuestión no va referida al fondo de la decisión sino a las medidas
cautelares y de situación personal -STC 236/2001-, o porque se trata de un caso de habeas corpus -SSTC 1/1995 y 154/1995). No tienen cabida en este supuesto
excepcional, por lo tanto, aquellas violaciones susceptibles de ser corregidas en el propio proceso, o en que la supuesta vulneración puede ser plenamente
restablecida por el órgano judicial o, en su momento, por este Tribunal en el cauce de un futuro recurso de amparo contra la sentencia definitiva.
También hemos incluido otra excepción a la regla general en relación con la función de preservación y no solo de reparación o restablecimiento propia del
amparo constitucional unido al tipo del proceso en que recayó la decisión judicial que motiva la queja. Ello no implica, sin embargo, que el recurso de amparo
asuma una función preventiva, cautelar, tendente a preservar los derechos fundamentales frente a las amenazas de vulneración que pudieran producirse por
la acción de los poderes públicos, ni ante la mera posibilidad abstracta de que las violaciones lleguen a producirse, siendo imprescindible que se produzca la
infravaloración, menoscabo o violación de un derecho susceptible de amparo. La interpretación del concepto que ha acogido el Tribunal requiere, pues, que
se haya producido efectivamente la vulneración, a partir de la cual la protección de amparo no sólo persigue la reparación o restablecimiento del derecho
fundamental, sino también la preservación futura del mismo, tratando de evitar ulteriores y reincidentes violaciones del derecho. De lo anterior resulta que
únicamente es admisible el recurso de amparo ante la existencia real y concreta, efectiva y cierta y no meramente eventual, de vulneraciones de derechos
fundamentales, de manera que el recurso planteado ad cautelam, ante una vulneración potencial o futura, resulta radicalmente improcedente (por todas, STC
9/1982, de 10 de marzo; 43/1988, de 16 de marzo; 145/1990, de 1 de octubre).
Por último, han de comprenderse también los supuestos de resoluciones interlocutorias que infrinjan derechos fundamentales de carácter material, distintos
a los contenidos en el art. 24 CE, causando una lesión autónoma de los mismos, y que no puedan directa o indirectamente ser subsumidos en dicha norma
constitucional y, en su caso, las vulneraciones ser restablecidas a través de los derechos y garantías contenidos en el referido art. 24 de la Constitución (STC
27/1997, de 11 de febrero, relativo al derecho a la libertad sindical, en que la imposición de una medida cautelar, en la cuantía indicada, podía llegar a ocasionar
en sí misma la vulneración de este derecho fundamental material, imposibilitándose su restitutio in integrum). Son casos en que se ha dado la ocasión a los
Tribunales ordinarios de restablecer aquel derecho fundamental sustantivo, presuntamente vulnerado, distinto a los contenidos en el art. 24 CE el cual, en
cualquier caso, nunca podría ser objeto de restitución a través de la invocación, en la Sentencia definitiva, de los derechos procesales del art. 24 CE».
En términos casi idénticos, el Auto del Tribunal Constitucional nº 169/2004, de 10 de mayo. Véanse también las Sentencias del Tribunal
Constitucional nº 27/1997, de 11 de febrero; y 235/2006, de 17 de julio.
21
Convenio Europeo para la Protección de los Derechos Humanos y de las Libertades Fundamentales,
hecho en Roma de 4 de noviembre de 1950.
22
En virtud de la Ley Orgánica 6/2007, de 24 de mayo, de modificación de la Ley Orgánica 2/1979, de 3
de octubre, del Tribunal Constitucional.
23
Sentencia del Tribunal Constitucional nº 155/2009, de 25 de junio.
24
En este sentido, las Sentencias del Tribunal Constitucional nº 10/1981, de 6 de abril; 8/1986, de 21
de enero; 37/1989, de 15 de febrero; y 207/1996, de 16 de diciembre, conceden el amparo con base en
la consideración de que los actos de los poderes públicos recurridos suponen ya una lesión de los
derechos fundamentales, a pesar de no haberse ejecutado todavía, porque implican una afectación
directa y negativa del contenido de los mismos, aun cuando la consumación de tal afectación se
prevea posterior aunque ineludible.
25
La regulación de las medidas cautelares también ha sido reformada por la Ley Orgánica 6/2007, de
24 de mayo, de modificación de la Ley Orgánica 2/1979, de 3 de octubre, del Tribunal Constitucional.
26
Sentencia del Tribunal Constitucional nº 56/1982, de 26 de julio.
27
Cfr. GÓMEZ AMIGO, La sentencia estimatoria del recurso de amparo, Aranzadi, Pamplona, 1998, págs.
231 y ss., y 283 y ss.
Cfr. CORDÓN MORENO, El proceso de amparo constitucional, La Ley, Madrid, 1992, págs. 12-13.
28
29
En virtud de la Ley Orgánica 15/2015, de 16 de octubre, de reforma de la Ley Orgánica 2/1979, de
3 de octubre, del Tribunal Constitucional, para la ejecución de las resoluciones del Tribunal
Constitucional como garantía del Estado de Derecho.
Entre las líneas de investigación en las que se enfoca son: Tutela jurisdiccional de
los derechos fundamentales y recurso de amparo; Proceso penal, diligencias de
investigación penal restrictivas de los derechos fundamentales: las intervenciones
corporales, acusación popular; Tutela del crédito: proceso monitorio español, proceso
monitorio europeo y juicio cambiario. Incidente concursal. Acuerdo extrajudicial de
pagos. Mediación; Implantación y desarrollo de la e-Justicia en España y en la Unión
Europea. Tramitación electrónica de los procedimientos judiciales; Cooperación
judicial penal en la Unión Europea: orden europea de protección y obtención
transfronteriza de prueba penal electrónica.
P
ara hablar además de un tema recurrentemente sancionados por el
que si bien resulta recurrente, no sistema interamericano de derechos
creo que sea menos importante, humanos por la vulneración del
y que desde mi perspectiva se ha artículo 7 de la Convención Americana,
constituido en uno de los problemas especialmente, el 7.2 y 7.3, me refiero a
endémicos de nuestra administración la prohibición de privación de libertad
de justicia, me refiero a la constante ilegal y prohibición de privación de
vulneración del derecho a la libertad libertad arbitraria; y, sin embargo,
personal del penalmente procesado, décadas después lejos de mejorar las
dicho en otras palabras, al abuso de cosas, creo yo que han empeorado y
la prisión preventiva por parte de han empeorado ostensiblemente y esto
nuestros operadores de justicia. Y digo que no es una apreciación subjetiva,
que se ha constituido en un problema puede objetivamente verificarse a
endémico porque lo tenemos desde través de las estadísticas de nuestro
hace mucho tiempo, hemos sido sistema de justicia.
diaria a los jueces de romper todo contra Ecuador y contra otros países
estándar en materia de protección de también Bulacio versus Argentina,
la libertad personal del penalmente Barrios Altos versus Perú, Niños de la
procesado. Calle versus Guatemala, bueno, una
cantidad de fallos que, justamente, se
Estamos levantando números, pero, referían a la protección del derecho a
sin miedo a equivocarme, puedo decir la libertad personal.
que más del 90% de nuestros jueces no
utilizan los estándares convencionales ¿Cuándo hablamos de privación de
del sistema interamericano a la hora libertad arbitraria, de qué estamos
de dictar las prisiones preventivas, hablando? Claro, el 7.2 prohibición de
es decir, a lo mucho observan la libertad ilegal, creo que todo el mundo
legislación nacional; y, esto hace que lo puede entender adecuadamente,
un altísimo porcentaje de las prisiones es decir, una prohibición de libertad
preventivas que se dictan todos los días ilegal es aquella que incumple
por parte de nuestros operadores de con la normativa nacional, tanto
justicia sean arbitrarias o ilegítimas, es constitucional como legal, yo creo que
decir, vulneren el 7.3 de la Convención. para eso no hace falta mucho ejercicio
mental como para entender; pero el
¿Qué es lo que dice la Corte 7.3, ese es el que nos trae un poquito
Interamericana en materia de la más de problemas en su aplicación
protección de la libertad personal? ¿Por qué? Porque, la privación de
En materia, en específico del 7.3, ha libertad arbitraria se produce cuando
generado una jurisprudencia bastante la privación de libertad cumple
larga, de hecho, ustedes va a ver que en con la normativa nacional, es decir,
la década de los 90, es decir, hace ya 30 es legal, pero incumple con los
años hubo una multiplicidad de fallos estándares convencionales, estándares
de la Corte Interamericana, varios convencionales que por principio
Ha publicado varios libros, como Código Orgánico Integral Penal Comentado; El Delito
de la Defraudación Tributaria en el COIP; entre otros.
SUMARIO
E
n Europa continental, de concentrada, expresado por medio de
acuerdo con la concepción un Tribunal Constitucional. Dicho
jurídico-política inspirada órgano restringía sus actuaciones
por el liberalismo, existió, a raíz de a la anulación de aquellas leyes que
la implantación del Estado legal de resultaban contrarias a la Norma
Derecho, una fuerte resistencia a la Fundamental2. Así, dicho Tribunal
creación de un sistema judicial de fue concebido, esencialmente, como
revisión de las leyes, similar al creado, una suerte de legislador negativo3.
a partir de 1803, en los Estados Unidos Esta función atribuida al mismo ha
de América. Predominó así, hasta informado, de manera constante, su
bien entrado el siglo XX, la idea de actuación más destacada. A ella, que
que ningún órgano judicial podía le permite actuar como Tribunal de
imponerse a las decisiones adoptadas la ley, se han sumado con el tiempo,
por el Parlamento, en tanto que aunque no siempre, según en qué
encarnación legítima de la soberanía Estados, atribuciones que lo facultan
nacional, ya que ello conculcaba el para actuar, igualmente, como Tribunal
principio fundamental de la división de conflictos, resolviendo los que se
de poderes, rígidamente interpretado1. generan entre las altas instituciones
del Estado, y entre la federación y los
No obstante, la necesidad de territorios, esencialmente; y, también,
garantizar el valor normativo y como Tribunal de la libertad, amparando
1
E. García de Enterría, “La Constitución como norma y el Tribunal Constitucional”, Madrid, Civitas,
1981, págs. 123 y ss.
2
Cfr., por todos, P. Cruz Villalón, “La formación del sistema europeo de control de constitucionalidad
1918-1939”, Madrid, Centro de Estudios Constitucionales, 1987, pássim.
3
H. Kelsen, “La garantie jurisdictionnelle de la Constititution (La Justice constitutionnelle)”, en Revue
de Droit Public, Vol. XLV, 1928, págs. 197 y ss.
4
M. Cappelletti, “Il controllo giudiziario di costituzionalità delle leggi nel Diritto comparato”, Milano,
Giuffré, 1979, págs. 61 y ss.
5
Así, vid., a este respecto, el espléndido libro coordinado por E. Aja Fernández (ed.), “Las tensiones
entre el Tribunal Constitucional y el Legislador en la Europa actual”, Barcelona, Ariel, 1998.
6
F. Rubio Llorente, “La jurisdicción constitucional como forma de creación del Derecho”, en “La
forma del poder”, Madrid, 1993, págs. 510 y ss.
7
Así, J. Pérez Royo, “Tribunal Constitucional y división de poderes”, Madrid, Tecnos, 1988, págs. 24 y
ss.
8
F. Rubio Llorente, “La jurisdicción constitucional como forma de creación del Derecho”, op. cit.,
pág. 515.
9
J. Jiménez Campo, “La declaración de inconstitucionalidad de la ley”, en F. Rubio Llorente y J. Jiménez
Campo, “Estudios sobre jurisdicción constitucional”, Madrid, McGraw-Hill, 1998, págs. 130 y ss.
10
E. Aja y M. González Beilfuss, “Conclusiones generales”, en E. Aja (coord.), “Las tensiones…”, op.
cit., págs. 265-266.
11
F. Caamaño Domínguez y otros, “Jurisdicción y procesos constitucionales”, Madrid, McGraw-Hill,
2004, págs. 63 y ss.
12
J. Jiménez Campo, “La declaración de inconstitucionalidad de la ley” en F. Rubio Llorente y J.
Jiménez Campo, “Estudios…”, op. cit., págs. 121 y ss.
13
E. Aja Fernández y M. González Beilfuss, “Las tensiones…”, op. cit., págs. 274 y ss.
F. Caamaño Domínguez y otros, “Jurisdicción y procesos constitucionales”, op. cit., págs. 141 y ss.
14
P
revio a iniciar esta charla, Constitución de la República, tiene la
permítaseme agradecer la obligación constitucional y legal de
gentil invitación del Consejo administrar justicia, tomando como
de la Judicatura y la Universidad égida de sus decisiones judiciales
Internacional de La Rioja. Y tomando la Constitución de la República,
las palabras de la profesora Roca, estimo entendiendo palmariamente el
que estos dos días de capacitación efecto irradiador que ejerce la Norma
han sido muy importantes para los Suprema sobre la totalidad del sistema
operadores de justicia, pues vale la legal en la actualidad.
pena seguir la sugerencia del profesor
Jordi Nieva, primero es la capacitación Claros en que las garantías y derechos
y luego el activismo jurídico. contenidos en la Constitución se
aplican en todas las áreas del Derecho,
Es muy grato dirigirme a ustedes hace que el derecho constitucional
como jueza ordinaria, que en atención tenga radical importancia al momento
a lo previsto en el artículo 427 de la de abordar los diversos casos subidos
NO
CONCEDEN NIEGAN
CAUSAS RESUELVEN SIN
RESUELTAS ACCIÓN DE ACCIÓN DE
INGRESADAS FONDO DEL RESOLVER
PROTECCIÓN PROTECCIÓN
TEMA
SALA 100 91 29 57 5 9
LABORAL
Autora del libro “Más autonomías, más democracia” y artículos varios atinentes a
Derecho Procesal, Penal, Constitucional y afines.
Acto de
Clausura
Agenda Acto de
Clausura
MARTES, 18 DE FEBRERO DE 2020
Discurso de clausura
y agradecimientos
A
partir de la aprobación de tal como lo define el artículo 1, de este
la Constitución en el año instrumento normativo.
2008, se establece una nueva
concepción de Estado, pasando del Bajo este principio fundamental se
tradicional Estado social de derecho, a revaloriza la dignidad de las personas,
un Estado constitucional de derechos por medio del reconocimiento de la
y justicia, social, democrático, supremacía del texto constitucional
soberano, independiente, unitario, sobre el resto del ordenamiento
intercultural, plurinacional y laico, jurídico, con la consecuente aplicación
Entrega de
certificados
Entrega de certifi
Certificados
cados
Intervención de clausura
Certificados
Entrega de certifi cados Entrega de certificados
Quito,
EntregaAuditorio
de CertifiIAEN
cados Entrega de certificados Entregade
Entrega deCertifi
certificados
cados
Quito,
EntregaAuditorio
de CertifiIAEN
cados
Agendas
Acto de inauguración
JORNADAS ACADÉMICAS:
"DERECHO CONSTITUCIONAL PARA OPERADORES DE
JUSTICIA"
LUNES, 17 DE FEBRERO DE 2020
8:30 – 9:00 30 min Registro de participantes Escuela de la Función Judicial
Intervención musical
9:35 – 9:40 5 min Grupo “Camerata” de la Casa de la Cultura.
Salida de autoridades
Académica
Día 1
LUNES, 17 DE FEBRERO DE 2020
Ponencia 9: Importancia de la argumentación Prof. Tomás Aliste Santos,
16:20 - 16:40 20 min en el Estado constitucional. Profesor de la Universidad
Internacional de La Rioja – UNIR
Académica
Día 2
MARTES, 18 DE FEBRERO DE 2020
9:00 - 9:20 20 min Registro de los participantes Escuela de la Función Judicial
Ponencia 5: Sistemas de control Prof. José María Porras Ramírez,
11:10 – 11:30 20 min constitucional de las normas legales y Catedrático de la Universidad de
administrativas. Granada.
Ponencia 6: Obligaciones de los jueces Dra. Anacelida Burbano Játiva,
11:30 – 11:50 20 min ordinarios al conocer la garantía de “Acción Jueza de la Corte Provincial de
de protección” Justicia de Pichincha
Registro
Fotográfico
Mesa de autoridades: De izq. a der. Dr. Juan José Morillo Velasco, Dra. Ruth Maribel Barreno Velin,
Dr. Jhoel Escudero, Dra. María del Carmen Maldonado Sánchez, Dra. Paulina Aguirre Suárez, Dr. José
María Vázquez, Dr. Patricio Donoso Chiriboga, Dr. Fausto Roberto Murillo Fierro
De izq. a der. Dr. Jorge Benavides Ordóñez, Prof. Luis Gómez Amigo, Dr. José María Vázquez, Prof. Jordi Nieva Fenoll, Prof. María José
Roca, Dra. María del Carmen Maldonado Sánchez, Prof. María Josefa Ridaura Martínez, Prof. Carlos Vidal Prado, Prof. José María Porras
Ramírez, Prof. Dr. Tomás J. Aliste Santos.
Dra. Paulina Aguirre Suárez Dra. María del Carmen Maldonado Sánchez
Créditos
Autoridades
Dra. María del Carmen Maldonado Sánchez Dr. José María Vázquez
Presidenta del Consejo de la Judicatura Rector de La Universidad Internacional de La Rioja,
UNIR
Dr. Jorge Aurelio Moreno Yanes
Vocal del Consejo de la Judicatura Mgs. Ana Frontela
Country Manager Universidad Internacional de La
Dra. Ruth Maribel Barreno Velin Rioja - UNIR
Vocal del Consejo de la Judicatura
Dr. Gustavo Ayala Cruz
Dr. Fausto Roberto Murillo Fierro Director de Programas Universidad Internacional de
Vocal del Consejo de la Judicatura La Rioja - UNIR
Organización