No iDftteo, no hurtes, no inientaf>, o* ti' );gi6ano qn* W'írs, la mvjer qtt*

pravariquas, bonn k lua pftiirra: en arrdg-ia tiií ca.>.i, ci ¡nafifltndo qoe ^ -

sume, cumple U ley de Dio*, amándole emneBa sus fanctoniiS, ^ ,9br«in 4il*
y airviéaivle.—Moiau. trabaja, hacen unftobr»t«aHtl|Mt«iHa»

Las Dominicales
h* faente da la vida es la «(encía. Bn el monje que ora y i^naa.—J(<i<(w-o.
caeo de dada, el jaex auptamo ea la con- Desde la India bastuja I^lici» el sol
ciencia.—A/anit. no ve mis que una familia Inmensa
Conteste & tí miarao.Sóeratet. qué debía regirse por las leyes d«l
amor. Mortales, todos sois hermanos.—
Trahaja para extirpar el mal} v:mba' VoUatrt.
llece la tierra cubriémlola de végetalea Haz el bien por el bien. No empleea
y aaimalea útiles.—Zoraaitro. jamas la humantdnd Como un simple
Todos loa humanos son Ig-uales. üo medio... Respétala como un tln.—Kant.
haJF otra diferencia entre ellos que lax El borobrffl debe realiíar balo Dios la
virtudes q,ue poseen.—Bi«í/io. armoufa de la Naturaleza y el Bapirilu
Amaos los unos h loa otros.— Sel on forma de voluntad racional y por el
perfectos como nuestro Padre.que esti puro bien.—iCraun.
en los cielos.—/iMii«.
La piedad no consiste en volver el Que la Verdad ostente todos sos es-
rostro hacia Levante 6 al Poniente. plendores en la tierra; que se desplo-
Piadoso es el qpe socorre i los huérfa- memos templos y e a l n n hechos pol
nos, & los pobres, reiseata los eantlvcs, » vo los tronos, y *e satarrea bajo «1 n a
observa la oración, da limosna, es pa- Sro lus adoradores del vellocino de oro
ciente en la adversidad. El que ^ ]««V> si se interponen en su camina, |Paso,
y teme & Dios clemente y misencM^io- paso & la Verdad divinal—Jí/ StpirU»
so.—JVaAoma. itl ligl».

Precios. lA rsdaoeion no responde de los artículos flr-

Madrid, trim. t pUs, I Bxtranlsro.alo. 12ptas. La redacción dari cuenta de toda obra de que mn los.
NUM. 4. Provincias, id. a,50 • I OUramar,id...ao •
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de que es víctima y sentir profunda in- tadora. Al otro, amén de bt ilegitimidad atraviesa en su yath^el Océano; disfruta sas de la naturaleza, al ser interpelado
£1 problema social. dignación contra ella. De esto, á alzarse que oscurecerá por 8Íempr| su frenfe, las todas las invenciones; agota todos los pla- por el amigo de la vieja fe sobre cuál
iracundo y remover la sociedad, trastor- leyes que se consideran mis caritativas, ceres; vive en perpetua primatera, tras- era su iglesia, le seilalaba con el dedo
Una verdad palmaria enseña la medi- nándola de arriba á abajo, exponiendo el le deparan un asilo desábilgado y sucio, portándose á todos los «limas; admira en
tada lectura de la historia humana. Esta mundo con estas conmociones á una dis- en que con otros disputar4 un alimento el espacio infinito, y apareciendo en
la historia todas las edades, en los museos aquel instante la luna qué ascendía'
verdad es que la civilización, ó sea el con- locación, sólo hay un paso, que la ira ola insuficiente é insano: y unft vez fuera de todas las artes, en el cielo todas las cons-
junto de adelantos y perfeccionamiento utopia dan en un minuto. telaciones, y cuando en fastuoso lecho, por el horizonte, le obligaba á postrar-
ese asilo, si pudo vencer lá insalubridad,
que constituyen el progreso, se ha reali- De ordinario las gentes que por su in- el abandono en la calle, desamparado, asistido de la ciencia, rodeado de amigos se en tierra para adorar la hostia que
zado por ascensiones sucesivas de la masa diferencia hacia todo pretenden pasar por hambriento, sucio, tiritando de frío en in- y familia, exhala, por ser mortal, el últi- alzaba el sacerdote en que él creía (1).
social, primitivamente sujeta por la igi>o- sensatas, consideran exageradas MB pin- vierno en el resquicio de iioa puerta, en- mo suspiro, su cuerpo, que el arte hace Sí; éste es el único templo digno de
rancia y por la fuerza del yugo de unos turas que de las desigualdades sociales se negrecido y resecado en terano por los incorruptible, es encerrado en mármoles la grandeza de nuestra civilización.
pocos, al goce de las riquezas, ilustración, hacen, y los vaticinios que sobre el por- ardores de un sol de justiéia, sin direc- soberbios, en que el artista esculpe su faz, ¡Abajo simbolismos de materia, que no
derechos y bienestar que por privilegio venir se adelant£^n, los tienen por sueños. ción, vestido ni comida secura en ningnn que parece mofarse con desden del título consienten la verdad trasparente! Par»
acapararan sus crueles y egoistas domi- De pronto, una insurrección formidable tiempo, una ifafancia, por fin, de abando- de hermano con que la religión que ha enlazar nuestros brazos y entonar ar-
nadores. surge, y entonces su temor no reconoce no, de ignorancia, de sufrimiento y mise- desplegado en su sepelio todas sus pom- moniosos coros, no necesitamos imá-
Ley fatal de la limitación humana ha límites, y el miedo les inspira las mayores ria, que parece milagro puedan vencer pas y ornamentos, apellida á aquel otro genes ni altares, nos basta este algo
hecho que todas estas grandes ascensio- cobardías ó inauditas maldades: todo lo las débiles fuerzas de una de eáas huma- ser desgraciado, que vivió á su lado los
mismos días, en el mismo lugar, y parece, invisible, único digno de nuestra estir-
nes se hayan verificado entre trastornos, encuentran bueno para apagar el volcan. nas criaturas que diariamente encontráis
luchas y explosiones horrorosas, que hie- al comiiarái sele, distar de él lo que un pe racional; la idea de la justicia que
No hay duda que el siglo en que vivi- en el arroyo, y sobre las cuales sólo fija adora fervientemente el hombro mo-
lan de espanto cuando se examinan en mos no presenta en nuestro país aquellas ojos piadosos algúnfilántropo,para llorar planeta dista de otro en el espacio, y una
sus sangrientos detalles. La fuerza de re- odiosas tiranías de las pasadas edades. su desventura. edad de otra edad en el tiempo. derno, y el santo amor de la fraterni-
sistencia de los privilegios ha obligado á Empero, cuanto va dicho es cierto: exis- La juventud, que todo parece igualarlo Alguien tal vez considere esta pintura 4ad y caridad con que nos tiene atadas
los aspirantes ala igualdad á desplegar ten desigualdades antihumanas cuyo aná- en sus dorados días, es para él un cons- exagerada, tales extremos imposibles. las almas el que se solazaba también
en el ataque una violencia que parece re lisis es preciso hacer, y cuyo remedio es tante gozar: los hombres más distingui- Nada, por desdíchi, más real. Diariamente en predicar bajo la cúpula del cield, el
ñida con la santidad de su causa. El egoís- perentorio buscar para todo el que tiene dos ilustran su inteljgencia á cambio os codeáis con seres que, sin atender m^s atoantísimo Cristo.
mo sobrexcitado de los conservadores del entrañas y desea para la sociedad asiento de un poco del oro que le cupo en el que á la expresión de sus rostros, podéis Obra semejante en este pueblo, don-
régimen atacado ha inspirado á sus ex- fijo ó inconmovible. Las luces de nuestros reparto social, sin que él para nada de clasificar en ambas categorías. Los más dé el sacerdote de lo viejo ha martilla-
plotadores refinamientos de barbarie, que días, las crecientes necesidades de todas ello se cuídase: las bellezas más esplén- observadores exclamarán: es cierto el do con el poderoso cetro de los re-
en muchas ocasiones ha precipitado su las clases, los adelantos de las ciencias y didas se disputan los primeros vuelos de mal; es deplorable el espectáculo; es yes las" cadenas entre las que el ge-
ruina y les ha señalado de infamia. Todos de las artes, en vez de ofrecer una garan- su' amor: caballos de sangre y trenes ele- monstruosa la injusticia; pero, decidnos: nio español, cual otro Prometeo, yace
aparecen compitiendo en vileza de medios, tía de reposo y estabilidad, exigen, por gantísimos distraen y avaloran las horas ¿cuál es su remedio? ¿No ha habido siem -
y tintos en sangre de enemigos. pre lo mismo? ¿No ha pesado idéntica fa- aprisionado desde hace cuatro siglos,
el contrario, dar cuanto antes satisfacción de sus ocios: artistas y artesanos agotan, es superioi*, lo sabemos, á nuestras
Apénase el alma al examinar, pasados á las necesidades del proletariado, que de unos su genio y otros su habilidad, para talidad de destino sobre los hombres?
muchos siglos, que aquellos enemigos día en día adquiere más conciencia de su ataviar su persona, decorar sus palacios, ¡Ah! ¡El rehiedio! Francamente ha de flacas fuerzas. Pero era preciso comen-
eran hermanos y tenían, como tales, co- fuerza incontrastable. ¡Ay de todos, si to- embellecer sus quintas, regalando sus declarar todo hombre sincero que no le zar; eso hemos hecho.
munes intereses. Consuela, sin embargo, dos, ricos y pobres, no nos sometemos á oídos en el teatro, encantando sus ojos conoce, que no consiste en ninguna de El soldado que derrama su sangre
contemplar que, á pesar de las resistencias las leyes eternas de la justicia! \ky de to- con pinturas y esculturas, seduciendo su tantas lucubraciones y panaceas políti- por la patria; el obrero que trabaja to-
de los unos, de los ataques inoportunos ó dos, sí la guerra social estallase en Euro- olfato con perfumes exquisitos y excitan- cas como se vienen propalando en la úl- das las horas del dia; el escritor que
exagerados de los otros, el bien posible se pa, porque el egoísmo de los privilegiados do su paladar con todo género de nuevos tima centuria. Mas el remedio á esa in- defiende k yerdad con su pluma; el
reatüza, y, tras la tempestad denlos cornija- y «i juisto <S&aQ6 de bienestar de los des- condimentos. justicia ha de existir, ó el hombre, en veis juez que niiñ!ieiñce su vara tóte el po-
tes, aparece el sol iluminando una más heeedados no se armonizasen en una so- En tanto, el mísero proletario, azotado de hijo de Dios, habrá que declararle pro- deroso; el genio que ostenta á nuestros
ancha y más humana justicia. iflfeh en derecho! — Los desiertos de por el hambre y la desnudez, abandona ducto burlesco del Mal. El remedio no ojos la belleza que arde en su fantasía;
La última catástrofe de este género que Ofiente, donde habitan las fieras sobre la calle en que vagamundeó y se recoge puede ser «no; han de ser muchos á la el tribuno que defiende los derechos
ha conmovido la humanidad, es la Revo- las ruinas desvastadas de ciudades opu- al taller en que un trabajo rudo, penoso vez: han de constituirle una serie no in-
terrumpida de sabias y fecundas refor- del pueblo en las asambleas públicas
lución francesa. Esta revolución, de cuyo lentas, fueran pálidas imágenes de sus y de escasa remuneración, apenas sostie-
espfntu se alimenta y alimentará aún por fértiles llanuras, en que hoyflorecentoda ne su macilenta salud: la máquina desfi- mas, inspiradas en la caridad y el dere- ó tras las barricadas de las callejs; el
muchos años la Humanidad, aunque se suerte de artes y brillan los más vivos es- gura sus miembros y agota su vigor, sin cho. La una sin el otro, diez y nueve si- patriota que prefiere vivir en el ostra-
propuso la redención de todos los hom- plendores de la civilización. consentirle una hora para ilustrarse, ni glos de cristianismo la declaran ineficaz. cismo ó en la cárcel antes de doblegar
bres, esto es, la igualación de todos los No basta, ni siquiera ea justo, inculcar- un minuto para el amor; reñido de siem- El derecho solp, con su rigidez, proba- su frente.álos tiranos; el sabio que
llamados estados; üo acertó á nivelar sino le al proletariado resigOacion, predicarle pre con la miseria y la desnudez en que blemente no alcanzase obra tan grande y consume su vida dirigiendo sus ojos á
tres, elevando la clase medía al goce del paciencia, aconsejarle prudencia, mos- vegeta, apenas si un sueño corto, sobre redentora* lo infinitamente pequeño á través del
derecho político, de Ja propiedad, de los trarle sus deberes y excitarle de Continuo un mal jergón ó en el duro y frío suelo, Empero, sí el remedio nos es descono- microscopio, ó á lo gigantesco con el
honores y comodidades que eran ante- á sobrellevar sus miserias. Es forzoso vol- repara sus fuerzas para el continuo tra- cido, le declaramos urgente. La cuestión auxilio del telescopio, para revelar á
riormente patrimonio exclusivo de los re- verse á los privilegiados de todas clases y bjgo: las amistades, las distracciones, los social se ha convertido en la cuestión de los hombres verdades que le enriquez-
yes, el clero y la nobleza. enseñarles lo que sucede,^ llamándolos divertimientos de toda clase, son para él todas las horas; y viene preñada de ame- can ó le eleven; el padre de ñimilia
Ni los nobilísimos arranques de Ips re- respectivamente á la meditación, si no imposibles: si acaso los conoce, sólo lle- nazas terribles. El proletariado pide, y pi- que cumple sus deberes, hé ahí nues-
v^ltiéionarios franceses, que todos se sa- quieren que, ya que no ellos, sus hyos, gan á él como el eco de un mundo en que de con razón y con justicia, eu asiento en tros sacerdotes.
crificaron por la causa humana, ni las deque tanto parecen preocuparse, y con le está vedada la entrada. la mesa social. Hay que hacerle lugar.
sublimes concepciones igualitarias de sus cuyo bienestar futuro tratan de disculpar Y el hombre, cuya inteligencia ha pe- A ellos seguiremos; su palabra, su
Habla en esto la patria; reclamando sus ejemplo, su virtud, arrebatarán nues-
filósofos, acertaron á hacer partícipes por su avaricia presente, sufran las conse- hijos á su defensa: el rico, con desden netrado los arcanos del universo mate-
igual, en lo que humanamente es posible cuencias de sus yerros, y de las injusti- irrisorio, redime la reclamación con el rial, deduciendo sus leyes sencillísimas; tra voluntad y llevarán tras sí cauti-
y realizable la igualdad, lanío de la ri- cias que no se cuidan de remediar. valor tJe un caballo: el pobre, sacado del que ha hecho el análisis del gran misterio vas nuestras almas; hacia ellos dirigi-
queza social como del derecho, á latota- Creen, ófingencreer, porque en el or- taller, es metido en la cuadra de un cuar- de la conciencia; que ha arrancado á la remos los ojos de nuestros hyos y de
lidad del cuerpo social, á Ja universalidad den político se camina apresuradamente tel, enfundado en un uniforme, traque- tierra el secreto de su formación y de sus nuestros deudos, para que sopan cómo
de los ciudadanos. á la igualdad, que las desigualdades so- teado por sus superiores para aprender productos; que ha inventado tantas mara- se obra el biei^ y cómo se cunaple la
Y se ve todavía, en las más ilustres y ciales no son tan atroces como en reali- las maniobras militares, y trasportado al villas; que, en suma, como pretendió en ley de Dios, de la natufaleaat «J M '
adelantadas naciones del mundo, que el dad son. Fíjense en cualquier casa de una punto ai campo de batalla, que riega con el Paraíso, se ha hecho igual á Dios, ¿se- no-Dios, como queráis llamar a qttiwn
esjado, como la estatua de Babilonia, m gran dudad, como Madrid; observen, y su sangre en defensa de leyes de tan rá impotente para hacerse igual á su sostiene la vida, hombres á quien el
mfezoia de diversos materiales má^ ó ine- seguramente se presentará á su espíritu monstruosa desigualdad. Herido tal vez, hermano?
abuso de la palabra de Dios os tiene
nos preciosos, y que, como ella ¡oh des- ol triste, el horroroso espectáculo de cier- estropeado seguramente, cumplido su pe- No pronunciemos tal blasfemia. Espe- indignados contra el nombre.
gracia! tiene los fundamentos de ba'rro. tos e^trehios «ocíales. noso deber para con la patria de que el remos más de su inteligencia y de su co-
razón. Por lo demás, ¿qué importa el tróje?'
Por b^o de ana aristocracia, que ya no En ana habitación lijosa, soleada, don- ricotanfácilmente se eximió, vuelve al
nace de la sangre, del talento, del valor do-todo respií^ comodidad y bueií gusto; taller, donde, alternando la enfermedad ¡Cuánto traje talar no hemos visto en
6 de la sabiduría, sino que sé origina de donde todo contribuye al agrá lo de la vi- con el hamhre, el hambre con la desnu- RAMÓN CHÍBS. nuestro pueblo salpicado de sangre,
nna sola fuente, fltriqueM, existe una da, ^ntrel^atistas y holandas que para- dez, la desnudez con el aislamiento, la ig- por desgarrar el suelo de la patria, sin
masa hambrienta y desposeída, un'cuarto mentan recamado lecho, viene al mundo norancia y la pena, consume su vida mi- embargo de pretender representar á
estado de proletarios, productoras en de- un ser humano, tan hijo de Dios y taif serable. El hospital para sus enfermeda- quien ofrecía una mejilla ásu enemigo,
finitivo examen de todariqueza^y sólo de igual en derechos á otro ser humano que des, la cárcel para sus excesos, la taberna Las Dominicales. después de haberle abofeteado la otra!
ella participantes, con irritaiite desigual- al propio tiempo nace en la desmantelada para su distracción, el lupanar inmundo Dejaos de formas, de vestiduras, de
dad, en parte mínima y apénaistifioieate buhardilla, del mísmo^ edificio, como es para sus amores, lat cargas de caballería Se nos ha interpelado por Varias per- todo lo que consume el orín y la her-
á conservar una jníserable existetici^ que, igaai una gota de agua á otra gota proce* para sus protestas y reclamaciones, son sonas acerca del título de nuestro pe- rumbre atended á la esencia; y estad
más que vida, parece perpetuo sofi-imieií. dente del mismo manantial. los asilos ó los medios que la sociedad le riódico, que tenía para ellas cierto sa- segurosde que cuando tras una semana
to, castigo continuo ^ riguroso. Suponed muertos los padres de amb^s tiene dispuestos, hasta el día que su yerto bor de iglesia. de trabajo salís al campo bajo el sol es-
Todajclás revoluciones que de ochenta criaturas eñ el instante de su nacimientói cadáver, después de destrozado en un an- pléndido de nuestra patria, entre vues-
años acá-han agitado la Europa, todos los y seguid, paso i paso, la vida que la ac- fiteatro de medicina, como objeto de es- Ved sn razón;
Hasta aquí, y al llegar el domii^, tros hijos y vuestros amigos, á esparcir
trastornos en i^erepecUva, sdlo reconocen ción social, no la fatalidad, cual alguien tudio, es arrojado al albañal.
póT origen esta constitución social. La pretende, les depara. Aluno la acción de congregábanse las gentes bajo las bó- el ánimo ygozarlosencantos que ofrece
A su lado, el privilegiado heredero, la sencÜla naturaleza entre honestos
rizovi no concibe la jpaaéia«| mando ín- las leyes, por todos consentidas, le entre- exento de todo trabajó, por su riqueza, al yeáaa de un templo de polvo, para oir
terin este estado de cosas no deswparezca ga un centenar de millones, un tutor que igual que se eximió de los deberes patrió- murmurar palabras ininteligibles. juegos, estáis bajo el más hermoso de
mediante la participación deli^^tarjado lo dirige y administra su caudal, robusta ticos, después de gozar la juventud en mil Ese templo es ya estrecho; hay que los teníplos, huellan vuestros pies las
en el bienestar social. O ha de airaacár- nodriza, dorada cuna, ctu;hara de oro placeres, constituye una &milia, que per- trasformarlo en aquel otro que el ge- losas más santas, y ofrecAis, con la
sele al proletariado la conciencjnj y con para alimentarse, juguetes de toda clase, petuará su nombre y su fortuna; se úm^ nio vislumbraba, cuando en cierta no-
ena la inteligencia y el corazón, ó eter- vestido de todas estaciones; una^níancia/ por propio derecho de nacimiento en la che callada, caminando por lew som-
namente habrá de conocer Ift injusticia en fln, <s6moá*i saaa>iüegre, feUz^ dnoan»silla del legielador; recorre la Europa; bias, entre las palpitaciones misterio- (1) tíctorfiftígct.
 2 LA8g)0MINICALí:S DEL LIBRE PENSAMIJlNTO

tranquilidad, y pureza de vuestra co«.-r día, ew vez de palabras de amor, las exclusivismo de vuestra creencia. Es que de la emancipación popular. Ademas^ cuente La pobre niña del ciego va descalza;
ciencia, que nace de haber cumplido hace resonar de odio, en vez de con- os hiere la verdad. Si os dejarais guiar, con el apoyo de LAS DOMINICALES en lá bri-
sus brazos están casi al descubierto; con
no decimos ya por la Razón, sino por lo llante campaña que en estos momentos libra
bien vuestros deberes durante la se- fianza siembra recelos. mejor de vuestra religión, por las doc- en favor de la moral pública; campaña que los restos de un mantón hecho jirones,
¡TriiSte é ingrata misión la suya! trinas mas sabias y más incontroverti- tantas causas criminales ha suscitado á su ajusta á su cuerpo, con toda la fuerza que
mana, la más grata oración á Dios. digno director el Sr. Perillán Buxó, y de las
bles que encierran las palabras que se cuales esperamos y deseamos verle muy consienten sus delicados miembros, á su
KAMON CBIES. ponen en labios del Cristo, no os espan- pronto libre. h'ermanito, que está contraído de frío. ¡Y
taría cuanto afirmamos. cuan hermosa es, qué luz amorosa despi-
¿No ha dicho éste que por el fruto se den sus grandes ojos negros, donde se
conoce el árbol? Pues si el pueblo hebreo
La actitud del Sr. Pí Margall. fuera el elegido, se le conocería por sus pinta la agonía del dolor, y donde ruedan
El pueblo de Dios. frutos: sería el más virtuoso, el más sa- «Sois unos cobardes, sois unos misera-
bles,» así se dirigía un obispo, Mons. Frep-
lágrimas silenciosas!
Bajo el epígrafe de Documento nota- bio; ostentaría en ciencia, arte, política, El grupo marcha por una calle de Ma-
industria, la civilización más brillante. pel, á sus compañeros los representantes de
ile, nuestro apreciable colega La Van- El pueblo hebreo es el pueblo elegido, las Cámaras francesas hace pocos dias. drid donde hay un convento con colegio
Esto es lógico. Si un padre prefiere á
guardia, diario federal, ha publicado el es el pueblo de Dios. uno de sus hijos, se esterioriza al punto Cuando loimos estas palabras, SP nos ocur- aristocrático. La niña quiere atravesar
Hé aquí lo que se nos ha enseñado en rió escribir el artículo sobre «el pueblo de
miércoles último una carta del Sr. Pí esta preferencia en multitud de detalles: Dios,» que verán en otro lugar nuestros lec- la fila interminable de coches que la se-
las escuelas, y se sigue enseñando como le da la mejor educación, le viste con los
Margall, escrita para ser leida en un doctrina de íe. tores. paran de la acera opuesta; varias veces
mejores trajes, procura elevarle sobre Ese lenguaje no es el de nuestra noble lo intenta, y otras tantas se detiene, ya
un banquete, que, con motivo del dé- ¿Qué fundamento hay para decirlo? La cuanto le rodea. Dios, que tanto puede, raza aria: es el lenguaje del sacerdote judío,
cimo aniversario de la proclamación de Biblia, escrita por los hebreos mismos. haría más con el pueblo judío, si éste fue- es el del viejo testamento, ese que imita la por el severo gesto del lacayo, que la
¿Qué dice á su vez la Historia? Que el ra su hyo preferido. prensa ultra-católica. prohibe el paso, ya por su natural timi-
la República, se celebró en Yillanueva destino del pueblo hebreo es el del repro- A nosotros los hijos de la noble España,
¡Y dónde está el brillo de ese pueblo? dez; al fin tiene un momento de resolu-
y Geltrú el dia 11 del corriente. bo desde los tiempos más remotos: fué antes que vasallos de Roma, seamos libera-
esclavo en la India, esclavo en Egipto, Vedle sin patria, sin hogar, relegado á les ó conservadores, no puede inspirarnos el ción, ve un espacio mayor entre dos co-
Miembro distinguido ó influyente los rincones de las ciudades, habitando oir hablar de ese modo, sino la protesta que ches, y sin osar levanta la vista, tem-
esclavo en Asiría y Caldea, siervo entre entre suciedad y miseria, esclavo ó sier-
del partido federal el Sr. Pí, su carta, nosotros los europeos, durante la Edad hallamos en nuestro colega conservador El blorosa y acelerada, pasa llevando de la
como de una de las más brillantes per- Media y entre los árabes. vo, perseguido y muerto como perro ra- Estandarte, que dice con verdad;
bioso en multitud de tiempos y de luga- «¡Buen modo de imitar al queespiró en el
mano á su padre. Un caballo del coche
soiíalidades del republicanismo, tiene Tuvo algunos dias de independencia, res, llevando la maldición en la frente Qólgota... profiriendo con sus cárdenos la- retrocede un paso en aquel momento y
pero bien pronto su impotencia para go- por haber sacrificado la vida de uno de bios aquella sublime frase de «amaos los piafa; se oye al punto el crujido de un
en estos momentos grande importan- bernarse por sí propio le hizo siervo, los suyos, á quien por la pureza de la doc- unos á los otrosí» látigo, y con él un grito desgarrador. ¡El
cia, y ha sido leida y comentada con mitad de los asirios, mitad de los caldeo- trina puesta en sus labios, adora como
avidez y calor. babilónicos. cochero soez había azotado el rostro de
divina la humanidad, aun siendo de su
Nosotros también la hemos leido. Su De seguro que hay mucho crédulo es- raza, que hoy desprecia. la niña!
pañol que asegura que la condenación Es que es bárbaro suponer que el Crea- No hay que detenerse á explicar lo que
lectura nos ha producido honda pena. Él del pueblo judío proviene de su conduc- Cuenta La Correspondencia que uno de
señor Pí, en ella, persevera en su deplo- ta infaiae con el Cristo. ¡Pero si hacía dor puede tener pueblos elegidos y repro- los pasados dias, al estar hincado de rodi- pasó por el alma de aquel ciego infortu-
séTs siglos que había perdido su indepen- bos. El Ser enteramente recto no podría llas ante los santos evangelios un señor nado. No queremos desgarrar el corazón
rable y trastornádor principio del pacto cometer tal injusticia; es que no la co- diputado jurando, y al decirle el presidente
cia cuando se supone la existencia del mete el hombro que es bueno. Los padres de los lectores.
sinalagmático como procedimiento de Cristo I ¡Si entonces era ya subdito de las palabras de ritual: «Si asi lo hacéis Dios
que tratan desigualmente á sus hijos, son os lo premie, y si no os lo demande,» se oye- Preferimos hablar á su inteligencia;
organización federativa: error patente Roma! los más ignorantes, ó más necios, ó más ron risas en la tribuna déla prensa, que obli-
¿Es posible que un pueblo sobre quien preferimos trasmitirle las ideas que se
que produjo la división del partido fe- perversos; en las familias virtuosas no se garon á dicho presidente á hacer desalojar la
agolpan á nuestra mente.
deral, que por fortuna supo á tiempo pesa tan duro destino, sea elegido de advierte semejante género de preferen- tribuna.
Dios? cias. ¡Mala señal semejantes coincidencias para ¿Qué van á hacer los coches á aquella
rechazar en su parte más sensata una Esto es lo primero que se ocurre á el juramento! ¡Mala, muy xaaM calle? A esperar la salida de las niñas.
quien registra la Historia. Luego busca ¿Cómo se llama, pues, aún historia sa-
teoría totalmente inaplicable á la fede- grada á la de ese pueblo? ¿Serán sagra- ¡Qué! ¿Es tan molesto que vayan andando
ración de nacionalidades de antiguo testimonios imparciales: busca á los sa- dos aquellos actos de bárbara venganza hasta su casa? Decidnos, hombres de
bios reputados por tales en todos los pue- de que están plagadas las páginas del vie-
unificadas de hecho y de derecho, como blos; busca á los Aristóteles, Sócrates, ciencia; decidnos, médicos: ¿no les sería
lo es España. La recordación de este Cicerones, á los rail hombres ilustres que jo testamento? ¿Será sagrado tener hijos Desde las columnas de este perióáiso no más higiénico ir á pié, dada su edad, y da-
conocían al pueblo judío, y que de seguro de varias mujeres, como los tuvo el santo perseguimos una idea política determinada
principio, piedra de escándalo, preve- Abraham y los no menos santos reyes Da- do el ejercicio intelectual á que acaban de
hubieran notado su divina aureola, de dentro de los partidos republicanos militan-
mos que ha de entorpecer la unifica- vid y Salomón? tes. Nuestra afirmación única os la Repúbli- consagrarse? Esto es indudable. Aquellos
llevarla en la frente; pero nadie hace
ción de este partido, voto unánime de afirmación semejante, nadie piensa en No hay historias sagradas y profanas: ca, bien que ya sepa el público á que atener- coches allí son enteramente inútiles: más
lo que hay son hechos más ó menos bue- se acerca de la opinión particular de los que que eso, son perjudiciales para las niñas
la totalidad de los federales asistentes ella. escribimos^ en las DOMINICALES DEL LIBRE
No hay, pues, otro testimonio que el nos, más ó menos santos. Y es indudable y para los transeúntes.
al banquete que en Madrid celebraron que las leyes inmortales de la naturaleza PENSAMIENTO; opinión que forma como parte
que el mismo pueblo judío ofrece. moral, como las de la física, dan la palma de nuestra naturaleza y no abandonaremos Pero hay más; aquella casa es á la vez
el 11 de Febrero en la fonda de Los Ahora bien; sólo los franceses creen jamás.
á los pueblos que realizan los mejores he- Si pues nuestra afirmación clara y termi-
iglesia y colegio; esa iglesia tiene enci-
Leones de Oro, y del cual nos ocupába- que Francia es la primera nación del chos, como á los individuos, y dan tam- ma puesta la cruz, símbolo de humildad;
mundo; sólo los españoles, que España nante es la República, y reconoceremos
mos en nuestro número anterior. Esta bién sanción penal á los que se separan como obrero de nuestro ideal á quien pro- las profesoras visten hábito religioso, di-
tiene el suelo más abundoso de la tier- de esas leyes.
unificación, para la causa republicana ra; sólo la joven desvanecida, que todas mueva su triunfo, no hemos de escatimar cen que adoran al Cristo, que se sacrifi-
tan importante, sólo era concebible eü las miradas son para ella. Esto ha pasado al puel>lo hebreo: duro, nuestro aplauso al partido democrático-pro-
cruel, inepto para gobernarse por sí mis- gresista que, concertado en Asamblea, acaba carían por él.
la preterición del pacto, motivo de disi- ¿Puede extrañar, por tanto, que los ju- mo, encerrando, en medio de su servi- de dar una gran prueba de concordia y de ¿Cómo, pues, aquellos coches á la puerta?
dencias en tantas ocasiones, preterido díos se creyeran la primer raza del mun- dumbre, la orgullosa pretensión de ser patriotismo votando la coalición para los Pues si enseñaran el cristianismo á las
do, los elegidos de Dios? preferido por Dios, entretenido, por lo fines comunes, con otras proposiciones que
por el mismo Sr. Pí, ya estando en el Pero el siglo xix no es el niño para atestiguan la elevación de miras que preside alumnas, ¿era posible que las consintie-
mismo, sólo en dirigirle sublimes trinos, en ese partido al tratar de la relaciones con ran que llevaran allí, á las mismas puer-
poder, ya antes de 1873, ya en alguna quien se ha hecho el catecismo que se que es lo único grande que se le debe
da en las escuelas todavía, haciéndonos los restantes y de todo elemento republicano.
de sus obras posteriores á esta fecha como pueblo, ha sufrido el condigno cas- Reciban los dignos representantes de Ij
tas del templo, aquellos trenes que com-
perder un tiempo precioso. Sabe que tigo, yaciendo, como aún le vemos, sin Asamblea nuestra cordial enhorabuena<! piten unos con otros en lujo, aquellos
memorable. Su reciente afirmación en lleva dentro una chispa de aquel fuego patria, sin hogar, sin un pedazo de tier- la rapidez y el tino con que han sabido 11( hombres vestidos con trajes que los de-
la carta á los federales de Villanueva y que robó Prometeo del cielo, y hace uso ra propio en que poder sentar su mu- á término su importantísimo acuerdo.
Geltrú la consideramos como una de ella. gradan, aquellos soberbios troncos que
grienta planta.
¡El pueblo judío el elegido del cielo! pudieran rendir tan útiles efectos á I*
prueba del poco deseo del Sr. Píen se dice. ¿En qué podrán compararse á Si hicierais uso de vuestra inteligencia
y/aplicarais el aforismo del Cristo antes agricultura y á la industria? ¿No es esto
agrupar alrededor de la bandera fede- nosotros, los hijos de la raaa aria, esos citado, de que por el fruto se conoce el antitético con la doctrina del Cristo?
ral otra cosa que fieles creyentes en semitas siempre esclavos? árbol, debíais, católicos, en vez de decir Nuestro querido colega El Alabardero de
¿En la ciencia? ¿Dónde tienen un Pla- Si la pura doctrina del Cristo habitara
doctrinas y partidarios de su persona- «que el pueblo hebreo es el pueblo de Sevilla se felicita de que LAS DOMINICALES
tón, un Aristóteles, un Kant, un Newton? vivan, y copia nuestro acertijo del número allí dentro; si-se enseñase la caridad, el
lidad. Dios,» decir que es amor, el desprecio á los bienes de la tier-
¿Dónde podría ponerse la Biblia hebraica pasado.
como ciencia al lado del Código de Manú «El dejado de la mano de Dios.» Damos las gracia» á EMÍabardero por BU ra, el desden por las vanas apariencias,
Mas si es deplorable este documento buena voluntad, que sabe de tiempo es cor-
hechos por nuestros hermanos los indos? DEM(')FU.O. el destino que espera al rico que vive en
por lo que se refiere á lo privativo delfe- ¿En arte? ¿Qué comparación puede respondida por los redactores de LAS DOMI-
deralismo, toca en lo fatal, respecto á haber entre los artistas de ese pueblo, NICALES. la opulencia, mientras la miseria acosa
lo que es común á los republicanos es- que no los ha tenido nunca propios, sino al pobre, aquellos coches no durarían
pañoles. La coalición, que todos los re- asalariados, ya fenicios, ya árabes, ya Luz y sombra. un solo instante á la puerta.
europeo-cristianos, con aquellos insig- «Hijas mias,—les dirían las maestras
publicanos progresistas acaban de pro- nes artistas de la Grecia? Ellos, que tie- Recibimos un folleto sobre los consumos
nen el alma fundida con la tradición, si inspiradas por ese espíritu;—traed el tra-
clamar en su Asamblea, que tantos fe- y arbitrios municipales de Sanlúcar de Bar-
hubieran descollado en algún arte, hu- rameda, escrito por nuestro amigo y correli- je que queráis; no vistáis de uniforme,
derales, creemos sinceramente que la bieran sostenido su estilo. Ved sus sina- gionario D. Eduardo Gutiérrez Enriquez, en cada cuerpo tiene sus formas, y cada ros-
El ministro do Fomento ha tenido el buen
inmensa mayoría de ellos, declaran in- gogas de Toledo, que nos restan;'ved las gusto do no conformarse con el dictamen de que se denuncia la mala administración mu- tro su color; no sienta bien el azul ó el
dispensable á la consecución delfinco- que hoy tienen eft varios lugares de Eu- BU Consejo de Instrucción pública, y ha dado nicipal de aquella importantísima población.
Mal univeraal en toda España, y necesaria rojo á todos los semblantes; que el traje
mún y primordial de la democracia, ropa; en todas emplean un arte mercena- la cátedra del Conservatorio á Vioo.
rio: aquí el árabe, fuera el moderno, Nuestro aplauso al Sr. Gamazo. Sólo falta su curación, los trabajoj que, como el del se- haga resaltar vuestra natural hermosura,
halla en el Sr. Pí un censor rígido y ahora, para que sea completo, que suprima el ñor Gutierres, este laudable objeto se propo- pero que sea t m sencillo como honesto.
siempre el del pueblo que les rodea. nen, merecen general aplauso.
áspero. No ciertamente la rechaza en Consejo. Si habéis de gastar cincuenta én un ves-
Si hubieran tenido arquitectura pro-
principio, que esto fuera imposible sin pia, que era la única que les consentía tido, gastad sólo veinticinco, y emplead
universal protesta; pero la reduce á ta- su religión, hubieran quedado de ella ves- la otra mitad en un abrigo para dárselo á
tigios, y nuestro siglo imparcial les hicie- la pobrecita que encontráis en la esquina
les estrechuras, pénela tales cortapisas; ra justicia. Pero no: ellos no han soñado En Reus ha sido silbado y brutalmente
se vale al examinarla de tan duras pa- jamas realizar aquella armonía de piedra atropellado por una turba de muchachos un
¡Pobre ciega! tiritando en los dias de frió... Sobre todo,
del templo griego. ¿Y en la escultura? sacerdote maronita. no 03 consiento que gastéis un real en
labras para los que la han de compar- (Y es éste el fruto de la enseñanza católi-
¿(Cuándo han imaginado crear la sobe- ca? Es la misma conducta de los salvajes, cosas superfluas. Ayer ha venido á espe-
tir, que en realidad de verdad, esta rana hermosura que palpita en el mármol Miradlo, y sentid compasión: fué un
con los misioneros cristianos. ¿ \ qué, pues, rarte, Pepita, un coche lujoso. ¿A qué
crítica la hace imposible de toda impo- griego en forma de estatua? i r á predicar á lejanas tierras? Aquí, aquí héroe en la guerra. La desgracia impla- quieres tú coche, si eres fuerte como un
sibilidad. ¿Cuándo se ha visto que in- ¿Dónde soñara el pueblo hebreo, sin es donde hace falta enseñar amor á los se- cable secó sus ojos. Cierto dia se incendió
que el genio de nuestra razi aria vibrara mejantes, dulzura, hospitalidad, las virtudes roble, y brotan sangre tus mejillas ne-
sultando al aliado se busque la alianza? en el cerebro de un Rafael y de un Mi- cristianas, que están olvidadas. la pólvora con que cargaba cartuchos vadas? Eso es ofender á Dios, cuando hay
¿Cuándo que el recelo sea la base de lo guel Ángel, que se inmortalizaran tipos ¡Y querrán que dejemos con paciencia para defender la patria, y desde entonces tanto pobrecito que no tienen pan. Di á
que se funda en la confianza? de su raza como el Cristo, María, Após- marchar así, sin freno moral, á nuestra ama- no ha visto más la luz. También perdió á
da patrial tu papá que á este colegio, que es cristia-
toles y Evangelistas en la imponderable su dulce esposa; no tiene ya sobre la tier- no, no consentimos que vengan niñas
Desde hace cerca de dos años, por pintura cristiana? Quien diga que haya
una forma siquiera en los cuadros de Ra- ra más que aquellos dos seres que le arrastrando lujo. Tú tienes un corazón
grupos numerosos, se van apartando amen; la niña de ocho años que lleva sir-
del Sr, Pí Margall sus antiguos- corre- fael y en los frescos de Miguel Ángel, no muy hermoso, una inteligencia que des-
modela-la en el arte griego, no sabe lo Nuestro querido cologa La Broma acoge viéndole de lazarillo, y el niño de uno y lumhra; tus padres te adoran: arrójate
ligionarios. Por no aceptar su pacto si- que OH pintura, ni se ha enterado de la nuestra publicación con las siguientes pa~ medio, que ésta estrecha en sus brazos. en sus brazos cuando vayas á casfi, y di-
nalagmático, se separaron el Sr. Figue- génesis de este arte. Sí: la pintura cris- labras: Jamas había implorado la caridad pú-
tiana es tan de raza aria como nosotros «No hemos tenido espacio para saludar an- les: «Me queréis mucho, me llamáis vueá-
ras y sus numerosos amigos, que en la mismos. El hebreo no ha soñado con her- tes de hoy á LAS DOMINICALES DKL LIBRE P E N - blica. No sabía otro oficio que exponer tro encanto y vuestra dicha. ¿Sabéis
lucha de pluma que con los pactistas mosura semejante. Las vírgenes de Ra- SAMIENTO, nuevo periódico que dirige Ramón su cuerpo á las balas para defender la in- padres raios, quién sostiene ese encanto
sostuvieron, se denominaron federales fael son Venus italianizadas; nuestras Ohies. dependencia y la libertad de su pueblo.
»Es uii órgano de vigorosa é inteligente pro- y esta hermosura que veis en mí, de que
orgánicos. Por no compartir sus rece- Purísimas de Murillo son andaluzas vir- La nauta que lleva, y con que arranca
ginales. paganda democrática, y le deseamos toda la tantas veces me habláis? Pues es Dios.
los sobre la coalición, y no aceptar su ventura (lóase éxito), que merece y que o b - algún triste sonido, no es más que un Na es justo que, en co mp ensacion de dar-
¿Dónde puede compararse el pueblo he- tendrá, seguramente, si persevera en su her- pretext para hacerse notar de las gentes,
jefatura, há poco se acaban de ir de su breo con aquellos ilustres padres nues- mosa labor. me vida, cumpláis sus leyes vosotros? Y
lado federales probados y consecuen- tros, loa romanos, que'desde un monteci- ^Periódicos como ese, no deben morir. ¡Pobre ciego! no tiene fuerzas para hacer bien: mi profesora me ha dicho que Dios
tes. La carta á los federales de Villa- llo en que levantan algunos muros, lle^ «Publicistas como Chies no deben callar. sonar su instrumento; lo que emite no manda que no se tenga nada inútil cuan-
gan á gobernar la tierra, desplegando «¡Adelante, compañero, adelante!» son notas musicales, son lamentos, dolor, do hay necesitados; que nuestros coches,
nueva, inserta en La Vanfftmrdia, le una fuerza de voluntad que asombra? Damos á La Broma las más expresivas hambre, miseria. que empleamos sólo en ir al paseo, á
aislará seguramente más todavía en el ¡Ellos, los hebreos, relegados en un rin- gracias por su cariñoso saludo, que agrade-
cón miserable de aquel vasto imperio! cemos con toda el alma, por más que reco- El dia es de esos terribles de invierno, misa y á visitas, cuando podríamos ha-
campo republicano, en donde ahora nocemos no merecer tan lisonjeras frases. característicos de Madrid; sopla el viento
Sentiríamos heriros, católicos de cora- cerlo á pié, son una provocación á la mi-
que sólo, cowo él mismo dice, las ma- Cuente elsatíricoé ilustrado colega con nues- con violencia; el frió penetra, lloviznan
zón; pero éa que no somos nosotros los tra humilde, pero decidida oooperaoion en seria de los pobres, que, vendiéndolos y
las pasiones pueden fomentar la dísoor. culpables, lo sois vosotros mismos, por el partículas inflaitesimales de nieve.
ppQ de la causa redentora de la Éepública y repartiendo entre algunas familias des-
 LAS DOMINICALES DEL LIBRE PENSAMIENTO

graciadas su valor, podríacaos socar mil sido inceí ñute en casi todas las épocas de su ja le la propiedad que le eleva sobre el nuestros lectores si tienen ©n cuenta ciertos tar, periódico que, sin desconocer la mesura
discursos, cuya síntesis hemos díido á cono-
lágrimas y hacer felices á muchos her- larga vida. / resto de los demás seres, arrancadle la cer, y cuya tendencia hemos condenado,
que corresponde á los que visten el uniforme
Otro de los motivos ef, á no dudar, la capri- de soldado marcha, en punto á las ideai>, á la
manos nuestros, que bendecirían nuestro cbosa interpretación de la doctrina de Cristo; in- libertad: ¿qué queda? Una fiera, un creyendo interpretar los sentimientos de
nuestros compañeros de armas. vanguardia, defendiendo con calor cuanto
nombre y nos servirían de rodillas, mien- terpretación que han procurado siempre esté monstruo, un idiota; cualquier género Dicen así los párrafos ;i que nos referimos: croo útil al ejército y al país.
tras esos lacayos que llevamos en el pes- conforme con los intereses del sacerdocio, porque de ser que queráis, menos un hombre. «Aunque difiera un poco el momento, ya
cante murmuran de nosotros y aun qui- así les ha sido más fácil favorecer sus maqui- ¿Comprendéis ahora lo que ha pasa- deseado por vosotros, de dejar de oirme, voy MARIO.
zá nos maldicen si les hacemos esperar naciones, satisfacer sus ambiciones ocultas, sus á hacer una observación, que por la ocasión
de en Alicante? Entre un ejército de
demasiado, ó les contrariamos. Padres deseos de mando y autoridad, su inmoderado
orgullo; y satisfecho esto, no han sentido escrú-
y la fecha la creo oportuna... y necesaria.
«Me habéis oido decir y probado la nece-
mios, vended los coches y repartid el di- pulos de que sus obras y sus predicaciones no hijos de Dios, de comerciantes, obre-
sidad de la completa fusión del ejército con
nero á los pobres.»—Si agotas el tesoro estuvieran muy conformes con la doctrina del ros , escritores, autoridades públicas, la nación, que verdaderamente anhelo. Os
de tus gracias, yo estoy segura que conse- Divino Maestro. profesores que tienen mujer6s> hijos, lo aconsejo, señores: os lo pido; mirad que Un libro de texto como otros.
mientras seamos una institución, estaremos
guirás tu intento. En vano se empeñarán los que por católicos se esposas, padres, hermanos; entre hom- expuestos al criterio odioso de las compara-
tienen, en evitar este derrumbamiento de la anti- —Papá, yo no puedo aprender esto.
De todos modos, sábelo: al colegio no gua fe; sus esfuerzos serán ineficaces. bres, en suma, no era posible que pu- ciones por aquellos que juzgando las colas —¿Qué es ello, hijo mió?
de la milicia por los juegos guerreros de lo» £1 niño me entrega un librito donde dice:
te consentiremos más venir en coche, á Cuando al libre pensamiento consiga extin- dieran vivir en paz los jesuítas. Mor- años infantiles, donde con sólo una espada «¿Qué es longitud!'
no ser que estés enferma. ¿Cómo lo ha- guir ese sentimiento, que la tradición y el fana- dían, aullaban, echaban baba contra la de madera se vencen ejércitos innumerables. »La distancia que separa un punto cualquiera
El dia en que esa fusión soa un hecho, ya os del globo situado en un meridiano, de otro que
bríamos de consentir, cuando queremos tismo robustecieron, habrá prestado un señalado sociedad; es natural: y no han hecho se encuentra situado en otro meridiano que se
lo he dicho, todo lo alcanzareis por derecho
darte una enseñanza enteramente cris^ servicio al progreso, que es luz, y á la libertad, lo que las panteras y chacales hubie- propio. La patria, que tiene una parte de sus
toma como punto de partida; y como todo meri-
diano es un círculo máximo que divide la tierra
tiana? ¿Qué me importará adornar tu in- que es vida. ran hecho, porque hasta ahí no llega hijos privados de los derechos de los demás, en dos hemisíerios, aunque en distinto sentido
Jeligencia enseñándote geografía, his- debe compensar con ciertos privilegios esa que el ecuador, de aquí que la longitud pueda ser
MELIUEO. el poder del hombre. Todavía esos necesaria desigualdad. Al ciudadano que en oriental y occidental. Ni una ni otra pueden pa-
toria, lenguas, cien cosas más, si dejaba hombres disfrazados de jesuítas tienen medio de un país libre se ofrece en la paz sar nunca de 180 grados, ó sea de la mitad de los
dQ enseñarte lo que para mí es base prin- como un esclavo, hombre sin voluntad, sin 360 en que ya hemos dicho que se divide la cir-
en su alma, muy oculto en verdad, lo albedrío, y en la guerra se ofrece como már- cunferencia.»
cipal, lo que enseñó Jesús, á quien adoro? Lector que entiendas lo que es longitud, repa-
Y quiero enseñártelo, no de memoria, no que llamamos el ángel esto es, la vir- tir en lo más hermoso de la vida, no se le
ra en lo que es la enseñanza de memoria que se
preguntándotelo con el catecismo delan- Lo de Alicante. tud natural, que nos hace redimibles puede ni se le debe medir por el mismo ni-
vel que á los demás. Lo contrario seria per-
da en las escuelas. Pasan tus pobres hijos el
tiempo trabajando la memoria; gastan sus facul-
te, sino notando si lo realizas en la vida; por perversos que seamos en nuestros seguir hoy unos privilegios arruinadospara tades: ¿para qué? para aprender lo que no es ver-
Lo que ha pasado en Alicante con los caer en otros más odiosos ó injustos, porque dad, y de un modo enrevesado.
que de otro modo de nada sirve la ense- actos personales, ó por violación que estarían inspirados en la crueldad y el egoís- Fije la atención cualquiera en la definición
ñanza. » jesuítas, conocido de todos, es cosa que queramos hacer de nuestra naturaleza. mo. Quedaos, los quo tan mal nos juzgáis, preinserta.
La longitud es «la distancia que separa un
Así entendemos que se enseñe en un no debía llamar la atención; es un he- En Alicante ha pasado lo que acaeció con los privilegios del céntimo, que queréis
cercenar, á quien no cercena ni una gota de punto del globo situado en un meridiano, de
colegio cristiano. Si alguna institución cho lógico, natural. Ellos, y nosotros en el siglo pasado en todas partes. Tu- sangre por daros nuevos derechos y nuevos otro que se encuentra situado en otro meridiano
que se toma como punto de partida...» Según
de este género enseña así, nosotros, sin la sociedad civil, somos dos órdenes de vo que elegir la sociedad civil entre horizontes de bienestar y de riqueza. Con él esto, tomo Madrid, que está en vn meridiaw), San-
nos pagáis los servicios de la inteligencia, tander, que está en otro, hallo la dislaneia que ¡os
llevar nombre de tal ó cual fe, nos des- seres, dos mundos. vivir ella ó los jesuítas. Entonces te- grandes ó pequeños; pero pensad, cuando lle- separa, resultan quinientos kilómetros, y conclu-
cubriremos con respeto ante ella. La sociedad civil es el mundo hecho nían éstos un poder formidable, de que guéis al hecho de la muerte, si tenéis algo yo: la longitud de Santander es quinientos kiló-
con qué comprar la vida que se os escapa, y metros tomando por primer meridiano el de Ma-
Lo que no podemos soportar, lo que por Dios, corapliesto de amigos, padres, afortunadamente carecen; y en la dis- drid, porque la distancia de un punto á otro es
entonces acordaos de nosotros, cuando bajo
hiere nuestra alma y hace surgir en ella hermanos, hijos, esposos que viven yuntiva de vivir ó morir, los reyes los la bóveda del cielo, sobre la encharcada ma- entendida sieiQpTé en el sentido de dimensión de
la recta que les une.
airada protesta, es que se diga que en es- sujetos á las leyes del amor, en' el seno arrojaron de sus Estados. risma ó el árido pedregal por ^todo lecho,
¿Sabes, lector que no entiendes de estas cosas,
tablecimientos donde ostenta á la vista do la madre naturaleza. con la soledad por toda compafiía, con el ca-
lo que ha querido decir el que ha escrito el libro?
tan palmario contraste con la doctrina Sólo que hay algo más santo que el ñón que truena por toda voz de cariño y de Pues otra cosa de la que ha dicho; ha querido á§-
iQué de tesoros, de afectos, «o guar- consuelo, damos esta vida tan querida y ne- cir que longitud de un punto es el arco de ecuador
del Cristo, se da enseñanza cristiana, edi- derecho de defensa del Estado que in- cesaria á los que han de gemir en la miseria, comprendido entre el meridiano de aquel punto
ficante y religiosa. da ese mundo! Recorrámoslo rápida- vocaban, y es el de la misma natura- ya por vuestras ideas, ya por vuestros inte- y el que pasa por otro previamente determinado,
reses, ya, peor, por vuestras personales ren- que se llama primer meridiano. Tendrás tus difi-
Nuestra indignación sube de punto mente. leza violada en la persona de los jesuí- cillas. cultades para entenderme, mucho más no sabien-
cuando las altas clases que viven bajo ese La desgracia nos acosa, hemos per- tas. De esencia y apariencia son hom- «Roma y Grecia, en sus bellos tiempos, en
do qué es ecuador, ni que se trata del número de
grados, minutos, etc., del arco, y no de su distan-
molde aprendido ó consentido en sus es- dido la fortuna, la tristeza nos ahoga bres; de hecho, les falta alma propia, el los que la nación constituía el ejército y no cia longitudinal.
era'gabela de la pobreza el morir por la pa- F.8to prueba que aun las explicaciones mis
cuelas católicas, del todo antitético á la y el amigo fiel asoma á nuestras puer- alma individual que todos poseemos. tria, sino honra y deber del ciudadano, no precisas, sin tener delante el objeto á que se re-
humildad y á la caridad predicada por el tas, vierte su bolsa en la nuestra, es- Hé ahí por qué, aunque se propale pocos privilegios concedía en los honores del fieren, son logogritos; que si, en vez de hacer
Cristo, aparentan asustarse de nuestras trecha nuestra mano, y nos conforta, triunfo á sus ínclitos generales. Entonces, aprender en las escuelas á los niños de memoria
que son listos, fuertes y temibles, en como siempre, á los grandes filósofos', á los semejantes retahilas, se les enseña un globo, y se
doctrinas, y nos tildan de querer acabar nos anima á vivir, nos descarga del realidad, como ha demostrado el viril verdaderos filósofos, han seguido los gran- les dice: «mira, esto es longitud y esto otro lati-
con la reUgion. tud,» en pocos instantes sabría lo que jamas
peso que sentíamos en nuestro co- des capitanes, porque la fuerza, afirmando el
y elocuente escritor Nakens en un pre- derecho^ es como la mano que en el papel
aprenderá con la explicación inexacta y viciosa
¿Qué religión es la vuestra? ¿Para qué razón. cioso artículo, resulta lo contrario: son
que nos ocupa.
escribe y propaga la idea que brota en el ce- ¡Y qué modo de educar el juicio de los niños!...
os sirven esps templos donde vais á daros ¿Qué diremos del amor de los hijos? rebro. As! salió la época moderna, deque tan- «Distancia que separa un punto cualquiera del
torpes. Como que son incompletos, les
golpes de pecho, si encumbráis sobre los ¿Quién describe el efecto que siente el to, y con justicia, os envanecéis; no brotó de globo titilado en un meridiano, de otro que se en-
pescantes de vuestros coches á hombres falta lo esencial: alma. aquellas tablas ensangrentadas del cadalso cuentra situado en otro meridiano.» ¡Como si hubie-
ra puntos de la tierra no situados en meridianos!
vestidos como monos, que con la impuni- alma cuando aquellos tiernos bracitos se Ademas, no lo olvides, sociedad cris- que levantaba la egoísta,intransigencia y la
artera venganza, sino de aquellos campos en- Haga el favor de decirnos el geógrafo cuáles son
dad de vuestro poder social azotan con cuelgan á nuestro cuello y los labios tiana que corres á besar los hábitos de sangrentados por la abnegación y el sacrifi-
los puntos no situados en meridiano.
Ademas, el que es preguntado, debe dar con-
el látigo el rostro de una niña de ocho rosados estampan sobre los nuestros un esos hombres que cometen infracción cio de mil héroes quo no han tenido ni una testaciones precisas; confundir ideas es el pecado
cifra que recuerde su nombre sobre la tierra
años que guía á su padre, que ha queda- beso de fuego? clara y palmaria de estos dos precep- que redimieron con su sangro.
mayor en la vida del pensamiento. Pues bien:
juzgue el lector si es contestación á la pregunta
do ciego por consagrarse á preparar No menos se puede decir de la afec- tos terminantes de vuestra Biblia, que »Ya me habéis oido hablar de Newton, y «¿qué es longitud?» cuanto está escrito desde
aquello con que iba á defender vuestra ción de dos nobles esposos. por tan grande lo tengo, que lo admiro reli- dónde dice: «... y como todo meridiano...»
reconocemos los que no llevamos ape- giosamente. Si la teoría de la pluralidad de Y el autor afirma en el prólogo que quiere dar
riqueza, vuestra libertad y la honrado la ¡Cuántas horas de gratos ensueños llidó de religión positiva: al «creced y mandos es cierta, él con su lógica y su plu- á conocer la Asiganturtt prácticamente.
patria? Nos falta decir que esta obra está señalada de
mientras los hijuelos rebullen al lado! multiplicaos,» y al «amaos los unos ma nos ha descubierto el velo de nuestra «texto para las escuelas de primera enseñanza
Somos mil, multiplicado por mil veces, Aquél, tan vivo y tan osado, será ge- patria futura, de aquella patria donde la bon- por el Real Consejo de Instrucción pública.»
á los otros.» dad y la justicia del Señor nos prepara el ¿Y para esto sirve el Real Consejo? ¿Para dar
más cristianos que vosotros, sin hacer neral; el otro, flemático, llegará, con descanso y la paz eterna; pero en esta tierra su real sanción á que los niños gasten su inteli-
¿Cómo, si fuerais verdaderamente
genuflexiones inconscientes en vuestros su reposado entendimiento, á descu- rebelde é ingrata; en este mundo donde la gencia y el tiempo en aprenderlo que no es exac-
templos. religiosos, no os apartaríais de los jesuí- experiencia se forja en el yunque de la in- to, ni preciso, ni lógico?
brir nuevas leyes'matemáticas; cuando tas, que así terminantemente violan gratitud; en esta patria, donde hemos sido En nombre de la salud de la inteligencia de los
largo tiempo esclavos, en vez de ser señores, niños, suprímanse cuanto antes los textos y el
menos, será un Newton. Aquel mayor, mandamientos de vuestra ley? Consejo.
no fué un Newton, fué un Napoleón, con la
que tiene malas notas del colegio, y punta de su espada y con la sangre de már-
sobre cuya inteligencia no dan satis- tires sin cuento, el que suavizó las injusti-
cias de la historia, el que nos dio estos dere-
factorios informes los profesores, en
Un sentimiento que ii(iuere. cambio es tan bonachón, tan honrado,
Sección militar. chos del hombre, que nosotros reniínciamos
en aras del bien común, y nos dio á gozar
estas sacrosantas libertades, que sirven hoy
Curiosidad infantil
que, aplicado al comercio, vaá ver en- Habíamos dicho en nuestro primer núme- de bandera para execrar á los que con su
Bel mismo modo que la vida de la naturaleza ro que desde la revolución de Setiembre vie.
necesita de la renovación de loa átomos, así la
trar á carretadas el dinero por sus sangre las conquistaron. IdiUo.
ne notándose un nuevo espíritu, infundí- «Guardaos, repito, el privilegio de la can-
vida de las sociedades necesita la constante re • puertas; El que pintarrejea- cuanto en-
do en nuestro ejército; espíritu de amor á tidad; nosotros, con la inteligencia en la paz,
novación de las ideas. cuentra, tiene que ser lo menos un Ea- con el martirio en la guerra, no por ésta ó La escena es un baile de pueblo, en
las ideas modernas, de generoso entusiasmo
Dna nación que guarde en su seno principios fael. En cuanto á la niña, es imposible
por la grandeza de la patria, y defensor de
por la otra personalidad, sino por el bien de sala grande. En rincón escondido hay una
políticos, morales ó religiosos no conformes con la palria y del ejército, conquistaremos el pri- bella joven. En una habitación contigua,
el progreso, arrastrará una existencia pobre y que con sus gracias y en su travesura la unión estrecha entre la sociedad civil y vilegio del prestigio; no el prestigio de los
débil, y necesitará que venga á sacarla de su pos- natural, no conquiste el corazón de un militar. variados colores del uniforme, con que nos frente al rincón, ansí mujer cose tranqui-
tración uno de esos sacudimientos sociales, una banquero. Véase, en comprobación, lo acaecido pocas queréis alucinar y nos creéis pagados, ador- lamente; á su ladt) hay una niña que en-
de esas tempestades revolucionarias sin las cua- nando las víctimas para el sacrihciÓ, como se tabla con ella el siguiente diálogo:
noches há en el Oentro militar, esto es, en
coronaban y cubrían de preseas las que al
les la civilización seria aún uPmito. Ilusiones, empeños vagos quizá, pero el círculo militar más importante, relatado dolmen subían en las selvas druídicaa de los
Para crear es necesario destruir. Un edificio Por qué, di, madre, Sofía,
NISA.
de ciertos sentimientos nobles que pu- por uno de los periódicos militares, de más galos, sino el prestigio de la.religión estre- Tan
bella, está allí apartada,
TI
nuevo necesita más sólidos cimientos que el an- circulación y simpatías en el ejército, La. Cor- cha del deber, aureola de la patria, que se
tiguo sobre él cual se funda. rifican el alma, llevan á ella la dulce apaga ó enciende, según en ella es más ó
Con la cabeza inclinada?
respondenciaMilita.r: Dime, ¿por qué, madre mía?
España es una de esas naciones en las que, alegría, proporcionándola expansiones menos considerado el ejército. MADRE.
Se trata del discurso leido por el capitán ¡Cuánto preguntas, María!
habiéndose extendido el progreso en algunas de placenteras, y disponiéndola á ser bue- »No es ésta, no, la escuela do la ignoran-NIÑA.
¿Por qué ha besado la rosa?
8tiB esferas, guarda todavía reliquias tradiciona- de ingenieros Sr. Ami, el sábado 17 del cia; á sus filas llega el ciudadano ignorando
na y justa. ¿Por qué deshoja las floresi'
les, sentimientos muertos en otros países, mer- corriente en el Oentro militar. las letras del alfabeto, y de ellas sale con
¿Por qué tiene esos colores?
ced al empuje de la libertad. Mas como el podet Tal es el mundo de Dios. El formado Hé aquí lo que sobre él dice L a Corres- enseñanza elemental y con un baño de civi- MADRS. ¿Por qué es, madre, tan hermosa?
lización, que allá en el aula de eu aldea n u n -
NIÑA.
y la influencia del espíritu moderno es tan gran- al calor de aquel mandato que pode- pondencia Militar:
ca hubiera adquirido, sujeto al yugo del ter-
Hija mía, no seas curiosa.
de, y la fuerza de In razón es tan poderosa, hacen «El discurso del Sr. Ami es una obra ¿Por qué se sienta allí, fuera
mos leer en la Biblia de la naturaleza; ruño y de la miseria, al yugo de la rutina y
í)el baile y la confusión?
que el sentimiento de la fe, tan intenso en otros maestra. de la traición, tan poderosas en las pequeñas
tiempos, empiece & decrecer (aun en personas que nos dice aun sin leerlo en biblias Grande en su fondo, bello en su forma, localidades; yugos más onerosos y menos ci- MADRE. ¿Por qué sola en el rincón?
que se tienen por verdaderos j fervorosos cre- humanas: «Creced y multiplicaos;» y admirable por su atrevimiento, sin dejar de vilizadores que el yugo de la Ordenanza:^ y NIÑA. Saberlo, madre, quisiera.
ser digno de aplauso por la mesura y por la tan exageradamente se ha tomado por el ejér- Eres, niña, muy parlera.
yentes), empiece á agonizar; pues todos, estos de este otro puro precepto cristiano: circunspección con que está expuesta la doc- cito la profesión, que todos debieran haber ¿Por qué se ha puesto encendida
sentimientos, que soii débiles de suyo, en épocas
como la presente sólo necesitan para su extin-
«Amáoslos unos álos otros.» trina, y notable porque cada uno d e s ú s pár- cumplido antes, que equivocando la verda- En cuanto Arturo ha llegado?
MADRE. ¿Por qué, madre, ha suspirado?
rafos rebosa, digámoslo así, el espíritu m i - dera misión del soldado en las filas de la mi-
ción que un pequefio soplo los conmueva y que Ved ahora el del Papa. Sus soldados litar, en consorcio íntimo con el amor á la
NIÑA.
Dímelo, madre querida.
licia, coge el fusil diez días en el mes, si lle-
una ligera ráfaga del viento de la libertad los están formados en fila, mirando á la patria. No es de extrañar, por lo tanto, que ga, y coge la pluma ó el silabario los veinte No seas, hija, entrometida.
hiera. el auditorio permaneciera como suspendido restantes. No olvidaré jamas las palabras ¿Por qué así se están mirando?
tierra, adonde miran los gusanos. El jefe de aquellos sublimes conceptos, expresados MADRE. ¿Por qué, madre, la flor bella
Uno de los motivos más principales de que el que, á raíz de la guerra que asoló la Fran-
sentimiento de la fe toque á su término, es la hiere con su báculo el pavimento; nadie con tanto arte y con tan ingenua franqueza cia, oí pronunciar á un francés sabio é ilus- NIÑA. Que antes besóle da ella?
corrnpoion del clero y sus viciadas costumbres, se conmueve, nadie levanta los ojos. militar, que, y como consecuencia de la im- trado, contemplando una numerosa bibliote- ¿Por qué se hablan tan callando?
presión que producían, los aplausos resona- ca militar: «No puedo comprender la necesi- Me tienes, niña, sudando.
qa6 no son, como ligeramente se ha supuesto, Hay que demostrar que no se es hom- ran á cada momento, los murmtúlos de »dad de tanta ciencia para matar hombres^.» M i ra: se pone encarnada.
propios de este tiempo, pues que en muy distin- aprobación se sucedieran sin cesar, y la ova- MADRE.
tas épocas se ha visto censurado por hombres
bre,'que dentro no hay más que estuco. Lamentemos su influencia en las naclonesj Bueno tiene que haber sido
ción fuera unánime y entusiasta al dar por y digamos de ellos con pena y con cariño Lo que le ha dicho al oido. ^
cuya religiosidad nadie ha puesto en duda. Unas palabras deslizadas al oido de los terminado el Sr. Ami su notable trabajo, aquellas palabras de la Escritura; «Tienen ¿Qal será, madre adorada?
San Bernardo deoia: «Ya no puede decirse que capitanes, y trasmitidas por éstos del que mañana mismo empezaremos á publicar ojos y no ven, tienen oídos y no oyen.» NIÑA. Eres, niña, muy cansada.
á tal pueblo tal sacerdote, porque hoy el sacerdo- en el folletín, del que se hará una numerosa {María se acerca á los novios, que absortos
mismo modo á los soldados, les hacen tirada, que costeará gran número de socios, Nuestra entusiasta felicitación al Sr. Ami,
te es cien veces peor que.el pneblo.» Alfonso el en su coloquio, no reparah en ella, y vuelve
desfilar por todos los puntos cardinales. que en el acto así lo acordaron. que con tan franca elocuencia expone lo que
Sa^io prohibió que los sacerdotes representasen MADRE. al lado de su madre?¡
«íiiiRB iglesias, porque los tales, el uso le conver- ¿A qué van? Quizá no lo saben. Al lle- Todos los generales que estaban presen- entiende verdad, y á esos generales y oficia- NIÑA. Oye, madre, ¡qué bonito!
tes, que eran muchos, encabezaron con sus les del Oentro militar, á quienes no arredran Al darle Arturo aquel ramo.
tían en abuso, y el permiso en licencia. El in- gar á su destino lo sabrán. Se descon- nombres la lista de los adheridos al pensa- Le ha dicho «te amo, te amo,»
tencionado Tirso de Molina no dejó de dirigir miento do dar la mayor publicidad posible Uificultad'es para elevar al ejército, y por
agudas sátiras á la conducta de loseelesíásticos
fía de que entre el estuco haya podido Muy quedito, muy quedito.
al discurso del Sr. Ami, a quien felicitamos ende la patria, adhiriéndose á toda idea no- MADRE, ¡Que calles, niña, repitol
tle su tiempo; y si todos estos testimonios no quedar algo de alma, algo humano. calurosamente por tan señalado triunfo. ble y levantada. / ¡Cuánto se acerca á Sofía!
fueran bastantes, léase á Hurtado de. Mendoza, Y bien: suprimid en un hombre el Oon objeto de anticipar & nuestros lecto- Míralos, madre, un momento...
X.
Aprovechemos también la ocasión para sa-
Castillejo, al Pt isla, al Dante, á Bocaceio, con- r a algo de lo mucho bueno que dijo el se* ¡Si se confunde su aliento!
súltese la historia imparoial de tos Papaé, y ten-
pensamiento; quitad los afectos al co- ñor Ami, publicamos seguidamente algunos tlsifacer una deuda: la de devolver nuestro
Que la besa, madre mia.^.
drá i^ue coafesarae que U eorrapdon del clero ha razón; privadle de voluntad; arrancad'- párrafos, de cuya ojiortUDldad juzgaran cordial saiuddj á La Correspondencia. MilU Imprest*
ven á daacostarte,
B. Ruiiifios, placa de la PiJ», T
M«Ha.
 LAS DOMINICALES DEL LIBRE PENSAMIENTO

Estos anuncios proceden de la Redacción, y su inserción es gratuita. No

se admiten anuncios de pago, ni redactados por los interesados.
Habiéndosenos hecho pedido de algunas de las obras que figuran en nues-
tros anuncios, rogamos á los autores que nos envíen sucinta nota del precio
y lugar donde pueden adquirirse, para agregarla al correspondiente anuncio.

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D DEuu mu ID fu
PERIÓDICO S E M A N A L
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ADMINISTRACIONÍ CORREDERA BAJA, NÚM. 59, SEGUNDO DERECHA

PRECIOS DE SUSCRICION
Madrid, trimestre, 2 pesetas.—Provincias, id., 2,50 id.—Extranjero, año, 12 id.—Ultramar, id., 20 id.
Níimero suelto del día, 10 céntimos. Atrasado, 25 id.
La Redacción dará cuenta de toda obra de que reciba dos ejemplares.
La Redacción no responde de los artículosfirmados.—Nodevuelve los manuscritos.—La Administración no admite anuncios de pago.
1
I LIBRE D J l i M11
Esta Sociedad, cuyo título basta á acreditar su objeto humanitario, recoge á loa niños abandona-
dps y los ampara temporalmente en el Refugio que tiene establecido en la calle de Claudio Coello,
INFANTAS, 42 núm. 32.
Tiene abierta consulta médico-alopática diaria de 8 á 9 de la mañana, pública y gratuita en su lo-
Este establecimiento, se consagra hoy á la educación ameral, esto es, á la llamada primera y se- cal; la tiene también homeopática en la Travesía de Trujillos, núm. 3, de una á dos de la tarde. En
gunda enseñanza. Es ajena á todo espíritu de partido, religión, 6 escuela determinadas. Cuenta en- ambos locales se aplica gratuitamente la vacuna todos los sábados de una á dos de la tarde.
tre sus profesores y cooperadores á hombres de opuestos campos de la vida política militante, como El Refugio recibe á cualquier hora del dia y de la noche los niños que se encuentran perdidos en
Pelayo Cuesta, Azcárate, Giner, Alonso Martínez, Carvajal, Labra, Moret, etc., etc. Los profesores la vía pública.
se consagran exclusivamente á educar á los alumnos é instruirlos en las diferentes ramas de la cul- La Sociedad protege á los niños que son víctimas de malos tratamientos y tiene establecida una
tura, mediante explicaciones en las clases, en los paseos, en las visitas á Museos, talleres, fábricas, consulta jurídica gratuita, en casa de D. Fermín Hernández Iglesia, Travesía de la Parada, núme-
y toda clase de establecimientos que hay en Madrid, así como en las excursiones frecuentes que ha- ro 10, 2.*, para proporcionar los informes y consejos que se le pidan á nombre de los niños pobres,
cen por toda España, y aun por el Extranjero. huérfanos ó desamparados, y promueve y sostiene las reclamaciones administrativas y los pleitos
Es un establecimiento modelo que honra á nuestro país. Los padres que quieran dar una sólida y causas que interesen á aquellos desgraciados seres.
instrucción á sus hijos, y ademas educarlos en sus deberes usuales, envíenlos á la Institución Libre La piedad que respiran los fines de esta Sociedad que acabamos de enumerar, la hacen acreedora
de Enseñanza. á las simpatías y al aplauso del público, que debe prestarla toda su cooperación.

ASOCIACIÓN PARA LA ENSEÑANZA DE LA MUJER

CALLE DE LA BOLSA, 14
Esta asociación, fundada por el piadoso D. Fernando de Castro con el solo fin de elevar y ennoblecer á la mujer española mediante la educación é instrucción,
ha progresado notablemente, merced á la devoción que presta á esta idea el Sr. D. Manuel Ruiz de Quevedo, á la que coadyuvan catedráticos distinguidos de la
Universidad, explicando sin remuneración alguna las clases.
Ademas de la Escuela de Institutrices, cuya matricula está cerrada, existen ya varias otras de aplicación, á saber:
Escuela de correos y telégrafos.—Honorarios, 5 pesetas mensuales por todas las asignaturas de un curso; 5 por la práctica de Telégrafo; 2 por cada
asignatura suelta.
Clases de lenguas: ingles, alemán é italiano.—Por una de las asignaturas de ingles ó alemán, 10 pesetas al año. Por la de italiano, 5 pesetas mensuales.
Clases de diiujo del yeso y de pintura.—Por una asignatura, 10 pesetas todo el curso; por las dos, 15 pesetas todo el curso.
Clases de armonium.—10 pesetas por todo el curso.
Escuela de comercio.—Está cerrada la matricula.
La Asociación se sostiene mediante las pequeñas cuotas de los socios, y por algunas subvenciones de corporaciones y particulares.
Cuantas personas de espíritu ilustrado y que comprendan la importancia de semejante institución que ha de ser una de las más sólidas raices de la regenera-
ción de nuestra patria, deben hacerse socios.
SOMBRERERÍA MI- CONFERENCIA SO- V I W DE MESA. CA- JOAQUÍN COSTA, FLEMENTOS DE MA- QINER, FRANCISCO HISTORIA DE POR-
•"•^liur.—Justo Gómez, calle de Peli- ^^bre
'bre viajes
viajes escolares*,
escolares*, pOi
por .v«i«i¡i
Rafael Uao, 6,—Se mueren las gentes an- •'obras.—Iji T eoria del hecho jurídico», '^temáticas por Baltzer, traducidos ^-^Obras,—Pocos países contarán hom- tugal, por A. Herculano,—Desgra-
gros, l i y ifi. Muy acreditado en esta Torres Campos,
mpos. profesor de la Institu- tes de lo que debieran, porque alimen- y otra» varias obras de.este joven escri- directamente del alemán por ü, Eulo- bres que unan la profundidad de pensa- ciadamente no hay más que cuatro to-
especialidad. cion l.ibre de Enseñanza. Folleto inte- tos y bebidas están de ordinario solis- tor, deben ser señaladas á la atención gio Jiménez y _ D, Manuel Merelo,—N» miento y la vasta erudición que posea mos de este monumento de la historia
resantísimo. Véndese en la librería de cados. Si nuestro periódico pudiera des- del público. Admiran por la erudición hay comparación entre los libros ele- este sabio profesor de la Universidad,— del pueblo hermano, pero ellos bntaii
cubrir dónde se venden los artículos de que revelan y la profundidad de pensa- mentales de Matemáticas franceses, que Tiene publicados variedad de trabajos, para formar idea del genio de Hercula-
REVISTA CIENTIFI- Hernando. primera necesidad puros, se afanaría
por darlo á conocer al público. Esta-
miento. usa de ordinario nuestra juventud, y entre ellos: «Estudios de Literatura no, v penetrar en la entraña de la Edad
co-militar,— Semanario doctrinal éste que los Sres-, Jiménez y Merelo y Arte,* «Enciclopedia jurídica,» por edla:
Med
militar, en que se insertan trabajos se- mos seguros de que no porque la into- han traducido.—Sólo el poder de la ru- Ahrens, traducida directamente del ale- Del mismo autor hay ademas: la Hit-
is,—Barcelo
rios. ¡lona, 5 pesetas trimestre. T A SUISSE ILLUS- licacion sea lenta, deja de serlo desde el
momento en que las sustancias noci- T AS CUENTAS DEL tina explica que después de impresos
en lengua castellana, se siga ensebando
mán por el Sr. Giner en unión de A. G,
Linares; «Principios de derecho natu-
torie da ¡nquisicao, Eundo 6 Pretbytero,
O Monge de Cúter, etc , á cual más ad-
tree.—Esta preciosa publicación, re- vas se introducen en los alimentos ••-^Estado en Inglaterra, Francia y Es- por textos á la francesa. ral,* etc. mirables,
lativa al país mas pintoresco de Europa,
R E V U E MILITAIRE va apareciendo por cuadernos, algunos
Pues bien, tenemos evidencia de que el
vino que anunciamos es puro y está
tado, porM. A. J. wilson.con introduc-
ción por el marques de Riscal.—Llevar
de l'étranger. —Publi<« artículos con más de veinte grabados Cada cua-
verdaderamente concienzudos .sobre la derno cuesta cincuenta cuntimos de pe-
hecho con la mayor pulcritud; todas las bien las cuentas del Estado es ahorrar
ENFERMEDADES DE FL LINARES.—PE-
organización y asuntos militares de to-
dos los países—París, rué Montmartre,
seta. 1.0 recomendamos á los aliciona-
dos á los viajes.
operaciones con máquina. Nos apresu-
ramos á manifestarlo al público, aun
mil gastos inútiles al contribuyente
Este, si tiene entendimiento, debe ayu- r-ERVECERÍA ESCO- •^lo» niños,,—El Dr. Lozano, director •^riódico biscnal que se publica en la
ciudad de su nombre. Es un resuelto
sin permiso del cosechero. dar al marqués de Riscal en *u obra da ^^cesa.—Principe, fi—Se da cafS puro, de la consulte de la Sociedad protectora
15a; 13 francos al año. impulsar al Gobierno á qu« lleve bien de los niños, que vive calle del Pez, 11 adalid de la República
I..- cuentas. Para ello que comience por duplicado, »e consagra á esta especiali-
HÍJIÍETAT-SOMBRE- riMARRA HERMA- leer su interesante folleto. MANICOMIO DE CA- dad. Lo recomendamos.
R L ECO BILBILITA-
rero.—Tiene acreditado buen gus- MECÁNICA DE SOLÍ- , * rabanchel Alto.—El nombre del
to, sobre todo en sombreros para niños. ^-'nos, sastres.—Carmen, i5,—No hay dos, por Eduardo Lozano, catedrá- Dr, Ezquerdo, que dirige este estableci- no.—Diario sostenido por las frac-
Principe, 7. establecimiento más acreditado en tra-
jes de niño.
ticode Instituto. El Sr. Lozano ha he-
cho una obra concienzuda, propia de su
pNCICLOPEDIA PO- miento, del cual es propietario, basta
para acreditar su importancia. El doc- ESPECÍFICOS.-NO ciones republicanas de aquella locali-
dad. Suenseñaes República,honradez,
•*—'pular, ilustrada de Ciencias y Artes, tor Bzquerdo es délos que hacen una justicia.No debe haber liberal aragonés
recta inteligencia, que merece el apre- formada con arreglo f la Enciclopedia •^comprarlos. Sólo un médico inteli-
-DENITO MORENO, cio del profesorado público. iconográfica y el 'Convarsation leii- religión de su profesión, gente puede determinar la proporción
en que deben combinarse los simples
que le niegue su proeeccion.
•^hermanos.—Espoz y Mina, 7. Sastre»
degusto acreditado. ANUARIO DEL CO- con- de Alemania, por F. Gillman. Es un
tesoro de cultura que haciendo penetrar en cada caso, para formar medicamen-
mcrcio, por Bailly-Bailliere.—Me
G I N E R , HERMENE- por los ojos las cosas con su forma y L I B R E R Í A DE GU- tos compuestos apropiados á la edad,
naturaleza y estado de cada dolencia.
HISTORIA DE POR
rece bien de nuestro país el Sr. Bailly
FAÑS.-ESTABLEA por la obra importantísima que ha lle-
vado á cabo; la cual, si no exenta de in-
^"•^gilde.—Obras.—Tiene un importan-
te libro .sobre Arte, con un prólogode
color, ahorra inmensas fatigas al pensa-
miento.
•^tenberg. Calle del Principe.—Ofrece
esta nueva librería la garantía de que Por otra parte, el sabio que conoce
una verdad, se apresura a ofrecerla
tugal, por J. P. Oliveira Martin».—
Este compendio de la Historia de Por-
tugal e» de lo mejor que puede hallarse
^^miento de tipografía,—Surtido de ejactitudcs, contiene precioso», dato» está á su frente una de las pocas perso- pira bien de lo» hombres; lo» autores
maquinarla y efectos tipográficos, de lo D. Nicolás Salmerón y otros varios más, nas que conocen el comercio de libros en obras de este género. Está admira-
para todas las personas de negocios. asi como algunas comedias. extranjeros. de especillcos que quieren hacer creer blemente escrita, como cuanto sale de
más completo y de más gusto que hay
en Madrid. Está relacionado con las OBJETOS DE ESCRI- que tienen en su mano la vida de sus
semejantes, esconden su secreto para
la pluma de este gran literata portu-
principales casas de Europa. ViUanue- torio—Concepción Jerónima, 10. gués. Tiene otras varias obras, muy in-
ganarse algunos reales. Es imposible
va, a». ZAPATERÍA DE IÑI- rOLEGIO IBÉRICO. Este antiguo establecimiento, fundado
en i8i*, merece la confianza del públi- OBRAS DE DON RA- creerlos, hay que juzgarlos más huma-
teresante» á los españoles, como la Hi*
torta de la civilización ibérica, Portugal
go Lozano.—Calatayud.-l,a»condi- co —Se venden cerillas linas muy eco- ^-^facl Marfa de Labra.—«La Coloniza- nos; hasta la infeliz portera de la casa eontempordneo, etc,
HISTORIA DE BSPA- ciones de carácter del dueño de este esta- ^'Calle de Leganitos—Recomenda-
mos á las familias este colegio, dirigido nómicas: á 2 y 2,5o pesetas medio kilo, clon en la historia,» «La Abolición de se apresura á decir < sus comadres
la cíate de remtdios que emplea para
•*• "'•ña por Lafuenie (D. Modesto),— blecimiento le hacen aciccdor á toda la la esclavitud* y otras varias, que deben
por el Sr. Langa, persona de la mayor
Montaner y Simón, Barcelona. Honra i
ios Sres. Montaner la edicioft monu-
conlianza del público, Varios indivi-
duos de Madrid traen de su casa el cal- inteligencia y rectitud. leer los que se interesen por la reden-
ción del esclavo y por lo» asuntos colo-
que los apliquen á lo» individuos de
sus familias cuando están enfermos y MAPA DE ESPAÑA
mental que acaban de hacer de esta clá- zado, á pesar de las molestias naturales FRANGE EN RELIEF. niales, en los cuales tiene verdadera sanarlos: ¿había de ser menos un señor
farmacéutico? Decir pues, que curarán
da Vogxl.—Recomendamos este
mapa de nue»tra patria, editado en lo
sica obra. 3ue lleva consigo el trasporte. No pue- Este admirable mapa de Francia y autoridad, conquistada por sus talentos,
e daise mayor recomendación. T AS COLONIAS — de parte de la Europa central, es lo más el Sr. Labra, esto, aquello y lo otro, es una pura bro-
ma para bacer la estadística de los bo-
sabia Alemania, que no tiene igual en
cuanto hemos hecho nosotros ó han
Prats,—Géneros ultramarinosy con- acabado de su género. Deben adquirirlo hecho los restantes pueblos extranjéroí-.
TENEDURÍA DE L]I- literta,—Oe lo mejor en Madrid en >u
género.—Arenal, 8,
'\oi establecmiientos de enseñanza celo-
sos de facilitar á los alumnos el conoci-
bo» que andan por el mundo y reírse á
dos carrillos. Lector discreto, huye de Los militares, sobre todo, necesitan im-
•El
•*• bros, por Blas Goytre y Blasco —_. r O R T E DE PATRO- miento de las formas reales del terreno. (GUMERSINDO DE ser número en esa estadística, y cuan-
do éste» enfermo con.sulta á un médico
prescindiblemente poseerlo,
oue quiera enterarse del estado último nesy trajes de niño. Carmen 3i.— Parí», Ch, Delagrave, rué Soufflot. ^-"Azcárate.—Obra».—Este serio y ele-
de los conocimientos en e.sta materia, Para todo, aun lo más sencillo, se nece- iliistrado, que sepa lo que padeces y la»
lea «1 libro de Goylie.—Librería de Cór- sita aptitud; el dueño de este estableci- T AS NACIONALIDA- vado jiensador tiene publicados varios
trabaios sobre Derecho político, de pro-
medicina» que te da. ATLAS STILLER—
doba, Puerta del aol. miento tiene más que eso: tiene genio. dea, por D. Francisco Pl y Margall. piedad, etc., que deben ser leido» por Magnílico atlas, del cual forma
Hay que verle concebir y hacer para Libro.escrito con profundidad y elo- HISTORIA DE LA HU- todo el que aspire á poseer conocimien- parte el grandioso mapa de Eapafi»
ORDENANZAS MILI- apreciar su habilidad. cuencia. manidad, por Laurent.—Hay dos tos sólidos en estas materias. de Vogel, No hay nada más superiui
^-^ tares.—Exposición didáctica de par- traducciones españolas de eata obra,
que es un monumento erigido á la li-
F L MOTÍN, PERIODI- en este género, (Librería deGutenberi:,
calle del Principe.;
le de las mismas, por N Amorós. Obra • ^ c o satírico.—Ha^ mucho papel im-
interesante nt militar que quiera pene-
trarse del espíritu de la Ordenanza. FARMACIA, CALLE T OS DOS CISNES— beitad del pensamiento y al progreso, á
la vez que el más implacable proceso POLÍTICA DE CAPA Y preso que, en apariencia sena, oculta
algo bufo. El JUolin, en cambio, en for-
del Pez, núm. 46.—Puede acudir á
ella el público, con la seguridad de que
•*-'Restaurant.—Calle de Alcalá, 17.—
D« lo mejor de Madrid. Es invariable.en
coctra el clericalismo, espada, por Selles.—Precioso libro, mas bufas, persigue un tin lerio. TELLO.-IMPRENTA
digno del autor de «Kl Nudo gordiano,* •* El Sr. Tello tiene acreditado SH
ACADEMIA PREPAT- no le engañan. el esmero en servir bien. buen gusto en los trabajos de imprenta.
•*^r*tori« par» las carreras de Inge,.ie- BOLETÍN DE LA INS- O SECULO—PERIÓ- Plaza de los Mostenses.
ros, Estado Mayor, etc., por el ingeniero
de C»roín«» sr. Portuondo.—Calle de GEOGRAFÍA DE ELI- nURAND —BNCUA- •*^titucion Libre de Enseñanza, Infan- C E R V E C E R Í A IN- / 7 dico republicano de Lisboa —Pu-
VtlTCTde, niím. 34 —El Sr Portuondo, ^^^»í« Redua.—Reclus W unt glori»
ta!, 43—Suacricion: 10pasetaa al añb.
Publica aerioa «rtlculoa tobrí p«daca>
_ glesa —Carrera de Sao Jerónimo,^ blicación tai) «aria como entuaiaatapor QAINZ Y ROMILLO
adema* d« «abcr, tima •! don de tnie- de U ciencia, y su obra una maravilla, •*^dernador,—Calle de la Greda, J y >, ea el «itio en que se puede aaborear el la libertad y el progreso. hermano».--Alniacen de papel. Caá»
ñ«r, qu« no •« común. |i« y cianaia, caté puroi Sdpinlo 1' aattroa. de aólida reputación. P)u« /«tCiUao,
Lo mafor dt MaJrid tn lu gtocro.