Texto Expositivo

SAN JUAN 14:1-23 Y JUAN 17:21-22 NO HABLAN DE TRINIDAD
Para empezar debemos de tener en cuenta lo que quiere decir la palabra trinidad, la
trinidad es un dogma que enseña que Dios está compuesto por tres personas distintas:
el padre, el hijo y el Espíritu Santo, lo cual es todo lo contrario a lo que enseña la Biblia,
porque lo que enseña la Biblia es que Dios es único, (judas 1:25 al único y sabio Dios,
nuestro Salvador, sea gloria y majestad, imperio y potencia, ahora y por todos los
siglos. Amén.) es muy importante tener presente que la palabra único hace referencia
a una cosa o sujeto que es solo y sin otro de su especie, partiendo de este concepto
podemos asegurar que Dios es único y no hay otro como Él.
Lo que nos enseña la biblia es que hay un solo Dios el cual tiene atributos únicos de Él,
y que no comparte con nadie, el cual se ha manifestado de diversas maneras a la
humanidad.
Teniendo claro estos conceptos nos damos cuenta que en estos dos pasajes bíblicos,
Jesús está hablando con sus discípulos dando a conocer sus dos naturalezas, la humana
y la divina, pues sus discípulos tenían aun algunas dudas acerca de la deidad de Cristo y
su papel en la humanidad, teniendo en cuenta que el pueblo judío es un pueblo
totalmente monoteísta, y esperaba la manifestación de Dios para salvarlos.
Durante esta conversación que tuvo Jesús con sus discípulos hay afirmaciones que
Jesús es el mismo padre, y el mismo Espíritu Santo.
5
Le dijo Tomás: Señor, no sabemos a dónde vas; ¿cómo, pues, podemos saber el
camino?
6
Jesús le dijo: Yo soy el camino, y la verdad, y la vida; nadie viene al Padre, sino por mí.
Cuando Jesús le dice a Tomas nadie viene al padre sino por mi está afirmando que Él es
el mismo padre ya que emplea la expresión nadie VIENE AL PADRE, en ese momento el
que está hablando y está presente es Jesús, pero aun así dice nadie viene al padre
dando a entender que Él es el mismo Padre.
Otra expresión dicha por Jesús es “¿Tanto tiempo hace que estoy con vosotros, y no
me has conocido, El que me ha visto a mí, ha visto al Padre; ¿cómo, pues, dices tú:
Muéstranos el Padre?”
Hay que tener en cuenta que la naturaleza de Dios es Espíritu, y como Espíritu no tiene
una forma corporal, por lo cual Felipe le pide muéstranos al padre, en ese instante
Jesús nuevamente afirma que Él y el padre son el mismo, teniendo en cuenta que le
está hablando en tiempo presente, y el único que acompaña a los discípulos en ese
momento es Jesús o sea el Padre manifestado en carne.
En cuanto al Espíritu Santo, Jesús también hace afirmaciones que Él es el Espíritu

Santo,
17
el Espíritu de verdad, al cual el mundo no puede recibir, porque no le ve, ni le conoce; pero
vosotros le conocéis, porque mora con vosotros, y estará en vosotros.
Con esta expresión VOSOTROS LE CONOCEIS PORQUE MORA CON VOSOTROS, se
refiera a sí mismo dejando claro, que ya conocen al Espíritu Santo porque mora con
ellos, cabe resaltar que en ese momento el Espíritu Santo no se había manifestado en
la vida de los creyentes, porque Jesús no había sido glorificado.
Jesús también usa la expresión NO OS DEJARE HUERFANOS, VENDRE A VOSOTROS, en
ese instante está hablando del Espíritu Santo, claramente está diciendo vendré a
vosotros manifestado como el Espíritu Santo, y también dice como padre que no nos
dejara huérfanos.
En cuanto a Juan 17:21-22

21
para que todos sean uno; como tú, oh Padre, en mí, y yo en ti, que también ellos
sean uno en nosotros; para que el mundo crea que tú me enviaste.
22
La gloria que me diste, yo les he dado, para que sean uno, así como nosotros somos
uno.
Aquí está haciendo referencia a una unidad que tiene Jesús con el Padre en cuanto al
propósito, mente y voluntad, teniendo en cuenta que la humanidad de Jesús siempre
estuvo sujeta a su naturaleza divina, para llevar a cabo el plan de salvación.
Por lo anterior podemos concluir que estos dos pasajes bíblicos, no nos hablan de una
trinidad si no por el contrario nos afirman que Dios es único e indivisible con la
capacidad de cumplir con diferentes papeles que son necesarios para nuestra
redención, ya que en su papel de Hijo nos redime, y en el papel del Espíritu Santo
regenera al hombre llevándolo a su estado original.

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SAN JUAN 14:1-23 Y JUAN 17:21-22 NO HABLAN DE TRINIDAD

En cuanto al Espíritu Santo, Jesús también hace afirmaciones que Él es el Espíritu

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