Tipos Penales Hurto
Tipos Penales Hurto
Tipos Penales Hurto
Penal I
Penal II
Penal III
Penal IV
Biblografia
Temario
Tema 1: EL DELITO DE HURTO. Elementos; Estructura Típica; Tipos: hurto simple, hurto calificado y
hurto agravado; Diferencias esenciales con otros delitos contra la propiedad; Ubicación en el
Código Penal venezolano; Delito de Hurto tipificado en la Ley sobre El Hurto y Robo de Vehículos
Automotores. El hurto de información establecido en la Ley Especial contra los Delitos
Informáticos.
EL DELITO DE HURTO: Se entiende por hurto, todo acto en el cual una persona se apodera de algún
objeto mueble, perteneciente a otro para aprovecharse de él, quitándolo, sin el consentimiento de
su dueño, del lugar donde se hallaba.
ELEMENTOS:
La acción de apoderarse
El Apoderamiento ilegítimo
La Ajenidad de la cosa
El Valor de la cosa
El verbo que dirige la acción del sujeto activo es apoderare, ello representa una noción
compuesta: comprende un acto material de apoderarse de la cosa mueble y el apropósito que es
de orden subjetivo ya que se encuentra en la conciencia libre y voluntaria del sujeto activo. De
esta manera, no basta tomar la cosa sino que también debe existir la intención de adueñarse de
ella, de tomarla para sí, esto comporta la plena intención, consiente y decidida y la posibilidad de
ejercitar el actos de apoderarse de la cosa mueble. El resultado de la acción es la apropiación de la
cosa. El hurto es un delito de resultado, ya que hace falta el desplazamiento patrimonial y exige la
separación física de una cosa del patrimonio y esfera jurídica de su dueño y su incorporación a la
esfera jurídica patrimonial del agente o sujeto activo del delito.
El apoderamiento ilegitimo: consiste en la sustracción de una cosa mueble sin que exista el
consentimiento del dueño, es decir, un apoderamiento arbitrario de lo ajeno, con el
convencimiento e intención manifiesta de pasar el bien mueble a la esfera jurídica de disposición
del sujeto activo, que le permita adquirir la facultad de disponer realmente de él.
La Cosa mueble: es sobre quien recae directamente la acción del hurto. En principio, para el
derecho penal, será lo que pueden ser llevado o transportado. Las cosas susceptibles de hurto son
aquellos objetos corpóreos o tangibles, que debe tener un valor o gozar de apreciación personal o
mejor dicho que se ostente un derecho sobre ellos.
El objeto del delito es una cosa mueble ajena. Es dable recordar que, de acuerdo al artículo 531 y
siguiente del Código Civil, son bienes muebles los objetos materiales susceptibles de apropiación.
Es decir, un bien mueble es un objeto marial que puede ser corporal, por ejemplo, una mesa o
incorporal, por ejemplo, energía eléctrica o un programa de computadora.
También debe indicarse que para el derecho penal el significado de cosa mueble es más amplio,
puede no solamente comprender los muebles por su carácter representativo y, en algunos casos,
las cosas muebles por su naturaleza. Al respecto Carrara explica que "el hurto puede recaer sobre
cosas que en manos del propietario eran inmuebles pero que se movilizan en virtud de la acción
del delincuente" (por ejemplo, la tierra, mientras no está separada del suelo, es una cosa inmóvil
por excelencia, pero puede ser hurtada en el caso que una persona, valiéndose de un balde, la
sustraiga del terreno vecino para usarla en sus propios beneficios. Es que en el derecho penal
determina el carácter de mueble de una cosa atendiendo a su "transportabilidad" o movilidad, es
decir, si una cosa puede ser transportada para el derecho penal es "mueble".
La Ajenidad de la cosa: La cosa debe ser ajena, aspecto que implica un requisito negativo ya que
no le pertenece a quien la hurta, como también uno positivo pues la cosa pertenece a alguien
quien de alguna manera tiene que demostrar su titularidad. Esto es importante pues no hay hurto
si la cosa es propia o carece de dueño por estar en condición de abandono. La cosa debe ser "total
o parcialmente ajena", presentándose este último caso cuando sobre ella existe condominio o son
varios los titulares del derecho de propiedad.
Debe recodarse que "res nullius" es una cosa que carece de dueño como un animal salvaje y que
"res derelictae" son las cosas abandonadas por su dueño y los mismos no tienen el ánimo de
recuperarlas. En ambos casos quien se apodere de ellas y logre demostrar esta condición, no
comete hurto.
Sin embargo las cosas pérdidas o "res desperditi" u olvidadas no son cosas abandonadas porque su
dueño sigue teniendo la esperanza de recuperarla y, por ello, no son susceptibles de apropiación,
En todos los casos, si se presentan dudas acerca de si una cosa fue abandonada por su dueño o ha
sido perdida, se presumirá que ha sido extraviada, siempre que tenga algún valor material.
El Valor de la cosa: representa la utilidad dada y el valor económico de intercambio de una cosa
mueble establecido en un momento determinado. En el proceso es requerido el justiprecio, que
será realizado por un perito o experto, sobre el valor de la cosa hurtada, en el tipo penal contenido
en el artículo 451 del Código Penal solo existe un límite mínimo que es el de una unidad tributaria,
el cual opera como elemento de disminución de la pena.
El valor es el elemento necesario que justifica la apreciación proporcional del bien mueble y
determina la naturaleza y cuantía del daño causado, en los delitos patrimoniales constituye el
elemento esencial para determinar el agravamiento o disminución de la pena.
Estructura Típica: pretende establecer el análisis de la norma penal en cuanto a la composición del
tipo penal del Hurto, dentro de las peculiaridades que determinó el legislador en la construcción
normativa respecto a la forma básica y complementaria.
Estructura básica del Tipo Penal del Hurto contenido en el artículo 451 del Códico Penal:
Núcleo Rector: constituye la forma verbal que nutre antológicamente la conducta típica en general
en los tipos penales que agrupa, de tal manera que ella gira en torno del mismo.
La importancia de lo dicho radica en que la interpretación que sobre la norma hacen jueces,
magistrados, fiscales y abogados en su diario administrar o participar en la administración de
justicia, establece la ubicación general de los tipos penales que agrupa un núcleo dentro de las
peculiaridades propias que lo caracterizan. En detalle, la interpretación de la adecuación de la
conducta se realiza respecto del verbo que dirige la acción, el cual está planteado dentro de un
núcleo rector, que indica la generalidad de la acción.
El apoderamiento es el acto consumativo del hurto. Por tanto, en los tipos penales descritos en el
Código Penal para el hurto, se admite el grado de frustración, más no el de tentativa.
En la construcción de la oración en la norma penal, el legislador pudo hacer uso de varios verbos,
por ello es preciso analizar la conducta desplegada por el agente con la finalidad de subsumir la
acción en el verbo rector de la norma penal.
En los tipos penales compuestos, existen distintos verbos, cada uno representa o identifica una
acción determinada, en este caso el verbo rector será aquel que se ajusta a la acción que el sujeto
activo despliega y dentro de la cual se subsume.
Sujeto Activo: El hurto es un delito de sujeto activo indiferente o indeterminado, porque la norma
no exige en su redacción para el agente, una cualidad especial determinada.
Bien jurídico tutelado: El bien jurídico protegido es la propiedad, entendida en sentido penal,
comprende la propiedad civil o dominio, la posesión y la tenencia, ya que por ejemplo, la
sustracción de una cosa perdida al depositario de la misma representa de igual forma un hurto
aunque el propietario legitimo no aparezca nunca. Concebida como un derecho, se encuentra
establecida en el artículo 115 de la Constitución de la República.
Teoría de “la amotio rei” o de la remoción: Considera consumado el hurto cuando la cosa ajena ha
sido trasladada del lugar donde reposaba originalmente; de manera que establece que no basta
con tocarla, sino que es necesario haberla desplazado de su lugar original. Según esta teoría, el
delito está consumado porque la cosa fue movida de su lugar original, la intención de sustraer
quedaría sobreentendida dentro de la voluntad de desplazar la cosa ajena.
Teoría de la “ablatio rei”: Es más exigente y elaborada que las anteriores, incorpora una serie de
elementos que pretenden determinar la intención manifiesta del sujeto activo en su acción.
Sostiene que el hurto se consuma cuando el delincuente toma la cosa ajena y la sustrae de la
esfera jurídica de custodia o de vigilancia de quien la detenta, desapoderándolo a la víctima de su
legítimo derecho de propiedad o de posesión.
Teoría de la “illatio re”: Es una teoría descartada en la actualidad. Sostiene que el hurto se
consuma cuando la cosa ha sido llevada al lugar donde el agente piensa utilizarla, sacar provecho
de ella o tenerla definitivamente.
Teoría del apoderamiento verdadero y propio: El hurto se consuma cuando la cosa entra en la
esfera jurídica de disponibilidad del sujeto activo. Es decir, cuando éste adquiere un poder de
hecho que es asumido por la misma tenencia sobre la cosa.
Ilegitimidad del apoderamiento: Tanto en el robo como en el hurto, el apoderamiento debe ser
ilegítimo; es decir, sin derecho. El que se apodere de algo legítimamente, con derecho, no comete
hurto, es así el caso de los cónyuges no separados de bienes o cuando no existan capitulaciones.
De igual forma, no hay hurto si se lleva a cabo el desapoderamiento en cumplimiento de un deber,
o en ejercicio de un derecho, o con el consentimiento expreso o tácito del tenedor. El
consentimiento tácito o presunto, actúa normalmente como causa de justificación, ya que en
estos casos puede considerarse como una causa de exclusión de la responsabilidad penal.
Normalmente cuando se presentan conflictos entre el propietario y un poseedor, se considera que
mejor derecho tendrá el propietario a menos que exista una protección jurídica, como el contrato
de depósito, que otorgué derechos específicos al poseedor del bien en cuestión, que
presuntamente había sido hurtado.
Medios: Todos los medios son aptos para consumar el hurto, siempre que no sean violentos, pues
en este caso estaríamos ante la figura del robo. Ciertos medios son tenidos en cuenta por la ley
para agravar o calificar el hurto, ejemplo: escalamiento, uso de ganzúa, llave falsa, entre otros.
Circunstancias
De modo: despojando a una persona mediante astucia usando algún tipo de sustancias
psicotrópica o enervantes de la voluntad; abusando la confianza que nace de un cambio de buenos
oficios, de un arrendamiento de obra o de una habitación; abriendo cerraduras sirviéndose de
llaves falsas u otros instrumentos o valiéndose de la llave verdadera perdida o dejada por su
dueño; empleando algún uniforme o insignia para infundir autoridad; un hecho realizado por tres
o más personas, entre otros.
De tiempo: de noche; aprovechando la facilidad que brinda algún desastre; violando los sellos
puestos por alguna autoridad en virtud de un procedimiento administrativo o judicial; entre otros.
De lugar: en las oficinas, archivos o establecimientos públicos, en cementerios, tumbas o
sepulcros, en los sitios de culto religioso, en transporte público, naves o aeronaves, entre otros.
Causas Agravantes para el delito de hurto: son todas aquellas que de una manera u otra
incrementan el quantum de la pena respecto al parámetro establecido en la forma general del tipo
penal configurado en el artículo 451 del Código Penal.
Artículo 451. Todo el que se apodere de algún objeto mueble, perteneciente a otro para
aprovecharse de él, quitándolo, sin el consentimiento de su dueño, del lugar donde se hallaba,
será penado con prisión de un año a cinco años.
Mendoza T., siguiendo a Rodríguez Devesa, afirma que el consentimiento del propietario o del
poseedor es una causa de justificación que excluye el delito de hurto en todo caso en que el
propietario o el poseedor puedan disponer de la cosa.
Si alguien se apodera, violentamente, de una cosa que le pertenece y que otro no quiere
restituirle, cuando procede la devolución, no existe hurto (ni robo), pero sí ejercicio arbitrario de la
propia razón o auto-justicia. La comprobación de la existencia del derecho con que se procede,
funciona corno atenuante, solamente.
Minoridad penal. Si el agente no ha alcanzado la edad de catorce años, para el momento en que
ha cometido el hurto, no puede ser considerado penalmente de acuerdo a lo dispuesto en el
artículo 531 de la Ley Orgánica de Niños, Niñas y Adolescentes (LOPNA).
Enfermedad mental. En materia de hurto, es obligada la referencia a la cleptomanía, que es una
impulsión morbosa a hurtar (casi siempre, en supermercados o tiendas por departamentos)
pequeños objetos, de escaso valor, en la mayoría de los casos, que la persona podría comprar.
Excusas absolutorias: Hay ciertos casos en los cuales, a pesar de haberse cometido hurto,
defraudación, incluso la estafa o daños a la propiedad, el autor está exento de persecución penal,
de acuerdo a lo que contempla el artículo 481 del Código Penal en los términos siguientes:
Artículo 481. En lo que concierne a los hechos previstos en los Capítulos I, III IV y V del presente
Título, y en los artículos 473, en su parte primera, 475 y 478, no se promoverá ninguna diligencia
en contra del que haya cometido el delito:
En perjuicio de un hermano o de una hermana que viva bajo el mismo techo que el culpable.
Culpabilidad: El hurto es un delito necesariamente doloso. Ello implica que la decisión consciente
del agente se apodera de la cosa mueble ajena sacándola de la esfera de custodia de su legítimo
dueño o poseedor sin el consentimiento de éste, para aprovecharse de ella, perfecciona la acción.
No puede haber apoderamiento culposo, porque el verbo apoderarse (objetivo-subjetivo) implica
no sólo una acción física, sino, además el propósito de someter la cosa al señorío fáctico del autor.
Penalidad: El hurto simple acarrea una pena de prisión de un año a cinco años, término medio:
tres años de prisión, de acuerdo a lo que dispone el primer aparte del art 451 del Código Penal. Si
el valor de la cosa sustraída no pasare de una unidad tributaria, la pena será de prisión de tres
meses a seis meses, lo cual en doctrina se ha denominado hurto mínimo.
Tipos de Hurto
Hurto Simple: se encuentra establecido en el artículo 451 del Código Penal en los términos
siguientes:
Artículo 451. Todo el que se apodere de algún objeto mueble, perteneciente a otro para
aprovecharse de él, quitándolo, sin el consentimiento de su dueño, del lugar donde se hallaba,
será penado con prisión de un año a cinco años.
Si el valor de la cosa sustraída no pasare de una unidad tributaria (1 U.T.), la pena será de prisión
de tres meses a seis meses.
Se comete también este delito cuando el hecho imputado recaiga sobre cosas que hagan parte de
una herencia aún no aceptada, y por el copropietario, el asociado o coheredero, respecto de las
cosas comunes o respecto de la herencia indivisa, siempre que el culpable no tuviere la cosa en su
poder. La cuantía del delito se estimará hecha la deducción de la parte que corresponde al
culpable.
Hurto Agravado: contempla situaciones que permiten realizar un incremento a la pena, está
establecido en el artículo 452 del Código Penal en los siguientes términos:
Artículo 452. La pena de prisión por el delito de hurto será de dos a seis años, si el delito se ha
cometido:
El tipo penal previsto en este artículo, supone un sujeto activo indiferente o indeterminado. En lo
que atañe a la culpabilidad, es necesario que el agente se apropie de bienes propios del trabajo y
quehacer de la Administración Pública en las circunstancias ya señaladas, por las cuales se
configuran las circunstancias agravantes. Para establecer en encuadre en las condiciones
establecidas por este numeral, es necesario que el agente conozca el carácter del lugar donde
efectúa la acción y el destino público dado a la cosa hurtada (elemento intelectual y elemento
afectivo del dolo). De lo contrario, solo configurará el hurto es simple. Si la cosa sustraída es de las
destinadas notoriamente a la defensa pública o a la pública reparación o alivio de algún infortunio,
el hurto será calificado, ver numeral 11 del artículo 453 CP.
3. Apoderándose de las cosas que sirven o están destinadas al culto, en los lugares consagrados a
su ejercicio, o en los anexos y destinados a conservar las dichas cosas.
4. Sobre una persona, por arte de astucia o destreza, en un lugar público o abierto al público.
Comentario: Esta agravante se fundamenta en la particular peligrosidad del agente que, casi
siempre, es un delincuente habitual. El tipo estudiado incluye una referencia espacial: el hurto es
agravado si se comete en un lugar público o abierto al público. El dispositivo que comporta este
ordinal plantea dos hipótesis, en lo atinente a los medios de comisión: hurto con astucia y hurto
con destreza. El arte de astucia implica engaño, que debe dirigirse únicamente a distraer la
atención de la víctima. La destreza consiste en cualquier clase de habilidad, como soltura de
manos u otra agilidad. El hurto con destreza es el cometido por los llamados carteristas.
5. Apoderándose de los objetos o del dinero de los viajeros, tanto en los vehículos de tierra,
aeronaves o por agua, cualquiera que sea su clase, como en las estaciones o en las oficinas de las
empresas públicas de transporte.
Comentario: En particular, el dispositivo contenido en este numeral denota un sujeto pasivo
calificado en esta modalidad de hurto ya que especifica al viajero, es decir, la persona que se
traslada o se hace trasladar de un lugar a otro, y realiza un recorrido largo, mayor que el ordinario.
La acción, como en todas las formas del hurto, estriba en el apoderamiento de una cosa ajena que
está conformando o integrando el equipaje del viajero. El objeto material está constituido por las
cosas o el dinero de los viajeros. También el dispositivo contenido en este numeral agravado,
encierra una referencia espacial: el hurto debe perpetrarse en el propio vehículo ya sea avión,
ferrocarril, barco, o transporte público o en las estaciones, en las oficinas de las empresas de
transporte o en alguna de sus dependencias.
6. Apoderándose de los animales que estén en los establos, o de los que por necesidad se dejan
en campo abierto.
Comentario: Este ordinal prevé el hurto de ganado menor: ovino, porcino, cabrío, así como
también el hurto de ganado mayor: bovino y equino. Establece como circunstancia de lugar ya que
bien el ganado objeto del hurto puede estar en los establos o bien pastando en campo abierto. De
esta manera el numeral en cuestión establece el llamado “abigeato”, que puede determinar una
pluralidad de bestias o bien tratarse de una sola. La calificante en cuestión se refiere a la
protección del objeto y no sobre la cantidad.
7. Apoderándose de las maderas depositadas en las ventas de leña amontonadas en algún lugar, o
de materiales destinados a alguna fábrica, o de productos desprendidos del suelo y dejados por
necesidad u otro motivo en campo raso u otros lugares abiertos.
Comentario: El fundamento del dispositivo que contiene este agravante, estriba en la disminución
de la protección privada de la propiedad. El objeto material plantea tres hipótesis:
2. Los materiales destinados a alguna fábrica. Estos materiales: ladrillos, cemento, arena, cal,
entre otros, han de encontrarse en el sitio de la construcción. En un lugar abierto de una fábrica,
dejados bajo la confianza que implica el lugar por lo que existe una condición de disminución de la
defensa privada ejercida sobre los materiales indicados.
3. El producto desprendido del suelo y dejado por necesidad en el campo raso u otros lugares
abiertos.
Comentario: estos son objetos expuestos a la confianza pública los que están desprovistos de
custodia, sin más amparo que la probidad colectiva.
Hurto Calificado: establece unas series de situaciones que permite calificar la circunstancia de su
comisión, contemplado en el artículo 453 del Código Penal señala lo siguiente:
Artículo 453. La pena de prisión para el delito de hurto será de cuatro años a ocho años en los
casos siguientes:
En el hurto con abuso de confianza, el agente se apodera de la cosa que ha quedado a su merced,
gracias a la confianza que le tiene la víctima en los siguientes términos:
a) De un cambio de buenos oficios, en el cual una persona cree en la honradez de otra, tomando
en consideración las relaciones precedentes que existe entre ambas.
2. Si para cometer el hecho el culpable se ha aprovechado de las facilidades que le ofrecían algún
desastre, calamidad, perturbación pública o las desgracias particulares del hurtado.
Una perturbación pública: Se trata, en este caso, de las conmociones causadas por una multitud
en estado de confusión o alboroto: motín, asonada, huelga, disturbios violentos, en ocasión puede
surgir a consecuencia de situaciones que distraen la atención de la colectividad como un triunfo
deportivo, político entre otros.
La desgracia particular del hurtado: La causa de este infortunio puede ser física o moral Puede
tratarse de una enfermedad, como la epilepsia, la apoplejía o el infarto o un desmayo, también
puede surgir cuando la víctima es presa de un accidente o situación inesperada: colisión, perdió un
avión o tren, entre otras. En estos casos en agente se aprovecha de la confusión y se apropia los
bienes de la víctima.
3. Si no viviendo bajo el mismo techo que el hurtado, el culpable ha cometido el delito de noche o
en alguna casa u otro lugar destinado a la habitación.
Para que exista el hurto calificado que nos ocupa, pueden cumplirse alternativamente cualquiera
de las referencias: temporal o espacial.
4. Si el culpable, bien para cometer el hecho, bien para trasladar la cosa sustraída, ha destruido,
roto, demolido o trastornado los cercados hechos con materiales sólidos para la protección de las
personas o de las propiedades, aunque el quebrantamiento o ruptura no se hubiere efectuado en
el lugar del delito.
Comentario: para esta calificante se toma en cuenta que el hurto se haya perpetrado con fractura,
los fundamentos están presente en: la mayor peligrosidad y temeridad desplegada por el agente,
que demuestra audacia y especial decisión; y en atención a la mayor alarma social que puede
causar esta modalidad dentro del delito y sus causas. La acción consiste en destruir, romper,
demoler o trastornar los cercados, entendido esto a todo elemento que es colocado o
confeccionado con materiales sólidos para lograr la protección de las personas y sus propiedades.
Para que este presente esta calificante debe existir fractura del lindero protector, es preciso que la
fuerza consiente del agente ejerza sobre las cosas destinadas a proteger la propiedad, la venza y se
apodere del objeto de propiedad ajena.
5. Si para cometer el hecho o trasladar la cosa sustraída, el culpable ha abierto las cerraduras,
sirviéndose para ello de llaves falsas u otros instrumentos, o valiéndose de la verdadera llave
pérdida o dejada por su dueño, o quitada a éste, o indebidamente habida o retenida.
Comentario: El hurto con escalamiento es calificado porque el agente vence la defensa privada de
la propiedad, emplazada por la víctima para su protección mediante el empleo de medio artificial
o su agilidad. En estos casos, el agente demuestra una especial temibilidad, ya que por esta razón
el hurto despierta mayor alarma pública. El escalamiento puede ser interno cuando el agente lo
realiza al interior del inmueble con el fin de apoderarse del bien ajeno o externo. Para que exista la
calificante que analiza el presente dispositivo, es menester que el agente haya vencido los
obstáculos impuesto por la víctima mediante el empleo de medios artificiales o a fuerza de
agilidad personal que de otra forma no podrían ser superados. No existe hurto con escalamiento si
el muro es discontinuo, ello quiere decir que no cubre todos los sectores o linderos del inmueble
en donde se perpetro el delito. Tampoco rige esta calificante cuando el agente se vale de un
medio que el propietario mismo había dispuesto de forma evidente o dejada en ese sitio para su
acceso particular.
7. Si el hecho se ha cometido violando los sellos puestos por algún funcionario público en virtud de
la ley, o por orden de la autoridad.
Comentario: El fundamento de este dispositivo establece una calificante que aplica en razón a la
duplicidad de la lesión jurídica, ya que el delito ofende la propiedad y la Administración Pública.
Los sellos han de ser puestos por el funcionario competente, en virtud de la Ley, por orden de una
autoridad administrativa o judicial. Por ejemplo, en los casos de embargos, secuestros, incautación
entre otros, o en los casos de inventario de las cosas que forman parte de una herencia. Se comete
el delito rompiendo, despegando o cortando los sellos. Por su naturaleza, se evidencia que el
presente dispositivo establece la condición dolosa en su comisión.
Comentario: El fundamento de este dispositivo, determina una calificante que reside en la mayor
potencialidad delictiva y, por consiguiente, en la menor potencialidad defensiva, que entraña el
hurto en examen. El hurto es calificado cuando intervienen en su perpetración tres o más
personas reunidas, en calidad de autores o cómplices.
La diferencia con el agavillamiento radica en que en este dispositivo existe la calificante cuando
tres o más personas se ponen de acuerdo para cometer un hurto determinado, que en efecto
perpetran, o intentan perpetrar, reunidas, en cambio que el agavillamiento es un delito contra el
orden público.
Comentario: Para que opere la calificante, la cosa sustraída ha de estar destinada notoriamente a
la defensa pública o a la pública reparación o alivio de algún infortunio. Notorio es lo público y
sabido de todos, para que rija la calificante, es menester que el agente conozca las circunstancias
fácticas en las cuales se asienta aquélla, lo cual representa para el agente el elemento intelectual o
consiente del dolo. Con esta calificante se protege enérgicamente las cosas vinculadas a la
seguridad pública. Por otro lado, se tiene en cuenta la especial temibilidad de la persona que
sustrae las cosas que están destinadas a reparar o aliviar algún infortunio, las cosas que se recogen
para auxiliar a los damnificados por un terremoto, inundación, entre otras.
Si el delito estuviere revestido de dos o más de las circunstancias especificadas en los diversos
numerales del presente artículo, la pena de prisión será por tiempo de seis años a diez años.
Espigamiento en Fundo Ajeno: Se denomina también “hurto campestre” porque se lleva a cabo
sobre los frutos que se encuentran en un área campestre o rural. De manera que, el hurto
campestre recae sobre cosechas o frutos que al estar expuestos en un fundo quedan al aire libre y
sin protección respecto de terceros, sujetos a la confianza pública, ya que se conoce que existe un
dueño a quien le pertenece, por razón de lógica apreciación de las cosas.
Artículo 454. El que sin estar debidamente autorizado para ello, haya espigado, rateado o
rebuscado frutos en fundos ajenos, cuando en ellos no se hubiere recogido enteramente la
cosecha, será castigado con multa de cinco unidades tributarias (5 U.T.) a veinticinco unidades
tributarias (25 U.T.), a querella de parte. En caso de reincidencia, la pena será de arresto de tres a
quince días.
Comentario: La acción consiste en espigar, ratear o rebuscar frutos. Objeto material, Está
constituido por los frutos escapados a la cosecha, que aún no se ha recogido enteramente. Un
elemento del tipo en estudio requiere que el agente no esté autorizado para espigar en fundo
ajeno. El delito se consuma con el apoderamiento, lo mismo que el hurto. Por tanto, es admisible
la tentativa. Este delito es de acción privada, enjuiciable por querella de la parte agraviada.
Diferencias esenciales con otros delitos contra la propiedad.
1. El hurto se distingue del robo, porque en éste el agente se vale de violencias contra las
personas, como medio de apoderarse de la cosa. Sintéticamente: Robo = Hurto + violencia contra
las personas.
2. El hurto se diferencia de la estafa, puesto que en ésta el sujeto pasivo entrega la cosa al agente,
en virtud de que el último lo ha engañado e inducido en error. En la estafa, el consentimiento de la
Víctima está viciado.
Se comete también este delito cuando el hecho imputado recaiga sobre cosas que hagan parte de
una herencia aún no aceptada, y por el copropietario, el asociado o coheredero, respecto de las
cosas comunes o respecto de la herencia indivisa, siempre que el culpable no tuviere la cosa en su
poder. La cuantía del delito se estimará hecha la deducción de la parte que corresponde al
culpable.
Artículo 452. La pena de prisión por el delito de hurto será de dos a seis años, si el delito se ha
cometido:
3. Apoderándose de las cosas que sirven o están destinadas al culto, en los lugares consagrados a
su ejercicio, o en los anexos y destinados a conservar las dichas cosas.
4. Sobre una persona, por arte de astucia o destreza, en un lugar público o abierto al público.
5. Apoderándose de los objetos o del dinero de los viajeros, tanto en los vehículos de tierra,
aeronaves o por agua, cualquiera que sea su clase, como en las estaciones o en las oficinas de las
empresas públicas de transporte.
6. Apoderándose de los animales que estén en los establos, o de los que por necesidad se dejan
en campo abierto.
7. Apoderándose de las maderas depositadas en las ventas de leña amontonadas en algún lugar, o
de materiales destinados a alguna fábrica, o de productos desprendidos del suelo y dejados por
necesidad u otro motivo en campo raso u otros lugares abiertos.
Artículo 453. La pena de prisión para el delito de hurto será de cuatro años a ocho años en los
casos siguientes:
2. Si para cometer el hecho el culpable se ha aprovechado de las facilidades que le ofrecían algún
desastre, calamidad, perturbación pública o las desgracias particulares del hurtado.
3. Si no viviendo bajo el mismo techo que el hurtado, el culpable ha cometido el delito de noche o
en alguna casa u otro lugar destinado a la habitación.
4. Si el culpable, bien para cometer el hecho, bien para trasladar la cosa sustraída, ha destruido,
roto, demolido o trastornado los cercados hechos con materiales sólidos para la protección de las
personas o de las propiedades, aunque el quebrantamiento o ruptura no se hubiere efectuado en
el lugar del delito.
5. Si para cometer el hecho o trasladar la cosa sustraída, el culpable ha abierto las cerraduras,
sirviéndose para ello de llaves falsas u otros instrumentos, o valiéndose de la verdadera llave
pérdida o dejada por su dueño, o quitada a éste, o indebidamente habida o retenida.
6. Si para cometer el hecho o para trasladar la cosa sustraída el culpable se ha servido de una vía
distinta de la destinada ordinariamente al pasaje de la gente, venciendo para penetrar en la casa o
su recinto, o para salir de ellos, obstáculos y cercas tales que no podrían salvarse sino a favor de
medios artificiales o a fuerza de agilidad personal.
7. Si el hecho se ha cometido violando los sellos puestos por algún funcionario público en virtud
de la ley, o por orden de la autoridad.
Si el delito estuviere revestido de dos o más de las circunstancias especificadas en los diversos
numerales del presente artículo, la pena de prisión será por tiempo de seis años a diez años.
Artículo 454. El que sin estar debidamente autorizado para ello, haya espigado, rateado o
rebuscado frutos en fundos ajenos, cuando en ellos no se hubiere recogido enteramente la
cosecha, será castigado con multa de cinco unidades tributarias (5 U.T.) a veinticinco unidades
tributarias (25 U.T.), a querella de parte. En caso de reincidencia, la pena será de arresto de tres a
quince días.
Delito de Hurto tipificado en la Ley sobre El Hurto y Robo de Vehículos Automotores:
Este tipo penal establece una modalidad específica, que caracteriza inclusive circunstancias
agravantes autonomas, de igual forma contempla el desvalijamiento como una modalidad de esta
especie. Dentro de las circunstancias de su comisión establece la tentativa determinando para ella
una penalidad disminuida respecto al tipo penal general. La ley sobre el Hurto y Robo de vehículos
Automotores fue promulgada por La Comisión Legislativa Nacional de la Asamblea Nacional
Constituyente de 1999, en ejercicio de las atribuciones conferidas en el numeral 1 del artículo 6
del Decreto de la Asamblea Nacional Constituyente que estableció el Régimen de Transición del
Poder Público, dando cumplimiento a lo estipulado, en el para entonces reciente, texto
Constitucional aprobado.
La ley sobre el Hurto y Robo de vehículos Automotores, fue publicada en la Gaceta Oficial N°
37.000 del 26 de julio del año 2000, en referencia al Hurto de Vehículo señala en el artículo 1, lo
siguiente:
Comentario: en cuanto al cómputo de la pena para establecer el término medio se ubica en seis
años; en relación a la estructura básica el tipo penal en cuestión se encuentra ubicado dentro del
Núcleo Rector del Hurto; El Verbo Rector establece una forma simple siendo: apoderarse; El Sujeto
Activo es Indeterminado; El Objeto Material está constituido por los vehículos Automotores; El
bien jurídico tutelado es el derecho a la propiedad establecido en el artículo 115 de la Constitución
de la República.
El legislador hace énfasis en la condición de ajenidad de la cosa hurtada cuando señala que, “El
que se apodere de un vehículo automotor perteneciente a otra persona natural o jurídica”, de
igual forma establece la condición subjetiva que demarca la voluntad de aprovechamiento propio
o ajeno. Por otra parte, señala que la acción debe realizarse sin el previo consentimiento de su
dueño o poseedor, lo cual es evidente y necesario para ubicar este tipo penal dentro del núcleo
rector del hurto.
Artículo 2.- Circunstancias Agravantes. La pena a imponer para el hurto de vehículo automotor
será de seis a diez años de prisión si el hecho punible se cometiere:
Comentario: La Ley de tránsito terrestre establece las categorías de trasporte público, colectivos o
de carga, el tipo penal establece de forma general con esta calificante que se protege
enérgicamente los vehículos destinados al transporte público. Por otro lado, se tiene en cuenta la
especial temibilidad de la persona que sustrae bienes que son de utilidad a la colectividad.
Comentario: Este dispositivo, establece una agravante para el determinador o autor intelectual del
hurto de vehículos automotores, presupone que el agente determinador del hurto es un mayor de
edad, el cual emplea para perpetrar su acción a niños o adolescentes, con lo que no se deja a un
lado la responsabilidad penal del adolescente que sirvió de medio en la comisión del hecho
punible.
5. Por dos o más personas que se hubieren reunido o puesto de acuerdo para realizarlo.
Comentario: El fundamento de este dispositivo, determina una calificante que reside en la mayor
potencialidad delictiva y, por consiguiente, en la menor potencialidad defensiva, que entraña. El
agravante opera cuando intervienen en su perpetración dos o más personas reunidas, en calidad
de autores o cómplices.
6. Sobre vehículos pertenecientes a los cuerpos policiales de seguridad pública o sobre vehículos
destinados al transporte de valores.
Comentario: Para que opere el agravante, el vehículo sustraído debe estar adscrito a un cuerpo
policial, de seguridad pública, o bien destinado al transporte de valores. Debe ser notorio el
carácter público y por tanto evidente, sabido o conocido el carácter particular del vehículo. Para
que rija la calificante, es menester que el agente conozca la particular vinculación que existe entre
el vehículo objeto de la acción y el órgano o dependencia de adscripción. Con esta calificante se
protege enérgicamente las cosas vinculadas a la seguridad pública. Por otro lado, se tiene en
cuenta la especial temibilidad de la persona que sustrae las cosas que están destinadas a estos
fines.
7. Con escalamiento, llaves sustraídas o falsas, ganzúas o cualquier otro instrumento similar, o
violando, o superando seguridad electrónica u otras semejantes.
Comentario: El fundamento de este agravante establece modalidades empleadas para superar la
especial protección impuesta por el dueño o tenedor y supera una cercha o muro o emplea una
llave sustraída o falsa, ganzúa que permite vulnerar la protección. Es preciso que el autor haya
sobrepasado el lindero protector mediante el escalamiento o abierto la cerradura, es decir, que la
llave o la ganzúa haya actuado sobre el mecanismo interno de la tecnología empleada para vencer
la protección del vehículo automotor.
Comentario: El fundamento de la calificante descansa, por una parte, en la deslealtad del agente
para con su víctima y, por la otra, en las especiales facilidades de que ha gozado el sujeto activo
para cometer el hurto del vehículo automotor.
En el hurto de vehículo automotor con abuso de confianza, el agente se apodera del vehículo que
ha quedado a su merced, gracias a la confianza que le tiene la víctima, en el cual una persona cree
en la honradez de otra, tomando en consideración las relaciones precedentes que existe entre
ambas. También puede ocurrir que tal confianza emerja de un arrendamiento del vehículo, ya que
una interpretación sistemática de la ley, nos convence de que el legislador se refiere a la
prestación de servicios, concretada en una relación laboral, contrato de trabajo o bien contrato de
servicio en el cual está vinculado algún vehículo automotor.
Comentario: Este agravante tiene un fundamento o razón objetiva, que está representado por una
parte, en la disminución de la posibilidad de defensa propia o privada que puede ejercer la victima
contra el ataque a su propiedad representada en el vehículo automotor y de forma o razón
subjetiva, la temibilidad o peligrosidad especial que pone de manifiesto la voluntad de quien se
vale del infortunio común o individual para hurtar un vehículo en medio de una situación de
calamidad. En estos casos, el sujeto activo se aprovecha, para cometer el delito, de una desgracia
que pudo motivar el abandono del vehículo automotor que es expuesto, por las circunstancias, a
la disposición del delincuente.
10. Por persona disfrazada, ilícitamente uniformada, usando indebidamente identificación falsa o
hábito religioso.
Comentario: El dispositivo para este agravante se fundamenta en la lesión causada a la
credibilidad que han de merecer los funcionarios públicos y los documentos de identidad, para el
normal desarrollo de la vida colectiva. La simulación de autoridad es, en este caso, constituye el
medio que facilita el apoderamiento del vehículo, objeto material del delito. El otro medio de
perpetración del hurto agravado de vehículo que consagra este numeral, es la utilización de
documentos de identidad bien sea pasaportes, cédulas u otro falsificados.
Comentario: ello implica que para que tal delito se configure, es menester que el apoderamiento
tenga por objeto partes o piezas de un vehículo, entendiéndose por tales, las que integran el
sistema de energía por ejemplo, o el de lubricación o de enfriamiento o de combustible,
embrague, frenos, el de encendido, entre otros, cada uno de los cuales está compuesto de piezas
indispensables y esenciales para su funcionamiento. Es evidente que no necesariamente quien
perpetre el desvalijamiento puede estar incurso en el delito de hurto de vehículo automotor, por
lo que el delito de desvalijamiento representa una forma autónoma e independiente de la otra.
El núcleo rector de este tipo penal se encuentra dentro del hurto; el verbo rector de la acción es:
sustraer; el sujeto activo es indeterminado; el sujeto pasivo es indeterminado; el objeto material
tutelado está constituido por los vehículos automotor y; el bien jurídico tutelado es el derecho de
propiedad establecido en el artículo 115 de la Constitución de la República.
Así mismo establece otra condición a quien alternativamente detente, esconda o comercialice las
partes o piezas sustraídas a un vehículo automotor, aun cuando no haya tomado parte en el delito,
lo cual representa una estructura complementaria de la norma que configura otra forma típica
autónoma e incompleta ya que hace una remisión a la disposición anterior contenida en el mismo
artículo para establecer idéntica pena.
Esta norma penal, se encuentra igualmente ubicada en el núcleo rector del hurto, presenta de
forma alternativa tres verbos rectores de la acción del agente o sujeto activo que a saber son:
detentar, esconder o comercializar; el sujeto activo es indeterminado; el sujeto pasivo es
indeterminado; el objeto material tutelado está constituido por los vehículos automotor y; el bien
jurídico tutelado es el derecho de propiedad establecido en el artículo 115 de la Constitución de la
República.
De igual forma la ley sobre el Hurto y Robo de vehículos Automotores establece en su artículo 4, la
tentativa como forma inacabada del delito en los términos siguientes:
Artículo 4.- Tentativa de Hurto. Quien iniciare la ejecución del delito de hurto de vehículo
automotor, aun cuando no se produzca la consumación del mismo, será castigado con pena de dos
a cuatro años de prisión.
En cuanto a la frustración, opera los parámetros generales que contiene el Código Penal en su
articulado.
El Hurto de Información: establecido en la Ley Especial contra los Delitos Informáticos, aprobada a
finales del año 2001, significa un gran avance en materia penal el país, visto que permite la
protección de bienes vinculados a las tecnologías de la información, persiguiendo todas aquellas
conductas antijurídicas que se realicen en este campo. De forma particular configura en el artículo
13 el hurto de información en los términos siguiente:
Artículo 13: Hurto. El que a través del uso de tecnologías de información, acceda, intercepte,
interfiera, manipule o use de cualquier forma un sistema para apoderarse de bienes o valores
tangibles o intangibles de carácter patrimonial sustrayéndolos a su tenedor, con el fin de
procurarse un provecho económico para sí o para otro, será sancionado con prisión de dos a seis
años y multa de doscientas a seiscientas unidades tributarias.