Monólogos de Héroes
Monólogos de Héroes
Monólogos de Héroes
Una vez que el ejército realista se ve prácticamente cercado por las fuerzas guerrilleras
patriotas, se inició una investigación a fondo para averiguar quién era la persona
encargada de dar informes. Así es como soy detenida por un sacerdote español. Una
vez presa declaré con rotundidad que efectivamente sirvo a la causa libertadora y que
fui yo la persona que dio los informes del movimiento del ejército realista. Se
me preguntó quién era la persona que había redactado las cartas enviadas a mi
esposo; pero me negué a revelar los nombres de los componentes de esa vasta
organización de patriotas ayacuchanos. Rechacé toda clase de ofertas y de amenazas;
y así, con paso firme, con paso sereno me dirigí hasta la Plazuela del Arco, lugar donde
fui fusilada.
Ejercí funciones de gobierno con el título de Protector de la Libertad del Perú. Entre
mis realizaciones más relevantes están la creación de la bandera y el himno de la
nueva nación; fundé la Escuela Normal y la Biblioteca Nacional, a la que doné mis
libros; decreté la libertad de los hijos de esclavos nacidos después de la declaración de
la independencia y extinguí los tributos que pagaban los indígenas. Mientras
continuaban las acciones militares contra las fuerzas realistas, formé la primera
escuadra peruana y el ejército nacional.
TUPAC AMARU
Mi nombre es José Gabriel Condorcanqui, tras ver los abusos impuestos por los
españoles a los indígenas decido cambiar mi nombre a Tupac Amaru II y liderar la
rebelión para la libertad contra el imperio español en la que acompañaban mestizos,
criollos, indígenas y libertos negros.
Acompañado de mi esposa Micaela Bastidas y otros valientes luchamos para conseguir
la libertad del indio, pero nuestras fuerzas fueron derrotadas y en abril del año 1781
fui apresado. Ejecutaron a mi familia para que hablara y me sometieron a las torturas
más atroces, llegando incluso a estirar mis extremidades con caballos, mis verdugos
decidieron acabar con el inhumano espectáculo de tortura ordenando que me
cortaran la cabeza. Cumplida la sentencia, se envió cada parte de mi cuerpo a un
pueblo de la zona rebelde, en un intento de dar a la ejecución un valor ejemplarizante.
FRANCISCO BOLOGNESI
Mi nombre es Francisco Bolognesi, fui un coronel peruano, cuando explotó la Guerra del
Pacífico fui llamado para tomar las amas y defender la patria en la Batalla de Arica en la que
Perú y Bolivia se enfrentaron contra Chile.
Después de la derrota de los ejércitos de Perú y Bolivia en la batalla de Tacna, el sur del país
quedó casi del todo perdido en manos chilenas. Únicamente en Arica quedaba una guarnición
de 1.600 hombres a mi mando, que, aislada por tierra y por mar, estaba condenada a caer. La
noticia del desastre de Tacna había tardado en saberse en Arica por lo que no pude cobrar
conciencia de la magnitud de la derrota y mantuve la ilusión de que no todo se habría perdido.
Escribí varios telegramas a Lizardo Montero a Moquegua y Arequipa, prometiendo que la plaza
no se rendiría, pero pidiendo instrucciones y en especial la llegada de las fuerzas. No recibí
respuesta. El 5 de junio de 1880 un parlamentario del ejército chileno se acercó a pedir la
rendición de la plaza a fin de evitar un derramamiento de sangre ante tal requerimiento
repliqué las palabras por las que seré recordado en la historia peruana: "Tengo deberes
sagrados que cumplir, y los cumpliré hasta quemar el último cartucho". Fui ultimado por un
culatazo del ejercito enemigo el 7 de junio de 1880.