La historia trata sobre una niña llamada Hasel que no se cepillaba los dientes. Su mamá le advirtió que si no lo hacía se le caerían los dientes, pero Hasel no le hizo caso. Después de una semana se le cayeron unos dientes y empezó a cepillarse los dientes todos los días. Una noche, mientras sus padres no estaban, el hada de los dientes le dejó un osito de peluche y un billete de cinco quetzales debajo de su almohada como recompensa por cepillarse los d
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La historia trata sobre una niña llamada Hasel que no se cepillaba los dientes. Su mamá le advirtió que si no lo hacía se le caerían los dientes, pero Hasel no le hizo caso. Después de una semana se le cayeron unos dientes y empezó a cepillarse los dientes todos los días. Una noche, mientras sus padres no estaban, el hada de los dientes le dejó un osito de peluche y un billete de cinco quetzales debajo de su almohada como recompensa por cepillarse los d
La historia trata sobre una niña llamada Hasel que no se cepillaba los dientes. Su mamá le advirtió que si no lo hacía se le caerían los dientes, pero Hasel no le hizo caso. Después de una semana se le cayeron unos dientes y empezó a cepillarse los dientes todos los días. Una noche, mientras sus padres no estaban, el hada de los dientes le dejó un osito de peluche y un billete de cinco quetzales debajo de su almohada como recompensa por cepillarse los d
La historia trata sobre una niña llamada Hasel que no se cepillaba los dientes. Su mamá le advirtió que si no lo hacía se le caerían los dientes, pero Hasel no le hizo caso. Después de una semana se le cayeron unos dientes y empezó a cepillarse los dientes todos los días. Una noche, mientras sus padres no estaban, el hada de los dientes le dejó un osito de peluche y un billete de cinco quetzales debajo de su almohada como recompensa por cepillarse los d
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Las hadas de los dientes de hasel
Había una vez hasel no se cepillaba los dientes, entonces
su mama le dijo que se cepillara los dientes si no se le iban a caer los dientes; y eso es muy importante cepillarse los dientes. Entonces hasel no le hizo caso a la mama de no cepillarse los dientes. Luego de una semana se le cayeron unos dientes y después se dio cuenta lo que le decía su mama y empezó a cepillarse y a cuidárselos. Y después empezaron a crecerle sus dientes cada semana porque ella se los cepillaba. Luego los padres de hasel salieron en la noche y ella se quedó en la casa solita. Ya era hora de dormir y hasel se fue a cambiar y a cepillarse sus dientes, se acostó y luego llego el hada de los dientes, le dejo una sorpresa debajo de su almohada y era un osito de peluche y un billete de cinco quetzales. Y este cuento se ha acabado. Fue una linda historia.