Escabiosis
Escabiosis
Escabiosis
ESCABIOSIS
SARNA HUMANA
Las lesiones de esta enfermedad van a estar caracterizadas por túneles epidérmicos y pápulas que
al paciente le pican, y se complica con una infección bacteriana. El prurito se agudiza en la noche.
Existe descamación es rica en parasito cuando hay exceso de ácaros. Las lesiones se presentan en
cualquier parte de la piel EXCEPTO en la cara, el cuero cabelludo, en las palmas y en las plantas de
los pies. Tiene una gran predilección por los pliegues interdigitales, Los pliegues de la muñeca,
codos, las zonas genitocrurales y perineales. Por el rascado y el daño de la epidermis, se presentan
infecciones secundarias de tipo piodermitis o impétigos.
Hay una forma clínica más severa que se conoce con el nombre de Sarna noruega o sarna costrosa.
Esta sarna se va a dar de una manera diseminada en casi todo el cuerpo del paciente y se va a
caracterizar por abundante descamación, hiperqueratosis engrosamiento de la piel), la vamos a
ver principalmente en personas con enfermedades debilitantes, como la diabetes, las personas
que tienen lepra lepromatosas, desnutrición y algún grado de inmunodeficiencia. Lo normal no es
que todo el cuerpo este lleno de sarna, cuando sea así el paciente tiene un compromiso
inmunológico.
El parásito realiza su ciclo evolutivo completo, desde huevo hasta adulto, en el huésped
humano en un plazo de una a tres semanas. Una vez fecundada, la hembra excava una
galería en el espesor de la capa córnea de la epidermis, en la que va depositando los
huevos, que son grandes (150-180 micrones)
El parásito puede penetrar en la piel alrededor de una hora, en pacientes que nunca hayan
tenido sarna o escabiosis. Las personas con síndrome de Sarna noruega o costrosa es
mucho mas contagiosa por la cantidad que hay en la piel, y puede hacer una especie de
vuelo y posicionarse en la piel de otras personas que están ahí cercanas.
• Psoriasis
• Ictiosis
• Hiperqueratinosis folicular
Para ver los canalitos, túneles o galería es importante que nos auxiliemos con una lupa.
Epidemiología y distribución son amplias y No está muy clara la epidemia, pero en el pasado se le
atribuyo a la pobreza, el hacinamiento, debido a la movilización por la guerra.
Periodo de incubación: hace una diferencia entre las personas con exposición previa y las que
nunca han estado expuestas. Sin exposición previa al ácaro en cuestión de 2-6 semanas antes de la
aparición del prurito. Y las personas que han estado infestadas anteriormente aparecen los
síntomas entre 1-4 días de la nueva exposición. Esta no nos deja ninguna inmunidad.
PATOGENIA
Reacciones alérgicas
Algunas especies de ácaros son capaces de provocar intensa sensibilización alérgica del
huésped humano, cuando éste entra en contacto con ellos o los inhala accidentalmente.
Excepto la sarna, porque no se presenta en la palma de las manos. (aunque en la realidad,
aunque el libro menciona que se respeta, un paciente con sarna puede presentar ese
síntoma, en los lactantes si se ve en las zonas respetadas la sarna)
PATOLOGÍA
Directas. Corresponden principalmente a las galerías o túneles provocado por las hembras en el
estrato córneo de la epidermis y la reacción local frente a este daño.
Erupción Micro-papulosa y folicular, cubriendo las zonas vecinas a los surcos acarinos,
pero afectando también otras áreas.
LESIONES DIRECTAS
LESIONES INDIRECTAS
Diagnóstico
Acaro-Test
Epidemiología
Es una afección cosmopolita, pero más frecuente en los países o zonas temperadas y frías
del globo.
Podemos encontrar esta infección en un hotel. Todos estamos susceptibles a contraer esta
enfermedad.
Gamexano al 1%.
Se utiliza friccionando toda la superficie corporal, desde el mentón a los pies, mediante
brochas, compresas o con un rociador a presión. Y repetir a los 7 días.
Vaselina Azufrada
Benzoato De Bencilo
Decametrina,
Generalidades
Manifestaciones clínicas
A. Síntomas y signos Los síntomas pueden incluir prurito, debilidad, malestar general, fiebre
y pérdida de peso. Los escalofríos son notorios. El eritema y la descamación son extensos.
Puede presentarse alopecia y caída de las uñas. La linfadenopatía generalizada quizá se
deba a linfoma o leucemia o tal vez sea reactiva. Las mucosas no se afectan.
B. Datos de laboratorio Se necesita una biopsia de piel y ésta muestra las alteraciones de
una dermatitis inflamatoria específica, o de linfoma cutáneo de linfocitos T. En el síndrome
de Sézary es posible que los leucocitos periféricos muestren reordenamiento clonal del
receptor de linfocitos T.
Diagnóstico diferencial
Complicaciones
Los pacientes con eritrodermia exfoliativa inflamatoria generalizada pueden tener debilidad
(pérdida de proteínas) y deshidratación, o tal vez surja septicemia.
Tratamiento
Pronóstico
Casi todos los pacientes se recuperan por completo o mejoran de manera considerable
con el tiempo, pero en ocasiones necesitan tratamiento prolongado. Es inusual el
fallecimiento cuando no hay un linfoma cutáneo de linfocitos T. En una minoría de
enfermos persiste la eritrodermia por periodos indefinidos.
Capítulo 54
SARNA Y OTRAS ACAROSIS
La sarna o escabiosis es una ectoparasitosis de tipo familiar, que ha afectado al hombre desde la
antigüedad, pero no fue hasta 1687 cuando se la relacionó con la presencia de un ácaro en la piel.
Sin embargo, sólo a fines del siglo XIX, se aceptó que el Sarcoptes scabiei es su agente causal. A lo
largo de la historia, se han descrito brotes epidémicos de sarna cada 20-30 años,
aproximadamente, coincidiendo con períodos bélicos o cambios en el comportamiento de la
sociedad. Unos de los últimos brotes informados en Europa y Norteamérica es el de la década de
los años 60, el cual habría comenzado entre 1963-1964.
ARCOPTES SCABIEI
Sarcoptes scabiei es un ácaro del suborden Acaridida, de tamaño pequeño, redondeado u ovalado,
no segmentado, aplanado dorsoventralmente y con cuatro pares de patas cortas. Blancuzcos,
apenas visibles a simple vista, ya que el tamaño de las hembras es de 300-500 µm de largo por
230-420 µm de ancho y los machos miden sólo 213-285 µm de largo por 162-210 µm de ancho.
Están cubiertos por una cutícula muy fina en la cual se dibujan líneas ondulantes paralelas y
presentan cerdas o pelos salientes. No tienen ojos ni tráqueas; las piezas bucales consistentes en
un par de quelíceros y un par de pedipalpos triangulares, están fijados a un gnatosoma, situado en
la parte frontal del cuerpo, dándole aspecto de cabeza. Las patas son cortas y robustas, dispuestas
en dos pares anteriores y dos pares posteriores, están provistas de órganos a modo de ventosas
situados en los extremos de unos largos pedicelos no articulados en los dos primeros pares de
patas de las hembras y en primero, segundo y cuarto par de patas de los machos. Las otras patas
terminan en cerdas largas (características de la especie).
Tienen un ano terminal en ambos sexos. En la hembra la apertura de la bolsa copulatriz está en el
lado dorsal, algo anterior a la región anal, presentando una abertura genital por donde elimina los
huevos, ubicada en la línea media de la superficie ventral. El aparato genital masculino está en la
linea media de la región ventral, entre el ano y la parte donde emerge el tercer y cuarto par de
patas.
El ciclo del parásito se realiza en el estrato córneo de la epidermis, donde las hembras son
fecundadas, ya sea en la superficie de la piel o en el interior de pequeñas galerías en el estrato
córneo. Posteriormente las hembras excavan estrechas galerías o túneles qué pueden medir entre
unos pocos mm hasta tres cm de longitud (diariamente el parásito excava entre 0,5-5 mm), en
donde va colocando sus huevos y deyecciones en un lapso de 4-6 semanas, tiempo al cabo del cual
muere.
Los huevos que la hembra coloca, en número de dos a tres por día, con un total de treinta y cinco
a cincuenta miden 160 µm de longitud, tienen forma ovalada y de ellos eclosionan larvas
hexápodas al cabo de 3-8 días, que se parecen a los adultos, pero con ausencia del cuarto par de
patas. Estas larvas hexápodas emergen a la superficie de la piel y se transforman en ninfas
octópodas al cabo de 2-3 días y mudan en dos oportunidades antes de transformarse en adultos
machos y hembras. Todas las formas juveniles, tanto larvas como ninfas, pueden excavar túneles
en la epidermis, donde se alimentan de detritus celulares. La duración de los dos períodos ninfales
es de 3-6 días, por lo cual el desarrollo completo del ácaro es de 8-14 días. La hembra vive 4-6
semanas, en tanto que el macho muere después de la cópula.
Epidemiología
La sarna es una ectoparasitosis cosmopolita, más frecuente en países templados y fríos. Por ser su
mecanismo de transmisión directo, es una enfermedad de tipo familiar o de grupos cerrados, en
los cuales se observa que la posibilidad de contagio es de un 73-85%, siendo, por lo tanto,
importante los factores de hacinamiento y promiscuidad. La posibilidad de infección a través de
fomites es escasa. La higiene personal necesariamente no evita el contagio, pero puede variar la
forma de presentación clínica, haciendo la enfermedad más leve y de más difícil diagnóstico.
Su prevalencia fue muy alta en la antigüedad por la falta de higiene y de tratamiento específico. En
los últimos años, ha disminuido por los cambios higiénicos, estándares de vida, tratamientos más
adecuados y probablemente, por aumento de la población inmune a adquirir la enfermedad. En
Estados Unidos, durante el período 1937- 1983, presentó variaciones en su incidencia (5,4% en
1945; 0,0% en 1955; 1,0% 1960; 3,6% en 1976, con una reducción en los años posteriores). En
Chile, estudios realizados en 1975 y 1981 demostraron una prevalencia en la ciudad de Santiago
de 5,0% y 3,0%, respectivamente. Actualmente es de 1,0%. Se han producido brotes epidémicos
en diferentes regiones del país que han sido eficientemente controlados.
Patología
Los antígenos del cuerpo del ácaro, sus deposiciones y secreciones son responsables de las
reacciones de hipersensibilidad en la sarna. Se ha demostrado que hay depósito de complejos
inmunes tanto en las lesiones inflamatorias como en los nódulos escabiosos.
Clínica
Lesiones directas.
Perla escabiosa y surco acarino. La perla escabiosa o vesícula perlada de Bazin, son
lesiones vesiculares de no más de 1 mm de diámetro que aparecen en el sitio donde el
ácaro hembra se introduce al cavar un túnel, provocándose una reacción inflamatoria con
engrosamiento de la capa córnea, aumento en el número y profundidad de las papilas
dérmicas y formación de una vesícula con contenido líquido en el epitelio. Los surcos
acarinos constituyen la manifestación externa de los túneles que realizan las hembras en
el estrato córneo de la epidermis y su respectiva reacción inflamatoria; se forman
trayectos lineales eritematosos, de tipo serpiginoso, que pueden medir milímetros o
centímetros (Lámina 35). Estas lesiones se ubican desde el cuello a los pies, distribuidas en
los pliegues corporales o donde la piel es más delgada: región interdigital de los dedos de
las manos, cara anterior de muñecas, cara interna de brazo, antebrazo y axila, surco
submamario, flancos, región genital, surco subglúteo y cara interna de muslos, rodillas y
tobillos. En un adulto inmunocompetente no se ven lesiones en palma de manos, planta
de pies ni espalda.
Lesiones indirectas
Son lesiones de distribución bilateral y simétrica, intensamente pruriginosas, más
generalizadas, habitualmente papulares y no necesariamente asociadas a los sitios que
invade el ácaro. Además de las pápulas se pueden observar escamas, vesículas-bulas,
erupción micropapulosa, nódulos, costras y escoriaciones por grataje. Los nódulos
acarinos se pueden observar en codos, axilas, flancos, escroto, pene y pliegue subglúteo,
habitualmente en pacientes con antecedentes atópicos. El cuadro clínico se caracteriza
por el prurito que no aparece hasta después de 15-50 días de la infestación por ser una
reacción de hipersensibilidad; en tanto en las reinfestaciones el prurito aparece entre las
24 a 48 horas después del contagio. Este cuadro que se observa en el paciente adulto
inmunocompetente, es diferente a lo observado en niños o pacientes inmunodeficientes.
Existe también la "sarna del limpio", en la que, a pesar de los hábitos de limpieza del
paciente, puede existir prurito, pero prácticamente no se observan lesiones. También se
ha descrito "la sarna del incógnito", en la cual, por error diagnóstico médico, las lesiones
están modificadas por el tratamiento y uso de corticoides tópicos y/o sistémicos. La sarna
en los niños pequeños o lactantes, aunque puede presentar el mismo cuadro clínico de la
sarna de un adulto, tiene ciertas diferencias clínicas probablemente provocadas por la
diferente distribución de las unidades pilosebáceas, el grosor del estrato córneo y la
disminución de la producción de sebo. Hay lesiones en cara, cuello, espalda, región
retroauricular, palma de manos y planta de pies. También se ha descrito, una complicación
de la sarna en los niños como es la acropustulosis palmo-plantar en la cual hay pápulas y
vesículopústulas estériles, intensamente pruriginosas que pueden involucionar
espontáneamente después de meses o años, pues no responden a los antihistamínicos ni a
los corticoides.
La sarna del paciente inmunodeficiente (pacientes con SIDA, leucémicos, en
quimioterapia, desnutridos, diabéticos, con defectos inmunológicos, con trastornos
neurológicos y en niños mongólicos), es la denominada sarna noruega o costrosa, nombre
que ha recibido después de su primera descripción realizada en leprosos de Noruega en
1852. Se caracteriza por una hiperqueratosis de la epidermis, poco pruriginosa, en la cual
se observan costras grisáceas, gruesas y adherentes, ocasionalmente sobre un fondo
eritematoso, ubicadas en las superficies no flexoras, pecho, espalda, cabeza, detrás de las
orejas, palmas de manos y plantas de pies. Frecuentemente se comprometen los lechos
ungueales de manos y pies, observándose uñas engrosadas, que podría confundir el
diagnóstico con una onicomicosis. Otra característica importante es su alta contagiosidad,
porque debajo de cada costra existen millares de ácaros que pueden ser fácilmente
transmitidos, aunque el contacto sea mínimo.
Complicaciones
Entre las complicaciones de la sarna son frecuentes las dermitis e incluso cuadros de urticaria y
eritema polimorfo. Es frecuente observar en mujeres nulíparas la dermitis del pezón, con lesiones
periareolares de las mamas que incluyen desde pápulas eritematosas intensamente pruriginosas
hasta lesiones eritematosas y resumantes de toda la mama. Otra complicación frecuente
provocada por el intenso grataje, son las piodermias que incluyen el impétigo, celulitis, linfangitis e
incluso glomerulonefritis aguda dependiendo del agente causal. La mayoría de las lesiones son
primariamente causadas por Streptococcus pyogenes y secundariamente invadidas por
Staphylococcus aureus. La glomerulonefritis aguda fue asociada sólo en 1954 a las sarnas
infectadas, siendo provocada por el Streptococcus pyogenes de la cepa M-55 (cepa nefrotóxica).
Diagnóstico
El ácaro test es un examen directo que demostrará la presencia de S. scabiei, restos de ácaros,
huevos o deyecciones. Originalmente se usaba una cinta adhesiva transparente que se adosaba
sobre zona escarificada y luego se colocaba sobre un portaobjeto y se miraba al microscopio.
Ultimamente se ha mejorado el rendimiento de esta técnica raspando la epidermis con un bisturí,
recogiendo los restos epidérmicos obtenidos sobre un portaobjeto, agregando KOH al 10%,
dejando macerar. unos minutos, luego de los cuales se cubre con una laminilla y se mira al
microscopio. El rendimiento de esta técnica varía entre el 60 y el 70%, dependiendo del sitio de la
toma de muestra, que debe ser en una perla escabiosa, surco acarino o nódulo escabioso y de la
experiencia del microscopista. Por lo tanto, un ácaro test positivo confirma el diagnóstico, en tanto
que uno negativo no lo descarta. El rendimiento de este examen es máximo en la sarna noruega,
debido a los miles de ácaros que están parasitando al hospedero; en cambio, en la sarna habitual
donde no hay más de 30-50 ácaros provocando todo el cuadro, el rendimiento es menor.
La biopsia de piel no se utiliza de rutina y suele efectuarse sólo con fines docentes o por error
diagnóstico. Tiene características especiales en la sarna noruega en donde, además de la
espongiosis e hiperqueratosis, se observa gran cantidad de ácaros.
Diagnóstico diferencial
Tratamiento
Es fundamental que sea dirigido al enfermo, a la familia y a los contactos directos. Existen
numerosos tratamientos en la actualidad, pero se debe elegir el adecuado al paciente,
dependiendo de su edad, presencia de escoriaciones o infecciones y el tipo de sarna para lograr
una mayor eficiencia y una menor toxicidad. Los medicamentos más utilizados son:
Lindano al 1 %.
Es un excelente insecticida de efecto residual, permanece activo durante un mes si no se le
retira de la piel. Un 10% de lo aplicado se absorbe, va a la sangre, atraviesa la barrera
hematoencefálica y se excreta por la leche materna y por la orina. Es neurotóxico y puede
provocar además anemia aplástica y otras discrasias sanguíneas por aplicaciones múltiples o
ingestión accidental. Se aconseja no usar en lactantes menores, personas anoréxicas,
ancianos, atletas, mujeres embarazadas y durante el período de lactancia. Una indicación
adecuada de lindano tiene una eficacia de 90-95%. Se ha demostrado resistencia al lindano en
pacientes imnunodeprimidos. La aplicación debe efectuarse al paciente y grupo familiar al
mismo tiempo, desde el mentón hasta los pies, con guante de goma o brocha (no usar algodón
o telas), y posterionnente deben vestirse en forma inmediata para que la ropa se impregne
con el insecticida, el que deberá permanecer sobre la superficie corporal por lapso de tres días
(sin bañar ni cambiar de ropa); luego de lo cual se indica bañó, cambio de ropa de vestir,
sábanas y toallas, las que deben lavarse o hervirse. Se debe repetir la aplicación de lindano al
séptimo día, debiendo permanecer sobre la superficie corporal por otros tres días. Este
esquema de tratamiento está basado en el ciclo del parásito, pues el lindano mata formas
juveniles y adultas, pero como no es ovicida, no destruye los huevos, pero a medida que éstos
eclosionan (3-8 días), la presencia del lindano sobre la piel destruye a las larvas que van
emergiendo a la superficie de la piel.
Existen otros esquemas de tratamiento con lindano como, por ejemplo, aplicarlo por tres días
continuos, con baño previo, posteriormente cuatro días de descanso y otras tres nuevas
aplicaciones, lo que expone a mayor neurotoxicidad y dermitis por el mayor volumen de
lindano aplicado.
Prevención
La educación para la salud que explique los mecanismos de transmisión debiera ser difundida
permanentemente a las poblaciones de riesgo para que eviten el contacto con personas
sospechosas de tener la parasitosis. Es fundamental realizar un diagnóstico oportuno y un
tratamiento eficaz. El registro y denuncia de los casos debiera ser obligatorio para prevenir nuevos
brotes epidémicos.
Son artrópodos del orden Acarina, de la clase Arachnida, que abarca un gran número de especies,
la mayoría con cuatro pares de patas, dimorfismo sexual. Como no existe división de su cuerpo en
cabeza, tórax y abdomen, su cuerpo tiene una forma ovalada o redonda y en su extremo anterior,
semejando una cabeza, están sus piezas bucales (quelíceros y pedipalpos). No tienen alas y sus
patas están formadas por seis o siete segmentos (coxa, trocanter, genua, tibia y tarso).
Generalmente presenta cuatro fases en el desarrollo de su ciclo evolutivo: huevo, larva, ninfa y
adulto. Existen en la naturaleza algunos subórdenes de vida libre que se alimentan de residuos
orgánicos del ambiente y otros que pueden ser zooparásitos y fitoparásitos que son capaces de
provocar enfermedad en el hombre.
Demodicidosis
Producida por ácaros que viven en los folículos pilosos y en las glándulas sebáceas de los
mamíferos. Los géneros Demodex y Trombicula son parásitos del hombre. Del género Demodex se
han descrito para el hombre dos especies: Demodexfolliculonim y Demodex brevis, ácaros del
folículo piloso de la cara, pestañas, cejas, barba o glándulas sebáceas anexas; tienen un tamaño de
100-400 mm, con aspecto vermiforme (cabeza corta y ancha, cuatro pares de patas cortas y un
abdomen prolongado). Se ubican principalmente en la cara, alrededor de la nariz y de los ojos en
cantidad pequeña (no más de cinco en una muestra de una pápula examinada), pero un aumento
exagerado de su número puede provocar cuadros inflamatorios más severos y crónicos
denominados demodicidosis. Este ácaro también puede agravar los cuadros de acné rosácea e
incluso, en los pacientes con SIDA, puede provocar lesiones papulonodulares de la cara, cuello y
cabeza. El Demodex de los perros, que es diferente al de la especie humana, les produce un tipo
de sama severa, grave, de difícil tratamiento y a veces, mortal. El tratamiento de la demodicidosis
humana debe realizarse con aplicación tópica de permetrina al 5%, crotramitón al 10% y/o
tiabendazol al 5%.
Acarosis por ácaros de animales
El hombre puede presentar cuadros de dermitis y prurigos provocados por ácaros parásitos de los
animales, habitualmente hematófagos que sensibilizan al hombre con su saliva, observándose la
presencia de lesiones maculopapulares, intensamente pruriginosas en la zona de contacto con el
animal infestado. Una de las más frecuentes es la provocada por el ácaro hematófago de las aves
domésticas y silvestres (gallinas, palomas y gorriones) denominados Dermanyssus gallinae y
Dermanyssus avium, los cuales producen lesiones dermíticas en sujetos que están en contacto con
pájaros o incluso oficinistas, pues existen palomas que tienen sus nidos cerca de los conductos de
entrada del aire acondicionado. Otro ácaro hematófago de los múridos silvestres y domésticos es
Allodermanyssus sanguineus, por lo cual se recomienda que, junto con desratizar, se debe aplicar
insecticida en las madrigueras o sitios habituales de pasada de los roedores. Existen Sarcoptes
scabiei de otros animales que pueden provocar dermitis en el ser humano que está en contacto
con estos animales infestados como son: pastores, ordeñadores, domadores y personal que
trabaja en viveros. Estos cuadros de dermitis son diferentes en su cuadro clínico a la sarna
humana, pues son localizados y autolimitados.
Otros ácaros son capaces de provocar reacciones alérgicas, al estar en contacto con ellos o cuando
se les inhala, lo que desencadena una sensibilización del hospedero humano. Uno de los más
importantes son los dermatofagoides o ácaros del polvo de las habitaciones: Dermatophagoides
pteronyssinus (mide 0,3 mm y se alimenta de células epiteliales descamadas) está relacionado con
cuadros atópicos, fundamentalmente respiratorios (asma bronquial y rinitis alérgica) y
ocasionalmente cutáneos. De este mismo tipo de ácaros sensibilizadores son los que proliferan en
los sitios de almacenaje o de elaboración de alimentos como son el Tyrogliphus siro, Glycipltagus
domesticus y Dermatopltagoides farinae o ácaro de la harina que provoca el asma del panadero.
Los ácaros de animales silvestres o domésticos pueden actuar como vectores biológicos de virus y
rickettsias de algunas infecciones zoonóticas, como por ejemplo, el tifus de matorrales o fiebre
fluvial, que existe en Japón, India, Filipinas y algunas islas del Pacífico. Es transmitido por ácaros de
roedores, y algunos cuadros de encefalitis viral pueden ser transmitidos por los ácaros de las aves
como es el Dermanyssus gallinae. Conociendo los problemas que pueden ocasionar los ácaros no
específicos del hombre, son importantes, como medidas de control, el aseo de las viviendas, sitios
de almacenaje e industrias, además de la aplicación de insecticidas y rodenticidas.