Clase 22 Sept. Tertulia Peter Pan
Clase 22 Sept. Tertulia Peter Pan
Clase 22 Sept. Tertulia Peter Pan
Wendy despertó a Michael y John y Peter para iniciar su viaje. Pero antes
de partir Peter les explicó que debían aprender a volar. Les echó un poco
de polvo de hada por encima y enseguida los tres niños comenzaron a
elevarse por el aire. A todos les pareció muy divertido y comenzaron a dar
vueltas y más vueltas por la casa. Armaron tal revuelo que acabaron
despertando a Nana.
Peter la oyó venir así que pudieron volver a sus camas rápidamente como
si no hubiese pasado nada. Así, cuando la niñera entró en la habitación
creyó que los tres dormían plácidamente.
Pero Nana estaba intranquila y estaba casi segura de que algo raro estaba
ocurriendo en el cuarto de los niños, de modo que corrió a avisar a los
señores Darling. Pero cuando volvieron, los niños ya no estaban. Los tres
habían partido rumbo a Nunca Jamás nerviosos e ilusionados por vivir
aquella fantástica aventura.
Al primero que vieron desde el aire fue al temible capitán Garfio, el peor
enemigo de Peter Pan. En una lucha hacía tiempo Peter había logrado
arrebatarle la mano derecha y por eso el pirata llevaba en su lugar ahora
un garfio. Pero lo manejaba perfectamente y eso, unido a sus ganas de
venganza, lo hacían muy peligroso. Aunque había algo a lo que el capitán
Garfio tenía miedo: el cocodrilo. Una vez estuvo a punto de comérselo y por
eso ahora no quería otra cosa que no fuese él. Menos mal que el capitán le
arrojó un reloj y por eso ahora hacía tic-tac cada vez que se acercaba.
Llegaron hasta el lugar donde estaban los Niños perdidos. Pero Campanilla,
que estaba muy celosa de Wendy porque estaba todo el tiempo junto a
Peter, se adelantó para tramar algo.
- Peter dice que ataques a Wendy… - le dijo a los Niños perdidos.
- ¡De acuerdo! - contestaron todos al unísono corriendo por sus arcos y
flechas, Así que los niños comenzaron a disparar sus arcos y flechas hacia
Wendy y sus hermanos. Pero afortunadamente no les pasó nada.
En cuanto llegó Peter detrás de todos les echó una gran bronca.
- ¿Pero ¿qué hacéis? ¡Encima que os traigo a una madre para que os
cuente cuentos la recibís así!
Los Niños perdidos, que iban vestidos con las pieles de los osos que
cazaban, se disculparon y Peter les presentó a Wendy y a los demás.
Wendy y sus hermanos decidieron quedarse allí y junto con los Niños
perdidos y Peter formaron una gran familia que vivía feliz en su guarida
subterránea.
Así que los piratas cortaron las cuerdas que apresaban a la princesa.
Entonces apareció por la laguna el capitán Garfio a bordo de su barco. Iba
para contarles que sabía que los Niños perdidos habían encontrado una
madre y de ninguna manera podían permitirlo.
Wendy se quedó pálida al oír aquello y Peter, que no aguantó más callado,
de nuevo imitó la voz de Garfio. Pero esta vez el pirata fue más listo que en
otras ocasiones y supo que se trataba de Peter Pan.
Lo encontró y luchó contra él hasta que logró herirlo con su garfio, mientras
los niños escapaban en el bote. Wendy se salvó gracias a la ayuda de las
sirenas y a la cometa que Michael había perdido unos días antes y que
apareció por allí, mientras que Peter logró sobrevivir gracias a la ayuda de
la pájara de Nunca Jamás.
Aquella aventura hizo que Peter se hiciera muy amigo de los indios pieles
rojas, pues le estaban agradecidos por haber salvado a la princesa Tigridia
y prometieron defenderlo con sus arcos y flechas del ataque de los piratas.
Los Niños perdidos se sintieron muy tristes al oír esto y decidieron que se
irían con ella. No así Peter, que de ninguna manera quería abandonar el
país de Nunca Jamás. Al menos se preocupó porque Campanilla y los pieles
rojas acompañaran a los niños por el bosque en su camino de vuelta a
Inglaterra.
Los piratas estaban atando a Wendy al palo mayor en ese momento cuando
de repente sonó algo que nadie esperaba... Tic- tac, tic-tac, tic-tac...
- ¡Es ese maldito cocodrilo! ¡Rápido Smee escóndeme! ¡No dejes que me
coja! - gritó Garfio preso del pánico
Pero allí no había ningún cocodrilo, era Peter, que hábilmente se había
hecho pasar por él. en cuanto Garfio fue a su camarote a esconderse Peter
apareció en la cubierta del barco de un salto y empezó a acabar con los
piratas uno por uno. Pero desde sus aposentos Garfio dejó de oír el tic-tac
y creyó que el cocodrilo había huido y podía salir de nuevo.
Al salir Garfio se encontró con varios piratas muertos. Nadie sabía qué
había ocurrido exactamente así que todos empezaron a pensar que el barco
estaba maldito pues ya se sabe que los piratas son algo supersticiosos.
Estaban a punto de lanzar a Wendy por la borda convencidos de que era
ella quien atraía a la mala suerte, cuando Peter salió de su escondrijo para
evitarlo.