Ricardio
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Ricardio
Louis Henry Sullivan, considerado el primer arquitecto moderno de América, nació el 3 de septiembre de
1856 en Bostón.
Cursó estudios de arquitectura en el Instituto Tecnológico de Massachussets, y entre 1874 y 1876 vivió
en París donde asistió a la École des Beaux Arts. A su regreso de Europa se estableció en Chicago donde
se estaba llevando al cabo la reconstrucción de la ciudad destruida por el gran incendio de 1871. Trabajó
para el ingeniero Fredrik Baumann, ocupándose de los problemas estructurales relativos a las grandes
obras. En 1879 formó sociedad con Dankmar Adler de quien, en 1881, pasaría a ser socio. Fue allí donde
se comienza a gestar la carrera de Frank Lloyd Wright, quien fue alumno de Sullivan después de haber
abandonado los estudios de ingeniería civil iniciados en la Universidad de Madison y de haber trabajado
con el arquitecto JC Silsbee en Chicago.
Con la Escuela de Chicago, L. Sullivan, comenzó a desarrollar una corriente que sería la base de la
arquitectura moderna; creó formas originales, siendo capaz de conseguir una unidad estética en los
edificios de altura. En sus diseños combinaba paredes de albañilería con detalles de terracota, enlazaba
formas geométricas y defendía que el ornamento, cuando fuera usado, debería ser sacado de la
naturaleza, rechazando referencias clásicas, principios que fueron tenidos en cuenta por su pupilo en el
desarrollo del programa A Home in a Prairie Town.
Sullivan también fue un prestigioso teórico, que expresó sus ideas en conferencias y escritos como el ya
clásico “Autobiografía de una idea”, (1924). Su famosa afirmación «la forma sigue a la función» se
convirtió en leitmotiv para muchos de sus colegas, aunque él nunca la aplicó de forma literal, sino, tan
sólo en el sentido de que la idea de un proyecto podía partir simplemente de sus consideraciones
funcionales. Murió en Chicago el 14 de abril de 1924.
Con la Escuela de Chicago, L. Sullivan, comenzó a desarrollar una corriente que sería la base de la
arquitectura moderna; creó formas originales, siendo capaz de conseguir una unidad estética en los
edificios de altura. En sus diseños combinaba paredes de albañilería con detalles de terracota, enlazaba
formas geométricas y defendía que el ornamento, cuando fuera usado, debería ser sacado de la
naturaleza, rechazando referencias clásicas, principios que fueron tenidos en cuenta por su pupilo en el
desarrollo del programa A Home in a Prairie Town.
18 DE DICIEMBRE DE 1889
Su primera gran obra fue el Auditorio (1887-1889). En su proyecto previo, algo contradictorio con sus
propios principios, vemos que el edificio estaba plagado de una decoración de estilo francés y presenta
una estructura compleja.
Cuando se construyó (Sullivan solo tenía 30 años) fue el edificio más alto de Chicago. Tras varios
devaneos con lo ornamental, Sullivan se dejó influir por los almacenes Marshall de Richardson en lo
formal (las arquerías). Los tres primeros pisos son de granito gris y almohadillado rústico y los superiores
de piedra caliza. Se trata de un edificio rectangular y sobrio, con una torre pensada para albergar la
maquinaria del edificio y el propio estudio de Adler y Sullivan, que allí se mantuvo dos décadas.
Destacan sus proporciones, los detalles decorativos del interior y su estructura de hierro, aunque
disponga de generosos muros para reforzar la torre.
Podemos considerar este el primer edificio multiuso de gran tamaño en Estados Unidos: contenía un
hotel, oficinas, teatro y ópera; hoy lo ocupa una Universidad.
La bóveda se sirve de un gran entramado de hierro cuajado de decoración y la decoración orgánica junto
a su escalera sigue el patrón de Monadnock y del modernismo europeo por sus juegos de curvas,
elementos florales y vegetales.
Se dio la oportunidad de presentar la nueva ciudad al mundo; dando como consecuencia un movimiento
de reacción en la nueva generación de arquitectos estadounidenses, que se conoce con el nombre de
Prairie School o escuela de la pradera
En materia de diseño la mayoría de los pabellones y construcciones se rigieron por el tinte francés del
Segundo Imperio. Trabajaron en ella muchos de los arquitectos de la Escuela de Chicago, que
abandonaron la moderna e incipiente imagen austera de sus edificios en altura para abrazar el
historicismo, intentando demostrar así que Estados Unidos dejaba atrás su impronta “de frontera” para
incorporarse a la política imperialista, sobre la base de un sistema republicano y democrático.
La feria también funcionó como una bisagra en la historia del urbanismo norteamericano y mundial. El
plano estuvo a cargo de Burnham y Olmsted y terminó transformándose en modelo del movimiento City
Beautiful, que influirá en el diseño de capitales como Washington o Canberra y en importantes
intervenciones urbanas en todo el globo durante las primeras décadas del siglo XX.
1894
En el artículo decia que la construcción de edificios con alma de hierro era un estilo de construcción
nacido en Chicago que estaba comenzando a expandirse en casi todas las grandes ciudades americanas
14 DE FEBRERO DE 1895
Fue el primer rascacielos con grandes ventanas de vidrio que componen la mayoría de la fachada,
presagiando una característica que sería dominante en el siglo XX.
El Edificio Reliance fue el primer rascacielos en incorporar el cristal como principal material en sus
fachadas, un hecho que terminaría por ser un denominador común en este tipo de edificios a lo largo del
siglo XX.
En 1970 entró en el Registro Nacional de Emplazamientos Históricos y en 1976 fue declarado Lugar
Histórico de los EE.UU.
El edificio fue diseñado por Charles B.Atwood del estudio de Daniel H.Burnham con E.C.Shankland como
ingeniero asesor. Los primeros cuatro pisos se levantaron en el 1890. La adición de los 10 pisos restantes
se llevó a cabo entre 1894 y 1895 completando lo que sería la primera muestra del “método de
construcción de Chicago”.
Se dijo del Edificio Reliance que era una obra “Proto-Modernista” por su falta de jerarquía clásica en las
fachadas. Su fachada incluida grandes ventanales apaisados con fornitura de terracota que le
proporcionaban una extraordinaria sensación de ligereza. Fue un precursor de lo que más tarde se
convertiría en el muro cortina.
Concepto
Este edificio viene a simbolizar el espíritu de la Escuela de Chicago, de la cual fue «El Canto del Cisne».
En este edificio reconocemos un intento análogo con el Manhattan Building de Jenney. Podemos
observar un nuevo aspecto interesante: el montaje en altura de los elementos sustancialmente distintos,
a distintos niveles. Del mismo modo que edificios distintos pueden ser colocados uno al lado de otro a lo
largo de una calle, también distintos pedazos de un mismo edificio pueden ser montados los unos sobre
los otros. La parte más baja será la más tradicional, con piedra desbastada a la manera de Richardson y
de Root, con las obligadas referencias ideológicas al primitivismo, a la naturaleza. Pero más arriba,
cuando comienza plenamente la reproducción técnica, el diseño tiende a perderse en un montaje que
ahora ya viene referido no tanto al edificio como directamente a la ciudad.
La simple iteración de las plantas se convierte en el carácter específico de la arquitectura del rascacielos,
de una manera explícita, cuando surge el Reliance Building sobre los cimientos del viejo edificio diseñado
por Root, ahora según el diseño de Charles B. Atwood, del despacho de Burnham: catorce plantas
idénticas repiten el invariable, excepcional diseño de cada una de ellas.
Estructura
Se trata de uno de los primeros edificios en utilizar una estructura de acero lo cual lo llevó a ser el
primero en lograr superficies vidriadas tan grandes en fachada. Su superestructura de acero se colocó
sobre unos cimientos de hormigón que se llegan a hundir 38 metros bajo el nivel de calle.
La estructura de acero no queda vista en ningún momento ya que se encuentra revestida con materiales
que la protegen ante un posible incendio, algo que no se tenía muy en cuenta en la ciudad de Chicago
tras el fatal incendio que arrasó la ciudad en el 1871.
1896
Louis Sullivan acuñó esta frase en un artículo publicado en este año, en donde textualmente dijo: Ya sea
el águila en pleno vuelo o la flor de manzano abierta, el incesante trabajo de los caballo, el cisne alegre,
la ramificación del roble, las nubes a la deriva, sobre todo el sol que cursa, La forma sigue a la función, y
esta es la ley. Dónde la función no cambia, la forma no cambia "