Ficha de Niebla
Ficha de Niebla
Ficha de Niebla
Ficha de niebla
1. Contenido y temas
3.1. Resumen del argumento.
Augusto Pérez es una persona alambre que tiene una vida muy rutinaria y tranquila.
Al verse afectado por el amor y por las pláticas que hace frecuentemente con su amigo
Víctor Goti, comienza a cuestionar cada uno de los aspectos de su vida: se pregunta si
alguien sabe lo que es amar, qué es vivir y cuál es la finalidad de la existencia, entre otros
temas. Esos pensamientos lo consumen en el momento en el que su novia Eugenia huye
con otro hombre después de que él abandona a Rosario, una muchacha que le planchaba la
ropa, que le había jurado estar con él y quererle siempre.
Al verse sin salida, decide buscar ayuda y se dirige a la casa de Miguel de Unamuno, un
reconocido escritor, con la idea de que podría decirle qué hacer. Los resultados son
inesperados cuando Unamuno se pronuncia su creador y le dice que es un ente de ficción a
quien, incluso, puede matar si lo desea. Augusto, en su defensa, dice que quizá Unamuno
también es el personaje “nivolesco” de alguien más y que ese ente terminará con su vida
cuando menos lo espere; y defiende su existencia al mencionar que él volverá a vivir cada
vez que alguien lea su historia, mientras que el autor vasco, en cambio, no lo hará.
De esta forma, Miguel de Unamuno intenta plasmar el encuentro de un creador con su
creación simulando la relación Dios-criatura; Niebla se construye alrededor de este tema
mediante el desarrollo de conceptos como la concepción de la vida y el destino.
3.1.1 Estructura: Niebla está compuesta por treinta y tres capítulos que podrían
dividirse en tres secciones.
La primera sería el momento en el que Augusto conoce a Eugenia y comienza a
cortejarla, ya que desde ese instante el protagonista comienza a cuestionar qué es el amor,
qué es la vida e idealiza la imagen de su amada, de quien sólo conoce los ojos.
La segunda parte sería la que engloba la convivencia con Eugenia, las visitas
frecuentes de Augusto a la casa de los tíos de ella y el desconcierto que tiene éste por
sentirse enamorado de todas las mujeres en el mundo. Aquí, los cuestionamientos que hace
Augusto sobre su forma de vivir se hacen mucho más profundos, Orfeo (su perro) comienza
a fungir como su fuente de desahogo y Víctor Goti le habla sobre la creación de la “nivola” y
de lo miserable que es la vida de un momento a otro.
Por último, la tercera parte se compone del engaño de Eugenia a Augusto al
escapar con Mauricio, ya que esto propicia que el protagonista se sienta perdido y de la
visita del protagonista a Miguel de Unamuno, personaje identificado con el autor del texto.
Tras la muerte del protagonista a modo de epilogo una singular oración en boca de Orfeo el
perro que muere de pena por la muerte del amo.
3.2. Temas2:
Crisis epistemológica: los pensadores de la primera disciplina llegaron a la
conclusión de que el hombre era completamente incapaz de alcanzar la verdad y de
conocer todo aquello que fuera válido universalmente, y los de la segunda afirmaron
que conocer la verdad absoluta acerca de los hechos históricos era imposible de
conseguir.
2. Los paratextos3
2.1. Posición del autor/ editor
Prólogo del ficticio Victor Goti amigo de Augusto.
Post-prologo aclaratorio de Unamuno. (disiente de Goti).
Prologo posterior de Unamuno en el que explica su trayectoria literaria añadido
en 1935. Enumera sus obras:
3. Personajes.
3.1. Personaje(s) principal(es) Augusto Pérez.
3.2. Personajes secundarios Domingo y Ludivina (criados), Eugenia Domingo ,
Margarita la portera,
Augusto Pérez:18 Hombre burgués que ha perdido a su madre recientemente y, en
consecuencia, vive en compañía de su ama de llaves y su mayordomo. Se enamora
de Eugenia y la pretende; mientras, también corteja a Rosario y le ofrece escapar
con ella. Suele preguntarse cuál es el sentido de la vida y sentirse perdido en una
niebla donde desconoce todo. Dialoga constantemente sus devaneos con su perro
Orfeo y con Víctor Goti; este último lo contradice constantemente y eso produce que
Augusto termine por alargar más sus monólogos internos. Sus constantes
cuestionamientos existenciales lo llevan a la muerte al enfrentarse con el hombre
que le ha dado una vida ficticia.
Víctor Goti:19 Amigo más cercano de Augusto. Suele estar conforme con su vida
hasta que su mujer se embaraza y la relación entre ellos se vuelve tensa y
malhumorada. Está en contra de seguir las construcciones establecidas por la
sociedad y, para curarse un poco del tiempo libre, decide crear una forma literaria
llamada “nivola”, la cual tendría un poco que ver con la novela tradicional en cuanto
a su estructura, pero se distinguiría de ella al estar formada mayoritariamente de
diálogos. Constantemente califica los juicios de Augusto como vanos y poco
certeros, orillando a que su amigo tenga monólogos más extensos. Finalmente,
cuando su hijo nace, se siente pleno y satisfecho con su vida cotidiana.
Miguel de Unamuno:20 Un reconocido escritor español al que Augusto decide visitar
cuando ya no sabe qué decisiones tomar. Este personaje se presenta como el autor
de la nivola de la vida de Augusto y le asegura tener el poder de decidir qué sucede
6. Tipo de lenguaje
6.1. Registro estilístico (elevado, común, vulgar...), registro estándar con ciertas
licencias en cuanto a uso de palabras inventadas por el autor.
6.2. Rasgos peculiares según el habla de los personajes. Características de cada
uno de ellos.
7. Narrador (es).
7.1. Número de narradores uno/ varios narradores.
El término “nivola” es usado por primera vez en el prólogo que Víctor Goti le hace a Niebla al
decir “Aparte de que este señor [Unamuno] saca a relucir en este libro, sea novela o nivola –y
conste que esto de la nivola es invención mía–”29 y después, el mismo prologuista, afirma
que Niebla pertenece a esa forma cuando dice “Yo no puedo prever ni la acogida que
esta nivola obtendrá de parte del público que lee a don Miguel…”. 30 A partir de esto, la crítica
emplea ese término para referirse a esta obra.
Después, en el desarrollo de la historia, Goti especifica los cambios de novela a nivola cuando
describe las características de esta:
Mis personajes se irán haciendo según obren y hablen, sobre todo según hablen; su carácter se irá
formando poco a poco. Y a las veces su carácter será el de no tenerlo […] lo que hay es diálogo;
sobre todo diálogo. La cosa es que los personajes hablen, que hablen mucho, aunque no digan
nada […] Aunque, por supuesto, todo lo que digan mis personajes, lo digo yo
Unamuno
CRITICA
Existe una cantidad considerable de los estudios que los críticos han realizado para
analizar la estructura y el argumento de Niebla, algunos de ellos, como Katrine Andersen,
mencionan que en la obra se puede notar la influencia
de Kant, Hegel, Spencer, Spinoza, Schopenhauer y Kierkegaard porque Augusto se siente
perdido dentro de, justamente, una niebla que no le permite saber hacia dónde va o qué es lo que
debe hacer para que su vida tenga un sentido. 31
Manuel García Serrano dice que el protagonista de Niebla intenta construir su identidad, pero
no esa que se compone conforme al entorno y la convivencia, sino una individual y
que Unamuno permite la contemplación de éste como concurrencia de dos factores: “que uno
ha hecho cosas, y que uno ha de hacerlas”. 32
Sergio Arlandis se interesa, por una parte, en el trasfondo que guarda Niebla sobre el afán de
salvación personal frente al no-ser, debido a que encuentra en ella un rasgo de agonía
Una de las primeras cuestiones en las que coinciden algunos críticos, 35 es la teoría de que
Unamuno tenía un estilo propio en sus escritos después de una fuerte crisis religiosa que
experimentó el autor en 1897 en la cual “quiso crear aquello en lo que no creía”,36 y de la cual
se tiene información debido a que su correspondencia fue recuperada casi en totalidad, y
gracias a eso pudo verse, en las cartas dirigidas a Clarín, una constante referencia a este
proceso.37
Algunos aseguran que su postura se inclina hacia el agnosticismo y otros deciden definirlo
completamente como ateo; pero, lo que es común entre estos estudiosos, es la mención de la
importancia que Unamuno le dio a la existencia y al devenir humano, en la cual todos
concuerdan. Se dice que este escritor pasó la vida entera entre el ir y venir en el pensamiento
religioso, incluso se afirma que vivió con cierta angustia existencial, por lo cual deseaba poder
proyectársela a sus lectores y que éstos vivieran los mismos cuestionamientos que él. 38
Según dice Luis García Jambrilla, lo que ha predominado en estos análisis son “las lecturas
meramente temáticas y filosóficas, centradas fundamentalmente en el problema de la
personalidad, de la existencia y de la identidad individual” en las obras de Unamuno, después,
en frecuencia, se hallan las que se ocupan por la estructura autoficcional de éstas y, hasta lo
último, las que están interesadas por las técnicas narrativas como la metaficción.39 Un ejemplo
de estos estudiosos interesados en el estudio metaficcional de Niebla es Ana Dotras quien hace
un detallado análisis sobre la nivola y demuestra las características que la englobarían dentro
de ese modelo.
Dotras menciona que cuando Víctor Goti describe la estructura de la nivola (que se supone que
él crea), suceden dos cosas, la primera es que también se presenta la forma de Niebla por lo
que este personaje puede ser el portavoz de las ideas estéticas de Unamuno 40 y la segunda es
que el lector experimenta un extrañamiento que le genera la impresión de la obra que se crea
a sí misma.41 Gracias a esto, según menciona esta autora, Niebla permite que el receptor sea
también un co-creador del texto. 42 Dotras relaciona lo dicho anteriormente por los críticos de la
filosofía existente dentro de esta novela con la función metaficticia y dice:
Las conjeturas metafísicas en torno a las relaciones entre Dios y sus criaturas se hacen por
analogía a la relación entre el autor-creador y sus personajes. El ser humano, como ente de
ficción, es el protagonista de la novela que escribe Dios. La dimensión existencial se conecta de
esta forma con la metaficticia, al sugerir la posibilidad del carácter ficticio de la existencia
humana, al identificar la vida con la ficción.
Ana Dotras