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Cancionero Virgen

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La Guadalupana H i m n o a la h u m i l d a d

Virgencita dorada
Desde el cielo una hermosa mañana (2) Con que gusto venimos, con gran devoción
La Guadalupana (3) bajó al Tepeyac (2) A decirte lo que hay en nuestro corazón.
Suplicante juntaba sus manos (2) Hoy es día de fiesta hasta en el más pequeño rincón.
Y eran mexicanos (3) su porte y su faz (2) Hoy se muere el rencor y florece el perdón.

Virgencita milagrosa,
Su llegada llenó de alegría (2)
Eres tú la estrella más hermosa de la creación.
De luz y armonía (3) todo el Anáhuac (2)
Virgen Morena Reina de la esperanza

Hoy te cantamos el himno a la humildad.


Junto al monte pasaba Juan Diego (2)
Eres la tierra donde la fe sembramos
Y acerco se luego (3) al oír cantar (2)
Y cosechamos siempre de tu bondad.

Poema:
A Juan Diego la Virgen le dijo (2)
"A ti venimos, Madrecita, con nuestros cuerpos más
Este cerro elijo (3) cansados
para hacer mi altar (2) que la última ocasión. , pero con un amor tan grande,
Para ti, que

Y en la tilma entre rosas pintadas (2) nos cabe en el corazón.

Su imagen amada (3) Porque eres consuelo divino, luz de todos los
caminos.
se dignó dejar (2).
Gracias por quedarte siempre, con tus fieles
peregrinos."
Desde entonces para el
Virgencita adorada no me puedo ir
mexicano (2)
Sin decirte mil gracias, Tú sabes porque.
Ser Guadalupano (3) es algo esencial (2).
Y teniendo el momento, te quiero pedir

Por los que de justicia se mueren de sed.


En sus penas se postra de hinojos (2)
Virgen Morena...
Y eleva sus ojos (3) hacia el Tepeyac (2).
Buenos días Paloma Blanca Virgencita del alma querida

Virgencita del alma querida


Buenos días, paloma blanca, hoy te vengo a saludar,
En mi pecho yo llevo una flor
saludando a tu belleza en tu reino celestial.
No te importe el color que ella tenga
Eres madre del creador, que a mi corazón encanta
Porque al fin tú eres, madre, una flor
gracias te doy con amor, Buenos días, paloma blanca
Tu cariño es mi bien, Virgencita
Niña linda, niña santa, Tu dulce nombre alabar.
En mi vida tú has sido y serás
Porque eres tan sacrosanta, hoy te vengo a saludar.
El refugio de todas mis penas
Reluciente como el alba, pura, sencilla y sin mancha
Y la cura de amor y verdad
Que gusto recibe mi alma, Buenos días, Paloma Blanca.
Aunque amores yo tenga en la vida
Que linda está la mañana, el aroma de las flores.
Que me llenen de felicidad
Despiden suaves olores, antes de romper el alba.
Como el tuyo jamás, madre mía
Mi pecho con voz ufana, gracias te da, Madre mía
Como el tuyo no habré de encontrar (2)
En este dichoso día, antes de romper el alba.

Cielo azul yo te convido, en este dichoso día.

A que prestes tu hermosura, a las flores de María. Junto a ti María

Madre mía de Guadalupe, dame ya tu bendición

Recibe estas mañanitas, de un humilde corazón Junto a ti María


como un niño quiero estar
tómame en tus brazos
Madre eres guíame en mi caminar.
Madre eres ternura Quiero que me eduques
eres una flor que me enseñes a rezar
blanca y preciosa hazme transparente
llena de amor lléname de paz

Madre eres ternura eres una flor Madre, Madre, Madre, Madre

blanca y preciosa llena de amor Madre, Madre, Madre, Madre

Si Señora ven a mí, ven, ven a mi Gracias Madre mía

cúbreme con tu manto, lleno de amor por llevarnos a Jesús


haznos más humildes
Si Señora ven a mí, ven, ven a mi
tan sencillos como Tú
cúbreme con tu manto, lleno de amor
Gracias Madre mía
por abrir tu corazón
porque nos congregas
y nos das tu amor
Una entre todas SANTA MARIA DEL AMEN
Una entre todas fue la escogida; Madre de todos los hombres,
fuiste Tú, María, la elegida, enséñanos a decir amén.
Madre del Señor, Madre del Salvador. Cuando la noche se acerca
y se oscurece la fe.
/María, llena de gracia y consuelo, Cuando el dolor nos oprime
ven a caminar con el pueblo, y la ilusión ya no brilla.
nuestra Madre eres Tú. / (bis) Cuando aparece la luz
y nos sentimos felices.
Ruega por nosotros, pecadores de la tierra, Cuando nos llegue la muerte
ruega por el pueblo que en su Dios espera. y Tú nos lleves al cielo.
Madre del Señor, Madre del Salvador.

Madre de los pobres


Ella es María
Era como la mañana Madre de los pobres,
y con ella amanecía los humildes y sencillos,
ese sol que al mirarla de los tristes y los niños
en sus brazos se dormía. que confían siempre en Dios.
Ella es, Ella es, Ella es María.
Ella es, Ella es, Ella es María. Tú, la más pobre porque nada ambicionaste.
Tú, perseguida vas huyendo de Belén.
Ella acunaba en sus brazos Tú, que un pesebre ofreciste al Rey del Cielo,
al Niño que salvaría toda tu riqueza fue tenerlo sólo a El.
a los hombres y mujeres
que le entregaran su vida. Tú, que en sus manos sin temor te abandonaste.
Tú, que aceptaste, ser la esclava del Señor,
Luego de sufrir la muerte vas entonando un poema de alegría:
de ese Hijo que ella amaba “Canta alma mía, porque Dios te engrandeció”.
llevó en silencio al mundo
la verdad de sus palabras. Tú, que has vivido el dolor y la pobreza.
Tú, que has sufrido en la noche sin hogar.
Dame tus fuerzas María Tú, que eres Madre, de los pobres y olvidados,
para que pueda encontrar eres el consuelo del que reza en su llorar.
el camino que en su vida
Dios nos quiso señalar.
La Virgen María nos reúne María de Jesús

La Virgen María nos reúne Eres más que el mar,

en nombre del Señor, la gota de rocío en el arenal,


la flor nacida en medio del pedregal
del Señor Jesús,
a fuerza de esperanza, fe y caridad,
Dios nuestro Señor.
así eres Tú, María de Jesús.

Venimos a buscar el pan de la Palabra, Llévame hasta él,


esconde mi lucero en su amanecer
Palabra del Señor que reconforta el alma.
Aviva en mi alma el fuego de su querer
Y apagaré mi sed.
Venimos a comer el Pan sacramentado,
Dame de beber,
el Cuerpo del Señor, Jesús resucitado.
la sangre del cordero que fue a nacer
Del seno inmaculado de ti mujer
Venimos a llevar el pan de la alegría,
De noche allá en belén.
mensaje que nos dio el Hijo de María.
Siento una vez más

Santa María del camino tu mano dirigiendo mi caminar,


tus ojos encendiendo mi oscuridad,
tu corazón de Madre latiendo está,
Mientras recorres la vida, tú nunca solo estás,
junto a la cruz, María de Jesús.
contigo por el camino, Santa María va.

Sólo una vez más,


¡Ven con nosotros al caminar,
dirige mi sendero hacia ese portal
Santa María, ven!/ (bis)
y encierra mi camino en su caminar
Aunque te digan algunos para borrar las huellas de todo mal,
que nada puede cambiar, danos tu luz, María de Jesús.
lucha por un mundo nuevo,
Soy como el cristal,
lucha por la verdad.
que deja cada día la luz pasar,
Si por el mundo los hombres y enciende claridades por donde va,
sin conocerse van, soy como luna llena para brillar,
no niegues nunca tu mano así soy yo, la Madre del Señor
al que contigo está.
En la obscuridad
Aunque parezcan tus pasos acude a mi regazo para llorar,
inútil caminar, yo sé de consuelos y de humildad
tú vas haciendo camino, y enciendo amor y vida en eternidad,
otros lo seguirán. así soy yo, la Madre del Señor
Madre óyeme Oh Virgen Santa

Madre óyeme
¡Oh, virgen santa! Madre de Dios
Mi plegaria es un grito en la noche
Sois la esperanza del pecador
Madre mírame
Sois la esperanza del pecador
En la noche de mi juventud

Madre sálvame Vuela suspiro del alma mía


Mil peligros acechan mi vida Lleva a María mi ardiente amor
Madre lléname Haz que me mande mi madre amada
De esperanza, de amor y de fe -Una mirada de protección

Madre guíame
Dile que has visto mi sufrimiento,
En las sombras no encuentro el camino
dile que siento mortal dolor,
Madre llévame
que es su amor santo
Que a tu lado feliz cantaré
mi ardiente anhelo,
Madre una flor que es el consuelo del corazón
Una flor con espinas que es bella
Madre un amor
Somos cual nave que van perdidas
Un amor que ha empezado a nacer
Y combatidas del aquilón
Madre sonreír Mas tú nos llevas con rumbo cierto
Sonreír aunque llore en el alma -Al feliz puerto de salvación
Madre construir
Caminar aunque vuelva a caer En ti ponemos nuestra esperanza,
Madre solo soy todo lo alcanza tu intercesión;
El anhelo y la carne que lucha hacia nosotros tu mano extiende,
Madre tuyo soy -benigna atiende nuestra oración.
En tus manos me vengo a poner
Oh María, Madre mía Oh virgen la más bella

Oh María, Madre mía Oh Virgen la más hermosa


oh consuelo del mortal: Del Valle del Anáhuac,

-amparadme y guiadme Tus hijos, muy de mañana


Te vienen a saludar.
a la patria celestial-
Despierta, Madre despierta,
1. Con el ángel de María
Mira que ya amaneció
las grandezas celebrad.
Ya los pajarillos cantan,
-Transportados de alegría La luna ya se metió.
sus finezas publicad-
Aquella alegre mañana,
2. Salve, júbilo del cielo, En que te apareciste a Juan
del Excelso dulce imán; Mientras Dios me dé la vida,
-Salve gozo de este suelo, Nunca se me olvidará

triunfadora de Satán- Cuando miro tu carita


Llena de tanto candor,
3. Quien a Tí ferviente clama
Quisiera darte mil besos
halla gloria en el pesar,
Para mostrarte mi amor,
-pues tu nombre luz derrama,
Envidia no tengo a nadie
gozo y bálsamo sin par-
Sino al Ángel que a tus pies,
4. De sus gracias tesorera Mas de cuatrocientos años

te ha nombrado el Redentor: Te sirve de cascabel,

-con tal Madre y Medianera Madre de los mexicanos


nada tema el pecador- Dijiste venías a ser;
Pues ya lo ves, Morenita
5. Hijo fiel quisiera amarte Si te sabemos querer,
Y por ti sólo vivir
Mira que soy mexicano
-Y por premio de ensalzarte Y, por eso tuyo, soy,
Ensalzándote morir- Y busca, en el mundo en vano
Quien te quiera más yo.
6. Pues te llamo con fe viva
muestra, ¡oh Madre!, tu bondad, Despierta, Madre despierta
Mira que ya amaneció
-a mí vuelve, compasiva,
Mírame a tus pies postrado
esos ojos de piedad-
Y dame tu bendición.
María, mírame Dulce Madre

María, mírame, María, mírame Dulce Madre no te alejes


Si Tú me miras, él también me mirará Tu vista de mi no apartes
Madre mía, mírame, De la mano llévame Ven conmigo a todas partes
Muy cerca de él, Que ahí me quiero quedar Y sólo nunca nos dejes

María, cúbreme con tu manto Ya que nos proteges tanto


Que tengo miedo, no sé rezar Como verdadera Madre
Que por tus ojos misericordiosos Has que nos bendiga el Padre
Tendré la fuerza, tendré la paz El Hijo y el Espíritu Santo

Madre, consuélame de mis penas Has que nos bendiga el Padre


Es que no quiero ofenderle más El Hijo y el Espíritu Santo
Que por tus ojos misericordiosos
Quiero ir al cielo y verlos ya
Del cielo ha bajado la Madre de Dios
María Madre somos tus hijos
Nos acogemos en tu protección 1. Del cielo ha bajado la Madre de Dios.
Que por tus ojos misericordiosos Cantemos el Ave a su concepción.
Nuestra familia, viva el Amor.
Ave, ave, ave María.

María Madre de los que sufren Ave, ave, ave María.

Dale consuelo a ese dolor


2. Del verbo divino, de Cristo Jesús,
Que por tus ojos misericordiosos
Santísima Madre, María, eres tú.
A mis hermanos, muestre tu Amor.

3. Oh Virgen sin mancha, oh Madre de amor,


Madre acógeme en el pesebre
El ángel te ofrezca mi salutación.
Junto a tu Niño y a San José
Que por tus ojos misericordiosos
4. Tú eres el orgullo de Dios creador,
Toda mi vida, sea un Belén.
Y el fruto más digno de la redención.

En tus brazos quieren, descansar. 5. Las gracias emanan del trono de Dios,
Y todas confluyen en tu corazón.
En tus brazos quiero
Descansar 6. La luna humillada tus plantas besó,
Y el mundo te adora vestida del sol.

7. Pues somos tus hijos, oye nuestra voz;


Defiéndenos siempre en la tentación.
Dios te salve María Viva María, viva el Rosario

Dios te salve María, llena eres de gracia Viva María, viva el Rosario,
El Señor es contigo, bendita tú eres viva Santo Domingo que lo ha fundado.
entre todas las mujeres
y bendito es el fruto de tu vientre Jesús Si quieres bendiciones, paz y alegría
rezarás el Rosario todos los días.
Santa María madre de Dios
Ruega por nosotros pecadores (2) Devoto de María, si gracias quieres,
rezarás el Rosario y nunca peques.
Ahora y en la hora de nuestra muerte
Los dieces del Rosario son escaleras
Amén para subir al cielo las almas buenas.

El rosario a María todos debemos


Adiós, Reina del cielo Rezarlo cada día para ir al cielo

Adiós, Reina del cielo, Madre del Salvador. El demonio en la oreja te está diciendo:

Adiós, oh Madre mía. Adiós, adiós, adiós. no vayas al Rosario, sigue durmiendo.

De tu divino rostro la belleza al dejar, Labrador perezoso, vístete luego

permíteme que vuelva tus plantas a besar. y acompaña al Rosario por este pueblo.

A dejarte, oh María, no acierta el corazón: Para guardar los hijos en la inocencia,

te lo entrego, Señora, dame tu bendición. rezarás el Rosario con reverencia.

Adiós, hija del Padre; Madre del Hijo, adiós;


del Espíritu Santo, oh casta esposa, adiós.

Adiós, oh Madre Virgen, más pura que la luz:


jamás, jamás me olvides delante de Jesús.

Adiós, del cielo encanto, del universo honor;


Abraza el alma mía, en tu gloria y amor.
El Diario De María Madre del silencio

Te miro a los ojos y entre tanto llanto


Como una tarde tranquila,
Parece mentira que te hayan clavado
Como un suave atardecer
Que seas el pequeño, al que he acunado
Era tu vida sencilla
Y que se dormía, tan pronto en mis brazos
En el pobre Nazareth
El que se reía, al mirar el cielo Y en medio de aquel silencio
Y cuando rezaba, se ponía serio Dios te hablaba al corazón

Sobre este madero, veo aquel pequeño


Que entre los doctores, hablaba en el templo Virgen María, Madre del Señor
/: Danos tu silencio y paz
Que cuando pregunté, respondió con calma
Para escuchar su voz:/
Que de los asuntos, de Dios se encargaba

Ese mismo niño, el que está en la cruz


Enséñanos, Madre buena,
El rey de los hombres, se llama Jesús
cómo se debe escuchar
Ese mismo hombre, ya no era un niño al Señor cuando nos habla
Cuando en esa boda, le pedí más vino en una noche estrellada
Que dio de comer, a un millar de gente en la tierra que dormida
Y a pobres y enfermos, los miró de frente hoy descansa en su bondad

Rió con aquellos, a quienes más quiso


Y lloró en silencio, al morir su amigo y, sobre todo, María
cuando nos habla en los hombres
Ya cae la tarde, se nublan los cielos
en el hermano que sufre
Pronto volverás, a tu Padre Eterno
en la sonrisa del niño
Duérmete pequeño, duérmete mi niño
en la mano del amigo
Que yo te he entregado, todo mi cariño
en la paz de una oración.
Como en Nazareth, aquella mañana
He aquí tu sierva, he aquí tu esclava
QUÉ TE PUEDO DAR TE ALABO EN VERDAD

Qué te puedo dar, que no me hayas dado Que te Aún en la tormenta RE LA


puedo decir, que no me hayas dicho Tú Qué aun cuando arrecia el mar
puedo hacer por Ti, si yo no puedo hacer nada Te alabo te alabo en verdad.
Si yo no puedo hacer nada si no es por Ti, Señor. Aún lejos de los míos
Todo lo que sé, todo lo que soy Todo lo que aún en mi soledad.
tengo es tuyo. Te alabo te alabo en verdad.
Pues solo a Ti te tengo Señor
pues tú eres mi heredad.
Te alabo, te alabo en verdad.
TAN CERCA DE MI Aún en la tormenta
Tan cerca de mí, aún cuando arrecia el mar.
tan cerca de mi Te alabo, te alabo en verdad.
que hasta le puedo tocar, Aún sin muchas palabras
Jesús está aquí. aunque no se alabar.
Ya no busco a Cristo en las alturas Te alabo, te alabo en verdad
ni lo buscaré en la oscuridad Pues solo a Ti te tengo Señor
dentro de mi ser, en mi corazón Pues tú eres mi heredad.
siento que Jesús conmigo está Te alabo, te alabo en verdad.
Yo le contaré lo que me pasa
como a mis amigos le hablaré TUYO SOY
yo no sé si es Él quien habita en mí
o si soy yo quien habita en Él Yo no soy nada y del polvo nací,
Míralo a tu lado caminando pero Tú me amas y moriste por mí,
en las alegrías y el dolor Ante la cruz sólo puedo exclamar;
a tu lado va siempre al caminar ¡tuyo soy, tuyo soy!
Él es un amigo de verdad. Toma mis manos, te pido
toma mis labios, te amo;
Toma mi vida, oh Padre;
¡tuyo soy, tuyo soy!
Cuando de rodillas te miro, Jesús
veo tu grandeza y mi pequeñez.
¿Qué puedo darte yo?, tan sólo mi ser
¡Tuyo soy, tuyo soy!
ESPÍRITU DE DIOS DIOS ES AMOR
Espíritu de Dios, llena mi vida,
Llena mi alma, llena mi ser Dios es amor, es amor, Aleluya
Ven lléname, lléname Viva el amor, el amor, Aleluya
Con tu presencia, lléname, lléname
Con tu poder, lléname, lléname Desde siempre te amé, dice el Señor
Con tu bondad. Cielo y tierra formé, pensando en ti
Si Dios no vive en mi, vivo sin rumbo Hijo mío serás, y un corazón tendrás
Vivo sin calma, vivo sin luz. Para ser tú también el amor

ESPÍRITU SANTO VEN Te alejaste de mí, dice el Señor


Espíritu Santo ven, ven Y al abismo bajé de tu traición
Espíritu Santo ven, ven Di la vida por ti, y en el plan que dejé
Espíritu Santo ven, ven Sobre tu mesa fui amor
En el nombre del Señor
Acompáñame, ilumíname, toma mi vida En tu hermano yo estoy, dice el Señor
Acompáñame, ilumíname, Espíritu Santo Ven. Quiero encontrarte en él, en su dolor
Santifícame y transfórmame, tú cada día Son mi pan y mi ley, un vínculo de unión
Santifícame y transfórmame, Espíritu Santo Ven Un incendio de amor, el amor
Resucítame y conviérteme, todos los días
Resucítame y conviérteme, Espíritu Santo Ven. Dios es amor, amor, Aleluya
Aleluya, Aleluya

ESTA ES LA LUZ DE CRISTO

Esta es la luz de Cristo,


yo la haré brillar (3)
Brillará, brillará sin cesar
Soy cristiano y esa luz, yo la haré brillar
Daré luz a la ciudad, yo la haré brillar
Nunca la ocultaré, yo la haré brillar

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