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El Cervell Polièdric

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El cervell polièdric

1. El nacimiento de la inteligencia
La inteligencia es la capacidad que tenemos de ante nuevas situaciones, ser
capaces de crear nuevas respuestas para adaptarnos mejor, aquellas que no
tenemos genéticamente. Todos procedemos del mismo antepasado, pero llegó el
punto en el que el hombre empezó a evolucionar de forma diferente, y aquellos que
se adaptaron mejor, fueron los elegidos para continuar evolucionando hasta llegar a
lo que somos ahora. Características que nos fueron diferenciando de los primates
como la posición bípeda (debido, por ejemplo a que África se fue desforestando y
ya no era necesario colgarse de los árboles) el uso de herramientas más
complejas... El bipedismo tuvo que ver el hecho del que el cerebro se fuera
desarrollando y se fuera haciendo más grande en comparación al resto del cuerpo.
Así, las funciones más primitivas se quedaron en los sitios más recónditos, mientras
las funciones superiores se fueron añadiendo posteriormente, en la parte que se iba
desarrollando. Ya por último, nombrar que la selección natural es el concepto por el
cual explicamos la evolución. Los individuos sufren cambios que se producen al
azar, si estos cambios permiten una mayor adaptación del individuo al medio y éste
logra reproducirse, esta especie que se adapta mejor, acabará desplazando a las
otras.

2.La fábrica de emociones


Las emociones y sensaciones sólo son un producto de múltiples reacciones
químicas que se dan en nosotros, en nuestro cerebro. Las neuronas son las células
nerviosas, éstas están formadas por el axón y establecen conexiones con otras
neuronas, sinapsis. En el axón, la neurona tiene dendritas, que son ramificaciones
del axón. Una neurona puede estar conectada con miles de neuronas más, hecho
que no se descubrió hasta la llegada del español Ramón y Cajal. Más tarde, se
descubrió que lo que mueve el cerebro no era la electricidad sino la química,
descubriéndose el primer neurotransmisor, la acetilcolina. Los neurotransmisores
son sustancias químicas que transmiten el mensaje de una neurona a otra. Así, una
neurona suelta un neurotransmisor mientras que la siguiente tiene unos receptores
específicos para recibirla, si la recibe correctamente, ésta lo pasará a la siguiente
neurona y así contínuamente. Luego hay analgésicos que cortan este mensaje que
pasa de neurona a neurona, evitando por tanto el dolor. También se descubrió que
el cuerpo producía una especie de calmantes para el dolor, llamados endorfinas.
Son sustancias que encajan en el receptor de la neurona siguiente, pero no le
ordenan que las vuelva a liberar. Se llaman inhibidoras. También hay unas que
actúan al contrario, aumentando la producción y liberación del neurotransmisor. Se
llaman estimuladoras.
3.El almacén de los recuerdos.
La memoria es la capacidad que tenemos para recuperar información sobre algo
que hemos vivido o experimentado. La memoria se da en según que personas con
una mayor o menor facilidad pero a pesar de ello, todos tenemos los mismos tipos
de memoria. Una es a corto plazo, y permite únicamente retener algo durante unos
segundos; otras dos son la semántica y la episódica. La semántica guarda datos,
mientras que la episódica guarda hechos vividos directamente y los relaciona con
otros elementos. También está la memoria explícita (guarda conscientemente lo
que queremos recordar) y la memoria implícita (que retiene cosas sin que nos
demos cuenta). Y por último, otro tipo de memoria llamada procedural, que nos
permite realizar cosas una vez aprendidas sin prestarles tanta atención como al
principio, por ejemplo, conducir. La memoria no se encuentra en una zona
específica del cerebro, sino que se encuentra repartida entre las distintas zonas,
que al recordar algo, se ponen todas en contacto. Hay técnicas para aumentar la
memoria, al igual que enfermedades que la atacan directamente como por ejemplo,
el alcéimer.

4. El cerebro sabio
El conocimiento se encuentra dentro del cerebro, pero no existe propiamente, sino
que es el resultado de muchas conexiones neuronales, sustancias químicas e
impulsos eléctricos. El conocimiento es un aprendizaje, pero también se crea en el
interior, razonando y deduciendo. El lenguaje es lo que forma una estructura
diferente de un cerebro de los otros ya que implica muchas facultades distintas. El
conocimiento empieza desde que estamos en el vientre de nuestra madre, cuando
ya somos capaces de distinguir voces, sonidos... por eso los estímulos son muy
importantes para la formación de conexiones neuronales. No hay un centro de
conocimiento pero sí partes que influyen notoriamente, una de éstas sería el corte
frontal ya que toda la información pasa por aquí. Otra el sistema límbico, que
incluye entre otras funciones, las emociones. Así pues, existe un tipo de relación
entre las emociones y el razonamiento.

5. El cerebro creativo
La ciencia necesita creatividad, esta creación tiene que ser coherente con los datos
que obtenemos de la observación y de los experimentos. A veces, esta creatividad
nos viene en los sueños, pues nos relajamos tanto que las conexiones sinápticas
no pasan por la lógica, expresando también nuestras obsesiones o pensamientos
rechazados en la conciencia.
La creación es un proceso mental, pero provocado por un ambiente social y
cultural. ¿Cómo hace el cerebro para recibir las creaciones? Las sensaciones que
nos llegan despiertan algunos circuitos neuronales que nos hacen valorarlas;
diversas sustancias químicas que intervienen en los procesos creativos.

6. El cerebro dolorido.
Gracias a unas primeras lesiones, se establecieron las primeras áreas del cerebro
asociadas a un tipo de función: el área de Broca, con la dificultad para hablar; y el
área de Wernicke, para entender el lenguaje. A pesar de estas lesiones, el cerebro
también tiene una capacidad de regeneración más alta como más joven. No hay
áreas concretas para actividades concretas, pero sí al ser lesionadas afectan a
otras regiones y no pueden funcionar correctamente. Hace unos años, los estudios
del cerebro se hacían detectando la actividad eléctrica en sus diversas partes, pero
ahora hay técnicas como la resonancia magnética, la tomografía por emisión de
positrones o la tomografía axial computerizada que permiten ver el cerebro en
acción.

7. Guerra de hemisferios
Hay varias hipótesis que intentan explicar porque el ser humano ha desarrollado
más la parte derecha del cuerpo. Una de ellas es la asociada al lenguaje, ya que
tanto el gobierno de la parte derecha del cuerpo como del lenguaje se encuentran
en el hemisferio izquierdo; se pontenciarían mutuamente pero no nos explica el por
qué, ni tampoco la existencia de los zurdos. Los dos hemisferios están unidos por
un conjunto de millones de fibras nerviosas llamada cuerpo calloso que permite el
intercambio de información. Así, pueden estudiarse los dos hemisferios por
separado y ver que realiza cada uno. Por tanto al tener cada hemisferio unas
funciones, se piensa que los zurdos son superiores en ciertas cosas y los diestros
en otras. Por ejemplo, en los diestros, el hemisferio derecho procesa la información
y el izquierdo actúa; en los zurdos, el mismo hemisferio capta y da la orden.
8. Guerra de sexos
Cada sexo manifiesta unas mayores habilidades para procesos distintos. Por
ejemplo, las mujeres tienen más capacidad de expresión verbal, transmiten mejor
sus sentimientos e incluso detectan mejor las emociones; en cambio, los hombres
superan a las mujeres en la orientación espacial. Esta habilidad va ligada a la de
orientarse, mientras las mujeres se fijan más en los detalles. Esto se debe a que las
mujeres tienen el cerebro menos asimétrico, sus dos hemisferios parecen estar
menos especializados en sus funciones pero tienen el cuerpo calloso más
desarrollado. Estas diferencias, a parte de tener unas pocas bases sociales (desde
la existencia de los primeros cazadores recolectores) es mayoritariamente
biológica. Ya que son las hormonas XX en las mujeres y XY en los hombres, las
que provocan diferencias en el cerebro de cada uno. Esto explica que incluso la
homosexualidad tenga una base biológica, en el cerebro de los cuales hay una
región de tamaño más pequeño que en el resto de los hombres.

9. Guerra de genes
La biología es determinante en las capacidades intelectuales y en el
comportamiento de los individuos. Se inventaron ciencias falsas, como la
frenología, que establecía las facultades de cada persona según su tipo de cerebro,
la forma que tenía su cabeza. La inteligencia se empezó a medir cuando mandaron
a Binet que estableciera una escala para saber que niños entorpecían el ritmo de la
clase. Así surgió el Cociente Intelectual (CI) que se ha ido perfeccionando con el
tiempo. También se han hecho experimentos para comprobar que es lo que marca
la inteligencia, si el ambiente o la genética, y los resultados han sido que ambos
ejercen un papel muy decisivo.

10. El cerebro feliz


La droga ha existido a lo largo de toda la historia del ser humano. Desde reyes,
grandes eventos como la Revolución Francesa y personajes importantes como
Freud tuvieron relación directa. Las drogas (como la morfina) se parecen a las
endorfinas que crea el ser humano... pero ¿por qué las ajenas nos producen
problemas? No son totalmente iguales y es que las drogas traen tres
consecuencias: tolerancia, cada vez se necesitan dosis más altas para obtener los
mismos efectos; dependencia, la persona al recibir drogas exteriores, deja de creas
las interiores, por lo tanto sufre problemas pues necesita droga y por último,
dependencia psíquica, el individuo necesita la droga para sentirse bien al margen
de que cree o no endorfinas. Por otro lado, la química, que tanto ha mejorado la
vida de las personas en cuanto a fármacos se refiere, también ha proporcionado lo
contrario: drogas que cada vez destruyen más. Y es que, aunque intentemos
eliminar la tristeza, el dolor y otros sentimientos negativos, éstos también nos sirven
de defensa y nos enseñan a entender que no todo es siempre maravilloso y que las
relaciones humanas también tienen sus altibajos.

11.El cerebro artificial


Poco a poco el ser humano ha ido creando inventos más sofisticados, pasando por
el ENIAC (una máquina para calcular de 30 toneladas y 160 metros) hasta los
ordenadores actuales. Así, nació el chip, un microprocesador formado por un
circuito muy complejo que permite hacer operaciones lógicas y matemáticas. La
ventaja de estos inventos, como el ordenador, es que trabajan en paralelo y no en
serie yendo mucho más rápido. Pero a pesar de ello, el cerebro les sigue ganando
ya que es capaz de transmitir y recibir miles de mensajes al mismo tiempo. Y es
que aunque creen máquinas sofisticadas e innovadoras, siempre hay que
introducirles órdenes y programas para que hagan algo, mientras que el cerebro
humano no necesita maestro para aprender. El cerebro humano sirve de modelo
para intentar obtener máquinas con más precisión que sustituyan a los humanos en
ciertas tareas.

12. El cerebro del futuro


Cada tipo de ser humano se fue adaptando a una zona concreta (y los que no se
extinguieron) gracias a la creatividad humana. La evolución del ser humano se ha
acabado ya que ha llegado el momento en el que ya es capaz de dominar su
entorno y adaptarse a él; lo que domina ahora es la evolución cultural. La
mentalidad del ser humano fue cambiando y esto permitió que la gente investigara
dudas y así se fuera expandiendo el conocimiento; esto llevó a la tecnología y a la
revolución industrial. La cultura es cada vez más rápida y ya vemos los cambios de
pensamiento entre generaciones, así que... ¿cómo será el cerebro de los humanos
dentro de un siglo? Y es que aunque los nuevos inventos disminuyan una parte de
nuestra creatividad, nacen otras nuevas.
Podemos seguir el ejemplo del cerebro como una unidad sin centro, pero con
muchos puntos que se valoran y se ayudan entre ellos. Si la evolución cultural nos
ha llevado a un cerebro de esta índole, bien la evolución cultural nos podría llevar a
una sola colectividad.

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