Trabajo Final - Grupo 3
Trabajo Final - Grupo 3
Trabajo Final - Grupo 3
Facultad de Derecho
Trabajo Grupal
Grupo 3
Alumnos
Profesor
Lima, 2021
ÍNDICE
I. Normativa legal y reglamentaria
II. Concepto
III. Naturaleza jurídica
IV. Funcionamiento
V. Actos inscribibles
VI. Quórum para toma de acuerdos
VII. Jurisprudencia Registral Vinculante (Precedentes y Acuerdos Plenarios)
VIII. Resoluciones del Tribunal Registral
IX. Identificación de los principales problemas que se presentan e
identificación del estado actual de la cuestión. Determinar la necesidad
de reformas respecto a este tema
X. Bibliografía
II. Concepto
Ahora, en el tercer párrafo del artículo 145 del Reglamento de la Ley N° 27157, se
señala que, los propietarios de la Junta de Propietarios pueden renunciar a la
misma. Aunque ello no implica que el propietario deje de cumplir con sus
obligaciones y continúe gozando de los atributos de su derecho de propiedad.
IV. Funcionamiento:
El presidente de la
Junta de Propietarios
puede convocar a
elecciones de nuevo
presidente o
directiva.
Actos inscribibles
Por otro lado, el quórum requerido para que la elección sea considerada válida es,
en primera convocatoria, la mitad de los propietarios hábiles más uno, y en segunda
convocatoria con los propietarios que asistan.
Dado que interesa saber el criterio del TR con respecto a la naturaleza jurídica de la
junta de propietarios, en la Resolución N°711-2006-SUNARP-TR-L se establece
claramente que estas no constituyen personas jurídicas. La junta de propietarios se
inscribe en el registro de predios; si fueran personas jurídicas, se inscribirán en el
registro de personas jurídicas. Agrega el TR que la junta de propietarios “ha sido
creada por ley a efectos de regular el funcionamiento y administración de la unidad
inmobiliaria, estableciendo derechos y obligaciones de los propietarios, que se
encuentran recogidos en el Reglamento interno (…) la junta de propietarios
constituye un ente corporativo sin personería jurídica con la única finalidad de velar
por el funcionamiento y administración de los bienes y servicios de dominio común o
bienes en copropiedad, en la que son sus integrantes quienes en función de
votaciones deciden respecto del manejo de la unidad inmobiliaria ” (fundamento 4,
p. 5).
Dado que el caso se dio en el 2017, las sesiones virtuales no tenían tanta fuerza y
reconocimiento como ahora. Dicho ello, consideramos que las sesiones a través de
medios electrónicos serían la solución más accesible, dadas las circunstancias.
Es importante señalar que dicha norma ha sido derogada por la Ley 31194, ley que
modifica el artículo 21-A de la Ley 26887, Ley General de Sociedades “a fin de
regular las sesiones no presenciales y el ejercicio de los derechos de voz y voto no
presenciales en las sociedades”. Así, es posible seguir realizando sesiones no
presenciales, aunque la nueva norma aplica para los órganos de las sociedades,
personas jurídicas reguladas en el Código Civil y otras leyes especiales, de acuerdo
a la tercera disposición complementaria final. No encontramos ningún obstáculo
para que, el artículo en comentario sea aplicable a las sesiones de Junta de
Propietarios, incluso se torna necesario tomando en cuenta la necesidad de
regulación supletoria el vacío de la Ley N° 27157.
Como ya hemos venido mencionando a pesar que dicha junta no ostente la calidad
de persona jurídica se le deben aplicar las mismas reglas en tanto sea posible. Así
lo entendió el Tribunal Registral en la Resolución Nº 026-2021-SUNARP-TR-T del
18/01/2021 señalando que la Junta de Propietarios sí podía sesionar de forma
virtual incluso cuando su reglamento lo omita, señalando que dicho decreto debía
extender sus alcances a la junta de propietarios.
Hemos analizado a lo largo del trabajo los problemas que traían a las juntas de
propietarios respecto a los quórum y convocatorias para la celebración de las
sesiones. Ante ello consideramos que, en una eventual regulación normativa se
debe tener en cuenta si la convocatoria y participación de las juntas comprendería
solo a los titulares inscritos o también a los extrarregistrales. Para ello debemos
partir de lo dispuesto por el Art. 949 del Código Civil, en tanto que la propiedad de
un bien inmueble se transmite por el solo consenso, no siendo necesaria la
inscripción; por ello, la convocatoria también debe tomar en cuenta a los propietarios
no inscritos (Mora, 2018, p.83). Por otro lado, al momento de la calificación del
acuerdo puede existir discrepancia entre los titulares registrales y los asistentes a la
asamblea, por lo que el registro ha establecido que es suficiente con la asistencia de
los propietarios con dominio inscrito para llegar al quórum o mayoría necesaria,
desamparando así el derecho de los titulares extrarregistrales, situación que
consideramos debe preverse normativamente.
X. Bibliografía