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2014 - Peralta, Luz - Mujeres en El Peru

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MUJERES EN EL PERÚ 1968 - 1995

Un ensayo sobre la diversidad y heterogeneidad


de la participación femenina

Luz Peralta Apaza

HISTORIA

A H DI H A
Universidad Nacional Seminario de Historia
Mayor de San Marcos Rural Andina


H e c h o el D e p ó s i t o Legal en la Biblioteca N a c i o n a l del Perú N . e
2014-18960

Primera e d i c i ó n
Lima, diciembre 2014

© Mujeres en e! Perú 1968 -1995. Un ensayo sobre la diversidad y heterogeneidad de la


participación femenina
Luz Eladia Peralta A p a z a

© 1. edición
a

Seminario de Historia Rural A n d i n a - U N M S M


T i r a j e 5 0 ejemplares

Q U E D A P R O H I B I D A LA R E P R O D U C C I Ó N T O T A L O PARCIAL SIN PERMISO DEL A U T O R

SEMINARIO DE HISTORIA RURAL A N D I N A

Jr. A n d a h u a y l a s 3 4 8 , Lima 1.
Teléfono ( 5 M ) 619-7000 anexo 6158
C o r r e o electrónico: shra@unmsm.edu.pe
Página w e b : http://seminariohistoriaruralandina.org/

D i r e c t o r F u n d a d o r : P a b l o Macera Dall'Orso
Director: E m i l i o R o s a r i o Pacahuala

D i a g r a m a c i ó n y d i s e ñ o d e interiores: N o r m a G u t i é r r e z E n r i q u e z

L i m a - Perú
INTRODUCCIÓN

Un estudio sobre Las mujeres en el Perú entre 1968-1995 obliga referirse a un tema muy
amplio en un período signado por la crisis económica, social y político más álgida en el
país, tal vez si este habría sido sugerido antes de 1950 la tarea habría sido más sencilla,
1

pues gran parte se resumiría al entorno doméstico-privado circunscrito a la familia y a La


relación de esta con la sociedad en La formación de los futuros ciudadanos en el ámbito
urbano, y el reconocimiento de los roles femeninos en el entorno rural, sin la ola de
violencia que se precipitó hacia 1980.
Hoy nos encontramos frente a un giro significativo en la conquista del espacio
público, antes considerado masculino, en el que se desarrollan y aplican ideas, y se
toman decisiones vinculadas al poder en todas sus esferas. Pero este avance que podría
ser una conquista ideada por las feministas de comienzos de siglo XX en el Perú y en el 2

mundo , no ha seguido el curso esperado, cuál sería la asunción por parte de las mujeres
3

de su condición y acción reformadora por la vía del derecho; aquí observamos que son
otras las causas de la emergencia y protagonismo de las mujeres. El ingreso del Perú al
sistema económico mundial globalizado, en el que la prédica feminista fue absorbida por
el proceso económico neoliberal que puso en cuestión la vigencia de la tradicional
familia patriarcal, al someter al jefe de esta, a una situación crítica, con un mando que no
se sustenta en la capacidad de sostenerla económicamente.
Es preferible hablar de mujeres y no de la mujer por cuanto hay una diversidad
de posiciones, condiciones y relaciones que nos permiten identificar grandes grupos con
intereses similares, siendo Los más representativos aquellos que tienen que ver con el
área de residencia urbana y rural, que desde ya, le asigna a la urbana una serie de
subgrupos al interior, como La clase o los segmentos socioeconómicos y culturales; frente
a la rural, que, sobre todo, obedece a otras características de carácter regional (costa,
sierra y selva por ejemplo).

1
Este trabajo fue sugerido por encargo del doctor Pablo Macera en 1996 a modo de informe, como parte de un
proyecto más amplio, en el que participaron otros especialistas bajo su dirección. Cabe advertir que la clase
sociales en la segunda mitad del siglo XX.
2 Alvarado, 1912.
3 Roíg, 1981.
Por esa razón se ofrecen trece capítulos, que intentan presentar un panorama
general; los cuatro primeros (población, saiud, educación, trabajo), como ejes
transversales; el quinto y sexto tratan los desgrupos rurales más diferenciados, el Ande
(campesinos) y los de la Amazonia (indígenas); del séptimo al décimo, los que configuran
la complejidad de la mujeres en el ámbito urbano mediante el estudio de una clase
próxima al entorno del poder político, (clase media), servicios de asistencia en las
llamadas clases populares (vaso de leche y comedores populares) y, Las Instituciones
privadas que actuaron como vínculo entre ambos grupos en un período de inestabilidad
económica, social y político (las ONG).

Los últimos tres corresponden a la normativa (legislación), el ejercicio del poder


de las mujeres y la influencia de la vertiente ideológica constante de apoyo (al
feminismo).

Desde 1968 hasta 1995 las mujeres han atravesado un sinnúmero de caminos
que las han llevado a convertirse en parte expectante de la sociedad y la política
peruanas. La instrucción ha llevado a la mujer de la clase media y alta a participar en el
mercado laboral competitivo, cuando no, creativo, mientras que la pobreza destaca como
la palanca de aquellas que forman parte de la clase media y baja. Si hay un denominador
común para todos estos cambios, debemos considerar que este es el trabajo; la inserción
en el mercado laboral, sea cual fuere la modalidad y condición de la participación de las
mujeres, incorporó a cada una de ellas al engranaje de la vida pública, de la que hoy son
protagonistas.

Pero si bien el trabajo, la capacidad de adquirir ingresos, significó para las


mujeres el acceso a nuevas condiciones, otros aspectos debían ir de La mano, el marco
legal, en todas las áreas, debía ser adecuado a la reciente incursión femenina. Así salen a
relucir las organizaciones feministas como el acicate necesario para el fomento de
normas e instrumentos necesarios que permitirían la igualdad de derechos de hombres y
mujeres ante la ley.

Hacer una síntesis de lo hecho por las mujeres no es una tarea fácil, pues se debe
intentar comprender a todas, y porque cada actividad es siempre significativa, desde las
más tradicionales como son las labores domésticas y la crianza de los niños (trabajo
reproductivo), hasta las más novedosas para su género como las carreras profesionales
especificadas en ciencias, tecnología y en política . De todos modos, en el caso peruano,
4

es posible apreciar una línea de trabajo que sintetiza lo más resaltante de la actividad

4
Stolcke, 1992.

6
femenina en el transcurso de estos treinta años, la educación, y para ello debemos
remontarnos a los años cincuenta como lo indica Cecilia Blondet : 5

"Con la expansión del sistema educativo nacional iniciada en la década de


1950, se incorporaron a las aulas escolares un numeroso contingente de
niños y niñas. Este proceso fue el principal impulso para transformar la
ubicación de las mujeres en la estructura social, económica y política del
país".

Por otro lado, el incremento de la migración de las zonas rurales hacia las urbanas
ante la demanda de mano de obra por parte de las industrias {las que en el futuro dieron
origen a los llamados pueblos jóvenes) si bien solucionó un problema laboral, concentró
las oportunidades de mejora de vida en las ciudades.
Como todo movimiento social, el de las mujeres tampoco estuvo desligado de
ideologías vigilias ante las apremiantes situaciones políticas, así nacieron las propuestas
ante La incapacidad de las instituciones indicadas para superarlas. En ese sentido hay que
referirse a la juventud de los estratos medios y altos en las universidades, la influencia del
socialismo como la Revolución Cubana, el gobierno de Velasco Alvarado con el Sistema
Nacional de Movilización Social (SINAMOS), la crisis política y laboral de fines de los años
setenta y el fortalecimiento de los partidos; el segundo gobierno de Belaúnde y la
agudización de la polarización de las clases sociales tradicionales; la guerra interna iniciada
por una facción comunista ("senderistas"), y el gobierno de Fujimori, que tras el descrédito
de los partidos políticos optó por la desaparición de las dos cámaras legislativas (senadores
y diputados) convertidas en una sola, instauran una economía de mercado bajo un
gobierno con poder absoluto.
Lo más sobresaliente de la participación femenina en las últimas décadas ha sido
la creación de organizaciones de mujeres en los sectores menos favorecidos
económicamente en los años ochenta, a partir de la formación de unidades de distribución
de alimentos, que fueron en la mayoría de los casos, la única manera de sortear el hambre
entre las más pobres; y entre Las instruidas, construir una opción de Uderazgo. Los
programas de trabajo colectivo para la obtención de alimentos como los comedores
populares, el programa del vaso de leche y Las microempresas femeninas bajo
asesoramiento profesional por parte de las ONG, operaron de modo fundamental en las
dos últimas décadas del siglo XX.
Para elaborar este trabajo se contó con abundante bibliografía . En los sesenta y
6

setenta es común encontrar una bibliografía que se ocupa de la mujer pero casi siempre
Ligada automáticamente a la familia, como el reino de la mujer, su responsabilidad; y la

5
Blondet, 1995.
6
Proporcionada por el director fundador del Seminario de Historia Rural Andina, Pablo Macera.

7
condición de madre es, y no puede ser de otra manera, la más destacada; por ello, Los
programas y estudios que parten desde el gobierno se centran en la triada: mujer, niño y
adolescente, un claro ejemplo es La familia, la infancia y la juventud en el desarrollo
nacional, título de la conferencia convocada por el gobierno peruano que se llevó a cabo
en Lima en año 1967. Este tema aunque redundante es muy importante por cuanto refleja
los cambios que al interior de la familia se registran, ei trabajo reproductivo en el hogar va
siendo mejor considerado como tal, así como las otras actividades realizadas por la
esposa . 7
En las dos últimas décadas la mayoría de las publicaciones incidieron en la
participación de las mujeres en el mercado laboral; y en segundo Lugar, en la mujer
campesina, sobre todo en lo referente a su condición laboral, en el que destaca La
participación familiar en la producción y la crianza de los niños.
En el sector urbano, destacan los estudios correspondientes a toda la gama de
organizaciones populares de mujeres, a través de las estrategias de sobrevivencia y su
paulatino avance hacia el movimiento político. Este proceso ha sido ampliamente
estudiado por las ONG y de manera especial, la formación de líderes.
En materia de leyes, las ONG junto a las representantes en el poder legislativo,
incidieron en el aspecto laboral, es decir la capacidad de poder acceder a todos los puestos
de trabajo, consolidando su condición de mujer, sobre todo el de madre. La maternidad es
una condición propia de la mujer, la diferencia, por ello es materia obligada de las
abogadas feministas. La decisión de concebir o no, la penalización del aborto, entre otros
temas, no hacen sino demostrar que han conseguido Logros muy significativos; en ese
sentido, Los gobiernos han actuado favorablemente a pesar de las protestas de la Iglesia
Católica.
La participación de las mujeres en La política también es un tema recurrente
generalmente en la coyuntura electoral, todos concluyen en que los logros si bien no
corresponden a las expectativas, sí han servido para demostrar que lejos de ser una mera
representación inocua, esta es orgánica, de calidad, por lo que paulatinamente han logrado
participar codo a codo con sus compañeros de trabajo.
Al hablar de política estamos hablando de poder, y este se ofrece por varias vías,
junto a la legislativa, también está la ejecutiva, en la que incursionaron las primeras
ministras bajo el gobierno de Alan García (1985-90) , y que el régimen de Alberto Fujimori
8

consideró hacerlas parte de su gabinete de manera regular, lo es hasta el día de hoy.


Otras instancias de poder, además de la que se da, al interior de las agrupaciones
políticas, son las organizaciones civiles, de ellas han emergido üderesas en las

7
Ribera Díaz, s/f.
Ylda Urízar (Ministra de Salud) y Mercedes Cabanillas (Ministra de Educación).

8
organizaciones comunales populares. También se deben tener en cuenta a Los colegios
profesionales y a los sindicatos gremiales.
Cuando se miran por los grupos de trabajo comunal popular no se puede dejar de
mencionar a las ONG de desarrollo, instituciones privadas que suplen funciones que
corresponden al Estado porque este no asigna los medios necesarios. Las ONG que
trabajan con mujeres, tienen entre sus miembros directivos a gente que de alguna manera
conoce y/o participa de la corriente feminista, discurso que ha sido acogido por
instituciones de nivel mundial como la Organización de las Naciones Unidas, la
Organización Internacional del Trabajo, la Organización Panamericana de la Salud y
Organización Mundial de la Salud; lo que se comprueba porque inscriben entre sus
obligaciones conceptos como género, igualdad, trabajo reproductivo y otras nociones que
corresponden a una teoría que tiene claros resultados sociales y políticos.
Hay otros temas como son los perfiles de mujeres de distintos sectores,
principalmente las de la clase media, que ayudan a visualizar mejor los problemas de tipo
discriminatorio al competir en el mercado laboral profesional universitario.
Con esta pequeña síntesis de los que se verá más adelante, se puede concluir que
la literatura versa, sobre todo, de las carencias económicas; los reclamos, las conquistas y
los cuestionamientos parten de cada grupo socioeconómico según sus requerimientos más
urgentes. En el caso de las mujeres rurales y de los sectores populares generalmente se
parte de La demanda de alimentos, esta es la vía que conduce a su organización, porque
cuestionan su forma de vida y deben nacer frente y superar la discriminación social de
género. En los sectores altos, el problema estriba sobre el marco Legal que discrimina a las
mujeres negativamente frente a los hombres en torno a sus derechos privados y el
mercado laboral, porque también sobre ellas recae la responsabilidad familiar, por
añadidura, tiene que demostrar su capacidad superando en el desempeño de sus funciones
a un varón por la misma actividad, casi siempre por un sueldo inferior; salvo que ellas
encabecen la empresa o institución. A partir de estas consideraciones se opta después por
el nivel de vida y alimentos, tendientes a obedecer los dictados de la moda que se pubiicita
en los medios de comunicación. Las mujeres aunque iguales, diferentes.
Pero ¿Qué buscan las mujeres? En general, Las mujeres tienen como norte de sus
aspiraciones el bienestar y éxito de su "familia", de su grupo referencial primordial; creer y
saberse partícipe del diario quehacer productivo y; ser reconocida por ello con la garantía
de una vejez en el que, generaciones posteriores, tengan a bien retribuirle no solo los
servicios materiales sino también la cuota generosa de cariño puesto en ellos. Esta idea se
aplica a todos los niveles; el personal, el familiar, el laboral y también el político. ¿Qué es la
aspiración de cualquier ser humano?, efectivamente. Solo que la diferencia está marcada

9
en la sociedad occidental por la división social del trabajo, que sobrevalora el aporte de los
hombres frente a las mujeres. Se hace mención a la cultura occidental contemporánea, en
tanto que ha planteado encarecidamente este aspecto como problema y marca las pautas a
nivel mundial, incluso, problematizando, situaciones discriminatorias en donde las mismas
discriminadas no lo interioricen así.
La valorización de su función social en tanto seres con características biológicas
propias (reproducción específica y social) que hoy pueden controlar, frente a las
características de Eos hombres (fortaleza física), yace en su capacidad para desenvolverse
especialmente tanto física como mentalmente a través de la observación práctica, la
conservación, adaptación y permanencia de ios conocimientos adquiridos.
El sexo en los seres vivos es anterior al género humano y determina
necesariamente una condición de diferencia. Es la clara e ineludible condición para la
continuidad de la especie humana en este escenario. Hombres y mujeres, diferentes pero
igualmente importantes y complementarios.
Este trabajo presentado a modo de informe, se basó en una vasta bibliografía
contemporánea al periodo estudiado proporcionada por Pablo Macera. Material que fue
matizado con la experiencia de vida de quien lo ofrece; por lo que tiene un carácter de
ensayo. Es notable el uso recurrente de la información estadística presentada por el
Instituto Nacional de Estadística e Informática (iNEl) y La elaborada por Cecilia Blondet; y en
el caso del Vaso de leche, el texto de Aída García Naranjo, la más autorizada en este tema,
fue la base de una suerte de comentarios de quien observó parte del proceso desde el lado
opuesto, lo mismo puede decirse del texto sobre las empleadas del hogar de Martha Loza,
Rosa Mendoza y otras.
Es pertinente mencionar que en la elaboración de este trabajo no se contó con el
parecer de especialista alguno(a), por Lo que puede ser motivo de polémica y debate. Algo
que es necesario añadir, como se verá Las citas carecen de número de página, esto se debe
a que en determinado momento de su elaboración, los textos, que tuve en mi poder,
tuvieron que ser devueltos por razones de seguridad, casi la mitad carecía de los datos
específicos, entonces, para uniformizar la presentación de las mismas se optó por no
tomarlas en cuenta en ningún caso, ante la imposibilidad de de ubicarlos todas.
Agradezco al historiador Pablo Macera por la oportunidad de tratar el tema y ai
Seminario de Historia Rural Andina por publicarlo. A Miguel Pinto por la paciencia en la
entrega de este trabajo, y de manera muy especial a Norma Gutiérrez, encargada de la
edición, quien además seleccionó con mucho cariño y entusiasmo las imágenes que dan
vida a esta entrega.
Luz Peralta Apaza

10
1. MUJERES Y POBLACIÓN EN EL PERÚ 1968-1995

! oficiales de los censos


llevados a cabo entre 1961
y 1993, en tres décadas,

I esta se duplicaron, de
10'420 357 a 22'639 443
habitantes .1
Entre los
factores que originaron
este incremento, destacan
dos: el avance de la ciencia médica en el campo de la salud pública (vacunación,
raciones alimentarias, etc.) y, el rápido crecimiento de las ciudades producido por la
emigración de las zonas rurales en busca de mejores oportunidades de vida, efecto que se
corrobora en el incremento del porcentaje de la población urbana: 47,4% (1961), 59,5%
(1972), 65,2% (1981), 70,1% (1993); siendo el lapso entre 1961 y 1972, el que sobresale, el
apoderamiento de doce puntos adicionales en poco más de una década. En el cuadro de
los censos nacionales también se han colocado las cifras del censo de 1940, en el que se
indica que sólo el 35,4% de la población residía en las zonas urbanas, porcentaje que
evidencia como este proceso de migración a las ciudades es un proceso propio de la
segunda mitad del siglo XX.
Para el Estado, los censos son de sumo interés para diseñar las políticas
económicas y su implementación; el número de la población y sus características sociales y
económicas ofrecen un mapa de la situación del país y permite ver las oportunidades que
el país ofrece para la producción de bienes y servicios, comercio nacional e internacional, la
mejora de la calidad de vida, etc. Hay que advertir que el índice de masculinidad o
feminidad no fue tomada en cuenta para estos fines sino hasta la década de 1960, en el
que el crecimiento de La población empezó a ser un factor a tener en cuenta en las políticas
de desarrollo.

1
El Instituto Nacional de Estadística e Informática considera como cifras estimadas, además de la población censada,
la omitida y estimada en la Amazonia (Perú: INEI, 1995).
PERÚ: CENSOS NACIONALES DE 1 9 4 0 , 1 9 6 1 , 1 9 7 2 1 9 8 1 y 1 9 9 3
POBLACIÓN TOTAL, CENSADA (POR SEXO Y ÁREA DE RESIDENCIA)
OMITIDA Y ESTIMADA EN LA AMAZONÍA

CENSADA, OMITIDA Y ESTIMADA EN LA AMAZONIA


FECHA CENSAL

CENSADA Y OMITIDA

CENSADA OMITIDA
ESTIMADA TOTAL
Sexo Área de residencia EN LA
TOTAL
Hombres Mujeres índice de Urbana Rural % Población Total AMAZONIA
Relativa Total
mascuiinidad urbana
9Jun. 1940 3'067 868 3'14 0099 977 2'197 133 4'010 834 35,4 6'207 967 6,97 465 144 6673 111 350 000 7'023 111
2Jui. 1961 4'925 518 4'98í 228 98,9 4'698 178 5'208 568 47,4 9'906 746 4,00 412 781 10'319 527 100 830 10'420 357
4 Jun. 1972 6 7 8 4 530 6 7 5 3 678 100,5 8'058 495 5'479 713 59,5 13'538 203 3,86 543 556 14'081 764 39 800 14'121 564
12Jul. 1981 8'489 867 8'515 343 997 U'091 923 5'913 287 65,2 17 '005 210 4,10 727 021 17732 231 30 000 17762 231
11 Jul. 1993 10'956 375 U'091 981 98,8 ¡5'458 599 6'589 757 70,1 22'048 356 2,35 531 543 22'579 899 59 544 22'639 443

Fuente: Perú, INEI, 1995. Elaboración propia.


Los censos mencionados, con excepción dei de 1972, indican que la población
femenina superó a la masculina: en 1961 de un total de 9'906 746 censados, el 50,28%
fueron mujeres, en 1972, de 13'538 208, el 49 88%; en 1981 de 17'005 210, el 50 07%; y en
1993 de 22'048 356, el 50 30% . A partir de la década del setenta se inician las primeras
2

medidas en torno a la natalidad, y las mujeres empezaron a ser objeto de las primeras
fórmulas de anticoncepción y políticas gubernamentales en ese sentido. Esas políticas no
fueron interiorizadas por todas en igual forma, puesto que las mujeres viven en habitat
diferentes, corresponden a diferentes niveles socioeconómicos, y no siempre participan de
una misma línea cultural; he ahí uno de los obstáculos y la temeridad de proponer un perfil
de la mujer peruana y, a partir de este, aplicar un proyecto político general en la población
o en un sector con meridiano éxito, sin el peligro de afectar la dignidad de un gran
porcentaje de ellas . 3

En el Perú es fácil verificar que el aumento de la población no ha significado un


mejoramiento en la calidad de vida. Los últimos años de la década de 1970, la década del
1980, y los primeros años de la década de 1990, fueron testigos de condiciones
socioeconómicas y políticas de deterioro profundo que afectaron sobre todo a tos sectores
menos favorecidos, sectores cuya juventud (carentes de los recursos básicos y opciones de
vida dignos) podía sentir cierta inclinación por participar y manifestarse políticamente de
manera violenta, al extremo de participar en el atroz enfrentamiento interno iniciado por el
Partido Comunista del Perú (Sendero Luminoso) contra el Estado Peruano, que empezó en
1980 y menguó con la captura y el encarcelamiento de su líder en 1992. En este período
las migraciones no sólo se dieron por la búsqueda de mejores horizontes, más bien
estuvieron signadas por la vorágine senderista, que hizo buscar en las ciudades un poco de
seguridad y amparo, ya inexistentes en las zonas altoandinas, como Ayacucho, cuyo radio
de acción se extendió hasta la ciudad capital.

1.1. Población urbana y rural

Si bien el Perú es diverso geográficamente, una primera forma de identificar las diferencias
culturales para el presente estudio es diferenciar las poblaciones urbanas y rurales. En 1961
(ver el siguiente cuadro), la mujer rural representaba el 52.6% de la población, en 1972

> Aunque la fuente privilegia el índice de masculinidad: 97,7% (1940), 98,9% (1961), 100,5% (1972), 99,7% (1981) y
98,8% (1993) se ha considerado pertinente destacar el porcentaje que cada género ocupa del total. Esta constante
ha hecho que ios hombres suelan hacer bromas acerca de la "oferta" de mujeres, como una forma de justificar
graciosamente sus infidelidades.
3
Cierto es que las mujeres, en líneas generales, tienen una aspiración común, estar rodeada de un entorno estable y
agradable a través de un ingreso regular que permita a sus familias gozar de buena salud (física y mental) y dote la
debida preparación para incursionar en el plano con igualdad de oportunidades. Sin embargo, estas palabras poseen
diferente significado para cada una de ellas.

13
(once años después) el 40.3%, y en 1981 tan solo el 34.6%. Pero estas cifras daban
resultados globales en las que no se diferenciaban los departamentos, menos las regiones
de la costa, sierra y selva.

PERÚ: CENSOS DE 1 9 6 1 , 1 9 7 2 Y 1 9 8 1
D I S T R I B U C I Ó N DE LA FOBLACIÓN CENSADA POR SEXO,
SEGÚN ÁREA URBANA O RURAL Y E D A D

POBLACIÓN CENSADA

ÁREAS Y 196! 1972 1981


EDADES
Tota! Hombres Mujeres Tota! Hombres Mujeres Tota! Hombres Mujeres

TOTAL
9 906,7 4 925,5 4 98!,2 13 538,2 6 784,5 6 753,7 17 005,2 8 489,9 8 515,3
(en miles)

0-14 43,3 44,2 42,5 43,9 44,5 43,4 41,2 41,8 40,7
15-64 52,9 52,5 53,3 52,2 52,0 52,4 54,7 54,4 55,0
65 y más 3,8 3,3 4,2 3,9 3,5 4,2 4, i 3,8 4,3

URBANA
4 698,2 2 339,6 2 358,6 8 058,5 4 028,2 4 030,3 11 091,9 5 517,8 5 574,1
(en miles)

(*) (47,4) (47,5 (47,4) (59,5) (59,4) (59,7) (65,2) (65,0) (65,4)
0-14 41,3 41,8 40,8 4!,9 42,3 41,54 38,6 39,2 38,1
15-64 55,4 55,4 55,4 54,6 54,6 54,7 57,6 57,3 57,9
65 y más 3,3 3,8) 3,8 3,5 3,1 3,8 3,8 3,5 4,0

RURAL
5 208,5 2 585,9 2 622,6 5 479,7 2 756,3 2 723,4 5 913,3 2 972,1 2 941,2
(en mi íes)

(*) (52,6) (52,5) (52,6) (40,5) (40,6) (40,3) (34,8) (35,0) (34,6)
0-14 45,2 46,3 44,0 47,0 47,8 46,1 46,2 46,7 45,6
15-64 50,6 49,9 51,3 48,6 48,! 49,1 49,2 48,9 499,6
65 y más 4,2 3,8 4,7 4,4 4,! 4,8 4,6 4,4 4,8

(*) Porcentaje con respecto a ia población total.

Fuente: Gómez/Weinberger, 1992.

En 1981 (ver cuadros siguientes) se encuentra una serie de datos que demuestra
cómo se distribuyen las mujeres en cada departamento, y a la vez indica donde se registra
la mayor población rural; de esta manera son Cajamarca (79.4%), Huancavelica (75.3%),
Apurímac (74.2%) y Puno (68.2%), los que presentan una mayor población rural,
coincidentemente, en estos departamentos son las mujeres las que ocupan más del 50%
de la población rural de los mencionados departamentos, Una situación, que al cabo de
trece años no varió significativamente (guerra interna de por medio).

14
PERÚ: CENSO N A C I O N A L DE 1 9 8 1
P O B L A C I Ó N CENSADA POR ÁREA DE RESIDENCIA,
SEXO E Í N D I C E DE M A S C U L I N I D A D SEGÚN D E P A R T A M E N T O

índice de masculinidad
ÁREA DE RESIDENCIA SEXO
DEPARTAMENTO TOTAL
% % % %
Urbana Urbana Rural Rural Hombres Hombres Mujeres Mujeres

TOTAL 17'005 2IO 11'091 923 65,2 5'913 287 34,8 8'489 867 49,9 8'515 343 50,1 99,7

Amazonas 254 560 81 973 32,2 172 587 67,8 132 772 52,1 121 788 47,8 109,0
Ancasli 826 399 439 597 53,2 386 802 46,8 407 323 49,2 419 076 50,7 97,2
Apurímac 323 346 83 422 25,8 239 924 74,2 157 705 48,7 165 641 51,2 95,2
Arequipa 706 580 583 927 82,6 122 653 17,4 357 097 50,5 349 483 49,4 102,2
Ayacucho 503 392 183 688 36,5 319 704 63,5 245 447 48,7 257 945 51,2 95,2
Cajamarca f '026 444 211 170 20,6 815 274 79,4 508 955 49,5 517 489 50,4 98,4
Callao 443 413 440 446 99,3 2 967 0,7 225 734 50,9 217 679 49,0 103,7
Cusco 832 504 348 396 41,8 484 108 58,2 419 483 50,3 413 021 51,2 101,6
Huancaveiica 346 797 85 775 24,7 261 022 75,3 168558 48,6 178 239 50,4 94,6
Huánuco 477 877 148 427 31,1 329 450 68,9 240 502 50,3 237 375 49,0 101,3
ica 433 897 341 619 78,7 92 278 21,3 216651 49,9 217 246 49,6 99,7
Junín 852 238 510 662 59,9 341 576 40,1 426 536 50,0 425 712 51,3 100,2
La Libertad 982 074 631 529 64,3 350 545 35,7 483 315 49,2 498 752 49,6 96,9
Lambayeque 674 442 518631 76,9 155 81 1 23,1 332 172 49,2 342 270 50,0 97,0
Lima 4745 877 4'542 911 95,7 202 966 4,3 2'349 439 49,5 2'396 438 49,9 98,0
Loreto 482 829 255 290 52,9 227 539 47,1 249 331 51,6 233 498 50,7 106,8
Madre de Dios 33 007 15 960 48,4 17 047 51,6 19 623 59,4 13 384 50,7 146,6
Moquegua 10! 610 78 391 77,1 23 219 22,9 53 646 52,7 47 964 50,4 111,8
Pasco 211 918 121 802 57,5 90 116 42,5 108313 51,1 103 605 48,8 104,5
Piura 1 125 865 697 191 61,9 428 674 38,1 565 251 50,2 560 614 49,7 100,8
Puno 890 258 283 222 31,8 607 036 68,2 438 434 49,2 451 824 50,7 97,0
San Martín 319 751 181 210 56,7 138 541 43,3 167 175 52,2 152 576 47,7 109,6
Tacna ¡43 085 122 187 85,4 20 898 14,6 76 333 53,3 66 752 46,6 114,4
Tumbes 103 839 81 837 78,8 22 002 21,2 55 465 53,4 48 374 46,5 114,7
Ucayaii í 63 208 102 660 62,9 60 548 37,1 86617 51,8 78 591 48,4 107,7

Fuente: Perú. INEI, 1995.

15
PERÚ: CENSO N A C I O N A L DE 1 9 9 3 P O B L A C I Ó N CENSADA
POR SEXO, ÁREA DE RESIDENCIA E Í N D I C E DE M A S C U L I N I D A D
SEGÚN D E P A R T A M E N T O

de masculinidad
SEXO ÁREA DE RESIDENCIA

% población
urbana
índice
DEPARTAMENTO TOTAL

Hombres Mujeres Urbana Rural

TOTAL 22'048 356 10'956 375 11'091 981 98,8 15'458 599 6'589 757 70,1

Amazonas 336 665 172 603 164 062 105,2 119517 217 148 35,5
Ancash 955 023 470 111 484 912 96,9 548 028 406 995 57,4
Apurímac 381 997 190 005 191 992 99,0 133 949 248 048 35,1
Arequipa 916 806 455 200 461 606 98,6 785 858 130 948 85,7
Ayacucho 492 507 240 138 252 369 95,2 236 774 255 733 48,1
Cajamarca 1 '259 808 627 875 631 933 99,4 311 135 948 673 24,7
Caílao 639 729 318 188 321 541 99,0 639 232 497 99,9
Cusco 1 '028 763 517 798 510 965 101,3 471 725 557 038 45,9
Huancavelica 385 162 187 890 197 272 95,2 100 439 284 723 26,1
Kuánuco 654 489 327 379 327 no 100,1 252 778 401 711 38,6
lea 565 686 279 602 286 084 97,1 472 232 93 454 83,5
Junín T035 841 514 222 521 619 98,6 678 241 357 590 65,5
La Libertad ¡'270 261 624178 646 083 96,6 870 390 399 871 68,5
Lambayeque 92 795 449 573 471 222 95,4 709 608 211 187 77,1
Lima 6'386 308 3'126 615 3'259 693 95,9 6'178 820 207 488 96,8
Lorelo 687 282 353 587 333 695 106,0 398 422 288 860 58,0
Madre de Dios 67 008 37 883 29 125 130,1 38 433 28 575 57,4
Moquegua 128 747 66 843 61 904 130,1 106 601 22 146 82,8
Pasco 226 295 114 425 111 870 108,0 133 383 92 912 58,9
Piura 1 3 8 8 264 692 917 695 347 102,3 976 798 411 466 70,4
Puno í '079 849 535 830 544 019 99,7 423 253 656 596 39,2
San Martín 552 387 294 453 257 934 98,5 335 942 216 445 60,8
Tacna 218 353 111 808 106 545 114,2 195 949 22 404 89,7
Tumbes 155 521 82 426 73 095 112,8 136 287 19 234 87,6
Ucayali 314 810 164 826 149 984 109,9 204 795 110015 65,1
Fuente: Perú. ¡NEI, 1995.

16
En 1981, observamos que tan solo Lima, La Libertad, Lambayeque e lea figuran
como las ciudades que tienen más porcentaje de mujeres y que a la vez coincide con una
proporción más urbana. En 1993, las cifras no varían sustancialmente, pero ¿dónde la
población masculina es mayoritaría? A decir de las cifras, predomina en las zonas de la
selva y también en los departamentos fronterizos ¿habrá inconscientemente algún tipo de
protección que obedezca razones de sobrevivencia vital grupal? La excepción es Puno y es
comprensible, en Puno además de la situación de pobreza existe una variable, la fuerte
comercialización ejercida, sobre todo, por mujeres, que consiste en viajes semanales que
movilizan mercancías en las fronteras, tanto de manera legal como ilegal (contrabando),
desde mediados de la década del ochenta y mediados del noventa, comprobarlo es fácil,
tan solo remitirse a los archivos de los medios noticiosos que mostraron el contingente
femenino participando activamente en ese negocio. Un trabajo que exige mucha fortaleza
emocional, por los riesgos que ofrece, justificados con el amén de las respetables
ganancias.

1.2. En torno a las políticas de población

La Asociación Multídisciplinaria de investigación y Docencia en Población (AMIDEP) publicó


Problemas pobiacionales peruanos, que contiene una serie de ponencias de la Ira. Reunión
Nacional de Población (1978), evento importante al que asistieron los más destacados
científicos del área, y funcionarios de gobierno. En este evento, la directora asociada,
Violeta Sara-Lafosse, logró poner en consideración nuevas variables en cuestión, una de
ellas fue el "catolicismo", que hasta entonces no había sido públicamente cuestionado, ni
como parte del problema ideológico, lo que se dio a través de las palabras de Juan Julio
Witch:

"Esa élite religiosa conservadora (no muy numerosa pero influyente) no


puede ignorar el alto número de madres solteras y abandonadas, la
elevadísima tasa de fecundidad inclusive de aquellas que viven en unión
estable, el hecho de que casi la mitad de las que suceden cada año en el
país son de niños menores de cinco años; pero ellos están más
preocupados de "conservar" la pureza de la doctrina (que consideran
como tal) que en plantear y resolver Los problemas humanos reales del
país" .
4

El tema del control de la natalidad fue tomado en cuenta en las esferas


gubernamentales en 1968, a través del Arquitecto Fernando Belaunde Terry; hasta
entonces primaba una tendencia pronatalista, Manuel Prado sólo promovió los censos

4
AMIDEP, 1980. En 1985 AMIDEP organizó la Segunda Reunión y su publicación estuvo a cargo de Roger Guerra
García (1986).

17
de población. Belaunde reconoció la explosión demográfica como un problema y
apoyó los estudios demográficos, pero a decir de Juan Julio Witch, no se
comprometió con una política de población . 5
Después del golpe militar contra
Belaunde (1968), el General Juan Velasco Alvarado, tampoco abordó este problema; al
parecer no quiso tener inconvenientes con los grupos conservadores ni con los
intelectuales de izquierda, pero gracias al empeño del Instituto Nacional de
Planificación (INP), mediante el Pían Nacional de Desarrollo 1971-1975, se hizo un
censo (1972) que permitió la publicación de las "Proyecciones a largo Plazo de la
Población y la Economía del Perú", la coyuntura era la adecuada, 1974 fue señalado
como el Año Mundial de la Población, y se publicó el documento católico Familia y
Poblaciones, que puso sobre el tapete varios temas novedosos. En agosto de ese año
se realizó en Bucarest la Primera Conferencia Mundial de la Población, y el INP tuvo la
oportunidad de prepararse para este evento convenientemente y envió una
delegación que expuso lo siguiente:
"La posición del Perú, por consiguiente, es que el llamado problema
demográfico, forma parte de una problemática más antigua y más
real, que es problema de la justicia social en el mundo..." .
6

En la segunda fase del gobierno militar, bajo la presidencia del General


Francisco Morales Bermúdez Cerruti, se elaboraron los "Lineamientos de la Política de
Población en el Perú"; y en 1976, se difunde el concepto de "Paternidad Responsable",
propuesta del papa Paulo Vi, que recuerda los deberes del padre, concepto muy
importante porque puso énfasis en el fortalecimiento de la familia, la situación de la
mujer y del niño y, otros temas sociales, evitarse así una confrontación con la Iglesia.
Este documento no se aplicó sino hasta 1979, para aquel entonces ya gozaba de la
simpatía de las feministas del país y de casi todas las organizaciones sociales.
Correspondió a este período la polémica entre las políticas del control de la natalidad
mediante los métodos anticonceptivos (por pildoras, dispositivos intrauterinos, etc.) por
control de la natalidad con apoyo extranjero, en la creencia de que la riqueza producida
será mayor per cápita y mejoraría la calidad de vida y oportunidades para las nuevas
generaciones, la posición del gobierno militar de corte socialista, no consideraba esa
medida la más adecuada, porque las condiciones de vida podrían mejorarse si la
distribución de la riqueza fuese justa y estuviese acompañada de una óptima
producción por la vía del progreso basada en la educación.

5
AMIDEP, 1980.
6
AMIDEP, 1980.

18
Violeta Sara Lafosse analiza la situación de las mujeres, en forma global y
también por sectores y grupos sociales; y aborda además, las relaciones entre hombres y
mujeres para explicar la situación de las mujeres; toda una pionera, considerando que el
enfoque de Relaciones de Género recién se incorpora en Los estudios sociológicos a fines
de la década del ochenta en el Perú. Ella destaca y pone de manifiesto el comercio
sexual (prostitución) y su efecto inmediato y negativo en las mujeres respecto a Los
hombres; y como el estado conyugal de aquellas transita por relaciones inestables en la
convivencia, además, denuncia que las mujeres que adoptan este oficio no tienen un
respaldo jurídico Legal (en la década del setenta), donde incluso adolescentes incursionan
por esta vía de inestabilidad.
Violeta Sara Lafosse menciona las actividades de las mujeres identificado cinco
sectores, señala sus características en materia de trabajo, salud y educación; e incorpora un
enfoque psicológico sin dejar de considerar la evolución histórica a nivel mundial, con una
distancia prudencial de las ideologías de corte feminista:

1 - Sectores acomodados o medios: Las primeras, que gozan de muchos


beneficios que no están siempre encaminadas en desarrollar
seriamente una profesión, no manifiestan directamente tener intereses
delimitados (lo que no quiere decir que no los tenga) y están más
pendientes de la moda; algunas de las cuales, por no perder las
ventajas propias de su clase, soportan situaciones frustrantes, en el que
varias con formación universitaria, frustran su carrera al casarse y
formar una familia encabezada por un hombre con ideología patriarcal.
Las de los sectores medios, con un contingente de profesionales
(docentes, enfermeras, asistentas, etc.) que debe laborar y a la vez
deben transmitir una nueva visión de la realidad, sufren ante todo una
injusta remuneración, pues socialmente se entiende que su sueldo es
complementario.

2 - Campesina: De ella dice, que la concepción de "ama de casa" tan solo


obedece a las zonas urbanas y no corresponde a su realidad. No
obstante su participación en la actividad agrícola, padecen la
subordinación frente a sus esposos. Destaca sobre todo el impacto
negativo de la Reforma Agraria en las campesinas, porque no las
reconoce como presuntas adjudicatarias.

3- Obrera. Sara Lafosse resalta entre varias a la confeceionista a


domicilio, que lleva los cortes de tela para coserlos en su hogar, y que
tiene la "ventaja" de poder atender a la familia, sobre todo a los niños,
bajo la modalidad de "destajo", pero exenta de garantía alguna de índole
laboral.

4 - Ambulante: El 12.3% de la PEA femenina (1972) se dedica al


comercio al por menor, que va desde la venta en una habitación en la
casa o en la calle. La mayor preocupación va por el cuidado de los
niños.

19
5- Ama de casa. Las que se ven obligadas a tener el número de hijos
que el tipo de esposo en mayor o menor grado permita; la presentación
de este tipo de mujer es casi como la de un ser atrapado de marañas
ideológicas, legales y morales que debe ir en consonancia con lo que de
ella se espera, una docilidad que hace que la dignidad de la mujer
dependa de la voluntad del marido.

La autora cuestiona además la función de "ama de casa" como actividad


autónoma y exclusiva de las mujeres. Ella también estudió la situación de la mujer
campesina, que según sus cifras, tiene una actividad global del 11.85%.
Diez años después, AMIDEP publica "Perú: Tres temas poblacionales", con tres
artículos, uno de los cuales analiza el tema de la participación de la mujer en el sector
comercio; el segundo, de Eliana Chavez y Félix Lossio , que estudia la inserción de las
7

mujeres en este campo como consecuencia de los cambios poblacionales, a través de las
siguientes variables de carácter individual:
- Condición de migración
- Tiempo de residencia
- Educación
- Estado Civil
- Edad

Aunque, el problema también se aborda desde el plano familiar todo parece


indicar que su participación activa se debe al nivel de ingresos en la familia, sobre todo a
partir de la década de 1970 en adelante, justo cuando la depresión del salario de 1978
representa al 59% del salario real de 1973. El problema que ya se preveía era; que este
acceso no permitía a las mujeres una verdadera realización profesional, la estructura
ocupacional del sector moderno no mejoraría estas posibilidades . 8

1.3. Población y maternidad

Otra forma de apreciar a las mujeres en términos de población es a través de los gráficos
por edad y sexo, del que tenemos los siguientes resultados (ver cuadro) para 1980 y 1993
en Lima Metropolitana.

7
Chavez/Lossio, 1987.
8
AMIDEP, 1987.

20
LIMA METROPOLITANA: 1 9 8 0 Y 1 9 9 3
P O B L A C I Ó N TOTAL SEGÚN GRUPOS DE E D A D Y SEXO

1980
70 a +
C5-G9

G0-G4

5 5 - 5 9

50-54
-o
a 4 5 - 4 3
"G

tu 4 0 - 4 4
•V
3 5 - 3 9
t/1
O
30-34
ü.
E
<j
2 5 - 2 9

20-24

15-19

10-14

5-0

0-4

3 0 0 2 5 0 2 0 0 1 5 0 100 50 0 50 1 0 0 1 5 0 2 0 0 2 5 0 3 0 0

P O B L A C I Ó N (en m i l e s }

1993
1

ZZJ

z.:.;..:;.:::u
a.
g

13

400 300 200 100 0 100 200 300 400


P O B L A C I Ó N (en miles)

Fuente: Gárate/Ferrer, 1994.

Lo primero que salta a la vista es que entre los trece años la población se
incrementó notablemente sino que el número de mujeres de 1980 del grupo de edad de
cero a cuatro años, de 220 mil aproximadamente, (cifra que podía mantenerse en el 1993
en el grupo de edad de diez a catorce años), fue superada con creces, pues llegó a 360 mil
aproximadamente; y esto tiene una explicación, la migración hacia la capital, no solo de
hombres y mujeres en edad adolescente o adulta sino de niños y niñas, es decir la

21
migración familiar, precisamente en el lapso de La violencia política, que tuvo como
consecuencia, la llegada de costumbres regionales que en la mayoría de los casos,
sobrevivieron en la ciudad y, el desarrollo de ciertos mecanismos de adaptación laboral. La
reproducción cultural, cual privilegio, en manos de las mujeres, ha sido bien fomentada, de
tal manera que las novedades tecnológicas fomentaron un cambio sui generis en el nuevo
rosto de la ciudad.
Hacia 1993, se reconoce el alto número de familias conformadas por parejas de
jóvenes. Ello da oportunidad para fijar el interés por las mujeres madres de 12 a 17 años,
según datos que proporciona el Centro de Estudios y Acción para la Paz (CEAPAZ).

PERÚ: 1 9 9 3
MUJERES DE 1 2 A 1 7 A Ñ O S Q U E TIENEN HIJOS

CHILE

Fuente: CEAPAZ, 1994.

22
En este gráfico se aprecia que las madres adolescentes están sobre todo en la
zona amazónica, seguida por los departamentos de Amazonas, Cajamarca, Tumbes, Pasco,
Ayacucho y Abancay, una combinación de la pobreza y la falta de atención por parte del
Estado. La costa y las ciudades con vínculos comerciales no padecieron esa realidad de
manera tan dramática que aqueja a las mujeres de forma individual y desventajosa. Esta
situación representada en porcentajes da el siguiente resultado entre los grupos de edad
de doce a catorce años y de quince a 17 años. Se puede observar que la diferencia es
mayormente entre el segundo grupo, sobre todo en las áreas rurales por razones culturales.
Las niñas de menor edad, al parecer, ofrecerían además otro tipo de motivos, económicos y
delincuenciales, cuando no la seducción.

FERÚ:1993
M A D R E S ADOLESCENTES POR GRUPOS DE E D A D

El rostro de Lima, ha cambiado, efectivamente por la migración provinciana y sus


descendientes. Su 50% de componente femenino, aparentemente el factor "pasivo", juega
un rol permanente de estabilización, consolida no solo la personalidad del esposo, sino
reproduce los valores culturales al interior de las familias; por ende, su apoyo crea para ios
suyos el ambiente propicio, en el que cada familia, en vez de adecuarse a las normas (de
Lima por ejemplo), transforma el medio en el que reside. El rol de las madres, como

23
educadoras, es la base sobre la cual se apoya esta saludable proyección de los núcleos
culturales. He ahí la importancia de la familia, el hogar, el terreno llevado por las mujeres
cuasi hegemónícamente. Lo contrario ocurre con la migración de hombres solteros, pues
no ofrece estas garantías y corre el riesgo de formar una familia con una persona residente
que atraerá para sí a la pareja, lo adecuará al nuevo medio y lo hará partícipe de sus
costumbres, porque para ello cuenta con toda la familia residente. Como la mayoría de los
migrantes, una forma de mantener los vínculos del hogar es manteniendo la red de
vínculos, pero esta no solo funciona a nivel emocional, requiere de un traslado geográfico
que debe solventarse económicamente, pero ¿quiénes se trasladan las veces que sea
necesario al terruño para resolver o mantener los vínculos o representar los intereses de
sus maridos radicados en Lima? Los hombres en ese sentido tienen una movilidad más
limitada que las mujeres por las labores de trabajo y negocios (riendas que no se puede
soltar fácilmente).
Las mujeres podrían mejorar su condición si en sus manos tendrían el control de
la natalidad y la capacidad de desembarazarse de una serie de prejuicios que perjudican su
autoestima a través del avance de la ciencia. En el Perú, donde la cuestión de culturas
raciales baña y representa a las clases, existe la oportunidad de que ciertas variables
jueguen a su favor, precisamente, a partir de la migración.

24
2. SALUD DE LAS MUJERES PERUANAS

Este tema es
ineludible para
comprender a las
personas y
conocer a la -
sociedad, un buen
estado de salud
hace la diferencia
en el desempeño
de cada persona;
en este sentido
cabe recordar que tan importante como la salud física lo es la salud mental, por lo que
debe hacerse todo Lo posible para erradicar y prevenir todo aquello que la merme,
tanto en el ámbito privado como en el ámbito público; también crear medidas que
inhiban a las personas propiciar, por ignorancia o egoísmo, situaciones en el que se
generan condiciones de afección a la salud de forma física o psicológica.

Las políticas de salud en el Perú han puesto énfasis en aquellas enfermedades con
un alto índice de afecciones (TBC, diabetes, cáncer, etc.) y; tratándose de las mujeres,
circunscrita al aspecto maternal, sobre todo en lo que corresponde al embarazo y sus
repercusiones pre y post ambulatorias. A fines de la década de los años ochenta y en
adelante, la idea de desarrollar, en diversos sectores, estudios bajo el concepto de género
ha tenido una importante difusión. En los noventa esta perspectiva no escapó a la
formación médica, más aún, los estudios de género en medicina implicaron una actitud
coherente sobre las particularidades femeninas que van más allá de la función maternal.
No es difícil encontrar textos de la Organización Panamericana de la Salud (OPS) sobre
Género y Salud, ni estudios sobre la situación social de la alimentación (en el que cuentan
la dieta escolar, y los programas del Vaso de Leche; etc.).

25
En el campo de la medicina se han Identificado enfermedades que afectan
particularmente a las mujeres, enmarcados en la salud pública, que son actualmente
materia de investigación, sobre todo en el campo de la psiquiatría, en el que se ha
avanzado mucho, y en el que el apoyo psicológico es fundamental. Esta nueva
situación conviene a las mujeres que desean tener participación en los sectores del
poder y manejarse en las esferas de la legalidad, etc., protegidas por la "ciencia" y
respaldadas por las leyes, camino a la equidad respecto a los hombres, ya no hay
limites. En el rubro de la salud se espera que las diferencias se tengan en cuenta,
incluso, a la hora de prescribir los medicamentos, tratamientos, dosis y terapias, para el
restablecimiento de la salud.

2.1 Esperanza de vida, gasto público y participación femenina

Siempre es pertinente observar las cifras, en este caso las ofrecidas por BLondet y
Montero y las oficiales , porque ayudan a explicar el sector salud en torno a las
9 10

mujeres, estos datos son: esperanza de vida, sistemas y condiciones de salud,


mortalidad, morbilidad y; de manera disgregada, la reproducción. Se comprueba así
que el predominio del punto de vista maternal, la función reproductora, es patrimonio
de las mujeres.
En el primer cuadro, sobre la esperanza de vida, las cifras permite notar la
diferencia favorable hacia la mujer, de 3.6 años, la que al parecer, no variaría hasta el
año 2000.

PERÚ: 1 9 7 5 - 1 9 8 0 / 1 9 9 0 - 1 9 9 5
ESPERANZA DE VIDA AL NACER SEGÚN SEXO

AÑO TOTAL HOMBRES MUJERES

1975-1980 56,9 55,2 58,8


1985-1990 61,4 59,5 63,4
1990-1995 64,6 62,7 66,6
1995-2000 67,0 65,1 69,0

Fuente: Blondet/Montero, 1994.

9
Blondet/Montero, 1994.
'operú. INEI, 1995.

26
FERÚ: 1 9 5 0 - 1 9 5 5 , 1 9 7 0 - 1 9 7 5 Y 1 9 9 0 - 1 9 9 5
E V O L U C I Ó N DE LA ESPERANZA DE V I D A , POR SEXO

1950-1955 1970-1975 1990-1995

Fuente: Blondet, 1993.

En mucho los avances de la ciencia y la efectiva difusión de vacunas y


conocimientos preventivos son los responsables 2 ó 3 de esta mejor situación, porque lo
correspondiente al mejoramiento de ia calidad de vida, al menos en el Perú, no ha tenido
una efectiva cuota del Estado (gobiernos) que se refleje en el gasto público en salud entre
1980 y 1991, pues las cifras solo reflejan el descenso por donde se le aprecie, aunque

FERÚ,1980-1991
GASTO PÚBLICO EN SALUD

GASTO SALUD/
AÑO GASTO SALUD a/ GASTO TOTAL % GASTO SALUD/PBI. %

1980 41 4,8 1,12


1981 42 5,1 1,09
1982 34 4,4 0,90
1983 34 4,3 1,01
1984 36 4,3 1,01
1985 36 4,4 1,00
1986 38 4,7 0,95
1987 35 4,8 0,82
1988 24 4,9 0,62
1989 15 4,4 0,44
1990 11 3,6 0,33
1991 b/ 11 4,4 0,31
a/Nuevos soles de 1979.
b/ Datos Preliminares

Fuente: Biondet/Montero, 1994.

27
la población aumentaba cada día, la crisis económica en ese período repercutía
repentinamente en la frágil salud de las personas malnutridas (sobre todo ancianos,
mujeres y niños), la violencia doméstica, política, vehicular y delincuencial eran agentes al
acecho de la población mayoritaria y menos favorecida, y con agravantes en las zonas
rurales en constante peligro.
Las únicas opciones que las mujeres y el resto de la población mayoritaria tenían
para la salvaguardar ia salud eran los centros y puestos de salud, en los primeros al menos
contaban con un médico permanente, pero en los puestos no, a estos llegaban
periódicamente o nunca. La presencia va de acuerdo a este orden: Lima (como si fuera una
región), costa, sierra y selva. Según el cuadro "En 1990, existían 3 328 puestos de salud, lo
que significaba uno por cada 6 000 habitantes, y 777 centros de Salud, o sea uno por cada
27 000 habitantes, respecto a los ochenta, el número de centros y puestos de salud se han
incrementado en casi el doble" (Blondet/Montero, 1995); pero ello no quiere decir que las
calidad de cada centro de atención haya mejorado o se haya mantenido, fácil era
comprobar que los servicios de salud habían deteriorado.

P E R Ú : 1 9 8 0 , 1 9 8 3 , 1 9 8 5 , 1 9 8 8 Y 1990
D I S T R I B U C I Ó N PORCENTUAL DE CENTROS Y PUESTOS
DE SALUD EN F U N C I O N A M I E N T O POR REGIÓN

Total Nacional % Lima % Costil % Sierra % Selva

Año Centro Puesto Centro Puesto Centro Puesto Centro Puesto Centro Puesto
Salud Salud Salud Salud Salud Salud Salud Salud Salud Salud

1980 451 1408 27,2 4,3 33,7 28,1 31,5 48,7 7,5 18,8
1983 535 1670 28.0 6,0 32,7 27,4 31,4 48,0 7,8 18,6
1985 612 1769 29,2 5,6 32,5 27,6 28,4 47,9 9,8 18,8
1988 717 2847 22,0 8,7 38,0 223,6 30,3 43,8 9,6 23,8
1990 777 3328 21,8 10,6 36,4 23,3 30,7 44,7 10,9 21,4

Fuente; Blondet/Montero, 5994.

Por todos es sabido como el gobierno ha dejado a otras instituciones parte de


su responsabilidad y gestión en materia de gasto social, la salud pasó a ser
subvencionada por la misma población de manera directa; no solo en forma económica
por la vía de los impuestos, por la vía del trabajo asignado (en horas, acaso una especie
de mita encubierta) a las mujeres de las zonas urbano marginales en aquellos puestos de
salud que "funcionaron" las 24 horas del día y cuya sucursal era nada menos que la casa
de la "promotora de salud", que podía ser una ama de casa o vecina con entrenamiento

28
previo para ese fin. Mujeres que provenían de ios grupos organizados autónomamente
en los barrios de los distritos aledaños del centro de la ciudad que; por cierto, tenían así
unas "constancias" que en el futuro les servirían para poder acceder a un puesto de
auxiliar en algún centro de salud próximo. En Lima este programa, estuvo unido con el
Programa No Escoiarizado de Educación Inicial (PRONOEI) con el apoyo de la
Organización de Las Naciones Unidas (ONU) a través del Fondo de las Naciones Unidas
para la Infancia (UNICEF) y el Estado, que funcionó de manera similar, en ese caso con las
promotoras de educación inicial, llamadas "animadoras". Programas de emergencia que
no fueron fruto del azar, sino de planes muy bien trazados a partir de la evaluación de la
condición de las mujeres de los sectores urbanos marginales (sobre todo, del tiempo
Libre del que se podía disponer). La salud en ese sentido tenía un refuerzo preventivo,
porque los PRONOEI ponían énfasis en el aprestamiento bío-psicomotor, la adopción de
hábitos de limpieza, modales y el entretenimiento (juegos y lectura de cuentos). Un
subproducto de este programa fue la generación de poder en torno a las "promotoras" y
"animadoras", una condición que las enaltecía sobre sus congéneres, por cuanto
contaban con la información básica doméstica de sus vecinas y tenían contacto con "los
de arriba", Las instituciones públicas y ONG. Todo cuenta.
Antes, en la década de 1970, las primeras mujeres entrenadas en el campo de la
salud fueron las parteras, mujeres que atendían a aquellas mujeres que no podían contar
con la atención de la Maternidad de Lima; en segundo lugar, las voluntarias que
deseaban conocer más a fondo este tipo de servicios, un paso más hacia La meta, la
ansiada profesión de enfermera, saber leer recetas, usar el termómetro, aplicar
inyecciones, medir la presión, conocer los primeros auxilios, etc. Años en Los que no se
esperaban pagos justos, tan solo la satisfacción de servir y obtener el respeto por el
reconocimiento inmediato de sus "pacientes", algo creíble en Los setenta pero que en Los
ochenta pasó a un último lugar. En Villa El Salvador en 1973, a través de seis dirigentes
de salud, se captaron a 63 responsables en este programa, para ello se implemento una
farmacia, un centro de vacunación y un centro de capacitación, que costó a la Comunidad
Urbana Autogestionaria de Villa el Salvador (CUAVES) gestionarlos con sus propios
recursos (las pequeñas cuotas de sus vecinos), obtener el compromiso solidario de
profesionales altruistas en el campo de la medicina, que eran esperados con gratitud.
Esta modalidad fue adoptada por otras poblaciones. Mujeres convertidas en muros de
resistencia a las enfermedades y epidemias; muros con grietas, que con el paso del
tiempo, en la década de los años ochenta, se fortalecieron con la participación de las
ONG y La misma población.

29
LIMA METROPOLITANA: 1 9 8 0 - 1 9 9 3
PARTICIPACIÓN DE MUJERES EN GESTIÓN DE A C C I O N E S
DE SALUD A NIVEL DISTRITAL

N° DIRIGENTES
ORGANISMO
SALUD
DISTRITO/ AÑO RESPONSABLES DE ACTIVIDAD PRINCIPAL
ZONA % SALUD ACTIVOS REALIZADA

Hombres
Mujeres

Mujeres
/Total
2
o
í-
Villa El Salvador

1973 6 n. n. 63 Secretarías de Salud a Implementación de la farmacia


d. d. nivel de Grupos Comunal; Campanas de
Residenciales. Vacunación; y Capacitación de
Promotoras.
¡983-1985 6 3 3 50,0 102 Secretarías de Salud Reapertura Servicio Social de
1. Consejo de Salud de Grupos Residenciales. CUAVES y Farmacia. Campaña
la Comunidad Urbana 1632 Secretarías de Salud contra EDA. Inicio del Plan Único
Autogestionaria de de manzanas. de Salud: concentración de
Villa El Salvador 400 Promotoras de Salud. instituciones públicas y privadas.
(CUAVES) 1985-1990 6 T" T~ 50,0 106 Secretarias de Salud Desarrollo del Plan Único de
Grupos Residenciales. Salud.
1300 Secretarías Salud de Diagnóstico de Unidades
manzanas. Familiares de Alto Riesgo.
n. d. Promotoras Salud. Inmunizaciones.
150 Secretarias de Salud Campaña contra el cólera.
Grupos Residenciales, Campaña contra el SIDA;
n. d. Secretarias de Salud Campafia de nutrición del menor
de manzanas. de cinco años y M.G. Tratamiento
210 Promotoras de Salud. del embarazo.
Chorrillos

1. Villa Venturo 1980-1982 6 5 1 16,6 19 Promotoras de Salud. Campañas contra diarrea,


deshidratación y eliminación de
basura.
2. Héroes del Pacífico 1982-1984 5 - 5 100,0 n. d. Campañas contra la diarrea y
deshidratación.
1982-1989 8 8 100,0 70 Asistentas Sociales de Campanas contra la diarrea.
3. San Genaro Manzanas. Campañas de vacunación. Control
de Crecimiento y Desarrollo.
Detección de parasitosis.
1988-1990 8 2 6 75,0 17 Secretarias Generales Campañas de control nutricional a
4. Comité General de Salud. nivel de nueve asentamientos.
Salud del Sector Villa Aproximadamente 150 Jornadas Vacunación a nivel de 17
(Margen derecha) responsables de Salud de asentamientos de la Zona.
Base. Recuperación de ambulancia para
Centro de Salud de la zona.
San Martín de Porres

1984-1986 6 5 16,7 22 Promotoras de Salud. Campaña contra Parasitosis


intestinal.
San Juan de
Lurigancho
1986-1990 6 3 3 50,0 39 Responsables de Campaña contra la diarrea y la
1. Zonal La Piniella Salud del Programa Vaso deshidratación. Campaña contra la
de Leche. Poliomeüüs (a nivel distrital).
2. Comisión Mixta del 1986-1990 1 n. 5 50,0 300 Dirigenias de Salud. Campaña contra el Cólera a nivel
Municipio 0 d, distrital.
Ate - Vitarte

1. Comités de Salud a 1984-1986 3 n. n. 70,0 Aproximadamente 300 Administración de Botiquines


nivel de siete zonas de! 7 d. d. Promotoras de Salud. Comunales en cada zona. Control
distrito de Crecimiento y Desarrollo.
Campaña de despistaje de Cáncer
del Cuello Uterino.
Fuente: Blondet/Montero, 1994.

30
En líneas generales, la falta de recursos mínimos para garantizar la salud aunada a
la desnutrición condicionaron el riesgo de la salud, no es una casualidad que el Ministerio
de Salud asuma de cierta manera el suministrase de alimentos a los niños desnutridos y
ancianos de los barrios marginales. Además afectó mucho, la falta de los servicios básicos,
sobre todo el del agua potable, vital para la vida y la salud, de la que sólo goza en 1993, el
43% a nivel nacional, careciendo de esta el 92% de la población rural.

PERÚ: 1 9 8 1 Y 1 9 9 3
CARENCIA DE SERVICIOS DE AGUA Y DESAGÜE (%)

1981 1993

Hogares sin agua potable

Nacional 50,8 42,6

Rural 97,5 92,9

Hogares sin desagüe

Nacional 65,0 60,0

Rural 100,0 100,0

Fuente: Blondet/Montero, 1994.

Esto no tendría nada de raro si es que en las zonas rurales las aguas obtenidas
de sus ríos y sus manantiales fueran aptas para el consumo humano, pero no la
incursión de la industria extractora cercana a los poblados expulsa sus desechos
contaminando el agua y propiciando enfermedades; en este sentido, no solo la
población estaba siendo afectada, sino también la ecología, como se ha interiorizado
en la importancia de su conservación, es claro deducir que la corrupción del medio
ambiente agravaba la precaria salud de la población rural. Y no solo la falta de agua
sana, la carencia del servicio del desagüe, y también la falta de otros servicios básicos
{electricidad, teléfono, carreteras, etc.) aislaba de todo beneficio a los pueblos rurales.
Comparando las cifras de Blondet y Montero con las del INEi, se observa que
en el primer caso, en 1993, la zona rural que carecía del servicio de desagüe
representaba el 100%, mientras que para el INEI en 1995, dos años después, este
servicio pareciera haber llegado a más del 10% de la población rural. Coincide este
lapso con la captura del líder de la organización política llamada "Sendero Luminosos"
y los cambios económicos sobrevenidos con la nueva carta magna, después del
autogolpe del presidente, ingeniero Alberto Fujimori Fujimori.

31
PERÚ:1995
HOGARES C O N NECESIDADES BÁSICAS INSATISFECHAS
(% DEL TOTAL DE LOS HOGARES)

FÍSICAS INADECUADAS

Fuente: Perú. INEI, 1995.

2.2 Mortalidad femenina

Saber cuáles son las enfermedades que más repercute a las mujeres, las enfermedades que
causan la muerte en ellas y la comparación de estas enfermedades entre mujeres y
hombres es muy importante; para ello se cuenta en primer Lugar con un cuadro del Centro
de Estudios de Población y Desarrollo" que proporciona cifras de 1970 (ver cuadro
siguiente). Según la información, la diferencia más saltante es la que corresponde a los
accidentes, para las mujeres representa el 3.58% de (a causa de su muerte, mientras que
para los hombres es el doble, 8.05%; quiere decir que de cada cien muertos hombres, ocho
murieron por accidentes y/o muerte violenta. Ese año las mujeres murieron más por
problemas en el aparato respiratorio (28.02%), seguido por las infecciones y enfermedades
parasitarias (27%). En el resto de enfermedades no se destacan diferencias mayores;
notamos más bien que sí se manifiesta una propensión a las enfermedades que tienen que
ver con la sangre y órganos hematopeicos. Pensemos en el SIDA en los noventa, en el que
las mujeres van alcanzando de manera progresiva a los hombres. Los tumores o neoplasías
también se muestran significativas.

" CEPD, 1979.

32
PERÚ: 1 9 7 0
CAUSAS DE MORTALIDAD POR SEXOS
(CIFRAS RELATIVAS)

Total Hombres Mujeres

Causas 100,00 100,00 100,00


Infecciones y parasitarias 26,81 26,67 27,00
Tumores 4,68 4,03 5,38
Alergias y glándulas endocrinológicas y nutrición 2,31 2,09 2,54
Sangre y órganos hematopeicos 1,09 1,00 i,19
Mentales y psiconeurosis 0,28 0,44 0,09
Sistema nervioso y órganos de los sentidos 3,65 1,80 1,48
Aparato circulatorio 7,54 7,22 7,89
Aparato respiratorio 27,87 27,62 28,02
Aparato digestivo 4,45 4,91 3,94
Aparato genitourinario 1,41 1,30 1,51
Complicaciones del embarazo, parto y puerperio 0,92 1,91
Piel y Tejido celular subcutáneo 0,19 0,18 0,19
Sistema osteomuscular y del tejido conjuntivo 0,61 0,45 0,78
Anomalías congénitas 0,64 0,69 0,59
Causas de morbilidad y mortalidad perinatales 0,04 4,86 5,23
Síntomas de estados morbosos mal definidos 8,63 8,59 8,67
Accidentes, envenenamientos y violencias 5,90 8,05 3,58

Fuente: Centro de Estudios de Población y Desarrollo (CEPD), 1979.

Cecilia Blondet nos presenta unos gráficos correspondientes al año 1983 pero
antes explica:
"El cuadro de principales causas de muerte en Perú es una clara
combinación de enfermedades tradicionales y de menores
(respiratorias, agudas y digestivas), junto a otras modernas y de adultos
(tumores malignos y enfermedades del corazón). Ello debido a varios
factores: por un lado, el proceso de transición demográfica que
atraviesa el país (con sus distintos ritmos regionales), por otro lado a
las radicales diferencias en las condiciones de salud, que presentan las
zonas urbanas y rurales, asociadas también a Los niveles
socioeconómicos y educativos" . 12

En el siguiente gráfico se muestran las causas de muerte por edades.

12 Blondet. 1993.

33
PERÚ:1983
PRINCIPALES CAUSAS DE MUERTE
EN EDADES ADULTAS, P O R SEXO

A d u l t o s d e 15 a 24 a ñ o s

(por de» mil]

9 77,5
(por cien mil)

^E^f-^.^
iO.7 47,4 ¡¡ 52.6 % lt,í

Si,7 %

i 0.0
ICO.0%

CGmpü(ic¡ancs del embirijo.pjfio j pucrpirio

54.9 S
IA 45.1 %

4,0 50.3 S 49,7% 3,9

T w i w t i milt¡noi

15.7 X S4.355 S.0

A d u l t o s de 25 a 44 a ñ o s

13,0 VA

lfl,3 0.0

CorrpFicifbnc^ Jet cmbiraw, pjrto ¡f puerperio

13,1
Al
Turorcí m»B¡r.oi
32.9% e.7

50.1 X 49.9 X li.l

12,3 18,4% 53,0

Aí<Mtn«l

IU 53.1
•2D -
cnfcrmcJieTe: del ÍOIJÍÚ"
10.1

Fuente: BlondeE, 1994.

34
Desde los 15 a los 24 años Eos hombres siguen marcando el paso en cuanto a los
accidentes un 77.3% frente al 22.7% en cifras globales tanto hombres como mujeres suman
el 28% de las causales de muerte; este número debió ser más alto en la década del noventa
por cuanto la liberalización del mercado hizo que la compra de las llamadas "combis"
creciera indiscriminadamente sin que a los choferes se les exigiese requisitos mínimos de
seguridad vial. La competencia por llenar sus unidades, hizo que llevaran el rótulo de
"asesinas" por parte de sus usuarios. Que podría significar esta diferencia, parecería claro
que se debía a que en la década de 1970 las mujeres recién estaban conquistando el
mercado laboral en el espacio público, por lo que las posibilidades de sufrir un accidente
fuesen escasas, pero en 1983 ya había un gran contingente, que además de trabajar salía a
estudiar en academias, universidades y otros centros superiores de educación; quedaría
una hipótesis que tiene que ver con la protección de la vida, el cuidado, la prudencia, el no
correr un riesgo que pueda privar de sus vitales servicios a su prole; un sentido que no es
privativo de la madre sino, al parecer, de la mujer. Regresando a ese rango de edad, de 15
a 24 años, las mujeres tan solo acusan la diferencia fundamental de riesgo que tiene que
ver con la maternidad, el parto. El corazón y los tumores, afectan en este caso la vida de
ellas, en tanto provienen de malformaciones o enfermedades que se agudizan más en el
rango de 25 a 44 años, tanto el corazón como, los tumores crecen con mayor incidencia, y
sobre todo los tumores malignos en las mamas y el cuello uterino. En cuanto a los
accidentes, los hombres superan su récord previo. En el conjunto de tipos de cáncer las
mujeres son las más afectadas, un tercio está localizado en su aparato reproductivo; en esa
línea, los hombres tienen un 12.9% de cánceres a la próstata, respecto del total . 13

Datos más recientes de lo que significa el cáncer en las mujeres ofrecidas por el
Instituto Nacional de Enfermedades Neoplásicas (INEN) están en el Compendio Estadístico
volumen N° 1 del ÍNEI de 1993, cuyas cifras generales presentan 3 989 casos de mujeres
frente a 1 887 registrados en el ÍNEN . Según estos se puede constatar que en primer
14

lugar la neoplasia más común es la del cuello uterino (1 150 casos), un tercio del total
correspondiente a las mujeres; en segundo lugar se ubica el de mama (849 casos) poco
más del 20%; seguido de Los que tienen que ver con el aparato digestivo. Los hombres sin
embargo tienen La afección al aparato digestivo como la primera causa, del total de 1887
casos, 211 son del estómago es decir el 11.2% (acaso, el comer fuera del hogar haya tenido
que ver con dicha cifra), seguida de leucemia (146 casos) y la próstata (140 casos).

13
Blondet, 1994.
14
ÍNEI. 1995.

35
2.3. Salud reproductiva

El gran tema en materia de salud de las mujeres es el de la actividad reproductiva, este es


el centro de todos los estudios más avanzados, el comportamiento va desde aquellas que
optan por no tener hijos teniendo la capacidad física para ser madre, hasta las que
necesitan acudir a los profesionales médicos para concebir, aunque sea fuera de la matriz,
o con óvulos ajenos, y precisar de un vientre de alquiler para su gestación. En esta materia,
los médicos, que han estudiado el cuerpo de las mujeres, han desarrollado métodos del
control reproductivo, e intentando controlar el número de las nuevas generaciones. Un
control, hasta entonces privativo de Los hombres, en tanto que el número de médicas crecía
algo más del 13% (registrado en 1990 por el Colegio Médico del Perú ver capítulo sobre el
poder). Los cuadros estadísticos a nivel mundial mostraban cifras muy claras sobre la tasa
de fecundidad a nivel mundial, véase:

MUNDO: 1994
FECUNDIDAD

Promedio de partos por mujer

Las tasas de fecundidad varían notablemente en todo el mundo

Las tasas de fecundidad están relacionadas con el bienestar de las madres y los niños.
Cuando se producen demasiados nacimientos en poco tiempo, o cuando las madres
son muy jóvenes o muy adultas, aumentan las tasas de mortalidad enfermedad, y la
deficiencia nutrlcional en los hijos.

36
Primero veamos las tasas de fecundidad a nivel mundial, América Latina está en la
media de África y Europa con América del norte. La salud reproductiva de la mujer está
directamente ligada a la población, a los estudios demográficos y al diseño de las políticas
públicas. La población está en manos de las mujeres, son la garantía de la existencia de la
sociedad; no obstante en el Perú (cuyo carácter patriarcal perenniza los apellidos paternos),
sobre todo en las ciudades, se tiene a menos el nacimiento de las mujeres frente al de los
hombres, cuyo alto número no garantizará en nada la existencia de La nación (crecimiento
de la población), una forma de pensar que en los últimos años va disminuyendo en tanto la
instrucción pública y privada prepara a las mujeres para el mercado laboral.
En el cuadro siguiente, las cifras correspondientes al Perú tienen que ver sobre
todo con los programas especialmente diseñados para este logro, concentradas en las
zonas urbanas (conviene recordar la información vertida en el capítulo sobre la población),
han dado como correlato un descenso de la tasa de natalidad que, a partir de la década de
1970, ha descendido en los últimos cincuenta del siglo XX.

PERÚ: 1 9 5 0 - 1 9 9 3
E V O L U C I Ó N DE LA F E C U N D I D A D

Quinquenios 1950- 1960- 1970- 1975- 1980- 1985- 1990-


1955 1965 1975 1980 1985 1990 1995

Hijos por mujer 6,9 6,9 6,0 5,4 4,7 4,0 3,6
Nacimientos anuales (miles) 384 495 574 617 627 636 659

Fuente: Blondet, 1993.

Pasar de casi siete hijos por mujer a 3.6 parece ser un éxito, un gran avance, se
trataba entonces de aproximar el número de habitantes a las posibilidades económicas con
el que un país garantizaba un nivel de vida "decente". Seguir la vía que Europa había
optado y que en los años sesenta y setenta se mostraba en "vitrina" como un indicador más
de los países del primer mundo era la voz. En la década del sesenta, el Perú apostó por
adecuar el número de los seres humanos a los números de su "cristalizada" producción
tercermundista, despreciando su inmedible vitalidad y capacidad creativa e inventiva en su
territorio de 1 285 216 20 Km , que tuvo en los entes privados, a sus más serios activistas,
2

que nunca mencionaron la injusta distribución de la riqueza como el principal agente del
empobrecimiento de la mayoría de la población.

37
PERÚ:1977-1992
F E C U N D I D A D SEGÚN FACTORES DIFERENCIALES

ENAF ENDES ENDES


1977-1978 1986 1991-1992
ZONA
Urbana 4,5 3,1 2,8
Rural 7,4 6,2 6,2
EDUCACIÓN
Ninguna 7,3 6,6 7,1
Primaria incompleta 6,7 5,4
Primaria completa 5,1 4,3 5,1
Secundaria y más 3,0 2,9 3,1
Superior y más - .
1,9
REGIÓN n.d.
Lima Metropolitana 3,43 2,5 n.d.
Resto de la Costa 4,9 3,8 n.d.
Siena 6,7 5,4 n.d.
Selva 7,3 6,0 n.d.
ENAF: Encuesta Nacional de Fertilidad, 1977-197S (INE1)
ENDES: Encuesta Demográfica y de Salud Familiar, 1986 (1NE). No incluye Apurlmac, Ayacucho y Huancavelica.

Fuente: Bíondet, 1993.

La agrupación por zonas, tanto urbanas como rurales, permite ver que la
fecundidad de las mujeres mantiene en ambas una diferencia de tres puntos, si la
fecundidad es un indicador de desarrollo, se constata que La zona rural con relación a la
urbana no ha mejorada en nada (basta echar una ojeada por los periódicos). En las zonas
urbanas, La educación, la instrucción, refleja con claridad su efecto en la baja de la
fecundidad. La educación secundaria sobre este tema sería al parecer la más efectiva entre
Las mujeres, ello tendría que ver sobre todo con la información brindaba en los setenta, los
ochenta y Los noventa; pero el tema de La sexualidad, con mención al control de La
natalidad, no se difundió debidamente en Los últimos años de la educación primaria, sobre
todo en las zonas rurales, donde la unión de parejas se da a muy temprana edad. La
educación primaria no pudo hacer nada at respecto, por cuanto el asunto de informar a los
menores sobre estos asuntos pasaba por una serie de técnicas, no sin razón, aunque a La
Larga obstaculizan la mejora de calidad de vida de un gran sector de la población; aún más,
cuando la juventud adolescente poco piensa en el afecto reproductor de La satisfacción
sensual. Hombrecitos y mujercitas que tienen en la publicidad, a agentes de incitación y
distorsión que entorpecen su madurez y pierden el cuidado en amenazas tan graves como
el terrible Síndrome de Inmunodeficiencia Adquirida (SIDA). Lima a pesar de todo es la
primera en controlar su natalidad, según Los datos para 1991-92.

38
Al cabo de un lustro, a puertas del siglo XXI, emergió el fenómeno de las fiestas para
adolescentes, el crecimiento de madres niñas de entre 14 y 16 años se va convirtiendo en un
problema de salud familiar que no necesariamente desemboca en un drama económico, a
diferencia de la década de 1980, son nuevas las circunstancias que el INEI prevé en ascenso.

FERÚ: 1 9 5 0 - 2 0 0 0
TASA Y ESTRUCTURA DE F E C U N D I D A D POR Q U I N Q U E N I O ,
SEGÚN E D A D DE LA MUJER

Años 1950 1955 1960 1965 1970 1975 1980 1985 1990 1995
1955 1960 1965 1970 1975 1980 1985 1990 1995 2000

Tasa Global de 6,85 6,85 6,85 6,56 6,00 5,38 4,65 4,00 3,43 2,98
Fecundidad

ESTRUCTURA (%)

Total 100,0 100,0 100,0 100,0 100,0 100,0 100,0 100,0 100,0 100,0

Edad de la Mujer
15-19 9,48 9,48 9,48 7,80 7,19 8,60 7,97 8,55 9,16 9,65
20-24 20,64 20,64 20,64 20,20 20,56 22,16 21,98 23,02 24,04 24,83
25-29 23,15 23,15 23,15 23,10 24,35 24,66 24,15 24,49 24,77 24,95
30-34 20,25 20,25 20,25 21,30 22,15 20,45 20,57 20,23 19,84 19,51
35-39 14,94 14,94 14,94 16,40 16,77 16,16 15,68 14,94 14,21 13,64
40-45 8,24 8 24
f 8,24 7,90 7,38 6,47 7,86 7,23 6,62 6,19
45-49 3,31 3,31 3,31 3,30 1,59 1,51 1,79 1,55 1,36 1,22

Fuente: Perú. INEI, 1995. Elaboración propia.

Si vemos las edades entre 15 a 19 hasta 1965, años la tasa que le corresponde es
de 9.48%. Esta generación, a pesar de La liberación sexual (hablamos del componente
urbano) mantiene la relación, cuando debido a la reconocida influencia de los avances en
materia de educación de los cincuenta con Odría debió mostrar alguna baja en la cifra (son
años en los que el acceso al trabajo y el movimiento feminista en el Perú tenía cierto eco
entre las mujeres). El porcentaje de hijos en ese rango de edad baja considerablemente en
los años setenta, pero este sólo perduró hasta los años ochenta, porque en los noventa
volvieron las cifras de los años cincuenta. ¿Qué habría sucedido? Un futuro estudio sobre
los sangrientos años de la década del ochenta permitiría establecer, cómo intervinieron: La
falta de maestros y servicios públicos en Las zonas más alejadas y signadas por la violencia,
el ansia de vivir, no perecer, aunadas a un progresivo mejoramiento de la economía a partir

39
de los años noventa; puesto que la proyección para el año 2000 crece, con una proyección
de 9.65%. De esta manera se hacía urgente tomar medidas para que esa situación no
generase en las precoces madres serios obstáculos para su futura independencia personal.
En el caso de los grupos étnicos amazónicos, a pesar de su escaso número respecto a la
población nacional, pareciera que una fuerza superior Les exigiera ser los más "empeñosos"
en crecer; con derecho a enseñorearse en sus respectivas áreas, por un "derecho
consuetudinario" cuyas raíces proceden de la etapa preincaica, frente a las amenazas
políticas, económicas y sociales que deben afrontar. Consideraciones que deben estar
presentes a la hora de emprender políticas de salud, muy diferentes a las zonas urbanas,
puesto que la precocidad obedece también a diversos aspectos culturales.

PERÚ:1993
TASAS ESPECÍFICAS DE F E C U N D I D A D DEL PAÍS
Y DE LOS PUEBLOS ÉTNICOS M Á S F O E L A D O S

— PAJS +PUEBLOS ÉTNICOS

0.-*

15-19 20-24 25-29 30-54 35-39 40-44 45-49

Fuente: Perú. INEI, 1996.

Ingresando al tema del control de la natalidad, en este lapso tuvo ante sí a dos
frentes: el más claro es el aspecto económico que afecta a la población a nivel nacional y a
nivel del núcleo familia; el otro es una grave consecuencia del primero, la negativa por parte
de los progenitores (generalmente el padre) de responsabilizarse de sus hijos, sea cuales
fueren los motivos.

40
A la falta de medidas apropiadas de contra concepción (por ignorancia o por
falta de medios para acudir a un profesional médico), el aborto se presenta de manera
alarmante, las noticias de este tipo de prácticas tan solo llegan cuando este acabó con
la vida de una mujer, y en la mayoría de los casos, no hay manera de registrarla; sobre
este punto Blondet refiere: "No existe información consolidada sobre el número de
abortos registrados, cuya práctica es considerada un delito. En otros países
latinoamericanos se estima que uno de cada tres embarazos concluye en aborto" . 15

Pero tenemos un cuadro que tanto Marfil Francke , como Blondet 16 17


utilizan del
Ministerio de Salud.

PERÚ: 1 9 7 7 - 1 9 7 8
TASAS DE ABORTO SEGÚN REGIONES DE SALUD
(Tasa p o r mil n a c i d o s vivos)

REGIÓN DE SALUD i 977 1978

Ñor Occidental 126,6 125,3


Ñor Medio 142,7 151,4
Oriente 144,8 154,9
Centro Oriental 159,9 178,2
Centro Medio 155,6 173,7
Sur Medio 137,2 138,1
Sur Occidental 135,5 158,0
Sur Oriental 120,8 143,0
Sur Altiplánico 272,0 211,9
Lima Metropolitana 131,0 131,0
Todas las regiones 137,0 142,7

Fuente: Blondet, 1993.

Según este, es la zona del sur altiplánico la que más abortos presenta, superando
los 211 9 casos por cada mil nacidos vivos. Esta situación de seguro ha variado, no en
cuanto a su frecuencia, sino debido a Las nuevas condiciones que la década del ochenta
ofreció, la migración forzada por causa del terrorismo y La crisis económica. Por otra parte,
las cifras de muerte dadas para 1983, por segmentos de edad, podría acaso mantenerse, y a
lo mejor en el caso de las menores de 24 años, crecer.

15
Blondet, 1993.
16
Francke, 1985.
1 7
Blondet, 1993.

41
PERÚ: 1 9 8 3
MUERTES POR A B O R T O , SEGÚN E D A D

EDAD % Tasa
(por cien mil mujeres)

15-24 16 23,5 0,9


25-34 26 38,2 1,9
35-44 13 19,1 1,4
45-54 3 4,4 0,5
Desconocidos 10 14,8 -

Total 68 100,0 0,6

Fuente: Blondet, 1993.

Las razones de la mortalidad de las más jóvenes, pudieron deberse a la


dificultad encontrada para plantear esa situación frente a sus padres o familiares; en las
mayores, el limitante es sobre todo económico, incluso con la existencia de un hogar
establecido, la incapacidad de mantener a una nueva vida y La necesidad de ahorrarse
gastos médicos extraordinario es un componente de riesgo. La muerte acecha cuando
la adolescente acude a un lugar clandestino o cuando una madre de familia no tiene
los recursos adecuados para practicarlo "adecuadamente". Pese a que Las políticas de
aquellos gobiernos apuntaron a una reducción de la tasa de fecundidad, Los esfuerzos
tan solo se dedicaron a la seguridad de la etapa prenatal y post-natal (velar por el
nuevo ser), y descuida a aquellas, que pasan el trance solas, que con sus propios
medios procuran evitarse un problema, evitárselo a los suyos, (¿al país?); mujeres que
carecen de atención y que no ven otra salida que el aborto, pues ven en el embarazo
"no deseado" una causal de despido laboral, situación terrible que condenaría al
hambre a sus menores hijos; pero también aquí se encuentran aquellas mujeres que en
busca de la realización personal, a través de una profesión o negocio rentable en
ascenso, detienen el embarazo sembrando en ellas un estado psicológico negativo, que
permanece latente, después de ese período inmediato de tranquilidad.

Aproximadamente, una década (1995) después, el INEI presentó un cuadro


sobre la morbilidad gineco-obstétrtca, éstas cifras manifiestan otras causas: en el ciclo
prenatal, con el 14%; en el parto normal, con el 32%; y el aborto, con el 12,6%.

42
PERÚ, 1 9 9 4
PRINCIPALES CAUSAS D E M O R B I L I D A D GINECO-OBSTETRICA

41,1%
OTRAS CAUSAS OBST.

PARTO NORMAL
32%

ABORTOS

TOTAL: 2871Q

Fuente: Perú. INEI, 1995.

Considerando que generalmente tan solo se asiste a un centro de salud en


los casos extremos, el aborto podría tal vez pasar a ser la última causa si acaso las
mujeres que lo practicaron habrían sido atendidas a tiempo en centros médicos
adecuados. Cabe recordar que sólo se han registrado los casos registrados en las
secciones de maternidad, de modo que el número de abortos pueden dar una cifra
mayor sin lugar a dudas.

He aquí un cuadro general sobre la tasa de mortalidad materna de la


Organización Panamericana de la Salud (OPS) de 1987, que nos sitúa a nivel América
en un lugar realmente lamentable, el penúltimo, antes de Bolivia.

43
R E G I Ó N DE LAS AMÉRICAS (OFS): 1 9 8 7
M O R T A L I D A D MATERNA EN PAÍSES S E L E C C I O N A D O S

Canadá
EUA

Bahamas
Cosía Rica
Cuba
Uruguay
Chile
Panamá ^ ^ ^ 1 9

Venezuela [ffiffis^¡¿j 60
Guyana 80
Trinidad y Tabago 80
México ¡£368688838^ B2
Suriname b j ^ S ^ & K i & i 08
:
Arqen'.ina p$SS?ijffiffi3i£¿^ 91
Colombia K ^ y ^ i i T ^ ^ 100
República Dominicana p^^^^S^íí^ 100
Jamaica b^&jfi^ft5Si^SS£^SSS5g3 115
Brasil í^^^4i<Í^Pl^í^^ 140
El Salvador & ^ , ^ M i S S 3 S ^ 148

1 5 9
Nicaragua ^ ^ ^ ^ ^ ^ ^
Ecuador t^^í^íí^^í^í^^^^ 160
Honduras
Haití
Guatemala
Paraguay
Perú
Bolivia
i 1 1 1 1 1 1 —
o 350
50 100 150 200 250 300
TASA POR 100 000 NACIDOS VIVOS
Fuente: Mora y Yunes, 1993.

Una explicación de esta realidad es la que ofrecen Mora y Yunes "La mujer pobre
está combinando crecientemente sus actividades domésticas (que permanecen invisibles),
con responsabilidades productivas, combinación que, por ei desgaste de energía adicional
implicado, está actuando en detrimento de su salud física y mental" . Al margen de las 18

nociones morales y parámetros sociales, esta situación debe ser atendida, más, cuando
muchas mujeres tienen hijos sin casarse por la vía civil, lo que en la mayoría de los casos, las
pone en una situación frágil ante la sociedad, que se agrava cuando carece del soporte
familiar, poniendo en riesgo además su salud mental. No cabe duda que el cuadro también
refleja el grado de aprecio de los gobiernos de turno por sus respectivos connacionales.

1 8
Mora y Yunes, 1993.

44
Para el caso peruano Blondet presenta dos cuadros muy importantes sobre la
mortalidad materna; el primero agrupando a las mujeres según factores diferenciales, en el
que las mujeres que tienen más de cuatro hijos (70%), las solteras (60%) y Las mayores de
35 años (50%) ocupan Los primeros lugares; y el segundo que agrupa las causas, en el que
la mayoría de Los casos se debe a causas directas con la maternidad (85%), siendo la
hemorragia y el aborto Las de mayor incidencia.

PERÚ: 1 9 8 6
M O R T A L I D A D MATERNA SEGÚN FACTORES DIFERENCIALES

Tasa
(por diez mil nacidos vivos)

Total mujeres 30,3


Mujeres con más de cuatro hijos 70,0
Mujeres solteras 60,0
Mujeres de 35 años 50,0
Mujeres primíparas 30,3
Mujeres casadas 25,0
Menores de veinte años 10,0
Mujeres con menos de cuatro hijos 10,0

Fuente: Blondet, 1993.

PERÚ:1985
MUERTES MATERNAS SEGÚN G R U P O S DE CAUSAS

Grupos de causas N° de casos %

Directas
Hemorragia 38 23,0
Aborto 37 22,0
Infección 30 18,0
Hipertensión inducida por gestación 29 17,0
Otras causas directas 142 85,0
Indirectas 26 15,0
Total 168 100,0

Fuente: Blondet, 1993.

Una de Las formas de evitar la mortalidad materna es La prevención del embarazo,


en este sentido, una vez más las cifras elaboradas por Blondet entre 1977 y 1992 son muy
útiles. Se advierte que en ese período, entre los métodos modernos, el dispositivo intra-

45
uterino (DIU) que sobresaliendo con respecto a los demás; no así la pildora en la misma
magnitud, la pildora hasta hoy goza de cierta mala fama, por los trastornos ulteriores,
como los cambios en la figura (gordura) y las afecciones en la conducta, al que había que
agregar otro problema que la acompaña, la falta de constancia y disciplina de las mujeres,
pues es fácil olvidar tomarla.

PERÚ: 1 9 7 7 - 1 9 9 2
U S O D E A N T I C O N C E P T I V O S EN MUJERES U N I D A S , SEGÚN M É T O D O
(Por p o r c e n t a j e s )

MÉTODO ENCUESTAS
ENAF ENPA ENDES ENDES
1977-1978 1981 1986 1991-1992
MÉTODOS MODERNOS

Pildora 4 5 7 6
DIU 1 4 7 13
Esterilización 3 4 6 8
Otros modernos 3 4 3 6
MÉTODOS TRADICIONALES
Ritmo 11 17 18 21
Otros tradicionales 10 7 5 6
Uso total 31 41 46 59

Fuente: Biondet, 1993.

Entre los métodos tradicionales, el ritmo es el más utilizado, el nivel educativo


también juega un papel importante en la elección del tipo de anttconcepción a utilizar.
Sobre este tema Blondet opina:

"El uso de medios anticonceptivos es menos frecuente entre mujeres


rurales que entre urbanas" un 59% de las primeras no usaba ningún
medio (1991-1992), cifra que era del 34% entre las segundas. Esta cifra
es aún mayor según et nivel educativo: mientras no usa medios el 65%
de las mujeres sin educación formal, esa cifra es del 26.8% entre las
mujeres con estudios universitarios" . 19

En el cuadro de 1981-1991, ofrecido por el Ministerio de Justicia, que presenta el


uso de los anticonceptivos en el Perú entre las mujeres unidas, que prueba la diferencia por
áreas de residencia y nivel educativo; en el primero, Lima encabeza el porcentaje más alto
del uso de los anticonceptivos, y también el de los métodos moderno, seguido de cerca de
las áreas urbanas, que superan el 50%; frente a la situación de las mujeres de las áreas
rurales que no superan el 25%.

" Blondet, 1993.

46
PERÚ: 1 9 8 1 - 1 9 9 1
PORCENTAJE DE MUJERES UNIDAS QUE USAN ANTICONCEPTIVOS
Y M É T O D O S M O D E R N O S SEGÚN ÁREA DE RESIDENCIA Y NIVEL EDUCATIVO

Usa anticonceptivos (%) Usa métodos modernos (%)

1981 1991-1992 1981 1991-1992

TOTAL 41 59 43 56
Área de residencia
Lima Metropolitana 56 73 49 65
Urbana 50 66 47 60
Rural 21 41 23 38
Nivel educativo
Sin educación 18 35 29 32
Primaria 40 51 39 47
Secundaria 60 66 49 60
Superior 73 65

Fuente: Perú, Ministerio de Justicia, 1995.

Los porcentajes por nivel educativo comprueban el vínculo entre su nivel alto y su
mayor uso, las mujeres "sin educación", mejor dicho, sin instrucción, son las que menos
usan estos métodos.

Una de las demandas fundamentales del feminismo es que las mujeres tengan el
conocimiento, control y disfrute de su sexualidad, tanto en lo relativo al placer como es su
función reproductiva, y hoy en día esta situación va haciéndose realidad poco a poco; sin
embargo, pese a la difusión de este tipo de mensajes a través de los medios que brindan
información médica y legal, la presencia de mujeres en concursos de belleza, de vedettes
ataviadas con breves prendas, travestís, etc., ha trastornado la percepción e identificación
de valores de las nuevas generaciones, con consecuencias serias, sobre todo en los sectores
medios tradicionales, quienes orientados por una formación en valores fuertemente
direccionados por la iglesia católica o por una ética burguesa, ven que su ideal de
"decencia" y "honradez", las conmina a sentir, después de muchos años de haberse
efectuado un aborto, de ser el caso, ese sentimiento de pesar. Entonces, no se trata
únicamente del control de maternidad, también de fortalecer la personalidad y la salud
psicológica, y ello va más lejos, la mentalidad de una sociedad.

De esta manera se puede apreciar que la salud de las mujeres en torno a la


maternidad afecta directamente a la sociedad, esto ya era sabido en los años setenta, pero
si se piensa que este tipo de decisiones no recae sólo en las mujeres; en ese sentido, la

47
perspectiva de género ayuda en mucho, porque reconoce la diferencia sexual y la
asignación de los roles masculinos y femeninos desarrollados cuIturaímente, cuyos cánones
enmarcan las relaciones entre los mismos, destacando además, el valor equitativo de
ambos en el escenario social.

Algo que se puede apreciar en torno al control de la natalidad, es que este recae
sobre las mujeres, cuadros de esta naturaleza en el que los cuantificados sean los hombres,
no existen, es la constatación de que los estudios van en torno a las mujeres, siendo ellas
las que tienen que estar pendientes de las pildoras, del control periódico de los DIUs, y
soportar los cambios corporales que algunos de estos métodos pudiera acarrear en
desmedro de su normal desenvolvimiento, hasta que su adaptación. Estas cifras muestran
que la situación aparentemente ventajosa de las mujeres en torno a la salud reproductiva
debía variar, más aún cuando las mujeres están asociadas a los niños en sus primeros años
de forma exclusiva. Pareciera impensable la elaboración de un cuadro que lleve por título:
"Porcentaje de hombres unidos que usan anticonceptivos y métodos modernos según área
de residencia y nivel educativo". Los estudios no hacen sino verificar la lejanía de los
padres en estos asuntos, legitimando la distancia entre ellos y sus hijos. Bien podrían los
hombres asumir responsabilidades en este sentido, puesto que la situación coloca a las
mujeres como las responsables de este "cuidado", reprochándosele, aunque sea a través de
una mirada condescendiente, una gestación indeseada, sobre todo en aquellas décadas en
el que el poder adquisitivo familiar se veía disminuido día a día.

En mayo de 1996, a propósito del día de las madres, El Comercio publicó unas
cifras que revelaba la situación de las madres, basadas en los censos y proyecciones del
INEI. Del total de madres en el Perú (5'556,000), sólo el 54% presenta la condición civil de
casada, este es un dato clave, puesto que en el siglo XX, incluso en su última década, el
lazo matrimonial, pese a ser una institución fatigada por la crisis, suponía, un compromiso y
confianza a perpetuidad que ampara legalmente a la familia y, a la vez, que otorga un plus
emocional al interior de la familia, otorga legitimidad en el medio social. Vista estas
consideraciones, se puede suponer la precariedad de las familias en condición de
convivencia (24,2%), con una madre que va superando los tres hijos, que va haciéndose
mayor, que se esfuerza por brindarle las mejores condiciones en el hogar a un marido que
crece en el plano laboral, que conoce a mujeres más jóvenes que anhelan para sí los
beneficios de un hombre con estabilidad económica, el marido que bromea (difunde) con
su soltería. Situaciones no raras que amenazan la tranquilidad y quebrantan La salud mental
de las mujeres que no han sido preparadas para asumir por sí solas sus propios gastos, y
menos el de su prole, y cuando en el futuro llega la etapa del abandono. Pavorosa imagen
si las cifras mencionan que sólo el 25,17% de las madres trabajan, casos que se ven en

48
% compuestos por las madres solteras, acusa en muchos casos la angustia de no contar
con la obligación moral pecuniaria, lo que tas obliga a apoyarse en la familia para salvar la
situación. Hay que tener en consideración que en este período la migración de las zonas
rurales en su versión femenina, colocaba a las mujeres en una muy difícil situación, sin una
preparación adecuada y obligada a garantizar la vida de sus niños con trabajos poco
expectantes, son las madres solteras cuyo alto índice se refleja frente a las madres solteras
de las zonas rurales. Sería interesante contar con la cifra de madres abandonadas. Estos
puntos que pertenece al ámbito de la sociología, reflejarían además el poco valor que se le
otorga a una mujer alejada de los suyos, la que ha sido conocida en "la calle"; es decir en el
trabajo, en la escuela, en una fiesta social, en el ámbito público. Se puede afirmar que
pertenecen a esa legión de mujeres de diferentes estratos que buscan un lugar en el
mercado laboral. Urgía (urge) informar sobre sexualidad a las mujeres; desde el Estado con
medidas preventivas, y también desde las iglesias, sobre todo cuando el porcentaje de
embarazadas anémicas pasaba el 50% . 20

En los años noventa las mujeres han logrado poner de manifiesto sus
peculiaridades en materia de salud, pues no es una persona asexuada, en el hogar y en el
trabajo, incluyendo la prostitución.

Hay en el hogar, las llamadas amas de casa, las más "afortunadas", las que "no
trabajan" y que sin embargo "dan problemas", que por lo general están asociadas a los
problemas psicológicos. La ansiedad, la falta de seguridad en sí mismas y la baja
autoestima se generan, precisamente, por la incapacidad de poder probarse en el
mercado laboral generando incertidumbre en su interior, esto la mella sobremanera
cuando no tiene con quien charlar sobre esos temas de forma saludable, por la
indiferencia de los esposos a las demandas y planteamientos femeninos, que no sólo
son emocionales sino también físicos (más aún cuando entienden que su imagen
(cuerpo) se convierte en el centro de su vida social. Décadas antes, estos temas eran
considerados tabú, pero en la década de 1990 ya son puntos de discusión, (problemas y
soluciones) en torno a las relaciones entre hombres y mujeres, los que han dado lugar a
publicaciones muy interesantes, uno de ellos Compromisos para la salud y los derechos
sexuales y reproductivos de todos preparado por María José Alcalá de Family Care
Internacional en el marco de las reuniones y acuerdos de Beijing (1995), Copenhague
21

(1980) El Cairo (1994) y Viena (1993). De este texto extraeremos unos conceptos que
engloban el problema desde su dimensión real:

2 0
Blondet/Montero, 1994.
2 1
Alcalá, 1995.

50
todos ios sectores sociales pero visibles en los sectores populares por su elevado número.
En el que los hijos perciben el dramatismo materno por "salir adelante", se constata así un
síndrome de "amor a la madre" que refuerza la imagen de la madre sacrificada frente a la
irresponsabilidad paterna como un modelo institucionalizado.

PERÚ:1996

Las mamas en cifras


Los censos del INEI y sus estimados, revelan.que el 54%
I de las mamas peruanas son casadas; Apenas e! 25.17%
[ de ellas trabajan, en su mayoría de forma
' independiente.

Madres por número de hilos


JH//0.... 1'033,000
2 Hilos 1*025,000
3 Hijos 825,000
4 Y 5 Hijos y 136,000
6 y más Hijos 1'577,000
Total 5'596,000

Nívelde educación de la madre


Empleadas 420,000
Sin nivel 1*309,000
Obreras 111,000
Primarla .... , 2"050,000
Independientes 520,000
Secundar/a V513.000
Empleador y/o patrono .. 38,000
Superior 724,000
Trabajadora del Hogar... 86,000
Total 5'596,000
Trabajadora Familiar
No. Remunerada 234,000
Total V 409,000
Casadas 3'044,000
Convivientes 1 "354,000
Solteras 414,000
Ofras ¡separadas,
Aroa Urbana 326,000
viudas, divorciadas} 784 ,000
Área Rural 87,000
Totai 5*596,000
Total 414,000

\{'l No Incluyen convivientes, que son el 24.2% del total de madres.

Fuente: El Comercio, 13 de mayo de 1996.

Según el cuadro, las madres con más de seis hijos, son un grupo mayoritario en
cuanto a las madres que trabajan, casi el 25% del total, un tercio lo hace manera
independiente, y ello tiene sentido porque cuando las mujeres se emplean, en la mayoría
de los casos reciben por el mismo trabajo la mitad de lo que los hombres perciben. El 7,39

49
"La SALUD SEXUAL está encaminada al mejoramiento de la vida y de las
relaciones personales, y los servicios de salud sexual no deberían estar
meramente orientados al asesoramiento y la atención en materia de
reproducción y de enfermedades en materia de reproducción y de
enfermedades de transmisión sexual" . 22

"La SALUD REPRODUCTIVA es un estado general de bienestar físico,


mental y social, y no de mera ausencia de enfermedades o dolencias,
en todos los aspectos relacionados con el sistema reproductivo y sus
funciones y procesos. Las personas son capaces de disfrutar de una
vida sexual satisfactoria y sin riesgos de procrear, y la libertad para
decidir hacerlo o no hacerlo, cuando y con qué frecuencia. El hombre
y la mujer tienen el derecho a obtener información y tener acceso a
métodos seguros, eficaces, acequibles y aceptables de su elección
para la regulación de la fecundidad que no están legalmente
prohibidos, así como el derecho a recibir servicios adecuados de
atención de salud que permitan los embarazos y los partos sin
riesgos. La atención de la salud reproductiva se define como el
conjunto de métodos, técnicos y servicios que contribuyen a la salud y
al bienestar reproductivos al evitar y resolver los problemas relacionados
con la salud reproductiva" . 23

"Los DERECHOS SEXUALES Incluyen el derecho humano de La mujer a


tener control respecto a su sexualidad incluida su salud sexual y
reproductiva, y a decidir libre y responsablemente respecto de esas
cuestiones, sin verse sujeta a la coerción, la discriminación. CC.MM
Plataforma 96 . 24

Este texto además hace recomendaciones a nivel nacional e internacional,


definiendo conceptos, fomentando la educación sexual verificando la situación de la
investigación médica. Como parte de un bosquejo de lo que serían los planes nacionales
destaca el cómo se abordan; mediante la promoción de la igualdad de la niñez, el
bienestar como adolescentes, la identificación de las reglones en condiciones sin riesgo
de violencia con los hombres, el aliento de la responsabilidad masculina, la vida familiar;
y por último, la prevención de las enfermedades de transmisión sexual; en este caso el
VIH y el SIDA.

Pero, ¿cómo actúan los peruanos? o mejor dicho, actuaron, Violeta Sara-
Lafosse 25
hizo un estudio pionero en Lima entre 1974 y 1975. Véanse los cuadros a
continuación, el primero a nivel de los sectores populares y el segundo a nivel medio.
Interesante es verificar que el sólo hecho de leer Los indicadores supone ya una relación
asimétrica entre hombres y mujeres.

Alcalá, 1995. Cuarta Conferencia Mundialista sobre la mujer ( C C M M Plataforma 94), Beijing, Setiembre 1995.
2 2

Conferencia Internacional sobre la Población y Desarrollo ( C I P D Programa de Acción), El Cairo, setiembre de


1994.
Alcalá, 1995.
2 3

Alcalá, 1995.
2 4

" Sara-Lafosse, 1978.

51
LIMA: 1 9 7 4 - 1 9 7 5
EXPECTATIVAS DE COMPORTAMIENTO SEXUAL
EN LOS PADRES DEL SECTOR POPULAR

Expectativas de la madre Expectativas del padre


Indicadores de las expectativas
De En Total De En Total
acuerdo desacuerdo acuerdo desacuerdo
1. El marido debe ser siempre el 68,7 31,3 100,0 66,2 33,8 100,0
que inicie el acto sexual (147)* (148)*
2. Es aceptable que la mujer inicie 51,0 49,0 100,0 77,0 23,0 100,0
el acto sexual (145)* (148)*
3. La mujer debe aceptar siempre 62,1 37,9 100,0 50,0 50,0 100,0
al marido sin tener en cuenta sus (145)* (148)*
propios deseos
4. Es aceptable que la mujer 82,1 17,9 100,0 85,2 14,8 100,0
busque disfrutar el acto sexual (145)* (148)*

Fuente: Sara-Lafosse, 1978.

LIMA: 1 9 7 4 - 1 9 7 5
EXPECTATIVAS DE COMPORTAMIENTO SEXUAL
EN LOS PADRES DEL SECTOR MEDIO

Expectativas de la madre Expectativas del padre


Indicadores de las expectativas
De En Total De En Total
acuerdo desacuerdo acuerdo desacuerdo
í. El marido debe ser siempre el 45,7 53,3 100,0 38,5 61,5 100,0
que inicie el acto sexual (135)* (135)*
2. Es aceptable que la mujer inicie 64,4 35,6 100,0 80,0 20,0 100,0
el acto sexual (135)* (135)*
3. La mujer debe aceptar siempre 40,0 60,0 100,0 27,8 72,2 100,0
al marido sin tener en cuenta sus (135)* (135)*
propios deseos
4. Es aceptable que la mujer 92,6 7,4 100,0 91,9 8,1 100,0
busque disfrutar el acto sexual (135)* (135)*

Fuente: Sara-Lafosse, 1978.

Ante la primera proposición, las mujeres del sector popular aceptan la iniciativa
masculina con un 68%, entonces, el 32%, un tercio, estaría privándose de esa iniciativa,
cuando no, su iniciativa estaría gravada por una contradicción con sus principios; la
respuesta masculina va en la misma dirección que las mujeres, pero con un porcentaje
levemente menor (66,2 % ) , las mujeres "más papistas que el Papa". En el sector medio, la
premisa no cuenta con la aprobación mayoritaria de las mujeres, poco más de la mitad
(53,3%) la rechaza, mientras que el porcentaje de hombres superan esta negación por casi

52
8% (61,5%), una diferencia ciara que muestra los efectos de la instrucción. En La segunda
propuesta, es llamativo advertir como son más las mujeres que no consideran aceptable su
iniciativa (49%), que los propios hombres, pues ellos si consideran aceptable la iniciativa de
las mujeres (77%); las respuestas del sector medio ofrecen esa misma relación, pero con un
margen más amplio, se muestra más permeable. La tercera proposición además de
reafirmar La primera propuesta, envilece a Las mujeres, y he ahí el drama de las mujeres del
sector popular que legitiman esa condición superando a los hombres (62%), que en este
caso está dividido en partes iguales; que la mujer debe aceptar siempre al marido sin tener
en cuenta sus propios deseos, es una situación que la mayoría de las mujeres del sector
medio no acepta (60%), siendo superadas por los hombres en esta negación (72,2%). En el
caso de la última afirmación, es positivo que la mayoría en ambos sectores superen el 80%
en favor del disfrute; no obstante, es innegable que en el sector popular, el porcentaje de
mujeres, más que los hombres, se reste como aceptable esa satisfacción, lo contrario
sucede con los datos del sector medio. Este cuadro muestra los efectos de las políticas
educativas emanadas en el gobierno del presidente Manuel A. Odría en la década de 1950.
Habría sido interesante contar con ese tipo de encuestas de manera periódica en las
décadas siguientes, no cabe duda que la tolerancia y el respeto mutuo, como producto de
la instrucción escolar se habría reflejado como cambios significativos hasta hoy.
El tema sexual, en el caso de tas mujeres, es amplísimo, tanto por la complejidad
de las mujeres (física y psicológica) como por Las represiones hasta hoy asignadas
cuIturaímente, tradicionalmente. En el caso de las mujeres de clase media por ejemplo,
según Burga y Cathelat (información entre 1980-81) la satisfacción sexual es un factor
esencial e importante para el 72% de las encuestadas, y consideran los métodos
anticonceptivos como un factor que les ayuda a tener armonía en la pareja; lo que es muy
importante porque, a diferencia de los hombres, están comprometidas con la familia de
manera global, la sociedad asume que esa es su responsabilidad, luego, su valoración
depende fundamentalmente por La maternidad. Las autoras afirman que eL plano afectivo
es una vía por la cual las mujeres pueden realizarse, reforzar la compatibilidad y el
entendimiento intelectual, "sin embargo, existe un alto grado de incompatibilidad entre los
ideales de entendimiento intelectual, espiritual y la realidad". Este Libro que estudia las
mujeres de los estratos medios de Lima recoge ideas de la doctora Matilde Ráez de
Ramírez, quien pone de manifiesto cómo la identidad de las mujeres está basada en
variables que influyen en su perfil psicológico:
"La ubicación dentro de un grupo social... enfatiza variables que [...]
proporciona a todos los miembros [...] rasgos psico-sociales
determinados, que explican necesidades muy profundas de afiliación y
pertenencia. Pero al mismo tiempo, variables como la elección
vocacional, la ocupación, condicionan rasgos psicológicos particulares

53
que señalan una relación de compromiso personal con la profesión u
ocupación elegida. [...]. Simultáneamente los procesos particulares
permiten que el individuo mantenga su equilibrio, y es la Identidad
Sexual, contraparte de la Identidad Profesional, donde se mantiene y
refuerza la Identidad .
26

Afortunadamente también se puede contar con los perfiles: psicológico, afectivo,


antropométrico y clínico preparado por el médico Dr. Luis Ruiz, los que constituyen todo el
espacio de la salud mental de la mujer. Ruiz presenta tablas en las que se puede apreciar
los síntomas más frecuentes, y encuentra que el 47% de las entrevistadas sufre de cefalea,
el 42% de nerviosismo, el 37.9% de leucorrea, 15%) de palpitaciones y el 13% de insomnio.
Casualmente todos estos problemas están directamente relacionados al sexo y su relación
con el medio y los problemas. En cuanto a los síndromes, los sintomáticos representaban
el 40%; el Síndrome neuropsiquiátríco, el 13.7% y; el respiratorio, 12.3%. En este punto el
Dr. Ruiz menciona que los males de salud son en la mayoría de los casos: respiratorios,
dermatológicos, digestivos y ginecológicos, y que la diferencia encontrada entre las
mujeres de los estratos medios y las de zonas populares, es que entre las primeras las
afecciones son agudas y de corta evolución, mientras que los barrios aledaños de Lima son
por lo general de larga evolución o crónicos. No es extraño que sea así, porque la pobreza
desata la inconformidad, una válvula de escape que en los sectores populares termina
convirtiéndose en violencia, terminando en asuntos oficiales policiales . 27
Los problemas
surgen en todas las clases sociales y afectan la salud mental de las mujeres, en la clase
media se traduce en otras formas, la más frecuente, el alcoholismo, entre aquellas que
pasan de ser bebedoras sociales a excesiva consumidora. Un alto número de ellas son
alcohólicas clandestinas "de dormitorio", Osear Rodríguez dice de ellas:
28

"La mujer alcohólica sufre con mayor intensidad que el hombre, en razón
de su psicología y constitución es mucho más compleja y sensible.
Frustraciones, tensiones emocionales, inmadurez de la personalidad,
complejos de culpa, son algunas de las posibles causas de su
alcoholismo, una enfermedad del cuerpo y del alma" .29

Hasta aquí hemos mencionado el tema sexual en los niveles más comunes de las
mujeres, faltaría saber la situación de las que arriesgan su salud por ejercer la prostitución
que entre otras enfermedades tiene en el Virus de la Inmunodeficlencia Humana (VIH) al
desencadenante del temible Síndrome de Inmunodeficlencia Adquirida (SIDA); cuando
viendo las cifras que Kimball, Salvatierra y Zacarías, presentadas por la OPS observan que
30

™ Burga/Cathelat, I 9 8 Í .
" Pimentel, 1988.
Rodríguez, 1997.
2 8

Rodríguez, 1997.
2 9

3 0
Kimball, Salvatierra y Fernández, 1993.

54
El Callao en 1989 presentaba el 0,5 de la seroprevalencta entre sus prostitutas, una cifra no
alta si se la compara con otras ciudades de América latina, pero que se presenta como una
fuerte amenaza de contagio.

AMÉRICA LATINA, 1 9 8 7 - 1 9 9 0
ESTUDIOS DE SEROPREVALENCIA EN PROSTITUTAS

País Lugar Afío Muestra Seroprevalencia


——
(%)
i _¿
Argentina Región nordeste 1989 260 1,5
Argentina Región nordeste 1989 1305 1,9
Argentina Rosario 1989 3171 2,0
Boüvia Sin especificar 1989 430 0,0
Brasil Presidente Prudente 1989 100 2,0
Brasil Santos 1989 100 10,0
Brasil Santos 1989 247 3,0
Guatemala Ciudad de Guatemala 1989 250 0,4
Guatemala Ciudad de Guatemala 1989 163 0,0
Guatemala D o s zonas 1989 185 0,5
Haití Puerto Príncipe 1989 129 41,8
Haití Gona'íves 1987 322 69,'0
Honduras San Pedro Sula 1989 300 19,8
Honduras San Pedro Sula 1990 250 35,0
México Ciudad de México 1989 961 2,2
México 20 ciudades 1989 3632 0,4
México Guadalajara 1989 550 0,2
Perú El Callao 1989 630 0,5
República Dominicana Santo Domingo 1989-1990 184 4,4
Fuente: Gómez, 1993.

En el Perú se registró en 1983 el primer caso de SIDA, se trató de un hombre


homosexual, pero el cabo de diez años pasaron ser 202 hombres los que manifestaron el
SIDA; y entre las mujeres, que en aquel año no registraba ni una, en 1993 ya habían 26
casos, la mayoría de ellas heterosexuales. La ignorancia sobre este mal en los años 80
identificó el SIDA con los homosexuales, el paso del tiempo se encargó de demostrar que
no era así, que cualquiera podía ser víctima, en 1993 los afectados homosexuales sólo
representaban poco más de un tercio del total de enfermos. Los estudios revelaron
además, que la mayoría de las mujeres se infectaban por la vía sexual (75%), que la edad
preponderante oscilaba entre los 20 y los 49 años, y que la vía sanguínea ocupaba el
segundo lugar (17%) como causa de contagio en esa década. La prostitución entre las más
pobres, multiplica los riesgos.

55
PERÚ: 1 9 8 3 - 1 9 9 3
DISTRIBUCIÓN PORCENTUAL DE CASOS DE SIDA REGISTRADOS
SEGÚN SEXO Y CATEGORÍA DE TRANSMISIÓN

CATEGORÍA 1983 1993

Hombres Mujeres Hombres Mujeres

Hijo de madre infectada 0,0 0,0 1,5 15,4


Heterosexual 0,0 0,0 24,3 76,9
Hombre homosexual 100,0 0,0 33,7 0,0
Otros 0,0 0,0 40,5 7,7
Total % 100,0 0,0 88,6 11,4
Total N° casos 1 0 202 26

Fuente: Btondet/Montero, 1995.

Otra vertiente que estudia ei aspecto de La salud sexual es el correspondiente al


psicoanálisis. Saúl Peña y Moisés Lemlij 31
prepararon un volumen que contiene los
trabajos del XX Congreso Latinoamericano de Psicoanálisis Feminidad y Masculinidad
realizado en Lima en 1993. Este evento manifestó lo siguiente: "EL pensamiento que
consideramos fuente de nuestra motivación es que la pareja es La unidad creativa y
primaria para la vida de la familia y el ser humano", antes: "Creemos que esta célebre cita
se aplica no solo a la feminidad sino a la masculinidad y la relación entre ellas". En ella
presentaron sus trabajos reconocidos psicoanalistas como Saúl Peña (Presidente), Max
Hernández (Coordinador de Psicoanálisis aplicado), Jaime Heresi, Fernando Maestre,
Patricia Portocarrero, Alvaro Rey de Castro, Alberto Péndola y Marcos Gheiler; la
importancia del evento hizo que se preparase un precongreso días antes titulado:
"influencia del Género en la formación y práctica psicoanalítica".
Dando una ojeada a este volumen uno se puede dar cuenta desde el principio el
tipo de mercado que estos especialistas tienen, el sector de La clase media y media alta
(casos clínicos que describen: artefactos modernos, viajes ai exterior por negocios, etc.)
de diferentes casos de Latinoamérica; pero lo interesante es descubrir como casi todos
parten de la inadecuación de las mujeres en su medio a causa de un trauma surgido, en
la mayoría de los casos ocurridos, en la niñez, y también en experiencias de identidad en
esa edad. La idea es que las pacientes reconozcan una carencia y puedan explicarla a
través de la sociedad, un medio físico o su cuerpo mismo; de pronto, experimentar la

< Peña/Lemlij, 1994.


3

56
falta del falo o carecer de una serie de estímulos que si tienen los hombres, por la sola
premisa de ser hombres. Por otra parte se presentan los efectos de las madres
dominantes sobre sus hijos, que ya esposos ven bloqueado el "normal" desarrollo de su
identidad sexual, situaciones repetitivas, en las que ia moral, la instrucción, la religión, y
las etapas del desarrollo humano juegan un papel importante. Ejemplos de otras formas
más complejas de ansiedad o malestares que pacientemente los psicoanalistas trabajan
con sus clientes.

De los casos presentados, uno muy interesante es el de Alcira Baldin de


Slemenson "El Climaterio", en el que reflexiona sobre esta etapa:
"El climaterio es un período de la vida femenina de cierta extensión y
de límites imprecisos, que transcurre entre la madurez sexual y la
senectud, durante el cual se produce la disminución progresiva hasta su
extinción de la actividad ovár'tca y se establece un nuevo equilibrio
hormonal" . 32

Es un tema de nuestro tiempo y del futuro, cuando la esperanza de vida se


extiende y se convierte en una etapa que necesita reconocérsela útil. Es bien conocido
que la sociedad no censura a los hombres que mantienen una relación con mujeres
mucho menor, pero sí cuando la relación es a la inversa. Esto es debido a que la edad en
que las mujeres son capaces de procrear es "apetecible" sexualmente. Lógica
internalizada que puede encontrarse incluso en los personajes de los cuentos infantiles
más conocidos por la infancia urbana: porque la abuelita de Caperucita Roja, la bruja de
Blanca Nieves, y la madrastra de Cenicienta presente a las mujeres mayores desprovistas
de la función reproductora, como personas aisladas, cuya vitalidad debe ser encaminada
al servicio de la prole; de lo contrario, si fuese destinada esa capacidad a sí misma, es
considerada avara, egoísta o canalizada hacia la maldad. Sobre esto dice Alcira Baldin:
"En tanto en el nivel corporal se altera la homeostasis biológica, en el
nivel psicológico se altera el establishment existente hasta ese
momento y en el nivel sociológico debe buscar un nuevo lugar en este
mundo" . 33

Como no hay lugar, se dan las llamadas "crisis" cuando llegan a esta etapa, la
autora menciona que esto no debería ser así, porque información de tipo antropológico,
entre los indios Nohame, el climaterio no es vivido como un trauma, por el contrario "son
frecuentes los casamientos, incluso con hombres más jóvenes, habltualmente divorciados
con hijos, que buscan en la mujer madura una compañera experta y dispuesta a cuidar
de él y educar a sus hijos". Este tema que pertenece a la salud pública debe ser materia

3 2
Peña/Lemlij, 1994.
3 3
Peña/Lemlij, 1994.

57
de proyectos a nivel nacional (con urgencia en las ciudades) en los estratos medios, la
productividad de ellas debe ser bien encaminada.
La OPS publicó en 1993 un libro muy importante, "Género, mujer y salud en las
Américas" a cargo de Elsa Gómez , que
34
reúne artículos de una veintena de
investigadores. Es la primera en su tipo, ya que el tema recién se había planteado en la
OMS en 1992 como parte de las discusiones técnicas, he aquí parte de lo que ellos
entienden por género:
"Género podría entenderse como la red de rasgos de personalidad,
actitudes, sentimientos, valores, conductas y actividades que, a través
de un proceso de construcción social, diferencia a los hombres de las
mujeres" .
35

Los trabajos se seleccionaron sobre la base de esta premisa, varios de los cuales se
iniciaron en este tema por primera vez. Los estudiosos dirigieron su atención "hacia la
dialéctica de las relaciones entre la biología y el medio social, que se plasma en situaciones
de desventaja o ventaja de las mujeres frente a los hombres, desigualdad está entendida en
términos de las probabilidades de gozar de salud, de enfermar o morir" . Elsa Gómez C.
36

presenta dos conocidas paradojas en el campo de la salud: "la primera se refiere al hecho
de que las mujeres, pese a gozar de una mayor esperanza de vida que los hombres,
muestran mayores índices de morbilidad; la segunda, el contraste que se observa entre el
predominio numérico de Las mujeres en el sector salud y su exigua representación en los
niveles altos de decisión, prestigio y remuneración" . 37

Los criterios que guiaron la publicación de los artículos fueron los siguientes:
a. que fueran exclusivos de las mujeres
b. que fueran más prevalentes entre las mujeres que entre los hombres;
c. que tuvieren consecuencias más graves para las mujeres que para los hombres;
d. que implicaran factores de riesgo diferentes para las mujeres.
e. que requieran estrategias especiales de intervención para Las mujeres . 38

El concepto de género ha impactado positivamente porque evidencian un aspecto


que hasta entonces parecía exento al tema de salud, el poder; por esa razón son capaces de
detectar:
"Programas y servicios de salud que reproducen relaciones de poder-
subordinación y estereotipos sexistas, y que desconocen las diferencias

34 Gómez, i 993.
3 5
Gómez, 1993.
3 6
Gómez, 1993.
"Gómez, 1993.
38 Gómez, 1993.

58
socialmente construidas y la posición de desventaja de las mujeres para
ejercer poder sobre su salud" . 39

En la introducción hay una enumeración de los temas que a continuación


transcribimos por precisos e indispensables para ofrecer un panorama general de la
situación en América Latina, estos son:
• La sobre mortalidad masculina por accidentes y violencias, visible a partir del primer
año de edad y asociada estrechamente a actitudes y conductas esteorotipadamente
masculinas como la agresividad, la intrepidez y la osadía; y también, por La ingesta
excesiva de alcohol.
• La mayor prevalencia de desnutrición entre las niñas que entre los niños,
documentada en un número importante de países de la región, y atribuida a una
distribución de los recursos alimentarios familiares escasos que favorece al varón en
detrimento de la mujer.
• La prevalencia de depresión, dos y tres veces más alta entre las mujeres que entre
los hombres, menos relacionada con los factores hormonales que con estilos de
personalidad y con experiencias ligadas a tipos de socialización y a oportunidades
diferenciales por género.
• La notable mayor prevalencia entre las mujeres, particularmente durante la
juventud, de desórdenes alimentarios asociados con ideas culturales de peso e
Imagen corporal, y con el papel central que desempeña la belleza física en la
valorización social de la mujer.
• El hecho de que las complicaciones relacionadas con el embarazo, el parto y el
puerperio figuren, en casi todos los países de la región, entre las cinco primeras
causas de mortalidad durante la edad reproductiva, pese a la naturaleza fisiológica
y no patológica de este proceso; y pese también, al carácter inminentemente
previsible de estas defunciones.
• La sobremortalidad femenina por cáncer durante la edad adulta, asociada menos
con una mayor legalidad de los cánceres propios de la mujer que con la
accesibilidad limitada a la tecnología médica de detección temprana y de
tratamiento en sus etapas iniciales.
• El hecho de que en América Latina, en más de un 80% de los casos, la
responsabilidad de la regulación de la fecundidad recaiga enteramente sobre la
mujer, junto con tal responsabilidad, los efectos laterales nocivos de la tecnología
anticonceptiva.
• Reforzando la tendencia anterior, la reducida asignación de recursos para la
investigación sobre anticoncepción, en particular para la tecnología anticonceptiva
dirigida al hombre.
• La proporción de 1 en 300 de esterilizaciones masculinas/femeninas que se
observan en algunos países de la Región, a pesar de que la vasectomía es una
intervención más sencilla, más económica y menos invasora que la esterilización
femenina.
* El abuso de la tecnología médico-quirúrgica específicamente dirigida hacia La
mujer, por ejemplo cesárea y la histe recto mía.
• El desgaste mayor de energía, con respecto al hombre, que tiene la mujer
asalariada en virtud de su responsabilidad de cumplir con una doble jornada de
trabajo: la Laboral y la doméstica.
• La definición legal de "trabajo" como requisito de acceso a prestaciones de salud y
de seguridad social, que aunque en apariencia genéricamente neutra, en la práctica
excluye un mayor número de mujeres que de hombres del disfrute de tal beneficio,

" G ó m e z , 1993.

59
porque no considera trabajo la informal, que aglutinan una proporción
comparativamente mayor de la fuerza laboral femenina que la masculina.
• La desprotección (general y de salud) durante la vejez, que afecta a la mujer en
mayor que al hombre, generada por las menores tasas de empleo femenino en el
sector formal de la economía, la discontinuidad de la participación laboral que se
asocia con la maternidad, y la menor remuneración laboral percibida por la mujer
en comparación con el hombre.
• La tolerancia, e incluso la legitimación, no solo consuetudinaria sino legal, de la
violencia contra La mujer, particularmente la ejercida por el cónyuge.
• Paralelamente, el retardo del sector salud en reconocer La violencia contra la mujer
como un problema de salud pública pese a que, por ejemplo en los Estados Unidos
más mujeres sufren lesiones serias por causa de las agresiones de sus compañeros
que por la suma de accidentes automovilísticos, violaciones por desconocidos y
asaltos de distintos tipos.
• La baja prioridad asignada a la investigación de enfermedades y tratamientos que
afectan exclusiva o preferentemente a la mujer.
• La conducta discriminatoria de la investigación médica y farmacéutica mediante la
cual, obedeciendo a criterios de facilidad o de paternalismo, se ha excluido a Las
mujeres de los estudios clínicos sobre enfermedades que afectan a ambos sexos;
consecuentemente, las terapias derivadas de dichos estudios se basan en
información dudosa e incluso, de riesgosa aplicabilidad para la población femenina.

Temas tratados de manera muy precisa, con cuadros que ejemplifican la situación
a nivel de América. En todos estos casos aparece latente una situación, los riesgos que
provienen de las condiciones de trabajo que no consideran la anatomía, ni la fisiología
femenina; por ejemplo, entre las mujeres de los estratos mayorttarios de la población, en el
que las afectadas suelen trabajar con sustancias tóxicas, sobre todo las madres gestantes y
las que trabajan en el campo en plena fumigación de las plantaciones. Un problema que
alcanza no solo a las mujeres sino también a los niños.
La perspectiva de género presentada, trata de descubrir como todo lo relativo a la
salud puede promover el intercambio de opiniones y puntos de vista que deben traducirse
en cambios en las políticas de la salud pública, ejercicios que mejorarían el nivel de vida de
todos.

2.4. Temas afines a la sexualidad

Por la Información que se ha presentado en la parte de salud, es posible darse cuenta que
mucho de lo estudiado está en función de la salud reproductiva, y que gracias a las
nociones que de género que se han introducido en ese campo se puede esperar un avance.
El aborto que se presenta en la mayoría de los casos como solución y problema, acusaba
ser pasado por la tangente. Hasta mediados de la década de los noventa no terminaba ni
siquiera por ser asumido por las leyes, sabiendo de que a pesar de que las leyes la legalicen
(Lo que sería un primer paso), las mujeres aún no podrían dejar de pensar en algún

60
momento que pudo ser otra la experiencia. Interesante habría sido que los políticos
contaran con el volumen "El aborto en debate" de Maruja Barríg, que consiste en una serie
de entrevista hechas sobre el tema a líderes de opinión' . 10
El desconocimiento de la
sexualidad entre las mujeres es muy alto, cuanto más si se considera que este órgano está
dentro del cuerpo y no es visible como en el caso de los hombres. Las mujeres incluso
evaden esta averiguación (cada vez menos) por vergüenza y educación familiar; este
desconocimiento que no prevé embarazos no deseados es el causante principal de que las
mujeres tengan un triste paso por los hospitales . 41
En este sentido han sido muy
importantes los avances que mediante programas se han logrado en los sectores
populares , no solo de Lima sino en provincias .
42 43

Zoila Hernández y Tealdo del Pozo en 1967 trataron el tema de Los rasgos
psicológicos de las madres prostitutas , este grupo de mujeres que no encajan en la vida
44

aceptada socialmente, generalmente no gozan de Los medios económicos necesarios para


mantener a salvo su salud y mantienen en un plano muy deprimente su salud psicológica,
más aún si es madre, condición que puede proseguir a través de su prole, lo que hay que
resolver, porque la sexualidad nos remite a la imagen y a la percepción que entre los
hombres y mujeres tienen sobre ellos mismos, la construcción de su personalidad y Los
estereotipos del rol sexual . 45

La sexualidad en la mujer de los estratos populares ha sido abordada desde fines


del ochenta, y es pertinente observar como los componentes racial y cultural va de la mano
con el desarrollo de su personalidad, un tema que no se menciona con claridad en la
mayoría de los libros pero que es sensible en conjunto ; hay autores que evidencian este
46

problema, cuando Vega Centeno plantea lo que es ser mestizo y la crisis cultural que esto
le significa al país, por ahí también Nugent con "El laberinto de la choledad aclara el
panorama" ; por otro lado están Los sentimientos de las mujeres populares urbanas, a las
47

que no les es extraña esta frase, que a la vez es título de un trabajo, "Para que mis hijos no
sufran como yo" ; y el de las mujeres que perteneciendo a La clase media, presentan
48

diferentes modo de actuar [Silva, 1990] y replantean su autoestima, que recuerda otro título
sugerente, "Soy rubia al pomo ¡Y qué!", de Beatriz Ontaneda, que mediante La imagen
juega con "los estereotipos nacionales". Posturas diferentes que revelan dinamismo,

4 0
Barrig, 1993.
Cervantes/Watana be/Den egri, 1988.
4 1

« C U A V E S , 1988.
« C E N T R O Amauta, 1993.
Hernández/Pozo, 1967.
4 4

4 5
Masías Claux, 1981; Mansilla, 1983; Raguzde Romana, 1986; y Anderson, 1983.
4 6
Barnechea, 1986; Vega Centeno, 1988; Ugarteche, i 992; Nugent, 1992; Zubieta Núñez, 1993; Ontaneda, 1995; y
Silva, 1990.
* Nugent, 1992.
4 6
Zubieta Núñez, 1993.

61
proyección al futuro y empoderamiento. Freda L. Paltiel bajo el título "La salud Mental de
la mujer de las Américas" , entiende este problema desde la mujer y sus afecciones
49

depresivas. En el caso peruano, es Aída García Trovato quien hizo un esfuerzo de síntesis
acerca de cómo se asume la salud mental de la mujer y, como no podía ser de otra manera,
encontró que desde el sector salud "La mujer ha sido y es considerada objeto más que
sujeto de salud. Se le dedica algún programa en función de la maternidad [,..] que el
bienestar de la madre y sus posibilidades de realización como persona integrante de una
sociedad", además, dada la amplia variabilidad del campo femenino, en ella la evaluación
de la salud mental se hace "mucho más difícil de realizar que la evaluación de la salud física
[...]. Variabilidad que está ligada a los antecedentes personales, familiares de cada persona
y al contexto social en el cual vive" . El valor físico y estético de la mujer se enriquece con
50

la capacidad de concebir, en una sociedad machista, en la que las mujeres son formadas
desde niñas para dedicar su vida en primer lugar al cuidado de la familia que ella formará,
la incapacidad de ser madre es una de las razones para sufrir un severo cuadro de
patología psicológica cuyas consecuencias pueden poner en peligro la salud física, cuando
menos, generar stress o una depresión que disminuya su voluntad de vivir plenamente. Los
problemas de las mujeres que no pueden procrear y que no han encontrado otras vías de
desarrollar las cualidades maternales (con hijos adoptados) o sublimarías con otras
actividades que permitan su realización, son problemas que deben estudiarse más.

En la década de los noventa la homosexualidad se convirtió en los medios


masivos de comunicación en un tema manifiesto en el Perú a través de Los trasvestístas
en su versión amanerada, recibido en principio como una muestra de "descaro", esas
manifestaciones sólo proclamaban su ruptura con la clandestinidad. La homosexualidad,
entendida, en líneas generales, como la atracción sexual hacia las personas del mismo
sexo, es inherente a la sociedad, pero no está libre de los prejuicios. Por esta razón, y
dada su complejidad, se trataba de conocer los diversos tipos, causas, y condiciones que
la originan, sean estos psíquicos u orgánicos; estudios que necesarios en una sociedad
patriarcal y machista que los discrimina y asóla. Habiendo sido tratado como un tema
tabú, aún en la década de los años ochenta, se podía ver artículos periodísticos con
títulos que llamaban la atención, por ejemplo: "Homosexualidad: ¿Apología o
condena?" , pero en los años noventa, luego de los estragos del SIDA y la relación que
51

había de esta enfermedad en la década de los ochenta, podía leerse en los noventa un
título como este: "SIDA: El lado oscuro del sexo" . 52

«Paltiel, 1993.
5 0
García Trovato, 1993.
si Salazar, 1983.
" Cuanto, 1992.

62
2.5. Una condición de ser mujer

Existe entre algunas feministas (no las materialistas), la idea de que la función determina el
género y la constitución física; y que esta constitución física, que adolece de la fortaleza
física, podía cambiar mediante nuevos hábitos, y así romper con los convencionalismos e
ingresar a las actividades masculinas extremas, esperándose con ello que las mujeres
puedan progresivamente obtener más equidad, demostrándose así (al cabo de varias
generaciones), que teorías como las manifestadas por Engeis en "La familia y el trabajo en
la transformación del mono en hombre" podían aplicarse a otros objetivos; sin embargo, en
un programa de televisión, "El Tercer Planeta", que se transmitió en febrero de 1997 por el
canal del Estado (Canal 7), se pudo verificar que las mujeres estaban limitadas por su
constitución física diferente a la de los hombres, pues la práctica compulsiva de ejercicios
diarios no pueden sumar a las mujeres características adicionales sin que afecten
seriamente otras funciones básicas para la existencia del género humano, la reproducción.

Este documental presentaba a las mujeres de los gimnasios de aeróbicos, una


disciplina que busca el cuidado de la salud a través del fortalecimiento del órgano vital, el
corazón, tonificando también los músculos y beneficiando el sistema óseo, logro probado
entre sus practicantes; pero al hacer un seguimiento a las instructoras, que no solo se
dedicaban a esta actividad en horarios específicos sino a tiempo completo, se pudo
observar que lejos de ser las más saludables, las más fuertes; las encontraron víctimas de
fracturas espontáneas de huesos, cuyas placas radiográficas óseas parecían pertenecer a
personas mayores de setenta años y con deficiencia de calcio en la columna vertebral.
Acompañaba a este cuadro la suspensión de la menstruación al cabo de una jornada
permanente de esfuerzo excesivo. Una instructora consideró esto hasta conveniente
porque le evitaba las incomodidades menstruales, pero al cabo de ocho meses, acudió al
médico por tener fuertes dolores en la espalda; y efectivamente, su estructura ósea se
encontraba seriamente afectada. Lo descrito es grave porque imposibilita la capacidad de
concebir y provoca el deterioro físico; es decir, se merma la condición biológica otorgadora
de vida y se produce una carrera hacia la muerte.

Que el esfuerzo excesivo y sistemático que una mujer pueda Llegar a tolerar como
cotidiano y que el cuerpo estimulado desarrolle capacidades físicas sin afectar otras, es
algo que hasta hoy no se puede probar. Apartando los logros a nivel deportivo, las
prácticas excesivas en el caso de las mujeres, además de crear un problema de salud,
estarían yendo contra la vida misma.

63
3. EDUCACIÓN EN LAS MUJERES

La formación educativa referida a la


mujer se valora más por la sola
presencia en el ámbito laboral
público y privado que por la
capacitación técnica y el
enriquecimiento intelectual; esto se
debe a que la educación, que
debía ser integral, en el Perú
pareciera estar limitada a la
instrucción y capacitación para
ingresar al terreno laboral, quedando así la educación en valores, artes y humanidades que
fortalecerían la responsabilidad familiar. En la vida, sobre todo en las zonas urbanas, el
bienestar familiar, la realización profesional y el poder, provienen de la instrucción. En el
caso de las mujeres es fundamental para desempeñar bien una labor especializada, y
también para conducir bien una carrera; pero esta debe ser promocionada de manera
colateral, como lo son Las reuniones familiares, institucionales, sociales y otros espacios que
promueven el diálogo y establecen las relaciones que le permitirán desarrollar al máximo
los objetivos acordes a las metas de cada una de ellas. Esa es la vía, la forma de contribuir
al cambio social e ingresar como agente activo. La vía que en décadas, conduce a las
mujeres desde el desempeño de las labores domésticas hasta las altas responsabilidades
sean estas públicas o privadas.
La consulta bibliográfica de Los estudios sobre la educación, en este período,
presenta la situación de las mujeres como parte de todo compendio, sobre todo acerca de
su situación en la última década del siglo XX y en el que la perspectiva de género recién se
estaba aplicando , antes empezaron a publicarse textos que guardan especial con ios
53

contenidos de este concepto, por ejemplo están los libros: "Escuela Mixta: alumnas y
maestras la prefieren" de Violeta Sara Lafosse, Carmen Chira y Blanca Fernández 54
y
"Experiencia del SENATI en la capacitación femenina" . Y también los de Carmen Montero:
55

" Blondet/Montero, 1995.


5 4
Sara-Lafosse/Chira/Fernández, 1989.
ss S E N A T I , 1978.

64
"Ser pobre y ser mujer" 50
y, Le dije lo que quise: ia mujer pobladora y el sistema
educativo' .61
Estos títulos indican que el tema de género primero trató ia educación adulta
y después, las mujeres de los sectores populares, lo que se extendió a la educación de las
niñas en las escuelas. Por lo pronto hay literatura que va en ese camino.
Si bien la mayoría de los estudios están referidos a las mujeres de los sectores
urbanos-populares, esto no quiere decir que se desconozcan los problemas asociados a las
mujeres en las demás regiones del país, sólo recordar las diferencias con la costa rural, la
sierra y ta Amazonia basta para comprender la complejidad de Los problemas y la
dificultad para superarlos, a comparación de sus pares de las zonas urbanas capitalinas.
Pero la educación no sólo obedece a parámetros estrictamente geográficos, debe
estar acompañada del tipo de asistencia que brinda el Estado dirigido por el gobierno, y la
cultura que identifica a cada centro poblado, reconociendo sus propias particularidades.
Pero bien existe la preocupación por incluir la perspectiva de género a estas latitudes, la
tarea se muestra distante.
Es interesante mencionar que en la "Plataforma peruana de acción para la equidad
de género (1995-2000) objetivos estratégicos futuros", presentado en la Cuarta Conferencia
Mundial sobre las Mujeres en Beijing (setiembre-1995), reconoce que las mujeres son las
que más adolecen del analfabetismo en el Perú; por otro lado, en el caso de las
profesionales, todas las mujeres sufren discriminación. Práctica que se inicia en las
escuelas, cuando son los maestros los que reproducen los estereotipos tradicionales del
rol de la mujer, una situación que podía ser cambiada mediante un conjunto de
estrategias que ponen mayor énfasis en la educación de las zonas rurales y urbano
marginales, impulsando programas específicos para niños, niñas y adolescentes . 58

3.1. Analfabetismo, pobreza y fecundidad

Desde la década de 1960, la cobertura de la educación mixta (hombres y mujeres) creció,


pero no podía afirmarse que ello había beneficiado en mucho a las mujeres; aún en 1991,
del 10,7% de analfabetas, en total, las mujeres representaban el 17,4% y los hombres el
14,1% . Según la misma fuente este total tiene concentración en la zona rural con el 28,1%
59

de la población, las mujeres son el 45,6% frente al 10,4% de los hombres en el campo. A
pesar de las normas que favorecieron a las mujeres, la tasa de analfabetismo que había
bajado en líneas generales para todos, mantuvo la diferencia entre hombres y mujeres, esto

5 6
Montero, 1983
5 7
Montero, 1990.
5 8
Perú. Ministerio de Justicia, 1995.
5 9
Blondet, 1993.

65
quiere decir que no existe una paridad entre la importancia que se les otorga a las mujeres
comparables a la que se brinda a los hombres. Ver gráfico:

PERÚ: 1 9 6 1 - 1 9 9 1
EVOLUCIÓN DE LAS TASAS DE ANALFABETISMO
POR SEXO MAYORES DE 1 5 A Ñ O S

(Miles)

1961 1972 1981 IV9J

Ü&ül mujáis £ 2 2 hombres


Fuente: Blondet, 1993.

El siguiente cuadro muestra el comportamiento desde 1981 hasta 1993 por nivel
educativo y por sexo.

PERÚ 1 9 8 1 - 1 9 9 3
EVOLUCIÓN DEL PERFIL EDUCATIVO DE LA POBLACIÓN POR SEXO
(Población de 1 5 a ñ o s y m á s )

TOTAL 1981 1985-86 1993


Sin instrucción 16,2 17,1 12,6
Primaria 42,8 37,2 31,5
Secundaria 31,0 34„7 35,5
Superior 10,1 11,0 20,4
Total 100,0 100,0 100,0
HOMBRES
Sin instrucción 9,0 9,0 7,0
Primaria 44,6 39,7 31,9
Secundaria 34,4 38,0 39,5
Superior U,9 13,3 21,6
100,0 100,0 100,0
MUJERES
Sin instrucción 23,1 24,9 18,0
Primaria 40,9 34,8 31,0
Secundaria 27,7 31,5 31,7
Superior 8,4 8,8 19,3
100,0 100,0 100,0
Población femenina con secundaria o más 36,1 40,3 51,0

Fuente: Perú. Ministerio de Justicia. 1995.

66
En primer lugar se observa que si en 1981 la mayoría había terminado sólo la
instrucción primaria, en 1993 esta mayoría correspondió a la educación secundaria. Es
necesario observar como en 1981 la diferencia entre hombres y mujeres en el nivel
primario, colocaba en desventaja a las mujeres pues la diferencia era del 3,5%; y en 1993,
cuando el nivel secundario es mayoría, la diferencia entre hombres y mujeres es más alta, la
desventaja es de 8,2% (mujeres en 31.7% y hombres en 39%). En ello no solo juega la
voluntad de los padres, poco a poco a las mujeres se les exige hacerse cargo de las labores
domésticas de su hogar o fuera del como empleadas domésticas. También, cuando la
demanda de los uniformes, útiles escolares y otros implementos amenazaba con colapsar
el presupuesto familiar no cabía sino posponer la escolaridad de las hijas. No era raro
tampoco que estuvieran ya pensando en formar un hogar o estuviesen embarazadas, por lo
que cabía que estén en casa desempeñando las labores domésticas. Lo interesante es que
una vez pasado el nivel secundario, en el nivel superior, ellas mantienen el porcentaje en
los primeros cinco años (el quinquenio el más atroz, económicamente hablando) y en los
últimos siete (7) años, más que duplican su incursión, del 8,8% al 19,3%. Debe tenerse en
cuenta que los hombres tenían más posibilidades de trabajo con sólo sus estudios
secundarios, porque podían (pueden) capacitarse con carreras cortas, o de manera
informal, acceder a un trabajo que le retribuirá, en el mismo tiempo, una mejor
remuneración que el alcanzado por las mujeres.

Pero antes de proseguir con Los datos referidos a las que pasaron la brecha del
analfabetismo, cabe observar las cifras de analfabetismo en el Perú en los departamentos
con mayor número de analfabetos.

PERÚ: 1 9 7 2 , 1 9 8 1 y 1 9 9 3
D E P A R T A M E N T O S C O N M A Y O R TASA DE ANALFABETISMO

Mayor de 5 años Mayor de 15 años

Departamento 1972 1981 1993

Hombres Mujeres Total Hombres Mujeres Total Hombres Mujeres Total

Apuríniac 50,6 76,8 64, í 37,3 62,0 50,1 21,5 51,5 36,9
Ayacucho 47,5 72,8 60,7 32,8 55,6 44,6 18,0 45,8 32,7
Huancavelica 47,0 73,1 60,7 30,7 55,4 43,5 18,7 47,7 34,1
Cajamarca 35,0 60,7 48,0 25,0 47,1 36,2 14,9 39,0 27,2
Puno 34,0 63,7 49,2 21,6 43,7 33,0 10,9 32,9 22,2
Cusco 40,3 64,7 52,3 26,8 46,9 36,8 14,3 36,4 25,4
Lima (Refen.) 8,8 14,7 11,7 5,9 9,7 7,8 1,9 6,2 4,1

Fuente: Francke, 1985; y Perú. INEI, 1994. Elaboración propia.

67
En este cuadro se puede apreciar que la zona de la sierra centro-sur es La más
afectada y mantiene aún la alta tasa de analfabetismo respecto a las demás. No es por
gusto que esta sea la zona que acogió a Sendero Luminoso y que a propósito de su
situación económica muestre todas las condiciones que podrían justificar una reacción
violenta. En el norte es Cajamarca la que presenta una cifra desalentadora, pero no
comparable a las primeras tres, no obstante, es la que a lo largo de todo el período
muestra una marcada diferencia entre hombres y mujeres. Le sigue la zona sur pero esta ha
mostrado de alguna forma el avance a lo largo de más de veinte años. Las mujeres de
Apurímac aún no podían salvar esa situación, es increíble que en los noventa, su
analfabetismo llegue al 5 1 % . Ni las zonas de la Amazonia muestran tan alta tasa de
analfabetismo. Loreto, Madre de Dios y San Martín ofrecen en cifras alrededor de 10% en
1993, cuando en los setenta ofrecían una cifra de 33% más o menos . Claro que estas 60

afirmaciones habría que leerlas con cuidado, puesto que sólo se estarían refiriendo a las
zonas urbanas y centros poblados aledaños, no hay que olvidar que la población de la zona
amazónica recién estaba siendo tomada en cuenta, cual comunidades indígenas con
derechos reconocidos al amparo de las leyes dadas a partir de la década de Los años
sesenta, todo un universo que sólo ha tenido serios estudios entre las distintas disciplinas
sociales a partir de esa décadas, cuyos resultados recién pudieron verse a partir de la
década de 1980.

Estas cifras van de la mano con los niveles de pobreza, como se verá, esta es
más aguda y extrema en las zonas de la sierra rural, donde la pobreza extrema llega al
69.3%.

PERÚ: 1 9 9 1
P O B L A C I Ó N TOTAL POR D O M I N I O S DE E S T U D I O ,
SEGÚN NIVELES DE POBREZA

Niveles de pobreza Total Lima Costa urbana Sierra urbana Sierra rural

Totaí 100,0 100,0 100,0 100,0 100,0


Pobres 53,6 48,9 55,0 47,4 67,9
Pobres extremos 40,1 20,4 40,3 39,1 69,3
Pobres no extremos 59,9 79,6 59,7 60,9 30,7
No pobres 46,4 51,1 45,0 52,6 32,1

Fuente: Perú, Ministerio de Justicia, 1995.

6 0
Francke, 1985.

68
Existe además otra relación entre las mujeres, el nivel educativo que, al
parecer, influye en el número de hijos que ellas tienen, según las cifras ofrecidas por el
Informe Nacional sobre la Mujer 61
y los datos de Marfil Francke 62
la tasa global de
fecundidad varía según el nivel de instrucción de las mujeres, los que pueden ser
comparados con las áreas de residencia y que nos dará una relación directa y tasa de
natalidad en el Perú.

PERÚ:1977-78 Y 1991-92
TASA GLOBAL D E F E C U N D I D A D (TGF)
SEGÚN ÁREA DE RESIDENCIA Y NIVEL E D U C A T I V O DE LAS MUJERES

PERÍODOS 1977-78 1991-92

Total 5,3 3,5


Área de residencia

- Urbana 4,5 2,8


- Rural 7,4 6,2
Nivel educativo

- Sin educación s.¡. 7,1


- Primaria s.i. 5,1
- Secundaria s.í. 3,1
- Superior s.i. 1,9

Fuente: Perú. Ministerio de Justicia, 1995.

Entre los años 1977 y 1992, las residentes urbanas procuran tener menos hijos y
entre las residentes rurales se nota una disminución, habría que averiguar las razones, pero
la relación se mantiene. Esto también es consecuencia de la difusión del control de la
natalidad en las ciudades y La proximidad de Los centros de salud en los vecindarios
urbanos, lo que influye en la utilización de anticonceptivos. Cabe tener en cuenta la falta
de cifras para el período 1977-78, lo que demuestra que el interés por estos asuntos era
reciente.

Perú. Ministerio de Justicia. 1995.


6 1

« Francke, 1985.

69
PERÚ,1981
P R O M E D I O DE HIJOS N A C I D O S V I V O S POR MUJER
AL FINAL DEL P E R I O D O R E P R O D U C T I V O , SEGÚN NIVEL E D U C A T I V O

Fuente: Francke, Í985

Este gráfico revela el número de hijos de las mujeres que cerraron su ciclo
reproductivo en 1981 (mujeres que tendrían que haber nacido antes de 1930
aproximadamente), según su nivel educativo en el que claro notar el estrecho margen que
guarda con las cifras presentadas en el cuadro anterior. A más instrucción, menos hijos.
Sobre la instrucción en las zonas más deprimidas del país, se advierte que no sólo
se trata de saber leer y escribir, el problema va más allá de la ubicación geográfica, el grado
de pobreza y el hecho de ser mujer; y esto se revela sobre todo en las zonas andinas,
donde las mujeres campesinas ven limitadas su disposición para hablar en español
(castellano) "correctamente", convirtiéndose en la primera dificultad que ellas tienen para
acceder a la alfabetización. Datos sobre las socias de los clubes de madres de Ayacucho
pueden granear esta situación: el grupo mayoritario tiene primaria, pero más de un tercio
padece de analfabetismo con estudios primarios como en su caso tan solo el 57% de ellas
son bilingües (ver cuadro) paralela con la tasa de analfabetismo.

70
AYACUCHO, 1991
NIVEL E D U C A T I V O Y LENGUA DE LAS SOCIAS DE CLUBES DE M A D R E S

Nivel de educación % Lengua %


Analfabeta 36,9 Quechua 38,1
Primaria 41,8 Castellano 2,6
Secundaria 16,5 Bilingüe 57,5
Superior 0,4 No responde 1,9
No responde 4,5 - -
Total 100,0 Total 100,0
Fuente: Perú. Ministerio de Justicia, 1995.

Es decir que al margen de la pobreza, de la situación geográfica o, ser mujer, este


rasgo cultural, lejos de abrirle más posibilidades, en combinación con el medio, alejado de los
servicios del estado, limita y hace que el horizonte educativo se vea reducido si se es
analfabeto y si se aprendió el español como segunda lengua. Además, hay que tener en
cuenta que los pobladores "monolingües tienen una (...) conciencia realista del poder del
castellano y del mundo que este representa" ; entonces, es de imaginar la situación de las
63

mujeres, que laboran en la casa, en la chacra y demás quehaceres que la sociedad andina le
asigna. En el caso de las mujeres de Ocongate (Ayacucho), ellos viajan menos, no tienen
experiencia en las ciudades, y no opinan en las reuniones de la comunidad (menos tienen
acceso a la instrucción militar), estas mujeres de todas maneras reproducen las funciones
tradicionales, casos en los que se hacía necesaria la intervención de los programas dirigidos a
actuar contra esas diferencias, que van en perjuicio no solo de las mujeres sino de las
comunidades en conjunto. Eso da pié a que las mujeres se muestren tímidas porque saben
positivamente que difícilmente podrán mantener una discusión coherente o llevar a cabo un
negocio que vaya más allá de sus quehaceres domésticos tradicionales. Sobre esta
problemática Penélope Harvey con su texto Género, autoridad y competencia lingüística.
Participación política de la mujer en pueblos andinos^, demuestra la importancia que esta
tiene en el desarrollo de los pueblos andinos.

En las llamadas comunidades indígenas de la Amazonia, la educación bilingüe se


presenta como la más difundida, pero generalmente esta no va más allá de la instrucción
primaria, aún en la década de los años noventa. El problema de esta situación radica en
que los estudios secundarios coinciden con la edad en que las mujeres empiezan a formar
sus hogares, por el que las sesiones sobre la sexualidad y el control de la natalidad están

6 3
Harvey, 1989.
M
Harvey, 1989.

71
fuera de su alcance. La Información en ese sentido no niega los conocimientos ancestrales,
pero conviene que estén informadas, lo contrario sería gravarlas por discriminación; porque
hay que tener en cuenta que existe el interés de participar de la vida urbana para resolver
problemas personales, familiares, comunales, etc.

3.2. Educación superior

A fines de los años sesenta apareció el hipismo, un movimiento juvenil norteamericano


cuyo estilo de vida cuestionaba los patrones culturales y políticos de la generación
conservadora de la postguerra (l¡ Guerra Mundial); en el Perú, en las ciudades, sobre todo
en Lima, llegó su versión comercial, como una nueva moda en el vestir; no obstante, los
universitarios, conocedores de la ideología en la que estaba enmarcada, rescató su esencia
liberal con consecuencias sociales, sobre todo la desestigmatizacíón del divorcio en los
sectores medios, en los que se tornaron laxos ciertos preceptos morales que afectaron la
estabilidad de la familia tradicional. Por cierto, el movimiento tenía propuestas orgánicas,
entre las mujeres, la liberación femenina que demandaba un replanteamiento jurídico, la
reivindicación de la mujer estaba así representada por el movimiento feminista, que
aunque pequeño en número, cumplieron una efectiva labor.
A pesar de las dificultades y limitaciones que las mujeres tienen que sortear,
tienen como aliadas a las Organizaciones No Gubernamentales (ONG), pues sus programas
de promoción se encargan de ofrecer un tipo de instrucción que les sirve para mejorar sus
actividades domésticas; y también para aprovechar el tiempo libre generando ingresos; de
ia misma manera, tos talleres vecinales y los centros de formación nocturna para mayores
favorecen a tas amas de casa que optan por una carrera corta o un oficio que les permita
en el futuro poder tener un negocio propio que le darán la tan ansiada independencia
económica, una cuota de poder. Una experiencia que ha generado líderes, pequeñas
empresarias, promotoras, etc. Sí la Instrucción tiene como meta formar un ciudadano que
sea capaz de sostener su vida, labrarse un porvenir y a la vez sentir la satisfacción personal
mediante una ocupación que le agrade y por ella ser reconocida, las mujeres han
demostrado, sobre todo en los años más álgidos, ser ejemplo de ello, trabajan dentro y
fuera del hogar, se instruyen y contribuyen con el ingreso familiar y al erario nacional.
Casos que suelen verse con cierta regularidad, en aquellas que empezaron con una carreta
y que más tarde se convirtieron en prósperas propietarias de negocios originales, en los
que el componente femenino hace la diferencia y proporciona un plus.

72
mujeres, muy pocas, mientras se inician en estudiar en un 0,8% mecánica automotriz, los
hombres estudian cosmetología en un 0,0%. Una de las razones es precisamente, el valor
que se le otorga a las labores asociadas a la mujer, la idea de que una labor femenina no va
con la aspiración de un hombre, la labor de secretariado, que desde ya anuncia una
condición de subordinación, tampoco tiene demanda entre los hombres. Contra ello
habría que pensar en la fama que tienen los maquilladores o peluqueros en los salones de
belleza con mayor demanda y, en los restaurantes cuyos cocineros prefieren hacerse llamar
Chef en el Perú. La incursión masculina, aparece como la varita mágica que enaltece
cualquier oficio, porque se asume que sería ofensivo pagar a un hombre (previa evaluación
de su trabajo y una mirada a su apariencia para identificar su condición socioeconómica)
menos de lo que debería para sostenerse asimismo y a una pequeña familia, porque aún se
maneja el prejuicio de que un hombre trabaja porque tiene la responsabilidad de mantener
una familia, en tanto que la mujer trabaja para apoyar. Es interesante observar como el
rubro de los negocios tiene a hombres y mujeres en condiciones más o menos parejas; en
la comercialización de bienes y servicios, las mujeres pueden flexibilizar sus horarios y
tomar directamente las decisiones que considere pertinentes.
En cuanto a las carreras universitarias, en estas sí que las mujeres han ido
conquistando más rubros a su favor (no debemos olvidar que estos centros de enseñanza
se encuentran en las ciudades y que no pocas alumnas provienen de los distritos
aledaños). En el transcurso de más de treinta años no puede obviarse que la economía
fue haciéndose más crítica, sobre todo en la década de los ochenta, cuanto peor a partir
de la mitad del gobierno del sociólogo Alan García (después del anuncio fallido de la
estatización de la banca), y sobre todo la escalada de violencia sin tregua por parte del
Partido Comunista del Perú {llamado "Sendero Luminoso") y el Movimiento
Revolucionario Túpac Amaru, decidieron acelerar la caída del sistema político iniciado
con la Constitución de 1979. Un entramado social que no detuvo la voluntad de
superación de las mujeres de los segmentos socioeconómicos menos favorecidos por
acceder a una vacante universitaria.

PERÚ, 1 9 6 0 - 1 9 8 0 - 1 9 8 5 Y 1 9 0 0
P A R T I C I P A C I Ó N D E LAS MUJERES EN LA E D U C A C I Ó N UNIVERSITARIA

Arios 1960 1980 1985 1990

Postulantes 28% 39% 41% 40%


Ingresados 26% 35% 39% 39%
Matriculados 25% 34% 36% 36%
Graduados - 38% 40% 40%

Fuentes: Perú. Ministerio de Justicia. 1995; y Francke, 1985.

74
Continuando con la instrucción formal, la incursión de las mujeres y hombres en los
institutos superiores en Lima en 1990, presentadas por Btondet, es la siguiente:

LIMA METROPOLITANA: 1 9 9 0
MATRÍCULA DE LOS INSTITUTOS SUPERIORES T É C N I C O S ,
POR SEXO, SEGÚN ESPECIALIDAD

(Porctitujei)

Cosmética, Dermatología 100,0 0,0

Secretariado 99,7 0.3

Enfermería, Obstetricia, Fisioterapia 9-1,9 5,1

Diseño Interiores 86,7 13,3

Tursímo, Hotcíería 83,4 i 6,4


Ci. y Diseño Publicitario ífi.í 33,1

Laboratorio Dental, Farmacia 60,B 39,2

Contabilidad, Administración 56,7 : 43,1..

Industria Aumentaría 55,4

Comercio, Negocios y Ventas 43,2 5¡,8,

Locución y Comunicación 40,9 : 59,1:

Optometría 38,7 ¡1,3.

Computación 3S,4 6t,í

Mercadotecnia 32,1 í7,a<


Química Industrial 27,8 .72,2

Metalurgia 24,8 7S,2

Construcción Civil 20,¡ 79,4

Operación Química Metalúrgica 10,8 89,2'

Electrónica, Electricidad 3,2 •.9Í,8,'

Mecánica Aeronáutica 3,1 96,9

Agropecuaria 2>í

Electro. S¡st. Computacional 1,4 .98,6

Mantención de Maquinaria 1.1

Mecánica Automotriz y de Producción 0,8

Fuente: Biondet, 1993.

La primera impresión es que La elección de Los oficios corresponde a los


estereotipos sexuales de la sociedad, las mujeres elegirán la cosmetología, el secretariado,
las carreras médicas de segundo nivel y así poco a poco dejando las tareas asignadas a las
mujeres desde el hogar. Si bien este cuadro nos muestra las condiciones en el año 1990,
antes la elección seguro se habría reducido a Las diez primeras, no más. Los hombres
estudian mecánica automotriz, mantenimiento de maquinarias, cómputo, etc., pero las

73
Si bien en 1960 tan solo el 28% de los postulantes eran mujeres, hoy ya son
alrededor del 40%. Los progresos se advierten más, desde 1960 hasta 1980 y, de este
año a 1985, el quinquenio siguiente al parecer no ha tenido variación significante alguna,
incluso el porcentaje de postulantes mujeres se redujo en 1 % , los motivos antedichos
explican esta situación, en el que la mayoría de padres de familia prefirió respaldar a los
hijos hombres en vez de las mujeres en los gastos previos en academias preuniversitarias
particulares. Desde fines de ía década de 1970 y los primeros años de la década de 1990,
el Sindicato Único de Trabajadores de la Educación Peruana (SUTEP) ante la pérdida de
poder adquisitivo de los maestros, después de varios intentos de negociación con los
gobiernos, presionó a través de largas jornadas de huelga de maestros sin éxito, esta
situación melló su capacidad de actualización, el resultado afectó a los jóvenes
estudiantes de los colegios nacionales que, en los concursos de admisión, descubrían su
insuficiente preparación. Cada vez se hizo más necesaria la presencia de los centros
privados preuniversitarios.

Es claro ver que tas cifras no dicen mucho si no se identifican los diferentes
estratos socioeconómicos, con ellos se ve que las más beneficiadas son las de los
sectores medios u altos Las que acaparan esta suerte de 15,3% para 1991-1992 que según
las cifras que el INEI da para las mujeres con instrucción superior en el país (de ese 15.3%
solo el 2.4% corresponde a la zona rural) según los datos extraídos de Cecilia Blondet . 65

No obstante, se cuenta con un cuadro que nos proporciona ia encuestadora Apoyo según
un estudio de marketing hecha a las amas de casa en Lima , (ver cuadro) se puede
66

observar que las que poseen la educación universitaria están en un 46% en el nivel
socioeconómico A, como es de suponer, que no existe en este segmento ni una sola sin
instrucción o tan solo primaria; esa condición, en un 50% sólo es posible en el segmento
D, cifras que corroboran la polaridad social en el Perú. Considerando que los sectores
populares representan a una base ponderada de 78.1% en la muestra empleada, esa cifra
presenta una situación muy deprimente. Las mujeres en su mayoría pasan con cierta
holgura la educación secundaria, en adelante el futuro se les presentaba incierto. Este
panorama se puede presentar como estable, dadas las condiciones económicas,
difícilmente las amas de casa tendrán tiempo y/o dinero para poder proseguir otros
estudios. Esto sería (o es) toda una hazaña., sobre todo en la década de 1980.

6 5
Blondet, 1994.
6 6
Apoyo, 1993.

75
LIMA, 1 9 9 3
E D U C A C I Ó N DEL A M A DE CASA (ENCUESTA)

Total Nivel socioeconómico Edad

RESPUESTAS A B C D 18a 25 a 40 a
% % % % % 24% 39% más %

Ninguna/Primaria 30 0 7 22 50 6 19 48
Secundaria 44 24 37 52 42 60 46 37
Superior técnica/Universitaria 15 30 23 18 8 31 18 8
Incompleta
Universitaria completa/ Postgrado 11 46 34 8 0 4 17 7
Total: 1 0 0 % Base real 426 66 101 151 108 56 183 187
Base ponderada 100% 4,1 17,8 36,5 41,6 - - -

Fuente: Apoyo, 1993.

Que tas mujeres acceden más a tos institutos superiores que los hombres, bien lo
demuestra el cuadro correspondiente al año 1981. Ellas debían ser prácticas.

FERÚ: 1 9 8 1
P O B L A C I Ó N DE 5 A Ñ O S Y M Á S ,
SEGÚN SEXO Y NIVEL E D U C A T I V O

I
s
Sf-3% SV-3% é2.2% 37-7%
«3
Fuente: Francke, 1985.

Pasando a la educación superior, se nota, una vez más, que la inclinación sigue
por la vía de las profesiones que son una extensión de las labores asignadas a las mujeres.
Según la fuente de la Asamblea Nacional de Rectores para 1986, el 100% de los
matriculados en las escuelas profesionales le caben a las mujeres el total de 37.2% y a los
hombres el 62.8% (ver el siguiente gráfico).

76
PERÚ:1986
A L U M N O S M A T R I C U L A D O S EN EL SISTEMA UNIVERSITARIO
ESTATAL Y PRIVADO POR SEXO, SEGÚN ESPECIALIDAD

(Poícentijei)

N* de
mujarcj

Servicio 5ociai SJ.B 4,2 6.44B


Obstetricia 93.4 4.471

Enfermería 2,7 10.293

Nutrición 77,1 22,7 37J

Turismo
1 7-Í.I 25.) 1.544

Ciencias de la Comunicación ¡0,4 >;3Í I.Í29

Arte 5?.4 115


Educación 53,5 18,250

Química 53,1 1.392

Psicología 51,3 5.43Í

Traducción 51,1 500

Farmacia 49,a 1.939

Arqueología 424
Biblíotecologia 44,0 73
Cicnciai biológicas 43,8 V 56,2 2.J3S
Antropología 43,7 ^SU";' m
Historia 42,9 ;; 57,rY^'y
:
:
35
Sociología •i 1,3 '.SB.7 2017
Contabilidad 38,1 41,8', 1.5921
Odontología 3S,7 I.7S9
Administración JS.Í ¡73
Zootecnia 31,4 951
Arquitectura lí.e ^ 7 0 , 2 :

I.71Í
Derecho 21,7 «71
Estadística 37,4 ¡35
Computación 74,9 e-fí
Economía 2¡,3 4.7 S 7
Medicina 2S,S 3.443

1
Ingeniería Química 23,9 ;'Tí, 1 \ 1.819

Ingeniería Pesquera 22.6 523


Medicina Veterinaria 19,4
1 80,4' 504
Ingeniería Industrial 1.941
Agronomía 15.4 [.115
Ingeniería Civil 11,2 [.434
Física 8,3 ÍI.2, 124
ingeniería Geológica 4,4 Í5, C-
97
ingeniería Electrónica 2,8 97,1-' 84
ingeniería de Minas 2,2 97,3 82
Ingeniería Mecánica 0,7 •99,1. 43
Total 37,2 ;
¡2,S- 111.353

Fuente: Blondet, 1 9 9 4 .

77
También podemos observar que la ruta es la siguiente: primero los que van
directamente conectados a La protección de la familia, La más directa es la vinculada a la
salud, son los conocimientos más elementales y atañen a la seguridad integral (servicio
social). En segundo lugar está el aspecto estético, este destaca en la mujer porque tiene
que ver con la imagen (turismo, arte, y ciencias de la comunicación). En el nivel
tradicional y "más profesional" encontramos a las disciplinas educativas, que van de la
escuela de las primeras letras hasta su inserción en la sociedad, como Educación (nivel
secundario) y Psicología; carreras donde el profesional no tiene socialmente "la última
palabra". Sobre la asistenta social recae toda la maraña legislativa y la decisión de La
empresa o institución: sobre el obstetra recae el ginecólogo; sobre las enfermeras todos
los médicos; lo mismo a la nutriciónísta. Carecen de autonomía, deben estas profesiones
contar con un promedio superior de aprobación, de lo contrario, con una red que apoye
una iniciativa, esto cuando la sociedad misma se encarga de disolver el valor colectivo,
resaltando el individualismo. Seguidamente están las carreras mediante las cuales se
puede transmitir ideas y mensajes, se puede llegar a conocimientos que expliquen el
porqué de su lugar en la sociedad, sin la pretensión competitiva (son las ciencias
sociales); es decir, sin arriesgar, la situación es como seguir en casa, resguardada,
evitando los peligros, salvo la decisión de los mismos profesionales. Las carreras que
demandan mayor responsabilidad económica (una obra de ingeniería en que la inversión
sobrepasa los cálculos normales de riesgo para una familia) y riesgo de vida (una terapia
delicada) o de tipo legal competitivo, se van sumando poco a poco en el universo
femenino; convirtiéndose en una vertiente de poder.

PERÚ,1983-1994
C O M P O S I C I Ó N DE LOS I N S C R I T O S EN COLEGIOS PROFESIONALES SEGÚN SEXO

1983 1994
Colegios

% Mujeres % Hombres % Mujeres % Hombres

Enfermeros 90,1 9,9 70,0 30,0


Asistentes sociales - 70,0 30,0
Contadores 18,8 81,2 40,0 60,0
Odontólogos 18,5 81,5 25,3 74,7
Arquitectos 17,9 82,1 20,4 79,6
Abogados 17,2 82,8 20,4 79,6
Médicos 12,9 87,1 19,7 80,3

Fuente: Perú, Ministerio de Justicia, 1995.

78
La superación de los prejuicios en torno a la desvalorización de los oficios
asociados a las mujeres a hecho sus progresos, según el cuadro de profesionales entre
1983 y 1994 es posible verificar que Los hombres son cada vez menos prejuiciosos, el
porcentaje de enfermeros, por ejemplo, varió de 9.9% al 30%; habría sido interesante
contar con información comparativa de los asistentes sociales; no obstante, este cuadro
permite ver la proporción por sexo de otras carreras y como las mujeres incursionan
creciendo en porcentaje, sobre todo en el campo económico, como contadoras, por
ejemplo, que en una década, más que duplicaron su porcentaje. SI bien los estudios
universitarios corresponden a la juventud, hay excepciones, no son pocos los casos en que
las mujeres, pasada la edad reproductiva retoman aquella carrera trunca o; por qué no,
inician una; sobre todo a partir de la década de los noventa. Dicho esto, habría que
reconocer que estas cifras son un indicativo de como las mujeres prosiguieron su conquista
por el espacio profesional universitario en una década tan dura.

3.3. Estudiantes y sociedad

Un fenómeno, que va dejándolo de ser porque se hace cotidiano, es la visible participación


de las mujeres en los asuntos socio políticos. En la década porque se hace cotidiano de
1960, difícilmente uno podía reconocer la participación activa de un movimiento estudiantil
femenino con agenda propia, no obstante su participación iba en ascenso, pues en esa
década era conocida la importancia de las mujeres en la labor de propaganda o en las
llamadas "actividades de apoyo" a través de sus respectivas secretarías. Tiene ello que ver
con los estereotipos femeninos que aún estaban bien arraigados en la sociedad; uno podía
imaginar por ejemplo, mujeres militantes en determinados partidos políticos; pero no en
las Guerrillas de 1965 (que sí las hubo). Además, hay que recordar que recientemente las
mujeres habían logrado el voto (5 set. 1955); es decir que, mediante este tuvieron el
convencimiento de que la participación femenina era real, legal y legítima. En los años
setenta, la capacidad adquisitiva de la población mayoritaria empezó a bajar
paulatinamente, sobre todo entre aquellos que laboraban para el Estado. El régimen de
corte socialista del general Juan Velasco Alvarado (1968-1975) popularizó entre la juventud
su apuesta por las políticas denominadas de izquierda y su gobierno hizo reformas
estructurales que fortalecieron las organizaciones gremiales; el gobierno del general
Francisco Morales Bermúdez Cerrutl (1975-1980), gradualmente ponía fin a estas medidas
preparando el camino para volver a La senda representativa, dio lugar, mediante elecciones,
a la Asamblea Constituyente (1978) que elaboró la Constitución Política del Perú de 1979,
años en los que precisamente se iniciaron las prolongadas huelgas del Sindicato Único de

79
Trabajadores del Perú. Esta efervescencia política impactó en el alumnado escolar, las
elecciones, la paralización de actividades y la protesta callejera, que generaron entre los
universitarios un profundo apego a los problemas sociales. Los escolares podían estar
convencidos de las bondades de la prédica de cierta postura política para el caso de las
elecciones de la Asamblea Constituyente y, tratar de comprender los reclamos de sus
maestros; cuando no, temer el ataque de los maestros por el lanzamiento de huevos o
pintura amarilla a sus centros de estudios y profesores. A partir de la década del ochenta,
se inicia una etapa de elecciones en el Perú, la información a través de los medios masivos
de comunicación, así como las polémicas políticas, cual "carnaval". Las vertientes de la
izquierda no solo habían llegado a las aulas, habían difundido una cultura signada por las
reivindicaciones populares andinas, la universidad San Marcos era un claro ejemplo de ello;
en las manifestaciones políticas callejeras se podía ver a los hombres reuniendo gente,
pronunciando discursos y otras tareas en la labor ideológica; mientras que a las mujeres
podían vérselas como acolitas, desempeñando labores administrativas o formando parte de
una secretaría secundaria, que no de organización; lógicamente que esto tenía relación con
la proporción poblacionaí en estas casas de estudios. Más adelante se verá que su número
en nada representaba su dinamismo y compromiso con el mensaje político abrazado.
Varias y comprensibles son las razones por las cuales las mujeres demoran en
proponer un espacio para tratar directamente sus problemas como estudiantes, favoreció
su participación, además de los hechos mencionados, la crisis económica que afectaba
directamente a los hogares; pero sobre todo la declaración de la Década de la Mujer entre
1975-1985 por parte de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), que fue el
reconocimiento a nivel internacional de las mujeres como agentes de cambio en todos los
ámbitos. Uno de los frutos en esa línea es el folletín presentado por la Federación de
Estudiantes del Perú, "I Encuentro Nacional de Mujeres Estudiantes. Conclusiones"
realizando entre el 24 y 26 de junio de 1988 ; en este manifiestan que el objetivo fue
67

"analizar los diferentes componentes de la problemática de la mujer estudiante y delinear


planteamientos de solución a los problemas que dificultan la mayor participación de las
mujeres en el accionar del movimiento estudiantil y en la toma de decisiones en todos los
ámbitos de la vida social" . 68
Esta reunión contó con la participación de los centros
educativos secundarios de Lima, Chiclayo, Tingo María, Jaén etc.; institutos superiores de
lea, Huancayo, Cuzco, Trujillo, Moliendo etc.; también universidades de Arequipa, Puno,
Huánuco, Lambayeque, Tacna, Lima etc., entre ellas estaban Católica, Ingeniería, Agraria de
la Selva (Tingo María). A ese evento invitaron a organizaciones como el movimiento
feminista, el Frente Popular de Mujeres, la Federación Nacional de Trabajadores de la

" FEP, 1988.


FEP, 1988.
6 8

80
Universidad Peruana (FENTUP) y otros sindicatos. Lo interesante es que dicho evento pudo
hacerse efectivo gracias al presidente de la Asamblea Nacional de Rectores (ANR) Alberto
(

Fujimori Fujimori entre otras personas:


"En nombre de la Junta Directiva Nacional de la FEP que presido, expreso
a los participantes, personas e instituciones, que aportaron a la
realización del I Encuentro Nacional de Mujeres Estudiantes, nuestro
reconocimiento por su contribución, Muy especialmente al Señor Rector
de la Universidad Nacional Agraria de la Molina y Presidente de la
Asamblea Nacional de Rectores. Ingeniero Alberto Fujimori Fujimori..." . 69

Esta reunión realizada a fines de junio fue precedida por:


Encuentro Regional del Norte (3,4 y 5 de agosto)
Encuentro Departamental del Cusco (16-17 de junio)
Encuentro Departamental de Junín (17-18 de junio)
Encuentro Departamental de Tacna (18-19 de junio)
Encuentro Departamental de Huánuco (20 de junio)
Encuentro Regional del Sur (22-23 de junio)

Notoria es la presencia de los líderes de izquierda, entre ellas Alberto Moreno,


entonces Secretario General del Partido Comunista del Perú (Patria Roja), y el senador
Edmundo Murrugarra, entre otros. También se hicieron presentes representantes de la
FEPOMUVES (Frente Popular de Mujeres de Villa EL Salvador), FEDEP JUP (rondas
campesinas de Chota), COFADER (Comité de Familiares de Detenidos Desaparecidos y
Refugiados en Lima), etc. Es claro además que este Encuentro significó para sus integrantes
un hito muy significativo, pues conformaron un presidium de honor, integrado por: Micaela
Bastidas, Tomasa Tito Condemayta, María Parado de Bellido, Flora Tristán, María Trinidad
Henríquez, Laura Caller etc. estando en los años ochenta, se trataba de enfrentar al partido
de gobierno en 1988, su peor año. A decir del contenido del folleto, la idea general
estribaba en denunciar el advenimiento de la derecha y evaluar las expectativas de los
movimientos populares. El tópico educativo, más técnico, derivó en temas circundantes y
comunes, como son: la emancipación de la mujer, su situación, la contradicción entre Las
leyes y sus tristes desencuentros con la realidad, la violencia sexual y la ideología patriarcal.

Fueron críticas, convinieron en que La organización era una respuesta a La aguda


crisis estructural, pero que a su vez era "desorganizada", con características de
espontaneidad e inconstancia. Reconocieron además que La organización de la mujer está
sobre todo ligada a objetivos "academicistas", y que una vez más era evidente el desfase
existente entre teoría y La práctica en el sistema educativo. Preocupación de ellas también
fue el tema laboral, por esta razón manifestaron su interés por avanzar más en los asuntos

« FEP, 1988.

81
gremiales. No olvidaron los asuntos internacionales, en ese sentido manifestaron su
solidaridad con las mujeres nicaragüenses y las mujeres palestinas.
Cierra el folleto con la transcripción de la resolución "En apoyo de las mujeres
jóvenes por la igualdad, la educación y la participación" aprobada por el XV Congreso de la
Unión Internacional de Estudiantes (UIE) celebrado en La Habana (noviembre-1987). En
este se denuncia que la discriminación empieza en el hogar y prosigue en el trabajo, se
exhorta a Llevar a cabo una serie de acciones que deben empezar desde las escuelas
secundarias como parte del movimiento estudiantil; entre las cuales está, hacer cambios en
los contenidos de los programas educativos y eliminar objetivos que contravienen su lucha
por la igualdad. Se puede afirmar que la década de 1980, entre otras recientes, provocó el
encuentro de las mujeres y la política de manera directa, uniendo la familia, el trabajo, la
educación y la política.

82
4. MUJER Y TRABAJO

El potencial femenino en el
trabajo ha cobrado hoy en día
más importancia en la medida en

im
que el número de hogares que
están encabezadas por ellas ha 1
crecido de manera considerable
y, porque poco a poco Las
mujeres han ampliado su radio
de acción en el plano laboral; en
el que han demostrado que

pueden desempeñarse tan o más


eficientemente que los hombres. Esto se puede apreciar en todos los estratos económicos
sociales, en las diversas entidades, sean estas públicas o privadas, y en cualesquiera que sea
su ubicación en el engranaje productivo. Pero esta situación tuvo un proceso en el que se
conjugaron factores históricos, sociales y culturales.

4.1. Población Económicamente Activa (PEA), mujeres y


educación

Al observar las cifras sobre el ámbito laboral, los primeros datos que se nos presentan son los
correspondientes a la Población Económicamente Activa (PEA) y a Las tasas de actividad.
Hasta los años setenta la presencia laboral femenina no está bien cifrada, y esto se debe
fundamentalmente a que aún no se habían incorporado en las políticas sociales los
conceptos que hoy se empezaron a manejar a mediados de la década del ochenta en el Perú,
porque teórica y políticamente no se ha logrado inscribir como trabajo al conjunto de
actividades que las mujeres realizaban en el hogar en beneficio de sus familias, porque estas
tareas domésticas eran y son consideradas como gracioso apoyo familiar sin remuneración.
La educación escolar, los estudios en los institutos superiores y en las universidades
incrementaba el porcentaje de las mujeres en el mercado laboral, lo que se puede advertir a

83
partir de los datos del censo de población de que presentó la Oficina Nacional de Estadísticas
y Censos (ONEC), en el que se puede apreciar la participación femenina en la PEA
manteniendo la tasa de actividad.

REPÚBLICA DEL PERÚ: P O B L A C I Ó N TOTAL, 1 9 7 2


PORCENTAJES DE LA POBLACIÓN E C O N Ó M I C A M E N T E ACTIVA (PEA),
N O PEA, A C T I V I D A D N O ESPECIFICADA, TASA DE A C T I V I D A D
Y D I S T R I B U C I Ó N DE LAS MUJERES EN ELLOS

TIPO DE ACTIVIDAD. DÍA DEL CENSO: 4 DE JUNIO DE


DEPARTAMENTOS, POBLACIÓN 1972
SEXO, ÁREA TOTAL PEA No PEA Actividad no Tasa de
URBANA Y RURAL % especificada actividad
TOTAL
Total % Total % Total % Total % %

Total 13538208 100,00 3871613 28,6 9639130 71,19 27465 0,20 28,16

Urbana 8058495 59,52 2388827 17,6 5653601 41,76 16067 0,11 29,70

Hombres 4028169 29,75 1793508 13,2 2224259 16,42 10402 0,07 44,64

Mujeres 4030326 29,77 595319 4,39 3429342 25,30 5665 0,04 14,49

Rural 5479713 40,47 1482786 10,9 3985529 29,43 11398 0,08 27,12

Hombres 2756361 20,30 1277890 9,4 1471863 10,87 6608 0,05 46,47

Mujeres 2723352 20,10 204896 1,5 2513666 18,56 4790 0,03 7,54

Mujeres Urb. y Rural 49,87 % 5,89 % 43,86 % 0,07% -

Fuente: Perú, ONEC, 1974. Elaboración propia.

Cabe recordar que en 1972 la población urbana ya había superado a la población


rural (urbana 59, 52% y rural 40.47%). El porcentaje de la población total que corresponde
a la PEA es el 28.6%, de este sólo el 5.89% correspondía a las mujeres en esta forma: el
4.39% en el área urbana y el 1.5% en el área rural. Si el 28,6% equivalía al el 100% de la
PEA, las mujeres sólo representaban el 20.59%, poco más de la quinta parte. Aunque el
cuadro sólo refleja los parámetros de la PEA, sería muy interesante cotizar en horas hombre
la labor de las mujeres en el hogar, desde la administración de los recursos y su puesta en
funcionamiento en un hogar con no más de tres hijos y con altos recursos; o el desempeño
de otras que realizan las mismas funciones junto con la parte operativa (cocina, lavandería,
costura, enfermería, asesoría de imagen, etc.) en una familia con más de cuatro hijos y con
escasos recursos; en ambos casos, labores ineludibles.

84
La No PEA de 1972 abarcó el 71.19% de la población en general, correspondiéndoles a
las mujeres el 43.86%. Si en 1972 la PEA femenina equivalió al 20.59% del total, en 1981
esta llegó al 25,10%, creció cinco puntos más. Según los gráficos elaborados por Gaby
Oré , se puede ver que en 1981, la PEA ocupada de mujeres es menor que su
70

correspondiente PEA, y en cuanto a la PEA desocupada, casi La duplica, mientras que en el


caso de los hombres, la PEA ocupada es mayor a su PEA, y la desocupación, menor. Ello
indica que el número de puestos de trabajos asalariados está compuesto más por los
varones que por las mujeres por una gran diferencia.

PERÚ,1981
PEA N A C I O N A L POR SEXO PEA O C U P A D A P O R SEXO PEA D E S O C U P A D A POR SEXO

Fuente: Oré, 1993.

Hay que tenerse en cuenta que por aquellos años se estaba generando un
fenómeno producto de la crisis económica, el subempleo, una nueva variable que se
acomodaría mejor a la realidad de Las mujeres en el Perú de esos años.

PERÚ:1961-1993
P O B L A C I Ó N CENSADA Y TASA DE A C T I V I D A D FEMENINA

Población total femenina de PEA Tasa de actividad Tasa de


AÑOS quince y más años femenina (%) crecimiento de la
(en miles) de quince y PEA femenina
más años
1961 2 864,9 640,6 22,4 -
1972 3 831,1 763,1 19,9 1,6
1981 5 051,9 1 277,5 25,5 5,8
1993 7 075,8 2 104,8 29,7 4,2

Fuente: Perú. INEI, 1995.

O r é , 1993.

85
Para una mejor idea del crecimiento de la participación de las mujeres en la PEA
Nacional el INEI presentó los cuatro últimos censos (desde 1961 hasta 1993), en el que
pese a su crecimiento progresivo en número, se registra un declive en la tasa de actividad,
de 22,4 % en 1961 a 19,9% en 1972, lo que se corrige en adelante hasta elevarse al 29,7%
en 1993, como se puede observar en el siguiente gráfico:

FERÚ:1961-1993
TASA DE A C T I V I D A D FEMENINA

196! 1972 1981 1393

Fuente: Perú, INEI, 1995.

Que estas cifras van rumbo a la equidad respecto a los hombres es casi un hecho
en cuanto a metas, y esto va de la mano con la instrucción que las mujeres vienen
recibiendo en los centros de formación profesional tanto en el área técnica como en el área
profesional universitaria. Así no solo la participación de las mujeres crece en número en el
PEA sino también en permanencia, poco a poco, sea por vocación y/o por necesidad, o
ambas, las mujeres desarrollan actividades económicas. El gráfico de tasas de actividad por
sexo y grupos de edad de 1972 muestra con claridad, la diferencia que existía entre
hombres y mujeres, ellos irrumpen entre los 15 y 24 años en la actividad económica en más
del 90%, y permanecen en ella hasta poco más de los sesenta años aproximadamente;
mientras que ellas ingresan progresivamente entre los 15 y 24 años, pero sólo en un 25%
aproximadamente, y no todas permanecen, puesto que la línea marca cierto descenso en el
caso de las mujeres urbanas, lo que lleva a pensar que se debe a la formación de las

86
familias (embarazos dedicación exclusiva a la maternidad y servicio del hogar) no así en el
caso de las mujeres rurales, cuyo tipo de trabajo y horario difieren al de las zonas urbanas.
Este efecto, según Cecilia Blondet se manifiesta con claridad a partir de la década de 1960
71

y es a partir de la década de 1980 que en Lima Metropolitana se manifiesta un cambio


progresivo hacia los años noventa.

PERÚ: 1 9 7 2
TASAS ESPECÍFICAS DE A C T I V I D A D DE LA P O B L A C I Ó N
E C O N Ó M I C A M E N T E ACTIVA POR SEXO Y G R U P O S DE E D A D

too

Fuente: Perú, Ministerio de Trabajo, 1976.

En este sentido la producción bibliográfica también confirma este proceso, el


mayor número de publicaciones sobre este tema se da en los años ochenta, en las que se
estudian la participación de las mujeres en el mercado laboral, las razones por las cuales
participa de manera creciente (la instrucción escolar y el interés por la generación de sus
propios recursos e independencia), los problemas que encuentra, el impacto social que se
manifiesta a nivel estadístico, así como también los cambios a nivel emocional; por
ejemplo, en Las relaciones con sus compañeros de trabajo . 72

Blondet, 1994.
Bar rig/C hueca, 1985.

87
La ocupación de ias mujeres según Blondet tiene que ver en mucho con su nivel
73

de instrucción. En 1981 entre las mujeres ocupadas, el 20% no tenían nivel de instrucción,
casi el doble que los hombres ocupados.

PERÚ: 1 9 8 1
P O B L A C I Ó N POR SECTOR DE O C U P A C I Ó N
SEGÚN NIVEL DE I N S T R U C C I Ó N POR PORCENTAJES

Población ocupada Población desocupada

Nivel de instrucción Mujeres Hombres Mujeres Hombres

Ninguno 20,8 10,5 21,8 7,8


Primaria 34,5 49,1 26,5 30,9
Secundaria 24,5 28,2 31,2 42,9
Superior 16,8 10,2 12,1 11,2
No especificado 3,4 2,0 8,4 7,2
Total 100,0 100,0 100,0 100,0
N° 1'208 860 3 8 1 9 083 126 621 159 327
Nota: Corresponde a la población de seis y más años de edad.

Fuente: Blondet, 1994

En este cuadro se puede apreciar también que, a partir de la instrucción primaria,


conforme el nivel es más alto la diferencia que favorece a los hombres no sólo disminuye
sino que se invierte: en primaria 14,6%; en secundaria, 3,7%; y en el superior, las mujeres los
superan por un 6,6%. Sólo el 10,2% (389 546 aproximadamente) de los hombres ocupados
tenía estudios superiores, mientras que 16,8% (203 088 aproximadamente) de mujeres
ocupadas tenía estudios superiores. La relación entre hombres y mujeres ocupados con
estudios superiores en 1981 fue de 65,73% para los hombres y 34,26% para las mujeres; sin
embargo el nivel superior en este caso es muy amplio, están incluidos los institutos
superiores y las universidades, pese a ello, el cuadro demuestra que cuanto más instruidas,
mejores serán las oportunidades de trabajo. Lo que no necesariamente se traduzca en un
salario equitativo por el mismo desempeño.
El gráfico a continuación presenta la PEA en 1993, en él se evidencia los avances
en la instrucción femenina, mientras las mujeres prosiguen de manera constante sus
estudios, los hombres hacen un alto en la secundaria. Las mejores oportunidades laborales
para los hombres son socialmente aceptados, como se dijo líneas arriba, se entiende que
debe sostener el hogar, una vez ocupada una plaza, podía ascender sobre la base de su

7 3
Blondet, ¡994.

88
experiencia; por otra parte, ciertamente asume la responsabilidad de sostener una familia,
lo que harta que sus posibilidades de proseguir una carrera universitaria se aminoren,
porque preferirán dedicar ese tiempo a la generación de mayores ingresos, puesto que la
inversión en ese sentido sería de largo aliento, una opción poco atractiva en tiempos de
inestabilidad económica y violencia, cuando se procuraba ahorrar para salir del país.

PERÚ: 1 9 9 3
PEA DE Q U I N C E Y M Á S A Ñ O S P O R SEXO,
SEGÚN NIVEL DE E D U C A C I Ó N

PERSONAS (mileí)

SIN HIVEL-PRE-ESC. PRIMARIA SECUNDARIA SUPERIOR

Fuente: Perú, INEI, 1995.

En la década del ochenta el mercado Laboral era muy estrecho aún para los
hombres, el rasgo más común era el subempleo, y la Labor informal. La mayoría de las
mujeres debieron trabajar con un sueldo inferior al de los hombres, y es en esta condición
en la que ingresan por lo general al sector laboral, sobre todo en los negocios privados.

4.2. Trabajadoras del hogar

El trabajo doméstico es la ocupación femenina más conocida y de fácil acceso al mercado


laboral, sobre todo en las zonas urbanas. Desde mediados de la década de 1950, a este
tipo de trabajo, la frase "Más horas, menor recuperación, menos oportunidades" , la 74

Roig, 1981.

89
sintetiza. Las habilidades consideradas como propias de la mujer no reciben un genuino
reconocimiento a nivel laboral, porque difícilmente los derechos y deberes que alrededor
de este oficio se han producido, como los son: sueldo básico, seguros sociales, vacaciones,
Compensación por Tiempo de Servicios (CTS), etc., difícilmente se cumplen. Tales
exigencias y condiciones generalmente permanecen en el olvido por sus peculiaridades, las
que están matizadas por halos de ignorancia entre las empleadas y, complicidad entre los
empleadores, por eso en la mayoría de los casos existe una suerte de entendimiento, que
responde a la necesidad de los empleadores de contar con personal "de confianza" que se
ocupe de las labores domésticas que les quitará el tiempo que necesitan para invertirlo en
actividades más expectantes; y por otra parte al numeroso contingente joven-adulto no
calificado que necesita trabajar para su propio sostén (alimentos) de forma transitoria,
mientras conoce otros entornos, aprende normas, reúne dinero y se prepara para
desempeñar otra labor más atractiva en la ciudad. Esto es así por cuanto el mayor
contingente proviene de las zonas rurales, cuando no, de las poblaciones que rodean las
ciudades, ciudades donde habitan las familias que tienen el control económico de sus
respectivas regiones, que tratándose de Lima, tienen el control económico del país. Este
trabajo puede ser flexible, pues ofrece varias modalidades: "cama adentro", el equivalente a
la dedicación exclusiva; "cama afuera", lo que sería el tiempo completo y; por tareas (la
lavandera por ejemplo); las dos últimas generalmente conviene a las mujeres que ya tienen
su propio hogar y dispone de horas libres.
En el Perú este trabajo no es considerado el empleo anhelado para la mayoría de
la población, permite conocer familias de altos ingresos en Las zonas rurales y el de Los
sectores medios y altos en Las ciudades, de este modo generan la posibilidad de establecer
redes, los vínculos necesarios para facilitar nexos externos a sus respectivas familias; por lo
que se reafirma como el empleo eslabón que las ayudará a lograr su realización personal
(estudiar, poseer su propia familia y obtener ingresos que les permitan vivir a gusto a través
de una actividad que le agrade), como cualquier persona.
Cabe indicar que el trabajo doméstico no es privativo de las mujeres, entre los
hombres hay quienes desempeñan labores domésticas, jóvenes que atienden los
mandados, limpian los exteriores de la casa, mantienen frescos los jardines, guardan los
autos en las cocheras, cambian plomos y empaquetaduras y realizan reparaciones sencillas
de muebles y objetos hogareños procurándoles un buen acabado; labores que con el correr
de los años les brinda la oportunidad de desempeñarse como un trabajador especializado
independiente con mejor remuneración (electricista, pintor, jardinero, etc.).
Pero hay una variedad de empleadas domésticas, desde aquellas con
experiencia laboral o especializada en algún rubro (ama de llaves, limpieza, cocina, ama

90
de niños, ama de recién nacido hasta los dos años, etc.) con derechos incluidos hasta las
llamadas "ahijadas" que solo perciben una propina porque se considera suficiente el
proporcionarles alimentos y "escuela nocturna" entretanto se la adiestra en el trabajo
doméstico.
La bibliografía sobre el trabajo doméstico aunque pequeña tiene en Lima el
centro de atención. Entre los primeros trabajos tenemos los de Blanca Figueroa, La
trabajadora doméstica en el Perú 75
y otro cuyo título relaciona este trabajo en torno al
nivel económico de la familia patronal . Norma Gamarra, que aborda un sesgo laboral y
76

reivindicativo y ACSTHO (Asociación de Capacitación y Servicios de las Trabajadoras del


77

Hogar) que edita un libro muy interesante, que es a la vez un manual para las
trabajadoras hecho por las mismas trabajadoras ; tienen como meta la organización
78

gremial. La editora Nueva Sociedad de divulgación internacional también ingresó al


tema de manera particular (Nueva Sociedad, 1993). De todos los textos, destaca "La
dominación total" de Gonzalo Portocarrero (1993), que trata algunos casos de las
empleadas domésticas en Cusco, en el que la situación de pobreza de la vida en el campo
obliga a los padres a llevar a sus niñas a La ciudad y ofrecerlas a sus respectivas madrinas
para aliviarse de los gastos de su alimentación con la esperanza de que reciban un trato
familiar y preparación básica (estudios) para salir adelante; Portocarrero percibe la
irresistible oportunidad que se Le presenta a la madrina al contar con una persona que se
dedicará a las labores domésticas sin un sueldo, una relación que va camino al abuso,
pues la menor no tiene el trato familiar, ni tiempo para estudiar o para dedicarlo a ella
misma, ni tampoco acceso a otros espacios sociales; y por añadidura, sufre vejaciones
(insultos, golpes) no solo dirigidos a su desempeño, que (en el mejor de Los casos) la
instaría a superarse mediante el esfuerzo aunque sea a manera de revancha, sino a su ser
étnico e histórico, que la hace ver cristalizada en esa condición, la vil estocada. Sigue a
ello un correlato de soledad, que la encamina a aferrarse a quien le brinda algún gesto de
cariño, abriéndose una puerta con múltiples opciones, que generalmente empieza con un
nuevo ser, su verdadero y único incondicional amor.

Los antecedentes del trabajo doméstico en el Perú, con las características


actuales de oposición étnica económica y cultural, provienen del período colonial, en las
ciudades las familias de la élite de poder contaron con los esclavos domésticos y en las
zonas rurales los indígenas realizaban estas tareas como consecuencia de los trabajos
personales. ¿Acaso, provendría de aquella época la costumbre de no pagar por estas

Figueroa, (975.
Figueroa, 1977.
Gamarra, 1988.
Loza y otros, 1990.

91
labores una remuneración digna? En el siglo XIX el servicio doméstico continuó pero en
otras condiciones, considerándose como una ventaja el conocer el estilo de vida, el gusto
y refinamiento de la élite en el vestir y variada dieta; por ejemplo, en la preparación de
alimentos con una amplia gama de ingredientes y la preparación de dulcísimos postres
con alquímica recetas, así como también, las formalidades del oficio que los jóvenes
provincianos habrían de aprender. Diferencias que de seguro contarían entre sus
empleadores a la hora de valorar cada una de las tareas emprendidas. Está por escribirse
la historia del servicio doméstico. A inicios del siglo XX, el ingreso a la modernidad hizo
del Perú un país productor de materias primas de exportación, las ciudades de la sierra
empobrecieron y las de la costa se robustecieron, oleadas de serranos fueron a la costa
por trabajo estacionario; más adelante, a trabajar permanentemente al verificar que el
viraje económico sierra-costa no daría marcha atrás. Los lazos establecidos favorecen
una progresiva migración hacia la década de 1950 en adelante, para aquel entonces, ser
serrano equivaldría a ser indio, a ser pobre, a ser una persona con carencias y
desventajas.
En las décadas del sesenta y del setenta, podían considerarse ventajas, conocer
un nivel de vida más cómodo que asumirá como parte de sus aspiraciones, aprender a
utilizar los novedosos electrodomésticos, asimilar nuevos estilos, costumbres, moda y
modales urbanos que le otorgará mejores perspectivas laborales, y aunque parezca poco
feliz, la posibilidad de un mejor uso del español (castellano) pues si el acento provinciano
daba pie a la discriminación, su pobre conocimiento daba pie a la burla; otra ventaja sería
que casi el íntegro del sueldo podía convertirse en ahorro porque generalmente los
alimentos corrían por parte del empleador. Las desventajas están reflejadas en el trato
individual, cuando la explotación no tiene horario y obliga a las empleadas a ser las
primeras en despertar y la últimas en dormir sin tener tiempo libre para dedicarlos a sí
mismas (estudios por ejemplo), aparte de los días de salida; también, en el trato
cotidiano, discriminativo-negativo que en la mayoría de los casos merma la dignidad
personal, cuando el trato de confianza (el tuteo) se torna invasivo y prepotente por los
menores hacia las empleadas madres de familia, reafirmando una relación dominante-
dependiente, que en el caso peruano generalmente, va más allá de la relación laboral; es
decir, contribuye a la perversa relación asimétrica que ofrece las bases de una sociedad
disociada que desvaloriza ipso fado en el mundo privado (íntimo y político) el
componente cultural milenario generado en el territorio peruano, el que portan la
mayoría de las mujeres como sus legítimas descendientes sean éstas de la costa, sierra o
selva.

92
Las trabajadoras del Hogar si bien han hecho sus progresos estos han sido
marcado por la pobreza no solo material, sino de oportunidades, que se veían y ven aún,
en los poblados rurales. Si nos remontamos a los sesenta, tenemos como una variable
decisiva la migración hacia Lima y a las zonas urbanas del interior del país. En aquel
entonces las clases sociales estaban diferenciadas no solo por el caudal económico sino
sobre todo por el componente étnico, y está como hoy, también distribuido
geográficamente. Por ello, establecerse en la ciudad era la razón por la cual se venía a
trabajar como doméstica si aún no se presentaba una vacante como obrera.
Los sueldos aunque pequeños cubrían con todas sus necesidades básicas, por
otro lado existía una especie de complementación asimétrica con la familia empleadora.
Relaciones subliminadas con una dosis de paternalismo que facilitaba la relación laboral..
No se puede evitar que la solidaridad se manifieste en los setenta, La conciencia social
también llegó a ellas; y no solo Llega la mano de obra en busca de un empleo, también la
carga negativa del encuentro con la ciudad y el conflicto que no se resuelve, pronto este
trabajo en un principio oportuno para las clases altas y también las medias, pasaron por la
movilidad social. El crecimiento de la oferta de trabajadoras del hogar y el ingreso de
miembros de los sectores populares a la cíase media más económica que social, residentes
en los distritos de Lince, Jesús María, Surquillo, etc.
Llegar a pensar en que la joven trabajadora esté conforme con su trabajo por más
de que esté bien remunerada no significa que piense permanecer en él. EL matrimonio o
"el compromiso" es como una válvula de escape, ahí decide la vuelta o no al trabajo.
Cuántas de ellas se embarazan antes de liegar al cometido de establecer una familia,
muchas veces esta situación viene a ser otro lastre más en contra de sus aspiraciones
iniciales, peor cuando estas mujeres no tienen familiares en quien apoyarse. Lo peor es
quedarse en la calle. En los años finales del setenta y comienzos de los ochenta, la
formación de los barrios marginales y el comercio ambulatorio se convierten en la otra vía
a asumir, (no solo asumir, sino también crear). Los tiempos han hecho de que ellas estén
mejor informadas, no hay punto de comparación entre una doméstica del sesenta con una
de Los noventa. Encontrar una trabajadora "sin mañas y sana" y una empleadora "buena"
hoy se hace cada vez más difícil.

En Los años noventa un proyecto de ley que beneficiaría a las trabajadoras


domésticas se estanca ante una realidad que trasciende los planos laboral, económico y
político. Muchas cosas en juego que de aprobarse pronto sería violada por tirías y
troyanas. Si en Los sesenta nadie se preocupaba por ellas cuando más lo necesitaban, en
los setenta y ochenta La izquierda por la vía de la CGTP presta su apoyo político, aunque
sus numerosas organizaciones no representaban a este componente social. Desde los

93
ochenta y comienzos de los noventa poco se hizo, y como este problema implicaba tener
un lugar en el derecho laboral, la presentación de un proyecto sería válido si quitaba su
connotación peyorativa. No se debe olvidar que lo que las trabajadoras(es) desean es el
reconocimiento de su dignidad en el desempeño de sus labores como cualquier otro oficio.

4.2.1. El servicio doméstico en Lima

Abordar el servicio doméstico a nivel nacional no es posible por cuanto no hay suficiente
material bibliográfico. La extensión de las labores del hogar fuera de él debe tener en las
provincias ciertas particularidades que marcarían un panorama más amplio y diverso . Así, 79

es Lima la que ofrece mayor información y esto se justifica por cuanto presenta la mayor
concentración.

Una entrada para llegar en el plano laboral es la fuente que nos proporciona la
Encuesta de Mano de Obra en Áreas Urbanas en 1972 del Ministerio de Trabajo . 80

LIMA M E T R O P O L I T A N A : 1 9 7 2
CATEGORÍA O C U P A C I O N A L DE LA PEA POR SEXO

CATEGORÍA OCUPACIONAL HOMBRES MUJERES

Empleado privado 16,1 18,4


Empleado público 13,8 13,0
Obrero 39,1 10,4
Trabajador independiente 17,7 20,2
Patrono 4,6 2,2
Doméstico 1,4 23,8
Trabajador familiar 0,9 3,1
Desempleo Cesante 4,5 3,8
abierto Aspirante 1,2 2,2
Desempleo encubierto 0,7 2,9
Total 100,0 100,0
N° de casos 1986 915
Fuente: Perú, Ministerio de Trabajo, 1976.

Según esta encuesta, de un total de 2901 casos entre hombres y mujeres, si


analizamos los porcentajes encontraremos que el sector doméstico ocupa el 1.4% del PEA
masculino es decir 19 hombres y el 23.8% del PEA femenino igual a 210 mujeres, el total

Loza y otros, 1990.


Ministerio de Trabajo, i 976.

94
conformado por 229 arroja un 9 1 % a favor de Las mujeres. Por otro lado esta categoría
ocupacíonal es la que acoge a casi la cuarta parte del PEA femenino seguida por las
trabajadoras independientes con un 20.2%.
Este 23.8% del PEA femenino desciende de la siguiente manera en 1981 con
19.3% en 1984 con 20.2% en 1986 con 16.4% en 1987 con el 13.9% y para 1991 el H.2% . 81 82

Sin embargo esta disminución no quiere decir que el otro sexo ocupe este vacío, tan solo
quiere decir que esta ocupación está decreciendo y que las mujeres siguen siendo las más
representativas, eso no ha cambiado mucho en 1989; ni aún en 1991 (92.3%) . 83

LIMA METROPOLITANA: 1 9 8 9
C O M P O S I C I Ó N POR SEXO DE LAS CATEGORÍAS OCUPACIONALES

(Porcentajes}

Mujeres Hombres

Patronos 13.4 U¿
í-.Ví

Empleado) privado)

Empleadoípúblicos 62,0

Obreroj privado* 8,1 81,9

Obrero* públicos v.l'.v.t é "^-V:'


Trabajadores
Independiente! 53,1
Familiares no ^-^'u «V'-'-'^-.'
remunerados ^'^.'ivVA^Vv."^ «,l
Trabajadorei ^si^r^^^y^)}';:--^'-:^:
1A

Practican»! 51.»

Total 5V

Nat» : Ct>rmf>«*4* » la febUríón d« H f m u i t a i <Jt *4t4: i x d v r * $ ' pelona» quf


1

Fuente: Blondet, 1994.

Loza, Luza, Mendoza y Valverde hicieron un trabajo muy serio, la situación de las
empleadas del hogar, basadas en la información proveniente de jóvenes de 16 a 21 años
ubicadas en colegios, parroquias centros técnicos y otras instituciones de empleadas del

81
Loza y otros, 1990.
8 2
Blondet, 1994.
8 3
Perú-Ministerio de justicia, 1995.

95
hogar y, que provienen de distintas categorías (alta, media y baja) de empleadores, a través
de encuestas realizadas en 1986 y 1990.

LIMA: 1 9 8 6 - 1 9 9 0
LUGAR DE PROCEDENCIA DE LAS TRABAJADORAS DEL H O G A R

1986 1990
Región
F % F %
Costa 92 34,7 60 25,0

Sierra 154 58,1 160 66,7

Selva 13 5,0 13 5,4

N o responde 6 2,2 7 2,9

Total 265 100,0 240 100,0

Fuente: Loza y otros, 1990.

Una de las primeras afirmaciones que se puede hacer es que el mayor componente
lo integran las trabajadoras provenientes de la sierra, en el que predominan los
departamentos de: Ayacucho (13.8%), Lima (10.4%), Cajamarca (9.6%), Apurtmac (9.6%),
Cuzco (8.8%), Puno (7.5%) y Piura (7.1%). Debe tenerse en cuenta que estos datos son
próximos a la ola de violencia política y terror que, sobre todo azoíó a Ayacucho, por lo
que es probable que sí la información habría sido recolectada en los años sesenta y
setenta, en situaciones no violentas, La información pudo haber sido diferente.
Entre los motivos que más destacan para venir a Lima a trabajar como empleadas,
ellas manifiestan en primer lugar que lo hacen para poder trabajar y estudiar (42%). Así
dejan de ser una carga familiar antes del matrimonio es común oír en las familias de
barrios populares lo siguiente "¿cuándo se casa tu hija?, ¿hasta cuándo la vas a
mantener? Ya está grande", en el caso de las jovencitas que finalizan la secundaria o a
la floja quinceañera que está mal en los estudios, porque el estudio es la única garantía
que les permitirá alternar con otras personas, conocer contactos laborales mejores y/o
a la pareja adecuada que busca su superación, los estudios deseados que los padres no
pueden asegurar. Por eso va en segundo lugar la respuesta, por estudios (22.3%). Solo
trabajar (13.6%), manifiesta un grupo menor, que busca hacer llegar su pequeño sueldo

96
al sostén familiar. Estos porcentajes 84
corresponden a 1984 pero entendemos que las
razones no han cambiado sustancialmente.
El trabajo se consigue mediante una recomendación, también mediante una
agencia, y lo que ofrecen son servicios, un sector en el que las mujeres en general han
ingresado en el plano laboral. Pero ellas se encuentran generalmente en la categoría
ocupacional de subempleadas. La modalidad usual del contrato es verbal y no son poca las
veces que estos acuerdos se rompen o sobreviene a la llana respuesta de que no hay
dinero para pagarles puntualmente. Acudir a Las instancias legales, es una pérdida de
tiempo.
No todas las empleadas son iguales, se observa que la mayoría de ellas, casi el
70%, son jóvenes que solo tienen instrucción primaria y cursan los inicios de instrucción
secundaria, esto no quiere decir que al interior del trabajo sus actividades sean parejas.
Dentro del trabajo las actividades que realizan son en un 75% o más todas las labores de la
casa es decir "todo servicio", y la especialidad que le sigue es la de la cocina, que no excede
el 9% entre Las encuestadas, le sigue las tareas del lavado, cuidado de niños y limpieza . 85

Este porcentaje mínimo debe también corresponder con el grupo socio-económico alto-
medio. La cocina viene a ser de alguna manera una situación privilegiada frente a las otras,
sobre las cuales caen todas las tareas que generan stress.
En 1990, según la encuesta, el trabajo doméstico va en disminución. En primer
lugar porque tan solo el 7% de ellas piensa quedarse en este empleo para siempre, puede
que la razón sea por conformidad, ello obedecería más a la pérdida de voluntad o
esperanza de obtener otro empleo que la misma relación de trabajo genera en mujeres
especialmente desprotegidas, salvo excepciones . El resto, es decir la mayoría, trabajaría
86

solo mientras termine sus estudios, por poco tiempo hasta que encuentre otro empleo. Es
la transitoriedad del trabajo doméstico lo que hace pensar que en breve, su peso, sentido y
significado en el mundo laboral va a cambiar drásticamente.

Uno de los problemas más duros que casi todas las empleadas tienen que
pasar es el que corresponde a su estado anímico. Antes más que hoy, el choque
cultural fue La primera gran barrera a superar, que si bien se tolera, existen otras trabas
que lesionan su identidad: la alienación y la discriminación que consiste en desbaratar
todo valor ajeno a sus empleadores, gestos que hacen que su ingreso (sin hablar del
maltrato directo) no sea muy agradable. Y a todo ello ¿a qué edad ingresan las mujeres
a este tipo de trabajo?

Loza y otros, 1990.


Loza y otros, 1990.
Loza y otros, 1990.

97
LIMA: 1 9 8 6 - 1 9 9 0
E D A D EN Q U E E M P E Z Ó A SER TRABAJADORA DEL H O G A R

1986 1990
Grupos de edad
F % F %
Hasta 10 años 23 8,7 25 10,4
De 11 a 13 años 42 15,8 49 20,4
De 14 a 16 años 122 46,0 115 48,0
De 17 a más años 59 22,3 41 17,1
Sin respuesta 19 7,2 10 4,1
TOTAL 265 300,0 240 100,0

Fuente: Loza y otros, 1990.

Mas del 60% ingresa entre los 11 y 16 años, esta edad adolescente de fama
problemática entre los jóvenes, manifiesta la capacidad de las mujeres para adaptarse y
lograr un mínimo de aceptación en la sociedad, a veces en desmedro de sus propios
intereses, tienden inclusive a aceptar como propios y mejores los gustos e ideologías que
ni siquiera comprenden, al margen de si son o no beneficiosas para ellas y su vida futura en
relación a su familia. El cuadro que Loza y compañía elaboraron verifica esta afirmación.
Se evidencia así cierto desarraigo entre las empleadas y su entorno familiar.

LIMA, 1 9 8 6 - 1 9 9 0
PREFERENCIA POR PARTIDOS POLÍTICOS

1986 1990
Partido y/o frentes Partidos y/o frentes
F % F %
AFRA 128 48,3 APRA 14 5,8
IU 534 20,0 IU 31 12,9
AP 18 6,8 FREDEMO 113 47,1
PPC 13 4,9 CAMBIO-90 30 12,5
Ninguno 20 7,5 IS 5 2,1
Otros 2 0,8 Ninguno 12 5,0
Sin respuesta 31 11,7 Otros 2 0,8
Sin respuesta 33 13,8
TOTALES

Fuente: Loza y otros, 1990.

98
Así se explica, por ejemplo que el FREDEMO haya sido favorecido con cerca del
47% por ciento de la totalidad de las trabajadoras del hogar en 1990. El año 1986 el APRA
podía favorecerse no solo de La influencia de los empleadores, sino también, de la
popularidad que el gobierno aprista gozaba.
Entre 1984 y 1986 la política popular contó con un ambiente de izquierda, la crisis
económica hizo que las familias de los sectores menos favorecidos (de obreros y
ambulantes) se sintieran próximos a la prédica marxlsta, no obstante prefieren al partido
que no se ajustaba ni a Moscú ni a Washigton con un candidato alto y, entre 1988 y 1990,
mientras sus hogares apostaban por un cambio, después de la decepción aprista o una
oportunidad a la izquierda, ellas prefieren al candidato reconocido como "el intelectual"
(entiéndase, muy inteligente) reconocido internacional, información que provendría de
textos escolares o páginas culturales de periódicos a su alcance.
¿Cómo explicar el estrecho margen de realización profesional? Esto se da con
frecuencia entre aquellos que trabajan "cama adentro" al servicio de una familia. Una
manera de ver como se refleja esto es mediante el siguiente cuadro sobre el uso del
tiempo libre:

LIMA M E T R O P O L I T A N A , 1 9 9 0
U S O DEL T I E M P O LIBRE

Lugares y/o acciones F %

Fiestas 36 15,0
Parques 30 12,5
Cine 8 3,3
Visita a familiares 123 51,2
Iglesia 22 9,3
Tareas del colegio 13 5,4
Otros 8 3,3
TOTAL 240 100,0

Fuente: Loza y otros, 1990.

Se puede apreciar que la primera opción es la de visitar a sus familiares, esta es la


recuperación de su identidad, de reconocimiento igualitario y donde todas pueden
interrelacionarse con libertad, por otro lado las fiestas también se suman a este propósito,
exalta otro interés que es el de alternar con jóvenes y divertirse y pasar un tiempo tranquilo
en los parques. Los estudios no son precisamente los más atendidos, he ahí el detalle.

99
Aunque la proporción de aquellas que no tienen familiares directos es menor, lo
más probable es que a ellas, luego del trabajo, les espera más trabajo; y por otra parte.
¿Cómo tener una guía seria para su futuro y evadir los "peligros" de las fiestas y amistades
dudosas? Más aún, no necesariamente el contar con familiares es garantía de seguridad,
cuando ellas están prácticamente en una situación familiar intolerante. Muchas veces
puede ser que esta visita sea, por lo demás, deprimente.
La importancia que este trabajo tiene para las mujeres de los sectores populares
radica en la comprobación de poder ganar un sueldo y a través del obtener una mayor o
conseguir un trabajo mejor. Pues según las cifras de Loza y otros en 1990, entre las razones
por las cuales abandona un trabajo están: primero por el bajo sueldo y otro tan solo
porque era su primer trabajo total el 50% por ciento tienen razones económicas. El
maltrato no supera el 15% del total como causal y aquí caben dos explicaciones; o el
trabajo no es tan discriminatorio y/o el trato es una variable que estas trabajadoras no
consideran como una razón suficiente, salvo en casos extremos. Los estudios y otros
derechos ocupan un 13% aproximado como una razón valedera. El asedio sexual que es
muy publicitado como una de las causales más frecuentes no lo es tanto como para dejar el
trabajo, el 3.8% no esté dispuesta a acceder a esta presión. El 18.2% restante aduce
problemas familiares, falta de costumbre o simplemente no dan explicación.
La convicción de que le asisten derechos que no les son reconocidos
generalmente, el acceso al estudio, el paulatino conocimiento de los derechos civiles,
aunados ai cambio de la Constitución de 1993 y la nueva política económica del "sálvese
quien pueda", que les permitió ver con sus propios ojos la fragilidad de sus empleadores
(de clase media) van cambiando el rostro de la empleada del hogar. Para aquel entonces,
el porcentaje de aseguradas había subido sustancialmente de 1986 a 1990, en un 17.5%
acercándose al 28% en 1990.

LIMA, 1 9 8 6 - 1 9 9 0
TRABAJADORAS DEL HOGAR Q U E G O Z A N DEL SEGURO SOCIAL

SEGURIDAD SOCIAL Año 1986 Año 1990

F % F %
Tienen Seguro Social 36 13,6 67 27,9
No tienen Seguro Social 215 81,1 160 66,7
Sin respuesta 14 5,3 13 5,4
TOTAL 265 100,0 240 100,0

Fuente: Loza y otros, 1990.

100
En la medida en que la demanda de este tipo de trabajo vaya superando a La oferta
como opción Laboral femenina, y que esta oferta solo se sostenga por la crisis económica, o
con el aumento de la información y automatización de la vida cotidiana, pronto tendrá el
reconocimiento de cualquier labor bien hecha con sus propias manos, las horas hombre, una
labor lujo. El seguro social, importante porque implica el reconocimiento de los años
laborales, aún no es muy comprendido por aquellas que consideran que los años dedicados
a estas labores en realidad no cuentan frente a sus futuras aspiraciones. Pareciera que la
ignorancia se convierta muchas veces en un "requisito indispensable", también el que sea
bastante joven y sin hijos, y mejor si es provinciana.

4.2.2. Organizaciones de las trabajadoras del hogar

En Lima se formó en 1969 la Central General de Trabajadoras del hogar, un primer intento
político con la pretendida finalidad de su gestor de ser el líder sin la adecuada
participación de las trabajadoras . En 1972, en Cuzco nace el primer sindicato reconocido
87

oficialmente por el Ministerio de Trabajo (Res: N° 007-72) apoyado por los campesinos, la
iglesia y las organizaciones populares. En Arequipa se funda un sindicato en 1973 pero no
se logra el reconocimiento legal.
En Lima, a partir de 1968, se empezó a organizar a las trabajadoras del hogar por
sus derechos laborales a través de la Juventud Obrera Cristiana (JOC). Un año después de
emitido el D.S. N° 002-TR del 10 de marzo de 1970, a partir de 1971 hasta 1973 bajo la
asesoría de la Confederación General de los Trabajadores del Perú (CGTP) se las movilizó
con ayuda de otros sindicatos y grupos cristianos. El 24 de diciembre de 1973 lograron
contar con 2 800 afiliadas al fundar la Coordinadora Sindical de Trabajadoras del Hogar
(COSINTRAHOL). Esta organización aborda los temas puntuales que las discriminan en el
plano laboral, fundamentalmente La R.S. del 14 de diciembre de 1957 que por ley obligaba
al empleador avisarle su despido con quince días de anticipación, mientras que a las
domésticas se les podía despedir al momento de exigir el abandono del trabajo, y en el D.S.
002-TR del 10 de marzo de 1970 que reconoce la mitad Los derechos de compensación por
años de servicios que equivale a un mes por año para cualquier otro trabajador, mientras
que las vacaciones también solo contaba con quince días de descanso por año . El seguro
88

social que se les presentaba con la mayor parte de los beneficios difícilmente era
aprovechado convenientemente por cuanto el número de aseguradas era ínfimo. Este D.S.

Loza y otros, 1990.


Así quedó después de todo en la Ley N° 27986 de 2003.

101
N° 002-TR de 1970 es eí que hasta hoy perdura y en contra de él es que las organizaciones
trabajan y se organizan.
En 1976 tienen su primer Encuentro Nacional en Cuzco, y en 1977 se formó el
Comité Ejecutivo de la Coordinación Nacional. En 1978 se realizó un Congreso en el que
participaron siete sindicatos limeños, los que elaboraron una plataforma de lucha y
acordaron afiliarse a la CGTP que aún no aceptaba su autonomía al interior de la Central
(machismo, subvaloración).
Luego de seguidas reuniones en 1982, se desplazan hacia el parlamento exigiendo
la aprobación de su pliego de reclamos y el reconocimiento de su sindicato. En 1987 se
insistió, llegando Incluso a contar con la participación de algunos parlamentarios, pero no
pasa de un diálogo y un proyecto sin aprobación.
En 1988, se realizó en Bogotá-Colombia el Primer encuentro Latinoamericano de
Trabajadoras del Hogar, se creó la Confederación de Trabajadores de América Latina y el
Caribe e instituyeron como día internacional de la Trabajadora del Hogar el 30 de marzo.
Lo más trascendente es que mediante esta se tuvo como meta el llegar a los medios de
gobierno de todos los países para rescatar y solucionar la problemática del Trabajador
doméstico e incluso enviar una moción a las Naciones Unidas para que esta se pronuncie.
En los años 90 este trabajo de organización laboral no siguió este curso el que
puede deberse a la ínfima participación de las trabajadoras (5.0%) en los sindicatos, sin
contar con el (65%) que ignora su presencia.
Hablar de las trabajadoras del hogar no es nada vano, estas representaban en
1972 más del 20% de la incursión femenina en el mercado laboral, una cifra que explica
muchas transformaciones en este camino de las mujeres en el plano laboral. Con su
descenso también se refleja su progresiva especialización y preparación a la casa de
mejores empleos. No son pocas las empleadas domésticas que hoy han llegado al éxito
laboral mediante esfuerzo y sacrificio, las más afortunadas y con visión se encuentran sino
al mando de un hogar, sí con una pequeña empresa defendiendo aquella libertad-tiempo
que le permita cumplir con las obligaciones que su género socialmente demanda.
Generalmente, las empleadas del hogar lo son en tanto no encuentran otro trabajo ni
opción fuera de las labores domésticas. Un fenómeno que puede afirmar esto es que a la
primera oportunidad de evitar el enclaustramlento y haber logrado aprender otros hábitos,
ellas optan por otra labor que tas ayude a retornar al seno familiar en mejores condiciones.
En el gobierno de Alan García se instauró el Programa de Apoyo al Ingreso
Temporal (PAIT) mientras este duró muchas trabajadoras del hogar abandonaron las casas

102
donde trabajaban para enrolarse en sus filas, al finalizar este, un gran contingente, no tuvo
más que regresar . 89

Las características que este tipo de trabajo tiene pueden ser comparables no solo
con las de las mujeres de los países latinoamericanos, sino con los países del tercer mundo,
las están aderezadas con ignorancia, explotación, pobreza y discriminación.

4.3. La informalidad

El ideal de un trabajo para la mujer es, sino su propio negocio, el estar adecuadamente
empleada, pero lastimosamente esto no es lo que se presenta en la estadística, puesto que
"El ingreso de La mujer en el mercado de trabajo es por el subempleo, luego el empleo
inadecuado y finalmente el adecuado" , esta afirmación ofrece una suerte de pirámide por el
90

que logran el fin cometido. Muchas cosas se oponen a este propósito, el sueldo inferior al
del hombre por igual trabajo desempañado, la inestabilidad permanente y, finalmente, el
ciclo de maternidad que en la mayoría de los casos es el detonante que truncar una serie de
esperanzas, al menos parentoriamente.
Hay una forma de empleo que como fruto de la crisis económica se ha venido
desarrollando aquí en el Perú y es conocido como el "trabajo atípíco" , este ataca tanto a
91

hombres como a mujeres pero debemos admitir que más a las mujeres. Este trabajo es el
de mediados de los años noventa entre aquellos empleados asalariados que no gozan de
estabilidad "son el empleo y/o inestable, el empleo a tiempo parcial y el trabajo fuera de la
empresa y/o para más de un empleado" . 92

La óptica que de ello tienen las mujeres se traduce en el trabajo a "destajo", aquel
que ellas aceptan, y evitar quedar sin un ingreso. Estos contratos que manejan y favorecen
a los empleadores no pudieron caerles mejor. Claros ejemplos son las costureras que
laboran en sus hogares (llevan cortes de tela para unirlos en cantidades industriales, luego
las entregan, y otras los recogen para culminar con los acabados, consiguiendo de esta
manera que no solo participe un asalariado, sino otros miembros de la familia) u otros
profesionales que trabajan por horas en servicios específicos, y que el producto total de sus
ingresos se suma a otros trabajos que llevan simultáneamente. Entre otras formas están los
llamados "services" que restan a los trabajadores una serie de derechos de manera
unipersonal. La idea de estos "service" es que han visto las ventajas de contratar a

Gamarra, 1988.
Jara, 1987.
Verdera, Í992.
Verdera, 1992.

103
desempieados 93
por tres meses, sin obligaciones, con una forma legal y orgánica que era
una explotación laboral alienante por cuanto no se le permita al trabajador una carrera al
interior de la empresa.
En los capítulos anteriores se pueden apreciar cuadros en el que se verifica la
situación de la mujer en el empleo, el trabajo en líneas generales. Pero, encontrar uno
donde se presente la variable informalidad no es fácil. La informalidad significa la falta de
una legislación que reglamente un trabajo o una ocupación de hecho en las diversas
categorías ocupacionales. Hay un rubro conocido como trabajador independíente pero en
este tipo de trabajo se encuentra los trabajadores familiares, y en el que los mismos
responden ser empleados, obreros y otras categorías. Pero, es los noventa bastaba salir a
las calles para percatarnos de que hasta los empleados de empresas formales no perdían la
oportunidad de hacer taxis en horas de trabajo, o hacer trabajos ajenos a los del centro de
trabajo con los equipos que este les facilita, amas de casa que por las mañanas entregan
labores realizadas en las tardes del día anterior, incluso con la venia de sus superiores.
Las mujeres, por necesidad, son las que primero acceden a este tipo de trabajos, y
aunque es trillado decir que la pobreza es la causante de esta realidad, también se puede
decir que el acceso este tipo de trabajo solo habría llegado a labores domésticas de no ser
la educación. Así las mujeres ingresan poco a poco en todas las categorías ocupacionales.
Ser informal remite automáticamente a Eos vendedores ambulantes, y si es una
mujer la que ejerce esta ocupación lo primero que vemos es una vendedora de
comestibles; en segundo lugar, una vendedora de artículos no perecibles (ropa, artículos de
limpieza del hogar), y si se es más optimistas, las que encabezan pequeñas empresas
informales. Todos estos trabajos se generan al margen de cualquier seguridad social.
Las vendedoras ambulantes de comida se hacen conocidas entre los trabajadores
obreros y también entre los empleados de los organismos públicos dada la oferta en el
mercado de un menú a bajo costo, trabajos como las de Estela Picasso 94
y Romeo
Grompone revisan sobre este fenómeno. La venta ambulatoria de alimentos en la calle es la
95

extensión de las labores domésticas como una tarea que puede ser usada como generadora
de ingresos, la ventaja que tiene es que asegura a la vendedora contar con el alimento diario
para el sustento de sus hijos, y además mantiene el espacio y tiempo necesarios que deben
tener para estar al pendiente de sus hijos, (generalmente es un trabajo de medio día); por
otro parte, el contacto con el público le permite obtener otra perspectiva de la vida. Este
trabajo difícilmente puede permitir a las mujeres obtener un capital considerable a corto

9 3
Desempleados en masa como consecuencia de las renuncias masivas con incentivos del gobierno de Alberto
Fujimori teniendo como telón legal de fonod a la Constitución de 1993, de Corte.
9 4
Picasso, 1980.
9 5
Grompone, 1988.

104
plazo, si es que no cuentan con un ingreso fijo por parte de los esposos o maridos. Las
mujeres de las clases populares salen a vender por lo general, si no tienen quienes las
sostengan, si acaso el esposo ya no cuenta con el trabajo estable. Por observación uno
puede darse cuenta que aquellas mujeres que cuentan con esposos albañiles que trabajan
eventualmente por jornadas son las que se dedican a este tipo de negocio. Ellas van en sus
carretillas ayudadas por sus maridos o solas y venden diversos productos de pequeña
inversión en puntos estratégicos por largas horas, si es comida, pueden dar desde el
desayuno hasta el almuerzo y a veces el lonche y Los antojitos de noche.

LIMA 1 9 7 6
ACTIVIDADES DE LAS V E N D E D O R A S AMBULANTES

TOTAL MUJERES (2)/(l)


GIRO 0 ACTIVIDAD (1) (2) %
Productos agrícolas, comestibles, hortalizas, frutas 18 967 13 183 69,59
Telas, tejidos, confección 13 062 5 708 43,69
Servicios de alimentación 8 809 6 173 70,07
Abarrotes 4 074 1 806 44,33
Pesca y caza 2 326 1 252 53,80
Total 47 238 28 122 59,53
Fuente: Gómez/Weinberger, 1992.

Según el cuadro (el primero del ÍNE en 1976 presentado por Gómez y Weinberger),
se ve que tas mujeres irrumpen con el 70,07% desde la opción más familiar, la alimentación
como el primer lugar en los servicios y en ellos debemos ubicar los menús, sigue la venta de
comestibles (69,59%) y nos indica el número de vendedoras de verduras y frutas (69,59%) etc.
Finalmente están los ambulantes de confección. De ellos podemos asegurar que el más duro
es aquel que tiene que ver con la venta de productos agrícolas (hortalizas y frutas), las
mujeres tienen que levantarse a las cuatro de la mañana sino antes para ir al mercado
mayorista, en plena oscuridad a las seis de la mañana ya debieron haber hecho las compras
para venderlas en sus respectivas "paradítas"; a las 7 a.m. llegadas a una paradita deben de
inmediato ordenar la mercadería a la venta so riesgo de perder la clientela si acaso no está a
la vista (considere los acarreos). Estas madres son las que solo tienen tiempo a partir de las
10 a.m., momento en que recién se hacen cargo de su hogar, hasta entonces a cargo de la
hija mayor o, lo que es peor, "encerrados". La ventaja de la venta de verduras es que además
pueden "payapar" (coger gratis) más productos que los comerciantes mayoristas y ellas
seleccionan para su gran familia o venderlos a precios muy baratos.
El grupo de las vendedoras de productos no perecibles, abarrotes y artículos de
limpieza (49,33%) caracteriza los años ochenta de manera categórica; aquí se combina la

105
crisis de las empresas, la inestabilidad laboral y una forma de ganarse el sustento sorteando
la explotación, este grupo que se autodenomina comerciante, y que es el que mejores
provechos le ha sacado, y en que las mujeres han participado de manera creciente, sin
distinción casadas o solteras. Debemos recordar que no son pocas las trabajadoras del hogar
que lo que desean es reunir el dinero suficiente que Les permitan tener un pequeño negocio,
este es precisamente el que se les presenta, acceder a comprar mercadería variada supone el
poder contar con ahorro, un lujo que solo pueden permitírselos aquellos que con esfuerzos
se logran entre los grupos de los barrios populares.

La informalidad no es patrimonio de las mujeres de los sectores populares, las


mujeres de clase media también acceden a este tipo de comercio, la única diferencia es que
no salen a las calles a ofrecer sus productos a vista y paciencia de todo el barrio, por otro
lado tampoco sus productos serían adecuados a este tipo de mercados. A ellas las
podemos ver vendiendo, en primer lugar, productos alimenticios a restaurantes del barrio,
estos son pasteles de la "abuela", alfajores "exquisitos", y/o sandwichs preparados
"higiénicamente", se vuelve a las amas de casa cuyos bajos ingresos económicos mellan su
economía. Los productos de vestir, por lo general se da entre las de nivel socioeconómico
medio-alto. Una forma de conocer el mundo es comerciando con vestidos importados y
de marca, para la temporada que se aproxima y que es pasado para los países del norte.
Este trabajo es informal, para ello cuentan con sus "contactos" en la aduana y toda una red
de amistades y familiares que las frecuentan (algo que Yambaí practicó y que ha
trascendido a todos los niveles sociales, un gran negocio cuyo ejemplo se ha multiplicado).
También esta forma de comercio se da entre aquellas mujeres que poseen trabajos
formales que no le ofrecen la debida remuneración que necesitan para vivir con las
comodidades a las que están "acostumbradas". Estudios al respecto no existió en los años
90, es algo que debe observarse y lograr engazarlo al interior de la problemática de las
mujeres. Ellas pueden así ser producto de la crisis que afectó a todas las mujeres, para ellas
también el trabajo les significó el ingresar al mundo público de las finanzas, muchas de
ellas son Las que terminan generando su propia empresa y, cuando no, involucrar a los
esposos y hasta comprometerlas en lo que "más apropiado"; no sin antes considerarlo
varias veces (nos referimos a la lucha interna que tienen los hombres ante La disyuntiva de
reconocer o no la eficacia de su esposa).

Las pequeñas empresas informales, (teniendo en cuenta las distancias sociales que
enfrentan tanto mujeres de los estratos populares como la de los estratos medios y altos)
poseen una Lógica de generación de ingresos marcada por su condición de mujeres. La
extensión de Las labores domésticas, el comercio al menudeo de los artículos que le son

106
afines y por último el acceso a la empresa informal que con los años puede convertirse en
formal, de acuerdo a sus decisiones.
El comercio ambulatorio es, de entre todos los trabajos informales, el más
destacado y así Lo demuestran los trabajos. En la revista Debate Edgard Zamalloa 96

descubre el protagonismo de este tipo de comercio. En el Congreso de investigación sobre


la mujer andina, Jorge Osterlíng ya destacaba el rol de La mujer . A partir de mediados de
97

los años ochenta se puede apreciar el comercio ambulatorio ya no como un problema,


pero tampoco como una solución, las ONG ponen aquí sus ojos, como ya no se piensa en
erradicarlos, en tanto mujeres, se proponía ayudarlas, se trata de organizar a las mujeres
para que puedan formar una empresa; como se sabe, el principal inconveniente es la
adquisición del crédito, sobre esta situación han trabajado autoras como Margaret Lycett , 98

Margarita Berger y Susana Pinilla .


99 100

Lejos de ser un problema, el comercio ambulatorio le significó a los estratos


populares una salida, un escape a la pobreza y al hambre con el componente de la
habilidad que innata en los más necesitados, se brinda espontáneamente. Esta forma de
ver las cosas está ampliamente difundida' . 03

Después de esta breve síntesis podemos así explicarnos en el siguiente cuadro


sobre Lima.

LIMA METROPOLITANA: 1 9 8 4 - 1 9 9 3
PEA O C U P A D A TOTAL Y P O R SEXO, SEGÚN ESTRUCTURACIÓN DEL SECTOR

Fuente: Gárate/Ferrer, 1994.

Zamalloa, 1980.
Osterling, 1982.
Lycett/White, 1988.
Berger/Bunivic, 1988.
1
Pinilla, 1989.
De Soto, 1986.

107
Como se dijo con anterioridad, ubicar un cuadro que nos manifieste ios diferentes
rubros que la informalidad abarca es una tarea ardua, para Lima, el trabajo de Werner
Gárate y Rosa Ana Ferrer En que trabajan /as mujeres , 102
muestra claramente la diferencia
entre el trabajo del hogar, el del sector formal y el del sector informal entre 1984-1993. La
PEA ocupada total reserva a las mujeres el monopolio del trabajo del hogar, de otro lado
1987 se presenta como el año en que la crisis se profundiza en el Perú, la misma que se ve
reflejada con la caída progresiva del sector formal y el incremento del sector informal, este
último lo supera en 1992; es decir, hay más informales que formales, y dentro de los
informales son las mujeres las que acceden claramente a partir de 1987. Por otro lado, los
hombres han optado por esta modalidad a partir de 1990, esto se debe seguramente a la
ola de despidos que se dieron en el sector público y privado, que afectaron el campo de la
producción y consumo generando recesión.

Así se puede comprender como los caminos de la informalidad son


innumerables. Ser informal no es sinónimo de ser trabajador independiente, si existe la
empresa informal, entonces sus componentes reproducen esta situación. Sino que es
Gamarra y los sinfines de operarios que le dan sentido, la mayoría de los trabajadores
eran eventuales, las secretarias también lo eran, la vía de la informalidad que apunta a la
formalidad no era muy directa, la idea de que ellos aspiran a serlo no dejaba de ser una
idea imprecisa.

El gobierno no ha sido ajeno a este problema; más bien, ha dado una vía de salida
de la informalidad por medio del Instituto de Desarrollo del Sector Informal - IDESl
NACIONAL , este que es una publicación expresa:
103

"Existe informalidad en todas tas actividades (industria, artesanía,


comercio, transporte, minería, parceleros agrarios, vivienda) y en todas
estas cosas hay una característica común: No están registradas o se
encuentran semt-registradas en las municipalidades o entidades
estatales respectivas" . 104

Este instituto brindó financiamiento a grupos de pequeños empresarios que antes


carecían de créditos o; que si lo obtenían, era a base de intereses leoninos. Debe
considerarse que ésta intervención del gobierno, que el grupo de informales agradecía,
estaba constituido por quienes poseían un capital y ganancias que escapaban al control del
Estado; en adelante el Estado percibiría más ingresos por la vía de la formalización.

Gárate/Ferrer, 1994.
O r é , 1993.
Instituto de Desarrollo del Sector Informal (IDESl), 1992.

108
4.4. Programa de Apoyo al Ingreso Temporal (PAIT)

El PAIT o Programa de Apoyo al Ingreso Temporal que se llevó a cabo en 1985 105
con Alan
García puede ser considerado un trabajo atípico. Si bien este trabajo significó para los
sectores populares una manera de paliar el desempleo no solucionó en nada lo que
buscaba la población trabajadora cual es la estabilidad laboral, entiéndase el que le
permite una carrera con remuneración justa. Pero ¿qué pasó con el PAIT en Lima?, el
programa fue convirtiéndose en un paliativo al que con mayor frecuencia participaron
mujeres. Este programa social estaba destinado al excedente laboral y, al final de cuentas,
en Lima fue una forma más de acrecentar los medios de organización de las mujeres de los
barrios populares. Los trabajadores del PAIT eran pobladores de la localidad donde se
realizaban las obras , la mayoría de ellas mujeres migrantes, se trataba de mano de obra
106

no calificada, la mayoría, el 70% entre los 16 y 35 años. En realidad, algunas veces, lo que
hacían era hacer tiempo con el objetivo de cumplir el horario y firmar el cuaderno de
asistencia que le garantizaba el pago. Es en el año 1987 cuando este programa adquiere
mayor relevancia, año en que también los comedores populares están en expansión. Ello
quiere decir que dos procesos se coordinaron para el fortalecimiento de las organizaciones
femeninas. Hay que aclarar que el PAIT no atrajo el mayor porcentaje de las mujeres en
edad de trabajar pero si fueron ellas las que más lo ocuparon, las amas de casa tenía en el
PAIT un ingreso seguro, no las alejaba de la responsabilidad del hogar, por otro lado no era
extraño verlos con la familia, pues los niños también colaboraban en el llevado de
materiales. El filón político era tan visible que se puede afirmar que contar con un amigo
Aprista era una garantía de participación.

Si se recuerda a la participación de las empleadas domésticas en el plano laboral


debe tenerse en cuenta que ese empleo también es de tipo se mi-informal, ello explica
como un buen porcentaje de trabajadoras del hogar optaron por ingresar al PAIT.
El PAIT no ofrecía seguridad laboral, menos La formación de un sindicato, se
estaba vista y paciencia de las "vecinas", claramente las mujeres demostraron una vez más
estar dispuestas a todo con tal de obtener un ingreso fijo.
Perl Paredes 107
versó acerca de la importancia que este programa tuvo para las
mujeres de los estratos populares y proponía una serie de sugerencias con el objeto de
apoyarlas, a partir de las carencias que manifestaban como la falta de salud, y el recorte

Gómez/Weinberger, 1992.
Elías/Garavito, 1994.
Paredes, 1988.

109
de horas de trabajo; a través de la democratización del programa con la participación de
los municipios y criticado las jerarquías de campo compuesta por hombres, a las que las
mujeres por su número y capacidad también pueden acceder.
Otra conocedora de PAIT nos lleva a otro plano donde se plantea una
preocupación, cómo se considera a este no como un programa de empleo sino de
ingresos' que puede darse de bruces frente a lo que en si fue solo una distribución de
08

los dineros del Estado a los más pobres, sin un sentido productivo y siendo en servicios,
poco útil. Para mayores datos debe leerse los textos de esta misma autora . 109

Al hablar de informalidad en las mujeres, también podemos ubicarlas al lado de


los esposos informales, como la extensión de su "negocio"; la informalidad, vista desde la
pobreza solo nos lleva a un estado de supervivencia, mientras que si lo vemos como la
ocupación en la que participan los miembros de la familia, esta sí puede significar el
éxito.
La familia generalmente unida por el lazo maternal, es la que puede dar frutos y
desembocar en las llamadas empresas familiares. Ello implica la participación del esposo
o los hijos hombres, la suma del trabajo de ellos en torno a las mujeres es suma. Muy
diferente es la situación de las mujeres solas que no cuentan con el apoyo familiar o de
un hombre. En Villa El Salvador por ejemplo, es el establecimiento de una cantina,
negocio seguro, este casi siempre está a disposición de los hombres y cuando está a
cargo de una mujer le es muy difícil mantener una imagen honrada frente a sus vecinos,
la informalidad está siempre al borde de las normas legales del comercio. Ser parte del
engranaje formal supone una serie de obligaciones y conocimientos que difícilmente
pueden ser cumplidos por los sectores populares, que ávidos de lograr una mejora a nivel
económico, no puede sino transgredir las normas. Las mujeres en este sentido han sido
las más beneficiadas, este tipo de trabajo le otorga libertad de horario y por otro lado, la
promueve en el ámbito público.

i 0 S
Vigier, 1986.
i 0 9
Vigier, s/f.; y Vigier, 988.

110
5. MUJERES CAMPESINAS

Desde los años sesenta hasta los


años noventa hay un problema
común que da visos de solución
lentos, la permanente falta de
atención a las mujeres campesinas,
que pertenece al problema nacional
e histórico que es el abandono del
sector agrario. Y si este sector
algunas veces fue favorecido, lo fue
en la medida en que se tenía que
solucionar graves problemas de
índole social, predial legal y económico, sólo a través de la Reforma Agraria a fines de 1960
se dio una nueva imagen de la propiedad de la tierra en el Perú y del status de los
campesinos, pero esta se limitó al orden institucional y social, careciendo este último, de
una consideración especial a las mujeres, cual es reconocer y trabajar en torno a las
relaciones de género y las consecuencias sociales que de estas se pueden desprender, pero
que sobre todo tienen gran incidencia en el estudio de la distribución del trabajo y la
participación en él, de la mujer.

Al cabo de estos últimos treinta años de la Reforma Agraria de Velasco, lo positivo


fue ta revalorización del campesinado dedicado al abastecimiento de alimentos en las
ciudades y en especial a la gran Lima. Hasta entonces la idea del campesinado en los
sectores urbanos era no solo ignorada sino en el común de las clases medias y urbanas
populares, hasta desdeñable. Lo positivo fue que a través de esa medida política y
demagógica la dimensión del campesinado cambió, por ende cambió, la actitud hacia ellos.
El discurso de Velasco cundió en la conciencia de los campesinos en general, los enalteció
cualitativamente, las comunidades andinas pasaron al frente no sólo como parte de la
geografía entre los cerros, sino como un contingente orgánico de la sociedad peruana, que
aunque privada de los beneficios tecnológicos y administrativos de los antiguos dueños de
la tierra, potencial y numéricamente eran capaces de lograr a través de ese gran salto una
reconquista, pero ello no fue más que un momento efímero que pronto tuvo su correlato

ni
más triste con las acciones que se desarrollaron luego del gobierno velasquista por el
nuevo gobierno de Morales Bermúdez, que se encargó de que tales mensajes solo fueran
una quimera para unos y una pesadilla para otros. En cuanto a su potencial revolucionario,
no fue posible dar marcha atrás con el reparto de tierras y además, la medida que otorgó el
voto para los analfabetos, afectó positivamente a los campesinos, y campesinas, que
conformaron el porcentaje mayor de analfabetismo.
Si bien las comunidades campesinas que en forma particular formaban parte de
las grandes compañías conocían la fase de producción, poca era su relación con la fase de
comercialización, el entorno de las relaciones internacionales y el de las empresas
relacionadas con el gobierno. Ese desconocimiento de las relaciones sociales y su
ignorancia de la tecnología moderna fueron en suma su mayor enemigo al desarrollo.
En ese corto período de éxtasis, la oportunidad que ofreció la Reforma Agraria
hizo que en ese lapso "los campesinos" fuesen protagonistas como "jefes del hogar", y en
tal sentido dieron poco espacio a las mujeres. EL mismo texto de procedimientos
discriminaba a la mujer, pues tan solo a la falta de un jefe de familia la mujer tenía la
oportunidad de adquirir un terreno mediante la demostración que la calificaba como tal
"jefe de hogar". Si para las mujeres de los sectores urbanos y medios las diferencias no
favorecían a las mujeres y más bien la ponía en desventaja, este rasgo no era diferente
entre las mujeres campesinas, por el contrario se reforzaba, cuando la reforma les puso un
límite en la adquisición de un derecho, de negociación.
Hasta los comienzos del setenta, los estudios hechos a propósito de la Reforma
Agraria, observan con preocupación la diferencia y el grado de postergación en el que se
encontraban las mujeres campesinas, más cuando este sector en América Latina debía poco
a poco ir de la mano con el capitalismo y con la tecnología. Al respecto, M. León y C. Deere
y L. Carpió" , sobre la postergación de la mujer campesina en el Perú
110 111
se presentan en
esta coyuntura como las primeras en tener en cuenta a las mujeres campesinas.
Entonces, las mujeres campesinas no eran consideradas como parte plena del
aparato productivo, sino como parte de la familia que se asumía estar siempre
representada por el varón, en este caso el esposo, el padre de los hijos, el hijo mayor, salvo
Las excepciones tenidas en cuenta para La distribución de tierras. Las mujeres campesinas
entonces, aún no eran ciudadanas con capacidad de resolver problemas porque aún no se
le había reconocido su capacidad productiva y menos se ponía enjuego su participación en
las decisiones políticas, a diferencia de hoy en el que su opinión si es tomada en cuenta, y
aquí hay que reconocer que más han sido de interés extranjero que nacional como materia
de investigación.

1 1 0
León/Deere, 1970.
" i Carpió, 1970.

112
A partir de la década de 1970 se puede apreciar que recién se inician los estudios
para conocerlas, para saber cuál era su nivel de vida; de ello dieron más luces sobre todo
antropólogos y sociólogos (mujeres). Como antropólogos se destacan los estudios que
tienen directa proyección de la mujer en lo cultural, y no les faltaba razón. Entre los
trabajos sobre las mujeres aymarás que hallamos y que seguro son una fiel muestra de este
tipo de estudios encontramos a Domingo Llanque Brindis Mamani ; y por el lado112

quechua, a Daysi Núñez del Prado . 113

SÍ algo trastocó ta situación social de las regiones rurales fue la Reforma, no solo
apuntó para un cambio estructural, la Reforma Agraria también afectó a las personas
encargadas de llevarla a cabo, con su presencia y prédica de alguna manera habían
influido también, en la forma de ver las cosas por parte de los campesinos (claro está, de
acuerdo a la zona de influencia, es diferente el norte y sobre todo la costa donde el tipo
de producción, la clase de trabajadores y hasta las costumbres son tan diferentes).

Las mujeres percibieron sufrían los cambios de su nueva situación y supieron


aprovechar las oportunidades que se les presentaban para su ingreso al, entonces Llamado,
Perú oficial, debían prepararse antes de que otro tipo de pruebas las coloquen en una
situación más frágil. Esto es, que no era raro ver como los estudios antropológicos que a La
vez tenían la misión de hacer el diagnóstico de las poblaciones del Perú, también se
destacaban los estudios previos para decidir la instalación de una nueva zona productiva-
extractiva. Las mujeres, aunque poco tomadas en cuenta, pronto dieron a conocer el tipo
de subordinación que se les asignaba respecto al hombre, porque tenían labores que
necesariamente representaban una función que era inferior ni accesorio, era muy necesario.
Ello se evidenció no solo con los resultados a todo nivel de los estudios realizados, sino
precisamente en la manera de abordar, no ya a las mujeres sino, a la familia como unidad
productiva . 114

Ya hemos dicho que la Reforma Agraria si bien trabajó una serie de cambios
estructurales en cuanto a la propiedad de la tierra, también en lo social dio otro cambio
que fue de alguna manera negativa para las mujeres que fueron desconocidas como
minifundistas en su capacidad de trabajadora del campo y por tanto con derechos. Su
condición mejoraba si era sola, viuda-heredera, que como compañera de un hombre o
casada . Esa condición no se desconocía por las mismas campesinas debían ponerse al
115

frente, pues la falta de propiedad de la tierra no la descalificaba para en los puestos


políticos, un reclamo muy comprensible si recordamos lo que para ellos hasta hoy se

1 1 2
Llanque, 1972; y Mamani, 1982.
1 1 3
Nuñezdel Prado, 1975.
1 , 4
Bolton/Bolton, 1975.
M5
Sara-Lafosse, 1983.

113
presenta un documento que, por muy viejo que sea, basta para entablar demandas
legítimas . 116

5.1. Campesinas, Estado y Organizaciones No Gubernamentales

En los años setenta la familia campesina como entidad productiva fue un tema muy
trabajado por los investigadores sociales. La familia como ente privada era estudiada
desde el servinacuy" u otras manifestaciones familiares, hasta el tipo de relaciones en el
7

interior, los más interesantes. Se hicieron estudios por zonas , y se trató de averiguar
118

cuáles eran los grados de socialización ; resaltaron en ellos el afán de investigar el tipo
119

patriarcal del Ande . En este tipo de estudios destacó el apoyo que los investigadores
120

recibían de la Asociación Multidisciplinaria de Investigación y Docencia en Población


(AMIDEP).

Las metas de la ley de la Reforma Agraria eran: "mayor justicia social, ampliación del
mercado y previsión de los fondos de capital para el desarrollo industrial" ; porque era sabido
121

que: El capital comienza a sentir su freno a la Inversión en el sector agrario y la tendencia inicial,
paralela o posterior, (según los casos) del grupo de terratenientes y capitalistas de inversión en
otros sectores de la economía, se va acentuando haciéndose más visible a partir de los años
cincuenta del presente siglo y, sobre todo, en la década del sesenta . 122

Para comprender la actitud de las campesinas frente al proceso, era necesario, (y


así lo comprendían quienes estaban interesados en el tema), conocer las relaciones
familiares de la familia campesina, la distribución del trabajo, las edades y las tareas que en
función de estas variables realizaban. En los setenta el campesinado tuvo un protagonismo
político y social que opacaba, dada las circunstancias, otros tipos de problemas
importantes, cotidianos, y permanentes; problemas cuyos cambios, por ser generalmente
lentos, avanzan imperceptibles por carecer de la atención masculina y porque sobre todo
en la cultura occidental, tradicional los hechos domésticos en manos de mujeres, que por el
mismo hecho de estar en manos de mujeres mantenerse como parte de las costumbres y el
orden establecido; y nada mejor que dentro del seno del hogar, formando a los nuevos
hombres. Los investigadores no tardaron mucho en darse cuenta que esta visión no era
acorde con las nuevas políticas y los cambios esperados por la Reforma Agraria, por la que

" * C r e s p i . 1976.
Relación marital de prueba entre un hombre y la mujer.
1 1 7

lis Villalobos, 1977.


Cornejo Muñoz, de Vera, 1978.
1 ( 9

Bourque, W a r r e n 1979.
1 2 0

Rubín d e C e l i s , 1982.
Rubín de Celis, 1982.
1 1 1

114
las campesinas, que pronto demostraron su disconformidad. Con varios argumentos, pero
no fue sino hasta los ochenta en que tuvieron eco sus expectativas. Las organizaciones,
tanto del Estado como de las entidades privadas, habían puesto mayor interés sobre todo a
lo urgente a partir de los propietarios desde el área técnico-administrativa.
Este avance notable en los ochenta, ante todo tiene sus antecedentes en 1975,
año en que se declara en adelante el Decenio de la Mujer, que abrió una serie de debates y
medidas que en el mundo señalaban la urgencia de atender sobre todo a las más
afectadas, esta vez no solo por su condición doméstica, sino también legal, formal y social.
En esto es que encajaba el problema de las campesinas pero había que considerar que la
familia no era un ente uniforme en las cuales las tareas cumplían una serie de actividades
homogéneas para todas las mujeres; había diferencias, no solo geográficas sino
principalmente, culturales y con todo lo que ello involucra.
Por eso es que este sesgo de investigaciones sobre la familia, también se refleja
en las publicaciones sobre las mujeres campesinas. La antropología en este caso tuvo una
participación decisiva; así como también la sociología, y hay que agregar que en esta
profesión mucho influyó la tendencia político-ideológica de izquierda, que tuvo en Velasco
un perfecto mentor entre sus colaboradores de base.
En el Perú caben destacar, sobre todo, los estudios de Violeta Sara-Lafosse,
investigadora que apoyada por AMIDEP y la PUCP no sólo contribuyó con sus trabajos de
orden rural, sino que se extendieron a la familia, al trabajo, a la educación y también a los
comedores. Debemos tener en cuenta que no hay que confundir la distribución de las
tierras como si fuera una entrega real y total a los campesinos, Rubín de Cells dice al
respecto:
"las nuevas formas de organización empresarial dan nominalmente la
propiedad de la tierra y el control de sus medios de producción a los
trabajadores y eliminan realmente a los terratenientes del control directo
sobre la tierra...nominalmente, porque su compleja reglamentación dicha
Ley da al Estado la representación directa del capital en el control sobre
la tierra, sobre la inversión de capital sobre la organización de la
producción, sobre el destino del producto y del capital generado por los
trabajadores" .
123

De esta manera la condición de los campesinos no era del todo envidiable, tenían
aun un yugo difícil de romper amen de las dificultades que se presentaron en el transcurso
de las negociaciones y reveses que se presentarían cuando la nueva situación no hizo sino
manifestar la falta de recursos no solo materiales sino humano-técnicos para proseguir
con las metas del gobierno.

m
Rubín de Celis, 1982.

115
Volviendo a los campesinos, tenemos para efectos ilustrativos un cuadro que nos
traza una idea sobre tres departamentos diferentes por su ubicación geográfica y
costumbres elaborado por Vilma Vargas de Balmaceda y Joel Jurado Najera, según los
censos de 1972 y 1981, en cuya publicación 124
afirman:
"Un rasgo fundamental de la economía campesina es que constituye
tanto una economía doméstica como una economía empresarial
(Shanin, 1973: Galeski, 1977) Otro rasgo, es su multiactivídad es decir
que sus ingresos derivan no solamente de su actividad agrícola,
principal base de sustento (...) 50% de sus ingresos, sino que
normalmente debe acudir a otras fuentes para sobrevivir: el comercio
de productos artesanales, textiles 12% de elaboración de agroindustrias
caseras, (...) 19% y finalmente la venta de la fuerza de trabajo familiar
en los mercados Locales y regionales, que constituye el 19% restante de
sus ingresos . 125

Ellos mismos han elaborado un cuadro por categorías ocupacionales en


departamentos que consideraron, en el se puede observar cómo el porcentaje de
categorías que superen jerarquías descendió, mientras que los trabajadores independientes
se elevó en casi diez años; La excepción es Puno que incrementó su porcentaje de
empleadas y bajo su porcentaje de trabajadores independientes.

ANCASH, C U S C O Y F U N O : 1 9 7 2 - 1 9 8 1
D I S T R I B U C I Ó N PORCENTUAL DE LA P O B L A C I Ó N O C U P A D A EN LA AGRICULTURA
POR D E P A R T A M E N T O S BAJO E S T U D I O Y POR CATEGORÍA O C U P A C I O N A L 1 9 7 2 , 1 9 8 1

Departamentos Patronos Empleados Obreros Trabajadores Totales


Independientes (*)

1972 1981 1972 1981 1972 1981 1972 1981 1972 1981
Ancash 0.4 0.2 0.9 0.8 13.9 11.5 84.5 85.4 (92,504) (102,241)
Cusco 1.1 0.7 1.3 0.6 9.5 7.7 87.7 90.0 (128,602) (151,336)
Puno 0.6 0.2 1.0 1.8 9.8 7.9 88.2 87.0 (144,350) (180,363)

(*) Trabajo familiar no remunerado.


Fuente: Vargas de Balmaceda/Jurado, 1981.

A continuación Sara-Lafosse en el cuadro siguiente, brinda información de seis


zonas sobre la edad en que aprenden las mujeres a trabajar en el agro.

1 2 4
Vargas de Balmaceda/Jurado, 1987.
1 2 5
Vargas de Balmaceda/Jurado, 1987.

116
CAÑETE, M A N T A R O , LAMBAYEQUE, C H A N C H A M A Y O , C U Z C O Y AREQUIPA. 1 9 7 8
E D A D D E I N I C I O EN EL TRABAJO DEL AGRO D E LAS MUJERES

Edad de
Total Zona de residencia
inicio en ei
agro % (N) Cañete Mantara Lambayeque Chanchamayo Cusco Arequipa
5-7 14 12 El 8 4 31 15
5-10 45 42 49 33 41 68 37
5-14 68 68 72 64 62 80 63
I5y + 32 32 28 36 38 20 37
Total 100 (1160) 100 (208) 100 (197) 100 (157) 100 (200) i 00 (202) 100 (196)

Fuente: Sara-Lafosse, 1983.

Según estos datos, las zonas indicadas presentan, encontramos algunas


diferencias, pese a que en general un 45% del total de las mujeres encuestadas ******ya
participan en las labores agrícolas antes de cumplir los diez años; y a los catorce años la
mayoría ya se encuentran elaborando el agro.
Otro cuadro en el que se puede apreciar el trabajo de las mujeres y los hombres
en el agro es el de Huaraz, que si bien no es un claro reflejo de cómo se da la distribución
del trabajo en tareas, sí demuestra como el trabajo agrícola no excluye a la mujer, más bien
la hace partícipe de las distintas tareas en mayor o menor grado, y por otro lado ejemplifica
que las mujeres, no desde ahora, sino de muy antes, están acostumbradas a trabajar en el
área de la producción.

HUARAZ: 1 9 9 1 - 1 9 9 2
P A R T I C I P A C I Ó N POR SEXO EN LA A C T I V I D A D AGRÍCOLA (EN PORCENTAJES)

Labores Culturales Cordillera Blanca Cordillera Negra


Mujer Ho3m4,5bre Tota! % Mujer Hombre Total %
Barbecho 1,5 3 4,5 3 7 10
Pre. Terreno 7 12 19 4 6 10
Siembra 7 8 15 8 13 21
Riego 3 7 10 1 5,5 6,5
Deshierbo 4 3 7 6 7 13
Aporque 2 7 9 2 6 8
Cosecha 11,5 13,5 25 10 ¡4 24
Selec. Semill 1,5 1 2,5 0,3 0,2 0,5
Otros 4 4 8 3 4 7
TOTAL 41,5 58,5 100% 37,3 62,7 100%

Fuente: Zevallos, 1994.

117
Se aprecia que en el cuadro que ambas cordilleras el trabajo de las mujeres forma
parte del 40% del total aproximadamente, la que ocupa una de las tareas más importantes.
Las labores que las mujeres realizan no solo se circunscriben al campo, muchas
veces el sustento, como se dijo antes, depende de aquellas actividades que escapan a la
actividad agrícola la que ocupa casi el 50% del total, en el texto las mujeres generalmente
realizan otro tipo de actividades:

Z O N A S DEL PERÚ: 1 9 7 8
O C U P A C I O N E S SUPLEMENTARIAS DE LAS CAMPESINAS POR Z O N A S

Zonas de residencia
Ocupaciones
Tota! Cañete Mantara Lambayeque Clianchamayo Cusco Arequipa
% N % N % N % N % N % N % N
Total 100(1169) 100(208) 100 (201) 100 (159) i 00 (200) i 00 (202) 100 (199)
Subtotal 57(663) 26 (55) 56(113) 52 (82) 37 (73) 96(193) 74 (147)
Artesanía 27 5 19 33 9 92 5
Comercio de 25 12 29 19 9 14 65
sus productos
Elaboración de 10 3 4 8 9 27 6
alimentos para
la venta
Comercio 6 6 6 5 3 12 6
intermediario
Otras 6 3 6 9 12 3 2

Fuente: Sara-Lafosse, 1983.

Aquí Sara-Lafosse demuestra cómo estas labores extra-agrícolas no solo


representan el 50% de la actividad rural sino un poco más (57%) se ve como esto puede
ser mayor en casos como el Cuzco, una zona turística que tiene como una fuente de
ingresos el rubro de la artesanía y la venta de alimentos elaborados en sus conocidos
establecimientos, picanterías , tradicionales por cierto. Arequipa también tiene entre sus
126

labores extra-ag rico las al comercio de sus productos con un alto porcentaje donde las
mujeres destacan con fuerza. La red comercial no solo consta productos como las
verduras y las carnes, este cuadro del año 1978, sería un tanto diferente para los noventa
en el que para nadie es un secreto como las mujeres han ampliado su cobertura, que
trasciende de lo nacional a lo internacional, utilizando la vía de Arequipa, Puno y Bolivia, en
la que ya no solo comercian productos agropecuarios sino que han ampliado sus ingresos

' » Llosa, 1992.

118
mediante el contrabando de productos alimenticios y electrónicos como los radios,
equipos de audio y sonido, relojes, que llegan directamente por Desaguadero y el sur de
Tacna. Imaginemos mujeres con polleras y chompas repletas de relojes y pilas, un montón
de chompas puestas unas sobre otras, desatando lo que más tarde sería un problema grave
en materia económica nacional. En los ochenta llegó al punto de tener que ser controlado
de alguna manera, lo que no fue más que una medida sin consecuencias puesto que las
campesinas de Puno y Arequipa, en muchos casos, hicieron que sus esposos las apoyen y
hasta participen codo a codo con ellas dada la demanda de productos y el abandono del
Estado por ayudar a este sector. Esto hizo que las mujeres salgan al frente por el poco
ingreso que les ofrecía sus labores agrícolas, esto es sin tener en cuenta otro conflicto
productivo, el cultivo de la coca en la que la participación fue sobre todo masculina. En los
noventa el éxito de esta vía de supervivencia de las mujeres campesinas ya no era algo que
sólo ellas explotaban, las mujeres urbanas pronto dieron paso a este tráfico que prescinde
de un horario rígido permanente y que puede ser retomado a voluntad, uno más por el
cual las mujeres ayudan al ingreso familiar. De acuerdo al cuadro, la zona del Mantaro en
menos medida comercian sus productos, tal vez porque esta ruta es la que se dirige hacia
Lima y debe estar en manos de los hombres.

Las mujeres así, gracias a los estudios realizados por investigadores que rescatan
la labor femenina fuera del hogar en el marco rural, reconocidos así su derecho a la tierra y
a la representatlvidad en las organizaciones campesinas; esto puede entenderse según las
respuestas que Sara-Lafosse captó en las campesinas en cuanto a la propiedad de la tierra
en los fundos en 1978:

Z O N A S DEL PERÚ: 1 9 7 8
P R O P I E D A D DE LA TIERRA EN LOS F U N D O S

Propiedad TOTAL Zona de Residencia


de la tierra % N Cañete Mantaro Lambayeque Chanchamayo cusco Arequipa

Total 100(542) 100(50) 100(134) 100(49) 100(51) 100(125) 100(133)


D e ella 30 28 48 20 22 23 29
D e ambos 33 22 38 6 45 30 38
Del cónyuge 37 50 14 74 33 47 33

Fuente: Sara-Lafosse, 1983.

119
Un 30% asegura que ella es la propietaria de las tierras, mientras que un 37%
asegura que es del esposo y el 33% asegura que es de ambos. Una afirmación que hace
Sara Lafosse traduce esto todavía basándose en trabajos antropológicos, citando a Daysi
Nuñez del Prado:
"A pesar de un desbalance formal normativo aparente entre el hombre
y la mujer, los quechuas en el terreno real, brindan a la mujer una
posición altamente equilibrada con respecto al varón, donde sus
decisiones son de peso y valor para la acción [...] es decir participa en
la producción, en la administración y en la distribución de la misma" . 127

Las mujeres campesinas son entre la población más olvidada del Estado, la más
afectada, pues la tasa del analfabetismo tiene en ellas su mayor margen con respecto a
las urbanas. Por otro lado, a pesar de sus esfuerzos aún no reciben la cooperación
necesaria, esto se ve al no presentárseles la capacitación debida para integrarse a todos
los niveles del aparato comercial. Esto empezaría desde la decisión de los padres en
educar a las niñas y darles la capacitación de orden técnico que ellas demandan . 128

Si hubo algún medio de ayudarlas, no solo a ellas sino a la familia campesina;


este fue sobre todo facilitándoles la comunicación, esto si bien ha sido una tarea que el
gobierno de Fujimori en los años noventa emprendió con seriedad, y que poco dejó a ver
frente a la escasez del mercado a propósito de la recesión generada por la política que
obligó a pagar las deudas "puntualmente".
Versar sobre las campesinas en el Perú obliga a diferenciar a las mujeres de la
sierra (cuando participan en las diferentes etapas de las actividades del campo y fuera de
el sustento familiar) de las de la costa hechos como la expropiación de las tierras que se
hicieron sobre fundos en los que el tipo de producción industrial, así como las
costumbres occidentales, han influido mucho por la proximidad que tienen con las
ciudades y los puertos que estas zonas tienen. Formas que la diferencian desde el siglo
XIX y que han llevado a reproducir algunas características propias de la industrialización
europea, como la alienación del trabajo de las mujeres; es decir, que el trabajo de las
mujeres empezó a ser subvalorado, mientras que el de los hombres recibió más
beneficios.
La situación de las campesinas es tan penosa que no ve ningún aliciente que las
haga, de alguna manera ser modelo para sus descendientes. Según una encuesta
realizada por un equipo de trabajo en 1 9 9 3 129
a las campesinas de lea, ellas manifestaron
desear tener más bien hijas y el 30.2% ambos. Entre las razones por las cuales ellas
preferían tener hijas estaban: ellas acompañan a las madres, ayudan en la casa, les

1 2 7
Sara-Lafosse, 1983.
Sara-Lafosse, 1983.
i^Zevallos, 1994.

120
permiten salir a la parcela; y por último por qué ellas, "dan menos problemas" en la
crianza y son más dóciles y juiciosas. Así mismo ellas desean que sus hijos sean
profesionales y trabajen. Desean sobre todo que sus hijos no se queden en la chacra un
8.1%, mientras que a las hijas le avizora un futuro casadas como amas de casa y que no
sufran como ellas, lo que representan un 9%. En suma las respuestas expresan una
situación de dependencia, poco deseable.

Esta situación hizo que la migración hacia las ciudades sea cada vez más intensa
en la búsqueda de mejores oportunidades. A pesar de los programas que distintas ONG
desarrollan para su mejora de vida (por ejemplo el CEDEP el Centro de Estudios para el
Desarrollo y La Participación en Cajatambo 1979, Callejón de Huaylas 1986 e lea en 1989,
que no solo se traducen en capacitación de tipo comunal, sino en varios casos política
cuando a través de éstas se preparan reuniones regionales de campesinas como el Primer
Seminario Taller sobre la situación de la mujer trabajadora de Cuzco) , en ellas se130

aprecia que tan campesina se es, trabajando como ambulante u obrera en las haciendas
ajenas o en la ciudad poniendo de manifiesto sus desventajas. Un testimonio de Cuzco
dejó ver que en varios casos la Reforma no les solucionó ningún problema, que la
situación servil permanente siguió que la explotación es familiar y, cuando trabajan las
tierras arrendadas, ven que las cosas no mejoran, que están peor a ú n . 131

La situación más desfavorable la tienen las mujeres que carecen de tierra y que
por otro lado no pueden atender a sus hijos por falta de tiempo ya que este lo dedican al
trabajo fijo en el campo por un sueldo bajo . Es usual que se abuse de su ignorancia,
132

ignorancia de la que son conscientes y como esto es algo que les sucede
permanentemente y no pueden hacer nada por cambiar las cosas, solo les queda
manifestar su queja en los talleres que organizan estas instituciones que buscan,
precisamente, descubrir esta serie de problemas de la población rural.

Las diferencias que hay entre las mujeres campesinas no permite tratarlas en
conjunto, por ello tan solo se han cogido modelos y cuadros que reflejan la situación más
cercana a todas ellas. Trabajos sobre las mujeres campesinas en las zonas costeñas no
abundan, sería interesante saber en materia de género cuanto han avanzado las mujeres
de este entorno porque el tipo de producción y el tipo de propiedad de la tierra es
diferente, como también diferente, es la relación laboral entre los dueños de las
haciendas de la costa norte y la sierra sur. Los trabajos rescatados por Carmen Chira
hasta 1989 tratan sobre Piura y Cajamarca, tan solo dos parecen tratar el tema de las

1 3 0
Asociación Amauta, 1982.
3
> ' Zevallos, 1994.
132
Asociación Amauta, 1982.

121
campesinas de las haciendas azucareras, Blanca Fernández de 1982 "Reforma Agraria y
condición socioeconómica de la Mujer el caso de dos cooperativas agrarias de
producción peruana" , y Amelia Fort "La campesina de Ferreñafe" publicado por la
133

Pontificia Universidad Católica del Perú en 1985. Lo más probable es que el nuevo
sistema se dé una situación de proletarización rural que afecta directamente a las
mujeres. En este tipo de trabajos hay otra clase de problemas que si vislumbran al tratar
el tema de relaciones de género.

Marisol de la Cadena da la pauta para poder diferenciar el tratamiento que se le


da por ejemplo a la mujer de los sectores urbanos y clase media preferentemente con
respecto a las campesinas, en las que la división del ámbito privado al público no tiene
sentido, esto es muy cierto cuando sabemos que las mujeres no solo ya habían
participado en el ámbito comercial sino que también por el tipo de participación en La
organización comunal.

Otro asunto que se debe considerar es que aquella división existente entre las
mujeres rurales y las urbanas porque poco a poco, al paso de los años, van siendo cada
vez más difíciles de tratar por separado, la situación de La que llamamos hoy mujer
campesina se ve como una especie de "especie de extinción", donde la migración hacia
las ciudades son cosa cotidiana y que está siendo alentado por los padres que les hacen
ver a sus hijos cuan difícil es La situación de los trabajadores del campo. Mujer rural y/o
mujer campesina denominaciones que se usan para el estudio de tipo sociológico y para
las estadísticas, devienen del Perú en una situación ambigua, cuando no sabemos que la
producción agropecuaria es por cierto un tipo de producción insustituible, a la que por el
escaso apoyo que se le da tiene cada vez más dificultades para no solo superarse, sino
también lograr el desarrollo de su sector de los que nos beneficiaríamos todos.

Existe un mecanismo por el cual ya no se habla de mujeres campesinas y


urbanas como si fueran comarcas separadas, es el hecho de que estas mujeres se
relacionen entre sí, a provincias y departamentos, las ONG han dado paso a organismos
como el de lea, la Federación Provincial de Mujeres, en las que participan no solo las
mujeres del área urbana sino también rural . 134
Esta organización se fundó en 1989 y
empezó con la participación de 35 organizaciones que en 1994 creció a 85, cada una
reúne aproximadamente de setenta a ochenta mujeres; esta Federación da atención y
asesoría legal, servicios de salud y educación a nivel comunitario, en la que ellas han sido
debidamente capacitadas, también, brindan apoyo en los programas de producción y
promoción permitiéndoles dar valor agregado a la producción agropecuaria, en este

1 3 3
Fernández, 1982.
M Zevallos, 1994.

122
caso lea ofrece atgarrobina, paliares bajo transformación industrial . Además cuentan 135

con un programa radial que les permite comunicarse con el resto de las mujeres a la vez
que mantienen informada a la comunidad de todas sus actividades. Este tipo de trabajos
ha hecho que las mujeres estén mejor estimadas y políticamente más sólidas en su
participación. Han logrado no solo atraer a los comités del vaso de leche sino también
negociar con dependencias del gobierno y otras, ONG sin que por ello sufran de
manipulación política.

Pero, ¿Cómo va la conciencia de género de las mujeres campesinas en el Perú? a


decir de Vilma Vargas de Balmaceda y Joel Jurado Najera, "la participación de la mujer en
las tareas productivas y reproductivas sitúa a la mujer campesina de Ancash como la de
menor participación, y a las del Cuzco y de Puno como las de mayor participación"
aseveraciones que se basan en una encuesta realizada por ellos mismos en las respuestas
demuestran que trabajan igual o tanto más que los hombres, pero que sin embargo al
preguntárseles acerca de la importancia de su labor las ancashinas en un 22.6%
responden que no es tan importante, mientras que tan solo la mitad opina que lo es en la
medida que el hombre, y un 25% que es más importante, la respuesta más interesante
radica en la capacidad de reconocer el valor de su trabajo, la contraparte de estas
respuestas la dan las puneñas, quienes consideran en un 50% que su labor es más
importante que la de los hombres. Cabe agregar que las razones que argumentan es que
la mujer hace de todo y todo el día y para todos, para mejor ilustración veamos:

ANCASH, CUSCO Y PUNO: 1 9 8 5


A U T O V A L O R A C I Ó N D E LA MUJER SOBRE LA I M P O R T A N C I A
D E SU TRABAJO P R O D U C T I V O Y R E P R O D U C T I V O
POR Z O N A S (%)

Ancash Cusco Puno

C o n s i d e r a n q u e n o es i m p o r t a n t e 22.6 15.4 14.3

C o n s i d e r a n q u e e s igual d e importante q u e el trabajo del varón 51.6 79.5 35.7

Consideran q u e su trabajo e s m á s i m p o r t a n t e 25.8 5.1 50.0

Total % 100.0 100.0 100.0


N ° de casos (31) (39) (42)

Fuente: Vargas/Jurado, 1987.

i 3 S
Zevallos, 1994.

123
ANCASH, CUSCO Y PUNO: 1 9 8 5
J U S T I F I C A C I Ó N DE LA M A Y O R I M P O R T A N C I A DEL TRABAJO DE LA MUJER
C O N EL TRABAJO DEL H O M B R E , POR ESTRATEGIAS

Argumentos Ancash Cusco Puno Estrategia Estrategia Estrategia


I II III
La mujer hace de todo y todo 75,0 100,0 42,9 33,3 61,5 21,4
el día hace más en la casa.
Si ella no trabaja no están 12,5 0,0 28,6 20,0 23,1 14,3
bien !as cosas.
Es más importante en la 0,0 0,0 9,5 6,7 7,7 7,2
crianza de los hijos.
La mujer trabaja para todos. 12,5 0,0 14,3 33,3 7,7 57,1

Es la que más sufre, la que 0,0 0,0 4,7 6,7 0,0 0,0
más se sacrifica por el hogar.
Porcentaje total. 100,0 100,0 100,0 100,0 100,0 100,0

Fuente: Vargas/Jurado, \B&7.

Las estrategias que se mencionan en el cuadro son las siguientes:

Estrategia I: "Familias campesinas cuya reproducción se


sustenta en el autoabasto".

Estrategia II: "Familias campesinas cuya producción se sustenta


en la venta de sus productos".

Estrategia MI: "Familias campesinas cuya producción se apoya


principalmente en la venta de la fuerza de trabajo de sus
miembros".

Las que pertenecen a la estrategia I y II opinan que ellas hacen de todo en casa,
además consideran que sus labores son indispensables para que estén bien las cosas. En
tanto la respuesta de las que corresponden a la estrategia til responden que las mujeres
trabajan para todos en un 57%, es decir, no se refieren únicamente a las labores del hogar,
están conscientes de su participación fuera de ella. Lo más grave es que las del grupo de la
estrategia I, que en síntesis se refieren a las puneñas reconocen el sufrimiento como una
característica que se padece al interior del hogar, además son también las puneñas las que
ponen sobre relieve su trabajo como orientadora de los niños. Las mujeres cusqueñas se

124
presentan como las que por encima de todo están más dedicadas a sus labores domésticas,
lo que corresponde también a La estrategia II en mayor número, es decir que su producción
se basa en la comercialización de los alimentos.
Es el momento de pensar aquí de qué manera la Llegada de los españoles al Perú
hicieron que varios conceptos y valores nativos sean trastocados cuando la
complementariedad de los géneros se tenía por base en la reproducción de La existencia
social, la unidad necesaria, pese a que "con todo, eran los varones y no las mujeres quienes
representaban a La unidad doméstica ante la administración imperial . 136
Esto es sin
mencionar el aspecto afectivo que está cargado de una serie de expresiones que varían
según etapas y otra serie de manifestaciones que reflejan la cultura andina respecto a la
occidental, en la que se puede advertir una "cierta semejanza entre la bucólica andina y la
europea (...) a que en ambas sociedades, la ganadería es definida con relación a la
agricultura en términos básicamente similares la primera tiende a ser periférica con
respecto a la segunda; los pastores suelen ser jóvenes y sus cantos expresan también
nuevos sentimientos" , el autor además enfatiza" para que el individuo logre sus plenos
137

derechos y reconocimiento social debe formar parte de un pareja (y luego ser padre o
madre), un individuo sin compañera o compañero conocido y sin hijos es considerado un
desvalido y un ser incompleto (el ideal que sustenta esta norma y valor parece ser entonces
que se alcanza la categoría de persona en La relación interpersonal como pareja y como
padre o madre); La relación de la pareja parece ser concebida como básicamente
complementaria pero asimétrica y egocéntrica (entre sus dos miembros manteniendo un
espíritu competitivo, práctico y un estilo "distanciado"; como marco a estas ideas agregan:
la sociedad, es un conjunto, que tiene una inclinación endogámica (que se traduce, para
dar un ejemplo en la preferencia por el intercambio matrimonial restringido e
intercambiable: entre dos comunidades, entre dos barrios, o dos grupos de hermanos) y
una cierta concepción de humanidad restringida. Estos ideales se encuentran
confrontados, y sin duda, en parte atenuados por la tradición hispano cristiana, en que la
relación yo-tú es ideal y fundamentalmente horizontal y recíproca..." . 138
Por otro lado
según el mismo autor, el desarrollo de la pareja que se convierte más tarde en la familia
nuclear, la institución parental más importante, se consolida emocional, social y
económicamente mediante un proceso:

a. búsqueda y amores (fiestas, carnavales, pastoreo)


b. Rímanakuy o rímakukuy (diálogo e intereses y sentimientos entre las
dos familias).

136 Silverbiatt, 1990.


' " O r t i z Rascaniere, 1993.
m
Ortiz Rascaniere, 1993.

125
c. El servinacuy o watanaki (novios viviendo en la casa de los padres de
uno (a) de los novios, bajo la autoridad del dueño de la casa, prueba)
d. La unidad doméstica (fin del servinakuy, la pareja adquiere su propio
espacio. Los padrinos y comunidad ayudan en la construcción de la
casa).

Es interesante como descubre Ortiz R. el ciclo de la pareja andina, que puede ser
cuestionada, pero que marca un punto de apoyo para comprender el estado de la situación
campesina, cuando afirma:
"En resumen, la pareja se encontró en la soledad, luego fue pobre y
dependiente, después adquirió autonomía, riqueza y prestigio; al final
tiende a volver a la pobreza y a una cierta soledad. Este ciclo -de
soledad, pobreza, dependencia, domesticación, autonomía, riqueza
económica y social, y reversión de los términos (salvo el de
domesticación)- es percibido por los andinos claramente como un
ideal: un buen anciano ha de ser pobre y estar más allá del orden
familiar (pues también deber ser un "bien" de toda la comunidad); un
buen adulto, acomodado y sociable; un joven debe ser "altivo y
rebelde". Alejarse del modelo es considerado como un defecto grave:
un anciano rico es un avaro; un adulto pobre, un ocioso o pecador; un
muchacho demasiado sumiso, un débil sin futuro. A medida que los
andinos intensifican su participación en la economía nacional y de
mercado, estos ideales serán más difíciles de lograr: la acumulación de
riqueza desigualmente repartida, la migración intensa, la difusión de
otros valores, traen consigo que, por ejemplo, hayan padres
suficientemente acomodados como para que continúen siéndolo en la
ancianidad, y que sus hijos, apenas casados, disfruten de considerables
bienes gracias a los padres" . 13

Según estas afirmaciones, es posible comprender no solo como se inicia una


familia andina, es más, habría que releer el texto de Ortiz Rascaniere, que va más allá. Lo
interesante es como el ciclo familiar va de la mano con los efectos de la pobreza que
presenta nuestras serranía, esa pobreza en la que se observa pueblos que apenas se
reconocen en los mapas del Perú en la que aparecen por lo general tan solo mujeres, niños
y ancianos con ropas raídas y que demuestran no solo el abandono que sufren del Estado,
sino que el Estado si acaso pensó alguna vez ellos con el afán de integrarlos al Perú Oficial.
Aquella indiferencia con respecto a la participación de estos grupos humanos sin un
potencial explotable que la mantienen esta "pobreza milenaria", no significa el desamparo
total sino la secularización de un ciclo vital en el que hoy sí les es tan lesivo. Lugares con
pobladores que presentan ancianos y niños con trajes recogidos y parchados sin más pena
cuando vemos a los jóvenes provincianos en Lima que se hacen de "combis", talleres de
confección clandestinos, taximotos, que construyen sus casas y que al paso de los años, la

Ortiz Rascaniere, 1993.

126
mayoría solo desean establecerse en su casa en su hogar de origen, sin más actividad que
aconsejar a sus hijos y vivir de los que estos les ofrezcan.
Se tendría que hablar más de lo que significa la familia andina, punto en el que no
se equivocaron para nada las primeras (os) investigadores cuando apuntaron a la unidad
doméstica y sus formas de vida para comprender no solo a la mujer campesina, artífice
principal de toda la organización comunal como hoy la entendemos. Si bien la familia
nuclear es importante de ninguna manera se puede pretender entenderla a la manera
occidental, la familia en los andes es más compleja, va más allá de la conocida por nosotros
como la nuclear, el parentesco y sus relaciones más compadrazgos de por medio juegan a
nivel comunitario una serie de factores muy importantes en la comprensión de la Reforma
Agraria y sus consecuencias, mejor dicho, de como las familias se han adaptado a la nueva
situación.

Sobre este tema mucho tuvo que ver un Simposium de la Asociación de


Antropólogos Americanos en Toronto el año 1972 llamado Parentesco y Matrimonio en la
Región Andina en el que se pudo evidenciar que "el sistema actual del parentesco andino
es preponderantemente un sistema bilateral, es decir que la descendencia es transmitida
por ambos sexos, padre y madre, a los hijos e hijas. También resalta que son las
condiciones económicas, políticas y sociales las que producen variaciones en el parentesco,
pero sin perder este su carácter esencialmente "cognático" y bilateral. Por último, Lambert,
uno de los participantes enfatizó el rol importante que juega el parentesco espiritual
(Compadrazgo) dentro de ese sistema" . 140

Cada miembro de la familia, entiéndase también a los miembros colaterales, tiene


funciones determinadas que se diferencian no solo por el tipo de parentesco sino además
por la procedencia de los nuevos miembros en la que además la parte de los apellidos
cumplen un rol importante capaz de permitir o no una relación de pareja con futuro
promisorio. La importancia que tiene los parientes espirituales, juegan un rol
importantísimo en la familia y su situación frente a la comunidad. Es tan importante que
aún hoy es esta designación la más importante relación que una familia de características
culturales predominantemente andinas puede establecer exigiendo implícitamente cierta
solidaridad del padrino con la familia de los ahijados. La red de interrelaciones que se
practica en las provincias del interior es repetida, adaptada a las nuevas circunstancias, y
estas ayudaron, ayudan y ayudarán a estos grupos humanos a trascender aún pese a la
consuetudinaria acción del gobierno que se empeña en desentenderse de ellos y sus
problemas, cuando no extraer tan solo los beneficios que puedan de ellos obtener sin dar
nada a cambio.

' « Mayer/Bolton, 1980.

127
De las afirmaciones vertidas, la más interesante es aquella que observa la
descendencia transmitida por ambos sexos, al parecer una práctica de parentesco
precolombina, las mujeres heredan a las hijas y los hombres a los hijos, lo que afirma y
hace sólida la propuesta de la complementariedad de los hombres y mujeres en el trabajo
familiar sobre todo en los quechuas. Complementariedad que aún los antropólogos no
han podido explicar con seguridad sus formas, considerando que al hablar de los Andes no
solo existen diferencias por regiones que guardan sus respectivas particularidades, sino
también su relación con la cultura occidental.
En la cultura andina, donde la transmisión de los valores yjerarquías se transmiten
primero con el ejemplo, la voz y otros vehículos iconográficos (lo que viene cambiando a
partir de los setenta como producto de la arremetida educativa), se han visto trastocados
por el mestizaje igualmente hasta hace casi treinta años mediante las mismas formas
impuestas desde las clases dominantes en cuanto a reforzar su status de poder (no quiere
decir que pase a ser como ellos) haciendo que la población aborigen pierda ciertos
principios inherentes a su armonía social. ¿Cómo? mediante la incorporación de los
nuevos mecanismos para comprenderlos en la administración, ideas que mejor explica
Penélope Harvey así:
"El argumento general es que factores externos han introducido
asimetría y dominio masculino en relaciones entre hombres y mujeres
que de otra forma serían complementarias e igualitarias. Incluso allí
donde puede verse que los hombres usan estos factores externos para
su beneficio, la dominación masculina sobre las mujeres es
presentada masculina sobre las mujeres es presentada como
esencialmente extraña a las posibilidades inherentes a la organización
social indígena" .141

La propuesta de Harvey no queda ahí, porque es probable que lo expresado tenga


estrecha relación con la acentuada alta tasa de analfabetismo femenino en el interior, la
desventajosa situación de las mujeres campesinas se debe a la inseguridad que manifiestan
las mujeres al sugerirles la representatividad de ellas con relación a decisiones de la
comunidad. Al ser los hombres los representantes de las comunidades y familias, es claro
que ellos en principio tenían la palabra, de otro lado les urgía el dominio y/o conocimiento
del castellano para poder establecer comunicación con los representantes del Estado e
instancias superiores, más aún los documentos (títulos, contratos, etc.) están redactadas en
castellano y escritos, así el jefe de familia era el indicado para que se ocupe de este tipo de
quehaceres. Las mujeres por otro lado asignadas a las labores domésticas y de producción
en las que poca oportunidad tenían de manifestar sus reclamos, por cuanto no eran de su
competencia, debían como no, confiar en las negociaciones del esposo, de los padres y/o

w Harvey, 1989.

128
hijo mayor entrenado para estos quehaceres "públicos". Es importante destacar que las
razones que más se manifiestan como las responsables de esta marginación de la mujer en
la toma de decisiones no radica necesariamente en el claro manifiesto de los hombres de
saber otra lengua esta vez "superior", sino en la entendida circunstancia de que las mujeres
se convierten en las depositarlas de la cultura en su más "limpia pureza", esto que lleva a
que los hombres en Ocongate por ejemplo solo hablen en castellano cuando está
borrachos . 142

La familia campesina no actúa de la misma manera en todas partes, tampoco las


mujeres desempeñan las mismas funciones en todas las familias, la ganadería, la agricultura
y el comercio permiten a las mujeres poder hacerse de ingresos y reconocimiento dentro y
fuera del hogar, estos trabajos también reditúan ingresos nada despreciables al interior de
la unidad doméstica, pero, en líneas generales la situación de las mujeres campesinas no es
favorable para ellas.
Lo interesante es saber que los científicos sociales han optado estudiar a la
familia, y no se han equivocado. El desarrollo de los factores que apuntan a una mejora de
las condiciones de vida de las poblaciones campesinas (centro y sur andina sobre todo),
debe empezar por devolver a las mujeres campesinas la autoestima a nivel social bajo una
concepción de género, más cuando se registran antecedentes históricos y económicos que
la han despojado de ciertas facultades que les habría permitido negociar mejor sus
contribuciones al interior del hogar y la comunidad.
Las características de las mujeres campesinas no pueden ser vistas desde el punto
de vista de los sectores urbanos, hasta esta categoría es parcial, pues lo opuesto sería la
mujer rural, una opción que no puede aplicársele a las peruanas, sin que se haga evidente
el sesgo cultural andino en constante vigencia, que sufre una situación de apoyo, defensa y,
a la vez, afirmador de la vida; mientras que por otra parte, se le ha estigmatizado como un
atraso y cuyas manifestaciones hasta hace poco eran consideradas como símbolos
negativos para el desarrollo de la nación. Si algo bueno tuvo la Reforma Agraria (amén del
desastre económico coyuntural) fue la horneada de investigadores "socialistas" que
pusieron de relieve los valores andinos e hicieron que estos se renueven y apoyen no solo a
las familias campesinas andinas sino que colaboren a la "conformidad" social cultural del
Perú.
No se puede hablar de las mujeres campesinas peruanas sin diferenciar a las del
norte costeño, las del centro y norte andino y, las de la costa central y sur con respecto a
las del sur andino.

' « Harvey, 1989.

129
Los efectos, las distorsiones y cambios, así como la desaparición de los rasgos
culturales precolombinos, los que no han podido mantenerse vigentes a través de estos
casi cinco siglos, los procesos de desestructuración que han venido por diversas vías,
algo que casi no mencionamos es el de los efectos de la minería en la familia campesina,
sobre todo entendiéndolo desde los tiempos de la conquista hasta nuestros días, peor
aún, ni en los primeros años de ta década de los ochenta, cuando a causa de las graves
injusticias salariales los mineros empezaron a hacer Las marchas de sacrificio, cuya mayor
noticia la causó la marcha de las minas Canarias (Ayacucho) en 1982. Un libro que nos
remite a este tema interesante es de Zoila Hernández, cuyo título El coraje de las
mineras. Marginaiidad andino-minera en Canaria ^ resume en seis páginas la situación
1

de la mina Canarias y luego se ocupa del Comité de Amas de Casa (CAC) que reúne a las
esposas de los mineros y los padecimientos que a través de las marchas han sufrido (32
muertos, incluidos 22 niños). Al margen de la denuncia de los trabajadores y sus esposas,
del poco interés por identificar a los autores intelectuales y organizadores de esta
marcha, del gancho con el contó este grupo de mujeres para participar como "invitadas"
en el III Encuentro Feminista Latinoamericano y del Caribe que se realizó en San Paulo, y
de plasmar la frase "caídos en acciones represivas del gobierno del señor Fernando
Belaúnde Terry, etc.", se puede apreciar como las mujeres entrevistadas tienen una
opinión un tanto pobre de ellas mismas, el que se pone de manifiesto cuando llegan
precisamente a Lima, la ciudad en la que ellas pensaban encontrar apoyo y que en
muchos casos no solo le demostraron indiferencia, sino su rechazo, y hasta su desprecio,
de tal magnitud, que llegaba a lastimarlas al punto de detenerse a pensar, y darse valor
para volver a pedir la colaboración de los transeúntes para tener su olla común con
alguna comida.

Otro aspecto que hay que considerar es que en este caso se pone de manifiesto
el racismo, que fue y es tan lesivo para gran parte de la población andina. Los rasgos y
las manifestaciones culturales que la identificaban con la cultura andina, fueron para ellas
en Lima lejos de una ventaja, una desventaja, la idea de ser rechazadas como "cholas
asquerosas" es más, "cholas de mierda, carajo", pronto Les hace ver cuan desprovistas
están de poder hacer frente no solo como mujeres sino frente a un grupo humano,
mayoritario y dominante que las rechaza. Lo otro que también es importante destacar y
que se muestra acorde con el desarrollo de los movimientos femeninos en el Perú, otra
vez, el conformar una organización alterna a la de sus esposos, que no solo busca apoyar
a los esposos sino que desea ser protagonista. A pesar de que cada una de ellas debían

' « Hernández, 1986.

130
"aprender a leer y escribir, para defenderme yo misma y defender al Comité ; también
aprecian lo importante que era saberse conducir en las asambleas, el orden de ellas, en
fin entender cómo se manejan esas áreas. En la mayoría de los casos el miedo a hablar,
el perder la vergüenza pare ellas ha provenido de la práctica en la venta de caramelos y
otros pequeños productos para subsistir en La ciudad.
Algo curioso, y que resalta la diferencia que existe aún entre Las peruanas es la
diferencia de clases y de culturas a la que pertenecen. Diferencias que fácilmente
pueden trascender y afectar no solo La visión de un problema sino también la actitud
que en muchos casos son causas de divergencias entre mujeres que al parecer apuntan
a un ideal como es el de la nación o la misma situación de justicia en nuestro medio.
Este caso se gráfica con la participación de la socióloga Piedad Pareja Pflucker, quien al
parecer (según Hernández) en su libro Terrorismo y sindicalismo en Ayacucho
(Lima, 1981) afirma: "que el CAC es el órgano clave del conflicto", ella había
establecido una conexión entre el CAC y Sendero Luminoso. Las mujeres mineras en este
caso vieron a Piedad como una mujer que no entendía sus problemas, nada menos que la
gerente general de Minas Canaria que no pagaba sus sueldos a sus esposos desde hacía
un año.
He aquí unos pasajes de una de las mineras refiriéndose a ella, a Piedad:
"Piedad Pareja es una mujer que no tiene conciencia con sus
trabajadores, no tiene aprecio, esa estimación para sus obreros. Ella
quería tratarnos como a cualquier animal, como en el tiempo antiguo,
pero ella estaba bien confundida. Creía que nos iba a tratar con látigo,
pero se dio contra el tren, porque no nos hemos dejado pisar el
poncho, como se dice"

[...]

Una vez lo he leído (el libro de Piedad Pareja) en la Mina cuando los
dirigentes lo llevaron. Se llama Terrorismo y Sindicalismo. Ella ha
puesto nuestros nombres ahí porque Las mujeres éramos las más
reclamonas, en todo chancábamos a la Piedad. Pero ella también era
fregada. En cambio la actual señora de su padre, la señora Gloria, que
desde más antes ha sido su secretaria y también ha sido empleada, ella
es buena persona. ¡Cómo será de acá a otros años, si cambiará o no!
Pero ahora como la conocemos, es muy distinta a la Piedad" . 145

Esta solidaridad que existe de antemano con los que considera más próximos, la
llamada igualdad, identidad y demás parámetros que tan solo con la actual tolerancia se
puede entender aquí en el Perú.

' « Hernández, 1986.


' « Hernández, 1986.

131
El tema de la violencia de Sendero Luminoso y su influencia en los campesinos,
entre aquellas mujeres que viven dentro del campo en Las zonas rurales despojadas de
una forma de vida para pasar a otra, y no por su propia voluntad sino por sobrevivencia
como las comerciantes ambulantes en las ciudades, las que huyen de los campos en
busca de paz, o las que van a las urbes citadinas en busca de justicia, unas y otras
finalmente, al no poder lograr una realidad positiva, pronto caen ante la necesidad de
cambiar hábitos, costumbres, normas, conductas y todo lo que a la larga ellas consideran
un ducto al respecto al reconocimiento.
Las mujeres campesinas, por decirlo así, no escapan al paquete de los ochenta,
también en esta década ya no son sujetos pasivos de la acción social, sino que a La ola de
todo el proceso revolucionario cambiaron su perspectiva de la vida, han adoptado otras
formas de participación doméstica, el comercio, y otras prácticas próximas al capitalismo.
Por otra parte, la participación de las mujeres campesinas tienen un muy buen
aliado en las Organizaciones No Gubernamentales de Desarrollo, mediante estas podrían
alcanzar niveles muy significativos. El esfuerzo más notable comenzó con la Central
Nacional Agraria (CNA) que nació por iniciativa de Velasco, al cabo de veinte años ha
dado lugar a partir de 1989 a los Encuentros Nacionales de la Mujer Campesina. Por otra
parte surgieron asociaciones distritales que desde 1982 en Puno llegaron a establecer en
Plura y Junín. Otra institución que agrupa a los campesinos es la Confederación
Campesina del Perú que se fundó en 1980, esta convocó en 1987 su Primera Asamblea
Nacional de la Mujer Campesina, que busca bajo estas reuniones el reconocimiento de su
condición de productoras y la mejora del precio de sus productos . 146

Cecilia Blondet recoge información que le permite identificar la formación de


clubes de madres en las zonas de emergencia, las que en 1989 impulsaron la primera
marcha por la Paz en Ayacucho, la constitución de la Federación de Clubes de Madres de
Huamanga con 280 clubes, luego La Federación Departamental de Ayacucho con 1,200
clubes con más de 70,000 afiliadas. En 1983 se produjo el Primer Encuentro Regional de
Organizaciones de Mujeres con delegadas de Huancavelica, Apurímac, k a y Ayacucho. En
este acápite Blondet menciona a las trabajadoras del hogar y menciona su red
latinoamericana. Esto también nos recuerda cuan importante es la vía del trabajo
doméstico para las mujeres campesinas.
El gol de las ONG lo que la Red Nacional de la Mujer Rural creada en 1988 e
impulsada por el Centro de la Mujer Peruana Flora Tristán, que abarcaba no solo a las
mujeres campesinas, sino, que además coordinaba con los gremios los temas de su

' * Blondet, 1994.

132
agenda . Esta red creó un medio informativo, la Revista Chacarera, que en el número
13 de agosto de 1993 se vio muy interesante. Es un medio informativo por el cual se da
notas desde Ancash, Ayacucho, lea. Cerro de Pasco, Arequipa, Tarapoto y Lima, menciona
a los talleres de capacitación, la preocupación del momento (propiciaba el terrorismo) no
omitía el problema de la violencia doméstica, la participación de las mujeres en los
gobiernos locales, la iglesia, el tema de los derechos humanos, y otras manifestaciones
artísticas, así como también la difusión de nuevas publicaciones de interés rural .
148

Blondet/Montero, 1995.
M a
Centro de la Mujer Peruana. Flora Tristán, 1993.

133
6. MUJERES INDÍGENAS

Si las mujeres de los sectores


urbanos pese a todo lo que han
hecho por lograr mejores
oportunidades al interior de las
clases a las que pertenecen recién
estaban viendo algunos frutos; y las
mujeres campesinas que sufren las
consecuencias de la alienación
cultural heredada desde hace casi
quinientos años de aculturación aún no terminan de sortear el problema económico, social y
cultural que ha dejado a tas mujeres en una condición menos ventajosa de que la que tenían
en tiempos; las condiciones para las mujeres de las comunidades nativas, menos cantaron
con los recursos necesarios para insertarse en la actual estructura social peruana con las
ventajas de sus pares hombres. Precisamente esta aculturación a la que tarde o temprano
toda la población nativa va a seguir, la convierte en el blanco de discriminaciones
económicas cuando no culturales a la hora de insertarse en el mundo global.

6.1. Problemas generales

Este acercamiento empieza, en principio, por las necesidades económicas extranjeras, y


encierra en sí el concepto de que la zona amazónica está a merced de las demandas
ínter nació nales antes que las de Perú; y en cada momento económicamente expectante, los
nativos en nada se benefician de la explotación del caucho, maderas, petróleo ni de la coca,
por el contrario, cada una de estas incursiones Les ha significado la desaparición de grupos
humanos culturales por entero y cambios drásticos en el ambiente.
En el caso de las mujeres, ¿problemas?, estos se presentan por la invasión que estas
comunidades sufren por el contingente laboral de las empresas que han dejado no solo la
tierra irreconocible sino que aunada a la incursión de los mestizos se cultura está sufriendo
trastornos ideológico-políticos a la mayoría de las comunidades.

134
Una manera extrema de enfrentar el problema sería detener la intervención en
estos centros poblados que han sabido mantenerse sin molestar a nadie por siglos, y; que
sobre todo han conservado para todos nosotros una fuente natural de extrema belleza y de
utilidad si pensamos en la ecología mundial . Pero esta no pasa de ser una justa y/o
149

buena intención si nos proponemos a considerar que la ideología imperante apuesta a


conquistarlo todo.

Por lo pronto, lo único que han logrado es atacar a los pueblos en condiciones
asimétricos, en la que los nativos llevan la parte menos ventajosa y los invasores todas las
oportunidades a su favor.
Pero justo es ponerse en la orilla contraria. Es necesario hacer partícipes de la
sociedad a nivel nacional que deben respetar los cánones morales y legales de estos
pueblos y formar parte de las políticas que los beneficiarían; y así mismo, todo aquello que
se encuentre como claro aporte a la nación, puede ser tomado por el Estado mediante
negociaciones política y económicas.

Pero lo que se hizo fue invalidarlos, y precisamente por esa carencia fueron
tratados como sí fueran ciudadanos de segunda clase a ios que se debe conducir por que
efectivamente ellos mismos no podían tomar sus propias decisiones. Así fue desde la
invasión europea hecha por los primeros misioneros desde las leyes iniciales de la
República y, finalmente, con las Leyes de tierras de Montaña, las que poco a poco
terminarían por privatízar estos terrenos en beneficio de unos cuantos, llegando a empujar
cada vez más a estas poblaciones a lugares menos propicios para su existencia, reduciendo
el espacio necesario para su curso de vida.

¿Cuándo se tomó en cuenta a la Amazonia? Cuando se descubrió que había


caucho, maderas, petróleo; después, habitantes. De esta manera sin muchas deliberaciones
se decide ingresar y extraer lo necesario, la materia prima correspondería a la gente
foránea, a los intereses extranjeros, todo a costa del bienestar de su población originaria.
Los agentes del Estado debieron pensar en la incorporación de estas personas en
la historia oficial y hacer algo al respecto, ofrecerles los medios necesarios para participar
orgánicamente (a futuro) en las decisiones que sobre sus tierras se toman.
Cabe en esta óptica una consideración especial la acción a la gestión populista
como muchos etiquetan mediante la cual Velasco opta por presentar en Palacio de
Gobierno y por televisión a los representantes (jefes) de comunidades nativas como
interlocutores, como ciudadanos y no como especímenes. Lo que vino después, la
conformación de las comunidades, el reconocimiento de la propiedad de sus tierras, el
estudio antropológico y sociológico de cada una de ellas, el otorgamiento de leyes

Conversación con el arqueólogo Daniel Morales. Lima, enero de 1997.

135
adecuadas y la progresiva instalación de representaciones estatales al interior de la
Amazonia, que tenían como correlato, no quedar a la saga de los trabajos que otros entes
foráneos venían haciendo con propósitos extraños (como el Instituto Lingüístico de Verano
o ILV) sino ir a la vanguardia y frenar el enajenamiento de sus medios.
Al hablar de mujeres indígenas, se debe tener en cuenta que los estudios
realizados en torno a las relaciones de género son muy pocos. En la última publicación que
salió sobre el comportamiento reproductivo de las mujeres en las comunidades indígenas
de la Amazonia del INEI de 1996 se recomienda "introducir la planificación familiar de
género en los programas y proyectos con poblaciones indígenas". Aún más, se necesitaría
de la participación activa de la población indígena para el "continuo perfeccionamiento en
el diseño y ejecución de los programas y proyectos de población y desarrollo, de tal
manera que se garantice la conservación de su cultura, idioma y su propio habitat".
Mientras se afirma aquello, todas las informaciones de orden gubernamental
indican que medir bajo parámetros occidentales, el índice de pobreza, como el número de
habitaciones por familia; y además, la conexión de la red de agua potable como otro ítem
para poder medírsele la salubridad, les resulta paradójico, cuando son precisamente estas
carencias las que les han permitido subsistir en aquellas tierras antes de que la industria
extractiva pretenda corrompiera todo su sistema de vida amazónico. La nota más saltante
y contradictoria es:
"Las condiciones de pobreza de ia población indígena pueden ser
mejoradas ya que variables como educación y la ocupación son las que
más influyen no solo en su comportamiento reproductivo sino sobre su
calidad de vida en general" .
150

En síntesis, necesariamente se debe pensar que se mantendría los aspectos


culturales más primarios, pero por la proximidad con la zona andina, la Amazonia mostraría
claros rasgos mestizos en todos los niveles, lo que afecta a las comunidades de la selva
alta.

Si vemos la bibliografía sobre este tema, podemos apreciar que los estudios sobre
la Amazonia parten desde mediados del setenta, y ello se debe a la nueva política que
sobre ellos se procuró por parte del gobierno militar, la Revista Amazonia Peruana aparece
en 1976 151
y continúan luego otros trabajos como el del antropólogo Stéfano Varesse La
sal de los cerros, que dio paso a trabajos similares que tratan de estructurar una historia de
la comunidad. Pero lo interesante estaba en estudiar además, los problemas que estas
comunidades pasaban con el avance del progreso, al impacto de la construcción de una

1 5 0
Perú, INEI, 1996.
1 5 1
Uriarte, 1976.

136
carretera marginal, por ejemplo con los aguarunas . El tema de las mujeres en la
Amazonia recién empieza a sentirse a partir de 1984, con el trabajo de Katheleen y Anthony
Stocks "Status de La mujer y cambio por aculturación" . 153
El mismo año en la Reunión
Regional de la Selva organizado por el grupo de trabajo AMIDEP, Judith Vivar expone
"Situación de La mujer en el oriente" . 154

La diferencia que resalta en los ochenta a diferencia de los setenta, es que los trabajos
se identifican con un conocimiento antropológico de las comunidades y de corte más bien
sociológico; y además, busca el conocimiento de un panorama a nivel regional y geográfico
con fines políticos más explícitos donde el tema femenino se hacía cada vez más importante.
Al Igual que en las comunidades campesinas, se hacía imperativo el conocimiento de la
dinámica familiar, así emprendieron investigaciones sobre el rol de las mujeres en ese ámbito.
Lo primero fue descubrir cómo era la relación de ellas respecto a los hombres, luego, Lo que era
más saltante, como afectaba el "Intercambio" cultural a las mujeres, Judy Tizón habla sobre ello
en su artículo "Subordinación de la mujer amazónica; modernización y desarrollo . En ese 155

mismo año, 1985, la revista Shipihui destaca el tema de género en la Amazonia en su número
N° 35-36, en él destacan dos artículos el de Federica Barclay que versa sobre Los programas de
desarrollo para mujeres en sociedades amazónicas 156
y el de Jeanine Anderson sobre Los
sistemas de Género y el desarrollo de la selva. Habría que reflexionar que queda de todo esto,
actualmente tenemos una serie de situaciones que nos permiten afirmar que en la Amazonia
peruana, al menos casi todas las mujeres tienen una labor económica que les permite cierta
autonomía que es la artesanía y la elaboración de ciertos objetos de utilidad que pueden ser
comerciados por ellas mismas; sin embargo, Los estudios muestran hechos que las mujeres de
la Amazonia lejos de haber ganado en el espacio de las relaciones de género, han perdido,
precisamente por el tipo de machismo que los "Civilizadores" llevaban consigo, los prejuicios
que hicieron de los hombres nativos, las piezas fundamentales de la ejecución de los diversos
programas en la Amazonia. Los aspectos culturales pronto salieron a flote, como por ejemplo,
el caso de una "médica" descalza de la Amazonia . 157

La gran diferencia que existe entre los primeros trabajos y los de los fines del
ochenta, es que los últimos ofrecen una combinación de estudio antropológico con un
tema común a todas las comunidades, el impacto causado por la oleada de asimilación al
Estado-Nación de los setenta, con todos los pro y contra, incluido el problema ecológico.
Estudios sobre las mujeres en estos asuntos también estarían presentes con títulos como

'52 Brown, s/f.


'53 Stocks/Stocks, 1984.
154 Vivar, 1984.
155 Tizón, 1985.
156 Barclay, 1985.
IS
? Beracíia O'Connel, 1987.

137
"La mujer Chayhuita: ¿un destino de marginación? Análisis de ta condición femenina en
una sociedad indígena de la Amazonia de María Pía Dradi 153
y el "Rol de la mujer en la
sociedad india" 159
de Alejandro Quispe, por ejemplo.
Javier Tantaleán percibió la doble marginación , que tanto en las mujeres
160

campesinas como en las nativas enfrentan en los varios Rimanacuy (reuniones promovidas
por el Gobierno), a los que asistían más de cuatro mil delegados, donde él vio que la mujer
"juega un rol efectivo de marginación pues de todos los presidentes que asistieron a los
Rimanacuy solo uno fue una mujer. Y fue patético observar el Rimanacuy de Puno y
Pucallpa cómo éstas eran marginadas, incluso físicamente, pues ocupaban lugares
secundarios, casi de aislamiento en las asambleas y grupos de trabajo".
Según Dradi , "en las sociedades de caza (en la que se inscribiría a las mujeres
161

nativas de nuestra Amazonia) y recolección, el status femenino es más alto cuando su


aporte no se limita a la transformación de la presa muerta por el hombre en alimento
comestible, sino que además ofrece productos de horticultura, que en la mayoría de los
casos representan la primera fuente de supervivencia cotidiana pero dice más:
"la labor de promoción y capacitación de la población nativa, efectuada
por diferentes instituciones (...) han acentuado ta desvalortzación del
componente femenino, pese a la buena intención de sus autores,
porque (...) no se ha prestado una verdadera atención a la mujer y se han
elegido a los hombres como interlocutores privilegiados" . 162

Por otra parte, antes de que se planteara este problema, las Labores domésticas y
artesanales aún no eran consideradas como importantes en la economía indígena ya que
debía adecuarse a las normas occidentales, se hacía preciso no enfatizar sobremanera la
labor agrícola que tan solo favorecía a los hombres; la artesanía se convierte en un valor y
ayuda a las mujeres a su autovaloración. Hoy en día es la venta de estos artículos las que le
dan otra faz, sin embargo el sello ya está grabado, pues cuesta a las mujeres volver a una
situación más estimulante.

Un componente cultural que hace de las mujeres sujetos pasivos en la vida


pública y en su hogar es el efecto de la asimilación a un tipo de economía capitalista, en el
que los hombres, además, porque el idioma que se practica para estos efectos es el
castellano. Las mujeres por lo general y por esta razón están casi excluidas de hablar este
idioma, no por marginación sin causa, sino que se deriva de las necesidades prácticas en la
vida económica, con esto las mujeres pierden mucho, fácil es comprender que están
desprovistas de las herramientas necesarias para labor social.

i » Dradi, 1987.
i*'Quispe, 1987.
' « Dradi, Í987.
Dradi, 1987.
»« Dradi, 1987.

138
6.2. Diversidad cultural de las mujeres en la Amazonia

En la Amazonia existen más de cuarenta grupos étnicos con sus respectivas lenguas, el
estudio de la situación de las mujeres portadoras de sus culturas no es una tarea fácil. La
fuerte penetración occidental en la Amazonia a fines del siglo XIX y el siglo XX ha
dificultado su conocimiento. La situación de la mujer indígena podía ser más ventajosa
antes de que lleguen incluso los primeros misioneros en los siglos XVII y XVIII. Es posible
que las mujeres tuvieran un rol más relevante aunque sea en el ámbito marital, a decir de la
cita extraída del texto de Dradi de las misiones del XVII "los hombres ruegan, más que
mandan a sus mujeres, ni estas sufren otro lenguaje en sus maridos", con esta cita Dradi
presenta un rasgo de las mujeres Chayahuita (región Loreto, provincia Alto Amazonas,
distrito Cahuapanas). Otro ejemplo que hasta hoy perdura es el consentimiento que la
madre debe dar para que la unión de su hija se formalice, esto tiene un componente
importante cuando de establecer relaciones extrafamiliares se refiere. De todas formas no
se puede exagerar pretendiendo que la situación de las mujeres era bastante destacada,
pues pese a toda una serie de estudios que se dan con el fin de hacer notar que la mujer
tiene un lugar de reconocimiento justo, en ningún caso podría afirmarse que sean las
mujeres las que encabezan abiertamente el mando familiar.

Una de las autoras que más estudió el tema femenino y de la Amazonia general es
Jeanine Anderson, ella manifiesta que los estudios sobre la Amazonia y sus habitantes han
versado más sobre la adaptación ecológica de los grupos nativos , su artículo: "Sistemas
163

de género e identidad de mujeres en culturas marcadas del Perú", (marcadas, para ella, son
esencialmente del Ande y la Amazonia). Anderson nos proporciona una síntesis de las
relaciones de género en la Amazonia, y para ello enfoca cuatro aspectos:
• Los sistemas de parentesco en la Amazonia
• El matrimonio
• Las actividades de subsistencia: Grupos de hombres y grupos de
mujeres.
• La solidaridad intragénero y la hostilidad inter-géneros .
164

En el primer acápite la autora señala que en el aspecto cultural Las reglas de


herencia son poco relevantes, es más, las reglas matrílineal o patrilineal no llegan a ser muy
importantes, en realidad se adecúan a las necesidades de la "comunidad", digamos mejor
al grupo que necesita de las relaciones sociales como garantía de sobrevivencia.

1 6 3
Anderson, 1990.
1 6 4
Anderson, 1990.

139
Es precisamente esta forma de vida, que traspasa las llamadas costumbres, la que
le permite adecuarse a los cambios como consecuencia de la aculturación que deviene de
los proyectos de desarrollo.
En cuanto al matrimonio Anderson descubre tres prácticas matrimoniales, la
posibilidad o no de elegir al esposo, y la poligamia" , como velo de todo, el
165

"intercambio de mujeres". Las mujeres son en este sentido, muy codiciados por su
trabajo en el cultivo de la chacra, en fin, lo que al varón le la daría la suficiente garantía
para establecer una familia independiente. Los hombres así se sienten en la obligación
de demostrar a sus mujeres que ellos pueden otorgarle seguridad y que son eficientes.
Los matrimonios por lo general no son conformados por la voluntad de los novios, en la
mayoría de los casos las personas y/o jóvenes tienen que sujetarse a la voluntad de los
padres, es decir aceptar La mujer a determinado joven por esposo. El futuro esposo no
necesariamente tiene que ser desagradable para las novias. Aquí, el amor romántico, a la
manera occidental no cuenta para nada. La poligamia es casi insignificante, y en esos
casos las mujeres aunque no comparten la misma cocina y habitan distintas casas, tienen
buenas relaciones.
Sobre las actividades de subsistencia, el punto de los grupos de hombres y grupos
de mujeres es muy interesante, la autora resalta como los trabajos de ambos en la
Amazonia también están divididos, además de sexualmente, en términos especiales. Así,
las mujeres trabajan en el hogar, acompañada de sus familiares, cuñadas, y ellas mismas
manifiestan que así realizan el trabajo de manera más llevadera. Por otro lado los hombres,
realizan tareas como la caza y La pesca; y en el día, los trabajos asalariados. De esta manera
el bosque "les pertenece" y las mujeres que ingresan solas corren un riesgo de ser
asaltadas por un grupo de hombres. Haciendo una generalización extrema menciona: "El
bosque es, finalmente, escenario de la expresión más extrema que conoce la Amazonia de
hostilidad entre hombres y mujeres: la violación por un grupo de hombres a la mujer
culpada de penetrar los secretos del culto masculino" . 166
Esta división, se encuentra
reforzada además por la notable dificultad que encuentran los hombres para salvar esta
situación (actualmente, se entiende). Ellos a veces son contratados de forma estacional a
otros lugares alejados de sus familias y no pueden Llevar consigo a sus familias, en este
caso el costo alimenticio no puede ser cubierto por los ingresos de los hombres, las
mujeres cuidan los cultivos, amén de la negativa salir del grupo, y privándose ellos de la
ayuda-compañía de sus compañeras.

La solidaridad intragénero, se manifiesta a pesar de los ritos que entre hombres y


mujeres realizan para revalorizar su función reproductiva. El más interesante es aquel que

1 6 5
Anderson, 1990.
i " Andersonb, 1990.

140
se suma en los diferentes mitos que justifican la subordinación de las mujeres, porque
alguna vez en el pasado ellas tenían el control de la comunidad, el poder, del que hicieron
uso y abuso. Así, los hombres tuvieron que ejercer el control y la dirección del grupo.
Asignadas las obligaciones, una forma de intercontrol es la constatación de que
los alimentos necesarios no carezcan, un ejemplo tomado por Anderson de los sharanahua
que proviene de la dependencia mutua social y económica que permite la expresión
abierta de hostilidad (cita de Janet Siskini, extraída por Jeanine Anderson) . El ejemplo
167

muestra como las mujeres controlan el ingreso de la carne en la dieta alimenticia, si acaso
este nutriente faltase por más de tres ó cuatro días, ellas montan una rebelión que en sí es
un desafío a la capacidad de los hombres para poder cumplir con sus obligaciones. Su
reclamo es público y el reto también, y empieza una serie de competencias entre hombres
y mujeres, fiesta y baile, es en este tipo de actividades, en el que los hombres salen
airosos; y al día siguiente los hombres salen en grupos a cazar. En realidad lo que se busca
es dar ánimo, retarlo en el mejor sentido.

A través de esta explicación Anderson destaca la diferencia más predominante


entre las mujeres campesinas y nativas, las primeras tienen un papel más amplio con
respecto a la familia, por añadidura la relación entre hombres y mujeres en los campesinos
es de complementariedad; y además una esposa es casi el núcleo afectivo a toda la familia.
Mientras tanto las nativas tienen otro tipo de relación un tanto más igualitaria, y además de
oposición, si bien existe subordinación esta no es tan aplastante, la familia en la Amazonia
responde más a la comunidad, al grupo que al núcleo doméstico, la fuerza la impone la
familia (con parientes y adultos) no necesariamente el hombre a su libre voluntad, incluso
una decisión de ese tipo debe contar con la aprobación general, los núcleos familiares
dependen uno de otros para sus subsistencia, y es en este marco que las relaciones de
género también pueden favorecer a las mujeres.

Anderson manifiesta que el rol maternal en la selva amazónica está poco


elaborado en el plano simbólico (no hay en la mitología amazónica una figura sumatoria de
la maternidad como, la pachamama andina) , la mujer amazónica es sobre todo esposa
168

con todo el valor que por su trabajo y el status puede agregar a un hombre. Las mujeres al
casarse resaltar sus atributos femeninos, sobre todo la capacidad de reproducción. El
matrimonio expone a la mujer a ser vista como "una clase de ser radicalmente diferente
(del hombre)" . Pero este tipo de relaciones que el matrimonio ofrece, con el paso de los
169

años y la aculturación está desapareciendo; y los hombres, por efecto de los cambios que
han hecho resaltar a las mujeres económicamente en base al comercio de sus artesanías,

i " Anderson, 1990.


'se Anderson, 1990.
i t ' O r t n e r , 1979.

141
están poco a poco dejando de lado sus obligaciones. El alcance político que antes tenían
los hombres como autoridad está decayendo. Esto se nota y afecta a las mujeres por
cuanto los representantes capitalinos otorgan de antemano a los hombres una serie de
facultades como jefes, "ya". Así este poder que ejercen sobre las mujeres hacen de estas
sujetos de una serie de arbitrariedades, cuando por ejemplo disponen de ellas para ser
llevadas a ambientes urbanos y es en esos términos, que sólo bastaría "una hebra rota"
para que quede desprovista del reconocimiento de una serie de valores morales y
culturales, próxima a parecer o convertirse en una prostituta en lugares desconocidos para
ellas, así uno puede imaginarse la serie de experiencias negativas que marcarán su vida en
adelante, que más tarde dificultarían su aceptación plena en uno u otro de los ambientes
asignados.
Generalmente hablar de este tema con mayor profundidad a los antropólogos, si
se quiere profundizar a cada comunidad en particular. Pero no todos los ejemplos
mencionados pueden ser generalizados en la Amazonia, en los últimos treinta años este
panorama ha cambiado muchísimo y difícilmente se encontrará una comunidad privada de
algún tipo de contacto con la colectividad nacional, el Perú oficial.
Un aspecto cultural que jugó negativamente a las mujeres malas experiencias,
tiene que ver con los primeros años de interrelación entre el Ande y la Amazonia.
Ejemplo de ello, es lo que percibí personalmente en Tingo María, en 1984 fui a una feria
dominical, un mercado en el que vienen comerciantes de distintos pueblos, entonces vi a
dos mujeres vendiendo artículos de artesanía shipíba, vistiendo indumentaria "mixta" es
decir con diseños shipibos y tela sintética entusiasmada por los objetos que compré,
algunos collares, pregunté por su elaboración, y asumiendo que eran shipibas Les
pregunte; «¿Son ustedes shipibas? Entonces deben conocer a Cecilio Soria (entonces un
joven dirigente Shipibo en Lima)», ignoro si entre ellas se denominaban de otra manera,
si la pregunta les pareció invasiva o querían negar su etnia, pero una de ellas aunque
reconoció conocer a La persona y decirme donde se encontraba, respondió que era de
Tingo María; luego pregunté a otros vendedores si ambas eran shipibas y estos me
respondieron que sí, que solían venir cada fin de semana a vender sus collares, tejidos y
objetos de cerámica y otros utensilios. Posiblemente estas mujeres ya habrían sufrido las
primeras manifestaciones discriminatorias culturales o habían sido advertidas de alguna
ingrata situación. Se puede observar que Las mujeres nativas en Las ciudades reciben un
trato equiparable al de las empleadas domésticas, no gozan de mínimas garantías que les
asegure un trato justo y/o al menos disponer de un día al lado de los suyos. Las
domésticas de origen andino tienen cierta ventaja frente a las indígenas, porque tienen
una red cultural que Las acoge (conos populares marginales); por el contrario las mujeres

142
indígenas no la tienen, porque los posibles vínculos están muy lejos de ellas, y el acceso a
su tierra, desde ya, no es fácil, ni hablar de las que llegan en este estado a las ciudades de
la costa. Ese desarraigo las coloca en una situación de esclavas. No es difícil recordar
que en cierta ocasión al encontrarme con el dirigente Cecilio Soria en 1984, me informó
que uno de los problemas más urgentes era el de poder establecer conexión con los
jóvenes que habían salido de la comunidad con el pretexto de mejorar en las ciudades
(estudiar), y que a la postre solo sabía que ellas que no trabajaban con agrado, no
estudiaban, por último, les había perdido el rastro. El número había crecido y se temía
que hayan sido utilizadas en el mercado sexual. Situaciones que se podían generalizar en
los años 1980, considerando que la comunidad shlpiba gozaba de un grupo dirigencial
recorrido ante otros organismos formales.
Sobre estos fenómenos debe ponerse énfasis en los cambios sucedidos a partir de
1969 hasta 1979. A decir de Michael F. Brown, en base a la experiencia aguaruna:
"Es difícil describir la vida típica sin caer en afirmaciones generales a
través de palabras como Yisualmente', 'La mayoría de las personas'" etc.,
lo cual conduce a una distorsión de la realidad. Este problema es aún
más grave en el caso Aguaruna porque las transformaciones sociales han
sido tan rápidas que la niñez en el año 1979, es muy diferente a la niñez
de 1969" .
17d

Este autor resalta esta diferencia y circunscribe su trabajo entre 1977 y 1978.
Rescata que es precisamente la etapa de la adolescencia la que sufre los mayores cambios.
La capacidad de aprehender del medio la ínterreíación que existe entre cada uno de los
ritos pre requisitos para llegar a la adultez, así como las obligaciones de género se han ido
perdiendo. Pensemos en el uso del tabaco, las alucinaciones. "El adolescente sí sigue
aprendiendo del mundo, pero el proceso es menos intensivo y su papel no bien definido.
La participación en ritos tradicionales ha terminado en todos los grupos de la sociedad
aguaruna" . La disciplina se va perdiendo y; por otro lado los más viejos los desconocen
171

son "locos", Brown observaba que estos jóvenes tenían la intención de trasladar la
tecnología y avances que la cultura occidental les mostraba, pero no podían explicar muy
bien, la utilidad final que le darían a ellos sus hermanos, estaban confundidos. Llegando a la
adultez estos jóvenes se tendrán que casar y como es general en las comunidades nativas,
debían residir en la casa de la esposa.

Las mujeres en este caso no pasan por ningún ritual específico para pasar de niña a
mujer y de soltera a casada, por otro lado, son las mujeres las que se presentan como las más
conservadoras culturalmente y esto se debe a que ellas son las que permanecen al interior de
la comunidad mientras que los hombres tienen contratos de trabajo y otras formas de

i " Brown, s/f.


Brown, s/f.
1 7 1

143
interrelación con los centros urbanos,, y los rústicos dedicados a la producción a escala
(agricultura comercial).

Brown menciona, que "desde el punto de vista aguaruna, las cualidades más
buscadas en una mujer son en orden de importancia:

1) que sea trabajadora, que sepa cultivar la chacra y crie animales


domésticos.
2) que no tenga un historial conocido de aventuras amorosas.
3) que sea atractiva físicamente.

Estas cualidades reafirman lo asegurado por otros autores, como Anderson, que
destaca sobre todo a la esposa por tal, como trabajadora y que sea un respaldo para el
esposo en lo moral esto frente a los "aportes" de la cultura occidental). Lo afectivo pasa, a
decir de ambos, a segundo plano, resaltando que entre los aguarunas el matrimonio es, tal
vez, más forzado, y muchas veces las mujeres amenazan con el suicido. Entre Las objeciones
que los candidatos a suegros pueden interponer contra la futura nuera y/o yerno son las
malas relaciones que ambas familias puedan tener, la incapacidad de los novios para cumplir
con sus contribuciones económicas y la ociosidad.

En otro plano, lo que a los hombres no se les puede pasar por alto es que tenga
otra esposa, el padre de la novia le reclamará porque no tendrá tiempo para servirle. Pero la
objeción se ciñe teniendo en cuenta la etapa reproductiva de la mujer. Otros son el ser
demasiado jóvenes o ser primos paralelos. En la actualidad, los matrimonios entre los
aguarunas, del Alto Mayo por ejemplo, no cumplen con los rituales tradicionales.
Una de las consecuencias de la aculturación es el desencuentro que existe entre la
moral indígena de la Amazonia y la occidental, el más resaltante nos descubre que, normas
como no matar, no hacer brujería, no robar, etc., entre Los aguarunas se extiende a la familia y
parientes, mas no con los enemigos; para ellos comportarse mal con estos últimos no tiene
nada de malo, y Brown concluye; "Así que la moralidad aguaruna no es universal, sino
limitada a la red extendida de parientes" . 172
El autor además menciona un Reglamento
interno de la Comunidad; de la comunidad aguaruna del Alto Mayo, en la que se destaca
como de los once ítems nueve son referidos a los asuntos matrimoniales (tomar a una mujer,
soltera, casada, seducir a jovencitas con engaños de matrimonio, etc. y solo dos
corresponden al plano laboral (peleas y ausencia laboral).
Cuando los autores se refieren al aspecto mitológico y religioso se hace necesario
recordar que en ello radica una serie de creencias que se cruzan entre sí. Que van desde las
creencias propias de los nativos, como el chamanismo, la curandería, tas almas que, ellos
afirman tienen todos los seres animados e inanimados; hasta el cristianismo que les han
hecho cambiar no solo hábitos culturales, y que reconocen no solo procede de los católicos,

i " Brown, s/f.

144
sino que han sido protestantes los que les han dado nuevas pautas y costumbres efectivas,
tanto que en una comunidad entera dejó de tomar masato en 1978. Considerando la
importancia que esta bebida tiene en toda la Amazonia, se puede tener una idea del grado
de influencia de esta concesión, cuya raíz está en el Instituto Lingüístico de Verano que se
encargó, de adoctrinar y formar maestros bilingües en su centro de Yarinacocha que ya
contaban en los años setenta con nuevos testamentos en lenguas nativas. Esta labor
proseLitista fue menos intensa a fines de esa década, ya entonces habían logrado que la
mayoría se reconozca como cristiano. No encontró en este sentido el autor conflictos entre
los "aguarunas católicos" y los "aguarunas evangélicos", y esto debido a la ausencia de
actividades misioneras católicas.

6.3. Sexualidad y salud

El tema de la sexualidad entre Eos nativos, según Brown, es tratado de manera más libre que
entre otras culturas en el Perú, no es extraño encontrar entre las mujeres hablar de ello con
otras que tienen experiencia y esto se manifiesta sobre todo en la música y en el baile. Como
en todas las sociedades, entre los aguaruna es la oportunidad del galanteo y otras
manifestaciones sensuales y amorosas. Lo interesante es que en este caso los hombres a la
hora de danzar lo hacen entre ellos y lo mismo las mujeres, los hombres danzan alrededor de
la casa y las mujeres se reúnen al centro y charlan sobre temas graciosos y galantes. En
ocasiones bailan parejas de hombres y mujeres (¿será influencia foránea?). El autor nos
presenta el siguiente gráfico:

HOMBRES- <-

O O
MUJERES

MUJERES

-HOMBRES

Dirección de los movimientos de hombres y mujeres durante el baile.

Fuente: Brown, s/f.

145
También, algunas de las canciones más comunes, por ejemplo.

CANCIÓN MASCULINA CANCIÓN FEMENINA


j á n b u y á m a i y á n u (estribillo) (Cantora: Lucila Jiukam Tsapik,
Dije, "Me quedaré sin hacer nada" Huascayacu)
Pero no lo hice. já j e j a je (estribillo)
"Mi pene no escucha, no escucha, Quise al hijo del tucán (i.e. un esposo alto)
se levanta, se levanta. pero agarré al hijo de la paloma (i.e. un
Dije, "voy a ayunar", esposo bajito)
pero no lo hice. Unito he tenido (i.e. un hijo)
Mi pene no escucha, no escucha, di a luz unito
se levanta, se levanta. Para el soldado pequeño,
Dije, "iré a Moyobamba a estudiar", hice un hermano (i.e. tuvo un hijo más).
pero mi pene no escucha, se levanta.

Fuente: Brown s/f.

Lo que debe destacarse es que el estribillo es el mismo en todas las canciones


para los hombres (jánu yámai yánu) y para las mujeres (ja j e ja je), los que no tiene un
significado especial. Presentamos estas que tienen la mayor carga erótica porque así
podemos comprender como esta liberalidad para con el tema puede tener un significado
para los foráneos, la idea de que la mujer de la Amazonia es "ardiente". Las costumbres,
entre tanto, se amestizan. Sucede que en las fiestas se observa que hacen uso de discos (en
los años setenta) e interpretan canciones populares, esto dura hasta que las baterías se
gastan, después se sigue la fiesta con las canciones e instrumentos tradicionales hasta el
final. Podría hablarse más, de las canciones mágicas (llamadas ánen) que también tiene
una variedad referida a temas amorosos, como el de pretender que el esposo no consiga
otra esposa, o simplemente para que no la olvide ni la compare con otra en los viajes que
estos realizan fuera de la comunidad.
La salud es un factor muy importante a considerar, si nos remitimos a las
estadísticas, se observa que las comunidades indígenas tienen un alto índice de
desnutrición, las enfermedades son más calamitosas; y por último, las mujeres son Las más
afectadas. Sobre las mujeres nativas específicamente recae el índice de natalidad más alto
sobre toda la representación peruana. Todas estas consideraciones podrían ser tomadas
como el reflejo del tremendo atraso que existe entre estas culturas, pero esto no quiere
decir que estas cifras se deban a un descuido producto de la Ignorancia, ellos no ignoran
como hacerle frente a los nacimientos no deseados. Las cifras responden al ingreso de
nuevas enfermedades y/o trastornos derivados de la aculturactón, que en muchos casos
inhibe a los curanderos de practicar sus conocimientos so pena de caer en falta por aludir a
fuerzas mágicas. Aquellas costumbres que hacen que La población evite ciertas comidas
146
por períodos, respete ciertos tabúes; o que la dieta adoptada determine un desbalance que
no permita la armonía saludable entre la población y el medio (basura, etc.).
El control de la natalidad por ejemplo, antes de la intervención estaba
autocontrolada, más aun, tanto hombres como mujeres pueden tomar medidas para no
procrear, los hombres mediante zumos de Té sobre el pene para evitar el contacto sexual,
también puede lograr el efecto contrario; y las mujeres también en el caso de las aguarunas
poseen cuatro formas de control de la fertilidad: 1) suprimiendo la menstruación; 2)
previniendo el embarazo; 3) técnicas para inducir el aborto, y el 4) incremento de la
fertilidad en una mujer que desea concebir pero que no es capaz de ello" . Para poder 173

lograr su objetivo las mujeres recurren a diferentes plantas, mediante enemas y en casos
golpes en el vientre. Conocen incluso, las plantas que pueden hacer que la esterilidad sea
temporal y/o permanente.
Queda en cifras y realidades la situación que la aculturación ha dejado, temiendo
los nativos a las enfermedades que desconocen, a las que no pueden hacerle frente. Los
aguarunas, según Brown, perciben los cambios por el impacto que la carretera marginal,
esto ha ocasionado en la zona de estudio.
Es necesario cerrar este capítulo con una imagen general del entorno para situar a las
mujeres a través de las cifras proporcionadas por el INEI:

PERÚ: 1 9 9 3
C O M U N I D A D E S I N D Í G E N A S CENSADAS Y SU D I S T R I B U C I Ó N P O R C E N T U A L ,
SEGÚN D E P A R T A M E N T O S

COMUNIDADES INDÍGENAS
DEPARTAMENTOS Total %
TOTAL 1 145 100,0
Amazonas 149 13,0
Ayacucho 5 0,4
Cajamarca 5 0,4
Cusco 47 4,1
Huánuco 9 0,8
Junín 142 12,4
Loreto 427 37,3
Madre de Dios 23 2,0
Pasco 114 10,0
San Martín 15' 1,3
Ucayali 209 18,3

Fuente: Perú, INEI, 1994.

i " Brown, s/f.

147
PERÚ:1993
C O M U N I D A D E S I N D Í G E N A S CENSADAS
D I S T R I B U C I Ó N PORCENTUAL P O R DEPARTAMENTOS

Se debe tener en cuenta que se está hablando de un total de 299,218


habitantes aproximadamente, según el censo nacional de 1993 que equivale al 1.3% de
la población total del Perú. No es ni siquiera el 3% que equivale a los márgenes de
error de las encuestas p reelecto ra les, por ejemplo. Pero veamos cómo están
distribuidos entre departamentos más significativos:

La actividad principal que practican es la agricultura, esto representa el 88.9%


lejos le sigue la extracción maderera que es el equivalente al 9.9% y la caza con un
2.4% . 174

La educación actualmente se encuentra representada con el 66.4% con centros


educativos de instrucción primaria, el 17.1% de inicial y primaria, y en tercer lugar los
centros con instrucción inicial, primaria y secundaria que son el 8.8% . 175

' « P e r ú INEI, 1994 .


a

' » Perú INEI, 1994 . a

148
PERÚ: 1 9 9 3
P O B L A C I Ó N TOTAL DE LOS PUEBLOS ÉTNICOS M Á S P O B L A D O S

POBLACIÓN
PUEBLOS ÉTNICOS índice de
masculinidad
Total Hombres Mujeres

Total 100,0 100,0 100,0 107,7

Aguaruna 21,9 21,4 22,5 102,4

Campa- Ashanin Ka 19,7 20,1 19,2 112,3

Lamas-Chachapoyas 10,9 11,2 30,6 113,3

Shipibo-Conibo 9,8 9,8 9,7 308,8

Chayahuita 6,7 6,4 6,9 100,4

Cocama-Cocamiila 5,2 5,2 5,1 109,9

Quichua-Napo-Pastaza 5,1 5,1 5,2 106,6

Machiguenga 4,2 4,1 4,3 104,2

Amuesha 3,4 3,5 3,3 116,5

Huambisa 2,7 2,6 2,8 101,4

Campa Nomatsiguenga 2,7 2,7 2,7 107,5

Actual 2,3 2,2 2,4 100,3


Campa del Pichis 1,9 1,9 1,9 112,1

Campa Pajonalino 1,9 1,8 1,9 106,4


Yagua 1,7 1,8 1,6 120,1

Fuente: Perú, INEI, 1996.

Un rasgo que es común en todas las comunidades es el alto índice de


masculinidad entre la población indígena, y no hay excepción, sino veamos este cuadro
que explica el por qué las mujeres son tan cotizadas (cuadro anterior) todos los índices
superan el 100.0 encabezando la lista los Yagua con el 120.1 (Loreto-Maynas), seguidos
por los Lamas-Chachapoyas (San Martín) con el 113.3. No solo los nativos de la selva
norte padecen este fenómeno, también en el centro, los Campa del Pichis con 112.1, así
como los Machiguenga del Cuzco y Madre de Dios con el 104.2. Según el mapa
etnolingüístico existen 72 etnias y catorce familias lingüísticas, el censo de 1993 sólo ha
podido contar 48 pueblos étnicos, de ellos se tomó quince para el cuadro de población e
índice de masculinidad.

149
En la Amazonia la alta tasa de fecundidad de las mujeres en la Amazonia es
patente, la Tasa Global de Fecundidad (TGF) es de 3.4 para el promedio nacional y de 7.9
para los grupos étnicos, esta última cifra supera con creces el promedio de los ámbitos
rurales que es de 5.6. Recordemos que son promedios, pues el caso de los Huambisa y
los Quichua-Napo-Pastaza alcanzan con facilidad los nueve hijos por mujer.
Desgraciadamente esta alta tasa no se traduce en un crecimiento de la población
indígena, por el contrario, los niños son los que conforman el más alto número de
fallecidos de los 4 065 según el censo de 1993 (en un año), 473 es decir el 11.6% son
menores de tres años. Si agregamos a los de cuatro a nueve años, tenemos que, de cero
a nueve años conforman el 18.3%.

Se piensa que la educación es la que otorga ios mecanismos para lograr una
mejor calidad de vida, hemos visto que los pueblos indígenas cuentan en la mayoría de
los casos con centros de instrucción primaria (66.4%) pero, a pesar de esto, estos no son
para nada eficaces en la reducción de fecundidad, solo varía con la instrucción
secundaria, pero llegada la adolescente pronto las mujeres establecen una familia. Así lo
demuestra el cuadro a continuación:

PERÚ: 1 9 9 3
TASAS GLOBAL DE F E C U N D I D A D DEL PAÍS Y DE LOS PUEBLOS ÉTNICOS
M Á S P O B L A D O S , P O R NIVEL DE E D U C A C I Ó N A L C A N Z A D O

NIVEL DE EDUCACIÓN TOTAL PUEBLOS ÉTNICOS

Ningún nivel 5,8 8,3


Primaria 4,9 8,5
Secundaria 3,1 5,5
Superior 3,7
No Universitaria 1,8
Universitaria 1,6
Total 3,4 7,9

Fuente: Perú, INEI, 1996.

Sería necesario que la introducción de la instrucción y otro tipo de cambios


culturales vaya de la mano con Los servicios, en este caso el tipo de personal de salud en
las comunidades, sea mayor, ya que en número son 902, para casi el total de 300 000
habitantes de los cuales, el 45% son promotores de salud y el 53.6% otros sanitarios y

150
curanderos, tan solo el 2 . 1 % lo conforman los médicos. Es decir un médico para 15 000
indígenas. Son cifras de 1993.

La situación de las mujeres en la Amazonia pese a todos sus problemas pone de


manifiesto toda su capacidad de adaptación a prueba, a pesar de su escaso número, han
sido capaces de hacer llegar su presencia al resto del país su presencia. Vale decir que
cualitativamente tienen en sus manos la perdurabilidad de su cultura, depende de que los
organismos estatales se aboque a ello, para no perder toda su cosmovisión que registra a
más de la mitad del territorio nacional.

151
7. LA MUJER DE CLASE MEDIA

Hablar de las mujeres de


clase media en el Perú
es un tema muy
interesante a pesar de
que ta bibliografía sobre
este grupo social en
materia sociológica no
sea abundante y no se
compare con el que
corresponde a las mujeres de los sectores urbanos populares, Lo que se puede rescatar de
estos últimos libros, es un negativo. A través del discurso de los libros acerca de las de
clases populares abordados por las escritoras e investigadoras, que por lo general son, de
la clase media, es notable que colocar a sus congéneres en un plano inferior, sobre todo en
la década del setenta. Con la mayor ingenuidad, a pesar de tratar de esforzarse por
servidas y reivindicarlas, las convirtieron en sus conejillos de indias, en una forma de dar un
sentido a sus vidas como mujeres instruidas y poder acceder a un ingreso generoso por
parte de las ONG. La clase, en estas décadas del sesenta y setenta tenía requisitos que
sobrepasaban las exigencias sobre ella imperaban inquebrantablemente las variables
económicas y culturales, que incondicionalmente valoraba el mundo cosmopolita
occidental.

En los ochenta esta perspectiva se ve un poco transformada y esto se debe acaso


a la participación que tuvieron unas y otras en el desarrollo de los proyectos que afectaban
a estas últimas directamente. A fines de los años ochenta, la clase media sufrió una serie
de transformaciones como correlato de la crisis económica, que propicio la emigración de
sus miembros más aptos como una medida de emergencia a fin de no diluirse en el trance
de la década perdida, se decía que "Alan García desapareció La clase media (tradicional)".
Lugar que fue ocupado por los sectores emergentes ingresando a las instituciones públicas,
y cuando no abriéndose paso en el mundo empresarial de manera formal, o informal por
cuanto las normas no respondían a la nueva sociedad. Así la clase media ya no fue el
grupo identíficable de los años sesenta. En los últimos años las personas que conforman

152
esta ciase han variado en mucho en todos los aspectos. La nueva clase media no tiene un
rostro étnico con márgenes diferenciados y el desplazamiento del poder a otras clases
socioeconómicas ha abierto una brecha a la "tradicional" clase media limeña. El
incremento de profesionales en los sectores populares ha dado lugar a una apertura en la
composición actual de la clase media (narcotraficantes, profesionales, pequeños
comerciantes, informales, empresarios con "visión" y, en un número nada despreciable
aquellos que llegaron al poder político por medio de los procesos electorales.
Las mujeres como los hombres también han accedido a los sectores medios por
estas mismas vías, pero con un componente que se va haciendo cada vez menos
representativo, el matrimonio conveniente.
Las palabras del primer párrafo estuvieron dirigidas a considerar la enorme
diferencia que existía entre los trabajos de uno y otro grupo de mujeres, y también refleja
una ideología que no pudo ser abandonada a pesar de las ideas de izquierda que
proponían una sociedad diferente y democrática. Recordemos por citar un ejemplo la
incomprensión de José María Arguedas entre su propio grupo intelectual.
Pero ¿qué cabe decir cuando se menciona a la mujer de clase media en el Perú a
mediados de los años noventa? Es fácil poder hacer una división entre aquellos sectores
populares urbanos (conos de Lima Sur, Norte y central) y los barrios residenciales (La
Molina, Surco, San Isidro, Miraflores, Monterrico y San Borja) que albergan a los integrantes
del grupo dirigente del Perú. Pero esta división geográfica política en el caso de Lima y
que debe reproducirse en el interior del país, que convierten al resto en el sandwich de la
clase media, no guarda entre ellos la homogeneidad que la caracterizaba en los años
sesenta es decir social, cultural y económicamente. Actualmente el componente
económico es el que decide una condición de clase media bajo otros parámetros.
El proceso migratorio, los vaivenes de las crisis económicas, que han díreccionado
los polos de enriquecimiento a zonas límite con la ilegalidad no han hecho sino hacer más
compleja la ubicación de este sector social.
Pero a pesar de que la clase media no goza de material abundante, tenemos
algunos muy pertinentes en el mercado; el de Maruja Barrig, Cinturón de Castidad: La mujer
de ia clase media en el Perú , 176
el de Jeanine Anderson, La mujer de la clase media
limeña , 177
que junto a Teresa Burga y Marie France Cathelac, Perfil de la mujer peruana,
1980-1981 * nos ofrecen en líneas generales aspectos del nivel de vida de la clase media,
17

siendo las últimas las que nos ofrecen un perfil de este tipo de mujeres hasta la década del
ochenta.

1 7 6
Barrig, 1979.
1 7 7
Anderson, 1981.
1 7 8
Burga/Cathelac, 198i.

153
Otro investigador que ha trabajado acerca de la clase media en general es
Gonzalo Portocarrero, "Las fantasías de la clase media" , "Las clases medias en la
179

imaginación popular" , Portocarrero hace mención sobre todo a la forma que esta clase
180

adopta para ubicar a determinados grupos sociales, y abordar una actitud sobre ellos. Lo
Interesante es que a través de esta investigación nos podemos ubicar desde su punto de
vista, con sus miedos y sus proyectos.

Norma Fuller Osores es una antropóloga que ha sabido captar el proceso que la
mujer de clase media ha sufrido en estos últimos años . A diferencia de Portocarrero, que
181

nos habla de la clase media en general y que nos lo ofrece por la vía de encuestas entre
jóvenes universitarios en que las preguntas son sobre todo coyunturales (terrorismo,
violencia, los conos populares), Fuller nos ofrece un panorama un tanto siguiendo las
propuestas de las feministas, aquella que tiene que ver con las raíces comunes como son la
educación, el derecho al voto y la libertad del uso del cuerpo de la mujer (entiéndase
control de la natalidad). Pero lo importante es que se ubica dentro de aquellas que han
cambiado como todas pero sin hacer prédica de la lucha feminista, es decir aquellas que
han logrado éxitos por la vía del trabajo, no sin dificultades, y que han sido parte de la
ciase media "tradicional".

La misma Norma Fuller nos da un ejemplo de descripción de las mujeres de clase


media. Haciendo hincapié a los estudios de Jeanine Anderson 182
que consideraba a la clase
media como una clase pequeña y sin identidad, Norma Fuller opina que esto bien podía
afirmarse hasta la década del sesenta y considera que en Eos últimos años esto ha
cambiado sustancialmente. Y esto lo sostiene al verificar que la acción democratizante
difundida por los medios de comunicación no pueden sino hacer que los que antes se
denominaba clase media haya cambiado mucho cuando ya no son el grupo de
profesionales reconocido por sus apellidos y que pertenecía a determinado grupo étnico . 183

Las mujeres también han sido objeto de estos cambios pero guardando hasta hace poco
valores que defienden sobre todo el honor y la familia. Adaptándose a la nueva sociedad y
siendo parte de esta nueva clase media que ya no aspira como antes a formar parte de la
aristocracia, sino que se aploma como un sector de costumbres urbanas y que de alguna
manera busca estereotipos para emularlos de manera que los diferencia de las clases
populares.

Portocarrero, 1985.
1 7 9

Portocarrero/Arrieta, 1985.
1 8 0

> ' Fuller, 1988 y Fuller, 1993.


8

• Anderson, Í 9 8 I .
a2

Portocarrero, 1985.
1 8 3

154
Sin embargo, a pesar que todo esto, es algo conocido por Fuller, no tenemos a
bien un parámetro de los que podemos definir como clase media en nuestros días. La
clase media puede ahora diferenciarse en clase media baja y clase media alta socialmente,
por otro lado en términos económicos también Las hay, y no necesariamente guarda los
valores de eficiencia, formación, y estilo de vida. Ciertamente este concepto de clase
media puede ayudarnos a comprender el sector urbano profesional con capacidad de
decisión en círculos subalternos y por qué no al 100% en el caso de aquellos que han
cruzado el puente de la pequeña empresa.

Entre las mujeres se observa que en las universidades nacionales, a partir de la


década del setenta, el componente provinciano que seguía carreras liberales, que hoy está
ubicado en cargos expectantes en el sector público, cuando estudiantes, tenían como meta
ascender en la escala social mediante el estudio. En los ochenta, ante la pregunta que
debía revelar su extracción social muchas contestaban el sector medio, y para ello bastaba
su condición profesional o, la de uno de los miembros de la familia. Es sabido que la clase
media tradicional no acepta esta mera calificación. La movilidad social que es una
característica nueva de la sociedad peruana, ha hecho que esto se modifique. Pero a todo
ello Norma Fuller si tiene una definición muy pertinente:
"En este sentido, si me parece posible hablar de una cultura de
clase media. Esto no implica afirmar que sus componentes sean
completamente diferentes a como fueron hasta hace unas décadas
o que carecen de un grupo de referencia a imitar, sino que se definen
de un grupo de referencia a imitar, sino que se definen por sí mismos
por lo que son o creen ser, y no por su semejanza a la élite
dominante" . 184

Así, su definición torna a la clase media más amplia, ella (la autora) corresponde a
la clase media alta, la que corresponde a los años sesenta, probablemente ella misma sea
portadora de las opiniones que al interior de su clase puede obtener de sus congéneres.
Precisamente ella elabora su Libro basándose en este grupo de mujeres con éxito. Las de
clase media-media y media-alta que corresponden a dos generaciones (un primer grupo de
37 a 47 años) residentes en San Miguel, Surco, Miraflores, San Isidro, Surquillo, La Molina,
Barranco, Chorrillos y San Borja.

Según los resultados de sus encuestas ella puede apreciar que el componente
principal de su formación, amén de las costumbres de la familia, es la religión, y es la
generación anterior la que marca esta diferencia, al hablar Fuller del modelo mariano, se
puede ver como la formación de un colegio particular católico marca en definitiva (por
cuanto la clase media de su generación tenía como rasgo el enviar a sus hijos en una

•w Fuller, 1993.

155
escuela particular cristiana de religiosas) la conducta y parámetros morales que ponían de
manifiesto la importancia del rol de la mujer como educadora y formadora de la sociedad,
en cuanto madre.

Las novedades de la liberación femenina hicieron de esta generación la más


conflictiva, pues a pesar de que el modelo de realización personal fueron cuestionados por
las protagonistas de manera frontal (feministas), este quiebre de cánones tuvo su
consecuencia en el resto de mujeres "tradicionales", con el creciente número de divorcios,
la tardanza para tomar el estado del matrimonio, el tener como meta primera los logros en
el plano profesional y laboral. Este grupo tuvo que padecer la estigmatización social al
tomar una que otra decisión que no comulgaba con las costumbres seguidas por sus
predecesoras. A diferencia de estas, las de ía generación siguiente, el camino se les
presentó menos batallador, pues ya no es extraño que decidan tener una carrera (aunque
todavía esta sea de alguna manera la extensión de las obligaciones de las mujeres:
enfermera, asistenta social, educadora, o de la mano con otras cualidades como son la
belleza y la estética). Por otro lado, la ciencia ha hecho que muchos de los conocimientos
antes considerados propios en innatos de la mujer se vayan trasladando al campo de la
medicina y otras ciencias que se abocan a sí mismas la protección de la humanidad a
escalas "planetarias" (utilizando el término que Fuller aplica al tema de comunicaciones)
diseñando una serie de "recomendaciones" que ingresan a lo más íntimo de la crianza de
los niños.

Hay otro aspecto que diferencia sobre manera a esta clase de mujeres, es el
componente psicológico en todos los niveles de la familia. A diferencia de las mujeres de
los estratos populares, donde los problemas y necesidades giran en torno a la economía
familiar, no queriendo decir con esto que carezcan la clase media de problemas
económicos y al que dan suma importancia; pueden optar, asistir a los especialistas para
solucionar problemas y conflictos que se interponen en su carrera a la felicidad y
realización personal. Es este un gran espacio para explicar sobre todo Las transiciones que
las mujeres pasan en esta lucha por incorporarse a las distintas instituciones en condiciones
de equidad, el problema de enfrentar los privilegios que aún mantienen los hombres en el
plano laboral y social, causa frustración en varias de ellas.

SÍ bien antes habla un enfrenta miento de las de la primera generación (hoy entre
65 a 75 años), por abrir la trocha y, tal vez, enmarañarse entre el maniqueísmo que ellas
mismas generaron sin proponérselo (romper con la mujer objeto, demostrar la
competencia al margen de los atributos físicos casi estigmatizados); hoy, superado ello,
existe una coexistencia de los atributos femeninos con los éxitos profesionales, el ser bella

156
y hacer uso de esta cualidad se convierte en un pivote que ayuda mucho a las mujeres de la
clase media en el logro de sus ambiciones profesionales; la combinación de la seducción y
la eficiencia sin restar el componente maternal al cual consideran muy importante, y
además de metas en las que no tienen como enemigo a la sociedad, como en los sesenta y
setenta. Las mujeres de la clase media de los noventa enfrentaron las dificultades como
algo individual y establecen un plano un tanto más independiente, ya no son solo quejas,
sino que su óptica es la de continuar al frente por sí sola, los problemas son tomados como
desafíos para llegar al éxito, que a decir de Fuller se resume en cumplir tres exigencias:
pareja, maternidad y trabajo.

Es claro que esta tríada propuesta por Fuller está vigente, pero habría que añadir
algo más, aquella asociada al éxito laboral ha venido marcando un interés mayor en las
mujeres que tiene sus hijos y disfrutan de una pareja, que en definitiva no necesariamente es
padre de sus hijos, pues al conocer las leyes y saberse autos uncientes, logran garantizar la
educación y alimento de sus hijos sin ningún inconveniente, pero eso sí, les preocupa,
resolver los problemas psicológico que a veces se generan en los hijos al encontrar un vacío
al momento de reparar en la carencia del padre, sobre todo al llegar a la edad de la
adolescencia. Se tiene claro que en ese sentido los problemas a resolver giran en lo
existencial. Un problema que de ellas ha sido trasladado a sus hijos, pero que cada día va
dejando de serlo porque ya no son casos aislados.

Como correlato de este fenómeno la pareja resiente sus bemoles por la


resistencia que ofrecen los hombres a estos cambios protagonizados por las mujeres, y se
manifiesta en breves separaciones o hasta divorcios, debió a esta paulatina
independencia de las mujeres. Aún no pueden aceptar que ellas tomen decisiones
importantes en el hogar, la mujer no puede ser sino sutil, les molesta sobre todo la
independencia económica y también las de pensamiento, aunque ello está tomándose
poco a poco.

A pesar de tantas dificultades, la mujer de la clase medía podría repetir lo que


Cecilia Rivera (antropóloga) inscribe en su texto:

"¿Por qué renunciar a algo que me gusta para lograr lo que es mi


derecho? Ese pleito no era con los hombres, era con las mujeres. Es
más, por qué renunciar a algo, lo quiero todo. Quiero tejer y martillar,
cocinar, mandar. Quiero ser madre y compañera, si. Y también quiero
desarrollar en mi trabajo y tener las mismas oportunidades y
reconocimiento que cualquiera, hombre o [...]. Aunque, claro ser madre
y no supermujer. Pero eso sí, en ninguna circunstancia ni condición

157
quiero ser relegada, ignorada o subvaluada. Alabada y engreída sí, pero
dominada y usada, no" . 185

La pobreza en la clase media, entre los años ochenta y noventa es un tema que
no ha sido trabajado, a pesar de que la crisis ha golpeado con más rigor a las mujeres de
estas esferas y de la manera más cruel a aquellas que no habían logrado establecer
familia o no lograron éxito en el desempeño profesional. Son varías las causas, una de
las primeras es el divorcio o la separación, la otra, cuando les cierras las puertas de
incorporación social que le permita el acceso de oportunidades ó cuando esclavizadas de
sus estilos de vida, los recursos no les permiten sino la sobrevivencia y ver ante sí un
futuro incierto. La clase media no siempre garantiza un by pass a un nivel económico
alto, o asegura la vejez.

Según los estudios de Jeanine Anderson 186


sobre la feminización de la pobreza,
en que estudia al sector pobre entre los pobres, es decir las mujeres, permite hacer una
reflexión análoga respecto a las mujeres de clase media. Se afirma que en el gobierno de
Alan García empezó a desaparecer la clase media tradicional, en el Ínterin surgiría una
nueva clase media; entonces, ¿qué pasó con las hijas de aquella clase media tradicional?
No cabe duda que aquella debacle afecta más a las mujeres, según las encuestas de los
niveles de educación ofrecidos por Fuller, estas revelan que las ocupaciones en la que se
desempeñan son las que no guardan en sí mucho prestigio. Si bien sus entrevistadas casi
todas son profesionales, ella bien ha explicado que son precisamente las más destacadas.
Por lo general las carreras que ellas han comenzado no necesariamente son las de mayor
demanda en los centros laborales de altos ingresos, la condición empeora si no se
conoce al contacto adecuado, ello nos puede dar una idea de un grupo al que
pondríamos "ángeles del limbo", aquellas familias «decentes» 187
de flancos profesionales
y portadoras de un estilo de vida adecuado para presentarse en los círculos sociales de
élite, pero sin el componente financiero-familiar que en ios años noventa son tan
importantes. No es difícil oír "pobrecítas, tas hijas de don (...), si él estuviera vivo nada de
esto habría sucedido" refiriéndose directamente a las familias que carecen del padre de
familia, del "respeto", que frases que contradicen los avances de la lucha por desterrar el
machismo tan arraigado y que representa una imagen y valores que aún no se pueden
pretender fuera del contexto.

1 8 5
Rivera, 1993.
1 8 6
Anderson, 1993.
Lo decente, no se limita a lo honesto, justo y digno, en el Perú este concepto deviene en un adjetivo calificativo
de identificación visual, y es en ese sentido que se reclama, para legitimarle como tal, el poseer la piel clara.

158
Pese a ello, la etapa de reorganización social que aún no culmina , las mujeres
de la clase media actual y sus antecesoras han sido las abanderadas de estos cambios no
solo como ejemplo sino como copartícipes del cambio de todas las mujeres desde los
estratos más altos hasta los más deprimentes, el mensaje ya ha llegado a todas. Se debe
tener en cuenta, la frase de Fuller: "La clase media acomodada es, en nuestro concepto, el
sector que representa a la "cultura oficial peruana" , por cuanto es el modelo que se
189

presenta en todos los medios masivos de comunicación (publicidad gráfica televisiva),


estos cambios operados ideológicamente desde fines del sesenta no han concluido, hasta
hoy la clase media tradicional es aquella que aspira a tener un nivel de vida y valores de la
clase alta. Con sus dilemas, interesante será estudiarla en tanto su nuevo componente
provinciano popular, estilos de vida y valores.
A través de las entrevistas que Apoyo publicó el año 1996 en su revista Debate , 190

sobre un grupo de mujeres de la clase media (de profesionales reconocidas en sus


respectivas áreas), se puede tener una idea de cómo pensaban ellas en los 1990, por
ejemplo ante la interrogante ¿qué ha cambiado la mujer? Ellas opinan: que ahora pueden
elegir, que se encuentran mejor preparadas para optar en la vida, que han adquirido más
responsabilidad, que tienen mayor independencia económica; pero a su vez que ya no se
sienten tan protegidas, además la capacidad de controlar el número de hijos deseados les
ha abierto la oportunidad de poder ingresar al plano laboral de manera más libre, además
de considerar la década de 1990 como aquella que ha permitido la transformación integral
de todas las mujeres peruanas.
Según los datos ofrecidos por Apoyo para 1994 191
en el que se muestran aspectos
de la vida del ama de casa, se aprecia como ellas diferencian lo que consideran más
importante y lo que en sí tienen:

1 8 8
Si con Alan García la clase media empezó a perder el sostén económico que gozó en los años cincuenta y
sesenta del siglo XX, la década dei ochenta signada por la crisis económica y una guerra interna de grandes
magnitudes y después el schock de Fujimori en agosto de 1990 y el ingreso del libre mercado, parte de la clase
media colapso, no pudo mantener ese margen diferenciado con los sectores populares de manera meridiana, la
crisis económica hizo que sus miembros estén casi frente a frente con los sectores populares, es más, varios de sus
miembros menos favorecidos empezaron a desarrollar relaciones en términos de igualdad en el orden económico y
laboral (bodegas de pasteles, restaurantes, joyería, servicios de limpieza a domicilio, agencia de empleos domésticos,
pequeñas empresas de servicios, etc.) pues los puestos decorosos bien remunerados (no las labores administrativas
en las oficinas sino jefaturas y direcciones, etc.) pasaron sólo a sus miembros más competitivos (emergentes de los
sectores populares o clase media provinciana) y a las nuevas generaciones de los menos emprendedores de las
poderosas familias de la clase media alta.
La crisis es la razón de la novedosa corriente de movilidad social que empezó claramente a mediados de los años
noventa que no culminó con la llegada del siglo XXI, una movilidad social que bulle entre los sectores emergentes
de los sectores populares y la clase media tradicional, con algunos destellos de exitosos empresarios venidos de las
esferas populares que establecen relaciones comerciales y amistades profesionales con los de la tradicional clase
alta, pero que no significa pertenecer a ella, en otras palabras, considerarlos como candidatos para formar parte de
sus respectivas familias.
'85 Fuller, 1993.
"o Apoyo, 1996.
" ' Apoyo, 1994.

159
LIMA: OCTUBRE DE 1 9 9 4
IMPORTANCIA Y TENENCIA DE ASPECTOS EN LA VIDA DEL A M A DE CASA

+
1 Amistad
2 Amor
a Belleza
A Buen humor
5 Dinero
6 Educación 2 9
7 Éxito
3 Familia
9 Fe
10 Inteligencia -110 11
11 Salud
12 Sexo
13 S u e n e
14 Trabajo
11

Importancia
+
12 13

Tenencia

Fuente: Apoyo, Oct. 1994.

TENENCIA DE ASPECTOS EN LA VIDA DEL A M A D E CASA


- p o r N i v e l S o c i o E c o n ó m i c o (NSE) -

Fuente: Apoyo, 1994.

160
Si bien el gráfico cubre a los niveles socioeconómicos A B y C D el resultado entre
los diferentes tipos de mujeres coincide en señalar que lo más importante en la vida son la
familia, la educación y la salud; siendo el sexo y la suerte entre aquellos que eran importantes
en menor grado. En cuanto al NSE A, la amistad es tan importante como el amor, el NSE B le
añade a estos el factor de la fe. A diferencia de las clases C y D que ponen al trabajo y la fe
como las inmediatas a las tres principales. En cuanto a la tenencia lo que afirman tener es la
fe y el amor seguida de la familia, se puede apreciar que en el caso del amor los grupos A, B y
C y D responden casi de manera similar, es decir que lo tienen en igual medida, sin embargo
en los otros aspectos las diferencias se hacen ya de un margen, sobre todo en el dinero y la
suerte.

Lo que sí parece raro es que el sexo, la suerte y el dinero se encuentre entre


aquellos que poseen en menor medida, pero algo tan práctico como el dinero (que todos
ambicionan más y más) y tan ilusorio como es la suerte van juntas, debe ser explicado; sin
embargo, el componente sexual que no es un imposible en el promedio de las mujeres
peruanas se muestre entre los de menor tendencia acusa una insatisfacción al nivel más
íntimo. Para poder entender mejor este aspecto recurramos a Teresa Burga y Marie-France
Cathelat .192

LIMA: 1980-81

1 9 2
Burga/Cathelac, 1981.

161
Este cuadro está basado en una encuesta realizada en Lima entre 219 mujeres de
25 a 29 años casadas, unidas y solteras. En el resultado de estas autoras el 80.4% declara
llevar satisfactoriamente su vida sexual. Aunque hay más de una década de diferencia
entre los datos de Apoyo y los de Burga y Cathetat, este desencanto si bien puede
haberse tornado a un segundo plano por los otros problemas producto de la crisis
económica, creemos que la diferencia estriba en el papel de ama de casa. Ser ama de
casa hoy no siempre es una elección, es una asignación laboral que a final de cuentas
resulta en la clase media, gratificada por sus hijos. El rol de madre desplaza a la amante.
Lo que pronto amaina los deseos y demás necesidades de carácter sexual en las mujeres,
mientras que el esposo sólo se convierte en la fuente de seguridad familiar, ello puede
dar una explicación a los datos de Apoyo 1994. Este tipo de manifestaciones (herencia
del marianismo) influye sobremanera en otros factores que aún persisten en la plena
relación de estas parejas y que manifiestan las mujeres de clase media: "el alto grado de
incompatibilidad entre los ideales de entendimiento intelectual y espiritual", en otras
palabras, la comprensión.

Hablar de clase media, remite a varios rasgos psicológicos, de identidad. No cabe


duda que por ello temas como la feminidad , la imagen , los medios de comunicación
193 194

(por ejemplo: la revista Viva del Centro de la mujer peruana Flora Tristán, 1986) y de
género , en los cuales los efectos y la imagen social tienen alta importancia, tanto en sus
195

éxitos como sus fracasos sean materia de estudio. Esto se hace más patente en los casos
en que las mujeres llegan a terapia psicoanalítica , en los que destaca la formación en la
196

infancia, la influencia religiosa, y los cambios en la instrucción escolar frente a las relaciones
familiares y sociales de su entorno.

Por otro lado, se sigue con el componente cultural, el político, el jurídico legal,
esta vez no soto para afirmar los derechos de todas las mujeres, sino para estudiar
problemas que las toca personalmente, individualmente. He aquí la diferencia entre las
mujeres de la clase media y tas de las clases populares, a las primeras se las toma en
tanto individuo, persona, ciudadana; a las otras, por el movimiento, los clubes de madres,
como masa. Mientras las primeras tratan de ocultar sus fracasos, las últimas lo
denuncian.

1 9 3
Lemlij/Morales, 1992; Ureta, 1982; y Ureta/Iglesias, 1985.
' « S e n d ó n , 1986.
1 9 5
Lora, 1989.
1 9 6
Peña, Lemlij, 1994.

162
8. UNA VISIÓN DEL VASO DE LECHE

Frente a tantas versiones


del vaso de leche tenemos
la de Aida García Naranjo,
una mujer de conocida
trayectoria de la llamada
izquierda peruana, que tuvo
la virtud de conocer de
cerca las dificultades y las
ventajas que los llamados 4 V j
pueblos jóvenes viven. Ella
enseñó doce años como
educadora y fue dirigente
del Sindicato Único de Trabajadores de la Educación Peruana (SUTEP). Su hija y
experiencia, si acaso pudiera hacerse un recuento, tendría un sinfín de actividades que no
dudamos han sido trascendentales en Villa El Salvador (VES). EL mentado distrito te
permitió crecer políticamente al albor de la creación de los colegios con el esfuerzo de
los moradores (infraestructura al 100%); y también, la participación de las mujeres a las
que ella pudo, tal vez, impulsar.

Los centros educativos actuaron como centros de fortalecimiento y de


congregación de mujeres, las que más tarde, conociéndose unas a otras, formaron los
comités de madres para dar paso al comedor popular; ingresar como madres y ganar
experiencia en la organización, es ingresar por la vía de la educación, al Vaso de Leche, que
surgió un efecto positivo, también generó una suerte de disputas al interior no solo de la
población de VES, sino también al interior de los partidos de izquierda que luchaban por
comandarlos.

Si VES fue en los noventa líder de los pueblos jóvenes, se lo debe en gran parte
a esta ansia de "tener", y un lema conocido que era repetido por tirios y troyanos era
aquel que decía: "Porque no tenemos nada, lo haremos todo", (ojo, no "lo copiaremos
todo"). Las ganas y la voluntad de crecer hizo que efectivamente, Aída García Naranjo no

163
haya errado en escoger ese distrito para iniciar su labor proselitista. Llegó a ser la
regidora por la izquierda y tuvo a su cargo el programa del Vaso de Leche entre (1990-
93) e internacionalmente fue reconocida como ciudadana solidaria con otras instituciones
de corte social. Esto sin contar con su otra ocupación, la de ser cantante popular, es
decir, haber sido la directora y cantante del grupo Tiempo Nuevo (1975-93).
Personalmente recuerdo con que cariño los jóvenes veinteañeros de comienzos del
ochenta recibían con entusiasmo un concierto de Tiempo Nuevo, claro los que estaban
en las filas de la izquierda (que digámoslo, no representó la juventud de la mayoría de
VES, aunque, sí, eran los más "movidos").

¿Por qué es más importante mencionar a Aída García Naranjo? además de las
razones antedichas, el hecho de ser mujer y de conocer el carácter machista de la
izquierda de entonces, en la que las mujeres que decían ser militantes asumían
generalmente su segundo lugar después de los líderes (casi todos hombres), y que pesa
todo ello apostó por ser un ladrillo más, lo que equivaldría a salvarla de toda la oscuridad
de la izquierda y sus ulteriores intereses en VES. Más, cuando el libro, que se va a tratar,
no dejar de ser fiel a su entorno política. El libro se titula: Nosotras, tas mujeres del vaso
de leche 1985-1994 editado por ei Centro de Asesoría Laboral (CEDAL) al que perteneció
como directora, gerente y administradora y otra ONG, Radda Barner de Suecía, en 1994,
muy rica, a pesar de su conocida posición.

El libro consta de tres capítulos; el primero que trata sobre el panorama de


actualidad del gobierno de Fujimori, las mujeres y los niños; el segundo viene a ser una
relación ordenada de los distintos organismos antecesores que dieran lugar al Vaso de
Leche, acompañado de un balance; y el último, que recoge los testimonios del programa
del Vaso de Leche al interior de toda ta república con fotografías, cuadros, y gráficos.

En líneas generales trata de la situación a inicios de la década de los años de


1990 demostrarlo con cifras y destacar la lucha de las mujeres por la alimentación infantil,
la que se venía disminuyendo hasta comprometer a toda una generación. Todo
relacionado con la pobreza que estaba en ascenso y que iba en consonancia con la tasa
de mortalidad infantil.

García Naranjo pone cifras, y estas inciden en: la participación del gobierno en
cuanto al gasto social, la tasa de la mortalidad infantil, las donaciones que se reciben en
alimentos la venta de leche.

164
PERÚ:1980-1994
G A S T O SOCIAL DEL G O B I E R N O

ANOS PORCENTAJE DEL PBI Per Cápita (US$ de 1986)


1980 4,6 61
1985 4,7 54
1990 2,2 21
1991 2,2 21
1992 2,6 24
1993 (*) 2,7 26
1994(**) 3,8 33
(*)Estimado
(**)Proyectado

Fuente: García Naranjo, 1994.

Según la información del gasto social, es claro que el gobierno de Belaunde


(1980-85) y el de García (1985-90) sostuvieron poco más del 4.5% del PBI en el gasto social,
mientras que el de Fujimori tan solo le asignó el 2.2% del PBI, lo que se puede considerar
cruel, luego de haber iniciado una economía que estaba decidida a ponernos limpios ante
los ojos de la escena económica internacional (el schock del 8 de agosto de 1990, del que
no encuentro una sola publicación analítica específica).
En cuanto a la mortalidad, García Naranjo se explaya en ello pero miremos los
siguientes cuadros:

PERÚ:1986
N Ú M E R O DE N I Ñ O S M U E R T O S POR CAUSA

HASTA 1 AÑO
CAUSAS 1986 %
IRAs 13 091 30
infecciones perinatales 18 234 34
EDAs 5 143 11,0
Metabolismo 1 870 4,0
Otras bacterianas 1 870 3,0
Desnutrición 1 216 5,1
Resto de causas 5 330 13,0
IRAs: Infecciones respiratorias
EDAs: Enfermedades digestivas

Fuente: García Naranjo, 1994.

165
PERÚ: 1 9 9 1
M O R T A L I D A D INFANTIL

TOTAL DE NIÑOS MENORES DE I AÑO MUERTOS TOTAL URBANO RURAL

Niños nacidos en 1991 637 898 393 703 246 668


Tasa de mortalidad infantil 75,81 65,5 92,8

Fuente: García Naranjo, 1994.

El cuadro de número de niños muertos por causa, menores de un año, en el que


se destacan enfermedades respiratorias y digestivas, razones que perduran hasta ios cinco
años y que es una constante hasta la actualidad. Otra cosa que hay que subrayar es que
esta cifra aumenta en 1991 y se puede apreciar que sobre todo las víctimas se hallan en las
zonas rurales. El siguiente cuadro explica las tasas de mortalidad en 1994 por
departamentos y, en quintiles, nos pone sobre aviso de que los departamentos más
afectados son los mismos que corresponden a los más pobres en el mapa de la pobreza en
el Perú . 197

PERÚ: 1 9 9 4
TASAS D E M O R T A L I D A D INFANTIL (POR M I L )

4. MUY ALTA 3. ALTA 2. MEDIA (DE 1. BAJA


RANGOS DE INGRESO (MÁS DE 100) (DE 75 A 99) 50 A 74) (MENOS DE 50)
(POR QUINTIL DE INGRESO)

Huancaveiica Cajainarca
Ayacucho Pasco
5. Primer quintil (cinco meses) Apurímac
Cusco
Puno
San Martín
Huánuco
4. Segundo quintil (10 meses) Ancash
Amazonas
Junín
Loreto
Piura La Libertad
3. Tercer quintil (quince meses) lea
Tacna
Ucayaíi Lambayeque
2. Cuarto quintil (20 meses) Madre de Dios
Moquegua
Arequipa
1. Quinto quintil (25 meses) Tumbes Lima -Callao

Fuente: García naranjo, 1994.

1 9 7
García Naranjo, 1994.

166
Por otro lado, se cruzan otras razones; la recepción de donaciones de alimentos,
los que al margen de beneficiar a la población más necesitada, ha conducido al
empobrecimiento del productor peruano, hablamos de los trabajadores agrícolas
ganaderas.

PERÚ:1982-1990
R E C E P C I Ó N DE D O N A C I O N E S DE A L I M E N T O S

Miles TM

1982 1983 1984 1985 1986 1987 1988 1989 1990

Fuente: García Naranjo, 1994.

Entre tanto el volumen de venta de leche entre 1985 y 1992 desciende sobre todo
a partir de 1987 y 1989, se pone enjuego el programa del Vaso de Leche y se manifiesta la
falta de poder adquisitivo.

PERÚ:1985-1992
V O L U M E N DE VENTA DE LECHE

MÜGS TM

.
Evaporada

"

^ ^ ^ ^ ^ Paslourizada

•_
1 , , ,
i i r— (
Í— 1—
1985 1986 1987 1988 1989 1990 1991

Fuente: García Naranjo, 1994

167
Otro fenómeno que le acompaña es como la tasa de actividad infantil aumenta
considerablemente en el Perú, imaginemos a aquellos niños que mal alimentados, además,
tienen que ayudar al ingreso familiar.

PERÚ:1961-1986*
TASA DE A C T I V I D A D INFANTIL EN EL PERÚ

TASA DE
AÑOS POBLACIÓN PEA ACTIVIDAD
(en miles) (en miles) INFANTIL
1961 2 308,8 79,6 3,4

1972 3 308,6 85,4 2,6

1981 4 076,0 124,2 3,0


a
1984 4 194,8 376,2 9,0

* Tasa de actividad infantil = PEA 6-14 años/ Población 6/14 años.

" 1NE: Encuesta Nacional de Hogares sobre Medición de Niveles de Vida (ENN1V). Lima, 1985-1986

Fuente: García Naranjo, 1994.

Es indudable que la leche, sobre todo, la consumen los menores de edad, pero
¿qué habría ocurrido con los niños que trabajan? ellos que son mayores de seis años
aproximadamente si bien se sirven del Vaso de Leche, casualmente por su condición, solo
un porcentaje se beneficia del programa, los niños que no van al colegio y que trabajan
todo el día reducen sus posibilidades de recibir una ración de leche quedándole solo el
té, claro que no todos estos casos se pueden contabilizar pero ¿cómo se explica que más
del 50% de la población infantil sufra un alto grado de desnutrición?. El té fue el único
recurso que muchos niños tenían hasta la creación del programa del Vaso de Leche.
Hasta entonces los niños de Eos estratos populares y zonas rurales se vieron incapaces de
proseguir una carrera donde los conocimientos son lo primero (cuando un alumno no
poseía la energía necesaria para captar las clases, peor aún, cuando la enseñanza de bajo
nivel se ensañó con aquellos que finalmente no podrían asistir a una academia). Así no
se podía pretender negar que lo informal que rozara con lo delictivo, el soborno un
mecanismo casi común en los veinteañeros de los años noventa, cuando no podían
acceder a sus metas y quedar como desocupados. Veamos la abismal diferencia que
existe entre el té y el vaso de leche. En el caso de la leche materna, debe recordarse
además que esta no puede ser reemplazada por el vaso donado, pensemos en las madres

168
que no tienen leche en su pecho, que tienen una enfermedad infecciosa y deba
reemplazarla por la inaccesible leche evaporada. He ahí la importancia que tienen estas
raciones que incluye a las madres gestantes y lactantes.

TÉ vs LECHE

Leche Humana Leche de vaca Té Té con azúcar


1,24 Its. 1,24 Its. 1,24 Its. 1,34 Its.

Calorías 950 801 24 409

Proteínas (gr.) 14 43 - -
Grasas (gr.) -
50 43 -

Carbohidrato (gr.) 117 60 5 9,5

Calcio (mg.) 407 1 455 - -

Fósforo (mg.) -
172 1 147 -
Hierro(mg.) 1,23 - - 0,1

Sodio (mg.) 197 616 - 1

Magnesio (mg.) 210 160 15 15

Vitamina A(mg.) 0,24 0,12 - -


Thiatnina (mg.) 0,12 0,37 - -

Riboflavina (mg.) 0,49 2,10 1,12 0,12

Niacina (mg.) 2,47 1,23 - -


Áciso ascórbico (mg.) 62,00 12,33 - -

Fuente: García Naranjo, 1994.

¿Qué le significa al Estado mantener el Vaso de Leche? garantizar en algo una


dosis que le evite enfermedades. Podemos asumir que en algo un poco más del 1 % del
Presupuesto de la República. Veamos el cuadro que nos presenta García Naranjo. Por lo
menos al primer gobierno de Alberto Fujimori:

169
PERÚ: 1 9 9 1 - 1 9 9 2
P R O P O R C I Ó N DEL GASTO SOCIAL EN EL PRESUPUESTO DE LA REPÚBLICA
ESTRUCTURA PORCENTUAL

SECTORES Y PROGRAMAS 1991 1992

Presupuesto General de la República 100,0 100,0


GASTO SOCIAL 30,90 31,10
I Gasto Social Sectorial 26,50 26,10
Ministerio de Educación 18,10 18,90
Ministerio de Salud 8,10 7,10
Ministerio de Vivienda 0,30 0,10
II Programa de Apoyo a la Pobreza 4,40 5,00
FONCODES 0,60 2,20
Vaso de Leche 1,20 1,10
PRONAA 0,30 0,90
Alimentación Escolar 0,80 0,20
Otros 1,50 0,60

Fuente: García Naranjo, 1994.

Lo más importante del trabajo de Aida García Naranjo es la presentación que ella
hace de la estructura del Vaso de Leche, lo que conoce y valoriza en este sentido el
movimiento de mujeres y organizaciones.
Hay dos programas que ella rescata como antecesores, los programas PAE
(Programa de Alimentación Escolar) creado en 1979 que otorgaba un vaso de leche a los
niños entre seis y trece años, del que solo tiene datos hasta 1981, y PAM! (Programa de
Atención Materno Infantil) del Ministerio de Salud que comenzó en los ochenta y que tiene
registrado su servicio hasta 1989. Menciona además la Gota de leche, CARITAS, OFASA y
CARE.
Durante la campaña de Izquierda Unida, uno de los ofrecimientos que hacía era el
programa "Vaso de Leche", cumpliéndose, el 4 de abril de 1984. Después mediante la Ley
N° 24059 de 1985 este programa se oficializa, y como lo dicen las participantes "no es
producto del favor de los parlamentarios, es el resultado de nosotras" . 198

9 e
' García Naranjo, 1994.

170
"LEY 24059

El Presidente de la República por cuanto:


El Congreso ha dado la Ley siguiente:
Artículo I . Créase el Vaso de Leche en todos los municipios provinciales
o

de la República destinados a la población materno infantil en los niveles


de niños de cero a seis años, de madres gestantes y en período de
lactancia con derecho a la provisión diaria por parte del Estado, a través
de Los municipios, sin costo alguno para ellas, de 250 ce. de leche o
alimento equivalente.

Artículo 2 . Las municipalidades provinciales adoptarán las medidas


o

pertinentes para organizar, ejecutar y controlar Las acciones necesarias


para el cumplimiento de lo dispuesto en el artículo anterior, contando,
para ello con el concurso activo de las organizaciones de la comunidad.

Artículo 3 . Créase el Fondo del Vaso de Leche, el mismo que se formará


o

con los recursos del Presupuesto de la República asignados a este fin;


con recursos que aporten las mismas municipalidades, y con las
donaciones de la cooperación internacional.

Artículo 4 . El Fondo del Vaso de Leche será el encargado de asignar los


o

recursos necesarios para ejecución del Programa a cada municipalidad


provincial en relación a la población beneficiaría de cada provincia.

Artículo 5 . Las municipalidades provinciales de la república formularán


o

el programa correspondiente al año 1985 para el cumplimiento de lo


dispuesto en los artículos I y 2 e informarán al Fondo del Vaso de
o o

Leche sobre el monto de los recursos necesarios. El Ministerio de


Economía, Finanzas y Comercio efectuará las transferencias de recursos
para elfinanctamlento del Programa al Fondo del Vaso de Leche.

Artículo 6 . El Poder Ejecutivo reglamentará la presente Ley en un lapso


o

de treinta días a partir de su publicación y deberá, para este fin, incluir


una comisión formada por un representante del Ministerio de Economía,
Finanzas y Comercio, un representante del Ministerio de Salud, un
representante de la Municipalidad de Lima, un representante de la
Municipalidad de Arequipa, un representante de la Municipalidad de
Trujillo, un representante de la Municipalidad de Huancayo y un
representante de la Municipalidad de Iquitos.

Artículo 7 . La presente ley rige desde el día siguiente de su publicación.


o

Comuniqúese al Presidente de La República para su promulgación.


Casa del Congreso, en Lima a los veintiún días del mes de diciembre de
mil novecientos ochenta y cuatro.
Manuel Ulloa Elias, Presidente del Senado
Elias Mendoza Habersperger, Presidente de la Cámara de Diputados.
Carlos Manchego Bravo, Senador Secretario.
Ernesto Ocampo Meléndez, diputado Secretario.
Al Señor Presidente Constitucional de la República.

POR TANTO
Mando se publique y cumpla.

171
Dado en la Casa de Gobierno a los cuatro días del mes de Enero de mil
novecientos ochenta y cinco.

FERNANDO BELAUNDE TERRY.


Diario "El Peruano", es de 6 de enero de 1985".
Fuente: García Naranjo, 1994.

Como se señaló, el Ministerio de Salud, dejó su servicio hasta 1989. En agosto de


1985 se realizó la Primera Asamblea Metropolitana de los Comités del Vaso de Leche en la
que participaron 1 200 madres coordinadoras de 33 distritos. Después de tantas marchas
lograron que en 1991 el Vaso de Leche sea incorporado al Presupuesto General de la
República mediante la Ley: 25308.
El Vaso de leche tenía prioridades, estas eran en orden de importancia las
siguientes:
1. Madres gestantes
2. Madres lactantes
3. Niños de cero a cinco años
4. Niños en edad escolar
5. Niños de seis a trece años.

Cada ración debía contener.

P R O G R A M A VASO DE LECHE
LEY N ° 2 4 0 5 9

RACIÓN INSUMO LECHE Y HOJUELA LECHE HOJUELA

Leche 16,0 gr. 27,5 gr. —


Hojuela 10,0 gr. ... 30,0 gr.
TOTAL 26,0 gr. 27,5 gr. 30,0 gr.

Fuente: García Naranjo, 1994.

Sobre el funcionamiento del programa, el modelo que presenta la autora, como


ella misma lo refiere, no se llevó a cabo a lo largo de todos los comités, pero sí destacó en
los de los conos norte, centro y sur de Lima.

172
Primero se dan los casos en que La licitación no existe, La leche se compra por La
decisión del Alcalde y las organizaciones no son iguales en todas partes. El gráfico que se
presenta a continuación destaca la Cogestión, que permite que las organizaciones
populares y sobre todo de mujeres participen activamente en la distribución de las
raciones. Es decir, una vez otorgado el numerario a la Municipalidad esta tiene que
coordinar con las organizaciones populares que están desde ya organizadas a los niveles
distritales y provinciales. Es la manera como las mujeres organizan su poder.

FUNCIONAMIENTO DEL
P r o g r a m a d e l Vaso d e L e c h e

Fuente: García Naranjo, 1994.

173
Con esta cogest'tón, los beneficiados fueron los niños de los sectores populares
urbanos que tuvieron otra faz en su presentación ante la sociedad internacional. Sabían las
mujeres que no solo debían participar con su voz y presencia, hicieron lo posible para que
sus gestiones se registren con documentos; controlar, sino el dinero, las raciones, la
fiscalización, a medias. Por ejemplo en VES, se llegó a tener dos locales de acopio.
Más que número de comités, lo interesante es el número de beneficiados que
García Naranjo apunta; veamos algunas cifras. Empecemos por Lima, los datos son más
específicos, el cuadro nos indica el modo en el que el Programa del Vaso de Leche ha ido
creciendo a lo largo de una década, se duplicó en cuatro años de 450 000 beneficiarios en
1985 a 964 991 en 1989. Ya en los noventa se hizo un salto que sobrepasó el millón en
Lima, cifra que ha ido descendiendo poco a poco hasta 1994.

LIMA METROPOLITANA: 1 9 8 5 - 1 9 9 4
P R O G R A M A M E T R O P O L I T A N A DEL VASO DE LECHE
T O T A L DE BENEFICIARIOS DIARIOS

1,101,484
1,113,700
1,126,861
1.157.3891
1,115,109

400,000 800,000 1*200,000

Fuente: García Naranjo, 1994.

Nota: Se ha consignado d o s datos para los años 1986, 1987 y 1990 correspondientes a meses
diferentes, y para 1989 se presentan cifras correspondientes a tres meses.

Hubo prioridades, desde las madres gestantes hasta los niños de seis a trece años.
Estos se distribuyeron de la siguiente manera en 1994.

174
LIMA METROPOLITANA: 1 9 9 4
BENEFICIARIOS DEL VASO DE L E C H E / P R O Y E C C I Ó N ANUAL %

3%
Madres Gestantes

Niños 0-6

Fuente: García Naranjo, 1994.

El 85% del total de los beneficiados son los niños, el 15% restante asiste a las
madres lactantes, gestantes, los enfermos de TBC, ancianos, etc. Me atrevería a
considerar al Programa del Vaso de leche como una efectiva medida, y con menos carga
política que los comedores y, que por tener un objetivo definido cumpla su función a
cabalidad. Otro cuadro interesante es el que gráfica la distribución que se ha dado en
1994 de este programa a nivel de Lima Metropolitana por conos beneficiados. En este
gráfico están considerados todos los distritos metropolitanos a excepción del distrito de
San Isidro, que expresamente no quiso formar parte del programa, sintomático en un
distrito como este, de alta población burguesa donde, la participación de su "minoría" no
tenía por qué ser desconocida, todos conocían la precariedad de sus pobladores de la
esquina noreste de las avenidas Aramburú y Arequipa, por ejemplo.

175
LIMA M E T R O P O L I T A N A : ABRIL DE 1 9 9 4
BENEFICIARIOS DEL VASO D E LECHE P O R C O N O S

Fuente: García Naranjo, 1994.

Según las cifras es aproximadamente, el 30% para cada cono (Norte, Este y Sur)
Lima, es decir el Cono Centro tan solo se beneficia en un 8,8%. Esta es una cifra que no
solo guarda correspondencia con la población de escasos recursos, también tiene que ver
con el número de sus organizaciones y la población de sus distritos, donde la niñez tiene la
más alta cifra.
Otro capítulo importante que tiene el libro de Aída García Naranjo es el que
corresponde a los testimonios de las distintas participantes que hay al interior del país
primero veamos el orden de los departamentos beneficiados con este Programa en toda la
nación. El cuadro de beneficiarios a nivel nacional 1990, nos hace notar que Lima ocupa
casi el 50% del total de Las raciones distribuidas. Le sigue a Lima. Cusco con 159 700
beneficiarios que significa el 13.3%, después Junín con el 9.4% y así sucesivamente. Esta
proporción va de acuerdo a la población, cada uno de los departamentos tiene sus propias
características, que la diferencian de Lima, aparte de la zona geográfica aquí juegan otros
componentes mayoritariamente culturales y también económicos.

176
PERÚ: 1 9 9 0
BENEFICIARIOS A NIVEL N A C I O N A L POR D E P A R T A M E N T O S

1.200-]
i, V200.000
í. cusco 159.100
1,000 3. JJB) 113,101
4. H M I31.000
í, UU8ERTAD 104,200
800 6. mai 93,500
7. (AKMWH ÍÍ.4Í0
I. CttlM 84.000
9. PUW 83.500
78,000
10. mwnwí H.300
160 II. SWJAfflJM 57,070
I!. «uu#c Í6.000
i), AVAOÍHD SftOOO
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17. IMWi 34.000
It. UWIMI 19.0M
1S. IUMSÍS ¡Í.O00
20. « !4.5«
M. W S t f S 14.200
19.140
ÍJ. iUVHD I5.BB0
14. VvWÍDEDlOS 13.790
15. PASCO

1 2 3 4 5 C 7 8 9 10 11 12 13 14 15 16 17 18 19 20 21 22 23 24 25

Fuente: García Naranjo, 1994.

Este cuadro, no tendría sentido sin las versiones que García Naranjo tomó a través
de casi toda la República.
Por Lima, el de Teresa Aparcana es muy ilustrativo, destacan nítidamente dos
cosas, su formación de líder y el servicio que ella brinde y la participación de las mujeres y
su aporte en el vaso de leche. Como líder afirma que la organización ha sido su
universidad, aspira que ello repita a otras mujeres, valora lo que ha ganado en lo personal,
la autoconfianza, el reconocimiento, la autoestima, lo que le hace poder decir "tenemos el
poder desarrollar y avanzar. Podemos hacer algo porque somos capaces". Otro aspecto en
la misma línea, más interesante, concerniente a la clase social, el desprendimiento del
complejo de ser de pueblo joven, cuando dice: "Desde mi organización aprendí a ver los
problemas nacionales, el porqué de cada cosa". Antes de llegar a este logro no dejó de
mencionar sus problemas iniciales. Una mujer que empezó con el Vaso de Leche en 1984,
cuando se inició el programa, es en este caso la mejor indicada para resaltar las dificultades
y logros, este es el otro lado, el servicio. Desde ya dice que solo reciben la leche,
únicamente, y que ellas corren con los gastos del traslado, la preparación (kerosene y
canela, etc.), pese a ello, las organizaciones vecinales no las han considerado como debería
ser, con apoyo, sino por el contrario, con desconfianza, era lógico, una organización alterna
no solo estorba, incomoda, es peligrosa. Así fue que el protagonismo masculino de los

177
años setenta pasaron al de las mujeres en el ámbito barrial, el apoyarse a un programa
reconocido oficialmente por el cual se puede negociar con otras ONG y con el mismo
gobierno (como conseguir el dinero para el traslado, para locales, etc.) las ayudó mucho.
No en vano Aparcana denuncia que si bien ellas nacieron de la organización barrial, luego
esta las abandona, y las usan para luego darse sentido cuando están en capacidad de
aportar, dice: "La organización vecinal, es como algunos padres que afirman sus hijos y
después se olvidan toda una vida de criarlos y cuando su hijo ya está formado, ya producen
interés, ahí, se acuerdan, entonces ahora quieren estar, fiscalizar, quieren saber cuántas
bolsas... en que podemos ayudar".
Por las provincias, Esther de la Cruz de Huacho da una idea de cómo la zona rural
tiene sus particularidades, ella sabe que los niños necesitan de la leche, pero su
consternación nace cuando observa que su labor no está siendo comprendida. Cuando
cocina para su familia y Luego tiene que salir a las dos a procurar el vaso de leche de las
4.00 p.m. y, la gente no viene, son más los albañiles los que vienen, vendedores de
mercado, ya almorzando después de la faena, el resto está acostumbrado a venir tarde
(7 p.m.). El problema ella lo entiende, las mujeres aunque no tienen un trabajo fuera del
hogar estable, están supeditadas a lavados, y otros quehaceres domésticos en casas, que
no las dejan salir, este trabajo que cada vez les da menos ingreso pero no pueden perder.
Los niños por lo general almuerzan a las tres de la tarde, así, el vaso de Leche ya no Lo
quieren y siendo tarde tampoco se les permite tomarlo, porque luego no comería la cena.
Razones por las cuales solicita un comedor, así beneficiaría a los niños directamente, pero
claro, también agrega que no le dejen toda la carga a ella sola por el hecho de ser la
dirigenta.
En Cusco las cosas parecen reflejar sobre todo la situación de pobreza en los
barrios olvidados, los que rodean la ciudad. María Velásquez Quispe da la pauta, trabajo,
pobreza, responsabilidad y seguir al frente del Vaso de Leche. Lo que Le da su mayor
miedo, el recorte de los fondos. Actualmente sabe que no puede prescindir del programa,
más aún cuando las madres y los niños se lo reclaman y ponen en cuestión su labor y
puesto.
El caso del departamento de Junín es muy ilustrativo, bajo la recopilación de tres
dirigentas (de Huancayo, Chilca y la Oroya), se puede evidenciar, tal vez con mayores
pruebas la utilización política del Vaso de Leche. Por un lado el oficial, cuando tienen que
recurrir directamente al alcalde, hacerle favores políticos a su candidatura antes y en sus
mítines, después, luego como justificadores de sus gestiones, con el cargo negativo de no
ser reconocidas o de enfrentarlas entre ellas. En todos los casos estas organizaciones de
alguna manera ya existían antes de que se oficialice el Vaso de Leche, enteradas no

178
quisieron perder la oportunidad de beneficiarse de aquella ayuda, la única vía era el trámite
ante las alcaldías. Es una lucha constante, contra la manipulación política, contra la
permanencia de las mismas dirigencias en el Programa, en este caso parece que la
organización femenina rural de Junín poco o nada pudo sacarle de positivo a las mujeres.
En términos de género, las oportunidades no brotaron del programa. Una versión
diferente es la que ofrecen las de Huancayo, ellas si manifiestan un grado de promoción
social a nivel personal y de comunidad, en Huancayo, la ciudad, convergieron el Comité de
Damas del Municipio, la Unión Popular de Mujeres y la Federación de Mujeres que formó
Ricchari Wanka Warmi, esta última que tuvo a su cargo la periferia. Las huancaínas son
pese a todo las que al final de la alegría inicial, descubren la manipulación partidaria, la
malversación y el chantaje, a diferencia de las de los pueblos aledaños, las que fueron
"maltratadas" desde un principio. Hasta los años noventa se puede notar el problema
discriminatorio, ya no tanto racial sino cultural.

Una Cajamarquina Carmen García Linares tiene una entrada muy simpática, ella
dice de Hualgayoc: "Mi pueblito es bien quedado, a veces no avanza nada", pero prosigue:
"Prácticamente no recibimos, son los alimentos que llegan muy pocos, hay muchos niños,
muchas mujeres abandonadas y no alcanza". La situación, que relata es realmente muy
triste, se dicen así mismas analfabetas, abandonadas, etc. pide que las ayuden porque no
tienen recursos, es más, pide que no les reduzcan la partida del Vaso de Leche. "Nos hacen
pagar a cada madre y nos viene saliendo caro". Ella es la primera en decir que en
Hualgayoc nunca hicieron marchas por algo que les faltara. Demás está decir que las
manipularon, no era necesario. Carmen García es madre de seis hijos, y pide que les
enseñen a ver por las cosas, "queremos estar más enteradas" agrega.
En Piura, la situación es diferente, los problemas no son tan álgidos, sobre todo en
los centros poblados, en términos sociales, la pobreza es la que determina la participación
de las mujeres al interior de un comedor. El problema de las lluvias no les permite utilizar
la leña y deben comprar el kerosene y están preocupadas por atender a los niños que no
tienen ni para el té. En el caso de Huancabamba, las campesinas se muestran más
mortificadas, la leche como tal no les llega, María Cristina Peña Zurita Presidenta de ia
Asociación de Mujeres trabajadoras Campesinas de Huancabamba (Piura) dice "...no se da
leche de ninguna calidad..." tan solo reciben quáker y azúcar, la leche tan solo se entrega
en el pueblo y no en el campo. La queja va directamente al Concejo y sus concejales, a
decir de María Cristina "El Concejo hace lo que quiere". Las entregas que deben ser
mensuales, a veces se las den por trimestres. Entre tanto apuestan por el mejoramiento del
programa.

179
El caso de Arequipa es diferente, a pesar de ser la segunda ciudad del Perú, su
problema a comparación de Lima, Ana Herrera (Paucarpata) dice: "hay tiempo de
organización muy diferente que el de Lima, no sé si estamos atrasados, pero la experiencia
acá es diferente que en Lima". "Hay aquí mucha diversidad, comedores, clubes de madres,
talleres de mujeres. Hay de todo en los registros de los Municipios, en la región, en las
propias organizaciones". En Arequipa los partidos políticos, actuaron de dos maneras,
cuando fue alcalde Cáceres, se caracterizó por no potenciar a ios clubes y organizaciones
existentes. El APRA por el contrario "apoyó" a los clubes de madres que ellos mismos
patrocinaban, bajo el nombre de Comité de Damas. En 1994 el día de la mujer (8 de
marzo), frente al evento realizado por la esposa del alcalde, la ASOMA (Asociación de
Organizaciones de Mujeres de Arequipa) convocó a una marcha, se presentaban así las dos
caras organizativas. ASOMA pertenece a Miguel Grau, el pueblo joven más grande de
Arequipa. Un dato que se maneja aquí, y se ve que es frecuente, es la participación de un
mismo grupo de mujeres en diferentes servicios. Un mismo organismo desempeña la
coordinación del Vaso de Leche, a la vez del comedor popular y también el taller de
mujeres, todas muchas veces en un solo local, el local de la dirigente, que en muchos casos
es tan humilde como la condición de todas las beneficiadas.

Hablar de Cerro de Pasco nos remite a la minería y es así como empieza el


testimonio de Gertrudis Cristóbal Rojas, la presidenta del Vaso de Leche de Cerro de Pasco:
"Empezó con las mujeres mineras (...) pero la ley, sólo a veces es la ley...". La organización
empezó en los campamentos, en principio ella no podía saltar la desconfianza del resto de
las mujeres, no todas querían dar sus datos (¿temor frente a otros reclamos?) así nomás
empezó con 35 mujeres que trajeron el Vaso de Leche, "ahora contamos con 24 000 y
tantas mujeres". La discriminación se hizo patente y llegó al extremo de que no las
dejaban ingresar ni a las oficinas, el avance se puede medir así "en este año estamos
teniendo problemas con Las autoridades". La tarea de esta dirigenta era buscar la unidad o
por lo menos la coordinación de todas las organizaciones femeninas. Gertrudis hizo un
pedido que todas las mujeres participan en este tipo de actividades.
En Yanacancha Alicia Guerrero Ricaldi Secretaria de su comité, mencionó del
Centro Cultural Popular Labor, cuyas asesoras las apoyaron desinteresadamente, este
Centro también participó en la formación de los comedores en la Asociación Provincial
Cerro de Pasco. En Yanacancha se quejan de que el alcalde no las deja enterarse del
presupuesto, el alcalde recurrió incluso a los "militares", he aquí la diferencia que hace La
presencia de Labor, ellas las informan, Las guían y las ponen al tanto de los peligros que
pueden venir a propósito de la privatización que se da como parte de la política del
gobierno fujimorista. Otra participante de Yanacancha Flavia Escalante nos vuelve a

180
mencionar que son los mineros los que consumen esta leche, y también los niños que
están desnutridos, la razón de ser del Vaso de Leche. Los ancianos en completo abandono.
La queja es la misma, el alcalde no las comprende y no las ayuda, en vano piden que la
compra se haga con participación de la Asociación del Vaso de Leche, la subcomisión y el
alcalde, este último tiene la libertad de hacer solo la compra. Ellas habían acordado
comprar ia leche de marca Aurora de la Empresa Nacional de Comercialización de Insumos
(ENCI), pero el alcalde compró una leche sin marca y con mayor precio. Las madres
protestaron negándose a consumirla por cuanto la etiqueta decía distribución gratuita e
hicieron una marcha, pero el alcalde ni las escuchó.
En lea una provincia costeña, el programa de Vaso de Leche estaba a cargo de 78
clubes de madres, por club habían de 200 a 250 niños beneficiados, estos encargaron de
poner a las mujeres a cubrir todos los caseríos y distritos donde habían niños, ancianos y
personas con TBC, etc. Los problemas lo sintieron cuando su alcalde (aprista), Marco
Arbulú, decidió favorecer tanto solo a sus partidarias. La situación llegó incluso a que
descaradamente se apoye a las que "me han acompañado en mi campaña". Solo atienden
a cien clubes de madres más de cien clubes quedaron fuera, estos últimos tienen que
recurrir a PRONAA. Esto afectó la organización de las madres, el hecho de carecer de
apoyo hace que las mismas organizaciones se desintegren.
Tacna tuvo sus mejores épocas en 1987 (coincidencia con los años favorables de
Alan), cuando se crearon 280 comités de Vaso de Leche, el alcalde pertenecía a las filas de
izquierda Unida, también adquirieron 105 cocinas. Esto duró hasta que cambian la gestión,
la gente del Partido Popular Cristiano (PPC) no dio cabida a las mujeres de la Federación,
una razón de esto la da Juana Challco, comerciante y además tenía celos de la gente de la
izquierda. Lo interesante es que estas mujeres ante los problemas, llegaron a conectarse
con la gente de UNICEF, que les brinda su respaldo, con alimentos, y otras actividades de
salud. Lo mismo que repite en otros lugares la Federación está en constante lucha con el
municipio que pretende ignorarla. De los 280 comités, tan solo quedan cuarenta comités,
ellas seguían luchando.
La situación en Loreto que es un departamento amazónico, es diferente, sobre
todo más por su situación geográfica y clima. El problema no se limita al Vaso de Leche, es
decir a la alimentación, es también el de salud, las inundaciones, el calor, la inseguridad de
tas cosechas, ello hace que no puedan confiar ni tener seguro el sustento. En cuanto a la
función de las mujeres en el programa, han podido demostrar que son capaces de llevar a
cabo la distribución de la leche. Los insumos en el caso de la provincia de Maynas llegan
de Lima. Nelly Sajami Coordinadora del "Asiento Poblacional 28 de julio" se ha dado
cuenta de que incluso los hombres se benefician de su organización al punto de dejarlas a

181
ellas como las encargadas de citar al pueblo para las reuniones, una tarea que los
dirigentes reunían por lo pesado y agotador entonces (de ir de casa en casa que los
hombres tenían que hacer con este fin). En la actualidad ellos se sirven de las esposas para
pasarse la voz a través del Comité de Vaso de Leche, es lo más sencillo. Lo interesante es
que entre los 36 dirigentes hay un hombre, él cumple la labor de fiscal. Claro que este
Programa es considerado de Mujeres, pero ahí tienen también problemas ediles.
En Pucallpa la situación no es mejor, denuncia Carmen Buena Pico Macedo una
desatención del alcalde, por otro lado no reciben la dotación completa, se les ha recortado a
la mitad, ella ignora quién es el responsable de esta situación pero a su vez piensa: "siquiera
es mejor tener la mitad El alcalde no se acuerda de ellas y, cuando piden apoyo, les
responde que no hay recursos. Un problema que las mujeres tienen con las provisiones es el
clima, la humedad a veces no les permite mantenerlas, en buen estado por muchos días, la
lluvia por ejemplo hace que esta se pierda, a veces la sequía también se encarga de
malográrselas. Y cuando esto sucede tan solo pueden ofrecer mazamorra, de harina, como lo
afirma Raquel Erausquln de Rivera de Campoverde en Ucayali; "cuando hay mazamorra la
agencia [Agencia Municipal del Caserío de San José] no empresta los platos. Tenemos una
buena relación con la Agencia". Ella manifiesta que está contenta con el alcalde, este es más
humano, ellas votaron por él porque tenía buenos gestos desde antes de las elecciones, este
señor Ángulo de las filas del Ministro Democrático de Izquierda les había ofrecido además
ropa. Este es uno de los pocos casos en que ellas se manifiestan cierta confianza.

A través de estos resúmenes de los testimonios presentados por Aída García


Naranjo, podemos acercarnos a la realidad de los diferentes comités particulares de cada
región. En la costa como vimos se ven las dificultades de la entrega y las relaciones
ambiguas con los alcaldes (en otras palabras con los partidos políticos), en la organización se
destaca Lima, se llega a afirmar que este caso es diferente. En el caso de la sierra, la situación
es muy lamentable, el abuso, la indiferencia a los problemas de nutrición, se conjugan con la
pobreza, el punto en el que no solo los niños y madres gestantes están impedidas por tantos
motivos de recibir leche (distancia, falta de cuota para el transporte, etc.), y que pese a ello en
los casos de los departamentos mineros, sean los mineros los que se benefician de este
alimento. Los problemas se agudizan cuando por ejemplo un pueblo tiene las características
de Huaígayoc, donde la desinformación y falta de organización de las mujeres las pone en
desventajas, a pesar de que más necesitan del programa. Cuanto más cerca de las ciudades
se encuentran más probable es que deban inclinarse o enfrentarse a una organización
política. En la selva casi todo es nuevo en cuanto a organización de Vasos de Leche,
organización que solo era practicada en el caso de los caseríos por los hombres, el aporte de
las mujeres es la ventaja de que a través del programa apoyan a la organización comunal,

182
problema aparte es el clima que con sus lluvias y colores hace a veces que la leche si es que
llega, en algunos casos se malogre.
Concluyendo con el trabajo de García Naranjo podemos afirmar que este
programa ha dado sus frutos, aún en aquellos casos donde la experiencia haya enrostrado
a las mujeres su lado más difícil, les significa el contacto, el conocimiento, en cierto grado
de la participación pública de el ejercicio de la "lucha", saber lo duro que se puede ser
desde el poder, descubrir que la organización tiene que ser efectiva no solo por la
capacidad de convocatoria y convencimiento sobre ellas, sino adoptar la suficiente
seguridad en sí mismas de imponerse y probarse en el escenario de la discusión, esta
puerta que para muchas mujeres les está vedada aún en los altos círculos sociales y
culturales. El debate, la discusión de alto nivel, la presión de las mayorías, es una
experiencia que no cabe duda ha sido asimilada por toda una generación. Por lo pronto,
ya habrán generado los anticuerpos necesarios para próximas "batallas".

183
9. COMEDORES POPULARES

El tema de los comedores


populares jugó un rol
importantísimo en Los peores años
de la crisis económica, sobre todo
por la contribución en la
transformación de las mujeres de
los sectores menos favorecidos
económicamente, al hacerlas
partícipes, en términos de
organización e interacción directa
con las Instituciones gubernamentales y no gubernamentales de asistencia social. Sobre
todo porque no sólo transformaron sus estilos de vida sino porque también modificaron la
estructura del Estado con la creación de oficinas, direcciones, e incluso un ministerio que se
hizo realidad ante la demanda de soluciones de carácter económico, social y legal. Todo
ello se resume a que el contacto de las mujeres con las Instituciones partió del hecho de
que las mujeres empezaron a dirigirse de manera directa, con documentos por escrito y con
cargo, cuyos tenores fueron cambiando, de una petición que apelaba a la consideración y
la buena fe de la autoridad, a solicitudes que demandan el cumplimiento de sus derechos
básicos enmarcados dentro de la ley; cuando no, la visita personal de sus representantes
ante el Poder Legislativo para que se creen las leyes necesarias para garantizar la
supervivencia de aquellos sectores críticos en los que era necesaria la intervención directa, no
sólo del Estado sino del concurso de otras instituciones que faciliten la cooperación de
entidades nacionales e internacionales. Esto se hizo más patente en la década de 1980, sobre
todo en los sectores populares urbanos donde cumplido un papel trascendental en el
desarrollo social de la mayoría de los hogares del país en todos los estratos sociales, desde
las beneficiarías de estos comedores con la ración alimentaria diaria, aquellas trabajadoras
de las ONG que recibieron un sueldo por asesorarlas en los asuntos de gestión para hallar
financia miento, y aquellas miembros del Comité Directorio ONG que lograron un vasto
conocimiento sobre los temas sociales a nivel regional y nacional, con altos salarios y un plus
traducido en poder político u ocasionalmente o no el uso de la mano de obra organizada en

184
provecho propio, por cuanto afectaron a todas las mujeres de sus efectos que tuvo un lugar
determinante en el nuevo rostro político, en todos los niveles.
Es difícil omitir este tema en el campo del poder, en el campo del feminismo y
sobre todo a nivel de clase social. En el tema de poder, cuando tocamos el tema de las
líderes populares, formadas por lo general en estas "escuelas de organización". En cuanto a
las feministas; la sean por conveniencia o por convicción, otorgándole sentido y cobertura a
toda una serie de proyectos que a la larga las fue arrastrando a sesgos insospechados,
generando trabajo, así como material de investigación a ser transformados en preteorías.
Los comedores populares son hijos de los programas de asistencia que desde el
cincuenta veníamos recibiendo como una ayuda de los países más favorecidos para los
más pobres, y que sobre todo estaban dirigidos por toda una red que fue creciendo dada
la situación económica que iba paulatinamente empeorando. En esto se incluyen las
nacientes ONG de las cuales ya hablamos, que con los años se multiplicaron en los setenta,
siendo el apogeo de estas en el marco de los ochenta cuando estos centros tenían
programas dirigidos a las mujeres enriquecidas por la corriente internacional feminista que
había echado sus raíces al lograr "la década de la mujer (1975-85)" y enarbolaron como
bandera una serie de objetivos que incluía a todas las mujeres; y las que en número son
más, las de los sectores populares y menos favorecidos de los adelantos y ventajas del
"progreso", o mejor dicho las víctimas de este fenómeno.
Bibliografía al respecto la tenemos en cantidades industriales es si cotejamos
desde manuales, informes, estadísticas y hasta explicaciones ideológicas y políticas.
En este capítulo debemos comprender también a los programas del vaso de leche,
que también es un programa que tiene sus orígenes desde los cincuenta (versiones orales
que manifiestan que entonces les daban hasta los almuerzos en los colegios nacionales).
Basta recordar los desayunos que fueron de obligación para los colegios estatales en
primaria, con mayor énfasis para aquellos niños que mostraban signos de desnutrición.
Pedro Lizarzaburu demostró que aquellos desayunos los podemos encontrar desde el
gobierno del General Osear R. Benavides, que destinó fondos del Tesoro Público para
sufragar las actividades, en adelante, lo que fue asistencia de las "damas de la caridad" de
los años veinte, se va sosteniendo con ayuda del Estado . Continúa esta acción con más
199

énfasis el gobierno de Odría en los cincuenta, los alimentos "americanos" destinados en


principio a ayudar a Europa en la preguerra pasaron después a trasladarse a América Latina.
Esta ayuda hizo que las compras que hacía el gobierno a Las empresas nacionales se
suspendan, el gasto evitado se derivaba al aspecto logístico . 200

' » Gaíer/Núñez, 1989.


™>Galer7Núñez, 1989.

185
Posteriormente surgen las instituciones privadas, tanto filantrópicas, las que
asumen esta distribución, a su vez son las preferidas por las leyes americanas. Las
instituciones favorecidas en el Perú fueron CARITAS PERUANA (católica) y O FAS A
(adventista) en Cuzco y Puno a propósito de las emergencias de los desastres naturales.
Poco a poco este servicio se generaliza a nivel nacional. Avanzan más, asisten a Los
programas materno-infantiles es la vía común de las ONG, que van asumiendo labores que
le corresponden al Estado.
En los años sesenta Alianza para el Progreso vira este sentido y lo convierte en un
sistema de inversión. Así, el gobierno de Belaunde utiliza este recurso para su programa de
Cooperación Popular para la construcción de caminos. Con el golpe de Estado de 1968
Cooperación Popular es desmantelada y son las organizaciones privadas las que asumen la
administración de estos recursos. Nacen SEPAS (evangélica) y CARE (asociación laica).
Con el terremoto del 31 de mayo de 1970 en Huaraz, las donaciones se
incrementaron, el Estado tuvo que crear una oficina que para racionalizar esta ayuda,
creándose en adelante la Comisión Nacional de Apoyo Alimentario, que devino en una
entidad permanente, conocida como la Oficina Nacional de Apoyo Alimentario
dependiente del Sector Agrícola (ONAA), esta oficina se convirtió en la captadora de las
donaciones que llegaron de todos los países para asistir a los países del tercer mundo. Esta
oficina con los años deja de cumplir lo correspondiente a la ejecución de la ayuda a todos
los necesitados, pues la distribución se hizo cada vez menos efectiva, llegó incluso a
conseguir autorización de la Comunidad Económica Europea para vender los productos
donados, en años en que la crisis económica iba creciendo.
En los años ochenta el Ministerio de Salud empieza una nueva modalidad de
apoyo alimenticio, compra alimentos en el país y acepta donaciones con ese fin. Según
este breve resumen del artículo de Pedro Lizarzaburu se puede observar como el Estado
abandona el apoyo alimentario que alguna vez tuvo en su poder . 201
Un mecanismo de
control social, que sin desearlo (o sí) pasó a las ONG que fueron cayendo en manos jóvenes
de los sectores medios y altos que experimentaron el poder al amparo de las ideas
marxistas .202
A la larga, con claros intereses políticos, que los encumbraron como los
líderes indiscutibles de la izquierda peruana hasta mediados de la década de los años
noventa, cuando gran parte (luego del significado de la caída del muro de Berlín, la
Perestroika Rusa y el bloqueo económico impuesto a Cuba por los Estados Unidos de
América) decidió optar por posiciones de centro o girar hacia el liberalismo, presionados
por los réditos político-electorales.

2 0 1
Lizarzaburu, 1988.
™ Galer/Núñez, 1989.

186
Lizarzaburu ensaya Los montos que este tipo de actividades significaron, el que en
moneda es difícil de calcular, pues por lo general estas donaciones que se daban en
alimentos directamente no estaban cotejados en moneda, pero felizmente los donantes
aceptaron la monetarización de sus productos con el fin de financiar otros gastos
operativos y gastos de inversión. El promedio que encuentra Lizarzaburu es de cuarenta
millones de dólares entre 1981 y 1985 para "los recursos totales manejados con fines de
asistencia alimenticia", esa cifra significó en 1986 el 30% de las importaciones de trigo o el
3% de ia inversión pública del mismo año. Cifra alta. Las 3/4 partes del total de la
inversión total eran alimentos disponibles. El mayor porcentaje de este tipo de ayuda fue
hacia Lima y Callao (38%) y la diferencia al resto del país (32%) . 203

Lo informado debe ser tomado en cuenta antes de empezar con las


organizaciones femeninas en el Perú, los comedores populares y los comités de vasos de
leche. Así veremos el lado político formal, la participación, a nivel nacional primero
después internacional. Se conjugaron primero intereses nacionales y luego internacionales;
por último, dio un nuevo rostro al movimiento feminista en el Perú, con la integración de
mujeres de otras esferas sociales. Lo mismo con la participación de líderes a nivel mundial
de mujeres representantes de grupos desfavorables (organizaciones populares) y otras más
que pueden ubicarse entre las tantas reuniones que nivel internacional organizan ONG
agrupando a distintas personalidades sobre determinado tema social.
Otro punto de vista desde el que se puede abordar la participación de las mujeres
en el vaso de leche es abordándolas bajo la condición de Estrategias de sobrevivencia. Esta
es interesante por cuanto pone de relieve el protagonismo de las mujeres, ya no
entenderíamos estos comités como generados por el Estado y/o fomentados por las ONG
exclusivamente, sería también las organizaciones formadas por las mismas mujeres
organizadas a fin de lograr el máximo beneficio de un programa(s) cuando la economía se
hacía más álgida.
En fin, hay diferentes maneras de abordar este tema. Blondet por ejemplo 204
lo
hace como las "Organizaciones sociales de mujeres" y le da el cariz político, es el más
relevante. Ve su nacimiento a partir de los setenta para facilitar la distribución de los
alimentos y donaciones.
Recuerda "el Primer Encuentro de Comedores Populares de Lima y Callao con la
asistencia de 300 organizaciones de Comedores pertenecientes a clubes con la asistencia
de 300 organizaciones de Comedores pertenecientes a clubes de madres, parroquias y
federaciones. En 1986 se formó la Comisión Nacional de Comedores Populares (CNCP) en
el mismo marco del Primer Encuentro Nacional de Comedores Populares Autogestionarlos.

2 0 3
Lizarzaburu, 1988
a» Blondet, 1994.

187
Esta comisión participó en el Programa Social de Emergencia 1989-1990 y en 1990 en la
Coordinadora Transitoria del Programa de Emergencia del gobierno de Fujimori. En
diciembre de 1991 se logró la aprobación de la ley que creó el Programa de Apoyo
Alimentario (Subsidio del 65% de los alimentos de los comedores y Comités del Vaso de
Leche). En 1991, en el marco de la Primera Convención de Comedores Populares
Autogestionarios de Lima y Callao que reúne las 43 centrales de Comedores Populares
Autogestlonarios de estas localidades". Esta versión de Cecilia Blondet sin embargo no es
muy clara, por cuanto no distingue para nada a los comedores que no son
"autogestionarios". Pensemos en los apoyados desde el gobierno, no debemos olvidar que
el margen de los voluntariamente creados por los organismos "autogestionarios" debemos
entender a los de las mujeres que participaban de los organismos comunales femeninos
habían otros los entonces conformados por los comités de vaso de leche impulsados a la
sombra del gobierno local de la izquierda, el APRA u otro grupo. En el gobierno de García
por lo pronto al interior de los comités distritales del partido se formaron comités para
comedores y otros para la pequeña empresa (máquinas de coser, etc.) supuestos apoyos en
los que se sustentarían las organizaciones femeninas, el premio a su Lucha. Si bien la
mayoría se benefició de ellas, no debemos olvidar que este fenómeno que corresponde a
las utilidades políticas post-electo ra les (Belaunde, García principalmente) tuvieron a las de
formación de izquierda una especie de cenicienta. De ahí que, estas otras organizaciones
autogestionarias, ponen de relieve, defienden, conquistan y se respaldan en dirigencias
reconocidas socialmente a fin de lograr una distribución más homogénea, para nada les
convenía depender de la Iglesia, del Estado y sus representantes políticos.

Así, las cifras de Blondet si son de los comités autogestionarios, aún pueden
generalizarse en la medida en que claro, de alguna manera lo son pero estamos seguros
que no se puede decir que casi todos estos comedores fueron miembros o participaron en
la Federación de Centrales de Comedores Autogestionarios de Lima y Callao, veremos
intereses muy diferentes por cierto. Salvo ese detalle, el resto es válido.
Sobre los comités de Vaso de Leche, podemos decir que este fue creado como
programa en 1984 (Barrantes en Lima como alcalde) en enero de 1985 luego de una
movilización de mujeres del Vaso de Leche este programa de Vaso de Leche se convirtió en
Ley (Ley: 24059), en 1986 fue incorporado a la Ley General de Presupuesto . 205

No cabe duda que los mayores avances se hicieron en los ochenta, y que los
investigadores que le dieron cobertura, fueron de las canteras de la izquierda. Hasta esa
década, la formación de los primeros comedores con este rasgo movilizatorio no existía,
seguro hay alguna publicación anterior a 1984 que trate el tema, pero no lo encontramos,

Blondet. 1994.

188
incluso en las bibliografías de la mayoría de los libros. Como la institución es SUMBI
(Servicios Urbanos y Mujeres de Bajos Ingresos) la primera que aborda el tema publicando
el trabajo de Violeta Sara Lafosse, bajo el título de Comedores Populares. La mujer frente a
la crisis **, otro que salió al año y que viró la óptica a otro aspecto, fue el de Carlos Kawata
20

con su Problemas operacionales de tos comedores populares ® . 2 7


En 1986 los comedores,
ya una fuerza, hacen que se produzca una publicación como "Informe sobre comedores" . 208

En 1987, era claro que el protagonismo de las mujeres era contundente, se ubicó a la mujer
con los servicios , mientras la organización femenina se iba consolidando
209 210

Es cuando ante las cifras que decían como las mujeres tenían que sujetarse a una
situación tan desventajosa, el empleo para ellas estaba cada vez más escaso; las madres de
familia sobre todo, que no podían estar a cargo de su casa exclusivamente, debían
comprometerse a colocarse de alguna manera a realizar labor que les permita contribuir
con el gasto familiar.
Antes de proseguir, veamos como el número de comedores populares se
Incrementó a través de las cifras extraídas por Cecilia Blondet y Carmen Montero . 211

PERÚ:1980-1994,
C R E C I M I E N T O DE LOS C O M E D O R E S Y E V O L U C I Ó N DE I N D I C A D O R E S E C O N Ó M I C O S

N° de Inflación PBI Gasto social %PEA


AÑO comedores a/ Anual b/ p.c. c/ p.c. rea! d/ subempleo e/
Antes 80 119
1980 172 406,7 26,0
1981 199 72,7 103,9 417,3 26,8
1982 236 72,9 101,6 359,5 28,0
1983 303 125,1 86,8 334,0 33,3
1984 523 111,5 88,9 324,0 36,9
1985 884 158,3 89,0 315,0 42,2
1986 1 117 62,9 95,1 391,3 42,6
1987 1 383 114,5 101,0 290,0 34,9
1988 1 861 1 722,3 90,7 224,6 37,0
1989 2 958 2 775,3 78,5 127,5 73,5
1990 3 259 7 649,7 72,3 82,3 73,1
1991 5 112 139,2 73,2 76,8 78,5
1992 56,0 69,5 92,5 76,8
1993 39,0 72,6 100,0 77,4
1994 4 848* 15,4 80,0 nd 74,0
* Para 1994, la Encuesta Nacional de Municipalidades del Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI),
registra en Lima 2 575 Clubes de madres y 2 273 Comedores Populares, lo que daría un total de 4 848
organizaciones que presumiblemente dan servicio alimentario.

Fuente: Blondet/Montero, 1995.

2 0 6
Sara-Lafosse, 1984.
2
" Kawata, 1985.
2 0 8
Fomento de la Vida (FOVIDA), 1988.
2 0 S
Córdova, 1987.
2 ! 0
Boggio y otros 1987; y Villavicencio, 1988.
2
¡ ' Blondet/Montero, 1995.

189
Este cuadro es muy interesante, ya que nos permite comparar Los indicadores
económicos del país con Los comedores de Lima. Toda una combinación letal de no ser
por la presencia de estos comedores. Establecer el número de comedores en todo el país
es muy difícil, sobre todo si se tiene en cuenta que los cambios y la movilidad existente van
de La mano con la apertura y cierre de ellos.
Las cifras inclusive varían en una misma autora, el caso más notorio es el de
Cecilia Blondet precisamente, a la que no dudamos bajo ningún punto de vista la veracidad
de sus fuentes. En su libro Mujeres Latinoamericanas, Cecilia Blondet menciona que en
1991 había 5 329 comedores populares en Lima , mientras que en Hoy: Menú popular,
212

registra 5 212 comedores . En cuanto al número de los comedores autogestionarios para


213

ese mismo año, en su publicación Mujeres Latinoamericanas rescata el Padrón de la


Federación de Comedores Autogestionarios de 1991:

L I M A Y CALLAO: 1 9 9 1
C O M E D O R E S A U T O G E S T I O N A R I O S SEGÚN DISTRITO

Distrito Central Comedores Raciones Socias Casos sociales

Cono Sur 16 613 81 929 12 684 3 790


Cono Norte 16 721 86 516 16 404 3 857
Cono Este 6 503 66 009 12 467 2 933
Cono Oeste 5 56 8 422 2 126 691
Total 43 1 893 242 876 43 681 11271

Fuente: Blondet, 1994.

Tenemos, que el número de estos comedores es el menor respecto a los que alguna
manera gozaron de las bondades de los organismos públicos. Tan solo en este caso de Lima
vemos aquellas dificultades, en las que las provincias sin duda presentarán problemas
mayores. Pese a estos datos, el número de comedores autogestionarios valen más
contestatarios, podrían afirmarse que son estos los que más bulla hicieron, libres del favor
político de turno podían denunciar con mayor soltura y de mandar en nombre de la niñez y
los problemas sociales mayores propuestas a los gobiernos de turno. Esa es la razón que
sean precisamente los de las canteras de la izquierda los que propusieran estos
planteamientos: sin responsabilidad de fracaso alguna. La cobertura (el filón político) en

™ Blondet, 1993.
2 1 3
Blondet/Montero, 1995.

190
estos casos es mayor, el aparato político es una caja de resonancia mayores consecuencias,
así se explica cómo María Elena Moyano haya tenido tanta resonancia a su muerte, no así el
caso de otras mujeres que en si no tuvieron una voz detrás de ellas, y tampoco una
organización política donde hacer carrera, desde cada acción se reconoce con la popularidad.
Cifras del funcionamiento de los comedores populares de diversa índole a nivel
nacional las encontramos en el Compendio de Estadísticas Sociales 1994-95 . Véase: 214

PERÚ:1994-1995
D I S T R I B U C I Ó N DE C O M E D O R E S POPULARES
Y P O B L A C I Ó N BENEFICIARÍA, SEGÚN DEPARTAMENTOS

1994 1995
Departamento N° de comedores Beneficiarios N° de comedores
populares
Total 9410 951 966 12 395
Amazonas 726 42 847 756
Ancash 308 28 724 383
Apurímac 122 25 250 408
Arequipa 300 15 000 386
Ayacucho 61 8 086 208
Cajamarca 160 35 204 480
Cusco 45 7 044 121
Huancavelica 58 6 777 501
Huánuco 183 9 500 166
lea 277 19 845 307
Junín 39 6 400 173
La Libertad 273 21 910 619
Lambayeque 165 17 175 308
Lima 1/ 4610 502 878 4 955
Lo reto 32 1 600 78
Madre de Dios 3 300 12
Moquegua 103 8 932 103
Pasco 37 9 232 87
Piura 1 363 134 330 1 624
Puno 174 17 400 218
San Martín 20 4 970 39
Tacna 174 14 322 175
Tumbes 123 9 840 205
Ucayaíi 54 4 400 83

Fuente: Perú, INEI, 1995.

214 INEI, 1995.

191
Ahora vemos por qué los datos acerca de Lima son los más trabajados, tiene casi
el 50% del total a nivel nacional, le sigue Amazonas que corresponde al norte del país,
interesante sería saber a qué se debe. Nos damos una idea, que este programa o tipo de
organización no tiene precisamente sitio en los lugares donde más se les necesita, como
por ejemplo: Madre de Dios, Ayacucho, Loreto y Puno. Muchos de los inconvenientes,
sabemos, como el que las donaciones Lleguen a tiempo y en buen estado. Además no
debemos dejar de mencionar que muchos programas cumplen una doble función la de
comedores y programas de vasos de leche a la vez. El número de beneficiarías varía
ostensiblemente entre un comedor por cien beneficiarios como Madre de Dios hasta de mil
o más en el caso de Lima por cada comedor.
Pasemos a hablar de como se sienten las mujeres al interior de los comedores.
Las mujeres son las que se reúnen por ser vecinas, y también por qué son pacientes del mal
de la mala nutrición en sus familias, en muchos casos carentes de un plato de comida
seguro, pero sin la esperanza cierta de un próximo trabajo que les permita criar a sus hijos
fuera de la delincuencia. Aunque claro, están también aquellas que desean ahorra, las que
teniendo un ingreso algo mejor que las del resto cuentan además con algún tipo de
instrucción educativa, muchas veces la secundaria hace la diferencia:

¿SE ALIMENTA M E J O R A LOS H I J O S ? O P I N I Ó N D E LAS SOCIAS

N° de socias Distribución relativa


¿Se alimenta mejor a los hijos?
Si 34 20,6
No 130 78,8
No responde 1 0,6
Total 165 100,0
¿Por qué?
Sí, porque no tenemos nada 19 55,9
Sí, porque es nutritivo 5 14,7
Sí, otro motivo 10 29,4
Total 34 100,0
No, debo complementar 58 44,6
No, cocinan en cantidad 19 14,6
No, el Comedor es complemento 9 6,9
No, en casa es mejor 34 26,2
No, otro motivo 10 7,7
Total 130 100,0

Fuente: Blondet/Montero, 1995.

192
El ingreso ha sido paulatino, muchas mujeres, hoy dirigentes ingresaron en los
programas de OFASA, ésta en los ochenta les hacia trabajar, después de CARITAS, era el
más común. No es de extrañar el movimiento que se daba al interior de estos iniciales
comedores. El testimonio de la hermana María Van der Linde recuerda los hechos de la
siguiente manera:
"Las señoras dijeron que no querían seguir trabajando con OFASA
porque las explotaban mucho... les daban menos cantidad de alimentos
que los que le tocaban. Yo les propuse ayudarlas bajo una condición
que los víveres no se distribuyan en crudo fijo que se preparen
colectivamente y que cada uno recibiera de acuerdo el número de
miembros de su familia, porque según los reglamentos de la USAID, que
seguía CARITAS y OFASA a cada persona le daban una cantidad fija,
independiente del número de miembros de la familia" .215

La hermana María Van der Linde lo recuerda como el primer comedor en Comas
"Comedor Unión" en 1978, al año, este ejemplo cundió a todos los distritos populares El
Agustino, Villa El Salvador y San Martín, esta vez con el concurso de la ONG. Sara Lafosse
en 1984 señala comedores fundados por párrocos los llamados "administrados", los que se
diferenciaban de los "independientes", estos últimos constituyeron el AFEDEPRON-Comas
en adelante constituirían las redes de comedores . 216

La razón por la cual se valoriza en los comedores más su función socíalizadora es


por cuanto ha sido lo más resaltante a decir verdad, parece que fuese así. Una encuesta
reveladora es la elaborada por Cecilia Blondet y Carmen Montero . 217

Y la pregunta ¿Se alimenta mejor a los hijos? las socias responden en su mayoría
que no, el 78% frente al 20%. De todas las que afirman que si, y que lo afirman, antes no
tener nada, son tal vez las que no tienen ningún puesto representativo al interior del grupo,
posiblemente sea discriminada y explotada. A la respuesta No, la mayoría afirma que
deben complementar, claro que no faltan aquellas que dicen; que en la casa es mejor.
Decir que no también tiene sus justificaciones, por que el gasto deben hacerlo en las
noches, deben cocinar para la noche como si lo hicieran en la mañana para Las dos comidas
del día cuando dicen que deben complementar, esto es agregar carne, ensalada, ají, no
siempre hay sopa y segundo (aunque se sabe que la sopa es secundaria, la costumbre
prima) así las señoras deben prepararlo también para darle de comer al esposo o mayores
que regresan en la noche de trabajar. En algunos casos las raciones que se sacan cubren la
demanda de la mañana y la noche, pero en la mayoría de los casos no. En cuanto a los
niños estos en su mayoría están de acuerdo en que sus madres participen de los
comedores. Y la pregunta ¿le gusta que hayan comedores? tiene una respuesta por parte

2 , 5
Blondet/Montero, 1995.
2 1 6
Sara-Lafosse, 1984.
1 1 7
Blondet/Montero, 1995.

193
de tas participantes de afirmación el 98.2%, más aún en el caso de que no pertenezcan a él
irían de todas maneras . 218

La ventaja del comedor popular radica en las horas libres que gozan las mujeres
para trabajar, en la mayoría de los casos, tejer y coser para fábricas de confecciones sean
estos en su localidad o en Gamarra . Esto es posible en aquellas mujeres con varios hijos,
219

donde la edad de la prole va de tres a catorce años, que pueden encargar a la mayor de las
hijas al cuidado del resto, o en su defecto, ellas mismas dirigir las actividades domésticas.
Otro grupo también ocupa el tiempo en las labores domésticas, lavar, planchar, ver los
estudios de sus hijos, etc.
Pero no siempre es así, sobre todo cuando responden que el comedor les quita
tiempo, y esto es porque tienen que estar en las reuniones y estas suelen ser largas, o
cuando se obligan a cocinar rotativamente, o son obligadas a participar de las marchas de
reclamo (que los niños aprecian, por cuanto se van todos a las calles y se quedan sin que
nadie los vigile) y es cuando la imagen de ellas se va desdibujando, y se las tilda de:
alborotadoras, chismosas, callejeras; y más aún, que hacen "lo que les da la gana". El
pequeño grupo que se refiere al comedor como una pérdida de tiempo, lo hace
refiriéndose a este punto, pues inmediatamente lo asocia a los problemas de índole
conyugal. Hay un tema que nadie ve, ni estudia y es por cuanto tiene que ver con aquellas
humildes luchadoras, sufridas heroínas de estas organizaciones. Ellas si como cualquier
mujer están en pleno proceso de problematizar su situación, como cualquier sujeto trae
consigo una serie problemas, pero no obstante toman decisiones, la más importante, la
formación de los comedores populares. Pero pronto queda la directiva en mano de
aquellas más instruidas y que no necesariamente precisa de los servicios del comedor
popular, es más no laboran en otras actividades, disponiendo de tiempo para las gestiones
y reuniones, pero que en sí forman un círculo vicioso, se enquistan en la directiva,
fomentan la desigualdad, se vuelven tiranas y conminan a las otras mujeres a seguir una
especie de dictadura, máxime si entre ellas hay quienes están al servicio de una bandera
política o pretende un lugar expectante en esa línea, quedando una vez más, aquellas que
más lo necesitan a merced de las primeras, que trabajan, que no tienen tiempo para
atender a sus propios hijos y que terminan endeudadas por no poder asistir a las
asambleas y sufren la pena de ser amenazadas con la expulsión del comedor, o en todo

Blondet/Montero, 1995.
2 1 9
Observación de primera mano. Gamarra es el emporio comercial de confecciones en prendas de vestir más
grande del Perú, está situado en el distrito de La Victoria, en Lima. Gamarra es el nombre de la calle donde está
ubicado, y si bien la mayoría de las prendas se hacen en esa calle u otras aledañas, se estila además la confección a
destajo, fuera de esa zona. Las mujeres recogen los cortes de tela y los hilos y los llevan a sus hogares, donde
cuentan con una máquina industrial y una remalladora, con las cuales realizan sus labores y generan un ingreso
familiar dentro del hogar. La señora puede recoger los cortes yendo al taller central dos o tres veces por semana,
para recoger los cortes y entregar las prendas ya confeccionadas. Entonces, no cocina y se vuelve productiva, y
además compra el menú del comedor popular por un precio económico.

194
caso pasar a la condición de "casos especiales" que es una condición por medio de la cual
el resto las ve como casos inferiores, expresándose esto con discretos gestos de
conmiseración o fingida pena que lo que hace es reforzar su precaria situación para saberse
poseedora de alguna ventaja material y/o espiritual. Son las mujeres que viven con su
"compromisos" , que han sufrido "abandono", son "madres solteras", o cuyas parejas han
220

devenido en "padres borrachos". Aunque no siempre son sólo mujeres, también hay
hermanos huérfanos que están a cargo del mayor o por sus abuelos, etc.
Pese a las diferencias que existen alrededor del comedor, todos son conscientes
de que si están participando del comedor popular es porque les conviene y se benefician
mutuamente, después de todo al comedor se va en esas condiciones, nadie que tenga las
comodidades necesarias va a él. La generación de una serie de discriminaciones que dan
forma a la estructura de poder al interior del comedor se da conforme pasa el tiempo, pues
hay quienes se sirven del comedor y pese a la superación de las necesidades básicas han
hecho de los comedores un estilo de vida, pues prefieren seguir en el comedor e invertir lo
ahorrado en sus pequeños negocios o construir otro piso más, poner a sus hijos o nietos en
colegios particulares del barrio, etc. Son las mujeres que van adoptando una conducta
soberbia, pues ellas son las que generalmente ofrecen su garaje para que funcione la
cocina, conoce los mecanismos para la recolección del dinero y el cheque del Banco de la
Nación y hace gala de conocer a todos los funcionarios y de tener influencias, el beneficio
es mayor cuando la subvención establecida para un número X de familias, se mantiene (por
años) cuando las asociadas (después de cinco, diez ó más años) dejan de acudir sin
renunciar, así las mujeres que están en la directiva siguen recibiendo una subvención que
no va de acuerdo a las necesidades, esta vez por exceso, pues hay desidia por parte de las
autoridades para controlar la veracidad de la información presentada, una desidia que en sí
lo quiere es evitar un papeleo que convendría socíalmente para hacer más eficiente a estos
comedores.

Hablar de comedores populares mencionar el trabajo de alimentar a la población


popular urbana organizada, es un tipo de organización que tiene como objetivo la solución
del problema básico de la alimentación, para que puedan alcanzar los medios económicos
para mejorar sus ingresos familiares. Por ejemplo, se espera que logren formar talleres de
costura, de tejido, de artesanía, de gestión, la experiencia, incluso es útil para animarse a
establecer su propio negocio, el que puede partir desde una pequeña tienda, hasta una
casa de confección de ropa.

220 E t
s e término que utiliza las mujeres de los sectores populares urbanos para indicar que viven con un
e s u n

hombre con el cual ellas no están casadas (este puede ser casado, soltero, viudo o divorciado) como si lo
estuvieran. Se caracterizan precisamente por conformar familias inestables, donde la continuación de la relación
generalmente se basa en una serie de concesiones que las mujeres hacen a sus compañeros en diversos aspectos,
sobre todo económico, cual es sólo responsabilizarse de la mujer y lo hijos con él habidos.

195
Entonces se puede ver que efectivamente, La idea es que ellas generen sus propios
ingresos y de forma democrática, sin generar discriminación entre ellas, pero no siempre es
así, la participación de las mujeres en estos talleres, se hace difícil para algunas, las más
necesitadas no pueden esperar la venta del producto y esperar una comisión, necesita la
garantía de un ingreso fijo semanal o diarto (cuando se es ambulante), es ahí cuando
empieza la automarginación.
La existencia de comedores populares es un claro síntoma de pobreza en nuestro
país, ahí radica la diferencia entre los comedores y los restaurantes, la capacidad de
escoger se limita, la pobreza cierra el abanico de probabilidades en todos los sentidos.
Esta limitación que se ensaña con los más pobres en su mínima institución (la familia)
también tiene limitada el número de escuelas para poner a sus hijos, si acaso no están
condenados a no acudir.
Lo ideal sería que no existieron los comedores populares, que no intervinieran las
ONG en el Perú, que la pobreza decaiga paulatinamente. Que la intervención de institutos
no tengan en el discurso de los informes ese sutil racismo, que hace mencionar a los líderes
populares tan solo por "Juana", "Meche", "Rosa", algo que poco a poco está cambiando;
por otro lado, como no hay mal que por bien no venga, esta etapa en la historia del Perú,
tiene la virtud de ver a las mujeres en acción fuera del hogar participando organizadamente
en términos autónomos.
Si en un primer lugar uno puede rescatar fases y sobre ellas la del ochenta. No se
puede obviar esta experiencia que nos pone en un lugar algo equitativo en la solución de
los problemas sociales. Otro tipo de casos que tienen que ver mapas con el poder lo
estamos estudiando a nivel político, su lugar, los comedores populares como tal
resolvieron en parte la falta de alimentación y de otro lado produjeron un ensayo de lo que
podría hacer el conjunto de mujeres en pos de una meta, los alcances y las limitaciones.
Que los comedores populares han llegado a su tope, no se puede afirmar sin
correr el riesgo de que la realidad nos demuestre lo contrario. Hasta donde puede seguir el
proceso de poder popular femenino, tampoco. Cada participante de alguna manera ha
sido afectada positivamente, unas más que otras.
De aproximadamente 23 millones de habitantes, 951 mil beneficiados que
equivalen al 4% sí es una cifra interesante. Si responde a la emergencia nacional en los
años de crisis. Esta energía canalizada en principio a los comedores y sus derivados,
afectadas por algún poder y disgregadas deben ser diseminadas a fin de que sirven a las
nuevas generaciones como una vertiente a la que se les pueda oponer una escala en el
cambio, en esa búsqueda de la justicia social, que en el Perú primero debe haberla en
términos culturales.

196
10. LOS ORGANISMOS NO GUBERNAMENTALES DE
PROMOCIÓN PARA MUJERES

Las Organizaciones No
Gubernamentaies de promoción
para mujeres han tenido y tienen
en la actualidad una importancia
vital sobre todo en Los sectores
populares urbanos y los sectores
campesinos. Pero lo cierto es
PJUPJp que estas ONG llamadas también
de desarrollo, tiene por lo
general tres objetivos y son:
investigar, promover y fomentar
el desarrollo, los que pueden conjugarse como son el caso de Casa de la Mujer Peruana
Flora Tristán y el Movimiento Manuela Ramos, los más representativos. En cuanto a su
radio de acción, interés y forma de abordar los problemas femeninos.

Para que una ONG funcione es necesario que se crucen tres variables el contexto
socio-económico, el movimiento barrial y el financiamiento nacional e internacional que
Impletnente los programas . En el Perú el contexto socioeconómico fue especialmente
221

crítico en los años ochenta, por otro lado la población se agrupaba y organizaba en torno a
algún beneficio en su favor.
Díaz Albertini destaca los siguientes períodos desde 1950 hasta 1982.
a) Asistencialismo-paternalismo 1950-60
b) Autoayuda y desarrollo Comunal 1961-68
c) De la Cogestión a la autogestión 1969-75
d) Promoción como concientización 1976-82

a). Característica de este período es la acelerada migración que originó las


primeras invasiones. La organización barrial estaba en torno a la toma y defensa de los
terrenos ocupados. La Iglesia Católica, los grupos de damas y otros grupos voluntarios

2 2
' Díaz Albertini, 1989.

197
prodigaron alimentos, ropa y materiales. Los alimentos por trabajo (food for work) que
provenían del gobierno de EE.UU eran distribuidos por CARITAS (Catholic Relief) y O FAS A
(adventista). Por otro lado Odría centralizaba estas obras de "caridad".

b). La segunda etapa coincide con el reconocimiento de Los barrios marginales


(Ley 13517), mientras que en Lima el ritmo de crecimiento de los mismos se acelera. Por
otro lado el éxito de la Revolución Cubana en 1957, hizo que tanto el gobierno como los
grupos de "derecha" impulsaron el "desarrollo comunal" a través de la "auto-ayuda",
filosofía norteamericana (vacuna antirevolucionaria). Belaunde lo etiquetó como
Cooperación Popular, un programa que utilizó en su beneficio político. La organización
autónoma aun no se realizaba, las mujeres no eran en estos escenarios protagonistas
relevantes. Los partidos políticos dirigían la opinión de estos sectores sociales. A nivel
político el trabajo de las ONG de desarrollo, de izquierda, trabajaban con sindicatos y
gremios laborales ofreciendo mediante asesoría legal y capacitación. Por otro lado la
Iglesia Católica luego de la reunión de Medellín (1968) asume la opción por las más pobres
y desarrolla un trabajo de educación popular.

c). Los períodos anteriores indican el progresivo avance de la organización


comunal. Velasco inicia una nueva relación con el pueblo, autogestión es la característica
de su gobierno, se puede asegurar que las mujeres tuvieron en esta etapa una participación
más activa en ambos frentes (las feministas y las de los barrios populares). El gobierno
militar dio a la mujer protagonismo, esto se manifiesta con la creación del Comité de
Revalorización de la Mujer (COTREM) en el marco del Plan Inca en 1972 222
y la Comisión
Nacional de la Mujer Peruana (CONAMUP) por D.L. 21045 el 30 de diciembre de 1974, por
medio de esta se organiza una vía por la que convergieron mujeres de diversos sectores
sociales en favor de ellas en el proceso "revolucionario", antes, en 1973 un grupo de
mujeres de clase media fundó Acción para la Liberación de la Mujer Peruana (ALIMUPER)
pero aún las ONG no actuaban directamente con ellas. A nivel mundial, por el esfuerzo
generado por las feministas la Organización de las Naciones Unidas declaró 1975 como
Año Internacional de la Mujer, una buena caja de resonancia . 223

d). El progresivo desarrollo popular descrito nos da una imagen que viene de un
paternalismo gubernamental a la autogestión popular. El Estado pronto abandona parte
de sus obligaciones socioeconómicas. Con Bermúdez, hasta las mujeres se vieron
necesitadas de salir a las calles frente a este abandono. La organización popular tiene dos
opciones; los partidos políticos de izquierda y las ONG para obtener soluciones a sus
problemas. Las ONG se habían dirigido fundamentalmente hasta entonces al sector

™ Blondet, 1994.
™ Roig, 1981.

198
laboral. Por otro lado es este el período más importante de las ONG y que tiene que ver
con el avance femenino en el ámbito público, y que coincide con el comienzo de la década
del ochenta, la que más frutos y oportunidades brindó a la mujer para llegar a la toma de
decisiones, hasta entonces las mujeres socialmente estaban subordinadas a los varones.

La ONU declaró 1976-1985, el Decenio de la Mujer, con ello las feministas en el


Perú tuvieron mayor cobertura, en este período se fundan nuevos grupos feministas, y se
inicia no solo la concientización de los grupos populares sino también de las mujeres, al
principio desde la sexualidad en el plano laboral y el legal, más adelante se verá el giro
que es el más enriquecedor, cual fue el trabajo directo con las organizaciones populares
femeninas.

Los pueblos jóvenes ya habían logrado su etapa de "madurez", existía ya una base
de organización comunal sobre la cual se podían establecer proyectos que además estaban
garantizados por ese aire de solidaridad que reinaba no por el interés del logro de una
meta (títulos, agua y luz), sino también por el fomento de las ideologías de izquierda, la
llamada "mística". Pero no había sino llegado tarde tal conciencia, la crisis económica
agudizada en el gobierno de Belaunde, hizo que estos propósitos pasen a segundo plano,
el poder adquisitivo se redujo a un límite tal que del ingreso familiar, un 65% o más iba
hacia los alimentos. Este fue el comienzo de un paulatino y creciente ataque al "reino" del
ama de casa. El pueblo joven, la organización comunal (masculina) hasta entonces perdió
fuerza, el gobierno no le dio sino el tiro de gracia al municipalizarlos, estos dirigentes
optaron por atrincherarse en ellas mediante los partidos. Mientras tanto, las mujeres
enfrentaban el problema alimenticio, atrás quedaron los programas de concientización,
habían que hacer frente al hambre mediante las llamadas "estrategias de sobrevivencia"
alrededor de los cuales se capacitó y asesoró a los primeros grupos de mujeres. Del
conocimiento de la realidad nacional, a la acción dinámica popular. Así ONG y mujeres
organizadas unieron esfuerzos para superar los años más críticos de la historia republicana
que estaba impregnada de pobreza, violencia y fragmentación al Interior de los sectores
populares.

Las ONG en el contexto femenino han hecho muchos avances en cuanto a la


mujer. En ta educación, en el trabajo, en la salud, en los comedores populares, en la
promoción de ta empresa, y también en el aspecto político, en tanto que de este tipo de
labores emergieron varias lideresas populares.

Como es sabido, las ONG tienen en el Perú toda una trayectoria de trabajo y se ha
ido incrementando sobre todo a partir de los ochenta, que puede ser comparable con los
ingresos que el Perú recibió vía cooperación técnica internacional.

199
FERÚ: 1 9 7 7 , 1 9 8 4 , 1 9 8 9 , 1 9 9 0 Y 1 9 9 3
N U M E R O DE O N G D
SEGÚN A Ñ O S

AÑO N° de ONGD

1977 30-40

1984 218

1989 616

1990 703

1993 895

Fuente: Perú, Ministerio de Justicia, 1995.

PERÚ: 1 9 8 5 - 1 9 9 0
C O O P E R A C I Ó N TÉCNICA INTERNACIONAL RECIBIDA
(en millones de dólares)

N° Total N° Proy. Total

AÑOS Bilateral Multilateral ONG Proyectos Mujer CTI

1985 75 908 25 898 15 668 302 - 117 475

1986 100 038 30 896 19 154 311 - 150 089

1987 107 006 36 814 25 325 299 - 169 146

Í988 139 280 29 068 32 327 281 - 199 847

1989 113 735 41 271 48 615 286 - 204 622

1990 258 284 26 982 26 982 248 8 331 454

Fuente: Perú, Ministerio de Justicia, 1995.

Se puede apreciar que entre el lustro 1984-1989 se dio la mayor expansión, los
años siguientes no se caracterizaron por La restricción de los fondos a las ONG, con la caída
del Muro de Berlín, los fondos que eran destinados a América Latina no podían seguir por
cuanto primero se debía atender los problemas que al interior de Europa se generarían por
la difícil incorporación de trabajadores del Este a la Europa Occidental. "La caridad
empieza por casa".

200
Entre las primeras ONG pueden considerarse al Centro Flora Tristán y el
Movimiento Manuela Ramos que han trabajado no solo en la promoción sino en el
campo de la investigación. Estas hacen política en el espacio tradicional y en el de
224

mujeres .
A partir de los años ochenta estos grupos han formado redes de coordinación que
agrupa a diferentes ONG e instituciones u organizaciones sociales de mujeres. Esto se ve
reflejado en la distribución de los proyectos, en el que la capacitación sobresale con más
del 50% desde 1975 hasta 1986.

PERÚ:1975-1986
D I S T R I B U C I Ó N D E LOS PROYECTOS D I R I G I D O S
A LA MUJER SEGÚN ÁREA DE A T E N C I Ó N

3975-79 1980-83 1984-86

Capacitación 54,0 62,0 52,0

Generación de ingresos 15,0 22,0 27,0

Servicios 28,0 11,0 12,0

Otros 3,0 5,0 9,0

Total 100,0 100,0 100,0

Fuente: Perú, Ministerio de Justicia, 1995.

A partir de la década de los noventa los frutos de esta capacitación provienen


de los programas de acción. En ellos las mujeres promotoras se multiplican, y ya no
solo se incluyen a mujeres que conozcan el predicamento feminista, había más interés
por el apoyo que desde las instituciones podía llegar en general se motivaron por
razones a estas últimas. Las jóvenes de la década del setenta eran por lo general de las
clases medias egresadas de las escuelas de CCSS (profesoras, sociólogas, etc.); en los
noventa, el componente de las mujeres de sectores populares ha crecido mucho y
carecen de la influencia de "las utopías de revolución y cambio social" . Las nuevas 225

integrantes de origen provinciano, se encuentran en pleno desarrollo de su realización


profesional. Este fenómeno se ve en las zonas urbanas, aún, a nivel de todas las ONG
pese a todo el esfuerzo las mujeres no igualaron al número de promotores varones,
sobre todo en el área rural.

2 » Blondet, 1994.
« 5 Blondet, 1994.

201
PERÚ:1991
D I S T R I B U C I Ó N DE P R O M O T O R E S DE O N G FOR SEXO
SEGÚN Z O N A D E TRABAJO (%)

SEXO URBANA RURAL TOTAL

Hombres 54 77 67

Mujeres 46 23 33

Total 100 100 100*


* N° de casos - 205.

Fuente: Perú, Ministerio de Justicia, 1995.

En la década del noventa las ONG con acción a la mujer reflejan que el plano de la
investigación académica está superada por la práctica social, y esto no hace más que
reflejar la situación peruana que en 1991 ya contaba con 42 ONG especializadas en la
mujer, y con por lo menos 35 con un programa dirigido a ellas, véase:

PERÚ:1991
A C T I V I D A D PRINCIPAL DE LAS O N G C O N A C C I Ó N HACIA LA M U J E R

ESPECIALIZADO CON PROGRAMA

ACTIVIDAD PRINCIPAL EN LA MUJER DE MUJER TOTAL

N° % N° % N° %

Acción 38 90,4 25 71,4 63 81,8

Académica e investigación acción 4 9,5 10 28,6 4 18,2

Total 42 100,0 35 100,0 77 100,0

Perú: Ministerio de Justicia, 1995.

En los noventa se aprecia que los proyectos de las ONG pueden dividirse entre los
que forman parte de la promoción, extensión y desarrollo orientados a que las mujeres
tomen conciencia y actué de manera libre y segura en su papel de mujer dentro y fuera de
la familia; por otro lado la vía de la investigación, que analiza la problemática de las
mujeres aplicando las teorías sociales en busca de solución y/o mejoras en el proceso.

202
Si bien la mayoría de estas ONG han hecho una labor destacada en cuanto a la
organización social de mujeres, sobre todo en la generación de ingresos y logros sobre la
distribución de los alimentos que se dieron a los comedores populares, de cuya
experiencia se ha publicado abundante bibliografía como las de Violeta Sara-Lafosse , 226

Carlos Kawata , Maritza Villavicencio , Anna Boggio , Marcela Chueca , Patricia


227 228 229 230

Córdoba , Nora Galer , Duran, 1994; y Blondet/Montero, 1995 y otros . En ellas se


231 232 233

puede apreciar el rumbo del proceso del desarrollo de los comedores populares y su
contraparte las Organizaciones No gubernamentales, las primeras publicaciones nos Eleva
a entender a los comedores populares como una respuesta a la crisis, en este sentido lo
que se presentan son informes sobre este fenómeno, a mediados del 1987 se habla de
estos comedores como una vía de promoción de las mujeres, la organización cobra
mayor importancia, en este caso Marcela Chueca es muy optimista . A fines del ochenta
234

se puede apreciar que la Literatura versa sobre el movimiento de mujeres en torno a los
comedores. Los últimos informes en los noventa, estos comedores están considerados
como portadores de una propuesta orgánica frente a la crisis. No cabría referirse solo a
la descripción de la distribución de alimentos, la formación de líderes, la capacidad
organizativa que lleva a la metropolización de estas organizaciones y su sintonía con las
políticas del Estado no podían haberse comprendido sin la participación de las ONG.

El otro aspecto que siempre estuvo presente pero que tuvo el eco de Los
comedores ni la violencia política, que fueron la mayor preocupación de la comunidad
peruana, es y no se puede negar, la violencia doméstica, el abandono familiar por parte
de los maridos y la gama de atropellos de que son víctimas las mujeres en razón de su
género, problemas que se desarrollan a nivel familiar y cuyo origen matriz es materia de
las teóricas de vanguardia . 235
Nos referimos solamente a la violencia doméstica, sin
querer decir que no sean afectadas las mujeres en los ochenta por la violencia política
(sobre todo en las zonas rurales) en ellas participaron sobre todo abogadas, asistentes
sociales, y sociólogas en que los casos varían entre el maltrato físico, la violación a
menores al interior de la familia, el abandono del hogar, la amenaza y otros problemas
que en principio fueron denunciados por las mujeres de los sectores populares,
sabiéndose que por otro lado es un problema que afecta a las mujeres de todos los

2 2 6
Sara-Lafosse, 1984.
2 2 7
Kawata, 1985.
22
« Villavicencio, 1989.
2 2
' Boggio (etal.), 1987.
™ Chueca/Pérez, 1989.
Cordoba/Gorriti, 1989.
2 3 2
Galer/Núñez, ¡989.
2
" Delpino, 1991.
2
" Chueca/Pérez, 1989.
2JS
R a g u z , 1986; Pimentel, !988;yOrvig, 1986.

203
sectores socioeconómicos. Sobre ese tema las publicaciones han sido numerosas, las
ONG incluso, han llevado este problema a otras latitudes en las cuales han encontrado
eco, llegando incluso a formar a comienzos de los noventa un grupo latinoamericano
CLADEM que se ocuparía de estudiar estos problemas.

Podemos afirmar que, sea el área al que acceden las mujeres, o solo observen y
tengan en la mira, ese es su interés. Los estudios corresponderán a la trascendencia que
cada problemática ofrezca. Las ONG no hacen sino actuar en aquellos sectores olvidados
por el gobierno y, en su defecto, estar a la vanguardia de los intereses internacionales
(ecología). La información que estas instituciones brindan es el mejor material cultural que
pueden dejar a la posteridad.

El aspecto laboral de las mujeres es con el tema de las mujeres campesinas uno de
los más ricos. El trabajo de los campesinos no había podido ser mejor investigado, el
trabajo que ellas realizan tanto dentro y fuera del hogar, que además tiene participación en
la comercialización de los productos que cultivan, amén de otras labores como el hilado y
tejido de lanas o elaboración de quesos, y/o artesanías, los que antes no estaba
considerado debidamente, ya han sido puesto sobre el tapete; incluso las ONG de las zonas
rurales han recuperado en ellas la red del trabajo familiar, en el que se incluyen en el
ámbito laboral también a los niños. Dos impactos sociales son en este caso materia de
interés, la Reforma Agraria para la década del setenta y la violencia generada por Sendero
Luminoso, ambos cargados de una fuerte concepción ideológica, en el primero los
trabajadores de las ONG adquirieron los conocimientos necesarios y fomentaron entre
ellos la apertura a esos espacios, en el segundo, una situación contraria por cuanto Sendero
Luminoso lejos de permitir esta participación y/o ayuda atacó estas en pos de una
radicalízación de las diferencias socioeconómicas.

La vida privada, familiar, los cánones que las rigen, su ingreso a la modernidad, los
conflictos al interior de las comunidades y dentro de ellas las mujeres, salta a la vista. Han
descubierto la doble opresión que sobre las mujeres campesinas recaen en los años de
crisis donde ellas son las que menores posibilidades tienen de acceder a los beneficios de
la migración.

Las mujeres campesinas y la parte que les toca a aquellas, que por esposos tienen
a los mineros y demás trabajadores de empresas inmensas que a la postre de la alienación
cultural han modificaron el rostro de las ciudades del interior.

Las mujeres de las comunidades nativas, las informales, las normas legales, los
problemas, el control de la natalidad, todas las situaciones, las que atraviesan a todas las
mujeres son materia. La creación de redes agrupa temas y ha sido la mejor herramienta
204
para diseñar sus proyectos y hacerlos más efectivos (ver cuadro) estas redes se
empezaron a formar desde fines de los ochenta y su radio de acción pasa las fronteras,
estas redes tienen a su vez comunicación directa con sus pares internacionales, y como
veremos más adelante mucho tienen que ver no solo a nivel de organizaciones privadas
sino que han llegado a los niveles Estatales por medio de los vínculos que los grandes
organismos internacionales reconocidos por los gobiernos de todas las naciones
afiliadas. Hablamos de OIT, ONU, OMS, UNESCO, UNICEF, etc. y también en instituciones
dedicadas al comercio.

REDES Y C O O R D I N A D O R A S

• Coordinadora Nacional de Derechos Humanos


• Grupo de Trabajo Agro-Alimentario
• íntercentros Salud
• Red de Educación Popular Entre Mujeres
(afiliada al Consejo de Educación de Adultos de América Latina, C E A A L )
• Red Nacional de la Mujer Rural
• Red Nacional de Promoción de la Mujer
• Colectivo de Derechos Reproductivos
• Coordinadora del Movimiento Feminista.

Fuente: Blondet, 1994.

Lejos de ser una apuesta de gobierno, los inicios de esta vocación que hoy se da
por las mujeres, viene de las feministas, de las ONG que ellas Uderan y que con seriedad en
los trabajos han desarrollado y hecho viable esta propuesta de creciente actualidad.

El producto se ve en las organizaciones populares femeninas, pero a mediados de


la década del noventa, un efecto político les ha quitado protagonismo a las organizaciones
femeninas.

205
11. LAS MUJERES Y LA LEGISLACIÓN PERUANA

Situar a las mujeres en el aspecto legal y recorrer


estos últimos treinta años nos va a permitir ver
cómo es que las leyes aunque lentas, se adecúan
de acuerdo a los cambios, que en este caso es la
reafirmación en el campo laboral. Desde
comienzos de siglo se puede observar que las
mujeres fueron materia de debate para los
legisladores y que si bien en un principio éstas no
podían desligarse de las obligaciones "inherentes
a su sexo" si pudieron acceder a otros campos, al
laboral, al de ciudadanía al tener derecho al voto,
a actuar libremente en el mundo comercial, y
paulatinamente a la igualdad de derechos dentro
del matrimonio.
En estos casi treinta años, las mujeres han pasado a una etapa que puede llenarse
de gran movilización en todos los sentidos. Destaca sobre todo en el plano del Estado, el
gobierno de Velasco que abrió dependencias dispuestas a lograr una mayor participación
de las mujeres en la Revolución que él protagonizaba (una movilización social / un
zarandeo social). Si se tiene la perspectiva por gobiernos, habría que considerar sus etapas,
la primera del general de división del Ejército, Juan Velasco Alvarado; la segunda,
correspondiente al gobierno del general de división del Ejército, Francisco Morales
Bermúdez, la tercera, la de los regímenes civiles en los ochenta, representadas por el
segundo gobierno del arquitecto Fernando Belaúnde Terry y el sociólogo, Alan García
Pérez; y por último, un régimen cívico-militar que corresponde a la década del noventa y
que estuvo a cargo del ingeniero agrónomo y matemático, Alberto Kenya Fujimori Fujimori.
Ello quiere decir que las leyes de acuerdo al proceso histórico que protagonizan en la
sociedad peruana dependen políticamente de los gobiernos de turno en materia
legislativa y que ei accionar de sus gestiones no necesariamente tiene relación con las
directrices que de estos emanan.

206
Si descubrimos estas cuatro fases vamos a comprender que las leyes no se dan
necesariamente en el marco mismo en el que los problemas se manifiestan. Como en
todo, las leyes en el Perú son las que legalizan una situación ya dada y aceptada
socialmente.

11.1. Entre las décadas de 1960 y 1970

En los años sesenta podemos apreciar como los textos en materia jurídica son más
referidos a la familia, la mujer corresponde a ella y recobra más derechos desde su papel de
ama de casa, mujer casada sería la mejor expresión; en el plano laboral los estudios se
remitían a leyes dadas en los comienzos de siglo a los del cuarenta, en otras palabras, se
ponía de manifiesto una opción por los problemas inherentes a la clase medía, fuerte hasta
entonces. Esto tiene concordancia con lo que significa el naciente grupo de feministas en
los últimos años de este siglo. El acceso al comercio y el problema del aborto así como el
establecimiento de normas que permita un acceso a otras profesiones masculinas (servicio
militar), eran temas tímidamente abordados a decir de los trabajos publicados hasta
entonces . 236

En el gobierno de Velasco, como dijimos anteriormente se dio impulso a la


participación de la mujer, y esto se puede ver no solo en la promoción que el gobierno
hacía de ellas en sus líneas de actividad, la preocupación por su situación legal en todas
las áreas de la economía y la sociedad en general se manifiestan en la publicación del
libro "La Mujer en la Legislación Peruana . 237
En el se puede entender el esfuerzo por
parte del Estado por procurar a las mujeres una situación más favorable en el Plan Inca,
en un artículo: "Efectiva igualdad con el hombre en derechos y obligaciones",
"eliminación de todo trato discriminatorio", y el más importante "promover la educación
mixta"; además de "garantizar que los bienes comunes no sean dispuestos por decisión
unilateral del esposo".
Si bien es cierto que desde el Código Penal de 1924 y la Constitución de 1933, no
se establecía una discriminación por sexo , las diferencias desde los hogares se mantenían
238

hasta las esferas laborales. Al revisar los temas de materia legal aplicados a la mujer
resaltan son los temas de educación, salud, campesinado, trabajo, violencia y los que están
vinculados con el rol maternal; de otro lado lo que la constitución y los códigos civil y penal
sobre las mujeres determinen.

2 3 6
C E P D , 1979.
Perú-SINAMOS, 1975.
m
C E P D , 1979.

207
La doctora Ana María Yáñez, ha publicado varios trabajos sobre este aspecto los
que va reactuallzando de acuerdo a las novedades que se van expidiendo , en aquellos 239

títulos en el que se expresa una configuración general de los derechos de la mujer, la mujer
de hoy puede instruirse y a partir de ello situarse en sus derechos en casi todos los sectores
de la actividad social. Los temas recurrentes son en este caso los relacionados a la familia y
sobre todo en lo que constituye a la triste etapa de la disolución matrimonial, el
matrimonio pronto muestra en este punto las desventajas de la mujer frente al hombre. A
pesar de todos los avances en esta materia, los abusos que al interior de las relaciones
entre hombres y mujeres, es víctima la mujer (por lo general) siguiendo el meollo de los
signos exteriores de violencia que exhiben las mujeres en todos los ámbitos, que no se
manifiesta abiertamente, sino que es soportada por una serie de cánones que sobrepasan
el poder de la legislación. Divorcio, adulterio, maltrato físico, aborto, violencia psicológica,
secuestros, prostitución, seducción, y el famoso tema de los juicios por alimentos son los
causantes, por lo general de las primeras formas que la mujer ingresa al enmarañado
trámite judicial.
El trabajo que es la punta del iceberg, en lo que a la transición del ámbito privado
al público se refiere, es en suma el tema más importante para las mujeres, es el que más se
ha estudiado en estos últimos años. Las razones que tiene que ver con la crisis, la
educación, el capitalismo internacional, etc. no han podido sin embargo en materia de
legislación plasmarse con la debida oportunidad, ia mentalidad de los conciudadanos
(mujeres y hombres) no cambió lo suficiente para aceptar lo que viene a ser un hecho, las
mujeres al lado de los hombres, en todos los horizontes generados por la humanidad.
A partir de 1968, el 3 de octubre para ser más específicos por Decreto Ley N°
17063, las FFAA actuar, según el Estatuto Revolucionario, fruto de la serie de reformas
nació, el 30 de diciembre por D.L. N° 21045 la Comisión Nacional de la Mujer Peruana
(CONAMUP), que se instaló el 4 de febrero de 1975 promulgándose su estatuto el 16 de
julio de 1975. En este marco el gobierno peruano, por D.L. N° 21177 de 10 de junio de
1975, ratificó la Convención de Derechos Políticos de la Mujer aprobadas por la ONU el
20 de diciembre de 1952, este hecho que puede ser tomado tan solo como un gesto (por
cuanto la constitución del 1933 la garantizaba), cobró importancia política, más si se
tiene en cuenta que el 12 de noviembre de 1974 el gobierno estableció por D.L. 20788 el
servicio Militar Femenino de Voluntario en Paz y Obligatorio en Guerra, la reserva sería
para aquellas cuya edad correspondería entre los 18 y 45 años, cuando a los hombres les
correspondería de 18 a 55 años.

Yáñez, s/f.; Galín/Yáñez, 1982; Yáñez/Galin, 1985; Yáñez/Guillén, 1994.

208
En febrero de 1973 por Decreto Supremo se había creado el Reglamento de
Re valorización de la Mujer, en ellos se hacía el llamado al Ministerio de Educación, al
SINAMOS, al Ministerio de Trabajo, Ministerio de Salud, Ministerio de Transportes y
Comunicaciones, y a la Comisión Nacional Peruana de Cooperación con la UNESCO.
La CONAMUP creada en diciembre de 1974 se instaló en febrero de 1975 y fue
presidida por la esposa del Presidente de la República, era una institución autónoma que
solo dependía directamente de la presidencia. Duró tan solo dos años y nueve meses
cuando la Ley que la creó ( D I . 21045) fue derogada por el D.L. 22127. Se entendía que las
funciones que esta desempeñaba también podían ser cumplidas por las otras
dependencias del Estado.
Hasta 1979 la Constitución vigente era la de 1933, el Código Civil de 1936, el
Código Penal de 1924, el Código Sanitario de 1969 y el Código de Comercio de 1902 . El 240

régimen militar paulatinamente hizo excluir de ciertas medidas que discriminaban a las
mujeres. La vida de las mujeres aun era soportable, más no tanto para aquellas de la clase
media, como se verá estas mujeres pusieron más empeño en la reforma de muchas normas,
por cuanto ellas eran las más afectadas directamente.
Si el Plan Inca (Plan del Gobierno Revolucionario) de 1974 suponía la "efectiva
igualdad con el hombre en derecho y obligaciones" como el objetivo de sus acciones
según el Artículo 23. El Pían Tupac Amaru de 1977 en su Artículo 30 repitió lo que el Plan
Inca pero esta vez ampliando algunos conceptos, como lo el modificar el Código Civil y las
leyes que restringen los derechos de la mujer.
Según la Constitución de 1933, no se discriminaría en nada a la mujer, la
redacción de los derechos se hace en forma genérica del "ciudadano", y si bien la
Convención de Derechos Políticos de la Mujer aprobada por las Naciones Unidas en 1952
fue recién ratificada por D.L 21177 de 10 de Junio de 1975, esto no significó que los
derechos de las mujeres mejoraran, fue tan solo un gesto puesto que la Constitución del 33
los garantizaba de antemano. Además ya en 1974 (12 noviembre) establecía a la mujer el
derecho y/o obligación de la participación militar.
En cuanto al Código Civil de 14 de noviembre de 1936 los derechos se mantenían
iguales salvo cuando la mujer se casaba. Según el art. 8 de este Código modificado por
D.L. 21994 la mujer adquiría el ejercicio de sus derechos civiles al igual que el varón. El
matrimonio es lo que sujeta a la mujer respecto al hombre, se emplea ya el término de la
autoridad marital. Más aún la mujer de catorce años que se casaba podía ya adquirir el
ejercicio de sus derechos civiles, pero el esposo representaba la autoridad conyugal
correspondiéndole a ella todo lo que es el hogar.

" O C E P D , 1979.

209
Para trabajar, la esposa necesitaba el expreso consentimiento aunque sea verbal
del esposo, solo en caso de juicios ella podía actuar sin el consentimiento del esposo. El
marido era el administrador de los bienes comunes, la mujer podría revelarse ante ello
siempre y cuando pruebe que lo que está haciendo el cónyuge era un abuso. La mujer solo
podía administrar con libertad sobre aquellos ingresos que sean adquiridos por su trabajo
(aquí cabe una reflexión, aún hoy se puede apreciar como el dinero que el marido gana es
considerado común de los dos, mientras que la esposa supone propios aquellos que
consigue por su trabajo y no les incluye como ingreso común), esta distorsión le da una
falsa seguridad a ella, tal vez esta forma de ver los ingresos sea la causa de este código que
en su momento era la única forma de que la mujer accediera a un bien de manera directa y
disponer de ellos sin intervención del esposo.
La patria potestad era ejercida por ambos durante el matrimonio, pero en cuanto
exista un conflicto conyugal esta pasaba inmediatamente al esposo. Solo en caso de
divorcio, los hijos la patria potestad pasaba a quien se confiaban los niños. Si el culpable de
la causal de divorcio era hombre, a este se le obligaba a pasar una pensión alimenticia a la
mujer, caso contrario, ella debería darle la pensión de ser rica, o si al marido le sea
imposible trabajar. Desde ya se consideraba a Las mujeres el criterio de "incapacidad
relativa de la mujer" . 241
En cuanto a los hijos, estos podían permanecer ai cuidado de la
madre hasta los siete años, después pasarían al padre, en caso de ser hombres y a la madre
de ser mujeres; cuando el esposo decidía quedarse con los hijos e hijas apelaban a su
capacidad adquisitiva, el poder darles una vida material mejor, la mujer podía oponerse, de
plano tenía todas las de perder.
En el caso de la adopción, este podía ser ejercido por hombres y/o mujeres sobre
niños en peligro y/o abandonados menores de 18 años; pero debían ser mayores de
cincuenta años, porque debía garantizarse que el adoptante sea mayor por 18 años que el
adoptado y que no tenga descendientes herederos. Según el D.L. 22209, de 15 de junio de
1978, ese tiempo se modificó a quince años.
En el aspecto laboral, como se dijo antes, la mujer casada debía primero contar
con la autorización del esposo, ella tenía como función principal el atender personalmente
el hogar. Y a pesar de que el Código Civil en su artículo 1572 establecía la Igualdad de
salario por trabajo igual en la práctica este no se dio. La jornada laboral de la mujer había
sido considerada como en la de los menores de catorce años, con restricciones de horario,
sin exceder las 45 horas semanales. En esta forma la protección de que gozaba la mujer no
era por ella misma, sino en función de la familia, de lo contrario se crearía el desorden al
interior del hogar, el problema iría directamente sobre el jefe del hogar. La maternidad

M I C E P D , 1979.

210
también protegía de alguna manera a la mujer (en el papel) asignándole ciertas
consideraciones que La ponían en un nivel de seguridad económica con tres meses de
sueldo en caso de ser despedida sin motivo alguno. Muchas veces estas prerrogativas se
vierten contra ella (hora de lactancia, descanso pre y postnatal y el establecimiento de
cunas por cada 25 niños en el que se reconoce como jefe de familia al marido). En este
punto cabe una reflexión que versa sobre el tratar de manera diferente a las mujeres
campesinas o nativas respecto a las de los centros poblados urbanos y en cuanto a la
situación civil de casada. El CEPD 242
decía que esto también debía aplicarse a todas las
mujeres en general sin distinciones, Lo que actualmente ya es un hecho.
En el comercio, el Código correspondiente (1902) al parecer no consideraba
discriminación alguna. Pero pronto esto se manifestaba cuando la mujer pasaba a ser
casada, podía comerciar solo bajo el consentimiento del marido y bajo escritura pública.
Por otro lado el esposo podía revocar esta autorización también bajo escritura pública.
Este permiso tenía un riesgo cuanto una vez que la esposa tenía esta facultad los pasivos
que su gestión acarreara eran asumidos por el patrimonio conyugal. Otra vía en la que
ellas podían ejercer el comercio era la viudez, el abandono o la prisión etc. Por otro lado
según los artículos 13 y 14 de este Código de Comercio "se determinan las personas que,
dadas sus condiciones y situaciones especiales, que son, también aplicables a la mujer,
están impedidas de ejercer el comercio y la profesión mercantil".
En cuanto a la Seguridad Social, las mujeres aseguradas podían contar con
atención médica, hospitalaria y de farmacia, prestaciones económicas tanto para las
obreras como para las empleadas en forma de subsidios durante el tiempo de descanso
pre y post-natal. Las mujeres también gozaban del asegurado, la esposa de un empleado
podía ser atendida en caso de estar embarazada a partir del sexto mes, mientras que la
esposa de un obrero no podía beneficiarse de estos servicios. En cuanto al Sistema de
Pensiones, la mujer si estaba beneficiada por cuanto era regla general. Entonces no
existían las licencias de suspensión Laboral sin que por ello evada el peligro de perder su
plaza de trabajo.
Las trabajadoras domésticas tenían en este caso todas las de perder. El día de
descanso era establecido por el empleador, podía disponer incluso de los días feriados (1
de mayo, 28 de julio y Navidad), ellos además trabajan hasta por más de 16 horas diarias y
a diferencia de tener un mes de vacaciones solo contaba con quince días. Tampoco existe
un sueldo mínimo.
La Reforma Agraria por el D.L. 17716 de 24 de junio de 1969, creó un
reordenamiento agrario de carácter estructural. Se trataba de la desaparición de los

2 « C E P D , 1979.

211
latifundios y minifundios. Esto hizo que se presentasen los postulantes a la adjudicación de
tierras agrícolas. Y una de las exigencias era la de ser jefe de familia según el artículo 84.
La mujer tenía en este caso que demostrar que calificaba como tal para poder ser
adjudicataria, en caso de que el esposo fallecía en el transcurso de los pagos del predio,
esta propiedad pasaba a la cónyuge y a los hijos, claro, después de la persona asignada por
el adjudicatario que esté trabajando la tierra; de otra forma, le encargada sería la Dirección
General de Reforma Agraria y Asentamiento Rural. Según Sara-Lafosse 243
si bien esta
Reforma ha querido ser una solución a la explotación, lo fue desde la ideología del
"sistema patriarcal urbano" tal efecto desconoció en la mujer campesina su condición de
trabajadora del campo con pleno derecho a ser beneficiarla de la Reforma Agraria. La
mujer propietaria de un fundo en forma directa, por compra herencia o matrimonio, estaba
en mejores condiciones que aquellas que estaba casadas o tenía un compañero.
En lo que respecta a la Ley de las comunidades Nativas, el D.L. 20653 hizo que la
colectividad nativa acceda a la vida económica del país y de este modo la dignidad de
aquellos se vio enaltecida. En cuanto a las mujeres como en la Ley de Reforma Agraria,
reconoce a las compañeras permanentes. Establecida la edad de sesenta años para los
hombres y 55 para las mujeres, hubo consideraciones, de forma condicional (55 y 50 años)
y. el de forma excepcional (veinte años en el hombre y quince en la mujer).
En el caso de La pensión de viudez,, esta se otorga a La viuda del asegurado
fallecido y al viudo en tanto tenga más de sesenta años y la madre mayor de 55 años. En
cuanto a los subsidios y pensiones de la mujer en el sector público, la mujer está facultada
para optar por La licencia por maternidad por sesenta días, quince antes del parto y 45
días después. Esta situación era discriminatoria al interior de las propias mujeres pues las
que trabajaban en el sector privado por las mismas razones tenía 84 días de licencia (42
días, antes y después del parto). Debemos concluir que hasta 1979 las diferencias se
basaban por el tiempo de empleo y por el sector, al no permitirse que las esposas de los
obreros sean beneficiados con la atención, mientras que los empleados sí, y que entre
empleadas públicas y privadas existían diferencias en las licencias por maternidad.
En materia educativa la Ley General de Educación D.L. 19326 de 21 de marzo de
1972 no pudo ser mejor aliada. Fomentó La importancia de la mujer en el campo político,
este sería el primer paso para darle otro sentido a su participación laboral, el actual. El
Código Penal de 1924, no discriminó al aplicar las sanciones correspondientes a los delitos
cometidos dentro y fuera del territorio sean hombres o mujeres. Entonces la pena de
muerte podía ser aplicada en casos extremos, como el homicidio. La diferencia se presenta
en el caso de el atentado contra el honor, si una mujer era violada esta dejaría de gestionar

M Sara-Laffose, 1983.

212
la denuncia si el culpable decidía casarse con la víctima. En el caso de que la esposa
matase al esposo esta podía ser penada hasta la muerte. Si una madre mataba a su hijo al
nacer o cuando ella se hallase en estado puerperal las penas podían ser rebajadas hasta
seis meses, bajo la consideración de una perturbación psíquica. El aborto era considerado
como un delito penal, solo estaba excluida la sanción por aborto terapéutico. Otra figura
delictiva era el abandono de personas desamparadas.
El Código Sanitario y protección a la madre de 18 de marzo de 1960 establecía
que la salud era un elemento indispensable para que los pueblos puedan desarrollarse, por
otro lado, consideraba la concepción como el inicio de la vida humana. En este sentido se
creó por D.S. 00451-74-SA, el Instituto de Neonatología y Protección Materno Infantil del
Ministerio de Salud, poco después se estableció que las mujeres embarazadas así como los
recién nacidos debían ser atendidos en los centros de salud de Estado en forma gratuita.
Se obligaba que la madre amamante a su hijo por cuanto aquella leche le pertenecía.

11.2. Entre las décadas de 1980 y 1990

La Constitución Política de 1979 y el Código Civil de 1984, mejoraron definitivamente la


condición jurídica de las mujeres. La Constitución no discrimina a la mujer, no considera a
la mujer menor en nada. Pero Lo que más sobresale es la diferencia que existe entre el
Código Civil del 1936 y el de 1984, las mujeres han ganado espacio y muchas desventajas
han sido superadas, por ejemplo, en lo que respecta a La familia, la mujer casada ya no está
sujeta a la voluntad del esposo, las decisiones de la familia en adelante debían ser iguales
para ambos, también en cuanto a la manutención del hogar. En lo concerniente a la patria
potestad, también ahora la mujer tiene las mismas ventajas que el hombre, asimismo en la
representación conyugal.
En cuanto al Código Penal, este también ha sido reemplazado por el nuevo de
1991, que en algunos casos permite que las penas rigurosas se cambien por las de servicio
comunitario; por otra parte, ya no considera la pena de muerte. El aborto sigue siendo
penado por este código. En el caso de la prostitución el ejercicio de esta práctica no está
penado para el que lo practica, pero si a quien lo fomente o se beneficie de este. En el
caso de la violación este es considerado como un delito contra la libertad de las personas
en cuanto la anulación de la pena en caso de matrimonio, sigue vigente.
El Código Penal no pudo ser mejor, pese a que se tenía la idea de que entre los
miembros de la comisión no había ni una mujer. Una de las más grandes comisiones fue
aquella que trató la violencia doméstica, no está tipificada como delito solo la conducta
violenta del marido que hacían que la mujer quede privada para trabajar por un tiempo

213
menor de diez días, sea considerada como una falta, por lo demás es muy difícil a la mujer

probar estos delitos. La omisión de la asistencia familiar está considerado un delito y

estaba penalizado con cárcel hasta que cumpla con sus obligaciones. El adulterio no está

tipificado como delito.

En materia Laboral, la "Ley de Trabajo de niños y mujeres por cuenta ajena" de

1918, N° 2851, aún es la que más sobresale frente a los mil y un decretos, leyes y

resoluciones que la modifican. Cabe destacar que lo más intolerable es que se trate

conjuntamente el trabajo de las mujeres con el de los niños. Un prejuicio "sólidamente

anclado en la cultura latinoamericana" .


244
Las mujeres están consideradas como

disminuidas respecto a los hombres, existe una serie de trabajos que no están a disposición

de ellas.

Aunque la constitución garantiza a la mujer igual remuneración por un trabajo igual,

existen ocupaciones que por ser "femeninas" automáticamente tienen un rango inferior y por

tanto una remuneración menor (ejemplo enfermera). En 1968, por D.L. 14222, se autorizó

que la remuneración podía ser inferior al mínimo vital si acaso el rendimiento de la mujer

fuera inferior al del hombre. Aún la constitución del 1979, en su artículo 45, espera que una

Ley se encargue de las condiciones de trabajo de los menores y las mujeres. En cuanto a los

trabajos prohibidos, estos se refieren a los nocturnos y esto no debe ser, salvo claro está,

cuando las mujeres se encuentren embarazadas. Si se trató de evitarle trabajos considerados

peligrosos, las mujeres no están en ninguna situación favorable, la realidad demostraba que

eso tan solo fue una Ilusión, la mayoría de peruanas trabajaba en lugares en los cuales el

horario no se respeta, y las condiciones peligrosas o no, poco tiene que ver cuando de

explotar se trata, más aun, cuando el acceso a un trabajo se hacía cada vez más difícil. La

Constitución de 1993 no menciona derechos especíales para la mujer. Tan solo en el artículo

23, en el que las consideraciones priman sobre la mujer bajo responsabilidad del Estado.

La Seguridad Social había dado un paso adelante con la Ley 24705 dada bajo

régimen aprista en julio de 1987, cuando incorporó a las amas de casa y madres de familia

a la seguridad social previo pago del 5% del salario mínimo vital.

Si bien en el Código Penal no establece como delito la violencia doméstica, la Ley

26260 de diciembre de 1993, aprueba las normas sobre la política del Estado y de la

Sociedad frente a la violencia familiar, "una de las más importantes que se han dictado en

relación directa con La situación y tratamiento jurídico a la mujer" . 245


Así, la Policía

Nacional, el Ministerio Público y el Poder Judicial son ias encargadas de intervenir ante

estos actos.

M 4 Blondet, 1994.
™ Blondet, Montero, 1994.

214
Una clara prueba de que el Perú está avanzando es que uno de los pocos países
en Latinoamérica que ha legislado sobre los derechos reproductivos, en 1966 Asociación
Peruana de Protección Familiar (APPF) inició programas de planificación familiar pero en
1974 fue clausurado. Bajo el decreto 625-76 sobre Lineamientos de Política de Población,
que no fue puesto en aplicación sino hasta 1980, se creó el Concejo Nacional de Población.
En 1985 se da la Ley de Política de Población cuyo objetivo era informar sobre los
procedimientos que se conocen para asegurar la decisión Ubre, informada y responsable de
las personas sobre el número de hijos; pero prohibía el aborto y la esterilización como
métodos de planificación familiar. Esto fue superado por la ley de Esterilización voluntaria
de 1988, por esta Ley las personas mayores de treinta años y con más de dos hijos pueden
acceder a dicho método.
A partir de 1993 rige la nueva Constitución, sucedánea del golpe de 1992 de
Fujimori, que abre un régimen liberal en materia económica pero que se ocupa menos de
la condición de las mujeres. Un Ministerio de la Mujer es un gran paso, cuyos frutos serán
materia de discusión en el futuro.

11.3. Sobre las Normas internacionales

Hasta hoy el Perú participa de la Declaración Universal de los derechos Humanos de 1948
(ONU) por Resolución Legislativa de 1959, el Pacto Internacional de los Derechos Civiles y
Políticos de 1966 (ONU) aprobado por Perú en 1978, et Pacto Internacional de los Derechos
Económicos, Sociales y Culturales de 1996 (ONU) aprobado por Perú también en 1978, el
Convenio Relativo al Trabajo Nocturno de las Mujeres, vigente en Perú desde 1949, la
Convención sobre los Derechos Políticos de la Mujer aprobada en el Perú en 1975 y la
Convención de las Naciones Unidas sobre la eliminación de todas las formas de
discriminación contra la Mujer de 1979 (ONU), que entró en vigor en el Perú a partir de
1982. También están incluidos Eos Convenios N° 45 y 100 de la OIT, el primero sobre la
Igualdad de Remuneración y el otro sobre trabajos subterráneos de mujeres hoy vigentes.
Todos estos pactos están garantizados por la Constitución de 1993 que en sus artículos 55
y 56 considera como normas de derecho interno.
Pese a todo estamos en desventajas, en los primeros años de la década de los 90
aún las mujeres aseguradas no podían incluir a los esposos como cónyuge mientras que
ellos sí. Las mujeres tan solo pueden favorecer de este beneficio a sus hijos, la mujer
soltera tampoco puede beneficiar a los padres en el caso de no tener hijos, la capacidad de
amparar a la familia sigue siendo por Ley patrimonio del esposo.

215
12. LAS MUJERES Y EL EJERCICIO DEL PODER EN EL PERÚ

Las mujeres en el Perú han


logrado en los campos del
poder muchas formas de hacer
uso y ejercicio de él, pero en
los noventa del siglo XX, aún
no se podía decir que ellas se
hayan sentido muy cómodas o
que les venía muy natural, en
ia política formal, en la
administración pública, en las
instituciones gremiales y aún,,
en las organizaciones femeninas porque casi siempre en la carrera del poder debían
enfrentarse en determinado momento, necesariamente, ante un jugador de "footbaíl
americano". Lo que falta es traducir en la realidad social, el saber y el valor de las mujeres,
hasta entonces existían dificultades en las relaciones sociales y las mujeres aún practican
esta participación con La inseguridad de los aprendices y de los imitadores (Colectivo N° 4,
1990).

Afortunadamente hay mujeres que han superado estas trabas y gozan


"plenamente" de un trato y respeto igualitario, pero aún siguen siendo minorías. Como se
entendió en El Colectivo N° 4 de Milán, de lo que se trata es "vencer el miedo de la propia
voluntad de vencer", las mujeres no encontraban "su sitio" en las esferas del poder, y tenían
que hacerlo. Este campo competitivo le es extraño a muchas mujeres dotadas de
inteligencia pero que son víctimas de su formación cultural que las hace evitar estos
escenarios donde lo que se afirma es la virilidad.
En este sentido viene bien citar a Beatriz Merino, quien fuera senadora de la
República por el FREDEMO en 1990.
"El drama de este país es que las mujeres son tratadas por el hombre
como ciudadanas de segunda clase y que, además se lo han creído. El
verdadero drama de este país es que las mujeres se sienten ciudadanas
de segunda clase, en la medida que se sigan sintiendo así, van a seguir
siendo tratadas así. El día que usted encuentre una mujer que no le
acepte eso a nadie, usted sabe que ahí tiene perfectamente una persona
que va a competir, que va a desarrollarse y va a ganar como cualquier
hombre" (Villar, 1994).

216
Lo que uno podría pensar ante las últimas palabras "ganar como un hombre", nos
remite inmediatamente al plano laboral-económico y ello es comprensible, pero la idea es
"ganar" en términos generales igual como ganan los hombres, es decir, no igualarnos a
ellos, sino otro poder ser ganadores individualmente por sobre todas las personas en las
diferentes áreas en que se compitan.
Las esferas del poder están, sea por que los hombres así las han generado, a su
medida; y naturalmente, en un principio debieron sentirse invadidos. Pero en la actualidad
las mujeres no soto valen por su número, sino por lo que cada una de ellas potenciatmente
realiza y que es geométricamente más relevante. Son de esta manera, algunos ejemplos a
seguir. Por otro lado, cada una de ellas se halla sexualizando las relaciones sociales en la
etite política, lo que no quiere decir que las mujeres adopten posturas "neutras" asintiendo
este carácter que se daba por medio de las leyes, las políticas sociales, etc. En este sentido
ellas adoptan hoy una conducta acorde a su sexo sin que ello quiera decir que aceptarán
cargos que las identifiquen con la extensión de los quehaceres tradlcionatmente femeninos
(servicio social, salud y educación).
Un vistazo panorámico de los centros de poder, de decisión en el Perú nos
llevaría a pensar en la diversidad de escenarios desde el punto de vista cultural, de clase,
de región y de las escalas existentes. Las primeras diferencias que se pueden establecer
son de carácter regional, cada una de ellas representa diferentes intereses y grados de
instrucción. Por ejemplo la Amazonia, respecto a la sierra norte, centro y sur, y de estas
con las ciudades de la costa, específicamente Lima. Un ejercicio prepolítico para las
mujeres es el hecho de mantenerse a sí mismas. En este caso ta migración de las jóvenes
en busca de un futuro mejor es la muestra más clara de cómo ellas compiten por su
manutención y deben arrancarle a la "calle" el dinero suficiente para subsistir y poder
satisfacer sus necesidades. Necesidades que también los son espirituales y psicológicas
que (a afirman en su condición de ciudadanía, de persona. Recuérdese a las Uderezas de
los sectores populares urbanos, y también en aquellas que si necesidad de migrar las
necesidades básicas les permite descubrir aptitudes y coraje para conseguir lo que antes
era un imposible por sí sotas.
La contraparte de aquellas sería la conformada por la clase media, que preparadas
para labores de decisión se ven ante un mundo en el que deben evidenciar su capacidad,
no sin antes tener que probar su idoneidad para hacer lo mismo que tos hombres sino más,
para tan solo conseguir el mismo respeto que cualquier hombre.
Empezar en 1968, precisamente en el gobierno de Velasco nos permite iniciar con
el año el comienzo del cambio significativo para ta mujer en et campo de la política,
diferente habría sido empezar unos cinco años antes. El Gobierno de ese régimen militar

217
permitió bajo varios dispositivos legales que la mujer paulatinamente acelere su
participación por la vía de la educación y el acceso a otros programas de promoción que
en la actualidad está dando sus frutos (ver mujer y legislación). Los últimos años
demuestran estos logros, y se manifiestan cuando una persona las ve como representantes
de la nación, como líder sindical, como miembro de la sociedad de Industrias en actividad,
líderes de empresas que para nada se le podría identificar con labores y/o intereses
femeninos. En los años noventa ya se contaba con las oficiales de la Policía Nacional,
alcaldesas con éxito, y con éxito, y una legión de profesionales que en sus diferentes
rangos y/o rendimientos contribuyen a la igualdad.
Hemos mencionado las profesiones o estratos de poder civil, en el que más
destaca el ingreso a la vida pública de la mujer; sin embargo, las otras dos esferas de poder
como son; la religiosa y la militar estaban aún en el Perú por razones obvias aún excluidas.
Las armas de todo tipo y toda generación están hechas a la medida de los hombres. Así
que el caso de la Política Nacional es por decir el primer intento de participar en esta esfera
de poder (no hablamos de infantes ni suboficiales). En el campo de la religión católica, por
ser la mayoría, difícilmente se podrían hacer reformas en este aspecto, a no ser que por
alguna decisión "milagrosa" del papado permita a las mujeres ejercer el sacerdocio. El
sacerdote tiene entre otras tareas; celebrar misas, dar la extrema unción, y sobre todo La
potestad de ser los guías espirituales y morales que la sociedad tiende a respetar. El resto
de las otras confesiones tampoco ofrecen mayores vías de poder hacia las mujeres a
excepción de la metodista que no es mayoritaria en el Perú.
Poder y mujer, antes esta unión parecería tan antagónica, pero poco a poco esto
ya no va siendo así. Estimo que la palabra poder más que política es la adecuada para
referirse a lo que apunta la mujer (creo, además, que es lo más práctico) que no concibe
para nada a la hora de erigirse como la política que tradicionalmente entienden u
ordenaron los hombres, con ideología, estatutos y partidos y también como "el arte de
gobernar". Para las mujeres el ingreso a la política les viene luego de ingresar al nivel de la
toma de decisiones, desde el hogar, en el trabajo y si la oportunidad lo decide en la política
tradicional, al frente de instituciones representativas de la nación, en el ámbito de
gobierno, empresarial y gremial. Toma de decisiones que tiene que ver con la decisión de
lo que hará con su propia persona y los que están a su cargo y para ello nadie mejor que
una mujer para saber que la única manera para tener a una persona bajo su dominio amén
de la voluntad de dirigirla es mediante el control económico, el control de la capacidad
adquisitiva mediante el cual se estimula y se limita, Mercedes Cabanillas líder del Partido
Aprista Peruano resume esto en pocas palabras "cuando la mujer se libera del bolsillo del
marido, se libera totalmente" (Villar, 1994). Este es el primer paso la confianza y otros

218
auditivos parten de ahí. Rompiendo los mecanismos de dominación aprehendidos en los
hogares.
Para hablar de las mujeres en el campo del poder primero veremos la parte de la
política tradicional (Congreso, municipios, etc.), luego los gremios profesionales y/o
sindicales y después los movimientos populares liderados por mujeres. El tema de Sendero
Luminoso se tratará al final por considerarlo excepcional en la historia peruana en el que La
participación femenina tuvo la cualidad de echar por los suelos esa cualidad femenina que
hacía difícil pensarla, tan justiciera, tan cruel.

12.1. Política tradicional

En el Perú como en el resto de los países latinoamericanos, tan solo las mujeres que han
tenido la oportunidad de acceder a la instrucción profesional y/o que haya llegado a
obtenerlas y aprovecharlas, han podido ingresar a la arena política como la entendemos en
términos electorales. El componente mayoritario está formado por las mujeres de la clase
media. Actualmente esto puede haber sufrido un viraje al tener que considerar a las
llderezas populares urbanas de los ochenta, en los que convendría entender una formación
en el pleno ejercicio de la organización social (la práctica de una mezcla de psicología,
sociología y política en el proceso). Volviendo a la clase media, debemos comprender que
sobre estas mujeres, que así mismas se definen en su mayoría educadas bajo los cánones
cristiano-católicos, ha influido lo que es conocido como el marianismo definido por
Stevens como "el culto a la superioridad espiritual femenina que enseña que las mujeres
son divinas, superiores moralmente y más fuertes esplritualmente que los hombres" (Villar,
1994). Un discurso adoptado y que hoy está siendo revisado por Las mujeres a partir de los
ochenta de manera dramática gracias a los adelantos tecnológicos y sobre todo a la
instrucción recibida en los centros superiores.

Sobre la participación política de la mujer se hace necesario mencionar Los textos


de Elsa Chaney de 1965 The political participation of peruvian women y la mujer en la
política latinoamericana: EL caso del Perú y Chile de 1977, por Eliana Villar, quien cita "la
tarea universal de las mujeres de ser madres ha influido profundamente en los límites y el
estilo de su participación en la vida pública" 246
y que, además, conciben la escena política
cuando ingresan a ella como "una casa" en la que asumen los mismos papeles domésticos
y subordinados que en los hogares.

Villar, 1994.

219
Las mujeres en el Perú no votaron hasta 1955 en que accedieron también a ser
listas para ser candidatas. Así la primera representante femenina parlamentaria se dio con
nueve representantes en 1956. Los analfabetos aún no votaban, en aquel entonces
difícilmente la mayoría del electorado podía ser femenino. La segunda representación
femenina se dio en 1963 con dos mujeres una aprista y otra belaundista. Hasta entonces,
las fiestas electorales habían cumplido una etapa en materia femenina de poder, porque si
bien se considera como un retroceso democrático el golpe militar y los años siguientes en
que no hubo participación electoral, lo que marcó aquella docena de años al interior de las
mujeres es la diferencia del antes y el después. Los doce años fueron de constante
proyección de ellas a la vida laboral, a la vida pública, al competir por plazas de trabajo con
uno o más (siempre más) hombres en términos profesionales.
Con el régimen militar se dieron varios dispositivos legales que llevaron a las
mujeres a manejarse con más seguridad e igualdad en la sociedad. Sobre todo en el
campo de la educación, pilar diferencial de La clase media. Los setenta, con sus ideales
democráticos de izquierda, la sensibilidad social que de ella emanaba y las comunicaciones
que emitían códigos muy bien comprendidos por las mujeres jóvenes universitarias hizo
que estas pronto se aseguren de una nueva forma de entender la sociedad y cuestionarlas.
Por otro lado, seguir introduciéndose en el plano laboral.
Todavía hasta antes de que se presenten las elecciones de la Asamblea
Constituyente en 1978, las mujeres no tuvieron su participación decisiva, hasta 1980 dice
Villar fue "muy frágil y casi anecdótica" (Villar, 1994). Solo habían pasado 25 años en que
las mujeres tenían la calidad de ciudadanas, menos aún solo nueve años si consideramos
1963 como último comicios electorales.
A partir de 1977 a través de una reforma en el Código Civil La edad para sufragar
fijada a partir de Los 21 años se redujo a Los 18. Por otro lado también se dio paso al voto de
los analfabetos en 1979, demostrándose así que el mayor componente de analfabetos estaba
integrado por mujeres, ellas fueron casi el 63% de los analfabetos inscritos.
En las elecciones de la Asamblea Constituyente (78-79) tan solo dos mujeres
ocuparon un puesto de un total de cien. Debemos hacer aquí un alto de reflexión ¿Por qué si
el electorado femenino es el equivalente del 50% del electorado las elegidas no representan
este porcentaje? Hay muchas respuestas que tienen explicaciones, como que Las mujeres
peruanas no se encuentran representadas por razones vinculadas a su desempeño; es decir,
La carencia de la energía propia de un hombre. La desconfianza hacia ellas (y entre ellas), por
el prejuicio que le niega el "respeto" individual, pues no es rara la frase; "casada es más
respeto". La sola idea de que una mujer vale más por el respaldo que le da un hombre frente
a los demás. Las mujeres votan por determinado candidato en La medida en que crean que

220
son capaces de hacer respaldar sus propuestas. La meta de ser una ciudadana plena que
haya demostrado la capacidad de hacerse respetar ante todos, la hace, en el espectro
político, mejor candldata, sino veamos: ¿quiénes por el hecho de ser feministas han logrado
una curul en el parlamento? Tampoco le interesa que diagnostiquen su situación, eso sí son
cosas caseras. Cuando eligen a cualquier candidato lo eligen porque en suma reúne los
requisitos que como ciudadano(na) al elector le gustaría poseer, en realidad no se vota por
un par, por una persona que lo represente en sus cualidades sino por quien es su ideal, a
quien de alguna admire entonces se elige a la triunfadora en su área a aquella que mejor
represente sus ideales. Entonces, cuando las mujeres eligen a un hombre no lo hacen porque
sean hombres sino porque hasta hoy ellos representan en sí aquella fuerza de éxito de las
personas "aplomadas". Así podemos explicar el caso de Beatriz Merino, Martha Chávez y la
misma Susana Díaz. Si bien las primeras fueron incluidas en números expectantes, luego
demostraron que sí podían actuar plenamente. En la medida que se demuestren las mujeres
así mismas que son capaces de realizar las tareas "masculinas" de poder sin restricciones de
cualquier tipo, las mujeres no tendrán que probar su capacidad, sino que tanto sus éxitos o
fracasos no comprenderán como causa a su relación de género sino por las cualidades que
individualmente posee como persona.
Volviendo a las elecciones de 1978, estas dos representantes no hacen más que
reafirmar la etapa que significó el gobierno Militar. Las mujeres aunque preparadas aún no
habían podido hacer patente su participación orgánica en las esferas del poder. Así la duda
del electorado femenino tenía sus razones en esta elección, más aún cuando las listas se
elaboraban según los intereses de los partidos políticos entonces respaldados por la
coyuntura política que en mucho favorecía el divorcio con la dictadura y que por otro lado
esta "democracia" secuestrada por aquellos partidos políticos no tenía sino una retahila de
líderes históricos que en número la oferta de curules seguros. Así 1980 1985 y 1990 las
mujeres aún no pasaron con seguridad el 5%. Veamos en los siguientes cuadros este efecto:

PERÚ 1 9 8 0 - 1 9 8 5 - 1 9 9 0
N Ú M E R O D E MUJERES C A N D I DATAS A D I P U T A D A S Y SENADORAS

1980 1985 1990

CANDIDATOS N° % N° % N° %

TOTAL SENADORES 895 100,0 716 100,0 960 100,0

Mujeres 129 14,4 106 14,8 115 12,0

TOTAL DIPUTADOS 2 503 100,0 1 900 100,0 s.L s.i.

Mujeres 240 9,6 213 11,2 5.1. s.i.

Fuente: Perú. Ministerio de Justicia, 1995. Elaboración propia.

221
PERÚ 1 9 8 0 - 1 9 8 5 - 1 9 9 0 - 1 9 9 2 - 1 9 9 5
N Ú M E R O DE MUJERES ELEGIDAS C O M O DIPUTADAS Y SENADORAS

1980 1985 1990 1995


ELEGIDAS N° total de
N° % N° % N° % N° %
miembros

SENADORAS (60) 2 3,3 3 5,0 4 6,7 - -


DIPUTADAS (180) 13 7,2 10 5,6 10 5,6 - -
CONGRESISTAS (80) - - - - 7 8,8 13 10,8

Fuente: Perú. Ministerio de Justicia, 1995. Reelaboración.

Si bien el número de candidatas no pasaba el 15% del total, el número de


elegidas tan solo significó el poco más del 5%. Es a partir de 1992 cuando el poder de los
partidos políticos se ve desacreditado que el voto femenino pasa con libertad ese
porcentaje. En 1922 con un 10.8%. Esta representación sí se ajusta paulatinamente con los
logros que la mujer va teniendo en ese espectro político laboral.
Algo que nos puede explicar este resultado es la siguiente encuesta que realizó
Caretas.

¿QUIÉNES SON MEJORES EN LA POLÍTICA?

Mujeres Hombres Ambos

Más sensibles 69,2 9,7 21,1


Más honestos 55,6 6,4 38,0
Más humildes 48,5 16,7 34,9
Más moderados 46,6 28,7 24,7
Mejores administradores 41,6 31,5 26,9
Más independientes 21,3 50,1 28,6
Ejercen autoridad 15,4 50,3 34,2

Más inteligentes 14,8 15,4 69,8


Más eficaces 20,9 26,6 52,4

Más democráticos 22,5 25,7 51,9

Resuelven problemas 24,5 28,9 46,6

Fuente: Caretas, 7 de marzo de 1996.

222
Cuando se les pregunta por qué de ser mejores los hombres, inmediatamente se
remiten a lo que son virtudes del estereotipo masculino; en primer lugar la independencia y
la autoridad que de ella emana; en segundo lugar, la administración y La toma de
decisiones que se representa con la respuesta "resuelven problemas". Mientras tanto, ia
mujer está "adornada" de otras cualidades, como la sensibilidad, la honestidad, la
humildad, la moderación y el ser buena administradora. La inteligencia está casi pareja y la
eficacia no está tan diferenciada. Hasta hoy aún las mujeres están vistas por el común de la
gente bajo los estereotipos tradicionales y a la política también. Lo que se les reconoce
como capacidades en tanto sexo deberían ser un texto cuestionado. Por otro lado cuando
se pregunta si las condiciones para que una mujer sea presidente están dadas no hay duda
que para ia mayoría sí en cuanto reconocen que una mujer es capaz de desempeñarse en
esa función. Pero lo que impide esta separación de las mujeres es y lo dicen, el machismo,
la capacidad de las mujeres puesta en duda por ios hombres y por las propias mujeres de
ellas mismas. Y el componente principal que es la falta de educación.
Debemos reconocer que la mayoría de las mujeres que aún reconocen el
machismo como una traba para la igualdad de oportunidades políticas asumen que el roi
principal de ellas es el ser madre y educar a los hijos (de no cumplir esto la mayoría no
podría evitar cierto sentimiento de culpa). Esto es tal vez la máxima contradicción, pues a
un hombre se le asigna el mantenimiento de la familia y para ello deben destacar en su
trabajo, ganar más dinero, ser más, profesionalmente. Una razón que lejos de alejarlo de la
política le generará más puntos.

PORCENTAJES DE MUJERES EN LOS PARLAMENTOS NACIONALES


UNICAMERALES O EN LAS CÁMARAS BAJAS (DIPUTADOS), 1 9 8 9

País Porcentaje
Suecia 38,1
Cuba 33,9
República Federal Alemana 15,4
URRS 15,3
México 14,7
Angola 14,5
Colombia 13,6
Nicaragua 13,5
Costa Rica 12,3
Venezuela 10,0
Bolivia 6,9
EE.UU. 5,7
Francia 5,7
Ecuador 5,6
Perú 5,6
Brasil 5,3
Argentina 4,7
Marruecos 0,0

Fuente: Villar, 1994 (extracto).

223
A pesar de todo la situación de ia mujer en el ámbito mundial va en ascenso, en
1989 los porcentajes de mujeres parlamentarlas en el mundo poco a poco van representando
el lugar que ocupa en el campo político, en el caso peruano por ejemplo hoy nuestra
representación es del 10.8%. No sería desproporcionado afirmar que son los países social
demócratas (Noruega, Suecia etc.) y los de Europa los que han avanzado en este punto, así
también podemos afirmar que es la participación en el trabajo lo que en común tienen
ambos grupos de países. Los llamados capitalistas, sin embargo, están en una posición
intermedia (por esta razón las feministas acusan al capitalismo patriarcal como el generador
de La opresión de las mujeres) y son los países en vías de desarrollo aquellos que aún se
encuentran en la saga. La educación en tanto instrucción, en tanto información se refleja
como el velo distorsionador sobre todo en Eos países del medio oriente. Este es un punto
más que puede afirmar la hipótesis que indica la vía de la liberación de la mujer en cuanto a
la participación igualitaria con los hombres se da por medio de la instrucción (el trabajo
como su resultado) diseñada por una política social y demócrata que no se formará sino con
la masiva participación de las mujeres en el campo laboral aunque sea afrontando una serie
de injusticias en procura de lograr los espacios necesarios para este fin.
Antes de pasar al grupo de las que participan en las altas esferas del poder aquí
tenemos la voz de las mismas protagonistas parlamentarias que significa pare ella el poder:
Beatriz Merino
"Mira el poder es la capacidad de hacer. En la capacidad de hacer o llevar
adelante alguna de nuestros proyectos. Eso es para mí el poder" .247

Lourdes Flores Nano


"La capacidad de poder decidir y de poder hacer realidad de poder hacer
muchas cosas que si no las tienes, son sueños" .
248

Para estas dos parlamentarias, que surgen del estrato medio tradicional el poder es
la oportunidad de hacer, el poder es un medio de realización. Una muestra de que las
mujeres son diferentes es encontrar por ejemplo otra opinión, como la de Mercedes
Cabanillas (del estrato medio popular) como ella misma lo afirma es hija de líderes u formada
por un partido de trayectoria como es el APRA.
Mercedes Cabanillas:
"Mira eí poder es eí gran riesgo porque muchos lo asumen y al final se
olvidan de sus compromisos, muchos lo asumen y pasan por una suerte
de vértigo..., es difícil mantenerse en el poder con humildad, con
serenidad, con ecuanimidad... Creo que al poder hay que llegar con mucha

2 4 7
Villar, 1994
2 4 R
Villar, 1994.

224
madurez al poder para saber que el poder es transitorio y que nosotros
somos mortales. El poder queda, los hombres pasan" . 249

Su respuesta nos hace pensar que en ella a influido su presencia por largos años en
un partido político, no solo llegó a ser ministro sino que, además, fue la más votada para
asumir la presidencia del Senado en las elecciones del noventa. Que como ella bien dijo, sus
compañeros (hombres) se valieron de ciertos ardides para no darle el cargo que se había
ganado de Presidenta del Congreso. Pero por otro lado percibe el poder, como los hombres
lo entienden, casi un ente con personalidad, casi un trofeo máximo por el cual uno está en la
disposición de hacer lo que desee, como actos que el mismo poder genera, el poder-dios.
Sobre todo al decir "el poder queda", el poder-meta-cumbre nos remite a un siglo atrás, un
milenio atrás, como nació el poder, así como una mezcla de dioses y voluntarios y fuerzas
propias de los escritos de Homero. Claro con el componente femenino de la sensatez de lo
práctico. Primero, lograr el poder mediante una "guerra", e inmediatamente la fiesta
embriagadora. Dos puntos de vista diferentes. Sobre todo comparado con lo expresado por
Beatriz Merino, una congresista de los años noventa proveniente de las canteras de la carrera
profesional laboral. El poder como algo al que no hay que acostumbrarse, que en sí es
peligroso si se tiene de continuo, se refleja que aún el poder les es extraño a las mayorías de
las mujeres.

Al interior de los partidos el machismo se ha demostrado tanto o hasta más de los


ochenta, a pesar de que en el APRA existía la Acción Política de la Mujer o después como la
Izquierda incorporó a feministas en sus listas, estas antes debían ser sumisas a lo que dictara
la dirigencia y/o a sus interpretaciones en el plano teórico. A pesar de que las mujeres
planteaban al interior de sus partidos una serie de problemas que tenían perspectiva de
género estas no tuvieron más remedio que apartarse y plantear y solucionarlos por las vías
que las ONG les ofrecían.
A partir de 1980 las cosas cambiaron paulatinamente, la organización popular
practicada por los pobladores populares urbanos en los gobiernos militares fue un ensayo
que las mujeres supieron aprovechar. El discurso político de la "Justicia Social" cundió y
con este mensaje de paz y el formar una "Nueva Democracia" (no Sendero Luminoso) en la
que participarían por igual en la toma de decisiones las diferentes fuerzas políticas en
beneficio de las mayorías, fue algo que poco a poco se puso en práctica. Lamentablemente
no formaron parte de estos partidos en forma masiva sino en forma individual., por
ejemplo cuando Mercedes Cabanillas llega a ser la Secretaria General del Partido Aprista y
Lourdes Flores Nano lo mismo por el Partido Popular Cristiano. Y habría que reflexionar un
poco más, no cuando los partidos políticos son solventes, pues todo lo contrario cuando

2 4 9
Villar, 1994.

225
están desacreditados. Una vez más, así como en el trabajo, los oficios en cuanto sean
desarrollados por mujeres son menos retribuibles en cuanto menos oportunidades brinde,
más representado por mujeres. Más lejos, cuando las ONG de feministas hacían sus pinitos
pocos hombres participaban en ellos, ahora más prestigiados no solo participen sino que
es tema.

Pero que hicieron o hacen estas mujeres una vez llegada a tal situación. ¿Cuan
cierto es que están predispuestas a elegir Las funciones que son considerados femeninas? AL
hacer una lectura de las entrevistas de Villar, no podemos asumir que los temas "femeninos"
son los que las mujeres prefieren en primera instancia, tampoco que al interior de todas las
agrupaciones políticas las mujeres sean segregadas. Por lo menos Beatriz Merino afirma que
en el caso del FREDEMO liderado por Vargas Llosa, se trató de incluir a Las mujeres (que las
había capaces) pero estas no aceptaron los cargos (puestos en las candidaturas
parlamentarias) que se les ofrecían. Cuando parlamentarias, allí sí se pudo apreciar la
segregación y el machísmo Leamos a Beatriz Merino:
"Por quienes toman las decisiones sobre a qué comisiones somos
asignados, son hombres. Yo pedí el primer año participar en la comisión
de economía, se me dijo que no. Pedí participar en la comisión de
industrias, se me dijo que no. Pedí participar en la comisión de energía y
minas, se me dijo que no. Finalmente me habían apuntado los del
movimiento al que pertenecía entonces, en la comisión de salud y otra
de cooperativas, entonces después de una gran discusión enérgica me
apuntaron en la comisión de pesquería con lo cual yo tenía muy poca
relación, ninguna experiencia, ninguna relación. AL año siguiente
nuevamente tuve que hacer una gran discusión para que me pusieran en
la comisión de energía y minas. No creo que sea que las mujeres no
quieren participar en los temas económicos. Yo creo que,
lamentablemente, la mayoritaria composición de hombres hace que no
puedan ingresar a esos temas. Claro ingresan algunas, pero con grandes
dificultades .
250

Claro, es soltera y como profesional ha llegado a ser "directora de una prensa


multinacional en cinco países de América Latina". Tal vez una podría argumentar que
Vargas Llosa no tenía cuadros etc. El resto de políticas proveniente de partidos, por el
contrario, afirman la condición de mujer como más a fin de los problemas de la familia y
los servicios, cuando menos una óptica diferente, La sensibilidad por ejemplo mencionada
por Lourdes Flores Nano quien llegó a presidir la Comisión de Energía y Minas "un tema
que en mi vida había oído".

No es extraño que en tanto se presenten como representantes de las canteras de


los independientes que las mujeres sean mejor captadas para ser elegidas luego del
descrédito de los partidos en el noventa.

Villar, 1994.

226
En 1987 por primera vez dos mujeres bajo el gobierno aprista tuvieron entre
manos una cartera ministerial, fueron los ministerios de Salud y Educación. El Ministerio de
Salud fue golpeado por las huelgas médicas y los problemas que por escaso presupuesto
se presentaron. La otra cara de la medalla fue el de Educación que contó con el 24% del
presupuesto del gobierno central, la ex-ministra de Educación Mercedes Cabanillas dice al
respecto: "En el ejecutivo es donde tú puedes realmente desarrollar tus programas, con una
decisión política, con una buena asignación de recurso, tu puedes... hacer mucha obra",
luego quedar bien. Cabe decidir si acaso era parte del "populismo" colocar a estas dos
primeras mujeres, no era en aquellos dos ministerios que por sí mismos están asignados de
antemano a un carácter femenino. Año muy difícil, con huelgas, inflación, y la agudización
económica, hoy parecería que era ante todo una carta de invitación a la misericordia.
En el Perú las elecciones son generales, se eligen al mismo tiempo tanto el jefe del
ejecutivo como el de los representantes del Congreso. A diferencia del poder Legislativo
cuyos representantes son elegidos directamente por votación popular, en el militar (que no
está reconocido oficialmente como un poder del Estado) el presidente puede elegir
libremente a sus máximas autoridades, lo mismo ocurre con el ejecutivo entre los
diferentes ministerios y/o instituciones al margen de los porcentajes del electorado. El
cuadro a continuación destaca como las mujeres han ingresado al ejecutivo. Se puede
afirmar que el avance es lento pero firme. En los ochenta las mujeres han echado sus
primeras raíces, primero como directoras generales, hasta luego llegar a ser ministras,
ahora en los noventa no nos es extraño que una mujer encabece un ministerio. Aunque
nos sorprendería que encabece el de Energía y Minas o el de Economía. Será más adelante.
Pero las cifras son:

PERÚ 1 9 8 3 , 1 9 8 7 - 1 9 8 8 Y 1 9 9 4
CARGOS DE ALTA DIRECCIÓN EN LA ADMINISTRACIÓN PÚBLICA SEGÚN SEXO

1983 1987 -1988 1994

Poder Ejecutivo
Mujeres Varones Mujeres Varones Mujeres Varones

Ministros - 16 2 14 2 13
Viceministros - 22 - 21 4 16
Directores Generales 4 74 9 93 s.i. s.i.
Directores Superiores 5 57 13 42 s.i. s.i.
Subdirectores 1 2 - 2 s.i. s.i.
Inspectores Generales - 16 - 12 s.i. s.i.
Secretarios Generales - 9 4 10 I 13
TOTAL 10 196 28 194

Fuente: Perú. Ministerio de Justicia, J995.

227
Debemos agregar que fueron más las mujeres que se encuentran en los puestos
claves de la administración pública. Destaca así, la creación del Ministerio de la Mujer
(noviembre 1996) y el nombramiento de la su ministra Miriam Schenonne, que se
encargará de reunir los esfuerzos que se dirijan a la promoción de las mujeres (en
diversos aspectos: salud, la educación, etc.). Parece extraño que el Instituto Peruano del
Deporte también estuviese incluido; sin embargo, tiene explicación cuando la intención
es ayudar a la población infantil y juvenil, grupos que siempre han estado ligados a la
parte familiar, por ende, a la mujer. Podemos inferir otra idea, si apreciamos que desde la
creación del CONAMUP (ver tema de legislación) en 1975 se incluye con las mujeres a los
hijos (la niñez). Más aún, cuando se incorporan juntos en el ÍNABIF, casi hablamos de un
ministerio de ciudadanos no plenos o en "vías de plenitud".

Este ministerio que al parecer solo duraría hasta que esta coyuntura de
transición culmine, que tiene objetivos de promoción a la mujer, será sujeto de juicios
sobre si fue o no necesario y/o sí tan solo fue una medida coyuntural y populista cuando
la crisis azota más a las mujeres.

Este mismo tipo de designaciones se encuentran las representantes de los


siguientes estamentos públicos:

PERÚ 1 9 8 6 Y 1 9 9 4
M I E M B R O S DE LAS CORTES SUPERIORES
Y DE LA CORTE SUPREMA POR SEXO

1986 1994

MUJERES VARONES Mujeres Varones

Cortes Superiores

Presidentes - 20 4 19

Vocales 9 177 22 201

Jueces 82 354 163 529

Total 91 551 189 749

Corte Suprema 3 10 2 22

Total 185 1112 380 1520

Fuente: Blondet/Montero, 1994.

228
PERÚ: 1 9 8 6 Y 1 9 9 3
FISCALES DEL M I N I S T E R I O PÚBLICO P O R SEXO

1986 1993
CATEGORÍAS
MUJER VARÓN MUJER VARÓN
Adjunto Supremo 2 20 2 12
Superior 10 53 15 61
Adjunto Superior 5 56 17 46
Provincial 39 202 120 249
Adjunto Provincial 90 168 146 136
Total 146 503 301 507

Fuente: Blondet/Montero, 1994.

PERÚ 1 9 9 4
PERSONAL DE LA S U P E R I N T E N D E N C I A N A C I O N A L
DE A D M I N I S T R A C I Ó N TRIBUTARIA (SUNAT) SEGÚN CATEGORÍA Y SEXO

HOMBRES MUJERES TOTAL


CATEGORÍAS
N° % N° % N°
Ejecutivos 173 61,8 107 38,2 280
Profesionales 868 55,4 699 46,7 1567
Administrativos 801 53,7 691 46,3 1492
Total 1842 55,2 1497 44,8 3339

Fuente: Blondet/Montero, 1994.

Por ejempío en las Cortes Superiores de Justicia de 1986 a ocho años después los
avances han sido positivos del 0% al 20% en 1994 con respecto a los presidentes, llegando
en conjunto al 30%. Lo que sucede en la Corte Suprema es algo extraño, parece revelar no
un retroceso sino las características de un gobierno como el aprista respecto a la dictadura
(post-golpe de Fujimori). En cuanto a los fiscales del Ministerio Público las cifras si son
alentadoras, la participación femenina se da en todas las áreas y en los dos períodos se
aprecia una creciente alza. En la Superintendencia Nacional de Administración las cosas no
pudieron ser mejores, recordemos que se dio el concurso público, que a su vez contrajo la
participación de jóvenes profesionales en todas las escalas del área administrativa. Los
cuales hizo que se incluyesen en las filas del nuevo personal.

229
1. Mayoritariamente a egresados de las escuelas particulares por cierto tal
vez con más tiempo y calidad de preparación (clase media tradicional).

2. Mujeres quienes nuevas en los cargos, con la formación de la eficiencia


propia de la clase a la que pertenecen, y por qué no decirlo lo que es
una ventaja, esa honestidad propia de las mujeres, mejor dicho la
cautela de quien aún no ha establecido La dimensión real de su
ubicación ni creación de relaciones extra labora les. Novicias.

El éxito de esta institución reestructurada, se debe en gran medida a la participación


de trabajadores novatos que defenderán su ubicación conocedores de la nueva política del
gobierno donde la estabilidad no está para nada garantizada, y por otro lado, carecen de una
serie de amigos, conocidos y padrinos en la institución. Con Los años se verá que el éxito o
fracaso no se deberá, a que es el número de mujeres que hizo eficaz las primeras
recaudaciones, o la clase La que determina el funcionamiento de una institución, sino la
política debidamente respaldada con penas severas cuál es el perder el trabajo ante el
incumplimiento del deber . El estado no como institución que es de los gobernantes, sino
251

el Estado como nuestra institución que debe cautelar nuestros intereses. Aquí en el Perú
todavía hay un divorcio entre la población y sus instituciones producto de la injusticia que
empuja a cada uno arrancar al otro lo que necesita. Una mazamorra de revanchas, desquites,
y reacomodos sociales, culturales y hasta raciales que obstaculizan en principio, el respeto
por los demás sin condición más que su presencia como persona.

Antes de pasar a otra instancia de poder cabe aquí mencionar a María Herminia
Drago quien fuera Contralora General de la República que nos puede ilustrar un poco las
interioridades de las mujeres que como ella llegan a altos puestos de la administración
pública a base de una carrera profesional que no fue fácil de ascender. Ella menciona que
una de las primeras dificultades que sufre una mujer de carrera es ante todo la etapa de la
maternidad y la Incomprensión de los esposos. A diferencia de los hombres, las mujeres
que crecen en un hogar "modelo" en el que el modelo de mujer lo refleja la madre que no
falta a sus responsabilidades hogareñas bajo ningún pretexto, tienen una noción diferente
del deber. El caso de esta señora se refleja cuando ella misma no se permitió faltar, ni en el
caso de que su hijo esté enfermo, a faltar a sus obligaciones laborales. Esta es la típica
mujer que no ingresa por la vía política tradicional, sino por el trabajo, la visión que tienen
poder es como sus superiores la han utilizado luego su perspectiva es la siguiente: ¿Qué
opinas del poder?

El otro día he estado escuchando a Marcial Rubio y dijo una cosa que yo
siempre he pensado definitivamente el poder no puede ser continuo
porque corrompe. Yo pienso que el poder debe ser una circunstancia en
La vida, pero una forma de vida. Porque definitivamente la persona que

Entiéndase de las órdenes del superior.

230
mucho tiempo se mantiene en el poder empieza a tener problemas. El
poder aleja de la realidad a las personas. El poder hace que las personas
que están alrededor de las personas con poder digan lo que ellas
quieren escuchar, con lo cual se ejerce mal el poder, porque se está
ejercitando en base a datos que no son los exactos y es muy difícil
mantener la ecuanimidad. El poder deber ser una cosa transitoria, no
debe ser una forma de vida . 252

No es extraño que muchas mujeres que ingresan a la política tiene esta


perspectiva. Sin muchas filosofías, el trabajo en instituciones jerárquicamente masculinas
les da esa doble afrenta, una distorsión del poder en cuanto a definición, al margen de la
competencia que María Herminia lo entiende como el problema básico y que el hombre
teme (Villar, 1994).
Apartándose del poder ejecutivo y legislativo tenemos otra vía electoral que es la
que permite otra instancia de poder, las alcaldías provinciales y distritales. Gobiernos locales
que permiten a quienes salen elegidos poner a prueba su capacidad de gestión. Primero
veamos las cifras que a continuación comentaremos (ver cuadros).

PERÚ 1 9 8 0 - 1 9 8 3 - 1 9 8 9 - 1 9 9 3
ALCALDES PROVINCIALES POR SEXO

MUJERES VARONES TOTAL


AÑOS
N° % N° % N° %
1980 7 5,2 127 94,8 134 100,0

1983 6 3,9 147 96,1 153 100,0


1989 5 3,1 157 96,9 162 100,0
1993 9 4,9 174 95,1 183 100,0

Fuente: Perú, Ministerio de Justicia, f 995.

LIMA M E T R O P O L I T A N A 1 9 8 0 - 1 9 8 3 - 1 9 8 9 - 1 9 9 3
ALCALDES DISTRITALES DE LIMA M E T R O P O L I T A N A P O R SEXO

ELECCIONES MUJERES HOMBRES


MUNICIPALES N° % N° %

1980 1 2,6 37 97,4


1983 4 10,0 36 90,0
1989 4 9,5 38 90,5

1993 5 11,6 38 88,4

Fuente: Perú, Ministerio de Justicia, 1995.

Villar 1994.

231
LIMA M E T R O P O L I T A N A 1 9 8 1 - 1 9 9 3
N U M E R O DE REGIDORES DEL C O N C E J O PROVINCIAL D E LIMA
SEGÚN P E R I O D O M U N I C I P A L POR SEXO

VARONES MUJERES
PERÍODO MUNICIPAL TOTAL
N° % N° %

1981-1983 35 89,7 4 10,3 39

1984-1986 32 82,1 7 17,9 39

1987-1989 35 89,7 4 10,3 39

1990-1992 31 79,5 8 20,5 39

1993-1995 36 92,3 3 7,7 39

Fuente: Perú, Ministerio de Justicia, 1995.

Con el golpe militar de 1968, las elecciones suspendidas fueron bajo el gobierno
de Belaunde respuestas. Si vemos el cuadro en el que se reflejan las elecciones a lo
largo de todo el Perú nos damos cuenta de que el 5% parece una sombra, el encargo de
una ciudad está pensada aún como patrimonio de los hombre en esto últimos quince
años. Debemos recordar que en el Perú en su mayoría está representado por un
componente rural y ciudades no del todo modernas (si Lima lo es) al interior del país eí
machismo es harto demostrable y más todavía entre lo que es el mayor componente de
la población total, las clases populares donde aún las líderes no lo son sino entre las
mujeres generalmente.
El caso de Lima si en un tanto diferente, la participación de ellas ha sido más
expectante se acerca a ese 10% que va más acorde a la participación de las mujeres en el
mercado laboral de élite. En 1980 las candidatas elegidas por los partidos políticos solo
lograron captar el 2.6 de las alcaldías distritales de Lima Metropolitana ver cuadro
conforme pasan las siguientes elecciones los resultados son ya más alentadores. En
cuanto al número de regidores es rara la cifra de 1990-92 en comparación con 1993-95
se reduce a un poco más del 50% luego del golpe de Fujimori, se puede decir que al
igual que la caída de esta participación sintoniza con la baja de la elección de las
representantes en la Corte Suprema (ver cuadro), finalmente la consolidación de
determinadas formas de coacción política necesita de una organización basada en
relaciones de confianza, en la que finalmente está distribuida entre los hombres, cuando
ya Cambio 95-Nueva Mayoría a la luz de los resultados no permite que otra fuerza

232
política se apodere ni haga peligrar el que está en manos del gobierno. Es evidente que
a falta de fuerza partidaria mejor es la oportunidad femenina.

La composición de estas mujeres en el espectro social responde a la


identificación del candidato con su barrio, que es la ventaja de este tipo de participación
en el poder local. Esto lo vemos en Comas y en San Borja. A propósito, unas palabras que
grafican el punto de vista de la alcaldesa de San Borja Luisa María Cuculiza, una mujer
que prácticamente ha demostrado las características "viriles" en materia administrativa,
sin perder su feminidad:
"Generalmente una como profesional, ocupando estos puestos, tiene
que tener un carácter muy fuerte y usted comprenderá, que para
manejar todo un distrito, no, yo no puedo ser blanda... Porque una
persona que no tiene carácter, que no sabe luchar, que no sabe poner
las cosas en su sitio, no sirve para nada definitivamente" .
253

Esta facultad para tener éxito en la política, parece ser un requisito al margen
de las buenas intenciones y/o buenos proyectos o métodos de accionar. Recordemos
María Elena Moyano quien fuera Teniente Alcalde tenía esa característica (lo sé) bajo otra
perspectiva claro. Aquí cabría recordar a Alan García cuando dijo que en política no se
podía ser ingenuo. Al margen de lo anecdótico, la tan mentada debilidad femenina física
se va cuestionando a la luz de los hechos:
"Yo toda la vida que caso en los matrimonios, le digo a la pareja," usted
señora haga de cuenta que se está casando con un niño, porque el
hombre desde que nace hasta que muere tiene que ser afianzado por
una mujer". Eso es cierto. El hombre solo no avanza, el hombre solo se
cae, no es fuerte. Al hombre no le gusta el dolor físico, no le gusta los
problemas... Claro que hay casos excepcionales" . 254

Para no ir más lejos es Cuculiza quien ve a los partidos como una traba para las
mujeres en política. Ella dice por ejemplo como se da el caso de Lourdes Flores Nano del
PPC que tiene que estar sujeta a un jefe que "ya debe estar tranquilo en su casa
reposando". En cuanto al último párrafo todas las mujeres, todas, sin distinción de ciase
opinan casi lo mismo, frente a esto lamentan carecer de la fuerza física y yo añadiría más,
cuentan con el aparato público a su medida (relaciones, contactos y todo lo que la
movilidad trae).

Que las mujeres tengan a la familia por responsabilidad, un hecho. Ella crearía
el Ministerio de la Familia no aceptaría, otra cartera (Villar, 1994). Es Luisa María Cuculiza
otra de las políticas que niega esta actividad como una carrera, que opinan de el poder

Villar, 1994.
Villar, 1994.

233
no como un medio sino como una "cosa muy efímera". Por otro prefiere hablar de estar
al servicio de los demás, cuando en realidad está haciendo lo que por política se puede
hacer, el plasmar en la realidad una serie de proyectos, en fin aplicar medidas en
beneficio de los demás.

En el conjunto de mujeres que ha llegado a altos cargos públicos sea por la vía
de las elecciones o por designaciones respaldadas por la confianza se puede observar
que no siempre comprendieron el feminismo desde sus inicios (etapa actual 1969 en
adelante) aunque les merecía respeto pronto lo entendieron como una fuerza que
pretendía igualar a las mujeres y Eos hombres para empezar bajo la vía del
enfrenta miento, la imagen del setenta que ahora está siendo cada vez más aceptada
conforme se aprecia más los logros de las feministas en todos los niveles, así el
feminismo se afirma en el Perú y en nuestros días no como una fuerza política sino como
un bastón, que ayudará a las mujeres a llegar al nivel que les corresponde en el escenario
público, en consideración a las diferencias que las mujeres tienen y que los hombres
también poseen. En todos los sectores. Allí donde llegue una mujer y se enfrente a
dificultades un grupo de feministas estará expectante, estudiando su situación
diagnosticando y planteando tácticas que la afirmen. No en todos los sectores, como se
va a lo largo de este trabajo, en todos los planos.

12.2. Gremios profesionales

Este es un tema que tiene que ver directamente con el aspecto laboral y educativo. Las
mujeres pasan primero por los trabajos donde la retribución es menor, el tipo de trabajo
es más inestable, el tipo de actividades aún está determinado por las tareas hogareñas o
por las actividades que requieran mayor meticulosidad. Lo que cambia de acuerdo al
tipo de formación que hayan llevado para afrontar la vida, y claro las oportunidades que
su entorno le presente.

Lo que presentamos a continuación es como se refleja esta participación no solo


entre mujeres ni como mercado laboral, si no de representación gremial. Hasta qué
punto las mujeres son capaces de representar a todo conjunto profesional. Toda vez que
este tipo de instituciones, como lo son los gremios tienen opinión pública y en muchos
casos dada su personalidad jurídica representan fuerzas que políticamente sostienen el
ordenamiento social.

234
DIRECTIVOS NACIONALES DE LAS PRINCIPALES CENTRALES
DE TRABAJADORES Y G R E M I O S DE EMPRESARIOS DEL PERÚ SEGÚN SEXO

Directivos Directivos
Nacionales Nacionales
1983 1994
GREMIOS

Varones

Mujeres

Varones

Mujeres

Total
Total
CENTRALES DE TRABAJADORES
CGTP (Confederación General de Trabajadores del Perú) 40 1 41 51 22 53
CTP (Central de Trabajadores del Perú) 42 5 47 11 5 16
CCP (Confederación campesina del Perú) 20 3* 23
SUTEP (Sindicato Único de Trabajadores de la Educación Peruana) 8 7 15 19 5** 24
GREMIOS DE EMPRESARIOS
SIN (Sociedad Nacional de Industrias) 11 0 11
CONFIEP (Confederación de Instituciones Empresariales Privadas)
ADEX (Asociación de Exportadores) 32 2 34 35 2 37
APEMIPE (Asociación Peruana de Medianos y Pequeños Empresarios) 6 2 8
Notas:
* En la CCP las secretarías ocupadas por mujeres son la de Mujer Campesina, Organización de la Mujer
Campesina y la de Comunidades Nativas.
** La Secretaría General del SUTEP está a cargo de una mujer.
Fuente: Blondet/Montero, 1994.

Según el cuadro podemos observar que los gremios laborales aún no han sido
captados por las mujeres en la medida que intervienen en el campo laboral, no olvidemos
que los sindicatos tienen un alto componente masculino, el tipo de labor que realizan y la
manera que enfrentan los atropellos políticos de turno decisivamente tienen que ser
enérgicos. Las mujeres tienen en esta arena mucho por hacer. En los ochenta dos casos
vienen en mi memoria, el de la Secretaria General del Sindicato de trabajadores de la
Beneficencia Pública de Lima en 1986-87; amedrentado el Secretario General (atropello en la
vereda al salir de un local) por estar empezando una lucha contra el despido masivo de los
trabajadores mediante casos prematuros y cambios de ubicación en el desempeño de sus
funciones. Pronto los trabajadores no tenían a quien recurrir. El gobierno aprista por medio
de sus representantes a cargo de esta beneficencia decidió dar trabajo bajo esta puerta, así
ingresaron estudiantes de la Villarreal y la Garcilaso en pos de puestos llegando al límite de
colocar a dos personas en el archivo a hacer labores que detestaban con el solo fin de ser
mejor ubicados. Trabajadores entre 45 y más años llegaron a dar con una, hasta entonces,

235
secretaria de gerencia que por abogar por eilos fue a dar al Archivo (con su calentador,
fotitos, florerlto y una máquina de escribir) quien con su máquina y conocimientos de
derecho se dedicó a elaborar documentos que podían ser presentados ante el Ministerio de
Trabajo y organizar los papeles de sus compañeros, hasta que le quitaron la máquina de
escribir. Decidida a defender no solo su puesto sino el de sus compañeros se dedicó a
organizar a todos para hacer una propuesta (cabe mencionar que esta mujer era casada con
dos hijos pequeños) en los días más álgidos no era raro verla llorar no solo por su situación
sino por la de sus compañeros. Como su ubicación, el local central, la hacía de fácil
ubicación, pronto la enviaron a trabajar a una dependencia (asilo) en el Rímac. Luego de un
año ya era Secretaria General del Sindicato. La secretaria tan femenina con una actitud poco
combativa con estudios de derecho troncados por las labores maternales y laborales, tenía
otra actitud; más segura, con otro "look" jeans y zapatillas, luchadora al frente de una huelga
indefinida y haciendo noticia en los periódicos y en la televisión. Este es un caso en que el
extremo el que hace que las mujeres se dan valor así mismas.
El otro caso es el de la Secretaria General de los Trabajadores del Archivo General
de la Nación, Ruth Borja, licenciada en Historia y con estudios de Maestría, cuya incursión
también corresponde al 1987 y a diferencia de la anterior, tenía claro que su puesto
definitivamente era de enfrentamiento a la patronal, en este caso el Estado. Puede que en
ella, la diferencia se dé porque tenía aspiraciones al interior de la carrera sindical,
participaba de las reuniones de la Central Intersectorial de Trabajadores Estatales (CITE)
donde seguramente tuvo que hacer frente al machísmo que allí impera; sin embargo, llegó
a ocupar el cargo de Secretaria de Defensa en 1991 y participar en las negociaciones
colectivas entre los trabajadores y las autoridades políticas. Lo interesante es que ella es la
demostración de que una mujer puede hacer tres labores a la vez: trabajadora (Madre),
estudiante y líder sindical. Sin contar que su papel de esposa estaba siendo
peligrosamente sacrificado, debía estar presente en las reuniones que a decir de ella
misma pasaban sobradamente la medianoche. Logros, como no, concurso de plazas,
cuotas adicionales por una serie de derechos y claro, las manifestaciones de presión a su
representante más próximo, el Jefe del Archivo General de la Nación.

En ambos casos tuvieron que enfrentar represalias, lo que lejos de amedrentarlas


las hacía más fuertes, por otro lado, en ningún momento se les cuestionó su capacidad,
todo lo contrario; sin embargo, se podía observar cierto celo por parte de sus congéneres
que se manifestaban, en el caso de la última, demostrando precisamente su espíritu
aguerrido como un detalle en contra, es decir su falta de "mesura", de femineidad.
Según Blondet y Montero la participación sindical femenina ha sido
históricamente baja "variando de un 15% en 1973-74 a un 19% en 1982".

236
La mayoría de las mujeres como sabemos estaban entre las confeccionístas y
otras que se desempeñan en laboratorios y servicios. Los trabajos en ios que ellas
incursionan con los efectos de la crisis no se caracterizan precisamente por su estabilidad,
lo que es un requisito casi ineludible para tener capacidad de representación y negociar, así
que desde este punto de vista ios grandes grupos donde labora la mujer difícilmente
podían aspirar a organizarse no pudiendo negociar colectivamente . 255
La escasa
participación femenina en las centrales sindicales también refleja este efecto. No son pocas
las veces que sus problemas son primero femeninos y obviados respecto a los que tienen
que ver con el trabajo en sí, por otro lado hay otras explicaciones que tienen que ver
generalmente con la autosegregación de las mismas trabajadoras para participar en las
contiendas sindicales más aún cuando sienten miedo y desconfianza de ser excluidas por
sus compañeros . 256

En 1975, según el Ministerio de Trabajo solo el 10% de los cargos sindicales eran
ocupados por mujeres, quienes se concentraban en las secretarias "acordes a su sexo",
como bienestar social, archivo, asuntos femeninos (Barrig/Chueca/Yañez, 1985). Destacan
Barrig y otras, que en 1983 por ejemplo "la Federación de Laboratorios y Droguerías,
industrias que emplean predominantemente mujeres, sobre veintidós dirigentes solo un
cargo era ocupado por una mujer".
Ahora que se toca el punto de los sindicatos, he aquí un tema que las autoras
rescatan y que pone de manifiesto una de Las posibles causas que explican el actuar
organizado de las hasta hoy organizaciones corruptas en manos de los hombres:
Como en un círculo vicioso, también en los organismos que se
constituyen para la defensa de Los trabajadores existen irregularidades y
arbitrariedades que pueden parcialmente, ser explicadas en su origen,
por los intentos de manipulación política, bastante eficaces en el sector
pesca-durante el gobierno del General Juan Velasco 1968-1975 . 257

Creemos que no solo en el sector pesca, es muy posible que lo haya sido en
todos. También hay que agregar que la desconfianza de las mujeres trabajadoras parte de
algo muy concreto, el que sus compañeros no consideran sus problemas "a la orden del
día" en los pliegos y reclamos laborales. Aquí se debe tener en cuenta que en sí hay una
diferencia entre los trabajadoras, obreras, y las empleadas-profesionales. Las primeras se
encuentran presas de la falta de instrucción, sus vidas transcurren entre el trabajo en la
fábrica, las tareas del hogar y un descanso precario asaltado por los problemas
económicos, en otras palabras, trabajo, trabajo y un "sueño reparador" para continuar con

Blondet, 1994.
Barrig/Chueca/Yañez, 1985.
Barrig/Chueca/Yañez, 1985.

237
el trabajo, exento de oportunidades; para cuando abandonan esta situación de obreras
entonces tampoco pueden aportar más a la lucha sindical por cuanto es tema del pasado.
Mientras tanto las profesionales si tienen el ejercicio de alternar y también discutir con los
hombres desde las aulas, además cuentan con los conocimientos necesarios (en materia de
organización) para comprender el enmarañado mundo sindical. Lo que sí está muy poco
tratado es la situación de la empleocracia privada, las razones pueden deberse a que por lo
general acceder a estos puestos muchas veces se debe a favores personales de confianza en los
que a la larga juega la lealtad. La situación diferente frente al sector público donde
precisamente las diferencias salariales en cuanto a género son menos diferenciadas, haría
pensar en que el sector privado es aún más sexista y que la única manera de lograr ciertas
modificaciones que las equiparen en remuneración es por la vía individual de la competencia.
Donde juega un rol importante la oportunidad.
El grupo empresarial, lo que se podría entender como la patronal presenta según
los datos una exigua representación. En los setenta las revistas de la Sociedad Nacional de
Industrias Industria Pesquera, las mujeres tan solo estaban en los cargos de secretarlas
(empleadas) de los directores de los diferentes rubros (pesquería, textilería, minera etc.).
Algo que prosiguió hasta los ochenta, actualmente no tenemos datos pero suponemos que
debe haber una representante cuanto menos. En la Asociación de Exportadores ADEX la
presencia femenina es muy interesante, aunque no llegue al 10%. Habría que averiguar a
qué tipo de exportación se dedican.
El APEMIPE que es la Asociación Peruana de Medianos y Pequeños Empresarios,
tiene de ocho directivos nacionales a dos mujeres. Este hecho no hace más que confirmar
la participación de las mujeres en la pequeña empresa, donde ellas pueden decidir sin
competir al Interior de esta con los hombres, mediante esta modalidad no son pocas las
mujeres que han involucrado en el trabajo a los esposos y en muchos casos a toda la
familia. Esta es tal vez la condición más satisfactoria de las mujeres de nuestras décadas.
Un trabajo que le permita distribuir su tiempo y que por los resultados lo gratifique y se le
reconozca como una ciudadana plena. Su elevado número en la representación nacional,
pensamos no es más que el reconocimiento de su elevada participación. Esto es,
considerando que en muchos casos sino todo este tipo de empresa proviene de las
canteras de la informalidad, cantera que poco a poco la mujer ha sabido incursionar a
propósito de lo difícil que le es mantenerse en las industrias de producción donde la
explotación es feroz.

Los colegios profesionales nos ilustran la preferencia que las mujeres han tenido
y tienen por una u otra actividad. Según Marfil Francke, podemos afirmar que en efecto se
reproduce la preferencia por aquellas tareas que en sí son la extensión o especialización de

238
las labores domésticas. Por otra parte es necesario anotar que estas profesiones en
principio son poco o nada apreciados por los hombres (es más la resistencia de ingresar a
labores consideradas femeninas, que la que las mujeres oponen a Las que realizan los
hombres). Así como el 100% corresponde para las mujeres en la enfermería y obstetricia lo
contrario con la medicina y la ingeniería. Aunque en el presente cuadro solo se consiguen
a los dirigentes de 1983 este es útil para ver cómo ha ido la mujer hasta 1990.

C O L E G I O S PROFESIONALES: TOTAL DE INSCRITOS Y DIRIGIENTES


POR SEXO ( 1 9 8 3 - 1 9 9 0 )

1983 1990

Ambos Mujeres Dirigentes Mujeres Ambos Mujeres


sexos
PROFESIONALES total sexos
N° N° % del N° % del N° % del

total total total

Abogados * 10 203 1 760 17,2 10 1 10,0 14 678 2 994 20,4

Arquitectos 1 961 351 17,9 10 3 30,0 2 998 677 22,6

Asistentes sociales nd nd nd nd nd nd 3 853 3 828 99,4

Economistas ** 1 933 264 13,7 11 1 10,0 4 017 825 20,5

Enfermeras 12 799 11 529 90,1 6 6 100,0 18 553 182159 97,9

Médicos 16 308 2 103 12,9 7 0 - 22 298 2 876 12,9

Odontólogos 4 249 785 18,5 9 1 11,0 5 929 1 496 25,2

Psicólogos nd nd nd nd nd nd 2 490 1 610 64,7

Obstetrices 2 290 2 264 99,0 6 6 100,0 nd nd nd

Ingenieros *** 12 917 639 5,0 13 0 - nd nd nd

Químicos 4 097 2 768 68,0 15 3 20,0 nd nd nd

Contadores **** 10 393 1 959 19,0 4 0 - nd nd nd

Periodistas 2 190 222 10,0 10 0 - nd nd nd

Notas:
* Sólo incluye el departamento de Lima, que incorpora al 70% de los abogados colegiados en el Perú.
** Datos correspondientes sólo a Lima.
*** No incluye a los agrónomos. Datos válidos para el 30/X1I/1981,
**** Sólo incluye a Lima, Arequipa y La Libertad.
Fuente; Francke, 1985 y Blondet, 1994. Elaboración propia.

Cuando las mujeres poco a poco Ingresan a las profesionales que tradicionalmente
han sido monopolizadas por los hombres, paulatinamente logran una ubicación entre las
dirigencia. No está demás darse cuenta que en materia de profesiones "femeninas". Las
razones en primer lugar pueden ser el machismo y casi de la mano el que no ofrezca un
Ingreso acorde a sus futuras "obligaciones" familiares. Una carrera es costosa, no solo si se
considera el tiempo invertido sino la necesidad de ingresar cuanto antes al plano laboral. Los

239
datos en materia de técnicos podrían habernos dado otra imagen de la dirigencia en materia
gremial-profesional. Deber de los colegios profesionales es velar por el aspecto de
ontológico y ético de las profesiones que representan, el ejercicio del oficio en sí, al margen
de las demandas salariales. Intereses que desde todo punto de vista las mujeres estaban ya
en capacidad de departir, aportar y dirigir.

12.3. Movimientos populares femeninos

Sin duda lo que más destacó en estos últimos treinta años en materia femenina es su
participación en la actividad pública como movimiento femenino en defensa de los derechos
elementales de la población popular. Con la formación de sus propias líderes y cuadros de
acción. En esta coyuntura crítica que significó la crisis casi permanente del ochenta, las
mujeres no solo hicieron una grieta en la política formal, en los gremios profesionales,
también en cuanto a la sociedad en conjunto se refiere ellas pusieron su sello en los ochenta.
Los puntos diferenciales que estas mujeres han tenido respecto a las dos anteriores
tipos de participación se basa sobre todo en que para llegar a este punto no continuaron
una trocha ya preparada por los hombres es decir el ingreso a cupos preestablecidos, el
movimiento femenino prácticamente se hizo su propio camino. Vale repetir que en materia
de ejercicio de poder siempre está presente algo que las feministas del siglo pasado
vislumbraron con claridad y que hoy si se va comprendiendo a cabalídad al paso de los casos
que se manifiestan como este por ejemplo, el ejercicio pleno de su ciudadanía.
Cuando las mujeres ingresan al plano laboral formal y/o político formal uno puede
apreciar que deben luchar por iguales derechos primero para ser respetadas como
ciudadanas plenas y después de esta gran valla el segundo paso está el destacarse ya en
plano ocupacional. Pero la inmensa mayoría de mujeres de entre veinte y treinta años en los
ochenta que vivían en los pueblos marginales no tenían esa vía de participación. Con la
preparación e instrucción inadecuada a causa de sus escasos recursos económicos, pocas o
nulas serían las oportunidades de ingresar al plano político tradicional y al gremial.
Cecilia Blondet comprende un capítulo de organizaciones sociales de mujeres, en
las que ha incluido "la acción de mujeres de sectores populares". Pero nosotros
consideramos a las líderes a aquellas que han logrado a costa de mucha actividad no solo
solidaria de comunidad sino que han debido echar mano de otros recursos que tan solo
afloran ante circunstancias especialmente críticas.
Como movimiento popular femenino las mujeres han trascendido casi obviando la
prédica feminista. En el Perú donde toda ley y toda norma aún no se respetan, más aún, es
violada de inicio. La exigencia de derechos es un tema que ni siquiera se considera, tan solo

240
cuando reconoce que aquellos nuevos códigos deben ser adoptados para poder proteger y
defender su derecho a la existencia.
El movimiento popular femenino debe sus orígenes a la primera etapa
asistendalista, que corresponde a la intervención del Estado y las organizaciones
internacionales con el fin de distribuir alimentos y servicios a los sectores más necesitados. A
través de los años, hasta 1968 esas ayudas dieron de cierta forma la idea de organización
comunal, pero la actitud cambió con el ingreso del gobierno militar a partir de 1968 y la
invasión del pensamiento de la izquierda peruana. La nueva actitud tuvo como dominador
común un cierto rechazo-rencor a quien consideraban el representante del capitalismo
enemigo de los pueblos subdesarrollados, América Latina. Es interesante descubrir como la
población en los setenta pronto era consciente de que aquellas ayudas internacionales eran
tan solo migajas de lo que en realidad ganaban; a los países productores de materias primas
que los enriquecían, mediante condiciones desiguales, que en gran medida se debían a los
gobiernos predecesores que fueron cómplices y/o inútiles para parar esa situación. Esta
impresión la pude oír y asimilar en 1978 en Villa el Salvador entre gente que había
participado en los partidos de izquierda y también en las subdirecclones de SiNAMOS. Así la
repartición de víveres no siempre era recibida como una gracia, todo lo contrario, como un
derecho.
Las mujeres en los pueblos jóvenes se organizaron para recibir los alimentos al
empezar los ochenta, hasta entonces, la organización se hacía con el objeto de formar grupos
de trabajo que podían realizar tareas como arborizar los parques, hacer limpieza pública, u
otras tareas de tipo comunal (más adelante es que se reúnen con un fin productivo) El
cambio se da cuando los alimentos que se repartían individualmente pronto no cumplían la
función principal de aplacar y bajar el índice de desnutrición infantil, sino que iba a parar las
tiendas y mercados. Esto sobre todo con la leche y el azúcar, así se dio una medida que
obligaba a las mujeres a prepararlo y repartirlo a los niños. Entonces esta distribución estaba
en manos de la iglesia Católica. Por otro lado la juventud que Iba adquiriendo una formación
política desde la misma iglesia con la prédica de la Teología de la Liberación daba paso a una
generación pequeña de futuras líderes, las que se incorporaron como madres de familia en
su mismo barrio, convencidas de que no necesariamente la Iglesia debía ser el medio de
distribución, y que además la creciente demanda en si superaría con creces la pequeña red
de distribución hacía que al interior de los barrios se formaran los primeros comedores que
contaban con un apoyo institucional que les daba cierto margen de decisión y que pronto se
multiplicarían a causa de la grave situación económica que correspondía al entonces
gobierno de Belaunde (80-85) que cuando no había dinero para ios desayunos, se dieron
casos, así se lo hizo saber una madre, en el que le agregaban nlcovita en su dieta alimenticia,

241
bajo la excusa de que ello no podía hacerles daño, ya que a los propíos anímales los hacía
crecer y engordar, solo, el té o mate con biscocho constituía su alimento matinal. La falta de
empleo, cuando aún los barrios marginales todavía eran llamados distritos dormitorios, antes
de que constituyeran su propio mercado laboral en sus respectivos barios.
Por la bibliografía revisada, el tema de los comedores populares aún no eran foco
de las feministas, las primeras muestras de esta presencia la ofrece recién en 1984 Violeta
Sara-Lafosse (Sara-Lafosse 1984) las mujeres en los comedores populares empezaron a ser
consideradas por Servicios Urbanos y Mujeres de Bajos Ingresos (SUMBI). Más adelante este
asunto también fue materia de estudio del Centro Latinoamericano de Trabajo Social
(CELATS) (Boggio de la Cruz/Flores/Raffo, 1987) (Chueca/Pérez, 1989). En los noventa se da
lugar a la toma en serio de los comedores y encontramos a DESCO y el IEP publicando libros
que sintetizan esta labor de las mujeres de los pueblos marginales. Podemos afirmar que
este último interés es el que demuestra ya el carácter político de su rol en la vida pública.
Hacemos esta referencia porque es importante para la comprensión del movimiento de
mujeres sobre todo en las zonas urbano marginales de los que tenemos mayor información.
Un aspecto que debe rescatarse es la diferencia que se ve en alcanzar metas de un
género y otro. Cuando un pueblo joven o barrio, se invade, se funda o se quiere establecer
este parte previamente de la organización con participación activa de los hombres. Debemos
entender que es con ellos que se empiezan a una primera etapa que es la de lograr los
títulos, hacer las gestiones para la instalación de los servicios (agua, desagüe y luz), en otras
palabras lo que requiere todo un acercamiento con las instituciones públicas y además el
trámite correspondiente. Hasta los setenta las mujeres aún no estaban muy seguras de su
participación en el escenarlo público. La presencia aún tímida no es sino una característica
que poco a poco se iba desmoronando, por la educación de las jóvenes y por la crisis como
veremos más adelante. Sigamos con la participación masculina, hasta finales de los setenta,
ellos eran los que realizaban las gestiones se nombraban dirigentes y sabían tratar con esos
asuntos que demoraban meses sino años. Es con Velasco que íes da la importancia que hace
que ellos mismos se sientan protagonistas de ese movimiento democratizador y
revolucionario. No es coincidencia que cuando ingresa el gobierno de Morales Bermúdez
todo cambiara, desaparece el SINAMOS y la ayuda directa que llegaba de los distintos
estamentos del Estado también. Así pues quedaban emancipados, así poco a poco que este
tipo de organización comienza a decaer. Pronto esas reuniones se hacían parcas por los
escasos logros y/o beneficios conseguidos, las asambleas pronto fueron acogidas por las
mujeres, que reemplazaban a sus esposos, las que finalmente no podían decidir nada, pues
tenían como respuesta "lo consultaré con mi marido". En el caso de Villa el Salvador, esta
etapa comprende las elecciones para la Asamblea Constituyente, es 1977 un año de agitación

242
y radicalizacíón social, y la organización estaba dada por sectores, grupos y manzanas; es
decir que por cada 24 familias había seis representantes (en salud, educación, vigilancia, etc.).
Seis representantes por manzana, multiplicado por (as 16 manzanas que la conformaban era
por lo menos una asamblea de unas cíen personas, que conforme se iban los meses su
número bajaba, en muchos casos estos cargos servían nada menos que para reunir
socialmente a los nombrados y, por qué no, ocupar los cargos políticos. En 1977, las
elecciones jugaron un rol importante con los partidos políticos.
Toda gestión requiere tiempo, la mayoría de los vecinos entonces eran trabajadores
obreros cuyo principal objeto era mantener su empleo luego las asambleas se Les hacía un
tanto "pérdida de tiempo" más cuando el gobierno no estaba en su parte. Tan solo la fe
política podía mover a los partidos para captar las entonces dirigencias a la deriva. Es así
que se suman el interés de los partidos políticos (APRA y la futura (U), el abandono de Los
vecinos comunes y corrientes, la presencia femenina en las asambleas y con alguna prédica
de izquierda y la crisis económica más lacerante en crecimiento.
En 1978, en plena huelga magisterial, Villa el Salvador jugó un rol importantísimo,
eran los primeros días de abril y se abrieron las puertas a los intereses políticos a través de
Los jóvenes y Los padres de familia. Puesto que los colegios y toda infraestructura les
pertenecían a los pobladores, los mismos vecinos eran conscientes de que les asistía el
derecho a una participación más activa en la comunidad y claro en favor de sus profesores.
¿Quienes podían hacer esto? Las mujeres tuvieron así sus primeros contactos. Las asambleas
escolares.
Desamparados por el Gobierno, las organizaciones Internacionales como la UNICEF,
y la Iglesia ocuparon este vacío pero, precisamente quedaba en blanco el fin político (a la
caza de la liebre) y así fue que la Iglesia poco a poco no quedó más que como un ente
distribuidor regulador. A todo ello ¿la población organizada, acaso no podía realizar esa
labor, después de tantos logros (agua, desagüe, luz, colegios, centros de salud, comisarías), ¿y
la autogestión que tanto orgullo causaba?
La capacidad de sentirse igual a los demás, el respeto que los pobres se merecían a
sí mismos, fueron también argumentos concíentizados por las más jóvenes. Existía entonces
la capacidad de intervenir.
La Comunidad Urbana Autogestionaria de Villa El Salvador (CUAVES) era un botín, a
ella, aunque en crisis, correspondía la organización al pueblo joven. Hasta entonces tan solo
cubierta por varones, digamos mejor, hasta hoy en líneas generales.
Después de los esfuerzos de Eos grupos de izquierda por apoderarse de la CUAVES,
lo que lograron al fin, se impusieron una tarea de negociación en directa relación con las
entidades beneficiadoras tanto nacionales como internacionales. Los PRONOEI (Programas

243
No escola rizad os de Educación Inicial) Módulos de Salud y Educación (Convenio Ministerio de
Educación y UNICEF), cooperación específica de donaciones por intermedio de embajadas. Y
se vuelve a lo mismo ¿quiénes se desempeñarían en estos centros? La respuesta, las mujeres,
las instituciones internacionales sabían claramente que tenían que contar con este elemento,
por dos razones principales: la dedicación "natural" de las madres por estos problemas y el
otro de carácter práctico, eran las únicas que podían contar con el tiempo necesario para
hacer esas labores por un mínimo de retribución (la cuarta parte del sueldo mínimo de un
maestro en los ochenta), que le daba a cambio status, relaciones, certificados y candidata a
ser líder. Caso de María Elena Moyano. El mismo rol jugaba ser coordinadora de un Club de
madres en el expendio de alimentos por la vía de alimentos. EL mismo que se le daba a las
que eran coordinadoras en los programas de OFASA en arborización, en CARITAS por barrer
las calles, etc.
Así la experiencia hacía a las mujeres que ya se encontraban en la arena, avanzar un
paso más. Pero sin pensarlo el logro fue la creación de espacios propios. En Villa el Salvador,
las dirigencias fundadoras del hoy distrito tuvo otro punto de partida. Hecho el distrito, al
que ellas colaboraron con su participación, fue la crisis, la afectación directa de sus problemas
privados que no resistían más, lo que hizo que ellas ya no solo se organicen en actitud pasiva,
tenían que ser activas cuando de proteger el sustento diario se trataba. Envalentonadas por
muchas razones válidas, pronto el coraje salió a flote.
Los líderes que entonces se perfilaron y que ya estaban siendo asesoradas por las
feministas, y dirigentes de izquierda, no fueron tan idealistas como pudiéramos imaginarnos,
a lo mejor allí radica la diferencia de la de clase media, largo plazo más prácticas y con
objetivos determinados que no excluían la adopción de un poder primero sobre su entorno y
paulatinamente al nivel político y económico salieron a relucir. Claramente se podía apreciar
que las movía dos tipos de intereses; el político tradicional, para las que provenían de las
canteras de las organizaciones de izquierda en esta lucha de poderes políticos la izquierda
venció al APRA por inercia coyuntural frente a los actos de la izquierda a nivel nacional, ser de
izquierda era, estar en La vía correcta con los tiempos, sobre todo si uno era instruido casi
esta minoría miraba con cierto menosprecio a aquellos que no pensaban así, "pobreza,
ignorancia" así se explicaba el ascenso al poder por segunda vez de Belaunde), el APRA era el
ayer.

Las mujeres pronto adoptan vicios que el poder ofrece cuando este se sabe seguro
(divide y reinarás, no decir los objetivos, ocultar). Claro en menor medida que los hombres al
principio pero luego de la misma manera una más inteligentes que otras, desde la simple
repartición de alimentos . Esta es la prueba que si bien las feministas colaboraron con ellas
258

Yanaylle, 1991.

244
para poder ingresar su prédica podemos afirmar que estas no fueron comprendidas sino muy
tarde después. Las mujeres en principio tan solo recibieron y solo se interesaron por su fácil
acceso a las gestiones que aún las mujeres de los sectores populares urbanos desconocían. A
diferencia del plano laboral doble debe probar su condición frente a los hombres, entre
mujeres esta operación carecía de aquella prueba, estaba entre ellas. Razón por la que
afirmo que es una necedad idealizar a la mujer por más honesta, más responsable etc. en
razón a su sexo, se debe entender más por su formación cultural y los problemas que se le
presente para afrontar los obstáculos.
En Villa El Salvador por ejemplo este caso de manipulación al interior de las mujeres
y sus organizaciones como el Club de Madres.
Celia Blondet explica que "un elemento que influyó notablemente en la definición
de uno u otro estilo de líderazgo, fue sin duda la historia familiar de las mujeres" 259
y se
refiere con esto a la difícil situación que cada una pasó individualmente hasta llegar a Villa el
Salvador, también a la heterogeneidad de la procedencia de las familias al distrito, es verdad,
de cada uno de los distritos de Lima (claro no de las clases acomodadas) Surquillo, Lince, La
Victoria, Miraflores, Barranco, San Borja, Callao, Barrios Altos, Jesús María etc. y también de
diferentes lugares del país: Huancayo, Piura Cañete, Huánuco, Puno, Cajamarca, Arequipa, y
de la selva de norte a sur, así como en los ochenta huidos del terrorismo ayacuchanos. Con
lo que significa la diversidad de costumbres y logros culturales. En que no debemos
confundir, familias enteras con familias recién constituidas, donde además se tenía que entre
la población cada mujer no tenía a ningún confidente de antemano, ni conocido. En una
manzana de 24 lotes podían representarse las tres regiones del Perú.

La afirmación de Blondet, que rescata hasta tres tipos dirigenciales de mujeres en


Villa El Salvador: la primera compuesta de las mayores en este caso las fundadoras
provincianas en su mayoría que se encargaron de la primera socialización, la segunda
conformada por las más jóvenes, la mayoría limeñas y, un tercer grupo de aquellas que están
conformadas entre las primeras y las últimas. Esta última es la más politizada por cuanto
asimilaron las ideologías del setenta, son a decir verdad las que dieron al movimiento
popular de mujeres como lo entendemos hoy su origen.
Es por ello que si bien las mujeres en Villa El Salvador, por ejemplo, no tuvieron
sino un nivel de poder lo que crearon ellas por medio de organizaciones femeninas,
"comedores" "vasos de leche" que después se convirtieron en la Llamada FEPOMUVES,
Federación Popular de Mujeres de Villa el Salvador. Que en sus orígenes nada tiene que ver
con los intereses finales de la distribución de alimentos, sino con la unión de toda
organización que había como fuente de bonos a favor de un grupo político de izquierda, se

2 5 9
Blondet, 1991.

245
trataba de "organizar a las mujeres para recibir víveres y evitar la manipulación de las
agencias donantes" . 260

Es interesante aunque sea solo resumir este capítulo en el que describe el origen del
FEPOMUVES, en esto mucho tuvo que ver el Centro de Comunicación Popular (ONG
relacionada a Miguel Azcueta), se convirtió en centro de capacitación de dirigentes y de
mujeres también, con La intervención de docentes y líderes comunales entonces vinculadas a
la Unidad Democrática Popular (UDP). Más cuando se inician las reuniones con el propósito
de crear la Federación, Lucila Contreras líder del Unidad Nacional de Izquierda Revolucionaria
(UNIR).
"Yo quiero decir que lo de la Federación nace por Patria, o sea no nace por
iniciativa de las mujeres de Villa El Salvador, sino del partido político Patria
Roja. Si bien es cierto que existían los Clubes de Madres y otras
organizaciones, no fueron convocadas para la Convención, o sea, no se
rescató lo que ya existía de organización.

Lo que interesó a Patria Roja fué captar a las mujeres de Villa El Salvador.
Sabían que eran fácilmente convocadas en torno a los víveres; uno con
víveres podía convocar cualquier cantidad de mujeres; entonces eso
rescató Patria Roja para utilizarlas, tratando de centralizar el movimiento
femenino. Para esto ¿qué haces? Lucila llama: "te conozco, oye María ven
pa'ca, ¿quieres trabajar? ¿quieres víveres? ya júntate veinte mujeres, tú las
comandas a esas veinte mujeres y yo te doy víveres. Y así fué. Entonces la
otra mujer, su vecina se enteraba y armaba otro grupo" . 261

Lucila Contreras es recordada así, ella afirma haber actuado asesorada por su
esposo que era de UNIR como ella, entonces la idea que se vendía era que la gente del UNIR
optaba por hacer la distribución independientemente de las organizaciones donantes, etc.,
mientras que la UDP que contaba con el Alcalde Miguel Ascueta deseaba que en aquella
Federación participan todas las mujeres, todas las organizaciones de todos los programas,
fácil para la UDP con Alcalde y con la CUAVES capturada.
La Federación fue desde sus inicios formada alrededor de una sola persona en este
caso de Lucila Contreras. La UDP quería (y lo hacía por medio de sus representantes, pasar a
la CUAVES, la federación recién formada. Pura discusión y lucha entre la izquierda burguesa
(UDP) y la popular (UNIR). No está demás resaltar el fondo racismo solapado que daba otro
matiz a los de la UDP, la ropa, el discurso y sobre todo alternar con gente "decente". EL
ataque de la UDP hacia el UNIR fue desde las bases (la CUAVES reconocida por el Municipio
naciente con Azcueta, fue su primer dispositivo municipal el hacer oficial toda decisión de
ella).

" 0 Blondet, 1991


2 6 !
Blondet, 1992.

246
Así las reuniones tenían sobre todo un carácter muy triste y ajeno a otra externa del
ideal de organización femenina. Los víveres jugaban un rol importantísimo de
aglutinamiento, mas cuando las mujeres no tenían idea de cómo eran utilizadas por ajenos
intereses. No más les interesaban no perder su ración de alimentos.
Si en la primera Convención de 1983 Lucila Contreras es elegida la primera
presidenta de esta Federación, en 1984 con la Segunda Convención, le sigue Francisca una
líder del PUM(UDP+VR+MIR) apoyada y asesorada por aquel grupo político. Se sumaba:
CUAVES+Municipio y Centro de Comunicación Popular. Entonces la organización contaba
con cuatro mil mujeres en todo el distrito .262

"La autoridad y las lealtades en la mayoría de los casos se cimentaban en las


personas y no en los cargos". Es interesante ver que la personal sí determina una serie de
vínculos más fuertes (vena corruptiva) que escapa a toda determinación de género. En los
distintos niveles de poder ya se generaban las "palancas", la "vara".
En 1987, las cosas mejoran en la FEPOMUVES, logran como fruto de la maduración
de sus líderes hacerse de poder autónomo, seguía Francisca como Presidenta. Las ONG
hicieron convenios con ellas y así lograron:
- La casa de la Mujer
- Centros de Acopio (para vasos de Leche)
- Comedores populares de la Federación

Ya tenían presencia. Y se puede decir que fue en setiembre de 1988, que este
organismo tuvo su gran prueba con las medidas económicas que el gobierno de García
(85-90) abrió con su galopante inflación. Entonces el Programa de Apoyo Directo (PAD) a
cargo de la primera dama contribuyó ayuda por medio de los comités del Partido Aprista
y/o personas que tenían relación directa con el partido. Es decir se prescindía de la
FEPOMUVES.
En la lucha por el clientelismo/ayuda la FEPOMUVES sufrió estragos, no era ella la
vía de reparticipación, el Estado y la Iglesia tuvieron nuevamente el protagonismo y
FEPOMUVES tuvo que dejar incluso que muchas de sus correligionarias pasen a las otras
filas puesto que la crisis pronto les demostró su fragilidad. Con las bases melladas, luego
las dirigencias tampoco la plena confianza de sus bases. Por otro Lado las "bases" no
tenían ningún interés de pelearse o no con el Estado por los alimentos la población en
necesidad, no le interesaba sino cubrir sus más inmediatas necesidades. Hay que
mencionar que incluso hasta el camino de religiosas en muchos casos se entiende por esta
especie la solidaridad material, y también de alguna forma de inventarse un cúmulo

Blondet. 1991.

247
valorativo de conocimientos que lo enaltezca (donación de ropa, viajes a provincias con
fines doctrinarios, trabajos) y también de relaciones como es el caso de los mormones que
se encargan de promover profesionalmente y económicamente a sus miembros. Habría
que ver cuanto tuvo que ver este periodo crítico con el auge de las nuevas religiones, al
margen de dogmas. Qué ofrecen materialmente.
En 1989, el PUM se dividió, la FEPOMUVES salió pese a todo a flote, pero perdió
algo su capacidad de negociación. Sin embargo su presidenta en los noventa salió elegido
teniente-alcalde por el mismo partido de Miguel Azcueta.
En su libro Cecilia Blondet, despliega un halo de heroísmo y este sin duda lo fue,
más por las mujeres de base, es decir por aquellas que al final de cuentas no sabían bien
como se iba trabajando con fines ulteriores, y así cumplían las marchas matinales, las colas
largas, las reuniones vespertinas a costa de dejar a sus niños, los deberes del hogar,
generándose al interior de sus familias un clima de conflicto, por esas salidas en "todo el
día", también por sus problemas personales. ¿Cómo es que la participación de las
feministas es una vertiente más? Las feministas como órgano de asesoramiento si llegaron,
más su prédica y discurso, no, más aprendieron ellas de las mujeres populares. Acaso no
fue su mejor caso de estudio en materia de poder.
A partir del noventa, debemos ver que parte de la fuerza de María Elena Moyano
fue el aprovechar un filón peligrosísimo que ni sus compañeros de partido se atrevían a
tocar, el problema del terrorismo, no era ningún secreto que Sendero Luminoso quería
influir en la dirigencia de la FEPOMUVES, el aparato político al cual sirvió Moyano. El
trabajo de todo líder es entre otras cosas estar vigente, María Elena Moyano lo sabía y jugó
su última carta (ya era madre de dos hijos, en ella también se cumple un rasgo común de
las mujeres dedicadas a la política, el dejar de lado a la familia por otras ambiciones), la que
le daría como le dio por poco tiempo, presencia en las esferas altas de la dirigencia de la
Izquierda. Enfrentar a Sendero Luminoso por la vía ideológica, negarlos, invalidarlos,
cuestionar sus métodos, repetir en voz muy alta lo que al interior de su partido se hablaba
con discreción. Así llegó colocarse en la vitrina política, pero pronto Sendero Luminoso se
encargo de callarla, pero lo infame no es solo el acto quienes la mataron sino el desprecio
manifestado hacia su persona por parte de quienes tenían al deber de cuidar y defender su
integridad física cuando sus actos otorgaba créditos a su agrupación política. O acaso, en
el fondo, sentían era celos de su protagonismo.

A la muerte de María Elena Moyano asistieron muchas personas, pero en definitiva


no eran en su mayoría sentidas multitudes que la acompañaron como la prensa sobre todo
La República publicaron fueron aquellas que estaban ligadas a la red del FEPOMUVES por
las razones antes mencionadas, la obligación de cumplir con ciertas disposiciones so pena

248
de ser sancionadas con la supresión de los víveres. Resaltando ya muerta su capacidad de
"política" al interior de las filas de Izquierda. Al conmemorarse un año de su muerte el
esfuerzo del municipio, en manos de la "izquierda" del Centro de Comunicación Popular,
etc. la comunidad, la inmensa mayoría que conoce a Moyano solo por la prensa y la
difusión periodística, con el apoyo de las ONG se ve en ella, a lo lejos, una líder, al gusto de
sus promotores, mientras aquellas que la conocieron en el llano, tienen el recuerdo de una
mujer de coraje, en tanto, manipuladora, 263
que cumplía un roí que nadie estaba en
condiciones de realizar por falta de tiempo y/o conocimientos, recelo, admiración, envidias,
confundidas con reconocimiento y; por qué no decirlo, gratitud.
Las publicaciones que la recuerdan después de sus acciones dejan explícito una
admiración y un modelo a seguir, en cuanto uno se disponga a cuestionar sus métodos,
pronto responden que se trataba precisamente de ello, de tener personalidad, una especial
forma de abordar las cosas, los problemas. "Oh claro, ella podía vestir con botas como no,
vestir casacas de cuero porque no". Pero, vestirse así para una marcha, fumando y con
actitudes de dominación vertical, era algo muy diferente al ideal de la pregonada
democracia popular desde las bases, más cuando las órdenes que no necesitaban
explicaciones y eran cumplidas con el temor de las sanciones.
En Villa El Salvador, donde la defensa de la izquierda se daba precisamente entre
un pequeño grupo de dirigentes, donde se votaba, no por la izquierda, sino por Miguel
Ascueta y lo que representaba, sino por él, por los vínculos que puedan beneficiarlos, así la
izquierda ganó en Villa El Salvador por las mismas razones que gana Fujimori en 1995.
Cuando en materia económica en sí, optan por la pequeña empresa y explotan a las suyos
y a sus vecinos.

12.4. Lima, pamplona alta: década de 1990. La red de una


dirigente popular: Emma Hilario
Un libro que tal vez rescata otro aspecto de las mujeres líderes del movimiento u
organizaciones populares es el de Virginia Guzmán y Alicia Pinzas Biografías
Compartidas ^,2
En ella se hace referencia de Hilario, por su origen, características y
aspecto físico pronto nos daremos cuenta que obedece a otro tipo de intereses. En este
caso también es una vía que como mujer se construye para lograr los fines que se han
trazado.

2 f i i
Debido a las marchas a las que eran obligadas a participar so pone de no recibir su ración diaria o eí pago de una
multa.
2 " Guzmán/ñnzás, 1995.

249
Emma Hilario es pobladora del Cono Sur y corresponde a Pamplona Alta. En su
zona nadie mejor conocida y referida sobre los asuntos de temas de organización y
comedores populares. También pobladora de un Pueblo Joven, llamado Ollantay
reconocida por Velasco en 1971, al que ella llegó en 1973. Hija de dirigente sindical
minero del centro, nació en 1946 (mayor que María Elena Moyano), recuerda su niñez y
juventud sobre todo a través de la escuela y las diferencias que se establecían entre los
lugareños y los blancos de Lima, llega a Lima y trabaja en una casa, en la que conoce
personas que tienen que ver con el mundo de las ONG. Llegada a Pamplona Alta en 1979
se inicia el programa de OFASA y luego el de Caritas, y se integra en una junta directiva. El
primer contacto lo tiene con la madre norteamericana, Elena, con la que se reunió hasta
1990 en que retornó a su país, cuya característica era ser muy cercana a las pobladoras al
punto de aconsejarlas en los problemas personales. Emma participó de los encuentros
matrimoniales que la madre solía conducir.
Emma asistió a su primera Gran Convención del asentamiento y es ahí donde a
pesar de estar asesorada, se enfrenta al machismo de los dirigentes que no le permiten
hablar, pero por su fuerza deciden leer su noción, en ella que planteaba que las mujeres
también debían ser coordinadoras de manzana . 265
Se ubicó como una líder bien
consolidada, había llegado a representar a su comunidad como Presidenta del Comité de
Construcción y Obras firmando el Convenio para la construcción del centro comunal.
1984 significa el ingreso de los partidos de izquierda en su localidad, sobre todo
por intermedio de la gestión municipal, y también la Llegada de las feministas al barrio.
Entonces se realiza la primera Convención de Mujeres de su barrio y ella pieza principal.
Participa de un taller y se convierte en promotora. En esos años también se consolidaban
los comedores populares, los vasos de leche, los comités de salud. Emma llega a ser la
presidenta de la Central de Comedores autogestionarios de su distrito (San Juan de
Miraflores) y una de las tres dírigentas de la Coordinadora Nacional de Comedores. En
1988 es elegida Secretaria General de la Directiva Central de su Sector. "Debía demostrar
que podía ser una buena dirigente", y sacrificó el tiempo que debía a su familia.
Emma Hilario es una dirigente que ha traspasado todas las instancias que se le
pueden presentar a una mujer líder de barrio, se enriqueció de experiencia y sobre todo
supo entrelazarlas y sacarle provecho. En sus relatos se puede rescatar que ella hace
mención sobre todo a los partidos políticos, las ONG y sus diferencias con el Estado. De los
partidos políticos Emma nunca se fió, y a pesar de que tuvo oportunidades de ingresar a
uno, no lo hizo, desconfió. Se definió a sí misma de izquierda y feminista, en sí seguro lo
era.

Guzmán/Pinzás, 1995.

250
Como dirigente de polendas tuvo acceso a viajes, al exterior (México) los que
aprovechó para conseguir más relaciones, relaciones a las que también correspondía con
apoyo político y marca la diferencia con respecto a los hechos sucedidos en Villa el
Salvador por ejemplo.
En los noventa, ella misma manifiesta que sintió la presencia y la amenaza de
Sendero Luminoso en este sentido pudo ver como la siguieron y llegaron a ingresar a su
casa y "le pegaron y le rompieron dos costillas". Hilario opinaba que ellos la estaban
evaluando y que "todavía no la iban a matar". Cabe mencionar que más peligrosa fue la
situación que pasó al enfrentar una supuesta declaración que bien pudo traer abajo su vida.
Su vida volvió a correr peligro cuando ingresaron los miembros de Sendero
Luminoso y la quisieron ultimar de un balazo, ella se defendió con el brazo que pudo cubrir
su cabeza a donde estaba dirigido el proyectil. Los hechos sucedieron cuando Sendero
Luminoso estaba matando a una serie de dirigentes populares en los barrios marginales.
"El caso más difundido es el de María Elena Moyano... asesinada en febrero de 1992, quien
justamente había enviado una carta a Emma luego de un atentado contra su vida. "No nos
queda más que la fuerza del pueblo organizado y la toma de conciencia de las mujeres de
nuestro pueblo, no solo con esa fuerza será posible derrotar al terror" . 266

LIMA, P A M P L O N A ALTA: D É C A D A DE 1 9 9 0 .
LA RED DE UNA DIRIGENTE POPULAR: E M M A HILARIO

Fuente: Guzmán/Pinzás, 1995.

Guzmán/Pinzás, 1995.

251
Lo interesante del trabajo de Virginia Guzmán y Alicia Pinzas, Biografía
Compartidas radica no solo en entrelazar la vida y relaciones personales de esta dirigente
sino también ver como se moviliza, es en suma un modelo, que el resto no trabajó. Es la
red de relaciones e intercambios las que tienen que ver primero con: el campo, la ciudad y
el barrio; todos los que finalmente le dan forma a la que es la red que interesa: La red de
una dirigente sindical. Redes que no se pierden sino que contribuyen con la dirigente y
sus posibilidades de acción. Una semana de Emma Hilario es tan rica como gratificante
como para cualquier profesional, con la diferencia que en su caso no recibe un sueldo por
su labor, ni seguro con estabilidad social ni que vea mejora por esa labor en un
enriquecimiento de su hogar. Satisfacciones estas tan normales. Su trabajo continuo no
solo le atañe a ella sino a toda su familia, que también corren los riesgos.
Como se puede apreciar, como dirigente popular ha creado su propia instancia de
poder, las mujeres y sus organizaciones alrededor de los comedores populares, y la
dirigencia comunal, en su caso la Iglesia que se manifestó tan cercana sobre todo por la
influencia de la madre Elena luego queda en segundo plano. Como los partidos políticos y
las ONG. El estado por las razones de su importancia a la hora de gestionar el ingreso de
los alimentos cobra ya su interés. Solo tiene conocidos en aquellas instancias donde ella
tiene una conocida. Las relaciones bien pueden ser utilizadas de muchas maneras. La
desconfianza de los partidos políticos explica así la carencia de una "amiga".
Como en el principio, no podía poner en este rubro de poder a las feministas y
hacer el conglomerado del movimiento femenino popular.
Las feministas son como la policía en la sociedad. Y su injerencia era necesaria en
todos los actos, por ejemplo: cuándo las feministas sirvieron sin estar preparadas para ello,
a las dirigentes populares, cuando corrieron peligro sus vidas, dando el apoyo necesario,
como en el caso de María Elena Moyano, con darle un lugar donde vivir "escondida" en los
momentos más difíciles. Dándoles el asesoramiento en materia de género; y sobre todo,
cuando pierden una posición en la toma de decisiones frente a los hombres. También,
haciéndoles saber su cuota de las líneas feministas.
Cuando se había de política, y en ella se comprende a la mujer, se tiene que
reconocer que en este caso el poder que las mujeres ejercen, corresponde a las actividades
que tienen que ver con los roles de su género, es decir en los sectores de salud, educación,
asistencia social, y sobre todo el de gestión que representa solo la administración, pero de
ninguna manera de decisión, lo que poco a poco se va logrando. Todo esto en el plano de
nuestro "estado de cosas". Sin embargo, no es determinante que las mujeres tengan
ciertos niveles vedados. El cambio de las cosas es y será a despecho de las idealistas, "a la

252
fuerza", se tiene que luchar por ello en todos los flancos; pues la complejidad del Perú con
sus distintas culturas y costumbres padece de un denominador común, el machismo.
Las líderes de las organizaciones populares se caracterizan sobre todo por su
propósito de satisfacer las necesidades de la población, íncursionan por el frente de los
alimentos, la edad ideal, la del ciclo reproductivo, es precisamente la de mayor peso
representativo en aquellos cargos. Si bien es cierto mucho tiene que ver la experiencia de
vida de cada una de ellas, también su ubicación social, esta condiciona su forma de
incursionar en el poder. También es importante la relación que ellas tienen con los demás
grupos que intervienen, el Estado, la iglesia y los partidos políticos. La otra cara de La
medalla respecto a tas mujeres senderistas como se verá más adelante. Este un país con
tantas contradicciones, con el "combustible" proveniente de la injusticia y la incertidumbre,
todo se trastoca desde cada una de las instituciones del Estado hasta la familia sin hablar
de las comunidades que han traído consigo la emigración y abandono por la injusticia y
falta de oportunidades para vivir con dignidad.
A mediados del gobierno de Alan García (1985-1990), mucho se hablaba de un
probable gobierno militar. En 1988 la situación socioeconómica estaba muy mal, y la
presión internacional no dio señales de bajar en nuestra historia ocurre que cuando La
nación se hace presa de ta crisis, los militares tomaban las riendas con el pretexto de salvar
o reconstruir el país. Una vez que Los militares cumplían este cometido venía luego el
civilismo a retornar sobre un escenario más o menos ordenado. El desorden de 1987 en
adelante se quedó sin bomberos, sin militares que pusieran en orden las cosas por la
fuerza. No hubo golpe militar, pero ¿quiénes tuvieron que afrontar la situación para que la
reproducción social continúe? La baja policía, las mujeres. No los más fuertes sino las más
débiles, los no preparados. ¿Acaso, este recodo representó el fin de una etapa de crisis con
movimiento femenino y todo?
Es un hecho que la participación en el poder de (as mujeres debe ser consolidada
en las instituciones de mayor envergadura, aquellas de las cuales no se puedan prescindir.
Es decir en los centros de gobierno central y como ministras en los diversos sectores, de la
misma manera, con la participación de más mujeres en el mercado laboral.

12.5. Sendero luminoso y sus mujeres

Sendero Luminoso ha sido y es aún un fuerte dolor de cabeza para ios gobernantes del
país y los partidos políticos institucionalizados, en materia de poder, es una organización
temeraria para el resto de los ciudadanos. Al margen de que sus postulados puedan o no
estar en concordancia con las actitudes de diferentes sectores de la población. Su inicio en

253
cuanto a operaciones de guerra interna empiezan en 1980, ha sido la sombra de dos
gobiernos que no supieron enfrontarlo. Se trataba de profundizar las contradicciones,
crear el desorden debilitar el Estado y generar el terror con el propósito de capturar el
poder. Como hemos visto, las organizaciones femeninas no eran para nada el objeto de su
interés por la forma en que se conducían los partidos de izquierda revisionista, al interior
de los comedores populares se las acusaba de corruptas y de mantener vínculos con la
burguesía etc.

Sendero Luminoso tenía a Lima como fin, su trabajo empezó en Ayacucho, su


organización, sus cuadros también. Aunque dirigida por un hombre, las mujeres que en el
movimiento participaron se destacaron por su protagonismo, al frente de las Incursiones
que se enfrentaban al ejército, con armas en mano. Ellas fueron foco de interés no solo
para sociólogos sino también para un historiador que se remitió a explicar estas actitudes
recordando a Mama-Huaco, modelo femenino reconocido por las culturas precolombinas
(Macera, 1988).
Cuando se menciona a Sendero Luminoso, es lógico pensar en su vertiente violenta.
Pero esta vorágine, que tiene en sus mujeres a protagonistas de actos tan o más que el
realizado por los hombres, y que también están en los diferentes niveles de poder tienen, un
origen mucho mas tempano. Sendero Luminoso es dentro de la izquierda el ala más
extrema en el Perú (no es parte de este capítulo comentar sobre la estructura de Sendero
Luminoso ni su programa así como tampoco de los entretelones ideológicos). Robin Kirk
tiene algo que decir sobre lo que ha género se refiere:
"Para Sendero Luminoso -al menos en teoría- es la clase y no el género
lo que importa. La condición biológica femenina es equivalente a la de
un minero o un intelectual...

A diferencia de otros comunistas, que insistían en que la igualdad de


género es una "contradicción secundaria" a ser discutida después de la
revolución, la revista senderista Rima Ryna Warm'i (Las mujeres hablan)
argumenta que la igualdad económica y de género surgirían de la
victoria maoista. Sendero Luminoso sigue siendo el único grupo
político que ha reclutado activamente a mujeres y las ha colocado en
posiciones de poder" . 267

El interés que Abimael Guzmán tenía por las mujeres se puede rastrear desde
1965 cuando formó el Movimiento Popular de Mujeres como parte de la facción maoista
del Partido Comunidad del Perú. Abimael Guzmán se dio cuenta de ello cuando trabajo en
el departamento de Educación, donde la mayoría estaba constituida por mujeres.
Una mujer que causó impresión a su muerte y que fue motivo de no pocos
adeptos por su ejemplo, fue Edith Lagos, que "no era una campesina, sino un misti, tercera

2 6 7
Kirk, 1993. En este subcapítulo, el texto base es Las mujeres de Sendero Luminoso de Robin Kirk.

254
hija de un rico tendero", sigue, "capturada en 1981 [...] el mayor cambio está en la
expresión", y cuya foto parece decir: "Aquí hay alguien cuyas ideas están formadas" tenía
18 anos
En 1981 Sendero Luminoso ya tenía la tercera parte de la zona de Ayacucho.
Guzmán decía bien ai referirse a sus jóvenes correligionarios como "los mejores hijos del
pueblo". Estos jóvenes no solo defendían una línea política sino que también organizaban
juicios populares en los que otorgábanse la facultad de juzgar a los esposos adúlteros,
asimismo a los que abandonaban su hogar y/o practicaban la sevicia.
Este tipo de intervención en la vida privada de las familias, en temas que son de
interés femenino, así resueltas no Indicaban ninguna prédica feminista los actos por si solos
hablaban.
Edith Lagos ayudó a planear el escape de la prisión de Huamanga de 1982 en el
que se liberó a 78 senderistas y 169 presos comunes. Su muerte fue muy significativa,
asistieron diez mil personas, la más grande multitud jamás reunida por un motivo no religioso,
se trataba ya de la Comandante Edith. Así se convirtió en su heroína y mártir. Tres meses
después de su muerte no le quedó a Fernando Belaunde más que declarar en estado de
emergencia a nueve provincias de Ayacucho, incluida Huamanga, el control pasó a los militares.
Las mujeres también son tomadas con especial esmero en La iconografía
senderista. Al clausurar el Primer curso Militar de Sendero Luminoso se realizó una pintura
para conmemorar el evento, aparecía Guzmán como siempre resplandeciente dando la
bienvenida a los camaradas, y las dos primeras personas eran mujeres, ¿el mensaje?
"Convertiremos el fuego negro en rojo, el rojo en luz. Estos somos nosotros, este es el
nuevo despertad. Camaradas hemos renacido". Esto se reconocen cuando en el Diario de
Marka, destacan los colores rojo y negro y las mujeres en actitud de lucha. Por otra parte,
eran pocas las oportunidades en que los medios de difusión hacían saber que eran
mujeres, quienes daban el tiro de gracia a sus ajusticiados. La tercera parte de los acusados
de actos terroristas atribuidas a Sendero eran mujeres, según las autoridades peruanas . 269

Robín Kirk estudió a las mujeres de Sendero Luminoso a principios del noventa y
observó que La imagen que proporcionaban era aquella de mujeres que, carentes de visión,
venían siendo utilizadas por hombres violentos y psicópatas sedientos de sangre. Luego
de sus investigaciones se dio cuenta de que, por el contrario, eran mujeres bastante
inteligentes, que habían pensado acerca de su participación en Sendero Luminoso, en las
consecuencias personales y políticas que iban a ocasionar.
En 1990 la inteligencia nacional documenta la presencia de ocho mujeres entre los
19 miembros del clandestino Comité Central del Partido y que en el partido declaraba que

Kirk, 1993.
2 6 9
Kirk, 1993.

255
el 40% de sus militantes eran mujeres. Su presencia en los escuadrones de aniquilamiento
así lo demostraría.
Otra mujer que hizo noticia fue "la chata", quien en noviembre de 1990 condujo
una incursión de cincuenta senderistas a la hacienda de un prominente líder político. Hizo
arrodillar a Javier Puigros sobre el suelo diciéndole "la mala yerba...debe ser arrancada de
raíz". Horas más tarde ella fue baleada por la policía junto a dos compañeros. La prensa
hizo una imagen de mujer cruel, bella y de apetito sexual, que cuadraba con la información
que presentaba a sus dos compañeros como sus amantes.
En 1990, la policía ya tenía en su manual de entrenamiento los "rasgos de
personalidad" se referían de estos términos:
"Son más determinadas y peligrosas que los hombres, tienen conductas
absolutistas, y se consideraban capaces de desempeñar cualquier misión,
poseen la dicotomía de la debilidad y la dureza son indulgentes,
sumamente severas...explotan y manipulan al prójimo, son impulsivas y
arriesgadas" .
270

y nada mejor que todas sus lecciones para tener esas características, una de ellas es la
siguiente:
"¿Cuál es el enemigo del pensamiento revolucionario? El revisionismo!
¿En qué etapa está el Perú, ¡Dominación semífeudal, capitalista-
burocrática e imperialista, principalmente yanqui" .
273

Lecciones que particularmente recibía Betty, una integrante del Ejercito Guerrillero
Popular (EGP). Cuando ella no hablaba era criticada precisamente por no hablar "¿Cómo
podría convertirse en una verdadera revolucionaria si nunca abría la boca? El objetivo, le
dijeron, era forjar verdaderos revolucionarios. ¡Las legiones de hierro! Ella no debía ocultar
¡nada-nada! al PARTIDO [...] más importante que la habilidad era el pensamiento" . 272
El
Pensamiento Gonzalo.

Betty sabía el quechua, la mayoría de los camaradas mayores que también eran
ayacuchanos provenían de familias de clase media y no podían conversar con los
campesinos con fluidez. Betty era indispensable para estos fines, así en adelante tendría
una nueva vida así, y escogió un nuevo nombre, sería Betty, sería la camarada Rita.
Robín se entrevistó con un chofer que conoció a la esposa de Osmán Moróte, a
decir de él era "palomíllera", tenía un hermano experto en energía alternativa, y otro que
dirigía El Diario. Con dos hijos, Elena y Eduardo, uno de ellos detenido en 1991 cuando
intentaba colocar una bomba contra Máximo Román. Para este chofer las casas de Durand,

Kirk, 1993.
Kirk, 1993.
Kirk, 1993.
256
Moróte y Cáceres eran como un triángulo de las Bermudas o un agujero negro, recordó

"aquí es donde ellos se perdieron" . 273

A Kirk también estas mujeres le hacen recordar a otras en la historia, a Mama


Huaco que condujo a sus hermanos a conquistar el valle del Cuzco, a Micaela Bastidas con
ingenio militar, etc. . 274

Lo racial es el Perú un problema, una categoría, negativamente sublimada. A


pesar de que a fines de los años setenta aparentemente no fue tratado como tal,
pretendiendo ignorarlo, quizá por el protagonismo de los líderes que daban esa imagen
(Belaunde, Hugo Blanco) atendiendo por ejemplo los problemas económicos y de justicia
social en términos de clases económicas, o por el contrario confundirlos a todos con
prédicas altruistas, demagógicas, diciéndole a la gente lo que ellos desean escuchar.
Cada vez más personas de las grandes mayorías participaban de la educación
superior. EL acceso al trabajo en los niveles populares, fuera de todo el ideal que uno
pueda hacerse de ellos, tiene en el racismo la traba más cruel, amén de los contrasuelazos
que la mayoría de profesionales emergentes sufren al pretender trabajos acorde a su
preparación, cual es la presencia, la presencia racial. Kirk dice "Estos nuevos graduados
descubrieron que, en el Perú oficial, es el origen racial y no la calificación profesional lo que
determina el éxito. Aún para desempeñarse como una secretaria mal pagada, se requiere
de "buena presencia" piel blanca y no de la adecuada preparación" y "para las mujeres, el
futuro era especialmente cruel. Teniendo en cuenta las estadísticas de mortandad infantil,
desnutrición y enfermedades infecciosas, la pobreza femenina en América Latina está
creciendo". Sendero Luminoso les da bajo esta perspectiva, la oportunidad de un "contrato
místico" , que las salva de ese destino cruel, es casi como ser una monja, su situación la
275

pone por encima de cualquiera de otras mujeres, y se sienten enaltecidas, son mejores que
las blancas y las ricas, son iguales que los hombres.

Sobre Augusta La Torre, la esposa de Abimael Guzmán, se decía que Gonzalo la


nombró dirigente del Movimiento Popular de mujeres, y en las reuniones políticas ella
sentábase detrás de él tomando notas y siendo "ojos y oídos" de Abimael. Cuando
encarceladas, las mujeres que estaban en la Trinchera Luminosa, el pabellón de las
acusadas y sentenciadas hasta mayo de 1992 su imagen estaba presente por doquier. "El 6
de mayo, la policía puso sitio a la prisión con el objetivo de trasladar a las senderlstas a
otros lugares distantes. Empezaron con 130 mujeres, quienes le salieron al frente con
dinamita, armas caseras y frascos de ácido muriático. Las mujeres escaparon a través de un
túnel que conectaba la Trinchera Luminosa con el pabellón de varones, y desde el cual Eos

2 7 3
Kirk, 1993.
2 7 4
La polaridad que existe entre Mama Huaco y La Calata es un punto de partida para Kirk.
2
« Kirk, 1993.
257
senderistas montaron resistencia combinada" (Kirk, 1992). Este tipo de trabajos debían ser
coordinados entre ellos por igual, otra demostración más de su capacidad organizativa.
En la cárcel, también hubo manifestaciones que decían mucho más de su mejor
condición, una mujer de Sendero. "Las mujeres son oprimidas por la sociedad y por la
familia, de modo que son más revolucionarias que los hombres", dijo la camarada Gloria de
el Penal Castro Castro; más, ¿quién sufre lo peor de la crisis de nuestro país? Las mujeres.
Necesariamente ellas son las primeras en ver la solución o la revolución y "Los detalles
personales no son de ayuda a la guerra popular", además el tener hijos para ella (Gloria) era
secundario, cuando tenía cuatro hijos, sostenía que la mayor herencia que le podría dejar
era "una Nueva Sociedad", Kirk que la entrevistó expresa "solo hablaban de Gloria, se
sacrificio, del paraíso de la Nueva Sociedad", concluía que Las detenidas se referían a las
que entregaban información: "cayeron en la mugre reaccionaria", una forma de
considerarlas inferiores.
En los días de visita, las prisioneras se vestían como para una fiesta, la pulcritud
debía imperar pese a todo. EL orden, la imagen ordenada, casi marcial.
Kirk recoge además, la entrevista de una periodista "Ruth", que le hiciera a la
camarada Flor. Flor era la llderesa de una columna, ingresó a los 19 años, cuando su sueño
era trabajar como secretaria bilingüe en Estados Unidos de América, en un año, fue
reconocida y fue promovida a un cargo alto en el Partido en la selva. ¿Qué sabía hacer?
Desde las 4 a.m., se entrenaba con ejercicios, practicar emboscadas, ataques, lemas en las
paredes, escapar, organizaba partidos de vóley y fútbol ("entre la columna y las masas") en
la región. Ruth, la periodista pensaba de la Comandante Flor así como de los demás
jóvenes, son lo mejor que el Perú tiene para ofrecer... Pero solo puede pensar en ellos con
temor y repulsión".
La mayoría de los periodistas visitaban a los hombres, pero las más importantes
ahí eran las mujeres, como después se confirmaría tras la captura de Abimael Guzmán. Una
de ella era la "Camarada Noche" Laura Zambrano detenida y liberada primero, ella se
dedicaba a tejer alfombras (todas con la Imagen del Presidente Gonzalo claro), era maestra
de escuela y pensaba continuar con ese trabajo. El día de su liberación, fue "directamente
desde la puerta de la prisión hacia un auto que la esperaba y que la introdujo rápidamente
a la clandestinidad". Fue finalmente capturada con Abimael. En la prisión estaban también:
Sybila Arredondo, Renata Herr, la misma Laura Zambrano, etc.
La importancia de las mujeres era tal, que capturado Abimael, se pensó que era
una mujer la encargada de conducir el Partido, Techi Duran o la abogada Martha Huatay,
defensora de terroristas, más tarde también capturada.

258
El texto de Kírk publicado por el IEP, menciona que la mayoría de las mujeres son
dirigentes populares (comedores, derechos humanos, iglesias protestantes) que creen que
el cambio se lograría por medio de la paz. Aunque mejor sería decir que todas, cada una
desde su ubicación hace individualmente lo necesario para mejorar su situación y todas por
la vía de la acción, la participación activa en su medio social. El trabajo, en cualquiera de
sus manifestaciones, como trabajadora, como madre, como líder y como no, como soldado.
En el principio me referí en tres tipos de poder que deben en el caso del Perú
estar vinculados. EL militar, el religioso y el civil. El militar es casi terreno monopolizado
por ios hombres, este organismo no termina por ubicar a las mujeres en todos sus niveles.
Así que si deben participar mujeres ellas debían sujetarse a rutinas regulares. Sendero
Luminoso aquí ha logrado sin pretenderlo que las mujeres puedan servir tanto más o
menos que los hombres, una ventaja sobre la milicia oficial. En lo religioso, tenemos que
reconocer que la Iglesia católica, la que más fieles tiene entre los peruanos, tiene definida
la ubicación de las mujeres al interior (no hay sacerdotes), más bien, las iglesias
protestantes mediante ese trato personal y popular que permite el acceso a la palabra
(biblia) de manera más democrática, tiene las mujeres sus mejores emisarias, que van al
centro de la doctrina y normas de vida más eficaces. Es en el plano civil y dentro del
político, que las mujeres a pesar de todos sus tropiezos han abierto una trocha, también se
puede afirmar que es por la vía del trabajo como se afirman más, no tanto como
movimiento de mujeres de los sectores populares y/o medios, sino más bien como un
conjunto total heterogéneo que tiene que atravesar un sin fin de valores, situaciones y
discriminaciones no de género sino al interior de la misma sociedad, clases, razas, culturas,
ocupaciones, etc. donde aún entre hombres se juega una suerte de lucha por el poder.

259
13. VIGENCIA DEL FEMINISMO EN EL PERÚ

En este acápite no se trata de hacer una


extensa reseña de sus múltiples aportes, pero
si de aquellos hitos significativos que
contribuyeron y contribuyen a La equidad
entre hombres y mujeres.
El feminismo en el Perú ha
sobresalido sobre todo a partir de los últimos
años de la década del setenta. Y a decir
verdad este fenómeno no se puede
comprender en esta etapa sino es teniendo en
cuenta la influencia extranjera, a pesar de que
en el Perú ya habían mujeres que exigían
derechos igualitarios entre hombres y
mujeres. A partir de la iniciativa de Los estudiantes universitarios de la década del setenta
es que esta toma de conciencia renace en el Perú con una aureola (en principio) de cierta
incredulidad y con ataques que las ridiculizaban.
La fundación de Acción para la Liberación de la Mujer Peruana (AL1MUPER) en
197 3 2 7 6
es el primer organismo que se presenta como el detonante de lo que un grupo de
mujeres de clase media había logrado en el sentir de las mujeres populares, un movimiento
femenino popular que ha tenido, en los grupos formados posteriormente un apoyo
"incondicional".
Pero ¿qué era lo que Les preocupaba a estas mujeres? sí bien es cierto que muchas
de ellas no veían en un principio los problemas de las mujeres de los sectores populares la
problemática social fue su primer acercamiento a ellas. Las estudiantes, se declaraban
feministas sobre todo por cuanto ellas eran las primeras violentadas al ingresar al mercado
laboral, estas nuevas profesionales, la mayoría de ellas de carreras que tenían que ver con
las Ciencias Sociales (razón por la cual eran las llamadas a observar y sentir con
detenimiento esta situación de discriminación y analizarla) repararon en los problemas
generados en relación a su sexo, pronto se vieron ante un trato desigual, inferior sino de

»* Blondet, 1994.

260
"especial consideración" que no hacía sino considerar su puesto laboral como algo
accesorio a su persona.
Para "tal puesto" se necesita a una persona de carácter, y pronto se deduce que
las mujeres "carecen" de este requisito, pero lograr tal hazaña, luego debían soportar
inmediatamente la impresión de su rol laboral hacia sus subordinados, en los setenta sobre
todo, que consistía en dudar de su capacidad y ponerle pruebas de toda índole.
Finalmente se debía admitir que la sociedad aún no estaba preparada para una situación
así, por otro lado no faltaba un hombre que podía realizar la misma labor con una
autoridad "reconocida socialmente", y con un sueldo mayor, pero que era lo adecuado para
aquellos que sostienen a la familia.
Está demostrado que para que las mujeres tengan acceso a todos los derechos, la
mejor forma de llegar a ellos es por medio del trabajo, aquel que le permite obtener un
salario que no la subordine a un padre, esposo o hijo que las mantenga económicamente.
Esta situación se presenta en los setenta no como a un grupo de mujeres que ingresa al
mercado laboral, sino como una generación. Pero esta conquista a medias no bastaba, le
faltaba otro componente, aquel que los hombres reconocen en ellas habilidad, la palabra.
Esta también debía salir de los hogares, de la vida domestica-privada, salir al marco
público. Las feministas fueron las primeras en incursionar a este tipo de relación en la vida
pública. La lucha en el mercado laboral que progresivamente fue una conquista de todas
las mujeres, empujadas por el desarrollo de la tecnología, las comunicaciones, pero sobre
todo por la profunda crisis económica que seguía su curso, la transformación social
acelerada por Velasco también incluyó, pero primero se debe dar crédito a este primer
contingente de mujeres.
ALÍMUPER hace su debut público con el ataque a los concursos de belleza, según
ellas, estos estigmatizan a la mujer sub valorizando otras facultades relativas a su capacidad
intelectual. Se trataba de liberar a la mujer de una serie de mecanismos y estereotipos que
limitaban su desarrollo integral como persona, y libre ciudadana.
Ellas denunciaron este sistema discriminatorio en función de su sexo, imbuidas
por las teóricas norteamericanas reconocieron además su ataque al capitalismo
patriarcal . En ALÍMUPER también se preocuparon del feminismo en el Perú como tarea
277

de trabajo , a mediados de los ochenta, Ana María Portugal publica por medio del Centro
278

Flora Tristán "Setenta años de movimiento feminista en el Perú" y al año siguiente publica
otro trabajo que enmarca esta labor en un plano latinoamericano . 279

2 " Vargas, 1983.


" 8 Portugal, 1978.
2 " Portugal, 1985; Portugal, 1986.

261
En conjunto todas ellas lograron coordinar esfuerzos amén de problemas internos,
que las hacía lidiar con los compromisos partidarios de izquierda (que las calificaba de
burguesas). Entre varias, una feminista debe ser rescatada, es la conocida Virginia Vargas
cuyo papel se destaca por ser en muchos casos la más notoria a través de las entrevistas
periodísticas y también por su labor práctica y teórica. Su producción bibliográfica así lo
demuestra, como conocedora del movimiento feminista y como activista . A través de ella 280

se puede uno formar un perfil de feminista, con sus congresos, vínculos internacionales y
como es que ella entiende la participación en la política, con aquella perspectiva que no
niega la feminidad para acceder a ella. También hablar de rebeldía, afirmarse y entender el
producto de la relación entre las feministas con los movimientos sociales. Virginia Vargas
fue la voz del feminismo en el Perú, La que públicamente está identificada con los programas
de las ONG de asistencia popular, y con el pool de profesionales especializadas en busca de
logros a nivel político, como las de las de su generación, guarda en mucho ese matiz del
setenta.
Se hace bien en hablar de movimiento feminista, este no se generó con un fin
político determinado, no había inscripción obligatoria ni compromisos antelados, fue una
participación, en un principio juvenil, en el que las participantes "simplemente" se reunían,
conversaban y decidían acciones que ponían en marcha de inmediato. Las marcaba aquel
idealismo del setenta muchas de ellas sin pertenecer a determinado grupo (de los muchos
que hay organizados cuya razón es más reconocida como ONG de promoción a la mujer) no
faltan a las reuniones que con ocasión de las celebraciones conmemorativas se encuentran y
forman parte de algún proyecto específico o cumplen con un cometido individual estas a su
vez son las que no han optado por el feminismo para hacer de su prédica una forma de
alcanzar beneficios personales acomodándose a las ONG o formándolas . 281

Así, el feminismo peruano que nace para hacer frente al patriarcado, que lucha
por los derechos de las mujeres sin discriminación alguna, con el fin de erradicar la
conciencia machista que esclaviza a las mujeres y reconociendo al interior de ellas a las más
golpeadas en todos los ámbitos, tas mujeres de las clases populares. No fueron pocos los
grupos que decidieron su trabajo directo con las nacientes organizaciones populares.
En los ochenta el movimiento feminista pudo poner a prueba toda su capacidad
organizativa, la llamada "Década perdida" (llamada así por la CEPAL a la década de 1980)
solo puso sobre el tapete que las políticas gubernamentales no podían solucionar
problemas de interés popular, por el contrario, sus decisiones fueron funestas para los años
consecutivos, las ONG, cuyo origen y existencia puede explicarse en la desconfianza que los

280 Vargas, 1983-1985-1989-1991.


m
Información brindada por la historiadora Beatriz Suarez, feminista activa; y además, primera reportera gráfica del
Perú.

262
países y organismos internacionales tenían por los gobiernos, eran asociaciones privadas
respaldadas por una seria calificación profesional (proyectos viables presentados por
personal con experiencia de gobierno, sobre todo en el gobierno de Velasco) canalizaron
los fondos necesarios para desarrollar programas sociales que en principio debía ser tarea
del Estado, también fueron instrumentos por los cuales las feministas hicieron labor
proselitista a través de los programas de asistencia, asesoramíento y capacitación en las
nacientes organizaciones femeninas, que en sus manos solo tenían el interés primario de
sobrevivir a la miseria.
No es fácil por este motivo dividir, feminismo, política y movimiento de mujeres
en el Perú. Estas tres variables se confunden en los ochenta, representantes de esta
interacción pudieron unir sus voces ante los gobiernos, ante los organismos
internacionales, fortaleciéndose unas a otras. Tenían ante si gobiernos derrotados
moralmente, políticamente agotados, débiles y temerosos, un miedo que trascendió a toda
la población a todos los hombres y mujeres por acción del narcotráfico y el terrorismo, las
mujeres atacadas por la pobreza hasta en el interior de sus hogares no tuvieron más que
salir de estas que "hacían agua".
Por un lado las mujeres feministas con una prédica ideológica y política,
convencidas de su accionar en el gobierno y en sectores populares, ven la oportunidad de
servirlas a través de que ellas más conocían la gestión de organizaciones y el conocimiento
del aparato burocrático; al frente, las nacientes organizaciones populares necesitaban del
concurso de las primeras. Las feministas ofrecían sus vínculos y asesoramíento, a cambio
de que estas también actúen (¿acuerdo implícito?) como la base de su capacidad
organizativa, así se prestigian y ganan no solo personalmente sino como grupos. Las
organizaciones populares ofrecen su componente numérico y la razón para gestionar un
proyecto, ganan compensaciones económicas (alimentos y trabajo) y una generación de
líderes femeninas instruidas y capacitadas para exigir y dialogar con los organismos
públicos. Promoción, desarrollo, participación son conceptos que caracterizan a esta etapa.
Sin embargo la multiplicación de las ONG que trabajan con las mujeres no
contaban con el número necesario de promotoras que en si poseyeron las bases mínimas
del pensamiento feminista, en tos ochenta bajo el tono peyorativo de los setenta, estas ya
dejaban muy claro cuáles eran sus objetivos, condicionar a la sociedad en todos los niveles
y espacios de acción. Se trataba de "vencer el miedo a la propia voluntad de vencer" el
miedo, en resumen, la inquietud de las feministas, identificadas en Sottosopra Verde de
enero de 1983, publicado por la revista Debate Feminista, setiembre 1990.
En los éxitos también se produjeron conflictos, estos generaron otra inquietud por
parte de las feministas con responsabilidad pública en los cargos altos que ocupaban en

263
sus respectivas ONG. La idea no era solamente solucionar problemas primarios de
asistencia a las mujeres afectadas por ta violencia en todas sus manifestaciones.
La concepción no debía olvidarse. Nace así la idea de formar un programa de
preparación ideológica en torno al Género en el plano de la acción social, que Ingrese a
todas las ramas de trabajo, lo que en el futuro desembocó en el Diploma de Estudios de
Género, un curso de post-grado que ofrece 282
La Pontificia Universidad Católica del Perú a
partir de 1991. Se logran así dos objetivos, capacitar a las profesionales bajo esta
perspectiva nueva ofrece una nueva forma de enfocar la realidad y, constituir una disciplina,
que naciendo en una universidad prestigiosa, se difunda en otras.
Las feministas no solo han recurrido a la teoría ni se han dedicado exclusivamente
al trabajo con mujeres populares en los ochenta. Otras también estudian la realidad de la
mujer peruana en el Perú. Entre ellas destacan; Violeta Sara-Lafosse, Jeanine Anderson
(EUA), Maruja Barrig, Cecilia Blondet y Ana María Yañez, por citar algunas, a riesgo de omitir
a otras no menos importantes. Estas investigadoras abordan temas como, el problema de
la mujer campesina y la familia en el caso de Sara-Lafosse; Amazonia, clase media,
identidad y mujeres de estratos urbanos pobres en los trabajos de Jeanine Anderson; la
mujer de la clase media y el acceso al campo laboral y la problemática que surge,
trabajados por las citadas Maruja Barrig; síntesis de la mujer peruana y organizaciones
populares por Cecilia Blondet y Ana María Yañez, etc.
Lecturas que hicieron tomar una opción diferente y responsable, frente a los
cuestionamíentos de su situación a nivel mundial 283
y otros artículos incluidos en un
volumen muy trascendente en la formación del concepto de género como "Antropología y
Feminismo" de Olivia Harris y Kate Young ; mucho se ha avanzado y hecho. Se ha abierto
284

una puerta en el campo de la política con una tónica propia , observada por sus 285

compañeras del orbe , los ochenta también fueron testigos de la formación de sus
286

primeras líderes y acciones . 287

Teóricamente re-estudian a los clásicos como Sigmund Freud y también a Jacques


Lacan en el campo del psicanátisis para explicar la razón de la subordinación femenina (falo
como símbolo de poder) y atacarla. A Margaret Mead en el campo antropológico, se
preocupa por la estructuración de la conducta sexual desde el punto de vista del
temperamento y descubre que estos temperamentos considerados innatos en un sexo
"podrían ser, en cambio, meras variaciones del temperamento humano, a las cuales pueden

2 8 2
Convertido desde hace dos años en una Maestría en la Facultad de Ciencias sociales
2 8 3
Bamberger, 1970.
Harris/Young, 1970.
as
* Francke, 1983; Henríquez, 1983 y; Galer y otros, 1984.
*« Burns, 1982.
w Francke, 1983; Henriquez, 1983 y, Galer y otros, 1984.

264
aproximarse por su educación... los miembros de uno de los dos sexos", en su libro "Sexo y
temperamento".
Las feministas también han incursionado en ei campo de la historia, y no solo en
asuntos que pueden llamarse femeninos (casas de recogimiento, institutos de la mujer,
maternidad, familia, sino también en el trabajo, un factor decisivo en la emancipación
sexual de las mujeres a pesar de que este tema se juzgue carente de fuentes para
mujeres .288
En el Perú Joan Scott ha influido en las historiadoras feministas en la
perspectiva de Género y en esta ruta está por ejemplo, María Emma Mannarelli, quien inició
los estudios de ilegitimidad en la colonia.
Describir la participación de las mujeres en la actividad pública sin recurrir a las
feministas equivaldría a no poder comprenderla como un proceso en gran parte encausado
por ellas. De la misma manera, comprender a las feministas prescindiendo de las teóricas
extranjeras es una sin razón, necesariamente su desarrollo teórico está muy ligado a la
producción que sus compañeras producen en ei mundo en boletines, artículos y
compilaciones 289
que aportan sobre todo con un contenido con perspectiva política.
Existen centros de difusión de esta literatura, ONG con bibliotecas
impiementadas. Por ejemplo la de la Casa de la Mujer "Flora Tristán", del Movimiento
Feminista Manuela Ramos y el Centro de Documentación de la Mujer (CENDOC-MUJER),
que forman parte de más de ocho redes que sobre las mujeres existen en el Perú y que con
el paso de los años han fortalecido el avance de las mujeres en la conquista de derechos,
espacios, reconocimientos sin detrimento de su condición femenina. Entre 1968 y 1995 se
puede identificar el segmento histórico pionero de la Incursión de las mujeres en todos Los
ámbitos públicos, a partir de entonces se han dado avances y retrocesos, propios de una
época turbulenta, a puertas del siglo XXI, se abre otra etapa, que se inicia con los
resultados consecuencias de una política económica liberal que mantiene y refuerza,
mentalidades que habían sido raspadas en la década de los ochenta, las feministas tienen
mucho por hacer, en principio no amainar.

288 Davin, 1984.


2 6 9
Alexander/Taylor, 1984; Bourque, 1985); Henríquez, 1987); Barret, i 987; Kirkwood, 1988; Bourque, 1979;
Piccini, !990;yStolcke, 1922.

265
14. A MANERA DE CONCLUSIÓN

No cabe duda de que las mujeres en el Perú han sacado al Perú adelante en compañía de
los hombres, es difícil establecer cuando ocuparon un lugar subalterno. En el período
trabajado, se ha podido observar como la población ha pretendido ser modificada
interviniendo el cuerpo de la mujer y se ha puesto la voz en alto para su corrección,
también como la educación la ha sacado de los hogares, del mundo privado con éxito,
por lo que es urgente su instrucción por cuanto de ellas depende la formación de las
nuevas generaciones y la decidida lucha por que el salario equivalga a su desempeño en
el ámbito privado. Mujeres campesinas y llamadas indígenas, que en buena cuenta son
las residentes rurales que participan de una cultura andina y un conglomerado de
culturas en la Amazonia, merecen una mejor atención de todos. Las mujeres de las
ciudades, que tienen las ventajas de la vida cosmopolita, las de las llamadas clases
medias (que va teniendo ya otra definición a partir de las década 1990) deben estar
convencidas de que las mujeres peruanas no son sólo ella, también lo son aquellas que
preparan el vaso de leche, las reúnen en los comedores populares y dan sentido a las
ONG. El poder en avance a través de las nuevas normas favorables a la mujer va unido a
su participación política desde todos los frentes, tal vez, el más heroico, el que proviene
de los centros poblados que menos recursos económicos poseen, que, al filo del abismo
tratan de encontrar justicia social desde fuera; así cabe y tiene vigencia la labor de las
pioneras, que mirando el mundo se convierten en sus asesoras y cobran un
reconocimiento inigualable, nuevas redes, nuevas verdaderas amigas y amigos, también
nuevos frentes.

Para la realización del presente ensayo se contó y valoró sobre todo los cuadros
(información objetiva) hallados y elaborados por diferentes estudiosas (os) que presentan
muy bien intencionadas recomendaciones, pero, hay un gran tema que aún permanece
oscuro, los sentimientos, las relaciones humanas, los gestos, el tono de la voz, el trato
diferenciado entre las personas, los piropos, los insultos, las miradas, las bromas de doble
sentido. Temas que no sólo deben estar en manos de psicólogos y psicoanalistas, sino en
las políticas de Estado, desde las formalidades, aparentemente inocuas. La discriminación
de todo tipo se ejerce desde ese plano, el nuevo tramo a trabajar.

266
15. SOBRE LAS MUJERES Y LA INFORMACIÓN
BIBLIOGRÁFICA

A ta caza de información sobre las mujeres en los últimos años del siglo XX encontramos que
esta era vasta; y no se podía establecer solo una revisión de títulos académicos sobre: "Las
mujeres y..." o, "Las mujeres...". Se debían considerar además ¿qué leen las mujeres? y cómo
estas lecturas influyeron en ellas.
Al margen de las noticias, los periódicos y las revistas que proponen secciones
referidas a "la mujer" que explayan su condición doméstica, constituirla por una mujer bella y
experta en hacer del hogar un lugar agradable para el resto de La familia. Siguiendo los
cánones de la cultura europea. Esta suerte es muy clara en ios periódicos del sesenta, la
ciencia y los adelantos técnicos, son de interés de la mujer en tanto les ayude a mejorar la
alimentación familiar, su aspecto físico o, facilitarle las labores hogareñas, así como también,
proporcionarle conocimientos "graciosos" lo suficientemente interesantes para entablar una
conversación con el género opuesto, cuyo fin será demostrar la capacidad de tolerancia y
habilidad necesaria para que el futuro esposo se sienta feliz; luego, esa será la felicidad de "la
mujer".
En materia bibliográfica no podemos empezar por otro aspecto que ta fuente
producida desde tos sectores medios. Las mismas mujeres que, cuyo modelo, en cascada,
debía caer al interior de los demás hogares de las demás estratos socioeconómicos.
At repasar el fichero de más de cientos de trabajos se observa que más del 85% de
ellas está escrita por mujeres, y por los años de publicación, entre la década del setenta y el
ochenta, sugieren, que fueron mujeres formadas en hogares donde estos patrones de
conducta forman de los sectores medios altos. Por lo que es pertinente referirnos de manera,
aunque sea ligera a las revistas femeninas más conocidas del medio en Los años sesenta y
setenta: Buenhogar, Vanidades y, posteriormente Cosmopolitan. La primera dedicada sobre
todo a la mujer ama de casa de la clase media con la sección belleza corporal, cocina,
repostería, decoración y moda para cada estación. En cuanto a información adicional esta
constaba de noticias de salud femenina, secretos y trucos para ocultar cualquier tipo de
imperfecciones, ta actualidad estaba representada por ta actividad social de los políticos de
tos artistas de cine y televisión (imagen), y además notas de arte (pintura), ta literatura estaba
en manos de la pluma de autoras rosa, lo interesante de esta revista radica en su sección:
"Ellas en primer plano" en la que se emitía información de las actividades de mujeres en la

267
arena pública, las feministas y sus actividades, destacando precisamente a aquellas que
tenían éxito en el plano laboral profesional, un ejemplo de ello es el Libro Reportaje a la
Historia de Oriana Fallad, una periodista joven que era casi una heroína de su generación, al
lograr estar ahí, en el entorno más alto de la "toma de decisiones" donde describió a sus
entrevistados (líderes mundiales) desde un punto de vista más personal (más femenino) en
contraste con la dimensión de sus responsabilidades . 290

En cuanto a Vanidades si podemos decir que estaba dedicada a las solteras, sin
excluir a las casadas, el contenido iba con título de la revista, Vanidades, se encargaba de
destacar la belleza de la mujer sobre todo, era revolucionaria en cuanto a las más radicales
formas de embellecer, marcaba a esta revista lo moderno y se prodigaba en dar cuenta de la
gente del Jet-set En este caso la vida personal de las artistas que se veían exitosos, amables,
con sex-apple, y que en común tenían el ser poco conservadores, tanto en su tipo de vida
como las formas para acceder a nuevos contratos, y/o matrimonios; en otras palabras,
presentaba estereotipos bastante liberales. El aspecto moral estaba poco cuidado, quedaba
este tema a las novelas de Corín Tellado. La moda en Vanidades era juvenil y los anuncios
comerciales también. La esfera de mujeres "públicas" cambió de manera drástica la actitud
de las mujeres de la clase media (aparecen las divorciadas, que no se mostraban como un
fracaso ante la sociedad, ta actitud positiva con que se presentaban podía incluso decir que
tales conductas parecían modelos a seguir. Desde sus directas lectoras hasta las mujeres de
los sectores populares urbanos que accedían tardíamente a esta revista.

La revista Cosmopolitan que ingresa después al mercado femenino, en los años


setenta, es más snob, se caracteriza por tener sus modelos muy modernas ("la Chica Cosmo")
desinhibidas para la década y dispuestas a lograr el éxito, poniendo de relieve sobre todo la
apariencia personal, lo que empezaría por parecerse a ellas, altas, esbeltas, a la moda y con
una agenda cargada de invitaciones, muy solicitadas por los hombres, a los que ellas podían
conducir a hacer Lo que ellas quisieran. Esta revista en nuestro medio parece ser la pionera
en el culto a la belleza que haya llegado al Perú. La sencillez en el traje descubre más. Con el
paso de los años la revista fue más audaz, el contenido de sus artículos se hizo más infidente,
en este caso animaba a que tas mujeres divorciadas o separadas no estén sotas, pues a sus
heroínas nunca les faltaba un pretendiente que la invitara a pasear o a pasar momentos
gratos en el plano íntimo.
Éstas revistas no faltaban en las peluquerías, lugares obligados de las mujeres de la
clase media en las ciudades sobre todo en Lima. Así estas revistas llegaban a las reinas y
princesas del hogar.

2 9 0
Tuve en mis manos aquel último número con aquella noticia, a pesar de leerla periódicamente, ese número me
impresionó, sobre todo por las cartas que llegaban a la revista, en la que otras lectoras también manifestaban su
conformidad o entusiasmo por que una mujer haya podido producir un texto sobre aquellos temas.

268
En los años últimos de los setenta y la década del ochenta se desencadenó la crisis
económica, una crisis que no dejó lugar a pérdida de tiempo alguno, que no sea el acudir al
objetivo ya. Aparecen los "polos" (pieza T) prácticos de hacer, usar y lavar, la diferencia se
daría en la calidad y los pequeños accesorios (marcas) y firmas de diseñadores que se
apoderaron de las modelos. Pobreza de por medio, el aspecto seductor de las piezas de
vestido se hallaban en los trajes de noche. Riqueza de por medio, la playa pone de
manifiesto el acceso a la para entonces frase: "salud es belleza". Una dieta diferente, que
reflejaba con crueldad, otra forma de discriminación. La mala alimentación. Pues la
imposición de la nueva moda encabezada por la minifalda, obligaba a seguir el canon de la
modelo más popular de Estados Unidos de América, Twigi, muy delgada de rostro angelical,
con cabello corto y lacio.
La década de 1970 marcaba la reflexión femenina sobre su condición de mujer y
ciudadana en el mundo político, y estaba dedicada a conocer más sobre su rol en este
sentido, aquella época se caracterizó por estar el mundo ante dos vertientes políticas, el
liberalismo y el marxismo, ambas influyeron de manera sistemática en el desarrollo de su
prédica feminista y los deseos de cambiar el mundo.
Revistas cubanas, y de otros países del Este (eje socialista), ofrecían imágenes de
mujeres en el plano laboral: en actividades de la construcción civil (albañiles), en reuniones
políticas, en la carrera militar, etc. Una manera de lograr autonomía, un lugar de afirmación
para aquellas que no se situaban en la carrera tradicional del ama de casa. Hablamos de las
universitarias y las pequeñas empresarias.
Las mujeres de clase media que optaron por el trabajo; directo es decir, tas
empresarias contribuyeron primero con sus actos, más tarde con publicaciones, se referían
explícitamente al ejercicio de sus carreras y sobre todo compitiendo y adoptando caracteres
masculinos, los necesarios para abrir trocha en el mercado laboral, después vendría su
contribución en cuanto a género, lo que se hace más palpable en los años ochenta y noventa.
Las mujeres de los sectores medios que pasaron por los centros universitarios cuyas
carreras tenían relación con los temas sociales, fueron las que se encomendaron a conciencia
de mejorar la situación de mujeres, inmediata reacción luego de descubrir mediante propias
experiencias, la necesidad de corregir, y/o revolucionar la sociedad. Entonces las feministas,
en los setenta, observaron que el machismo aún se manifiesta al interior de las
organizaciones de izquierda, aún no eran consideradas fiables, no era extraño que primero
que las acuse de lesbianas, revoltosas, poco serlas y hasta tratadas con una ternura que
envolvía cierto velo de inferioridad. Sentimientos y actitudes que no solo provenían de los
hombres sino que en ello participaban mujeres.

269
Mientras que este grupo de mujeres se preparaba para tareas profesionales y tenían
el interés de prepararse para ellas y sus congéneres un ambiente mejor, en la cual ellas
también se preparen para poder enfrentarlo a pesar de que serían discriminadas, otro gran
grupo laboral que emergía del ejército de mujeres tradicionales hacían lo propio, pero con
métodos empíricos. La crisis económica hizo de este divorcio entre mujeres en los setenta en
el campo laboral, converjan paulatinamente a la necesaria unión de esfuerzos.
Sobre las causas por las cuales las mujeres ingresan al trabajo hay vasta bibliografía.
Desde la necesidad de resolver los problemas económicos , la situación de la mujer que
291

trabaja , organización , los cambios sucedidos , oportunidades , políticas de empleo ,


292 293 294 295 296

la crisis 297
y hasta seminarios que sobre las mujeres trabajadoras se han realizado con el fin
de mejorar su situación Cuadernos Laborales. También han sido efectuados los estudios que
tienen que ver con cada tipo de trabajo, es decir; obreras , ambulantes , amas de casa ,
298 299 300

profesionales , trabajadoras urbanas , trabajadoras andinas , etc.


301 302 303

También, aunque escasa, hay material sobre su participación sindical , y otras 304

consecuencias directas de esta participación en el mercado laboral remunerado, de tipo


psico-socioíógico el que consiste en la participación de las mujeres en (as discusiones de
carácter social que se pueden evaluar, en los progresos que se ven en la conformación de
organizaciones, donde ellas deben manifestar su opinión. Sobre todo el ser dueña de su
destino, es al parecer la meta de género y es el trabajo y el manejo de los conceptos
adecuados, respaldados por una serie de medidas legales que reconozcan el trabajo
sempiterno de la mujer, es decir las labores domésticas y que estas sean remuneradas con
justicia.
No se puede hablar de las feministas de los treinta años como las portadoras de un
pensamiento homogéneo, amén de las diferentes formas de concebir el feminismo, también
los caminos son diferentes y los conceptos vanaron de acuerdo a la situación de cada grupo
de mujeres. Al Igual que en el extranjero, las tendencias ideológicas (derecha e izquierda), las
situaciones geográfica y cultural han generado en esta diversidad tan solo un punto común,
la corrección de la legislación en cuanto a los derechos de las mujeres para que desenvuelva

2
" Perú-Ministerio d e Trabajo. 1976.
2
« Elías/Garavito, 1994.
2 9 3
Giguere, 1986.
2 " G u z m á n , 1987.
2 9 i
Mendoza, s/a.
2
« Ó r é , 1993.
2
" Paredes, 1987.
2««Barrlg, 1986.
« ' M e r c a d o , 1978.
3
°° OIT, 1986.
3 0 1
Fernández Baca, 1982.
3 2
° Felices, 1994.
3 0 3
Asociación-Perú mujer, 1983.
3« Carlessi, 1983.
270
en igualdad de posibilidades. Por otro lado cada una de las mujeres contributa con el sólo
hecho de participar en el plano laboral, mantenerse y lograr mejores niveles.
En síntesis, son este tipo de mujeres las primeras que se tomaron el trabajo de
escribir sobre los temas sociales femeninos, sobre todo en la década de 1970. La forma de
ingreso en casi todos los casos fue a través de la familia y la infancia, tema que desembocaba
en los problemas económicos, enseguida, la salida de las mujeres en masa al mercado
laboral. El proceso más importante. El detonante de esta década estriba en la falta de
protección a la niñez, las mujeres en las estadísticas se presentaban como la mitad
discriminada cuya falta de preparación cundiría en la debacle económica y posterior crisis
familiar, una reacción en cadena.
Los ochenta nos muestran otro tipo de inquietud, se editan libros cuyas
características son las estadísticas comentadas sobre mujeres y estudios que ofrecen una
vista panorámica de ellas en el plano laboral. En este sentido tenemos libros que procuran
una síntesis de la proyección de las mujeres al plano laboral y económico, (os problemas que
se le presenta y las condiciones que cada tipo de mujeres presenta, es el caso de las mujeres
campesinas. Las que no tienen una voz directa, sino que están tamizadas por la voz de las
investigadoras, poco después a mitad de la década es que las ONG emprenden una labor
más orgánica con ellas y deciden desarrollar programas que la coloquen en un nivel
promedio de mayor comunicación, se trataba de que emitan su voz y que mejoren los niveles
de vida, sobre todo batallar con el analfabetismo.
La producción bibliográfica se va desarrollando no soto por sectores interesados,
sino que cada sector se va ocupando tangencia Límente al menos, de las mujeres; los
ministerios deben dar cuenta de estos hechos con información analizada. Ellas ya están en
todas partes. Se debía primero hacer estudios de comprensión, de diagnóstico (los que
abundaron) y enseguida la relación de casos, procesos, y las famosas "experiencias de vida"
(consistía en las entrevistas que se les hacía a las protagonistas, pobladores de los sectores
populares urbanos y afines). Ya a finales de los ochenta con este material, se empezaron a
diseñar proyectos con la perspectiva de género, se trataba de conducir el movimiento
generado por el grupo de mujeres en su conjunto pero dándole una coordinación que
permita la dirección del proceso hacia objetivos pensadas desde arriba en favor de las de
abajo.
A diferencia de las ONG de los setenta y los comienzos del ochenta a fines del
ochenta, estas se fueron multiplicándose y con ello el componente de mujeres que
participaba en ellas se fue masificando, lo que se manifestó con la incursión de otros sectores
sociales en la dirección. La combinación de un feminismo popular y las necesidades
prácticas. Las publicaciones emitidas tienen para entonces una característica muy interesante,

271
cual es la integración de (conejillos de indias Vs. investigadoras) 305
las partes involucradas en
el proceso. Se puede apreciar el factor "íntimo personal", los escritos parecen estar
elaborados por psicólogas. Este tipo de conocimientos que las mujeres han tenido de ellas
mismas dieron como fruto la creación de redes interinstitucionales de información. Es así
como van ingresando en la política y a formar parte de las discusiones, proponiendo
proyectos de ley, asesoramiento en diversos proyectos de tipo productivo, y, sin dejar de lado
este lazo, un ancla en el congreso de la República.
En los noventa la situación se muestra más estable, la denuncia no tiene los ribetes
de las décadas anteriores, a nadie le parece extraño que las feministas trabajan por los
mismos ideales que la inducen a abrir el camino, gozan de la tolerancia cuando no de los
recursos al interior del país. Por otro lado, el concepto de género ya es conocido por todos
los medios intelectuales, en casi todas las áreas de investigación y demás disciplinas (trabajo,
literatura, marketing, comercio, salud, periodismo, medicina, historia, y antropología, etc.)
más cuando se reconoce en cada una de ellas un componente de conocimientos clarificador
que a la postre se traducirá en beneficio de todos quienes lo tomen en consideración.
Las investigaciones a La fecha conocidas se caracterizan por poseer vasta
información acerca de Los sectores populares, zonas rurales, y las vías de trabajo, con especial
interés en la generación de pequeñas empresas, esto que sí se justifica por la trascendencia
de las mujeres en la organización y los retos frente a la crisis se carece del estudio de las
mujeres de la otra orilla, de los márgenes (representadas por las trabajadoras de los sectores
populares intelectualizados medios) y las están en los sectores medios (las profesionales
emergidas de las clases medias consignadas a un salario por el trabajo profesional), más al
extremo podemos ver a las de la clase alta las que deberían ser estudiadas según los mismos
métodos a fin de obtener una idea menos difusa de su rol en el marco de la sociedad
peruana, más adelante se podrá a partir de estos estudios, sugerir vías de desarrollo que
logre en el Perú una comprensión más amplia entre los polos sociales que aún perviven.
En los treinta años el rostro del poder en el Perú ha variado un poco (no debemos
entusiasmarnos tanto por ver apellidos autóctonos en empresas en vías de estabilidad o por
dueños de transportes interprovinciales que en muchos casos carecen de una red más amplia
de decisión política, o individuales producto del narcotráfico), el proceso de la destrucción de
nuestra clase media y la pérdida con ella de ciertos valores estabilizadores, tan solo se ha
logrado, en materia de clase, raza, abordarla e imponer una clase socioeconómica que ha
impuesto nuevos valores y mecanismos de supervivencia que en nada favorecen al tipo de
sociedad de los sesenta. Sin embargo decimos un poco, en tanto la conquista de espacios no
tuvo visos de cambio inmediato en el siglo XX. Lo interesante es que se debe hurgar en ei

Punto de vista que puede parecer injusto, y lo es en algunos casos.

272
comportamiento de esta legión de mujeres que ha trasladado su ubicación socioeconómica y
con ella su posición ante el roí que le toca desempeñar en la maraña social, dejando un poco
de realizar estudios tan estáticos (fotografías) que ofrecen un panorama de las mujeres como
constante tipo social sin percatarse del cambio que su existencia les demanda (campesinas
con hijos profesionales) fenómeno de quince años de duración, participantes del comedor
popular con dos "combis", últimas que intentan reproducir los códigos de la cíase media a la
que desean pertenecer, primero "mejorando la raza" y después mediante las conductas y
modales que afirmen esta posición.
Sobre este punto el cuadro elaborado por el antropólogo Carlos Delgado sobre la
sociedad peruana en los sesenta resulta muy interesante, preparado para la Primera
Conferencia sobre familia e infancia y juventud, bajo el título "sobre el marco social para el
estudio de la familia, la infancia y la juventud en el desarrollo Nacional" (Mayo 14-20-1967),
el autor nos presenta una síntesis de nuestra sociedad de manera global y que tiene (a
diferencia de otros) en cuenta la movilidad social, el aspecto racial y la ocupación de cada
sector. Un modelo que permite vislumbrar a pesar de todas las Injusticias de carácter social
que es un país dinámico (saludable). ¿Que dónde están las mujeres?, la respuesta es obvia,
forman parte de la familia de los grupos descritos en el esquema.
Pero ¿qué tanto ha cambiado esta situación? la respuesta es la misma, poco. Aún
este modelo puede representar a la actualidad, a pesar del cataclismo del período de Velazco
Alvarado, la capacidad de "resanamiento de la sociedad peruana" nos remite a una
inteligencia social en cuanto a las fuerzas sociales, donde los cuatro sectores (mundo social
extra, sector dominado, intermedio y dominante) actúan como vectores directrices, mientras
que las manifestaciones culturales-étnicas, incluidas los tipos productivos actúan como
variables. Las mujeres en este sentido han logrado ser también protagonistas, el género,
como lo conocemos ahora, se suma como una variable más, tomada en cuenta en las
encuestas, como agente de cambio que a la vez pugnaba por mostrarse con etiqueta propia
en las esferas de la clase dominante, al margen de su composición étnica, laboral, o clase de
procedencia.

El único grupo que le faltó ubicar en el cuadro a Delgado es el compuesto por la


representación religiosa en los diferentes niveles mencionados, entonces poco perceptibles
dada La alienación intelectual de entonces.
Trabajos profundos que analicen a las investigadoras y su clase son necesarios,
con cifras, tendencias, para conocernos mejor, conociéndolas a ellas se tendría una imagen
más completa y fiel de, a (o que apunta una nación (incluyendo a los hombres que son de
todas maneras fruto de las aspiraciones y formas de fracaso que ellas les han impuesto, por

273
lo menos hasta los siete años, los suficientes para culminar la imposición de valores), y por
qué no, de plasmar sobre esta base nuevas políticas económicas.

PERÚ:1967
ESQUEMA GENERAL DE COMPOSICIÓN DE LA SOCIEDAD PERUANA ( s e g u n d a v e r s i ó n )

I.
MUNDO SOCIAL Tribus Selvícolas y Sedentarias Aisladas
EXTRA-"SISTEMA"
Núcieos rurales sometidos a Régimen de trabajo sin salario en Latifundios
o Serranos

1o
Trabajadores Rurales Serranos y Selváticos no Sindicalizados
Dr Plena
Domina

H T I
Trabajadores Mineros no Sindicalizados en Áreas Rurales Aisladas de la Sierra
Trabajadores Rurales Costeños no Sindicalizados
Trabajadores Urbanos no Sindicalizados de Sierra y Selva
Trabajadores Urbanos no Sindicalizados de Costa
11.
o Trabajadores Rurales Serranos y Selváticos Sindicalizados
SECTORES DOMINADOS cti
Trabajadores Mineros Sindicalizados en Áreas Rurales de la Sierra
MUNDO SOCIAL S o
ciali

Núcleos Campesinos Serranos Organizados en Comunidades


PREDOMINANTEMENTE
RURAL E INDIO « 51
o- Trabajadores Rurales Costeños Sindicalizados
D
2 Trabajadores Urbanos Sindicalizados de Sierra y Selva
ou Trabajadores Urbanos Sindicalizados de Costa
Empleados Rurales de Bajos Ingresos
•a S
:pen dier

Pequeños Agricultores
Sec tor
•adic

Pequeños Comerciantes y Artesanos Rurales


E- O Artesanos Urbanos y Obreros Calificados
•S .2 Personal Subalterno de las Fuerzas Armadas

-1
Pequeños Propietarios Urbanos
o "p .2a
<«z> te
x «o Empleados Urbanos de Bajos Ingresos en ía Empresa Privada
P.S e Empleados Urbanos de Bajos Ingresos en la Administración Pública
Agricultores Intermedios
•§ sí Pequeños Comerciantes Urbanos
i- « s Oficiales de Baja Graduación de las Fuerzas Armadas
III. o s u Profesionales de Bajos Ingresos
Ü •2? w U
Pequeños Industriales y Empresarios
SECTORES INTERMEDIOS
a Empleados Urbanos de Ingresos Medios en la Empresa Privada
MUNDO SOCIAL
|6 1'5
PREDOMINANTEMENTE Funcionarios de Nivel Intermedio en la Administración Pública
URBANO Y MESTIZO Profesionales de Ingresos Medios
IX
Sector!
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Oficiales de Grado Intermedio de las Fuerzas Armadas
Industriales, Empresarios, Comerciantes, Agricultores y Propietarios Urbanos
o Empleados Particulares de Altos Ingresos
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Profesionales de Altos Ingresos
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Sectoi•Dinárr

Funcionarios Públicos de Alto Nivel


Oficíales Superiores de las Fuerzas Armadas
Industriales, Empresarios, Comerciantes, Agricultores y Propietarios Urbanos de
Altos Ingresos
UH
Grandes Comerciantes
IV. o
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O
Altos Jefes de las Fuerzas Armadas
CLASE DOMINANTE OH
Altos Dirigentes de ios Grandes Partidos Políticos
MUNDO SOCIAL •8
'-j
PREDOMINANTEMENTE o Grandes Industriales
METROPOLITANO Y S- Grandes Propietarios Mineros, Rurales y Urbanos
BLANCO Banqueros y Financistas

Fuente: Carlos Delgado Olivera.


Primera Conferencia sobre La familia, La infancia y La juventud en el desarrollo nacional. Mayo, 14-20, 1967.

274
Esta fase que se propone debería incluso realizarse ya, cuando es más amplia la
cobertura que están dando los gobiernos a los trabajos con mujeres. Más hoy que se tiene
un Ministerio de la mujer, que parece ser el ministerio de los "no plenos", en vías de
"desarrollo humano".
Los noventa carecen de ese idealismo de los setenta, su contraparte el
pragmatismo es la escarapela del éxito de nuestros días, han tenido mucho que ver con el
desinterés colectivo que se tiene por los acontecimientos sociales organizados, se carece
de una primaria solidaridad. No es extraño que se invierta más en empresas pequeñas,
préstamos personales, todos fenómenos que individualizan cualquier fuerza de resistencia.
Este comentarlo sale a propósito de las conclusiones que en general ofrecen los libros
utilizados en el presente trabajo. Todos guardan (salvo excepciones), síntesis solidarias,
una especie de cierta admiración-solidaridad con las que fueron su objeto de estudio (un
manchón de Juanas, Marías, Rosendas, etc.) que responderían más bien a las necesidades
informativas apropiadas para gobiernos clasistas obrero-campesinos, pero que no sirven
para aquellos que, como el nuestro, no responde a este tipo de demandas.
Sin embargo podemos afirmar que cada trabajo guarda un valor unos a veces
redundantes pero siempre útiles, lo interesante es la variedad de los temas, desde Las
empleadas domésticas hasta las exitosas empresarias. Desde las de clase medía alta a las
más desvalidas.
Pero que sucedió con las lecturas de Las mujeres, si bien antes leían Las
mencionadas Buenhogar, Vanidades, etc., a fines de los setenta empezaron a ingresar a los
mercados revistas más baratas de corte popular que se especializaron en omitir noticias de
"sus artistas favoritos", predominando los de habla hispana, "Teleguía" sería la pionera en
este sentido, redujo la información compacta necesaria para atraer a la juventud femenina
sobre todo para a través de ellos hacer dinero, lo que no supieron, es que por este tipo de
publicaciones, las modas últimas no pasaban por las damas de las clases medias, sino por
los artistas directamente a los sectores populares. Ésta en su momento venía a ser la forma
"pirata" de las caras revistas latinoamericanas de moda y cine. Con la moda, también la
conducta de "sus artistas favoritos", un nuevo estilo sería el resultado de este Impacto
Ideológico. Al margen de la escuadra feminista, la infantería femenina se nutriría de este
tipo de información de entretenimiento, Las letras de las canciones se van haciendo menos
sugerentes y más directas. Luego, la naciente juventud opta por este tipo de
comunicación, poco a poco ven que con La crisis económica no hay empate entre sus
sueños y la realidad y optan por la realidad, de las baladas (de Miguel Bose, José Luis
Rodríguez, etc.) y la cumbia se da paso a la música llamada, chicha, que es la combinación
de las raíces musicales andinas con la tecnología y gustos modernos (el sonido sobre todo),

275
otro sector, las de las universidades nacionales, se obligan a sí mismas al gusto por lo
autóctono acorde con La izquierda en los ochenta, las mujeres participan de este modo de
manera muy tangencial, intérpretes poco sobresalientes respecto a los hombres, a su
manera pertenecen a la llamada "nueva canción". Las peluquerías están llenas de
informalidad, revistas baratas que masifican el mercado con pura información superficial
(nada de recetas, decoración, cuidado del hogar, etc.). En la crisis de los ochenta, adquirir
buenos periódicos {El Comercio, La República), o buena revista de actualidad para los
sectores populares, les era oneroso. Si acaso le interesarían.
En los ochenta, los periódicos populares están más dedicados a los hombres,
empiezan a ser las fotografías de las vedettes, las estrellas de las carátulas, las mujeres de
estos hombres y sus hijas tendrían que leerlas, luego por el efecto que estas lecturas (cada
vez más explícitas) hizo que la conducta andina en la ciudad se vea desprovista de cierto
tabú y respeto que existían para con los miembros de la familia. Más sensualidad a menos
costo, más sexo por menos cariño sincero; también, esta vez las mujeres pasan por tener
que ser más directas, más achoradas, más valentonas. Pocas son las oportunidades de
ingresar a Las lecturas seleccionadas. "Selecciones" y otras obras tipo Best sellers estarán
fuera de su alcance, no solo por su precio, sino por falta de estímulo y tiempo (dedicado a
trabajar); la otra vía es la de recurrir a números que ya pasaron (de más de un año).
En los noventa aparecen las lecturas femeninas con un filón de más práctico
acorde con la crisis y se destacan dos temas la cocina económica y la salud naturista. En las
tiendas Wong se expenden revistas cuya presentación en buen papel y contenido está
asignada a la clase media, se ofrece comida internacional o criolla con los secretos de la
buena mesa (con ingredientes de primera calidad, es decir caros) y la salud, se presenta con
información científica última y con suplementos vitamínicos de marca, todo natural por
cierto. En la otra versión tenemos los periódicos de medio sol especializados en salud
popular mediante el cual se da información de todo tipo de propiedades que las plantas
tienen para "curar" casi todas las enfermedades, la cocina sin embargo no goza de la
misma atención. Así se aprecia la salud.
Habría que saber el porcentaje de mujeres de los sectores urbanos que leen los
periódicos populares (Aja, Popular, El Chino, Chuchi) y cómo influyen en las lectoras.
Actualmente los ministerios (de salud sobre todo) vienen publicando folletos que están
dirigidos a las mujeres de los sectores populares urbanos y también rurales, pero
lamentablemente no tienen el efecto deseado sino viene con una pequeña promoción
adecuada.
Pensar en el material de lectura de las mujeres es hablar de lo que los jefes del
hogar llevan a casa, de cualquier medio literario que en esencia esté dirigido a los hombres

276
y si es para la esposa, informarla de los favores de las plantas medicinales y el
conocimiento del sexo y demás "secretos" para mejorar la relación Sexual, para este efecto,
el hombre ya no solo contará con su esposa, si es que esta no se pone "en onda", este tipo
de conducta "inmoral" (inadecuada) tiene en los mismos medios la base tolerante para sus
lectores, basta pasar una vista en las "cartas del corazón" (sección infattable en los
periódicos populares) en cuyas líneas podemos encontrar párrafos de menos de tres
minutos, situaciones amorosas "extraídas" de cualquier mujer promedio, que si bien no
fomentan desórdenes familiares, les asegura la tolerancia social. En síntesis, se fomenta la
sinvergüencería y el cinismo. Esta tolerancia que se refleja en las noticias cuando vemos a
mujeres que se resisten a una norma "X" aduciendo que son madres solteras con dos, tres,
o cuatro hijos. La contraparte de este carnaval y una vía de salvación se da con la salmuera
vía religiosa, en este caso la Iglesia Pentecostal, donde todos afirman haber sido antes
pecadores hasta que conocieron a Jesús.
Así el material de lectura femenino puede reducirse a dos polos de información,
uno muy pequeño y otro muy grande y vasto. Entonces, cuando se habla de literatura ¿a
qué nos referimos? ¿a cuántas? a muy pocas personas. Novelas, poemas y obras de teatro
pertenecen a un reducido grupo y tan solo tienen un valor referencial para las mujeres de
los sectores populares urbanos. Esta literatura se convierte así en la ventana (con una
distorsión espacial y temporal de más de veinte años o más al interior de la nación) para
conocer a los otros, no solo en términos sociales, sino a los otros que al interior de la
misma clase popular, piensa. Así la literatura viene a ser sobre todo a largo plazo (y
muchas veces esa es la intención) una entrega testimonial del pensamiento de la época en
que fue escrita, antes que un placer y una fuente de conocimiento para las mujeres de los
sectores populares. Poco a poco las mujeres van incursionando en este arte y es notable
como en la medida en que se interesen por los "grandes problemas nacionales" es que
también forman parte de grupos y talleres con contenido social.

Cada vez que nos referimos a la bibliografía sobre mujeres debemos ubicarnos,
en el caso de los temas sociales, según referenciales que mantengan un vínculo con el
movimiento mundial de las mujeres, pues si algo las caracteriza es la coordinación que el
movimiento femenino y las demás mujeres organizadas tienen con la situación interna. Por
ejemplo, si revisamos el período (1968-1995), es evidente que el golpe militar como hecho
y como consecuencia significó a la nación un quiebre de las estructuras sociales que ha
repercutido hasta nuestros días (Reforma Agraria, el Comité de Revalorización de la Mujer
1972 y la declaración de 1975 como el Año de la Mujer Peruana).
En 1975 se realiza en México la Conferencia Internacional de tas Naciones Unidas
sobre la Mujer, año que también es el Internacional de la Mujer y que trajo como correlato

277
designar en adelante el Decenio de la Mujer (1975-1985). En el Perú además las mujeres
ganaron más participación en la escena pública con el voto universal para mayores de 18
años en la que participarían los analfabetos (cuyo número mayor se encuentra en nuestra
población femenina). Como una sombra, la crisis económica empieza a agudizarse. En
1980, se realiza en Copenhague una Conferencia en la ONU con el propósito de evaluar los
logros adquiridos en el primer lustro del decenio, luego se realizó otra del cierre del
decenio femenino en Nairobi en 1985, en la que se evaluó el avance y se dieron las
estrategias a seguir en los próximos años, fijaron una reunión similar para 1995, la IV
Conferencia Mundial sobre la mujer. Este tipo de reuniones, coincidentes con los progresos
llevados a cabo en el Perú y la participación económica de organismos internacionales,
confirma esta afirmación inicial de la organización femenina. Otro factor que marca a las
mujeres en eí Perú es ta "democracia" (entiéndase, ta antípoda de la dictadura o régimen
militar) y la libertad de expresión, a la vez que su sombra subversiva, en el segundo período
de Belaúnde, el partido comunista del Perú, Sendero Luminoso. Socíalmente estos
acontecimientos que luego fueron una constante han sido los que signan la participación
femenina en la vida pública. Los aspectos privados se exteriorizan y pasan a formar parte
de problemática nacional que debe ser resuelta por el gobierno. Ingresan aquí los temas
de violencia doméstica y violencia sexual, el que da como resultado la primera Comisaría
de Mujeres en 1988 en Lima. Años de mayor concentración de fuerzas femeninas. En 1990
se crea en la Red Nacional de Promoción de la Mujer y el segundo semestre de 1991 se da
inicio al Diploma de Estudios de Género en la Pontificia Universidad Católica del Perú con
duración de un año.

En general, cuando uno revisa cualquier texto sobre mujeres se puede verificar
como todo está íntimamente ligado al plano económico y emocional de las mujeres sea
cuates fuere su situación socioeconómica. El primer paso es de diagnóstico lo que se refleja
en los setenta, acto seguido es la etapa del conocimiento asombro-valoración y estudio
profundo de casos, que se da en los ochenta y la propuesta de cambios, proyectos y otras
alternativas, manteniendo las referencias de diagnóstico al día. Estos estudios no han sido
elaborados al margen de la moda de tos demás estudios sociales. En Los setenta por ejemplo
la izquierda dio cabida a este tipo de trabajos que denunciaban las injusticias de clase
(manteniéndose en la neutralidad los emitidos por los ministerios del Estado), en Los ochenta
las investigaciones se muestran llevadas por los estudios regionales, y por zonas todos los
que tienen matiz de los ochenta (nos viene a la memoria los libros sobre mujeres campesinas
e indígenas), los libros del noventa se muestran más compactos, ofrecen una visión de
conjunto y, este tipo de enfoques entregados por temas y con propuestas demuestran un
conocimiento más seguro de la situación de las mujeres en el Perú.

278
BIBLIOHEMEROGRAFÍA

Aquí están los textos explícitamente mencionados en el trabajo; no obstante la literatura revisada es
mucho más amplia, que pertenecen a autores como Violeta Bermúdez, Carolina Carlessi, Elsa Chaney,
Carmen Chira, Teresita De Barbierí, Amelia Fort, Moisés Lemlij, Pablo Macera, Irene Silverblatt, Carmen
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r
índice

Introducción 5

1. M u j e r e s y p o b l a c i ó n e n el P e r ú 1 9 6 8 - 1 9 9 5 11
1.1. Población urbana y rural 13
1.2. En torno a las políticas de población 17
1.3. Población y maternidad 20

2. S a l u d d e las m u j e r e s p e r u a n a s 25
2.1. Esperanza de vida, gasto público y participación femenina 26
2.2. Mortalidad femenina 32
2.3. Salud reproductiva 36
2.4. Temas afines a la sexualidad 60
2.5. Una condición de ser mujer 63

3 . E d u c a c i ó n en las m u j e r e s 64
3.1. Analfabetismo, pobreza y fecundidad 65
3.2. Educación superior 72
3.3. Estudiantes y sociedad 79

4. M u j e r y t r a b a j o 83
4.1. Población Económicamente Activa (PEA),
mujeres y educación 83
4.2. Trabajadoras del hogar 89
4.2.1. El servicio doméstico en Lima 94
4.2.2. Organizaciones de las trabajadoras del hogar 101
4.3. La informalidad 103
4.4. Programa de Apoyo al Ingreso Temporal (PAIT) 109

5. M u j e r e s c a m p e s i n a s 111
5.1. Campesinas, Estado y Organizaciones No Gubernamentales 114
6. M u j e r e s i n d í g e n a s 1 3 4
6.1. Problemas generales 1 3 4
6.2. Diversidad cultural de las mujeres en la Amazonia 1 3 9
6.3. Sexualidad y salud 1 4 5

7. L am u j e r de clase media 1 5 2

8. U n a v i s i ó n d e l v a s o d e l e c h e 163

9. Comedores populares 184

10. L o s o r g a n i s m o s n o g u b e r n a m e n t a l e s d e p r o m o c i ó n p a r a m u j e r e s 1 9 7

11. L a s m u j e r e s y l a l e g i s l a c i ó n p e r u a n a 206
11.1. Entre las décadas de 1 9 6 0 y 1 9 7 0 2 0 7
11.2. Entre las décadas de 1 9 8 0 y 1 9 9 0 2 1 5
11.3. Sobre las N o r m a s internacionales

12. L a s m u j e r e s y e l e j e r c i c i o d e l p o d e r e n e l P e r ú 2 1 6
12.1. Política tradicional 2 1 9
12.2. Gremios profesionales 2 3 4
12.3. Movimientos populares femeninos 2 4 0
12.4. Lima, Pamplona Alta: década de 1 9 9 0 .
La red de una dirigente popular: Emma Hilario 2 4 9
12.5. Sendero Luminoso y sus mujeres 253

13. V i g e n c i a d e l f e m i n i s m o e n e l P e r ú 260

14. A m a n e r a d e c o n c l u s i ó n 266

15. S o b r e l a s m u j e r e s y l a i n f o r m a c i ó n b i b l i o g r á f i c a 2 6 7

Bibliohemero grafía 279


IMPRESO

Seminario de Historia Rural Andina


Andahuaylas 348, Lima 1
Teléfono 619 7000, anexo 6158
Lima, diciembre 2014
ISHRA
Repositorio digital
2019

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