Discipulado General 00 - Oidores y Hacedores
Discipulado General 00 - Oidores y Hacedores
Discipulado General 00 - Oidores y Hacedores
Juntamente con este libro, adjuntamos un DVD para que puedas percibir mejor cada
momento de Unción en estas enseñanzas.
Introducción
Todo obrero en la Iglesia Local, necesita conocer las Sagradas Escrituras hasta un nivel mínimo para
poder ser útil para Dios.
Comenzamos leyendo:
Mateo 28:16-20
16 Pero los once discípulos se fueron a Galilea, al monte donde Jesús les había ordenado. 17 Y
cuando le vieron, le adoraron; pero algunos dudaban. 18 Y Jesús se acercó y les habló diciendo:
Toda potestad me es dada en el cielo y en la tierra.
Leamos de nuevo:
18 Y Jesús se acercó y les habló diciendo: Toda potestad me es dada en el cielo y en la tierra.
19 Por tanto, id, y haced discípulos a todas las naciones,
Esta fue la instrucción que Jesús dejo a sus discípulos, y por consiguiente a nosotros.
19 Por tanto, id, y haced discípulos a todas las naciones bautizándolos en el nombre del Padre,
y del Hijo, y del Espíritu Santo;
20 enseñándoles que guarden todas las cosas que os he mandado; y he aquí yo estoy con
vosotros todos los días, hasta el fin del mundo. Amén.
Fíjate que Jesús nos dice que hagamos discípulos; el Señor nos dice que les bauticemos,
Y continúa diciendo y enseñándoles que guarden. No solamente hay que invitar a los perdidos a abrir su
corazón al Señor, sino que hay que llevarles al bautismo. El capítulo 1 es una enseñanza sobre el
bautismo, que debemos recibir antes de bajar a las aguas.
El Señor nos dice que hagamos discípulos, que les bauticemos y que les enseñemos que guarden lo
que está escrito. ¡Qué importante! ¿verdad? Porque a veces el cristiano abre su corazón a Jesús e
incluso llega a ser bautizado, pero no termina de aprender los principios del reino de Dios, no termina
de aprender el pensamiento de Dios y ahí anda vagando entre tinieblas y un poquito de luz;
malviviendo o medio sufriendo en la vida, sin entender que fue llamado a ser alguien bendecido,
alguien en autoridad en el mundo espiritual, entonces por eso, estamos preparando este libro de
discipulado, basado solamente en las Santas Escrituras, pero recopilando los versículos que hablan
de cada tema que es fundamental y es básico para tu vida y para que puedas ser un instrumento para
Dios. Hay más versículos en Las Escrituras, pero hemos intentado que sea algo razonable en cuanto
a tiempo, en cuanto a espacio; y hay suficientes versículos que tú vas a ir desarrollando y tú vas a ir
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Introducción 2
profundizando más en Las Escrituras al cabo del paso de los años. Este libro será una herramienta
para discipular y enseñar a otros, porque muy pronto vamos a empezar a abrir células en casas en
diferentes lugares de la ciudad, donde por ejemplo los martes o los jueves, tú vas a poder abrir las
puertas de tu casa e invitar a amigos, invitar a familiares; y algunas personas de la iglesia te
acompañaran y siguiendo el libro basado únicamente en Las Escrituras, vas a poder enseñar a otros;
vas a poder invitarles a ser discípulos, invitarles a que sean bautizados y les vas a poder enseñar que
guarden lo que está escrito, para que sean gente de bendición, sean gente prosperada y sean
instrumentos de Dios que vivan en autoridad en el mundo espiritual.
Entonces, este libro de discipulado que lo hemos llamado “Preparándonos para Servir”, no es para
otra cosa, es preparándonos para servir ¿verdad?, tiene un primer capítulo que es el capítulo del
“Bautismo”. Hay un segundo capítulo que habla sobre “Liberación”. Ya tenemos para todos un
ejemplar del libro en formato de estudio y en papel o sea en texto y también en CD en Mp3 para que
lo puedas escuchar si así lo deseas. Yo deseo que todos los hermanos y hermanas, todos los
hombres y mujeres que formáis parte de esta congregación, recibáis esta formación que a mí me
dieron en mi niñez, en mi adolescencia, en mi juventud. Piensa que yo llevo 50 años estudiando Las
Escrituras, quiero que aprendas estos principios que son básicos para el éxito en tu vida personal,
familiar, en tu servicio en la iglesia, hasta que el Señor te lleve con Él, nos lleve con Él al cielo.
Hay un tercer capítulo titulado “Cómo nos llego la Biblia”, aquí el pastor Fernando, nos enseña
cosas muy interesantes que van a aumentar nuestra consideración por las Santas Escrituras. Vas a
aprender sobre: ¿En qué idioma se escribió?, ¿Quiénes escribieron la biblia? Cómo el Espíritu Santo
inspiró a los autores; vamos a hablar de las copias, de los manuscritos, vamos a hablar de las
traducciones que usamos, vamos a hablar de los códigos cifrados que aparecen en la Biblia, escrito
en hebreo; el pastor nos va a enseñar cosas fascinantes, extraordinarias, que tristemente los medios
seculares no hablan de ellas aunque son extraordinarias.
Hay un cuarto capítulo, que es “El Servicio en el Reino”. Todo el que quiera servir a Dios en la
iglesia local, porque estamos ubicados en iglesias locales ¿verdad?, porque la iglesia universal es la
suma de todos los hijos e hijas de Dios en el mundo, pero la iglesia local es donde nos vemos las
caras, la iglesia local es donde compartimos, la iglesia local es donde la Unción desciende; la iglesia
local es donde vivimos, donde nos casamos, donde nacen nuestros hijos ¿verdad?, donde le decimos
el último adiós a los hermanos cuando el Señor se los lleva al cielo; es nuestro entorno de vida para
los cristianos; la iglesia local. El Servicio en el Reino, es muy importante que conozcas, hay un pasaje
estrella en este capítulo que nos enseña que si queremos servir a Dios, tenemos que usar sus ideas,
sus pensamientos, sus principios. Intentar servir a Dios con nuestras ideas, es un auténtico fracaso;
sí, podemos hacer cosas en la iglesia; pero con nuestras ideas, aunque hacemos cosas en la iglesia,
lo único que hacemos es estorbar, que es lo que hace el diablo. Aprenderemos en el capítulo 5 “La
Visión” que el Espíritu Santo, nos puede impedir, nos puede prohibir, como le prohibió al apóstol
Pablo, él quería ir a Asia y el Espíritu Santo le quería llevar a Macedonia, entonces dice la Biblia que
le impidió, pero la Biblia habla de que el diablo lo que hace es estorbarte. Entonces, cuando nosotros
no aplicamos los principios de Dios, cuando nosotros no aplicamos las ideas de Dios, lo que hacemos
es estorbar a Dios; y yo ponía ese ejemplo de ese pastor Centroamericano, amigo mío que es el que
tiene el templo más grande de toda Centroamérica, que cuando él empezó su vida pastoral, hizo una
oración y dijo: “Dios mío, quiero ser un buen pastor, quiero que tú me uses, quiero que..”, bueno,
empezó a derramar su corazón y llego un momento en que Dios le dijo: “Solamente no me estorbes”,
“solo no me estorbes”, eso fue lo que Dios le dijo, porque eso es lo que hace el diablo, estorbar.
En el capítulo 5, “La Visión”, hay enseñanzas muy necesarias porque hay tanta gente confundida en
la iglesia en general; hay tanta gente deseando, intentando hacer cosas sin enfoque, sin dirección,
frustrada, sin entender bien que hay una hoja de ruta; hay una instrucción de Dios para su vida.
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Introducción 3
El capitulo 7 “La Segunda Venida”, habla de las Profecías sobre los últimos tiempos, aquí hay
mucha información que recopilé hace 20 años que a mí, me sigue llenando de emoción. Yo me
encerré en mi casa, unos 3 meses hace veintitantos años, apasionado por lo que Dios me estaba
mostrando, sobre lo inminente de su segunda venida, me llamó tanto la atención lo que la Biblia dice
sobre la venida de Jesús, ¡te va a sorprender¡. He leído todos los libros de las librerías sobre este
tema, no dicen nada sobre lo que te voy a decir. En un momento de crisis en mi vida, que buscaba a
Dios desesperadamente, Dios me bendijo de una forma tremenda; revolucionó mi vida; a partir de allí,
mi vida fue dedicada exclusivamente a la obra de Dios. Te voy a hablar de años, te voy a hablar de la
matemática de la Biblia, te va a sorprender; te voy a hablar de los judíos, del pueblo de Israel; te voy a
hablar de fechas, ¡precioso!. Yo desde que lo estudie, desde que el Señor me abrió los ojos… fíjate
que dice la Biblia, que el día y la hora nadie la sabe, y la Biblia dice que el Señor viene como ladrón
en la noche, pero también dice: “Para vosotros no va a venir como ladrón”, es decir, el Espíritu os va
a avisar. Tienes que conocer bien Las Escrituras, no solo un versículo… tienes que conocer bien Las
Escrituras. Yo quiero ayudarte a que aprendas bien todos estos principios básicos de lo que es el
evangelio, las buenas nuevas de salvación para tu vida, para tu familia y para todo aquel que quiera.
Entonces, estos 7 capítulos son estratégicos para tu vida, debes aprender los versículos de memoria,
debes escuchar más de una vez el DVD; si quieres servir como obrero en la iglesia, necesitas
escuchar el capitulo del Servicio en el Reino más de una vez, lo vas a necesitar, porque si no haces
las cosas como Dios quiere, aunque estés haciendo cosas en la iglesia, en realidad no vas a estar
sirviendo a Dios. Va a ser imprescindible que lo hagas cómo Dios quiere, para que eso que tú haces
en la iglesia, realmente sea Servicio para Dios. Yo estoy realmente feliz, de estar recopilando toda
esta información en las Santas Escrituras y dártelo a ti, fácil, manejable, sencillo ¿verdad? porque
usamos solamente la Biblia. Entonces, recuerda que Dios nos dice que hagamos discípulos: “Id y
haced discípulos, bautizándoles y enseñándoles que guarden”. Me tienes que ayudar a enseñar a todo el
que quiera algo de Dios a que guarde lo que está escrito, porque eso marcará la diferencia entre la
bendición, entre el vivir bendecido o vivir arrastrándose; en vivir en abundancia, en autoridad o en
vivir allí medio arrastrándose por la vida.
Entonces, nuestra meta es hacer discípulos; bautizar y enseñar a todos que guarden lo que está
escrito, estamos trabajando en esa dirección. La Palabra que Dios me ha dado para hoy, me viene
inquietando desde hace unas semanas, va a ser el inicio de este libro. Vayamos a la Palabra.
Santiago 1:19-25
19 Por esto, mis amados hermanos, todo hombre sea pronto para oír, tardo para hablar, tardo
para airarse;
20 porque la ira del hombre no obra la justicia de Dios.
21 Por lo cual, desechando toda inmundicia y abundancia de malicia, recibid con
mansedumbre la palabra implantada, la cual puede salvar vuestras almas.
22 Pero sed hacedores de la palabra, y no tan solamente oidores, engañándoos a vosotros
mismos.
¡Qué interesante! vamos a hacer un primer énfasis aquí. Estamos hablando de escuchar La Palabra.
Dice la Biblia que “La fe viene por el oír y el oír por la Palabra de Dios”, es decir, la Palabra de Dios te
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Introducción 4
da la facultad, la capacidad de escuchar lo que Dios te quiere decir, pero ese es el primer escalón, no
te puedes quedar ahí porque fíjate lo que hemos leído:
Pero sed hacedores de la palabra, y no tan solamente oidores, engañándoos a vosotros mismos.
¡Cuidado, cuidado! porque estamos dando una enseñanza profunda de Las Escrituras, que es básica
para tu vida, para tu familia; es básica para tu servicio en la iglesia local; es básica para tu caminar
diario; es una enseñanza profunda, “Preparándonos para Servir”, pero cuidado que dice aquí:
Pero sed hacedores de la palabra, y no tan solamente oidores, engañándoos a vosotros mismos.
Cuidado no estés escuchando viernes a viernes, domingo a domingo, sábados, cuando hay
reuniones; en Mp3 en los CDS; en la Web, cuidado no estemos escuchando la Palabra de Dios:
Televisión cristiana, radios cristianas, etc., etc., cuidado no estemos solamente escuchando y no
seamos hacedores de La Palabra, esa es la primera reflexión que va a ir en esta introducción. Mucho
cuidado, la Palabra de Dios no solamente es para escucharla; ese es el primer paso, lo siguiente,
tenemos que ser hacedores de La Palabra.
23 Porque si alguno es oidor de la palabra pero no hacedor de ella, éste es semejante al hombre
que considera en un espejo su rostro natural.
24 Porque él se considera a sí mismo, y se va, y luego olvida cómo era.
25 Mas el que mira atentamente en la perfecta ley, la de la libertad, y persevera en ella, no
siendo oidor olvidadizo, sino hacedor de la obra, éste será bienaventurado en lo que hace.
26 Si alguno se cree religioso entre vosotros, y no refrena su lengua, sino que
engaña su corazón, la religión del tal es vana.
27 La religión pura y sin mácula delante de Dios el Padre es esta: Visitar a los huérfanos y a
las viudas en sus tribulaciones, y guardarse sin mancha del mundo.
El Señor nos dice que hagamos discípulos y que les bauticemos. Cuando las personas entregan su
corazón a Jesús, nuestra primera meta debe ser llevarles a que guarden todas las cosas que están
escritas. Esta fue la instrucción que Jesús dejó a sus discípulos y por consiguiente a nosotros.
Mateo 28:19-20
Algunos cristianos, después de dar el primer paso, no terminan de entender los principios del Reino
de Dios, el pensamiento de Dios, no entienden que fueron llamados a bendición y andan vagando
entre tinieblas, con un poquito de luz pero sin ser gente bendecida.
Este libro es una herramienta para discipular a otras personas. Está basado solamente en las Santas
Escrituras. Podrás enseñar a los nuevos hermanos en la fe para que sean instrumentos de Dios,
siendo discípulos, habiéndose bautizados; y serán prosperados, bendecidos y con autoridad en el
mundo espiritual.
Si anhelas servir como obrero en la iglesia local, necesitarás escuchar en el DVD o leer en este libro,
más de una vez, el capítulo "El Servicio en el Reino", lo necesitarás para discipular a otros. Verás la
importancia de conocer bien las Sagradas Escrituras, porque cuando nosotros, trabajando en la
iglesia local no aplicamos los principios de Dios, es decir, las ideas de Dios; aunque estamos
trabajando, lo único que hacemos es estorbarle.
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Introducción 5
Santiago 1:19-25
19 Por esto, mis amados hermanos, todo hombre sea pronto para oír, tardo para hablar, tardo
para airarse;
20 porque la ira del hombre no obra la justicia de Dios.
21 Por lo cual, desechando toda inmundicia y abundancia de malicia, recibid con
mansedumbre la palabra implantada, la cual puede salvar vuestras almas.
22 Pero sed hacedores de la palabra, y no tan solamente oidores, engañándoos a vosotros
mismos.
23 Porque si alguno es oidor de la palabra pero no hacedor de ella, éste es semejante al hombre
que considera en un espejo su rostro natural.
24 Porque él se considera a sí mismo, y se va, y luego olvida cómo era.
Fíjate, porque si estamos escuchando: “Tenemos que perdonar”, incluso hasta lo aprendemos de
memoria; estamos escuchando: “Tenemos que amarnos”, incluso hasta lo aprendemos de memoria;
pero si estamos escuchando que no vivamos en desorden sexual y hasta aprendemos de memoria
los versículos, pero si solamente lo escuchamos, si estamos escuchando la bendición que es el
diezmar, y el mandamiento de Dios de diezmar y ofrendar; si estamos escuchando todos los
principios del Reino, uno tras otro, viernes a viernes, domingo a domingo, sábado a sábado, en la
televisión cristiana, en todas las fuentes a través de donde nos llega la Palabra de Dios, y lo estamos
escuchando pero no lo ponemos por obra, nos pasa como dice este pasaje ¿verdad?. No solamente
tenemos que escuchar, ese es el primer paso, sino tenemos que ser hacedores de La Palabra, allí
está la bendición; por eso dice:
¿Por qué? Porque si nos quedamos en el primer escalón, no seremos personas bendecidas;
cristianos que se arrastran toda su vida; llenos de dificultades, que no viven en autoridad; que no dan
órdenes al diablo; es el diablo quien les maneja. Entonces por eso, tenemos que aprender y luego
enseñar a otros que guarden para que también ellos sean bendecidos. Ahora, tú no puedes enseñar
desde una posición que no sea la bendición, o sea, yo no puedo hablar del matrimonio si mi
matrimonio no funciona, ¿es así o no?; yo no puedo hablar sobre la educación de los hijos si mis hijos
no son un ejemplo ¿verdad?, o sea, tiene que ser desde la bendición, cuando Dios ya te ha
bendecido, cuando Dios ya te ha restaurado, es cuando tú ya estás en la autoridad en el mundo
espiritual para ser instrumento de Dios. Amén.
Que importante, “este será bienaventurado”, feliz, dichoso, es decir, a este le va a ir bien. Este que
escucha La Palabra y se propone; se propone ¿verdad? Mira lo que la biblia dice, claro, siempre
comprueba que lo que los pastores digamos o los lideres o lo que la tele cristiana diga, o la radio o lo
que tú escuches, como fuente de parte de Dios, comprueba que esté basado en La Escritura, siempre
te lo digo. Si alguna vez me escuchas a mi decir algo que no viene en la Biblia, desecha mi palabra,
pero si lo que yo digo es lo que La Biblia dice, procura no solamente escucharlo sino ser hacedor,
porque va a ser bien para tu vida, tu familia, para tus hijos, para tu futuro, para tu entrar, para tu salir.
¡Aleluya!
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Introducción 6
26 Si alguno se cree religioso entre vosotros, y no refrena su lengua, sino que engaña su
corazón, la religión del tal es vana.
27 La religión pura y sin mácula delante de Dios el Padre es esta: Visitar a los huérfanos y a
las viudas en sus tribulaciones, y guardarse sin mancha del mundo.
Preparando este mensaje y leyendo este versículo, nuevamente me viene una confirmación de seguir
apoyando para sacar niños de la calle. Ya estamos enviando dinero para eso ¿Poquito verdad? Esto
es como lo que conté de la estrella, recordáis que había una vez, una playa llena de estrellas de mar,
y había allí un joven que parecía que estaba intentando salvarlas; y se acercó un hombre y le dijo:
“Pero bueno, que vas a hacer? ¿No querrás salvar todas estas estrellas? - Entonces el joven se
agacho, cogió una, la lanzó y dijo:- “¡A todas no puedo, pero a esta sí!”. Dios nos va a demandar
muchas cosas, de acuerdo a los talentos, a los dones, a los recursos, a la revelación y a la luz que Él
nos ha dado de cómo es su corazón. Muy bien, Romanos 2:13, carta del apóstol Pablo a la iglesia en
Roma:
Romanos 2:13
Porque no son los oidores de la ley los justos ante Dios, sino los hacedores de la ley serán
justificados.
Otra vez,
Porque no son los oidores de la ley los justos ante Dios, sino los hacedores de la ley serán
justificados.
Ves que la Palabra de Dios hace mucho énfasis en ser hacedor de lo que oyes de parte de Dios, es el
50%; es la otra parte, es lo que completa el fruto, la bendición.
Lucas 6:46-49
¡Qué interesante esto ¡¿eh? Como Jesús nos habla tan claro:
Cuántas veces alguien llama a Jesús, Señor, Señor, pero le cuesta perdonar, le cuesta amar, le
cuesta diezmar, le cuesta vivir en una sexualidad limpia, le cuesta dejar la envidia, le cuesta dejar el
orgullo, y Jesús viene y nos dice con misericordia:
¿Por qué me llamáis, Señor, Señor, y no me haces caso de lo que te digo?... Eso nos lo dice a todos:
“Porque me llamas tanto Señor, Señor, y te estoy diciendo que perdones, si llevas 500 años en la
iglesia y todavía no me haces caso”. ¿Alguien lleva aquí 500 años? ¿no, verdad?, lo puedo decir,
como digo siempre, me gusta hacer este juego, pero yo lo que quiero, es que quede claro. Cuántas
veces llamamos a Jesús “Señor” y no le hacemos caso en tantas cosas. Esta es la palabra para hoy.
47 Todo aquel que viene a mí, y oye mis palabras y las hace, os indicaré a quién es semejante.
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Introducción 7
48 Semejante es al hombre que al edificar una casa, cavó y ahondó y puso el fundamento sobre
la roca; y cuando vino una inundación, el río dio con ímpetu contra aquella casa, pero no la
pudo mover, porque estaba fundada sobre la roca.
49 Mas el que oyó y no hizo, semejante es al hombre que edificó su casa sobre tierra, sin
fundamento; contra la cual el río dio con ímpetu, y luego cayó, y fue grande la ruina de aquella
casa.
Mateo 7:21-26
21 No todo el que me dice: Señor, Señor, entrará en el reino de los cielos, sino el que hace la
voluntad de mi Padre que está en los cielos.
22 Muchos me dirán en aquel día: Señor, Señor, ¡no profetizamos en tu nombre, y en tu
nombre echamos fuera demonios, y en tu nombre hicimos muchos milagros?
23 Y entonces les declararé: Nunca os conocí, apartaos de mí, hacedores de maldad
Jesús está enseñando todos estos principios del Reino a la multitud que le seguía y continúa diciendo
lo siguiente, versículo 24 (Puedes comenzar leyendo en el versículo 1 para una mejor comprensión):
No vale solamente con que escuches el mensaje de Jesús que te dice que no juzgues, tienes que
obedecerle, tienes que ser hacedor de La Palabra. Si entendemos este principio de ser oidor y
hacedor, subimos de nivel, porque lo que en la iglesia cristiana en general, en la iglesia evangélica en
el mundo, lo que no suele faltar es palabra; mejor palabra, más afinada, más ungida, menos ungida,
pero a nivel internacional, en todas las iglesias cristianas (estoy hablando del movimiento evangélico),
en todas las iglesias se da Palabra, se da La Escritura; los hermanos pueden llevarse la Biblia a su
casa, pueden escudriñarla a solas, o sea, el problema no está en oír La Palabra, el problema está en
que nos cuesta dar ese paso de ser hacedores de La Palabra, y esta va a ser la introducción de este
libro, de estos 7 capítulos que son tan importantes para tu vida, basado exclusivamente en las Santas
Escrituras. Arrancamos nuevamente en el versículo 24:
24 Cualquiera, pues, que me oye estas palabras, y las hace, le compararé a un hombre
prudente, que edificó su casa sobre la roca.
25 Descendió lluvia, y vinieron ríos, y soplaron vientos, y golpearon contra aquella casa; y no
cayó, porque estaba fundada sobre la roca.
26 Pero cualquiera que me oye estas palabras y no las hace, le compararé a un hombre
insensato, que edificó su casa sobre la arena
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Introducción 8
Y a lo mejor tú piensas: Mi casa, si yo edifico mi casa… mira, aquí está hablando de lo que tú haces,
aquí está hablando de lo que tú construyes en tu vida; aquí está hablando de lo que tú edificas en tu
familia; aquí está hablando de lo que tú levantas en la iglesia local donde tú estás, de lo que tú haces
en tu vida, en tu familia y en la iglesia, Aleluya. Cuando hacemos las cosas en nuestra vida, cuando
hacemos las cosas en nuestras familia, con nuestro esposo(a), con nuestros hijos, con nuestro
matrimonio, cuando hacemos las cosas en la iglesia, siendo oidores de la palabra y hacedores,
cuando viene la tormenta, porque os digo una cosa, la tormenta va a venir siempre, hagas como
hagas tu casa, en la roca o en la arena. La Biblia habla del día malo, hay un día que todo se cruza,
hay un día que dices: “Bueno…”, allí sí que andas por fe. Pero cuando tú edificas, cuando tú las
cosas que haces, lo que construyes, en lo que sirves, tu respirar; en tu vida, en tu familia; cuando
todo lo que tú haces, lo haces porque escuchaste La Palabra y la estás aplicando, la Palabra de
Jesús y la estás aplicando en tu hacer diario, es decir, tú haces las cosas guiado por la palabra que
aprendiste en Las Santas Escrituras y la aplicas, es decir, tú escuchaste el capitulo “El Servicio en el
Reino”, si no lo escuchaste, debes escucharlo y si estuviste, debes volverlo a escuchar porque, hay
enseñanzas sacadas de La Escritura que son básicas para que seas un escogido para Dios, para
servir a Dios; necesitas escucharlo.
Bien, entonces cuando tu vivir diario en tu vida, en tu familia, en la iglesia, cuando lo que haces está
basado en lo que has aprendido de Las Escrituras y lo estás poniendo por obra; cuando viene la
tormenta, que es irremediable que venga, cada cierto tiempo va a venir una tormenta a tu vida, cada
cierto tiempo va a venir una tormenta a la iglesia. Aquí un evangelista habla de inundación, el otro
evangelista habla de lluvia, de ríos, de viento, entendemos lo qué es ¿verdad? Cuando viene la
tormenta, lo que tú has edificado, lo que tú has hecho, permanece porque lo has hecho con los
principios de Dios, eso es lo que le hace permanecer. Ahora, si tú estás sirviendo, a pesar de que tú
has escuchado La Palabra pero no la estás ejecutando, no la estás llevando a cabo, no estás
basando tu vida, tu servicio en los principios del reino, entonces cuando venga la tormenta, no va a
quedar nada en pie de todo lo que has trabajado, es decir, todo lo que hagamos en nuestra vida en
nuestra familia, en nuestro matrimonio, en la iglesia; aplica siempre los principios de Dios, hazlo de
esta manera, porque si no cuando viene la tormenta, dice la Escritura, lo hemos leído, versículo 27:
… y soplaron vientos, y dieron con ímpetu contra aquella casa; y cayó, y fue grande su ruina
Es decir, solo se va a mantener lo que haces de acuerdo a los principios de Dios; por eso si
escuchamos en la iglesia, si nosotros mismos vamos a enseñar a otros, cuando vengan almas
nuevas les vamos a enseñar principios básicos: “Tienes que perdonar, tienes que llevar orden en tu
sexualidad, tienes que dejar la envidia…”; les vamos a predicar la Palabra de Dios. Ahora, si ellos
solamente escuchan la palabra que nosotros les estamos dando de parte de Dios, si ellos no la hacen
carne en su vida, si ellos no son hacedores de La Palabra…, tienes que enseñarles que lo que ellos
sirvan en la iglesia local, en cuanto venga la tormenta, se va a venir para abajo; porque para que eso
permanezca, desde el pastor hasta el que coloca la última silla, para que permanezca para Dios,
tendrá que hacerse todo de acuerdo a los principios de Dios, eso es lo que dice La Palabra. Todo lo
que tú edifiques, para que permanezca, tienes que hacerlo con los principios de Dios; por eso yo te
invito a que no pierdas el tiempo, porque yo he conocido en estos 50 años, mucha gente en la iglesia
evangélica esforzada, mucha gente que ha entrado, que ha salido; mucha gente que ha subido,
mucha gente que ha bajado; mucha gente que ha trabajado, pero ha trabajado en sus fuerzas, lo ha
hecho con sus ideas, y cuando viene la tormenta, que viene siempre; cuando viene el día malo, que
viene siempre, solo permanece tu servicio si eres un hacedor de La Palabra; si lo has hecho en los
principios de Dios, eso es lo único que va a permanecer. Yo no sé si alguien conoce, sobre todo los
que sois padres y especialmente las madres, ¿cuál sería el síntoma de la varicela? El síntoma de la
varicela, los que tenéis hijos pequeños: Fiebre y granos en la piel…, yo creo que estaríamos todos
unánimes si dijéramos que cuando vemos a nuestro hijo, allí pequeñito, que le empiezan a salir
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Introducción 9
granitos, que se empieza a sentir mal, que se empieza como que a rascar y tal, coincidiríamos las
madres y los padres en que: “Uy, este tiene varicela…” y eso que no somos médicos, yo creo que
cuando vemos los granitos, no hay duda, incluso te empiezan a salir los granitos detrás de las orejas.
Bueno, cuando vemos eso en un hijo nuestro o incluso un familiar, un amigo, normalmente niños, sin
haber estudiado medicina, rápidamente decimos: Varicela.
Entonces mira, hay un síntoma que manifiesta claramente cuando nosotros somos cristianos, que
somos oidores de la palabra, pero no somos hacedores…. voy a hablarte del síntoma, voy a hablarte
qué síntoma hay en la iglesia; tienes que saberlo, tienes que conocerlo. Hay un síntoma claro que te
dice que estamos siendo oidores porque venimos los viernes, cuando podemos; que estamos
escuchando La Palabra los domingos; los sábados, cuando hay reuniones; estamos escuchando la
televisión cristiana, estamos escuchando la radio cristiana; estamos leyendo libros cristianos; hay un
síntoma que es inequívoco de que somos oidores y no somos hacedores. Vamos a Las Escrituras.
Gálatas 5:13-15
13 Porque vosotros, hermanos, a libertad fuisteis llamados; solamente que no uséis la libertad
como ocasión para la carne, sino servíos por amor los unos a los otros.
14 Porque toda la ley en esta sola palabra se cumple: Amarás a tu prójimo como a ti mismo.
15 Pero si os mordéis y os coméis unos a otros, mirad que también no os consumáis unos a
otros.
¡Pero hemos leído: “amarás a tu prójimo como a ti mismo”, pero el apóstol, ya en el siglo I
comenzando la iglesia, saca a la luz una realidad. Cuando yo soy un cristiano oidor de La Palabra; la
escucho los viernes, la escucho los domingos, la escucho los sábados, la escucho entre semana a
través de medios de comunicación cristianos, leo libros; pero si me quedo solamente en oír la Palabra
y no soy hacedor de la Palabra; el síntoma, los granitos que me salen, es que empiezo a morder y
empiezo a comer a unos y a otros, es decir, empieza a haber contiendas, empieza a haber
desarreglos, se empieza a perder la armonía en la iglesia.
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Introducción 10
Lo vuelvo a decir, porque quiero que sea un instrumento vuestro contra el diablo: “El cielo es el cielo,
porque se aplican los principios de Dios”, porque Dios no le deja a nadie tomar decisiones; porque
aquí en la tierra Dios nos deja tomar decisiones a nosotros y al diablo, y fíjate la tierra que tenemos,
hay países, hay entornos mejores, pero en general esto es un autentico desastre ¿no? No sé cuantos
millones de personas mueren al año por hambre, bueno… es un desastre; es conocido por todos el
desastre que es esta tierra. Bien, entonces el primer síntoma, cuando al niño le empiezan a salir
granitos, decimos: Varicela. Entonces, cuando empieza a haber peleas, contiendas, por eso es la
introducción del libro; porque de poco te vale leer este libro; de poco te vale enseñar estos principios
del reino a otros, cuando te toque a ti discipular a otros, en tu casa o en la iglesia; de poco te vale
también si tú no eres hacedor. Si no eres hacedor, se te va a notar, ¿cómo?, se te va a notar porque
tú vas a participar en los líos de la iglesia, en las contiendas, en lo que hace desagradable la
convivencia en la iglesia; en lo que le quita cielo a la iglesia. La iglesia local, Dios la estableció para
que fuera un pedazo de cielo en la tierra, ¿Cómo conseguimos eso? Siendo oidores y hacedores de
la Palabra, empezando por mí; yo tengo que ser oidor y hacedor de la Palabra, o sea, yo no puedo
estar predicando sobre el perdón y no perdonar, aunque me la hagan gorda ¿verdad?. Yo tengo que
ser oidor y hacedor, si quiero mantener ese acceso al cielo; si quiero mantener la bendición para mi
vida. No puedo estar hablando de que hay que diezmar y no diezmo, tenemos que ser oidores y
hacedores. No puedo estar hablando de que tienes que vivir en orden en tu sexualidad y ser un
sinvergüenza; primero, Dios no me va a respaldar y segundo, voy a ser parte de la aflicción en la
iglesia; de eso que le hace a la gente decir: “Yo no voy más, porque para estar así o para estar
asao...” ¿por qué? Porque somos oidores, pero no hacedores.
Lo que vas a aprender es bueno, excelente para tu vida siempre y cuando estés
dispuesto a ponerlo por práctica, a ser hacedor de La Palabra de Dios, amén.
Entonces cuando se rompe la armonía en la iglesia local, ya sabemos que es el primer síntoma, es
como los granitos del niño que tiene varicela; al romperse la armonía, se pierde la bendición de Dios,
porque Dios envía la bendición solamente a los hermanos que se llevan bien.
Salmos 133:1,3
1 Mirad cuán bueno y cuán delicioso es Habitar los hermanos juntos en armonía,
3 Porque allí envía Jehová bendición, Y vida eterna.
La bendición la envía Dios, ¿Dónde la envía? ¿A cualquier sitio? No; ¿A la iglesia local? No; a la
iglesia local donde los hermanos se llevan bien; a la iglesia, dice: juntos en armonía. Allí es donde
Dios envía bendición; es un lugar de bendición; dice: bendición y vida eterna. Cuando los hermanos
nos llevamos bien, somos un entorno de salvación; somos un entorno, donde la gente perdida abre su
corazón al Señor. Entonces lo que sucede es que cuando se rompe la armonía, perdemos la
bendición y perdemos nuestra capacidad de ser un entorno de salvación. Cuando hay disensiones en
la iglesia, cuando hay contiendas; ese ambiente no permite que venga gente perdida para ser salva,
entonces, allí se pierde el propósito de la iglesia local.
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Introducción 11
Porque todo lo que tú construyas, es decir, todo lo que tú haces, estás construyendo algo; todo lo que
tú haces en tu vida, en tu familia y en tu matrimonio; en la iglesia; todo lo que tú haces estás
construyendo algo. Todo lo que tú edificas, si eres hacedor de la Palabra, venga la tormenta que
venga, va a permanecer estable, va a estar allí. Entonces, todo lo que tú haces en el evangelismo,
hazlo siendo hacedor de La Palabra; todo lo que tú haces como profesora de Escuela Dominical,
hazlo siendo hacedor de La Palabra; todo lo que tú haces en la Alabanza, hazlo siendo hacedor de la
Palabra. Si quieres que permanezca después de la tormenta, tienes que hacerlo siendo hacedor de
La Palabra. Todo lo que haces como pastor; todo lo que haces como ayudante de pastor; todo lo que
haces en la cocina; como diacono; como ujier; todo lo que haces, hazlo aplicando los principios del
reino, porque si no vendrá la tormenta y se desmoronará. Los de la danza, lo mismo, o sea, todas las
áreas de la iglesia; los que trabajan en el proyecto del programa de televisión en la televisión secular.
Todo lo que hagamos, hay más de 24 áreas identificadas; la intercesión, todo lo que tú ores, todo lo
que tú intercedas, las hermanas que escriben en la web las peticiones; todo lo que hagamos,
hagámoslo siendo hacedores de La Palabra, aplicando los principios de Dios. Porque vendrá la
tormenta que quiere el diablo, la más sorprendente; permanecerá tu trabajo, porque será un trabajo
hecho a la manera de Dios. Todo lo que hagamos en nuestra vida, todo lo que hagamos en nuestras
familia, tienes que entender esto, si quieres que permanezca lo que tú haces, lo que tú edificas.
Porque todo lo que tú haces, es algo que estás edificando, tienes que hacerlo aplicando los principios
de Dios. Es fundamental entender esto, o sea, todo lo que tú estás aprendiendo, todo lo que vas a
aprender, todo lo que vas a enseñar a otros, necesitas decirles: “Ojo, lo que aprendes, procura
aplicarlo, procura ser hacedor de La Palabra, sino no te vale de nada”. Tienes que ser hacedor de La
Palabra.
Quédate con esta frase: “Seamos hacedores de La Palabra”. Todo lo que has escuchado desde que
abriste tu corazón al Señor, desde que te convertiste, todo lo que has aprendido en las Escrituras,
tienes que ponerlo por obra para que seas bendecido, para que la bendición de La Palabra de Dios
llegue a tu vida. No por escuchar La Palabra es que eres bendecido, tienes que ser hacedor de La
Palabra. Recuerda lo que has aprendido, si eres hacedor, te metes en la autopista de la bendición.
Hemos sido creados para ser bendecidos, para vivir en la autoridad que Dios te quiere dar en todas
las áreas de tu vida. ¡Qué importante! ¿verdad?
Dios mío yo voy a ser hacedor de tu Palabra. Repite conmigo: Padre del cielo, en el nombre
de Jesús, yo quiero ser no solamente oidor, sino también hacedor de tu Palabra, porque
quiero ir en la autopista de la bendición, quiero ir a gran velocidad hacia la bendición. Dios
mío, dame de tu gracia para ser hacedor de tu Palabra. En el nombre de Jesús, amén.
Padre Santo, lamento todo el pecado de mi vida, de la vida de mis padres, de la vida de mis
abuelos, de la vida de mis bisabuelos; Dios mío, lo siento, Dios mío lo siento, Dios mío lo
siento de verdad oh Dios. Ha traído mucho dolor, ha traído mucha tristeza Señor, pero tú
dices en tu Palabra que tú viniste a deshacer las obras del diablo; que tú viniste para que
tuviéramos vida y vida en abundancia Señor. Dios mío, dame nuevamente vida, Dios mío
dame nuevamente vida oh Dios. Dame vida cada día oh Dios; enséñame oh Dios a vivir en
una atmosfera de arrepentimiento, de la misma manera que los médicos dicen a los niños
enfermos de cáncer que salgan de una atmosfera de humo, de nicotina, Dios mío, enséñame
a mí a entrar en una atmosfera de arrepentimiento. Oh Señor, que viva en una atmosfera de
arrepentimiento; que me levante, que me acueste y de mi alma, de mi cuerpo, de mi espíritu
salga arrepentimiento. Dios mío, perdona oh Dios; dame vida y vida en abundancia; dame
vida y vida en abundancia oh Señor. En el nombre de Jesús. Amén.
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Introducción 12
Fíjate que hemos estado soltando La Palabra y de repente, cae la Unción, ¡qué regalo nos ha dado
Dios! Tenemos que cuidar este tesoro que Dios nos ha dado.
Hemos escuchado una palabra que nos ha hecho pensar, no ha sido una palabra fácil, tienes que
meditar en ella. Es la introducción de este libro “Preparándonos para Servir”, pero cuando hemos
empezado a orar, automáticamente viene la Unción. Tenemos que cuidar la Unción, de domingo a
domingo, de viernes a viernes, eso es lo importante, si cuidamos la Unción, la Unción no se va.
¡Aleluya!
Santiago 1:19-26
Romanos 2:13
Lucas 6:46-49
Gálatas 5:14,15
Salmo 133:1
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