Location via proxy:   [ UP ]  
[Report a bug]   [Manage cookies]                

Cuestiones Historia de España (Bloques 1 A 4)

Descargar como pdf o txt
Descargar como pdf o txt
Está en la página 1de 24

 Hola chic@s, os he puesto anotaciones en color rojo para distinguirlas del texto a estudiar.

Revisad cómo se escriben las palabras en las que dudéis.

 Word tiene corrector, aunque a veces se equivoca (como tod@s claro ).

 Estamos en HISTORIA. Entonces, todo de lo que hablamos, pasó en el pasado, obvio. Por
ello, es más correcto escribir en pasado y no en presente. Ejemplo: es más correcto expresarte así:
“Los fenicios fundaron Malaka” en vez de “Los fenicios fundan Malaka”. En pasado es más correcto,
pero tendréis que estar mucho más atentos a las tildes: conquistó, fundó, absorbió, abolió…. Si
preferís en presente porque soléis tener muchas faltas de ortografía (buena táctica para no perder
puntos por eso), escribid todo el epígrafe en presente. No paséis de un tiempo verbal a otro
constantemente, que así influye negativamente en el corrector.

RECOMENDACIÓN

Estamos en un curso en el que hay que hacer trabajo de hormiguita. Así que procurad hacer
resúmenes o esquemas de cada uno de los epígrafes. Cuanto mejor los hagáis, mejor se os quedarán.
Y con el tiempo, utilizando únicamente los esquemas os acordaréis de qué trata cada epígrafe. Y
todavía mejor, intentad hacerlo con colores, símbolos o pequeños dibujos esquemáticos que os
ayuden a recordar el texto. Podéis hacerlos a mano o a través de aplicaciones como Canva o Popplet,
sencillas de manejar y a las que podéis añadir fotos, cuadros o mapas que os recuerden el temario.

Podríais incluso repartiros el trabajo y hacer los esquemas en grupo y luego os los pasáis. O
utilizar Padlet para elaborar líneas del tiempo o señalar conceptos importantes de cada epígrafe (Ej:
romanización, sociedad depredadora o recolectora, Ilustración, feudalismo, etc.).

Todo suma para sacar la nota a la que aspiramos. ¿Qué quiere decir? Que cada persona
aprende mejor de una u otra forma. Otro medio para repasar y asentar conocimientos es el
audiovisual, o incluso, sólo el auditivo. Por ello, os animo a buscar en Youtube los resúmenes que
hay de los distintos epígrafes (no siempre coincidirán con todo lo que yo os he señalado), y también
incluso en Spotify, donde hay varios profesores que han colgado lecciones de estas cuestiones o del
temario del siglo XIX y XX.

Mucho ánimo y suerte.

Historia de España
Cuestiones Bloques 1 al 4
Borja Carballo Barral

1
Epígrafes Bloques 1 a 4 de Historia de España. Borja Carballo Barral
BLOQUE 1. La Península Ibérica desde los primeros humanos hasta la desaparición de la monarquía
visigoda (711).

1.1. Sociedad y economía en el Paleolítico y Neolítico. La pintura rupestre.

El Paleolítico surge en la Península Ibérica hace unos 800.000 años, fecha en la que se datan sus primeros
pobladores, el Homo antecesor, cuyos restos más antiguos han sido hallados en Atapuerca. La llegada del
Homo sapiens tuvo lugar hace unos 40.000 años. Aunque el Paleolítico pasó por varias fases (Inferior,
Medio y Superior (no hace falta explicarlas porque no hay espacio, pero si ponéis sus nombres, demostráis
que sabéis más de lo que se os pide), tuvieron características comunes. Era una sociedad depredadora (su
supervivencia se basaba en la caza, la pesca, el carroñeo y la recolección de frutos). No sabían producir sus
alimentos y por ello debían buscarlos, siendo así nómadas que se desplazaban siguiendo a los rebaños de
animales o buscando mejores condiciones climáticas. Vivían en pequeños grupos, sin una clara jerarquía
social y en los que la división de las tareas era por sexos. Para realizar sus tareas, utilizaban herramientas
de hueso, piedra o madera como buriles o bifaces.

Hacia el 5000 a.C. aparecieron en la Península Ibérica las primeras comunidades neolíticas. En ellas se
inició la agricultura y ganadería y la elaboración de cerámica. Fue el paso de una sociedad depredadora a
otra productora de sus propios alimentos. Esta transformación fue el inicio del sedentarismo, la aparición
de poblados estables cada vez más grandes, una mayor jerarquización social (agricultores, ganaderos,
herreros, defensores) y el principio del comercio.

La Península Ibérica posee numerosos ejemplos de pinturas rupestres. Se trata de un arte figurativo en el
que destacan los animales pintados con una técnica naturalista. Las figuras se hallan superpuestas sin
formar escenas, aunque presentan efectos de volumen y movimiento y eran polícromas. La mayoría de
estas pinturas se concentran en la zona cantábrica destacando Altamira. En la zona levantina sobresalen
las escenas de carácter narrativo, con proliferación de figuras humanas monocromáticas que tienden a la
esquematización (Cogull).

En este apartado os puede servir hacer un esquema de antónimos, tipo:

Paleolítico Neolítico
800.000 a 5.000 aC (antecessor, neandertal y sapiens) A partir de 5.000 a.C. (H. Sapiens)
Grupos humanos poco numerosos (tribus) Más numerosos (poblados)
Nómadas (cambian de asentamiento) Sedentarios (se establecían de forma estable)
Sociedad Depredadora (caza, pesca, carroña) Sociedad productora (agricultura y ganadería)
Mínimo reparto del trabajo por sexo Especialización del trabajo (ganaderos, herreros…)

2
Epígrafes Bloques 1 a 4 de Historia de España. Borja Carballo Barral
1.2. Los pueblos prerromanos. Las colonizaciones históricas: fenicios y griegos. Tartessos.

Durante el primer milenio a.C. llegaron a la Península Ibérica numerosos pueblos procedentes de Europa
continental o de las costas del Mediterráneo antes de la llegada de los romanos. A través de los Pirineos
llegaron los pueblos indoeuropeos, que dividieron la península en dos grandes culturas: los íberos y los
celtas. Los íberos se asentaban en ciudades estado por el este y sur peninsular. Se dedicaban a la
agricultura y al comercio, y desarrollaron un arte refinado (Dama de Elche). En cambio, los celtas se
situaban en el norte y oeste peninsular, centrados en actividades agroganaderas, tuvieron un gran
desarrollo metalúrgico y solían vivir en castros (chozas de planta redonda, su base era de piedra y el resto
de madera y paja).

Procedentes del Mediterráneo llegaron otros pueblos colonizadores más avanzados en busca de beneficio
económico. Así, llegaron a la península fenicios, griegos y cartagineses. Los fenicios fundaron factorías
como Malaka o Gades (Málaga o Cádiz), los griegos colonias como Emporion (Ampurias) y los cartagineses
Cartago Nova (Cartagena). El impacto en los nativos fue muy grande en la costa mediterránea y el valle del
Guadalquivir. Gracias a ellos, la península dio el paso de la Prehistoria a la Historia con la llegada de la
escritura. También destacó la introducción de la moneda y de la tríada mediterránea (trigo, vid y olivo).

Tartessos fue un pueblo prerromano asentado en Andalucía occidental, que destacó por su organización
política, su riqueza minera y sus relaciones comerciales con los colonizadores históricos. (Curiosidad que si
la recordáis, pues puede que os ayude a sumar puntos: Su monarca más conocido fue Argantonio, primera
persona de la Península Ibérica que aparece en un texto escrito en la Historia (Lo nombran los griegos, y le
ponen ese nombre por la riqueza minera de Tartessos, especialmente de Plata: Argantonio significa
Hombre de Plata=Argenta es plata en griego, Ag, símbolo de Plata en la tabla periódica viene de ahí).

3
Epígrafes Bloques 1 a 4 de Historia de España. Borja Carballo Barral
1.3. Conquista y romanización de la Península Ibérica: principales aportaciones romanas en los
ámbitos social, económico o cultural.

La conquista romana de la Península Ibérica por la fuerza de las armas duró tres siglos dado que no siguió
un plan establecido. Se realizó en diversas etapas, interrumpidas por períodos de inactividad bélica. En la
primera etapa (218-197 a.C.) (si os cuesta quedaron con las fechas, pensad en el siglo: a finales del siglo III
a.C.), lograron dominar la costa mediterránea y el sur peninsular dentro del escenario general de la
segunda guerra púnica contra los cartagineses. Durante la segunda etapa (197-133 a.C.) (siglo II a.C.) se
conquistó la Meseta y el oeste y noroeste peninsular y se caracterizó por la resistencia de algunos pueblos
indígenas como los lusitanos comandados por Viriato o la ciudad de Numancia. Durante la última etapa
(29-19 a.C.) (Segunda mitad del siglo I a.C.), sometieron a los cántabros y astures.

Tras la conquista llegó un largo proceso conocido como romanización, es decir, la progresiva implantación
de la organización política, económica, social y cultural romana sobre los pueblos conquistados. Fruto de
esta aculturación, la Península Ibérica recibió un fuerte impulso económico al formar parte del imperio
romano y comerciar con sus territorios, se fundaron nuevas ciudades como Emérita Augusta (Mérida),
Itálica (Sevilla), Caesar Augusta (Zaragoza) o Legio (León), y se incrementó la producción minera (minas de
Río Tinto o Las Médulas). Culturalmente destaca la extensión del latín, del derecho romano y su gran
legado de infraestructuras como el teatro de Mérida, el acueducto de Segovia o las calzadas romanas (Vía
de la Plata). Por último, socialmente adoptó los modelos romanos destacando el gran desarrollo de la
esclavitud.

4
Epígrafes Bloques 1 a 4 de Historia de España. Borja Carballo Barral
1.4. El reino visigodo: origen y organización política. Los concilios.

Los visigodos se asientan en la Galia tras ser invitados por los romanos como hospites con la intención de
contener a otros pueblos germánicos (vándalos, suevos y alanos) que trataban de ocupar el imperio
romano. En el año 415 asientan su reino en Tolosa. Al desaparecer el Imperio en el 476, el reino visigodo
se extendía desde el Loira al Tajo, aunque la presión de los Francos les hizo asentarse definitivamente en la
península con capital en Toledo (507-711).

Los visigodos llevaron a cabo una importante tarea de homogeneización (uniformización o unificación,
cualquier palabra vale) de la península. La unificación política se realizó en varias etapas, en el siglo VI
(Leovigildo) derrotaron al reino suevo y en el siglo VII expulsaron a los bizantinos de la península (Suintila).
La unificación religiosa se produjo gracias a Recaredo, quien renuncia al arrianismo en favor del
catolicismo en el III Concilio de Toledo (589). Y la unificación jurídica llegó con la aprobación de un único
código legal, el Fuero Juzgo (653).

El reino visigodo se dotó de una monarquía electiva. Para el ejercicio de sus funciones el rey contaba con la
ayuda del Aula Regia, organismo integrado por miembros de la alta nobleza que daba consejos al monarca,
y los concilios de Toledo, reuniones entre el rey y la Iglesia, con la inclusión de algunos sectores de la
nobleza, que permitían facilitar la administración del reino. Era tal el poder de estos concilios, que tenían
la potestad de derrocar o ensalzar a los monarcas en función de sus acciones, unos destronamientos que
fueron moneda común en el reino visigodo.

5
Epígrafes Bloques 1 a 4 de Historia de España. Borja Carballo Barral
BLOQUE 2. La Edad Media: tres culturas y un mapa político en constante cambio (711-1474).

2.1. Al Ándalus: la conquista musulmana de la Península Ibérica. Emirato y Califato de Córdoba.

Vídeo de 4 minutos de resumen del capítulo: https://www.youtube.com/watch?v=KKFW7R1Y0oA

Vídeo resumen del epígrafe: https://www.youtube.com/watch?v=tcdrzNT2lWE

El carácter electivo de la monarquía visigoda provocó la


llegada de los musulmanes a la península en el siglo VIII.
La muerte del rey visigodo Vitiza provocó un conflicto
entre el nuevo rey Rodrigo, y los hijos de Vitiza, que no lo
reconocían, que permitió la entrada de los musulmanes
en la Península Ibérica. Sus tropas, comandadas por Tarik
y Muza, atravesaron el estrecho y vencieron a Rodrigo
en 711 en la Batalla de Guadalete. Tras esta victoria, la
conquista prosiguió por toda la península y Francia hasta
que fue frenada por las derrotas de Covadonga (722) en
Asturias y Poitiers (732) en Francia.

Los musulmanes llamaron a su territorio al-Ándalus, y


ubicaron su capital en Córdoba, convirtiéndose en un emirato dependiente (711-756) del califato Damasco
siendo regido por un emir.

El emirato independiente (756-929) surge tras la llegada de Abderramán I (podéis poner su nombre en
árabe: Abd-al-Rahmán, pero no es necesario) a la península. Superviviente de la matanza de los Omeyas en
Damasco, rompió la dependencia política de al-Ándalus del califato de Damasco. La etapa vivió momentos
de esplendor como el emirato de Abderramán II, aunque no estuvo exento de problemas que favorecieron
el avance cristiano por la meseta norte.

El califato de Córdoba (929-1031) se instaura en 929 cuando Abderramán III asumió su dirección política y
rompió con la dependencia religiosa de al-Ándalus. El Califato fue la época de mayor esplendor de al-
Ándalus, con la construcción de la Mezquita de Córdoba y un relevante desarrollo cultural. Sin embargo, la
estabilidad se acabó al nombrar califa a un niño de 8 años, Hisham II. El poder quedó en manos de su
hachib (líder militar) Almanzor, que realizó importantes campañas militares contra los cristianos por toda
la península. Tras su muerte (1002), el Califato entró en decadencia hasta acabar dividiéndose en varios
reinos de escasa importancia llamados de taifas (primeros reinos de taifas: habrá tres).

6
Epígrafes Bloques 1 a 4 de Historia de España. Borja Carballo Barral
2.2. Al Ándalus: reinos de taifas. Reino nazarí.

Vídeo resumen: https://buhosdeatenas.blogspot.com/2018/11/evau-tema-6-al-andalus-reinos-de-taifas.html

Tras la muerte de Almanzor, el califato entró en crisis y acabó disgregándose en territorios independientes
conocidos como reinos de taifas en 1035 (los primeros). Pese a la riqueza de algunos de ellos (Toledo,
Zaragoza o Sevilla), eran militarmente muy débiles, lo que facilitó el avance de los reinos cristianos. Ante la
pérdida de Toledo en 1085 por Alfonso VI de Castilla, las demás taifas pidieron ayuda a sectores
ultrarreligiosos musulmanes del norte de África: los almorávides.

La dominación almorávide de al-Ándalus se hizo efectiva de 1090 a 1145 (finales del siglo XI y primera
mitad del siglo XII) tras victorias tan importantes contra los cristianos como la de Sagrajas (1086). Los
almorávides lograron unificar de nuevo los territorios musulmanes. Sin embargo, su fanatismo religioso, el
renovado avance cristiano y la presión de los almohades desde el norte África acabó con su liderazgo
provocando una nueva división en taifas de los territorios musulmanes (segundos reinos de taifas).

Los almohades, también llegados desde el norte de África, vuelven a reunificar las taifas musulmanas de la
península y las defienden de los cristianos como en la victoria de Alarcos (1195). Esto provocó la reacción
cristiana que, tras una alianza de Castilla, Aragón y Navarra (y el apoyo papal en forma de Cruzada), vencen
a los almohades en la batalla de las Navas de Tolosa en 1212. Como consecuencia de esta victoria, el
imperio almohade cayó y aparecieron los terceros reinos de taifas. Estos fueron conquistados por los
cristianos en las décadas siguientes a excepción del Reino nazarí de Granada, que sobrevivió
independiente gracias al pago de parias (impuestos) a Castilla hasta que los Reyes Católicos pusieron fin a
781 años (ocho siglos) de presencia musulmana en la Península en 1492.

7
Epígrafes Bloques 1 a 4 de Historia de España. Borja Carballo Barral
2.3. Al Ándalus: economía, sociedad y cultura.

Vídeo de repaso: https://www.youtube.com/watch?v=j5azbryahjk

La presencia andalusí trajo consigo importantes adelantes económicos. La agricultura tuvo un gran
desarrollo gracias al regadío, las huertas (introdujeron el arroz o el algodón) o la tríada mediterránea
(cereales, vid y olivo). En la ganadería retrocedió la porcina (no estaba permitida por motivos religiosos),
desarrollándose la ovina y la equina. Se revitalizó la minería y la artesanía, propio de una sociedad urbana,
destacando la seda y el cuero nazarí. El comercio tuvo una gran importancia desarrollándose tanto en el
interior (en los zocos y bazares de las ciudades) como en el exterior (con el mundo islámico y el centro de
África). El gobierno se reservó el derecho de acuñar
moneda.

Respecto a la sociedad andalusí, su jerarquía dependía de


la creencia en el Islam. La cúspide social se componía por
una minoría árabe, que ocupaba los puestos más
destacados, y una mayoría bereber (procedentes del
norte de África) dedicada a la ganadería y al ejército. Más
tarde estaban los muladíes, los cristianos que se
convirtieron al islam. La sociedad musulmana era
respetuosa con la población de otras religiones, aunque
se las obligaba a pagar ciertos tributos. Así, en la base se
situaban los mozárabes (cristianos de al-Ándalus) y los
judíos que gozaban de libertad de culto. En el piso más
bajo se hallaban los esclavos, la mayoría de origen
africano.

En al-Ándalus también se produjeron grandes avances en ciencias como la astronomía, la medicina, la


botánica, la filosofía o las matemáticas. Del campo artístico merecen mención especial la Mezquita de
Córdoba y la Alhambra. El arte andalusí destacó en arquitectura antes que en escultura o pintura debido a
que el Corán impedía (todavía lo hace) la representación de figuras humanas.

8
Epígrafes Bloques 1 a 4 de Historia de España. Borja Carballo Barral
2.4. Los primeros núcleos de resistencia cristiana. Principales etapas de la Reconquista. Modelos de
repoblación. (es de los epígrafes más largos y espesos)

Vídeo resumen: https://www.youtube.com/watch?v=89Lix8MsFzA

La invasión musulmana de la península en 711 redujo las posiciones cristianas a las áreas cantábricas y
pirenaicas, donde surgieron entre los siglos VIII y X los primeros reinos cristianos. El Reino astur-leonés
surgió tras la victoria de Pelayo en Covadonga (722), y se expandió hacia el Duero, cuando se convirtió en
el Reino de León (siglo X). El Condado de Castilla, dependiente de León, logró una gran autonomía con
Fernán González, al ampliar sus tierras hacia el Duero. Al este, Navarra, que era parte de la Marca
Hispánica carolingia, alcanzó su mayor expansión con Sancho III el Mayor, quien al morir en 1035 repartió
su territorio entre sus hijos surgiendo así el Reino de Aragón. Los condados catalanes, bajo dominio
carolingio, lograron su independencia a finales del siglo X con el ascenso de Wilfredo el Velloso.

Desde el siglo IX, el proceso de Reconquista (en el título viene con mayúscula, así que ponedlo con
mayúscula!!) fue seguido por el de repoblación. (Para estudiar esta parte, conviene hacer un cuadro o usar
un mapa que os sirva de resumen y ordenación: para el avance geográfico, fijaros en los grandes ríos
peninsulares: hasta el Duero, hasta el Tajo, hasta el Guadalquivir). Tal que así:

Durante la primera etapa (VIII-X) los reinos cristianos avanzaron hasta el Duero y Cataluña, y utilizaron para
su repoblación la presura (entrega en propiedad de pequeños terrenos fronterizos al campesinado a
cambio de su defensa).

En la segunda etapa (XI-1150), los cristianos llegaron hasta los valles del Tajo y Ebro aprovechando la
debilidad de los reinos de taifas. Aquí utilizaron para su repoblación los concejos y fueros, que eran
grandes territorios entregados a nuevos poblados con su propio fuero para su desarrollo.

En la tercera etapa (siglo XII) llegan hasta el Guadiana, donde son frenados por los almohades. Aquí, las
tierras conquistadas se dividieron en encomiendas o extensos latifundios, que fueron entregados a las
órdenes militares.

En la última etapa (siglo XIII), los reinos cristianos avanzaron hasta el Guadalquivir sobre los terceros reinos
de taifas, realizando repartimientos de grandes latifundios para los nobles, órdenes militares, el Rey y la
Iglesia.

9
Epígrafes Bloques 1 a 4 de Historia de España. Borja Carballo Barral
2.5. Los reinos cristianos en la Edad Media: organización política, régimen señorial y sociedad
estamental.

Vídeo resumen en https://www.youtube.com/watch?v=Qh50pNc1t9s

Los reinos cristianos presentaban una estructura política muy similar entre sí, destacando la Corona y las
Cortes. Las monarquías cristianas pasaron de ser electivas (como los visigodos) a hereditarias (como los
carolingios). La Curia Regia, que era una institución destinada a cuestiones administrativas y de consejo,
dio paso a una nueva institución, las Cortes, al incluir a burgueses como representantes de las crecientes
ciudades. La función principal de las Cortes era aprobar impuestos (como los diezmos o alcabalas) y apoyar
las propuestas reales a cambio de recibir privilegios y fueros.

La sociedad en los reinos cristianos se conformó según el feudalismo imperante en el resto de Europa. Era
una organización social muy jerarquizada y estanca, marcada por el nacimiento y la desigualdad. La
sociedad se dividía en tres estamentos (nobleza, clero y estado llano), con lazos de vasallaje y
servidumbre entre ellos, y en la cúspide se hallaba el Rey. Los dos primeros eran privilegiados, no pagaban
impuestos y tenían una serie de derechos sobre el estado llano, y una legislación diferente.

La organización social se basaba en el establecimiento de relaciones feudo-vasalláticas entre el monarca y


la alta nobleza y entre las autoridades políticas y el conjunto de la población a través de contratos de
servidumbre y redes clientelares entre la nobleza y el clero y el campesinado. Imperaba el régimen
señorial, consistente en que los reyes entregaban a la nobleza o al alto clero territorios o feudos para su
aprovechamiento económico en los que los nuevos dueños o señores feudales, actuaban como reyes sobre
sus pobladores, que se convertían en sus vasallos al vivir en sus nuevos señoríos jurisdiccionales.

10
Epígrafes Bloques 1 a 4 de Historia de España. Borja Carballo Barral
2.6. Organización política de la Corona de Castilla, Aragón y Navarra al final de la Edad Media.

Los reinos cristianos peninsulares crearon diferentes modelos de gobierno en la Baja Edad Media, aunque
su estructura política se basaba en la monarquía, las Cortes y las ciudades.

Castilla era una monarquía unitaria en la que el rey adquirió cada vez más autoridad al retirar privilegios a
la nobleza y al concentrar la administración. Destacaban las instituciones del Consejo Real, la Audiencia y
la Hacienda. Respecto a las ciudades, en ellas surgieron los concejos (órganos de gobierno dirigidos por la
oligarquía local).

Aragón, sin embargo, era una confederación de reinos (Aragón, Cataluña, Mallorca y Valencia), que tenía
un carácter polisinodial (concepto histórico que vale la pena utilizar: poli “muchos”, sínodo “asamblea”…
por lo que: polisinodial es propio de un poder formado por varias instituciones que se equilibran) y pactista
(entendido como la tendencia a pactar o equilibrar el poder del Rey con el de la nobleza), es decir, el poder
se repartía entre sus instituciones propias a través de pactos. El rey estaba limitado por la nobleza a través
de las Cortes de cada reino. De aquí surgieron instituciones como la Generalitat de Cataluña (1359), o la
Diputación del Reino de Aragón y la del Reino de Valencia. También destacó el Justicia de Aragón, cargo
que actuaba como mediador y moderador en las pugnas y diferencias entre el rey y la nobleza.

En el caso de Navarra, su organización política se situaría entre el autoritarismo de Castilla y el pactismo de


Aragón. Conviene destacar que Navarra gozaba de un importante Fuero General, que fue mejorado por
sucesivos monarcas; y que sus Cortes tuvieron gran vitalidad en los siglos XIV y XV. Además, la llegada de
varias dinastías francesas a su Corona, hizo que recibiera cierto influjo francés.

11
Epígrafes Bloques 1 a 4 de Historia de España. Borja Carballo Barral
BLOQUE 3. La formación de la Monarquía y su expansión mundial (1474-1700).

3.1. Los Reyes Católicos: unión dinástica e instituciones de gobierno.

La boda de Isabel de Castilla y Fernando de Aragón (1469) y la muerte de Enrique IV (1474), provocó una
guerra civil castellana por el trono de Castilla (1474- 1479) entre Juana la Beltraneja (apoyada por
Portugal) e Isabel (apoyada por Aragón). Venció Isabel tras la renuncia de Juana en el Tratado de
Alcaçovas en 1479, año en el que Fernando ascendía al trono de Aragón.

Así, fundaron la denominada Monarquía Hispánica. Fue una unión dinástica, es decir, eran reyes de ambas
Coronas, pero cada reino mantuvo su unidad territorial, instituciones, legislación y moneda propias, pero
unificaron sus objetivos políticos, religiosos y militares: centralizar el poder real frente a la nobleza, lograr
la unidad religiosa de la península y terminar la Reconquista.

Establecieron una monarquía autoritaria, sentando las bases de un Estado moderno cuyo eje central fue
Castilla, dada su mayor extensión, población y dinamismo económico. De hecho, las reformas fueron más
profundas en Castilla que en Aragón, dada la fortaleza de sus instituciones. La única institución común fue
la Inquisición (1478).

En Castilla, los monarcas se impusieron sobre la nobleza, la Iglesia y las ciudades: el Consejo Real se
profesionalizó, convirtiéndose en órgano de gobierno e instancia judicial superior y reduciendo la
influencia política de la nobleza; lograron del Papado el Patronato Regio (control monárquico de los
nombramientos de cargos religiosos), y potenciaron la figura del corregidor, encargado de gobernar en las
ciudades en nombre del rey. En Aragón, los cambios fueron limitados debido al pactismo. Los Reyes
confirmaron los fueros de sus territorios, pero instauraron el Consejo de Aragón, las Audiencias y la figura
del Virrey en cada reino.

12
Epígrafes Bloques 1 a 4 de Historia de España. Borja Carballo Barral
3.2. El significado de 1492. La guerra de Granada y el descubrimiento de América.

(Epígrafe algo más largo, pero su relevancia lo exige, sorry)

El año 1492 es crucial en la Historia de España por la trascendencia de los acontecimientos que se
produjeron durante el reinado de los Reyes Católicos, Isabel de Castilla y Fernando de Aragón.

La conquista del reino nazarí de Granada, único reducto musulmán en la Península, fue larga. Los Reyes
Católicos aprovecharon las luchas internas en el Reino de Granada. La guerra comenzó en 1481, en 1487
cayó Málaga, y la rendición incondicional de la ciudad por parte del sultán Boabdil llegó el 2 de enero de
1492 tras la firma de las Capitulaciones de Granada.

La forzosa unificación religiosa de la Península también comenzó en 1492. Los judíos fueron expulsados de
la Monarquía Hispánica el 31 de marzo de 1492 mientras que los musulmanes, se vieron obligados a
marcharse a comienzos del siglo XVI, salvo que se convirtieran al cristianismo.

También en 1492 Antonio De Nebrija publicó su obra Gramática Castellana, la primera en estudiar y fijar
las normas de una lengua romance como la lengua castellana.

Pero el hecho más relevante para la Historia universal fue el descubrimiento de América por Cristóbal
Colón el 12 de octubre de 1492. La caída de Constantinopla en manos del Imperio Otomano en 1453 había
cerrado las rutas comerciales cristianas con Oriente y fue necesaria una alternativa. Por ello, los Reyes
Católicos aceptaron la propuesta de Colón de intentar cruzar el Atlántico para llegar a Oriente. Tras la firma
de las Capitulaciones de Santa Fe de 1492, donde los Reyes Católicos y Colón se repartían los potenciales
beneficios en caso de éxito, Colón inició la expedición con la que acabó descubriendo América, el Nuevo
Mundo. Realizó un total de cuatro expediciones y supuso el inicio del Imperio español americano.

13
Epígrafes Bloques 1 a 4 de Historia de España. Borja Carballo Barral
3.3. El Imperio de los Austrias: España bajo Carlos I. Política interior y conflictos europeos.

La creación del Imperio de los Austrias surgió de la herencia de Carlos I Habsburgo. Nieto de los
Reyes Católicos, recibió de ellos Aragón, Navarra, Castilla y posesiones italianas y americanas. De su abuela
paterna (María de Borgoña) heredó territorios en Europa como Flandes o Borgoña y, en 1519, de su
abuelo paterno, Maximiliano, Austria y la posibilidad de ser Emperador del Sacro Imperio Romano
Germánico, que logró en 1520 como emperador Carlos V.

Su política interior estuvo marcada por la sublevación de las Comunidades de Castilla (1520-1522).
Opuestos a los consejeros flamencos de Carlos I, querían limitar el poder real y los impuestos. Sus líderes
fueron derrotados en Villalar en 1521 y ajusticiados. A la vez estallaron las Germanías en Valencia y
Mallorca, un movimiento de protesta social contra los señores feudales que también fue sofocado.

En política exterior, Carlos I defendió su hegemonía y el catolicismo. Dos fueron sus rivales directos:
Francia, a la que derrotó en distintas guerras por el control de Italia; y el Imperio Otomano, al que se
enfrentó en el Mediterráneo y el Este de Europa. Respecto al catolicismo, Carlos I tuvo que enfrentarse al
protestantismo. Así, en 1545 organizó la Contrarreforma católica en el Concilio de Trento, y en 1555 firmó
la Paz de Augsburgo en la que reconocía la libertad de culto de los príncipes alemanes.

En 1556 Carlos I abdicó en su hijo Felipe II, quien recibió América, Flandes, Italia, Castilla y Aragón,
otorgando a su hermano Fernando Austria y la candidatura imperial.

14
Epígrafes Bloques 1 a 4 de Historia de España. Borja Carballo Barral
3.4. La Monarquía Hispánica de Felipe II. Gobierno y administración. Los problemas internos. Guerras y
sublevación en Europa.

En 1556 Carlos I abdicó en su hijo Felipe II, quien recibió América, Flandes, Italia, Castilla y Aragón,
otorgando a su hermano Fernando Austria y la candidatura imperial. Felipe II consolidó la hegemonía
europea de la Monarquía Hispánica.

También heredó sus rivales: Francia y el Imperio Otomano, a los que venció. La derrota de Francia en la
batalla de San Quintín en 1557 y la paz de Cateau-Cambresis (1559), mantuvo la hegemonía española
sobre Francia un siglo más, mientras que la batalla de Lepanto (1571) arrebató al Imperio Otomano el
control del Mediterráneo. Pero también tuvo nuevos rivales. En Flandes las provincias protestantes del
norte se sublevaron y protagonizaron continuos problemas, apoyados por Inglaterra, contra quien Felipe II
mandó la Armada Invencible, que fracasó (1588).

En política interior, Felipe II construyó una compleja maquinaria de administración y gobierno, la más
sofisticada de Europa para gobernar eficazmente su imperio. Estableció en Madrid su capital (1561), y
respetó la autonomía del régimen polisinodial de sus reinos, pero con un límite: el poder absoluto del
soberano. Potenció la figura del virrey y se apoyó en tres tipos de Consejos (el de Estado, los territoriales
(Castilla, Indias, etc.) y temáticos (Hacienda, Inquisición, etc.). Un imperio que en 1581 se amplió cuando
Felipe II hizo valer sus derechos dinásticos para heredar por la fuerza la Corona de Portugal y sus
posesiones en América, África y Asia.

Tampoco se libró de problemas en el interior, ya que se enfrentó a dos rebeliones: la de los moriscos en las
Alpujarras (1568-1570) ante la presión contra sus costumbres musulmanas, y la de Aragón (1590-1592),
debido a su papel secundario frente a Castilla en la Monarquía Hispánica de Felipe II.

15
Epígrafes Bloques 1 a 4 de Historia de España. Borja Carballo Barral
3.5. Exploración y colonización de América. Consecuencias en España, Europa y América.

La exploración y conquista americana del siglo XVI por parte de la Corona española, más centrada en sus
posesiones europeas, se realizó al menor coste posible: a través de capitulaciones, acuerdos privados de la
Corona con exploradores y aventureros que se costeaban los viajes a cambio de la promesa real de
obtener beneficios futuros de sus conquistas. Destacaron las expediciones españolas de Núñez de Balboa
(1513), que descubre el Pacífico, y la primera circunnavegación de la Tierra realizada por Magallanes y
Elcano (1519-1522). Entre las conquistas, sobresalieron la de Hernán Cortes en México sobre el Imperio
azteca (1535), y la de Pizarro en Perú contra el Imperio inca (1542). La diferencia tecnológica, la división
tribal y el terror psicológico de los indígenas hacia los recién llegados facilitaron su rápida conquista.

Las consecuencias fueron gigantescas:

En América, el repartimiento, la encomienda y la mita convirtieron a los indígenas en esclavos de los


colonizadores a pesar de la legislación y de la oposición de figuras como Fray Bartolomé de las Casas. Este
trabajo forzoso, unido a las enfermedades europeas, provocó una catástrofe demográfica entre la
población indígena, que además sufrió la aculturación del catolicismo, el castellano y el mestizaje.

La Monarquía Hispánica se benefició del intercambio comercial dominado por la Casa de Contratación de
Sevilla (1503). Se importaron nuevos productos (patata, cacao, tabaco) y se exportaba ganado y la trilogía
mediterránea. Además, se trajeron grandes cantidades de oro y plata con las que se mantuvo la
hegemonía europea.

A nivel europeo, el poder económico basculó del Mediterráneo al Atlántico, la llegada de metales
preciosos provocó una enorme inflación conocida como la revolución de los precios, y la fácil expansión
europea por América hizo surgir una marcada mentalidad colonialista.

16
Epígrafes Bloques 1 a 4 de Historia de España. Borja Carballo Barral
3.6. Los Austrias del siglo XVII: el gobierno de validos. La crisis de 1640.

El siglo XVII, el de los llamados “Austrias menores” por su presunta ineficacia política, fue una época de
decadencia. Delegaron el gobierno en sus validos, personas de su máxima confianza que, en la práctica,
dirigían el reino.

El valido de Felipe III, el duque de Lerma, realizó una política pacifista, la Pax Hispánica, al sellar tratados
de paz con Francia (1598), Inglaterra (1604) y Flandes (1609). En el interior, decretó la expulsión de los
moriscos en 1609 por miedo a que pudieran apoyar a los turcos, con nefastas consecuencias económicas.

El valido de Felipe IV, el conde duque de Olivares, defendió la hegemonía española con la movilización de
sus recursos y una política exterior agresiva (Guerra de los Treinta Años). Así, Olivares inició una
centralización política y estableció la Unión de Armas en 1626, por la que los territorios españoles debían
contribuir en dinero y hombres a su defensa en proporción a su población y riqueza. Este modelo provocó
una grave crisis territorial en 1640: las rebeliones de Cataluña y Portugal.

El reclutamiento forzoso contra Francia provocó la revuelta catalana dels segadors que proclamó la
república por parte del obispo de Seo de Urgell. El conflicto no se resolvió hasta 1652, cuando Felipe IV
juró los fueros catalanes. En Portugal, el rechazo a la dependencia portuguesa de Castilla hizo que sus
Cortes proclamaran rey a Juan IV. Apoyada Portugal por Francia e Inglaterra, España acabó reconociendo
su independencia en 1668.

Por último, el reinado de Carlos II fue muy inestable debido a los distintos validos y a la ausencia de
descendencia que hubo.

17
Epígrafes Bloques 1 a 4 de Historia de España. Borja Carballo Barral
3.7. La guerra de los Treinta Años y la pérdida de la hegemonía española en Europa.

La política pacifista de Felipe III y su valido, el Duque de Lerma, llamada Pax Hispánica, iniciada a principios
del siglo XVII quedó rota con el estallido de la Guerra de los Treinta Años (1618-1648). Lo que en origen
era una guerra de religión entre príncipes alemanes protestantes y católicos, derivó en una guerra europea
en la que participaron todas las potencias de la época como pretexto para ampliar su poder.

Felipe IV y su valido el conde duque de Olivares, apoyaron al bando católico, liderado por el emperador
Fernando II Habsburgo. Mientras, otras potencias como Francia, Suecia, Dinamarca o los rebeldes de
Flandes se aliaron a los protestantes y calvinistas alemanes. La Guerra terminó en 1648 con la Paz de
Westfalia, que certificó la libertad religiosa en el Imperio, el traspaso de la hegemonía europea de los
Habsburgo austriacos y españoles a los Borbones de Francia, y la independencia de las Provincias Unidas
(Holanda) de España. Sin embargo Francia y España siguieron en guerra hasta la Paz de los Pirineos (1659),
por la que España perdió el Rosellón y la Cerdaña (en el Pirineo catalán), varias plazas en Flandes y dio en
matrimonio a una infanta española con el rey Luis XIV (vínculo que haría posible la posterior subida al
trono de Felipe de Anjou al trono español en la Guerra de Sucesión Española).

La crisis interior de 1640 en Cataluña y Portugal, unido a las crisis demográfica y económica que afectó a
España a lo largo del siglo XVII, ayudaron a esta pérdida de hegemonía. Además, la falta de descendencia
del rey Carlos II en el último tercio del siglo XVII hizo que el acoso francés no cesara hasta lograr el trono
con Felipe de Anjou (el último párrafo no os debe costar mucho, es citar lo que sabéis de otros epígrafes).

18
Epígrafes Bloques 1 a 4 de Historia de España. Borja Carballo Barral
3.8. Principales factores de la crisis demográfica y económica del siglo XVII y sus consecuencias.

El siglo XVII fue un siglo marcado por la doble crisis demográfica y económica que tanto afectó a España.

La crisis demográfica provino de la suma de varios factores: las guerras en las que España participó
diezmaron su población (guerra de los Treinta años); la expulsión de los moriscos en 1609 (antiguos
musulmanes conversos al cristianismo en 1492 pero que seguían manteniendo sus creencias musulmanas),
redujo la población y la producción agrícola del Levante. Por ello, fueron frecuentes las crisis de
subsistencias y la emigración a América para escapar de hambrunas, malas cosechas y epidemias (peste,
gripe y viruela).

Esta situación demográfica se agravó con la crisis económica secular. La causa principal era la precariedad
de la Hacienda real, la cual estaba en bancarrota como consecuencia de los elevados gastos militares en
guerras como la de los Treinta Años, del descenso en la cantidad de metales preciosos que llegan de
América, por la falta de competitividad de la producción artesanal española frente a los productos
extranjeros (especialmente el sector textil castellano); por la reducción de la producción agrícola y la
fuerte inflación (moneda de vellón).

Las consecuencias de esta crisis fueron muy importantes. Los campesinos vieron empeorado su nivel de
vida. A su vez, la monarquía de los Austrias se endeudó con los banqueros europeos, lo que complicó su
recuperación económica. Esta falta de recursos impidió el mantenimiento de la hegemonía europea de la
monarquía hispánica a lo largo del siglo XVII. La complicada situación financiera dio lugar a la reforma
monetaria de 1680, que propició la estabilización del sistema monetario a largo plazo.

19
Epígrafes Bloques 1 a 4 de Historia de España. Borja Carballo Barral
3.9. Crisis y decadencia de la Monarquía Hispánica: el reinado de Carlos II y el problema sucesorio.

Al morir Felipe IV en 1665, el heredero Carlos II, tenía 4 años. Por ello, gobernó su madre, Mariana de
Austria, como regente hasta que fue mayor de edad. La reina depositó su confianza en su confesor
Nithard, que actuó como un valido. Ya con Carlos II como rey, la delegación del poder siguió en manos de
validos como el duque de Medinaceli o Juan José de Austria.

La Corte era un hervidero de intrigas por la debilidad enfermiza de Carlos II, apodado el “Hechizado”. A
esta inestabilidad se le unía la crisis demográfica y económica que afectaba a España en el siglo XVII. Por
ello, durante su reinado fueron frecuentes los motines y las sublevaciones, tales como El motín de los
gatos de 1699, en Madrid. En política exterior, la debilidad española hizo que reconociera la
independencia de Portugal en 1668, y que perdiera distintos territorios europeos a favor de la Francia de
Luis XIV.

A medida que el reinado de Carlos II avanzó sin tener descendencia, el clima de creciente inestabilidad
política se agudizó hasta conformar el denominado problema sucesorio. Se perfilaron dos posibles
candidatos: El archiduque Carlos de Austria, de la Casa de Habsburgo; y Felipe de Anjou, de la Casa de
Borbón y nieto del rey francés Luis XIV.

Carlos II, antes de su fallecimiento nombró como heredero a Felipe de Anjou para asegurar a la monarquía
española el apoyo de Francia (hegemónico en Europa) y evitar así su desmembración territorial. Sin
embargo, el temor de algunas naciones europeas (como Inglaterra y Austria) a la formación de un
imponente bloque hispano-francés provocó, tras la muerte de Carlos II, la Guerra de Sucesión española.

20
Epígrafes Bloques 1 a 4 de Historia de España. Borja Carballo Barral
BLOQUE 4. España en la órbita francesa: el reformismo de los primeros Borbones (1700-1788).

4.1. La Guerra de Sucesión Española y el sistema de Utrecht. Los pactos de familia.

La muerte en 1701 sin descendencia de Carlos II Habsburgo provocó la denominada Guerra de Sucesión
(1701-1714), entre Felipe de Anjou, elegido heredero, y Carlos de Austria. Esta guerra fue tanto un
conflicto europeo como civil.

Ambos tenían grandes apoyos internacionales. Felipe de Anjou, Borbón, tenía el apoyo de su abuelo Luis
XIV de Francia. Mientras, Carlos de Austria, contó con una alianza antiborbónica liderada por Austria e
Inglaterra y apoyada por Países Bajos, Prusia o Portugal.

También fue un conflicto civil ya que España se dividió en dos bloques. Los reinos de la Corona de Aragón
se rebelaron contra Felipe de Anjou por temor a su política centralista. En cambio, Castilla permaneció fiel
al pretendiente francés.

La guerra en Europa cambió en 1711, cuando el archiduque Carlos fue elegido emperador de Austria, lo
que hizo que Inglaterra presionase para firmar la paz de Utrecht (1713) y Rastadt (1714). Los acuerdos
fueron de tres tipos: 1) políticos: Felipe V era reconocido rey español pero se prohibía que lo fuera también
de Francia. 2) económicos: se acabó el monopolio comercial español con América al conceder a Inglaterra
ciertos privilegios comerciales (como el navío de permiso y el asiento de negros) 3) territoriales: España
perdió todos sus territorios europeos, Gibraltar y Menorca.

Surgió así el Sistema de Utrecht, que situó a Inglaterra como primera potencia europea mientras
equilibraba el poder de Austria y Francia en el continente. En este contexto, los Borbones de Francia y
España firmaron los Pactos de Familia contra Inglaterra. Fueron tres y lograron recuperar para España
algunas de las posesiones perdidas de Nápoles y Sicilia (Primer Pacto de Familia); Parma (Segundo Pacto de
Familia) y Florida y Menorca (Tercer Pacto de Familia).

21
Epígrafes Bloques 1 a 4 de Historia de España. Borja Carballo Barral
4.2. La nueva Monarquía Borbónica. Los Decretos de Nueva Planta. Modelo de Estado y alcance de las
reformas.

La victoria de Felipe de Anjou en la Guerra de Sucesión provocó la llegada de los Borbones a España,
quienes renunciaron a la hegemonía europea a cambio de fortalecer el absolutismo real y el progreso
económico.

En el interior, Felipe V implantó los Decretos de Nueva Planta (1707-1713, durante la Guerra de Sucesión),
que suprimieron el autogobierno de la corona de Aragón por apoyar al candidato austriaco. Se abolieron
sus fueros y se desmantelaron sus instituciones. En su lugar, se aplicaron las instituciones castellanas y el
castellano se hizo de uso obligatorio en la administración. Solo vascos y navarros mantuvieron sus
privilegios históricos como premio a su fidelidad.

En lo económico, se creó la Secretaría de Hacienda (1754) y se instauró un nuevo modelo hacendístico en


Aragón: cada territorio pagaba una cantidad fija repartida entre sus habitantes. El Marqués de la Ensenada
realizó el primer Catastro español para registrar los bienes de la población para que cada uno pagara
impuestos en función de sus posesiones. Sin embargo, los grupos privilegiados tumbaron esa medida,
dejando incompleto el saneamiento de la Hacienda.

El modelo de estado borbónico imitó el absolutismo francés. Se inicia la centralización del poder de la
Monarquía Hispánica en torno al rey. Además, se crearon nuevas instituciones para mejorar la
administración política, económica y militar (CSI, por si os sirve para no olvidarlas). Así, se crearon las
capitanías generales como autoridad militar, las secretarías de Estado (origen de los actuales ministerios),
y los intendentes, encargados de dinamizar la economía de las distintas regiones de la Corona. Los
Borbones también fundaron las Reales Academias de Arte y Ciencias.

22
Epígrafes Bloques 1 a 4 de Historia de España. Borja Carballo Barral
4.3. La España del S. XVIII. Expansión y transformaciones económicas: agricultura, industria y comercio
con América. Causas del despegue económico de Cataluña (Fijaos en el título del epígrafe y en el formato
de la respuesta: párrafo introductorio en el que se especifica conceptos clave (recuperación, Ilustración y
modernización) para seguir en orden con lo puesto en el título: agricultura, industria, comercio y Cataluña)

El siglo XVIII fue el de la recuperación económica española. Los borbones trajeron el espíritu
reformista ilustrado, iniciando un proceso modernizador que afectaría a la agricultura, la industria y el
comercio con América.
En la agricultura, principal ocupación de los españoles, intentaron mejorar su competitividad y
producción. Destacó la figura política de Jovellanos, quien en su Ley Agraria de 1794 (que no llegó a
aprobarse) propuso derogar la vinculación de la tierra (para que cualquier tierra pudiera comprarse o
venderse libremente en vez de estar sujeta a una institución o herencia), mejorar la preparación técnica
del campesinado e invertir en obras públicas.
En la industria, se potenció la producción nacional para que fuera competitiva y abasteciera a los
dominios españoles. Brilló Campomanes, que apostó por una política proteccionista, por la fundación de
las Reales Fábricas (Tapices, Tabaco, etc.) y la liberalización de los gremios.
Respecto al comercio con América, se buscó que las colonias exportaran a la metrópoli sus
materias primas (tabaco, café y azúcar) y que importasen productos industriales españoles. Para ello, se
liberalizó el comercio con las colonias americanas y se luchó contra la piratería y el contrabando.
En este contexto modernizador destacó el despegue económico de Cataluña, que se convirtió en la
zona más dinámica de España. Las razones fueron variadas. El régimen enfitéutico (palabra compleja, si la
usáis ganareis puntos, pero si no, señalar sólo que el campesinado catalán administraba las tierras que
trabajaba por una renta muy baja) del campo catalán, por el cual el campesinado era propietario de hecho
de la tierra que trabajaba a cambio de una renta fija, hizo que se orientase su producción al mercado
nacional, que acumulase capital y que fuese invertido en sectores como el textil o el vino. Surgió así la
potente burguesía catalana que abordaría con éxito la revolución industrial del siglo siguiente.

23
Epígrafes Bloques 1 a 4 de Historia de España. Borja Carballo Barral
4.4. Ideas fundamentales de la Ilustración. El despotismo ilustrado: Carlos III.

La Ilustración fue un movimiento ideológico que se extendió por Europa en el siglo XVIII
(denominado por ello “siglo de las luces”), y que defendía la búsqueda de la felicidad de los individuos por
medio del uso de la razón, el espíritu crítico y la ciencia. Su principal foco estuvo en Francia, desde donde
figuras como Rousseau (soberanía nacional), Voltaire (defensor de la burguesía) o Montesquieu (división
de poderes) cuestionaron el Antiguo Régimen. Algunas de sus ideas fueron llevadas a la práctica por el
denominado despotismo ilustrado, cuya máxima era “todo para el pueblo pero sin el pueblo”. Era un
fenómeno que partía del absolutismo y que se caracterizaba por ser de carácter reformista y minoritario,
es decir, aspiraba a mejorar la vida de las personas pero sin quebrar el orden estamental y sólo estaba
apoyado por una reducida élite de políticos, funcionarios e intelectuales.

En España, Carlos III fue uno de los reyes europeos que mejor encarnó el despotismo ilustrado. Y lo
hizo apoyándose en figuras políticas como Campomanes, Floridablanca, Jovellanos o Esquilache. Las
iniciativas ilustradas auspiciadas por Carlos III para reformar y modernizar la economía, la cultura y la
ciencia españolas, pasaron por la mejora de las condiciones de vida de las capas populares (aunque
provocasen disturbios como el Motín de Esquilache de 1766), la fundación de las Reales Academias (como
la de Historia o Lengua) y las Reales Fábricas (Tabaco o Tapices), la potenciación del desarrollo científico
nacional (apoyando el Observatorio Nacional o el Jardín Botánico), o la apuesta por el regalismo ilustrado
(basado en el control regio de las autoridades eclesiásticas y que desembocó en la expulsión de España de
los jesuitas en 1867).

24
Epígrafes Bloques 1 a 4 de Historia de España. Borja Carballo Barral

También podría gustarte