Ley de Precipitacion

LEY DE PRECIPITACION
Ahora vamos a ver cómo funciona la Ley de la Precipitación, y

vamos a entender por qué es que las cosas se dan o no se dan, y si
no se dan, qué es lo que pueda estar haciendo falta, qué es lo que
pueda estar interviniendo, qué es lo que pueda estar faltando en
nuestra consciencia. Vamos a entender la mecánica de la Ley de
Precipitación.
¡La Ley de Precipitación es la Gran Ley de la Creación actuando por
todo el Universo a cada instante!
Es decir, cuando decimos "Ley de Precipitación” estamos hablando
de la misma Ley que trajo todo este Universo a la manifestación. Es
la Ley que hace brotar a las plantitas, a las flores, a los frutos, que
hace crecer a los cuarzos. Esa misma Ley de la Creación del
Universo es la que hace que todas estas maravillas se manifiesten
en nuestro planeta, en nuestra Tierra. Es la que mueve a toda la
vida elemental, para que traiga estas manifestaciones a esta Tierra.
Todo en este mundo físico vino a la forma física y manifestación
mediante la Actividad de la Ley de Precipitación;
¡Todo! Los cuarzos, la tierra, los árboles, las plantas, los frutos, las
flores, los animales, los seres humanos, los planetas, las estrellas,
las galaxias y todo en el Universo vino a la manifestación a través
de esta misma Ley que nosotros estamos aprendiendo a utilizar.
.. .ya que a cada instante todo está saliendo de la Octava Invisible de
la Vida, se vuelve visible y tangible a nuestros sentidos físicos, sirve
por un rato, finalmente disolviéndose y regresando a la Octava
Invisible de donde vino en primer lugar.
¡Y comprender esto es algo tan importante! Porque nada en la
manifestación física es eterno. La manifestación es temporal, y así
es como funciona la Ley. Desde lo invisible, se manifiesta algo. Eso
que se manifiesta, se mantiene en la manifestación durante algún
tiempo, para prestar un servicio, y después se disuelve y regresa
otra vez a la Octava Invisible de donde vino originalmente.
Si nosotros comprendemos esto, entonces allí está la clave del
desapego. Ahí está la clave del poder tener cosas sin apegarse a
ellas, de poder tener el cuarzo, pero sabiendo que este cuarzo un día
va a terminar de cumplir su propósito en esta Tierra y se va a
inmaterializar, va a volver a la Octava de Luz de donde vino
originalmente. Cuando uno carga un cuarzo con el poder de la
Protección, y lo programa para establecer una protección en
particular, hay un momento adonde se presenta una energía que
intenta hacernos daño y el cuarzo al que nosotros programamos
para protegernos la absorbe, y en el momento en que la absorbe,
estalla, y se hace polvo o se quiebra en varios pedazos. Cuando eso
sucede, el cuarzo cumplió con su Plan Divino de Perfección. Hizo
aquello para lo cual vino a la encarnación. No hay que intentar
reparar el cuarzo o pegarlo, sino devolverlo a la Tierra para que lo
reabsorba y regrese a la Sustancia Universal de donde vino
originalmente. Toda sustancia tiene que regresar algún día.
Nosotros tenemos que saber que sea el tiempo que sea que algo
estuvo con nosotros -un anillo, un auto una casa, lo que sea- algún
día eso no va a estar más. Va a seguir su camino y tenemos que
dejarlo ir, porque cumplió con su propósito. Y además, si en algún
momento la vida nos está sacando algo o está haciendo que se vaya
de nuestro lado, eso también es para que estemos abiertos a recibir
lo nuevo, y a que nuevas cosas puedan venir a nuestra vida para
traernos lo que necesitamos en este momento.
El elemento agua es invisible en la atmósfera de la Tierra...
En el aire, hay agua, hay humedad. Todo equipo de aire
acondicionado extrae la humedad del aire y la concentra en forma
de agua. En toda la atmósfera de la Tierra hay agua.
...luego se concentra como lluvia... Una vez más vuelve a condensarse
aún más y se convierte en nieve o hielo; y después de prestar el servicio
que vino a dar, se disuelve, se evapora y regresa a la Octava Invisible
una vez más. Pero siempre está en el Universo, siempre estuvo y
siempre estará.
Si nosotros lográramos mantener la armonía lo suficiente,
volverían a crecer las plantas y las flores en los desiertos, ya que
no es por falta de agua que no crecen, sino por la falta de la
armonía del ser humano, que es la que hace que los elementales del
agua se vayan de allí.
Cuando mediante sus Llamados a la "Magna Presencia YO SOY", un
individuo atrae el Poder de Precipitación, es la misma Ley actuando;
pero mediante el Llamado a la Presencia, el Cuerpo Mental Superior
descarga más de su Energía de lo que el individuo usualmente atrae.
A medida que ese Poder aumenta, el momentum se acumula hasta el
punto en que la manifestación se da cada vez con mayor velocidad,
hasta que se toma instantánea o casi instantánea.
Tomando el mismo ejemplo del agua, nosotros vemos un cielo
claro, despejado, sin nubes, y sin embargo ese cielo contiene agua.
Cuando la humedad se concentra y se concentra, se empiezan a
formar las nubes... se concentra más y más y se empieza a cubrir el
cielo de nubes... se concentra más y las nubes comienzan a
oscurecerse, no porque cambien su color, sino que la gran
concentración no permite que pase la luz del sol... llega un
momento en que se empieza a producir descargas eléctricas, el
agua se condensa y se precipita en la forma de lluvia.
Igualito, de la misma manera, podemos pensar nosotros en
precipitar cualquier cosa en nuestra vida. Eso que ahora queremos
precipitar, veámoslo en el cielo despejado de nuestra mente. En esa
mente, ese cielo, está la Sustancia Luz Universal en todas partes,
compenetrándolo todo, en abundancia ilimitada. Y esa Sustancia
Luz Universal es como la humedad del aire. A medida que
pensamos y pensamos en esa idea, y empezamos a decretar que se
manifieste, comienzan a producirse condensaciones de Sustancia
Luz Universal, como nubes de Luz en nuestra mente, que se
condensan más y más, hasta cubrir nuestra pantalla mental de
nubes de Sustancia Luz dándole forma en nuestra mente a aquello
que queremos manifestar. Luego, con nuestros sentimientos, a esa
Sustancia Luz Universal que ya está suficientemente condensada
en nuestra mente, empezamos a descargarle el poder del
sentimiento. Entonces se condensa más todavía, más y más...
Después, así como los relámpagos se descargan en las nubes,
comienza a producirse la descarga energética de sustancia vital en
el plano etérico, que puede o bien atraer la sustancia física ya
existente en manifestación o puede también atraer la Sustancia
Luz Universal para materializar la propia sustancia física. Cuando
la condensación en suficientemente fuerte, grande e importante,
se produce finalmente la precipitación física de aquello que
queremos en nuestra vida.
Lo de las nubes es un ejemplo que se acerca bastante al proceso real.
Pero si uno quiere precipitar un auto, éste no se va a condensar de
la sustancia Luz Universal en el cielo y nos va a caer en la cabeza.
Eso no va a suceder de esa manera porque si es un auto lo que uno
necesita, los canales ya han sido provistos con anticipación para
precipitar ese auto, que está esperándonos, ya sea en la agencia, o
en la casa de alguien que lo esté vendiendo o regalando. Así es como
se precipita el auto como cualquier otra cosa en nuestra vida, en
nuestras manos y para nuestro uso, como decía el Maestro, a través
de conductos. Podemos recibir el bien o podemos recibir el dinero
para adquirirlo libre de toda deuda o préstamo. No le pongamos
limitaciones a la energía Universal. Ocupémonos de precipitar,
de energizar la idea y concentrar, concentrar, concentrar la
energía, condensar, condensar y condensar la Sustancia Luz
Universal hasta que aquello que queremos se manifieste
físicamente.

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