Litoral (Geografía)
Litoral (Geografía)
Litoral (Geografía)
La rigurosidad de las condiciones ambientales a las que se ven sometidas las comunidades biológicas
litorales, provoca una marcada selección que favorece fenómenos de diferenciación y especiación. Esto
confiere riqueza y originalidad, así como un considerable nivel de endemicidad a estos ambientes. Todo
ello también repercute en su fragilidad. Por lo general, las comunidades biológicas litorales se disponen de
manera zonal en bandas paralelas a la línea de costa.6
Se pueden establecer transectos desde las áreas con menor influencia marina hasta las sumergidas
totalmente en el agua.5
En el mar Mediterráneo, a diferencia del océano Atlántico, no se producen mareas vivas, esto trae consigo
la ausencia de tramos de costa baja con grandes zonas de inundación por mareas.
Índice
Fondos marinos litorales
Acantilados
Playas, arenales y sistemas dunares
Véase también
Referencias
Bibliografía
Es un ámbito particularmente rico en recursos biológicos, favorecido por los aportes de sedimentos
procedentes de las cuencas hidrográficas y de afloramientos de los fondos. Esto provoca una mayor
disponibilidad de nutrientes, como fosfatos y nitratos que son los principales factores limitantes de la
producción primaria.7
Fondos rocosos
Fondos arenosos
Las comunidades de más alto valor ecológico son las praderas de posidonia
(fanerógamas marinas). La capacidad de fijación del sustrato de las posidonias origina
praderas estables que ofrecen hábitat, alimento, refugio y lugares de cría a numerosas
especies.
Las praderas son particularmente sensibles a impactos que originen su arranque y su
enterramiento así como a la contaminación y a la introducción de especies y a las plagas.
Acantilados
Se entiende por acantilados, los paredones que caen más o menos verticales sobre el mar. Su génesis está
supeditada a presencia de relieves en la orilla marina y su evolución está determinada por el oleaje. Es un
tipo de costa rocosa muy abundante en el litoral atlántico y gallego, así como en tramos de la costa
mediterránea levantina y en las islas Baleares.
El perfil y evolución de los acantilados va a depender de la disposición que presentan los materiales frente a
la línea de costa y a las características de los mismos (las arenas compactadas también dan origen a
acantilados). Por su posición respecto a la línea de costa y por cómo se ven afectados por la dinámica
marina litoral, se distinguen, de manera general, dos tipos de acantilados:
Acantilados activos
Acantilados inactivos
Vista hacia el sur desde Punta Guanaco.
Son acantilados sobre plataformas arenosas, se sitúan fuera del Se observan los acantilados activos.
alcance del oleaje y están retirados respecto a la línea de costa.
Los acantilados son en sí mismos ambientes poco acogedores
para la vegetación, que solo puede desarrollarse en pequeñas grietas y rellanos. Además, la vegetación de
acantilado muestra un grado alto de especialización, al estar sometida a condiciones ambientales rigurosas:
exposición al viento, salinidad, escaso desarrollo edáfico y escasa disponibilidad hídrica.
La vegetación ofrece una distribución más de la zona. En la zona de impacto del oleaje tan solo viven
algunos líquenes especializados, por encima se desarrolla una Vegetación halófila que va variando su
disposición según su grado de tolerancia a la salinidad. Su importancia e interés para la conservación radica
en la presencia de numerosos endemismos, muchos de ellos a nivel local.
En cuanto a la fauna, los acantilados son colonizados por numerosas aves marinas, ya que ofrecen lugares
de nidificación y posadero.
Los acantilados, como medio terrestre abrupto que se introduce en el mar, junto con su papel como mirador
u observatorio, son uno de los puntos de mayor atracción visual y paisajística del litoral.
La urbanización puede repercutir en la conservación de las comunidades vegetales y de las colonias de aves
marinas, además de producir un considerable impacto paisajístico. La construcción de infraestructuras
portuarias incide sobre la dinámica litoral de acantilado: acelerando su erosión o desactivando sus procesos
de erosivos.
Las playas suelen presentar una zona vegetal muy definida en bandas paralelas a la línea de costa, en
función de dos factores determinantes: proximidad al mar y movilidad del sustrato.
Además, las comunidades vegetales deben adaptarse las duras condiciones de los sustratos arenosos, que en
los primeros niveles de colonización se caracteriza por bajos niveles de materia orgánica y escasa
disponibilidad hídrica. Generalmente, las playas están repaldadas por arenales y cordones dunares, su
origen se debe a la erosión que ejerce el viento sobre las zonas supra e intermareales. El avance de la duna
tierra adentro se caracteriza por la creciente degradación de su morfología y la creación de mantos arenosos
o eólicos que pueden extenderse varios kilómetros. Las dunas costeras son una de las formaciones naturales
que mejor representa el dinamismo y fragilidad de este tipo de medios. En ellas, se da una estrecha
interrelación entre arena, viento y vegetación. Tienen una importante función de protección y conservación
de los frentes costeros.8
Dunas embrionarias, vivas o móviles. Son dunas jóvenes, están en movimiento, avanzando
generalmente tierra adentro. Su cubierta vegetal es escasa.
Dunas fijas. Están colonizadas por la vegetación, lo cual frena el movimiento de la arena.
Dunas fósiles. Dunas antiguas, con arenas consolidadas y fosilizadas por una formación
superior.
En las dunas embrionarias y playas se desarrolla una vegetación pionera específica, de carácter psammófilo,
capaz de ir reteniendo y fijando parcialmente la arena. Según un gradiente de bandas paralelas a la línea de
costa, se van situando otras formaciones vegetales arbustivas y arbóreas (destacan los bosquetes de enebros
y sabinas costeros).
Véase también
Geografía litoral
Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente
Referencias
1. Middleton, B. A. (ed.) 2002. Flood Pulsing in Wetlands: Restoring the Natural Hydrological
Balance. John Wiley, Nueva York.
2. Keddy, P. A. (2010). Wetland Ecology: Principles and Conservation (2.ª edición). Cambridge
University Press, Cambridge, RU. 497. Capítulo 2.
3. Wilcox, D. A., Thompson, T. A., Booth, R. K.; Nicholas, J. R. (2007). Lake-level variability and
water availability in the Great Lakes. USGS Circular 1311. 25 p.
4. Hughes, F. M. R. (ed.) 2003. The Flooded Forest: Guidance for policy makers and river
managers in Europe on the restoration of floodplain forests. FLOBAR2, Department of
Geography, University of Cambridge, Cambridge, RU. 96 p.
5. Keddy, P. A. (2010). Wetland Ecology: Principles and Conservation (2ª edición). Cambridge
University Press, Cambridge, RU.
6. Houlahan, J. E.; Keddy, P. A.; Makkay, K.; Findlay, C. S. (2006). «The effects of adjacent land
use on wetland species richness and community composition». Wetlands 26 (1): 79-96.
doi:10.1672/0277-5212(2006)26[79:TEOALU]2.0.CO;2 (https://dx.doi.org/10.1672%2F0277-5212%282006%292
6%5B79%3ATEOALU%5D2.0.CO%3B2).
7. Yip y Madl
8. «Fisheries lake surveys» (http://www.dnr.state.mn.us/lakefind/surveys.html#littoral) (en
inglés). Consultado el 17 de marzo de 2006.
9. Keddy, P. A. (2010). Wetland Ecology: Principles and Conservation (2.ª edición). Cambridge
University Press, Cambridge, RU. Capítulo 2.
Bibliografía
Yip, Maricela & Madl, Pierre (1999) Littoral
(http://biophysics.sbg.ac.at/rovigno/rovigno3.htm). University of Salzburg.
Obtenido de «https://es.wikipedia.org/w/index.php?title=Litoral_(geografía)&oldid=140118774»
Esta página se editó por última vez el 3 dic 2021 a las 14:34.
El texto está disponible bajo la Licencia Creative Commons Atribución Compartir Igual 3.0;
pueden aplicarse
cláusulas adicionales. Al usar este sitio, usted acepta nuestros términos de uso y nuestra política de privacidad.
Wikipedia® es una marca registrada de la Fundación Wikimedia, Inc., una organización sin ánimo de lucro.