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La Columna de Najdorf - Diario Clarín Tomo 2 - 1979

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POR QUÉ GANARON LAS OLIMPIADAS

El secreto de Hungría
Clarín, Buenos Aires, Sábado 13 de enero de 1979 Tomo Nº 2 Columna Nº 1

No dudo que la Unión Soviética sigue y naturalmente, recogimos experiencias


siendo la gran fuerza en ajedrez pero, valiosas. Por ello sé que aun teniendo un
oficialmente, ha sido desplazada del pri- primer y segundo tablero fuertes, acaso
mer lugar por Hungría, actual reina en no alcancen para triunfar en los juegos.
el mundo. Hasta aquí no ha llegado aún Suecia tuvo a Andersson, Holanda
la repercusión que produjo en el país a Timman, Inglaterra a Miles y no les
este hecho. Sin embargo, sé que después bastó, sencillamente porque no tuvieron
de un episodio semejante, los soviéticos abajo, tableros de parecida jerarquía.
se movilizan para reparar errores. Deben ser cuatro jugadores de fuerza
A propósito, recuerdo que luego de más o menos pareja. Los húngaros mos-
la derrota de Spassky ante Fischer, la Fe- traron a un Lajos Portisch con su apti-
deración Soviética se abocó a una rees- tud conocida. Entre pares, supo cumplir
tructuración general de sus reglamentos con regularidad. Pero detrás suyo esta-
para evitar que los maestros descuida- ban Ribli, Sax, Adorjan y Csom, que su-
ran su preparación y a través de la mis- pieron estar a su mismo nivel y aporta-
ma, se los obligó a participar en torneos ron los puntos de la victoria. De aquí en
donde antes actuaban voluntariamente. más, habrá que emularlos para luchar
Ahora mismo se anuncia un gran con aspiraciones. Se debe aprovechar el
torneo en Munich. Es realmente impre- momento porque en la Unión Soviética,
sionante su lista de competidores. Ahí salvo sus principales figuras, muchas de
estarán Karpov, Spassky, Tahl, Potrosian ellas algo saturadas de ajedrez, no surgen
y Balashov junto a Andersson, Miles, valores similares. Karpov aparte, los que
Hubner, Kavalek, Portisch y otros. La asoman como Vaganian, Romanishin,
cantidad de soviéticos me hizo pensar. Dorffman, y otros, no ofrecen la misma
Tal vez, como en aquella oportunidad, garantía. Por eso están preocupados.
se los quiere mantener en actividad o En nuestro país ocurre lo mismo. Te-
quizá se intenta echar un manto de olvi- nemos un Panno indiscutible, lo mismo
do a aquel traspié, mediante resonantes que un Sanguineti o un Quinteros, pero
triunfos. Tanto mejor para el ajedrez y se necesitan otros que alcancen su nivel.
muchas gracias a los húngaros. Hay jóvenes talentosos y confío que en
Con Gligoric, somos los maestros la próxima olimpíada, será otro el papel
que más han actuado en las olimpíadas de la Argentina.
-1-
Estuve varias veces en Hungría y sé de Ribli para refutar dicho intento.
cómo estudian y se preparan. Son pro- 8.Te1! …
fesionales con muchas inquietudes. En Una jugada de concepto que amena-
nota anterior di un ejemplo sobre esto za e4 con más fuerza pues si C5f6, se-
en la partida de Andras Adorjan con guiría Cc3 y las blancas dispondrían de
Miles. Hoy acompaño esta nota con otro un fuerte centro. Es evidente que el gran
juego brillante do Zoltan Ribli contra el maestro húngaro domina la variante “al
ex niño prodigio Arturo Pomar, en las dedillo”.
olimpíadas. 8. … Ab4
Felicitaciones a Hungría. Repitió su 9. Ag5! ….
éxito de la Olimpíada de La Haya en Enérgica jugada que obliga la res-
1928. Han pasado 50 años y hoy dan se- puesta; posiblemente, la clave del estu-
ñales de estabilizar una calidad llamada dio. Sorprende a Pomar quien advierte
a convertirlos en la “sombra negra” de que no puede 9..., f6; 10.Ad2 y la es-
los soviéticos. tructura de sus peones es mala. Si 9...,
C7f6; 10.Axf6, Dxf6; (No 10..., Cxf6;
Blancas: Ribli, Zoltan (2585) por 11.Da4+, ganando); 11.Da4+, c6;
Negras: Pomar, Arturo (2430) 12.Cbd2 y el blanco tiene espléndido
Olimpiada, Buenos Aires, 1978 desarrollo,
9. … Ae7
1.Cf3 Cf6 10. e4! …
2. g3 d5 Sigue el estudio. Su fineza está en que
3. Ag2 e6 por tratar de escapar a un juego posicio-
4. 0–0 Cbd7 nalmente inferior. Pomar cae en otra lí-
5. d4 b6 nea más peligrosa. En casos semejantes
6. c4 Ab7 hay que optar por el mal menor.
7. cxd5 Cxd5 10. … Axg5
Lo clásico suele ser 7. ..., exd5; aun- 11. exd5 Axd5
que luego de Cc3, las blancas entran en 12. Cxg5 Axg2
un esquema parecido al que surge de las Curiosamente única. Si 12..., Dxg5;
defensas Tartakower o Tarrasch, donde 13.h4, Df5; 14.g4 y se pierde el Alfil.
las blancas tienen mejor posición. Tal 13. Cxe6 fxe6
vez, Pomar quiso salir de líneas conoci- 14. Rxg2 ....
das y había preparado esta movida, que Pienso que hasta aquí llegó la prepa-
parece lógica pues tiende a mantener la ración de Ribli. ¿Cómo se gana una par-
acción de su AD y no deja peones débi- tida superior? El joven húngaro muestra
les. Es muy interesante el procedimiento su ductilidad; aparte de la teoría revela
-2-
magnifica técnica para aprovechar las debilitadas casillas blancas.
ventajas que ofrece la posición. 21. … Tde8
22. Cc6+ Rb7
Todo obligado. El rey está en una
“red” de mate y no tiene refugio.
23. Df3 ….
Se amenaza ganar la dama con Cd8+,
o, Ce5+.
23. … Rc8
24. Ce5! Abandonan
Una partida sencilla y bonita. Me
llamó la atención por la precisión de su
mecanismo y él criterio para transfor-
14. … Df6 marla en una “joyita”.
15. Dg4 0–0–0
Si 15..., O-O; 16.Dxe6+ y final con
peones a favor. Ahora ya no se puede
16.Dxe6, por Dxd4.
16. Txe6 Df7
17. Cc3 …
Sale el caballo, completando el desa-
rrollo, para colaborar en el remate.
17. … Thf8
18. De2 …
Un “cambio de frente” mirando ha-
cia el debilitado enroque. Al rey le falta
la protección de un alfil en b7.
18. … Rb8
19. Te1 h5
La presión es tal que las negras no
tienen movida satisfactoria.
20. Cd5 Cf6
21. Cb4 …
Desde luego, la partida está gana-
da, pero Ribli quiere darle su toque de
brillantez, como los románticos. Es ins-
tructiva la armonía de su trabajo por las
-3-

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