Los beneficios de la unidad

January 1, 2017

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Eclesiastés 4:9-12 bien dice: «Es mejor ser dos que uno, porque
ambos pueden ayudarse mutuamente a lograr el éxito. Si uno
cae, el otro puede darle la mano y ayudarle; pero el que cae y
está solo, ese sí que está en problemas. […] Alguien que está
solo, puede ser atacado y vencido, pero si son dos, se ponen de
espalda con espalda y vencen; mejor todavía si son tres, porque
una cuerda triple no se corta fácilmente» (NTV).

El evangelismo masivo —practicado en el poder del Espíritu

Santo y basado en la Palabra de Dios— ayuda a los creyentes a
presentar al mundo un frente unido. El escándalo de divisiones
dentro del cristianismo requiere que se realicen festivales
masivos unidos. Digamos al mundo que nos amamos y tenemos
las mismas verdades fundamentales. Cuando se rompen barreras
y se dejan atrás animosidades, los creyentes experimentan como
nunca antes «el amor de Dios que ha sido derramado en
nuestros corazones por el Espíritu Santo» (Romanos 5:5 RV60).

Olvidando las diferencias (Juan 17:21)

Cuando Dios obra a través del evangelismo masivo unido, hay
sanidad espiritual en el Cuerpo de Cristo. Los creyentes
descubren la realidad de las palabras de Jesús: «Te pido que
todos sean uno, así como tú y yo somos uno, es decir, como tú
estás en mí, Padre, y yo estoy en ti. Y que ellos estén en
nosotros, para que el mundo crea que tú me enviaste» (Juan
17:21 NTV).

El deseo más íntimo de nuestro Señor Jesucristo es que todos

los suyos nos amemos, vivamos en unidad y no permitamos que
nada nos divida ni nos separe. Dios hizo todo lo que tenía que
hacer y el resultado es que somos un solo cuerpo en Cristo pues
estamos unidos por la fe. Somos uno en Jesucristo; somos más
que hermanos; carne de su carne y hueso de sus huesos. Es
hora de practicar esta verdad frente a un mundo muy dividido.

Siendo Hijo de Dios, en su omnisciencia veía los siglos y las

generaciones, y veía divisiones entre los cristianos. Por eso su
clamor fue que seamos uno, tal como el Padre y el Hijo.

Eso no significa que debemos actuar como si las diferencias no

existieran. La gente pensante e inteligente tiene diferencias de
opinión. No estamos de acuerdo absolutamente en todo, pero
somos uno en Cristo, de manera que podemos orar juntos,
ministrar juntos y, sobre todo, proclamar su nombre juntos frente
al mundo. Debe haber unidad, no uniformidad.

Cristo sigue: «[…] para que el mundo crea que tú me enviaste».

La unidad tendrá un efecto profundo en el mundo que nos ve, nos
critica y, a veces, nos aborrece. Esta unidad los convencerá de
que Jesucristo proviene del Padre y vino para salvarnos.

Unidad demostrada (Juan 17:22)

Cristo explica en Juan 17:22: «Les he dado la gloria que tú me
diste, para que sean uno, como nosotros somos uno» (NTV). El
Señor Jesús anhela que su pueblo no solo hable de la unidad
sino que la demuestre. En teoría somos uno, pero el deseo de
nuestro Salvador es que lo demostremos en la práctica. ¡Qué
mejor manera de demostrar la unidad que un Festival
evangelístico!

Además, este versículo es una fuerte advertencia a los que

promueven divisiones en el pueblo de Dios. ¡Qué dolor para
quien causa división y deba enfrentarse cara a cara con el
Maestro!

Unidad que testifica (Juan 17:23)

Ahora una nota muy positiva: «Yo estoy en ellos, y tú estás en mí.
Que gocen de una unidad tan perfecta que el mundo sepa que tú
me enviaste y que los amas tanto como me amas a mí» (Juan
17:23 NTV). El secreto de esa unidad práctica y real entre el
pueblo de Dios es la frase: «Yo estoy en ellos».  El evangelio
para los evangelios es que el Señor Jesús mora en el corazón de
cada uno de sus hijos (Gálatas 2:20). Cuando un cristiano
reconoce que Cristo vive en su corazón, comienza a buscar la
unidad de los verdaderos cristianos. Cuando el pueblo de Dios se
ama y se respeta no es porque estemos en un todo de acuerdo
entre nosotros, sino porque Cristo mora en nuestro ser. La unidad
entre los verdaderos creyentes hará que el mundo preste
atención a las palabras de Jesús.

La presencia de Dios y la bendición de los esfuerzos unidos de

evangelismo pocas veces se experimentan en otras
circunstancias.  La promesa de Dios del Salmo 133 de pronto
cobra vida: «Cuán bueno y cuán delicioso es habitar los
hermanos juntos en armonía […]  allí envía Jehová bendición y
vida eterna» (RV60).

Los festivales masivos unidos dicen al mundo que tenemos una

fe en común que nos une en el amor de Jesucristo y en amor
entre nosotros. «El amor que tengan unos por otros será la
prueba ante el mundo de que son mis discípulos» (Juan 13:35
NTV).

Es hora de olvidar las diferencias; entender la unidad que Dios

nos ha concedido; demostrarla en la práctica; y ganar este mundo
para nuestro Salvador.
Cuando las palabras hieren: autoestima e
impacto psicológico de la forma en que te
comunicas
Campus Mexicali 2 años publicado No hay comentarios

autoestima e impacto psicológico

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Se dice que las palabras pueden llegar a lastimar mucho más que un golpe, pues éste se
puede esquivar, pero, ¿de qué manera se escapa de las palabras hirientes?  

Si esas palabras provienen de un extraño es probable que no generen mayores

repercusiones, más que la de interponer distancia, pero te has preguntado ¿cómo
impacta y qué hacer cuando viene de las personas más cercanas o queridas?  

“En ocasiones no le damos importancia a los comentarios

que nos hieren, justificamos el proceder de la persona para
cuidar la relación que tenemos con ella, y nos olvidamos que
si esa relación tuviera la misma importancia para el otro,
tendría el mismo cuidado hacia nosotros”, explicó la Mtra.
Ivón Guerrero Ceballos, Directora de la Escuela de
Psicología de CETYS Universidad Campus Mexicali. 
 

Bajo la premisa de que ninguna persona tiene más o menos valor que otra, recordó, el
respeto debe ofrecerse en ambos sentidos dentro de una relación interpersonal. 

Sin embargo, algunas personas aceptan recibir menos de lo que dan, o permiten un trato
agresivo atribuyendo esta actitud al carácter y a otros factores, terminando por hacerse
inmunes a esas palabras, y asumiendo que tienen menos valía frente al otro, y que
merecen el trato que reciben.

“Esto es violencia verbal y puede llegar a ser antesala de la

violencia física. Es importante comprender que la violencia
se puede presentar en cualquier estrato social e
independientemente del nivel educativo de las personas y
puede ser ejercida tanto por hombres como por mujeres”,
detalló la experta, 
 

 ¿Te has descubierto pidiendo perdón cuando eres tú la parte ofendida? 

 ¿Necesitas contentar a alguien que se molestó contigo por expresar tu opinión o punto de
vista? 
 ¿Dejas de hacer cosas para evitar una discusión?  

Identificarse con alguna de las situaciones anteriores es señal de que se está sufriendo
violencia verbal, e incluso de que se ha normalizado recibir ese trato. Permanecer en
una relación de este tipo facilita la pérdida de autoestima de la víctima, propicia que el
nivel de violencia aumente, y abre la puerta a otros tipos de agresiones.  

“Si reconocemos que somos víctimas de violencia verbal o

que nosotros ejercemos dicha violencia con quienes nos
rodean, es importante acercarnos a un profesional de la
psicología que pueda apoyarnos con estrategias para
mejorar nuestra autoestima y no permitir ese trato, o bien
que logremos modificar la forma en que nos comunicamos”.
CETYS Universidad ofrece el servicio de atención psicológica gratuita a través del
Centro de Apoyo y Orientación Psicológica (CAOP), en la modalidad a distancia
durante la emergencia sanitaria por COVID-19, en apoyo a las personas que están en
busca de una guía para mejorar sus relaciones con los demás, de cuidar su salud mental
y de resolver situaciones de ansiedad y estrés, entre otras. 

Para solicitar dicha atención, es necesario comunicarse vía telefónica al 686-567-37-00

ext. 1080, o escribir vía mensaje a la página de Facebook CAOP CETYS Mexicali, a
partir del lunes 31 de agosto del 2020. 

 
“Es muy importante que cobremos conciencia del impacto
que nuestras palabras tienen en los demás”, concluyó la
Mtra. Ivón Guerrero.
 

 TEMAS: VOCETYS-2020-08-25
El tema en conjunto de la Biblia es uno de amor y sobre vivir en armonía los
unos con los otros. Lastimar al otro es contrario a este tema subyacente. La
Biblia contiene muchos pasajes que aconsejan en contra de lastimar a otros,
aún cuando hayas sido lastimado. Aún cuando otros te lastimen, Dios puede
transformar una situación mala en algo bueno.

Identificación
La Biblia está llena de indicaciones sobre no lastimar al otro. La Biblia prohíbe
el asesinato (Éxodo 20:13), el adulterio (Éxodo 20:14); el robar (Éxodo 20:15) y
sobre levantar falso testimonio (Éxodo 20:16) como parte de los Diez
Mandamiento. Todas estas acciones lastiman a otras personas, ya sea física o
económicamente. En lugar de eso, la Biblia nos anima a vivir “una vida en
armonía los unos con los otros” (Romanos 12:16), lo cual es opuesto a lastimar
a otros.

Tipos
La Biblia marca la diferencia entre lastimar a otros intencionalmente y hacerlo
involuntariamente. En Números 35:6-33, la Biblia establece ciudades de refugio
donde las personas que lastiman a otros involuntariamente pueden pedir su
protección. Numeros 35:22-25 hace referencia específica a situaciones en las
cuales una persona lastima a otras sin la intención de hacerlo, como lanzar una
piedra o tirar algo accidentalmente y que resulte en la muerte de otra persona.
Una persona que lastima a otra sin quererlo no debe ser tratada de igual
manera que la persona que lastima a otra adrede.

Consideraciones
La Biblia nos dice que no debemos lastimar a otros, aún cuando ellos nos han
lastimado primero. En Romanos 12:17, la Biblia nos dice, “No paguéis a nadie
mal por mal.” En lugar de eso, “Bendecid a los que os persiguen; bendecid, y
no maldigáis” (Romanos 12:14). La Biblia continúa diciendo, “No os venguéis
vosotros mismos, amados míos, sino dejad lugar a la ira de Dios” (Romanos
12:19). Dios es el que va a retribuir a los que te hagan daño.

Advertencia
Hacer que otra persona cometa un pecado es lastimar a Dios. La Biblia habla
duramente en contra de aquellos que hacen tropezar a un niño. Jesús habla
sobre este tema en Mateo 18:5-7, cuando dice “mejor le fuera que se le
colgase al cuello una piedra de molino de asno, y que se le hundiese en lo
profundo del mar” que provocar que un niño cometa un pecado. Luego sigue
diciendo, “ay de aquel hombre por quien viene el tropiezo (cosas que hagan
pecar a una persona)”

Beneficios
Afortunadamente, aún cuando una persona lastima a otra, Dios puede
transformar la situación para conseguir algo bueno. Esto pasó en la Biblia con
la historia de José, cuando sus hermanos lo vendieron para ser un esclavo.
(Ver Génesis 37) Cuando luego de muchos años, José vio a sus hermanos, les
dijo, “Vosotros pensasteis mal contra mí, mas Dios lo encaminó a bien, para
hacer lo que vemos hoy, para mantener a salvo a mucho vidas” (Génesis
50:20)

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¿Qué dice la Biblia sobre pedir

disculpas?
Escrito por: Alicia Bodine

Actualizado en: November 20, 2021

Thomas Northcut/Photodisc/Getty Images

Si bien la Biblia no usa exactamente las palabras “pedir disculpas”, nos enseña
mucho sobre el tema. Puedes aprender todo lo que necesitas saber sobre pedir
disculpas al estudiar las palabras “confesar” y “perdón”. También puedes ver
las situaciones en la Biblia en las que se pidieron disculpas para ver cuáles
fueron los resultados. Además, puedes examinar los pasajes en los que pedir
disculpas no sucedió, y cuáles fueron los resultados en tales caso.

Historia
Existen muchas personas en la Biblia que pidieron disculpas. Jonás fue tragado
por un gran pez porque no quería ir al lugar que Dios lo había enviado. En
Jonás capítulo 2, podemos leer la petición de perdón de Jonás a Dios por su
desobediencia. Como resultado, Dios hizo que el pez lo escupiera en tierra
seca, para que Jonás pudiera tener una segunda oportunidad. Job es otro
ejemplo de personas que pidieron disculpas en la Biblia. Dios permitió que
Satanás perjudicara a Job física y económicamente. En Job capítulo 42,
leemos la disculpa de Job a Dios por hablar sobre cosas que él no entendía.
No fue hasta que él se disculpó que Dios curó a Job y restauró su economía.

Beneficios
El primer beneficio de pedir disculpas es que la persona que está obrando mal
puede recibir el perdón. En Génesis, encontramos a los dos gemelos llamados
Jacob y Esaú. Jacob engaño a Esaú para recibir su primogenitura y luego le
robó la bendición de su padre. Más adelante, en los capítulos 32 y 33, vemos a
Jacob ofreciendo a Esaú una disculpa sincera junto con mucho regalos. Esaú
perdonó a su hermano y no lo mató como había dicho antes. Jacob recibió el
perdón y pudo mantenerse con vida porque se había disculpado. El segundo
beneficio de pedir disculpas es que es contagioso. En Esdras 10:1,
encontramos a Esdras llorando y pidiendo disculpas al Dios por su pecado y el
pecado de las personas. Las personas pasaron por el lugar y vieron a Esdras
pedir disculpas. Esto los conmovió y ellos también comenzaron a llorar delante
del Señor y a pedir disculpas.

Marco de tiempo
Las disculpas deben llevarse a cabo lo antes posible. Si eso no sucede, la
Biblia nos instruye en Efesios 4:26: “Enojaos, pero no pequéis; no se ponga el
sol sobre vuestro enojo”. Ya que el sol se oculta al final del día, podemos inferir
que la Biblia nos dice que nos disculpemos, sin importar lo que nos haya hecho
enojar, antes de ir a la cama en la noche. Las personas nunca deben dejar las
disculpas para el otro día. El marco de tiempo para pedir disculpas es de un
día.

Consecuencias
Las consecuencias de pedir disculpas pueden ser sustanciales. Las relaciones
se restablecen, tales como la de Jacob y Esaú. En Génesis, podemos leer
sobre un niño llamado José y sus once hermanos celosos. Los hermanos de
José lo vendieron para que fuera esclavo. José terminó siendo el oficial de más
alto rango por debajo del Rey. Debido a la sequía, los hermanos de José
fueron con él (sin saber quién era) y le pidieron comida. Al final de la historia,
los hermanos se disculparon por lo que le habían hecho a José y su relación
con él se restableció.

Otra consecuencia de disculparse es que se elimina la situación estresante.

Imagina si tu familia se reúne para la cena de Navidad y dos de sus miembros
están enemistados. La cena de Navidad puede volverse tensa, mientras todos
miden qué decir para que no se arme una nueva pelea. Si los dos familiares
que están peleados se reúnen y se piden disculpas, entonces la cena de
Navidad puede ser divertida y estar llena de risas en lugar de ansiedad.

Consideraciones
Cuando uno sigue las palabras de Dios, uno debe considerar seguir el
mandamiento de perdonar a los demás. Se nos dice en Lucas 11:3-5 que
necesitamos perdonar a los demás para que nosotros también seamos
perdonados. Si no pedimos disculpas y perdonamos a aquellos que nos han
hecho mal, ¿qué nos da el derecho de esperar que otras personas nos pidan
disculpas cuando nos han hecho mal? Si tenemos niños, también debemos
considerar seguir este modelo para que ellos vean cómo nos disculpamos y
también lo aprendan.
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¿Por qué a Abraham se lo llama el Padre

de la Fe?
Escrito por: Leslie Carver

Actualizado en: November 20, 2021

Photos.com/Photos.com/Getty Images

Abraham, cuyo nombre fue originariamente Abram, fue el padre de tres

religiones y un hombre fiel a Dios. Una gran parte del Libro de Génesis está
dedicada a él. Recibía visitas angélicas, persuadió a Dios de salvar la vida de
su sobrino Lot e incluso estaba dispuesto a sacrificar a su hijo por mandato de
Dios. Tenía bien merecido el título de "Padre de la fe".

Se pueden rastrear tres religiones hasta él

El nombre Abraham significa "ancestro de una multitud" y de hecho lo fue. En
Génesis 15:2-5, Dios le prometió al anciano Abraham, que no tenía hijos, que
entonces se llamaba Abram, que no solo tendría un hijo, sino que sus
descendientes serían tan infinitos como las estrellas. En Génesis 16, tuvo un
hijo de nombre Ismael con la sierva de su esposa Sara, Hagar. En Génesis 21,
nació de él y de Sara Isaac. Más tarde, en el mismo capítulo, cuando Sara
quiso deshacerse de Hagar y de Ismael, Dios le prometió a Abraham que de él
"también haría una gran nación". Ismael fue el fundador del Islam, mientras que
Isaac fue el fundador del judaísmo. El cristianismo creció a partir del judaísmo.
Por lo tanto, las tres religiones nacieron a partir de Abraham.

Fue fiel a Dios

En Génesis 22, Dios le ordenó a Abraham que sacrificara a Isaac. Sin
cuestionarlo ni quejarse, Abraham lo llevó al lugar que Dios le indicó, juntó la
madera, tomó a Isaac y lo colocó en el altar. Tenía un cuchillo en su mano,
preparado para matarlo, cuando la voz de un ángel clamó desde el cielo y le
ordenó que se detuviera. La voz continuó diciendo: "Ahora sé que temes a
Dios, ya que no has retenido a tu hijo, tu único hijo, de mí". A esas alturas, vio a
un carnero con sus cuernos enredados en un matorral cercano, y lo usó para el
sacrificio.

Dios lo escuchó
La Biblia está llena de ejemplos de personas que escucharon a Dios, pero
Abraham fue una de las pocas personas a quien escuchó Dios. En Génesis 18:
16-33, Dios decidió compartir con Abraham su decisión de destruir las malignas
ciudades de Sodoma y Gomorra. Puesto que su sobrino Lot y su familia vivían
en Sodoma, Abraham habló con Dios para que salvara a Sodoma si se
encontraban solo 10 personas justas allí.

Recibió a ángeles
En Génesis 18:1-6, aparecieron tres hombres en la tienda de Abraham. Hizo
que Sara les cocinara, insistió en que se quedaran y descansaran un rato y les
demostró toda la hospitalidad posible. Esto fue antes del nacimiento de Isaac y
uno de ellos le dijo: "Seguramente volveré en el momento debido y tu esposa
Sara tendrá un hijo". Se fueron en dirección a Sodoma. Dos de ellos resultaron
ser quienes salvaron a Lot y a su familia de la destrucción de la ciudad.

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¿Qué dice la Biblia sobre la

desobediencia?
Escrito por: Contributing Writer

Actualizado en: November 20, 2021

Comstock/Stockbyte/Getty Images

Muchas personas se preguntan qué dice la Biblia sobre la desobediencia. La

Biblia define la desobediencia como cualquier elección que es contraria a lo
que Dios ha instruido. La desobediencia de Adán resultó en la humanidad
siendo separada de Dios. Las naciones de Israel y Judea fueron destruidas
debido a la desobediencia de las leyes de Dios. La obediencia siembre ha sido
la respuesta, pero la desobediencia tiene sus consecuencias, incluso después
del arrepentimiento.

Significado
Según la Biblia, la desobediencia es fallar al seguir las leyes de Dios. Las
personas se separaron de Dios por primera vez a través de la desobediencia
de Adán (Génesis 3:17). La Biblia está llena de ejemplos de la desobediencia
de las personas y sus devastadoras consecuencias. Afortunadamente, las
personas siempre se pueden arrepentir y elegir la obediencia, como la reacción
de David a Natán señalando su desobediencia en tener una relación con la
esposa de Uriah y después asesinarlo (II Samuel 11 y 12). Incluso después del
arrepentimiento, las consecuencias siguen, como la pérdida de la vida del hijo
de David (II Samuel 12:15-19).

Consideraciones
En la Biblia, Dios usa frecuentemente el enfoque de la "zanahoria y el palo"
para fomentar la obediencia en su pueblo. Por ejemplo, después de dar las
leyes para gobernar Israel en el Libro de Deuteronomio, Dios enumeró las
bendiciones que Israel recibiría si las personas obedecieran las leyes de Dios
(Deuteronomio 28:1-14). Sin embargo, Dios tuvo que exponerle a Israel las
maldiciones por su desobediencia (Deuteronomio 28:15-68).
Desafortunadamente, Israel eligió la desobediencia y experimentó esas
maldiciones.

Efectos
En la Biblia, la desobediencia siempre ha tenido sus consecuencias. Por
ejemplo, la Biblia comparte en Juicios 2:6-23 que, después de que Josué
murió, los israelitas desobedecieron y adoraron a otros dioses, dentro de otros
actos de desobediencia. Dios se enfureció e impuso las consecuencias, como
vender a su pueblo a la esclavitud y permitir que Israel fuera derrotado en la
batalla. Fue debido a la desobediencia de Josué que Babilonia derrotó a la
nación y tomó al pueblo de Dios en cautiverio (I Crónicas 9:2).

Prevención/solución
La obediencia siempre ha sido la solución a la desobediencia. La
desobediencia de un hombre (Adán) le trajo la separación de Dios, pero la
obediencia de un hombre (Jesús) salvó a muchos (Romanos 5: 19). Dios quiere
tener piedad de aquellos que desobedecen (Romanos 11:30-32). Incluso
Manasés, quien fue uno de los reyes más malvados de Judea, fue capaz de
volver a Dios después de su terrible desobediencia (II Crónicas 33:1-18).

Advertencia
Según la Biblia, aún si una persona puede volver a Dios después de la
desobediencia, el daño ya está hecho. La obediencia después de la
desobediencia no cambia las consecuencias de las malas elecciones. Por
ejemplo, la Biblia cuenta la historia de Manasés, rey de Judea en II Crónicas
33:1-18. Aunque el rey Manasés se arrepintió y se volvió obediente, el daño de
sus acciones ya estaba hecho. Las personas continuaron desobedeciendo a
Dios, lo cual terminó con la destrucción de Judea.

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¿Qué dice la Biblia sobre la sanidad?

Escrito por: Contributing Writer

Actualizado en: November 20, 2021

Faith Allen

Mucha gente se pregunta qué dice la Biblia sobre la sanidad. La sanidad se

menciona varias veces en las Sagradas Escrituras. Jesús se centró en sanar a
la gente, tanto físicamente como emocionalmente, a lo largo de su ministerio.
Existen pasajes de la Biblia que hablan sobre la sanidad tanto de individuos
como de naciones enteras. Tú tienes el poder de sanar a los demás a través de
las palabras que escoges. La sanidad glorifica a Dios y trae alivio a quienes
están heridos.

Identificación
En la Biblia se mencionan diferentes formas de sanidad. A menudo, Jesús
sanaba a las personas con enfermedades físicas (Mateo 9:35). Jesús también
sanó a personas que tenían demonios. Algunas situaciones relacionadas con
demonios parecen sanidades físicas (posiblemente epilepsia), como en Mateo
17:14-20. Otras situaciones con demonios parecen sanidades emocionales,
como en Marcos 5:1-20. La Biblia hace hincapié en el deseo de Dios de
proveer sanidad emocional en Isaías 61, donde Él expresa su deseo de
"vendar a los quebrantados de corazón" (versículo 1) y "consolar a todos los
enlutados" (versículo 2).

Magnitud
Según lo que dice la Biblia, la sanidad no se limita solo a los individuos. La
sanidad también tiene lugar en un grupo o en una sociedad. En Jeremías 8:21-
22, Dios pregunta por qué no hubo medicina para las heridas de su pueblo. En
Jeremías 33:6-7, Dios dice que sanará a su pueblo, hará volver a los cautivos y
los restablecerá como al principio. Apocalipsis 22:2 habla de la "sanidad de las
naciones". La sanidad puede ser mucho mayor que suplir las necesidades
individuales.

Importancia
La Biblia identifica al don de sanidad como uno de los dones espirituales en 1
Corintios 12. Jesús sanó gente en repetidas ocasiones imponiendo sus manos
sobre aquellos necesitados (Lucas 4:40). Jesús espera que hagamos lo mismo.
En Juan 14:12, la Biblia registra que Jesús dijo: "El que en mí cree, las obras
que yo hago él las hará también". Jesús continuó diciendo que haría aun cosas
mayores de las que hizo, lo que implica que el don espiritual de sanidad es una
de esas cosas (Juan 14:12).

Reflexiones
La Biblia menciona varias veces el poder de sanidad que tiene la palabra.
Podemos usar nuestras palabras para sanar a los demás. En Proverbios, la
Biblia menciona el poder de sanidad de la palabra: "la palabra de los sabios es
medicina" (12:18); "la palabra apacible es árbol de vida" (15:4); "los dichos
suaves son... medicina para los huesos" (16:24). Ya que nuestras palabras
pueden llevar sanidad a los demás, la Biblia nos advierte en Santiago 3 que
tengamos cautela respecto a la destrucción que también pueden traer nuestras
palabras.

Beneficios
Según la Biblia, la sanidad glorifica a Dios y trae a su pueblo de vuelta a Él. En
Juan 9, la Biblia comparte el recuento de la vez que Jesús sanó a un hombre
que había nacido ciego. En el versículo 3, Jesús dijo que el hombre había
nacido ciego para que "las obras de Dios se manifiesten en él". En Isaías 61:3,
la Biblia comparte algunos de los beneficios de la sanidad, incluyendo el "gozo"
y alegría. La sanidad de Dios finalmente resulta en "perpetuo gozo" (Isaías
61:7). Aquellos que han sido más quebrantados son quienes más pueden
valorar el poder de sanidad de Dios.

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Cómo enseñarles a los niños sobre el

libro Proverbios
Escrito por: Paul Young

Actualizado en: November 20, 2021

Stockbyte/Valueline/Getty Images

El libro Proverbios brinda consejos prácticos para la vida cotidiana. Fue escrito
principalmente por el Rey Salomón y exhorta a la gente a buscar y aplicar la
sabiduría de Dios en cada aspecto de la vida. Los versículos de Proverbios
están escritos como si se tratara de un padre instruyendo a su hijo para que
viva la voluntad de Dios. Estos versículos contienen consejos prácticos y
pertinentes sobre los problemas que enfrentan los niños a medida que avanzan
hacia la adultez. Puedes utilizar estas lecciones prácticas a modo de estudio
bíblico para los niños.

Introducción
Léeles a los niños Proverbios 1, versículos 1 al 7.

Explícales que Salomón se menciona en la Biblia como el hombre más sabio

que haya existido. Cuéntales que Salomón era joven cuando se convirtió en rey
de Israel. Al darse cuenta de las inmensas responsabilidades de ser rey, le
pidió a Dios sabiduría para liderar a Israel. El hecho de que Salomón haya
pedido sabiduría en vez de fama y dinero fue de agrado para Dios. Como
resultado de ello, Dios hizo que Salomón fuera más sabio que cualquier otra
persona.

Describe el propósito del libro de Proverbios, como se resume en los versículos

2 al 4, haciendo hincapié en el versículo 4. Diles a los niños que Proverbios
brinda instrucciones para tomar decisiones correctas en la vida basadas en los
principios de Dios. Explícales que Proverbios dota a las personas jóvenes con
poca experiencia e inmaduras del conocimiento y el juicio para vivir una vida
devota.

Explícales las diferencias entre los sabios y los necios, como se describen en
los versículos 5 al 7. Enséñales que una persona sabia recibe la enseñanza de
Dios y aumenta su conocimiento y entendimiento sobre los caminos de Dios.
La reverencia a Dios es el punto de partida para conocerlo de verdad. Describe
a los necios como quienes rechazan las enseñanzas de Dios.

Los niños deben escuchar a sus padres

Lee Proverbios 4, versículos 1 al 6. Explícales a los niños que Salomón se está
dirigiendo a su hijo.

Explica la advertencia de los versículos 1 y 2. Expláyate en la verdad de

Proverbios y la Biblia como un todo y la importancia de no desviarse de sus
enseñanzas. Enséñales la importancia de aceptar las instrucciones morales de
los padres. Por ejemplo, usa los Diez Mandamientos de Éxodo 20 para
enfatizar la importancia de decir la verdad, no robar y honrar a los padres.
Dales ejemplos de aplicación de la vida real, como por ejemplo no robar las
pertenencias de otros compañeros, no hacer trampa en la escuela, no
descargar canciones de forma ilegal, siempre decir la verdad y honrar lo que
nos piden nuestros padres incluso cuando no estén cerca.
A partir del versículo 3, describe de qué forma el Rey David le enseñó los
mandamientos de Dios a su hijo Salomón. Coméntales que generalmente la
palabra de Dios se trasmite de generación en generación.

Explica la enseñanza del versículo 4, que dice que es importante aferrarse

firmemente al consejo santo y paterno y que prestarle atención al consejo de
los padres puede salvar la vida.

Enseña la importancia de adquirir sabiduría y entendimiento como se afirma en

el versículo 5. Diles a los niños que una de las mejores maneras de adquirir
sabiduría y entendimiento es escuchando el consejo santo de sus padres.

Explícales que lo que dice el versículo 6 significa que recibiendo la sabiduría y

el entendimiento de Dios se ahorrarán los problemas que vienen por la
desobediencia. Por ejemplo, al ser buenos alumnos en la escuela evitan ser
castigados.

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¿Qué dice Jesús sobre los videntes?

Escrito por: T.A. Workman

Actualizado en: November 20, 2021

jesus christus image by Daniel Fuhr from Fotolia.com

¿Qué dicen las investigaciones basadas en la fe sobre el mundo psíquico? La

mayoría lo ve como una forma de autogratificación. Por ejemplo, individuos,
incapaces de lidiar con la pérdida de un ser querido, quieren reconectarse a
través de los psíquicos para aliviar esta pena. Las personas también recurren a
los psíquicos para que los ayuden con sus carreras, vida amorosa o
agitaciones.

Las escrituras bíblicas denuncian la práctica con severas penas. ¿Qué dice
Jesús sobre los psíquicos? Sus acciones hablan más fuerte que sus palabras.

Identificación
Un psíquico, por definición de diccionario, es alguien capaz de comunicarse
con el mundo espiritual. El termino es usado para incluir médiums; alguien
canalizado por los muertos para comunicarse con los vivos. Algunos psíquicos
meramente perciben cosas que no son "recibidas" por los sentidos normales
como la vista, el olfato, el oído y el tacto. Otros afirman predecir eventos
futuros. En pocas palabras, sus eventos son inexplicables por las leyes
naturales o físicas.

Importancia
En la Biblia, el libro sagrado de la cristiandad, Dios usa varios mensajeros
espirituales. Los seguidores fueron visitados por ángeles, recibieron visiones y
tuvieron sueños emitiendo mandatos y prediciendo eventos futuros. Los
profetas también entregaban mensajes celestiales y predecían el futuro.

¿Los mensajeros espirituales se terminaron en los tiempos bíblicos? La

mayoría de las autoridades cristianas dice "sí". Creen que los mensajes de
naturaleza espiritual vienen de Dios, no de parientes fallecidos y son
entregados a través de la oración o de las lecciones aprendidas. El especialista
en cultos y vicepresidente de los Ministerios de Información Cristiana Russ
Wise dice que los psíquicos intentan "ser como Dios" y guían a la gente hacia
una "oscuridad espiritual".

Teorías/Especulación
Entonces, ¿qué dice Jesús sobre los psíquicos? La Biblia está cubierta con
directivas para evitar a los psíquicos y otros mensajeros. Pero estas palabras
vienen directo de Moisés, el apóstol Juan y otros autores. Las palabras no
vienen directamente de Jesús.

En la Cristianidad, Jesús recibe sus órdenes, como todos los creyentes, de

Dios. A pesar de ser mencionado en el Nuevo Testamento, las escrituras que
citan las órdenes de Dios de evitar a los psíquicos son primariamente parte del
Antiguo Testamento, anterior al nacimiento de Jesús. Debido a que la Biblia
indica que Jesús no pecó contra Dios, debemos asumir que sigue sus órdenes.

Versos como Deuteronomio 18:10-11 dictan directivas que dicen que ningún
ciudadano puede "practicar magia negra, o invocar a los malos espíritus por
ayuda, o ser un adivinador de futuro, un encantador de serpientes, medium, o
mago, o provocar a los espíritus de los muertos".

Consideraciones
Muchas escrituras bíblicas hacen referencia a los psíquicos y médiums
similares. Levítico 20:6 indica que aquellos que busquen consultar a los
médiums serán desterrados de su comunidad. En 1 Juan 4:1-3, se le advierte a
la gente sobre "los falsos profetas", y en 2 Crónicas 33:6 se le dice a la
humanidad que aquellos que consultan a los psíquicos enojan a Dios. El
Antiguo Testamento amenaza a los psíquicos con el castigo de la muerte.

Efectos
La fascinación mundial con los psíquicos ha causado que algunos escépticos
reclamen pruebas. El mago profesional James Randi regularmente desacredita
la actividad psíquica mostrando cómo la farsa se lleva a cabo.

Incentivos en efectivo han intentado atraer a los psíquicos a provar sus

artimañas. Científicos estadounidenses, en 1922, ofrecieron US$5.000 a
aquellos capaces de confirmar sus habilidades psíquicas. A pesar de que
algunas fueron analizadas, todas probaron ser falsas y el dinero jamás fue
cobrado. Similarmente, James Randi reunió 1 millón de dolares para cualquiera
que demostrara legítimas habilidades psíquicas. Desafíos parecidos se hicieron
en Australia, Nueva Zelanda y Reino Unido.

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¿Quiénes fueron los samaritanos en

tiempos de Jesús?
Escrito por: Cynthia Tucker

Actualizado en: November 20, 2021

Jupiterimages/Photos.com/Getty Images

Los samaritanos en tiempos de Jesús comenzaron como una raza de personas

en el Antiguo Testamento formada después de que el rey asirio tomó la mayor
parte de la nación de Israel en el exilio. Se repobló lo que entonces era la
ciudad capital de Israel, Samaria, con los extranjeros que eventualmente se
casaron con los Judios que se quedaron en la tierra. Como resultado, sus hijos
era solo mitad judíos. Estos medio-judios llegaron a ser conocidos como
samaritanos.

Relación con los judios

Los samaritanos todavía estaban en la tierra cuando los Judios regresaron de
su cautiverio y fueron rechazaron porqué no eran considerados "verdaderos"
Judios. Los samaritanos querían ayudar a reconstruir el templo en Jerusalén,
pero los Judios no quería su ayuda. Luego los samaritanos trataron de detener
a los Judios en la reconstrucción del templo. Cuando no tuvieron éxito,
construyeron su propio templo en el monte Gerazim. Este fue el comienzo de la
animosidad entre los dos grupos que continuó hasta el tiempo de Jesús.

Creencias
Al igual que los Judios, los samaritanos creyeron en el Dios de Abraham, Isaac
y Jacob. Sin embargo, se creían que el Monte Gerazim era el único lugar de
sacrificio y culto en oposición al templo en Jerusalén. No creían en todo el
Antiguo Testamento, solo en los primeros cinco libros: Génesis, Éxodo,
Levítico, Números y Deuteronomio. Estas creencias separaron aún más a los
samaritanos de sus vecinos judíos.

Relaciones con Jesús

Jesús tenía una actitud hacia los samaritanos diferente de la mayoría de los
Judios. No los despreciaba, en vez de eso se acercó a ellos. Él sanó a un
samaritano leproso. Cuando un pueblo samaritano se negó a darle la
bienvenida, Jesús no permitió que sus discípulos ordenaran su destrucción.
Una de las parábolas más famosas narra la historia de un buen samaritano que
ayudó a un Judío que lo necesitaba. Cuando Jesús empezó a viajar a su
manera por Samaria pudo hablar con la mujer junto al pozo. Como resultado,
ella y mucha gente del pueblo creyeron en él como el Mesías.

Influencias judias después de Jesús

Después de la resurrección de Jesús, él instruyó a sus apóstoles para predicar
el evangelio en Samaria, y lo hicieron. Los líderes judíos persiguieron a la
iglesia en sus inicios capturando a los cristianos ya sea arrestándolos o
matándolos. Debido a esto, los apóstoles se dispersaron por toda Judea y
Samaria. La presencia de los apóstoles en Samaria dio lugar a más conversos
samaritanos que construyeron iglesias cristianas en su tierra.

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Evalúa el daño, no seas “catastrófico” y hazte responsable.

¡Ups! Le preguntaste al amigo de un amigo a

quien despidieron hace poco qué tal le va en su trabajo . Las palabras
salieron de tu boca antes de poder evitarlo. Preguntarle acerca de la
situación más estresante de su vida (esa que esperaba que nadie sacara
a colación) fue un error inocente. Por supuesto, te disculpaste de
sobra, pero te das cuenta de que le dolió.
Esto es parte habitual, aunque dolorosa, de ser una criatura social,
pero decir algo equivocado requiere una disculpa de un tipo diferente
al que usarías, por ejemplo, cuando derramas café sobre la bolsa de
una extraña o llegas tarde al trabajo. Cuando haces un comentario
inapropiado o una broma insensible, la herida es interna, lo cual puede
ocasionar que resarcirla sea una tarea más difícil.
Es poco realista aspirar a ser un comunicador perfecto. Si te esfuerzas
por no equivocarte nunca al hablar, es probable que termines
empeorando las cosas; Don Cole, un terapeuta matrimonial y familiar
certificado, comentó: “Porque entonces sentirás más culpa, enojo y
sentimientos de molestia cuando cometas errores de comunicación y
hieras los sentimientos de alguien”.
El ser humano está diseñado para funcionar en una comunidad.
Cuando se presenta el rechazo social, la exclusión puede ser dolorosa
a nivel físico. Un estudio reciente publicado en Clinical Journal of
Pain reveló que los mismos circuitos neuronales que procesan la
angustia social también están involucrados en los circuitos del dolor
físico.
Como director clínico del Instituto Gottman, una organización que,
con base en investigaciones, proporciona ayuda a las parejas y
capacita a terapeutas para que mejoren su eficacia como consejeros de
pareja, Cole atiende con regularidad a parejas que batallan con una
mala comunicación. Resulta que las parejas exitosas cometen el error
de decir algo equivocado con la misma frecuencia que las parejas no
exitosas. Afirmó que la diferencia reside en que las parejas exitosas
saben cómo solucionar el haber herido los sentimientos de su pareja.
Podemos aplicar esta estrategia de reparación no solo con las parejas
románticas, sino con cualquier persona que hayamos ofendido sin
querer: amigos, conocidos y también compañeros de trabajo. A
continuación, te presento cómo resarcir un desliz verbal y sanar esos
sentimientos.
Antes de disculparte
Evalúa el daño. “Mantente abierto y sensible contigo mismo acerca
del posible daño hecho”, afirmó Andrea Bonior, una psicóloga clínica
certificada. Quizá piensas que debes disculparte por un comentario
casual, pero para la otra persona esto puede formar parte de un patrón
más amplio de desconsideración de tu parte. De hecho, podrían estar
más molestos de lo que crees, en especial si tu comentario tocó una
fibra sensible.
“Cuando nos damos cuenta de que hemos herido a alguien, entran en
juego nuestros instintos que buscan restaurar el equilibrio”,
aseveró Ijeoma Oluo, autora de So You Want to Talk About Race (Así
que quieres hablar de raza). Si no tienes claro si lo que dijiste hirió a la
otra persona, Oluo recomienda acercarte y decir: “Si me explicaras
cómo te lastimaron mis acciones, me ayudaría mucho a remediarlo”.
No lo formules como: “Dime por qué te molestaste”, en lugar de eso
pregunta: “¿Qué fue lo que hice?”.
No seas “catastrófico”. Las personas que son proclives a tener
pensamientos de culpabilidad suelen ser más duras consigo mismas.
Todas ellas dicen cosas como: “No puedo creer que dije eso. Soy una
mala persona”. Si te encuentras en un torbellino de vergüenza, Bonior
sugiere replantear tu discurso interno acerca del suceso como algo más
realista, comprensivo y útil como: “Esta situación toca una fibra. Me
siento apenado, pero puedo mejorarlo. Todos cometemos errores”.
No dejes que empeore. Podrías sentirte tentado a obviar el tema, pero
los expertos afirman que sería un error. No solo pasarás más tiempo
preocupándote por la situación, sino que mientras más postergues
abordar tu torpeza, más incómodo será hacerlo. Bonior sugiere
determinar un periodo para lamer tus heridas (una hora o un día), pero
trata de sanar lo más pronto posible. En ocasiones, cuando
postergamos una conversación difícil, terminamos por no hablar del
tema en absoluto, lo cual es, en realidad, lo que ocasiona un daño
irreparable en la relación. “No se trata de la ofensa inicial”, dijo, “sino
de cómo se abordó”.
Durante la disculpa
Acepta tu responsabilidad. Ignora la necesidad de ponerte a la
defensiva o dar excusas como: “No lo dije a propósito” o “¿Por qué
eres tan sensible? Obviamente era una broma”. Evita ahondar en
nimiedades y deja que la otra persona exponga sus sentimientos, dijo
Bonior. Deja en claro que no tomas a la ligera lo que hiciste. Los
estudios revelan que decir tus sentimientos puede ayudar a manejar la
ansiedad y la depresión. Entonces, decir cosas como: “Me avergüenza
haber dicho eso” o “Me consterna haberte lastimado” puede aliviar un
poco la angustia ocasionada por la situación. No obstante, no busques
hacerte la víctima, así que no exageres las cosas, dijo Bonior.
Valida su dolor. Es tentador usar este tiempo para aclarar tus
intenciones: puede que te sientas atacado y es comprensible querer
limpiar tu nombre pero, a menos que la persona te pregunte qué fue lo
que quisiste decir con tu broma o comentario, no lo expliques. Lo que
quisiste decir es irrelevante en una conversación centrada en el
impacto negativo de tus palabras. Tampoco es productivo discutir cuál
de las versiones de los hechos es la correcta. La memoria no es una
grabadora digital; es una codificación emocional de un suceso, afirmó
Cole. Acepta que lo que la persona escuchó y sintió fue real: “Mi
comentario fue inapropiado y entiendo por qué te molestó”.
Sé genuino. Asegúrate de que tu disculpa sea de corazón. Evita frases
hechas como: “Siento que lo hayas tomado así”. Ese lenguaje te
distancia de tus acciones y puede parecerle superficial al receptor. El
lenguaje corporal, los gestos faciales y el tono de voz se pierden en la
comunicación escrita, por lo que los correos electrónicos y los
mensajes de texto son lo menos apropiado cuando se trata de abordar
un tema sensible como una disculpa. Los expertos aseguran que es
mejor ofrecer una disculpa de frente siempre que sea posible. Una
llamada telefónica es la segunda mejor opción.
Explica por qué no volverá a ocurrir. Hablar de lo que te enseñó la
situación le reafirmará a la persona que aprendiste de tu error.
Además, aprender y hacer un esfuerzo por corregir tu conducta
demuestra que actúas de buena fe. Por ejemplo, si sigues
pronunciando mal el nombre de un colega, admite tu error. La
escritora Alison Green recomienda no usar argumentos como:
“Bueno, es un nombre complejo y jamás lo había escuchado”. Como
editora del blog de orientación profesional Ask a Manager(Pregúntale
a una jefa), y autora del libro con el mismo título, Green recomienda
decir: “Oye, discúlpame por hacer eso. Me da gusto que me lo hayas
comentado y me esforzaré por decirlo de la forma correcta”.
Después de la disculpa
Reinicia. Después de una metida de pata, puede ser especialmente
importante tener una interacción sin incidentes, en caso de que la otra
persona se pregunte cómo será la relación de ahora en adelante.
Despeja sus temores. “Si llegas media hora después y hablas de cosas
laborales normales, con frecuencia lograrás que se relaje”, detalló
Green. Esto ayudará a recalibrar la relación y garantizarle a la persona
que todo está bien.
Olvídalo. Si después de hacer tu mejor esfuerzo, la otra persona aún
no es capaz de superar la ofensa, aléjate. Puedes hacerte responsable
de tus errores y ofrecer una disculpa sincera, pero no puedes obligar a
nadie a aceptarla, comentó Cole. En ocasiones las palabras causan un
daño irreparable.
Nadie está obligado a tener una relación contigo. “Si has lastimado a
alguien, hay cosas que puedes hacer para remediarlo, pero, si no
quieren aceptarlo”, dijo Oluo, “no tienen que hacerlo”.
Aun así, trata de aceptar la oportunidad de comprender la experiencia
que vivió la otra persona e identificarte con su dolor, incluso si tuviste
un papel activo en provocarlo. No solo serás un amigo y colega más
considerado sino que, al mirar al mundo a través de sus ojos, habrá
mayores probabilidades de que la otra persona se sienta segura,
escuchada y comprendida.