El Derecho Probatorio en Venezuela
El Derecho Probatorio en Venezuela
El Derecho Probatorio en Venezuela
La evidencia de ley es, un producto de la ley que gobierna toda la materia relativa para la
búsqueda de la vía que dirige a la verdad de aquellos factores que son incidentales para el
procedimiento del instrumento legal, porque todo hecho deja un rastro.
PARTES
Considerando un punto de vista Subjetivo, probar significa el derecho que se tiene para demostrar
y esta creado en la certeza de un hecho. En este criterio, uno va a la prueba, por un lado, como un
derecho o una facultad, por el otro lado, la prueba produce un efecto o resultado, así como la
convicción en la mente del juez.
El punto de vista objetivo, la evidencia se define como todo lo que sirve para la certeza de la
verdad de una posición que, se puede decir que son los medios que utilizan las partes para
demostrar los hechos en cuestión.
El termino prueba no se limita solo a la ley, pero en otras ciencias. Probar en la ley es convencer y
convencer.
La Prueba es el derecho de traer cualquier instrumento en concordancia con el sistema legal para
probar un hecho a el juez.
La prueba es el medio.
Cualquier método puede ser usado por las partes, pero el medio debe ser el correcto para probar
el hecho que es destinado.
BASE PROBATORIA.
El derecho que las partes tienen para presentar y oponerse a la evidencia, para ser admitida, para
practicar esto y para ser evaluado por el juez.
Dentro del proceso, especialmente dentro de la actividad probatoria, existen una serie de
principios, que están intrínsecamente plasmados dentro de la normativa procesal, por ende,
deben ser conocidos, ya que forman parte de ese espíritu, propósito y razón del cuerpo
normativo base del estado de derecho. Dichos principios suelen variar en su denominación,
clasificarse o subdividirse según el autor, es por eso que en lo sucesivo se desarrollaran las
opiniones derivadas de los principios enumerados y solicitados por el facilitador para el
presente ensayo.
Como una nota de color, al desarrollar estos principios se viene a la mente del autor
cuando en las aulas de pregrado hace más de tres lustros, el docente de derecho probatorio
expresaba que lo que era bueno para el pavo, era bueno para la pava, decía palabras más,
palabras menos, revisen bien sus pruebas, preparen bien sus testigos, planifiquen bien su
proceso, que así como todos los días sale un bobo a la calle, todos los días llega un avispado
a los tribunales y les tumba el juicio con las pruebas que usted mismo metió en el expediente.
Ahora bien el principio de contradicción y control de las pruebas, es uno de los que permite
generar la igualdad en los sujetos procesales, la contradicción permite que las partes, refuten,
objeten, rebatan, contradigan los elementos probatorios presentados por la contraparte,
siendo esta una de las partes esenciales del derecho a la defensa y el debido proceso, por
tanto, es tan importante este principio que de vulnerarse se estaría cayendo en una posible
nulidad. De ahí que, la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela (2009) en su
artículo 49 numerales 2° y 3° lo establezca de forma intrínseca en el derecho a la defensa.
De la mano de la contradicción viene el control de las pruebas, que posee rango
constitucional, ya que en la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela (2009) en
su artículo 49 numeral 1° expresa lo siguiente:
Existe otro principio como el de la formalidad, entendida esta como un elemento que
garantiza que las formalidades esenciales del acto, estos formalismos, garantizan el ejercicio
de otros principios que como se ha explicado en este ensayo son esenciales, como la
publicidad y el control de la prueba ya que es el principio de formalidad de la prueba el que
garantiza que las formalidades de modo tiempo y lugar de la prueba se desarrollen dentro del
proceso.
Con relación al principio anterior, todos los profesionales del derecho entienden que la
evacuación de la prueba testimonial necesita de una serie de formalidades esenciales,
necesarias y lógicas, es impensable, además de imposible evacuar un testigo a través de un
fotografía. Así las cosas, nuevamente el artículo 49, en su numeral 1 de la Carta Magna se
relaciona con este principio al declarar nulas las pruebas obtenidas mediante violación del
debido proceso, generando la formalidad para la obtención y la formalidad para que el sujeto
posea la legitimidad para promoverla y evacuarla, lo que también es conocido dentro del
derecho penal y otras ramas como el derecho administrativo, en fase de determinación de
responsabilidades administrativas como la teoría del fruto del árbol envenenado.
La situación anterior se encuentra ligada con el principio de la preclusividad, propio del
derecho procesal y adaptado a la prueba, entendido como la pérdida de la oportunidad para
promover, impugnar o evacuar pruebas, va ligado al principio de formalidad y contradicción, y
es desarrollado por Bello (2015) en los siguientes términos:
Por otra parte, el principio de libertad probatoria ese que permite que las partes
puedan valerse de cualquier medio lícito de prueba para demostrar los hechos. No
obstante, es pertinente parafrasear lo expresado por Echandía al ser citado por
Rivera (2011), al referirse a este principio con “dos elementos, la libertad de
medios y la libertad de objeto” (p. 68), donde la primera hace referencia la libertad
legal para la utilización de los medios probatorios dejando al juez la posibilidad de
decidir sobre la pertinencia o no de la misma, y en segundo término a la libertad
que se tiene de probar todo hecho que tenga relación con el proceso, siempre que
no se violen derechos y garantías constitucionales.
En segundo lugar, es importante valorar para los operadores del derecho el objeto de la
prueba desde sus diferentes concepciones, para generar un criterio propio pero adaptado a
las necesidades y como se dijo acorde a las regulaciones legales que rigen el proceso, ya que
una claridad conceptual acerca de los hechos que pueden alegarse, debatirse, refutarse o
desecharse dentro del proceso pueden significar la pieza clave entre el éxito o el fracaso de
las pretensiones legales de los sujetos procesales.
Finalmente indicar, que los principios que rigen la actividad probatoria se encuentran
intrínsecamente ligados al marco jurídico que rige la actividad procesal, se presentan en
algunos casos de manera expresa, otros de forma tácita, pero están presentes dentro del
espíritu de la norma, por lo que de una u otra forma pasan a regular, medir y mejorar la
actuación de los sujetos procesales dentro del proceso mismo.
Desde el punto de vista subjetivo probar significa el derecho que se tiene de demostrar y se crea
en la certeza de un hecho. Bajo este criterio se va a la prueba por una parte, como un derecho o
una facultad, por otra parte, el efecto o resultado que la prueba produce, como es la convicción en
la mente del juez.
Desde el punto de vista objetivo se define la prueba como todo lo que sirve para darnos certeza de
la verdad de una posición o, también, puede decirse que son los medios que emplean las partes
para demostrar el hecho discutido.
El termino probar no se limita solo al derecho sino a otras ciencias. Probar en derecho es
convencerse y convencer.
Probar es el derecho que tienen las partes de llevar cualquier instrumento acorde con el
ordenamiento jurídico para probar un hecho al administrador de justicia.
Cualquier método pude ser utilizado por las partes para probar, pero ese medio debe ser el idóneo
para probar el hecho que se pretende.
DEVIS ECHANDIA las define como el conjunto de reglas que regulan la admisión, producción,
asunción y valoración de los diversos medios que pueden emplearse para llevar al juez la
convicción sobre los hechos que interesan al proceso.
Derecho que tienen las partes de presentar pruebas y oponerlas, a que se le admitan, a
practicarlas y a que les sea valorada por el juez.
En base a esto surgen dos juicios importantes que son aplicados al juez. En primer lugar, el juez
está obligado solo a considerar los hechos discutidos y que hayan sido alegados e instrumentados
por las partes. En segundo lugar, el juez tiene la obligación de conocer el derecho.
Por su parte el artículo 389 CPC explica cuando no habrá lugar al lapso probatorio0
3. En caso que los usos y costumbre alegados sean negociados pro la contraparte.
5. Si bien es cierto que el juez debe conocer el derecho nacional no está obligado a conocer
el derecho extranjero.
7. La actividad del juez con relación a los hechos debe precisar cuáles son los hechos
discutidos, cuales son los hechos no discutidos o aceptados por las partes, los hechos
tácitamente aceptados y la fijación de los hechos tácitamente aceptados y la fijación de los
hechos controvertidos. (Artículos 389 y 397 CPC)
8. En cuanto a los hechos; el juez tiene la obligación de aducir en sentencia los hechos
discutidos y que hayan sido aportadas conforme a la ley, esto es, a través de los medios
admitidos y practicados, de manera de no poner en sentencia hechos discutidos que no
hayan sido fijados mediante alguno de los procesos admitidos por la ley.
Principio inquisitivo
En nuestro CPC, se le concedió al juez iniciativas probatorias, acogiendo las tendencias procesales
modernas de involucrar al juez en el proceso civil, superando su postura de espectador y pasar a
ser el director del mismo y garante de los derechos de las partes y de una administración de
justicia, transparente, imparcial y justa, le atribuyo facultades probatorias para el imperio de la
verdad y de la justicia.