Tfg-O 939
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Tfg-O 939
Grado en Fisioterapia
INTERVENCIÓN FISIOTERÁPICA EN EL
ESPOLÓN CALCÁNEO. REVISIÓN
BIBLIOGRÁFICA
1. Introducción ................................................................................................................. 3
1.2. Epidemiología del espolón calcáneo, dolor de talón y fascitis plantar ………..5
1.8. Cuadro clínico del espolón calcáneo, dolor de talón y fascitis plantar………18
6. Bibliografía……………………………………………………………………………………………………36
ÍNDICE DE ILUSTRACIONES
ÍNDICE DE TABLAS
Entre los tratamientos existentes para paliar los síntomas de esta afección,
destacan el método conservador, la utilización de dispositivos para el calzado, la
fisioterapia, la radioterapia y la cirugía. Es de suma importancia a la hora de pautar un
correcto tratamiento para el espolón calcáneo, analizar la historia del paciente, llevar a
cabo un examen físico del pie y tobillo, así como, valorar los estudios de imagen
requeridos.
Abstract
The heel spur is defined as an abnormal growth of the calcaneus bone in the form
of a hook, either in the inferior part of the calcaneus, that is, in relation to the insertion of
the plantar fascia, or in the posterior part of the calcaneus, which is at the insertion of the
Achilles tendon. It is characterized by local pain in the lower or posterior area of the heel,
which can increase in the course of weeks or even months, and may expand to the foot or
lower extremity, preventing many symptomatic patients from being able to stand up or walk
for extended periods of time. The main risk factors for developing this condition are age,
obesity, sex and leg or foot deformities.
For this research thesis, I have reviewed articles published in scientific journals
belonging to the Medline and PEDro databases, dating from January 2006 to September
2016.
1
Among the existing treatments to alleviate the symptoms of this condition, the
conservative method, the use of devices for footwear, physiotherapy, radiotherapy and
surgery stand out. In order to ensure a correct treatment of the heel spur, it is extremely
important to analyse the patient´s history, carry out a physical examination of the foot and
ankle as well as to evaluate the required image studies.
Keywords: Heel spur, heel pain, plantar fasciitis, physiotherapy, ankle, foot.
2
1. Introducción
3
La presencia de espolón calcáneo no es sinónimo de que sea la causa primaria del
dolor de talón, puesto que pueden ser responsables del mismo otras patologías que
puedan cursar con la misma sintomatología que el espolón calcáneo. Por ello, es vital
realizar un diagnóstico diferencial, analizando la historia del paciente, llevando a cabo un
examen físico del pie y tobillo, así como valorar la posibilidad de mandar estudios de
imagen apropiados, si son necesarios. Todo ello con el objetivo de realizar un correcto y
exacto diagnóstico e iniciar así un tratamiento adecuado evitando de esta manera llevar a
cabo cirugías innecesarias (8).
Entre los distintos tratamientos para el abordaje del espolón calcáneo nos
encontramos con las terapias conservadoras, los dispositivos para el calzado, la
fisioterapia, la radioterapia y, por último, la cirugía en caso de que todas las anteriores no
hayan aportado una solución efectiva en un período de tiempo de 4 a 6 meses (6).
El espolón calcáneo fue descrito por primera vez a principios del siglo XX a través
de la figura del físico alemán Plettner. Este llevó a cabo la realización de un amplio
resumen de hallazgos radiológicos de exóstosis ubicados en la zona plantar del hueso
calcáneo o en el punto de inserción de la aponeurosis plantar.
Kujlar et al. definen espolón calcáneo como aquel osteofito que por lo general tiene
forma triangular y cuyo crecimiento se ubica en la parte posterior de la tuberosidad plantar
del hueso calcáneo. Este se extiende en sentido posteroanterior y puede tener una longitud
de 1 a 2 centímetros o de 2 a 2,5 centímetros (1). Su extremo anterior aparece violenta y
repentinamente sobre la fascia plantar, a modo de espina calcánea con una densidad ósea
que puede tener distintas formas y tamaños (2).
4
calcáneo) en relación con la inserción de la fascia plantar o detrás del talón (aspecto
posterior del calcáneo) en la inserción del talón de Aquiles. Otras formas con las que se
conoce a esta patología pueden ser talón del corredor, talón de tenista o talón de policía
(10) (Figura 1).
Debido a la relación que existe entre el espolón calcáneo y el dolor de talón (8,11),
así como con la fascitis plantar (12,13,14), se incluyen las características más relevantes
de ambas afecciones en los apartados que a continuación se enumeran: “Epidemiología”,
“Etiología”, “Anatomía patológica”, “Cuadro clínico”, Diagnóstico”, “Diagnóstico diferencial”,
“Pronóstico” y “Tratamiento”.
5
En tercer lugar, si prestamos atención a la incidencia del espolón calcáneo, es
decir, al número de casos nuevos de esta afección, es más alta en pacientes que padecen
fascitis plantar que en pacientes asíntomáticos (75% contra 63%) (9). No obstante, se
estima que los valores de incidencia del espolón calcáneo son de un 8% hasta un 88% en
la población en general (7,11). Agyekum et al. sugieren que sobre el 10% de la población
general padece espolón calcáneo y la mayoría de ellos no tienen ningún síntoma, sin
embargo, en otros casos los espolones calcáneos causan dolor y sensibilidad en la parte
inferior del talón, que puede empeorar a lo largo de varios meses (10).
6
padece (11,20). Además, en este mismo país supone entre uno y dos millones de visitas
por año al médico, representando aproximadamente del 10% al 25% de todas las lesiones
de pie en corredores. Otros deportistas como jugadores de baloncesto, fútbol américano y
rugby, sufren fascitis plantar al tratarse de deportes en los que la extremidad inferior juega
un papel fundamental (20,21,22). Sin embargo, también se habla de que las personas
afectadas pueden ser sedentarias (20,21). No obstante, la mayoría de los casos se
resuelven a los 10 meses aproximadamente, pero el 10% termina desarrollando fascitis
plantar crónica (6,10).
1.3.1.1. Retropié
Esta zona se compone únicamente por los huesos astrágalo y calcáneo. Asimismo,
la tibia y el peroné conectan con la parte superior del astrágalo para conformar el tobillo.
Su principal función es estabilizar la articulación del tobillo.
7
1.3.1.3. Antepié
Está conformado por los cinco metatarsianos que establecen el metatarso y las
falanges del pie. El primer dedo posee dos falanges (proximal y distal), mientras que el
resto poseen tres. Su principal función es dinámica (Tabla 1).
Hueso calcáneo: Se trata del hueso más fuerte, grande y de mayor longitud de los
siete huesos del tarso y forma la prominencia del talón (1). Este posee una forma irregular.
En su cara posterior se hallan dos carillas articulares con las que se articula con el hueso
astrágalo. Entre estas, se ubica un surco profundo conocido con el nombre de “sulcus
calcanei”, que junto con el “sulcis tali” forma un conducto óseo, es decir, el seno del tarso
(“sinus tarsi”). En cuanto a su cara inferior, se describe como rugosa y con dos eminencias,
las cuales son las tuberosidades interna y externa del calcáneo. La cara externa posee el
canal calcáneo interno. La cara anterior es lisa y se articula con el hueso cuboides. La cara
posterior forma parte del talón (24)(Figura 4).
Hueso astrágalo: Consiste en el hueso del tarso que es articulado con la pierna a
través de la mortaja tibioperonea y de forma caudal con el hueso calcáneo. También se
articula ventralmente con el hueso escafoides. Conserva una región anterior que se
articula con el hueso escafoides, un segmento intermedio y una porción posterior. El
cuerpo es la parte más voluminosa y su cara es articular creando la porción principal de la
tróclea o polea astragalina (23).
8
triangular que articula con el hueso escafoides, así como una cara distal también de forma
triangular que conecta con los cuatro primeros metatarsianos (23).
9
Anatómicamente, dicha bóveda va a estar conformada por tres arcos, los cuales se definen
a continuación:
En primer lugar tenemos el arco plantar interno, que se ubica entre el hueso
cuboides y la cabeza del primer metatarsiano. Además, el punto más alto del mismo se
encuentra a la altura del hueso escafoides (15 a 18 cm). De atrás hacia adelante las
estructuras que lo conforman son: calcáneo, astrágalo (el cual recibe las líneas de fuerza),
escafoides, primera cuña y primer metatarsiano. En este arco, el calcáneo va a ser un
transmisor de líneas de fuerza procedentes del astrágalo que desembocan en el suelo.
En segundo lugar nos encontramos con el arco plantar externo. Las estructuras
óseas que configuran el mismo arco enumeradas de atrás hacia adelante son: calcáneo,
astrágalo, cuboides y quinto metatarsiano. Se trata del arco más fuerte pero del menos alto
(3mm-5mm). Está organizado de tal manera, que deriva una serie de fuerzas producidas
en la pierna y que se dirigen hacia el suelo a través de líneas trabeculares en virtud de 2
arbotantes (anterior y posterior) del calcáneo.
Aclarados estos conceptos, cabe destacar que el equilibrio arquitectural del pie en
la posición estática se localiza a la altura de la articulación mediotarsiana, más
concretamente en el llamado “Centro del Tarso”. Cualquier modificación en esta región nos
da lugar a alteraciones del pie por retracción (pie cavo) o por aplastamiento (pie plano)
(5,24).
En la fase de apoyo de la marcha, el pie sufre una serie de modificaciones que van
desde la fase inicial de apoyo con el talón hasta la fase de apoyar la punta del pie en el
suelo, o también conocida como última fase. El hueso calcáneo es partícipe de todos estos
pasos que configuran la marcha y que se describen seguidamente:
En primer lugar, acontece la llamada fase de contacto del talón con el suelo. En el
transcurso de esta, el pie inicia la marcha apoyándose únicamente en la tuberosidad del
calcáneo. El tobillo se ubica en flexión dorsal en virtud de los músculos flexores dorsales.
En segundo lugar, se produce la fase de contacto total de la planta del pie con el suelo, en
ella el tobillo realiza una ligera flexión plantar por la acción de los músculos flexor común
de los dedos y flexor del primer dedo. La convexidad del pie se aplana y el centro del
equilibrio del tarso coincide con el centro del tarso. En tercer lugar, se propicia la fase de
10
primer impulso motor, donde el talón se levanta por actuación de los músculos tríceps
sural y músculos flexores activos, de tal manera que el equilibrio se traslada a la parte
anterior del centro del pie. Es en este momento cuando se apoya la región anterior del
mismo. Finalmente, acontecería el segundo impulso motor. El calcáneo se levanta
considerablemente por la acción de los músculos flexores plantares del tobillo, así como
por la del tríceps sural. El pie solo es apoyado en el suelo por su parte más distal, donde
las articulaciones de esta región se encuentran en una extensión pasiva formando un
ángulo de 90º. La extremidad heterolateral es apoyada sobre el otro calcáneo, iniciándose
de esta manera la marcha de puntillas. Esta acción es conocida como doble apoyo o punta-
talón, punta-talón (Tabla 2).
11
1.4.2. Articulación mediotarsiana
Anatómicamente tiene lugar entre la primera (calcáneo y cabeza del astrágalo) y la
segunda fila (escafoides y cuboides) de huesos del tarso. A su vez, esta articulación se
subdivide en dos. En primer lugar en la articulación calcáneo-cuboidea, la cual es de encaje
recípoco, y en la articulación calcáneo-astrágalo-escafoidea, siendo esta una enartrosis
modificada, determinando de esta manera todos los movimientos de la articulación
mediotarsiana.
Los medios de fijación de esta articulación van a ser el ligamento lateral interno o
ligamento deltoideo y el ligamento lateral externo.
12
1.4.2.1.3. Abducción y aducción
Se trata de movimientos ejecutados de forma exclusiva por la articulación medio
tarsiana. La aproximación consiste en dirigir la parte más distal del pie hacia la línea media
del cuerpo, siendo la amplitud de este movimiento de 35º-45º en cada sentido. La
separación se llevará a cabo en el momento en el que se dirija la parte más distal del pie
lejos de la línea media del cuerpo. La amplitud es de 35º-45º en cada sentido del
movimiento.
1.4.2.1.4. Inversión
La articulación mediotarsiana lleva a cabo este movimiento cuando el borde
externo del pie se encuentra inmóvil a la vez que es levantado el borde interno del mismo.
De esta manera, la planta del pie quedará dirigida hacia la línea media del cuerpo. Se trata
de un movimiento necesario para llevar a cabo la supinación del pie. La amplitud de este
movimiento es de hasta 50º.
1.4.2.1.5. Eversión
En el transcurso de este movimiento, el borde interno del pie se quedará fijo en una
posición, a la vez que el borde externo es levantado. De esta manera la planta del pie se
encontrará mirando hacia el lado contrario de la línea media del cuerpo. Se trata de un
movimiento más limitado en cuanto amplitud que el de inversión, ya que este es de 25º-
30º. Es un movimiento necesario para llevar a cabo la pronación del pie.
13
1.5. Etiología del espolón calcáneo, el dolor de talón y la fascitis plantar
Por otro lado, en cuanto al origen del espolón calcáneo, Koca et al. aclaran que el
llamado ángulo de Böhler puede ser una causa directa en la formación de dicha afección.
Su explicación se basa en que el calcáneo articula con el hueso cuboides por la parte
anterior y superior, lugar donde se transmite la mayoría del peso del cuerpo desde el talón
hasta el suelo y donde se ubica el ángulo de Böhler. La amplitud normal de dicho ángulo es
de 20º-40º y está formado por la intersección de la línea que nace en el punto más alto de
la faceta articular posterior y finaliza en el punto más alto de la tuberosidad superior. Sin
embargo, este estudio es el primero que investiga la posible relación entre dicho ángulo y
el desarrollo del espolón calcáneo. La importancia de la carga calcánea, especialmente
durante los procesos de caminar y correr, representan la relevancia del ángulo de Böhler
(7).
14
En relación a los factores de riesgo o características que aumentan la probabilidad
de padecer espolón calcáneo, nos encontramos cuatro: Edad, sexo, obesidad y
deformidades en pie o pierna (1,11,25,26). Existen otros factores de riesgo que pueden
provocar la aparición del espolón calcáneo, pero en menor frecuencia. Estos son: La etnia,
el desarrollo anormal del individuo, el tipo de calcáneo, la actividad física, la profesión y
enfermedades ortopédicas como la osteoartritis (1). Y es que la presencia del espolón
calcáneo plantar, se ha asociado significativamente con la osteoartritis, sin embargo, no
existe correlación con otras enfermedades médicas que revisten mayor gravedad como
pueden ser la diabetes mellitus, la hipertensión, el ictus o la enfermedad vascular
periférica (15) (Tabla 6).
15
1.5.3. Fascitis plantar
La fascitis plantar puede ser el resultado de la falta de adaptación de la fascia
plantar a las fuerzas de compresión, flexión o cizallamiento por parte de la éntesis de la
misma (6). La predilección por distribuir el peso corporal sobre los talones puede ser un
factor que contribuye al origen y evolución de esta patología. Sin embargo, este argumento
se encuentra en desacuerdo con la teoría que muestra que la carga que soporta el pie en
bipedestación, no afecta a la integridad de la fascia plantar. No obstante, la patogénesis de
la fascitis plantar no está bien desarrollada y, por tanto, sigue siendo desconocida
(6,22,26). Se ha sugerido que la fascitis plantar representa una forma de codo de tenista
en el talón siendo causada por los repetitivos microtraumas en el punto de inserción
(22,27).
16
fascitis plantar, revelan la creación de fibrosis debido al estrés mecánico (extensión
excesiva o microlesiones) que sufre la aponeurosis plantar, creciendo lenta y
continuamente en su zona de inserción.
17
1.8. Cuadro clínico del espolón calcáneo, dolor de talón y fascitis
plantar
18
1.8.3. Fascitis plantar
En el caso de la fascitis plantar, los pacientes normalmente se quejan de dolor en
la prominencia antero-medial del calcáneo. Este aumenta con la dorsiflexión pasiva de los
dedos de los pies, y estos síntomas pueden estar presentes durante semanas o meses
desde que tiene lugar su origen. El dolor empeora con la bipedestación después de un
período de descanso, más comúnmente por la mañana temprano después de dormir. Una
vez que el paciente comienza a caminar, el dolor tiende a disminuir. Este se alivia, pero
nunca se resuelve completamente a lo largo del día. A su vez, se ve exacerbado por
actividades tales como caminatas prolongadas o ejercicio, sobre todo en superficies duras.
El dolor unilateral suele ser más común que el bilateral (11,20,22).
Según Sadek et al., los síntomas del 80% al 90% de los pacientes con fascitis
plantar, desaparecen al cabo de 10 meses (4). Y según Apóstol-González et al. en la
mayoría de las fascitis plantares acompañadas de la presencia de espolones calcáneos, el
dolor desaparece de manera espontánea, sin secuelas (12).
19
plantar cohabiten (puede existir engrosamiento de la fascia plantar de más de 4
milímetros, o haber un ensanchamiento de más de 2 mm de diferencia con respecto del
lado contralateral. El grosor de la fascia plantar es de 2 a 4 mm en pacientes sanos y de 5
a 7 en pacientes con fascitis plantar). Es una herramienta útil para el diagnóstico puesto
que a su vez, puede diferenciar fácilmente la fascia de la almohadilla de grasa superficial y
el calcáneo subyacente (4,18).
El procedimiento a través del cual se identifica el dolor de talón, así como el del
espolón calcáneo, es laborioso puesto que las causas que originan ambas afecciones son
numerosas, y las dos suelen cursar con una sintomatología parecida. En los dos casos el
factor mecánico es el más común (8). Es vital analizar la historia del paciente, llevar a cabo
un examen físico del pie y tobillo (dolor a la palpación en la tuberosidad del calcáneo con
reproducción de los síntomas) y mandar estudios de imagen apropiados, si son necesarios,
para hacer un correcto y exacto diagnóstico diferencial e iniciar así un tratamiento
adecuado evitando de esta manera llevar a cabo cirugías innecesarias (6,8,12,17). La
ubicación del dolor puede ser una guía para la elaboración de un buen diagnóstico
diferencial (8,12) (Tabla 10).
Según Cutts et al., el 80% de los pacientes que padecen dolor de talón, sufren en
realidad fascitis plantar. Sin embargo, el 20% restante de los aquejados por el dolor de
talón, pueden padecer otro tipo de patologías como son Espondilitis anquilosante,
20
Síndrome de Reiter, Osteoartritis o Artritis reumatoide. El 13% de las radiografías simples
de talones realizadas a pacientes que sufren otras patologías que no son fascitis plantar,
tienen también espolones calcáneos y muchos autores consideran a estos como hallazgos
accidentales (22).
21
inyecciones anestésicas, así como antiinflamatorios no esteroideos. Este método de
tratamiento, puede jugar un papel fundamental en la recuperación del espolón calcáneo
(10).
1.12.3. Fisioterapia
Una gran variedad de métodos en fisioterapia han sido evaluados en el pasado,
pero ninguno de ellos han sido provistos con un nivel alto de evidencia. Estos métodos a
los que se hace referencia son la crioterapia, la termoterapia, los ultrasonidos, la
22
radiofrecuencia, el láser y la terapia con ondas de choque a nivel extracorporal (10,19). Sin
embargo, Holtmann et al. inciden en que la aplicación de dichos métodos en fisioterapia,
han demostrado tener éxito a nivel clínico (9).
La terapia con ondas de choque está bien documentada y trae consigo resultados
favorables en los pacientes aquejados de espolón calcáneo (11,15). Según Król et al., el
espolón calcáneo sintomático puede ser controlado haciendo uso de la terapia de ondas
23
de choque focal y radial (14). La primera de ellas, permite que la mayor cantidad de flujo
de energía posible alcance la profundidad seleccionada dentro del tejido patológicamente
afectado, mientras que la segunda, va disminuyendo progresivamente a medida que viaja
a través de los tejidos. Sin embargo, su actuación simbiótica destruye el fragmento óseo en
micropartículas, provocando a su vez la revascularización de la zona afecta a través de la
liberación de factores de crecimiento locales y la movilización de células madre
apropiadas. Por tanto, tras la valoración de los resultados de los artículos de Król et al. y
Krukowska et al., donde se puede comprobar cómo la intensidad del dolor producida por
los espolones calcáneos tanto en los grupos control como en los experimentales disminuye
gradualmente, se puede afirmar que la terapia de ondas de choque extracorporal es
generalmente efectiva en el tratamiento del espolón calcáneo sintomático. Sin embargo,
protocolos estándar como los de Gerdesmeyer et al. y Gollwitzer et al., elaborados para
comprobar la efectividad de las terapia de ondas de choque focal y radial, no han sido
desarrolladas aún. Su eficacia ha sido solo confirmada en la rotura de cálculos renales
(26,28).
Según Cutts et al., en los últimos años algunas unidades han utilizado la terapia de
ondas de choque extracorporales para el tratamiento de la fascitis plantar. Aunque la
técnica ha sido investigada de forma extensa, se realiza principalmente en centros
especializados. Los defensores de esta técnica, creen que las ondas de choque provocan
roturas a nivel microscópico en la fascia plantar engrosada, originando así una respuesta
inflamatoria, revascularización y reclutamiento de factores de crecimiento, dando lugar de
esta manera a una respuesta reparativa del tejido blando. Tal vez, debería de considerarse
un tratamiento de etapa final para aquellos pacientes que han fracasado en los
tratamientos conservadores y son reacios a someterse a una cirugía abierta (22).
1.12.4. Radioterapia
Según Koca et al. la aplicación de radioterapia en trastornos benignos se encuentra
en uso desde hace casi cien años en Europa central, y los pacientes con espolón calcáneo
constituyen un importante porcentaje de los usuarios que se someten a terapia de
radiación. Sin embargo, la radioterapia sigue siendo el último enfoque de tratamiento para
casos refractarios, especialmente en países distintos de los de Europa central. Hasta la
fecha, el posible riesgo carcinogénico de la terapia por radiación ha sido investigado en
muchos ensayos, pero el riesgo no fue tan alto como se temía en un principio. Los campos
de la radioterapia suelen tratar espolones calcáneos plantares que son demasiado
pequeños y las dosis totales son mucho más bajas que las utilizadas para enfermedades
malignas (7). Sin embargo, los médicos de otras especialidades a veces rehúsan a referirse
24
a los pacientes con la palabra radioterapia, debido al posible temor de estos a los efectos
secundarios locales, tales como el deterioro de la función de las gónadas o la inducción de
malignidades. No obstante, ni la toxicidad local, así como tampoco la inducción tumoral
han sido reveladas. La dosis en las gónadas es comparable a la de las intervenciones
radiodiagnósticas (9,19).
Según Koca et al. la simpleza del tratamiento, la gran precisión del mismo y la
manifestación de efectos adversos a largo plazo, parecen convertir a la radioterapia en una
de las más seguras, baratas y efectivas modalidades de tratamiento para el espolón
calcáneo. Asimismo, defienden junto con Holtmann et al., que los efectos antiinflamatorios
de la radioterapia son importantes en dosis bajas.
Resumiendo los datos tomados de la literatura, puede concluirse que dosis bajas
de radioterapia como tratamiento en el espolón calcáneo doloroso, es efectivo en la gran
mayoría de los pacientes que hacen uso de esta terapia, siendo los efectos secundarios
insignificantes. Además, produce un alivio importante del dolor en pacientes que padecen
espolón calcáneo sintomático. Sin embargo, el efecto placebo puede tener un papel
importante en la aplicación de este tratamiento.
1.12.5. Cirugía
Es consenso general, que los pacientes solo se sometan a cirugía en caso de que
la terapia conservadora no hayan sido lo suficientemente efectiva como para aliviar el dolor
del espolón calcáneo (9,12,22,19,25) entre los 4 y 6 meses de sintomatología (10,21,27).
Según Koca et al. existen varias técnicas quirúrgicas para el tratamiento del
espolón calcáneo plantar sintomático, sin embargo, no incide en cuáles son (7). No
obstante, Agyekum et al. especifican como método quirúrgico en el tratamiento del espolón
calcáneo, la cirugía percutánea (Figura 6). Asegura que se trata de un método sencillo y
con eficacia asegurada, siendo de esta manera una alternativa aceptable y segura. Su
indicación está definida en aquellos pacientes con al menos 6 meses de tratamiento
conservador que no han conseguido aliviar los síntomas del espolón calcáneo. Esta
modalidad de cirugía, disminuye el tiempo de estancia en la mesa de operaciones y
permite al paciente reintegrarse de manera temprana a sus actividades cotidianas en un
total de 10 días. Este tratamiento también es recomendado para los pacientes con
tendinopatía en el tendón de Aquiles que no responden a un tratamiento conservador de 6
meses (10).
25
Según Apóstol-González et al. clásicamente la cirugía consistía en realizar
abordajes a nivel medial y plantar con fasciotomía y resección del espolón (Figura 7).
Actualmente, se han desarrollado técnicas con pequeñas incisiones tanto endoscópicas
como percutáneas con ayuda de cámaras y apoyo de intensificador de imágenes,
realizando así la menor invasión posible y mostrando buenos resultados (12,21).
2. Justificación y objetivos
26
utilización de fisioterapia, para intentar ofrecer mejores resultados profesionales en
aquellos pacientes que se vean afectados por esta disfunción.
Seguidamente, entender cuáles son las causas y los factores de riesgo del espolón
calcáneo, así como descubrir cuál es la sintomatología característica de dicha patología.
Finalmente, conocer cuál o cuáles son los métodos en fisioterapia más efectivos en
el tratamiento del espolón calcáneo.
27
3. Material y métodos
Preguntas de interés
¿Qué plan de tratamiento en fisioterapia se lleva a cabo en la rehabilitación del espolón
calcáneo?, y ¿cuál de los tratamientos utilizados en fisioterapia para tratar el espolón
calcáneo es más eficaz?
Estrategia de búsqueda
En la selección de artículos de esta revisión bibliográfica se han hecho uso de las bases de
datos: Medline/Pubmed, Physiotherapy Evidence Database (PEDro), Google Académico y
Biblioteca Cochrane Plus. En la estrategia de búsqueda se ha utilizado el operador
booleano AND y se ha añadido algún truncador (*) según las bases de datos (Figura 9).
3.1.1. Pubmed
A través de Pubmed se han llevado a cabo 4 búsquedas de artículos distintas,
atendiendo a los criterios de inclusión y exclusión que se detallan a continuación:
Criterios de inclusión:
28
Criterios de exclusión:
Una vez expuestos los criterios de inclusión y exclusión, se procede a detallar cada
una de las búsquedas realizadas a través de Pubmed.
La segunda de ellas, fue el elaborada a través del empleo de las palabras clave:
Heel spur AND physiotherapy. Esta búsqueda ofrecía 8 artículos, de los cuales se
excluyeron 4, ya que, uno de ellos era duplicado de la primera búsqueda, otro no tenía
disponible el abstract y los dos restantes estaban escritos en polaco y ucraniano
respectivamente.
La tercera búsqueda se llevo a cabo haciendo uso de las palabras clave: Heel spur
AND physioterapy AND treatment. Pero los resultados que se obtuvieron fueron los mismos
que en la segunda búsqueda.
La cuarta se realizó con los términos de búsqueda: Heel spur AND physiotherapy
AND treatment AND effectiveness. De esta manera se encontró un solo artículo que fue
excluido al estar escrito en polaco (Tabla 12).
3.1.2. PEDro
La búsqueda realizada a través de este servidor ha consistido en una búsqueda
simple haciendo uso de las palabras clave: Heel Spur*.
29
Artículos cuya puntuación sea de 5 sobre 10 o superior.
En Google Académico se realizó la búsqueda simple con las palabras clave: heel
spur physiotherapy, acotando la misma a 10 años . Sin embargo, todos los artículos
encontrados se excluyeron al ser duplicados de los hallados a través del buscador Pubmed.
4. Discusión
Los estudios elaborados por Toumi et al. defienden que la prevalencia de los
espolones calcáneos, tanto aquíleos como plantares, son significativamente mayores en
las mujeres que en los hombres (3). No obstante, no corroboro tal afirmación, puesto que
todos los pacientes aquejados de espolón calcáneo que he tratado en el período de
30
prácticas eran solo varones. Si bien es cierto, los estudios de epidemiología de esta
afección hacen referencia principalmente a la población de Estados Unidos, por lo que
sería necesario realizar estudios de prevalencia e incidencia en España para conocer en
qué situación actual se encuentra dicha patología en nuestro país.
Menz et al. afirman que los espolones plantares y aquíleos son altamente
prevalentes en personas mayores, y especifica que en los pacientes con una edad superior
a los 61 años es del 72% (15). No obstante, aunque no se pueden extrapolar los datos de
los estudios epidemiológicos realizados en Estados Unidos a nuestro país, se puede
afirmar que los pacientes que acudían al servicio de fisioterapia en atención primaria o
especializada durante el período de prácticas para solucionar esta afectación, superaban
los 60 años de edad y algunos presentaban deformidades como el pie en varo o valgo, lo
cual respaldaría las teorías de Niewald et al., así como de Kujlar et al. que afirman, que dos
de los cuatro factores de riesgo para el padecimiento del espolón calcáneo son la edad y
las deformidades de pie o pierna (1,19). Los otros dos factores de riesgo serían la obesidad
y el sexo. En cuanto al primero, la fisioterapia puede tener un importante papel al poder
intervenir fomentando la promoción de la salud, pautando una dieta saludable y la
realización de ejercicio moderado (siempre que la sintomatología del espolón calcáneo lo
permitiera), a los pacientes con sobrepeso aquejados de esta afección, ya que, como
defienden Chia et al., el espolón calcáneo consiste en la formación de excrecencias
fibrocartilaginosas que se originan en respuesta a las fracturas de estrés del calcáneo en
un intento de proteger a este contra los impactos con el suelo (6). Por tanto, cuanto menos
peso exista en el sujeto, menor será la intensidad que tiene que soportar el calcáneo al
contactar con la superficie en la que se encuentre el paciente.
31
técnica con precisión (20). Por otro lado, la terapia con calor puede ser utilizada para
suavizar la tensión generada en el tendón de Aquiles y para promover el oxígeno y el flujo
de sangre rico en nutrientes a la zona afectada (10). Holtmann et al. inciden en que la
aplicación de todos los métodos en fisioterapia anteriormente descritos, han demostrado
tener éxito a nivel clínico (9). No obstante, Niewald et al. afirman que ninguno de ellos se
encuentran respaldados con un alto nivel de evidencia (19).
Agyekum et al. corroboran que son muchas las opciones de tratamiento existentes
a la hora de lidiar con el dolor que produce el espolón calcáneo, sin embargo, hay falta de
evidencia que muestre cuál de ellas es la más efectiva (10). Este es un aspecto en el que
estoy totalmente de acuerdo, además considero de suma importancia la elaboración de
estudios que valoren cuál o cuáles podrían ser las opciones de tratamiento más
importantes y de primera línea en el abordaje de esta patología, sin embargo, cabe
destacar que tras el análisis de todos los estudios que conforman la bibliografía de este
trabajo, el tratamiento en fisioterapia más efectivo para combatir el espolón calcáneo, es la
combinación de ultrasonidos con crioterapia según el estudio aportado por Costantino et
al. (20). La alta efectividad de esta terapia se consigue gracias a la unión del cono de
enfriamiento producido por la crioterapia y el efecto generado por las ondas ultrasónicas
de alta potencia. De esta manera, se crea un efecto térmico profundo que es muy bien
asimilado por el paciente y muy efectivo en la reducción de los síntomas dolorosos a corto
32
y largo plazo. Por tanto, esta terapia de generación de crioultrasonidos ofrece un curso
clínico efectivo y duradero en pacientes con fascitis plantar y espolón calcáneo, otorgando
una alta eficiencia terapéutica, satisfacción por parte de los pacientes que hacen uso de
ella, su bajo coste y su protocolo de uso breve y repetible (20).
Por otro lado, a través de los estudios de Krukowska et al. y Król et al., se puede
corroborar que la terapia con ondas de choque focal y radial ha supuesto una alternativa
muy efectiva como tratamiento de fisioterapia en la disminución y desaparición del dolor
producido por el espolón calcáneo. Asimismo, la forma de aplicación de esta terapia es
fácil y no requiere una localización precisa de la lesión, ya que, tiene un gran campo de
actuación en la zona de tratamiento (14,25).
El lograr una recuperación total del paciente con espolón calcáneo a través de la
fisioterapia puede evitar la aplicación de otras terapias de mayor magnitud como son la
radioterapia o la cirugía. Sin embargo, en cuanto a la primera de ellas, según Koca et al. la
simpleza del tratamiento, su gran precisión y la manifestación de efectos adversos a largo
plazo, parecen convertir a la radioterapia en una de las más seguras, baratas y efectivas
modalidades de tratamiento para el espolón calcáneo (7). Asimismo, defienden junto con
Holtmann et al., que esta proporciona efectos antiinflamatorios cuando es aplicada a dosis
bajas (9). Por otro lado, si prestamos atención a la cirugía, Heider et al. ha proporcionado
resultados excelentes en las técnicas de fasciotomía y resección del espolón calcáneo a la
33
hora de aliviar los síntomas provocados por el espolón calcáneo, facilitando a su vez la
reincorporación de estos sujetos a sus actividades diarias casi de forma inmediata (9). Sin
embargo, desde mi punto de vista considero que la fisioterapia ha de intentar conseguir
paliar la sintomatología del espolón calcáneo antes de emplear ambas técnicas, ya que,
con la radioterapia si están descritos efectos secundarios, aunque estos sean a largo
plazo, pero la aplicación de esta terapia supone de por si un riesgo para la salud de los
pacientes. En cuanto a la cirugía, a pesar de su contrastado alto porcentaje de efectividad,
donde solo la liberación endoscópica de la fascia plantar ha reportado una tasa de éxito
del 81,1% al 97% en los pacientes aquejados de fascitis plantar con espolón calcáneo
(20), considero que hay que evitar al máximo las complicaciones que puede traer consigo
un intervención quirúrgica en estos pacientes, como son infecciones, heridas o rotura de
suturas tras la intervención. Por lo tanto, la fisioterapia tiene un papel muy importante en el
tratamiento escalonado del espolón calcáneo, es decir, gracias a su utilización, pacientes
aquejados por esta afección no tienen que hacer uso de técnicas con mayor riesgo de
producir efectos no deseados a largo plazo como la radioterapia, o de procedimientos de
abordaje quirúrgico cuya aplicación invasiva la convierte en la forma de tratamiento de
última elección, a pesar de que la fasciotomía y resección del espolón calcáneo den muy
buenos resultados en la desaparición de síntomas provocados por esta afección, así como
a la hora de la reincorporación en las actividades de la vida diaria de los pacientes afectos.
5. Conclusiones
34
La fisioterapia ha de encargarse de que el paciente no manifieste recidivas de la
lesión tras la superación de la misma.
35
6. Bibliografía
4. Sadek A, Fouly E, Elian M. Lateral plantar nerve release with or without calcaneal
drilling for resistant plantar fasciitis. Journal of Orthopaedic Surgery; 2015. 23(2):
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6. Chia J, Suresh S, Kuah A, Ong J, Phua J, Seah A. Comparative trial of the foot
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flat insoles in patients with chronic plantar fasciitis. Ann Acad Med Singapore;
2009. 38 (10): 869-875.
7. Koca T, Aydin A, Sezen D, Basaran H, Karaca S. Painful plantar heel spur treatment
with Co-60 teletherapy: factors influencing treatment outcome. SpringerPlus. 2014,
21 (3): 1-4.
11. Yi T, Lee G, Seo I, Hub W, Yoon T, Kim B. Clinical characteristics of the causes of
plantar heel pain. Ann Rehabil Med; 2011. 35: 507-513.
36
13. McMillan AM, Landorf K, Barrett J, Menz H, Bird A. Diagnostic imaging for chronic
plantar heel pain: a systematic review and meta-analysis. Journal of Foot and Ankle
Research. 2009; 32 (2): 1-11.
15. Menz HB, Zammit GV, Landorf KB, Munteanu SE. Plantar calcaneal spurs in older
people: longitudinal traction or vertical compression? Journal of Foot and Ankle
Research; 2008. 7(1): 1-7.
17. Rosenbaum AJ, DiPreta JA, Misener D. Plantar Heel Pain. Medicine Clinical N Am;
2014. 98: 339-352.
18. McMillan AM, Landorf KB, Barrett JT, Menz HB, Bird AR. Diagnostic imaging for
chronic plantar heel pain: a systematic review and meta-analysis. Journal of Foot
and Ankle Research; 2009. 32(2): 1-11.
20. Costantino C, Vulpiani MC, Romiti D, Vet M, Saraceni VM. Cryoultrasound therapy in
the treatment of chronic plantar fasciitis with heel spurs. A randomized controlled
clinical study. European Journal of Physical and Rehabilitation Medicine; 2014. 50:
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22. Cutts S, Obi N, Pasapula C, Chan W. Plantar fasciitis. Ann R. Coll Surg Engl; 2012.
94: 539-542.
23. Netter FH. Atlas de anatomía humana. 6ª Edición. España: Editorial Elsevier; 2015.
Sección 7: 511-524.
24. Tixa Serge. Atlas de anatomía palpatoria. 2ª Edición. España: Editorial Elsevier;
2006. Capítulo V: 145-219.
26. Irving DB, Cook JL, Menz HB. Factors associated with chronic plantar heel pain: a
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37
27. Niewald M, Holtmann H, Prokein B, Hautmann M, Rösler H, Graeber S, Dzierma Y,
Ruebe C, Fleckenstein J. Randomized multicenter follow-up trial on the effect of
radiotherapy on painful heel spur (plantar fasciitis) comparing two fractionation
schedules with uniform total dose: first results after three months’ follow-up.
Niewald et al. Radiation Oncology; 2015. 10: 1-7.
28. P. Gartner, James L. Hiatt. Atlas en Color y Texto de Histología. 6º Ed. España:
Editorial Médica Panamericana; 2015: capítulo 4: 80-84.
38
Figuras y gráficos
39
Figura 2. Visión dorsal y visión plantar de los huesos del pie. Fuente: Netter et al.
40
Figura 3. Visión lateral y medial de los huesos del pie. Fuente: Netter et al.
41
Figura 4. Visión lateral, superior, medial y posterior del hueso calcáneo. Fuente: Netter et
al.
42
Figura 5. Fotografía de plantillas. De izquierda a derecha: plantillas planas, almohadillas
para el talón con espolón calcáneo, plantillas ortopédicas y órtesis personalizadas con
apertura en el talón. Fuente: Chia et al.
43
A B C D
A B C
Figura 8. A y B: Aspecto clínico del pie, con edema y deformidad. Se observa la cicatriz del
abordaje plantar en el talón. C. La imagen radiológica derecha muestra el sitio de lesión de
la cortical inferior del calcáneo. En la izquierda se puede evidenciar una fractura de
calcáneo. Fuente: Apóstol-González et al.
44
4%
13%
5%
PUBMED
PEDro
ATLAS
78%
LIBROS
Figura 9. Porcentaje de utilización de cada una de las bases de datos del espolón calcáneo
(Medline:78%, Atlas: 13%, PEDro: 5%, Libros: 4%).
45
7. Tablas y cuadros
Su función es estabilizadora.
Su función es dinámica.
46
Tabla 2. Fases de apoyo en la marcha. Fuente: Kapandji et al.
47
Tabla 3. Ligamentos que intervienen en los movimientos de inversión y eversión. Fuente:
Netter et al.
Ligamento en Y.
48
Tabla 4. Análisis muscular de los principales movimientos de la articulación medio tarsiana.
Fuente: Netter et al.
M. tibial anterior.
M. tercer peroneo.
49
Tabla 5. Músculos que actúan conjuntamente en las Articulaciones Tibiotarsiana y
Mediotarsiana. Fuente: Netter et al.
Edad.
Sexo.
Factores de riesgo principales
Obesidad.
Etnia.
Actividad física.
Profesión.
50
Tabla 7. Etiología mecánica del dolor de talón por la localización. Fuente: TU et al.
Etiología Rasgos Clínicos Tratamiento inicial
PLANTAR:
Fascitis Plantar. Dolor a los primeros pasos Reposo relativo.
durante la mañana o Ejercicios de estiramiento.
después de largos períodos Medicación antiinflamatoria
de descanso. o analgésica.
Sensibilidad en la Hielo.
tuberosidad calcánea Soporte del arco.
medial y a lo largo de la
fascia plantar.
51
Continuación Tabla 7. Etiología mecánica del dolor de talón por la localización. Fuente: TU
et al.
Etiología Rasgos Clínicos Tratamiento inicial
POSTERIOR:
Tendinopatía aquílea. Dolor intenso y Ejercicios excéntricos.
ocasionalmente y afilado. Disminución de la presión
Empeoramiento con el del área afecta.
aumento de la actividad o Elevación del talón, otros
presión del área. aparatos ortésicos.
Sensibilidad a lo largo del Medicación antiinflamatoria
tendón de Aquiles. y analgésica.
Ocasionalmente
prominencia palpable del
tendón espesante.
52
Continuación Tabla 7. Etiología mecánica del dolor de talón por la localización. Fuente: TU
et al.
Etiología Rasgos Clínicos Tratamiento inicial
MEDIOPIE (medial):
Tendinopatía tibial posterior. Sensibilidad en el hueso Ejercicios excéntricos.
navicular y en el hueso Disminución de la presión
cuneiforme a la altura del área afecta.
medial. Medicación antiinflamatoria
y analgésica.
MEDIOPIE (lateral):
Tendinopatía peroneal. Sensibilidad en el calcáneo Ejercicios excéntricos.
lateral a lo largo del camino Disminución de la presión
de la base del quinto del área afecto.
metatarsiano. Medicación antiinflamatoria
y analgésica.
53
Tabla 8. Causas del dolor de talón. Fuente: Agyekum et al.
Causas del dolor de talón plantar Causas del dolor de talón posterior
Apofisitis calcánea.
Obesidad.
Bipedestación prolongada.
Sobrecarga.
54
Tabla 10. Diagnóstico diferencial del dolor de talón. Fuente: TU et al.
Gota.
Espondiloartropatías seronegativas.
Ulceras diabéticas.
INFECCIOSO Osteomielitis.
Verrugas plantares.
MECÁNICO TABLA 8
Neuroma.
Neuropatía periférica.
TRAUMATISMO
Sarcoma de Ewing.
TUMOR (raro)
Neuroma.
VASCULAR (raro)
NUTRICIONAL Osteomalacia.
55
Tabla 11. Artículos seleccionados para la revisión bibliográfica.
56
Continuación Tabla 11. Artículos seleccionados para la revisión bibliográfica.
REVISTA TÍTULO AUTOR TIPO DE CONCLUSIONES
ESTUDIO
Journal of foot Diagnostic McMillan et al. Revisión Las personas
and ankle imaging for sistemática de con dolor de
research chronic plantar 23 estudios. talón plantar
(2009). heel pain: a crónico es
systematic probabale que
review and tengan una
meta-analysis. fascia plantar
engrosada con
una colección
de líquido
asociada.
57
Continuación Tabla 11. Artículos seleccionados para la revisión bibliográfica.
REVISTA TÍTULO AUTOR TIPO DE CONCLUSIONES
ESTUDIO
SpringerPlus Painful plantar Koca et al. Estudio La sencillez del
(2014). heel spur longitudinal en tratamiento, la
treatment with 62 pacientes. ausencia de
Co-60 efectos
teletherapy: adversos
factors agudos y su
influencing bajo coste,
treatment parecen
outcome. convertir a la
radioterapia
como una de
las
modalidades de
tratamiento
más seguras,
más baratas y
también
eficaces en el
espolón
calcáneo
plantar
sintomático.
58
Continuación Tabla 11. Artículos seleccionados para la revisión bibliográfica.
REVISTA TÍTULO AUTOR TIPO DE CONCLUSIONES
ESTUDIO
Chinese Journal Heel pain: A Agyekum et al. Revisión Hay muchas
of Traumatology systematic sistemática. opciones de
(2015). review. tratamientos
que existen
cuando se trata
de dolor de
talón, pero hay
falta de
pruebas para
mostrar cuál es
el más eficaz.
59
Continuación Tabla 11. Artículos seleccionados para la revisión bibliográfica.
REVISTA TÍTULO AUTOR TIPO DE CONCLUSIONES
ESTUDIO
Acta ortopédica Cirugía Apóstol- Estudio La cirugía
mexicana percutánea en González et al. descriptivo, percutánea del
(2009). fascitis plantar observacional pie en talalgias
por espolón de serie clínica por fascitis
calcáneo. (valoración de plantar con
los resultados espolón
en 10 personas calcáneo, es un
diagnosticados método sencillo
con talalgia por y eficaz.
fascitis plantar Disminuye el
con espolón tiempo
calcáneo y quirúrgico y
tratados por permite al
cirugía paciente
percutánea de reintegrarse de
pie). manera rápida
a sus
actividades
habituales.
60
Continuación Tabla 11. Artículos seleccionados para la revisión bibliográfica.
REVISTA TÍTULO AUTOR TIPO DE CONCLUSIONES
ESTUDIO
Ann R Coll Surg Plantar fasciitis. Cutts et al. Estudio La fascitis
Engl (2012). tranversal. plantar es una
afección común
y normalmente
incapacitante
que mejora con
el
establecimiento
de un
tratamiento
apropiado.
61
Continuación Tabla 11. Artículos seleccionados para la revisión bibliográfica.
REVISTA TÍTULO AUTOR TIPO DE CONCLUSIONES
ESTUDIO
Revista de Effectiveness of Rodriguez- Revisión La utilización de
salud, shock wave as Mansilla et al. sistemática. esta técnica
discapacidad y a method of mejora el dolor
terapéutica heel spur en pacientes
física (2014). treatment. con espolón
calcáneo. Es
necesario un
mayor número
de estudios
para determinar
la eficacia de
las ondas de
choque en el
espolón
calcáneo.
62
Continuación Tabla 11. Artículos seleccionados para la revisión bibliográfica.
REVISTA TÍTULO AUTOR TIPO DE CONCLUSIONES
ESTUDIO
Medicine Plantar Heel Rosenbaum et Artículo de El dolor de talón
Clinical N Am Pain. al. revision. plantar es
(2014). fenómeno
hallado
frecuentemente
que transciende
a diversas
especialidades
médicas,
incluyendo
ortopedia,
cirugía y
atención
primaria. La
fascitis plantar,
es la causa más
común.
63
Continuación Tabla 11. Artículos seleccionados para la revisión bibliográfica.
REVISTA TÍTULO AUTOR TIPO DE CONCLUSIONES
ESTUDIO
J Sci Med Sport Factors Irving et al. Revisión El dolor crónico
(2006). associated with sistemática. de talón
chronic plantar plantar, es una
heel pain: a de las más
systematic comunes
review. alteraciones del
tejido blando
del pie, cuya
etiología es aún
pobremente
comprendida.
Heel spur
2 AND 8 4 4
physiotherapy
Heel spur
AND
3 physiotherapy 8 0 0
AND
treatment
Heel spur
AND
physiotherapy
4 AND 1 0 0
treatment
AND
effectiveness
64