Tarea Modernalismo
Tarea Modernalismo
Tarea Modernalismo
Fecha: 16/04/2022
Modernalismo
sistemas de producción, al permitir la creación en serie de bienes para el consumo. Pero
también la aparición de nuevos medios de transporte más rápidos y eficientes, que
permitieron potenciar el comercio. La forja del hierro como elemento arquitectónico es
otro de los adelantos de la época, permitiendo la construcción de grandes estructuras
que dieron lugar a amplias naves de trabajo, entre otros edificios.
Modernalismo
Entonces se produce el gran éxodo de ciudadanos procedentes del campo a las
ciudades para trabajar como obreros de las numerosas fábricas que iban apareciendo.
Terrassa empieza a multiplicar su población de forma exponencial, dejando de ser un
pequeño municipio para transformarse en una gran ciudad. La ciudad se llena de naves
de ladrillo y altas chimeneas de los vapores que movían la industria local. La sociedad
empieza a cambiar, alejándose de la economía agrícola y centrándose en una potente
industria lanera que muy pronto situaría los «paños de Terrassa» en el mapa del sector
textil internacional. Los grandes industriales crearon una importante burguesía local
que quiso dotarse también de sus propios ateneos, casinos y teatros, brindando así a
la ciudad de una rica agenda cultural y de equipamientos urbanos aderezados por una
nueva corriente artística que floreció entre los siglos XIX y XX: el Modernismo.
Como expresión arquitectónica, el modernismo es una corriente esencialmente
decorativa, aunque dotada de soluciones arquitectónicas originales. La arquitectura de
la ingeniería del siglo XIX estaba ampliamente basada en el desarrollo del hierro,
primero como hierro fundido, después como hierro forjado, más tarde como acero.
Pero posteriormente fue incorporando nuevos elementos, como el hormigón armado.
Impregnada de los gustos estéticos de esa época, esa arquitectura industrial también
evolucionó incorporando los criterios ornamentales de la corriente modernista, al
igual que ocurriera en el caso de la arquitectura residencial. El origen de este tipo de
arquitectura se localiza en Bélgica, donde nace bajo en nombre de Art Noveau de la
mano de los arquitectos Van de Velde y Victor Horta. Pero su ideario se expande por
más lugares del mundo. Viena ve nacer la Sezession, con figuras totémicas como Otto
Wagner, y en Catalunya surge el Modernisme y Noucentisme con Antoni Gaudí, entre
otros.
A mediados del siglo XIX Terrassa era una de las ciudades catalanas y españolas
punteras en la revolución industrial. Se había especializado en la industria de la lana
y el sector textil era el auténtico motor económico de una ciudad totalmente
transformada. Los prohombres de la época, tal como ocurre en la actualidad, también
quisieron rivalizar a la hora de erigir sus fábricas y residencias. Para ello, recurrieron
a algunos de los arquitectos de la época más significados con esta corriente
estética. Melcior Vinyals, Josep Maria Coll i Bacardí o Lluís Muncunill fueron algunos
de los artífices de la eclosión del modernismo en la ciudad, especialmente el último
de ellos, que fue el arquitecto más prolífico, autor de algunos de los edificios más
emblemáticos de la ciudad.
El rápido desarrollo de Terrassa en una época muy concreta de su historia hizo que
se produjera una gran concentración de edificios de interés artístico, que surgieron al
amparo de la industria. De ahí el concepto del modernismo industrial con el que las
instituciones promueven ahora el turismo cultural en la ciudad. Dicha concentración
es tal que constituye una de las más importantes del mundo si tenemos en cuenta la
profusión de fábricas, viviendas, edificios públicos y otros elementos urbanísticos. No
en vano, en un pasado reciente, la ciudad podía verse como un gran complejo fabril
dominado por las chimeneas, hoy en día también principal elemento visual, aunque
con una función meramente estética.
El modernismo legó a la ciudad alrededor de 70 edificios de interés histórico y cultural,
entre los que cabría destacar la Masia Freixa, el Vapor Aymerich, Amat i Jover, la Casa
Josep Maria Coll i Bacardí (Casa Baumann), la Casa Alegre de Sagrera, el Teatro
Principal o la antigua confitería Vídua Carné.
A raíz de la celebración de los Juegos Olímpicos de Barcelona 1992, en los que
Terrassa fue subsede olímpica de hoquey hierba, la ciudad se planteó la posibilidad
de explotar turísticamente su potencial patrimonial. Los fenómenos del turismo
cultural y del turismo industrial empezaban a llegar al gran público en una época en
la que Cataluña exploraba la evolución futura del modelo turístico definido en los
años sesenta y setenta. Terrassa empezó a crear una oferta de servicios y rutas
turísticas estrechamente vinculadas al patrimonio industrial modernista, así como
también a elementos singulares de su patrimonio medieval, como el conjunto de
las iglesias de Sant Pere, o de su entorno paisajístico, como el Parque Natural de Sant
Llorenç i la Serra de l’Obac. En la primavera de 1993, el Ayuntamiento, el Museo de
Terrassa y el Museo Textil organizaron una jornada cultural y festiva en la que se
reprodujo la ambientación de la Terrassa de un siglo atrás: exactamente, del 28 de
marzo de 1918. Esa ruta teatralizada comportó la recreación de vestuarios, y escenas
características, que permitían revivir la atmósfera de la antigua ciudad industrial.
La década siguiente se fue consolidando progresivamente la oferta turística egarense,
y Terrassa consolidó su posición en el mapa turístico catalán, con el apoyo de
la Diputación de Barcelona y de la Generalitat de Cataluña. Ello le permitió tomar parte
posteriormente en iniciativas como la red Réseau Art Nouveau Network, creada a
escala europea en 1999, o la Red de Turismo Industrial de Cataluña con sede en
Terrasa desde 2006. Actualmente, Terrasa ocupa un lugar destacado en el mapa
europeo del modernismo y el turismo industrial, junto a municipios como Barcelona,
Reus, Sitges,Bad Nauheim (Alemania), Lodz (Polonia), Tiflis (Georgia), La-Chaux-de –
Fonds (Suiza), Bruselas (Bélgica), Alesund (Noruega), Glasgow (Reino Unido),
Helsinki(Finlandia), Viena (Austria), Liubliana (Eslovenia), Nancy y Aviñón (Francia) o
la provincia de Varese ( Italia).
En torno a todo ese patrimonio, el Ayuntamiento de Terrassa pone a disposición de
los visitantes hasta cinco rutas turísticas a través de las cuales se dan a conocer
algunos de los principales edificios, su historia y sus valores arquitectónicos
Ubicado en el número 54 del Portal de Sant Roc, la Casa del Bunyolero es uno de
los edificios más peculiares del modernismo terrassense por su fachada totalmente
cubierta por cerámica decorada. Bien de interés cultural local, este inmueble
residencial fue construido a principios del siglo XX, pero su aspecto actual se debe a
una reforma ejecutada en 1916 por Josep Maria Coll i Bacardí.
Casa Joan Barata
La Casa Joan Barata, como es conocido este edificio de tres plantas, se halla en la ruta
del modernismo que transcurre por el centro de la ciudad, en una calle que cuenta con
varios ejemplos de este legado arquitectónico. La reforma de Muncunill afectó al
interior y al exterior, cambiando por completo su fisionomía con elementos
claramente modernistas entre los que destaca fundamentalmente el uso del
esgrafiado, que hace de esta casa un ejemplo singular en Terrassa. Valiéndose de esta
técnica (consistente en cincelar dibujos en el enlucido y revestimiento de los muros),
Muncunill “pintó” con hojas toda la fachada.
Almacén Cortés i Prats
Entre los años 1906 y 1925, sus bajos acogieron al café Condal, toda una institución
para la sociedad egarense de principios del siglo XX. En 1906 y a iniciativa del pintor
Vancells, se instaló en su primer piso una sala de espectáculos modernistas
denominada Ars Lucis. En 1911 su primera planta también fue la sede del cine
Egara, y a partir de 1925 el edificio se convirtió en la sede del Sindicato Comercial e
Industrial, hasta recuperar nuevamente diversos usos comerciales.
Almacén Joaquim Alegre
La Masía Freixa era la residencia familiar del industrial Josep Freixa i Argemí, quien
encargó su construcción al arquitecto Lluís Muncunill. Anticipándose a lo que
ocurriría muchos años después en la ciudad (la transformación de antiguas fábricas
en viviendas), el proyecto se ejecutó en torno a una fábrica, de la que se aprovechó
su estructura original y su cubierta. El edificio estaba rodeado por un gran jardín
(actual Parque de Sant Jordi) y se hallaba en una zona de ensanche de la ciudad,
alejado de lo que en aquellos tiempos era la trama urbana.
Sociedad General de Electricidad
Teatro Principal
Quienes fueron los primeros modernista
y cuáles fueron sus aportes
Sin embargo, una lista de los más conocidos incluye a los siguientes
José Asunción Silva (colombiano, 1865-1896). Poeta y viajero, de obra breve pero
importante, en la que destaca El libro de versos (1923, póstumo). Se suicidó de un
tiro en el corazón a los 30 años.