LENTES OFTALMICOS

Un lente, palabra que proviene del latín “lentis”, que significa “lenteja”, es un medio u objeto que
concentra o dispersa rayos de luz. El lente oftálmico está formado por dos superficies refractoras,
transparentes, generalmente una cóncava y una convexa, que son responsables de sus
propiedades ópticas. Al combinar los lentes oftálmicos con el sistema óptico visual, se modifican
las características de los rayos luminosos que llegan a los ojos, corrigiendo un defecto refractivo o
protegiéndolos de radiaciones o agentes físicos nocivos (protección ocular); o bien modificando el
centrado del sistema óptico que forman.
El poder total de un lente para desviar la luz se representa por su poder focal. La unidad básica del
poder focales expresada como dioptría; por convención esta unidad la convergencia de la luz al
atravesar un lente cuya distancia focal es un metro.
Un sistema dióptrico es un sistema óptico formado por una superficie en la que se refracta la luz y
que separa dos medios transparentes de diferente índice de refracción, homogéneos e isótropos,
es decir que la velocidad de la luz es la misma en todos sus puntos, así como en cualquier dirección
que se considere.
Por definición, el poder dióptrico es proporcional al inverso de la distancia focal del lente en
metros. n

Donde:

D: poder focal en Dioptrías.

n: índice de refracción del medio en el cual la luz está viajando cuando sale del lente (aire).

f: distancia focal (metros).

Ejemplos:

Si la distancia focal de un lente es 1 metro en el aire, entonces 1/1m= 1.00 D

Si la distancia focal es de 50 cm en el aire, entonces 1/0.5m= 2.00 D

Igualmente, la distancia focal de un lente en el aire se puede hallar tomando el reciproco del
poder dióptrico. La distancia focal es medida desde la superficie posterior del lente al punto focal.
Este intervalo se conoce como la distancia de vértice focal. Por lo tanto, el poder dióptrico de un
lente oftálmico corresponde al poder de vértice.

Ejemplos:

Si el poder del lente es +2.50 D, entonces 1/ 2.50 = 40 cm.

Si el poder del lente es +3.00 D, entonces 1/ 3.00 = 33.3 cm.

Los lentes oftálmicos compensan los defectos que pueden presentar el sistema visual: miopía
hipermetropía, astigmatismo, presbicia, se fabrican en intervalos de ¼ de dioptría. Neutro, 0.25,
0.50, 0.75, 1.00. (tanto positivos como negativos).
REFRACCION:

Es el cambio de dirección que sufren los rayos de luz al pasar oblicuamente de un medio con
propiedades físicas diferentes. Esto es lo que sucede cuando la luz atraviesa los medios
transparentes del ojo para enfocar en la retina.

Los fenómenos de refacción son la base de aplicación de lentes y prismas.

INDICE DE REFRACCION:

El índice de refracción (n) caracteriza el medio por el que se propaga la luz y se define como la
razón entre la velocidad de la luz en el vacío (c) y la velocidad de la luz cuando atraviesa el material
del que está hecho el lente (v).

La velocidad de la luz en el vacío es de 3x10 m/s (300.000 km/s), que es también la misma
velocidad con la que cualquier onda electromagnética se propaga en el vacío. Se nota por el
símbolo “c” y es uno de las constantes fundamentales de la física moderna.
Debido a la interacción de la luz con la materia, la luz viaja en medios materiales con velocidades
menores a su velocidad en el vacío. Por lo tanto, el índice de refracción es un número
adimensional mayor o igual a uno (n=1).
Por ejemplo, si la velocidad de la luz en el medio es 189,000 km/s, ¿cuál sería el índice de
refracción de dicho medio? 300,000 n= = 1.5873.
189,000
La velocidad en el aire es prácticamente igual a la velocidad de la luz en el vacío: n(aire)=1.00 La
luz blanca solar está formada por una infinidad de luces coloreadas, cada una de las cuales tiene
una longitud de onda determinada.
Si esta luz atraviesa un prisma óptico, cada uno de los rayos se desviará según su longitud de onda.
Esto origina una desigualdad de desviación según los colores, que recibe el nombre de espectro.
El conjunto de líneas espectrales que se obtiene para un elemento concreto es siempre el mismo,
incluso si el elemento forma parte de un compuesto complejo y cada elemento produce su propio
espectro diferente al de cualquier otro elemento. El índice de refracción se debe referir a una
longitud de onda determinada (𝝀) y para ello se asigna un subíndice que la indica (n𝝀). Los más
comúnmente utilizados en óptica oftálmica son: nD (línea amarilla del sodio D), nd (helio d) y ne
(línea verde del mercurio).
En la fabricación de lentes de diversos índices de refracción, si los laboratorios oftálmicos señalan
otro índice de refracción que no sea de los básicos o correspondiente a la raya de Fraunhofer o la
longitud de onda (arques, 2000).
Ejemplos:
nF =1.64: quiere decir que el índice de refracción es el que corresponda a la raya F de Fraunhofer.
N656 =1.59: equivale a decir que nos referimos al índice que corresponde a la longitud de onda de
656 nanómetros.
Esto es debido a que el índice de refracción disminuye cuando la longitud de onda aumenta (para
materiales ópticos).
Con la creación de nuevos polímeros (materiales plásticos) para lentes oftálmicos, las casas
comerciales ofrecen diferentes valores del índice de refracción (bajo, medio, alto y muy alto). El
optometrista, al elegir el lente ideal para una prescripción oftálmica, debe tener en cuenta,
además del índice de refracción, las propiedades ópticas, físicas y el diseño, con el fin de obtener y
de menor peso.
Si se valora únicamente el índice de refracción, los lentes oftálmicos se pueden clasificar de la
siguiente forma:
Bajo índice: n ≥ 1.48 y < 1.53
Medio índice n ≥ 1.54 y < 1.60
Alto índice n ≥ 1.61 y < 1.70
Índice muy alto n ≥ 1.71

Dispersión relativa. Numero Abbe:

La luz, al atravesar un medio transparente, se descompone en los diferentes colores del espectro;
esto depende de varios factores, entre los que se destaca la dispersión relativa o cromática.
La dispersión cromática indica la mayor o menor desviación que puede
experimentar la trayectoria de la luz en función de su color, es decir, de su longitud de onda, al
atravesar un determinado medio.
La dispersión (D) está relacionada con el índice de refracción, de forma que será mayor cuanto
mayor sea la diferencia entre los índices que tiene el lente para las distintas longitudes de onda
próximas a la luz que se analiza.

Dónde: 𝜹n: Variación del índice de refracción.

𝜹𝝀: Intervalo de longitudes de onda.
Es decir, si se analiza la dispersión para la luz en el centro del espectro visible (del amarillo d), se
deben escoger los índices (n) próximos: F y C, del azul y el rojo respectivamente.
Por lo que la dispersión media es la diferencia entre los índices de refracción de las rayas Fy C de
Fraunhofer. Existen otras dispersiones denominadas parciales, comprendidas entre otras líneas.

(Dispersión media) D= nf – nc

El poder dispersivo se define mediante la razón:

El poder dispersivo es una característica importante de cualquier material óptico y varía

considerablemente para los diferentes materiales.
La medida de la dispersión se expresa por medio del Numero Abbe. Este fenómeno fue estudiado
ampliamente en el siglo XIX por el físico alemán Ernst Abbe (1840-1905).
El valor Abbe es la habilidad del material para dispersar la luz. En óptica oftálmica se utiliza
Dispersión o su valor inverso, que se denomina Numero Abbe y se simboliza por una V.

Donde:
Vd: Numero Abbe para la línea d del helio.
Nd: Índice de refracción del medio de longitud de onda del helio, línea d (587.56nm).
Nf: Índice de refracción del medio para la longitud de onda del hidrogeno, línea F (486.13nm).
Nc: Índice de refracción del medio para la longitud de onda del hidrogeno, línea C (656.27nm).
El valor Abbe promedio para el ojo humano es de 45, y para los lentes oftálmicos se encuentra
entre 60 y 30 aproximadamente (Bruneni, 1993), por lo tanto, los valores elevados de Abbe
(mayores de 45) indican menor dispersión que los valores menores y por supuesto estos deben ser
los más utilizados, ya que los materiales oftálmicos con un valor menor producen mayor
aberración cromática.
Por ejemplo, el CR-39 es considerado un material cromático bajo porque tiene un valor Abbe de
58, mientras el policarbonato se considera un material altamente cromático por tener un valor
Abbe de 32.
Transmisión, absorción y reflexión

Cuando la luz incide sobre una superficie, su comportamiento varía según sea la consideración de
la superficie y la inclinación de los rayos incidentes, dando lugar a tres fenómenos: transmisión o
refracción, absorción y reflexión, por cada superficie del lente. De esta manera, el flujo incidente o
intensidad inicial (𝚽) = 𝚽T + 𝚽A + 𝚽R

Donde 𝚽T : flujo transmitido, 𝚽A : flujo absorbido y 𝚽R : flujo reflejado (Arques, 2000).

La transmisión es la capacidad que tiene un material de ser atravesado por la luz y está
directamente relacionada con la transparencia del material.
Para conocer el porcentaje de transmisión de un lente en la zona del espectro correspondiente al
ultravioleta, espectro visible e infrarrojo cercano, se recurre a un instrumento denominado
espectrofotómetro, el cual determina por medio de curvas el porcentaje de radiación de longitud
de onda corta (radiación ultravioleta) que el lente filtra y, en consecuencia, su grado de protección
frente a estas radiaciones particularmente nocivas.
La absorción se define como la cantidad de energía radiante del espectro que el lente no deja
pasar y no es radiación reflejada.
En la naturaleza no existe un cuerpo absolutamente transparente, sino que todos ellos absorben la
luz de una manera más o menos intensa, oponiendo una resistencia a su libre propagación; esto se
manifiesta por una disminución de la intensidad luminosa del rayo, tanto más grande cuanto
mayor sea la absorción del medio.
Reflexión es el cambio de dirección que experimenta una onda luminosa al chocar con la
superficie. El grado de reflexión por superficie depende de varios factores: la frecuencia de la
radiación, el ángulo de incidencia y el índice de refracción del material. Cuanto más elevado es el
índice de refracción, mayores son las perdidas por la reflexión, o sea, mayor es la perdida de la luz.
La reflexión de los rayos luminosos sobre las superficies de los lentes oftálmicos es la causa de las
imágenes fantasma que pueden aparecer en determinadas condiciones.
Por lo tanto, la intensidad de un haz de rayos decrecerá al sufrir la refracción, debido a las
siguientes perdidas: por reflexión sobre la superficie de discontinuidad óptica, y por absorción al
atravesar el medio óptico. Estos dos factores dependen también del espesor y la colocación del
lente.
Dicha reflexión se puede calcular con la fórmula de Fresnel.
Esta solo es válida cuando la luz incide perpendicularmente sobre el lente (Hecht, 1986):
Donde:
n2: Índice del lente.
N1: índice del aire.
R: Coeficiente de reflexión.
(Si la absorción es despreciable R + T = 100%)
T: Coeficiente de transmisión.

Ejemplo: 1. ¿en un lente de vidrio Crown, con un índice de 1.523, del 100% de luz que llega al
lente, que porcentaje llega al ojo?
La cantidad de luz perdida por reflexión en la superficie frontal es:

T1 = 100 - R1 = 100 - 4.3 = 95.7%

La pérdida de luz por reflexión de la superficie posterior del lente es:

Y la luz transmitida por el lente será la siguiente:

100-4.3-4.1= 91.6%

2. Para un lente CR-39, con índice de refracción de 1.498, la luz perdida en la superficie frontal es:

100%-3.9%=96.1%

Y la luz perdida en la superficie posterior es:

(0.96)(0.39)=0.0038=3.8%

La luz transmitida por el lente, asumiendo que no absorbe luz es:

100%-3.9%-3.8%=92.2%
O sea, 0.6% más de transmisión que un lente en vidrio Crown. Al elegir un material de alto índice
se debe mantener una proporción entre la estética y la calidad visual, ya que, como se observa en
la siguiente tabla, a mayor índice de refracción mayor reflexión y menor transmisión.

PROPIEDADES FISICAS

TRASNPARENCIA:
Es la calidad o estado propio de los cuerpos que permite el paso de los rayos luminosos, de
manera que sea posible ver con toda claridad a través de ellos; debe ser máxima para que la
claridad sea igual en un ojo corregido que en uno no corregido. Cualquier falta de homogeneidad
óptica u opacidad en el material del lente resulta en dispersión de luz. La transparencia es la
relación entre la intensidad de la luz transmitida es la relación entre la intensidad de la luz
transmitida sin desviación y la luz incidente.

DENSIDAD:
Es la relación entre la masa (M) y el volumen (V) de un cuerpo (Keeney, 1997), enunciado
matemáticamente como:

Se expresa en gr/cm3 y generalmente se calcula a una temperatura de 25°C; este factor es

importante, ya que cualquier porción de materia cambia con la temperatura.
Los lentes oftálmicos representan el 25% del peso total de los anteojos y en ocasiones pueden
tener un efecto desproporcionado e importante en la comodidad del usuario. En la actualidad, con
la creación de materiales más livianos, es posible disminuir el peso de los lentes.
CONDUCTIVIDAD TÉRMICA:
La conductividad térmica es la capacidad de un material para trasmitir el calor. Se define como la
cantidad de calor transmitido durante un tiempo determinado, en una dirección perpendicular a la
superficie y para un intervalo de temperatura determinado. La capacidad de los materiales para
oponerse al paso del calor se conoce como resistividad térmica. Cuando un material es sometido a
cierto grado máximo o mínimo de temperatura, se pueden observar cambios en la forma o
consistencia de su composición química y en su comportamiento físico.

ELASTICIDAD Y RESISTENCIA MECÁNICA:

La resistencia mecánica se refiera al valor de la fuerza aplicada que produce la fractura del
material, es decir el grado de oposición que presenta el material a las fuerzas que tratan
deformarlo. La elasticidad es la propiedad de los cuerpos deformados de recuperar su forma inicial
una vez desaparecida la fuerza deformante.
Un material es frágil cuando su ruptura se produce apenas sobrepasa ligeramente su límite. Para
conocer la resistencia se somete el material a ensayos de compresión, tracción, flexión, impacto y
resistencia al choque térmico.

DUREZA:
Es la resistencia del material a dejarse penetrar por otro por acción de una fuerza. En los
diferentes materiales de lentes oftálmicos está relacionada con la fuerza que oponen a ser rayados
y a la facilidad con que pueden tallarse sus superficies. El evitar la difracción en los lentes
oftálmicos causada por rayones incrementa la calidad de la imagen y por eso es recomendable
aplicar en la superficie de los lentes procesos que disminuyan la posibilidad de las rayas.

TINCIÓN:
Los materiales orgánicos tienen una gran facilidad para ser teñidos de cualquier color y con la
intensidad que se desee. El tinte está determinado por las concentraciones relativas de los tres
pigmentos primarios (amarillo, azul y rojo), por lo tanto, es posible obtener un rango infinito de
tonalidades. Escoger el tinte está en función de las propiedades de absorción requeridas y puede
determinarse de acuerdo al defecto refractivo que se esté corrigiendo (para un miope se puede
preferir café y para un hipermétrope verde), pero también puede ser elección del paciente.

PROPIEDADES QUIMICAS:
Se refiere a la resistencia del material a los agentes atmosféricos, tales como temperatura y
humedad, y al ataque químico, como la exposición a ciertos solventes, ácidos o colorantes, que
pueden debilitar químicamente el lente y hacer perder la normalidad del polímero.