Episodio 11: "Doble Problema para El Zorro"
Episodio 11: "Doble Problema para El Zorro"
Episodio 11: "Doble Problema para El Zorro"
Un forastero de nombre Martínez acaba de llegar al pueblo. En la taberna pretende galantear a una de las
bailarinas y se trenza en una discusión con otro hombre, con el cual se baten a duelo de espada. Pero
Martínez es notablemente superior en habilidad, y termina matando a su oponente. El Comandante lo pone
de inmediato bajo custodia por alterar el orden público, y empieza a imaginar un plan para sacar provecho
de la situación y destruir al Zorro: le propone a Martínez levantarle los cargos si aparece vestido como el
Zorro durante la cena que ofrecerá esa misma noche para robar a los invitados haciéndose pasar por el
famoso enmascarado. Monasterio está seguro que, desacreditado el Zorro, la gente dejará de protegerlo y
brindará la información suficiente para una captura inmediata.
Don Alejandro recibe de un mensajero de parte de Monasterio la invitación formal para la cena, pero envía
a Bernardo para que entregue en propias manos la respuesta donde se excusa y explica que no asistirá. Esto
da la ocasión para que Bernardo escuche de boca del propio Monasterio que dicha cena es parte del plan
que ha urdido para destruir al Zorro. Sabiendo esto, Diego cree entonces oportuna su asistencia en
representación de su padre.
Esa noche, durante la cena, Monasterio se muestra conciliador con los hacendados, tratando de no despertar
ninguna sospecha. Y, tal como fue planeado, entra Martínez disfrazado como el Zorro para robar a punta de
pistola a todos los presentes. Diego se escabulle del salón de la taberna hacia las caballerizas donde lo
espera Bernardo con las ropas del Zorro, y regresa a tiempo para interceptar a Martínez cuando intenta
escapar. Ambos Zorros se baten a duelo, y uno de los dos cae y es desenmascarado: el impostor.
Monasterio tiene ahora el problema de explicar por qué Martínez no está en su celda. El Comandante finge
desconocer la causa, y descarga toda responsabilidad sobre el Sargento García, ordenándole que vuelva a
encerrarlo. Aprovechando la confusión reinante, Diego regreso al salón sin despertar sospechas de su
ausencia y manteniendo su identidad en secreto.
Norman Foster, fanático del baile flamenco, abre el capítulo con un número de danza española muy
sugestivo, que funciona muy bien e incluso le da al episodio una atmósfera más bien para adultos. También
puede apreciarse que Foster ha querido imprimir en este capítulo una dosis extra de violencia, superior a
76 Zorro, compañero inseparable de televisión
cualquier otro dirigido por él: Martínez se enfrenta a duelo con una persona y termina matándolo, una de
las pocas veces en toda la serie donde un personaje muere de este modo.
Una de las mejores escenas es la de Diego entrenando a Tornado: es obvio que Diego debe tener un lugar y
un momento para adiestrar y mantener en estado al caballo del Zorro, y en esta corta escena vemos cómo lo
hace. Pero ocurre una complicación: al lugar llegan, por coincidencia, García con los lanceros, quienes
piensan que han descubierto el escondite del Zorro. Mientras Diego esconde a Tornado, Bernardo logra
distraer y despistar a la patrulla. Una vez más, se ha logrado una perfecta combinación de comedia y
tensión, lo que Disney pretendía para la serie y que Foster demuestra saber manejar mejor que cualquier
otro director durante el ciclo.
Otra escena muy bien lograda es aquella donde Bernardo mueve la escalera de un balcón al otro tratando
de confundir al falso Zorro. Fiel al concepto exigido por Disney, Foster supo escribir esta escena con el
equilibrio justo entre comedia y tensión, sin que un aspecto tuviera que ser sacrificado por el otro.
El duelo entre el Zorro y Martínez es corto y poco llamativo. Se supone que Martínez es un gran
espadachín –incluso en el episodio siguiente queda claro que es incluso mejor que Monasterio- pero el
encuentro que tiene con el Zorro no llega a mostrar su potencial. En cambio, la escena de esgrima donde se
enfrentan el Zorro y Monasterio es la mejor de lo que hasta ese momento se filmó, lo que demuestra que
Guy iba teniendo cada vez más confianza a medida que avanzaba la serie.
En la escena donde luchan los dos Zorros en la galería de la planta alta de la taberna hay un error: Guy
Williams se encuentra a la derecha, se produce un corte donde se inserta un primer plano de Guy, y cuando
vuelve a la toma general con los dos Zorros, Williams se encuentra inexplicablemente a la izquierda. Es
tarea del asistente de dirección –en este caso, Vincent McEveety- controlar la ubicación exacta de los
actores. Se ve que a McEveety se le mezclaron los Zorros.
Detrás de Escena
Un error sin importancia en este episodio: en los créditos se menciona a Romney Brent (quien
interpreta al Padre Felipe) cuando, en realidad, no aparece. Los exteriores fueron filmados en Bell
Ranch. El título original de este capítulo era “Zorro, con Dos Zetas”.