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Gabriela Alatriste Polivagal

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APORTACIÓN DE LA TEORÍA POLIVAGAL A LA PRÁCTICA EN PSICOTERAPIA

Gabriela Alatriste Pérez


Maestrante
Maestría de Psicoterapia Cognitivo Conductual
Universidad Xochicalco, Campus Mexicali
“Análisis y presentación de casos.”
Mtro. Arturo Rizo Rosales
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Resúmen

El presente ensayo tiene como objetivo hablar sobre la teoría polivagal de Porges,

relativamente nueva de 1992, y que consiste en un modelo bioconductual explicativo sobre el

funcionamiento del sistema autónomo, que ha revolucionado lo hasta algunos años establecido.

Se inicará el trabajo con una explicación sobre los aspectos importantes de la teoría. Cómo

surgió, en qué consiste y posteriormente se concluirá con la reflexión sobre qué podría aportar a

la práctica de la terapia profesional esta teoría, es decir su utilidad en el campo de la

psicoterapia.
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APORTACIÓN DE LA TEORÍA POLIVAGAL A LA PRÁCTICA EN PSICOTERAPIA

Para empezar a hablar de la teoría polivagal y la aportación a la psicoterapia del

psiquiatra estadounidense Stephen W. Porges, se abordarán los antecedentes, de forma general,

de cómo surgió, y en qué consiste, para comprender también por qué se considera una teoría

controversial y que por otro lado, científicos de varias disciplinas están considerándola como

base de sus trabajos para diferentes fines.

El autor plantea que la teoría surgió el 8 de octubre de 1994, hace una crítica a la cultura

occidental en cuanto a que se enfatiza mayormente los pensamientos sobre las sensaciones, a la

hora de hablar la “seguridad”, el ponerse a salvo.

Le atrajo la psicofisiología por estudiar variables como; la respuesta electrodermal, la

respiración, la frecuencia cardíaca y la respuesta vasomotora, de la experiencia subjetiva de una

persona, sin que tuviera que dar una respuesta voluntaria. Y empezó a estudiar mas de cerca la

variable de la frecuencia cardíaca, encontrándose con un estudio de 1910, del fisiólogo alemán

H.E. Hering, en el que afirmaba que la respiración aportaba un ensayo funcional del control

vagal cardíaco. Esta base lo llevó a desarrollar un método que cuantificaba la arritmia sinusal

respiratoria como manifestación de la influencia vagal en la frecuencia cardíaca. (Porges, S. W.

2020).

Por lo que se dedicó a buscar una variable interviniente que explicara las diferencias

individuales en el comportamiento, ya que comentó que hasta ese momento las teorías del

aprendizaje no habían tenido gran evolución al modelo de Skinner E-R.

Comenta que su experiencia en las instituciones de las que formaba parte, lo condujo a la

creación de la teoría, ya que consideraba que las universidades no estaban estructuradas para que

el profesorado se sintiera seguro y protegido. Ya que promueven modelos evaluativos que


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predisponen a un estado de defensa, y que esto era incompatible a promover la creatividad y las

teorías expansivas. (Porges, S. W. 2020).

Esta teoría introduce el concepto de neurocepción como el proceso neuronal que evalúa

el riesgo ambiental sin conciencia, dejando en segundo plano a la evaluación cognitiva.

Pone de relievo la importancia de la seguridad y las consecuencias adaptativas de la

detección de riesgos en estados fisiológicos, comportamiento social, experiencia psicológica y

salud. Hace una reestructuración de los trastornos clínicos viéndolos como dificultades para la

regulación neuronal de circuitos específicos, que desactivan estrategias defensivas dejando que la

conexión social se dé espontáneamente, haciendo a un lado las teorías de aprendizaje, de

comportamientos adquiridos y modificables con programas conductuales.

Explica un nuevo modelo del sistema nervioso autónomo que se compone de circuitos

neuronales, de acuerdo a las tres etapas evolutivas del nervio vago, de millones de años de

evolución:

-primitivo no mielinizado. Implica la conservación de los recursos metabólicos (congelación o

apagado).

-sistema simpático-adrenalino. Estrategias de movilización: huida o lucha.

-vago mielinizado (más reciente): Modula estados de calma corporales y de conductas de

compromiso social (relación entre los nervios de la cara y los nervios que regulan corazón y

pulmón).

Explica cómo cada una de las tres etapas filogenéticas en el desarrollo del sistema

nervioso autónomo está asociada con un subsistema autónomo distinto que se retiene y expresa

en los mamíferos. Estos subsistemas autónomos están ordenados filogenéticamente y vinculados

conductualmente a la comunicación social (p. ej., expresión facial, vocalización, escucha),


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movilización (p. ej., comportamientos de lucha y huida) e inmovilización (p. ej., fingir la muerte,

síncope vaso vagal y bloqueo conductual). (Porges SW., 2011).

Además de lo anterior, al indagar en su página web

(https://www.stephenporges.com/about) la trayectoria y resumen de su trabajo científico, el

autor realiza diversas investigaciones como: fundamentos neurofisiológicos de las emociones, el

apego, la comunicación y la autorregulación en 2011, en 2013 desarrolló un dispositivo para

monitorear el estado de los músculos del oído medio con Greg Lewis, en 2017 lanzó Safe and

Sound Protocol (TM) a través de la colaboración con Integrated Listening Systems, y en el

mismo año publica “La guía de bolsillo de la teoría polivagal: El poder transformador de sentirse

seguro”, documento que vió necesario ya que se le criticaba que sus artículos eran muy densos y

pesados para leerse. Se observa como ha tenido una carrera muy prolija, motivado en gran

medida por la respuesta inspiradora de su primer artículo, en donde observó como varios

profesionales lo citaban e utilizaban de referencia para la elaboración de sus trabajos.

También en sus trabajos se encuentra la explicación para comprender las alteraciones

sociales que presenta una persona con trastorno del espectro autista, argumentando que éstas se

explican por la depresión del sistema de conexión social, afectando su prosodia,

hipersensibilidad auditiva, dificultades en el procesamiento auditivo, de contacto visual, de

regulación conductual. Dice que estas características pueden mejorar a través de la reactivación

del sistema de conexión social.

Las aportaciones de su teoría a lo largo del tiempo, aún cuando tiene grandes críticas que

sugieren que no presenta gran evidencia del sistema nervioso autónomo, han servido para ofrecer

un marco para la comprensión de las interacciones entre nuestro sistema nervioso y las claves

sociales e interpersonales presentes en el entorno, que aportan nuevas visiones a la psicología


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clínica y la psicoterapia. Por ejemplo, diversos autores han discutido recientemente las

implicancias de la teoría polivagal para comprender el surgimiento del trauma en los

consultantes, señalando que las experiencias de estrés prolongado o que son en extremo

amenazantes (p. ej., maltrato, abuso, negligencia infantil), activan estrategias defensivas arcaicas

de movilización e inmovilización basadas en el sistema simpático y el vagal dorsal,

respectivamente, quedando el organismo vulnerable a presentar sintomatología autónoma o del

simpático como ansiedad, angustia, taquicardia, hipertensión arterial o sudoración, o bien como

como fatiga crónica, mareos, entumecimiento, problemas gastrointestinales, o presión arterial

baja debido a un hipoarousal vagal. (Dufey D., Michele, Fernández T., Ana María, & Muñoz R.,

José Antonio, 2022)

También ha generado estudios sobre cómo las condiciones terapéuticas como la

autenticidad, la empatía y la aceptación incondicional, el mecanismo de neurocepción en el

cliente posibilita la movilización de mejores habilidades interpersonales (mayor expresividad

emocional verbal y no verbal) con mejores resultados terapéuticos (Dufey D., Michele,

Fernández T., Ana María, & Muñoz R., José Antonio, 2022).

Conclusiones

La teoría polivagal es una teoría relativamente nueva, aún cuando el autor reconoce que la idea

ya existía, compleja, que parte de la psicofisiología inicialmente, que rompe esquemas

establecidos y por lo mismo se vuelve controversial. Es criticada por no presentar evidencia

suficiente para el funcionamiento vagal. Sin embargo, ha significado el parteaguas para diversas

investigaciones que al parecer han ofrecido resultados en la práctica terapéutica, al considerar, no

sólo los esquemas anteriores con base a los enfoques de aprendizaje para generar cambios, sino
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incluir las respuestas fisiológicas, que permitan interpretar adecuadamente el motivo de consulta

y la forma mas óptima para abordarlo.

References

Dufey D., Michele, Fernández T., Ana María, & Muñoz R., José Antonio. (2022). Sintonizando

con otro: la teoría polivagal y el proceso de psicoterapia. Revista chilena de neuro-

psiquiatría, 60(2), 185-194. https://dx.doi.org/10.4067/S0717-92272022000200185

Porges, S. W. (2011). The polyvagal theory: new insights into adaptive reactions of the

autonomic nervous system. Cleve Clin J Med. 2009 Apr;76 Suppl 2(Suppl 2):S86-90. doi:

10.3949/ccjm.76.s2.17. PMID: 19376991; PMCID: PMC3108032.

https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pmc/articles/PMC3108032/

Porges, S. W. (2020). Guía de bolsillo de la teoría polivagal: El poder transformador de sentirse

seguro. Elephteria.

https://play.google.com/books/reader?id=jtRdEAAAQBAJ&pg=GBS.PT72.w.1.1.82_152

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