El Usufructo Constitucion y Extinción
El Usufructo Constitucion y Extinción
El Usufructo Constitucion y Extinción
CARRERA DE DERECHO
AUTOR:
Juan Pablo Dumas Cochancela
C. I. 0105858443
DIRECTOR:
Dr. Edy Daniel Calle Córdova
C. I. 0300776861
CUENCA – ECUADOR
Abril 2018
UNIVERSIDAD DE CUENCA
RESUMEN.
Por lo que para su mejor comprensión partiremos del concepto del derecho de
usufructo.
Asimismo, es necesario determinar las diferentes maneras que el propietario de
un bien puede constituir un derecho de usufructo a favor de cualquier persona
sobre bienes muebles o inmuebles.
Abordaremos también las maneras por las que se puede extinguir el derecho de
usufructo.
ABSTRACT.
The present investigation analyzes the different ways to constitute and extinguish
a right of usufruct within our legal system with the purpose of guaranteeing to a
third party called usufructuary the right to be able to use and enjoy something
that belongs to another, as if it were the same Owner of said property without
being disturbed by any person.
So for your better understanding we will start from the concept of the right of
usufruct.
It is also necessary to determine the different ways that the owner of a property
can constitute a right of usufruct in favor of any person on movable or immovable
property.
We will also address the ways in which the usufruct right can be terminated.
We will briefly analyze comparative law as the Chilean and Colombian legislation.
Finally, we will conclude with Ecuadorian jurisprudence on a case study on the
constitution of usufruct on movable and immovable property, as well as how to
constitute and extinguish the right of usufruct in daily practice.
ÍNDICE DE CONTENIDOS.
RESUMEN. ........................................................................................................ 2
ABSTRACT. ....................................................................................................... 3
ÍNDICE DE CONTENIDOS. ............................................................................... 4
DEDICATORIA. .................................................................................................. 7
AGRADECIMIENTOS. ..................................................................................... 10
INTRODUCCIÓN. ............................................................................................ 11
CAPÍTULO I. .................................................................................................... 14
CONCEPTO DEL DERECHO DE USUFRUCTO. ............................................ 14
1.1.- Generalidades. ......................................................................................... 14
1.1.1.- El concepto y naturaleza de usufructo en el Derecho Romano
Antiguo....................................................................................................... 15
1.2.- Características del derecho de usufructo. ............................................. 20
1.2.1.- Es un derecho real.......................................................................... 21
1.2.2.- Es un derecho de goce. .................................................................. 23
1.2.3.- Es limitación del dominio. ............................................................... 24
1.2.4.- Es un derecho temporal. ................................................................. 24
1.2.5.- Es intransmisible............................................................................. 25
1.2.6.- Es un derecho sobre cosa ajena. ................................................... 26
CAPÍTULO II. ................................................................................................... 27
CONSTITUCIÓN DEL USUFRUCTO. .............................................................. 27
2.1.- Constitución del usufructo: Generalidades. .......................................... 27
2.2.- El usufructo legal. ................................................................................. 27
2.3.- El usufructo voluntario. ......................................................................... 31
2.4.- Usufructo constituido por acto voluntario. ............................................. 31
2.4.1.- Acto constitutivo.............................................................................. 31
2.4.2.- Carácter consensual o solemne del acto constitutivo. .................... 32
2.4.3.- Papel de la inscripción conservatoria. ............................................ 32
2.4.4.- Vías por las que puede constituirse el usufructo por contrato. ....... 33
2.5.- Usufructo constituido por testamento.................................................... 34
DEDICATORIA.
AGRADECIMIENTOS.
INTRODUCCIÓN.
Por lo que, para comprender este derecho, tenemos que remontarnos al derecho
de propiedad que es y de donde procede. El derecho de propiedad es un derecho
complejo, formado por la suma de diversos derechos particulares que son: El
derecho de usar una cosa, el derecho a disfrutar de ella y el derecho a disponer
de la misma. Dicho de otra manera, cuando yo soy propietario de una cosa por
ejemplo una finca, tengo derecho a usarla viviendo en ella, cultivando, guardando
ahí a mis animales o lo que tenga. También tengo el derecho no solo de usarla
sino de disfrutarla, es decir de aprovechar los frutos que produzca. En el ejemplo
de la finca si tiene sembrado árboles puedo apropiarme y aprovechar los frutos
de estos. El concepto de fruto es alegórico y no solo se refiere a los productos
vegetales. Si soy dueño de una casa y la rento, pues las rentas son los frutos
civiles de la misma. Finalmente tengo el derecho a disponer de la cosa, haciendo
con ella lo que yo quiera, como venderla, regalarla, gravarla y con algunas
restricciones hasta destruirla. El derecho de propiedad que comprende los
derechos antes indicados puede desmembrarse en sus componentes que son
De esta base fáctica provista por una realidad en permanente evolución derivan
los temas que serán objeto de nuestro análisis.
CAPÍTULO I.
1.1.- Generalidades.
derecho temporal de usar una cosa ajena y de aprovechar los frutos naturales o
civiles de esta sin alterar la sustancia de la cosa en cuestión.
El usufructo era una combinación temporal del ius utendi y fruendi sin el ius
abutendi. Por tanto, se trata claramente de un desmembramiento de la
propiedad. El digesto ilustra lo que debemos entender por el término ‘’sin alterar
la sustancia de la cosa” (salva rerum susbstantia) al prohibir no solo que se
disminuya o consuma el objeto en cuestión, sino que el usufructuario transforme
un parque en una huerta, o un baño privado en público. El usufructuario se hace
propietario de los frutos naturales por el hecho de cosecharlos.
Según el Dr. Juan Larrea Holguín expresa que: “Dentro del usufructo se dan dos
situaciones muy diversas, que complican la definición, si se trata de derecho
constituido sobre cosas que se pueden usar sin consumirse por el uso, y se trata
de cosas fungibles, que necesariamente se consumen al ser usadas. En el
primer supuesto, tenemos propiamente el usufructo clásico o normal, mientras
que, en la segunda hipótesis, se modifica profundamente la institución y por eso
incluso se le da el nombre de cuasi usufructo…” (Larrea Holguín Juan, 2009)
La principal característica del usufructo, es que es una limitación del dominio, del
cual debemos manifestar de que es un desmembramiento y tiene una similitud
con el derecho del dominio puesto que forma parte del mismo. Aquí por ejemplo
entre el usufructuario y el nudo propietario está dividido el dominio ya que el uno
tiene la tenencia de la cosa y el otro tiene la facultad para disponer de ella, los
dos tienen derechos simultáneos, distinto es del fideicomiso que es un derecho
temporal que se suceden en el tiempo dos titulares de derecho.
El art. 594 del Código Civil nos dice que “Las cosas incorporales son derechos
reales o personales”. (Código Civil, 2005)
El art. 595: del mismo Código Civil define al derecho real de la siguiente forma:
Este derecho real podemos decir que es activo debido a que el titular, ejerce un
poder poderdante sobre la cosa fructuaria, establece una relación directa, sin
intermediarios. Pero el titular del usufructo, dispone de una acción persecutoria,
que le permite recuperar su derecho en poder de quien se encuentre. Esta es la
diferencia entre otros derechos personales, que puede existir una confusión por
ejemplo con el de arrendamiento que también se beneficia de una cosa ajena,
pero como un derecho personal que emana de su resolución con el arrendador.
La ley ampara estos derechos reales por medio de la acción de reivindicación y
las acciones posesorias que tienen por objeto conservar y recuperar la posesión
de bienes raíces o derechos reales.
Entonces al ser un derecho real podemos decir que es un derecho que recae
directamente sobre la cosa, la relación se establece entre el titular del derecho
de usufructo y la cosa usufructuada de la que aquel tiene derecho a percibir los
frutos, a pesar de que en la constitución puede cobrar mucha fuerza la figura del
propietario, especialmente en la constitución mediante negocio jurídico inter
vivos, lo cierto es que un una vez constituido el usufructo, aquel casi desaparece
de la escena. La relación se establece entre el usufructuario y la cosa, de modo
que cuando el usufructo se extingue la consolidación de este se produce por la
vía atractiva de la nuda propiedad, con independencia de que su titular sea el
mismo que constituyó el usufructo u otro diferente.
Porque confiere a su titular todas las facultades de usar y gozar del modo más
amplio y completo, sin más limitaciones que las que resultan del cargo de
conservar la forma y sustancia de la cosa.
Es un derecho de goce completo, pues a través de él, se goza de todos los frutos
naturales y civiles de la cosa. Para que la persona pueda gozar de una cosa es
indispensable que se encuentre frente a ella, y el camino para que esto suceda
es la realización de uno de los modos de adquirir.
Porque impide que el dueño ejerza en la cosa las facultades de usar y gozar,
que generalmente les correspondan. Esto se denomina como nuda propiedad
como reza el art. 599 del código civil inc. 2 “la propiedad separada del goce de
la cosa, se llama mera o nuda propiedad”. (Civil, 2015) Pero distinto es el caso
cuando el dueño vende la nuda propiedad y se reserva para sí el usufructo, que
muchas de las veces son usufructos vitalicios, por ejemplo cuando un padre
vende a un hijo un bien inmueble que puede ser una casa de habitación, pero
quiere seguir habitando ahí mientras viva y solo cuando este llegue a fenecer se
consolida la propiedad para el nudo propietario o caso contrario si fallece el nudo
propietario, se restituye la propiedad en su totalidad para el que tenía el derecho
de usufructo, es decir se consolida en el sobreviviente.
Según Juan Larrea Holguín; “Tiene una duración limitada, es temporal, a lo sumo
vitalicio, pero nunca perpetuo o definitivo. Un usufructo permanente para
siempre, seria jurídicamente inaceptable”. (Claro Luis, 2013)
“El usufructo podrá constituirse por tiempo determinado, o por toda la vida
del usufructuario. Cuando en la constitución del usufructo no se fija tiempo
alguno para su duración, se entenderá constituido por toda la vida del
usufructuario. El usufructo constituido a favor de una corporación o
fundación cualquiera no podrá pasar de treinta años.” (Código Civil, 2005)
Por lo que mal podría interpretarse que, si el usufructo se constituye sin plazo
alguno o por toda la vida del usufructuario será perpetuo, esto no es así pues al
morir el usufructuario la propiedad se consolida o se restituye la cosa al nudo
propietario, hay que recordar que aun la muerte de una persona se considera en
la doctrina un plazo cierto pero indeterminado, porque se conoce que sucederá,
pero no se sabe cuándo ocurrirá. De tal característica se desprende que es un
derecho sujeto a plazo, es decir que siempre que se constituya un usufructo será
por un plazo.
1.2.5.- Es intransmisible.
“La nuda propiedad puede transferirse por acto entre vivos, y transmitirse
por causa de muerte. El usufructo es intransmisible por testamento o
abintestato”. (Código Civil, 2005)
CAPÍTULO II.
“El usufructo legal de los padres sobre ciertos bienes del hijo que está bajo
patria potestad, y el de la sociedad conyugal en los bienes de los
cónyuges…” (Código Civil, 2005)
Un claro ejemplo tenemos en el caso del padre de familia sobre ciertos bienes
de su hijo. El menor puede adquirir ciertos bienes a título de donación, herencia
o legado con la condición expresa del donante o testador que tenga el usufructo
de sus bienes del padre.
Según Luis Claro Solar: “Este derecho tiene ciertas características especiales:
Esto es para los bienes del hijo de familia, pueden gozar el usufructo los padres
de este hijo de familia, sin embargo, cuando sea un hijo extramatrimonial, es
decir el hijo concebido fuera de matrimonio, gozará aquel padre del cual esté
bajo la patria potestad el hijo extra matrimonial. Pero no es de todos los bienes
sino solo de los que forman parte del peculio adventicio ordinario, y la
administración de estos bienes corresponden a uno de los padres, aquel que
tenga la administración de la sociedad conyugal.
Se llama usufructo legal del padre o madre de familia, el que concede la ley.
Cuando se trata de los bienes del peculio adventicio ordinario del hijo
extramatrimonial y de aquí podemos decir que es un usufructo personalísimo,
art 2368 del Código Civil “…Sin embargo, no será embargable el usufructo
legal, sea de la sociedad conyugal o de los padres sobre los bienes de los hijos,
ni tampoco los derechos reales de uso o de habitación”; termina con la
emancipación del hijo, Art. 286 Código Civil “La sociedad conyugal o los padres
no gozarán del usufructo legal sino hasta la emancipación del hijo”; los padres
no están obligados a rendir fianza por la conservación y restitución del bien, Art.
287 Código Civil “Los padres no están obligados en razón del usufructo legal, a
la fianza o caución que generalmente deben dar los usufructuarios, para la
conservación y restitución de la cosa fructuaria”; y, los padres deben sujetarse
a las reglas de la sociedad conyugal para la administración de los bienes, Art.
289 Código Civil “Los padres administrarán los bienes del hijo cuyo usufructo
les concede la ley, siguiendo las reglas de la administración de los bienes de la
sociedad conyugal.
“El usufructo legal de los padres sobre ciertos bienes del hijo que está bajo
patria potestad, y el de la sociedad conyugal en los bienes de los
cónyuges, están sujetos a las reglas especiales del Título De la Patria
Potestad y del Título De la Sociedad Conyugal”. (Código Civil, 2005)
el usufructo se extingue por la muerte del usufructuario, aunque ocurra antes del
día o condición prefijada para su terminación.” (SOMARRIVA , 2009)
2.4.4.- Vías por las que puede constituirse el usufructo por contrato.
Para Alexandri Somarriva: “La creación de usufructo por contrato puede hacerse
de dos maneras diferentes: por vía de enajenación y por vía de retención. En el
primer caso el usufructo es directamente el objeto del contrato, es decir se crea
a favor de una persona que antes no tenía el goce de la cosa. En el segundo
caso la constitución del usufructo no es sino el resultado indirecto del contrato,
el propietario enajena la nuda propiedad de la cosa, reservándose el usufructo.
(SOMARRIVA , 2009)
Lo que manifiesta el autor antes mencionado es que el usufructo se puede
constituir de dos formas o maneras la cual dependerá de la circunstancias en las
que se encuentren las partes que vaya a celebras dicho contrato, y según el
autor ya mencionado y a la cual palafraciamos estas son la primera que se da
por vía de enajenación, cuando seda la compra venta del usufructo, pues en esta
el uno de los sujetos que interviene el contrato solo compra el usufructo y el otro
conserva la nuda propiedad, en tanto que el Segundo caso la en donde el
vendedor decide vender la nuda propiedad y conserva para el derecho del
usufructo hasta la muerte o hasta que se de ciertas condiciones estipuladas ya
en le contrato al momento de la celebración del contrato.
Suele ser el instrumento más usado, junto con las donaciones, como es sabido
cuando se dispone usufructo por causa de muerte, solamente se produce el
efecto constitutivo al abrirse la sucesión, esto es al morir el causante. Mediante
testamento, el propietario de una cosa, puede dividir el dominio, dejarlo la nuda
propiedad a un heredero y el usufructo a otro. Igualmente puede tratarse no de
herederos sino de legatarios. En ambos casos, al disponer de los bienes se
ordena esta limitación del dominio distribuyéndolo entre uno que tendrá la nuda
propiedad y otro, el uso y disfrute de ella.
Según Alesandri Somarriva: “El modo más frecuente de constituir el usufructo es
una cláusula testamentaria. Cualquier testamento solemne o privilegiado, es
apto para establecer el usufructo.” (SOMARRIVA , 2009) En este caso no es
necesario inscripción alguna, pues se requiere la inscripción del usufructo
cuando recae sobre bienes raíces por acto entre vivos.
La constitución de usufructo por testamento, permiten establecer un plazo o
condición iniciales, que en general están prohibidas, pero en este caso se
permiten siempre que dicho plazo o condición se hay cumplido antes del
fallecimiento del testador. Así ordena el artículo 782 de nuestro Código Civil:
“Se prohíbe constituir usufructo bajo una condición o un plazo cualquiera
que suspenda su ejercicio. Si de hecho se constituyere, no tendrá valor
alguno. Con todo, si el usufructo se constituye por testamento y la
condición se hubiere cumplido antes del fallecimiento del testador, valdrá
el usufructo”. (Código Civil, 2005)
Constituiría así mismo usufructo la disposición en que se asigna una cosa hasta
un día incierto, pero determinado; dejo mi casa a Juan para que goce de ella
hasta que Manuel cumpla veinticinco años, y llegado Manuel a esa edad, éste
será dueño de la casa. Juan es simplemente usufructuario por el número de años
que falten a Manuel para cumplir los veinte y cinco y Manuel es fideicomisario de
la casa a quien se le ha dejado la casa desde un día incierto, la que llegará a
adquirir si llega a cumplir esa edad, pero si Antonio fallece antes de cumplir
veinte y cinco años, la propiedad corresponderá a los herederos del testador.
Hay que distinguir si se trata de las que son revocables o de las irrevocables, las
primeras que se asemejan a la sucesión por causa de muerte, ya que éstas sólo
surten los efectos legales cuando fallece el donante, pudiendo éste revocarlas
mientras viva. Las donaciones entre vivos siempre son irrevocables, salvo que
sea entre cónyuges. Al ser irrevocables, producen efecto a partir desde que se
perfecciona el acto mediante la aceptación.
Según el Dr. Juan Larrea Holguín manifiesta: “Que mediante donación revocable
se puede constituir usufructo de dos maneras; la una cuando directamente el
donante dispone que otra persona reciba en calidad de donatario el derecho de
usufructo y esta lo acepta. La otra forma consiste en la donación revocable de
una cosa seguida de la tradición de ella la misma que produce el efecto de que
el donatario adquiera los derechos y obligaciones de usufructuario.” (Holguín
Juan, 2009)
El art. 1167 nos expresa acerca de la donación lo siguiente:
El Dr. Juan Larrea Holguín manifiesta: “Quien ha donado un terreno o una cosa,
si se reserva el mismo la nuda propiedad tendrá que inscribir la escritura de
constitución de usufructo a favor de otro y este adquiere su derecho el momento
de la inscripción. Si por el contrario el dueño se reserva el usufructo debe
igualmente inscribirse la escritura y mediante dicha inscripción el nudo
propietario entra en posesión de la cosa, mientras que el antiguo dueño se
constituye en mero tenedor a título de usufructuario,” (Larrea Holguín Juan,
2009)
Las donaciones entre vivos son siempre irrevocables salvo entre cónyuges entre
quienes son siempre revocables.
Al respecto el jurista chileno Luis Claro Solar manifiesta: “Que se puede adquirir
el usufructo por prescripción puesto que rige la norma general de la adquisición
de los derechos reales por prescripción”. (Claro Solar, 2013)
Según Luis Claro Solar manifiesta que “Se gana por prescripción el dominio de
los bienes corporales raíces o muebles que están en el comercio humano y se
han poseído con las condiciones legales”. (Claro Solar, 2013)
El doctrinario Antonio Gómez establecía que “El usufructo podía adquirirse por
prescripción de diez años entre presentes y veinte entre ausentes con título
emanado de quien no era dueño y con buena fe, o por prescripción de treinta
años sin título alguno, lo mismo que las cosas corporales muebles (Larrea
Holguín Juan, 2009).
El Código Francés mantiene una duda, al decir que él, usufructo es establecido
por la ley o por la voluntad del hombre.
2.9.- El cuasiusufructo.
Ya que nuestro código no contempla limitación en cuanto a las cosas que pueden
ser objeto de usufructo, esto quiere decir que se puede llegar a constituir
usufructo sobre cosas consumibles, pero esto es objeto para que varios autores
como Antonio Vodanovic H. se nieguen a reconocer como usufructo esta
modalidad, solo es admitido por la doctrina como un usufructo impropio o cuasi-
usufructo. A diferencia del usufructo normal, este se constituye solo sobre cosas
consumibles o créditos de tal suerte que el usufructuario queda efectivamente
obligado a conservar su forma y sustancia para restituirle al dueño.
Es decir, se distingue dentro del usufructo dos especies el usufructo sobre cosas
no consumibles, al que llama usufructo perfecto, y el que hace sobre cosas
consumibles (granos, dinero) al que llama cuasiusufructo o imperfecto. Por lo
que por disposición del constituyente del usufructo o por acuerdo de las partes,
puede darse en cuasiusufructo ósea en propiedad con facultad de consumir o
vender cosas no consumibles como por ejemplo ropa, pues en ciertos casos es
mejor considerar las cosas como cantidades más que por su individualidad.
“El usufructo podrá constituirse por tiempo determinado, o por toda la vida
del usufructuario. Cuando en la constitución del usufructo no se fija tiempo
alguno para su duración, se entenderá constituido por toda la vida del
usufructuario. El usufructo constituido a favor de una corporación o
fundación cualquiera, no podrá pasar de treinta años”. (Código Civil, 2005)
Es decir, el usufructo tiene una duración limitada, al cabo de la cual pasa al nudo
propietario, y se consolida con la propiedad. El constituyente puede fijar la
duración del usufructo por un determinado tiempo o portada la vida del
usufructuario, y si omite fijar tiempo alguno, se entiende constituido el derecho
por toda la vida del usufructuario, cuando este es una corporación o una
fundación cualquiera, el plazo del usufructo no puede pasar de treinta años.
Si el usufructo es por tiempo determinado y el usufructuario fuere antes los
herederos de este no le suceden en el goce hasta la expiración del plazo
prefijado por el constituyente porque el usufructo es intransmisible por
testamento o abintestato. La muerte del usufructuario pone fin al usufructo.
El término del usufructo puede someterse a condición, si bien la iniciación del
usufructo no puede subordinarse a una condición, el fin o la extinción del mismo
puede serlo. Pero esta condición no suprime la exigencia del plazo, ya que todo
usufructo es por esencia temporal, el efecto que pueda producir la condición es
sólo anticipar la extinción del usufructo poniéndole fin ante de la llegada del
plazo, en caso alguno puede retardar la extinción más allá de la expiración del
término. Si la condición se cumple antes del plazo, el usufructo termina y se
consolida con la propiedad, pero si la condición no se cumple antes del plazo o
antes de la muerte del usufructuario, según los casos se mira como no escrita,
por lo que el usufructo terminará con la expiración del plazo o con la muerte del
usufructuario.
Los frutos civiles se perciben día a día, Pablo deja a José una casa, pero resulta
que la casa estaba arrendada por cinco años si al momento de la delación del
usufructo iban corridos un año y se habían pagado al propietario los cinco años
de renta del arrendamiento, entonces le toca al nudo propietario entregar al
usufructuario el año de renta que caen en el plazo en que Pablo será
usufructuario.
También puede darse en usufructo una cosa incorporal, un crédito, aquí hay que
tener presente que el usufructuario de crédito tiene derecho a percibir los
intereses, ya que estos constituyen una especie de fruto civil. Una vez expirado
el crédito el usufructuario podría cobrarlo, reteniendo el capital hasta el término
del usufructo.
Los derechos del nudo propietario han aparecido conforme se dan los derechos
del usufructuario ya que donde termina el derecho del uno, comienza el derecho
del otro, son derechos que coexisten mutuamente y algunos de estos derechos
son:
Aquí seria por ejemplo si constituyo un derecho de usufructo para unos dos años
y al momento de constituir el usufructo existen frutos que estén por cosecharlos,
y el usufructuario goza de esos frutos al momento de la restitución debería el
usufructuario devolver esos frutos al nudo propietario.
Esto cuando uno de los dueños ya sea el nudo propietario o el que posee el
derecho al usufructo hacen actos en perjuicio del otro.
vivos que comprende sólo bienes muebles siempre requiere instrumento público,
es decir escritura pública, razón por la cual diríamos que es un acto solemne.
CAPÍTULO lll.
El artículo 795 del Código Civil expresa lo siguiente: “El usufructuario de una
cosa inmueble tiene el derecho de percibir todos los frutos naturales, incluso los
pendientes al tiempo de deferirse el usufructo.
Entonces la ley nos dice que los frutos naturales pertenecen al usufructuario de
una cosa inmueble, incluso los pendientes al tiempo de deferirse el usufructo, a
pesar de decir que recíprocamente pertenecen al propietario los frutos naturales
que aun estén pendientes a la terminación del usufructo, ya que los frutos
naturales que pertenecen al usufructuario son los percibidos, no son los frutos,
sino el derecho de percibir los frutos, lo que pertenece al usufructuario y a
condición de que la recolección se efectúe mientras dure el usufructo. Los frutos
que se hallen pendientes por medio de las raíces que se adhieren al suelo o por
las ramas que los sostienen forman parte integrante del predio, por lo que no
pueden pertenecer al usufructuario por la simple declaración del usufructo, como
tampoco a sus herederos en caso de fallecimiento del usufructuario.
Es decir el usufructuario tiene derecho a percibir todos los frutos naturales sin
excepción, por consiguiente el usufructuario tiene derecho de percibir todos los
frutos que puede obtener de la cosa, como el propietario mismo, con tal que la
administre como buen padre de familia, y conservando su forma y substancia.
Por lo tanto, al tener el usufructuario derecho de percibir los frutos naturales del
inmueble fructuario desde la delación del usufructo, también tiene derecho de
percibir los frutos que se encuentran pendientes al entrar a usufructuarlo, aunque
él no haya tenido parte en la producción.
Luis Claro Solar manifiesta: “Que el usufructuario hace suyo los frutos naturales
por medio de la percepción de ellos, es decir por medio de la separación del
suelo dentro del tiempo de duración del usufructo. Mientras adhieren el inmueble
por las ramas de que penden o por las raíces forman un solo cuerpo con el
inmueble, son inmuebles y pertenecen al propietario del inmueble a que
acceden; desde el momento que son cortados los granos o separados los frutos
son muebles y pasan a ser propiedad del usufructuario.
Pothier expresa como regla general: “Que todos los frutos de una heredad sujeta
a un derecho de usufructo que son percibidos y separados de la tierra en que se
hallan pendientes, durante el tiempo que dura el usufructuario le pertenece
cualquiera la manera como hayan sido percibidos”. (Holguín Juan, 2009)
En cuanto a los frutos civiles pertenecen al usufructuario día por día. Nuestra ley
no dice que el usufructuario tenga derecho de percibir los frutos civiles como dice
respecto de los frutos naturales, ya que los frutos civiles corresponden al uso o
goce que otra persona tiene en las cosas fructuarias y a medida que este uso o
goce se va produciendo día a día los frutos van devengándose día por día. Esta
devengación al fin de cada día completo es para la adquisición de los frutos
civiles según expresa Somarriva: “Lo que la separación del suelo es para los
frutos naturales” (SOMARRIVA , 2009).
También puede darse en usufructo una cosa incorporal, un crédito, aquí hay que
tener presente que el usufructuario de crédito tiene derecho a percibir los
intereses, ya que estos constituyen una especie de fruto civil. Una vez expirado
el crédito el usufructuario podría cobrarlo, reteniendo el capital hasta el término
del usufructo.
Entre las cosas que pueden hacerse uso sin deteriorarse, ni consumirse sino
después de muy largo tiempo y cuyo usufructo se reduce al uso que de ellas
puede hacerse según su naturaleza y destino como un cuadro de pintura, una
estatua, el usufructuario puede usarlas según su naturaleza y deberá
conservarlas y restituirlas como las recibió. Sin embargo hay otras cosas que se
deterioran poco a poco por el uso como la ropa de vestir, razón por la cual es
muy difícil que se mantenga en su integridad la forma y substancia de la cosa, y
si el usufructuario está obligado a restituirlo conforme recibió el usufructo sería
imposible que se cumpla.
“Proudhon propone una división de las cosas muebles en dos clases: una que
comprendería todos los muebles que no tienen otro principio de destrucción
natural que el que resulta de la vejez o que se prestan a un servicio muy
prolongado como tapicerías, sillas, libros etc., y otra clasificación sería la de los
muebles que se destruyen poco a poco en más o menos tiempo, pero con cierta
rapidez por el simple uso y que tienen por lo mismo una existencia fugitiva y
pasajera en poder de su dueño como la ropa de vestir, herramientas de un
carpintero etc.” (Claro Solar, 2013)
preponderante sobre los derechos del propietario, es evidente que para éste a
cuyo poder deben volver después de la terminación del usufructo pueden tener
un valor de afección y por lo mismo estar el interesado en que sean conservadas
y restituidas en especie, aun deterioradas por el uso.
Estas diferencias tan fundamentales entre el derecho de goce utendi fruendi, del
verdadero usufructuario, y el derecho de disposición como verdadero propietario
de la cosa, abutendi que tiene el usufructuario de cosas fungibles y que modifican
su obligación de restitución al extinguirse el usufructo, modifican también la
caución a que es obligado para poder tener la cosa fructuaria. La caución del
usufructuario de cosas fungibles cambia de objeto no es la caución de
conservación de la cosa y de restitución de ella porque el goce le hace
desaparecer sino de restituir otras tantas cosas del mismo género y calidad o el
valor que tuviera al tiempo de la restitución.
El Dr. Juan Larrea Holguín nos expresa: “Que el usufructuario de cosa mueble
tiene derecho de servirse de ella según su naturaleza y destino, y al fin del
En el caso de las minas podemos aprovechar por ejemplo el oro y caso que se
produzca una disminución, el usufructuario está exento de responsabilidad,
siempre y cuando observe las leyes correspondientes.
Según Juan Larrea Holguín “Es un alistamiento detallado de los bienes que
recibe de usufructo, en este caso, tiene que ser con aprobación del juez. Es
realizado por un perito nombrado por el juez y a petición de parte interesada”.
(Holguín Juan, 2009)
Estas obligaciones que son dos han sido establecidas por el legislador en
consideración a los derechos del nudo propietario el que debe ponerse a cubierto
de la mala fe del usufructuario, para precaver y evitar que el usufructuario niegue
que ha recibido los bienes, el legislador, lo obliga hacer un inventario solemne
también conviene al nudo propietario ponerse a salvo de una insolvencia del
usufructuario, y este el legislador obliga a este a rendir caución.
Otro tema que tiene que ver con las cargas fructuarias es las cargas anuales o
periódicas, que es el pago de impuestos periódicos fiscales y municipales que la
graven durante el usufructo, en cualquier tiempo en que se hayan establecido,
estas cargas gravan directamente a la cosa fructuaria y deben pagarse a largo
tiempo como son los impuestos que se pagan cada año. Por eso se considera
que no tienen que ver directamente con la aptitud fructuaria. A esto el Art. 810
del Código Civil se refiere sobre las cargas fructuarias:
Por otro lado las obligaciones del usufructuario además de conservar y restituir
la cosa al momento de terminar el usufructo, es cancelar las cargas e impuestos
con que haya sido grabada la cosa fructuaria con anterioridad y durante el
usufructo, si el usufructuario no cumple con esta obligación, debe indemnizar al
propietario por los perjuicios que esto le pueda causar.
Por lo que una de las facultades del nudo propietario es básicamente el derecho
a la propiedad de la cosa, excepto su aprovechamiento que va corresponde en
ese momento al usufructuario.
Sin embargo, entre los deberes del nudo propietario tenemos las reparaciones
extraordinarias y el pago de todos aquellos impuestos que recaigan sobre el
derecho de propiedad.
Los derechos del nudo propietario han aparecido conforme se dan los derechos
del usufructuario ya que donde termina el derecho del uno, comienza el derecho
del otro, son derechos que coexisten mutuamente.
CAPÍTULO IV.
4.1.- Generalidades.
En esta lista se incluyen casi todas las causas previstas en el art. 818 de nuestro
Código Civil que analizaremos en el presente capítulo. Faltaría la mención
expresa de la renuncia del usufructuario, a que se refiere el art. 820 inc. 5. Por
otra parte, hay que mencionar que la terminación del usufructo por sentencia del
juez, puede abarcar varios casos, pero en la enumeración de VALENCIA Zea,
se refiere sin duda al caso que Planiol llama de caducidad de derecho por
incumplimiento del usufructuario de sus obligaciones fundamentales.
dicho usufructo hasta el día en que esa persona hubiera cumplido esa
edad, si hubiese vivido”. (Código Civil, 2005)
De este artículo se desprende que la causa general de la terminación del
usufructo se da ya sea por: la llegada del plazo o por el cumplimiento de una
condición resolutoria del derecho. El usufructo en principio es un derecho
temporal, puesto que está destinado a tener vigencia durante un tiempo, hasta
un día que ha de llegar ya sea por cumplimiento de un plazo o de una condición.
Todo esto si es que los eventos aquellos contemplados en el artículo anterior
ocurren antes de la muerte del usufructuario, ya que, si esto sucede, también se
pone fin a este derecho que es una de las causas para terminar el usufructo.
Pero no es lo mismo cuando fallece una persona distinta al usufructuario, ahí el
usufructo subsiste, por ejemplo, hasta cuando hubiera cumplido cierta edad
establecida en el contrato como condición.
Por lo que distinto sería el caso que se hubiera constituido el usufructo hasta que
tal persona muera, pues entonces terminaría en el día imposible de determinar
por adelantado, pero que ciertamente llegará. Porque el usufructo en este caso
dependería de una verdadera condición, que viva esa persona.
padre otorga a su hijo de 16 años el usufructo de este bien inmueble hasta que
su hijo contraiga matrimonio estaríamos frente a una condición, por cuanto con
el simple cumplimiento de esta condición termina el derecho de usufructo, pero
sin tener en cuenta el tiempo o plazo que dure, porque podría darse el caso de
que su hijo contraiga matrimonio en dos años, en tres años o en diez años y
solamente si se cumple dicha condición se terminaría el derecho de usufructo.
Aquí despejamos una duda del artículo 819 del Código Civil:
Como dice Juan Larrea Holguín la muerte del usufructuario depende del carácter
temporal del derecho y aun en el origen histórico de la intención de beneficiar a
una persona determinada por esto no se admite la transmisión de este derecho
real por sucesión hereditaria. Muy distinto es el caso de la muerte del nudo
propietario, quien si transmite su dominio por sucesión hereditaria, como también
puede transferirlo por acto entre vivos.
Conforme con el principio de que nadie puede tener una servidumbre sobre su
propia cosa, cuando la nuda propiedad y el usufructo se concentran en cabeza
de una misma persona, el usufructo se extingue. Así lo dispone en general para
las servidumbres. Pero la concentración de que hablamos se puede llevar a cabo
de las siguientes maneras: usufructo y nuda propiedad se reúnen en cabeza del
usufructuario; ambos en cabeza del nudo propietario, o ambos en cabeza de un
tercero.
Así tenemos los usufructos legales, en donde tenemos por ejemplo la viuda; el
Mortis Causa que se entrega por acto testamentario y que es siempre gratuito.
Y finalmente tenemos el que se realiza entre vivos ya sean estos Onerosos, que
se realizan mediante contrato o lo pueden ser Gratuitos que se lo otorga por
ejemplo mediante donación.
Esta acción será posible siempre que esa persona tenga la facultad de libre
disposición, es decir que pueda disponer libremente de lo suyo. También hay
que tener en cuenta que como cabe la pluralidad de titulares de este derecho y
existe el acrecimiento entre ellos, sería necesario que todos renuncien, para que
se extinga el usufructo.
A sí mismo el art 11 del Código Civil, expresa que: “Se podrán renunciar los
derechos conferidos por las leyes” (Código Civil, 2005) y esto mas es posible
porque estamos dentro del derecho privado, y si no rompe ninguna regla, es fácil
la renuncia, esto es, si no está expresamente prohibido, se sobrentiende que
está permitido.
La renuncia del usufructuario puede ser un acto unilateral o ser hecha una
convención con el nudo propietario.
“La renuncia hecha por una convención o acuerdo con el nudo propietario podría
ser a título oneroso o a título gratuito. Si el usufructuario se hace pagar su
renuncia, sea en dinero, sea estipulando una compensación, en otra forma, el
acto estará sujeto a las formalidades, que correspondan al contrato que se
celebre entre el usufructuario y el nudo propietario; así, si es una compraventa
regirán las reglas de este contrato y estará sometido, según la naturaleza de los
bienes en que existe el usufructo si han intervenido como transacción en caso
de litigio inminente o comenzado, deberán observarse las condiciones prescritas
para este contrato”. (Claro Luis, 2013) En conclusión la renuncia misma del
usufructo no requiere de solemnidad especial alguna y más bien solo dependería
de que el usufructuario tenga la capacidad de libre ejercicio y puede de manera
voluntaria renunciar a este derecho.
En cuanto a esta parte del tema debemos de considerar que cuando un bien es
expropiado pasa de tener una utilidad individual y se convierte en un bien de
utilidad pública, pues así la idea principal no es realizar un cambio o remplazo
automático de usufructo por la indemnización, sino más bien la obligación que
tiene el nudo propietario, quien como dueño del bien expropiado recibirá la
indemnización y, en consecuencia, deberá recompensar al usufructuario por la
terminación del derecho sobre el bien y en este caso el usufructuario tendría
derecho a una parte proporcional en la respectiva indemnización, pero el
usufructuario no podría hacer el uso de este dinero, pero si podría beneficiarse
de los en los intereses si es que ese dinero lo pondría en una cuenta bancaria
por así decirlo.
Cuando el juez emite una sentencia y esta pasa por autoridad de cosa juzgada
es un caso más para dar por terminado este derecho real y tenemos el siguiente
artículo del Código Civil que al respecto reza lo siguiente. Art. 823.- “El usufructo
termina, en fin, por sentencia de juez que, a instancia del propietario, lo declara
extinguido, por haber faltado el usufructuario a sus obligaciones en materia
grave, o por haber causado daños o deterioros considerables a la cosa en que
está constituido el usufructo.
El juez, según la gravedad del caso, podrá ordenar, o que cese absolutamente
el usufructo, o que vuelva al propietario la cosa, con cargo de pagar al
usufructuario una pensión anual determinada, hasta la terminación del
usufructo.” (Civil, 2015)
El juez según el caso podrá ordenar o que sea absolutamente el usufructo o que
vuelva al propietario la cosa, con cargo de pagar al usufructuario una pensión
anual determinada hasta la terminación del usufructo.
Concede la ley facultades muy amplias al juez, para arreglar esta materia
considerando las circunstancias y la gravedad de las faltas cometidas por el
usufructuario. Resulta razonable pensar que, así como el usufructuario está
obligado a prestar caución antes de entrar en la administración de la cosa, podrá
también evitar que se le prive de su derecho aumentado las garantías de buena
conservación y demostrando a través de las reparaciones adeudadas, la
voluntad de conservar el bien como es debido.
Puede suceder que una persona distinta de quien es el verdadero titular del
usufructo haya suplantado a este y haya disfrutado de la cosa hasta adquirir el
derecho por prescripción produciéndose secundariamente el efecto de la
extinción del derecho de quien realmente era titular.
Pero para ello también debemos tomar en cuenta que la prescripción puede ser
de dos clases, la una adquisitiva o usucapión y la otra extintiva o liberatoria, así
la primera nos ayuda o nos permite adquirir las cosas ajenas y la segunda que
permite extinguir las obligaciones por la inacción o falta de reclamo oportuno, por
el tiempo establecido en la ley, conocida también como prescripción extintiva de
acciones o simplemente liberatoria.
Se prohíbe constituir usufructo alguno bajo una condición o plazo cualquiera, que
suspenda su ejercicio. Si de hecho se constituye no tendrá valor alguno. Si el
usufructo se constituye por testamento y la condición se hubiere cumplido o el
plazo hubiere expirado antes del fallecimiento del testador valdrá el usufructo.
En cuanto a la extinción del derecho de usufructo el art. 863 del Código Civil
Colombiano expresa: “El usufructo se extingue generalmente por la llegada del
día o el evento de la condición prefijados para su terminación. Si el usufructo se
ha constituido hasta que una persona distinta del usufructuario llegue a cierta
edad, y esa persona fallece antes, durará, sin embargo, el usufructo dura hasta
que el día que esa persona hubiera cumplido esa edad si hubiere vivido.
Por ello es que para tramitar algún derecho real mediante la vía judicial como es
el derecho de usufructo lo tenemos que hacer de acuerdo a los siguientes
artículos del Código Orgánico General de Procesos:
Así el Artículo 290 determina claramente qué tipo de acciones o causas se deben
seguir por la vía ordinara:
“…Se tramitarán en procedimiento ordinario todas aquellas acciones que no
tengan un trámite especial (…) y entre ellas están: las que priven del dominio,
posesión o tenencia de algún inmueble o de algún derecho real de uso,
usufructo, habitación, servidumbre o anticresis constituido sobre un inmueble o
Según la ley notarial los notarios pueden constituir usufructo, ya que al ser una
institución notarial tiene por objeto dar fe de los actos que se realizan en
presencia del notario público, en su condición de funcionario competente. Entre
estas sabemos que se puede constituir y extinguir un usufructo lo cual se
CONCLUSIONES.
Hay que tener presente el concepto del derecho de usufructo, del que se
desprende el contenido básico de las facultades y deberes del usufructuario,
como titular de un derecho real de disfrute en cosa ajena y las del nudo
propietario que sigue siendo titular del derecho de propiedad, aunque
desprovisto de la facultad de aprovechamiento que tiene el usufructuario y que
por esto se llama nuda propiedad. El usufructuario y el nudo propietario no tienen
derechos y obligaciones, sino facultades y deberes. No tienen derechos
subjetivos en su concepto preciso, sino el derecho subjetivo es el de usufructo,
del cual se derivan facultades y deberes para el usufructuario y facultades y
deberes derivadas del derecho de propiedad, comprimido o más bien limitado
por el usufructo para el nudo propietario. No tienen obligaciones ya que estas en
su concepto preciso, son relaciones jurídicas en las que el acreedor tiene el
Para expresar esta idea cabe decir que el usufructo no se puede dar sin una
nuda propiedad simultánea. Lo que es cierto ya que como las cosas están
sometidas a su señorío todo y parte de este no corresponde al usufructuario
necesariamente constituye otro derecho el de nuda propiedad.
En definitiva, diría que el usufructo es establecido por la ley o por la voluntad del
hombre. Efectivamente los modos de constituirse el usufructo pueden reducirse
a estas dos, puesto que las otras formas no son más que el resultado de un
hecho del hombre, esto es de su voluntad y precisamente en esta circunstancia
está basada la clasificación que hemos hecho del usufructo en legal y
convencional
También considero que a más de las formas que hemos visto de extinción del
usufructo también se puede extinguir por el abandono, es decir sino utiliza las
cosas, en el caso de las cosas muebles se perdía por el no uso en tres años y
para las cosas inmuebles en diez años entre presentes y veinte entre ausentes,
sin que fuera necesario que se hubieran realizado respecto de otra persona los
requisitos de la usucapión o de la prescripción de largo tiempo. Es decir, si estos
derechos no son ejercidos en el plazo establecido legalmente se extinguen, la
simple inacción basta para que se extinga el derecho de usufructo.
RECOMENDACIONES.
Finalmente hay que tener presente que el objeto del derecho de usufructo es que
puede recaer sobre cualquier especie de bienes muebles o inmuebles,
singulares o universales, corporales e incorporales, consumibles o no, solo es
de advertir que el usufructo constituido sobre cosas consumibles es un
cuasiusufructo.
TERCERA INSTANCIA
VISTOS: El Ingeniero Gustavo Jaramillo Larrea comparece ante el señor Juez Séptimo Provincial
de Pichincha y expresa: que según contrato suscrito en esta ciudad de Quito, el 9 de junio de
1972, en calidad de propietario de la hacienda La Victoria, ubicada en el sector de La Unión
(kilómetro 187 de la Vía Santo Domingo - Esmeraldas), en la cual ha cultivado tres lotes de
cincuenta hectáreas cada uno, de banano Gross Michel que se hallaban en perfecto estado y
cuya producción estimativa fue de dos mil doscientos cajas semanales para la exportación,
concedió a favor del señor Agustín Ocampo el usufructo de las tres bananeras a fin de que pueda
explotarlas y beneficiarse de su producto, siendo su obligación cuidar de que se realicen tres
limpias y deshije anuales, debiendo realizarse la última limpia y deshije el mes anterior a la
terminación del contrato, el 17 de octubre de 1973; que fue obligación del señor Ocampo
mantener las guardarrayas existentes en perfecto estado, a fin de que no obstaculice el tránsito
de vehículos, debiendo emplear la cantidad de lastre que fuera necesario. Agrega el
demandante: que el señor Ocampo no cumplió con sus obligaciones contractuales; y, con tales
antecedentes demanda en juicio verbal sumario al señor Agustín Ocampo para que, en
sentencia, se le condene al pago, de lo siguiente: Cincuenta mil sucres estipulados en la cláusula
sexta del contrato como multa por no haberle entregado perfectamente limpias y deshijadas las
bananeras; los daños y perjuicios que le ha ocasionado el incumplimiento de las obligaciones
contractuales, en cuanto a los valores que ha tenido que erogar para deshijar y limpiar las
bananeras y arreglar las guardarrayas; el lucro cesante que se establecerá durante la prueba,
esto es con respecto a la disminución de la producción del banano debido a la falta de limpia y
deshije de las plantaciones; y, por último, demanda el pago de las costas procesales. En la
audiencia de conciliación el demandado deduce excepciones, las cuales constan en el acta
respectiva de Fs. 7 vta. a 9 del cuaderno de primera instancia. Trabada la litis en la forma que se
deja expuesta y sustanciado el proceso, el señor Juez Provincial expide sentencia la cual desecha
las excepciones del demandado, acepta la demanda y ordena que Agustín Ocampo pague, de
inmediato: la cantidad de cincuenta mil sucres conforme lo estipulado en la cláusula sexta del
contrato y, además, los daños y perjuicios ocasionados, los mismos que deberán liquidarse en
la forma prevista en el Art. 915 del Código de Procedimiento Civil. Con costas y regulación de
honorarios del Defensor del actor. El demandado, en tiempo oportuno, interpone recurso de
apelación y la H. Corte Superior de Justicia de Quito (Tercera Sala) acepta la demanda, en parte,
y reforma la sentencia apelada en el sentido de que el demandado está obligado a pagar al actor,
inmediatamente, la cantidad de sesenta mil sucres por todo concepto, incluidos los daños y
perjuicios y la rebaja a la que tiene derecho el demandado por la no percepción de los frutos el
día 17 de octubre de 1973. Sin las costas de la instancia.- El propio demandado interpone recurso
de tercera instancia y, por su parte, el actor, Fs. 32 del segundo cuaderno, dice: "Interpuesto el
recurso de apelación de la sentencia pronunciada por Ud.....". Radicada la competencia en esta
Sala, en mérito al correspondiente sorteo, examinado el proceso, para resolver se hacen las
consideraciones que siguen: 1.- Por la generalidad del término empleado por el actor al
interponer su recurso, en relación a la sentencia de segundo nivel, se estima, según
jurisprudencia establecida, que el recurso interpuesto es el de tercera instancia, recurso
concedido por la Tercera Sala de la H. Corte Superior de Justicia de Quito; 2.- No hay falta u
omisión de solemnidad sustancial alguna que haya influido o que pudiera influir en la decisión
de la causa, por cuya razón se declara la validez procesal. El trámite en juicio verbal sumario y la
estipulación de que las partes se sujetan a los jueces de Pichincha, para el evento del juicio, se
encuentra expresamente puntualizado en la cláusula octava del contrato de Fs. 10, suscrito el 9
de junio de 1972 y cuya firma y rúbrica reconoce el demandado a Fs.69 vta. Cuando se ha
celebrado el contrato al que acaba de hacerse referencia y por el cual el Ingeniero Gustavo
Jaramillo concede a favor del demandado, señor Agustín Ocampo, el usufructo de tres
bananeras existentes en su hacienda La Victoria, a fin de que pueda explotarlas y beneficiarse
de su producto, dicho contrato ha sido aceptado por las partes y hasta su finalización, sin que
en el decurso del correspondiente plazo se hubiera presentado ningún reclamo, ya sea por falta
de solemnidad, o de autorización; 3.- El Art. 608 del Código Civil dispone: "los productos de los
inmuebles, y las cosas accesorias a ellos, como las hierbas de un campo, la madera y fruto de los
árboles, los animales de un vivar, se reputan muebles, aún antes de su separación, para el efecto
de constituir un derecho sobre dichos productos o cosas en favor de otra persona que el dueño.
Lo mismo se aplica a la tierra o arena de un suelo, a los metales de una mina, y a las piedras de
una cantera". Y según el Art. 1767 del propio Código, en su último inciso: "Los frutos y flores
pendientes, los árboles cuya madera se vende, los materiales de un edificio, los que
naturalmente adhieren al suelo, como piedras y sustancias minerales de toda clase no están
sujetos a la excepción del inciso segundo". Es decir que las respectivas transacciones se reputan
perfectas por voluntad de las partes y no precisan de la celebración de escritura pública para su
validez, razón por la cual el contrato de Fs. 10 es válido. Además, todo contrato legalmente
celebrado es una ley para los contratantes, según la disposición del Art. 1.588 del Código Civil;
4.- Conforme al contrato celebrado entre las partes, el Ing. Gustavo Jaramillo Larrea concede a
favor del señor Agustín Ocampo el usufructo de las tres bananeras existentes en su hacienda La
Victoria, a fin de que el señor Ocampo pueda explotarlas y beneficiarse de su producto, cuidando
que se realicen tres limpias y deshijes anuales. Se estipula que la última limpia y deshije se
realizará en el mes anterior a la terminación del contrato. De las pruebas constantes de autos
puede deducirse que el usufructuario, por conveniencia propia, ha mantenido las bananeras en
buen estado de conservación hasta el mes de agosto, 29 30 de 1973, fechas de la calificación y
cuando se ha podido constatar la oportuna realización de labores de cultivo por parte del
Programa de Campaña Fitosanitaria, como consta de la certificación de fs. 100 del primer
cuaderno, expedido por el señor Inspector Técnico del mencionado Programa. Empero, no
prueba el demandado haber realizado la limpia y deshije de las bananeras el mes anterior a la
terminación del contrato, como estaba en la obligación de hacerlo, habiéndose constituido en
mora, conforme al Art. 1.594 del Código Civil, ya que las partes libre y voluntariamente han
previsto con anticipación el tiempo de realización de tales trabajos y el vencimiento del plazo a
cuyo vencimiento se produce la mora, siendo inútil el requerimiento al deudor, por tal razón.
Ocampo está en la obligación de pagar al demandante el valor correspondiente. El perito del
actor, Leonardo Carrera Morejón, en la diligencia de inspección judicial pedida para avaluar los
daños y perjuicios ocasionados por el incumplimiento de las obligaciones constantes del
contrato de 9 de junio de 1972, valora en treinta mil sucres la limpia y deshije de la ciento
cincuenta hectáreas, fs. 92, valoración que estimativamente se acepta como justa; 5.- La partes
contendientes en este procesamiento han previsto la multa de cincuenta mil sucres, en la
cláusula sexta del contrato, por incumplimiento, por parte del usufructuario, de cualquiera de
las obligaciones que asume y el pago, además, de todo daño y perjuicio al propietario. En la
misma cláusula se estipula que si a la terminación del plazo detentare las bananeras el
usufructuario y no las entregare perfectamente limpias y deshijadas, amas de la multa de
cincuenta mil sucres, pagará la cantidad de veinte mil sucres mensuales por todo el tiempo que
persistiera en la detención y no entregare las bananeras al propietario. Probado el
incumplimiento de entregar las bananeras a su dueño limpias y deshijadas en el mes anterior a
la fecha de terminación del contrato, procede el cobro al demandado del valor de la multa
estipulada a más del pago del valor de la limpia y deshije. Multa libremente establecida y en
forma independiente de la indemnización de daños y perjuicios; por lo mismo, el demandado
está en la obligación de satisfacer, también, la multa de cincuenta mil sucres estipulada; 6.- El
demandante no prueba los perjuicios sufridos por falta de la limpia de las bananeras en el mes
anterior a la fecha de recepción de las mismas. En efecto, se aprecia que dichas bananeras han
estado debidamente atendidas hasta agosto de 1973, como anteriormente se dijo; que la
producción de las mismas bananeras se prueba que aumenta, antes que disminuya, según se
deduce del certificado de Fs. 112 vta. y en el cual consta que ha exportado el Ing. Gustavo
Jaramillo Larrea, en el mes de octubre y hasta el mes de diciembre de 1973, un total de 18.433
cajas de Gross Michel. Por el retardo de la ejecución de la última limpia de las bananeras no hay
prueba de que se haya ocasionado daños, ni causado perjuicios en la plantación del
demandante; por lo tanto, no procede el reclamo de pago de los reclamos segundo y tercero de
la demanda; y puesto que, no hay prueba de que los guardarrayas de las bananeras hayan estado
en condición de obstaculizar el tránsito de vehículos, y el demandado las ha mantenido en
servicio, según aparece de autos; 7.- En esta clase de juicios, a excepción de los laborales, no es
admisible la reconvención. Por todo cuanto queda expuesto, ADMINISTRANDO JUSTICIA EN
TERCERA INSTANCIA
los que le correspondían al tradente, conforme prescribe el art. 715, y si no existe justo título y
posesión regular, no se puede adquirir por prescripción ordinaria bienes que están sujetos al
gravamen de restitución al tiempo de la muerte del usufructuario, contrariando el objeto y los
fines de la institución testamentaria, en el caso del usufructo y fideicomiso; 7o. Si bien de la
escritura pública de 3 de diciembre de 1923, presentada por Homero Cobos Mieles con el escrito
de fs. 39, consta que los demandantes Junio Espinosa Rizzo y Esther María Espinosa de Mangold,
vendieron derechos y acciones en la casa y solar adyacente, objeto de esta litis a José Manzano
Hinostroza, consta asimismo que éstos volvieron a adquirir los mismos derechos y acciones de
poder del comprador, por escritura pública inscrita otorgada el 23 de septiembre de 1946,
habiendo mediante esta readquisición comprobado el dominio que tenían en el inmueble
materia de la demanda, sobre el que se constituyó el mencionado usufructo y el fideicomiso,
según queda expresado; siendo en consecuencia inaceptables las excepciones de fs. 16 y 20, en
las que se ha negado el derecho de los actores, invocando la prescripción que no pudo realizarse.
Por estos considerandos, ADMINISTRANDO JUSTICIA EN NOMBRE DE LA REPUBLICA Y POR
AUTORIDAD DE LA LEY, se confirma la parte resolutiva de la sentencia que ha subido en grado
que confirma la de primera instancia que acepta la demanda por ser procedente, condenando
a los reos a la restitución y entrega del predio reclamado, con costas, daños y perjuicios, los que
se liquidarán en juicio verbal sumario. Las costas de esta instancia son de cargo de la recurrente
Esperanza Izquierdo de Loza. Se regula en sesenta sucres el honorario del doctor Julio Bastidas
por los escritos de fs. 106 y 113. Legalizado el papel, devuélvase"..
TERCERA INSTANCIA
usufructo del terreno vendido al actor, pero exige se obligue a sus vendedores a indemnizarlo
por los perjuicios sufridos; 4o. Durante el término probatorio se ha presentado la copia de la
escritura inscrita de fs. 13 a 14 de la que consta que el 22 de mayo de 1949, Neptalí Castillo y
Angela Sánchez venden a favor de Fernando Azael Tinoco, los derechos y acciones que
compraron en la hacienda Santa Rufina, bajo la linderación que se ha determinado en dicho
título, a Rubén Sánchez, con la reserva que había hecho éste del derecho de usufructo en los
sembríos de café y guineos verificados por el mismo, así como del derecho de uso y habitación
de una casa, por todo el tiempo en que el primitivo vendedor Sánchez y la esposa de éste vivan.
Se expresa en la escritura que los expresados cultivos y la casa con las reservas anotadas, se
incluyen en la venta y otras cosas que en la misa se enumera. De la copia de la escritura de fs.
27-29, de 4 de noviembre de 1949, aparece que los cónyuges Rubén Sánchez y Rosenda Granillo
de Sánchez, venden a favor de Abraham Guevara Sánchez, el derecho de usufructo que se
reservo el primer compareciente cuando efectuó la venta de los derechos y acciones a favor de
su hija Angela Sánchez y de su marido Neptalí Castillo, hasta la vida de los vendedores. 5o. Que
con las declaraciones de los testigos, rendidas a fs. 3, 4 y 5, se ha comprobado que los esposos
Sánchez - Granillo, han vivido en una casa de habitación, poseyendo y usufructuando la parcela
de terreno a que se refiere la demanda, inclusive los sembríos de café y guineos, en la hacienda
Santa Rufina, sembrándola desde hace varios años y dando en arriendo porciones de ella, y que,
hace pocos meses, Azael Tinoco, se ha introducido en dicha parcela de terreno linderado y ha
sembrado una sementera de arroz, dando en arrendamiento fracciones del referido terreno a
varias personas, y del informe de los peritos que obra a fs. 22 y 23, consta las siembras
verificadas por el demandado y por los arrendatarios de éste; 6o. Que, a más de la prueba plena
instrumental y de testigos que se ha producido en contra de Azael Tinoco, éste reconoce el
derecho del actor, siendo improcedente y extemporánea la nulidad por razón del trámite, que
se ha dado a la demanda, que está estrictamente ceñido a la ley, por tratarse de la conservación
y recuperación de la posesión del derecho de usufructo, sobre el que pudo ejercerse la acción
que se ha deducido, de acuerdo con lo dispuesto en los arts. 978 y 982 del Código Civil, habiendo
justificado el demandante que estuvo en posesión tranquila y no interrumpida durante más de
un año, antes de que se verifiquen los hechos de perturbación y despojo; 7o. Que es obligación
de los jueces y tribunales, al expedir sentencia que acepte la demanda, según lo prescribe el art.
728 del Código de Procedimiento Civil, amparar en sus derechos al actor, dictando las órdenes
que estime conducentes para restituir las cosas a su estado anterior, por lo cual en el fallo de
primera instancia que ha sido confirmado por la Corte Superior, se ha ordenado que Azael
Tinoco restituya inmediatamente a Fiel Abraham Guevara, la posesión de los terrenos que
indebidamente los ha ocupado y arrendado, como también las plantaciones de café y de guineo
que han sido sembradas por el primitivo vendedor, condenándole a pagar la cantidad de
setecientos sucres por concepto de daños y perjuicios que se hallan comprendidos y se observa
que en esta parte ha quedado ejecutoriada la sentencia para el demandante, que no ha apelado
de ella. En cuya virtud, ADMINISTRANDO JUSTICIA EN NOMBRE DE LA REPUBLICA Y POR
AUTORIDAD DE LA LEY, se confirma la sentencia recurrida. Con costas. Sin honorario que regular.
Legalizado el papel devuélvase..
2015 01 09 2da. P
de noviembre del año dos mil quince, ante mí, Doctora Diana Isabel Malo
Registro Mayor de la Propiedad del cantón Sígsig, el cuatro de agosto del año
parroquia San Bartolomé, de este cantón, mismos que tienen los siguientes
costado: ANTES: Con tierras de Benigno Uyaguari, HOY: Con María Josefina
ANTES: Con camino público, HOY: Camino de lastre; Por el pie: ANTES:
Con tierras de José Luis Otavalo y herederos de Isidro Otavalo, HOY: José
HOY: Con José Esteban Otavalo y Gladys Sisa; y, Por el otro costado:
ANTES: Con tierras de José Luis Otavalo y herederos de Isidro Otavalo; HOY:
ella contiene por ser otorgado a su favor y por estar de acuerdo con sus
doce del Colegio de Abogados del Azuay.- Hasta aquí trascrita la minuta que
20170109002P00120
Ecuador, a diez días del mes de marzo del año dos mil
BIBLIOGRAFÍA.
Holguín Juan. (2009). Derecho Civil del Ecuador. Quito: Corpracion de Estudios
y Publicaciones.
Larrea Holguín Juan. (2009). Derecho Civil del Ecuador. Quito: CEP.
Ley Notarial. (2016). Ley Notarial. En Congreso, Ley Notarial. Quito: LEXIS.