Transtorno Desintegrativo Infantil
Transtorno Desintegrativo Infantil
Transtorno Desintegrativo Infantil
INFANTIL
¿Qué es el trastorno desintegrativo infantil?
Normalmente, el niño o niña que sufre este trastorno ti ene un desarrollo normal,
pero en el momento en el que se manifi esta esta enfermedad, dicho desarrollo se
interrumpe y afecta a las habilidades cognitivas y comunicativas , e incluso,
experimenta un ti po de regresión de las capacidades ya adquiridas.
Este trastorno ti ene muchos nombres, uno de ellos, “el síndrome de Heller” se debe
a su investi gador Theodore Heller, un educador austriaco que descubrió esta
enfermedad en el año 1908.
El trastorno o síndrome desintegrati vo infanti l fue descubierto ti empo antes que Leo
Kanner descubriera el auti smo. Sin embargo, su reconocimiento fue tardío, hasta
hace unos pocos años.
Los síntomas se dividen en tres grupos: área del lenguaje, área psicomotriz y área
social, estos son los principales:
Pérdida total o parcial de la capacidad del lenguaje, tanto oral como escrito.
En los casos en los que el niño no ha perdido totalmente la capacidad del
lenguaje, pueden producirse ecolalias (imitar o repeti r sonidos, palabras,
frases, etc.)
Irritabilidad
Ansiedad
Incapacidad para ejecutar las acti vidades coti dianas del autocuidado (asearse,
comer solo, lavarse los dientes, vesti rse, etc.)
Los niños que sufren el trastorno desintegrati vo infanti l muchas veces presentan
otros trastornos como, por ejemplo, síndrome de Asperger o la enfermedad de
Schilder, o bien patologías neuronales como, por ejemplo, al esclerosis tuberosa.
Hoy en día los expertos todavía no han podido determinar las causas que expliquen
el trastorno desintegrati vo infanti l. Las investi gaciones realizadas hasta la fecha
excluyen las causas neurológicas o médicas como principal detonante de esta
enfermedad, puesto que no existe ninguna razón cientí fi ca que lo explique.
Por otra parte, también puede deberse por varios motivos , ya sea por un cuadro
infeccioso en el sistema nervioso, anomalías cerebrales, esclerosis tuberosa,
convulsiones, e incluso por un hecho traumáti co.
Otros enti enden que la causa de esta enfermedad se debe a los depósitos cerebrales
de amiloide, como si fuera un ti po de demencia infanti l.
Pese a que ambos se incluyen en los trastornos de Espectro Auti sta, presentan
ciertas característi cas que los diferencian.
Los niños con síndrome desintegrati vo infanti l y los niños con auti smo presentan
difi c ultades en las habilidades comunicati vas y sociales. Sin embargo, los primeros
se diferencian de los segundos, porque experimentan una regresión de sus
habilidades, padecen con más frecuencia episodios de epilepsia o muestran
conductas estereoti padas mucho antes.
Lamentablemente, no existe un tratamiento que permita acabar con los síntomas del
trastorno desintegrati vo infanti l, pero con la ayuda de profesionales es posible
mejorar la calidad de vida del niño que lo padece.
Es muy complejo poder mejorar las capacidades sociales, lingüísti cas o motrices del
niño, pero cabe la posibilidad de que adquiera la autonomía sufi ciente para realizar
ciertas acti vidades con autonomía o que regulen su propia conducta, sin necesidad
de entender lo que los demás le dicen.