Séptimo Manifiesto Del Reino
Séptimo Manifiesto Del Reino
Séptimo Manifiesto Del Reino
Llegamos a la “Manada Pequeña” rompiendo las ataduras del Orden Mundial y sus
organizaciones “espiritualistas” agonizantes que “desde los días de Juan el Bautista” hasta
la llegada de los Siete del Verbo, arrebataron con violencia el Reino de los Cielos, hoy
intocable ante la presencia de las Siete Estrellas del que está Sentado a la Diestra del
Supremo, que por la llegada del Reino determinó en Isaías 14:17, la destrucción del “dios”
invasor y su orden … “Pero tú echado eres de tu sepulcro como vástago abominable, como
vestido de muertos pasados a espada, que descendieron al fondo de la sepultura; como
cuerpo muerto y hollado. No serás contado con ellos en la sepultura; porque tú destruiste
tu tierra, mataste a tu pueblo. No será nombrada para siempre la descendencia de los
malignos. Preparad sus hijos para el matadero, por la maldad de sus padres de Z-zilón; no
se levanten, ni posean la Tierra, ni llenen de ciudades la faz del mundo. Porque Yo me
Levantaré contra ellos, dice EL SIN NOMBRE, y raeré de Babilonia el nombre y el
remanente, hijo y nieto, dice EL SIN FIN”.
la Voz aromada del Reino que cifró Jesús en Mateo 18:15 para los de
limpio corazón… “De cierto os digo, que si no os volvéis y os hacéis como niños, no entraréis
en el Reino de los Shielhos … Y cualquiera que reciba en Mi Nombre a un como
este, a Mí Me Recibe” ... porque traigo la Luz del que dijo “amaos los unos a los otros”, el
Reino del Amor y Comprensión a los que atendieron el llamado del Cristo en Juan y Jesús…
“Arrepentíos, porque se ha acercado”, y para recibirlo desalojan la
oscuridad que nubló sus mentes y endureció sus corazones; corrigen sus pasos dados en la
ignorancia, sabiendo que anduvieron en tinieblas. Mirad que el Reino de Cristo viene en las
Siete Luces del Verbo que van por toda la Tierra encendiendo el Interior de los hombres: “
cuando se descubre dividido en mil fragmentos y proyectado
en mil individuos diferentes que les son conocidos e importantes para él. Se reconoce en el
amigo que anda ciego porque no ha tenido un guía. Se identifica con el padre y con el amigo,
con el hijo y con el desalmado, con la madre que ama al hijo y con la que lo aborrece, se
identifica con el vicioso y con el bebedor, con el mendigo y con el enfermo que sufre, hace
suyo el dolor del afligido y del que no tiene consciencia, hace suyo su fracaso”… porque
hallan el Amor que anhelaron al ofrecerlo a los demás, aprenden perdón y obtienen la Paz,
porque también son perdonadas sus ofensas por el Supremo que los observa, en su bondad
sentida.