Antecedentes
Antecedentes
Antecedentes
Datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) y del Fondo de las
Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF), revelan que en México habitan cerca
de 40 millones de niños, niñas y adolescentes (en términos relativos, representa el
35% de la población), los cuales, en su mayoría, enfrentan problemáticas
múltiples: violencia, bajo aprovechamiento escolar o inasistencia a la escuela,
problemas de salud como la obesidad y desnutrición, entre otros, muchos de ellos
derivados de la pobreza. De ese total, 21 millones viven en pobreza; 4 millones no
asisten a la escuela; cada día mueren tres de ellos víctimas de la violencia; una de
cada cinco personas desaparecidas, pertenece a este sector de la población y
cada 30 minutos uno de ellos llega al hospital por lesiones causadas de manera
intencional.
La Encuesta Nacional sobre Discriminación 2017 (ENADIS), advierte que 22.5%
de niñas y niños entre 9 y 11 años, y que 36% de adolescentes entre 12 y 17
años, considera que en México sus derechos se respetan poco o nada.
Sobre el derecho de participación, 24.8% de niñas y niños de entre 9 y 11 años
manifestaron que su opinión nunca se toma en cuenta en la comunidad. Respecto
a la violencia en el hogar, 14.4% de niñas y niños refirió que alguna vez le
hicieron sentir miedo; al 13.2% los insultaron o se burlaron de ellos y ellas, 11.3%
se ha sentido menos o ha sido ignorado, al 10.5% lo jalonearon, empujaron o
pegaron, 10.1 % sufrió amenazas de ser golpeado o golpeada, y al 9.2% le han
hecho sentir avergonzada o avergonzado.
Con relación al acoso escolar, 22.6% manifestó haber sufrido burlas o recibir
apodos ofensivos; 15.7% padeció el rechazo de los compañeros y compañeras; a
15% le prohibieron participar en juegos, deportes o actividades en equipo, y a
12.5% le han pegado, empujado o amenazado.
El 41.8% de niñas y niños señaló haber sido discriminado en la escuela por su
peso o estatura, 35.5% por su manera de vestir, 32.5% por su forma de hablar y
expresarse y 27.5% por su nombre.
Como se advierte del Informe Especial de la Comisión Nacional de los Derechos
Humanos sobre Desaparición de Personas y Fosas Clandestinas en México, dado
a conocer a la opinión pública en abril de 2017, las instancias de procuración de
justicia de las entidades federativas del país reportaron en el periodo 1995 a
diciembre de 2016 un total de 6,901 casos de personas menores de edad
desaparecidas.
El Registro Nacional de Datos de Personas Extraviadas o Desaparecidas, da
cuenta que a septiembre de 2018 existían 9,672 casos registrados de personas de
0 a 17 años de edad en el fuero común, en tanto que en el fuero federal 382
casos.
El Informe de Evaluación de la Política de Desarrollo Social 2018, realizado por el
Consejo Nacional para la Evaluación de la Política de Desarrollo Social
(CONEVAL), señala que en 2015, 50% de la población nacional de niñas, niños y
adolescentes vivían en hogares que experimentaban algún tipo de pobreza, es
decir, 20.7 millones de niñas, niños y adolescentes.
El panorama es peor cuando hablamos de menores de edad indígenas, quienes
alcanzan porcentajes de pobreza cercanos al 80% (78.6 para las niñas y niños y
78.2 para las y los adolescentes). Esto refleja las desventajas que enfrenta la
población indígena, en particular los menores de edad, para el ejercicio de sus
derechos. La población indígena enfrenta brechas en todos los casos en los que
se compara con población no indígena, por ejemplo, 78.5% de menores indígenas
(0-17 años) se encuentran en situación de pobreza frente al 47.8% de la población
de menores de edad no indígenas[1]. De igual forma, el Informe de Evaluación
de la Política de Desarrollo Social refleja que 700,000 niñas, niños y
adolescentes, no asistían a la escuela por motivos económicos.
Datos de UNICEF y del Instituto Nacional para la Evaluación de la Educación
(INEE) revelan que en México, 1 de cada 3 niñas, niños y adolescentes indígenas
se encuentran en edad escolar (3 a 17 años); no obstante, la proporción de ellas y
ellos en función del nivel educativo varía en cada entidad federativa; por ejemplo,
mientras que en Nayarit y Nuevo León hay un número importante de niñas y niños
en edad preescolar (23.1 y 25.5%, respectivamente), en Veracruz habitan más
niñas, niños y adolescentes en edad para cursar la secundaria (22.4%) y la
preparatoria (20.4%).[2]
Al inicio del ciclo escolar 2016-2017 estaban matriculados casi 31 millones de
niños, niñas y adolescentes en la educación obligatoria (preescolar, primaria,
secundaria y preparatoria), de los cuales, 9% de la matrícula correspondía a
alumnas y alumnos indígenas. Al respecto se destaca que sólo 15.2% de 243,480
escuelas en México, se ubica en municipios indígenas. [3]
De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud, la obesidad infantil es un
problema de salud pública a nivel mundial que está afectando progresivamente a
muchos países de bajos y medianos ingresos. En México, de acuerdo a la
Encuesta Nacional de Salud y Nutrición de Medio Camino 2016 (ENSANUT MC
2016), 3 de cada 10 niñas y niños (de 5 a 11 años de edad) padecen sobrepeso u
obesidad. Aunque hubo una disminución significativa del sobrepeso en niños
varones, al pasar de 19.5% en 2012 a 15.4% en 2016, se observó un incremento
progresivo en la prevalencia combinada de sobrepeso y obesidad en zonas
rurales, tanto en niñas como en niños. Asimismo, 4 de cada 10 adolescentes (de
12 a 19 años de edad) presenta sobrepeso u obesidad.
En 2018, el Centro Nacional de Programas Preventivos y Control de
Enfermedades (CENAPRECE) de la Secretaría de Salud (SS), ratificó
las Declaraciones de Emergencia Epidemiológica EE-5-2018 y EE-6-2018 para
todas las entidades federativas de México ante la magnitud y trascendencia de los
casos de sobrepeso y obesidad [4], en las que se hace un llamado a las
autoridades de los tres órdenes de gobierno a coordinarse con la SS a efecto de
intensificar las acciones de promoción, prevención, diagnóstico oportuno y control
del sobrepeso y de la obesidad.
La Encuesta Nacional de Niñas, Niños y Mujeres 2015, elaborada por el Instituto
Nacional de Salud Pública (INSP) y UNICEF, revela que 63% de niñas, niños y
adolescentes de entre 1 a 14 años es sometido a formas de castigo físico o
psicológico por algún integrante de su familia, mientras que 6% recibe castigos
severos. Datos de ONU Mujeres 2014, señalan que 23 mil adolescentes, de entre
12 y 17 años, sufrieron alguna agresión sexual, así como que 747 mil niñas y
adolescentes de 5 a 17 años participaban en alguna actividad económica.
El Módulo de Trabajo Infantil 2017 del INEGI, señala que a nivel nacional 3.2
millones de niñas, niños y adolescentes de 5 a 17 años realizaron trabajo infantil,
de los cuales 58.2% desempeñaron ocupaciones no permitidas y 36.6%
quehaceres domésticos no adecuados. El número de personas en ocupación por
debajo de la edad mínima para trabajar era de 802,890 personas (38.7%) y
1,267,543 (61.3%) se dedicaban a actividades peligrosas. El 39.3% de quienes
eran personas menores de edad en ocupación no permitida no percibían ingresos
por su labor. Los Estados de Nayarit, Zacatecas y Campeche reportaron el mayor
índice de trabajo infantil, con 19.7%, 18.9% y 18.1%, respectivamente.[5]
Durante 2015, cifras del INEGI revelan que 49% de niñas y adolescentes de entre
5 y 17 años trabajaban; 7.8% de mujeres adolescentes ha tenido un hijo; 10.1% de
las adolescentes y jóvenes de 15 a 19 años dejó la escuela porque se embarazó o
tuvo un hijo y 13.1% lo hizo debido a que se casó.
Sobre este último punto, a raíz de la expedición de la LGDNNA, las entidades
federativas iniciaron una labor de armonización legislativa para establecer en su
legislación civil el requisito de edad mínima de 18 años para contraer matrimonio.
A la fecha, en la totalidad de las entidades se prohíbe contraer matrimonio antes
de los 18 años de edad, sin embargo, el Código Civil Federal aún contempla el
matrimonio de personas menores de 18 años y tres estados conservan dispensas
o excepciones a la edad (Baja California, Querétaro y Sonora).
De acuerdo con el Informe Anual de UNICEF 2017, 23.6% de las mujeres en
México se han casado o viven en unión conyugal antes de cumplir los 18 años de
edad. Chiapas, Guerrero y Oaxaca, son los tres estados de la República mexicana
con mayor porcentaje de matrimonio infantil con 44.82%, 42.41% y 39.17%,
respectivamente. Aproximadamente, 15% de las mujeres jóvenes entre 15 y 19
años está casada.[6]
Cifras de la Encuesta Intercensal del INEGI 2015, muestran que en México
residían 19.4 millones de niñas y adolescentes mujeres menores de 18 años; de
las cuales 2 de cada 100 niñas de 6 a 11 años no asistían a la escuela; 18% de
las adolescentes de 16 y 17 años declararon no haber terminado la secundaria o
tener un nivel de escolaridad menor y 1 de cada 10 de 5 a 17 años que hablaba
lengua indígena, no asistía a la escuela.
Por otro lado, de 1990 a 2016 la tasa de fecundidad de niñas y adolescentes entre
10 y 14 años aumentó en la mayoría de las entidades federativas, alcanzando en
ese último año 2.15 nacimientos por cada mil de ellas. Las entidades con más
altas tasas de fecundidad son: Guerrero, Chiapas y Coahuila.
La Encuesta Nacional sobre la Dinámica de las Relaciones en los Hogares
(ENDIREH) 2016, del INEGI, causa alarma pues revela que 66 de cada 100
mujeres de 15 años en adelante que residen en nuestro país han experimentado
por lo menos un acto de violencia de cualquier tipo (emocional, física, sexual,
económica, patrimonial o discriminación laboral) a lo largo de su vida. En su
mayoría quienes han ejercido esa violencia en su contra han sido la pareja, el
esposo o novio, algún familiar, los compañeros de escuela o trabajo, alguna
autoridad escolar o laboral, los amigos, vecinos, personas de su entorno cercano y
al final personas desconocidas.
La tasa de suicidios en la población de 10 a 17 años también presenta un
incremento en su nivel para el periodo 2006 a 2015 ya que pasa de 2.6 a 3.8 por
cada 100 mil niños en este rango de edad. El mayor número de muertes por esta
causa se presenta en varones. En 2015 se registraron 3.2 suicidios de varones por
cada 100 mil niños. En las niñas la tasa es de 1.8 suicidios por cada 100 mil, lo
que representa una sobremortalidad masculina de 177.8 suicidios de niños por
cada 100 en niñas.
En materia educativa, México es el país integrante de la Organización para la
Cooperación y Desarrollo Económico (OCDE) que presenta el nivel de deserción
escolar más alto, especialmente en las y los adolescentes de entre 15 y 18 años,
siendo las dos causas principales de abandono de los estudios las carencias
económicas de sus hogares en 52% de los casos, y los embarazos tempranos o
las uniones entre parejas jóvenes que representan 23%. Durante 2000 y 2011,
alrededor de 6.5 millones de adolescentes y jóvenes dejaron sus estudios.
La violencia en los planteles educativos ocupa un lugar importante en los
problemas que enfrenta la niñez en nuestro país. La Encuesta de Cohesión Social
para la Prevención de la Violencia y la Delincuencia 2014 del INEGI, encontró que
32.2% de adolescentes de entre 12 y 18 años sufrieron acoso escolar. Tanto en
educación básica, media básica o media superior, los conflictos y agresiones entre
pares (bullying o ciberbullying) así como entre profesoras, profesores, alumnas y
alumnos son ejemplos claros de cómo la conjunción de múltiples factores de
vulnerabilidad que afectan en lo individual y colectivo a las niñas, niños,
adolescentes y jóvenes, generan violaciones sistemáticas a sus derechos en un
ámbito que debiera ser de los más seguros para su desenvolvimiento.
Para la CNDH, que las autoridades cumplan con sus obligaciones constitucionales
de promoción, respeto, protección y garantía de los derechos de todas las
personas, es una tarea prioritaria que requiere un esfuerzo permanente y
coordinado para cumplir las exigencias que la sociedad demanda.
Las niñas, niños y adolescentes, constituyen la tercera parte de la población
nacional; a pesar de ello el acceso y ejercicio de sus derechos se ve limitado por
una visión social que los concibe como “objetos de protección”, excluyéndolos de
la participación y toma de decisiones sobre su propia vida e incluso justificando la
violencia que se ejerce en su contra.
Las obligaciones que el Estado, las familias y la comunidad tienen para con la
niñez y adolescencia, no se agotan al asegurar su supervivencia o atender
algunas de sus carencias sociales, es necesario habilitarlos para el ejercicio
progresivo de sus capacidades como seres humanos, alentando y fortaleciendo su
independencia y autonomía, lo cual contribuye a su sano crecimiento físico y
mental, posibilita que se apropien de valores, que se formen en una cultura de
respeto a la diversidad y rechazo a la violencia, y que desarrollen conciencia
ciudadana y responsabilidad social.
Como se observa, la estadística nos muestra la frecuencia y magnitud de las
acciones u omisiones que dañan los derechos de la niñez y adolescencia en
nuestro país, visibiliza un panorama que advierte la necesidad de consolidar
acciones de todas las autoridades de los distintos niveles y órdenes de gobierno
para garantizar el respeto a la dignidad y a los derechos humanos de ese sector
de la población, lo cual nos lleva a concluir que algunas causas de fondo son,
entre otras, la pobreza, la exclusión y discriminación, la ausencia de
oportunidades, la violencia e inseguridad, la desigualdad entre los géneros, los
prejuicios y estereotipos que atentan contra la integridad de las niñas y
adolescentes, la falta de inversión pública, así como la urgencia de sensibilizar y
capacitar a las y los servidores públicos a efecto de que ciñan su actuar al nuevo
paradigma de protección de los derechos de la niñez y adolescencia.
Retos del Estado Mexicano
La ONU proclamó al año 1979 como el Año Internacional del Niño. Durante este
año, tuvo lugar un verdadero cambio de espíritu, ya que Polonia propuso crear un
grupo de trabajo dentro de la Comisión de los Derechos Humanos que se
encargara de redactar una carta internacional.
Así, el 20 de noviembre de 1989, la Asamblea General de las Naciones Unidas
aprobó la Convención sobre los Derechos del Niño. A lo largo de 54 artículos el
documento establece los derechos económicos, sociales y culturales de los niños.
6. Comisión de Secretarías Ejecutivas de Protección Integral de los Sistemas Nacional y de Participación en la Sexta Sesión Ordinaria.
las Entidades Federativas
Participación en la Tercera Reunión de Enlaces.
7. Comisión para poner Fin a toda forma de Violencia contra Niñas, Niños y Adolescentes Participación en la Segunda Sesión Ordinaria.
En el marco de las acciones realizadas como integrante del SIPINNA, se envió a
la Secretaría de Gobernación, el escrito presentado a este Organismo
Constitucional Autónomo por diversas organizaciones de la sociedad civil, relativo
al acuerdo publicado en el Diario Oficial de la Federación el 9 de marzo de 2018,
en el que se determinó modificar la naturaleza jurídica de la Secretaría Ejecutiva
del Sistema Nacional de Protección Integral de Niñas, Niños y Adolescentes a la
de Unidad Administrativa de la Subsecretaría de Derechos Humanos de la
Secretaría de Gobernación. La comunicación tuvo por objeto solicitar a esa
Secretaría “reconsiderar su decisión sobre el carácter administrativo e institucional
de la Secretaría Ejecutiva, y devolverle el carácter de Órgano Administrativo
Desconcentrado para continuar con sus funciones, de conformidad con lo
dispuesto en el artículo 130 de la Ley General de los Derechos de Niñas, Niños y
Adolescentes, el cual establece que la coordinación operativa del SIPINNA,
recaerá en un órgano administrativo desconcentrado de la Secretaría de
Gobernación, que ejercerá las funciones de Secretaría Ejecutiva”.
https://www.cndh.org.mx/ni%C3%B1as-ni%C3%B1os/derechos-humanos-de-
ninas-y-ninos#:~:text=Ni%C3%B1as%2C%20ni%C3%B1os%20y%20adolescentes
%20tienen%20derecho%20al%20descanso%2C%20al%20esparcimiento,de
%20su%20desarrollo%20y%20crecimiento.
http://informe.cndh.org.mx/menu.aspx?id=40071
https://www.unicef.org/chile/media/7021/file/mod%201%20enfoque%20de
%20derechos.pdf
https://www.gob.mx/cms/uploads/attachment/file/725568/
LGDNNA_nva_reforma_230322.pdf
http://www.codajic.org/sites/default/files/sites/www.codajic.org/files/El%20proceso
%20de%20construcci%C3%B3n%20de%20la%20Infancia.pdf
https://www.humanium.org/es/historia/#:~:text=A%20partir%20de%201841%2C
%20las,%C3%A1rea%20social%2C%20jur%C3%ADdica%20y%20sanitaria.