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Poderosa Resumen - 221219 - 151938

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PODEROSA

AUTOR: SERGIO KLEIN

PERSONAJES PRINCIPALES:

Juana Rosalía

PERSONAJES SECUNDARIOS:

Abuela Nina

Sus Padres

Alex

Juana de Arco

EN LAS ENTRELINEAS DE LA MANO

La literatura debería ser una rama de la biología: trato a las palabras como a seres
vivos que, de un momento a otro pueden despegar el papel y salir por allí, sin
autor ni destino. Por el momento tengo 14 años y ningún libro publicado, pero vivo
soñando con ser escritora y vivir de la imaginación, que en mi caso reniega del
orden cronológico y alfabético y vive postergando el punto final.

Pretendo ser guionista de cine o talvez autora de telenovelas; modestia aparte,


creo que me sale bien inventar historias llenas de sorpresas y de cambios.

El problema de las telenovelas es la extensión: haca falta paciencia para soportar


la misma historia durante meses. No sé cómo mi madre aguata tragarse tantos
capítulos sin saber quién va a acabar con quien, quien es el autor de las cartas
anónimas y como morirá la bruja que hecha veneno en la vida de los demás
personajes. A mi padre también le gustan las telenovelas. Finge que no, pero le
gusta.

Silvia, la manicurista, se la vive hablando mal de los hombres. Su teoría es simple:


los hombres no sirven para nada y punto. Los rarísimos ejemplares que sirven
para algo solo tienen dos usos: matar cucarachas y cambiar focos; no es casual
que las mujeres prefieran a los hombres más altos.
Talvez Silvia habla de esa manera porque su marido la abandono. El tipo es uno
de esos paracitos que tiene alergia a todo tipo de trabajo, incluso a los pequeños
servicios domésticos. Resumiendo la historia un día se macho con una pedicurista
llevándose todo el dinero de la caja y la tarjeta de crédito de la literalmente pobre
Silvia. Ella se quedó unos días en cama, se acabó la caja de pañuelos
desechables, hasta pensó en cerrar el salón y volver a su pueblo. Silvia fue hasta
el espejo del cuarto del baño y le dijo a su reflejo ¿quieres que te diga una cosa?
Ese infeliz no merece nuestro sufrimiento. Al día siguiente, se despertó muy
temprano, se dio un baño prolongado y llego silbando al salón. Casualmente ese
día mi madre llego al salón a pedirle ayuda para salvar su matrimonio y darse una
manita de gato, ya que Silvia tiene talento en ser gitana que lee la palma de la
mano, ese día también acompañé a mi madre pero yo me quede sentada en el
sofá leyendo una revista pero cuando me di cuenta Silvia se me quedaba viendo y
me dijo que tenía que leer mi mano, yo se la di y me llevé una sorpresa cuando
me dijo que tenía poderes y que solo yo podía salvar el matrimonio de mi madre y
podía hacer lo que yo quisiera.

PIERCING SECRETO

Al llegar a casa, me encontré con un tremendo caos: varios trazos de cristal


brillaban en el suelo de la habitación de la abuela Nina. Seguramente quiso tomar
leche y volcó el vaso que yo le había dejado encima de la mesa de noche.
Mientras mi madre corría hacia la cocina para buscar la escoba y jerga, levante a
la abuela Nina sosteniéndola por debajo de los brazos y fuimos juntas hasta la
regadera.

Mi madre rezongó diciendo que la Abuela Nina no puede quedarse sola porque
hace tonterías. Pensé decirle que nadie derrama un vaso de leche a propósito,
pero me mordí la lengua para evitar una discusión.

En ese momento sonó el timbre. Al abrir la puerta, me encontré con Elena y


entonces me acordé que teníamos que hacer el trabajo de historia.

El grupo era muy pequeño: además de nosotras Elenita y yo, había una chica que
se llamaba Danyelle. ¿Alguien conoce a esas personas que se creen dueños de la
realidad? ¿Del tiempo de quien lleva la verdad en el bolsillo y no la comparte con
nadie? ¿Qué no presta la menor atención a lo que dicen los demás, pero capta
cualquier error de concordancia y te corrige delante de todo el mundo? Pues esa
es Danyelle, más conocida como Dany. Hacerse un piercing se ha convertido en
una manía común muchas compañeras se engancharon con esa moda y se han
perforado cejas, nariz, orejas, ombligo y hasta la lengua. Yo misma me quedé con
ganas de ponerme un arete pero un burro me hizo aplazar el plan y se me fueron
las ganas.

Como hiba diciendo, Dany se empecina en ser diferente. La semana pasada entro
tarde en el salón, y sin la menor ceremonia, interrumpió el control de asistencia
para anunciar que se había puesto un Piercing secreto. Hasta el profesor se
mostró interesado: ¿Qué historia era aquella? Dejo el bolso encima del pupitre y
dijo que podía contar el lugar donde se había colgado la argollita, sino, estropearía
el secreto. Imagínense el nivel de adrenalina de los chicos. Aquella historia del
piercing secreto parecía una propaganda engañosa, pero Dany aseguró que la
argollita existía y estaba muy bien escondida. Para probar que decía la verdad,
puso las manos en las jarras y lanzó un desafío ¿Quién desearía darle un beso en
el misterioso lugar?. Los chicos se pasaron en el recreo en asamblea y después
de mucha discusión, organizaron una apuesta, cada alumno podría elegir una
parte del cuerpo, solamente una. Y no se valía repetir. Si más de un alumno elegía
una parte, la cuestión se resolvería con fuercitas.

El ombligo recibió el mayor número de apuestas y se impuso sobre la entrepierna


por solo dos votos.

La intriga se mantuvo hasta la última clase del viernes. En cuanto sonó el timbre,
alumnos de todos los cursos invadieron todo el salón. A Dany le tomo un buen rato
para salir del pupitre y subiré al escritorio del profesor al frente donde todos la
podían ver. Sentada en el escritorio, silbó para disimular el nerviosismo y
lentamente se quitó los tenis, por fin se quitó el calcetín con la yema de los dedos
y mostro una minúscula argollita que se asomaba en el talón. Dany inventó esa
lotería sensual para que el ganador para que el ganador fuera Luis Agustó.

REVOLUCION FRANCESA

El profesor de historia nos mandó una terea de investigación, Yo y mi grupo


investigamos sobre Juana de Arco, pero yo había pensado que para que
investigar si yo misma podía hacer mi propia historia sobre Juan. Elenita y Dany
investigaron aparte y yo hice el resto sobre la historia.

Cuando llegó el día de la entrega del trabajo uno de cada grupo tenía que leer su
investigación, yo empecé a leer lo que había inventado sobre Juana de Arco, pero
me día cuenta que todos me observaban con una risita de burla, hasta el profesor
furioso me preguntó qué clase de broma era aquella, porque la historia no era así,
pero él dijo que yo siguiera leyendo. Al terminar de leer mi historia él profesor me
dijo que me fuera de inmediato a la dirección, en ese momento lo acompañé, él le
contó sobre mi investigación a la directora y me dijo que llamaría a mis padres
porque esa historia no existía.

En ese momento llagaron mis padres y les pidió que me dijeran que yo cambiara
la historia, porque si yo no la cambiaba me iban a expulsar de la escuela.

Al llegar a la casa, mi padre me pidió que cambiara mi investigación, pero yo le


conteste que no iba a cambiar mi historia aunque me lo pidiera de rodillas. Al
atardecer, mi padre prendió la televisión y en el canal de las noticias informaban
sobre Juana de Arco, todo lo que yo había escrito sobre Juana de Arco se había
hecho realidad, mi padre me felicitó por haber investigado antes sobre la vida de
Juan de Arco, después de un rato sonó el teléfono le dije a mi madre que yo iba a
ir a contestar, era la directora pidiéndome disculpas por haber cuestiona el
contenido de mi magnifica redacción. También le gustaría darme su enhorabuena
por ser yo una alumna tan bien informada, después de colgar miré la pantalla del
televisión y me vi en el lugar de Fátima con aquel peinado que todas las mujeres
intentan en vano imitar. El siguiente en llamar fue el jefe de grupo; a Marcelo le
encantaba las películas de suspenso y me Shelocka, yo no quería pasar el resto
de la noche recibiendo elogios y dando explicaciones, así que le pedí a mi madre
que atendiera a la gente de mi clase y le informará que estaba exhausta y había
decidido ir a la cama más temprano.

Le di un beso a mi padre y solté un bostezo para demostrar mi cansancio. Me fui


derecho a la habitación, apoye la espalda en la puerta y me fui deslizando hasta el
suelo. No sé cuánto tiempo me quedé allí sentada mirando el fondo de la nada e
intentando descubrir si yo era adivina, paranormal o detective. Prever el futuro no
es una novedad extrema, cualquier vidente pueda hacerlo. Pero, ¿acaso mi
redacción logró trastornar el pasado?

ANDROIDE CON ADRENALINA

Al día siguiente la dueña de la peluquería se despertó con una jaqueca horrible y


no podía atender a nadie. ¿Qué quería yo? ¿Cortarme el pelo? Hasta el fin del
mes no hay turno es fue la respuesta de la secretaria cuando entré en el salón y
pregunté por Silvia. Mariángeles seguía pareciéndose a una contestadora
automática: no solo por su voz mecánica, sino principalmente por la frialdad con la
que intentó despacharme. Me di cuenta de que no servía de nada hacerme la niña
buena y explicar que era urgente. Para hablar con Silvia, tenía que simular una
tragedia. Temiendo que fuera a cometer una tontería Mariángeles subió las
escaleras de dos en dos escalones para saber si Silvia podría recibirme. Me
quedé esperando en un sillón y traté distraerme con una revista de moda. Por más
esfuerzos que hice, no logré concentrarme en las últimas tendencias de moda
otoño, invierno. El runruneo en el salón estaba tan animado que abandone la
revista. La principal atracción era un cliente que parloteaba sin parar: desde la sala
de espera yo no le veía el rostro, pero tuve la nítida sensación de que conocía esa
voz. Contó que ya había probado las dietas, cortes de pelo, calzoncitos, joyas y
perfumes para llamar la atención de los hombres, pero nada había dado resultado.
Hasta que un día, saliendo del cuarto del baño se dio cuenta y vio que el problema
estaba en sus senos, o mejor dicho en la falta de ellos. Cuando oí esa palabra
mágica, asocié la voz a la persona: la charlanta era Pili, aquella que yo quería
borrar con un control especializado en personas. Ella empezó a hablar sobre un
tipo muy atractivo, que se había encontrado en elevador y que la había invitado a
cenar, ella empezó a decir las características del tipo, toda las características que
ella decía eran igual a las de mi padre, pero cuando las empleadas del salón le
preguntaron su nombre ella respondió que no podía decirlo. Yo había pensado
que era mi padre ya que él se pensaba divorciar de mi madre, por el amor de Dios,
Juana Rosalía ¿Qué haces aquí esta hora? ¿No deberías estar en la escuela?

Llegando a la escuela le conté a Elenita todo lo que había escuchado en el salón y


le pedí que me acompañara al lugar donde el tipo había invitado a cenar a Pili, no
fue muy difícil convencerla. La noche siguiente Elenita y yo tomamos un taxi, para
ir al comedor y ver al tipo donde Pili salía, llegando me quedé en la primera mesa
que estaba cerca de la puerta, allí se podría observar muy bien a las personas que
salían y entraban, después de unos momentos la parlanchina de Pili había llegado
pero su enamorado no, ella se había sentado en otra mesa muy apartad de la de
nosotras, en ese momento Elenita me dijo que tenía que ir al baño a hacer pis.
Después de un rato el enamorado de Pili había llegado, yo me pude dar cuenta de
que no era mi padre, sino el padre de Elenita, el camero se acercó a nuestra mesa
a preguntar que plato queríamos, yo vi en la lista y pedí el platillo más barato que
había, después de unos momento el camarero llegó con la comida, terminando lo
llamé y le pedí la cuenta, pero cuando él me la dio, metí mi mando a mi bolsón y
pude darme cuenta que el dinero que llevaba no alcanzaba ni para pagar las
bebidas, yo le dije que iba a ir al baño y luego le iba a pagar la cuenta. Me quedé
encerrada allí a la espera de inspiración y, en un trozo de papel higiénico, cree un
final feliz para la noche. El camarero se acerca a la mesa y le dice a Elenita que
tiene una sorpresa: ella es la milésima clienta del año y como premio la cena
correrá por cuenta de la casa. Pero me conformé con eso. Todo escritor es
perfeccionista y piensa que puede mejorar el texto. Ya estaba en la puerta del
baño cuando me acorde que tampoco tenía dinero para el taxi, y a esa hora sería
peligroso un paseo por autobús. Con miedo a que nos asaltaran, solo tuve que
escribir una frase más:
Además de brindarnos la cena, el general del restaurante pone un taxi a nuestra
disposición. Al salir del baño, Elenita casi me atropella. Llegó excitadísima para
contarme la novedad: no me podía imaginar el premio que habíamos recibido.

COMPLEJO DE NOVIA ABANDONABA EN EL ALTAR

El día siguiente teníamos una prueba sobre historia, aunque no había estudiado
para prueba, pensé que no valía la pena estresarme, sino sabía una pregunta,
bastaba con inventar una respuesta y mi historia se convertiría en historia. Pero no
me hizo falta apelar a la imaginación, porque la prueba era muy fácil y la memoria
respondió al dedillo. El problema es que yo no tenía cabeza para escribir sobre la
edad media: solo pensaba en los héroes y guerreros del futuro, como el androide
exterminador que vería en el cine con la cabeza apoyada en el hombro de Gus.
Después de una noche de pesadillas, yo estaba finalmente soñando ¡y sin el
riesgo de caerme de la cama! Mi ego tenía razones para estar hinchado. En el
salón, Gus siempre se sentaba hasta atrás pero aquel día se sentó a mi lado. Yo
quería saber en realidad, confirmar si su letra era la misma que el anónimo dejado
en pupitre. Pero no fue posible leer nada: su prueba estaba en blanco. Y él
también, llegué a pensar que aquella palidez rimaba con timidez, pero pronto caí
en la cuenta de que el chico sufría porque no tenía la menor idea sobre la vida de
Juana de Arco, y se iba a sacar un cero patatero. No me costaba nada ayudar a
Gus y de paso a todos mis compañeros. Bastaba hacer una letra bien grande y
redonda.

Gus quedó tan agradecido que me pago un sándwich en el recreo. Pero la mayo
sorpresa del día surgió a media tarde, cuando abría la mochila para enterarme de
las tareas del día siguiente y apareció una nueva nota en el estuche.

Eres una chica diez, Juana: Guapa, inteligente, simpática y para colmo generosa
con tus compañeros, gracias por intentar echarme una mano, pero la verdad no
presté mucha atención a tu prueba. El día siguiente mi madre me pidió que fuera a
hablar con mi padre para que él volviera de nuevo a la casa, pero él me dijo que
era muy difícil para que él volviera de nuevo con mi mamá.

Al llegar a la casa, encontré la puerta abierta. Mi madre andaba de un lado para


otro, con la imagen de Juana de Arco en brazos y casi se le fue la santa al suelo
cuando me vio salir del elevador, ¿Qué tal hija? ¿Hablaste con tu padre? Puedes
decirme la verdad. Piensa volver. No me atreví a revelarle el fracaso de mi misión
diplomática. Sin quitar los ojos del suelo, dije que mi padre ya no aguantaba
estaba lejos de sus hijo de la abuela Nina y de su mujer, principalmente de su
mujer.
Me arrepentí de haber ilusionado a mi madre, pero pensé que era tarde para
volver atrás. Fui a mi habitación, abrí el cajón del escritorio y escribí un block de
notas. Mi padre se enamorará de nuevo de mi madre, volverá corriendo a casa y
se convertirá en un romántico compulsivo. Al buen rato fui a la regadera, a darme
un baño para ir a ver la película con Gus, llegando al cine fingiendo observar el
cartel de la película, recorrí con los ojos la cola de la taquilla y ni señal de Gus. Me
acerque al vendedor de palomitas y le pregunté la hora. Aún faltaban diez minutos
para el comienzo de la función; por lo tanto era temprano dejarse dominar por el
pánico: relájate Juana Rosalía, relájate seguramente tu primer futuro novio ya
debe estar en camino; ya sabes cómo es el tráfico; estuve allí esperando más de
media hora y nadad que se aparecía Gus. Eran las seis en punto cuando volvía a
consultar al vendedor de palomitas. Decidí volver a casa, llegue justo al final del
partido y traje suerte: en el último minuto la selección logró meter un gol y acabar
con la monotonía del cero a cero. En vez de echar los cojines al vuelo, como solía
hacer mi padre, tomó a mi madre entre sus brazos y le dio un beso. Ella me vio al
lado de la puerta y mostró el típico asombro de quien es pillado infraganti. Me
pude dar cuenta que mi madre y mi padre se había reconciliado.

Después de un rato la abuela Nina se había caído de la cama y pedía auxilio, en


ese momento nos acercamos a la habitación de ella, a mí me dio tanta lastima de
verla, que después de recogerla me encerré en mi habitación, tomé una pluma con
decisión y escribí en la agenda: la abuela Nina se va a curar.

LA MARIPOSA QUE SE TRASFORMO EN ORUGA

Mi abuela me dijo que se despertó poco después de que yo saliera para la


escuela. De buen ánimo y hambriento se desperezó hasta crujir los huesos y se
sentó en el borde de la cama. Sólo entonces se dio cuenta de que estaba viva y
que otra vez tenía el control de su cuerpo, se levantó sin pereza y mareos y
caminó al baño silbando. El espejo le dio un susto: los párpados caían sobre los
ojos, las cejas pedían un buen recorte y el pelo blanco hacia un más oscuras las
orejas. Pensó en llamar de Silvia, pero dejó la vanidad para otro momento; antes
de cuidar la apariencia quería matar la añoranza de un café a la antigua, hecho
con colador de filtro.

Después de contar de que se pasó por la mañana haciendo limpieza en su


habitación, la abuela Nina protestó por el olor a quemado, se ató un delantal a la
cintura y prometió que prepararía un almuerzo rápido y saludable. Alex también
fue hasta la cocina y se ofreció para ayudar: ya sabía, por ejemplo encender
cerillos. Mi madre pensaba que la curación de la abuela Nina era un milagro de
Juana de Arco; tomada de la mano de mi padre, rezó un ave maría frente a la
imagen y agradeció a la santa por haber traído la felicidad de vuelta a nuestro
hogar.

Yo debería estar orgullosa por mis poderes literarios ya que al fin y al cabo mi
abuela estaba recuperada gracias a la frase que escribí en su agenda. Pero no
lograba quitar de la cabeza. Para no estropear la felicidad de mi familia fue a la
habitación me eche en la cama y me ahogue en llanto en la mochila.

Poco después, la abuela Nina se convirtió se golpeó la puerta y anuncio el menú

Macarrones con salsa de tomate y albahaca.

Me vuelve loca la pasta, mucho más cuando va acompañada por una salsa
preparada por mi abuela. Ella siempre tuvo familiaridad, con la cocina y, antes de
hibernar por su enfermedad, solía crear unos condimentos que nunca logre imitar,
ni si quera siguiendo pasó a paso su cuaderno de recetas.

Desde la habitación, escuche a mi madre rezongar diciendo que yo estaba hecho


un palo, a los 14 años ella ya era una moza corpulenta, una adolescente que no
se alimenta acabo padeciendo anorexia.

Después de cenar llame a la abuela Nina para que me contara todo lo que mi
madre había dicho sobre mí, y de paso entrara en mi habitación para observar
nuevamente las cosas que había ahí y me digiera, que era lo bueno y lo malo.

Al día siguiente la abuela Nina fue al salón de Silvia para darse una manita de
gato, llegando la abuela Nina al salón de Silvia admitió que siempre tuvo ganas de
hacerse un nuevo corte de pelo que era moderno y un color más vivo. Pero nunca
había pensado en el rojo, Silvia recordó que ese era el color de la pasión. Y en la
mano de mi abuela estaba escrito, con todas las líneas, para quien quisiera leer,
que pronto ella vivirá una pasión roja, Esa sería el color ideal para los cabellos y
las uñas. Sin hablar, claro está, del lápiz labial.

LA CENICIENTA DE LA TERCERA EDAD

Después de unos días mi padre había invitado a mi madre a ir pasear. Mi madre


acepto con tanta felicidad y le dijo que se ivan el siguiente día, yo despedí a mis
padres con un beso en la frente, después de un rato Elenita me marcó por el
teléfono y me dijo que me invitaba a su fiesta y que por favor la acompañara con
mis padres mi abuela y mi hermano, pero yo le expliqué que mis padres habían
salido de vacaciones y que sólo nos encontrábamos mi abuela y yo, pero le dije
que la acompañaríamos sin falta a su fiesta.
Al atardecer mi abuela Nina no sabía que vestido ponerse para la fiesta, no veía
otra solución para reformar el vestido de tubo, pero de repente tuve una idea que
era justamente lo contrario: en vez de aumentar el diámetro del vestido, yo debería
reducir las medidas del modelo. Para que aquella ropa le sentara bien, la chica
tenía que tener el cuerpo, como decirle de una chica por tanto, solo había una
salida: hacer que la abuela Nina volviera atrás en el tiempo. Abrí la agenda de las
medicinas. En la misma página en la que había previsto que la abuela se curaría,
escribí una frase aún más radical.

Ella se ha ido a bañarse con 70 años, pero saldrá del baño con solo 14.

Al rato, oí un grito y corrí hasta el cuarto del baño: ¿te encuentras bien abuela? El
silencio me dejó preocupada, aun sabiendo lo que me esperaba, casi me morí de
asombro cuando abrí la puerta y me encontré con una chica de mi edad.

La abuela Nina se miraba al espejo con la mano en la boca y no sabía si reír o


llorar. La toalla echada sobro los hombres no ocultaba los senos, mucho más
grandes, por cierto que los míos. El piercing seguía en la ceja el pelo remojado
realzaba el rojo y la nariz no tenía ninguna verruga. En resumen: una muchacha
con onda. Nina se secó los ojos con la toalla y admitió que no había motivo de
protesta no dejaba al fin de cuentas tiene el privilegio de volver literalmente a la
adolescencia, sin necesidad de ojear el álbum de fotos o recurrir a una cirugía
estética. Pero su alegría no era completa ni, mucho menos serena.

ADAN EN LO ALTO DEL TRIO ELECTRICO

En la entrada del salón de fiestas los padres de Elenita recibían a los invitados con
una sonrisa de fotografía. Doña Mariana llevaba un vestido largo bordado que
debió costarle una fortuna, pero se quedó visiblemente perturbada por el vestido
de tubo negro de mi abuela y me preguntó quién era la chica pelirroja tan parecida
a mí. Nina y yo nos miramos perplejas, olvidamos ponernos de acuerdo en cómo
la presentaría. Me vi obligada en improvisar: esta es Nina mi prima.

Milton, el padre de Elenita dijo que era un placer conocer una muchacha tan
guapa y le dio un beso en la mano. El hipócrita abrió el regalo y confesó que
Vinicio era su poeta preferido, nadie se había sumergido en el fondo en el abismo
de la pasión. Pensé que decía eso sólo por caer bien, pero de repente tomo las
manos de su mujer y mirándola en los ojos, comenzó a citar en soneto de la
felicidad de memoria. Lleve a Nina hasta un rincón de la sal ay la presenté con
mis compañeras de clase. Elenita se quedó sorprendida por la coincidencia: ¿Tu
abuela no se llama Nina? Asentí con una sonrisa sin gracia y lamenté no haber
inventado otro nombre para mi prima entre comillas. La única que no dijo nada fue
Danyelle. La antipática desfilaba de un lado hacia otro, como si fuera la dueña de
la fiesta, y sólo se acercó a mi abuela para observar de cerca el piercing de la
ceja.

Después de unos minutos Elenita se acercó a hablar con migo y me entregó el


celular: llamada para ti estaba segura de que era Gus, quien más me podía
llamarme a esa hora sostuve el celular con las manos temblorosas, retrocedí unos
pasos para hablar a gusto y, casi sin voz susurre hola. Del otro lado alguien se
hecho a llorar, no era posible identificar el sexo ni mucho menos la edad después
de muchos sollozos finalmente dijo mi nombre y distinguí la voz de Silvia le
pregunte el motivo de tanto llanto, desde donde hablaba, si quería que llamara a
Domingo, quiero decir a Junior. Silvia me respondió que no quería hablar con su
hijo, no por el momento y me contó que había ocurrido una tragedia la
comunicación era malísima y, como si fuera eso poco el sordo del DJ subió el
volumen pero pude escuchar la palabra sangre y ex marido. Acaso Silvia había
cometido alguna tontería le pedí que me explicara bien esa historia, eso sólo
conseguí gemidos y me rogo por el amor de Dios que fuera a su casa pensé en
alegar que no era psicóloga ni asistente social, que no quería perderme la llegada
de Gus. Pero no me atreví a decepcionar a Silvia. Cuando oí hablar de sangre,
sentí un escalofrió maligno e imagine al padre de domingo. En medio del patio con
su cara sumergida en un charco de sangre y tatuado por las mandíbulas de
Federico. Aun así, acepte ir en la casa de Silvia para investigar la tragedia.
Domingo comentó que yo estaba pálida y se quedó pendiente de una explicación.
Carraspee antes de responder titubeando que me había llamado una amiga, que
estaba medio deprimido que necesitaba verme con urgencias. Me conto trabajo
convencer aquel Dominguillo de que no era la chica indefensa que no necesitaba
guarda espaldas. Le devolví el celular a Elenita y camine por el salón en busca de
Nina, estaba cerca de la mesa de los dulces, devorando un chocolate
acaramelado y charlando con Dany. Ambas conversaban como viejas amigas, una
contándole a la otra donde pretendía hacerse el próximo piercing.

No me equivoque demasiado. Había un cuerpo tumbado en medio del jardín con


la cara sumergida en un charco de sangre, pero no era el padre de Junior. Por lo
que Silvia me contó el desgraciado debió quedarse en la esquina, al acecho y
esperó a que su hijo saliera para invadir la casi, armado con una navaja. Llegó
diciendo que necesitaba dinero y avanzó hasta la habitación, donde abrió bolsos y
cajones, hasta encontrar la tarjeta de crédito.

Federico estaba echado en el felpudo y salió en defensa de su ama, clavando sus


dientes adiestrados en la pierna del intruso. Silvia ordenó al perro que se alejara,
pero él sólo obedecía órdenes de domingo. Y siguió gruñendo y mordiendo hasta
que la hoja de la navaja le desgarró el pescuezo. Silvia uso todos los recursos con
presas de hielo, martíllate, esparadrapos, vendas, para restañar el derrame de
sangre a Federico nada funcionó. Pegue mi oído al pecho del animal y no oí ni un
miserable latido, Silvia no me dejo llegar a la amen del ave maría que estaba
haciendo, sabiendo que yo había curado a mi abuela creía que mi literatura de
auto ayuda podría resucitar al perro. Antes de que le diera una respuesta Domingo
salió detrás del muro y empujo el portón se arrodillo en el césped del jardín y
abraso el cuerpo de Federico y se quedó cuchicheando con la nariz pegada al
hocico. Le desató el collar y comino hacia la acera como si sostuviera un látigo.
Seguro escucho nuestra conversación y dijo que no volvería hasta no ajustar
cuentas con su padre. Fui hasta la sala y garrapatee en el margen del recibo de la
luz:

-Federico no es un gato, pero también tiene siete días. Y se va a levantar ahora


mismo-

En el momento en que volví al jardín, Silvia señalo al perro y anuncio lloriqueando


movió la cola. Domingo ya estaba en cima del muro dispuesto a saltar a la cera
casi perdió el equilibrio al ver a Federico desperezarse sacudir el pelo húmedo de
sangre y salir corriendo y ladrando como si antes hubiera fingido estar muerto.

ULTIMO DESEO

Al llegar a casa entre a mi habitación para escribir una frase que decía:

Nina deja de ser niña y vuelve a la tercera edad.

Guarde el certificado en el bolsillo e hice una higa con tanta fuerza que casi me
partí los dedos de la otra mano pero inmediatamente me pude dar cuenta de que
Nina no dejaba de ser niña, yo me quede preocupada para ver qué cosa
inventarles a mis padres cuando regresarían.

El día siguiente mis padres regresaron y les dije que la muchacha era la abuela
Nina solo que había regresado el tiempo atrás con algunos años, mi madre se
quedó en shokc sin saber que decir, y no sabía si creerme o no, después de
revisar algunas fotos de mi abuela cuando era joven nos pudimos dar cuenta de
que Nina era igual a mi abuela cuando era joven, mi mamá no sabía qué hacer, el
siguiente día mis padres llevaron a mi abuela al Doctor para ver qué es lo que
había pasado con su cuerpo, el doctor después de hacerle unos análisis no pudo
encontrar algún resultado que por lo tanto era bueno que mi abuela se quedara,
para hacerle la metamorfosis con los ojos cerrados, después de unos días mi
abuela estaba sentada en el borde de mi cama, esperando los resultados con los
ojos cerrados pero no envejeció ni una arruga, desaminada se cruzó el brazo.
Llegando al hospital me pude dar cuenta que mi abuela no había cambiado en
nada y me vi obligada a imprimir la frase que teclee y todas las demás que invente
a continuación:

La abuela Nina se convierte en una mujer adulta. Los granitos de la adolescencia


se transforman en arrugas de vieja en sólo cinco segundos, mi abuela envejece
más de 50 años. Para ser más exactas 57.

Nada de eso dio resultado. La vuela Nina intento calmarme, alegando que de
aquella manera podría romper el yeso. Me senté en la cama, al lado de Nina y
confesé la verdad: puede parecer una locura pero este es mi abuela. Hizo un viaje
en el tiempo y se convirtió en adolescente.

PALABRA DE BRUJA

Sentada en el sillón de la sala, saque de la mochila los cuadernos de Domingo y


hojeé uno por uno, con la esperanza de descubrir algún secreto, que sólo se
atrevería a contar por escrito. Pero creo que los chicos no confían en los diarios lo
que había en las últimas páginas eran pequeños cuadros de batalla naval y
grandes cuadros de gatos, la selección del equipo de futbol de la clase, el nombre
de Junios tachado con una cruz, una caricatura cruel en la directora de la escuela.
Ya estaba dispuesta de dejar los cuadernos cuando me acordé de prestar
atención en la letra de domingo y, como ya lo sospechaba, no encontré ningún
jeroglífico. Talvez por la prisa, no siempre ponía el punto de la i y a veces olvidaba
cortar la t. mi madre me dijo que la comida estaba servida pero seguí pegada en el
sillón mirando el cuaderno de Domingo y escuchando mi intuición, que acaba de
descubrir la verdad. El corazón acelerado ahogo los gritos del estómago, en vez
de ir a la cocina volé hasta mi habitación y me metí de cabeza en el armario.
Lance hacia arriba medias y calzones y saque del cajón el sobre de seda en el
que guardo las notas y poemas de mi admirador anónimo. La letra inclinada era
idéntica casi ninguna i tenía punto, como pude ser tan ciega, tonta, tan burra
cansaba de maltratarme fui a la habitación de mi abuela, detesto molestar a quien
está durmiendo pero me hacía falta conocimiento de una especialista el grafología
pero no me resistí sacudirle el hombro, Nina se despertó rezongando y casa me
trago con su bostezo. Pero la pereza desapareció Cuándo le conté mi sospecha.
Yo quería saber si domingo estaba en casa pero el zunzún del salón ahogo mi
pregunta. Era cuestión de descubrirlo por mi cuenta. Cuando Silva se tapó los ojos
con las rodajas de papas, entre en el jardín del edificio y sibí los escalones. Por el
camino, había ensayado algunas frases pero todas mis ideas parecían forzadas
ridículas y dramáticas. Decidí vaciar la cabeza para seguir los consejos de la
abuela Nina relajar el cuerpo y confiar en la lengua. Después de hablar con
Domingo y decirnos que ambos nos gustábamos y estaríamos juntos. Regrese a
mi casa a la hora de la cena pero no tenía hambre. Una pulsada en la vejiga me
hizo ir al baño el espejo me volvió una imagen malhumorada, pero ese mal humor
duro poco. Al mirar al fondo de la taza, vi que había hecho pis rojo y me sentí la
chica: me sentí la mujer más poderosa del mundo. De ahora en adelante, podría
enorgullecerme de conocer personalmente el SPM. Fui corriendo hasta la
habitación de la abuela Nina que estaba acostada de lado y escarbaba la pared
con la mano. Arrodillada al borde de su cama le revele la identidad del autor de
las notas, describí la sensación de un beso aficionado y le conté que necesitaba ir
a la farmacia a buscar toallas higiénicas, ¡mi gran sueño¡. La discreta señora de la
tercera edad me ofreció una sonrisa mensa, pero distante ¿me estaría
escuchando?

Mire a través de la ventana y vi que se hacía de noche; la luna llena relucía en las
uñas enormes que le di a mi abuela de regalo. Ella se volvió hacia la pared y seguí
rascando
Introducción

La obra literaria que se le presenta trata sobre una chica poderosa, con el mundo
en sus manos. Sus padres se la pasan peleando, su abuela rasca la pared,
Danyelle se hace piercing para llamar la atención de los chicos, Silvia la
maquillista se la pasa hablando mal de los hombres, Juana Rosalía sueña con ser
escritora, después que salva la vida de Juana de Arco de la hoguera. Juana trata
de cambiar la ficción en realidad, ya que escribiendo ella pude cambiar el futuro de
cualquier persona.

Esta obra se realizó con el objetivo de reflexionar sobre nuestros actos, deseos y
consecuencias, aprender cosas nuevas, sacar lo más importante de la obra,
explorar inquietudes que tienen los adolescentes, y demás personas como el
amor, la sexualidad, los tatuajes y otra cosas más que los adolescentes desean
realizar.

El propósito de realizar esta obra también fue aprende palabras nuevas, a mejorar
nuestro vocabulario, conocer más sobre autores de obras, aprender a entender o
a interpretar sobre un trabajo.
Conclusiones

1) Juana Rosalía piensa que la literatura debería ser una rama de la biología, ya
que las palabras pueden despegar el papel de y salir por ahí sin autor ni destino.

2) Los padres de Rosalía, siempre se la pasan peleando, su abuela Nina se la


pasa rascando la pared, su amiga Danyelle se hace piercing y la amiga de su
madre Silvia se la pasa hablando mal de los hombres

3) Juana Rosalía salva la vida de Juana de Arco de la hoguera con una redacción
que le dejan de tarea en la escuela.

4) Juana convierte a su abuela Nina que tiene 70 años en una joven de 14 años
para ir a la fiesta de su mejor amiga.
Recomendaciones

1) Es recomendable expresar nuestros leer mucho para conocer palabras


nuevas. .

2) Es de suma importancia que cuando lehamos una obra o un libro


investiguemos palabras que no conozcamos.

3) Es importante saber acerca de obras ya que por medio de ellas adquirimos


conocimientos.

4) Es recomendable leer obras literarias o por lo menos leer media hora al día
para mejorar nuestro vocabulario.
Comentario personal
Lo que pienso de esta obra literaria es que es muy interesante ya que trata sobre
una chica con poderes sobre naturales, que llega a salvar el matrimonio de sus
padres, y hasta convierte a su abuela de 70 años en una jovencita de 14 años.

Por una parte la obra se eleva un poquito en algunas palabras, pero solo es
cuestión de investigarlas, o preguntar a alguien que sepa y el problema ya está
resuelto.

Lo bonito de las obras literarias, es que algunas nos hacen reflexionar sobre actos
malos que hayamos hecho y conocer nuevas cosas, aprender nuevas palabras,
mejorar nuestra forma de hablar y también a aprender a leer bien, a imaginarnos
cosas ya que cuando uno va leyendo también uno se imagina lo que está
pasando, también una obra literaria nos ayuda a despertar nuestra mente o
nuestra forma de pensar.

También es recomendable leer en clases ya que el profesor nos pregunta sobre lo


que ya aprendimos, y aprendemos a comentar o explicar sobre nuestra obra
literaria en fin debemos de leer mucho para mejor, y ser buenos alumnos.
INEB
Telesundaria aldea pebilpam
Jacaltenango Huehuetenango
Catedrático: Alberto Javier Gómez Matías
Curso: Idioma Español
Grado: Segundo Básico

Clave: “1”
Sección: única
Tema: Obra literaria

Alumna: Lidia magdalena camposeco Pérez


Ciclo escolar: 2,014

Fecha de entrega : 7/11/2014


Bibliografía

Impresora Ecuador a progreso. Poderosa una chica con el mundo en


sus manos. Calzada san Lorenzo.

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