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Responsabilidad Civil Del Ingeniero en Ejercicio Y Principios Del Derecho Penal Y Compendio de Leyes Penales Que Rigen El Ejercicio de La Profesión

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REPÚBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA

MINISTERIO DEL PODER POPULAR PARA LA DEFENSA

UNIVERSIDAD NACIONAL EXPERIMENTAL POLITÉCNICA DE LA FUERZA


ARMADA NACIONAL BOLIVARIANA

UNEFA-NÚCLEO GUARICO

INGENIERIA DE SISTEMAS

8TO SEMESTRE

RESPONSABILIDAD CIVIL DEL


INGENIERO EN EJERCICIO Y
PRINCIPIOS DEL DERECHO PENAL Y
COMPENDIO DE LEYES PENALES QUE
RIGEN EL EJERCICIO DE LA PROFESIÓN

Docente: Bachiller(s):
Joanny Jiménez Jesús Aquino;28442449
EL HECHO ILÍCITO
Es todo acto contrario al ordenamiento jurídico vigente, generado por la
intención, la imprudencia, impericia, negligencia mala fe, abuso de
derecho e inobservancia normativa de una persona que obtiene por
remuneración una responsabilidad civil en favor de otra persona
(perjudicado o víctima) que debe cubrir el agente del daño.
El artículo 1.185 del Código Civil Venezolano refiere: “El que con
intención, o por negligencia o por imprudencia, ha causado un daño a
otro, está obligado a repararlo”
Debe igualmente reparación quien haya causado un daño a otro,
excediendo, en el ejercicio de su derecho, los límites fijados por la buena
fe o por el objeto en vista del cual le ha sido conferido ese derecho.

CARACTERES PRINCIPALES DEL HECHO ILÍCITO


1. El hecho que lo genera consisten en un acto voluntario y culposo por
parte del agente. La voluntariedad implica que el acto del agente le
es plenamente imputable.
2. Se origina en el incumplimiento o in ejecución de una conducta
preexistente que el legislador no la especifica expresamente, pero la
presupone en todo sujeto de derecho y la sanciona con la obligación
de reparar. Esa conducta preexistente se deduce del contexto del
artículo 1185 del Código Civil y consiste en una actuación negativa
(no hacer) del sujeto de derecho, que radica en no causar daños a
otros por intención, negligencia o imprudencia.
3. El incumplimiento culposo de la conducta preexistente referida debe
causar un daño. La producción del daño es fundamental para que el
hecho ilícito produzca su efecto principal: la reparación del daño, o
sea, la responsabilidad civil. De no causarse un daño, nada habrá que
reparar y el incumplimiento culposo de la conducta preexistente será
irrelevante desde el punto de vista del Derecho Civil.
4. El incumplimiento culposo de la conducta preexistente debe ser
ilícito, es decir, no debe ser tolerado, consentido, ni amparado por el
ordenamiento jurídico positivo.

HECHO ILÍCITO DEL ERROR


El error en materia jurídica rige el principio general de que la ignorancia de
la ley no exime de su cumplimiento. Por lo contrario en el ámbito penal se
reconoce la intención del error por la cual el sujeto que se encuentra en
este recibe una particular caracterización. En algunas legislaciones se
utiliza el término ignorancia para referirse al error, pero ambos pueden
constituir causa de inculpabilidad
El error se divide en error de hecho y de derecho. El de hecho, a su vez, se
clasifica en esencial y accidental; este último abarca el error en el golpe,
en la persona y en el delito. Para que el error esencial de hecho tenga
efectos de inculpabilidad debe ser invencible, pues de lo contrario dejará
subsistente la culpa
 Error de Derecho: La ley se presume conocida por todos, esta regla
clásica que tiene su origen en el derecho romano tiene un claro
fundamento que los autores han puesto siempre de relieve. De otro
modo, la ley, perdería su carácter obligatorio conforme las personas
aleguen su desconocimiento para librarse de su manda. Por ello el
error de Derecho no puede ser presentado como un vicio de la
voluntad.
 Error de hecho: El error de hecho es generalmente un vicio del
consentimiento, mientras que el error de Derecho es comúnmente
rechazado como tal, el error sobre un punto de derecho no vicia el
consentimiento, con ciertas excepciones en lo relativo al
cuasicontrato de pago de lo no debido, que obedecen más que nada
a un asunto de rechazo al enriquecimiento sin causa

HECHO ILÍCITO DE LA CULPA


Según Carrara, se entiende por culpa como la voluntad omisión de
diligencia en calcular las consecuencias posibles y previsibles del propio
hecho. A esta teoría se le han formulado diversas críticas, lo que no
implica que no se reconozca que el concepto de previsibilidad juega un
papel de importancia en la culpa, sino tan solo que ese elemento no
puede considerarse como suficiente para servirle de fundamento, dado
que en otras razones, aun siendo previsible el resultado, puede no darse la
culpa, si el sujeto ha actuado con la debida diligencia y prudencia. Así,
cabe pensar en todas aquellas actividades que siempre comportan un
riesgo y que al ser utilizadas por el sujeto con toda prudencia y diligencia,
aun siendo previsibles determinados resultados dañosos, excluyen toda
culpa, a pesar de la previsibilidad, en razón de que la conducta no ha sido
contraria a las normas de diligencia y de prudencia.

En este sentido Musotto señala los ejemplos de los trabajos en minas,


excavaciones e industrias pesadas, los cuales implican necesariamente
riesgos; y señala que no puede, por tanto, hacerse consistir la culpa en no
haber previsto lo previsible, ya que fundamentalmente lo que se requiere
es la existencia de una norma que imponga especiales deberes de
prudencia y diligencia, debiendo entonces decirse con mayor exactitud
que la culpa punible no consiste solo en no haber previsto lo previsible,
sino en no haber previsto lo que la ley obliga a prever

HECHO ILÍCITO DEL DOLO


Según Hernando Grisanti el Dolo es la voluntad consciente, encaminada u
orientada a la perpetración de un acto que la ley prevé como delito. Según
Francisco Carrara el dolo es la intención más o menos perfecta de hacer
un acto que se sabe contrario a la ley.
Manzini define al dolo como la voluntad consciente y no coaccionada de
ejecutar u omitir un hecho lesivo o peligroso para un interés legítimo de
otro, del cual no se tiene la facultad de disposición conociendo o no que
tal hecho esta reprimido por la ley.
Jiménez de Asúa dice que el dolo es la producción del resultado
típicamente antijurídico con la conciencia de que se está quebrantando el
deber, con conocimiento de las circunstancias de hecho y del curso
esencial de la relación de causalidad existente entre las manifestaciones
humanas y el cambio en el mundo exterior, con la voluntad de realizar la
acción u con representación del resultado que se requiere.

Existen distintos elementos, aportados por distintos autores, del Dolo,


entre los cuales se pueden señalar:
1. Los elementos descriptivos: señalan situaciones o acciones. Ej.: matar
a otro; Por lo general no suelen causar problemas en el ámbito de
comprensión del sujeto.
2. Los elementos normativos: son síntesis de niveles de conocimiento
como expresiones culturales. Ej.: exhibición obscena. Según Mezcal,
para valorar el conocimiento o esa voluntad, hay que hacer una
valoración paralela en la esfera del profano (ciudadano de la calle).
3. Los elementos esenciales: son aquellos sin cuya concurrencia no se
daría el tipo. Para que al sujeto se le pueda imputar esa situación, el
sujeto la debe conocer.
4. Los elementos accidentales son de dos tipos:
 Accidentales del tipo: la muerte del otro es un elemento accidental
(el homicidio, elemento esencial) que ese sujeto matara a otra
persona alevosamente, la alevosía sería un elemento accidental
típico, recogido en el tipo.
 Extra típico o generales: que no están recogidos en el tipo y son los
agravantes y las atenuantes.
PRESUNCIONES DE CULPA
Los Art. 2320 a 2329 establecen varias formas de responsabilidad indirecta
o refleja. Se clasifican en 3 grupos, dependiendo del hecho que provoca el
daño:
1. Propia y personal del responsable;
2. De un tercero ajeno al responsable, pero que depende de éste;
3. De cosas cuya propiedad tenencia o cuidado corresponde, al menos
en parte, al responsable.

La responsabilidad por el hecho de terceros es un régimen de atribución


de responsabilidad que excede los límites de la mera presunción de culpa,
incursionando en lo que el como la denomina “responsabilidad vicaria”.
Lo mismo ocurre con la responsabilidad en el ámbito de las cosas,
distribuyendo los riesgos de los daños entre los distintos posibles
responsables.
Estas formas de responsabilidad están fundadas, en último término, en la
culpa, por lloque permiten exonerarse de la responsabilidad, por regla
general, si se acredita que el imputado ha actuado con el cuidado y la
diligencia que se prescriben en atención a su situación.
Presunciones de responsabilidad por hechos propio Alessandri señala que
el Art. 2329, inciso primero del C: Civil consagra una presunción de
carácter general que se aplica cuando el daño proviene de un hecho que,
por su naturaleza, es susceptible de ser atribuido a culpa o dolo. Meza
Barros discrepa de este criterio y sostiene que las normas es una
explicitación del principio general de que el que ha cometido con dolo o
culpa un hecho ilícito dañoso debe responder.

LEY ESPECIAL CONTRA LOS DELITOS


INFORMÁTICOS
30 de octubre de 2001-Gaceta Oficial Nº 37.313

Artículo 1. Objeto de la Ley. La presente Ley tiene por objeto la protección


integral de los sistemas que utilicen tecnologías de información, así como
la prevención y sanción de los delitos cometidos contra tales sistemas o
cualesquiera de sus componentes, o de los delitos cometidos mediante el
uso de dichas tecnologías, en los términos previstos en esta Ley.
Artículo 2. Definiciones. A efectos de la presente Ley, y cumpliendo con lo
previsto en el artículo 9 de la Constitución de la República Bolivariana de
Venezuela.

Artículo 3. Extraterritorialidad. Cuando alguno de los delitos previstos en


la presente Ley se cometa fuera del territorio de la República, el sujeto
activo quedará sometido a sus disposiciones si dentro del territorio de la
República se hubieren producido efectos del hecho punible, y el
responsable no ha sido juzgado por el mismo hecho o ha evadido el
juzgamiento o la condena por tribunales extranjeros.

Artículo 4. Sanciones. Las sanciones por los delitos previstos en esta Ley
serán principales y accesorias. Las sanciones principales concurrirán con
las penas accesorias y ambas podrán también concurrir entre sí, de
acuerdo con las circunstancias particulares del delito del cual se trate, en
los términos indicados en la presente Ley.

Artículo 5. Responsabilidad de las personas jurídicas. Cuando los delitos


previstos en esta Ley fuesen cometidos por los gerentes, administradores,
directores o dependientes de una persona jurídica, actuando en su
nombre o representación, éstos responderán de acuerdo con su
participación culpable.

La persona jurídica será sancionada en los términos previstos en esta Ley,


en los casos en que el hecho punible haya sido cometido por decisión de
sus órganos, en el ámbito de su actividad, con sus recursos sociales o en
su interés exclusivo o preferente.

Artículo 6. Acceso indebido. Toda persona que sin la debida autorización o


excediendo la que hubiere obtenido, acceda, intercepte, interfiera o use
un sistema que utilice tecnologías de información, será penado con prisión
de uno a cinco años y multa de diez a cincuenta unidades tributarias.

Artículo 7. Sabotaje o daño a sistemas. Todo aquel que con intención


destruya, dañe, modifique o realice cualquier acto que altere el
funcionamiento o inutilice un sistema que utilice tecnologías de
información o cualesquiera de los componentes que lo conforman, será
penado con prisión de cuatro a ocho años y multa de cuatrocientas a
ochocientas unidades tributarias. Incurrirá en la misma pena quien
destruya, dañe, modifique o inutilice la data o la información contenida en
cualquier sistema que utilice tecnologías de información o en cualesquiera
de sus componentes.
La pena será de cinco a diez años de prisión y multa de quinientas a mil
unidades tributarias, si los efectos indicados en el presente artículo se
realizaren mediante la creación, introducción o transmisión intencional,
por cualquier medio, de un virus o programa análogo.

Artículo 8. Favorecimiento culposo del sabotaje o daño. Si el delito


previsto en el artículo anterior se cometiere por imprudencia, negligencia,
impericia o inobservancia de las normas establecidas, se aplicará la pena
correspondiente según el caso, con una reducción entre la mitad y dos
tercios.

Artículo 9. Acceso indebido o sabotaje a sistemas protegidos. Las penas


previstas en los artículos anteriores se aumentarán entre una tercera
parte y la mitad, cuando los hechos allí previstos o sus efectos recaigan
sobre cualesquiera de los componentes de un sistema que utilice
tecnologías de información protegido por medidas de seguridad, que esté
destinado a funciones públicas o que contenga información personal o
patrimonial de personas naturales o jurídicas.

Artículo 10. Posesión de equipos o prestación de servicios de sabotaje.


Quien importe, fabrique, distribuya, venda o utilice equipos, dispositivos o
programas, con el propósito de destinarlos a vulnerar o eliminar la
seguridad de cualquier sistema que utilice tecnologías de información; o el
que ofrezca o preste servicios destinados a cumplir los mismos fines, será
penado con prisión de tres a seis años y multa de trescientas a seiscientas
unidades tributarias.

Artículo 11. Espionaje informático. Toda persona que indebidamente


obtenga, revele o difunda la data o información contenidas en un sistema
que utilice tecnologías de información o en cualesquiera de sus
componentes, será penada con prisión de tres a seis años y multa de
trescientas a seiscientas unidades tributarias. La pena se aumentará de un
tercio a la mitad, si el delito previsto en el presente artículo se cometiere
con el fin de obtener algún tipo de beneficio para sí o para otro. El
aumento será de la mitad a dos tercios, si se pusiere en peligro la
seguridad del Estado, la confiabilidad de la operación de las instituciones
afectadas o resultare algún daño para las personas naturales o jurídicas,
como consecuencia de la revelación de las informaciones de carácter
reservado.
Artículo 12. Falsificación de documentos. Quien, a través de cualquier
medio, cree, modifique o elimine un documento que se encuentre
incorporado a un sistema que utilice tecnologías de información; o cree,
modifique o elimine datos del mismo; o incorpore a dicho sistema un
documento inexistente, será penado con prisión de tres a seis años y
multa de trescientas a seiscientas unidades tributarias.

Artículo 13. Hurto. Quien a través del uso de tecnologías de información,


acceda, intercepte, interfiera, manipule o use de cualquier forma un
sistema o medio de comunicación para apoderarse de bienes o valores
tangibles o intangibles de carácter patrimonial sustrayéndolos a su
tenedor, con el fin de procurarse un provecho económico para sí o para
otro, será sancionado con prisión de dos a seis años y multa de doscientas
a seiscientas unidades tributarias.

Artículo 14. Fraude. Todo aquel que, a través del uso indebido de
tecnologías de información, valiéndose de cualquier manipulación en
sistemas o cualquiera de sus componentes, o en la data o información en
ellos contenida, consiga insertar instrucciones falsas o fraudulentas, que
produzcan un resultado que permita obtener un provecho injusto en
perjuicio ajeno, será penado con prisión de tres a siete años y multa de
trescientas a setecientas unidades tributarias.

Artículo 18. Provisión indebida de bienes o servicios. Todo aquel que, a


sabiendas de que una tarjeta inteligente o instrumento destinado a los
mismos fines, se encuentra vencido, revocado; se haya indebidamente
obtenido, retenido, falsificado, alterado; provea a quien los presente de
dinero, efectos, bienes o servicios, o cualquier otra cosa de valor
económico será penado con prisión de dos a seis años y multa de
doscientas a seiscientas unidades tributarias.

Artículo 19. Posesión de equipo para falsificaciones. Todo aquel que sin
estar debidamente autorizado para emitir, fabricar o distribuir tarjetas
inteligentes o instrumentos análogos, reciba, adquiera, posea, transfiera,
comercialice, distribuya, venda, controle o custodie cualquier equipo de
fabricación de tarjetas inteligentes o de instrumentos destinados a los
mismos fines, o cualquier equipo o componente que capture, grabe, copie
o transmita la data o información de dichas tarjetas o instrumentos, será
penado con prisión de tres a seis años y multa de trescientas a seiscientas
unidades tributarias.
Artículo 20. Violación de la privacidad de la data o información de carácter
personal. Toda persona que intencionalmente se apodere, utilice,
modifique o elimine por cualquier medio, sin el consentimiento de su
dueño, la data o información personales de otro o sobre las cuales tenga
interés legítimo, que estén incorporadas en un computador o sistema que
utilice tecnologías de información, será penada con prisión de dos a seis
años y multa de doscientas a seiscientas unidades tributarias. La pena se
incrementará de un tercio a la mitad si como consecuencia de los hechos
anteriores resultare un perjuicio para el titular de la data o información o
para un tercero.

Artículo 21. Violación de la privacidad de las comunicaciones. Toda


persona que mediante el uso de tecnologías de información acceda,
capture, intercepte, interfiera, reproduzca, modifique, desvíe o elimine
cualquier mensaje de datos o señal de transmisión o comunicación ajena,
será sancionada con prisión de dos a seis años y multa de doscientas a
seiscientas unidades tributarias.

Artículo 22. Revelación indebida de data o información de carácter


personal. Quien revele, difunda o ceda, en todo o en parte, los hechos
descubiertos, las imágenes, el audio o, en general, la data o información
obtenidos por alguno de los medios indicados en los artículos 20 y 21, será
sancionado con prisión de dos a seis años y multa de doscientas a
seiscientas unidades tributarias.

Artículo 26. Oferta engañosa. Toda persona que ofrezca, comercialice o


provea de bienes o servicios, mediante el uso de tecnologías de
información, y haga alegaciones falsas o atribuya características inciertas a
cualquier elemento de dicha oferta, de modo que pueda resultar algún
perjuicio para los consumidores, será sancionada con prisión de uno a
cinco años y multa de cien a quinientas unidades tributarias, sin perjuicio
de la comisión de un delito más grave.

Artículo 31. Indemnización Civil. En los casos de condena por cualquiera


de los delitos previstos en los Capítulos II y V de esta Ley, el juez impondrá
en la sentencia una indemnización en favor de la víctima por un monto
equivalente al daño causado.
Para la determinación del monto de la indemnización acordada, el juez
requerirá del auxilio de expertos
RESPONSABILIDAD PENAL QUE SE DESPRENDE DE
UN HECHO ILÍCITO
La obligación de reparar el daño causado por un hecho ilícito, dentro del
cual, obviamente, quedan incluidos los hechos delictivos, deriva de los
Artículos 1185 y 1196 del Código Civil, los cuales disponen lo siguiente:

 Artículo 1185. El que con intención, o por negligencia o por


imprudencia, ha causado un daño a otro, está obligado a repararlo.
Debe igualmente reparación quien haya causado un daño a otro,
excediendo, en el ejercicio de su derecho, los límites fijados por la
buena fe o por el objeto en vista del cual le ha sido conferido ese
derecho".
 Artículo 1196. La obligación de reparación se extiende a todo daño
material o moral causado por el acto ilícito.
El Juez puede, especialmente, acordar una indemnización a la víctima
en caso de lesión corporal, de atentado a su honor, a su reputación, o
a los de su familia, a su libertad personal, como también en el caso de
violación de su domicilio o de un secreto concerniente a la parte
lesionada.
El Juez puede igualmente conceder una indemnización a los
parientes, afines, o cónyuge, como reparación del dolor sufrido en
caso de muerte de la víctima.

Ahora bien, existen tres clases de culpa en sentido amplio:


a) La contractual, que implica una relación jurídica o contrato
preexistente entre el autor del hecho culposo y el sujeto pasivo de
dicho hacer
b) b)La extracontractual, que no nace del deber recíproco que el
contrato impone a las partes, dada la ausencia de éste, sino del
respeto que a cada ciudadano debe merecer el derecho ajeno, que
nos obliga a no dañarlo, con ocasión del ejercicio de nuestros propios
actos
c) La nacida de delito, declarada y sancionada previamente por un
Tribunal penal y que origina una responsabilidad civil subsidiaria de la
penal.

Es el derecho de perseguir o solicitar la imposición del castigo legal a todo


delincuente; y la misma, por mandato expreso del Artículo 24 del Código
Orgánico Procesal Penal "deberá ser ejercida de oficio por el Ministerio
Público, salvo que sólo pueda ejercerse por la víctima o a su
requerimiento ", correspondiéndole a ésta última el ejercicio de las
acciones que nacen de los delitos que la ley establece como de instancia
privada (Art. 25 COPP).
Por su parte, la acción civil derivada o proveniente del delito, es aquella
que se otorga al perjudicado de un delito, esto es, a la víctima, para exigir
las restituciones, reparaciones e indemnizaciones que impone la ley penal.
De manera que la comisión de todo delito produce dos acciones: la penal,
para el castigo del delincuente y satisfacción de la vindicta pública; y, la
civil, para reclamar el interés y resarcimiento de los daños causados.

LA RESPONSABILIDAD PENAL
La responsabilidad penal es la consecuencia jurídica de la violación de la
ley, realizada por quien siendo imputable o inimputable, lleva a término
actos previstos como ilícitos, lesionando o poniendo en peligro un bien
material o la integridad física de las personas. La responsabilidad penal es,
en Derecho, la sujeción de una persona que vulnera un deber de conducta
impuesto por el Derecho penal al deber de afrontar las consecuencias que
impone la ley. Dichas consecuencias se imponen a la persona cuando se le
encuentra culpable de haber cometido un delito o haber sido cómplice de
éste.
La responsabilidad penal la impone el Estado, y consiste en una pena que
busca castigar al delincuente e intentar su reinserción para evitar que
vuelva a delinquir.

También podrá ser común o especial:


 Común: cuando el delito cometido puede ser realizado por cualquier
individuo (robo, violación, asesinato).

 Especial: cuando el delito es cometido por un funcionario público


aprovechándose de su condición.

DIFERENCIA CON LA RESPONSABILIDAD CIVIL


La responsabilidad penal no busca resarcir o compensar a la víctima del
delito, sino que esa será una responsabilidad civil independiente y
derivada del acto delictivo. Sería un tipo de responsabilidad civil
extracontractual por producir un acto lesivo para otra persona. En
ocasiones dichos conceptos se confunden, y sobre todo en el derecho
anglosajón, dado que ambas responsabilidades pueden llevar a
obligaciones pecuniarias.
Sin embargo, existen varias diferencias:
 Su finalidad es distinta: La responsabilidad penal sanciona, y la civil
repara un daño.

 La cantidad de la cuantía a pagar se calcula con diferentes medidas:


Una multa (responsabilidad penal) estará basada principalmente en
la gravedad del hecho delictivo, mientras que la responsabilidad civil
busca resarcir un daño a la víctima
.
 Normalmente el destinatario también es distinto. La responsabilidad
penal se suele pagar al estado, y la civil a la víctima.

CÓDIGO PENAL VENEZOLANO


Artículo 60. La ignorancia de la ley no excusa ningún delito ni falta.

Artículo 61. Nadie puede ser castigado como reo de delito no habiendo
tenido la intención de realizar el hecho que lo constituye, excepto cuando
la ley se lo atribuye como consecuencia de su acción u omisión. El que
incurra en faltas, responde de su propia acción u omisión, aunque no se
demuestre que haya querido cometer una infracción de la ley. La acción u
omisión penada por la Ley se presumirá voluntaria, a no ser que conste lo
contrario.

Artículo 407. El que intencionalmente haya dado muerte a alguna


persona será penado con presidio de doce a dieciocho años.

Artículo 411. El que por haber obrado con imprudencia o negligencia, o


bien con impericia en su profesión, arte o industria, o por inobservancia
de los reglamentos, órdenes o instrucciones, haya ocasionado la muerte
de alguna persona, será castigado con prisión de seis meses a cinco años.
En la aplicación de esta pena los Tribunales de Justicia apreciaran el grado
de culpabilidad del agente.
Si del hecho resulta la muerte de varias personas o la muerte de una sola y
las heridas de una o más, con tal que las heridas acarreen las
consecuencias previstas en el artículo 416, la pena de prisión podrá
aumentar hasta ocho años.

Artículo 412. El que con actos dirigidos a ocasionar una lesión personal,
causare la muerte de alguno, será castigado con presidio de seis a ocho
años, en el caso del Artículo 407; de ocho a doce años, en el caso de
Artículo 408; y de siete a diez años, en el caso del Artículo 409.

Artículo 413. Cuando el delito previsto en el artículo 407 se haya cometido


en un niño recién nacido, no inscrito en el Registro del Estado Civil dentro
del termino legal, con el objeto de salvar el honor del culpado o la honra
de su esposa, de su madre, de su descendiente, hermana o hija adoptiva,
la pena señalada en dicho artículo se rebajara de un cuarto a la mitad.

Artículo 414. El que hubiere inducido a algún individuo a que se suicide o


con tal fin lo haya ayudado, será castigado, si el suicidio se consuma con
presidio de siete a diez años.

CONSTITUCIÓN DE LA REPÚBLICA BOLIVARIANA


DE VENEZUELA
Artículo 26. Toda persona tiene derecho de acceso a los órganos de
administración de justicia para hacer valer sus derechos e intereses,
incluso los colectivos o difusos, a la tutela efectiva de los mismos y a
obtener con prontitud la decisión correspondiente.
El Estado garantizará una justicia gratuita, accesible, imparcial, idónea,
transparente, autónoma, independiente, responsable, equitativa y
expedita, sin dilaciones indebidas, sin formalismos o reposiciones inútiles.

Artículo 49. El debido proceso se aplicará a todas las actuaciones judiciales


y administrativas y, en consecuencia:
La defensa y la asistencia jurídica son derechos inviolables en todo estado
y grado de la investigación y del proceso. Toda persona tiene derecho a
ser notificada de los cargos por los cuales se le investiga, de acceder a las
pruebas y de disponer del tiempo y de los medios adecuados para ejercer
su defensa. Serán nulas las pruebas obtenidas mediante violación del
debido proceso. Toda persona declarada culpable tiene derecho a recurrir
al fallo, con las excepciones establecidas en esta Constitución y la ley.
Toda persona se presume inocente mientras no se pruebe lo contrario.
Toda persona tiene derecho a ser oída en cualquier clase de proceso, con
las debidas garantías y derecho del plazo razonable determinado
legalmente, por un tribunal competente, independiente e imparcial
establecido con anterioridad. Quien no hable castellano o no pueda
comunicarse de manera verbal, tiene derecho a un intérprete.
Toda persona tiene derecho a ser juzgada por sus jueces naturales en las
jurisdicciones ordinarias, o especiales, con las garantías establecidas en
esta Constitución y en la ley. Ninguna persona podrá ser sometida a juicio
sin conocer la identidad de quien la juzga, ni podrá ser procesada por
tribunales de excepción o por comisiones creadas para tal efecto.
Ninguna persona podrá ser obligada a confesarse culpable o declarar
contra sí misma, su cónyuge, concubino o concubina, o pariente dentro
del cuarto grado de consanguinidad y segundo de afinidad.
La confesión solamente será válida si fuere hecha sin coacción de ninguna
naturaleza.
Ninguna persona podrá ser sancionada por actos u omisiones que no
fueren previstos como delitos, faltas o infracciones en leyes preexistentes.
Ninguna persona podrá ser sometida a juicio por los mismos hechos en
virtud de los cuales hubiese sido juzgada anteriormente.
Toda persona podrá solicitar del Estado el restablecimiento o reparación
de la situación jurídica lesionada por error judicial, retardo u omisión
injustificados. Queda a salvo el derecho del o de la particular de exigir la
responsabilidad personal del magistrado o magistrada, juez o jueza y del
Estado, y de actuar contra éstos o éstas.

Artículo 257. El proceso constituye un instrumento fundamental para la


realización de la justicia. Las leyes procesales establecerán la
simplificación, uniformidad y eficacia de los trámites y adoptarán un
procedimiento breve, oral y público. No se sacrificará la justicia por la
omisión de formalidades no esenciales.

Artículo 259. La jurisdicción contencioso administrativa corresponde al


Tribunal Supremo de Justicia y a los demás tribunales que determine la
ley. Los órganos de la jurisdicción contencioso administrativa son
competentes para anular los actos administrativos generales o
individuales contrarios a derecho, incluso por desviación de poder;
condenar al pago de sumas de dinero y a la reparación de daños y
perjuicio originados en responsabilidad de la Administración; conocer de
reclamos por la prestación de servicios públicos; y disponer lo necesario
para el restablecimiento de las situaciones jurídicas subjetivas lesionadas
por la actividad administrativa.

LEY DE TRÁNSITO TERRESTRE


Artículo 37. Las licencias podrán ser anuladas, revocadas o suspendidas.
Serán anuladas cuando hayan sido otorgadas mediante un acto viciado en
razón de defectos de forma esenciales a su validez o por falta de los
requisitos o de fondo; serán revocadas cuando sobrevenga impedimento
que incapacite física, mental o legalmente a su titular para conducir
vehículos y serán suspendidas en los casos determinados por esta Ley.

Artículo 55. Se presume, salvo prueba en contrario, que es culpable de un


accidente de tránsito, el conductor que en el momento del accidente se
encontrase bajo los efectos de bebidas alcohólicas, de sustancias
estupefacientes o psicotrópicas, o que condujese a exceso de velocidad. A
dicho conductor se le practicará el examen toxicológico correspondiente,
el cual podrá ser omitido en caso de utilización de pruebas e instrumentos
científicos por
Parte de la autoridad competente, al momento de levantar el accidente.
Dichas pruebas e instrumentos serán determinados en el Reglamento de
esta Ley.

LEY PENAL DEL AMBIENTE


La presente Ley tiene por objeto tipificar como delitos aquellos hechos
que violen las disposiciones relativas a la conservación, defensa y
mejoramiento del ambiente, y establece las sanciones penales
correspondientes. Así mismo, determina las medidas precautelativas, de
restitución y de reparación a que haya lugar.

Artículo 2. Extraterritorialidad. Si el hecho punible descrito por esta Ley se


comete en el extranjero, quedará sujeta a ella la persona responsable,
cuando aquél haya lesionado o puesto en peligro, en Venezuela, un bien
jurídico protegido en sus disposiciones.
En este caso, se requiere que el indiciado haya venido al territorio de la
República y que se intente acción por el Ministerio Público. Requiérese
también que el indiciado no haya sido juzgado por tribunales extranjeros,
a menos que habiéndolo sido hubiere evadido la condena.

Artículo 3. Requisitos de las sanciones a personas jurídicas.


Independientemente de la responsabilidad de las personas naturales, las
personas jurídicas serán sancionadas de conformidad con lo previsto en la
presente Ley, en los casos en que el hecho punible descrito en Esta haya
sido cometido por decisión de sus órganos, en el ámbito de la actividad
propia de la entidad y con recursos sociales y siempre que se perpetre en
su interés exclusivo o preferente.
Artículo 4. Responsabilidad de representante. Cuando lo hechos punibles
fueran cometidos por los gerentes, administradores o directores de
personas jurídicas, actuando a nombre o en representación de Estas,
aquellos responderán de acuerdo a su participación culpable y recaerán
sobre las personas jurídicas las sanciones que se especifican en esta Ley.

Artículo 7. Definición de salario mínimo. Para los efectos de esta Ley un


día de salario mínimo se entiende como el día de salario mínimo para los
trabajadores urbanos, vigente al momento de dictarse la sentencia
definitiva, en el lugar en el cual se causó el daño o donde se cometió el
delito, si se trata de un delito de peligro

Artículo 37. Degradación de las playas. El que, con peligro o daño o


degradación del medio lacustre, marino o costero, impida o dificulte el
acceso a las playas con muros, barreras u otros obstáculos, será
sancionado con arresto de cuatro (4) a ocho (8) meses y multa de
cuatrocientos (400) a ochocientos (800) días de salario mínimo.

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