Los Siete Saberes
Los Siete Saberes
Los Siete Saberes
Edgar Morin, pensador francs de gran impacto en la actualidad, propuso en un documento solicitado por la UNESCO fomentar siete saberes necesarios para la educacin del futuro, que son: 1. Enfrentar las cegueras del conocimiento: el error y la ilusin 2. Alimentar los principios de un conocimiento pertinente 3. Ensear la condicin humana 4. Ensear la identidad terrenal 5. Enfrentar las incertidumbres 6. Ensear la comprensin 7. Cultivar la tica del gnero humano Con clara profundidad se va internando en los secretos rincones del ser humano y construye as una serie de redes o bucles para representar el mapa de la compleja condicin humana: Bucle individuo-sociedad Bucle individuo-especie Bucle inteligencia-afecto Bucle accin-contexto Bucle fines-medios Bucle riesgo-precaucin Bucle egocentrismo-autojustificacin-autodecepcin Bucle cerebro-espritu-cultura Bucle razn-afecto-impulso Bucle individuo-sociedad-especie Bucle individuo-sociedad-nosfera En el prlogo, que es un resumen del libro, ofrece las siguientes lneas de orientacin: 1. Las cegueras del conocimiento: el error y la ilusin. Es necesario introducir y desarrollar en la educacin el estudio de las caractersticas cerebrales, mentales y culturales del conocimiento humano. 2. Los principios de un conocimiento pertinente. Establecer el vnculo entre las partes y el todo, aprehender los objetos en sus contextos. 3. Ensear la condicin humana. El ser humano es a la vez fsico, biolgico, psquico, cultural, social e histrico (estructuras y mbitos de accin, en Habermas). Aprehender eso que significa ser humano, su identidad compleja y su identidad comn. 4. Ensear la identidad terrenal. El destino planetario del gnero humano. Los humanos vivimos un destino comn. 5. Afrontar las incertidumbres. Las mismas que han aparecido en las ciencias fsicas, biolgicas e histricas. Abandonar los conceptos deterministas de la historia humana, asumir lo inesperado y poder afrontarlo. 6. Ensear la comprensin. Es al mismo tiempo medio y fin de la comunicacin humana y necesita una reforma de las mentalidades. De all la necesidad de estudiar la incomprensin desde sus races. 7. La tica del gnero humano. La educacin debe conducir a una antropotica, que contemple el carcter trino del ser humano, a la vez individuo-sociedad-especie y construya democracia y ciudadana terrestre, al tiempo que asuma la humanidad como comunidad planetaria y tome conciencia de nuestra Tierra-Patria. El desarrollo de la obra sigue del modo que te presentamos: 1. CEGUERAS DEL CONOCIMIENTO: EL ERROR Y LA ILUSIN: El taln de Aquiles del conocimiento:
Al error de percepcin se agrega el error intelectual del conocimiento en forma de palabra, idea o teora, sujeto al riesgo de la interpretacin en la subjetividad del cognoscente y su visin del mundo (Habermas otra vez). El desarrollo de la inteligencia es inseparable del de la afectividad (inteligencia emocional). No hay un estado superior de la razn, sino un bucle inteligencia-afecto. Los errores mentales: Ningn dispositivo cerebral permite distinguir la alucinacin de la percepcin, el sueo de la vigilia, lo imaginario de lo real, lo subjetivo de lo objetivo, el egocentrismo y la auto-justificacin, o la tendencia a proyectar sobre el otro la causa del mal (Senge). Los errores intelectuales: Nuestros sistemas de ideas (visiones del mundo y racionalidades, en Habermas, (H) modelos mentales, en Senge (S)) protegen los errores e ilusiones. Los errores de la razn: Es la racionalidad la que corrige. La verdadera racionalidad, abierta por naturaleza, dialoga con la realidad y es el fruto del debate argumentado de las ideas (accin comunicativa.H.). La verdadera racionalidad no es solamente terica ni crtica, sino tambin autocrtica. Las cegueras paradigmticas: Los conceptos maestros de la inteligibilidad (pretensiones de validez. H.) son el orden en los deterministas, la materia en los materialistas, el espritu en los espiritualistas y la estructura en los estructuralistas. Todos excluyen o subordinan los conceptos que les son antinmicos, como ordendesorden, espritu-materia, materia-espritu, acontecimiento-estructura. Como son excluyentes, separan lo humano de lo natural y lo natural de lo humano, sin poder concebir la unidualidad naturalcultural, cerebral-squica, de la realidad humana. El paradigma cartesiano separa al sujeto del objeto, disociando la investigacin reflexiva de la ciencia y la investigacin objetiva. El imprinting y la normalizacin: Al determinismo de los paradigmas ( modelos mentales, Senge) explicativos, se asocia el determinismo de las convicciones y creencias que imponen a cada uno la fuerza imperativa de lo sagrado, normalizadora del dogma y prohibitiva del tab (mano silenciosa e intocables,Senge). La noologa:posesin: Desde el comienzo de la humanidad naci la nosfera: esfera de las cosas del espritu, por ello vivimos en medio de una selva de mitos que enriquecen las culturas. Los mitos han tomado forma a partir de fantasmas formados por nuestros sueos e imaginaciones. Las ideas han tomado forma a partir de los smbolos y los pensamientos de nuestras inteligencias. Las sociedades domestican a los individuos por los mitos y las ideas (colonizacin del mundo de la vida. H.). Sera necesario tomar conciencia de nuestras enajenaciones para poder dialogar con nuestras ideas, controlarlas tanto como ellas nos controlan y aplicarles pruebas de verdad y de error (pretensiones de validez susceptibles de crtica. H.). Es difcil distinguir entre idea e idealismo, entre racionalidad y razn, lo mismo para reconocer el mito oculto bajo el rtulo de ciencia o razn, pues tanto el mito como la ideologa destruyen y devoran los hechos (crisis paradigmtica en la estructura de las revoluciones cientficas, deca Thomas Kuhn). Muy a la par de Habermas, Morin destaca que debemos llevar una lucha crucial contra las ideas, pero no podemos hacerlo ms que con la ayuda de las ideas y slo debemos reconocer como dignas de fe aquellas ideas que aceptan que lo real resiste a la idea. La incertidumbre del conocimiento: Debemos comprender que hay condiciones bio-antropolgicas, socio-culturales y noolgicas, que interrogan al hombre, al mundo y al conocimiento. Popper los nombrara como tres mundos: el objetivo o natural, el del pensamiento o la cultura y el subjetivo. Habermas seala cuatro estructuras: de la cultura y la ciencia, de la sociedad y la moral, de la personalidad y el arte y del organismo y su adaptacin; a stas estructuras las hace corresponder con tres mbitos de accin: el cognitivo-instrumental, el prctico-moral y el esttico expresivo.
Las ideas que argumento aqu, dice Morin, no son slo las que yo poseo, sobre todo son las que me poseen. El problema clave es instaurar la convivencia con nuestras ideas, as como con nuestros mitos y detectar el mentirse a s mismo. Necesitamos civilizar nuestras teoras y hacerlas aptas para autoreformarse. 2. LOS PRINCIPIOS DE UN CONOCIMIENTO PERTINENTE: De la pertinencia en el conocimiento: El conocimiento del mundo se vuelve una necesidad intelectual y vital al mismo tiempo. Es el problema universal para todo ciudadano del nuevo milenio: Cmo lograr el acceso a la informacin sobre el mundo y cmo articularla y organizarla? Cmo percibir y concebir el contexto, lo global, la relacin todo-partes, lo multidimensional, lo complejo? El contexto: Claude Bastien dice que la evolucin cognitiva no se dirige hacia la elaboracin de conocimientos cada vez ms abstractos, sino por el contrario hacia su contextualizacin, condicin esencial de la eficacia del funcionamiento cognitivo. Lo global, las relaciones entre el todo y las partes: El principio de Pascal para inspirar la educacin del futuro: si todas las cosas son causadas y causantes, ayudadas y ayudantes, mediatas e inmediatas, y todas entretejidas por un lazo natural e imperceptible que liga las ms alejadas y las ms diferentes, no es posible conocer las partes sin conocer el todo y tampoco conocer el todo sin conocer las partes. Lo multidimensional: El ser humano es a la vez biolgico, psquico, social, afectivo, racional. La sociedad contiene dimensiones histricas, polticas, econmicas, sociolgicas, religiosas Lo complejo: Lo complejo es lo que est tejido en conjunto, es la unin entre la unidad y la multiplicidad. La inteligencia general: El conocimiento debe movilizar lo que el cognoscente sabe del mundo y activar su inteligencia. En la misin de promover la inteligencia general de los individuos, la educacin del futuro debe utilizar los conocimientos existentes, superar las antinomias (paradojas o contradicciones) provocadas por el progreso en los conocimientos especializados, as como identificar la falsa racionalidad (racionalidades instrumentales con arreglo a intereses, dira Habermas). La antinomia: Las disciplinas del saber se han encerrado en s mismas y se han separado en las ciencias biolgicas, ciencias humanas, exactas, estticas, etc. El debilitamiento de la percepcin de lo global conduce al debilitamiento de la responsabilidad particular y al debilitamiento de la solidaridad, pues se pierden los vnculos ciudadanos. Disyuncin y especializacin encerrada: Al mismo tiempo, la divisin de las disciplinas imposibilita coger lo que est tejido en conjunto, es decir, segn el sentido original del trmino: lo complejo. Reduccin y disyuncin: La reduccin simplifica lo complejo, oculta el riesgo, la novedad y la invencin, suprimiendo lo humano de lo humano, con una mentalidad mecnica determinista (Habermas la denomin razn instrumental). La inteligencia parcelada, compartimentada, mecanicista, disyuntiva, reduccionista, rompe lo complejo del mundo en fragmentos separados, fracciona los problemas, separa lo que est unido, unidimensionaliza lo multidimensional. Es una inteligencia miope que termina por enceguecer.
La falsa racionalidad: Estamos en va de una subordinacin a las Inteligencias Artificiales, IA, instaladas profundamente en las mentes en forma de pensamiento tecnocrtico, pues no comprenden lo vivo y lo humano (colonizacin del mundo de la vida, lo llama Habermas). El siglo XX ha vivido bajo el reino de una pseudo-racionalidad que ha pretendido ser la nica, pero que ha atrofiado la comprensin, la reflexin y la visin de largo plazo y su insuficiencia para tratar los problemas la ha convertido en uno de los ms graves problemas de la humanidad. Se trata de comprender un pensamiento que separa y reduce junto con uno que distingue y religa. No se trata de abandonar el conocimiento de las partes por el de las totalidades ni el anlisis por la sntesis: es necesario conjugarlos. 3. ENSEAR LA CONDICIN HUMANA: La educacin del futuro deber estar universalmente centrada en la condicin humana. Conocer lo humano es situarlo en el universo y a la vez separarlo de l. Los progresos concomitantes de la cosmologa, las ciencias de la tierra, la ecologa, la biologa, la prehistoria, han modificado las ideas sobre el Universo, la Tierra, la Vida y el Hombre mismo. Es imposible concebir la unidad compleja de lo humano por medio del pensamiento disyuntivo que concibe nuestra humanidad de manera insular, por fuera del cosmos que le rodea, de la materia fsica y del espritu del cual estamos constituidos. La condicin csmica: Hemos abandonado recientemente la idea de un Universo ordenado, perfecto, eterno, por un Universo que nace en la irradiacin, en el devenir disperso, donde actan de manera complementaria, concurrente y antagnica: orden, desorden y organizacin. Nuestra tierra es un trompo minsculo que gira alrededor de un astro errante en la periferia de una pequea galaxia en el suburbio de un gigantesco cosmos en expansin. La condicin fsica: La vida surgi en los destellos de los resplandecientes torbellinos solares, nosotros somos apenas una pajilla de la dispora csmica. La condicin terrestre: La Tierra se auto-produjo y se auto-organiz dependiendo del sol, se constituy en un complejo biofsico a partir del desarrollo de su biosfera. Somos a la vez seres csmicos y terrestres. Como seres vivos de este planeta dependemos vitalmente de la bisfera terrestre: debemos reconocer nuestra muy fsica y muy biolgica identidad terrenal. La condicin humana: La hominizacin debe ser tema de la educacin, pues muestra cmo animalidad y humanidad constituyen juntas nuestra condicin humana, desde el homo habilis, erectus, neanderthal, sapiens, en los que se sigue un proceso de bipedizacin, manualizacin, ereccin del cuerpo, cerebralizacin, complejizacin social y surgimiento del lenguaje y la cultura. El homnido se humaniza mediante un doble principio biofsico y psico-socio-cultural. En Habermas el nfasis est en el surgimiento del lenguaje simblico y en la interaccin intersubjetiva, la socializacin y la individuacin, que se dan al mismo tiempo. Como el punto de un holograma, llevamos en el seno de nuestra singularidad todo la humanidad, toda la vida y tambin todo el cosmos, incluyendo su misterio, que yace sin duda en nuestro interior. Lo humano de lo humano: Unidualidad: El humano es un ser plenamente biolgico y plenamente cultural: homo sapiens es tambin homo demens. El bucle cerebro-espritu-cultura:
El hombre se completa por y en la cultura. No hay cultura sin cerebro ni espritu sin cultura. La mente humana es una emergencia que nace y se afirma en la relacin cerebro-cultura. El bucle razn-afecto-impulso: Tienen una relacin inestable, permutante, rotativa. La racionalidad no dispone de todo el poder, puede ser dominada, esclavizada y sumergida por la afectividad o el impulso. El bucle individuo-sociedad-especie: Las interacciones entre los individuos producen la sociedad y en sta emerge la cultura. Construir una tica de la plenitud del sujeto y su libre expresin, constituyen acuerdos fundamentales en Morin y en Habermas, son tambin el medio y el fin para Senge y Freire. Todo desarrollo verdaderamente humano significa desarrollo conjunto de las autonomas individuales, de las participaciones comunitarias y del sentido de pertenencia a la especie humana. Unitas multiplex: la unidad y la diversidad humana: El campo individual y el campo social: Diversidad cultural y pluralidad de individuos: Se dice justamente La Cultura; se dice justamente las culturas, pues la cultura no existe sino a travs de las culturas. El ser humano es l mismo a la vez uno y mltiple, constituye en s un cosmos de pulsiones fsicas e instintivas y de sueos y fantasmas, extravos de lucidez y locas tormentas. Sapiens-demens: Se debe abandonar las visiones solamente racionales, tcnicas o utilitarias, pues el ser humano se nutre de antagnicos: Sapiens y demens racional y delirante Faber y ludens trabajador y ldico Empiricus e imaginarius prctico e imaginativo Economicus y consumans econmico y dilapidador Prosaicus y poeticus prosaico y potico Homo complexus: Dik, la ley sabia, es hija de Ubris, la desmesura. El tejido humano es al tiempo racional, neurtico, infantil La locura es un problema central del hombre, pues sondea lo indecible y est en la frontera del genio, ms all de lo real, de lo lgico, de lo social y lo cultural, en los terrenos de la incertidumbre. A pesar de la compleja ebullicin de la naturaleza humana, se ha producido desarrollo tcnico y cientfico, se han cimentado civilizaciones que han dado sus frutos en filosofas y ciencias: la Humanidad ha dominado la Tierra y nos hemos convertido en ciudadanos del planeta. 4. ENSEAR LA IDENTIDAD TERRENAL:
La mundializacin es uno de los problemas de nuestro tiempo y la educacin debe trabajar con un pensamiento policntrico para la identidad y la conciencia terrenal. La era planetaria: El mundo se vuelve cada vez ms un todo. Morin seala aspectos de la mundializacin que nosotros llamamos globalizacin. El desarrollo est en un punto insostenible. Es necesaria una nocin ms rica y compleja del desarrollo, que sea no slo material, sino tambin intelectual, afectivo, moral. El legado del siglo XX: La herencia de muerte: La evolucin humana es un crecimiento del poder de la muerte. Las armas nucleares y los nuevos peligros:
La dominacin desenfrenada de la naturaleza por la tcnica conduce a la humanidad al suicidio. Muerte de la modernidad: Si la modernidad se defiende como fe incondicional en el progreso, en la tcnica, en la ciencia y en el desarrollo econmico, entonces esta modernidad est muerta. La esperanza: El aporte de las contracorrientes: La contracorriente ecolgica, la contracorriente cualitativa, la contracorriente esttica, la contracorriente de la espiritualidad y la frugalidad, la contracorriente de los principios de la solidaridad y la contracorriente de las ticas de la paz. Es precisa civilizar la Tierra-Patria como casa y jardn comunes de la humanidad. En el juego contradictorio de las posibilidades: La mente humana podra desarrollar aptitudes an desconocidas en la inteligencia, la comprensin y la creatividad. La posibilidad antropolgica, sociolgica, cultural y mental de progreso restaura el principio de esperanza, pero sin certeza cientfica, ni promesa histrica. Por esto la toma de conciencia, el despertar de la voluntad, del coraje, del azar, se han vuelto urgentes y primordiales. La reforma del pensamiento se ha vuelto vital. Habermas dira que es preciso construir una nueva teora racionalizadora y Senge que se deben transformar los modelos mentales. La identidad y la conciencia terrenal: Se puede avanzar en la nocin Tierra-Patria. Por esto es necesario aprender a estar ah, en el planeta: aprender a vivir, a compartir, a comunicarse y a comulgar. (Se parecen a los principios de aprender a ser, hacer, saber, convivir y discernir, que nosotros empezamos a compartir). Habermas lo explica as: en el mundo de la vida se requiere de una accin comunicativa que nos conduzca al entendimiento, a la coordinacin de la accin, a la interaccin, a la socializacin y a la individuacin. Debemos inscribir en nosotros las conciencias antropolgica, ecolgica, cvica terrenal y espiritual. Los Estados deben abandonar su soberana e integrar un mundo policntrico y acntrico, no slo en el mbito poltico y econmico, sino ante todo cultural. Oriente y Occidente, Norte y Sur deben religar su disyuncin a favor de la sabidura de vivir unidos. Se impone salvar la unidad humana y salvar la diversidad humana, civilizar y solidarizar la Tierra, aprender una tica de la comprensin planetaria. Casi son los mismos trminos de Habermas, cuando pide construir una nueva moral, construir intersubjetividad y consenso por medio del dilogo. Por su parte, Senge centra la quinta disciplina en el dilogo y en organizaciones que aprenden de s mismas. 5. ENFRENTAR LAS INCERTIDUMBRES: Lo esperado no se cumple y para lo inesperado un dios abre la puerta, escribi Eurpides. Una gran conquista de la inteligencia sera poder deshacerse de la ilusin de predecir el destino humano. La incertidumbre histrica: Quin hubiera imaginado que un asesinato provocara una guerra mundial, o que un partido obrero creara una potencia totalitaria, o que una alianza para liquidar al fascismo se tornara en la guerra fra, o que la cada del muro de Berln derrumbara el imperio sovitico, o que un fantico del extremo oriente destruira las dos torres gemelas de Nueva York? El devenir es ahora cuestionado y lo ser para siempre. El futuro se llama incertidumbre. La historia creativa y destructiva: Los individuos portadores de diferencia constituyen una desviacin potencial. La historia es un complejo de orden, desorden y organizacin. Tiene siempre dos caras opuestas: civilizacin y barbarie, creacin y destruccin, gnesis y muerte. Los msticos orientales hablan de las mismas contradicciones en trminos de ying y yang.
Un mundo incierto: Enfrentar las incertidumbres: La educacin del futuro debe volver sobre las incertidumbres ligadas al conocimiento, pues intervienen los principios de incertidumbres cerebro-mentales, lgicas, racionales y psicolgicas. Habermas tambin ataca estas diversas categoras de anlisis, denominndolas racionalidades y pretensiones de validez, hacindolas susceptibles de crtica. Las racionalidades son con arreglo a medios, fines, normas, principios, valores y al entendimiento. Las pretensiones de validez son la verdad, la conformidad con las normas, la legitimidad y la autenticidad. La humanidad es llevada hacia una aventura desconocida. La incertidumbre de lo real: Las ideas y teoras no reflejan sino que traducen la realidad. Nuestra realidad no es otra que nuestra idea de la realidad. Comprender la incertidumbre de lo real es saber que hay un posible an invisible en lo real. La incertidumbre del conocimiento: Las incertidumbres y la ecologa de la accin: El bucle riesgo-precaucin: Pericles deca que nosotros sabemos a la vez probar una audacia extrema y no emprender nada sin una reflexin detenida. El bucle fines-medios y el bucle accin-contexto: Toda accin escapa a la voluntad de su autor cuando entra en el juego de las inter-retro-acciones del medio donde interviene. Es nuevamente, pura accin comunicativa en el mundo de la vida, para Habermas. La impredecibilidad a largo plazo: Ninguna accin est segura
de
obrar
en
el
sentido
de
su
intencin.
La apuesta y la estrategia: En la estrategia se plantea el problema de la dialgica entre fines y medios. La racionalidad de la accin, segn Habermas. Todo aquello que implica oportunidad implica riesgo y el pensamiento debe diferenciar entre ellos. La renuncia al mejor de los mundos no es de ninguna manera la renuncia a un mundo mejor. Sepamos entonces esperar lo inesperado y trabajar para lo improbable. Tambin las filosofas orientales recomiendan la misma postura de la conciencia. 6. ENSEAR LA COMPRENSIN: La misin espiritual de la educacin es ensear la comprensin entre las personas como condicin y garanta de la solidaridad intelectual y moral de la humanidad. Aqu se encuentra Morin con Habermas, Senge y Paulo Freire. Las dos comprensiones: La comprensin intelectual y objetiva y la comprensin humana intersubjetiva. Comprender incluye necesariamente un proceso de empata, de identificacin y de proyeccin. Siempre intersubjetiva, la comprensin humana necesita apertura, simpata y generosidad. Una educacin para los obstculos a la comprensin: La comprensin del sentido de las palabras de otro, de sus ideas y de su visin del mundo siempre est amenazada por todos los lados: Hay ruido que parasita la transmisin de la informacin, crea el malentendido o el no-entendimiento. Hay polisemia de una nocin que, enunciada en un sentido, se entiende en otro, como la palabra
cultura. Existe la ignorancia de los ritos y costumbres del otro, la incomprensin de los valores, de los imperativos ticos, de las otras visiones del mundo y de una estructura mental a otra. El egocentrismo: En realidad, la incomprensin de s mismo es una fuente muy importante de la incomprensin de los dems. Nos cubrimos nuestras carencias y debilidades, pero somos despiadados con las de los dems. Etnocentrismo y sociocentrismo: Un juicio moral traduce siempre un rechazo al anlisis e incluso al pensamiento. El espritu reductor: Los mltiples y multiformes obstculos a la comprensin estn constituidos por el bucle egocentrismoautojustificacin-autodecepcin. La conjuncin de incomprensiones individuales, intelectuales, colectivas, obstaculizan las relaciones entre individuos y colectivos, exigiendo agregar a los mbitos econmico, poltico, jurdico, social, componentes intelectuales y ticos, para desarrollar la doble comprensin, intelectual y humana. La tica de la comprensin: Esta es la esencia de la propuesta de accin comunicativa de Habermas. La comprensin es un arte de vivir, que nos pide comprender la incomprensin, argumentar y refutar, en vez de excomulgar y anatematizar. Si sabemos comprender antes de condenar estaremos en la va de la humanizacin de las relaciones humanas. Habermas lo llamara accin comunicativa para el entendimiento y la intersubjetividad. Senge lo denomina discusin experta. El bien pensar: La introspeccin: La prctica mental del autoexamen permanente de s mismo es necesaria para la comprensin de los dems. Aqu se hace explcita la conexin con la evaluacin que esperamos realizar. La conciencia de la complejidad humana: La apertura subjetiva (simptica) hacia los dems: Otra referencia a Habermas y a Senge. La interiorizacin de la tolerancia: Existen cuatro grados de tolerancia: el primero es respetar el derecho a proferir un propsito que nos parece innoble; el segundo es el principio democrtico de respetar la expresin de unas ideas antagnicas a las nuestras; el tercero es constatar que lo contrario de una idea profunda es otra idea profunda, en la que hay una verdad que debemos respetar, y el cuarto es la conciencia de las enajenaciones humanas por los mitos, las ideologas o los dioses. Comprensin, tica y cultura planetarias: La nica y verdadera mundializacin que estara al servicio del gnero humano es la de la comprensin y la solidaridad intelectual y moral de la humanidad. Comprender es tambin aprender y re-aprender de manera permanente (nosotros diramos desaprender y aprender a aprender). La mundializacin cultural, esttica y del pensamiento, no tiende a ser homogenizante, sino a la libre expresin de las originalidades particulares de nacin, pueblos o individuos.
Los hemisferios planetarios deben dialogar y comprenderse. Morin dice que la comprensin entre culturas, pueblos y naciones pasa por la generalizacin de las sociedades democrticas abiertas. Pero all est el problema epistemolgico de la comprensin que es a la vez medio y fin de la comunicacin humana y cuyo desarrollo necesita una reforma planetaria de las mentalidades, la cual debe ser la labor de la educacin del futuro. En este caso coinciden con los modelos mentales de Senge y con las visiones del mundo de Habermas, que son la mgica, mtica, metafsica, religiosa, filosfica, cientfica y esttica. 7. LA TICA DEL GNERO HUMANO: Toda concepcin del gnero humano significa desarrollo conjunto de las autonomas individuales, de las participaciones comunitarias y del sentido de pertenencia a la especie humana. Una tica propiamente humana, es decir una antropo-tica que incluya el bucle individuo-sociedadespecie, y que supone la decisin consciente de: asumir la condicin humana individuo-sociedad-especie en la complejidad de nuestro ser, lograr la humanidad en nosotros mismos en nuestra conciencia personal, asumir el destino humano en sus antinomias y plenitud, trabajar para la humanizacin de la humanidad, efectuar el doble pilotaje del planeta: obedecer a la vida y guiar la vida, lograr la unidad planetaria en la diversidad, respetar en el otro, a la vez, tanto la diferencia como la identidad consigo mismo, desarrollar la tica de la solidaridad, desarrollar la tica de la comprensin, ensear la tica del gnero humano lograr la humanidad como conciencia y ciudadana planetaria, apostar por una conciencia individual ms all de la individualidad
El bucle individuo-sociedad: ensear la democracia: Los ciudadanos producen la democracia que produce los ciudadanos. Es preciso superar los regmenes que colonizan el mundo de la vida de los individuos y evitar que ello ocurra en todos los planos de la accin. Democracia y complejidad: La democracia necesita diversidades y antagonismos, al mismo tiempo que consenso (vuelta a los postulados de Habermas). La democracia supone y alimenta la diversidad de los intereses, as como la diversidad de ideas, pues necesita tanto conflictos de ideas como de opiniones que le den vitalidad y productividad. La democracia exige a la vez consenso, diversidad y conflicto, al igual que la expresin del bucle de ideales libertad-igualdad-fraternidad. La dialgica democrtica: En la democracia dialogan y se complementan trminos antagnicos, como consenso-conflicto, normas y libertad, etc. El futuro de la democracia: Cuanto ms tcnica se vuelve la poltica, ms retrocede la competencia democrtica, en la mquina donde ciencia, tcnica y burocracia estn ntimamente asociadas y reinan los expertos en todos los campos (nueva mencin de Habermas). La reduccin de lo poltico a lo tcnico y a lo econmico y de ste al crecimiento, la prdida de los referentes y los horizontes.
La regeneracin democrtica supone la regeneracin del civismo, de la solidaridad y la responsabilidad, hacia el desarrollo de la antropo-tica. En los escenarios educativos, la clase debe ser el lugar de aprendizaje del debate argumentado, (Habermas) de las reglas necesarias para la discusin, (Senge) de la toma de conciencia de las necesidades y de los procesos de comprensin del pensamiento de los dems. (Freire) El bucle individuo-especie: ensear la ciudadana terrestre: Terencio deca: soy humano, nada de lo que es humano me es extrao. Kant deca que la finitud geogrfica de nuestra tierra impone a sus habitantes un principio de hospitalidad universal, y el destino comn tterrestre nos impone de manera vital la solidaridad. La humanidad como destino planetario: El individuo y la especie conforman la humanidad, que se ha vuelto un destino comn y tiene que ser un imperativo tico. Los retos que vienen son salvar a la humanidad en tanto se realiza, mediante una poltica del hombre, una poltica de civilizacin, una reforma del pensamiento en la Tierra-Patria; el desarrollo de la relacin individuo-sociedad en el sentido democrtico, y el desarrollo de la relacin individuo-especie en el sentido de la realizacin de la humanidad. El camino se hace al andar, deca Machado. Debemos re-emprender los senderos de la hominizacin en humanizacin, va de ascenso a la ciudadana terrestre.