Teoria Derecho
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negativa de la pena.
Por medio de este concepto negativo de pena, Zaffaroni sustenta lo
que llama "teoría agnóstica de la pena", es decir, una teoría que
asume desconocer la función de la pena, ya que niega su capacidad
de solucionar conflictos o de prevenirlos.
Es aquella que, como primer paso se debe hablar sobre la teoría del delito comprometida
con la realidad del sistema penal, asume abiertamente las siguientes premisas:
(d) es incapaz de cumplir con las funciones manifiestas atribuidas a ella por el discurso
oficial; más allá de esto, sustenta la necesidad de:
(e) ampliar lo que se entiende por pena por medio de un concepto negativo (por
exclusión),
(g) tomar en cuenta la existencia de un "sistema penal subterráneo" (que actúa mediante
delitos practicados por los propios operadores de las agencias del sistema penal).
Mendieta Gonzalez Miriam Iran
Teoría Agnóstica de la Pena
En verdad, la pena y el sistema penal son incapaces de solucionar conflictos: apenas tienen la
función de suspenderlos temporariamente. Esto se da, ya desde el inicio, por el hecho de que, al
contrario de los modelos sancionatorios de la reparación o restitución, el sistema penal expropia
de la víctima su conflicto por medio de la confiscación de su legitimidad activa procesal por parte
del soberano o del Estado. Así, Zaffaroni propone un concepto negativo y agnóstico de la pena:
"(a) una coerción, (b) que impone una privación de derechos o un dolor, (c) que no repara ni
restituye, (d) ni tampoco detiene lesiones en curso o neutraliza peligros inminentes"
A) El Reparador
B) El Conciliador
C) El Coercitivo
D) El Terapéutico
E) El Punitivo.
Su mentor, Eugenio Raúl Zaffaroni, parte de la concepción que ”en toda sociedad existen
relaciones de poder que intervienen en la solución de conflictos. Toda sociedad o cultura
tolera que en la mayoría de los conflictos no intervenga el poder formalizado o, mejor
dicho ninguna sociedad admite que en todos los conflictos intervenga ese poder
Zaffaroni plantea que la multiplicidad de funciones de la pena (en definitiva no se sabe cuál es su función) hace
imposible su definición en forma positiva, por esto expone un concepto negativo de ella (la pena no sirve para nada),
obtenido por exclusión y confesando la imposibilidad de agotar el conocimiento de sus funciones (agnóstico).
La pena no sirve para, la cárcel no sirve para nada. Es inútil intentar justificarla todas las teorías que lo intentaron
fracasaron. ¿Por qué? Por que la pena no es un bien para nadie, ni para el reo, ni para la sociedad. El solo hecho de
pensar que encerrando una persona en una habitación mugrienta y pequeña, con riesgos de contraer
enfermedades, de ser violado, de que lo maten, sin poder ver a su familia y sin poder trabajar, se está haciendo un
bien a la persona que delinquió o se está haciendo un bien a la sociedad, es un disparate.
La pena “es un hecho de los tantos que demuestran la irracionalidad de la sociedad moderna”
El poder punitivo estatal es violencia directa e indirecta por parte de un estado hacia sus
ciudadanos cuya legitimidad no puede ser justificada totalmente ya que importa una respuesta
irracional frente a los conflictos sociales. La pena, entendida como privación de la libertad
ambulatoria no puede ser la solución para que la sociedad mejore, se extirpen los problemas de
violencia y conviva en paz.