Módulo 2 Gianluca Rotandaro
Módulo 2 Gianluca Rotandaro
Módulo 2 Gianluca Rotandaro
ANTIGUA
Facultad de negocios
Gianluca Rotandaro
8-1018-1324
La dimensión política del desarrollo es un concepto que se refiere a la forma en que los
gobiernos y los actores políticos influyen en la dirección y la implementación de la
política de desarrollo en un país. Esto incluye el análisis de los procesos y mecanismos
de toma de decisiones, la formulación de objetivos de desarrollo, la asignación de
recursos para el desarrollo, la implementación de políticas y programas, así como la
evaluación de su impacto sobre la población. La dimensión política del desarrollo
abarca tanto el contexto nacional como los factores internacionales que influyen en el
proceso de desarrollo. Estos factores incluyen la globalización, la influencia de los
organismos internacionales de desarrollo, la acción de los actores no gubernamentales
y la movilización de recursos financieros. La dimensión política del desarrollo es un
tema importante para los países en desarrollo, ya que los gobiernos deben entender y
aprovechar los factores políticos para promover el desarrollo. Por lo tanto, el análisis de
la dimensión política del desarrollo se ha convertido en una parte importante del campo
de estudio de las ciencias sociales.
Resumen
Latinoamérica se encuentra inmersa en una profunda y larga crisis que afecta todas
sus dimensiones, tanto económica como ética, política, social y cultural. Esta crisis está
caracterizada por la desigual distribución de la riqueza, la marginalización y
descriminalización de grandes sectores de la población, la agresión a la identidad
cultural, la pérdida de valores morales e humanos y el vacío de pensamientos y
propuestas de los dirigentes. Esto se debe en gran parte a la implantación de la idea
del mercado auto regulador, como propone el Consenso de Washington. Esto ha
provocado una mayor vulnerabilidad económica, mayor pobreza y desilusiones,
frustraciones y exasperaciones entre los latinoamericanos. Por lo tanto, se requiere una
política que haga posible el bien común y que se enfoque en la reducción de las
desigualdades existentes.
De ahí la necesidad de contar con una ética de la responsabilidad para asegurar la
consolidación de la democracia, la plena vigencia de la libertad y el respeto inequívoco
de los derechos humanos. Por ello, la construcción de una Comunidad
Latinoamericana de Naciones, debe partir de la afirmación de los principios
democráticos, respeto a los derechos humanos, estado de derecho, autonomía y
división de poderes y la participación del pueblo socialmente organizado, para
garantizar el desarrollo de los pueblos latinoamericanos.
La democracia como proceso de construcción de una nueva sociedad, una sociedad
mas justa, mas solidaria, donde todas y todos tengamos iguales oportunidades, no solo
se refleje en elecciones cada cierto tiempo, sino que sea una verdadera actitud de
compromiso ciudadano, de solidaridad, de respeto a la dignidad de la persona humana
y de la persona como individuo y como miembro de la comunidad. La democracia no
solo debe ser entendida como un sistema electoral, sino como un proceso de
construcción de una nueva sociedad, una sociedad mas justa, mas solidaria, donde
todas y todos tengamos iguales oportunidades. No solo se refleje en elecciones cada
cierto tiempo, sino que sea una verdadera actitud de compromiso ciudadano, de
solidaridad, de respeto a la dignidad de la persona humana y de la persona como
individuo y como miembro de la comunidad.
la relación entre los medios de comunicación y el sector político es definitivamente una
de las materias pendientes en el ámbito de la democracia contemporánea. Es
necesario reconocer y aceptar que los medios masivos de comunicación tienen una
influencia decisiva en la formación de opinión, y por ende, en el buen o mal desempeño
de la actividad política. Los medios de comunicación masivos tienen una gran influencia
en el desempeño de la actividad política, lo que plantea la necesidad de una relación
equilibrada entre los medios y el sector político. Existen varios problemas que deben
ser abordados, como la democracia interna de los partidos y movimientos políticos, el
financiamiento de la actividad política y la relación entre los medios de comunicación y
el sector político.
La crisis de la democracia representativa, el descontento con los partidos tradicionales
y el aumento de los movimientos sociales, nos obliga a abrir los espacios de
participación y de construcción de la democracia desde abajo, desde las bases. Esto
exige una profunda reformulación de la democracia representativa, que atienda a la
pluralidad de actores y que construya los nexos de corresponsabilidad entre las
diversas instancias y niveles de la sociedad.
Se requiere una democratización real que consolide estos procesos participativos y los
derechos humanos, para lograr una verdadera democracia, respetuosa de los
principios de justicia, igualdad y equidad. Esta democracia debe garantizar una
democracia real, en la que los derechos humanos sean plenamente respetados y los
procesos de participación ciudadana sean inclusivos y abiertos.
Las organizaciones de jóvenes, los movimientos para la defensa de los niños, de la
cultura popular, de la defensa del medio ambiente, de los consumidores y usuarios, de
los que viven en las poblaciones marginales, los que laboran en la economía informal,
las personas con limitaciones físicas, los jubilados y pensionados, son parte de los
movimientos sociales que surgen por doquier. Estos movimientos, junto con
experiencias internacionales como el Foro Social Mundial, están generando un clima de
posibles alianzas que permiten configurar alternativas al pensamiento neoclásico,
generando condiciones esperanzadoras para impulsar nuevas posibilidades para una
democracia real, otros modelos de desarrollo y una efectiva integración regional.
II Parte: Acuerdos
Párrafo 311
Pienso que el Estado debe ser un ente que se preocupe por el bien común de la
sociedad. Debe estar comprometido con la promoción y defensa de los derechos
humanos y del medio ambiente, así como con el desarrollo de la ciencia y la tecnología.
El Estado debe ser una fuerza de bien para la sociedad, tratando de llevar una vida
mejor para todos. Debe generar políticas públicas eficaces que tengan en cuenta los
intereses de todos, sin discriminación de ningún tipo. El Estado también debe estar
comprometido con la desburocratización, la simplificación y la transparencia en la
administración pública. Al mismo tiempo, debe garantizar el control de la gestión de la
administración pública.
Estoy de acuerdo ya que esto se logra mediante la creación de organismos de control,
como la Contraloría General de la República, también ayuda a garantizar que el Estado
funcione de manera correcta, para que los ciudadanos reciban los servicios que se les
deben. Esto también ayuda a eliminar la corrupción en el Estado.
1. La democracia en América Latina ha tenido una historia turbulenta, con avances y ret
rocesos a lo largo de los años. Actualmente, la región ha experimentado un incremento
en los niveles de democracia, aunque todavía hay mucho trabajo por hacer. La democr
acia en América Latina se enfrenta a una serie de desafíos, como la corrupción, la viole
ncia política, la desigualdad y la falta de participación ciudadana. No obstante, hay sign
os alentadores de progreso. La región ha visto un aumento en la libertad de expresión,
el fortalecimiento de la rendición de cuentas y la participación de la sociedad civil en el
gobierno. La democracia en América Latina aún no ha alcanzado su potencial pleno, pe
ro las señales de progreso son alentadoras.
2. El descontento con el establecimiento político,
la falta de recursos para garantizar la estabilidad política,
la influencia de los grupos de poder y el aumento de la desigualdad social
3. El futuro de la democracia en América Latina se ve optimista, a pesar de los desafíos
y preocupaciones que surgen de los recientes resultados electorales. En Chile, el triunf
o de Sebastián Piñera representa una importante victoria para la democracia, ya que lo
s ciudadanos han elegido una dirección para el país a través de una elección libre y jus
ta. En Colombia, la elección de Iván Duque como presidente también representa una i
mportante victoria para la democracia, ya que los ciudadanos han optado por el lideraz
go de un candidato que ofrece una nueva perspectiva en relación a la economía y la se
guridad del país. Finalmente, en Brasil, la elección de Jair Bolsonaro como presidente
muestra que los ciudadanos están cansados de la corrupción y el mal gobierno en el pa
ís. Estos resultados electorales demuestran que la democracia sigue siendo una fuerza
fuerte en América Latina y que los ciudadanos están dispuestos a tomar decisiones info
rmadas para el bienestar de sus países.
4. Los acontecimientos políticos de 2022 en Bolivia, Ecuador, Panamá y el ataque a los
poderes del Estado en Brasil reflejan una profunda desconfianza en las instituciones de
los Estados y en la forma en que estos gobiernos han abordado los problemas sociales
. Esto se ha manifestado en protestas y manifestaciones masivas que han exigido un c
ambio en la forma en que el gobierno aborda los problemas sociales, la corrupción y el
abuso de poder. Estas manifestaciones han demostrado que hay una gran cantidad de
personas que están descontentas con el status quo y que quieren cambios profundos.
Esto indica una necesidad urgente de que los gobiernos reconozcan estas demandas y
se comprometan a trabajar en la dirección correcta para abordar los problemas que enf
rentan los ciudadanos.
5. Desde mi punto de vista, sí, la democracia en América Latina está en riesgo. En los
últimos años, hemos visto un aumento de la polarización política, el aumento de la viole
ncia, el aumento de la corrupción y un deterioro de la gobernanza. Si los países de Am
érica Latina quieren salvar la democracia, deben implementar mecanismos que asegur
en la igualdad de derechos, la justicia y la transparencia. Por ejemplo, los gobiernos de
berían trabajar para fortalecer los sistemas de justicia y garantizar el acceso de todos lo
s grupos a los medios de comunicación, así como para promover la participación ciuda
dana y el debate. Además, los gobiernos deben garantizar el respeto a los derechos hu
manos y a la libertad de expresión
CONCLUSIÓN
En conclusión, la dimensión política del desarrollo es un factor fundamental para lograr
un desarrollo sostenible y equitativo. Es vital que los gobiernos apoyen el desarrollo y la
inclusión social a través del uso de políticas que promuevan la participación ciudadana,
la creación de empleo, la igualdad de oportunidades y el acceso a servicios básicos.
También es importante que los gobiernos se comprometan a promover la justicia social
y la responsabilidad de la ciudadanía. Esta dimensión política del desarrollo es una
parte esencial para el logro de los Objetivos de Desarrollo Sostenible de las Naciones
Unidas.