Crites para Diseñar en Maracaibo
Crites para Diseñar en Maracaibo
Crites para Diseñar en Maracaibo
Facultad de Ingeniería
Escuela de Arquitectura
Alumno:
Marianliz Gómez
C.i: 29.877.110
MARACAIBO, JULIO 2020
INTRODUCCIÓ N
En una ciudad como Maracaibo, con una radiación solar alta, una temperatura promedio anual
que oscila entre 22°C y los 37°C, una humedad relativa del 80%, las características y
particularidades del desarrollo urbano y las condiciones locales del soleamiento y ventilación
exterior impactan al momento de diseñar una obra arquitectónica. El clima del trópico, cálido-
húmedo, como es el caso de esta ciudad, se caracteriza por promedios anuales de temperatura
entre 20 y 30°C y humedad relativa superior a 55%.
Debido a estas condiciones climáticas, los factores de soleamiento, sombras, iluminación natural y
movimiento del aire, constituyen variables relevantes de la calidad climática del espacio urbano.
Enmarcado en estas consideraciones, el propósito del trabajo es presentar los criterios de diseño
para la arquitectura de Maracaibo según su clima.
Desarrollo
Temperatura
En el ambiente exterior tanto la radiación solar como la temperatura del aire obedecen a ciclos de
24 horas que se repiten constantemente. En el exterior, la temperatura del aire y de las superficies
externas de la envolvente de la edificación se encuentra a su nivel mínimo antes del amanecer. A
medida que el sol se eleva en el cielo la temperatura del aire exterior aumenta hasta que alcanza
su valor máximo, y al mismo tiempo se almacena en la envolvente un flujo de calor originado por
la radiación solar recibida en forma directa, difusa o reflejada.
La envolvente almacena calor en mayor o menor medida y luego lo transmite al interior; este
proceso está vinculado al concepto de masa térmica o inercia térmica de una edificación, el cual se
refiere a la característica que tiene la edificación en su conjunto de amortiguar el calor que incide
sobre ella y transmitirlo al interior con retardo
Techos
A través del techo puede penetrar gran cantidad de calor a los ambientes interiores. Debido a su
posición recibe radiación solar en cualquier época del año y en forma perpendicular recibe
durante una buena parte del día en el caso de techos planos, por lo cual puede alcanzar
temperaturas superficiales exteriores de hasta 65 ºC cuando la temperatura exterior del aire, a la
sombra, es de sólo 27 ºC. El techo es la mayor fuente de calor en el caso de edificaciones de baja
altura, pues la radiación solar que recibe puede alcanzar hasta un tercio (1/3) de las ganancias de
calor de una casa y provocar altas temperaturas en el interior.
Debe prestarse una gran atención al diseño y materiales del techo para garantizar el confort
térmico de los ambientes interiores y reducir el consumo de electricidad en el caso de
acondicionamiento activo.
En Maracaibo los aleros de techo, pérgolas y corredores perimetrales son una solución apropiada
para minimizar las ganancias solares sobre paredes y ventanas; también se puede producir un
juego de volúmenes techando los espacios a diferentes alturas, de forma tal que arrojen sombra
propia. Los colores claros en el techo pueden reflejar entre 25% y 30% de la energía radiante del
sol. Las superficies claras, lisas y brillantes suelen tener reflectancia elevada en relación a la
superficie blanca teórica de perfecta reflectancia, la cual absorbe 0% y refleja el 100% de la
radiación.
Paredes
En cuanto a paredes, estas también están expuestas a altos niveles de radiación solar, con mayor
influencia en el caso de edificaciones de gran altura. Las fachadas este y oeste pueden tener
ganancias de calor de hasta 3000 w/m2 /día, al percibir en forma perpendicular los rayos solares
durante una buena parte del día. Parte de la ganancia de calor es absorbida por los componentes
opacos irradiada a los ambientes interiores.
Las técnicas que se utilizan para controlar el acceso de calor a través de las paredes deben darle
prioridad a la orientación, a los elementos de protección solar y a los materiales constructivos.
Estas acciones concebidas en forma coherente podrán garantizar una buena calidad térmica en el
caso de acondicionamiento pasivo, y un uso racional de la energía cuando se empleen sistemas de
aire acondicionado.
Aberturas
Las ventanas y otras aberturas ofrecen vista al paisaje y permiten el paso de luz y ventilación
natural. En contraposición, la luz solar con entrada directa a través de las ventanas puede
representar una alta ganancia de calor hacia el interior de los ambientes. Esto puede significar más
de la mitad de las cargas de energía de enfriamiento en una edificación con aire acondicionado. En
el caso de acondicionamiento pasivo, para aprovechar la ventilación natural es importante una
alta permeabilidad en las fachadas y en los cerramientos interiores.
La estratégica ubicación y tamaños de ventanas y/o aberturas estimularan la circulación y
renovación del aire. Tomando en cuenta que el sol sale por el este y se oculta por el oeste, y que
los vientos van en dirección noreste, las aberturas de la edificación serán en dirección norte-sur.
Iluminació n Natural
El sol es la fuente natural de la iluminación diurna, y su efecto depende de la localidad geográfica.
Es así como las características lumínicas del cielo están determinadas por la latitud, la altitud y las
condiciones climáticas de cada región. Un adecuado uso de la luz natural requiere un
conocimiento básico de sus propiedades fundamentales, de transmisión y reflexión. Al momento
de diseñar en Maracaibo, debido a tan altas temperaturas, se busca mitigar la radiación solar.
Materiales y colores de una alta transmitancia y/o reflectancia son factores de diseño
determinante para el aprovechamiento de la iluminación natural y para racionalizar el consumo de
energía. La propiedad de reflexión de los espejos permite su utilización práctica en la arquitectura
para la conducción o redistribución de la luz natural, como en el caso de los duetos de iluminación
y bandejas solares. Una estrategia adecuada para el aprovechamiento controlado de la luz natural
debe estar basada en las siguientes recomendaciones:
• Orientación y protección de las ventanas y otras aberturas, con parasoles, aleros, cortinas,
persianas u otro medio de bloqueo de las ganancias solares.
• Empleo de superficies reflectantes para reorientar la luz, y dotar los ambientes de mayor y
mejor iluminación natural.
• Ubicación y tamaños adecuados de las ventanas y otras aberturas en función del uso y
proporciones volumétricas del ambiente.