Analisis de Frutas
Analisis de Frutas
Analisis de Frutas
Ingresos y empleo. Las frutas y verduras suelen valer más por kilo que otros tipos
de alimentos (los productos animales son una excepción). Sin embargo,
también pueden requerir más mano de obra que muchos otros tipos de
alimentos. Esto ofrece oportunidades para que los actores de toda la cadena
generen empleo e ingresos.
Género y juventud. Las mujeres producen gran parte de los productos frescos
del mundo, y habitualmente son responsables de la cosecha, la
comercialización y el procesamiento. Como consumidoras, a menudo eligen qué
artículos comprar y cómo cocinarlos. Pero las mujeres se enfrentan a
desventajas en todas las etapas de la cadena: como productoras en su
capacidad para acceder a la tierra, los insumos y el asesoramiento, como
empresarias en la obtención de financiación para desarrollar sus negocios,
como trabajadoras en lo que respecta al pago justo por su trabajo y como
consumidoras en lo que respecta a la educación sobre alimentación y nutrición.
El alto valor de las frutas y verduras y el potencial de innovación abren
interesantes oportunidades para que los jóvenes participen en la producción y
en otros aspectos de la cadena de valor.
Se excluyen:
Las frutas y verduras mínimamente procesadas son aquellas que han sido
sometidas a procedimientos como lavado, clasificación, recorte, pelado, corte o
picado que no afectan su calidad de frescura (Gil y Kader, 2008). Los alimentos
mínimamente procesados conservan la mayoría de sus propiedades físicas,
químicas, sensoriales y nutricionales inherentes. Muchos alimentos
mínimamente procesados son tan nutritivos como los alimentos en su forma no
procesada (Parrish, 2014). Entre los ejemplos se incluyen las frutas en rodajas,
las frutas en bolsas, las ensaladas de verduras y las frutas y verduras
congeladas y secas.
Fresco vs procesado
A diferencia de la mayoría de las demás categorías de alimentos, las frutas se
comen normalmente crudas (no cocidas): ya seas enteras (bayas) o después de
pelarlas (naranjas, plátanos, papayas y mangostas). Muchos tipos de verduras
también se comen a menudo crudas, como las ensaladas. Algunas (como las
judías o frijoles verdes) deben cocinarse antes de comerlas.