Unidad 2
Unidad 2
Unidad 2
Los puntos se colocan en los cuatro lados del símbolo atómico: arriba, abajo, a
la izquierda y a la derecha. Cada lado puede dar cabida a dos electrones como
máximo. Los cuatro lados del símbolo son equivalentes; la colocación de dos
electrones en un lado o de uno a cada lado es arbitraria.
La regla del octeto
Los átomos con frecuencia ganan, pierden o comparten electrones tratando de
alcanzar el mismo número de electrones que los gases nobles más cercanos a
ellos en la tabla periódica. Los gases nobles tienen acomodos de electrones
muy estables, como revelan sus altas energías de ionización (o sea, se
necesita mucha energía para sacarle un electrón), su baja afinidad por
electrones adicionales y su falta general de reactividad química.
Puesto que todos los gases nobles (con excepción del He) tienen ocho
electrones de valencia, muchos átomos que sufren reacciones, también
terminan con ocho electrones de valencia. Esta observación ha dado lugar a
una pauta conocida como regla del octeto: los átomos tienden a ganar,
perder o compartir electrones hasta estar rodeados por ocho electrones
de valencia.
En términos de símbolos de Lewis, un octeto puede visualizarse como cuatro
pares de electrones de valencia dispuestos alrededor del átomo. Hay muchas
excepciones a la regla del octeto, pero ofrece un marco de referencia útil para
introducir muchos conceptos de enlaces importantes.
Enlaces iónicos
Es un tipo de unión química entre átomos, donde uno de ellos transfiere
un electrón al otro. Este enlace se establece normalmente entre metales y no
metales con diferente electronegatividad. Por lo general, el metal cede sus
electrones al elemento no metal.
Este tipo de enlace se produce por la atracción de iones con cargas opuestas.
Al ceder o aceptar los electrones de valencia, los iones cumplen con la regla
del octeto y, por lo tanto, son más estables. Los electrones de valencia son los
electrones de la capa más externa del átomo, que pueden participar en los
enlaces químicos.
Características del enlace iónico
• Se establece entre iones con carga positiva (cationes) e iones con carga
negativa (aniones).
• Se establece entre átomos con diferencias de electronegatividad
grandes.
• Se produce una transferencia de electrones.
• Generalmente se encuentra formando las sales.
¿Cómo se forma un enlace iónico?
Un átomo que cede uno o más electrones se transforma en un ion cargado
positivamente o catión. Ejemplos de cationes son el catión sodio Na+, el catión
calcio Ca2+ y el catión aluminio Al3+. La capacidad de ceder electrones es
característica de los metales.
Cuando un átomo acepta uno o más electrones se transforma en un ion
cargado negativamente o anión. Ejemplos de aniones son el anión cloro o
cloruro Cl-, el anión azufre o sulfuro S2- y el anión fosfato PO43-.
Cuando iones con cargas opuestas entran en contacto, se produce
una atracción electrostática y se forma el enlace iónico. Por ejemplo, el catión
sodio Na+ forma un enlace iónico con el anión fluoruro F- y forman el fluoruro de
sodio NaF.
Enlaces covalentes
Para la clase tan amplia de sustancias que no se comportan como sustancias
iónicas necesitamos un modelo diferente para el enlace entre los átomos. G. N.
Lewis razonó que un no metal podría adquirir una configuración electrónica de
gas noble compartiendo electrones con otro no metal.
Propiedades de los compuestos moleculares (covalentes)
En condiciones normales, los compuestos moleculares suelen existir como
gases, líquidos de bajo punto de ebullición y sólidos de bajo punto de fusión,
aunque existen muchas excepciones importantes.
Estructuras de Lewis: ¿cómo dibujarlas?
Podemos representar la formación de enlaces covalentes utilizando símbolos
de Lewis para mostrar los átomos constituyentes. La formación de la molécula
de H2 a partir de dos átomos de H se puede representar así:
Veamos un ejemplo:
Sabemos que el cloruro de potasio está formado por potasio y cloro. El cloro
tiene preferencia sobre el potasio luego se escribe a la derecha en la fórmula.
El potasio es un metal con número de oxidación +I. El cloro tiene varios
números de oxidación, pero en las combinaciones con los metales (que solo
tienen números de oxidación positivos) debe actuar con un número de
oxidación negativo y el único que tiene es -I. Como el compuesto formado es
neutro, la suma de los números de oxidación debe ser cero:
0 = x (1) + y (-1)
La solución más sencilla es x = 1 ; y = 1
La fórmula del cloruro de potasio es KCl
Propiedades de los metales y modelo de unión metálica
• Tienen un brillo característico.
• Producen al tacto una sensación fría característica relacionada con su
gran conductividad térmica.
• Son muy buenos conductores de la electricidad; la corriente eléctrica
fluye con facilidad a través de ellos. El flujo de corriente se lleva a cabo
sin que los átomos se desplacen dentro de la estructura metálica y se
debe al flujo de electrones en el interior del metal.
• La conductividad térmica de un metal es paralela a su conductividad
eléctrica. Por ejemplo, la plata y el cobre, que poseen las
conductividades eléctricas más grandes entre los elementos, también
presentan las máximas conductividades térmicas.
• Casi todos los metales son maleables, lo que significa que se pueden
martillar para formar hojas delgadas, y dúctiles, es decir, se pueden
estirar para formar alambres.
Estas propiedades indican que los átomos son capaces de deslizarse unos con
respecto a otros. Ni los sólidos iónicos ni los cristales de la mayoría de los
compuestos covalentes presentan un comportamiento de esta índole.
Típicamente, los sólidos de estos tipos son quebradizos y se fracturan con
facilidad.
En su mayoría, los metales forman estructuras sólidas en las que los átomos
están dispuestos en forma de esferas empaquetadas de forma compacta.
Modelo de mar de electrones del enlace metálico
Un modelo muy sencillo que explica algunas de las características más
importantes de los metales es el modelo de mar de electrones. En este modelo
se representa el metal como una formación de cationes metálicos en un
“mar” de electrones de valencia.
Los electrones están confinados al metal por efecto de las atracciones
electrostáticas hacia los cationes, y se encuentran distribuidos de modo
uniforme por toda la estructura. Sin embargo, los electrones son móviles, y
ningún electrón individual está confinado a algún ion metálico en particular.
Cuando se conecta un alambre metálico a los polos de una batería, los
electrones fluyen a través del metal hacia el polo positivo y entran en el metal
desde la batería por el polo negativo. La gran conductividad térmica de los
metales también se explica en función de la movilidad de los electrones, la cual
permite que se transfiera con facilidad la energía cinética por todo el sólido. La
capacidad de deformación de los metales (su maleabilidad y ductilidad) se
explica por el hecho de que los átomos metálicos forman enlaces con muchos
vecinos. Una redistribución de los electrones permite que el metal se adapte a
los cambios de posición de los átomos, resultado de la nueva forma del metal.
Sin embargo, el modelo de mar de electrones no explica satisfactoriamente
todas las propiedades. Según el modelo, por ejemplo, la fortaleza de los
enlaces entre átomos metálicos debería aumentar con el número de electrones
de valencia, lo que daría por resultado una elevación correspondiente de los
puntos de fusión. Los metales del grupo 6B (Cr, Mo, W), tienen los puntos de
fusión más altos de sus respectivos periodos. Los puntos de fusión a uno y otro
lado del centro de los metales de transición son más bajos; esto implica que la
fortaleza del enlace metálico aumenta primero con el número de electrones y
luego disminuye. Se observan tendencias semejantes en otras propiedades
físicas de los metales, como el calor de fusión, la dureza y el punto de
ebullición.