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CONFLICTOS

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CONFLICTO ENTRE UCRANIA Y RUSIA

Autor: Jonathan Guaraca.

El trágico conflicto entre Rusia y Ucrania comenzó en 2014, después de la anexión de Crimea por

parte de Rusia y la posterior depresión en el este de Ucrania. La anexión de Crimea fue el resultado de

un controvertido referéndum en el que la mayoría de los votantes de Crimea decidieron unirse a Rusia,

lo que fue condenado por la comunidad internacional y fue visto como una violación de la soberanía de

Ucrania.

El conflicto en el este de Ucrania, conocido como la guerra en el Donbás, involucra a grupos

separatistas prorrusos que luchan contra las fuerzas ucranianas en las regiones de Donetsk y Luhansk. Se

cree que Rusia ha brindado apoyo militar, financiero y logístico a los separatistas, aunque Rusia niega su

participación directa en el conflicto.

La mañana del 24 de febrero de 2022 todos los medios de comunicación se hicieron eco de la

invasión rusa de su país vecino. El presidente de Rusia, Vladimir Putin, ordenó a sus tropas bombardear

e invadir Ucrania en lo que suponía la primera gran agresión de este tipo en Europa desde el desenlace

de la Segunda Guerra Mundial en 1945 y el fin de la dictadura de los nazis en Alemania.

Este conflicto es uno de los eventos geopolíticos más significativos del siglo XXI. Aunque sus

raíces históricas son profundas, el conflicto se intensificó en la última década, llevando a

enfrentamientos armados y tensiones regionales. Exploramos las causas subyacentes del conflicto, su

evolución a lo largo del tiempo y el impacto que ha tenido en la región.


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I. Antecedentes históricos:

Para comprender las razones detrás del conflicto entre Rusia y Ucrania, es crucial mirar hacia su

historia compartida. Ucrania ha sido históricamente un territorio disputado entre Rusia y otros poderes

regionales. La anexión de Crimea por parte de Rusia en 1783 marcó el inicio de una presencia rusa más

sólida en la península y en la región del Mar Negro.

Durante el siglo XIX y principios del XX, Ucrania buscó la independencia nacional, pero sus

esfuerzos se vieron obstaculizados por las guerras y los cambios en el poder en Rusia. La Revolución

Rusa de 1917 y la posterior formación de la Unión Soviética llevaron a la incorporación de Ucrania como

una república soviética, lo que profundizó su dependencia de Moscú.

II. El colapso de la Unión Soviética:

El conflicto entre Rusia y Ucrania se agudizó con el colapso de la Unión Soviética en 1991.

Ucrania declaró su independencia y se convirtió en un estado soberano. Sin embargo, la herencia

soviética dejó profundas divisiones étnicas y culturales dentro del país. La población ucraniana orientada

hacia el oeste buscaba una mayor integración con Europa, mientras que la población de habla rusa,

especialmente en el este y Crimea, tiene vínculos más fuertes con Rusia.

III. La crisis de Crimea y el este de Ucrania:

En 2014, la tensión alcanzó su punto máximo cuando Rusia anexó oficialmente Crimea después

de un referéndum polémico. La comunidad internacional condenó esta acción, considerándola una

violación del derecho internacional y de la soberanía ucraniana. Además, estallaron conflictos armados
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en las regiones orientales de Donetsk y Lugansk, donde grupos separatistas respaldados por Rusia

buscaron la independencia y autonomía de Ucrania.

IV. Motivaciones y disputas territoriales:

Existen varias motivaciones detrás de la postura de Rusia en el conflicto. En primer lugar, Crimea

es de gran importancia estratégica para Rusia debido a su ubicación en el Mar Negro y su acceso al

Mediterráneo. Además, la población de habla rusa en Ucrania es considerada por Rusia como una

comunidad étnica y culturalmente vinculada, lo que justifica su intervención en proteger sus intereses.

V. El impacto en la región:

El conflicto ha tenido un impacto devastador en la región. En primer lugar, ha generado una

crisis humanitaria con millas de muertos y desplazados internos. Las economías tanto de Rusia como de

Ucrania han sido afectadas negativamente debido a la inestabilidad y las sanciones internacionales

impuestas a Rusia por su anexión de Crimea y su apoyo a los separatistas.

Además, el conflicto ha tensado las relaciones entre Rusia y otros países, especialmente

aquellos en Europa y la OTAN. La anexión de Crimea llevó a la imposición de sanciones económicas a

Rusia, exacerbando aún más la situación.


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Conclusión

El conflicto entre Rusia y Ucrania tiene profundas raíces históricas y políticas, y ha generado

tensiones significativas en la región, en el cual tiene una combinación de varios conflictos por parte de

intereses, valores, roles e información.

A medida que el conflicto continúa evolucionando, es imperativo que las partes involucradas

busquen soluciones pacíficas y diplomáticas para alcanzar una estabilidad duradera en la región, ya que

esta problemática a llegado a una escala de conflicto en una crisis, por la violencia y muerte de

habitantes de ambas partes.

El impacto humano y económico de este conflicto es innegable y requiere una atención urgente

por parte de la comunidad internacional para encontrar una resolución que permita una coexistencia

pacífica entre Rusia y Ucrania y así poder evitar mas muertes por parte de Rusia y Ucrania y así poder

salir de este conflicto.


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Conflicto entre Estados Unidos y China por Taiwán

Autor: Jonathan Guaraca

Introducción:

La disputa entre Estados Unidos y China por Taiwán ha sido uno de los temas más sensibles y

complejos en las relaciones internacionales durante décadas. Este conflicto involucra no solo a los dos

países principales, sino también a la región del Pacífico y el orden mundial en su conjunto. Analizaremos

las razones detrás de esta tensión histórica, explorando los antecedentes históricos, las posturas

políticas y las implicaciones estratégicas que subyacen en esta disputa.

Antecedentes Históricos:

Para entender la razón detrás del conflicto por Taiwán, es esencial remontarse a la historia.

Hasta 1949, Taiwán era parte integral de China, gobernada por el gobierno nacionalista del Kuomintang

(KMT), liderado por Chiang Kai-shek. Sin embargo, tras la derrota en la guerra civil china ante el Partido

Comunista de China (PCCh) liderado por Mao Zedong, el gobierno del KMT se exilió en Taiwán y

estableció una república separada en la isla.

Desde entonces, se ha mantenido una tensión constante entre las dos partes. China considera a

Taiwán como parte inalienable de su territorio y se ha esforzado por lograr la reunificación bajo la

política de "Una Sola China". Por otro lado, Taiwán ha desarrollado su propia identidad política y

democrática, resistiendo cualquier intento de reunificación forzada con la China continental.


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Involucramiento de Estados Unidos:

El papel de Estados Unidos en el conflicto de Taiwán ha sido una de las principales fuentes de

tensión entre China y Estados Unidos. En 1979, Estados Unidos cambió oficialmente su reconocimiento

diplomático de Taiwán a China, presentando relaciones diplomáticas con el gobierno de Beijing. Sin

embargo, Estados Unidos mantuvo relaciones informales y sólidas con Taiwán, al amparo de la Ley de

Relaciones con Taiwán, que garantiza la venta de armas a Taiwán y respalda su defensa.

Este doble juego de Estados Unidos ha sido un punto de fricción con China. Beijing ve el apoyo

continuo de Estados Unidos a Taiwán como una interferencia en sus asuntos internos y una violación de

la política de "Una Sola China". Para Estados Unidos, Taiwán ha sido un aliado estratégico en el Pacífico,

permitiéndole mantener una presencia en la región y contrarrestar la expansión china.

Implicaciones Estratégicas:

El conflicto por Taiwán no solo se centra en cuestiones de soberanía y reconocimiento

diplomático; también tiene implicaciones estratégicas significativas. Taiwán se encuentra en una

posición geográfica clave en el Estrecho de Taiwán, una ruta marítima importante que conecta el Mar de

China Oriental con el Mar de China Meridional. Controlar esta ruta es crucial para el comercio marítimo

y la proyección de poder en la región.


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Para China, la reunificación con Taiwán es vista como una cuestión de legitimidad y estabilidad

política interna. El liderazgo chino ha dejado en claro que no tolerará la independencia de Taiwán y ha

amenazado con el uso de la fuerza en caso de que la isla busque formalizar su separación.

Por otro lado, Estados Unidos tiene un interés estratégico en mantener la paz y estabilidad en la

región, ya que cualquier conflicto entre China y Taiwán podría arrastrar a la región a una confrontación

mayor y afectar la economía global.

Conclusión:

El conflicto entre Estados Unidos y China por Taiwán es una cuestión compleja que se deriva de

factores históricos, ideológicos y estratégicos. La disputa sobre la soberanía de Taiwán y las diferencias

entre los sistemas políticos y los valores de ambas naciones han llevado a tensiones significativas.

La disputa entre Estados Unidos y China por Taiwán es un problema arraigado en la historia, la

política y las implicaciones estratégicas. La política de "Una Sola China" de Beijing y el respaldo informal

pero sólido de Estados Unidos a Taiwán han llevado a una situación delicada y tensa en la región del

Pacífico.

Además, la comunidad internacional también tiene un papel crucial en fomentar el diálogo y

facilitar una solución pacífica que respete los derechos y la voluntad del pueblo de Taiwán, al tiempo

que evite una escalada de tensiones en la región, esto sería para que el grado de conflicto no escale a

una crisis, con el fin no entrar a una guerra, lo cual tendría mucha violencia y muchas muertes por

ambas parte. La búsqueda de una solución justa y sostenible para el conflicto de Taiwán un desafío

complejo, pero también es esencial para la paz y la prosperidad en el Pacífico y el mundo en general.

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