Trabajo
Trabajo
Trabajo
Peligros biomecánicos
De acuerdo a la anterior tabla definamos cada uno de los factores que pueden
generar riesgos biomecánicos, teniendo en cuenta que estos pueden estar
presente tanto en el TRABAJO EN CASA como el TRABAJO EN LA EMPRESA:
Factores de las Condiciones de Trabajo
Factores Organizacionales
Factores Ambientales
Silla ergonómica
El riesgo biomecánico se encuentra involucrado en casi todas las actividades laborales, con menor o
mayor impacto de acuerdo con la naturaleza de la tarea.
Biomecánica: La biomecánica es la disciplina que combina el estudio del cuerpo humano desde el punto
de vista de la mecánica clásica o Newtoniana, y la biología; su objetivo es el estudio del cuerpo humano
con el fin de diseñar tareas y actividades para que la mayoría de las personas puedan realizarlas sin
riesgo de sufrir daños o lesiones. La biomecánica se basa en el conjunto de conocimientos de diversas
áreas, tales como la medicina del trabajo, la fisiología, la antropología y la física. Conocer y entender los
límites físicos del cuerpo humano tienen una aplicación de gran utilidad práctica para la ergonomía, pues
sirve como guía en el diseño y la evaluación de tareas y actividades, en el diseño de estaciones de
trabajo, mobiliario, herramientas y utensilios, así como el descanso requerido, de acuerdo al tiempo y tipo
de actividad que se realiza.
Riesgo Biomecánico: Se define como la probabilidad de sufrir un evento adverso e indeseado (accidente
o enfermedad) en el trabajo y condicionado por ciertos “factores de riesgo Biomecánico” (Ministerio de
Protección Social, 2011)
Postura: se define como la relación de las diferentes partes del cuerpo en equilibrio (Keyserling, 1999).
Durante las diferentes posturas tomadas ya sea de pie, sentados o acostados, los músculos deben
ejercer ciertas fuerzas para equilibrar la postura o controlar los movimientos; incluso durante una posición
relajada cuando la contracción muscular tiende a cero, los tendones y las articulaciones pueden estar
sometidos a carga y hasta llegar a presentar fatiga, es por esto que aunque un trabajo parezca tener una
carga aparentemente baja con el tiempo puede llegar a ser extenuante.
Postura dinámica: posición del cuerpo que se modifica con los movimientos relativos de las extremidades
U otras partes del cuerpo humano, unas respecto de otras, o en relación con un objeto fijo (tal como el
puesto de trabajo)
Postura estática: adopción de una postura corporal fija en el tiempo, con contracción muscular sin
movimiento.
Postura forzada: Cuando se adoptan posturas por fuera de los ángulos de confort (Ministerio de la
Protección Social, 2008).
Postura mantenida: Cuando se adopta una postura biomecánicamente correcta por 2 o más horas
continuas sin posibilidad de cambios. Si la postura es biomecánicamente incorrecta, se considerará
mantenida cuando se mantiene por 20 minutos o más (Ministerio de la Protección Social, 2008).
Postura prolongada: Cuando se adopta la misma postura por el 75% o más de la jornada laboral (6 horas
o más) (Ministerio de la Protección Social, 2008)
El movimiento repetitivo está dado por los ciclos de trabajo cortos (ciclo menor a 30 segundos o 1 minuto)
o alta concentración de movimientos (> del 50%), que utilizan pocos músculos (Silverstein y col, 1987).
Movimiento repetido: Grupo de movimientos continuos, mantenidos durante un trabajo físico que
involucra al mismo conjunto osteomusculares, provocándole fatiga muscular, sobrecarga, dolor y/o lesión
Manipulación manual de cargas: cualquier operación de transporte o sujeción de una carga por parte de
uno o varios trabajadores, como el levantamiento, la colocación, el empuje, la tracción o el
desplazamiento, que por sus características o condiciones ergonómicas inadecuadas entrañe riesgos, en
particular dorso lumbares, para los trabajadores (Ministerio de la Protección Social, 2008)
Carga física: se define como el conjunto de requerimientos físicos a los que está sometido el trabajador
durante la jornada laboral; esta se basa en los tipos de trabajo muscular, que son el estático y el
dinámico.
La carga estática viene determinada por las posturas, mientras que la carga dinámica está determinada
por el esfuerzo muscular, los desplazamientos y el manejo de cargas Se define el trabajo estático como
aquel en que la contracción muscular es continua y mantenida. Por el contrario, en el trabajo dinámico, en
el que se suceden contracciones y relajaciones de corta duración.
Carga física dinámica: Es aquel donde suceden contracciones y relajaciones de corta duración.
Higiene postural: Consiste en aprender como adoptar posturas y realizar movimientos de la vida cotidiana
de la forma adecuada para prevenir lesiones osteomusculares.
Las posturas forzadas son más comunes en las actividades de construcción – obras civiles,
metalmecánica y mecánica, pero puede estar presente en las demás actividades económicas, por eso la
importancia de identificarlo y reconocer los factores agravantes y las medidas de intervención.
Una postura forzada se puede presentar al tener alguno o varios de los siguientes aspectos dentro de la
ejecución de una tarea:
Si se requiere mantener los brazos por encima del plano medio del cuerpo
En un espacio, reducido o limitado
Al realizar la tarea en posición inclinada, agachada, o con torción o estiramiento de segmentos
corporales
Cuando se manipulan elementos a una distancia excesiva
También podemos identificar una postura forzada por la posición del segmento corporal:
Tiempo que demore la tarea, ya que la permanencia en una postura que limita o dificulta la
circulación sanguínea puede afectar la recuperación de los tejidos y los músculos dificultando su
recuperación y generando fatiga muscular. Adicionalmente cuando hay restricción en el flujo
sanguíneo, la fatiga muscular consecuencia de la restricción, puede reducir la capacidad de reacción
ante impacto repentino y aumentar el riesgo de sufrir un accidente.
Exceso en los límites de flexión o extensión de los segmentos corporales.
Posturas antigravitacionales ya que va a demandar una mayor fuerza.
Combinación de posturas forzadas y ejecución de fuerza para la tarea.
Repetitividad del movimiento.
Exceso de fuerza o cambio brusco de posición que puede generar una lesión.
Compromiso de la columna vertebral por sobre esfuerzos o posturas reiterativas.
Medidas de prevención
Identifique el peligro, evalúelo y contrólelo: identifique las tareas que involucran posturas forzadas,
realice análisis de puestos de trabajo para valorar el riesgo de los mismos, y de acuerdo al APT
realizado defina las medidas de intervención
Trate de eliminar o reducir el riesgo presente por este peligro a través de medidas de ingeniería o
medidas de sustitución que modifiquen la tarea y no generen una postura forzada en el trabajador
Rediseñe los puestos de trabajo de forma que se ofrezca una postura cómoda y segura para el
desarrollo de la tarea
Utilice herramientas que ayuden al trabajador a mantener una postura adecuada, esto puede
involucrar el rediseño de las herramientas y equipos que se utilizan para el desarrollo de las
actividades o la adaptación de los sitios de trabajo
Forme y capacite a los trabajadores sobre la importancia de la higiene postural en el desarrollo de
sus actividades
Si no es posible acondicionar el sitio de trabajo por la diversidad de la tarea, establezca limites de
tiempo de exposición
Realice monitoreo periódico a las condiciones de salud de los trabajadores
Antes de realizar una tarea no rutinaria realice el análisis de riesgo de la actividad e implemente las
medidas de control necesarias para prevenir una afectación al trabajador
Fuente:
Cuando hablamos de movimientos repetidos hacemos referencia a todas aquellas actividades de tipo
repetitivo que implican la realización de esfuerzos o movimientos rápidos de pequeños grupos
musculares, generalmente de las extremidades superiores, agravadas por el mantenimiento de posturas
forzadas y una falta de recuperación muscular.
¿Cuáles son las principales consecuencias sobre la salud de las personas expuestas?
La mayor parte de los TME por movimientos repetitivos (como las tendinitis o el síndrome del túnel
carpiano) aparecen gradualmente, tras largos periodos de exposición a unas condiciones de trabajo
demasiado exigentes.
En los primeros estadios los TME aparecen en forma de dolor o molestias. Sus efectos suelen ser leves y
transitorios (el dolor desaparece al abandonar el trabajo). No obstante, si la situación se prolonga en el
tiempo pueden aparecer lesiones de mayor gravedad, que obligan a solicitar la baja laboral e incluso a
recibir tratamiento médico. En los casos más crónicos, el tratamiento y la recuperación suelen ser
insatisfactorios, pudiendo llegar a incapacitar a la persona para la ejecución de su trabajo.
¿Qué medidas preventivas se pueden llevar a cabo para reducir sus efectos?
En los puestos de trabajo y en las tareas en los que una evaluación de riesgos específica evidencie un
nivel de riesgo significativo por movimientos repetitivos será necesario intervenir para reducir el riesgo
hasta unos niveles aceptables.
A continuación se proponen medidas preventivas, de los tres ámbitos de intervención, ordenadas por
factor de riesgo.
Alta repetitividad
Ampliación de tareas: reestructurar el trabajo de forma que las tareas sean lo más amplias y
diversas posible, incorporando tareas adicionales, por ejemplo.
Rotación de tareas: organizar el trabajo de forma que los trabajadores varíen su actividad entre
dos o más puestos de trabajo con requerimientos físicos diferentes.
Mecanización: utilizar herramientas que ayuden a disminuir los movimientos repetitivos, como,
por ejemplo, destornilladores eléctricos.
Distribución de la fuerza entre distintos grupos musculares: repartir el esfuerzo realizado entre
diferentes grupos musculares, por ejemplo, permitiendo que el trabajo pueda realizarse con
ambas manos.
Mecanización: utilizar herramientas mecánicas para ejecutar las acciones que requieran un
esfuerzo muscular elevado.
Diseño ergonómico: diseñar los puestos de trabajo de forma que las articulaciones se
mantengan en rango articular cómodo. Por ejemplo, se debe evitar trabajar con brazos por
encima de los hombros, los alcances por detrás del cuerpo o las desviaciones de las muñecas.
Falta de recuperación
Tiempos de descanso: proporcionar tiempos de descanso suficientes que permitan la adecuada
recuperación de la musculatura sobrecargada. Estos tiempos de recuperación pueden consistir
en pausas para descansar cada cierto tiempo, o bien, en la realización de otro trabajo que
permita el descanso de las estructuras del cuerpo fatigadas durante la actividad anterior.
La manipulación manual de cargas es, según la definición del Real Decreto 487/1997, "cualquier
operación de transporte o sujeción de una carga por parte de uno o varios trabajadores, como el
levantamiento, la colocación, el empuje, la tracción o el desplazamiento, que por sus
características o condiciones ergonómicas inadecuadas entrañe riesgos, en particular
dorsolumbares, para los trabajadores".
Medidas preventivas para prevenir la fatiga y las lesiones en la manipulación manual de cargas
Es fundamental tener presentes las siguientes recomendaciones para prevenir la fatiga muscular
y evitar lesiones musculoesqueléticas:
1. La primera de las medidas es evitar la manipulación manual de cargas mediante el uso de
equipos para el manejo mecánico de las mismas, como grúas, carretillas elevadoras, etc.
2. Si no es posible evitar la manipulación manual, se deberá actuar sobre las características de
la carga para reducir el riesgo a un nivel tolerable:
El peso de las cargas debe minimizarse y no sobrepasar los 25 kg (15 kg para
trabajadores jóvenes, mujeres y mayores).
La anchura de la carga no debería superar la anchura de los hombros, la altura debería
ser inferior a 60 cm y la profundidad es conveniente que no supere los 50 cm, aunque es
preferible que no sobrepase los 35 cm.
El objeto o el recipiente donde se transporta debe disponer de asas con las dimensiones
adecuadas para poder introducir cómodamente las manos.
3. También será preciso controlar las condiciones en las que se realiza la manipulación:
Evitar el levantamiento de cargas a nivel del suelo o por encima de los hombros, por
ejemplo, mediante el uso de mesas o superficies de altura regulable.
Habilitar el espacio de trabajo suficiente que haga innecesaria la realización de giros y
torsiones del tronco.
4. Las tareas de manipulación manual de cargas deben organizarse de forma que se alternen las
operaciones de manipulación con otras tareas más ligeras, como puede ser controlar
maquinaria, cumplimentar hojas de trabajo, etc. Cuando no sea posible, se deberían intercalar
pausas para permitir la recuperación muscular y prevenir la fatiga física.
5. Los trabajadores deben conocer y aplicar las técnicas de manipulación adecuadas en cada
caso para realizar las tareas adoptando posturas correctas y optimizando el esfuerzo.
6. Por último, no deben olvidarse dos recomendaciones importantes:
Los esfuerzos físicos cansan, pero también pueden originar lesiones osteo musculares. Estas se
manifiestan en dolor, molestias, tensión o incluso incapacidad. Son resultado de algún tipo de
lesión en la estructura del cuerpo. Es obligación empresarial controlar aquella condiciones de
trabajo que las puedan causar o ser factor de riesgo en estos daños.
Realizar en el trabajo movimientos frecuentes y/o rápidos, repetitivos, levantar y/o soportar
cargas pesadas, o llevarlas durante un tiempo prolongado, mantener posturas estáticas y/o
forzadas, etc. representan riesgos para la salud. El esfuerzo físico y postural, debe ser
identificado y controlado como parte del plan de prevención.
Una organización del trabajo deficiente, que ocasione una excesiva presión de tiempo, a menudo
está en el origen de estos factores. También se pueden originar, por ejemplo, en el uso de
equipos mal diseñados o deteriorados, o carencias de medios auxiliares de transporte, etc.
Las daños que sufran los trabajadores varían en función de caracterticas individuales. Las
dimensiones corporales de las pesonas influyen mucho, así como su resistencia personal, pero
también se debe atender a otras condiciones de trabajo que, como el frío, contribuyen a agravar
las consecuencias.
Las soluciones a los esfuerzos físicos y posturales no deberían ser muy difíciles de hallar si se
consultara con los trabajadores. A menudo las soluciones son simples y las/os trabajadores las
conocen. Introducir sillas ergonómicas en oficinas o reducir los ritmos de trabajo, y/o mecanizar
algún proceso manual repetitivo son soluciones fáciles de introducir. Sin embargo, si esto no es
suficiente para eliminar el problema o bien no está clara la solución, se deberán evaluar los
riesgos, realizando un estudio ergonómico, para tomar en cuenta las características del entorno
de trabajo que puedan estar afectando a la salud.
Esta es una obligación empresarial ineluble. Habla con tu delegada/o y/o acude al sindicato. Has
de saber que si la empresa no actúa, existe el recurso a la Inspección de Trabajo.
En primer lugar, es necesario aplicar el principio general de adaptación del trabajo a la persona
del art. 15.1 d de la LPRL. Allí se señala, entre los principios que deben informar la acción
preventiva del empresario, el de:
En el mismo sentido, un artículo del Estatuto de los Trabajadores (36.5), establece la obligación
de evaluar y controlar los riesgos derivados del trabajo monótono y repetitivo:
"El empresario que organice el trabajo en la empresa según un cierto ritmo deberá tener en
cuenta el principio general de adaptación del trabajo a la persona, especialmente de cara a
atenuar el trabajo monótono o repetitivo en función del tipo de actividad y de las exigencias en
materia de seguridad y salud de los trabajadores. Dichas exigencias deberán ser tenidas
particularmente en cuenta a la hora de determinar los períodos de descanso durante la jornada
de trabajo".