Lectura N1 - HRT
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19/01/2023
SUBORDINACIÓN LABORAL
Para alcanzar un mejor entendimiento sobre su alcance, es importante revisar algunos elementos de
previo. En materia laboral existen los Principios Generales del Derecho, estos son enunciados básicos que
equilibran las relaciones obrero patronal. Estas directrices son de orden público, irrenunciables y que
conducen el actuar tanto del legislador como del juzgador, procurando asegurar la interpretación más
equitativa de las normas.
PRINCIPIO PROTECTOR
Este principio es nivelador, pues trata de garantizar la igualdad entre las partes que se involucran dentro
de una relación laboral, este busca proteger a la parte más débil dentro de la relación laboral, que
generalmente suele ser la parte trabajadora, por encontrase en una relación de subordinación ante las
indicaciones del patrono.
EL PRINCIPIO PROTECTOR SE MANIFIESTA A TRAVES DE:
Principio de la Condición más Beneficiosa.
Principio de la Norma más Favorable.
Principio In Dubio Pro Operario.
Principio de Irrenunciabilidad.
Principio de Primacía de la Realidad.
Principio de Continuidad.
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PRINCIPIO
PROTECTOR
Condición más Beneficiosa
“… parte del supuesto de que ante un eventual conflicto laboral, se debe
respetar en la medida de lo posible la condición que beneficie a la
persona trabajadora (…) en contraposición a cualquier normativa que
le genere un perjuicio mayor.” (Alfaro, A.:2011:68).
Principio de Irrenunciabilidad
“… debe entenderse en su verdadero sentido, como la no posibilidad de
privarse voluntariamente con carácter amplio y por anticipado, de los
derechos concedidos por la legislación laboral” (Plá, A.:1978:67)
Primacía de la Realidad
“… define que, en materia laboral, al analizar una relación jurídica,
prevalezcan las condiciones reales que se hayan dado en la misma, por
sobre los hechos que consten documentalmente…” (Sala Segunda de la
Corte Suprema de Justicia: 00805:2011)
Continuidad
“… este principio debemos partir de la base de que el contrato de
trabajo es un contrato de tracto sucesivo o sea que la relación laboral
no se agota (…) La relación laboral no es efímera sino que presupone
una vinculación que se prolonga (Plá, A.:1978:151)
.
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RELACIÓN LABORAL
De acuerdo con el artículo 18 de nuestro Código de Trabajo, el contrato individual de trabajo: “(…), es
todo aquél en que una persona se obliga a prestar a otra sus servicios o a ejecutarle una obra, bajo la
dependencia permanente y dirección inmediata o delegada de ésta, y por una remuneración de cualquier
clase o forma”.
ELEMENTOS DENTRO DE UN CONTRATO DE TRABAJO:
Prestación Personal del Servicio
Recibo de Salario o Remuneración
Subordinación
Contrato individual de trabajo, sea cual fuere su denominación, es todo aquél en que una persona se
obliga a prestar a otra sus servicios o a ejecutarle una obra, bajo la dependencia permanente dirección
inmediata o delegada en esta, y por una remuneración de cualquier clase o forma. Se presume, la
existencia de este contrato entre el trabajador que presta sus servicios y la persona que los recibe.
Dato lo anterior, la forma de reconocer una relación laboral es a través de los siguientes indicios:
El pago de una retribución reiterada durante un periodo prolongado.
Fijación de un horario.
Pago de beneficios típicos laborales.
Fijación de aumentos salariales.
Laborar en un centro de trabajo de la empresa.
Exclusividad de la prestación del servicio.
Entrega de equipo y uniforme.
Materialización de órdenes.
Aplicación de sanciones.
Aseguramiento CCSS O INS.
La subordinación comprende:
PODER DE DIRECCIÓN:
La prestación del trabajo debe estar dirigida hacia el cumplimiento de los fines que tiene el empleador
cuando establece la relación laboral. Esto justifica que está facultado para guiar la fuerza de trabajo hacia
las metas empresariales que él previó. La ley lo faculta para orientar la prestación de los servicios con
miras a satisfacer los objetivos de la empresa.
PODER DE MANDO:
La autoridad del patrono es necesaria para obligar al trabajador, jurídicamente hablando a ejecutar su
labor acorde con los objetivos de la empresa. Para esa finalidad la ley tutela la facultada patronal de emitir
órdenes e instrucciones que deben ser observadas obligatoriamente por la persona trabajadora.
PODER DE DISIPLINARIO:
Es la potestad patronal de corregir al trabajador con las respectivas acciones, cuando incumpla
injustificadamente las indicaciones que le ha dado.