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Ciencias Borrador 1

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MINISTERIO DE EDUCACIÓN Y CIENCIAS

COLEGIO NACIONAL E.M.D. NACIONES UNIDAS

“Proyecto Emblemático 2023”

ÁREA: CIENCIAS BÁSICAS

Tema: “Manejo de Recursos Naturales con énfasis a la Mitigación y Adaptación


al cambio climático”

Título:

Manejo y conservación

del suelo.
Integrantes:

- Melani Arianna Pineda Gauto


- Luciana Maria Haidee Ovelar Gaona
- Ramon Agustin Espinola Enciso
- Stefany Lucero Magaly Villamayor Garcia
- Rodrigo Ezequiel Gonzalez Giménez

Grado: 1ro Sección: 2da

Tutor/a: Ever Alfonso.

Asunción – Paraguay
2023
INTRODUCCIÓN
La conservación y el manejo adecuado del suelo son elementos fundamentales para la
sostenibilidad de la agricultura y la preservación de nuestros recursos naturales. El suelo es un
recurso invaluable que sustenta la vida en la Tierra al proporcionar un sustrato para el
crecimiento de cultivos, pastos y bosques, así como actuar como un filtro para el agua y un
almacén de carbono esencial. Sin embargo, el suelo es también un recurso finito y vulnerable
que enfrenta amenazas constantes debido a prácticas agrícolas insostenibles, la urbanización
creciente y el cambio climático.

A lo largo de este trabajo, se explorarán prácticas como la agricultura de conservación, la


reforestación, la construcción de terrazas y la gestión de aguas, entre otras, que desempeñan un
papel crucial en la preservación y el uso responsable de nuestro recurso terrestre más valioso.
La comprensión de estos conceptos y su aplicación práctica son esenciales para lograr un
equilibrio entre las necesidades humanas y la protección de nuestro entorno natural,
garantizando así un futuro sostenible para las generaciones venideras.
OBJETIVO GENERAL
➢ Explorar los principios y las prácticas clave del manejo y la conservación del suelo.
OBJETIVOS ESPECÍFICOS:
➢ Identificar factores de degradación.
➢ Diseñar prácticas de conservación.
➢ Monitorear cambios a lo largo del tiempo.
➢ Educación y divulgación.
MARCO TEÓRICO

El manejo y la conservación del suelo son prácticas fundamentales para garantizar la


sostenibilidad de la agricultura y la preservación de los recursos naturales.

Cómo Manejarla E Implementarla

La conservación del suelo es un punto clave de la agricultura, en especial de la agricultura


ecológica. Gracias a una conservación del suelo apropiada, no solo se puede obtener un buen
rendimiento en el campo en la actualidad, sino también en el futuro, sin tener que depender de
productos químicos. Aunque los efectos de la conservación del suelo pueden no ser claramente
visible a corto plazo, a largo plazo sí son notables, puesto que reducen la erosión, mantienen la
fertilidad y minimizan la contaminación del medio ambiente, pues contribuye a la sostenibilidad
ecológica.

Existen prácticas que están diseñadas para mantener la salud y la calidad del suelo, protegerlo
de la erosión y prevenir la degradación. Algunos aspectos clave del manejo y la conservación
del suelo son:

1. Erosión del suelo.

La erosión del suelo es un proceso natural o inducido por actividades humanas en el cual la
capa superior del suelo es desplazada o arrastrada por la acción del viento, el agua, el hielo u
otros agentes erosivos. Este proceso puede ser perjudicial, ya que puede llevar a la pérdida de
la capa fértil del suelo y causar una serie de problemas ambientales y agrícolas. Algunos
aspectos clave sobre la erosión del suelo son:

1.1. Causas de la erosión: La erosión del suelo puede ser causada por varios factores, incluyendo
la lluvia intensa, el viento, la actividad agrícola no sostenible, la deforestación, la construcción
de carreteras y la urbanización.

1.2. Tipos de erosión: Hay varios tipos de erosión del suelo, incluyendo la erosión hídrica
(causada por el agua), la erosión eólica (causada por el viento), la erosión glacial (causada por
el hielo), y la erosión antropogénica (causada por actividades humanas).

1.3. Impactos negativos: La erosión del suelo puede tener impactos graves, como la pérdida de
fertilidad del suelo, la degradación de la tierra, la sedimentación de ríos y cuerpos de agua, y la
degradación del hábitat natural. También puede contribuir a la contaminación del agua y la
disminución de la calidad del aire.
1.4. Prevención y control: Para prevenir la erosión del suelo, se pueden tomar medidas como la
siembra de cultivos de cobertura, la construcción de terrazas, la reforestación, la gestión
adecuada de la vegetación ribereña y la implementación de prácticas agrícolas sostenibles.

1.5. Importancia de la conservación del suelo: La conservación del suelo es esencial para
preservar la calidad del suelo, mantener la productividad agrícola y proteger el medio ambiente.
Promueve prácticas que reducen la erosión y fomentan la salud del suelo.

La erosión es un problema común que implica la pérdida de la capa superior del suelo debido a
la acción del viento, el agua o la actividad humana. Para prevenirla, se pueden utilizar técnicas
como la siembra de cultivos de cobertura, la construcción de terrazas y la implementación de
barreras naturales.

2. Materia orgánica:

La materia orgánica desempeña un papel crucial en el manejo y la conservación del suelo. Su


presencia y calidad son indicativos de la salud del suelo y afectan directamente su fertilidad,
estructura y capacidad para retener agua y nutrientes. Los roles y la importancia de la materia
orgánica en estas prácticas son:

2.1. Mejora de la estructura del suelo: La materia orgánica actúa como un aglutinante natural
que une partículas de suelo en agregados. Estos agregados son beneficiosos para la estructura
del suelo, creando porosidad y facilitando la circulación de aire y agua en el suelo. Una
estructura del suelo saludable promueve un mejor enraizamiento de las plantas.

2.2. Retención de agua: La materia orgánica tiene una alta capacidad para retener agua. A
medida que se descompone, libera lentamente la humedad almacenada, lo que es beneficioso
durante períodos de sequía. También mejora la capacidad de infiltración del suelo, reduciendo
el escurrimiento superficial y la erosión.

2.3. Aporte de nutrientes: La descomposición de la materia orgánica libera nutrientes esenciales,


como nitrógeno, fósforo y potasio, en formas fácilmente asimilables para las plantas. Esto
reduce la necesidad de fertilizantes químicos y promueve una nutrición equilibrada de los
cultivos.

2.4. Fomento de la actividad microbiana: La materia orgánica sirve como fuente de alimento
para microorganismos beneficiosos en el suelo, como bacterias y hongos. Estos
microorganismos desempeñan un papel clave en la descomposición de materia orgánica, la
transformación de nutrientes y la mejora de la salud del suelo.

2.5. Reducción de la erosión: Los suelos ricos en materia orgánica tienen una mayor cohesión
y resistencia a la erosión. Esto es especialmente importante en áreas propensas a la erosión
hídrica o eólica.

Para mantener y aumentar la materia orgánica en el suelo, se pueden seguir prácticas de manejo
y conservación, como la adición de compost, estiércol, cultivos de cobertura y la rotación de
cultivos. Estas prácticas no solo mejoran la salud del suelo, sino que también contribuyen a la
sostenibilidad agrícola a largo plazo al reducir la dependencia de insumos químicos y mejorar
la resiliencia de los cultivos frente a condiciones climáticas adversas.

Mantener y aumentar el contenido de materia orgánica en el suelo es esencial para mejorar su


fertilidad y estructura. Esto se logra mediante la adición de compost, estiércol u otros materiales
orgánicos, así como la rotación de cultivos.

3. Manejo de nutrientes

El manejo adecuado de nutrientes es esencial en el manejo y conservación del suelo para


mantener la fertilidad del suelo, mejorar la productividad agrícola y prevenir la contaminación
ambiental. Las prácticas y conceptos clave relacionados con el manejo de nutrientes en la
conservación del suelo son:

3.1. Análisis de suelo: Antes de aplicar fertilizantes u otros insumos, es fundamental realizar
análisis de suelo para determinar sus características químicas y físicas, así como su contenido
de nutrientes. Esto permite una aplicación precisa de los nutrientes necesarios.

3.2. Fertilización equilibrada: El manejo de nutrientes implica la aplicación equilibrada de los


macronutrientes clave: nitrógeno (N), fósforo (P) y potasio (K), además de otros
micronutrientes esenciales como hierro, zinc y manganeso. La cantidad y el tipo de fertilizante
deben ajustarse según las necesidades específicas de los cultivos.

3.3. Fuentes de nutrientes: Se deben seleccionar fuentes de nutrientes apropiadas, como


fertilizantes orgánicos (estiércol, compost) o fertilizantes inorgánicos (urea, fosfato di
amónico), teniendo en cuenta la disponibilidad y la solubilidad de los nutrientes en función de
las condiciones del suelo.
3.4. Técnicas de aplicación: La forma en que se aplican los fertilizantes es importante. Las
técnicas de aplicación precisas, como la fertiirrigación o la aplicación localizada, ayudan a
minimizar la pérdida de nutrientes y a maximizar la absorción por parte de las plantas.

3.5. Rotación de cultivos: La rotación de cultivos es una práctica que contribuye al manejo de
nutrientes al permitir que los cultivos de diferentes tipos absorban y reciclen nutrientes de
manera diferente, reduciendo la acumulación o el agotamiento de nutrientes en el suelo.

3.6. Manejo de residuos de cultivos: La incorporación de los residuos de cultivos en el suelo


después de la cosecha puede devolver nutrientes al suelo y mejorar la materia orgánica.

3.7. Técnicas de conservación de nutrientes: Se pueden utilizar prácticas de conservación de


nutrientes, como la aplicación de inhibidores de la nitrificación para reducir la pérdida de
nitrógeno, y el uso de coberturas vegetales para evitar la lixiviación de nutrientes.

3.8. Monitoreo y seguimiento: Es esencial realizar un seguimiento continuo de los niveles de


nutrientes en el suelo y ajustar las prácticas de manejo en consecuencia para evitar la
sobrefertilización o la deficiencia de nutrientes.

Un manejo de nutrientes adecuado no solo optimiza la producción agrícola, sino que también
previene la contaminación del agua y la degradación del suelo debido al exceso de nutrientes.
En última instancia, contribuye a la sostenibilidad de la agricultura y la conservación del suelo
y los recursos naturales.

Es importante equilibrar la aplicación de fertilizantes y nutrientes para evitar la


sobreexplotación y la contaminación del suelo y el agua. La agricultura de precisión y la
evaluación periódica de la calidad del suelo son herramientas útiles para lograr esto.

4. Conservación del agua

La conservación del agua es un componente esencial del manejo y la conservación del suelo,
ya que el agua es un recurso crítico para el crecimiento de los cultivos y la salud del suelo. Las
estrategias y prácticas claves relacionadas con la conservación del agua en la gestión y
conservación del suelo son:

4.9. Riego eficiente: El riego es una parte importante del manejo del agua en la agricultura.
Se debe utilizar riego eficiente, como sistemas de riego por goteo o aspersión, que entreguen
agua directamente a las raíces de las plantas y minimicen las pérdidas por evaporación y
escurrimiento.
4.2. Programación del riego: Se deben programar los riegos de acuerdo con las necesidades
reales de los cultivos y las condiciones climáticas locales. Evitar el riego excesivo es
fundamental para prevenir el encharcamiento y la lixiviación de nutrientes.

4.3. Captura y almacenamiento de agua: La captura y el almacenamiento de agua de lluvia es


una práctica importante. Esto puede incluir la construcción de estanques o sistemas de
recolección de aguas pluviales para su posterior uso en riego.

4.4. Drenaje adecuado: Para evitar la compactación del suelo y el estancamiento del agua, es
esencial contar con un sistema de drenaje adecuado que permita el flujo de agua excesiva lejos
de las áreas de cultivo.

4.5. Técnicas de conservación de suelo y agua: Prácticas como la labranza de conservación, la


siembra directa y el uso de cultivos de cobertura ayudan a conservar la humedad del suelo,
reducir la erosión y mejorar la infiltración del agua.

4.6. Reutilización y reciclaje del agua: Considerar la reutilización del agua de riego en lugar de
desecharla, siempre que sea seguro y práctico hacerlo. Esto puede reducir la demanda de agua
fresca.

4.7. Monitoreo del contenido de humedad: Utilizar sensores y sistemas de monitoreo para medir
el contenido de humedad del suelo y programar los riegos de manera precisa.

4.8. Educación y capacitación: Promover la educación y la capacitación de los agricultores en


prácticas de manejo y conservación del agua es fundamental para su implementación efectiva.

La conservación del agua en la gestión y conservación del suelo no solo preserva un recurso
vital, sino que también mejora la eficiencia en la producción agrícola, reduce la presión sobre
los recursos hídricos y contribuye a la sostenibilidad ambiental y agrícola a largo plazo.

La gestión adecuada del agua es esencial para evitar la compactación del suelo y la salinización.
La implementación de sistemas de riego eficientes y técnicas de conservación de agua, como la
labranza de conservación, puede ayudar a lograrlo.

5. Control de plagas y enfermedades

El control de plagas y enfermedades en el manejo y conservación del suelo es un aspecto


importante de la agricultura sostenible y la preservación de la salud del suelo. Las estrategias y
prácticas claves relacionadas con el control de plagas y enfermedades en este contexto:
5.1. Manejo integrado de plagas (MIP): El MIP es un enfoque holístico que combina múltiples
estrategias para controlar plagas y enfermedades de manera efectiva y sostenible. Esto incluye
el uso de métodos biológicos, químicos y culturales en conjunto.

5.2. Selección de cultivos resistentes: Plantar variedades de cultivos resistentes a plagas y


enfermedades puede reducir la necesidad de tratamientos químicos. La resistencia genética es
una estrategia importante en la gestión de enfermedades de las plantas.

5.3. Rotación de cultivos: La rotación de cultivos es una práctica que alterna los tipos de cultivos
plantados en una parcela en temporadas sucesivas. Esto ayuda a prevenir la acumulación de
patógenos en el suelo y a reducir la presión de las plagas.

5.4. Monitoreo y detección temprana: El monitoreo regular de las parcelas agrícolas para
detectar signos de plagas o enfermedades en una etapa temprana permite una respuesta rápida
y más efectiva.

5.5. Control biológico: Utilizar organismos beneficiosos, como depredadores naturales o


parasitoides, para controlar poblaciones de plagas es una práctica respetuosa con el medio
ambiente que puede ser parte del MIP.

5.6. Productos fitosanitarios selectivos: Cuando sea necesario utilizar productos químicos, se
deben preferir aquellos que sean específicos para el problema en cuestión y que tengan un
impacto mínimo en organismos no objetivo y en el medio ambiente.

5.7. Educación y capacitación: La formación de agricultores en el reconocimiento de plagas y


enfermedades, así como en las mejores prácticas de control, es fundamental para una gestión
eficaz.

5.8. Prácticas de manejo de suelo saludable: Un suelo saludable puede fortalecer la resistencia
de las plantas a las enfermedades y plagas. La conservación de la materia orgánica y la mejora
de la estructura del suelo son parte de estas prácticas.

El control de plagas y enfermedades en el manejo y conservación del suelo busca minimizar


el uso de pesticidas químicos y promover prácticas sostenibles que preserven la calidad del
suelo y reduzcan los impactos ambientales negativos. El objetivo es mantener un equilibrio
entre la protección de los cultivos y la conservación del suelo y el entorno natural.
La prevención y el control de plagas y enfermedades son cruciales para proteger la salud del
suelo y la productividad de los cultivos. Se pueden utilizar enfoques orgánicos y químicos de
manera responsable.

6. Educación y capacitación

La educación y la capacitación en manejo y conservación del suelo son fundamentales para


promover prácticas agrícolas sostenibles y la preservación de la salud del suelo y los recursos
naturales. Aquí se describen los aspectos clave de la educación y capacitación en este campo:

6.1. Concienciación y sensibilización: La educación comienza con la concienciación sobre la


importancia del suelo en la producción de alimentos, la protección del medio ambiente y la
mitigación del cambio climático. Esto puede llevarse a cabo a través de campañas de
información y divulgación.

6.2. Formación técnica: La capacitación técnica proporciona a agricultores, extensionistas y


profesionales agrícolas las habilidades y los conocimientos necesarios para implementar
prácticas de manejo y conservación del suelo. Esto puede incluir talleres, cursos y programas
de capacitación.

6.3. Investigación y extensión agrícola: La educación se beneficia de la investigación agrícola


continua. La información y las mejores prácticas basadas en evidencia se pueden difundir a
través de servicios de extensión agrícola para llegar a agricultores y comunidades rurales.

6.4. Demostraciones en campo: Las demostraciones en campo son una herramienta efectiva
para mostrar directamente a los agricultores cómo implementar prácticas de manejo y
conservación del suelo. Los agricultores pueden aprender viendo cómo se aplican estas técnicas
en condiciones reales.

6.5. Programas de certificación: Los programas de certificación pueden ofrecer a los


agricultores y profesionales agrícolas una credencial que demuestre su conocimiento y
competencia en el manejo y la conservación del suelo.

6.6. Desarrollo de habilidades empresariales: Además de las habilidades técnicas, es importante


capacitar a los agricultores en habilidades empresariales para que puedan gestionar sus
operaciones agrícolas de manera sostenible y rentable.
6.7. Acceso a recursos y tecnología: La educación también debe incluir información sobre cómo
acceder a recursos, financiamiento y tecnología que respalden las prácticas de manejo y
conservación del suelo.

6.8. Participación comunitaria: Involucrar a las comunidades locales en programas de


educación y capacitación fomenta la adopción de prácticas sostenibles y promueve la
colaboración en la conservación del suelo y la gestión de recursos.

6.9. Seguimiento y evaluación: Es importante realizar un seguimiento y una evaluación


continuos de los programas de educación y capacitación para medir su impacto y realizar
mejoras según sea necesario.

La educación y capacitación efectivas en manejo y conservación del suelo son esenciales para
empoderar a las comunidades agrícolas y garantizar la implementación exitosa de prácticas
sostenibles. Esto no solo beneficia a los agricultores y al medio ambiente, sino que también
contribuye a la seguridad alimentaria y al desarrollo sostenible a largo plazo.

El manejo y la conservación del suelo son vitales para garantizar la producción de alimentos a
largo plazo, proteger el medio ambiente y mitigar los efectos del cambio climático. Estas
prácticas promueven un equilibrio entre las necesidades humanas y la preservación de los
recursos naturales, lo que es fundamental para un futuro sostenible.
¿Qué es la conservación del suelo exactamente y en qué se centra?

El concepto de conservación del suelo hace referencia a un conjunto de técnicas y prácticas


agrícolas que evitan la degradación, la erosión y el agotamiento de éste. Las técnicas de
conservación del suelo están orientadas a un uso a largo plazo, pensando en el futuro. Tomando
medidas adecuadas y oportunas, los agricultores aumentan el rendimiento de sus campos para
los años venideros.

Uno de los principales objetivos de la conservación del suelo es el mantenimiento de la


biodiversidad de las eco comunidades que contribuyen a la fertilidad de diferentes maneras:
añaden materia orgánica, descomponen organismos perennes para liberar nutrientes y/o
mejoran la infiltración del agua y la aireación. Garantizar unas condiciones adecuadas para los
organismos vivos de la tierra es de vital importancia para la vegetación que crece en ella, ya
que los microorganismos ajustan la materia orgánica a las necesidades de las plantas.

Los distintos tipos de métodos de conservación del suelo evitan escorrentías, la contaminación
y sedimentación en las masas de agua y protegen el suelo desnudo del agrietamiento y la erosión
debido al agua, el viento y el calor excesivo.

Las prácticas de conservación del suelo se basan en tres pasos básicos:

Obtener un conocimiento adecuado del uso de los recursos del suelo.

Monitorizar los campos y detectar las zonas críticas.

Controlar y estimar la eficacia de las técnicas de conservación del suelo aplicadas.

La agricultura en el Manejo y Conservación del suelo.

La agricultura desempeña un papel esencial en el manejo y la conservación del suelo. La


producción de alimentos es una necesidad básica de la humanidad, también es fundamental
reconocer que la agricultura puede tener un impacto negativo en la calidad del suelo si no se
práctica de manera sostenible. A través de la implementación de técnicas y prácticas como la
agricultura de conservación, la rotación de cultivos, la reducción de la erosión y la gestión
responsable de los recursos hídricos se puede garantizar que la agricultura no solo sea
productiva, sino también respetuosa con el suelo y el medio ambiente. Este es esencial para
mantener la fertilidad del suelo a largo plazo y preservar nuestro entorno para las generaciones
futuras. La colaboración entre agricultores, científicos y responsables de políticas es crucial
para lograr un equilibrio adecuado entre la producción de alimentos y la conservación del suelo.

La importancia de la conservación del suelo

La tierra es la condición primaria y el entorno de los cultivos que sirven de alimento a los seres
humanos, los animales domésticos y la fauna salvaje. Dado que la mayoría de las plantas no
pueden existir sin tierra, es importante utilizar este recurso adecuadamente. Este enfoque nos
permite disponer de suficientes alimentos en el futuro y de material para necesidades técnicas,
como textiles para el hogar o combustible.

La importancia de la conservación del suelo también está relacionada con el suministro de agua
y las capas de tierra funcionan como filtros naturales para mejorar la calidad del agua. A su vez,
el agua es necesaria para disolver los nutrientes para las plantas. El uso inteligente de los
recursos de la tierra garantiza su disponibilidad para las próximas generaciones y, por tanto,
unos precios asequibles para los alimentos en el futuro. Otro aspecto es el estético, ya que un
paisaje con vegetación abundante agrada mucho más a la vista que las zonas devastadas y
abandonadas.

Beneficios de la conservación del suelo

La humanidad en general, y los agricultores en particular, obtiene provecho de las numerosas


ventajas de la conservación del suelo. Esta práctica agrícola contribuye a la sostenibilidad de
varias maneras:

Aumenta la calidad y la productividad de la tierra. Mantener el entorno natural para los


organismos que habitan la tierra aumenta la fertilidad y reduce la necesidad de fertilizar con
productos químicos, lo que aumenta el rendimiento y ahorra costes al mismo tiempo.

Reduce la erosión. Los métodos de conservación del suelo para reducir la erosión y el
agotamiento ayudan a los agricultores a evitar la expansión a nuevas tierras cuando los
territorios se vuelven poco fértiles.

Promueve la infiltración del agua y aumenta su almacenamiento. La técnica de conservación


del suelo de siembra directa frente al arado convencional afecta a la humedad del suelo al
reducir el agrietamiento y la evaporación, además de aumentar la tasa de infiltración.
Ayuda a la purificación del aire y del agua. La importancia de la conservación del suelo está
relacionada con el suministro de agua, ya que la tierra funciona como un filtro natural para
purificar el agua. La conservación del suelo mitiga la concentración de agentes contaminantes
y sedimentos. A su vez, el agua es una condición básica para disolver los nutrientes para las
plantas. El secuestro de carbono en el suelo y la reducción de las aplicaciones químicas también
contribuyen a la pureza del aire.

Da alimento y refugio a la fauna. La tierra con vegetación en crecimiento es un entorno vital


para los animales; no sólo como fuente de alimentación, sino también como cobijo.

¿Qué tipos de técnicas de conservación del suelo existen?

Los diferentes sistemas de conservación del suelo garantizan el uso a largo plazo de la tierra y
la mantienen productiva para las generaciones futuras. La conservación del suelo es una parte
fundamental de la agricultura sostenible.

Labranza De Conservación Y Siembra Directa

La labranza de conservación es una variación de la agricultura que intentar limitar el número


de labranzas, al mismo tiempo que aumenta la protección frente a la erosión cubriendo la tierra
con vegetación.

En el caso de la siembra directa, la labranza se reduce del todo o hasta un punto de perturbación
mínima, colocando las semillas entre los residuos de cosechas anteriores o de abono verde. El
principal objetivo de la siembra directa, además de intentar eliminar la labranza para no perder
el carbono retenido, es el de no dejar el suelo desnudo en ningún momento, de modo que no se
vea afectado por el viento y el agua. Asimismo, el uso de plantas de abono verde no solo ayuda
a proporcionar nutrientes a los cultivos principales, sus raíces mantienen el suelo compacto.

Rotación De Cultivos

La rotación de cultivos propone cambiar de especie agrícola en lugar de plantar una misma
durante muchas temporadas. Los agricultores que aplican este método de conservación del
suelo obtienen numerosos beneficios. La rotación de cultivos les ayuda a mejorar la estructura
de la tierra con diversos sistemas radiculares, mitigar la aparición de plagas y añadir nitrógeno
a la tierra con leguminosas, conocidas como plantas fijadoras de nitrógeno.
La elección de los cultivos a rotar es específica de cada empresa agrícola y depende en gran
medida de los datos históricos del clima y la productividad. Algunas plantas han demostrado su
eficacia en los últimos años y otras no.

Abandono De Fertilizantes Y Pesticidas Sintéticos

La aplicación de productos químicos para controlar maleza y plagas es perjudicial para el medio
ambiente. Sabiendo de la importancia de la conservación del suelo en la agricultura en general,
y la agricultura ecológica en particular, es necesario un cambio a formas alternativas de abordar
el problema. Estas alternativas son opciones biológicas y culturales para restablecer la fertilidad
como abono verde y animal, compost, rotación de cultivos y otros métodos de control no
químico.

Conservación De Los Organismos Del Suelo

Los organismos que viven en el suelo son un elemento clave en su conservación y el uso de
pesticidas y fertilizantes químicos puede tener consecuencias negativas para ellos,
especialmente si se usan de forma habitual y/o excesiva, debido a la toxicidad que pueden
alcanzar.

El ecosistema está compuesto por especies macroscópicas, microorganismos, bacterias y virus.


Los organismos macroscópicos airean la tierra y crean nuevos drenajes, además de fertilizar la
tierra con sus excreciones. Los microorganismos ayudan a obtener nutrientes para las plantas,
por ejemplo, fijando nitrógeno al suelo o aumentando la disponibilidad de agua y otros
minerales que las plantas necesitan mientras ellos mismos cogen los necesarios para sobrevivir.

Agricultura De Contorno

Este método de conservación del suelo resulta eficaz en los terrenos en pendiente y promueve
la plantación de especies a lo largo del contorno. Las hileras en pendiente provocan erosión
debido a las corrientes de agua, mientras que las hileras a lo largo del contorno la frenan. Un
impacto de las terrazas de cultivo es similar: también ayuda a conservar el suelo y reducir sus
procesos de degradación.
Cultivo En Franjas

En esta técnica de conservación del suelo, los agricultores combinan cultivos de alto
crecimiento con otros de bajo crecimiento en aras de obtener protección contra el viento, como
cuando el maíz crece en franjas junto a cultivos forrajeros. La práctica del cultivo en franjas
funciona aún mejor cuando los cultivos de alto crecimiento se intensifican en los lados donde
los vientos soplan con más frecuencia. Un beneficio adicional es la materia orgánica que sueltan
los cultivos bajos.

Cortavientos

Como su nombre indica, esta práctica de conservación del suelo se utiliza para reducir la fuerza
del viento y su efecto perturbador sobre el suelo. Se trata de árboles o arbustos plantados en
varias filas para proteger los cultivos de la nieve y los vientos. Según el número de hileras,
podemos distinguir entre cortavientos (hasta cinco hileras) y cinturones de protección (seis y
más).

La vegetación de los cortavientos también proporciona un entorno vital para la fauna y la flora
y minimiza la abrasión del suelo en los cultivos debido a los fuertes golpes de viento.

Cultivos De Cobertura

Esta técnica de conservación del suelo es otra forma de evitar suelos desnudos y,
adicionalmente, obtener beneficios para los cultivos comerciales por diferentes razones como:

producir forraje y material de pastoreo para el ganado;

proporcionar abono verde;

ayudar a controlar la maleza;

mantener la humedad;

asegurar un entorno natural para los microorganismos y animales pequeños;

equilibrar la concentración de nitrógeno (liberándolo o acumulándolo con determinadas


plantas).
Franjas De Protección

Para realizar este procedimiento de conservación del suelo, se colocan árboles y arbustos en las
orillas de las masas de agua para evitar sedimentos y el arrastre de agua. Sus raíces fijan el suelo
para evitar el desprendimiento y la erosión, las copas protegen del exceso de luz solar a los
habitantes del agua y las hojas que caen son una fuente de materia orgánica y alimento de los
animales acuáticos pequeños.

Vías Navegables Con Césped

Se trata de un surco para las corrientes de agua cubierto de hierba. Está conectado a una zanja,
fosa o corriente para recoger el agua, y las raíces de la hierba mantienen la tierra en su sitio,
protegiéndola de la erosión del agua, y contribuyendo así a la conservación del suelo.

Manejo Integrado De Plagas

Las plagas son y han sido un problema importante para los agricultores, que deben combatir
dejando de lado los productos químicos que envenenan la naturaleza filtrándose en el agua y la
atmósfera. Para una correcta conservación del suelo es importante eliminar los herbicidas
sintéticos sustituyéndolos por otros orgánicos o establecer enemigos biológicos de las plagas
siempre que sea posible, rotando las especies de cultivo para minimizar el aumento de las
poblaciones de plagas en el mismo campo durante años.

Objetivo principal de la conservación del suelo

El objetivo principal de la conservación del suelo es protegerlo de cualquier tipo de


degradación, incluido el agotamiento de la fertilidad y la erosión. La principal tarea para reducir
la erosión es cubrir las tierras con cultivos o residuos para evitar las zonas desnudas, ya que
están muy expuestas a alteraciones a causa del viento, flujos de agua y salpicaduras de lluvia.
RECURSOS FINANCIEROS

(Estos serán calculados y agregados una vez culminado el trabajo.)


CONCLUSIÓN

Este trabajo sobre el manejo y conservación del suelo nos ha permitido comprender la
importancia crítica de preservar este recurso natural. Hemos aprendido que adoptar prácticas
sostenibles, como la agricultura de conservación, reforestación, y la gestión adecuada de la
erosión, son fundamentales para mantener la fertilidad del suelo y proteger nuestro entorno. Es
esencial que continuemos promoviendo las practicas en la agricultura y la gestión del suelo para
garantizar un futuro más saludable y sostenible para las generaciones venideras.
WEBGRAFÍA

La webgrafía será agregada una vez el trabajo haya pasado su correspondiente


revisión de forma organizada.
ANEXOS

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