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Aberastury

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Duelo por el cuerpo perdido

Arminda Aberasturi habla sobre el proceso de duelo que experimenta un individuo


durante la transición de la infancia a la adolescencia. Este duelo se debe a los
cambios físicos y biológicos que ocurren durante este período. El individuo puede
sentirse impotente e incapaz de lidiar con su nuevo cuerpo, lo que puede llevar a
un sentimiento de despersonalización.

A medida que el individuo crece, debe abandonar ciertos objetos reales, como la
imagen de su madre de la infancia, y reemplazarlos con símbolos verbales, como su
ideología, aficiones, gustos y compromisos sociales. Estos nuevos símbolos ayudan
al individuo a lidiar con la pérdida de su cuerpo infantil y a elaborar su duelo.

El adolescente comienza a identificarse con ciertos estilos y a usar ropa y


accesorios para expresar su personalidad y pertenencia a un grupo específico. Sin
embargo, la inconformidad con su cuerpo siempre estará presente debido a las
presiones sociales y los estándares de belleza inalcanzables.

Solo cuando el individuo acepta su cuerpo con sus posibilidades y limitaciones,


puede comenzar a modificarlo según sus propios parámetros y no los impuestos desde
el exterior. Este proceso de aceptación implica renunciar a ciertas fantasías, como
la de la bisexualidad, y asumir su papel y posibilidades desde su cuerpo.
DUELO POR LA IDENTIDAD Y EL ROL INFANTIL

El texto habla sobre el proceso de transición de la infancia a la adolescencia.


Durante este período, los adolescentes experimentan un "duelo" por su identidad y
rol infantil, ya que deben asumir nuevas responsabilidades y roles sociales.

A menudo, los adolescentes intentan evitar estas responsabilidades delegándolas en


sus padres o en su grupo social. Esto puede llevar a relaciones interpersonales
inestables y a comportamientos que pueden parecer crueles o indiferentes.

Sin embargo, a medida que los adolescentes maduran y forman su identidad, comienzan
a valorar sus relaciones y a asumir responsabilidades. Este proceso puede ser largo
y desafiante, y el apoyo de los padres es crucial.

Finalmente, los adolescentes deben hacer el duelo por la pérdida de sus padres de
la infancia, lo que complementa su transición a la adultez. Este es un resumen
simplificado del texto, pero el original contiene muchos matices y detalles
adicionales.
DUELO POR LOS PADRE DE LA INFANCIA

Durante la adolescencia, tanto los jóvenes como sus padres experimentan un “duelo”
por la pérdida de sus roles anteriores. Los adolescentes deben aceptar que sus
padres ya no son los protectores omnipresentes de su infancia, y los padres deben
aceptar que su hijo ya no es un niño y que deben permitirle más libertades.

Este cambio puede causar conflictos, ya que los adolescentes aún dependen
económicamente de sus padres, pero desean más independencia. Además, los
adolescentes pueden reemplazar a sus padres con nuevas figuras ideales, como
celebridades o amigos.

Finalmente, los adolescentes aprenderán a prever las consecuencias de sus acciones


y a seguir las normas, mientras que los padres deben aprender a equilibrar la
imposición de reglas con la concesión de libertades.

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