Lucy Patané - Revista Ñ
Lucy Patané - Revista Ñ
Lucy Patané - Revista Ñ
“En mi casa siempre hubo muchos instrumentos: padre, madre y hermana músicos.
También ensayos, otros músicos, artistas plásticos, artistas en general. Una casa desbordada
de arte y diversidad”, explica Lucy con naturalidad, y dice que en su familia se escuchaba
desde Mahavishnu Orchestra a Paquito De Rivera, de Spinetta a música brasileña. Ella
nunca fue a estudiar ningún instrumento: aprendió mirando a otros, por memoria visual. Y
luego tocando.
Con 25 años de escenario, algunos la denominan como “la joven veterana del under”. Hoy,
con 33 años, y luego de una amplia trayectoria pese a su juventud –fue guitarrista de Diego
Frenkel, y con Paula Maffia fundaron “La Cosa Mostra” y “Las Taradas”-, Lucy se
encuentra en un momento especial: está presentando su primer disco solista, que lleva su
nombre, “Lucy Patané”, y que grabó en su propio estudio “Sale la Luna”. Nacida y criada
en Bernal, vive hace unos años en Capital Federal, pero las primeras presentaciones de su
material las hizo en su lugar de origen. En Capital, se presentará los jueves 18 y 25 de julio
a las 22 horas en el Centro Cultural Richards (Honduras 5272).
De un tiempo a esta parte, Lucy se convirtió en una figura del indie como cantautora, multi-
instrumentista y productora; ella se define como “agitadora cultural” y le gusta desarmar
lugares comunes. Atraída por los espacios culturales “ásperos”, de esos “que te hacen
raspar las rodillas”, a la vez se ve como una joven “blanca y privilegiada de clase media”
que tuvo la suerte de hacer giras por Europa pero que prefiere “lo sanguíneo” de Argentina
y América Latina.
“Pienso que la teoría de que ´si sos del conur sos más capo y si sos de capi sos un nabo´ hay
que desarmarla, al menos un poco -reflexiona-. Sí suceden cosas diferentes, como por
ejemplo en el conurbano te sentís menos observada, de alguna manera se vive el presente y
el anonimato. En Capital sucede una exposición desde el simple hecho de la cantidad de
gente que hay: nos vemos, te vemos, me ven. Entonces, ante esa exposición, actuás de
cierta manera”.
Luego de acompañar a otros artistas y formar proyectos de banda, Lucy dice que empezó a
sentir una insatisfacción, un “habitar la incomodidad como única fuga posible”. De forma
paralela, trabajó como productora y técnica en sonido. Y compuso la música para
los documentales, series y películas de Mathieu Orcel. Una especie de mujer orquesta que,
sin embargo, necesitó frenar la marcha para escuchar mejor los latidos internos.
Si bien su “escuela” fue tocar diversos estilos con muchas personas –desde el hardcore al
punk, pasando por la música country aunque siempre con los pies en el rock
contemporáneo-, entonces pensó en hacer un disco solista, tocando todos los instrumentos e
incluso haciendo la parte técnica del disco. Pero no se sentía feliz. “Empecé a convocar
personas para que me graben: ahí entran en juego Tomas Perez Campione y Juanito el
Cantor –dice, sobre su disco-. La manera fue bastante caótica, todo fue bastante instintivo,
siguiendo pistas de mis propios errores, y buscando por sobre todo que cada sonido me
conmoviera. Esa búsqueda duró 2 años. Grabé casi el 80 por ciento de todos los
instrumentos que suenan”.