Location via proxy:   [ UP ]  
[Report a bug]   [Manage cookies]                

Autoliberacion Interior

Descargar como pdf
Descargar como pdf
Está en la página 1de 190
Anthony de Melio Autoliberacion , interior x CONTENIDO Introduccién 7 1 jDespierta! jLa felicidad eres ti! 9 Estas dormido * Despierta * Importa la vida No te ates * No confundas los suejios * {Qué Ifo! E] amor no duerme * Disparar gratuitamente Ta ya eres felicidad 2 jDesprogramate! jSé ta mismo! 31 iDesprograémate! * No seas fotocopia * Facil y dificil conocerse a fondo * La vida observada Métodos para ser feliz 3 jReconoce tu afiadidura! 49 En cuanto metes tu yo... * Reconoce tu aiiadidura Resultado de nada * No tengas miedo El pez tenia sed * Menudo descanso 4 Amar es escuchar todos los instrumentos 69 El ser y la imagen * El amor es * El fuego es el amor 5 El miedo se aprende 81 No tengdis miedo * Estamos programados Arrepentimiento: una trampa Cambia tu programacién * Ejercicio de fantasia Otro ejercicio 6 El tesoro esta dentro de ti 101 El dichoso nifio * Violencia cultural Odiarse a si mismo * El amor no castiga El amor no es una droga * Date el gusto de vivir 7 Elser es lo que vale 119 Poco sirven las palabras * Ejercicio 1 * Ejercicio 2 Fjercicio 3 8 Dios est enla vida 137 Dios no se deja encerrar * El valor de la realidad Eso es muy comprometido * Opcidn por la verdad Ejercicio 9 El amor, esa maravilla 155 Qué es el amor * Mas o menos iguales EI mal no existe * Ejercicio * Si, pero... 10 El texto es la vida 171 Cuesti6nate * La Biblia y el telescopio El amor es clarividente Indice tematico 183 Introduccién A medindos de 1987, el jesuita indio Anthony de Mello, ran autor de libros espirituales (El canto del pajaro, El ma- nantial, Sadhana, ;Quién puede hacer que amanezca? La oracién de la rana) fallece en Nueva York a los 56 afios. EI padre De Mello se hizo famoso por sus cursos, ejercicios y conferencias sobre liberacién interior. Toda su obra estu- vo dirigida a lograr una sintesis entre la espiritualidad de Oriente y Ia de Occidente, en beneficio de la libertad y la rea- lizacion total de la persona. Despertar a estas posibilidades era el objetivo de sus antologias de cuentos, tomados tanto de la tradici6n cristiana como de la budista y la sufi, sin ocultar nunca su predileccién por Jestis. Hacia la época de su muerte, Tony de Mello iba a dar un curso de autoliberacién interior en Madrid. Este propésito no pudo cumplirse, pero su palabra clara y potente lo ha sobrevi- vido y llega hasta nosotros en una transcripcién que hiciera una de sus alumnas del curso que impartié en Barcelona en agosto de 1986. De Mello, sintesis también él de psicélogo y tedlogo, en su deseo de llegar a las raices de las personas, hace planteamien- tos verdaderamente radicales. Sin embargo, se debe tener en cuenta que su trabajo de conciliacién de espiritualidades y la validez de su accién pastoral vienen refrendados por numero- sos testimonios de todo el mundo y, desde luego, por el ex- traordinario éxito de sus libros. En efecto, lo que aqut propone el padre de Mello puede pa- recer heterodoxo y cuestionable (él mismo reitera que se debe cuestionar todo), pero tiene muchos puntos de contacto con los maestros mds destacados de nuestra historia y nuestra tra- dicién. Se trata de la profundizacién en la propia vida, para li- berarse de las cadenas interiores que nos impiden vivir in- tensamente. A veces, hasta la misma religién, mal entendida, es fuente de trabas psicolégicas para vivir Ia libertad interior que nos aleje de los intensos dolores y las extensas depresiones que caracterizan al mundo moderno. Publicamos este texto, revisado y ampliado, con la inten- cién de proporcionar un material valiosisimo para la reflexion y, por qué no, Ia discusién, en la certeza de que todo lo que contribuya a tales actividades, eminentemente formativas, contribuird también al crecimiento vital y espiritual del lector. Conciliando la profundidad y la utilidad, incluimos glosas marginales que se reagrupan al final en un indice temitico. jDespierta! jLa felicidad eres tt! Despertarse es la espiritualidad, porque sélo despiertos podemos entrar en la verdad y la libertad. espertarse es la espiritualidad, por- |\>) que sdlo despiertos podemos en- trar en la verdad y descubrir qué Canoe: lazos nos impiden la libertad. Esto es la ilu- minaci6n. Es como la salida del Sol sobre la noche, de la luz sobre la oscuridad. Esa alegria que se descubre a si misma, desnu-— dade toda forma. Esto es la iluminacion. El mistico es el hombre iluminado, el que todo lo ve con claridad, porque esté des- pierto. No quiero que os credis lo que os digo porque yo lo digo, sino que cuestionéis ca- da palabra y analicéis su significado y 10. Cuestionar que os dice en vuestra vida personal; pero todo con sinceridad, sin autoengafiaros por co- modidad 0 por miedos. Lo importante es el Evangelio, no la ages persona que lo predica ni sus formas. No la interpretaciGn que se le ha dado siempre o la que le da éste 0 aquél, por muy cano- nizado que esté. Eres tti el que tiene que interpretar el mensaje personal que encie- rra para ti, en el ahora. No te importe lo que la religion o la sociedad prediquen. La sociedad sélo canoniza a los que se conforman con ella. En el tiempo de Jestis y ahora. A Jestis no pudieron canonizarlo y por ello lo asesinaron. ;Quiénes creéis que lo mataron? {Los malos? No. A Jestis lo asesinaron los buenos de turno, los mas respetados y creidos en aquella sociedad. A Jestis lo mataron los escribas, los fariseos y sacerdotes; y si no andas con cuidado, asesinards a Jestis mientras vives dormido. ESTAS DORMIDO cémo sabré si estoy dormido? Je- Y= os lo dice en el Evangelio: ¢ “~Por qué decis Sefior, Senor, si 4, ios no hacéis lo que os digo?” Si no hacemos “tapa-agujeros” lo que Dios quiere y nos dedicamos a fa- bricarnos un Dios “tapa-agujeros”, es que estamos dormidos. Lo que importa es res- ponder a Dios con el corazén. No importa ser ateo, musulmdn 0 cat6lico; lo impor- tante es la circuncisién y el bautismo del corazon. El estar despierto es cambiar tu coraz6n de piedra por uno que no se cierre a la Verdad. Si estas doliéndote de tu pasado, es que estas dormido. Lo importante es levantarse eee ee nee 4 ara no volver a caer. La solucién esta en tu eae nn y de ver otra cosa que lo que te permites ver. Ver lo que hay detras de las cosas. Cuando se te abran los ojos, verds cémo todo cambia, que el pasado esté muerto y el que se duerme en_ el pasado esta muerto, porque sélo el pre- sente es vivo si ti estas despierto en él. Metanoia quiere decir despertarse y no perderse la vida. Es vivenciar el Presente. Vivir el presente Para saber esto hay un criterio: ;Ti sufres? Es que estas dormido. Es igual que sepas muchas cosas y te dediques a svar ne quiere decir que los dos estén dormidos. Si sufres es que estas dormido. Me diras que el dolor existe. Si, es verdad que el dolor existe, pero no el sufrimiento. El sufri- | Dolor miento no és real, sino una obra de tu!" mente. Si sufres es que estas dormido por- que, en si, el sufrimiento no existe, es un roducto de tu suefo; y si estas dormido, imaginado, que nada tiene que ver con el “Jeslis Teal, y osu pucde Sor uay poligoen. y.es0 puede ser muy peligroso. Calderén dice: “Todo es segun el color _ del cristal con que se mira.” Si estas dormi- do no seras capaz de ver mas que cosas dormidas, y no te dards cuenta hasta que despiertes. Pasar la vida por ti sin que ti la vivas. Estar despierto es aceptarlo todo, no como ley, no como sacrificio, ni como esfuerzo, sino por iluminacion. eee Si tienes problemas es que estas dormi- do. La vida no es problematica. Es el yo (la mente humana) el que crea los problemas. A ver si eres capaz de comprender que el. sufrimiento no esta en la realidad, sino en i Por eso, en todas las religiones, se ha predicado que hay que morir al yo para volver a nacer. Este es el verdadero bautis- mo que hace surgir al hombre nuevo. La en realidad no hace problemas, los problemas nacen de la mente cuando estas dormido. Ta pones los proven _DESPIERTA uf e puede decir que en estos ulti- S: mos dias no te has sentido como é un hombre libre y feliz, sin pro- blemas ni preocupaciones? No te has sen- tido asi? Pues estas dormido. Qué ocurre sata cuando estds despierto? No cambia nada, todo ocurre igual, pero ti eres el que ha cambiado para entrar en la realidad En Le preguntaron a un maestro oriental sus discipulos: “;Qué te ha proporcionado Ja iluminacién?” Y contesté: “Primero te- nia depresién y ahora sigo con la misMA poyesiin depresién, pero Ja diferencia esté_ en que o aceptacién ahora no me molesta la depresién.” Estar despierto es aceptarlo todo, no co- mo ley, ni como sacrificio, ni como esfuer- zo, sino por iluminacién. Aceptarlo todo porque lo ves claro y ya nada ni nadie te puede engajiar. Es despertar a la luz. El do- a | a lor existe, y el sufrimento s6lo surge cuan-_ do te resi 1 _dolor. Si {i aceptas el do-_ lor, el sufrimiento no existe. El dolor no es inaguantable, porque tiene un sentido comprensible en donde se remansa. Lo inaguantable es tener el cuerpo aqui y la mente en el pasado o en el futuro. Lo insoportable es querer distorsionar la realidad, que es inamovible. Eso si que es insoportable. Es una lucha inttil como es inutil su resultado: el sufrimiento. No se puede luchar por lo que no existe. No hay que buscar la felicidad en don- geiiciaad de no esta, ni tomar la vida por lo que no y vida es vida, porque entonces estaremos crean- do un sufrimiento que sdlo es el resultado de nuestra ceguera y, con él, el desasosie- go, la congoja, el miedo, la inseguridad... Nada de esto existe sino en nuestra mente dormida. Cuando despertemos, se acab6. IMPORTA LA VIDA El ir contra la realidad, haciendo pro- blemas de las cosas, es creer que tt impor- tas, y lo cierto-es que ti, como personaje individual, no importas nada. Ni ti, ni tus decisiones ni acciones importan en el desa- rrollo de la vida; es la vida la que importa y ella sigue su curso. S6lo cuando com- prendes esto y te acoplas a la unidad, tu vida cobra sentido. Y esto queda muy cla- ro en el Evangelio. zImportaron todas las transgresiones y desobediencias para la historia de la salvacién? zImporta si yo El sentido de tu vida age asesino a un hombre? gImporté el que ase- sinaran a Jesucristo? Los que lo asesinaron crefan estar haciendo un acto bueno, de jus- ticia, y lo hicieron después de mucho dis- cernimiento. Jestis era portador de la luz y por ello predicaba las cosas mas raras y contrarias al judaismo, a sus creencias e interpreta- ciones religiosas: hablaba con las mujeres, comia con los ladrones y prostitutas. Pero, ademas, interpretaba la Ley en profundi- dad, salténdose las reglas y sus formas. Los sabios y los poderosos tenian que elimi- narlo. ;Podia ser de otra manera? Era ne- cesario que muriera asi, asesinado y no enfermo de vejez. Cuentan que un rey godo se emociond al oir el relato de Jestis y dijo: “;De estar yo alli, no lo hubieran matado!” zLo creemos asi, como ese rey godo? Dormimos. La muerte de Jestis descubre la realidad en una sociedad que esté dormida y, por ello, su muerte es la luz. Es el grito para que despertemos. NO TE ATES ué hace falta para despertarse? é No hace falta esfuerzo ni juven- tud ni discurrir mucho. Sélo ha- ce falta una cosa, la capacidad de pensar algo nuevo, de ver algo nuevo, de ver algo nuevo y de descubrir lo desconocido. Es la —18— Jesiis, portador de la luz 2Como despertarse? capacidad de movernos fuera de los es- quemas que tenemos. Ser capaz de saltar sobre los esquemas y mirar con ojos nue- vos la realidad que no cambia. El que piensa como marxista, no piensa; el que piensa como budista, no piensa; el que piensa como musulméan, no piensa... y el que piensa como catdlico, tampoco piensa. Ellos son pensados por su ideolo- gia. Ta eres un esclavo en tanto y en cuan- to no.puedes pensar por encima de tu ideologia. Vives dormido_y pensado_por una idea. El ‘profeta T no se deja llevar por ninguna ideologfa, y por ello es tan mal re- cibido. El profeta es el pionero, que se atre- ve a elevarse por encima de los esquemas, abriendo camino. La Buena Nueva fue rechazada porque no querian la liberacién personal, sino un caudillo que los guiase. Tememos el riesgo de volar por nosotros mismos. Tenemos miedo a la libertad, a la soledad, y preferi- mos ser esclavos de unos esquemas. Nos atamos voluntariamente, llenandonos de pesadas cadenas, y luego nos quejamos de no ser libres. gQuién te tiene que liberar si ni ti mismo eres consciente de tus cadenas? Las mujeres se atan a sus maridos, a sus hijos. Los maridos a sus mujeres, a sus nego- cios. Todos nos atamos a los deseos y nues- tro argumento y justificaci6n es el amor. Esclawos de la ideologia Libertad ysoledad Lo peor y mas peligroso del que duerme es creer que esté de. con la realidad. vierto y confundir sus suefios i025 ~Qué amor? La realidad es que nos amamos a nosotros mismos, pero con un amor adul- terado y raquitico que sdlo abarca el yo, el ego. Ni siquiera somos capaces de amarnos, A. posofros mismos en libertad, Entonces, {como a saber amar a los demas, aunque sean nuestros esposos 0 nuestros hi- pen jos? Nos hemos acostumbrado a la carcel de de to viejo lo viejo y preferimos dormir para no descu- brir la libertad que supone lo nuevo. NO CONFUNDAS LOS SUENOS osotros estdis dormidos porque, si no, ya no necesitarias venir a este curso. Si ya lo vierais todo con ojO8 aytoconciencia nuevos, ya no necesitarfais venir a desper- taros. Pero, si sois capaces de reconoceros dormidos, ek S Ais despiertos, ya es _un_paso. Pues lo peor y mas peligroso del que duerme es creer que esta _despierto y confundir sus suefos con_ la realidad. Lo primero que necesitdis para despertar, es saber que estdis durmiendo y estais sofiando. La religion es una cosa buena en si, pe- ro en manos de gente dormida puede ha- cer mucho dafio. Y lo podemos ver muy claramente por la historia de una religion que, en el nombre de Dios, cometié tantas barbaridades creyendo que hacia el bien. Si no sabes emplear la religién en esencia, Fsencia en libertad, sin fanatismos ni ideologias de“! "si" un color u otro, puedes hacer mucho dafio y, de hecho, se sigue haciendo. Para despertar hay que estar dispuesto gga a escucharlo todo, mas alla de los carteli- tos de buenos y malos, con receptividad, que no quiere decir credulidad. Hay que cuestionarlo todo, atentos a descubrir las verdades que puede haber, separandolas de las que no lo son. Si nos identificamos con las teorfas sin cuestionarlas con la ra- z6n —y sobre todo con la vida— y nos las tragamos almacendndolas en la mente, es que seguimos dormidos. No has sabido asimilar esas verdades para hacer tus pro- pios criterios. Hay que ver las verdades, analizarlas y ponerlas a prueba, una vez cuestionadas. “Haced lo que os digo”, dice Jestis. Pero no podremos hacerlo si antes no nos trans- formamos en el hombre nuevo, despierto, libre, que ya puede amar. “Aunque diera todo a los pobres, y mi Nada importa cuerpo a las Ilamas —dice Pablo—, de sin amor qué me serviria si no amo?” Este modo de ver de Pablo se consigue viviendo, y este modo de ser nace de estar despierto, dis- ponible y sin engafios. jQUE Lio! i vida es un lio. Soy capaz de re- conocerlo? Necesito tener recep- tividad. ,Estoy dispuesto a reco- nocer que el sufrimiento-y Ta congoja los Fabrigolyo-miiomo? Si ores Capa aie carte cuenta, es Gue comienzas a despertarte. rdinariamente, buscamos alivio y nO gjjpig curacién. Cuando sufres, zestds dispuesto y curacién a separarte de ese sufrimiento lo necesario oie para analizarlo y descubrir el origen que ae detras? Es preferible dejar que sufras. _un_ poco més,hasta que te hartes y estés_ estés Gaetietos vad oO iertas ti, o la vida te despertard. —_ ~ Cuando la relacién entre amigos no funciona lo bien que tt quisieras, puedes aliviarla. Puedes pararte y comenzar una tregua, pero si no has puesto al aire las premisas que estan debajo, el problema si- gue en pie, y seguird generando senti- mientos negativos. Las componendas y alivios son manejos comerciales del buen comportamiento que te ha metido en la mente tu sentido de buena educaci6n. Si los miras, bien despierto, des- cubriras que no son mas que utilizacién, comercio de toma y daca y chantaje, mas hipocresia. Cuando ves esto, équieres qui- tarte el céncer, o tomar un analgésico para no sufrir? Cuando la gente se harta-de-su-— frir es un_ buen momento para despertar. Buda dice: “El mundo esta leno de do- dor, que genera suftimiento. La raiz del sae rin frimiento es el deseo. Si quieres arrancarte el deseo.” gE] deseo es cosa buena? Es una cues- tién de lenguaje, pues la palabra “deseo”, en espafiol, abarca deseos buenos, que son estimulos de accion, y deseos estériles, que a nada conducen. A estos deseos, para en- tendernos, vamos a Ilamarlos apegos. Despertarse es 1a tinica experiencia que vale la pena. —22— La base del sufrimiento es el apego, el deseo. En cuanto deseas una cosa compul- sivamente y pones todas tus ansias de feli- cidad en ella, te expones a la desilusién de no conseguirla. De no haber deseado tanto que tu amigo te acoja, te contemple y te tenga en cuenta; de no desearlo tanto, no te importarfa su indiferencia ni su rechazo. Donde no hay deseo-apego, no hay miedo, Porque.el miedo es Ja cara opuesta del de~ seo, inseparable de él Sin esta clase de deseos, nadie te puede intimidar, ni nadie te puede controlar 0 ro- bar, porque, si no tienes deseos, no tienes miedo a que te quiten nada. EL AMOR NO DUERME onde hay amor no hay deseos. Y por eso no existe ningtin miedo. Si amas de verdad a tu amigo, ten- drias que poder decirle sinceramente: “Asi, sin los cristales de los deseos, te veo como eres, y no como yo desearia que fue- ses, y asi te quiero ya, sin miedo a que te escapes, a que me faltes, a que no me quie- ras.” Porque en realidad, ;qué deseas? ~Amar a esa persona tal cual es, 0 a una imagen que no existe? En cuanto puedas desprenderte de esos deseos-apegos, po- dras amar; a lo otro no se lo debe lamar amor, pues es todo lo contrario de lo que el amor significa. El enamorarse tampoco es amor, sino de- sear para ti una imagen que te imaginas de Donde hay deseo, hay miedo Amor vs. deseo eeyges una persona. Todo es un suefio, porque esa persona no existe. Por eso, en cuanto cono- ces la realidad de esa persona, como no coincide con lo que tt te imaginabas, te de- senamoras. La esencia de todo enamora- miento son los deseos. Deseos que generan celos y sufrimiento porque, al no estar asen- tados en la realidad, viven en la inseguri- dad, en la desconfianza, en el miedo a que todos los suefios se acaben, se vengan abajo. El enamoramiento proporciona cierta emoci6n y exaltacién que gusta a las per- sonas con una inseguridad afectiva y que alimentan una sociedad y una cultura que hacen de ello un comercio. Cuando estas enamorado no te atreves a decir toda la verdad por miedo a que el otro se desilu- sione porque, en el fondo, sabes que el enamoramiento sdlo se alimenta de ilusio- nes e imagenes idealizadas. El enamoramiento supone una manipu- lacién de la verdad y de la otra persona para que sienta y desee lo mismo que tu y asi poder poseerla como un objeto, sin miedo a que te falle. El enamoramiento no es mas que una enfermedad y una droga del que, por su inseguridad, no esta capa- citado para amar libre y gozosamente. La gente insegura no desea la felicidad de verdad, porque teme el riesgo de la li- Enamoramiento El riesgo de la libertad No hay pareja ni amistad que esté tan segura como la que se mantiene libre. S6lo es eterno lo que se basa en un amor libre. Los deseos te hacen siempre vulnerable. suey ya bertad y, por ello, prefiere la droga de los deseos. Con los deseos vienen el miedo, la ansiedad, las tensiones y..., por desconta- do, la desilusion y el sufrimiento conti- nuos. Vas de la exaltacidn al desespero. ¢Cudnto dura el placer de creer que has conseguido lo que deseabas? E] primer sor- bo de placer es un encanto, pero va prendi- do irremediablemente al miedo a perderlo, y cuando se apoderan de ti las dudas, llega la tristeza. La misma alegria y exaltacién de cuando llega el amigo, es proporcional al miedo y al dolor de cuando se marcha... © cuando lo esperas y no viene... Vale la pena? Donde hay miedo no hay amor, y podéis estar bien seguros de ello. Cuando despertamos de nuestro suefio y vemos la realidad tal cual es, nuestra in- seguridad termina y desaparecen los mie- dos, porque la realidad es y nada la cam- bia. Entonces puedo decirle al otro: “Como no tengo miedo a perderte, pues no eres un objeto de propiedad de nadie, entonces puedo amarte asi como eres, sin deseos, sin apegos ni condiciones, sin egoismos ni querer poseerte.” Y esta forma de amar es un gozo sin limites. gQué haces cuando escuchas una sinfo- nia? Escuchas cada nota, te deleitas en ella y la dejas pasar, sin buscar la permanencia de ninguna de ellas, pues en su discurrir esta la armonfa, siempre renovada y siem- pre fresca. Pues, en el amor, es igual. En cuanto te agarras a la permanencia destru- yes toda la belleza del amor. No hay pare- Placer vs. dolor Amor vs. permanencia oboe ja ni amistad que esté tan segura como la que se mantiene libre. El apego mutuo, el control, las promesas y el deseo te condu- cen inexorablemente a los conflictos y al sufrimiento y, de ahi, a corto o largo plazo, a la ruptura. Porque los lazos que se basan en los deseos son muy frdgiles. Sdlo es eterno lo que se basa en un amor libre. Los deseos te hacen siempre vulnerable. — DISPARAR GRATUITAMENTE ay dos tipos de deseos 0 de de- H pendencias: el deseo de cuyo cumplimiento depende mi felici- dad y el deseo de cuyo cumplimiento no depende mi felicidad. El primero es una esclavitud, una carcel, pues hago depender de su cumplimiento, © no, mi felicidad o mi sufrimiento. El se- gundo deja abierta otra alternativa: si se cumple me alegro y, si no, busco otras compensaciones. Este deseo te deja mas o menos satisfecho, pero no te lo juegas todo a una carta. Pero existe una tercera opcién, hay otra manera de vivir los deseos: como estimu- los para la sorpresa, como un juego en el que lo que mas importa no es ganar o per- der, sino jugar. Hay un proverbio oriental que dice: “Cuando el arquero dispara gratuitamen- te, tiene con él toda su habilidad.” Cuando dispara esperando ganar una hebilla de bronce, ya esta algo nervioso. Cuando dis- ge Otra manera de vivi los des para para ganar una medalla de oro, se vuelve loco pensando en el premio y pier- de la mitad de su habilidad, pues ya no ve un blanco, sino dos. Su habilidad no ha cambiado pero el premio lo divide, pues el deseo de ganar le quita la alegria y el dis- frute de disparar. Quedan apegadas alli, en su habilidad, las energias que necesitaria li- bres para disparar. El deseo del triunfo y el resultado para conseguir el premio se han convertido en enemigos que le roban la vi- si6n, la armonia y el goce. El deseo marca siempre una dependen- cia. Todos dependemos, en cierto sentido, de alguien (el panadero, el lechero, el agri- cultor, etc., que son necesarios para nues- tra organizaci6n). Pero depender de otra persona para tu propia felicidad es, ade- mas de nefasto para ti, un peligro, pues es- tas afirmando algo contrario a la vida y a la realidad. Por tanto, el tener una dependencia de otra persona para estar alegre o triste es ir contra la corriente de la realidad, pues la felicidad y la alegria no pueden venirme de fuera, ya que estan dentro de mi. Sdlo yo puedo actualizar las potencias de amor y felicidad que estan dentro de mi y sdlo lo que yo consiga expresar, desde esa reali- dad m{fa, me puede hacer feliz, pues lo que me venga desde afuera podra estimularme mas 0 menos, pero es incapaz de darme ni una pizca de felicidad. Dentro de mi suena una melodia cuan- do llega mi amigo, y es mi melodia la que Depensencia del deseo eae me hace feliz; y cuando mi amigo se va me quedo Ileno con su miisica, y no se agotan las melodias, pues con cada persona suena otra melodia distinta que también me hace feliz y enriquece mi armonia. Puedo tener una melodia 0 mas, que me agraden en particular, pero no me agarro a ellas, sino que me agradan cuando estén conmigo y cuando no estan, pues no tengo la enferme- dad de la nostalgia, sino que estoy tan feliz que no afioro nada. La verdad es que yo no puedo echarte de menos porque estoy Ile- no de ti. Si te echase de menos seria recono- cer que al marcharte te quedaste fuera. ;Po- bre de mi, si cada vez que una persona amada se va, mi orquesta deja de sonar! Cuando te quiero, te quiero indepen- diente de mi, y no enamorado de mi, sino enamorado de la vida. No se puede cami- nar cuando se lleva a alguien agarrado. Se dice que tenemos necesidades emociona- les: ser querido, apreciado, pertenecer a otro, que se nos desee. No es verdad. Esto, cuando se siente esa necesidad, es una en- fermedad que viene de la inseguridad afectiva. ‘Tanto la enfermedad, necesidad de sen- tirme querido, como la medicina que se ansia, el amor recibido, estén basadas en premisas falsas. Necesidades emocionales para conseguir la felicidad en el exterior, no hay ninguna; puesto que tt eres el amor y la felicidad en ti mismo. S6lo mos- trando ese amor y gozandote en él vas a ser realmente feliz, sin agarraderas ni de- ea ge El amor es armonia Enamorado de la vida seos, puesto que tienes en ti todos los ele- mentos para ser feliz. La respuesta de amor del exterior agra- da y estimula, pero no te da més felicidad de la que ta dispones, pues tt eres toda la felicidad que seas capaz de desarrollar. Dios es la Verdad, la Felicidad y la Reali- dad, y Eles la Fuente, dispuesta siempre para llenarnos en la medida que, libre- mente, nos abramos a El. TU YA ERES FELICIDAD ip) espertarse es la tinica experiencia que vale la pena. Abrir bien los ojos para ver que la infelicidad no viene de la realidad, sino de los deseos y de las ideas equivocadas. Para ser feliz no has de hacer nada, ni conseguir nada, sino deshacerte de falsas ideas, ilusiones y fan- tasias que no te dejan ver la realidad. Eso sdlo se consigue manteniéndote despierto y llamando a las cosas por su nombre. Tu ya eres felicidad, eres la felicidad y el amor, pero no lo ves porque estas dormi- do. Te escondes detras de las fantasias, de las ilusiones y también de las miserias de las que te avergiienzas. Nos han progra- mado para ser felices o infelices (segun aprieten el botén de la alabanza o de la cri- tica), y esto es lo que te tiene confundido. Has de darte cuenta de esto, salir de la programacion y llamar a cada cosa por su nombre. Si te empefias en no despertar, nada se Dios es la Fuente Tit ya eres felicidad Salir de la programacién eee puede hacer. “No te puedes empefiar en hacer cantar a un cerdo, pues perderds tu tiempo y el cerdo se irritara.” Ya sabes que no hay peor sordo que el que no quiere oir. Si no quieres oir para despertar, seguirds programado, y la gente dormida y progra- mada es la mas facil de controlar por la so- ciedad. ' Dentro de mi suena una melodia cuando llega mi amigo, yes mi melodia la que me hace feliz; y cuando mi amigo se va me quedo leno de su muisica. ag Qee jDesprogramate! jSé tu mismo! Lo que haces como habito te hace dependiente porque te lo han programado. Sélo lo que surge de dentro es tuyo y te hace libre. o importante es ser capaz de darte cuenta de que no eres mas que un yo-yo, siempre de arriba para abajo, segtin tus problemas, tus disgustos 0 de- Ppresiones; que eres incapaz de mantener una estabilidad. Darte cuenta de que te pa- sas la vida a merced de personas, de cosas 0 situaciones. Que te manipulan o tt pue- des manipular. Que no eres duejio de ti ni capaz de mirar las situaciones con sosiego, sin enfados ni ansiedad. Toda esa actitud sdlo depende de tu programacién. Estamos programados des- de nifios por las conveniencias sociales, por una mal llamada educacién y por lo cultural. Vivimos por ello programados y damos la respuesta esperada ante situacio- nes determinadas, sin pararnos a pensar La cultura le programa oo qué hay de cierto en la situaci6n, y si es consecuente con lo que de verdad somos esa respuesta habitual y mecanica. Tenemos programadas ideas conven- cionales y culturales, que tomamos como verdades cuando no lo son. Como la idea de patria, de fronteras y habitos culturales que nos llevan a conflictos cuando nada tienen que ver con la verdad. ;DESPROGRAMATE! uando venia hacia aqui, en el avidén, me dijeron: —Mira, ya salimos de la India, ahi esta la frontera. Yo me asomé y por mas que miraba no vi ni una linea, ni una barrera natural de separacién. ;Es que existen las fronteras en la naturaleza? No estan mas que en nuestra mente. Toda tierra es de todos, y toda cultura no es mds que ideas que nos separan. Hubo un nifio blanco que se perdid en la selva y se crié en una tribu con cultura distinta. Cuando crecié se casé con una na- tiva de aquella cultura. Ocurrié que a una amiga de su mujer se le murié su marido en la guerra, y aquella noche, al pensar en su amiga sola, la mujer nativa le dijo al marido blanco: —Oye, me gustarfa que fueses a conso- lar a mi amiga, que esta sola, y como ya no tiene marido te acostases con ella. El marido, que recordaba atin rasgos de aan Gee No hay fronteras su cultura, se negaba, horrorizado, pero al final complacié a su mujer. Cuando volvié, la mujer le dijo: —Ya sabia que eras un buen hombre y ahora te quiero més, porque eres compasi- vo y me siento orgullosa de ti. iQué bella su cultura, pero qué dificil de entender y seguir para nosotros! No existe separaci6n de razas, s6lo distintas culturas programadas en nuestras mentes. En la na- turaleza no existen fronteras. El honor, el éxito y el fracaso no existen, como tampo- co la belleza ni la fealdad, porque todo con- siste en una manera de ver de cada cultura. Es lo cultural lo que provoca esas emocio- Patria, politica nes ante el nombre de patria, raza, idioma yeultura © pueblo. Son distintas formas de ver que estén programadas en nuestra mente. La patria es el producto de la politica, y la cul- tura es la manera de adoctrinar. Cuando eres un producto de tu cultura, sin cuestionarte nada, te conviertes en un robot. Tu cultura, tu religiosidad y las dife- rencias raciales, nacionales 0 regionales te han sido estampadas como un sello y las tomas como algo real. Te ensefiaron una religiosidad y una forma de comportarte que no has elegido, sino que te vinieron impuestas desde fuera, antes de que tuvie- ses edad 0 discernimiento para decidir, y sigues asi, con ellas colgadas, como una piedra al cuello. Lo cierto es que el dolor existe porque rechazamos que lo tinico sustancial es el amor, la felicidad, el gozo. ap Sélo lo que nace y se decide desde aden- tro es auténtico y te hace libre. Lo que ha- ces como habito y que no puedes dejar de hacer porque te domina, te hace depen- diente, esclavo de lo que crees, porque te lo han programado. Sélo lo que surge de dentro lo analizas, lo pasas por tu criterio y te decides a ponerlo en practica asu- miéndolo; es tuyo y te hace libre. Tienes que liberarte de tu historia y su programacién para responder por ti mis- mo y no de personaje a personaje. Lo mismo ocurre con lo que creemos amor y que no es mas que un modelo cul- tural aceptado por la mente. No se puede vivir influenciado por el pasado. Lo me- nos que se puede hacer por el amor es ser sincero, tener claridad de percepcién y la- mar a cada cosa por su nombre. Ser capaz de dar la respuesta precisa sin enganar ni engafiarte. Porque te amo te doy la res- puesta, desde mi realidad, que te corres- ponde a tiy a tu realidad, en este momen- to. Mas tarde no sé lo que puede ocurrir, y por ello no te hago promesas que no sé si podria cumplir. Esto es lo menos que puedes exigirle al amor: sinceridad. La espiritualidad consis- te en ver las cosas, no a través de cristales de color, sino tal como son. La espirituali- dad ha de nacer de ti mismo; y cuanto mas seas tti mismo, serds mas espiritual. La libertad Sinceridad en el amor NO SEAS FOTOCOPIA ‘0 imites a nadie, ni siquiera a Je- sus. Jestis no era copia de nadie. Para ser como Jestis, has de ser tui mismo, sin copiar a nadie, pues todo lo au- téntico es lo real, como real era Jestis. La culpabilidad y la critica no existen mas que en la mente de la cultura. Las per- sonas que menos se preocupan de la vida de ahora, de vivir el presente, son las que mis se preocupan por lo venidero. Preocti- pate por estar despierto, vive ahora y no te importaré el futuro. Cuando tu mentali- dad cambia, todo cambia para ti, a tu alre- dedor. Lo que antes te preocupaba tanto, ahora te importa un bledo y, en cambio, vas descubriendo cosas maravillosas que antes te pasaban inadvertidas. Lo que mds les preocupa a las personas programadas es tener raz6n. Tienen miedo a perder sus ideas, en las que se apoyan, porque les dan pavor el riesgo, el cambio, la novedad, y se agarran a sus viejas ideas porque estan fosilizadas. Nuestra vida se convierte en un lio por- que tomamos por realidad lo que no son mas que programaciones que no nos sir- ven de nada y nos agarramos a ellas por- que no sabemos descubrir otra cosa. En el fondo, tenemos una enorme inseguridad y, para sentirnos mejor, vamos a consultar a los que creemos que saben mas que noso- tros, creyendo que ellos nos van a solucio- nar los problemas. Pero los problemas, que Presente y futuro Los problemas estdn en nuestra imaginacién eons solo existen en nuestra imaginacién, sdlo despertando los solucionaremos. FACIL Y DIFICIL e cuenta que habia un gran maestro Iamado Buso, que vivia con su esposa y una hija, todos con fama de sabidu- ria y santidad. Un dia se acercé un hombre 4 jtuminacién al maestro y le pregunts: es facil —La iluminaci6n, jes facil 0 dificil? Y Buso le contests: —Es tan dificil como alcanzar la Luna. No conforme, el hombre se acercé a la mujer de Buso y le hizo la misma pregun- ta, a lo que ella le contesté: —Es muy facil. Es tan facil como beber- se un vaso de agua. Intrigado se quedé el hombre y, para sa- lir de dudas, le hizo la misma pregunta a la hija del maestro, que le contests: —jHombrel, si lo haces dificil es dificil, pero si lo haces facil... Lo mas diffcil es la capacidad de ver, ver simplemente, con s nceridad, sin engafar- se, porque ver significa cambio, nada a qué agarrarse, y estamos acostumbrados a buscarnos asideros y a andar con muletas. En cuanto llegas a ver con claridad, tienes que volar; y volar es no tener nada de qué agarrarte. Necesitamos desmontar la tien- Volar se puede En la naturaleza no existen fronteras. No estdn mds que en nuestra mente. Toda tierra es de todos, y toda cultura no es mds que ideas que nos separan. =o" da en la que nos refugidbamos y seguir por el sendero adelante sin apoyos. El susto mayor es por la aniquilacién de todo miedo, puesto que los miedos han si- do el manto en el que te envolvias para no ver ni ser visto. Dejar las cosas atras y en- frentarte a la felicidad, cuando no quieres ser feliz a ese precio. Una felicidad que has de expresar tt y no esperar a que te la den hecha. Aunque vas diciendo que buscas la felicidad, lo cierto es que no quieres ser fe- liz. Prefieres volver al nido antes que volar porque tienes miedo, y el miedo es algo conocido y la felicidad no. En mi profesién de psic6logo advierto cada dia esto. Lo primero que tiene que en- tender el buen psicdlogo es que el que vie- ne a él no busca la curaci6n, sino el alivio, la comodidad, pero no quiere cambiar; es demasiado expuesto y comprometido. Es como aquel que esta metido en la porquerfa hasta la boca y que lo tinico que le preocupa es que no le hagan olas, no que lo saquen de alli. Lo malo es que la mayo- ria equipara la felicidad con conseguir el objeto de su apego, y no quiere saber que la felicidad esta precisamente en la ausencia de los apegos, y en no estar sometido al po- der de ninguna persona o cosa. CONOCERSE A FONDO ara despertarse, el tinico camino es la observacién. El ir observéndose uno a si mismo, sus reacciones, sus Miedo a la felicidad —41— habitos y la raz6n de por qué responde asi. Observarse sin criticas, sin justificaciones ni sentido de culpabilidad ni miedo a des- Obseroarse cubrir la verdad. Es conocerse a fondo. =“ """° El indagar e investigar quién es Jesu- cristo es muy loable, pero gpara qué sir- ve? gTe puede servir para algo si no te co- noces a ti mismo? ;Te sirve para algo si estas controlado y manipulado sin saber- lo? La pregunta mas importante del mun- do, base de todo acto maduro, es: ; Yo, quién soy? Porque, sin conocerte, no puedes co- nocer ni a Dios. Conocerte a ti mismo es fundamental. Sin embargo, lo curioso del caso es que no hay respuesta para la pre- gunta quién soy yo?, porque lo que tienes que averiguar es lo que no eres, para llegar al ser que ya eres. Hay un proverbio chino que dice: “Cuando el ojo no esta bloqueado, el resul- tado es la visi6n. Cuando la mente no esta bloqueada, el resultado es la sabiduria, y cuando el espiritu no esta bloqueado, el re- sultado es el amor.” Hay que quitar las vendas para ver. Si no ves, no puedes descubrir los impedi- mentos que no te estén dejando ver. El observarte a ti mismo es estar atento a todo lo que acontece dentro y alrededor de ti, como si esto le ocurriese a otra perso- na, sin personalizarlo, sin juicio ni justifi- caciones ni esfuerzos por cambiar lo que esta sucediendo, ni formular ninguna criti- 6. pionar ca ni autocompadecerte. Los esfuerzos que para cambiar Quitarse las vendas A hagas por cambiar son peores, pues luchas contra unas ideas, y lo que hay que hacer es comprenderlas, para que ellas se caigan por si solas una vez que comprendas su falta de realidad. Hay que cuestionar todo esto para ver si se comprende como una verdad y entonces te pondras a observarte. LA VIDA OBSERVADA A veces te sientes mal, hecho un lio, no sabes funcionar solo y te vas al psicdlogo a que te arregle. El psicdlogo no puede hacer nada que tt no hagas. No puede conseguir nada que tu no estés dispuesto a hacer. Puede escucharte y ayudar a que ti mis- mo vayas aclaraéndote mientras hablas. En verdad, lo que haces alli es observarte, y eso es lo que has de hacer tu, pero de con- tinuo. Yo soy psicdlogo y puedo decirte que la terapia, la mayoria de las veces, lo que hace es un intercambio de problemas: te quita uno, pero te mete otro. La espiritualidad es la que intenta solu- cionarte. Busca solucionar el problema del yo, que es el que esta generando los pro- blemas que te llevan al-psicdlogo y al psi- quiatra. La espiritualidad va directamente a la rafz, a rescatar tu yo, el auténtico, que esta ahogado por barreras que no lo dejan ser libremente. El hacer esfuerzos por cambiar es con- traproducente, pues lo que te va a cambiar es la verdad: observar la verdad y com- prender que tu programacién no te deja La espiritualidad como terapia ser tti mismo. El observar es lo que te vaa cambiar. “La vida no observada, no exami- nada, no vale la pena vivirla, porque no es vida”, decia Sécrates. Es preciso darse cuenta de todas las reacciones que surgen al mirar a una per- sona, un paisaje o a uno mismo. Observar cémo sueles reaccionar frente a determi-_ sin prejuicios nadas situaciones. Mirar con objetividad, "«tiquetas como si no fueras tt, tomando conciencia de lo que pasa dentro y fuera de ti, estan- do atento (como cuando conduces). Hacer- lo sin juicios valorativos, porque si te po- nes etiquetas, ya no ves las cosas como son. Caer en la cuenta, sin prejuicios, slo entendiéndolo. Tenemos que darnos cuenta de que, con. la palabra, o con el pensamiento, solemos etiquetar las cosas y las personas, y luego, como consecuencia de ello, vivimos el per- sonaje de la etiqueta, y no la persona. Po- nerse en contacto con la realidad es mirar ésta sin querer interpretarla, ni cambiar nada, sino dejar que la realidad cambie el orden de las cosas luciendo por sf misma. Si no cambiamos esponténeamente es porque ponemos resistencia. En cuanto pg. istencia descubramos los motivos de la resistencia, at cambio sin reprimirla ni rechazarla, ella misma se disolvera. Cuando en nosotros hay sensi- bilidad, no se necesita violencia alguna pa- Para ser como Jestis, has de ser tii mismo, sin copiar a nadie, pues todo lo auténtico es lo real, como real era Jestis. —44— ra conseguir las cosas que necesitamos, pues todo se resuelve entendiendo, com- prendiendo; y nos sorprendemos al ver cé- mo todo se resuelve segtin comprendamos la realidad y no luchemos contra ella. METODOS PARA SER FELIZ arte cuenta del dolor, de la aflic- ci6n o del desasosiego que sufres y cual es el motivo; de dénde sale, en verdad, ese sufrimiento. Si te sientes molesto, darte cuenta en seguida de ello, y de donde nace este malestar. (Si dices que estas molesto porque alguien se ha porta- do mal contigo, no se puede entender que tu te castigues porque otro se comporta mal. Tiene que haber otro motivo mas per- sonal y escondido. Obsérvalo.) Darte cuenta de que el sufrimiento o las molestias se deben a tu reaccién ante un hecho 0 una situacién concreta y no a la realidad de lo que esta ocurriendo. (Si vas a iral campo y Ilueve, el enfado no esta en la lluvia —que es la realidad—, sino en tu reacci6n porque se han contrariado tus planes.) Solemos echar la culpa a la realidad y no queremos darnos cuenta de que son nues- tras reacciones programadas las que nos contrarian. Tenemos unos habitos inculca- dos, que funcionan como una maquinita automatica: a tal pregunta, tal respuesta; a tal contrariedad, tal reaccién. Y funciona- mos como autématas. La cultura nos incul- Darse cuenta Somos autématas eee ca unas leyes rigidas, cuya tinica raz6n es que asi se ha hecho siempre. Y con esta razon tan endeble somos capaces de matarnos por defender: honor, patria, bandera, raza, fa- milia, buenas costumbres, orden, ideales, buena fama y muchas mas palabras que no encie- rran mas que ideas sin sentido real, que nos han inculeado como cultura. Y lo mis- mo ocurre con las ideas religiosas Lo importante es el ser, y no el figurar. ser, no figurar La verdad es que estamos tan metidos en esa programacién que actuar con claridad de percepcién, desde esa cultura, casi pa- tece un milagro, y mds si pretendemos reaccionar sin disgusto. Hay que desper- tarse antes para comprender que lo que te hace sufrir no es la vida, sino tus alucina- ciones, y cuando consigues despertar y apartas los suefios, te encuentras cara a ca- ra con tu libertad y con la verdad gozosa. Lo cierto es que el dolor existe porque re- chazamos que lo tinico sustancial es el amor, la felicidad, el gozo. Cuando somos capaces Amor-felicidust de encontrar el camino despejado, para ese amor-felicidad que somos, nos topamos con el dolor, que no es nada concreto ni sustan- cial por si mismo, sino la ausencia de la per- cepcién del amor-felicidad. Como la oscuri- dad, que no existe, sino que es consecuencia de la menor percepci6én de la luz. Lo mas dificil es la capacidad de ver, ver simplemente, con sinceridad, sin engafiarse, porque ver significa cambio. La vida es, en sf, un puro gozo y tt eres amor-felicidad como sustancia y potencial para desarrollar. Slo los obstaculos de la mente te impiden disfrutarla plenamente. Son las resistencias que pone tu progra- macién lo que te impide ser feliz. De no tropezar con tu resistencia, ;dénde estaria el dolor? Habria una armonia en ti, igual a la que existe en la naturaleza. Mas aun, pues ti eres rey de esa naturaleza y dota- do de una sensibilidad para captar la bon- dad, la felicidad y la belleza, que te hace creativo y capaz ya, no sélo de ser feliz, si- no de dar amor-felicidad a manos llenas. Con sdélo observar todo esto ya estas dando un paso para tu despertar. Todo de- pende de tu reaccién, y ésta depende de tu programacion; y si eres capaz de observar esto y comprenderlo, ya tendrds bastante. Eres rey de la naturaleza Lo importante es el ser, y no el figurar. 4p jReconoce tu anadidura! Estar despierto es no dejarse afectar por nada, ni por nadie. Y eso es ser libre. oda programacién y todo condicio- namiento te llevan a ser un robot. Los habitos sirven para cosas practi- cas (capacidad de andar, de hablar un idio- ma, de conducir un coche...), pero para ver las cosas con profundidad, en el amor y la comunicacién, los habitos son como anestesiar la creatividad, lo nuevo, y no desear vivir el riesgo del presente Lo malo es que hasta la espiritualidad ha sido objeto de programacién, de desfi- guracién, pues la espiritualidad es como la realidad; pero todo lo valioso es suscepti- ble de distintas interpretaciones y manipu- laciones. Cada persona tiene una forma de reac- cionar y de interpretar. Yo conozco a un sa- cerdote que esta deseando tener un cancer El riesgo del presente See eee para morir sufriendo... Otros, la mayoria, se llevarian un gran disgusto al saber que tienen cancer. Tanto una actitud como la otra no dejan de ser producto de una pro- gramacion religiosa o cultural. Cuando una persona programada te ofende sin motivo, tan programado estas ti como ella, por dejarte ofender, porque las dos reacciones son igual de absurdas e irreales. Ocurre que, cuanto estas dormido, te molestan las personas que estan dormi- das, porque la programacién del otro afecta la tuya, te la recuerda, y eso es lo que mas te molesta, aunque no quieras reconocerlo. Si cuando un nifo o un mono te hacen una mueca, reaccionas enfadadndote, sefal de que eres tan nifio o tan mono como ellos. Estar despierto es no dejarte afectar por na- da, ni por nadie. Y eso es ser libre. Tu eres el que ha de elegir tu propia reacci6n frente a las cosas, situaciones y personas, no los habitos ni tu cultura. Si si- gues programado, tienes que saber ver que esa programacién es el control del que se vale la sociedad para imponerte sus cri- terios. Estamos siendo controlados en la medida en que seguimos dormidos: por el consumismo, por la politica, por el poder, por el trabajo y por el ocio. Las competicio- nes han pasado de ser un juego entreteni- do y saludable, a ser actos de odio. Antes se jugaba por el puro placer de jugar; aho- ra, en las competiciones, se contamin6 el deporte con el veneno de vencer y elevar- se por encima del vencido. oa Las ofensas no existen Lo mejor del hombre es el amor, y no lo- grar una marca, humillando a los vencidos. Yo soy mejor que ti y por ello consigo la ad- miracién y la fama; pero zen qué eres mejor que yo?, gen correr?, gen saltar?, gen meter una bola entre dos palos y dentro de un ces- to? Y eso, gpara qué sirve?, zamas con ello?, ite hace mds persona? Lo peor de todo esto son las comparaciones que miden al hom- bre ajustandolo a una medida ideal, rigida, y ponen en acercarse a ese modelo del ido- lo, toda energia y todo condicionamiento; épara qué?, para que resplandezcan los va- lores auténticos, genuinos. Vivimos en una era adoctrinada. Hasta al Santo Padre, al asistir a la consagracién de un grupo de cardenales, se le escapd decir: “Estos 150 cardenales que han teni- do el honor de ser elegidos...” ;Es un ho- nor ser cardenal? ;No es mas bien un ser- vicio? Estamos adoctrinados y nos dejamos arrastrar por las programaciones. Vivir li- Adoctrinamiento bremente, siendo duefio de uno mismo, es no dejarse llevar ni por persona ni situacién. alguna. Saber que nada ni nadie tiene po- der sobre uno ni sobre sus decisiones. Eso es vivir mejor que un rey, y saber oir esa hermosa sinfonia de la vida y disfrutarla. Lo contrario al miedo es el amor. Donde existe el amor no hay miedo alguno. Yel que no tiene miedo alguno no teme Ia violencia, porque él no tiene violencia alguna. Toda violencia viene del miedo y crea més violencia. any aes A veces puede haber emociones 0 de- presiones, por trastornos fisicos 0 psiqui- cos, pero eso ya no te trastorna, porque ya no te quita la capacidad de ser feliz y alegrarte con lo mucho hermoso que se produce a cada momento ante tus ojos. La depresién esta ahi, tt la observas, pero ya no te identificas con ella. Es algo que esta sucediendo por un motivo que conoces y, por lo tanto, esta controlada. Nada puede contra ti. Ocurre fuera de tu ser. EN CUANTO METES TU YO... anta Teresa dijo que Dios le concedid el don de desidentificarse de si misma y poder ver las cosas desde fuera. Es- te es un gran don, pues el tinico obstéculo y taiz de todo problema es el yo. Desiden- tificarse significa no afectarnos por lo que esta ocurriendo —vivirlo como si le ocu- triese a otro—, pues en cuanto metemos nuestro yo en cualquier persona, situacién © cosa, preparémonos para sufrir. Vivir de- sidentificados es vivir sin apegos, olvida- dos del ego, que es el que genera egoismo, deseo y celos, y por el cual entran todos los conflictos. Otra cosa que nos muestra que estamos programados es creer que cada uno estd en posesién de la verdad. Cada religién cree tener la verdad y ser la tinica, la exclusiva. 2Por qué? Temen perder si reconocen que puede haber verdad en cada una y en to- das ellas. Si viviésemos desidentificados Ege Cémo superar las depresiones Ver las cosas desde fuera de nuestras creencias, no nos preocuparia- mos por lo que lleven de acertado o no. Las creencias pueden cambiar, lo impor- tante es lo esencial que descubramos den- tro de nosotros y que nos lleva a ir buscan- do la verdad, y saber que es de todos. Despertarte es despertar a la realidad de que no eres el que crees ser. Esto es desiden- tificacion. Sdlo podras conseguir esto cuan- do seas capaz de atribuir tus tribulaciones a tu programacion y no a la realidad. Cuan- do uno se aflige, intenta cambiar la reali- dad para ajustarla a su pro; ramacién, pues cree que ésa sera la solucién a su proble- ma; pero como no lo consigue, su frustra- cién viene a sumarse a su afliccién y el problema no se aclara. Si el problema viene de tu programa- cidn, no puedes cambiar la vida y a los de- més, sino desprogramarte o ver, por lo menos, claramente, de dénde viene el pro- blema. Si cambias y te abres a la realidad, verds c6mo todo cambia a tu alrededor, pues era tu mente la equivocada, y al cam- biar tu mente y abrirte a la realidad, cam- biaré tu manera de ver y de vivir llamando cada cosa y situacién por su nombre. Recuerda aquello de: “En vez de alfom- brar todo el mundo para que no tropieces, es mas facil que te calces unas zapatillas.” zSe consigue la felicidad en esta vida? Cuando sueltes tus alucinaciones, te dards cuenta de que la felicidad siempre estuvo en ti, pero se metieron las exigencias de por medio, la cultura, los deseos, los mie- La verdad es de todos Todo cambiard ee dos, con sus mecanismos de defensa, y la fueron ahogando. Darnos cuenta de esto ya es dar un gran paso. Una persona, con tantas exigencias y problemas, no puede amar, ni encontrar la felicidad, porque ya tiene bastante con de- Gates Aa fenderse de lo que cree que la esta atacan- “6°” do. En ese estado, lo que Ilamamos amor es egoismo, amor a nuestro ego, interés propio. Nos sentimos tan mal y con tantos miedos, que sdlo podemos mirarnos a no- sotros mismos, vigilandonos con recelo porque, en verdad, tampoco nos amamos. Amor es pura gratitud, y nosotros nos ponemos condiciones. Y si nos ponemos condiciones a nosotros mismos, gcémo no vamos a ponérselas a los demas? Conver- timos eso que Ilamamos amor en un egois- mo refinado que utilizamos, 0 para darnos 5; .,,., placer, 0 para evitar sensaciones desagra- ne vs comercie dables, sensaciones de culpabilidad, o miedo al rechazo. Para evitar esto, comer- ciamos con lo que Ilamamos amor. Si so- mos capaces de ver esto y de llamar las co- sas por su propio nombre, ya vemos claro. RECONOCE TU ANADIDURA Dios sélo se lo encuentra por un proceso de sustraccién. Sabiendo lo que no es, no afiadiéndole nom- Encontrar bres, conceptos y etiquetas, encontraremos * Pies Las acciones pueden ser malas o buenas, siempre dependerén de la madurez y cordura del que las cometa. ena R a a Dios. Dios es, y por ello es inaprensible, no lo podemos enmarcar ni clasificar por- que escapa a toda objetivacion. Por eso, el ser humano es también inaprensible, por- que es semejante a Dios. Cuantas mas ana- diduras le pongamos al ser, menos lo co- noceremos. Hemos de dejarlas caer todas. Y lo mismo con la realidad. Si yo le exijo a la realidad unas condiciones, 0 le pongo unas afiadiduras, me alejaré de la realidad, la verdadera, y estaré siempre chocando con lo falso. Los misticos son los que se han abierto confiadamente a la realidad, sin preocu- parse por el resultado, pues saben que s6- lo en la realidad habita la verdad. Meterse en la batalla de la vida, pero con el corazon en paz, es la tinica manera de vivir la realidad de la vida. Es cumplir Ja voluntad de Dios. Para ello, el primer paso es reconocer Ja afadidura, darte cuenta con sinceridad de tus bloqueos y obstaculos. El segundo paso es mirar la causa, sa- biendo que esta fuera de la realidad. Sin culparte ni justificarte. Tu no tienes la cul- pa de esa programacién, y cuando caes en los habitos, no lo haces adrede. Ti eres vic- tima de tu propia diagramacién. No estés descontento, irritado y molesto contigo mismo, porque eso no te va a ayudar. Y si sufres, si te afliges, no tomes tu afliccién por tu ser. Desidentificate de ese sufri- miento. El yo, gquién es? gSoy un cuerpo? No, La batalla de la vida No culpparse 502 porque las células de mi cuerpo son renova- das continuamente y, en siete aos, no que- da ni una de las anteriores y, sin embargo, sigo siendo el mismo. Yo no soy mi cuerpo, pero tampoco soy mis pensamientos, pues ellos cambian continuamente y yo no. Ni tampoco soy mis actitudes, ni mi forma de expresarme, ni de andar. Yo no puedo iden- tificarme con lo cambiable, que abarca las formas de mi yo, pero no es mi yo. Tu eres el ser, lo que es. El cielo es, no cambia; las nubes si. Lo unico que puedes buscar es lo que no eres, pues en cuanto puedes objetivarlo ya no lo eres, sino que es una forma, una expresi6n de lo que real- mente eres. Puedes buscar lo que no eres, y al ir apartando tus formas y afiadiduras, te irds liberando de ideas equivocadas so- bre ti y, detras de todo esto, ird surgiendo tu ser. Asi es que el tercer paso es no identifi- carte con las formas que cambian, ni ape- garte a ellas, ni rechazarlas, ni ponerles etiquetas, ni valorarlas dandoles una im- portancia que no tienen. Llamarlas por su nombre: son formas nada mas, y si les das batalla, toman una importancia que, en si, no tienen. Cuando las mires tal como son, perderan importancia y se replegaran a su lugar. Hay que comprenderlas, entender por que estan ahi, para que no te estorben ni molesten. Entonces la importancia que les hayas dado hasta ahora se va, porque no es real, no existe, y descubres que no eran mas que alucinaciones del suefio de —60— EQuién soy yo? Las cosas por su nombre un ser dormido. No hay que violentarse con nada ni para mejorarlo ni para cam- biarlo. Lo que es, es, y s6lo lo es por su pro- pia causa, nada lo puede dafar si esta des- pierto. RESULTADO DE NADA 1 mfstico vomita antes el fruto del bien y del mal para poder entrar de nuevo en el Paraiso. No enjuicies nada, sino comprende el porqué y el lugar de las cosas. La felicidad no es el resultado de nada. Ella es, en si misma, y la descu- bres cuando te libras de todo juicio y afia- didura. Cuando quieres arreglar las cosas, metes en ellas tu yo endemoniado, tu ape- go, y lo estropeas todo. Entra solo en la realidad. No te apegues, ni siquiera a la li- beracién, porque ella no es aprensible, no se deja apresar, y lo que hards es crearte otras cadenas, otra esclavitud. Sdlo tienes que ver las cosas como son. Las cosas sdlo seran cuando deban ser, por mucha prisa que te des. La realidad no es algo que se pueda forzar ni comprar. Se trata de ver la realidad tal como es. Lo cier- to es que ya estas en ella, siempre lo has es- tado, pero la buscas, como aquel pez que iba loco buscando el océano. Lo tinico que no te deja es tu programacién y tus exigencias. Nadie hace el mal sin una justificacién. Es la justificacion la que lo engafia. Nadie se dafia a si mismo conscientemente, sino inconscientemente. El que hace el mal es No enjuiciar Ver la realidad como es apie un loco que no merece castigo, sino cura. No se puede condenar al que peca, sino el pecado, que es un error. Las acciones pue- La matdad den ser malas o buenas, y siempre depen-_ "° ¢#" dera de la madurez y cordura del que las cometa. No puede llamarse malo al que comete actos equivocados creyendo que los hace bien, 0 al que hace eso compulsi- vamente, defendiéndose de peligros que solo estan en su imaginacién. Ese es un lo- co, un ser dormido al que hay que desper- tar, o un enfermo al que hay que curar. Nadie hace las cosas malas adrede, fria- mente, por maldad, por la sencilla razén de que el componente sustancial de nues- tro ser es el amor, la bondad, la felicidad, la belleza, la inteligencia como luz de la verdad. Si esta sustancia esta ahogada por los miedos, por el sufrimiento, la tinica so- luci6n es sacar lo que estorba. Las cosas se observan para ver la ver- dad que hay detras de las formas con que ree se cubren. Uno puede tener en la mano un hay gue papel sucio creyendo que es un cheque de “Perr mucho valor. Si lo haces renunciar a él o se lo quitas antes de que descubra su valor real, esa persona siempre estara creyendo que le quitaron algo de valor y se compor- tard como un ser estafado, engafiado, des- pojado, y sus reacciones serdn de autode- fensa. Asi nunca despertard a la realidad. Estamos siendo controlados en la medida en que seguimos dormidos: por el consumismo, por la politica, por el poder, por el trabajo y por el ocio. eaGj Primero habra que despertarlo y luego él mismo ser el que tire el papel sucio, rién- dose del engafio en que estuvo metido. Y entonces si quedara liberado. Y si renuncias voluntariamente a algo, creyendo que es un valor y que has hecho un sacrificio con ello, siempre te vanaglo- riards de lo que has hecho y pediras apro- bacién y admiracién de los demas. Pero si antes despiertas y comprendes que en esa renuncia tuya no hay nada de valor, que lo que has hecho es buscarte a ti mismo, jc6- mo te vas a vanagloriar de renunciar a al- go que no servia para nada? Al contrario, te sentirds bien por haberte liberado de al- go que te impedia ser mas ti mismo. Pero ademas, entonces, comprenderas con hu- mildad a aquellos que atin se sienten ape- gados a lo que tt ya has renunciado por estar despierto. NO TENGAS MIEDO 6mo seria Jestis para que todos $ los sencillos se sintieran tan a 1a gusto con El? Jestis no se sentia superior a los demas porque vivia en la realidad. La sefial de estar en contacto con la realidad es la sencillez. El miedo es lo que nos lleva a quedar- nos en la programacién. Lo contrario al miedo es el amor. Donde existe el amor no hay miedo alguno. Y el que no tiene miedo alguno no teme la violencia, porque él no Comprenderds con Inonildad Jestts vinta en la realidad emgjam tiene violencia alguna. Toda violencia vie- ne del miedo y crea mas violencia. El que se enfada es que tiene miedo. Nosotros huimos de los enfados porque provocan nuestros miedos y, a la vez, nos ponen violentos. Nos asustamos de la agresividad porque despierta nuestra pro- pia agresividad. Nos defendemos no por justicia, sino por miedos. E] mistico es el que es capaz de liberar- se completamente del miedo, Por eso no es violento. El enemigo del amor no es el odio, sino el miedo. El odio es sdlo una consecuencia del miedo. El miedo genera los deseos. Los deseos son otra consecuen- cia del miedo. El que nada teme est4 segu- ro y nada desea. Hay un deseo comtin, que es el cumpli- miento de lo que se cree que va a dar feli- cidad al yo, al ego. Ese deseo es apego, por- que ponemos en él la seguridad, la certeza de la felicidad. Es el miedo el que nos ha- ce desear agarrar con las manos la felici- dad, y ella no se deja agarrar. Ella es. Esto s6lo lo descubrimos observando, bien des- piertos, viendo cudndo nos mueven los miedos y cuando nuestras motivaciones son reales. Si nos agarramos a los deseos, es senal de que hay apego. EL PEZ TEN{A SED ienes dos maneras de ver, de obser- var. Una manera intelectual, tedrica, sin profundizar. La otra manera de —64— Agresividad y violencia La felicidad ES ver es existencial, mirando desde tu pro- pia vida, desde tu ser. San Pablo dice: “Veo lo que debo hacer, y hago lo que no quie- ro.” Al decir esto se refiere al ver intelec- tual, que a nada compromete poque no es un ver revelador. Cuando lo ves desde lo existencial, lo ves desde la libertad que te da la verdad y entonces lo ves tal cual es, y esa revelacién hace que despiertes a la realidad. Habia una vez un arabe que viajaba en Ja noche, y sus esclavos, a la hora del des- canso, se encontraron que no tenian mas que 19 estacas para atar a sus 20 camellos. Cuando lo consultaron al amo, éste les dijo: —Simulad que clavais una estaca cuan- do leguéis al camello ntimero 20, pues co- mo el camello es un animal tan estapido, se creera que esta atado. Efectivamente, asi lo hicieron, y a la ma- fana siguiente todos los camellos estaban en su sitio, y el ntimero 20 al lado de lo que se imaginaba una estaca, sin moverse de alli. Al desatarlos para marcharse, todos se pusieron en movimiento menos el ntimero 20 que seguia quieto, sin moverse. Enton- ces el amo dijo: —Haced el gesto de desatar la estaca de la cuerda, pues el tonto atin se cree atado. Asi lo hicieron y el camello entonces se levanto y se puso a caminar con los demas. sta es una buena imagen que puede ilustrar nuestra estupidez humana cuando estamos programados e incapaces de ver por nosotros mismos ni decidir por noso- La revelacion Nuestra estupidez humana 65 tros mismos, sino por habitos, por unos gestos determinados, por la costumbre y por nuestra programacidn. Lo del pez que tenia miedo a ahogarse seria la mejor defi- nicién del hombre frente a su realidad. Cuando estamos dormidos no tenemos miedo de los suefios, pero si tenemos mie- do de despertar a la realidad, porque supo- ne un cambio. Supongo que preferir el sue- fio a la realidad es de idiotas, pero asi es. Kabir decia: “Me rei mucho al ver que el pez en el agua tenia sed.” Esta es nuestra propia realidad de dormidos. Sélo se des- piertan los que desean despertarse. Tratar de convencer a los que no lo entienden es como irritar al cerdo. MENUDO DESCANSO E I sufrimiento que padeces es el equi- valente a tu resistencia a la realidad. El resistirte a la verdad hace que choques con la realidad, que te esta dicien- do que no es por ahi, que revises tus plan- teamientos para que se ajusten a la verdad. Silo comprendes asi, crecerds. Si no lo com- prendes y te empefias en seguir obcecado y dormido, sufrirés sin remedio. En cuanto entiendas esto, por la observacién que te dé luz para descubrir tu realidad, se acabaran tu sufrimiento y tu irritacion. Quiénes despiertan Final del sufrimiento Despertarse es despertar a la realidad de que no eres el que crees ser. —66— Es muy importante, pues, ver, observar lo que te perturba para entender lo que an- da mal en ti. Al descubrir esto, verds c6mo cambia tu escala de valores. Vas descu- briendo tesoros por todas partes, mientras se va cayendo, por si sdlo, lo que no vale. No sabes bien lo que supone, la paz que consigues, cuando dejas caer la carga de tu supery6 de una posicién que te empefia- bas en mantener y que suponia tantos es- fuerzos y frustraciones; la raz6n que siem- pre querfas tener, el afén por defender tu imagen, tu nombre, tu prestigio, y todo lo que mantenias para impresionar, para que te valorasen o te tuviesen en cuenta. ;Pufl, épara qué servia todo eso? Menudo des- canso cuando lo tiras todo por la borda. Y lo paraddjico es que lo mantenias porque buscabas en ello remedio a tu inse- guridad, y la verdadera seguridad la al- canzas cuando lo sueltas todo. Ese es tu premio, con el que te sorprende la reali- dad. Y resulta que tienes motivos para es- tar siempre contento, pues las experiencias buenas son siempre gratificantes, y las ma- las te proporcionan crecimiento, al seiia- larte los obstaculos. Incluso las personas que te dan la lata, son motivo para que cambies, al conocerte mejor; y yano te em- pefias en cambiarlas a ellas. No hay nada mas clarividente que el amor. En cambio, la emocién del apego, Cambiar la escala de valores El premio de la realidad Acciones vs. reacciones Meterse en la batalla, pero con el corazén en paz, es la tinica manera de vivir la realidad de la vida. eng 7es que tomas por amor, te hace ciego. Si estas apegado a tu amigo, no podras verlo, por- que te lo impedira tu emocién. La emocién del apego trae consigo reacciones, pero no acciones. Para las acciones tienes que estar despejado y despierto. Amar es escuchar todos los instrumentos El amor va siempre unido a la verdad y a Ia libertad, y por eso nunca es débil. 0 no soy nada de lo que creo ser: mis cosas, mi cuerpo, mis senti- mientos. Mi yo es indefinible por- que no hay nada que lo defina. Cuando yo me relaciono con otra persona, {con quién me relaciono?, gcon una imagen? Cuando me relaciono tengo nocién del otro como unas experiencias, unos recuerdos, y con estas nociones construyo su imagen. Asi es que no me relaciono con esta persona, sino con la memoria que tengo de ella. Cuando abrazo a un amigo, {a quién abrazo? Abra- zo un recuerdo. Es asi, y lo cierto es que, si yo fijo la persona a la memoria que tengo de ella, la estoy fijando a un prejuicio. Y asi funcionamos por la vida, juzgando por prejuicios. Como consecuencia de ellos, si conocemos a una persona sdlo por Los prejuicios —B— sus habitos, cuando esa persona cambia, lo notaran sdlo las personas despiertas 0 los que acaben de concerla, pues para los otros sigue fijada a sus hdbitos, que son lo que recuerdan. Por ello, nadie es profeta en su tierra ni entre su familia, por regla general. Porque alli prevalecen los datos anecdéticos, las apariencias, y la persona queda apegada a esos recuerdos para sus convecinos 0 fami- liares. De Jestis dijeron sus paisanos: “;No era éste el hijo del carpintero?” Y Nata- nael, antes de conocer a Jestis, dice: “;De Galilea puede salir algo bueno?” Nos movemos a base de prejuicios, de recuerdos y t6picos. Es peligroso vivir de la memoria, del pasado. Sdlo el presente esta vivo, y todo lo pasado esta muerto, no tiene vigencia. Incluso el futuro no existe. Sélo hay vida en el presente, y vivir en el presente supone dejar los recuerdos, como algo muerto, y vivir las personas y los acontecimientos como algo nuevo, recién estrenado, abierto a la sorpresa que cada momento te puede descubrir. Es el ahora el que importa, porque ahora es la vida, ahora todo es posible, ahora es la realidad. La idea que la gente tiene de la eterni- dad es estipida. Piensa que dura para siempre porque esta fuera del tiempo. La vida eterna es ahora, esta aqui, y a ti te han confundido hablandote de un futuro que esperas mientras te pierdes la mara- villa de la vida que es el ahora. Te pierdes la verdad. El temor al futuro, 0 la espe- a No vivir del pasado La vida eterna es ahora ranza en el futuro, es igual, son proyec- ciones del pasado. Sin proyeccién no hay futuro, pues no existe lo que no entra en la realidad. Cuentan que un indio, condenado a muerte, se escapa y como lo persiguen de cerca se sube a un Arbol que esta colgado sobre un precipicio. Abajo lo esperan sus guardianes. No tiene escapatoria. Pero, de pronto, descubre que el Arbol al que se su- bid es un manzano. Entonces coge su fruto y se pone a saborear las manzanas que es- tan a su alcance. Esto es saber saborear el presente, sin proyectar el pasado en el fu- turo. {Seria posible vivir sin angustias ni preocupaciones? Eso sdlo lo descubriréis cuando estéis despiertos y viviendo en presente. Cuando san Juan de la Cruz habla de la purificacién de la memoria, se refiere a pu- rificarla de toda emocién. No anclarse en los recuerdos, ni sufrir de nostalgia, ni de aforanzas. Liberarse de las emociones del pasado; liberar la memoria de toda emocién para recibir limpiamente todo lo nuevo. Es- tar disponible, para recibir a la persona en cada momento, limpio de todo recuerdo y emocién. Cuando te encuentro, para perci- birte con claridad, he de dejar atras todo lo pasado —tanto lo bueno como lo malo— para estar abierto a tu presente sin relacio- narte con ninguna imagen, sino con la rea- lidad de ese presente. Saborear el presente ge EL SER Y LA IMAGEN i alguien me preguntase quién soy, no soy uta para darle datos tendria que referir- imagen me a cosas registradas en la memo- ria. Tendrfa que formar una imagen Ilena de etiquetas, y yo no soy nada de eso. Yo soy. Un ser imprevisible como la vida mis- ma, que no cabe en ninguna imagen por- que mis formas son cambiantes, y mi ver- dadero ser es inaprensible, imposible de referir. Cuando vivimos dormidos, leva- mos con nosotros una imagen propia, un yo ideal que nos hemos fabricado con tro- zos de recuerdos y otras cosas sofiadas por nuestro idealismo. Cuando alguien dice de mi algo que no me gusta, es la imagen lo que se ofende, pues nadie puede herir al que no tiene imagen propia. Yo no soy nunca la imagen que tengo de mi mismo ni la que tienen los demas de mi. Yo soy, y el ser no cabe en ninguna imagen porque Ye S0Y las trasciende todas. EL AMOR ES la persona no se la puede desear, porque en cuanto deseas a una persona has dejado de amarla co- mo tal. Yo no soy una cosa. No soy desea- Es peligroso vivir de la memoria, del pasado. S6lo el presente esta vivo. Es el ahora lo que importa, porque ahora es la vida, ahora todo es posible, ahora es la realidad. 6 ble ni indeseable. Soy lo que soy y nada mas. Tu llegards a amar a las personas en cuanto no te importe lo que son las perso- nas. El amor es impersonal. En el amor no se mete la personalidad. El amor es, y flu- ye por medio de ti; tti no lo fabricas y en el amor la persona se queda a un lado. Por eso, el amor te deja libre y disponible. El yo es un impedimento para amar. Cuando eli- ges, © comparas, 0 pides compensaciones, es porque necesitas a esa persona para amarte a ti mismo. Cuando desaparecen los recuerdos, los prejuicios y las visiones subjetivas, entonces ya surge el amor que fluye desde donde es. La personalidad, el yo, es un impedi- mento para amar, porque considero a las personas amadas como algo mio. Amo a mi hijo, a mi marido, a mi familia, porque son algo mio, distinguiéndolos de los que me quedan mis lejos. Entonces estoy cosifi- cando lo mas cercano como pertenencias a las que debo amar. Y el amor no sabe de de- beres ni de gratificaciones, porque el amor es libre y gratuito. “Te amo, te quiero, te necesito, no puedo vivir sin ti” significan: me agarro a ti porque llenas mi necesidad y mi apego. Eso es egoismo. El amor exis- te aunque no haya nadie alli. Es nuestra esencia y se manifiesta en una manera de ser, un estado del alma, y esta en conso- nancia con la capacidad de ver y existir, y en cuanto veamos y seamos nosotros mis- mos libremente, no podremos ser otra co- sa que amor. El amor fluye pee Jestis ama asi. Tenemos una idea equi- vocada del amor como algo muelle, dul- zén y consentidor. E] amor va siempre uni- do a la verdad y a la libertad, y por eso nunca es débil. Puede ser brusco, pero también puede ser suave y mas dulce que nada. Jestis fue amor siempre, y en su vida se manifesté unas veces brusco, duro in- cluso, y otras tierno, dulce y sensible. El amor da siempre la respuesta acertada, no se equivoca. Por eso no puedes imitar a Jestis, gc6mo vas a imitarlo?, gacaso ti eres El? Cada uno tiene que ser auténtico, ser uno mis- mo, y Jestis lo fue hasta el fin. El dia que seas tan auténtico como lo fue Jestis, en- tonces no tendras que imitarlo, pues en ca- da momento sabras lo que hacer. El dia que llegue a ti la iluminacién, serés amor y vivirds la eternidad en cada instante. EL FUEGO ES EL AMOR 0 que la sociedad te ensefié a ateso- rar no vale nada. Lo que la historia te legé como honor, patria, deber, etc., no vale nada, porque tienes que vivir libremente el ahora, separado de los re- cuerdos, que estén muertos; slo esté vivo el presente y lo que tt vas descubriendo en él como real. Lo que llamas yo no eres ti, ni eres tampoco tu parentela, ni tu padre, ni tu madre, porque eres hijo de la vida. Don- dequiera que haya sufrimiento, hay identi- ficacion con el yo, con una cosa, y en don- 7B El amor no es débil ni se eq Hijos de la vida de hay conflicto es que existe identificacién del yo con un problema, con un obstaculo que pone la mente. Esto es matematico. To- mamos de la vida lo no real. Le tenemos mucho miedo a la verdad, y preferimos ha- cer fdolos con la mentira. Dicen que hubo un sefior que descubrié en la antigiiedad el arte de hacer fuego. Lleno de alegria quiso comunicar su arte a las demés tribus. Se fue a una tribu del norte, donde hacia mucho frio, y les ense- ii el invento. Lo aprendieron en seguida y estaban tan contentos que fueron a darle las gracias al maestro. Pero éste ya se habia ido, porque era un gran hombre al que sdlo le importaba el bien del préjimo. Entonces fue a otro lugar a ensejiar el arte de hacer fuego; pero en esta tribu, primero lo reci- bieron los sacerdotes, que se quedaron perplejos: de donde venia la magia con la cual hacia este hombre el fuego? Al ver el éxito que el fuego tenia en la tribu, los sa- cerdotes tuvieron celos y asesinaron al maestro, pero —para que el pueblo no los culpase— hicieron una gran escultura de ély lo subieron a un pedestal, junto con el invento de hacer fuego, para que toda la tribu lo venerase. Y en aquel pueblo ya nunca hubo fuego, sino veneracién y ala- banzas. Es necesario comprender que la verdadera oracion es el fuego, y no la ve- neracién ni la adoracién de una imagen. Miedo ala verdad Yo soy, y el ser no cabe en ninguna imagen porque las trasciende todas. ges éDénde esta el fuego? “Yo he venido a traer fuego para que arda”, dijo Jestis. Hay muchos sacerdotes, pero pocos que sepan hacer fuego. El fuego es el amor. Ta no puedes tener el amor, es el amor el que te tiene a ti, y te cambia y te acrisola. La fe- licidad y el amor van juntos, pero no pro- ducen emociones, ni excitacién, porque es- to es enemigo de la felicidad. Tampoco producen aburrimiento, porque la felici- dad nunca hasta cuando es, de verdad, fe- licidad. Y no harta porque existe donde no existe el yo. La felicidad es un estado de continua conciencia. Si tii eres consciente de una cosa, la puedes controlar siempre y verla tal cual es. Si no eres consciente, esa cosa te domina. Solo si amas seras feliz, y slo amaras si eres feliz. Y amar es un estado que no eli- ge a quién amar, sino que ama porque no puede hacer otra cosa, porque es amor. Ojir un solo instrumento en la sinfonfa del amor, es privarse de la armonia del concierto. Amar es escucharlos todos. S6lo si amas serds feliz, y s6lo amaras si eres feliz. Elamor te tiene a ti El amor es una sinfonia El miedo se aprende A Dios sélo se lo puede conocer por la vida, que es su manifestacién. El esta en la verdad, y de despertar a la verdad se trata. a felicidad no tiene contrapuesto porque nunca se pierde. Puede estar oscurecida, pero nunca se va porque tti eres felicidad. La felicidad es tu esencia, tu estado natural y, por ello, cuando algo se interpone, la oscurece, y sufres por miedo a perderla. Te sientes mal, porque ansias aquello que eres. Es el apego a las cosas que crees que te proporcionan felicidad lo que te hace sufrir. No has de apegarte a ninguna cosa, ni a ninguna persona, ni aun a tu madre, porque el apego es miedo, y el miedo es un impedimento para amar. El responsable de tus enfados eres ti, pues aunque el otro haya provocado el conflic- to, el apego y no el conflicto es lo que te hace sufrir. Es el miedo a la imagen que el otro haya podido hacer de ti, miedo a per- La felicidad nunca se va der su amor, miedo a tener que reconocer que es una imagen la que dices amar, y miedo a que la imagen de ti, la que ti sue- fias que él tenga de ti, se rompa. Todo mie- do es un impedimento para que el amor surja. Y el miedo no es algo innato, sino aprendido. El miedo es provocado por lo no exis- tente. Tienes miedo porque te sientes amenazado por algo que ha registrado la memoria. Todo hecho que has vivido con angustia, por unas ideas que te metieron, queda registrado dentro de ti, y sale como alarma en cada situacién que te lo recuer- da. No es la nueva situacién la que te llena de inseguridad, sino el recuerdo de otras situaciones que te contaron o que has vivi- do anteriormente con una angustia que no has sabido resolver. Si despiertas a esto, y puedes observarlo claramente, recordando su origen, el miedo no se volvera a produ- cir, porque eliminara el recuerdo. NO TENGAIS MIEDO on la religién nos han metido mu- chos miedos que estén ahi y que hay que solucionar. “No tengdis miedo”, dice Jesus en el Evangelio. Todo el Evangelio esta leno de estas advertencias: “No temais..., no os preocupéis..., no Os aflijdis...” pero nosotros hemos hecho una religion lena de tabties y temores, llena de ideas falsas y de falsos idolos. Habia una madre que no conseguia que —86— El miedo no es innato iminar 19 alos La religion y los miedos su hijo pequefo regresara a casa antes del anochecer, después de jugar. Para asus- tarlo, le dijo que habia unos espiritus que salian al camino tan pronto se ponia el sol. Desde aquel momento, el nifio ya no vol- vi6 a retrasarse. Pero cuando crecié tenia tanto miedo a la oscuridad y a los espiritus que no habia manera de que saliera de no- che. Entonces su madre le dio una medalla y lo convencié de que, mientras la Nevara consigo, los espiritus no se atreverian a atacarlo. El muchacho salié a la oscuridad bien asido a su medalla. Su madre habia conseguido que, ademas del miedo que te- nia a la oscuridad y a los espiritus, se le uniese el miedo a perder la medalla. La buena religion te ensefia a liberarte de los fantasmas, y la mala a fiarte de las medallas. No metamos a Dios en los fan- tasmas. ESTAMOS PROGRAMADOS ara mi, muchas veces es dificil com- P binar los roles de padre espiritual y de psicélogo. Vienen a ti a que les des un consejo moral que los tranquilice y, si resulta que lo que necesitan es una tera- pia y se la das, se escandalizan, y entonces creen que los has dafiado en sus senti- mientos 0 creencias. A nadie has hecho da- fio, sino que has llamado las cosas por su nombre. Es nuestra programacién la que nos hace sufrir. Un dia vino un sefior, desesperado por- La buena religion Los consejos del psicélogo que otro sefior habia estado tocando los ge- nitales de sus dos nifias de pocos afios, y él, que lo sorprendié, queria matarlo. Y las ni- fas estaban ahora Ilenas de miedo. No por lo que sucedis, sino por la reaccidn de los padres ante el hecho. El padre no queria ver esto y me miraba como si estuviese lo- co. Su programacién no le permitia ver que, si él hubiese reaccionado como si na- da hubiese pasado, delante de las niiias, és- tas lo tomarian como un juego y nada alar- mante quedaria registrado en sus mentes. Puedes pedir explicaciones, romperle las narices o tratar de reaccionar con el sefior que tocé a las nifas. Pero si estas programado para pensar que la accién en si es pecaminosa y que las nifias han sido mancilladas, y todas esas cosas de nuestra cultura, estards atrayendo hacia ellas tu alarma y tus miedos. Mucho mds que los tuyos, pues ellas, que no estan programa- das, registraran en su mentes una alarma que uniran al acto en si: sin mas expliccio- nes y para siempre, tendran miedo a todo lo que se relacione con ello. Un miedo que sera inconsciente, irracional, y por ello mucho mas peligroso. En cuanto al sefior que tocé a las nifias, en el peor de los casos es un ser enfermizo, con una sexualidad sin desarrollar, y no el sddico y pervertido que se suele ver en él. 2Que hay que defenderse de él? De acuer- do, pero si estas despierto, llamaras las co- El miedo es irracional La felicidad es tu esencia, tu estado natural. —88— sas por su nombre y te dards cuenta de que los miedos que provocas sobre él son los mismos que metieron en tu infancia ante actos similares. Si piensas con realismo, verds que el préjimo —igual que ti— es miedoso, infantil, egoista y esttipido. Y no es que lo sea, sino que es su programacién la que hace que se muestre asi; nadie te de- frauda en la realidad. Es el juicio que te- nias de la persona (de cémo deberia ser) lo que te ha defraudado. Cuando te enamoras de una persona, lo haces de una imagen (la imagen de tus suefos); asi también el mundo de la reali- dad que vives (de lo que ti crees realidad) es falso, porque esta sujeto a conceptos. Los conceptos no son mas que aftadiduras que ha puesto tu cultura. ARREPENTIMIENTO: UNA TRAMPA n la carcel real, es el guardian el que tiene la llave. Pero en la carcel psico- ldgica (en la que estamos metidos por nuestra programaci6n), es el prisione- ro el que tiene la Ilave, pero lo malo es que no se da cuenta. jAy de ti, si ves esto claro, porque irremediablemente vas a salir de tus prisiones psicol6gicas y vas a cambiar para llamar a las cosas, personas y situa- ciones por su nombre! Entonces ya no hay vuelta atras. Te va a ser duro, pero mas du- ro es vivir a ciegas, adormilado. El préjimo es como ti Tenemos la Nave Todo miedo es un impedimento para que el amor surja. Y el miedo no es algo innato, sino aprendido. eaages Jestis insiste en la metanoia, en vivir la vida bien despiertos, sin perderse nada. El arrepentimiento es morir de verdad al pasado para instalarse en el presente mi- randolo con ojos nuevos. El concepto de arrepentimiento, tal como nos lo explica- ron, era como una trampa. Si no hubiese arrepentimiento quiza no habria pecado, porque mucha gente peca para arrepentir- se. Es un juego psicolégico con nosotros mismos en el que buscamos terminar el juego con el arrepentimiento. Es una for- ma de desahogarse emocionalmente y re- cibir aceptacién, aprobacién, con el per- don. Por eso, metanoia no quiere decir estar arrepintiéndose una y otra vez, sino des- pertar a la verdad. CAMBIA TU PROGRAMACION os hombres buscan y huyen de mu- chas cosas, y no entienden que, tan- to lo que buscan fuera como aquello de lo que huyen, esté dentro. Estas inten- tando escapar de algo que esté dentro de ti: tu inconsciente, en donde estén graba- das todas tus programaciones. Y lo que buscas, el amor, la felicidad, esta dentro de ti, eres ti mismo. Es el despertar a tu sufi- ciencia lo que va a liberarte. La resolucién de todo esta dentro de ti, y si consigues ser suficiente, ya has Negado a ser ti: mismo. Pero mientras no se te vayan tus neurosis de adormilado, no intentes cambiar el mun- do; antes despierta tu. e202 Verdadero arrepentimiento Lo que buscas estd dentro Mientras duermes y suenas, ves a las personas y al mundo igual que te ves ti. El dia que cambies, cambiaran todas las per- sonas para ti, y cambiaré tu presente. En- tonces vivirds en un mundo de amor. El que ama, termina siempre por vivir en un mundo de amor, porque los demas no tie- nen mds remedio que reaccionar por lo que él los impacta. Ahora piensa en las personas con las que ordinariamente vives y trabajas, y en los problemas que tienes con ellos. gSabes la soluci6n? Te voy a decir un remedio ma- gico, porque no falta nunca: cambia tu pro- gramacién y todo cambiara. Renuncia a tus exigencias: lo mas importante para vivir el presente, tanto contigo mismo como con los demés, es renunciar a las exigencias. Las exigencias son la fuente de todo problema de relacién y convivencia. Exi- ges que el otro no sea egoista, que no sea indiferente, y te autoconvences de que lo haces por su bien. gQue lo haces por su bien? Y entonces, gpor qué te molesta su actitud?; gno sera que esta reflejando algo que no te permites a ti mismo? No te enga- fies, lama las cosas por su nombre. No seas exigente contigo mismo y comenzaras a no exigir a los demas. Sal de esa progra- macién que te tiene prendido en el arbol del bien y del mal y comenzaras a aceptar la realidad sin juicios ni criticas. Cuando te molesta que tu amigo sea exigente, es que tti lo eres también. Cuan- do te molesta que no reaccione, no seas Un remedion magico No ser exigentes ang am

También podría gustarte