Campo de Batalla 14
Campo de Batalla 14
Campo de Batalla 14
Si hay un área que es donde primero el enemigo busca atacarnos es en nuestra mente. Por
eso es que en es importante proteger nuestra mente con el casco de la salvación, porque
donde mas estragos causa el enemigo es en nuestra mente.
La guerra espiritual es que es tan persuasiva, que algunas personas cuando están en medio de
ellas, no se percatan que lo que están atravesando es una guerra espiritual. El enemigo ha
desarrollado varias estrategias para que ignoremos la guerra espiritual.
Satanás buscó sembrar en JESUS pensamientos para llevarlo a dudar del cuidado, el amor, el
propósito y el favor de DIOS sobre su vida. Cuando miramos en Mateo 3: 17 DIOS declaró
sobre JESUS: ¨Este es mi Hijo muy amado, quien me da gran gozo¨. Luego de eso en Mateo 4:
1 - 10 vemos a Satanas una y otra vez buscando sembrar un pensamiento.
Luego que nos dice el v. 2 que JESUS tenia hambre, Satanás en el v. 3 le dice: Si eres el Hijo
de Dios, di a estas piedras que se conviertan en pan. Sembrando un pensamiento para que
dudara del cuidado de DIOS.
Luego en el v. 6 le dice: ¨Si eres el hijo De Dios; !tírate!; llevándole a dudar del amor de DIOS.
Por ultimo en el v. 9 le mostró todos los reinos del mundo buscando sembrar otro pensamiento
en la mente de JESUS y le dice: ¨Te dare todo esto, si te arrodillas y me adoras¨; buscando
sembrar un pensamiento para llevarlo a dudar del propósito de DIOS.
Esta es la forma en que el enemigo trabaja con nosotros sembrando pensamientos que nos
llevan a dudar del amor, el favor, el cuidado y el propósito de DIOS en nuestras vidas. Por eso
es que vemos tantos divorcios, indiferencias, avaricia etc. en el pueblo de DIOS; porque
Satanás es un especialista sembrando mentiras en las mentes de las personas.
Si queremos ganar esta batalla que se da en nuestra mente, especialmente cuando estamos
bajo ataques fuertes o situaciones difíciles, es importante que:
A muchos cristianos les da vergüenza aceptar que están atravesando una batalla espiritual. Si
no reconocemos que estamos en una batalla espiritual, lo que haremos es seguirle el juego al
enemigo; la Biblia nos dice en 2 Corintios 2: 11que ¨no ignoremos sus maquinaciones¨.
El salmista entendía que estaba en una batalla; por eso dijo en el v. 3: ¨Día y noche solo me
alimento de lagrimas, mientras que mis enemigosse burlan diciendo: ¿Dónde esta ese DIOS
tuyo? Sus enemigos estaban invirtiendo sus recursos en confundir la mente del salmista; pero
al menos el sabia que estaba en una batalla.
Una ves que tenemos claro, qué estamos escuchando, pensando y creyendo, esto nos ayuda
a determinar donde se generó este principio; una vez que ya lo hemos determinado, ahora
podemos tomar la decisión de si lo hacemos una convicción en nuestras vida o no.
Al salmista como a nosotros, le llegaban pensamientos a su mente, pero no los aceptaba así
nada mas, sino que el los confrontaba con una verdad mayor a la que estaba viviendo. Era
verdad que estaba destrozado; pero era una mayor verdad que el poner su esperanza en DIOS
lo sanaría; era verdad que estaba desalentado; pero era una mayor verdad que el acordarse de
DIOS fortalecía su esperanza. Por cada situación devastadora que atravesamos hay una
verdad mayor en la Palabra de DIOS que nos da consuelo y nos fortalece.
Cuando llegamos a la conclusión de que hemos creído debemos confrontarlo con la Palabra
de DIOS. Por ejemplo, hay personas que cuando eran niños, o en alguna relación le hicieron
creer que no valían nada, que no servían para nada, que eran unos derrotados; y han aceptado
eso como principio. Pero cuando descubrimos en la Palabra que DIOS escogió a lo vil,
menospreciado y débil del mundo; o cuando vemos que: somos linaje escogido, real
sacerdocio, nación santa, pueblo adquirido por DIOS; cambia nuestra perspectiva; porque
creemos una VERDAD MAYOR de nosotros que nos es revelada en la Palabra de DIOS.
En el v. 8 el salmista dijo: ¨Pero cada día el Señor derrama su amor inagotable sobre mí,y todas
las noches entono sus cánticosy oro a Dios, quien me da vida.¨ El tomó una decisión y
decidió creer en el amor inagotable de DIOS; por encima de las declaraciones de sus
enemigos y lo que se generaba en su propia mente; y lo decidió por medio de la Alabanza, la
Adoración y la Oración a DIOS.
El casco con el que protegemos nuestros pensamientos esta compuesto con la salvación.
Esto significa que la mejor manera en que podemos proteger nuestros pensamientos es con el
analizar y constantemente recordar lo que CRISTO hizo por nosotros en la cruz del Calvario.
Cuando entendemos la salvación y entendemos lo impresionante que es el amor de DIOS por
nosotros, el valor de la vida eterna, no hay absolutamente nada que nos pueda atormentar, no
hay nada que el diablo pueda levantar en nuestra contra que nos haga desmayar, que nos
haga rendirnos porque al ponernos en casco de la salvación recordamos que Satanás fue
vencido en la cruz del Calvario y nosotros somos libres y mas que vencedores por medio de
aquel que nos amó.
Tenemos que pelear en alabanza porque el enemigo viene a atormentar nuestra mente con
pensamientos que tratan de persuadirnos de amar y obedecer a DIOS; pensamientos que
vienen a robarnos la paz. Tenemos que pelear las batallas de nuestra mente, porque: toda
victoria que queramos obtener en la vida comienza en la mente. Cuando tomamos la decisión
de que no nos rendiremos, ni cesaremos hasta tener la victoria.
En cada tentación que JESÚS atravesó en el desierto se defendió con una declaración que
glorificaba, exaltaba y honraba a DIOS que es el motivo de la Alabanza y adoración. Por
ejemplo:
v. 4 ¨La gente no vive solo de pan, sino de todo lo que sale de la boca de DIOS;
v. 7 ¨No pondrás a prueba al SEÑOR tu DIOS;
v. 10 ¨Adora al Señor tu Dios y sírvele únicamente a él”
Esto fue lo que hizo el salmista, el salmista peleó alabando a DIOS; peleó poniendo su
confianza total en DIOS, peleó en adoración, aunque aun se encontraba en medio de su dolor
y bajo la persecución de sus enemigos, el escribió este salmo cuando aun estaba abatido;
pero en medio de todo eso; el Salmista declaró, lo que todos debemos declarar cuando nos
encontramos en medio de estas temporadas de nuestra vida: ¨¿Por qué estoy desanimado?
¿Por qué está tan triste mi corazón?¡Pondré mi esperanza en Dios! Nuevamente lo alabaré, ¡mi
Salvador y mi Dios!¨
Por eso es que es importante recordar la salvación, porque el recordar lo que CRISTO hizo en
la cruz, nos llevará a una vida de Alabanza y la Alabanza cautivará nuestros pensamientos,
nuestra mente y elimina toda posibilidad de tormento en la mente y viviremos declarando que:
NO HAY NADA MEJOR QUE SER CRISTIANO.