Claves Feministas

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Claves femí nlstas para la negociación en el a1nor
N
305.4
L 173 Lagarde, Marcela
"Claves feministas para la negociación en el amor"/
Marcela Lagarde -1º. ed. -
Managua: Puntos de Encuentro, 2001
106p.
ISBN: 99924-0-137-0
Memoria del curso Managua 5 y 6 de diciembre de 2000.
1. FEMINISTAS 2. AMOR
Edición a cargo de: María López Vigil

Producción: Teresita Hernández y Julieta Bendaña
Fotos interiores y de portada: Julieta Bendaña
Diseño y Diagramación: Juan R. López Altamirano
Para la reproducción total o parcial del contenido de esta edición.

solicitar autorización a Puntos de Encuentro
De la Rotonda de Plaza España, 4c. abajo. 1c. al lago.
Apartado postal: RP-39 Managua, Nicaragua.
Teléfono pbx: (505) 268-1 227
Fax: (505) 266-6305
E-mail: puntos@puntos.org.ni
Dra. Marcela Lagarde
INDICE
Prólogo . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .· . . . . . . . . . . .9
1: Amor e identidad femenina • • • • • • • • • • • • • • • • • • • • • . 11

Introducción .... .. ......................................... 11
Seres del amor. seres para el amor .. : ........ : . ._................ 12
Aprendemos a amar, nos educan en el amor ........................ 13
Una experiencia del cuerpo y de la imaginación ...................... 14
La más vital de las experiencias humanas .......................... 14
La biografía amorosa de las mujeres .......... . ..... . ............ 15
Modernas y tradicionales: marcadas por el conflicto ....... . .......... 16 +:
Para amar tenemos que conocer ............................... . 17 ·.;;:~::t
Quién soy, qué quiero, qué anhelo. qué necesito .................... 18
Una filosofía amorosa diferente .......................... . ...... 18
Una revolución: el amor es histórico ......................... . .... 19
Poder y amor están vinculados .................................20
El amor va cambiando a lo largo de la historia .......................20
2: El amor en la cultura occidental • • • • • • • • • • • • • • • • • . .23

Amor espiritual. amor carnal: eros. ágape, filía ...................... 24
El mundo griego: la perfección, la atracción ............. ·,· ......... 25
La revolución del amor cristiano . ................................26
Una invención de la literatura ...................................26
La plenitud: un anhelo de la modernidad ................... . ....... 27
Tradicionales y modernas: partidas en nuestro interior ............ : .... 27
El conflicto de dos libertades que se aman ......................... 28
¿Cómo amar si no nos amamos? .................... . ........... 29
Necesitamos ser egoístas .....................................30
La colonización amorosa de las mujeres . .......................... 31
En busca del amor de madre ...................................31
En busca del amor de padre ................................ . ... 32
Nuestra zona más arcaica: la carencia ............................33
La orden de ser bellas . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .33
La orden de trabajar y de ganar bien .......................... . .. 34
Un sistema que no es recíproco .................................34
Nos definimos como sujetas de pacto amoroso ..................... 35
Víctimas de la ceguera de género ...............................36
Mujeres modernas con mitos tradicionales .............. . ... . ......36
Para poder amar hay que ser ciudadanas ..........................37
Claves feministas para la negociación en el a1nor
¡
•
Los problemas de tu amor son problemas de todas .. . .... .... . ......38
El miedo al abandono . ................... ............... . ..... 39
La soledad es necesaria y vivificante .. .. ... . .......... ........... 39
Mujeres sobre-modernas ....... ...................... .........40
Estoy sola y soy sola . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .4 1
3: El amor a partir de la era burguesa . . .. . . .. . .... .. .43

..
i ,;. •.
¡r~ . . Nadie esperaba amor en el matrimonio .......... .. ................44
El amor burgués: una revolución histórica ..........................44
Los tiempos del amor cortés ....... ..... ..... . ....... .. ..... .. .45
Una nueva moral sexual: el matrimonio y la heterosexualidad ............46
Dueñas de nada . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .46
Homosexualidad tolerada, homosexualidad negada ..... ..............4 7
Amas de casa con el anhelo de dejar de ser ..................... .. .4 7
Permiso de poligamia ... ...... . .... ... ... .. .. . ...... .........48
El rito amoroso de los regalos ... . ....... ........... ... ....... .. 49
El más sofisticado de los sistemas de dominación, .. ... ... .. .........49
El fruto del amor burgués: las madresposas ........................50
Perfil de la madresposa .................................. .. ... 51
Las otras mujeres: las amantes ....... .. ....... . ..... . ..........52
Las amantes legitimadas ................................ ... ... 52
El amor victoriano y su poder . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .53
Siempre embarazadas, siempre pariendo .................. . .......54
La pervivencia de la tradición victoriana .. ......... ............... .55
Amor romántico: la pasión erótica y la causa política ..................55
El sentimiento oceánico de una pasión compartida .... ... .......... .. 56
El amor de Rodin y Camille Claudel ............. . ................56
El amor trágico, el amor imposible ....................... ... ..... 57
Camille Claudel: una víctima del amor romántico ........... . ....... .. 58
Virginia Woolf: aparece el amor libre ............ . . . .... . ......... 59
La libertad: objetivo del pacto amoroso ..... . .......... . .......... 59
Sin tragedias, con libertad ....... . ..... . . .... . ........ . ..... ... .60
Sin castidad, sin propiedad , sin fidelidad ... . .... ... .... . . . ......... 61
Textos imprescindibles para entender .. . .. . .... . ... . .............. 61
Lecciones del dolor .......... ............. . ........ . ..... .... 62
Alejandra Kollontai: una pionera .. . .... . ............. . ...... , .... 63
El amor como camaradería ..... . . .... . . . ........... . . ... .. . .... 63
Que el amor sea amistad ...................... . .......... . .... 64
Todas sintetizamos formas históricas del amor ......... .. ..... . . .... 64
En cada una conviven diversas formas de ser mujer ........ . . .. . ..... 65
Ora. Marcela Lagarde
4: Para deconstruir el amor como subordinación y dominio 67

Entre mito y realidad: una continua frustración ........... ......... .. 68
Inventarío de fantasías ....... ................ .......... ....... 69
Aprender a leer nuestras fantasías ............ . ..................69
Desilusión, desencanto. infelicidad ....... .... . ......... . ......... 70
La envidia . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 71
El patriarcado ha muerto ........................ . ............. 72
Primera condición: un compromiso con nosotras mismas ..... . ......... 72
Enamorarse: una conmoción vital ...... ............... ..... ...... 73
Una experiencia fascinante ....................... ... .......... 74
El enamoramiento en los hombres ...... .. ..... . ............. .. .. 75
Hombres enamorados. mujeres enamoradas .............. .......... 75
Enamoradas: marginadas de sí mismas:
Enamorados: fascinados por sí mismos . . .. . ... .. ................. 76
La dádiva voraz. la disposición al sacrificio ..... . . .... .. ............ 77
Nadie llega al amor en el vacío ... . .... . ................ . .. .. .... 77
Clase social. raza. edad, educación, belleza .. .. .................... 78
¿De qué nos enamoramos? ................... . ... .. .. . ........ 79 .,:
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Desenamorarse: recuperar el sentido de la realidad . . . . . . . . . . . . . . . . .. 80 ."1·
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Recuperar el cuerpo y el tiempo . ................ . ............... 80
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De la persona fantástica a la persona de carne y hueso ............ . .. 81
Dolor y sufrimiento son distintos . .. ................. .... ... ..... 81
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Descargar a la pareja de responsabilidades ..... .. .. .. .............83 .. .. ~ \
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5: Hacia la negociación en el amor ................. .85
La conciencia de tener el derecho de tener derechos . ................ 86 ~~
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Un anhelo instalado en la conciencia femenina ............. . ..... . ... 86 ñ1{
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Conciencia de ciudadanía ....... . ........... . .. ......... . ..... 87 ... / . .
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Instalarnos nuestra ciudadanía ................. . . . .......... . .... 87 WI

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Protagonistas con derecho al amor ................. . . . ..........88 ••¡;
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Tener historia propia, llevar contabilidad en la pareja ..... . . . .. . .......89 ..,·

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Un inventarío y una radiografía económica ............. .... . .......89
Amor. sexo y dinero ................................. . .......90
El reto de la independencia económica ..... ...... . ..... . ..... . .... 91
El itacate de cada una ............. .. ...... . ....... . ..... . .... 92
Incondicionales de nosotras mismas. . ........... ... ..............92
No esperemos incondicionalidad, busquemos confianza ............ . .. 93
El amor en el tiempo: que gane el presente .. . .............. ....... 94
Una agenda mínima para el amor ........ .. .......... . ...........95
El valioso recurso de la terapia ............... . ..................96 .. I
Necesitamos terapeutas feministas y terapias alternativas ..............96 : ,I,

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Claves ferninistas para la negociación en el ,11nor
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Creadoras del mundo, inventoras de cambios .......................97
Ni confesores ni inquisidores ......... ...........................97
Ser nosotras nuestra propia autoridad . . .... . ...... . .. ; ........... 98
Negociar lo mínimo, negociar lo común ...........................98
Los compromisos de la negociación ..............................99
No ponernos en riesgo, salir de la violencia ....................... 100
Ni traicionables ni traidoras ... .. .............................. 100
Los triángulos y sus riesgos ................................... 1O1
Si traicionamos a otra mujer. nos traicionamos ..................... 1O1
Una desgastante gimnasia afectiva .............................. 102
El triángulo Sartre-Beauvoir-el pintor .. .................. ..... .... 103
El fin del triángulo y el desafío de los celos ........................ 103
Algo sobre la monogamia ........ ... .... .. .... .. ..... ...... ... 104
Algo sobre la maternidad ..................................... 105
Algo sobre la paternidad ..................................... 105
Un pacto contra los padres irresponsables ......................... 106
Otra manera de ser hombres y de ser padres ........... .. ......... 106
Una recomendación: los grupos de autoconciencia feminista ........... 107
Hablar. compartir, apoyarnos. acompañarnos ..... .. .... .. ......... 108
Insolidaridad entre mujeres, competencia por los hombres ............ 108
Una nueva ética entre las mujeres .............................. 109
Todo esto es posible .. ...................................... 11 O
Bibliografía • • • 1 • • • • • • • • • • • • • • • • • • • • • • • • • • • . . . . 111
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Queremos agradec~,:. c/,~:,m~nefa ,~especial a Axunifa <je ~ranada, '
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Nicaragua, Axunica de 'Lügo, Galicia.y Grupo de Amigas,de Madrid,

ambas del Estado Español, su contribucí6n y solidaridad sin la cual,
' esta publicación no hub,e¡a sido posible.
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Prólogo
El amor ha tenido diversos contenidos a través de la historia. En diversas culturas y
épocas ha significado experiencias personales. colectivas y sociales. de contenido
afectivo, intelectual y erótico, consciente o inconsciente a la vez. corporal e
imaginario. Y aunque se piense lo contrario, el amor es específico para cada género,
cada clase social. cada edad. cada pueblo y cada cultura. El sentido del amor, como
referencia simbólica, es compartido entre quienes descifran los mismos códigos y
lenguajes y es a la vez diferente y único para cada quien.
Las mitologías y las ideologías del amor no reflejan lo que las personas viven. Sin
embargo, es común la creencia en que los mitos son posibles y, en ciertas
circunstancias confundimos la fantasía con la realidad. Así, la primera y constante
contradicción amorosa se establece entre la experiencia vivida y el mito.
Mujeres y hombres aman , y lo hacen de maneras diferentes. con la creencia en la

universalidad del amor y en que el amor es para unas y otros la vía privilegiada a la
felicidad. Sin embargo. el amor encierra recovecos de dominio que generan
desigualdad. lazos de dependencia y propiedad, así como privilegios e inequidad que
generan frustración, sufrimiento e incluso daño. La falta de reciprocidad choca con
la fantasía del amor compartido y paritario y la sujeción mata los anhelos de libertad
de cada quien. Más todavía. los contenidos de la libertad y el amor. diferentes por
género, lo son también por el sentido de la vida y la posición en el mundo de cada
cual.
Cada mujer recibe el mandato del amor como si éste emanara naturalmente de su
ser y cada quien debe convertirse en amorosa persona y alcanzar la felicidad por
medio del amor. Para las mujeres el amor es una cualidad de identidad y un medio
de valoración personal. de autoestima. Con estas bases sociales y culturales del
amor analizaremos en el curso: ¿Qué significa para las mujeres el amor? ¿Qué lugar
ocupa en nuestras vidas, en la cotidianidad, en el uso del tiempo y de las energías
vitales? ¿Qué tipo de relaciones enmarcan las experiencias amorosas de las mujeres
y cuáles son los conflictos y las realizaciones que las definen?
La experiencia amorosa está circunscrita a la pareja como el espacio simbólico

privilegiado y único de su realización. La pareja es en nuestro mundo una de las
relaciones más dispares y complejas, ya que sintetiza relaciones de dominio y opresión
más allá de la voluntad y la conciencia, conjunta lo público y lo privado. en ella se unen
lo social y lo personal en ámbitos que abarcan la intimidad afectiva y sexual, el contacto
cuerpo a cuerpo, la convivencia, la corresponsabilidad vital. la economía, el erotismo.
el amor y el poder.
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Claves feministas para la negociación en el an1or
En su diversidad, la pareja es reinventada y a la vez recreada con deleite de

copistas por las personas más diversas. La pareja es una de las asociaciones
más cargadas de deseos mágicos basados en mitos y dogmas así como en
anhelos y experiencias pasadas. Sus dramas concentran los poderes de
dominio, tanto como las dificultades de reconocimiento de la individualidad de
cada quien, y la ignorancia de modos amorosos que hagan vivible el encuentro
entre seres que depositan parte de sí en el fantasma de la otra persona, del
que hacen depender la satisfacción de sus carencias en las transacciones. Los
desafíos que presenta la pareja para las mujeres son enormes y su superación
precisa develar y conocer los caminos de cada una, las dificultades y los
aprendizajes en el enfrentamiento, hitos, conflictos y crisis.
.. Finalmente, veremos la alternativa que ha ido configurándose en la

...
. .:.. · experiencia de algunas mujeres y en la cultura feminista. Se trata de una
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alternativa política para transformar las relaciones y el contenido del amor
sobre las bases del pacto y la negociación equitativa, que permitan la
convivencia del encuentro, el amor y la libertad.
Reflexionar sobre la negociación en el amor nos permite develar el

lado oculto del amor y algunos misterios amorosos, así como los
descubrimientos, las osadías y las invenciones de las mujeres en la
búsqueda de experiencias amorosas ricas, renovadoras y libertarias, que son
parte invaluable de nuestra tradición feminista .
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Analizaremos y comentaremos varias claves feministas para la construcción de esa

nueva visión del amor. Las claves más significativas (;,s buscaremos para aprender la
negociación en el amor y en la pareja. ¿Es posible esa negociación? ¿Es deseable, es
necesaria? ¿ Cómo hacer compatibles amor y negociación?
1
Claves fen1inistas para la negociación en el amor
Seres del amor, seres para el amor
S iempre se dice que el amor es el motor de la vida y el sentido de la existencia.

Pero en nuestra cultura lo es mucho más para las mujeres. Para las mujeres, más
que para los hombres, el amor es definitorio de su identidad de género. Para las
mu¡eres, el amor no es sólo una experiencia posible, es la experiencia que nos
define.
En nuestra cultura se dice que el amor es el motor de la vida y el sentido de la

existencia. Para las mujeres el amor es definitorio de su identidad de género. Para
las mujeres , el amor no es sólo una experiencia posible . es la experiencia que nos
define. Cuando se pregunta para qué estamos las mujeres en este mundo, más allá
de ideologías, más allá de posicionamientos políticos, más allá de generaciones, la
respuesta más frecuente es "para amar''. Las mujeres hemos sido configuradas
socialmente para el amor, hemos sido construidas por una cultura que coloca el amor
en el centro de nuestra identidad.
El ciclo de vida de las mujeres es el ciclo de transfiguración de las mujeres como

seres del amor. Las mujeres vivimos el amor como un mandato. En la teoría de
género, esto significa que lo hacemos, no por voluntad, sino como un deber.
Amar es el principal deber de las mujeres. ¿Qué debemos ser las mujeres? Debemos
ser seres del amor. Y esto, como un mandato cultural, no como una opción, no por
nuestra voluntad, sino porque es el deber ser que culturalmente se nos ha
asignado, el deber ser que socialmente ha sido construido en cada mujer. El sentido
de la vida, la filosofía de género de las mujeres, tiene que ver con lograr los objetivos
amorosos para los que ha sido educada. A l vivir, cada una de nosotras vamos
transfigurándonos en seres del amor, aunque no nos demos cuenta de este
proceso. Analizándolo como antropóloga, diría que el sitio de vida de las mujeres es
el sitio de su transfiguración en seres del amor, en seres para el amor.
12
Aprendemos a amar, nos educan en el amor

L as mujeres no nacemos amando. aprendemos a amar. Existe una educación para
el amor. Muchos pensadores de la Ilustración reflexionaron sobre la educación
sentimental. Hace medio siglo la gran feminista del siglo )0(, la francesa Simone de
Beauvoir, dijo: No se nace mujer. llega una a serlo. Hoy. cincuenta años después.
podemos decirlo así: Nacemos sexuadas. con características sexuales específicas.
y es a partir de ellas que aprendemos los contenidos de género. En nuestra cultura,
uno de los contenidos de género fundamentales es aprender a ser seres del amor y
a definir nuestra existencia en torno al amor. a las diversas formas del amor.
Nuestro primer aprendizaje del amor lo tenemos en la relación materno-filial.

Para poder apreciar la construcción cultural de las mujeres como seres del amor
necesitamos revisar. cada una de nosotras. nuestra relación de amor con nuestra ¡
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madre. Porque en esa primera relación aprendimos a amar. La primera relación ..
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amorosa de las personas es con quien las cuida. En el patrón tradicional de género ·\ ; : .•,~-
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es casi siempre la madre quien cuida de sus criaturas. En esa relación aprendemos :
a amar. No solamente aprendemos de la madre modales. actitudes y habilidades ¡ sl"">A
para movernos en el mundo. Aprendemos a amar. Aprendemos contenidos y :¡

objetivos del amor. Aprendemos y desarrollamos necesidades amorosas. Todos
estos aprendizajes dan contenido a la relación entre las madres y sus hijas.
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También somos seres del amor en la relación con el padre. que constituye la otra gran
relación que marca y configura nuestro aprendizaje en el amor. En esa relación también ,,
aprendemos contenidos del amor, necesidades amorosas, deberes del amor. En todas ., · ·•
las relaciones entrañables que vendrán después estará siempre en juego el amor. En !'
cada relación íntima, próxima, siempre está en juego el amor. En cada relación entre / , .: """'· ~•~;1,•·
seres humanos se da una educación amorosa. Y cada relación personal es una f . ....
relación pedagógica sobre el amor. Estamos por eso en un aprendizaje continuo, en :: • ,,,,,:,·,,
permanentes cursos intensivos sobre el amor. Nos educamos, nos re-educamos, }
nos educan. Y también nosotras educamos a otros y a otras. Nos educamos y ·¡
educamos en cuanto al sentido trascendente y filosófico del amor. En cuanto a los ¡'; , .. ....
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deberes del amor. en cuanto a las prohibiciones amorosas y en cuanto a lo que está ·: :¡H~~¡ffi[¡j\¡;
permitido en el amor. En las relaciones amorosas pedagógicas aprendemos también !¡ .~e••;. üFiill!I
las necesidades que asociamos al amor, tanto las propias como las de las personas : "' e•'··
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a las que amamos . _¡ \tt .
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Este conjunto de experiencias -sentido del amor, necesidades amorosas, deberes. : • ,.,.,•••
prohibiciones y límites del amor- son piezas sustantivas de nuestra educación .
constante. de una educación que en antropología llamamos educación para la vida. .
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Se trata de una educación informal. Porque no se nos dice: te voy a explicar lo que
es el amor. sino que, con palabras o sin palabras, nos van enseñando lo que es el '
amor. Después, aprenderemos que la poética amorosa de todos los tiempos. los
poetas y las poetisas, han tratado de ponerle nombre a lo innombrable, a aquello que ••
cada una de nosotras aprendió asociado al amor, una experiencia fundamental de la '
vida que está centrada en el cuerpo. i
13
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Claves fe1nínístas para la negociación en el an1or
Una-experiencia del cuerpo y de la imaginación

IE I amor tiene que ver con el cuerpo. Marca el cuerpo. Su sentido, las necesidades
!.. amorosas, los deberes amorosos y las prohibiciones amorosas que vamos
': aprendiendo va.n marcando nuestro cuerpo. Las relaciones amorosas que hemos
···•· ( vivido tienen el cuerpo como su centro y permanecen cifradas en el cuerpo durante
; ; toda nuestra vida.
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·:·'. : '. ; El amor está en los cuerpos. Y está también en la imaginación, en el imaginario de cada
• •:¡ persona. Cada persona lleva en su imaginación a seres a quienes ama y a quienes
i- amó. Y como en el imaginario el tiempo tiene otra dimensión, muchas mujeres tienen
•.
i en su imaginario no sólo a seres del pasado sino a seres que vendrán en el futuro y a
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'"'''" ,,,,,¡ quienes amará. Así. nuestro imaginario permanece poblado por seres del amor de ayer,
¡· de hoy, de mañana.
]: Millones de mujeres en el mundo actual obtienen a veces más satisfacción de los

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¡ seres del amor que ven en el futuro que de los seres concretos con los que se
t' relacionan en el presente. en la vida cotidiana. Mientras en la mente y en la
¡; imaginación experimentan el amor, en la vida cotidiana no realizan esta experiencia
'
1¡_ con las personas con quienes conviven. Muchas mujeres sobrevivimos a crisis muy
¡1 grandes gracias a esos seres imaginarios del amor: como todavía no existe la
!' persona concreta que me ame como yo quiero ser amada, yo me la imagino y eso me
:: hace feliz. Resulta fascinante este fenómeno, tan común en la conciencia subjetiva de
'j las mujeres.
La más vital de las· experiencias humanas
.
!j,.: L a palabra amor viene del latín. Significa vivo afecto o inclinación hacia una persona
•, o cosa. Porque no solamente amamos personas sino también amamos animales.
: amamos a la Naturaleza. amamos objetos entrañables que tienen para nosotros un
,¡¡, significado. También amamos procesos individuales o colectivos. Amamos causas
.,:
:. filosóficas, causas políticas, causas sociales.
El amor es una experiencia de relación con el mundo. Es una experiencia de

aprehensión del mundo. Y también es una experiencia de aprehensión del yo misma.
Por el amor me relaciono con el mundo y, al mismo tiempo. conmigo misma en una
'
relación íntima. interna, yoica. Esta experiencia del amor propio es una clave
fundamental. Es necesario que cada vez un mayor número de nosotras podamos decir
t y digamos: me amo. Amo a otras personas, amo al mundo y amo lo que hacen en el
~. mundo otras personas. Y me amo a mí misma .
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14
Ora. Marcela Lagarde
El amor es una experiencia vital. Ésa es su característica. Es también una

experiencia constante. No es que amemos durante un rat ito y después ya no.
Podemos hacer interrupciones, podemos ponernos en "vacaciones de amor" con
una persona, pero el amor es una experiencia constante.
El amor es una experiencia vital y constante que nos coloca ante el mundo, ante la
gente, ante la vida. Sin amor no es posible la vida. El amor es una experiencia
movilizadora, nos mueve a actuar, a crear acontecimientos -a trascender-, a
transformar el mundo. Y a transformar nuestra vida, que es la más importante en el
mundo. El amor no sólo nos hace vivir, sino trascender. El amor es la más vital y ¡: •
trascendental de todas las experiencias humanas .
La biografía amorosa de las mujeres

L a vida de las mujeres está marcada por acontecimientos relacionados con el amor.
A nosotras el amor nos marca la vida, y nos la marca de una manera sustantiva, no
superficial ni formal. Acontecimientos importantes ligados al amor son los que inician las
etapas de nuestra vida, y son acontecimientos ligados al amor los que ponen fin a otras ,!
1
etapas. Las biografías de las mujeres siempre están punteadas por hitos amorosos.
-~
Descubrir cuáles son los hitos amorosos de nuestra vida es una clave metodológica !;
para conocernos. Les propongo una experiencia: que cada una haga la reflexión de su ¡ .
propia vida teniendo como eje el amor. Si cada mujer hiciera su biografía amorosa, }
el resultado sería interesantísimo. Y si reuniéramos todas esas biografías en un
memorial amoroso y lo publicáramos, tendríamos una joya. ::: füf!:;{:'..'l
;::::>::{t~<. • '\::;;we:g·t
: :B:fü!ti?!j~f .. :1·•::. ~
Tenemos que preguntarnos qué acontecimientos amorosos han definido nuestra ~ • 1~!'11!i~;~
vida. Es un ejercicio muy interesante. Por ejemplo, buscar los diez acontecimientos :i h:fuifilÍ!1';;; ·: '.'.:·,:/
: •»r9fitrtWtt\!ff}t ttJ1
amorosos que han marcado nuestra vida. ¿Cuáles son los diez hitos amorosos en tu }~j~ff!}[%j\1;;1Jii11~~!
infancia, en tu pubertad, en tu adolescencia, en tu juventud, en tu madurez? Otra ¡• ::?:'i'x;i¡~1 1 <:v,v¡n;;;
.. ·• ::•·:·•·':iliV,dr".'.l~~i.>:J\;>:
clave metodológica sería pensar en lo·s hitos amorosos importantes que vivimos '[: ;;:j~iÜJ,1;•1:1'11!~
como una encrucijada. Esos momentos en que tuvimos que optar entre esto o lo : _;¡::,,,:,.. :~,,- ~se._ • ,•• .·•·•·• ·• •:•':~C·:/"'-'..c•
otro. Ot ra clave es buscar los hitos amorosos en los que no optamos por el amor !• J)c:'.: ' >füril
sino por alguna otra razón que pudo más que la necesidad de amor. Otros hitos que :, •i;~¡¡¡~,-, ....
•. ttlt>7w❖;a1❖, ••r.·
debemos rastrear son los hitos obligados, los que fueron mandatos de género. -~ Jj¿j1jt1 'é'r< '"·
Porque se supone que a ci~rta edad hay que tener novio, porque se supone que f fÍl~;:~."- '
tienes que emparejarte, porque se supone que tienes que desear tener hijos, y se i, • • ·i:;;,,
SUpOne que tienes que tenerlos. • lfc•w>:
Hay otros hitos que son los marcados por deseos amorosos que no siempre .
coincidieron con las reglas establecidas y las rompieron: un amor "prohibido" por la
edad, por lo inconveniente de la persona, por el momento, por las diferencias. Las
experiencias amorosas prohibidas por las normas establecidas que han vivido una
gran cantidad de mujeres las ha convertido en disidentes vitales.
15
m
~ Claves fernioistas para la negociación en el amo r
~
.., .. .··•
,.: _t
; Son muchísimas las disidentes: la que se fue con el novio sin avisar en su casa y
!. nunca más llegó a dormir, la que en vez de novio tuvo novia. la que no solamente
¡ama a una persona sino que se da el lujo de amar a dos y a tres al mismo tiempo y
·: con intensidad ... Estas disidencias marcan la vida de las mujeres, especialmente la
•¡
1de nosotras. las mujeres contemporáneas.
Modernas y tradicionales: marcadas por el conflicto

\ ~: r L a contradicción entre tener vidas marcadas por hitos obligatorios y, al mismo
.,. •!fh, ¡ tiempo,tener vidas marcadas por transgresiones es una característica de nosotras,
••• J, las mujeres contemporáneas. Esta contradicción. que encontramos hoy en práctica-
:- mente todas las mujeres del mundo, tiene su causa en la configuración de género
· l que hemos tenido nosotras en un tiempo de tan agudas transiciones .
. :jjf. íi~~F-'." 1
1,:' : Cuando digo .. nosotras, las contemporáneas". estoy expresando una categoría
: " '.¡jjm/•.;¡¡;¡: '_ fundamental de análisis de género. Nosotras, por ser contemporáneas, compartimos un
i!l::::/'. , ••.. ~;
't'F,·i{;::·.: \ conjunto de semejanzas. En todo el mundo todas las mujeres contemporáneas nos
:h¡¡,~~:. ¡: parecemos muchísimo porque todas somos el producto de una construcción de género
• .·t/· _; muy tradicional y, al mismo tiempo, el producto de una nueva construcción de género,
jiJ•;¡¡~f~;: : j que ya es moderna. Mujeres iraquíes, chilenas. canadienses. francesas, guatemaltecas,
,t~;¡;'f-i¡i¡;:,.•at~
; ~ú úf i' * .
• ·: nicas, combinan en cada una y en el conjunto de todas ellas una construcción de género
f*t. ••
• )~! 'f tradicional y una construcción de género moderna. Esta doble construcción de género
•. 'J nos define.
.
~ Considero que es nuestra marca de género en estos tiempos de cambio de siglo y de
, l ,~¡\;!{ _¡¡¡ ;· milenio. Al resultado que produce esta doble construcción. a esta marca que nos define
tl,i::.' i~eh:~:~~::~i:;;:::;~/:t:;i::~:;~;::~:~;u~::i;:s:~~~I: s~: ~~~:::cla

'¡¡;;¡-' ::
:¡ En América Latina. todas nuestras culturas son sincréticas. porque son el resultado de
; mezclas culturales complejas y a menudo contradictorias. Todas las mujeres
(~: :. contemporáneas somos una mezcla de mujeres tradicionales y de mujeres
"tN,Ji~ ,mw,· j" modernas. Por eso. los conflictos que vivimos internamente reflejan los conflictos
i'í¡íli ,~y, ! que hoy se viven en el mundo entre la tradición y la modernidad. Toda mujer vive en
r su interior muchos de los conflictos culturales y sociales del mundo de hoy. La zona
más tradicional de su subjetividad y la zona más moderna de su subjetividad viven
grandes conflictos.
Lo tradicional y lo moderno no sólo son diferentes. Son antagónicos. Este

antagonismo produce a menudo profundos conflictos internos en las mujeres. Y vivir
se convierte en el arte de ir resolviendo las contradicciones, antagonismos y
,, paradojas que nacen del sincretismo de género que nos marca a todas y a cada una.
• ·: Es un arte que requiere de muchas artífices.
16
Las artistas que han ido resolviendo las contradicciones entre lo tradicional y lo
moderno han ido creando una forma única y propia de vivir. Para poder entregarnos ...-~.-.
a este arte tenemos que entender que estos conflictos nos acompañarán toda la
vida. Porque a lo largo de nuestras cortas vidas no se va a resolver la contradicción
entre tradición y modernidad.
Para amar tenemos que conocer

Las mujeres contemporáneas dedicamos muchos esfuerzos y afanes a
modernizar la vida social, la cultura, las leyes, la política. ¿Nos dedicamos a
modernizar el amor? En lo que yo conozco y encuentro, donde dejamos más
intocada la tradición es en todo aquello que tiene que ver con el amor.
.,...
Las mujeres no vivimos con equilibro la contradicción tradición- modernidad en esa .' • \!
importantísima zona de nuestra subjetividad y de nuestra vida. Mantenemos el amor en

formas tan tradicionales que darían gusto para un museo. Somos modernas en
apariencia. En la carrocería, en el estilo, en las formalidades. Pero la propia subjetividad,
lo que está más ligado a los afectos configuradores de nuestra identidad de género, el
amor, permanece intocado. Nuestro sincretismo es a menudo lastimoso porque el amor, •
tan central en la vida de las mujeres, resulta el espacio más tradicional en las mujeres ·-
modernas.
Una propuesta metodológica muy interesante para el autoconocimiento sería que ;l

cada una iluminara su configuración amorosa desde una perspectiva moderna. Que l ';ti • ::\ '
~
analizara el sentido que le da al amor, sus relaciones amorosas, su forma de amar. ,: ~ ----'";.:--•----
':mi~~~.:::.
,, *ii?t
Al hacer esta propuesta, estoy introduciendo una clave moderna. no tradicional, ; ::-· ''/~i-
sobre el amor. ¿En qué consiste esta clave? En entender que para amar hay que -~ m
,❖.' ..
conocer, tener conocimientos. ·" .
•
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.
t,•··.♦.·-\
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~
'
·; ~·~§!1~~ ~tr.•t!
Ésta es una clave profundamente moderna en cuanto al amor. Porque la clave \ lt!mf:~¡¡¡~~~~;; ;¡~;¡,;:,.
tradicional es: el amor se da solo, no hay que analizar nada, no es necesario conocer, ¡, ::;TTH~!~~f¡~::·;
el amor llega inesperadamente, te sale naturalmente del corazón y no necesitas cono- J . ,,,,/ •• •
cernada, sólo entregarte. Desde una perspectiva moderna entendemos que para amar ¡- ~¡;, •
nos es imprescindible el conocimiento. Estamos ante un principio·moderno que rompe :
con la atávica ignorancia que se le ha asignado a las mujeres en el amor. ,.
-:,J
1l
En la concepción tradicional del amor se esp,:lra que las mujeres seamos ignorantes.
.
La ignorancia se llega incluso a considerar un atributo del amor. En la moral amorosa •• .
tradicional esa ignorancia es elevada al rango de virtud, una virtud femenina. Desde •
una perspectiva moderna nos planteamos que para amar necesitamos conocer. , · :t;;;•'.: ,...~/·
.. t· 1
Sobre todo, conocernos a nosotras mismas. Necesitamos el autoconocimiento. ··
H¡;t•·
1... ,.
17
m
Claves femínistas para la negocíacíón en el amor
•....•
.:.~
f
il~:~i,~·~,,:, ) \ Quién soy, qué quiero, qué anhelo, qué necesito

e
,~1~ .. ,.
:.·.t~I' :
orno modernas. tenemos que asumir otro punto de partida en el amor. Para amar,
i!~[~ ¡¡ el primer interés tiene que estar situado en nosotras mismas. lo que me exige dar
,',.~ 'l respuesta a preguntas muy sencillas: quién soy. qué soy, qué quiero. qué deseo. qué
-· ~~ij\i: J
anhelo. qué necesito, qué puedo, qué hago. Son preguntas que me guían en un
·-t~fü :. recorrido para desarrollar la autoconciencia. Si no conozco quién soy, probablemente
. . :tr,;•,,;::;.
i;
~• :. •o::m~::~ lo que esté haciendo al amar es cumplir mandatos amorosos.
!: Si no sé qué quiero, probablemente esté dispuesta a querer lo que otros quieren para
• sí como si yo lo quisiera para mí. Si no sé qué anhelo, probablemente esté en
"= conflicto con mis deseos porque muchos de mis anhelos están prohibidos y no los
• i¡ realizo ni sé siquiera qué implicaría realizarlos. Si no sé qué deseo o reprimo mis
!· deseos por prohibidos, me convierto en territorio del deseo de otros y vivo para
¡ realizar los deseos de otros o de otras. Es fundamental la pregunta qué deseo. Y no
r hay que confundirla con qué quiero. Ni tampoco con qué necesito. Qué necesito es
1
; una pregunta sobre mi ubicación en mi vida y en el mundo.
\ Y no me puedo contestar esa pregunta si antes no defino quién soy y qué soy. Para
-\ saber qué necesito debo ubicarme yo, una mujer a la que le pasa esto, que anhela esto,
,i que tiene esta edad ... La edad es una clave fundamental para el amor. Porque el amor
•
\ requiere ser etáreamente realizable. Tengo esta edad y necesito saber cómo tengo
,. :: , ;~~ :- la edad que tengo, cómo vivo mi edad, cómo estoy en mi edad. cómo estoy en el
J.~- • - ~ H ,. ,.. 1:
: .~.r • • ::. cuerpo de mi edad, cómo está mi sexualidad de acuerdo con mi edad. Necesito
- .¡ ubicarme en mi edad para saber cuáles son mis necesidades amorosas. Porque si
, :m!i'• . ,; no defino mis necesidades amorosas actuales, probablemente estoy moviéndome
lt ifi•,,;l•:••~?:1¡:;¡¡,.¡¡¡"· :: por necesidades amorosas del pasado. A veces andamos cincuenteando con
'ili7il'~;~,¡;~~~~~~:· ;' :: anhel~s adolescentes. O con necesidades amorosas infan~iles. Y no acabamos de
• -~J. -. ." asumir la muier que somos en este momento de nuestra vida.
. '
_., -~-. :t.i'liíl~-- .. ,ii!·L M is necesidades amorosas no son naturales. Tampoco son absolutas. Definir mis
,.;,,¡¡¡,;i~.ii.-·~ 'i necesidades
pasa por jerarquizarlas y priorizar unas u otras. Pasa también por
~~~·~;:;:'l;.,:'.ít : discernir qué es lo que necesito realmente aquí y ahora. Y qué no necesito aquí y
.-..~:: :i!~
•
1
• ' ahora. Discernir es entender. analizar. comprender, tres experiencias subjetivas
• ,-!:~.-.. •
• ·•'··· i diferentes. Si analizamos nuestras necesidades, las entenderemos, las

comprenderemos. Nuestra voluntad podrá discernir cuál es nuestra necesidad
prioritaria. Discernir quiere decir tener capacidad de juicio. Otra clave para amar es
tener un juicio amoroso propio.
Una filosofía amorosa diferente

P
ara poder tener juicios propios sobre el amor necesitamos una filosofía
amorosa. Si no la tenemos definida, probablemente estemos funcionando con la
W filosofía amorosa tradicional. Una filosofía implica una concepción del mundo y de la
~tJ. vida. Una concepción articulada. una visión compleja sobre el mundo y sobre la vida.
1~' Tener una filosofía resulta urgente para poder reposicionarnos frente al amor.
p, h• ., .. .,......
'¡j; ttVl¡T~
·:. d e c"cuc.nh,P
18
t.:t .:;'.· c:;1 :,
~:., -j!:.•; ;: ,!" ;:;_: "· ·,
Si no tenemos una filosofía distinta a la tradicional, las carencias, las dificultades y la

problemática del amor las percibiremos desde la filosofía patriarcal con la que nos
moldearon . La cultura patriarcal se ha prodigado en crear una moral amorosa para las
mujeres. La ha desarrollado, la ha vestido y revestido a lo largo de siglos. En esa
filosofía hemos sido educadas. Y es en la subjetividad ligada al amor donde la filosofía
patriarcal permanece casi intacta. La cultura patriarcal les asigna a las mujeres como
identidad existencial el amor. Hace de las mujeres las especialistas del amor, las •
educa para que se especialicen en amar y en vivir en pos del amor. Si no tenemos
una filosofía alternativa, estaremos dándole siempre vueltas a los problemas desde
esa filosofía tradicional.
Existe una filosofía alternativa. Desde el siglo XVIII, por lo menos, se viene
construyendo una filosofía amorosa diferente para las mujeres. Es la que hoy ya se
llama filosofía feminista, que plantea una nueva perspectiva sobre la vida, las
relaciones, las personas, y el amor. En la cultura feminista, y durante siglos, las
mujeres feministas han debatido especialmente sobre el amor. El amor ha marcado
la filosofía feminista que, entre otras cosas, es también una filosofía amorosa.
Una revolución: el amor es histórico '
L as feministas llevan siglos reflexionando sobre el amor como tema central de su

análisis sobre el mundo. Si revisamos la literatura feminista desde el siglo XVIII hasta
hoy, encontraremos una crítica sistemática al amor tradicional. y el planteamiento de í
alternativas desde muy distintos ángulos. Las feministas han analizado la sexualidad \
-tema fundamental de la cultura feminista-, han analizado las relaciones sociales 1
-vinculándolas a las relaciones amorosas-. han analizado la familia, han analizado las '¡
;>
relaciones de pareja. \
En tierras latinoamericanas, la primera feminista que cuestiona el amor tradicional es Sor \.

Juana Inés de la Cruz, que hizo críticas que resultan muy actuales. La misma vida de '\
esta monja mexicana fue una crítica a la forma tradicional de amar. Con su vida, en las ¡
condiciones de su tiempo y de su mundo, ella trastocó el amor patriarcal. Necesitamos :i
conocer esa mirada transgresora de Sor Juana, que es su legado fundamental. ;
.,
Junto a ella , muchas otras feministas han revisado el amor en clave muy crítica . Y ::
han planteado alternativas al amor tradicional. Junto a otros pensadores, las ;!
feministas han dado un primer paso revolucionario al ubicar el amor en la historia. Al h
hacerlo así han dicho algo muy novedoso, novedosísimo: que el amor no es un hecho :
natural. que el amor no es un hecho ahistórico, sino que el amo_ r es construido
históricamente, que es un hecho aprendido socialmente. Ubicar el amor en la
historia es un importante aporte teórico que las feministas de todos los tiempos nos
han hecho y que han compartido con otros grandes pensadores modernos.
•i .'
•
En la visión tradicional, el amor es universal y ahistórico, es eterno, tiene valores
universales idénticos y se rige por una moral universal.
19
Claves feministas para la negociación en el amor
,r •.•.
.:J.
\i .•
,.,I :, En la visión feminista, el amor es histórico -está condicionado por las épocas y por
;t~~~-- !; las culturas-. está especializado por géneros -tiene normas y mandatos diferentes
•• •.. ?ili•t,;;,i -: para las mujeres y para los hombres-, y va de la mano con el poder. El vínculo entre el
'
•
r
poder y el amor es central en la visión feminista del amor.
Poder y amor están vinculados

la concepción tradicional del amor, el amor es funcional a la concepción
. . .! tradicional del poder. Que poder y amor estén vinculados quiere decir que el amor
-~,·1~;:;,-;'j::· :, es una fuente de poder. que muchos mecanismos amorosos permiten acumular
i!~• .•
•• • :_ poder, que al amar y al ser amados ganamos poder, que al no amar y al no ser
_¡. amados perdemos poder. Y quiere decir que la experiencia amorosa es también una
.. i experiencia política. Porque el amor reproduce formas de poder. Y porque el amor
: es también un espacio para la liberación y la emancipación políticas .
•i.
i!
¡ Millones de mujeres viven a diario experiencias de desamor. de injusticia en el amor,
•
; de inequidad amorosa. El feminismo ha hecho y sigue haciendo la crítica del amor que
'_ somete, que se impone, que devasta, que profundiza y perpetúa las desigualdades.
l Hoy, el anhelo de "justicia amorosa" moviliza a millones de mujeres a participar en los
! más diversos movimientos sociales. La clave de la justicia, de la equidad. es fundamental
!' para entender a las mujeres de hoy, que más que la salud. la educación, el agua potable
.. ·~-' o el alimento sienten el amor como su necesidad más básica y no cubierta.
.
. . ;,
:' El amor puede convertirse en un espacio para transformar las relaciones de poder
.~ en la vida personal, en la pareja. en la familia y en la sociedad. El amor es tema
1' central del feminismo. que ha ido logrando transformaciones legales y jurídico-políticas
·.: ' importantes. El feminismo considera que no es posible transformar el amor si no se
:- transforma la sociedad. que no es posible transformar la sociedad si no se transforma
; el amor. Al demandar una nueva ética amorosa, el feminismo está demandando nuevas
·: relaciones de poder, una nueva relación política, una nueva sociedad.
'.
El amor va cambiando a lo largo de la historia

E I amor se construye en la historia . Esto significa que aprendemos los contenidos
del amor. O que no los aprendemos. Que el amor es histórico significa que el amor
ha tenido contenidos diferentes en las diferentes épocas históricas. Esta clave
important ísima nos coloca en otra perspectiva.
Nos lleva a historizar el amor. A comprender, por ejemplo, que durante el siglo XX
proliferaron e:n Occidente formas nuevas del amor que cambiaron la conciencia de
muchas mujeres y hombres. A entender que en el siglo XVI se vivía el amor con
particularidades que ya no existen en el siglo XX. Nos lleva también a asumir un
fenómeno interesantísimo: que las mujeres de hoy conservamos en nuestra
subjetividad formas históricas del amor ya superadas en la sociedad .
20
Una clave muy interesante en el análisis feminista sobre el amor es reconocer que
en cada época, las mujeres han amado a la manera de su tiempo y, al mismo
tiempo, han amado también recogiendo formas tradicionales del amor ya superadas
y consideradas atrasadas en su tiempo. Han amado sincréticamente.
El amor es histórico y siempre es simbólico. Existe como imaginario, como

literatura. como ideología. como normas. como política. Cómo cada quien realiza el
amor dependerá del momento de la historia que vive y de sus condiciones de vida.
Aprendemos ideologías amorosas, aprendemos los contenidos específicos del amor
a través de mandatos. de normas, de creencias. Al vivir, cada persona trata de ,
realizar el amor ideológicamente aprendido. En la realidad, la mayoría vive
frustraciones amorosas, porque casi nunca podemos realizar el imaginario amoroso
al que estamos vinculadas. Existen distintas tradiciones amorosas. Me ocuparé
solamente de una de ellas, la tradición amorosa occidental. la que nos ha
configurado a todas nosotras, la que ha configurado nuestro imaginario amoroso. La
tradición amorosa occidental se ha ido extendiendo cada vez más y hoy, con la j _,,-;¡m\r¡f~' ,
globalización, se va convirtiendo en la perspectiva amorosa mundial. Es / :¡::':1¡m~i!t~ll~l~l
interesantísimo observar que cuando hoy se reivindica la multiculturalidad, se ¡ <; • ,;-t,: "'"':'.t'' '
reivindican formas de amor no-occidental frente al modelo de amor occidental , que :! ·. : <d~;.
1<<'ííll
se va haciendo hegemónico. :¡ <' •• •'· "~:,¡; · •·· • •.
.. ,.;:.. -~;·.'.:: ·,·-~ ,.·
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21
;: Claves fern inistas para la negociación en el amor
'11,
'm
•*if
!;
~
:E n la cultura occidental. el amor, definido como vivo afecto o inclinación, tiene
;f entre sus características fundamentales la benevolencia. La benevolencia implica el
' ;, anhelo de un valor: la suavidad . Se le asigna al amor una estét ica más que una ética.
, ~ / Occidente asocia benevolencia. deferencia y afecto con erotismo. A veces no hace
i separación, como si fueran una y la misma cosa. A veces sí separa estas
.;. características . Pero en el imaginario occidental prevalece vincular eros y amor a una
f ,: • • , •
1, expenenc1a un1ca.
E.
.Aj Occidente también asocia el amor a la voluntad. Cuando decimos que hacemos algo
ii![ "por amor". se entiende que empleamos nuestra voluntad. Voluntad para hacer cosas.
"~~ para sobreponernos a las dificultades, para crear. La voluntad implica también empeño.
~il! Hacer algo por amor implica hacerlo con empeño. Con voluntad y utilizando a fondo
: nuestras habilidades y nuestras capacidades. En Occidente el amor está también
>. ij profundamente ligado al deseo, a anhelos. ilusiones. sueños. imaginaciones. Al anhelo
,, ;
'. de lo innombrable. A menudo. la cultura occidental llama "amor" a la persona amada.

•~ asociación que resulta muy interesante. En Nicaragua se usa mucho decir a todo el
. ; mundo "amor, amorcito", aun cuando sean personas desconocidas. También la
-~iíi.~i:'.:ffil;:-~.,t.J; experiencia erótica se asocia en el lenguaje y decimos " hacer el amor" .
. .. . ...
.
" Nuestra cult ura concibe también el amor como un apetito. En la poesía. y también en
...:..,., • , la sicología. se habla del "hambre de amor" . Y en el erot ismo hablamos del
,.,,,,_.,,•.,'.: :-,¡,'· i;, "hambre de piel". El amor se experimenta como un apetito, un ansia. No solamente
.·· : . ¡, un anhelo de, un afecto por, una inclinación hacia, sino también como una pasión
m;. profunda, como una fuerza que no reconoce normas ni mandatos ni límites y sólo
~j busca satisfacerse. Por esa pasión amorosa se moviliza la voluntad y la creatividad de
f,. las personas.
.,
_ Amor espiritual, amor carnal: eros, ágape, filía

~-
¡C L
4
: a tradición occidental clasífica las diversas c lases de amor. Habla de amor físico
" y de amor espiritual. considerando que son dos amores diversos. y olvidando que no
¡· hay amor que no sea físico. En la tradición occidental se jerarquizan las formas de
·.- amor y se escinde la experiencia amorosa en dos planos. el físico y el espiritual.
·:· considerándolos autónomos. Se habla de carne y de espíritu y por tanto. de amor
.¡ carnal, que siempre se piensa como apasionado; y de amor espiritual, al que se le
.; asigna siempre un valor positivo, trascendente. moralmente bueno y sobre todo,
, superior al del amor carnal, que se supone dominado por las " bajas pasiones" .
'; .
if~
.•~J
24
.
Dra. lvlarcela Lagarde

_:: .--;,,->L.
.: ';:~'.<<¡,+;t~
Occidente habla también del amor de amistad, que implica prescindir del eros. Amor f1.
;;• tS<~;&:
.• :}/~ '',',' ':
Ji .
de amistad es aquel en el que no hay eros, y solamente se desarrolla el afecto por :i ' - ' ;_
:¡t¡; •• ., ..
el otro o la otra, una voluntad en favor del otro, una apetencia por su compañía, pero
sin involucrar nunca una relación carnal. También se conoce en la tradición
occidental el amor solidario. La solidaridad tiene como fundamento el amor. Se trata
de un amor sin objeto, indefinido, un amor a todos, un amor a un grupo, un amor a
un estado de las personas.
Y así, hay quienes, por ejemplo. aman a las personas sin techo y sin hogar... y el
resto no les importa. Focalizan toda su solidaridad. como si fuera un rayo láser. en
los sin techo y sin hogar. Otras personas aman a "todo el mundo". En general,
< :J
Occidente maneja tres conceptos fundamentales sobre el amor: eros. ágape. filia. Eros :go:··,.:<
quiere decir amor con atracción física. Ágape es un concepto griego que se relaciona
con el amor que comparte amor con otras personas. Y la filia es la simpatía. la
atracción espiritual hacia otras personas. que implica un sentido trascendente.
cargado de espiritualidad. Ágape es el concepto que después pasó a la tradición
cristiana occidental como amor-caridad. Es una conmoción por el otro o la otra que nos
lleva a hacer algo por ellos. En el cristianismo, todo otro y toda otra son seres que
merecen nuestro ágape. que compartamos amor con ellos. .
El mundo griego: la perfección, la atracción .;
.."
'J,1
:,..
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para la tradición griega. el amor hace perfectas a las personas. La cultura griega ::fi ....:, .-,
consideró que el amor pone a las personas en un proceso de perfección. Los ;;f(
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..,ju.,;
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a·· .•' ~:;:,~fü,.f:=:Y.

::!h -~~-YHG:~Vi:-;rr;°;
griegos veían al amante como un ser imperfecto que ama para encontrar en el otro ;:)1:.
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.•:: .,.,;,-;:,'.,,O·•
'w,,,.,,,;.,""
_~~:1•;.¡:;>1->,
' •;;L'.füi:i{;:,'.
o en la otra lo que le falta, aquello de lo que carece y que le impide ser perfecto.
Desde esta óptica. el amado es lo perfecto.
Piensen en la cantidad de expresiones amorosas contemporáneas que todavía llevan

el sello griego: ver en el amado o en la amada la encarnación de lo perfecto. de lo
único, de lo más maravilloso. En nuestro imaginario está el amado o la amada
perfectos. Más moderna es la idea de que quien ama a alguien perfecto se
perfecciona. se hace perfecto o perfecta. Lo que sucede es que, con estas ideas,
cuando llegan las desilusiones amorosas. los golpes son muy fuertes . Porque ni quien
ama es perfecta ni quien es amado es perfecto.
En el mundo griego se consideraba que hay personas que tienen atractivo, y es por
eso que atraen amor, es por eso que se las ama. La atracción era vista como la '
•t '
}¿'
cualidad de algunas personas. También en nuestro tiempo hablamos de personas ,. ¡ '< y.
i ..•:). .~": i'.

atractivas y de personas no atractivas. De personas que ejercen atracción porque sí. .( . .
:j:_'.i: ).',,<
. .
~'
.: ;,;: :. ,.. -.. e.
; ,,..,_:--··,
porque así son y atraen y ejercen una influencia de amor sobre otras personas.
·!
25
• · li: Claves feministas para la negociación en el an1or
,1:
i~.
,..
~: En la tradición griega, uno de los más claros sentidos del amor es el ejercicio de la
.! atracción. En muchas mujeres pervive esta idea. Y para muchas mujeres lo de la
} atracción es fuente de muchos dramas. Porque la atracción sobre el otro o sobre la
·".
a;: otra. que tanto exaltan los modelos tradicionales del amor. es efímera. está muy
'•'•":,,..,: il ~ ligada al cuerpo y muy pronto se acaba, aunque no de forma recíproca sino casi
•.' •.: :·.-- ji únicamente en la mujer. Sin atractivo la mujer pierde autoridad en la relación
... • ¡;:
·: ;. •. : ~; amorosa. Un terrible sufrimiento amoroso de muchas mujeres es la pérdida de su
.. capacidad de atracción .
f..
¡¡·
La revolución del amor cristiano
,iji L
a expansión del cristianismo, una religión que tiene como fundamento el amor.
f'!f"" ·t,;;¡
- .~: .j,: representó una revolución amorosa. En la concepción cristiana. el amor se

11
experimenta, se vive. se actúa y se demuestra. No solamente se siente, sino que tiene
-~~:- que hacerse visible en las acciones. No se trata sólo de sentir amor, sino de hacer
Ji amor, de ser benevolente con las personas que amamos. Amar a alguien es hacer
',1;,;, cosas por el bien de alguien.
1::$
i!l\¡.
?l· La moral amorosa occidental.
ya influida por el cristianismo. asocia siempre el amor
,~, con el bien, con algo bueno. Siempre. Y es impensable considerar que haya "amores
\ que matan". El cristianismo asocia el amor a la voluntad y al deseo de hacer cosas
.. ~1 buenas, considerando que el amor hace bondadosas a las personas. En el
·= ., cristianismo se supone que hay más amor en el amado que en el amante.
¡ El cristianismo produce un giro histórico importante: el amor no nace de la

,. apetencia, sino de la superabundancia. Se da amor porque se tiene amor en
/ abundancia y no porque se carezca de amor o porque se tenga apetito de amor. Se
( enseña: "Haz el bien sin mirar a quién" y se difunde un conjunto de expresiones
:ll° morales que insisten en que no importa cuál sea la calidad del amado, importando
.,•~! únicamente la felicidad que hay en dar amor, porque se abunda en amor. La
rnrnrnfL-:iii?;!,~sU ,. .· "ji solidaridad, la generosidad y la gratitud son características centrales del amor
i, ,c:·s•-:¡¡;,w,..
i,.•.~;":.'-"• •,:.~-•.··:::.:,: ''·
:,,l. cr·1st·1ano
•
~-:.,@.~p!~qi,'. !~::
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"~~:~;~?'(~~' :"::'
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: ::~:•:::::~;.: • r
Una invención de la literatura
.••. ,¡j¡Jf; '. . '
11/ itit•' :¡ U
na gran cantidad de autores y autoras modernos han cuestionado todas estas
-~[f''': ~¡ formas del _amor, tanto las de la antig_üedad clásica como las de la cu_ltur~ cristiana.
:;a,):m1ii~hi,0, f:, Para cuestionarlas han empezado ubicando el amor como una experiencia natural y
' 1;!~:. ;.:~..-:•,'
'.'.:b··, 'i;'.i¡, ·¡ no sobrenatural ni extraordinaria. No sólo han sido pensadoras feministas las que
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... ... :·., han hecho este cuestionamiento.
,
:-, ' ''. ~t 1t:i;~e.ffif1: ¡

~-) I· j:I1nrs:~~:; -:·
'~ \I th llIIlíli;lti !l También muchos filósofos no feministas están en esa línea. Citaré a uno, que me
· ~ll!!lj ;!;j¡¡~; ,:- parece muy potable. el español José Ortega y Gasset. Para él, el amor es una
"!-: )f7 '>
•'Jtif' ). invención literaria. Ve el amor como un invento al que la literatura ha llenado de

·f
1
· s .~;: contenidos. Y realmente, la producción literaria versa mayoritariamente sobre el amor.
"
26
Todas las mujeres hemos aprendido el· amor de muchas maneras. también a través de
la literatura. Y una clave fundamental para entender qué hemos aprendido es entender
que la cultura amorosa literaria. con sus mitos. forma parte de la cultura amorosa
popular vigente en nuestro mundo, aun cuando millones de mujeres y hombres no
hayan abierto un libro jamás, aun cuando sean analfabetas. ,·•·
La plenitud: un anhelo de la modernidad

.,
E n una tradición más moderna, el amor tiene otras características. Una de ellas, '.~:
,..
~
,1•: ·-
;:~---
. ';.
•, ..
.
la generosidad. Sentir generosidad y actuar con generosidad son consideradas ,• '.~
• ;e,,~...
•
experiencias amorosas. Otra característica que le ha asignado la modernidad al amor
ha sido la vitalidad. El amor se nos presenta como una experiencia vitalista y
vitalizadora, y el no tener experiencias amorosas está asociado a falta de vitalidad.
Y uno podría pensar lo contrario: si no estamos amando. tenemos todas las energías
para amamos a nosot ras. Pero nunca sucede así. porque hay energías que se
renuevan al ser realizadas. y si no se realizan, la persona pierde su vitalidad.
La modernidad rodea especialmente el amor del anhelo de la plenitud. Los griegos

querían ser perfectos. En la cultura moderna queremos ser plenos, sentirnos plenos.
En la modernidad la plenitud es un valor. Las filósofas del siglo XX han puesto en el
centro de su discurso el lograr la plenitud de las mujeres. considerando que el amor
a la antigua la impide. En la modernidad. la plenitud está relacionada con la condición
de ser personas. e implica la realización, la trascendencia y la libertad, tres
características filosóficas modernas a las que aspiran las personas. La plenitud no
puede ser pensada como una condición tradicional o en una cultura que no sea la
cultura moderna.
La modernidad entiende que vivir es sentirse plena, realizarse, ser libre. Seguimos
aspirando a ser benevolentes. a ser generosas, a hacer acciones para el bien de
otros. y al mismo tiempo aspiramos a realizarnos en plenitud y con libertad. Esta
doble aspiración nos crea una grandísima contradicción a las mujeres, es una
contradicción que nos marca a todas.
Tradicionales y modernas:
partidas en nuestro interior
P or querer amar con generosidad y con libertad. por querer amar y ser amadas
en plenitud las mujeres modernas viven conflictos muy profundos, que configuran
como frustración gran parte de sus experiencias amorosas. A la vez, somos
modernas y somos tradicionales, y a diario vivimos una contradicción antagónica en
desear ser benevolentes, generosas y dar por superabundancia a los demás. al
mismo tiempo que tratamos de realizarnos, de vivir en plenitud y de ser libres.
27
. Í' Claves ferninistas para la negociación en el arnor
..:,: '
!/( El amor moderno es también promotor de la creación. Se supone que un valor

,,\ universal del amor moderno es movilizar a las personas para crear. Para las mujeres,
J.{ la contradicción está en la cantidad de impedimentos con que tropieza nuestra
" creatividad.
f.
•• ·¡
¡
¡¡ Somos convocadas a movernos por amor, a mover montañas por amor, pero para
.;i, que nuestros esfuerzos beneficien a otras personas. Nuestra prioridad debe ser
!ii siempre el beneficio de los demás. En sí mismo, este mandato es una limitación a la
t creatividad amorosa de las mujeres. Porque en el ejercicio amoroso las mujeres
•. ·:; estamos siempre calibrando y balanceando qué tanto beneficiamos a los otros y qué
~~ ,i tanto nos beneficia a nosotras y aún más . si es legítimo que nos beneficie. La
:'. posibilidad creativa del amor tiene para nosotras una doble medida.
¡l Por todas estas contradicciones, las mujeres modernas experimentan en su identidad

. .-.. ' -:i lo que llamo escisión vital. Este concepto expresa una experiencia subjetiva y objetiva.
r·;-·'.~9!i:: ;¡¡ tanto intrasíquica como extrasíquica y social. por la que nos sentimos escindidas .
..i ' -:: partidas internamente entre lo tradicional y lo moderno. Los valores tradicionales y los
.,.. ,, valores modernos que vivimos tratan de coexistir en cada una de nosotras.
..-,;
!1.
_ ... '.'; Tenemos obligaciones tradicionales. deberes amorosos tradicionales, mandatos

·~~f'~~;, l' amorosos tradicionales, y al mismo tiempo sentimos mandatos y deberes amorosos
•.:' ]{lí~ !i modernos. Y las personas con las que nos relacionamos nos asignan a la vez
_ fllí}~ 1· deberes amorosos tradicionales y modernos. Esta contradicción atrapa a la mayoría
·,. -- :! ·, de las mujeres. Experimentamos la sensación de estar partidas. Anhelamos ser
'
• ; amadas, pero sentimos la exigencia de amar sin esperar ser correspondidas. Es por
:, eso que tantas veces el amor nos duele tanto y nos resulta tan agridulce. Porque se
; espera que demos mucho sin recibir lo mismo a cambio .
...,.,. -
,, Esta escisión vital. esta partición interna, nos duele. Hay quienes la sienten como un
4
d! desgarramiento interior. Porque en la experiencia del amor sentimos confrontada la
•+!: propia necesidad amorosa con la necesidad amorosa de los otros. Y en la
.
~ •
, ·i,l:: concepción tradicional del amor los otros siempre son prioritarios para las mujeres .
f
;, . . {r· Sentimos la necesidad de ser amadas y de amar, pero nos enseñaron a priorizar a los
·..
~;.•'.
¡f otros y a ser benevolentes y generosas con los otros y a no esperar que los otros lo
( sean con nosotras. Esta es tal vez la trampa amorosa más trágica en que la cultura
·; patriarcal ha colocado a las mujeres: priorizar a los demás en el amor.
r,!\;:;;._ ~; El conflicto de dos libertades que se aman

••
~. H ay otra característica del amor que anhelamos que genera un gran conflicto. Para
'
_ ¡. entenderla, citaré a otro hombre, para que vean cómo los hombres modernos han
;.~!;1;'. i, reflexionado críticamente sobre el amor. Citaré al compañero de la filósofa Simone de

. '• -~•,.1:.1 ••
¡:;;;:•1;¡..•
..;-,,;::··' •'· ,'L Beauvoir, al filósofo francés Jean Paul Sartre. que en su obra El ser y la nada. uno de
.:-" .
!f •.
~ los clásicos más importantes del siglo XX. plantea que el amor es la relación desde el
'
·•·:i.
;(~: sí mismo con el otro. Con " el sí mismo" definía Sartre al ser individual.
'-
' 1'
'.-
,t
¡":'·
28
l; .,
,;fo • ' }:
Dra. Marce la Lagarde
Sartre plantea que el amor liga a dos seres en conflicto, a dos seres que tratan de
ser "el sí mismo". Y en el amor se establece una relación entre dos libertades: mi
libertad y tu libertad. Y al establecerse se crea el conflicto más actual de la
modernidad: dos seres que tratan de afirmarse, de vivir en plenitud. de realizarse,
y además de preservar su libertad. Dice Sartre: Como cada ser existe por la libertad
del otro, la libertad de cada uno es la que queda comprometida en el amor. En el
mundo moderno la afirmación de la individualidad consiste en que cada quien es
individuo o individua porque es reconocido como tal en libertad. Desde este punto
de vista moderno, la libertad no es sólo un hecho subjetivo, no es sólo que yo diga
"soy libre". o que yo sienta en mi conciencia que soy libre, sino que yo soy libre en
el mundo y no aislada. Soy libre al ser reconocida como un ser en libertad.
Para un filósofo existencialista. como Sartre, la materia del amor es la libertad. Y

nadie puede ser libre si se relaciona con un ser que no es libre. Mi libertad depende
de tu libertad. Y esa libertad es la que queda comprometida en el amor de personas
que se afirman en su individualidad.
¿Cómo amar si no nos amamos?

L o que Sartre planteó como una nueva ética amorosa, era todavía una ética
amorosa masculina: Porque "el sí mismo" es todavía una cualidad de género de los
hombres. Siguiendo a Sartre, pero haciéndole una crítica feminista, Simone de
Beauvoir planteó que mientras las mujeres no vivamos desde " el yo misma" no
podemos ni ser libres ni aspirar al amor en libertad.
La crítica de Simone de Beauvoir a Sartre es la de todas las feministas. No se puede

plantear la universalidad de una experiencia cuando la condición social, sexual y de
género es desigual. En esta visión existencialista del amor, que lo define como la
realización de la libertad de cada quien. lo primero que tenemos que hacer las mujeres • :.'i'l;i
es perfilar los contenidos de nuestras libertades. Porque si no. ni siquiera sabremos qué
,.; -,~- ·1
es lo que está en juego en la relación amorosa. Si no nombramos nuestras libertades. . ;, ..'
·;~·F:m..:
'.,
ni siquiera nos daremos cuenta de si las tenemos. de si las perdemos o de qué se trata
en la relación.
Simone de Beauvoir fue más lejos que Sartre. Planteó que tampoco los hombres son
libres porque las relaciones amorosas tradicionales están basadas únicamente en
"su" libertad. mientras conculcan. en el amor, la libertad de las mujeres. Esta
inequidad le hace concluir que nunca ha existido el amor libre. Porque el amor libre
implica seres en libertad. mutuamente libres, no ontológicamente libres. No que
digan soy libre. sino que realizan sus libertades en la relación.
Dice Simone de Beauvoir: ¿Cómo las mujeres

,
podemos ser benevolentes si no somos
benevolentes con nosotras mismas?. Esta es una pregunta que tenemos que
hacernos todos los días y todas las noches y todos los instantes de nuestras vidas.
29 .
'
/" Claves feministas para la negociación en el amor
-
,f ¿Cómo ser generosas con los demás si no somos primordialmente generosas con
·-! nosotras mismas? ¿Cómo poder dar si no nos damos a nosotras mismas? ¿Cómo
;: poder ser si no nos afirmamos en una existencia individual? Considero esta serie de
;; preguntas emblemáticas dentro de la reflexión feminista en el siglo XX.
¡-
¡:·
r
. .
'9¡,', '
¡i Mi maestra. Franca Basaglia. definió a las mujeres como seres para los otros. La
fu.·= ~- sociedad y la cultura hacen de las mujeres seres que aman a los otros. Lo perverso
,;:,,
'),•
·j
.. ~r es que en esa imposición está la negativa del amor propio. A las mujeres les ha sido
. .,,,~ prohibido el amor propio. Es la mayor perversión de la cultura patriarcal.
.,
Necesitamos ser egoístas
'
1' P ara Simone de Beauvoir era clarísimo que. para que la libertad se realice en el
ij; amor, las mujeres tenemos que ser libres. Y esto significa que tenemos que ser
:•!!: egoístas. En la cultura tradicional el egoísmo en las mujeres es reprobable.
•I"
1¡
¡¡
\ Y si alguien nos dice que somos egoístas. muchas de nosotras nos sentiremos
J· molestas y ofendidas. Porque hemos aprendido una moralidad patriarcal que nos
·;¡¡ prohíbe el egoísmo. Pero el egoísmo que se nos prohíbe significa simplemente algo
1
, • necesario: que el yo. el ego. esté en el centro de la propia vida. Ese egoísmo es el
•
_:: supuesto de Simone de Beauvoir para el amor. ¿Cómo amar si no nos amamos
,¡; primero a nosotras mismas? Ésa es la cuestión fundamental.
¡ Para Simone de Beauvoir. ser egoísta es el princ1p10 de la posibilidad del amor

:' como realización. como creatividad. como generosidad y como libertad. Si no
: desarrollamos ese "yo misma" no podremos amar de forma moderna y saciar
.{ nuestros anhelos de libertad. Simone de Beauvoir creó una categoría al decir que las
:l mujeres son seres para las hombres. Dice ella: La perfección amorosa del patriarcado
•.. - f: consiste en haber creado en las mujeres la creencia de que la realización personal está
1üf
,!~ en allegarse a un hombre plenipotenciario en la vida.

,s...
~- Esta creencia coloca a las mujeres. cuando aman. en una experiencia de no libertad.
';; ¿Por qué? Porque es-el otro quien queda colocado en el centro de nuestra vida.
'
} como ser fundamental que nos desplaza en la experiencia subjetiva de nuestra
~- individualidad. Para Simone de Beauvoir, la individualidad es fundamental para el
t'
!! amor. Porque si no somos individuas quedaremos colocadas como seres
'
/ subordinadas de otros seres .
,,'
:, Sin individualidad, vivimos la experiencia de ser una "mujer habitada" . con la
J· expresión de Gioconda Belli. Cuando las mujeres hemos sido habitadas por otros y
r~ esos otros ya no están en nuestras vidas, sentimos el vacío. Estamos vacías porque
r-
~- el centro de nuestra vida. de nuestros pensamientos, afectos y deseos lo ocupaba
• :J: otra persona. Esa experiencia. esa vivencia. conducen a la falta de libertad. Nadie
jj'puede ser libre si está subordinada a un ser más importante que ella misma.
~. :Nr
m:
30
Dra. Matcela Lagarde
La colonización amorosa de las mujeres

P ara las mujeres. amar es colocar al otro en el lugar de ser lo más importante del
mundo, más importante que una misma. Decimos: "Sin ti me muero". y eso significa
que la sustancia de mi vida está en ti, no en mí, que mi vitalidad depende de tu
existencia, no de la mía, que mis pensamientos están habitados por ti, que mi amor
está monopolizado por ti. Es lo que algunas autoras han llamado la colonización de
las mujeres a través del amor. Te coloniza otra persona. te habita. No solamente
;:! ; ' . • !·
.,, '· '
habita entre tus cuatro paredes. sino que habita tu cuerpo, tu subjetividad, tus
anhelos, tus pensamientos. En la colonización amorosa. una persona ejerce poderes
de dominación sobre la otra.
Dice Simone de Beauvoir: Entre el yo y el otro. como anhelo de vivir, sólo puede
existir como medida la libertad. Mientras las mujeres no hagamos de la libertad un valor
amoroso, estaremos sujetas a otros o sujetaremos a otros o a otras. Nos dominarán
y dominaremos. Este doble efecto ha sido estudiado por algunas sicólogas y ;;"
sicoanalistas feministas, que han planteado que una mujer colonizada. una mujer
habitada. aspira a colonizar y a habitar de la misma manera en la que es habitada y
colonizada. Su ideario de amor es el amor enajenado, el amor-dominación. Un amor
muy patriarcal, que resulta funcional al mantenimiento de la dominación de las mujeres
por los hombres.
En un amor enajenado, una quisiera que la otra persona no tuviera límites. Como yo
no los tengo, aspiro a que tú no los tengas. Como yo no soy libre, aspiro a que tú
tampoco seas libre, como yo estoy invadida aspiro a poder invadirte. El anhelo y el
deseo de muchas mujeres construidas así está en reproducir en el otro la
experiencia vivida en carne propia. La fantasía amorosa es tener enfrente un esclavo,
la misma esclava que yo soy para ti , como lo expresa la gran feminista y escritora
norteamericana Alice Walker. Resulta duro, pero es así: la fantasía amorosa de
muchas mujeres es relacionarse con un esclavo, con una esclava. que tengan una
esclavitud de la dimensión de su propia esclavitud. Anhelas que la otra persona te dé
y haga por ti por lo menos lo mismo que tú supones que das y haces por ella.
En busca del amor de madre

O ué anhela una mujer que ha aprendido el amor sin límites? Sigo el pensamiento de
Alice Walker y Franca Basaglia. Anhela una madre. Al amar a otra persona, su fantasía.
su deseo es encontrar en esa persona el amor total. Un amor total y ya experimentado
en el pasado, en la infancia. Desea el amor materno. con todo el sentido simbólico que
tiene el amor de la madre. El amor de la madre es el amor como reconocimiento. La
madre es alguien que te reconoce. Re-conocer. volver a conocer. Alguien que no
sepa quién eres tú como tú lo sabes. sino que lo sepa mejor que tú. Que te reconozca.
Que te re-valore. Que te re-valore porque te sientes desvalorizada y que te re-valore
desde su poder, desde su jerarquía. desde su omnipotencia. Deseas que te valore
no cualquiera, sino alguien que es extraordinaria, porque si te valora ella te estará
dando valor y además lo estará apoyando con su valor. Reconocimiento. revaloración
y aceptación. Todos estos anhelos nos remiten al amor de la madre.
31
''.
~.¡¡··
~·
-~ Claves feministas para la negociación en el amor
;
::,
·~, La aceptación nos remite a la madre. Deseas ser aceptada en el mundo. ¿Cómo? Como
!~: tú eres. ¿Sin cambiar nada? Nada. Ésa es la aceptación en grado total. Anhelar ser
~' aceptada incondicionalmente es anhelo de madre: quiéreme como soy, acéptame como
;¡- soy, valórame como me imagino que puedo ser valorada. Incondicionalmente.
r:·
,. i!
+'.:~. '.
¡¡ Además de anhelar la incondicionalidad, en esta disposición existe otro deseo: dame

-Ei~'i·;:,
\ todos los dones. En antropología, los dones son los bienes que están en el mundo sin
. <
._. · ;. }11-li~ J
""' '•"•··•·•···••s,~.... ,. ••
que nos hayan costado t rabajo y que están a nuestra disposición para que podamos
¡:
;;;;;,)(¡)lli~lfür apropiarnos de ellos . En la teoría de género, los dones tienen género. Si
jg(t:'[ ;;li:. :
sobrevaloramos genéricamente a alguien. los dones que tiene que darnos son sus
"''"' i1\¡.; -;: dones genéricos, sus dones sexuados y genéricos . Dame tu ser y dame tu ser en el
lt 1i¡;m1~ü !' mundo. Dame porque yo me doy. Yo no solamente te doy, sino que me doy a mí misma
~h '\l:'. y espero que tú te me des de la misma forma en que yo te me doy a ti.

·,. ' 1'
¡,'.~!; A toda esta configuración amorosa la llamamos "buscar madre en el otro" . Al

!!!: relacionarnos amorosamente, muchas mujeres buscamos en los demás una madre.
11 ..
T Cuando esto sucede, cada fracaso, cada vacío, cada carencia es sufrida
;Jh~ doblemente, porque la vivimos en relación a la pe:~ona concreta, y, en relación al
J1i deseo de encontrar en ella a una madre. La frustrac,on es doble: no solo no me das,
...
,,.
,,;:
,
·'""'''·"' !m sino que no me das como madre.
J;·
Jr Como somos seres de la cultura, la relación con las otras personas siempre está
"B_ mediada por imaginaciones simbólicas. Por eso, si amamos así, a la persona
'· : que amamos no sólo le pedimos lo que le pedimos conscientemente, sino que
; inconscientemente le estamos pidiendo más: que nos ame como suponemos debe ser
• : un amor incondicional, un amor materno que se supone amor total. Con este anhelo.
'
:' la frustración es diaria y por cada detalle: no es sólo que tardó en abrirte la puerta
/ cuando llegaste a la casa, sino que no te valoró total e incondicionalmente en el
• • it momento de abrirte la puerta ...
"'::
-~ m
•. m"
•:;1 En busca del amor de padre
¡¡.
. .. E stas experiencias son muy complicadas, y se complican más si no somos

;lf '""f 'i
conscientes de ~~é deseamos al desear ser am~das o al ?esear am_ar. Con frecuencia
t,_,. . ._,,,~f\, .: deseamos tamb,en un padre. Padre en el sentido s1mbolico de genero. Un ser que
''·. ·. . ., ••·1'-~· •· ., ••
"'/~c::t ?H!f;~il r\~:: ¡ reúna todos los atributos paternos: ser mi referente, mi juicio, mi norma, mi regla. Y
·, · .r • ;, ;;: que tenga además otros complementos genéricos del padre: el que posee los bienes,
• iJ los recursos y los poderes. Dame significa : dame tus bienes, tus recursos, tus
,l¡; poderes, cobíjame bato tu manto poderoso, defiéndeme con tu escudo, dime qué
.) ,; hago, decide por mí. .. porque yo no soy mi referente. yo no tengo juicio. yo no me
··" ,:- normo, yo carezco, yo no tengo algo que tú si tienes. Cuando tengo estas
jjjjj~~;,'!lii,'füR:t/ :i expectativas lo que deseo es un padre.
ti"'.· ., a t;d:•;::,:;:~:=~= :
,~t • •
, ''
• iili.Z;,:..:•:~--·· .r
7,~. ~;·
--c1'--ro
A: •: ·¡¡¡¡;¡ • -~- La carencia es central en el sentido del amor que la cultura patriarcal ha legado a las
'~lí:··
,,Ll!!"'·
;!/:•-r· :¡¡- mujeres. La carencia es una característica de género. Y abundan las mujeres que ya
. ,,, :r adultas experimentan en su subjetividad carencias que resultan infant iles.
¡:'
1:'.
,¡;
'
•:.
.:
32
' i:
Son carentes como las niñas. no son adultas. Y es por eso que muchas mujeres
logran madurar sólo hasta que terminan una relación. Entre otras cosas, porque ya
no tienen a nadie cerca que les aliente su inmadurez.
Nuestra zona más arcaica: la carencia

L a carencia es inmadurez y también es pobreza. La carencia también tiene que ver
con esa pobreza de género en la que viven las mujeres, desposeídas de muchísimas
cosas que los hombres sí tienen , o si no las tienen se las inventan. Desposeídas de
poderes, de autoridad, de valor por sí mismas. las mujeres viven diciendo: dame eso
de ti, dámelo porque yo no lo tengo. La carencia nos remite a la zona más arcaica y
menos desarrollada de la configuración tradicional de género. En la relación amorosa
prevalece muchas veces la carencia: "Te doy porque no tengo, te doy para que me
des lo que no tengo". Y cantidad de mujeres viven su vida en el anhelo diario de ver
si hoy me dan. si hoy por fin sí me dan ... Si ayer no. no importa. si desde hace cinco
años no. no importa. si desde hace diez. no importa. pero hoy sí. O mañana.
Otra de las características de quien es una mujer habitada o ha sido colonizada en el

amor es estar convencida de que no sólo no tiene, sino que no merece tener.
Muchas mujeres viven la carencia como culpa. Quien no recibe los bienes. quien
tiene carencias es porque no habrá hecho lo necesario. o porque algo habrá hecho
para no merecer recibir los bienes. En esta perspectiva tradicional. se victimiza a
quien no recibe. Y se victimiza siempre a la mujer: porque hace algo mal o porque no "
H
~!.
lo hace suficientemente bien.
L
~
mili•
Millones de mujeres en el mundo se levantan todos los días dispuestas y decididas "a ílll·
..." ,..
ser mejores... Para merecer ser amadas. La carencia y la insuficiencia que
experimentan tiene un aspecto positivo porque estimula su trabajo y su creatividad.
Debemos de estar conscientes de la enorme cantidad de acciones que hacemos para
beneficio de muchísima gente. Este esfuerzo. naturalmente, tiene que ver con una
moral de valores positivos. pero también con el sentimiento de no ser merecedoras de
una vida mejor.
La orden de ser bellas
A las mujeres se nos hace sentir que si no somos amadas como quisiéramos ser
amadas es porque no hemos hecho algo, porque nos hemos equivocado en algo,
porque nos falta algo. Nos sentimos culpables de que nos falten los atributos para
ser amadas. Algunos de esos atributos están ligados a la belleza física. Se nos hace
sentir que el amor no se realiza para las feas. y por eso millones de mujeres en el
mundo gastamos más de la cuarta parte de nuestro salario en embellecernos sólo
para hacernos beneficiarias del amor. sólo para tener las características mínimas que
impone el mundo contemporáneo para ser amadas.
33
•· ,¡\ Claves feministas para la negociación en el an1or
I·.
.. . ..,m.•
1,:
~¡;!:::: :ft° Hoy. ser amada pasa por ser bella, por tener un cuerpo estético. Y esto irá en
1
;¡ aumento por la mezcla de un creciente culto al cuerpo y del peso que tiene la
•. ·:-:]:·
• :_..:~;::. J: enajenante cultura tradicional que ha impuesto desde siempre que el cuerpo de las
..:: ,; _¡¡, :¡ mujeres es
"cuerpo para otros". Tanto en la cultura tradicional como en la actual la
~i belleza es una exigencia patriarcal especialmente para las mujeres. Esta exigencia no
. ~' es ni recíproca ni simétrica, porque se admite que aun los hombres más feos tienen
.;;,;ro!=.-,,:;. • • ,.
• : . -:::::~~~- . ~: derecho a ser amados por mujeres muy lindas, y porque se llega a considerar que ser
_¡•!-"l!, \ feo es una virtud de los hombres.
.. . *!•·i .'
'
•..:"'.!
,s¡-.
-
. :::.~4
•
•
*1 '
,.
~:.. • •·=
:,-,¡f~f¡:: ¡ _ La orden de trabajar y de ganar bien
í ·:~¡~ ~ f-JS er trabajadoras es una virtud moderna que se exige a las mujeres para ser amadas .
. _ :¡: Se les exige también tener un buen trabajo, no cualquier trabajo. Y además. un
P•·
·¡¡¡: trabajo que resulte aceptable a la persona que las ama. La mayor parte de mujeres
,í¡( contemporáneas tienen algún conflicto con su pareja por razón del trabajo. Los
J; hombres compiten con las mujeres por el trabajo, descalifican los trabajos de las
,i:. mujeres y opinan sobre sus trabajos: no les parece el horario ni los compañeros ni
·¡¡r,,. . '[' las responsabilidades ... No hay hombre que no compita con rivalidad con el trabajo
• ~~-:- · i!i= de su pareja mujer. Los hombres todavía mantienen en su imaginario a mujeres que
.
..-: •- _;:;•¡::;·:. .:. estén a su servicio a tiempo completo, todavía entienden que ellos merecen una
' ·.,. ·t/:·
~~ fr jornada amorosa permanente.
•
....'' ::1
º'"
-, A las mujeres actuales se les exige que con su t rabajo generen bienes y dinero. Hoy.
1ser amada pasa por poseer algo. Ya no vale, como en la cultura t radicional. ser pobre
: y carenciada. Hoy se les exige a las mujeres contemporáneas ganar, y ganar bien. Y
·• los hombres se fijan mucho en las propiedades y en el salario de sus compañeras.
1 Están pendientes de si les vamos a sacar de pobres o si les va a tocar hacerse cargo
¡¡' de nosotras. La gradación de las expectativas de los hombres en este sentido se ha
\ ampliado muchísimo. Lo que ya ninguno espera es que lleguemos a la pareja con una
,...,Ji mano delante y otra detrás .
. ~-
m.,
tiP •• .;
.,; M ientras en la conciencia de muchas mujeres no está instalada todavía la idea de ser
... .: ~1 generadoras de recursos, en sus parejas la valoración económica es ya un requisito
•,. ..·;-i;·=••::;\:f.i!!Í
·rn.~"H ·: .
i para el amor.
<:5~~
'::?.~
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, •t;,~fi•·
rjffl-•
= •· ~
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-,·:, .... ~ ==~i• ....~ :
•;r: •• :r- ·_ j Un sistema que no es recíproco
_ :· _- ~~¡~hl~i
• ' 1'
IT
odos los valores que se esperan de las mujeres contemporáneas en el amor se
. • ;;f~ • 1¡:; l: corresponden con mujeres subordinadas, que no tienen una vida propia, y que giran
f
• '· • ·:~: Ven torno de sus parejas. Forman parte del arcaísmo amoroso de género asignado a
1
• • -· l
las mujeres desde la antigüedad y aún vigente. A la capacidad de trabajar, al éxito en
·;, el trabajo. a la capacidad de generar recursos, dinero y bienes, requisitos de la
..,,_ ~ modernidad, se suman los requisitos tradicionales. Además de la belleza, se espera
• , :. :;:.......
t
-:: : :;~¡- - de las mujeres que sean abnegadas, benevolentes, con una generosidad ilimitada .
:1.
·-· • ,:·-:-·.. ~1Se espera lealtad, obediencia, fidelidad .

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• rr
34
Se espera, sobre todo, subjetividad jerárquica: aceptar que está bien que el hombre
esté arriba y en posición de supremacía, y que está bien que ella esté en posición
de subordinación. Eso es lo que más se espera: que el orden jerárquico funcione.
Ninguno de los requisitos que se impone a las mujeres es recíproco. El sistema

amoroso no es ni dual ni binario ni simétrico. ¿Qué se espera del otro lado? Nada. •:;!
"'
Nada y todo. Una paradoja: al esperarlo todo se está dispuesta a no encontrar nada. •• •: ,;- "·;,-¡;y ll,.
Y esto sucede así porque como no se reconoce la individualidad de las mujeres, " _;-::;,';¡;;;[;; •• •
como no se reconocen sus libertades, se espera que en las relaciones las mujeres j }r~l,~llf;,.,:i¡mi,~:
., ,..,.ffi· ~·•-s-•i:·,1 ..... _._
participemos con incondicionalidad: sin reglas, sin normas, sin pacto. : •''.~\~• !:;~~~t i·':
:i /.'..'..'..- ,_
,
Nos definimos como sujetas de pacto amoroso

E n el amor son necesarios los pactos. Las mujeres no somos sujetas de pacto
amoroso, porque ese pacto implicaría ser reconocidas como pactantes. Mi maestra
de la vida, la gran filósofa española Celia Amorós, plantea que la gran revolución
feminista del siglo XX ha consistido en que las mujeres nos hemos definido a
nosotras mismas como pactantes, independientemente de que el mundo nos .,
reconozca con esta categoría. f -~Z-
: '. ,,
Después de autodefinirnos como pactantes, hemos tratado de llevar esta idea a las
normas, a las leyes , a las relaciones, al mundo, para que nos reconozcan como
sujetas de pacto. Sujetas de un pacto democrático.
Celia Amorós insiste en que si nosotras no tenemos los atributos de pactantes,
viviremos siempre relaciones de subordinación . en la amistad, en el trabajo o en el
amor. Es fundamental comprender que mientras no seamos sujetas de pacto
amoroso viviremos el amor muy tradicionalmente. A lo mejor, con anhelos de
libertad, de dignidad y de reciprocidad, pero con una real imposibilidad para realizar
esos anhelos. Quien no es individua no es sujeta de pactos. Para pactar
necesitamos tener identidad propia. Decir: "Yo soy". Y no decir: "Yo soy parte de
tu alma" , "Tú eres mi vida". Se requiere tener límites, tener una frontera personal. Ji;'
Se requiere decir: "Yo empiezo aquí y termino aquí, yo no me continúo en ti , yo no ·- ~·-;.;··-~.

~""-,_,,
.......
11r···
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soy parte de ti ni tú eres parte de mí". f
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J' .' •' "
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Pactar implica también tener capacidad de juicio personal y desarrollar valores

propios. Si no tenemos nuestros propios valores, nos endilgarán los valores de los
demás. Pactar, sobre todo, implica tener la capacidad de crear normas para mi vida y
normas para mis relaciones. Una serie de normas para mi vida que no están a
discusión, y que esté donde esté y esté con quienes esté las llevo adelante porque
yo lo he decidido. Ésa es mi libertad: decidir qué, cómo, dónde, cuándo, a qué horas,
por qué, con quién, para qué ... Yo me normo mi propia vida. Y desde ahí construyo
normas con las demás personas. Sin normas personales no hay negociación posible.
Para poder negociar necesito saber qué condiciones le pongo a las otras personas
para que se relacionen conmigo. Hacer esto da un giro total a las relaciones que nos
han sido impuestas por la cultura patriarcal, en las que nosotras no tenemos
condiciones sino que a nosotras nos ponen las condiciones.
35
" ':·'
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' ;;
·11 Claves femlnistas para la negociación e n el amor

'-~l:.:
• !¡: La propuesta feminista para el amor supone mujeres capaces de ponerse
.• ."': condiciones a sí mismas y de ponerle condiciones a los demás. Y si esas
•
·: condiciones no se cumplen, no se ama. Con esta perspectiva, aparece por primera

. i! vez en la historia de la humanidad el amor como algo que no es irremediable ni
l' funciona como una avalancha que te arrastra y te arrasa la vida. Por primera vez
¡¡ aparece el amor como una experiencia en la que se puede intervenir, decidir, elegir,
¡:,, optar. características todas que tienen que ver con la libertad. Cuando es así, el amor
J se convierte en una experiencia en la que se puede negociar.
1,..
!.
V íctimas de la ceguera de género

•• :ijl.. L
a filosofía política del feminismo plantea que las mujeres seamos sujetas de un
.~'•- qí:... pacto amoroso. Definir los contenidos de ese pacto implica una ética feminista.
·¡¡; ¿Con qué valores?
,i;.
r.:
::::
i,.¡: En primer lugar, la inteligencia. Uno de los grandes problemas en que la cultura
' · ~¡ tradicional coloca a las mujeres es la ignorancia construida en torno a la experiencia
/ del amor. Incluso mujeres muy lúcidas. muy estudiosas, muy analíticas, muy
1
~ comprometidas. muy clarividentes para analizar otras cosas, en sus relaciones
•
r;l amorosas no ven, padecen de una ceguera casi total. Se trata de una ceguera de
~¡ género fomentada culturalmente. M ientras no entendamos esta ceguera
,; permaneceremos atrapadas . Y peor. estaremos movilizándonos para superarla sin
:: lograr atinarle.
,.• Las
pautas tradicionales nos ciegan: "Lo que pasa es que no me porté bien. lo que
;: pasa es que no soy cuerísima, lo que pasa es que no fui suficientemente
,'. condescendiente, lo que pasa es que fui muy altiva, lo que pasa es que me afirmé
\ demasiado .. . " El terreno del amor es el terreno donde las mujeres seguimos más
:1'
. J:· colonizadas, aun las mujeres comprometidas en cambiar el mundo y descolonizarlo ...
·'k
11:
•• j; Si no sometemos a crítica política nuestra cultura amorosa, estamos perdidas. No
1\ basta hacer conciencia, es fundamental saber desde dónde hacemos conciencia.
~! Necesitamos analizar nuestros valores amorosos y nuestros mitos amorosos, para

{ descubrir cuáles siguen configurando nuestra idealización del amor. Porque
;' necesitamos desidealizar el amor.
Mujeres modernas con mitos tradicionales

lJ: E n el amor seguimos siendo muy idealistas. Somos supermodernas, con todos
los elementos de la modernidad -pensamiento crítico, principio de realidad, análisis
¡f concreto-, pero en el amor nos perdemos, y seguimos queriendo amar y que nos
'.l: amen según los mitos tradicionales, universales y eternos que han alimentado
r
. :'.
nuestras fantasías .
36
Las ideologías amorosas circulantes repiten y repiten que el amor es eterno, que el
amor no ha cambiado, que todo el mundo quiere lo mismo en el amor. Esos mitos se
refuerzan en la cult ura amorosa en la que seguimos siendo educadas, que nos
asigna el papel de seres en servidumbre.
Es importante que cada una analice qué mitos ha tratado de cumplir en su vida real
porque en nuestros mitos reproducimos muchos mitos tradicionales. donde el amor
siempre es incondicional. ¿Será el nuestro el mito del Príncipe Azul? Si así fuera se trata
de un mito totalmente desfasado, entre otras cosas porque en América Latina no hay
monarquías ... ¿Qué quiere decir este mito? Que a ciudadanas comunes y corrientes las
colocamos no sólo ante una supremacía de género, sino que, además. idealizamos la
supremacía monárquica. ¿Será el nuestro el mito del amor eterno? Éste es un mito q~e
ha resistido el paso del tiempo: la cultura del Mayo del 68 todavía repitió aquello de
" quiero envejecer contigo"; como la canción de los Beatles "when I' m sixty four... " 'r. i ~ j)
íl.. ·, . •• s,1n:.
U'""""
h
Para poder amar hay que ser ciudadanas

, ';;Cé ~
U na clave importantísima a tener en cuenta es que. de forma muy tradicional , las

mujeres modernas seguimos esperando que sean los otros los que cambien. no
nosotras. Y, como buenas latinoamericanas, queremos que cambie todo, que todo
mejore, y ¡que sea mañana!. Pero queremos que cambien los otros sin cambiar
nosotras, manteniendo intocada la parte arcaica de nuestro corazón donde se aloja
el amor.
Y en esa pasividad expectante somos más tradicionales que las más tradicionales.
Como modernas afirmamos nuestra verdad . Y nuestra verdad es que es justo que el
amor y las relaciones sean de otra manera. Pero como en el amor seguimos siendo
tradicionales, seguimos esperando que los otros cambien, sin exigirles que cambien.
Les exigimos a veces cc;:,mo protesta, como reclamo, como arrechura y berrinche, •-·; ·.. . . ;_
..-,, -,:~.::::::::::i
pero no somos capaces de ponerles una sola condición como ciudadanas. •• _,..,1,/•
·~!
- ';i
Y es que para poder amar, las mujeres modernas necesitamos ser ciudadanas. Si
elegimos a quien nos gobierna, podemos elegir a quien queremos que comparta con
nosotras el techo y el tálamo. Si le queremos poner normas al mundo, ¿cómo es
posible que no podamos poner una norma en nuestro mundo más inmediato, en
nuestro territorio, en nuestro hábitat, en nuestra vida cotidiana?
No podemos poner ni una norma porque no tenemos territorio propio, porque no

tenemos hábitat. porque no tenemos... Podríamos hacer un inventario de los
recursos. los bienes, los dones, los poderes que necesitamos tener para decidirnos
a poner una sola norma . No muchas, una sola. Y podríamos hacer ese inventario no
individualmente sino hacerlo entre varias. entre muchas, entre cada vez más y más
mujeres.
37
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Los problemas de tu amor

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son problemas de todas
?i Y esto nos abre a otro gran tema de reflexión. Porque mientras las mujeres no
1
.·"¡ tengamos una filosofía política colectiva sobre el amor. los otros, sean mujeres u
, ¡ hombres. seguirán encontrando esclavas para vivir con ellas. Si nosotras queremos
i~
cambiar. necesitamos ir haciendo cultura colectiva de esos cambios. Necesitamos
¡ construir otra cultura social. Para que la nueva ética amorosa se convierta en una
,f ética social. Si no, estaremos cada una por su lado, aislada, tratando de convencer
: sin autoridad. tratando de compartir sin estar colocadas en una posición de paridad.
{ Y no conseguiremos nada. O muy poco.
I;.
T
' ,: :
,,
··~ • ,J¡; A ese aislamiento de luchar solas sin éxito no le tememos miedo porque estamos
'
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, 1¡ acostumbradas a él. Y porque creemos que no nos daña. Hasta hemos llegado a
~
!f/ 1
.\'¡,· creer que es mejor luchar aisladas porque es así como se resuelven los problemas en
,.. ;t ,,;;
' '!; el amor. Y no nos damos cuenta de que el aislamiento de las mujeres en el tema del
'lt amor nos hace débiles socialmente para imponer nuestras condiciones amorosas, nos
1
hace débiles para crear una nueva normatividad social para el amor, nos imposibilita
{~- construir una cultura colectiva basada en una ética amorosa diferente.
J,
~·
¡¡,
:r. •
if Si yo le digo a alguna: "Tu problemática de amor o la mía depende también de que
t,
.:, tú y yo nos pongamos de acuerdo", dirá seguramente sorprendida: "¿ Y a ti qué te

• ' pasa? Los problemas de amor yo no los tengo contigo, sino con mi novio o con mi
• marido."
• Sin embargo, tiene que ver también conmigo, porque la problemática del amor es
; política, porque el amor tiene que ver con las relaciones de poder.
• • ';L Para poder lograr que los hombres cambien en las relaciones amorosas,
J necesitamos hacer una crítica de la cultura patriarcal dominante. Necesitamos
IrJ¡;]j¡~~ ·-, ;, Í¡ =~"1:~~~;~;;¡" ;~c~~-p::;uZ ~~:da:~~;:◊:q:~;b~~:a~:.~~:•;;¡~
.ÍI i!' seguirá
1 9
reproduciendo las formas enajenantes del amor. El cine. la literatura, el

t~~:n l~~~;u':.:
TT:J#i;·' • ;:j ¡¡ teatro, las telenovelas, toda la cultura seguirá ahí. reproduciendo a hombres que se
~[} !
H!:,, :•;];~1,( :!~ relacionan a partir de poderes desiguales y a mujeres acomodadas a una cultura de
.< ¡,'' r1ti1l : ¡ dominación bajo el velo del amor.
L/ '· ', \; ·.·...J#~hTu:. :
,• i~l!tl'.1l1li< ·:
t,;r::>::.:: t~•c·::· •
La transformación de la cultura es fundamental. La fuerza política de las mujeres es
. ,i;fi1;)!;~]j ¡ fundamental para lograr hacer ilegítimos los contenidos tradicionales del amor.
... ;.l•• i Muchas cosas hemos logrado ya en otros terrenos. Una clave para entender la
. ;¡ historia del feminismo está en que nosotras hemos ido avanzando en muchas cosas
'
~ porque hemos sabido aprovechar fisuras políticas y procesos democratizadores, de
~, tal manera que aunque la gente no estuviera convencida de lo que decíamos, sí
;ii-;•;11!;;' estaba ya convencida de que no era correcto mantener posiciones contrarias a las
.~¡ nuestras. Esperar que los hombres cambien, cuando nosotras no cambiamos nos
.;: debilita, porque seguimos depositando en ellos todos los poderes .
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Dra. Marcela Lagarde ::f~!lf!fi,!""
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El miedo al abandono )jj

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H abiar del amor exige hablar de la soledad. El amor, como vínculo, sólo es posible
....
I:
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entre seres que se asumen en soledad. No es una casualidad que la amenaza que se
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lanza contra las mujeres que queremos cambiar y que cambiamos sea la soledad. Se
nos amenaza buscando tocar la zona de nuestra identidad que es más tradicional y más
subordinada, la que está más subsumida porque no hemos desarrollado nuestra .
;, ';
, r·.. ;>
individualidad.
¿Qué más amenazante que decirnos que nos vamos a quedar solas? Si tu vida está
;¡ •,r"
centrada en otras personas, si dices "sin ti me muero " , lo que más temes es ::
•
quedarte sola. Por eso nos amenazan: "¡Si se siguen portando, mal se van a quedar
solas!" Pero la verdad es que yo, mientras más "mal portadas" veo a las mujeres
-en el sentido de romper las reglas de la dependencia vital y de la subordinación-,
más acompañadas las veo. Nos amenazan con la soledad, pero la amenaza velada,
el miedo a que convoca esta amenaza es realmente el abandono. Ser abandonadas
por quienes nos quieren, es uno de nuestros más profundos miedos. En la biografía
de cada persona ese miedo tiene una historia que la remite al pasado más remoto,
a su origen, a aquellos primeros años en los que realmente si era abandonada, podía
morir.
Para perder el miedo al abandono, lo único que tenemos que hacer es asumir que
somos adultas y no bebés de crianza. Nada más. El miedo al abandono es un miedo .
propio de criaturas que piensan que al alejarse la fuente de la vida, morirán. Asumir
que no somos criaturas sino mujeres adultas es un proceso interno muy complejo, ":ÍÍÍ
-~
de maduración emocional afectiva. Es difícil, pero es indispensable. . ..
...
:
La soledad es necesaria y vivificante ,

•
M ientras más fusión tenemos con los otros más amenazante nos parece la
soledad. Pero la soledad no tiene por qué amenazarnos. Cuando uno transita por la
vida construyendo su individualidad o, por lo menos, con la intención de hacerlo, la
soledad ni amenaza ni destruye. La soledad es un presupuesto mínimo. ¿Para qué?
Para pensar. Es posible pensar en colectivo. Lo hacemos a menudo y ahorita lo
estamos haciendo. Pero si no tenemos espacios de soledad y de aislamiento, no
podremos descubrir la otra parte del pensamiento, que siempre es el pensamiento
individual.
También es precisa la soledad para dudar. Y como modernas, o dudamos. .. o

dudamos. Si no, estaremos atrapadas en las garras de la fe, de la creencia
absoluta, de la idealización . Necesitamos tiempo para dudar. Y para dudar solas y no
frente a alguien, que tal vez nos va a decir: "¡Deja esas ideas, estás loca!" Pero yo
necesito dudar. Dudar de mi vida, dudar del mundo, dudar de lo que creo, de lo que
creí, de lo que ya no puedo seguir creyendo. Y lo necesito para poder descolocarme
de lo que me atrapa, de lo que me hace daño, de lo que no me permite ser.
39
.. .. ;,- Claves feministas para la negociación en el amor
·xu: ~./:J.;,. ••
. ~;1;, ifüi't • ' 1¡

if :;r•'IT/,•il,·,i; ·:' !' La soledad es fundamental para la duda. Y la duda es fundamental para construir una
:rr;1U>>,··i'.,c.:;¡¡;¡r¡ ~: subjetividad moderna en las mujeres. Mientras las mujeres no dudaron, las mujeres
•··· •·· • • •• " ' ;creyeron. Y se lo creyeron todo. Y por eso las han dominado. La movilización
1
\, '.:
: • • ;~;:'', ji~J;¡ ¡f moderna de las mujeres se genera en sus dudas: no me parece, no creo. no acepto.
. \<' :¡ pienso que sería mejor de otra manera ... La vida de cualquier mujer moderna está
..~;}':·:: ;¡ poblada de momentos de duda que nos han abierto a posibilidades de afirmación, de
J
'..(l/!i¡¡. • invención, de transformación .
.·:,:•:~.ii!' ¡
!!'IJ 1: ~b;~;~~~:d d=~o~~;:•~~:~~~v!'.";ra"

1
c;~:~~c~:~~;:ºs!•:;;~t.~i;~s ~:.~;~~;
,r,~~, ytenemos. Solas, no sumadas a otras, no confundidas con otras, no en equipo. Solas.
;~t#\~( ./ ¿Qué puedo yo? Yo no sé qué puedo, si lo hago todo con alguien. Yo no sé qué puedo
. ,. ' ( realmente, cuáles son mis fuerzas y mis habilidades reales si lo hago todo en pareja,
\ en equipo, en tumulto. iY a veces las mujeres vivimos en tumulto!
Mujeres sobre-modernas
i;[ P ara muchas otras cosas sirve la soledad. Para serenarme. La serenidad es
'P.l\ indispensable. sobre todo para las mujeres sobre-modernas como nosotras. que
:[ v1v1mos sobre-aceleradas. Somos pre-modernas porque somos tradicionales.
.': Somos modernas porque queremos ser individuas con derechos .
.,
:. Y somos sobre-modernas porque vivimos la modernidad con exageración, viviendo,
i cada minuto por dos . iY algunas por cinco minutos! Multiplicamos el tiempo. Esta es
l una característica de la sobre-modernidad de las mujeres actuales. Multiplicamos
•las actividades simultáneas, hacemos muchas cosas al mismo tiempo. Las
.' : sobre-modernas necesitamos ratos de sosiego. La serenidad es sosiego .
.: i Necesitamos ratos de calma.
,,
. •mlji Lo voy a decir filosóficamente: necesitamos tener la experiencia de la mismidad, esa
•ill, experiencia en la que no hay nadie que interfiere en nuestra subjetividad. Eso es
,·• estar sola. Nadie te está haciendo ruido con su presencia. Nadie te está
.,:¡ convocando, nadie te está apasionando, nadie te está entristeciendo. No hay nadie.
·¡¡ Y es ahí donde aparece la mismidad .
.,
¡ ¿Quién está ahí? Yo. Y no prendo el radio o enciendo la tele o agarro el teléfono para
_¡. hablarle a una amiga, como buscando nanas que lleguen a llenar el silencio ... No, me
.: encuentro a mí, en silencio, sola. A mí misma, a mi mismidad .
l¡ Enfrentar el tema de la soledad es fundamental para las mujeres. Porque estar solas
,: es la única vía para asumir que no hay madre posible. Que no la hay, que de nadie
....j."° l podemos esperar incondicionalidades, que de nadie debemos esperar cosas tan
F fundamentales como las que da una madre -cuando las da- como para cent rar
;¡ nuestras vidas en otros. Nadie nos puede dar eso que anhelamos. Nadie. Sólo con
j; soledad podremos saber qué es realmente lo que podemos esperar de nosotras
;¡. mismas y qué podemos esperar de otras personas.
t:
40
.:. '
rii
Estoy sola y soy sola

S aber estar sola es una dimensión necesaria. La otra dimensión necesaria es saber
que soy sola. Para poder definir nuestra individualidad necesitamos decir: soy sola. Yo
me encuentro con otros seres en este mundo, pero yo soy sola. Ser sola quiere decir
tener los recursos indispensables para sobrevivir. Lo que tenga de más es excedente,
pero no es lo fundamental en mi vida.
Simone de Beauvoir y otros autores plantearon esta soledad existencial. La soledad

como característica de la condición humana. Reconocer que desde que nacimos
estamos solas y encueraditas. Y que nunca se nos olvide este hecho. Porque la
cultura idealista trata de ocultar la soledad de la condición humana, pretende que no
nos demos cuenta.
Una cultura alternat iva al idealismo requiere reconocer la soledad como un principio
constitut ivo de los límites de la persona, para después. desde la soledad. poder
hacer vínculos . Es diferente hacer vínculos con alguien que ser parte de alguien. Yo.
como una persona. puedo hacer vínculos con otras personas. vínculos que pueden
ser ocasionales, temporales o duraderos. superficiales. sólidos o profundos. Pero
siempre serán sólo vínculos. No es lo mismo hacer vínculos y elegir cómo serán
esos vínculos que convertirse en el apéndice de otra persona y vivir subsumidas en
otra persona.
41
• ir
• •
era
bur esa
•
. e .
... ..1' ·,¡
·1~ · <. • • •• 1
fü1 r ,,.
Hem.o s dicho que ei 'amot: es -histórico, Hagamcts la his_toria de algunas form'as del amor,
presUn.tes en fa tradición occidental que nos han configurado, formas del amor de otras
épocas históricas que perviven eh la actualidad y siguen influyendo en nosotras.
,. . . . ,.··: -· ,¡;
~· ~;
~; Claves fen1inistas para la negociació n en el amor

¡
Nadie esperaba amor en el matrimonio
!,
:,
i(,
..
'
;,
¡:• U na de las formas históricas del amor que más ha impactado al amor
contemporáneo es la que los historiadores han llamado el amor burgués. El amor
burgués significó una revolución en las pautas de relación entre mujeres y hombres
en Europa en los siglos XIII, XIV, XV, vinculado al surgimiento y a la expansión de la
cultura burguesa. A diferencia del amor cristiano, que separó el cuerpo del espíritu,
el amor burgués une el amor espiritual y el amor carnal. Lo sorprendente es que este
importantísimo cambio se da dent ro de la misma cultura cristiana.
Para entonces, ya se admitía que en las relaciones de pareja debía estar presente el
amor. A partir de esta época se empieza a entender que también en el matrimonio
debe estar presente el amor. Antes del amor burgués, el matrimonio no estaba
ligado ni al amor erótico ni al amor espiritual. Las gentes se casaban sin amarse.
11! Llegaban al matrimonio por arreglos familiares, por conveniencia social. por ligar a
personas de un pueblo o de una tierra con personas de otros pueblos o tierras .
..
~1 Nadie esperaba que los esposos se amaran. Lo más que se pensaba era que con el
tiempo se irían acostumbrando el uno al otro. Como la relación matrimonial estaba
muy normada -la mujer debía obediencia al esposo, el esposo debía protección a la
esposa-, la subjetividad individual no significaba nada en las relaciones. Antes del
amor burgués, el amor se dejaba para relaciones eventuales fuera del matrimonio.
Los hombres vivían relaciones de amor pasional fuera del matrimonio y, desde luego,
con "malas mujeres", mujeres que no se casaban para dedicarse a garantizar ero-
tismo a los hombres.
El amor burgués: una revolución histórica

e uando aparece el amor burgués, al inicio de lo que se ha llamado la era burgue-
sa, los patrones cambian y se establece que el amor, el erotismo y la sexualidad
..
:: :
deben estar unidos. Más aún, que se debe buscar y encont rar a una persona para
'
amarla toda la vida. Juntar en una misma relación la pasión erótica, la pasión
espiritual y la convivencia es el modelo de amor que genera la cultura burguesa.
'
Juntar amor -en el sentido de cariño, atención, benevolencia y generosidad-. con amor
• ~-...
'' {
.
-en el sentido de pasión erótica-. con la convivencia -en el sentido de vivir la vida
cotidiana unidos-, y hacer todo esto funcional a la tarea de procrear, fue el desafío del
ii '
' amor burgués. La meta era ser una familia y perdurar en el mundo.
''.
'
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:: i ::
¡1:;'. .
,l.. ..
44
mfi ¡..
......
....
El amor se vuelve núcleo de las relaciones de pareja. de las relaciones sexuales, y

también de la familia. Todo queda articulado por el amor de dos personas , la pareja,
y la estabilidad familiar depende de esas dos personas, que deberán amarse toda la
vida siendo pareja sexual. Éste es el modelo ideal del amor burgués. La nueva
sociedad burguesa fomenta otra característ ica del amor: la comprensión entre los
cónyuges. Es en esta época cuando la comprensión surge como un valor del amor, .
y hasta el día de hoy leemos en revistas como Cosmopolitan: "¿Te comprende t u ;i,
pareja?". :lf" • 1,.
Esa pregunta nos llega desde hace unos seis siglos, desde los inicios de la era
J~;··
.
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burguesa. Junto al respeto como base de las relaciones entre hombres y mujeres,
aparece esta ot ra base, inédita en la historia de Occidente: la comprensión .
Hasta entonces nadie esperaba que las mujeres comprendieran a los hombres ni que
los hombres comprendieran a las mujeres. La comprensión en las parejas fue una .. p-.¡··f
,; ,;:/
invención muy importante de la modernidad burguesa. Hoy, aún seguimos teniendo .:• ·"•~
. ;¡;f
•• :.¡,...
::.. •·
el anhelo de comprensión y la comprensión sigue siendo imaginada como una
muestra de amor. Y para iniciar un amor todas valoramos profundamente encontrar .
h
comprensión y dar comprensión. g
...::i
:-;¡:: '
Los tiempos del amor cortés
U na característica relevante del modelo de amor que inaugura el amor burgués, a
diferencia de formas de amor anteriores. es que la pareja sexual. la pareja que
experimenta la pasión erótica, debe vivir y consumar su pasión en el matrimonio. En el
..
amor cortés -que es una forma previa- los hombres debían experimentar grandes ..
:, ;, 1,,
:::i!VA • .,
pasiones eróticas, pero estas pasiones eran ideales para vivir y no se realizaban, sólo ..-,·•1:
....,,
-:¡:,:¡¡!)
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alimentaban la imaginación. ::];!:ft
. : iifí¡
:¡: ~!
Cuando leemos las antiguas cantigas en las que se expresa el amor cortés,
conocemos de hombres -en Europa, en América también- que vivían enamorados de
una señora a la que mostraban públicamente su amor, y en nombre de la que
realizaban hazañas heroicas y corrían aventuras. pero con la que no tenían nada que
ver en la vida cotidiana y a la que ni siquiera le dirigían la palabra. Este tipo de amor
alentó a muchos hombres a participar en guerras, a enrolarse en expediciones de
conquista, a ir a Tierra Santa a las Cruzadas.
El amor burgués puso fin a aquellos amores ideales, sacándolos del cuadro del amor
permitido. Comienza entonces a ser ilegítimo socialmente que un caballero ame
idealizadamente a una dama que es esposa de otro señor y más aún. que lo
exteriorice públicamente. En la actualidad, un modelo así ocasiona crímenes
pasionales. La prohibición social del amor cortés tiene su base en que se impuso el
concepto patriarcal de que las mujeres amadas son propiedad privada de los
hombres que las aman.
...
45 ! :i:
;::¡fü
: : : : :J
Una nueva moral sexual: el matrimonio

y la heterosexualidad
E n el amor burgués. el amor erótico -se llama así desde entonces- es aceptado y
legítimo, y aunque las relaciones siguen siendo pactos familiares, la expectativa
comienza a ser que las parejas se amen y lleguen a realizar satisfactoriamente el eros.
Naturalmente. con mayor satisfacción para los hombres, dando por supuesto que la
sola presencia masculina debía llenar de satisfacción a las mujeres. Comienza a
extenderse una nueva moral sexual. Y así se le llamó: nueva moral sexual. Esta moral
tiene exigencias iguales para hombres y mujeres. mientras la práctica social del amor
mantiene las desigualdades.
Esta cont radicción entre ideología moral y práctica social ha marcado toda la
modernidad. La contradicción consiste en que quien ama debe esperar que el otro
seguirá las mismas normas de respeto a la moral amorosa y sexual, pero al mismo
tiempo se promueve una práctica social de esa moral que es desfavorable a las
mujeres. Hasta hoy muchas mujeres estamos marcadas por esta contradicción.
El amor burgués establece como norma moral del matrimonio. de la pareja y del
amor, el amor para toda la vida. También establece como norma obligatoria la
heterosexualidad. La heterosexualidad se constituye en la primera norma moral
consolidada en la historia de la modernidad. Queda impreso en la ideología
burguesa que el amor heterosexual es el amor natural. y que el no heterosexual es
amor contra natura. Es en la época de la Ilustración cuando se acuña el concepto
contra natura. En la época del amor burgués se comienza a establecer una rígida
frontera entre la Naturaleza y la Sociedad, definiendo que lo natural es lo positivo y
lo que se sale de las reglas naturales es negativo.
Dueñas de nada
E I amor burgués establece que el amor pasión. el amor eros. debe conducir al
matrimonio y a la procreación. Esa es la vía legítima y autorizada moralmente para
, .,,,__
.... mujeres y para hombres. Enseguida. la cultura patriarcal fijará las diferencias: para
las mujeres queda establecida la regla de la monogamia para toda la vida, para los
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·• hombres no.
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La monogamia establece como pauta fundamental la propiedad de los hombres
~};•
'.. sobre las mujeres. Es una pauta social sólo para las mujeres, que durante toda la vida
,.
deben llevar el apellido del esposo. Esta forma de propiedad sobre las mujeres ha
marcado la historia de todas las mujeres modernas. Según el modelo, cada mujer
tiene como destino en la vida hallar a un dueño. Buscarlo y encontrarlo se vuelve un
, mandato de vida para las mujeres. No se trata únicamente de que la mujer busque
un amor. sino de hacer que ese amor sea su dueño. Su dueño jurídica. afectiva.
sexual y económicamente.
.. 46
...,
r.:: •
•;·;· •• # "•• •
...
..
Surgió así una sofisticada forma de apropiación de las mujeres mediante las relaciones '
amorosas. Franca Basaglia ha llamado a esto la expropiación de las mujeres, una forma
de propiedad privada que interpretada feministamente es una forma de expropiación.
Expropiadas: no que no seamos o que no estemos, sino que estamos, pero no somos
dueñas de nosotras mismas.
,))
¿De qué no son dueñas las mujeres? De todo lo que hace falta para amar. En primer .:-
lugar, no son dueñas de su cuerpo. Su cuerpo pertenece al amado. Tampoco son ir
dueñas de su sexualidad, que queda marcada por el mandato de la monogamia -~
sexual y por el de la heterosexualidad. Tampoco son dueñas de su subjetividad, de
la que se apropia ese dueño que se instala en su corazón. Obviamente, quien no es
dueña de su cuerpo ni de su sexualidad ni de su subjetividad, no es una persona
libre. Se cumple así lo que decía Sartre: en el amor se pone en juego la libertad o la
falta de libertad.
Homosexualidad tolerada, homosexualidad negada

s i a todas las mujeres se les impone el mandato de la heterosexualidad, a todos ,~[
los hombres se les permite la homosexualidad semioculta, y a los hombres ,)
poderosos la homosexualidad adjunta. La desigualdad es tan notoria que ni siquiera --
··•·~
••
r
a los hombres que tienen prácticas y relaciones homosexuales se les tiene como
homosexuales. Tampoco se les piensa como bisexuales. Ésas son categorías del .
siglo XX. Estos hombres son vistos simplemente como heterosexuales que tienen ·:
amantes y favoritos.
La cultura patriarcal otorga más poder a los hombres poderosos que tienen relaciones
homosexuales con otros hombres. Es un fenómeno que ha sido estudiado como una
forma de pacto político entre hombres, especialmente en los gobiernos, los ejércitos y
las iglesias. A través de esas relaciones amorosas, los hombres establecen feudos de
influencia militar, política o ideológica. En todos los terrenos se muestra la disparidad
sexual. Mientras a los hombres los enaltece la homosexualidad, para las mujeres ni '
~,Y.~-¡..~-'.,,
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siquiera se cuenta con la posibilidad de la homosexualidad. Y por eso ni se les .. . . ~
prohíbe . Al principio de la era burguesa nadie imagina que las mujeres puedan • ,.
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establecer relaciones con otras mujeres. La homosexualidad femenina no queda
prohibida hasta muy recientemente, cuando empieza a irrumpir y se vuelve visible. ::ri•
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•
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Amas de casa con el anhelo de dejar de ser

E I amor burgués mantiene a las mujeres totalmente atrapadas en una relación
única. exclusiva y para toda la vida. En esta época y bajo ese modelo se inicia la
reclusión de las mujeres en la casa como seres del mundo privado. Más recluidas
aún las mujeres pudientes, porque las otras tenían que ir y venir, tenían que trabajar .1fil'
y siguieron trabajando. .,.
47
Claves fen1inistas para la negociación en el arnor
El modelo de mujer que se va construyendo para todas las mujeres en el imaginario de

la sociedad es el de la mujer como ser de la domesticidad, del domus, de la casa, del
hogar. La casa es su espacio natural. Y así va surgiendo el ideal de las mujeres amas de
casa, domésticas, hogareñas. Las demás, las que andan en la calle, las que van y
vienen, son las malas o las que están mal.
¿Cuál es la aspiración que empieza a formularse para las mujeres a lo largo de los
siglos de la era burguesa? Abandonar el espacio público. Ése es el ideal: dejar de
tener que trabajar, dejar de tener que ganar dinero, dejar de tener poderes propios.
No debemos creer que este ideal, que hoy nos empieza a sonar lejano, existió
siempre. Este ideal se construyó y este modelo se idealizó como el mejor estilo de vida
!;
para las mujeres en esta época. Al final, de tanto ocultarse, de tanto desear tener que
dejar de trabajar y de ser vistas, las mujeres desearon, anhelaron dejar de ser.
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E♦
"!».
Hoy, nosotras somos el resultado de la crítica histórica que muchas mujeres de aquel
tiempo y de tiempos posteriores hicieron al ideal de dejar de ser que se le impuso a las
E♦
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mujeres. A nosotras las contemporáneas nos ha tocado recuperar el querer ser, ¡y el
. querer serlo todo! Pero hubo una época histórica en que las mujeres desearon que
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~•····· ·: alguien las sacara de la vida pública, del trabajo.
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r El anhelo de dejar de trabajar para cumplir con un estereotipo de ser mujer -presentado
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-~.,, ' ..:· como el mejor- dominó la vida de las mujeres. Y se extendió a todas las áreas de la vida:
dejar de tener que pensar, dejar de tener que decidir, dejar de tener que participar... Este
•
' ,, . deseo construido cultural y socialmente logró enclaustrar a miles y miles de mujeres en
sus casas, en sus familias y en sus parejas monógamas y eternas.
Permiso de poligamia
L a poligamia siguió siendo aceptada socialmente para los hombres. Aceptada y
promovida. Los hombres sí podían ser polígamos. Y pueden, porque en este aspecto el
modelo burgués sigue muy vigente. Modificado en algunos aspectos, los pilares y
fundamentos del amor burgués siguen sólidos en las actuales relaciones de amor.
Ayer como hoy, ya en la modernidad, la poligamia sexual, no solamente la poligamia

amorosa, le sigue dando poder a los hombres. La poligamia es una de las más
importantes fuentes de las que obtienen poder los hombres. Desde los tiempos del
amor burgués hasta hoy los hombres adquieren poderes a partir de la sexualidad y
manifiestan poderes a través de la sexualidad.
No es sólo el mercado el que valoriza diferencialmente a las mujeres y a los hombres,

el amor también. Una de las fuentes del valor personal de los hombres está en el amor
de las mujeres. Los hombres de ayer y los de hoy requieren de varias mujeres para
nutrirse del amor de esas mujeres y así mostrar socialmente sus capacidades viriles,
sexuales y amatorias, elementos muy importantes que configuran lo que hoy
conocemos como autoestima masculina, alimentada por las relaciones desiguales que
tanto les favorecen.
48
Dra. tvlarcela Lagarde
El rito amoroso de los regalos

e on la modernidad, el amor de los hombres a las mujeres se va convirtiendo cada
vez más en una transferencia de recursos. Conforme avanza el mundo capitalista, se
va desarrollando más y más un orden social de géneros en el que los hombres se
convierten en los simbólicos más importantes del orden económico.
Dar amor comienza a ser compartir elementos del poder. Dar amor es dar dinero,
bienes, recursos. Dar amor es dar regalos: éste es uno de los ritos más arraigados
del amor. En la actualidad, como ya estamos muy liberadas , nosotras también
regalamos. Pero en la era burguesa , las mujeres no regalaban a los hombres, sólo
recibían regalos de ellos.
Una muestra simbólica del poder de los hombres sobre las mujeres es halagarlas.
seducirlas con objetos. Estos regalos de amor simbolizan también lo que en
antropología llamamos la compra de la novia. Con objetos -no útiles, sino suntuarios.
.......
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y sobre todo que tengan relación con la sexualidad- se "compra" a la mujer. ~
Como se trata de una compra sexual, los hombres regalan cosas para el cuerpo de
las mujeres. Se les regala lo que tiene que ver con la preparación del cuerpo de la
amante para los artificios del eros: perfumes y joyas. A l regalar perfumes se
simboliza el dominio sobre el cuerpo de las mujeres, al regalar joyas se expresa que
el poder económico es de los hombres. Estos ritos siguen vigentes en nuestro
tiempo. En este mundo lo que más se les regala a las mujeres son perfumes . ¿Qué
industrias son de las más superpoderosas del mundo? La de los perfumes y la de la
cosmética.
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Las cosas han ido cambiando. Porque la economía ha ido cambiando. Y las mujeres ,:-?i:'.; --· -· ~-:
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han ido aprendiendo a exigir otros regalos. Y a regalar ellas mismas. También ha ::-:e>
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cambiado ese principio de la cultura amorosa burguesa que establecía que las j::;'.,
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mujeres nunca pagan y los hombres siempre invitan. Ya entre nosotras, o pagas o ·:¡?¡fü1;1!F"i:::i·:·::·:: '', : '.' ..;
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no vas. Hoy, este principio burgués pervive en centros nocturnos y salones de baile .
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donde las mujeres no pagan o pagan la mitad, como un residuo ritual de su ;• •
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dependencia económica de los hombres . ,; ~'.;
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El más sofisticado de los sistemas de dominación <::
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E I orden burgués fue construyendo un modelo económico y social para las mujeres :B:
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haciéndolas dependientes económicamente de los hombres. En distintas épocas de la •• >~:. >~- .r

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era burguesa estuvo muy mal visto que las mujeres tuvieran dinero propio. Que •ij.ii:í•;,,
tuvieran algún negocio, manufacturas, empresas. que tuvieran tierras. Que tuvieran la
casa a su nombre. Las casas estaban a nombre de la familia o a nombre del marido, .-.,.ro ... .. •.·.,.,
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que detentaba todas las propiedades de la familia. Decir .. esto es mío .. quedó fuera del .· .
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vocabulario de las mujeres. . . . .

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Claves feministas para la negociación en el ainor
Hoy, en las mujeres que trabajan y que tienen ingresos propios existe todavía un
" sincretismo que genera muchos conflictos. ¿Cómo se expresa? En enfrentar a
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hombres que se ofenden porque las mujeres ganan más dinero que ellos y no lo
soportan, considerándolo un atentado a su autoestima. O en enfrentar a hombres
que siguen poniendo las casas y las cosas a su nombre, aunque las hayan
comprado entre los dos.
El modelo del amor burgués configuró a las mujeres como auténticas pobres. Pobres,
pobres. Dependientes sexual, afectiva, económica, jurídica y políticamente de los
hombres. Según algunas autoras y autores que han hecho la historia de las mujeres.
la historia de la sexualidad y la historia de los órdenes de géneros, el orden burgués ha
sido la operación más sofisticada que ha conocido la humanidad para lograr la
subordinación de las mujeres a través de las relaciones de amor.
En el modelo burgués, v1v1r, realizar la vida implicaba para las mujeres

necesariamente quedar en subordinación, en desigualdad y en dependencia vital.
Pocas veces en la historia de la humanidad se ha logrado crear un sistema tan
extraordinariamente perfecto para dominar a las mujeres. Y más: para que el anhelo
de amar de las mujeres. su deseo de ser amadas, sólo pudiera ser realizado en la
subordinación . Este sistema logró que conseguir un marido se volviera el objetivo de
ii la vida de la mayoría de las mujeres . Mujeres que probablemente se la hubieran
podido pasar muy bien sin marido, ni siquiera pudieron imaginarse la vida solas.
Esta ideología condujo y sigue conduciendo a las mujeres a tener, a sostener y a

mantener relaciones devastadoras. La idea del amor eterno. monógamo, exclusivo, la
idea de "el amor de mi vida" es perversa. Hasta hoy se escucha decir a muchas
mujeres: "Yo sigo buscando el amor de mi vida". Lleva veinte años tras esa ilusión, y
sigue y sigue, a ver si en el veintiuno, a ver.si en el veintidós ... La ideología del "amor
de mi vida", la idea de tener que encontrar a alguien maravilloso con quien realizar los
cánones del amor, todavía está presente en la cabeza de muchísimas mujeres
modernas.
Es importante reconocer que todas nosotras hemos recibido una formación amorosa
muy marcada por el amor burgués y vivimos en sociedades que proclaman aún este
amor como el modelo ideal para las mujeres.
El fruto del amor burgués: las madresposas

E I amor burgués inventó a las madresposas. Así, en una sola palabrita. Las
madresposas son mujeres especializadas en ser madres y en ser esposas, mujeres
cuyo sentido central en la vida es encontrarse un buen hombre o malo, porque
algunos salen malos o se echan a perder, pero al menos uno, un hombre- para hacer
la vida con él, y para tener hijos con él. y para hacer una familia con él.
50
Son tres los mandatos de las madresposas: ligarte sexo-afectivamente con un

hombre, realizar la maternidad y fundar una familia. En la modernidad, las madresposas
ya hacen también ot ras cosas, pero esas otras cosas que hacen son de pegoste, no
son lo vital para ellas. Lo vital para su identidad femenina son estos tres mandatos.
Tres mandatos que constituyen todavía el anhelo central de millones de mujeres en
todo el mundo. .
............
\'•
~
En América Latina la mayor parte de las mujeres contemporáneas hemos sido ¡;'
'
educadas para ser madresposas . No todas lo hemos realizado bien, unas lo hemos ;:
realizado a medias, ot ras regular, otras a tropezones y otras hemos hecho una .
revolución para enfrentar un modelo que no nos gustó.
Perfil de la madresposa
E n primer lugar, la madresposa debe anhelar y actuar toda su vida en función de ..
satisfacer las necesidades de su cónyuge. No importa en qué condiciones lo haga,
no importa si recibe o no recibe nada a cambio. Y si no satisface sus necesidades,
debe aprender a aparentar que lo hace. Surge así todo ese mundo de apariencias en
que se mueven tantas parejas, que aparentan socialmente vivir una relación ideal que
no viven. Lo hacen porque saben que el mundo acepta las apariencias pero no
acepta la no-realización de los mandatos .
Como resultado del modelo burgués, las madresposas deben asumirse -aunque de
forma muy ambivalente- como seres de la sexualidad . Educadas con prohibiciones,
,.,~
,
..
• • . • ' .
con tabúes. con pecados sexuales por todas partes, tienen que aprender al mismo • ,,
tiempo
,
a satisfacer necesidades sexuales. .
Esta es una de las ambivalencias sincréticas que más afecta a las mujeres: tener que ; :,
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ser puras e impuras a la vez, tener que ser "damas en la calle y putas en la cama". ..:¡·i.,,.
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Las madresposas deben tener como su patrón en el mundo a su cónyuge. Su ... :1
cónyuge no es un hombre más, es el Hombre. En superlativo. Con supremacía.

Deben obedecerle, serle leales. y nunca pret ender o imaginar que estarían mejor
solas.
También deben asumir y creer que el amor es la vía directa y sin escalas a la
felicidad. La era burguesa asocia el amor con la felicidad. Y considera infeliz a la
mujer que no t iene un hombre. unos hijos y una familia. Aunque pueda tener muchas
otras cosas en la vida, aunque pueda realizar muchas otras tareas con sentido, si no
ha logrado ese modelo de amor la mujer es considerada infeliz.
Las mujeres contemporáneas estamos todavía muy marcadas por la ideología que
nos dice que felicidad es igual a esta forma de amor, en la que lo más importante no
es tener a un hombre que nos ame sino tener a un hombre a quien amar. Esta / ..¡¡,¡i
jerar~uía am?rosa es la que nos debe h~cer felices. En muchas r~laciones actuales :1! • : ~
esta 1deolog1a se expresa en que las muieres soportan mucho me¡or el desamor que ;:
la falta de alguien a quien amar.
51
Tenemos más callo para aguantar el desamor que para enfrentar la ausencia de un
amor. Soportas mejor estar con alguien que no te ame pero al que puedes amar que
no tener a nadie. En la estructura identitaria de las madresposas no tener a quién
amar es la tragedia total.
Las otras mujeres: las amantes

E n este modelo de amor existe otro personaje de mujer fundamental, funcional a la
poligamia masculina. Es la amante. La amante es la "otra mujer" del sistema conyugal,
sexo-afectivo y erótico dominado por las madresposas. En este sistema, unas mujeres
se especializan en la vida doméstica. la vida de pareja. la maternidad y la familia, y otras
mujeres quedan especializadas para las relaciones eróticas. El sistema construye dos
modelos de mujer: mujeres para casarse y mujeres "para pasar el rato". o mujeres "sin
. "
compromiso .
Esta falta de compromiso se ha profundizado muchísimo en la modernidad, Y ya en

este siglo XXI, muchos hombres condicionan sus relaciones con las mujeres a que
no haya ningún compromiso: "Así me conociste y así soy, yo no te voy a ofrecer
nada ni me pidas nada." En este clima. muchas modernas, contrarias a las
instituciones y a la organización tradicional de la vida, se convierten en la mejor
materia prima para la construcción de las amantes. Las amantes se corresponden
con mujeres que no quieren estar atrapadas en instituciones tradicionales y que se
' .,_.,.,,:, han negado a caer en esa trampa. O simplemente son mujeres que querían caer en
, _.; ... -
. ella, pero no pudieron y ni modo. se adaptan. Aunque hayan querido ser
l-;;~ ~- madresposas, se quedan de amantes con tal de amar y de que las amen.
Hf\.
~-
l
Las amantes legitimadas

.'
L a cultura burguesa estableció dos grandes estereotipos en el amor: un amor eterno

y ligado a la familia, y otro amor puntual, temporal, efímero, donde lo que prevalece es
. el tiempo presente. Esperar vínculos en el concubinato es una locura. Si el amor dura,
&:, ;1!.
~~H.:-::.. :.
i:
::
qué bueno, pero si no dura, nadie esperaba otra cosa... salvo las mujeres. Porque aún
,~~',:· :,'.:; r
.....' .......
. ., ' ....
;~ habiendo asumido el rol de amantes, siempre aspiran a convertirse en la única, la
...... . .•
•·-
.
permanente, la exclusiva. Y esta expectativa es fuente de grandes conflictos, anhelando
siempre, desde una posición aún más subordinada que la de las madresposas, ocupar
otro papel, el que sólo las madresposas pueden realizar.
Hoy. cada vez más. la amante va siendo un simbólico asociado al eros, a la pasión,
a la aventura, también a la diversión. Y cuando una amante asume el discurso de una
madresposa le dicen adiós, "porque yo para problemas ya los tengo en otra parte".
Existe una moral para las amantes, que tienen un deber ser, y existe una
i·;.: .;• .; . expectativa sobre cómo deben ser. Se espera que sean buena compañía,
;
. .
' .. disponibles, ilimitadas. dispuestas a la superficialidad, a la frivolidad. O se espera de
ellas todo lo contrario: estar dispuestas a cualquier sacrificio y a arriesgarlo todo por
el amante. Las amantes son el "segundo frente", la "segunda casa". "la sucursal".
52
En los orígenes de esta diferenciación sexual de las mujeres. por el amor y la

sexualidad, el mundo de las madresposas y el de las amantes eran mundos ,
verdaderamente separados. Por un lado las mujeres buenas y por el otro las malas
mujeres. En el mundo actual, que sigue estando marcado por la cultura burguesa en el
amor y en la sexualidad, ya no están tan separados los dos mundos y algunas pautas "
culturales y morales han cambiado bastante. Mujeres decentes son amantes, y no han '::,
dejado por eso de ser decentes. Es más, hoy se afanan por aparecer decentes, :~
cuando en el pasado tenían que hacer ostentación de ser indecentes. Hoy se busca -¡-
adecentar y normalizar el concubinato, legitimándolo como otra forma de la relación •
amorosa, tan respetable y tan válida como otras.
Esta normalización se enfrenta a un problema jurídico: la monogamia es la que

establece legalmente los derechos. Esto explica por qué tantos movimientos de
mujeres han luchado por legitimar concubinatos y relaciones no monógamas,
exigiendo para estas relaciones los mismos derechos que tienen las relaciones .. •···•·
.
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•- .r\~;I'.•··•··.♦
,.
socialmente aceptadas. A estas luchas han dedicado esfuerzos muy importantes los . .
movimientos feministas del siglo XX.
El amor victoriano y su poder

H oy también vivimos bajo la influencia de otra forma de amor, el amor victoriano.
Este modelo de amor lleva el nombre de la Reina Victoria, que gobernó Inglaterra
"
durante la transición del siglo XIX al XX, cuando se da la gran expansión del imperio
británico, en un momento cumbre del desarrollo del capitalismo. La Reina Victoria es
el monarca que ha tenido un reinado más prolongado en Inglaterra. Durante su
reinado el amor burgués llega a su fin.
En el matrimonio de la Reina Victoria, su esposo no fue el rey, fue sólo "el esposo
de la reina". Ella era la heredera del poder monárquico. Siendo una mujer tan
poderosa, responsable de tan gran imperio, y llevando por esto una vida tan
diferente a la de las demás mujeres de su país y de su tiempo, la Reina Victoria logró
imponerse como modelo de mujer y de madre en Inglaterra y en muchas otras partes
del mundo. Convertida en "la madre de Inglaterra " y desde el artificio de la corte y
el poder del trono, contando con un equipo de nanas, institutrices y mayordomos
para cada uno de sus muchos hijos, la Reina Victoria construyó el estereotipo de
madre perfecta, legándole a la sociedad de su tiempo, una sociedad muy
conservadora, muy patriarcal y muy cerrada, la sociedad victoriana.
Su prolífica maternidad se convirtió en modelo femenino, y en base a este modelo ,.

se recluyó en sus hogares a las mujeres de la corte y a las de la aristocracia para '~ , ,. Íl_!lifÍm"
·~•-.' . ' .•:
que dieran más hijos a la nobleza. Era una estrategia de clase: se destinó a las fü ,fui ' ..
mujeres a dar más y más hijos a una clase social que estaba en expansión. Cuando / •• '
esta clase entró en declive y aun cuando ya estaba a punto de extinguirse, el /
modelo pervivió.
.
53
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1 Claves feministas para la negociación en el amor
1it'.'
' 1"",,-,
Siempre embarazadas, siempre pariendo
E I amor victoriano representa el extremo del amor burgués, es el amor burgués
llevado a su máxima sofisticación. Si el amor burgués resultaba negativo para las
mujeres, el amor victoriano fue aún peor. El amor victoriano consagra el amor de las
madresposas obedientes, puras, abnegadas, domésticas, conservadoras y
religiosas. El modelo victoriano identifica el amor con una experiencia muy ligada a la
experiencia de Dios. El amor tiene una dimensión religiosa muy conservadora y se
considera pecado casi todo.
La pasión erótica está muy mal vista en el modelo victoriano y queda excluida del
amor. Los cónyuges deben tener relaciones sexuales sin pasión, y si la mujer se
muestra apasionada es señal de que es una "mala mujer". La mujer tenía que
demostrar frigidez. La frigidez se convirtió en virtud para las victorianas. Hasta hoy,
muchas mujeres buscan demostrar con la frigidez que a ellas no les interesa la
sexualidad. la pasión erótica. Mostrarse frígidas es una forma de decir: "Yo soy pura,
no soy de las otras" .
El amor victoriano consagra fundamentalmente la dedicación de las mujeres a la

.
• : T' !:
procreación, instaurando como virtud esas maternidades de ocho. diez, quince,
-~
•• ·;:
-: ¡• :!;' dieciocho criaturas. La maternidad se convierte en la forma superior de entrega al
•:~: ;
cónyuge. en la expresión del amor supremo, y en la mayor prueba de la pureza
...
sexual de las mujeres. Para el amor victoriano la "pureza sexual" de las mujeres
consiste en mantenerse permanentemente embarazadas, pariendo y amamantando.
Así mostraban que el amor sexual no tenía para ellas la mayor importancia. Como el
amor era visto como pecado. debía purificarse y sólo podía limpiarse con la
maternidad . La mejor muestra de una buena relación conyugal era que la mujer se
mantuviera siempre embarazada. Esto implicaba también el retiro sexual de las
mujeres y favorecía que los hombres establecieran relaciones con otras mujeres, ya
que una mujer embarazada se consideraba intocable. En el amor victoriano se
considera que las mujeres embarazadas no tienen necesidades sexuales, y las
relaciones sexuales con mujeres embarazadas quedan prácticamente prohibidas,
considerándose como una perversión .
..
.¡,' Muchas mujeres en América Latina han vivido y viven aún en continuos embarazos,
.. aceptando esto como un mandato de género. Y muchos hombres latinoamericanos
:ii
... han vivido y viven aún con la idea de que si sus mujeres están siempre embarazadas
no los engañarán con otros hombres . Creen que las mujeres embarazadas son
intocables sexualmente, que una mujer embarazada no puede ni debe hacer uso de su
cuerpo porque su cuerpo embarazado no le pertenece. Por eso, es una costumbre muy
arraigada que, al viajar, al emigrar, al desplazarse para un trabajo temporal, los hombres
dejen a sus mujeres embarazadas para asegurarse así de que no tendrán amantes. Esta
costumbre, estas ideas nacieron en la sociedad victoriana, cuando los hombres
.. emprendían largos viajes por mar a otros continentes y, por razones de herencia y de
;: propiedad. querían estar seguros de quiénes eran sus hijos.
: '
54
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!1!-:: ;
Dra. Marcela L.agarde
...
La pervivencia de la tradición victoriana

.. .; .
;
A bunda la literatura sobre la época victoriana, sobre el amor victoriano y sobre su . .;
gran influencia en todo el mundo occidental hasta la actualidad. Después del esplen-
dor de la época victoriana, la tradición victoriana y su modelo femenino quedaron como
residuo, asumido por otra clase social : los burgueses recientes, los nuevos ricos, que
querían ser valorados como aristócratas y asumían para eso las costumbres de la J
••
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aristocracia. i, 1
1
i: '''
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En realidad, quienes las asumían eran las mujeres. Mientras los hombres cambiaban .:,
mucho y se emancipaban, destinaron a las mujeres a perpetuar el modelo victoriano. ';
' ' . :'
'
Muchos hombres burgueses asumieron la tradición de los aristócratas de mantener
'
a sus mujeres para que ellas no trabajaran. . .
Para aparecer tan ricos como los aristócratas, los nuevos ricos tenían que • '
:;., !W
t•;
demostrarlo y una de las muestras que daban era mantener a sus mujeres guardadas t 1h*•f'r,: '!'.. '
en las casas pariendo criaturas o yendo a rezar a las iglesias o haciéndose cargo de
los rezos a los difuntos, tareas prioritarias a las que se dedicaron sus mujeres.
Como no necesitaban trabajar. las mujeres no salían a la calle. Eran "mujeres de su

casa". y si salían era sólo para hacer actividades ligadas a la "maternidad social": a
ocuparse de enfermos, huérfanos y pobres, de los "vulnerables", como hoy se dice.
La exclusión de las mujeres de la vida laboral se asume como una muestra del
poderío y de la autosuficiencia de los hombres. que buscan aparecer como capaces
de sacarse adelante a ellos mismos, a sus mujeres y a su prole.
A pesar de que la aristocracia ha desaparecido en el mundo, y a pesar de que este

modelo de masculinidad autosuficiente ya no está hoy muy en boga, muchos rasgos
victorianos siguen aún muy presentes. como reducto cultural, en la ideología de las
clases medias de todo el mundo occidental. Y son muchas las mujeres de clase
media de muchos países que piensan que son más valiosas las mujeres que no
trabajan, considerando el no trabajar como una virtud económica y social.
Amor romántico: la pasión erótica

y la causa política
O tra forma histórica del amor es el amor romántico. Es expresión de otra época
y algunos de sus personajes emblemáticos son músicos famosos: Liszt, Schubert,
Schumann, Chopin, símbolos de la cultura romántica. ,. '
Como reacción al cerrado y conservador mundo victoriano. surge en Europa el :;: "
anhelo de vivir el amor de manera diferente. La "diferencia" se asocia a poder dar ? •
rienda suelta a las pasiones de amor. Aparece así el amor pasión. El amor J
romántico reivindica la pasión erótica y el amor fuera de la sanción institucional del ';;t
matrimonio.
55
••• ,·• -:.t'
.
!I< • Claves feministas para la negociación en el amor
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Del amor romántico está plagada hoy América Latina: miles y miles y miles de
mujeres y de hombres que se emparejan y que, con una ideología anti-institucional.
deciden no casarse, porque consideran absurdo que el amor requiera firmar "un
papelito" .
El amor romántico se plantea como un amor puro. Pero la "pureza" es ya de otro

tipo: el amor es puro porque no está contaminado por las instituciones. por las
formalidades. Es una pureza tan poderosa que no requiere de ninguna sanción social.
Otra marca que tiene el amor romántico es sumarle a la comprensión entre quienes se
aman la identificación en los fines vitales. Los amantes no sólo se comprenden,
buscan también los mismos fines. En la Europa de las revoluciones liberal y socialista
abundan las historias de parejas que vivieron amores románticos, las historias de
mujeres que lo dejan todo -familia, fortunas. títulos-. por una causa y juntan el amor y
r·. . la revolución. la pasión erótica y la causa política. Compartir causas políticas. causas
¡;.{
.
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"·•·•·•·•·····
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..
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<
.• estéticas. filosofías, luchas y proyectos une a las personas y el amor se sostiene y

aumenta al identificarse ambos en el mismo sentido de la vida. Cantidad de historias
',:i,
• 1;
de amor de este tipo abundan en América Latina y muy especialmente en Nicaragua .
!?f.,• •
r·,
.
V> :
F ~
El sentimiento oceánico de una pasión compartida
'.
L a identificación en fines que van más allá de la pareja, y la inmersión de ambos en
una causa mayor, agrega al amor un nuevo e importante componente. Algunos textos
.~·•· ...
f:1:; : sicoanalíticos han llamado a esta experiencia sentimiento oceánico. Te sumerges en

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~,,.,,. ;'
P.e: • '· algo mayor, de lo que te sientes parte. como si te sumergieras en el océano. Algunos
' ~ !,
' hablan también de adentrarse en un bosque. En el romanticismo. el sentimiento
.
oceánico es la base del amor. Al sentir ambos que pertenecen a un fin que los
J:
trasciende, que va más allá de ellos misrnos. los amantes se erotizan y la causa
común estimula su amor. En esta experiencia, el amor es parte de la causa y está al
servicio de la causa.
Un típico ejemplo de amor romántico fue el que unió a George Sand y a Federico
Chopin. Ella era una escritora casada, él un joven músico soltero. Los unió el arte. la
música, la creatividad, que les daban la experiencia del sentimiento oceánico.
Compartieron la misma pasión por el arte y el arte envolvía su amor y lo incrementaba.
El amor de Rodin y Camille Claudel

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U n magnífico ejemplo de amor romántico es el que unió al gran escultor Rodin
-autor de esa extraordinarísima escultura llamada El beso- con Camille Claudel.
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Camille, también artista, se enamoró apasionadamente de Rodin , su maestro. Y se
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convirtió en su modelo y también en su ayudanta. Camille está esculpida en las más
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;; importantes esculturas eróticas de Rodin. Y con él aprendió a esculpir. convirtién-
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dose en una escultora también extraordinaria, de tanta calidad como Rodin.
56
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Dra. lvlarcela Lagarde .. - ...

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...
Sin embargo, este inmenso logro le costó a ella la salud mental y la vida. ¿Por qué? j/P
Porque en aquella relación el único que podía ser famoso era Rodin. porque era él
quien tenía la supremacía. Vibraban al unísono por el arte. él la esculpía, la amaba,
ella lo ayudaba. lo amaba, iban de la escultura al cuerpo, del cuerpo a la escultura ...
pero en las exposiciones el que exponía era él, y el que era famoso y ganaba dinero ¡[ ·:¡
y era entrevistado era él. Cuando ella, como gran escultura, decidió exponer sus ·:' •·~
obras. le aconsejaron que no lo hiciera. Eran esculturas muy atrevidas y la sociedad !;!
parisina la iba a reprobar. Entonces. su amante. amigo y maestro exponía firmadas i
·~
por él y como suyas las esculturas de ella para protegerla y evitar que fuera Y.
lastimada socialmente. Hoy sabemos esto porque Camille Claudel les hizo una
marca que han sabido encontrar las historiadoras de arte feministas.
La historia de Camille Claudel es la de una romántica que deja todo por amor. se
consagra al amor. a su arte y a su hombre. mientras su hombre se consagra a su arte
y a sí mismo. La "pequeña" diferencia que se da en el amor romántico la descubrimos
al saber quién se consagra y cómo se consagra, porque aunque ambos comparten la
ii - 1
J
misma pasión no la comparten de la misma manera. De la desigualdad de género .: . :·'
...'
en el amor romántico sabemos bastante, porque son muchas las románticas que nos •'
han legado cartas. diarios. testimonios. donde cuentan el amor que vivieron y que las
consumió.
El amor trágico, el amor imposible

T enemas la tendencia de considerar el romanticismo muy positivamente. Pero lo
romántico contiene una clave muy negativa: la principal característica del amor
romántico -además de ser una pasión por una causa trascendente vivida como
sentimiento oceánico- es que siempre incluye la tragedia.
El amor romántico tiene siempre una cara trágica. Aun más grave: contiene la
disposición a la tragedia. la aceptación de que un minuto de goce lo vale todo y no
importa lo que pase después . La esencia del romanticismo es jugártelo todo por un
instante de amor. Una gran cantidad de infecciones de SIDA tiene su origen en
la cultura romántica. donde el amor prevalece sobre todo sin importar las
consecuencias. En el romanticismo sólo cuenta el presente. el momento. La
transgresión a las reglas morales lo domina todo y lo único que importa es vivir la
ruptura de los límites y dejarse llevar por la fascinación apasionada del momento.
'
:c:l ;:°l ··,. ~ -
El amor romántico es también trágico porque es el amor imposible. La cultura i¡ • ·' . ., •
romántica ha instalado como idea .. positiva" que n~ importa que no nos amen. que no ;¡ , .~; •llji;il;, :
nos debe preocupar el desamor, porque lo que mas vale es nuestro amor por el otro. ( ~~
~
Cantidades de mujeres han sido educadas para el amor con romanticismo. Esto ··:• . •
significa que para ellas es más importante sentir el amor que lo que ocurre en el amor.
Y así lo decimos: "A mí lo que me importa son mis sentimientos".
57
Claves femirtistas para la negociación en el amor
La realización concreta de esos sentimientos nos importa menos. Se pnonza el

afecto interno y se demerita la realización concreta del amor. Incluso, se desarrollan
amores en medio de situaciones que son realmente perversas. Porque el sufrimiento
se íntegra como pieza del amor. Y ésta es una clave de género fundamental para
entender cómo entendemos el amor: asumimos que amar es sufrir. Asumimos que
un componente ineludible del amor es el sufrimiento y así el sufrimiento amoroso se
convierte en una virtud. Esto nos conduce. y cada vez lo hemos ido sabiendo con
más claridad, a una enorme víctimización de las mujeres. La ideología del amor
romántico impide a muchas mujeres darse cuenta de que ser víctimas ni es una
virtud ni es positivo.
Camille Claudel: una víctima del amor romántico

H an sido muchas las mujeres víctimas de la cultura romántica. Algunas
sucumbieron. Camille Claudel entre ellas. Después de que Rodin se volvió muy
famoso y ella, pasados los esplendores de la primera pasión, comenzó a reclamar-
le que por qué no la llevaba a las exposiciones, que por qué de ella no hablaban los
•• periódicos, empezaron a pelearse los dos, y comenzó a haber mucha violencia en
aquella relación. Rodín acabó echándola de su estudio y empezó a llevar a otras
mujeres como modelos de sus esculturas.
Camílle comenzó a sentir celos terribles por el desamor de Rodin. No soportaba

verse excluida y marginada de la vida de aquel hombre. Rodín aumentó su ego y el
peso de su fama mientras ella iba languideciendo. Resulta impresionante ver cómo
en la crisis él engorda -se convierte en un hombre más corpulento- y ella se va trans-
formando en la sombra de sí misma. No soporta el abandono, porque estaba
fusionada con él. No sabe vivir sin él, lo necesita para respirar, para vivir, y al no
tenerlo va perdiendo la condición social y también la salud.
Camille Claudel se enferma, y acaba viviendo en un cuartito al lado del Sena. donde
sigue esculpiendo. Ese cuartito desapareció cuando se remodelaron los puentes de
París sobre el Sena. Camille comienza a beber mucho. Bebe ajenjo, que era como una
droga y provocaba alucinaciones, y vive rodeada de gatos y de basura. Sale de su
tugurio, con la ropa hecha hilachas, sólo para buscar qué comer. Los vecinos se
molestan mucho con los gatos y con la basura que se acumula en su casa, y terminan
llamando a la asistencia pública, que se la lleva a un manicomio. Camille Claudel, una
de las más grandes escultoras de la era moderna, vivió 40 años de su vida, recluida en
un manicomio y con el corazón hecho pedazos. No por Rodín, sino por un modo de
entender y de vivir el amor. En nuestro ambiente encontramos a diario historias como
~¡l~' la de Camille Claudel. Y muy probablemente algunas de nosotras hemos vivído en
r, nuestra vida momentos o etapas total o parcialmente claudelianas. Porque el amor
1 , . : romántico ha pervivido hasta nuestros días.
'
58
Virginia Woolf: aparece el amor libre

E n la misma época de Camille Claudel comienzan a haber mujeres que aman mucho, .
pero que rechazan las trágicas formas del amor romántico. Una de ellas es la escritora / ';i
inglesa Virginia Woolf, que vivió un amor muy grande, el amor de su vida, con su ~·~!
.,
marido, quien después de la muerte de ella se convirtió en su biógrafo y en su editor, ;[,
publicando sus diarios y sus escritos. Fue un hombre que verdaderamente la amó como ;¡
ella lo amaba a él, formaron una pareja en la que nunca ninguno se sacrificó para amar. i
Aunque Virginia Woolf formó con su esposo una pareja muy potable y también una ·¡
sociedad editorial, tenía mucho más poder que él y construyó más poder que él. Ella :;
era la escritora, la famosa, la que ganaba más dinero, él era su socio, su editor, su amor. :;
"'*
Ambos compartieron la vida en todo lo que pudieron. Apostaban a la igualdad. Ésta es J

una apuesta muy difícil en cualquier situación y hemos de saber que la única forma de 7,:lf
eliminar las brechas de desigualdad de género es tener más poderes nosotras. Porque :!i: /'il
cualquier hombre, todos los hombres, cuentan siempre con un plus de poder. Todos. i '·
Por eso, para igualar las cosas en la relación necesitamos tener nosot ras muchos más -l' ~i;;~ij¡¡.¡¡¡;¡¡,,,f¡: .
poderes que ellos. . '.tf11i\J:»'Y
Virginia y su esposo formaron parte de un grupo de amigos. entre los que había
escritores, artistas, escritoras, pintores. pintoras. Se emparejaban, se amaban, pero
no se casaban. Eran subversivos, transgresores, e inauguraron una nueva onda del
amor, con libertad sexual y amorosa.
Si leen la biografía de Virginia Woolf verán la aventura que resultó la construcción de

una forma de amar muy distinta, que se llamó amor libre. Ustedes probablemente han
hablado y discutido muchas veces sobre el amor libre y a lo mejor hasta lo han puesto
en práctica. Pues bien, el amor libre se origina entonces, como una crítica moderna al
amor cortés, al amor burgués, al amor victoriano, al amor romántico, a todas las
formas de amor tradicional.
La libertad: objetivo del pacto amoroso

E I amor libre es otra forma histórica del amor. Es una de las más importantes :I
utopías sociales en torno al amor realizada por diversas generaciones a lo largo de :
la historia del siglo XX en distintos países. i
El contenido básico del amor libre es la libertad: la libertad debe estar en el centro ;:
de cualquier relación humana y de cualquier relación de amor. El amor es libre, )1 ,
porque el objet ivo del pacto amoroso es preservar la libertad de cada uno. Entonces, t •
;, '
el amor consiste en cuidar: cuidar tu propia libertad y c uidar la libertad de la ot ra ~

persona. Ambos somos mutuamente responsables de nuestras libertades.
59
Claves feministas para la negociació n en el amo r
En ese marco de libertad se reconocen las diversas sexualidades. Pero no como

disfunciones o anormalidades. En el grupo de amigos y amigas de Virginia Woolf se
valoraba la diversidad sexual, considerándola un atributo. Entre ellos había hombres
homosexuales que no eran "de closet" , mujeres lesbianas que por primera vez
empiezan a llamarse a sí mismas lesbianas como una definición de sentido de la vida y
no sólo de preferencia sexual. y mujeres y hombres heterosexuales que vivían
relaciones basadas en la libertad.
El grupo consideraba que asumir. aceptar, respetar y valorar estas diferencias los
definía como gente de mentalidad abierta y de valores profundos. Se consideraban
más civilizados que los demás, y por reconocer la diversidad sexual sentían que
habían alcanzado un más alto nivel de desarrollo cultural.
Sin tragedias, con libertad

E I amor libre hace la defensa de la libertad sexual, entiende el amor como un
pacto de libertad. y niega el romanticismo excluyendo el sufrimiento del amor. Nada
de tragedias. El amor que vivamos, tenemos que vivirlo sin ocasionar tragedias.
'
'
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Estas pautas inauguran una nueva ética amorosa en la historia. Es la primera vez en
'I :
la historia que se plantea que el amor no es natural sino que lo desarrollamos, que
' no hay amores perversos sino que únicamente son perversos los amores que
.¡¡¡·~···<
'
¡ '
i
: niegan la libertad. y que en el amor la ética tiene que ir siempre por delante.
Estos principios son la gran herencia de aquella gente, un legado del que tenemos
que hacernos cargo principalmente las mujeres en la búsqueda histórica en la que
nos encontramos. tratando de defender el derecho al amor y de inventar nuevas
formas de amor. que lo conviertan en una experiencia positiva y no en una
experiencia que resulte devastadora para nadie.
La gente de aquel grupo insistía mucho en que no por ser libre el amor debe estar
exento de compromisos. En el amor debe haber compromisos claros entre las
personas. En el amor libre está presente el anhelo de la igualdad. Es la primera vez en
la historia que la igualdad pasa del plano de lo político. del plano de la ciudadanía, al
plano de lo afectivo, del amor. Ellos y ellas enarbolaban como ética amorosa el
reconocimiento de la igualdad entre los cónyuges.
Obviamente, la sociedad de su tiempo, muy conservadora, que llevaba el sello

victoriano, miró a esta gente con rechazo, como mira la derecha cualquier innovación.
Los consideró locos. Entre otras cosas. porque los hombres trataban con igualdad a las
mujeres y porque las mujeres no estaban sometidas a los hombres. O porque la
amistad -y ésa es otra clave de la originalidad de esta gente- acompañaba siempre al
amor. En el amor libre se liquida, teóricamente, la desigualdad entre los géneros. Y
,. .. también la desigualdad dentro de cada género. Porque las relaciones que había entre
. r .>. ~
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• , ce ::= mujeres y entre hombres también aspiraban a la igualdad.

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60
.... : í '
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Entender lo que estas personas vivieron es entender una historia generacional. Así
como los jóvenes de los 60 fueron rebeldes, así como tal vez nosotras también
pertenecimos a una generación de ruptura, los jóvenes de aquel grupo pertenecieron
a una generación que rompió con muchas cosas y que inventó cosas nuevas.
(~:~. ;
-iSjf
Sin castidad, sin propiedad, sin fidelidad ~•• ' ••n
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. ' .. ·~
L os de aquel grupo -así lo decían textualmente- querían liquidar la visión

pecaminosa del sexo. La sexualidad era libre. El amor libre busca eliminar la castidad ',
't
como componente amoroso de cualquier relación amorosa . Aprender a vivir de una !¡
manera no casta, en libertad, con amor y amistad: ésa era la propuesta. ¡'illli¡¡:_
'
Otra clave de su propuesta era eliminar la fidelidad entendida como expresión de

propiedad privada de las personas. Sólo si las personas dejan de ser propiedad de
otras personas pueden ser libres . Otro elemento de la propuesta era eliminar la
exclusividad en el amor. M uchas de aquellas mujeres son las primeras mujeres que
tienen amigos. Existe una relación muy interesante entre el amor libre y la posibilidad
de la amistad como nueva forma de relación ent re mujeres y hombres. Y en esa
amistad las mujeres realizan una gran cantidad de experiencias amorosas.
Obviamente, un problema permanente que leemos en las cartas y en las historias de

estas mujeres del amor libre son los celos. Los celos de los hombres. Es lógico
porque ellas eran pioneras de la amistad de mujeres con hombres . Aquellas mujeres
tenían que vencer por un lado la crítica social y por otro, los celos de los propios
hombres con los que estaban madurando un nuevo tipo de relaciones.
No era fácil: una cosa es compartir el ideario, otra vivirlo. Y, como siempre, le
tocaba a las mujeres el mayor esfuerzo, el trabajo cotidiano. Hay muchas historias
de celos desgarradores entre los amantes de estas mujeres, que no aguantaban
compartirlas . Las querían emancipadas con ellos, pero no con los demás . Querían
una mezcla, una especie de victoriana libertaria, un modelito muy parecido al que
quieren muchos contemporáneos, que nos quieren liberadas con ellos, pero que no
soportan que tengamos amistad con otros hombres.
,f'
,. .
Textos imprescindibles para entender

L ean la fascinante biografía de Virginia Woolf para que vean los retos a los que
se metieron los de este grupo. Lean La habitación propia, un libro de ella, un gran
libro de la cultura feminista del siglo XX, uno de los grandes textos de educación
feminista para cualquiera que se inicia, para cualquiera que ya lleva años en esto y J·;'
:
1
para cualquiera que quiera leer uno de los más bellos libros jamás escrito. Junto a El
segundo sexo, de Simone de Beauvoir, es uno de mis libros de cabecera.
61
Pueden leer también un libro maravilloso, la biografía de V irginia Woolf y de su

hermana. Las dos formaron parte de este grupo de jóvenes rebeldes. Las dos
tuvieron historias amorosas muy distintas. Virginia nunca fue madre y estuvo
emparejada con su marido toda su vida, aunque tuvo otros amores, y también
amores con otras mujeres al final de su vida. Su hermana no tuvo amores con
mujeres, fue madre y tuvo hijos con amigos entrañables, al mismo tiempo que amaba
muchísimo a su esposo. que por tiempos no era su pareja sino sólo su amigo.
Complicadísimo, ¿verdad?
Conociendo estas vidas aprenderán mucho. Descubrirán que lo más importante para
ellas era que nadie saliera lastimado de ninguna experiencia amorosa. No querían daño
para nadie. Tal vez porque las dos habían sufrido mucho. La familia de estas hermanas
estuvo marcada por la muerte. Su mamá murió muy joven. Virginia fue criada por su
hermana mayor, que también murió muy pronto. De pequeña, Virginia fue abusada
sexualmente por sus dos hermanastros. Ella y su hermana se aliaron toda la vida para
sobrevivir. Aplicaron mucho esa actitud que hoy llamamos sororidad. Se apoyaron. no
se dejaron nunca, estuvieron una junto a la otra toda la vida, cada una con sus propias
historias de amor.
Lecciones del dolor

E stas dos hermanas nos enseñan cómo las mujeres podemos reparar los daños
que nos han hecho. Porque es del dolor que experimentaron de donde surge la
crítica que ellas hacen a la sexualidad de la que habían sido víctimas. Por eso su
crítica al abuso y a la supremacía masculina. Por eso plantean el amor libre, con
respeto, con dignidad. Era el amor que ellas anhelaban después de haber vivido el
horror. Muchas de las mujeres que nos han aportado tanto son mujeres que han
tenido que levantarse de historias muy duras . Y al hacerlo, se han transformado ellas
y han construido alternativas para ellas y para todas. Tenemos que conocer sus
historias para fortalecernos y para encontrar el aliento que necesitamos para seguir
luchando y creer que las cosas se pueden cambiar.
No estamos hablando idealistamente ni hablamos de mujeres de plástico, sino de

mujeres que vivieron historias terribles y que para sobrevivir inventaron otra forma
de amor y de amistad. Sus historias no son color de rosa, son trágicas y ejemplares.
Virginia Woolf murió en el último bombardeo de la ciudad de Londres. Fue tal su
miedo ante las bombas que se llenó el sweater de piedras y caminó dentro de un río
hasta ahogarse. Se suicidó por pánico.
Entre sus amigos del grupo varios tenían hermanos que murieron en la guerra, otros
tenían problemas en sus casas por su homosexualidad. Y todos se solidarizaban con
todos. Todos ellos fueron pacifistas, en una época en la que todo el mundo defendía su
camiseta y su bandera. Aquel grupo es uno de los ejemplos históricos más interesantes
de gente que, haciendo una crítica durísima a las familias patriarcales como espacios del
abuso. construyó una ética para sobrevivir y para vivir en comunidad.
62
Alejandra Kollontai: una pionera

E I amor libre no sólo se encarnó en este grupo maravilloso. El amor libre es una
corriente histórica que ha aparecido y reaparecido una y otra vez. Antes que este
;¡111 ;,tí
/ ;::
grupo lo había reivindicado ya una mujer maravillosa, Alejandra Kollontai. Ella, una de \ {
nuestras ancestras, fue una gran revolucionaria comunista que participó en la ; '
revolución soviética.
Alejandra Kollontai fue la primera mujer que ocupó un ministerio de Estado en la ) ;··
historia moderna. Fue Ministra de Bienestar en Rusia, el primer estado socialista que l' .
conoció el mundo. Con el movimiento de mujeres de su país, redactó la primera ley \'. .1¡
de la maternidad libre y voluntaria que conocieron las mujeres. Fue la primera ley que \ ;
reconocía el derecho de las mujeres al aborto sin condiciones. Ella entendió que la :r · ~
;;
libertad amorosa no se reduce al derecho a elegir pareja, sino que para amar n¡.
libremente también es indispensable la libertad sexual. Reivindica estos principios en '\i
su libro La nueva mujer y la moral sexual, escrito y publicado en plena revolución. En [)P
sus páginas llega a decir que no puede haber socialismo si no hay revolución ,\
.: ..
sexual. ¿Y cómo se construye la libertad sexual? En la época de Alejandra Kollontai, '.¡1 ;; ••

haciendo de la maternidad un derecho, y quitándole a la maternidad el sentido de . '
deber y de condición natural de las mujeres. 1; ,
·J/·"'·\'~,/1..
Construyendo la maternidad como una opción en libertad. Entender esto, divulgarlo ·<'./· ":'il
'
y hacerlo posible ha sido una de las más grandes revoluciones en la historia de las ,
mujeres y del género.
El amor como camaradería

A lejandra Kollontai habló del amor libre y le llamó eros de alas desplegadas. Ella decía
que a las mujeres nos habían dividido el amor entre amor espiritual y amor sexual y que
un primer paso para la libertad sexual de las mujeres consiste en que las mujeres
podamos reivindicar el erotismo como una cualidad propia, humana, legítima y vivible.
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También planteó que el amor entre mujeres y hombres tenía que cambiar hasta
•.·,
transformarse en camaradería. Planteó que el ideal del amor era una relación entre
iguales que tienen movilidad propia y que no se comprometen la vida uno al otro.
Consideraba que en el amor cada quien debe tener su propia vida y encontrarse sólo
para pasarla bien .
Hace casi cien años. Alejandra Kollontai y aquellas mujeres llegaron muy lejos, eran
más radicales que nosotras. No pensaron que la pareja necesitara de la convivencia. "
Se plantearon nuevas formas de organización de la vida en común, no estructuradas :¡¡
•: 1
ni por la familia ni por la pareja. Inventaron las comunas como forma de organización ·\
de la sociedad, buscando evitar que prevaleciera la perversión -así la calificaban ;!~.
"
ellas- causada por las familias y las parejas tradicionales. J:·
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63 .,:m:
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...,
Claves feministas para la n egociación en el amor
Que el amor sea amistad

O tra defensora del amor libre, y una de nuestras ancestras feministas más
importantes, fue Mary Wollstonecraft. En 1792, hace casi dos siglos, publicó una de las
obras clásicas del feminismo, Vindicación de los derechos de las mujeres. Del libro de
esta extraordinaria mujer, que usaba corsé y polizón -nada que ver con ninguna de
nosotras- es esta cita revolucionaria: El amor debe ser, por su naturaleza misma,
transitorio. Buscar un secreto que lo convierta en constante sería una búsqueda tan
insensata como la de la piedra filosofal o la de la gran panacea. Y el descubrimiento sería
igualmente inútil, o mejor dicho, pernicioso para la raza humana. El vínculo más sagrado
de la sociedad es la amistad.
Esta lúcida mujer estableció la crítica del amor como propiedad privada de las
personas , e imaginó que la amistad podría sustituir esa forma de amor, que
consideraba perversa. Hoy, dos siglos después, pensamos, como ella, que es
posible renovar el amor con muchos de los atributos que se le asignan a la amistad,
preservando a la vez esos elementos fascinantes que configuran la experiencia del
.'
amor, caracterizada por una conmoción por otra persona, conmoc1on que, por.
cierto, también se da en la experiencia de la amistad.
Otra escritora moderna que también pueden leer, y que relata su compleja vida
amorosa, es Ana"is Nin. Es apasionante leer su diario, publicado en siete tomos y que
abarca más de cincuenta años de su vida. Es uno de los textos más extraordinarios
escritos por una moderna. Emancipada. libertaria. innovadora y pionera, esta mujer
nos ha legado un texto extraordinario para entender los procesos subjetivos de una
mujer que está inventando cómo ser libre. No sólo cómo se proclama que se es
libre. sino cómo se es libre. cómo se vive en libertad .
,
Todas sintetizamos formas históricas del amor
H e tratado de hacer un breve recorrido por diferentes formas históricas del amor
en Occidente . Para que entendamos que el amor no ha sido idéntico siempre, que
en sus formas históricas existen diferencias de género. de edad, de generación, de
cultura. Y para que entendamos también que nosotras. las mujeres contemporáneas.
sintetizamos en nuestras vidas estas diferentes tradiciones históricas.
Unas hemos vivido más experiencias románticas, a otras les tocó vivir experiencias
cortesanas, otras han tenido experiencias al estilo burgués, y casi todas estamos
viviendo una mezcla total.
Mi hipótesis es que la subjetividad amorosa de las mujeres es una síntesis de todas

las formas del amor que resultan en una mezcla única en cada una de nosotras,
distinta la de una a la de la otra. aunque siempre con problemáticas comunes y
compartidas.
64
Cada una de nosotras. mujeres actuales. encarnamos experiencias históricas que
vienen de muy lejos en el pasado. y a la vez estamos tratando de innovar nuestras
experiencias amorosas.
En cada una conviven

diversas formas de ser mujer
D arnos cuenta de esta diversidad sincrética en cada una nos puede ayudar
mucho a entender lo que vivimos: actitudes que creíamos cambiadas y superadas y
que vuelven a aparecer, ideas que vienen de no sabemos dónde. contradicciones
entre lo que ya sabemos y tendencias del pasado que se nos imponen o que nos
imponen ... En la cultura, en las ideologías del amor. funcionales a nuestra época. y
en la educación amorosa que hemos recibido: en todo vivimos un sincretismo. y ese
sincretismo nos lo complejiza todo.
A nosotras se nos fomentan cada día todas las formas del amor. Vas a ver una
película y te encanta la historia de una mujer que vive el amor libre y hace y dice y
torna. Llegas a tu casa y prendes la telenovela y lloras con la tragedia de una mujer :
...
.
..:..:
que muere por el amor de su vida. A la noche escoges para leer una novela y el •:;¡:
,¡•:
....
romanticismo del Romeo y de la Julieta que allí aparecen te fascina. Para descansar :·,
,; i:f!
..
,;~;_t
pones música y oyes cantar: "Quiero ser tu esclava y darte todo lo que me pidas" ... •;t
; ; !¡,
':l'.
Eso, sólo en cuanto a los insumos culturales. que no son los que hacen la vida real.
En la vida real. son muchísimas las estructuras sociales que nos condicionan en la
pareja y en la familia. Vamos viviendo la vida y resolviéndola -o no resolviéndola-
con todo este imaginario, con deseos y anhelos de cambiar, pero siempre
circunstanciadas.
El recorrido histórico es un camino para ponerle nombre a nuestras experiencias.

Hay otros caminos . Hay un libro muy bonitc para aquellas a las que les gusta más ..
trabajar con lo simbólico que con lo histórico.
..
65
\.. ,1
;, ' • • . , .•,:. t'
Claves fe1ninístas para la negociación en el amor
..... .,
Ella toma los perfiles de las diosas de la antigüedad clásica y los valores
arquetípicos que representaron. A partir de ahí configura las formas del amor. no en
d; la historia sino en estos arquetipos. Y habla de las mujeres Afrodita. que son las que
.,
·. . . •'
:~ '' viven el amor pasión. Y de las mujeres Hera, que son las de la familia y el mundo
·~ doméstico.
f:'' ' .•
e
Y así. va repasando a las diosas para concluir algo muy parecido a lo que hemos
planteado en nuestro recorrido histórico: cada mujer es la síntesis de diversas
formas de ser mujer. de diversas identidades femeninas. Al hacer su autoconciencia.
.
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li'. 1'
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cada una puede descubrir con qué diosas de la antigüedad se identifica más y puede
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perfilar su identidad femenina de la mano de las diosas clásicas .
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Claves feministas paca la negociación en el an1or
Entre mito y realidad: una continua frustración
E n las relaciones que las mujeres establecen con sus parejas, y también en las
relaciones que los hombres establecen con las mujeres, existe siempre un conflicto,
que puede llegar a definir la vida de la pareja. Es el conflicto entre el mito y la
realidad. Aunque pocas veces le ponemos este nombre o percibimos así este
. . ,. ' ;
conflicto, éste se produce porque la mayor parte de las mujeres cultivamos una
' 's '
'>;
>; '" < mitología amorosa como pieza fundamental de nuestra concepción del mundo.
. ., .:·:•
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El conflicto entre mito amoroso y realidad amorosa es de carácter cultural y social.
;¡![''<>? • •
'Yf!~ . : La sociedad fomenta activamente entre las mujeres una mitología amorosa. Se nos
fomenta un tipo de imaginería amorosa profundamente idealista, que a veces
.
defendemos a toda costa, como parte esencial de nuestra experiencia amorosa. Al
........ estar viviendo un amor, o al no vivirlo, en la imaginación. en los anhelos, en los
'
¡::::
¡¡ ::
: ! ¿: sueños de las mujeres están presentes los mitos amorosos aprendidos, que son los
...
¡•. '.
',. que organizan el deseo profundo de encontrar a un otro o a una otra.

'.
Aunque no nos demos cuenta, estos mitos juegan en contra de las relaciones reales.
Actúan tensionando las relaciones. Y el resultado más frecuente del conflicto entre el
mito y la realidad es la frustración. Entre muchísimas mujeres es muy frecuente la
experiencia de la contradicción entre lo que anhelan y lo que viven. Y eso que anhelan
está frecuentemente marcado por los mitos amorosos aprendidos. Una clave muy
importante para poder negociar en el amor es identificar cuáles son nuestros mitos
amorosos. Todas los tenemos. No se trata sólo de la debilidad de algunas mujeres, es
una realidad colectiva.
,·
Todos los mitos aparecen como creencias, y con frecuencia no tenemos idea de cuál
es la distancia entre el mito y la realidad posible. Y por eso, una fuente de continua
frustración está en confundir lo que debe ser con lo que es. Otra fuente de
frustración está en comparar a la persona amada con la persona amada en el mito.
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68
❖,·~thl '.
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·=C.\l.
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Dta. Marce la Laga rde
Y ahí nadie pasa la prueba. Otra fuente de frustración es aún más grave porque !
golpea nuestra autoestima: nosotras tampoco pasamos la prueba al comparamos •
con la amante que quisiéramos ser en nuestro mito.
Cuando las mujeres contamos nuestros amores y nuestros desamores. vamos t".
permanentemente de lo que sucede a lo que debería suceder. No hacemos diferencia i ti
" ~
ni mediación. Y no se trata sólo de un problema de nuestro discurso. es un problema ·¡ ~
de la experiencia subjetiva. Este ir y venir de la realidad al mito está muy presente en . ..
.
,; ; .l.':;
,.'.'Sh;::-·, .. •
la subjetividad de una mayoría de mujeres. .•.•::,,,a:··...
\l!:;/ ;
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; !;,."·,,:.-• '!Í!!fi
i ,... "' •.• ~~t
::1:::nh~.~::~~J
Inventario de fantasías ~ . ·~~::1J:' •I '\ ~11:
.. ~:. . ~:f;.;.. •
L os mitos se nos presentan ya organizados en historias que conocemos. en

leyendas que escuchamos. en literatura que leemos. También se nos presentan
i ··f:'. l.lll;k •' ~- 1/
¡¡ _;:; ·if;f • • '"
organizados como fantasías. Las fantasías amorosas son muy diversas. Sería :¡; i;;,i;~¡!íl, ·•·
interesante que cada una hicier~ ~n pequeño inventario de sus fantasías. por~ue una :¡ ·w: · _- ,...,.,,:;,.;
manera de enfrentar la problemat,ca del amor, es darnos cuenta de las fantas,as que :¡ ,,.. ., .;;,/,,~)
tenemos sobre el amor. Es importante que las escribamos y que relatemos qué es l :··t ••,..~ ,: :·•.Jis~'
lo que sucede en nuestras fantasías, para que podamos distanciarnos de ellas.
~ !~
'.í-
Es un buen ejercicio preguntarnos cuál es en este momento de mi vida mi fantasía :i1
amorosa. Podemos también analizar nuestras fantasías en las diferentes etapas de !t
la vida: cuáles eran mis fantasías amorosas cuando era chiquita, en la pubertad, en la L
adolescencia ... Y así sucesivamente. ¿Cambiaron o no cambiaron? Podemos ir :·
conociéndonos mejor si sabemos seguir en nuestra subjetividad el hilo finísimo de la ;/i .
..'
mítica. ¿Cómo se reconocen las fantasías? Son relatos. Una se imagina cosas que J:'"
suceden, y esas cosas se encadenan, forman parte de una historia. En la historia :i/·
está el personaje, la personaja, los personajes centrales, el acontecimiento, el hecho /r.
amoroso, la tra~a, el _desenlace ... ¿Qué tipo de acontecimi_entos amorosos llenan ;/; .,,;;ililij:~;¡¡~:::;._
nuestras fantas,as, que papel Jugamos nosotras en ellas, que papel les damos a los :;. , ¡¡J,fül? •
demás. y hacia dónde queremos llegar con nuestras fantasías? j¡¡ •Wi~T. ..,
..,
• ;; 1
·•· . . .. .
•ii
j
Aprender a leer nuestras fantasías :,
... 1
.•:.,¡'1i¡ . '
A I analizar nuestras fantasías podemos descubrir cuáles son algunos de nuestros ·J/
'
deseos amorosos inconscientes. Este análisis es una vía de acceso al inconsciente, /.
que se expresa en fantasías conscientes. Hay que aprender a leer las fantasías, que fa
1
nos dicen muchas cosas de nosotras mismas. aunque nunca nos lo dicen todo. T
porque siempre niegan y ocultan algo. Y tenemos que saber qué es lo que niegan y i~
qué es lo que ocultan .
:A
•• /J
I •:.
!f ' •
Este no es un simple ejercicio teórico. Analizar nuestras fantasías y distanciarnos de :W

•. l •
ellas nos puede ayudar a no vivir desilusiones. Mientras más fantaseamos. más '){'
grandes serán las desilusiones. i¼
;:·
:;.
69
Claves femirústas para la negociación en el amor
Desilusión quiere decir eso: la pérdida de una ilusión, de algo iluso, de algo no tan-
gible que está sólo en el imaginario. Reconocer que las fantasías son eso, fantasías,
nos puede ayudar muchísimo a separar lo que vivimos en nuestras relaciones de lo
que nos imaginamos como realidades.
Las fantasías tienen alguna utilidad positiva. Muchas mujeres sobreviven a

situaciones de enorme dureza en sus relaciones de pareja ayudadas de las fantasías.
Sin embargo, mantenerse fantaseando impide enfrentar las relaciones reales. Nos
paraliza. Porque la fantasía produce una satisfacción imaginaria que permite saciar la
sed amorosa que no se sacia en la vida cotidiana. O al menos. hace que la sed real
no nos sea tan agobiante. Pero si no nos decidimos a abordar el origen de esa sed,
cada aterrizada en la realidad será cada vez más frustrante, porque la realidad será
cada vez más distante de la fantasía.
Las mujeres que fantasean mucho se van volviendo expertas. Cada vez sus
fantasías tienen más calidad, y cada vez su realidad se deteriora más. Hay una
relación inversamente proporcional entre la capacidad de fantasear más y mejor y el
deterioro de las condiciones reales de las relaciones amorosas. Las fantasías
repercuten siempre en la calidad de las relaciones de pareja en las que estamos
inmersas. Y hasta pueden repercutir en la imposibilidad de encontrar pareja, porque
la fantasía se va haciendo tan grande que nadie se parece al ser fantasioso que vive
en nuestra imaginación y todos los que encontramos quedan descalificados .
Desilusión, desencanto, infelicidad

A demás de identificar las fantasías y de diferenciarlas de la realidad, sería
importante transformarlas y no convertirlas en placebos para poder vivir. Podríamos
transformarlas haciendo con ellas literatura, cuentos , ensayos, historias, poesía,
canciones , coreografías para bailar... Debemos aprender a transformar la fantasía,
que es un recurso de la subjetividad, en otro producto de nuestras capacidades.
Debemos renunciar a usar nuestra capacidad fantástica como un sustituto de una
realidad en la que no encontramos ni beneficios ni gratificación.
Si desarrollamos un proceso de autoconciencia, podremos desarrollar mejores

relaciones y mejorar la calidad de nuestro amor. Y también podremos transformar
nuestras fantasías. Un proceso de autoconciencia en serio nos llevará a enfrentar
experiencias de desilusión. Muchas mujeres no quieren hacer este proceso:
"Después de esto, ¿en qué voy a creer?" , dicen. Pues tendremos que empezar a
dejar de creer, a tener una mejor relación con el mundo real. a tener un mejor
análisis de la realidad. Junto a la desilusión, muchas mujeres viven el desencanto. El
\ desencanto sólo sobreviene después del encanto. Una no puede desencantarse si
!: antes no ha estado encantada. El desencanto es una de las experiencias más presentes
:1:c en la vida amorosa de las mujeres y está en relación con los mitos y las fantasías.
70
,a.
••
Otro fenómeno en relación con la contradicción mito-realidad, fantasía-realidad es la '; .. d\\\ifi1i'
·'." ~l'~t~;
' :/!/'::~
infelicidad. Aferrarse a los mitos conduce a la infelicidad. A menudo, el sentido de la

felicid~d de cada quie~ está definid~ en sus ~r~pios mitos. Si estamos dominad~s :~ . ••••••
por mitos, como los mitos no se realizan, la felicidad no llega nunca. La clave estana ir
en cambiar la fuente de la felicidad. Y en vez de tener como fuente generadora del ii
sentido de la felicidad toda una mitología, construir una concepción realista de la '
vida, del amor, de las relaciones de pareja, y adaptar esa concepción a lo posible. A
lo asequible, a aquello que sí está al alcance de la mano y en el horizonte posible. !
Distanciar la felicidad de la fantasía y colocarla en una visión realista nos ayudaría \
muchísimo a definir nuestro sentido personal de la felicidad, , y a dejar de estar ::
subordinadas a visiones idealizadas sobre la felicidad. Esta es una clave !
fundamental para mejorar la vida y las relaciones de pareja. ' )l'a'I!,;'
La envidia
Quien tiene problemas de frustración amorosa, quien experimenta un constante
desamor de pareja, y para superarlo se refugia en las fantasías, siente una gran }
I
'
envidia de las personas que sí realizan en su vida los amores posibles.
•
La envidia nos impide congratularnos con las personas que a nuestro alrededor ~
están contentas, gozan del amor y se quieren, y nos lleva a expresar hostilidad hacia f
el amor de los demás. Una vía de entrada para identificar dónde andamos en el ·:
terreno de las fantasías es preguntarnos qué tan envidiosas nos sentimos del amor '!
que viven otras personas. Hay gente que hasta le da coraje que haya gente que se ,¡: . •
ame, o se siente incómoda entre personas que se aman. o está más dispuesta a oír ;¡
'
tragedias amorosas que a escuchar éxitos amorosos. Busquen por ahí, porque estar ¡i
envidiando el amor que viven otras y ser incapaces de disfrutar y compartirlo es un ;: •
.'
índice de que mantenemos un exceso de fantasía y de mitos. t
Siempre ando en pos de parejas que viven realmente el amor. Las busco con ¡i
microscopio y con telescopio ... y las encuentro. Como buenas investigadoras de la t
vida. necesitamos averiguar. preguntarnos y preguntarles. A veces tenemos un 1h
interés morboso por preguntar sobre los conflictos, pero no un interés similar por .j
indagar cómo es la historia de amor de otras personas. ·~!lll- 0
.,:-;- ""'""'
..• ::, v~:

.: }·t
. ,,. -,~t
.tt
Cuando somos hostiles y envidiosas ante quienes viven el amor, perdemos mucho: ;. . \ ' .
dejamos de aprender del amor de otras personas. Una fuente de aprendizaje del r • '. al!
amor lo podemos encontrar en las personas de carne y hueso que se aman. Sin !; llli!l'I<
embargo, como a veces nos dominan la competencia y la rivalidad, no prestamos i .: ,..
' . ,.
atención a lo que podría ser aprendizaje -qué hacen, de qué se trata, qué los :: •\
ha conducido a amarse de esa manera- y desperdiciamos la oportunidad de ¡ ,
beneficiarnos de ese hecho pedagógico amoroso que es la experiencia del amor f
vivido por otras personas. En las historias de amor que funcionan bien hay muy poco :¡
o casi nada de mitos. Esos amores nada tienen que ver con los mitos ideales y ¡
mucho tienen que ver con los pactos terrenales. Tienen que ver, sobre todo, con la i:
sabiduría para la vida, con la capacidad de elegir a personas para amarlas y la j~
capacidad de elegir a personas para que nos amen, capacidades afectivas que todas -~
necesitamos desarrollar.
71
Claves fen1inístas para la negociació n en el amor
. El patriarcado ha muerto
.
.
,,,.• J
~~~y•··~!'.;'. '
·~HH/W~J:, .
• ,, ·••·A\""•·· i,: -- ;;;r
M uchas consideramos entrañables nuestras fantasías, pero sólo eli minándolas
empezaremos a movilizar energías para mejorar nuestras relaciones. Si
ii:.-;"'r.1·''- •::.
- •
- .....::·::':
i..c' ¡;•;
~::
transformarmos la energía que usamos para fantasear superaremos enormes

frustraciones. Pensando macrosocialmente: si las mujeres dejáramos de fantasear
tanto. ya le hubiésemos puesto un "hasta aquí" a muchísimos hombres. Como política
amorosa. nos urge a las mujeres convocarnos a dejar de fantasear. convocarnos a la
realidad. Y movilizarnos por hacer vivible la realidad, la realidad íntima, la de las
relaciones personales, esa realidad en la que está involucrado el amor.
El patriarcado durará hasta que las mujeres lo sostengamos con nuestras fantasías.
La duración del patriarcado es directamente proporcional a nuestras fantasías
. patriarcales . Hace unos cuatro años. las feministas italianas lanzaron una proclama
.i '. que dio la vuelta al mundo, titulada El patriarcado ha muerto. que es ya un texto
..' histórico del feminismo actual.
t
1::
: 1'.
•i:
No querían ellas decir que el patriarcado ha muerto en las relaciones sociales o que ya
...
:¡¡;
.''··1::
r.
no vivamos en un mundo patriarcal. Lo que estas feministas dijeron es que para
·'[ millones de mujeres en el mundo el patriarcado ya no es legítimo. que existe ya un
~,;
,..;:,
;:
desconocimiento y un rechazo al patriarcado. Con esta convicción. somos millones las
:,<;, ...
mujeres las que nos movilizamos contra el patriarcado, desautorizándolo,
deslegitimándolo, rechazándolo, expresando que no tiene nuestro consenso.
,
Quisiera traducir esta consigna macrosocial, El patriarcado ha muerto, a la

e,
" subjetividad de cada una: el patriarcado vive en mí, si yo lo alimento en mis fantasías.
!'
.....,. Esto significa , que el primer territorio a expropiarle al patriarcado es nuestra propia
:1·..
llt:·
,., subjetividad. Esta es una política feminista del amor. ¿Cómo expropiar al patriarcado
I.,.
....
'
de mi subjetividad? Apropiándomela. ¿Cómo? No haciéndole el juego a los mitos

patriarcales. que me hacen un daño terrible a mí y colectivamente se lo hacen a
,
muchas mujeres.
.,.."
...,:
;
I"
'. '
¡¡;,
Primera condición:
..
¡ .•
....
,
un compromiso con nosotras mismas
,¡
.::
...
.... A las mujeres modernas. que somos sincréticas. los mitos y las fantasías
lit...... patriarcales nos hacen un daño mucho mayor. Porque bastantes de nosotras estamos
. muy comprometidas con la causa de las mujeres, con causas populares. con causas
·•:- ..
. sociales .
Y vivimos una contradicción cuando hacemos grandes esfuerzos transformadores en
todos estos espacios. mientras mantenemos intacta una fidelidad interna al patriarcado.
• Esta fidelidad es subjetiva. afectiva, intelectual. en las relaciones personales. en el amor,
en la sexualidad y en la intimidad de cada una.
72
1
Para las mujeres modernas sincréticas resulta urgente poner en sintonía nue~tro ~,, ,, _¡,,~~~~~:ij" •
compromiso vital con otras causas con un compromiso vital con nosotras mismas . Ese ~ ¡,-:,1~·¡;¡¡, ;ii;
es el compromiso que cada mujer necesita construir. Un compromiso consigo misma ;: t-"
es la primera clave para la negociación en el amor. ? ..
Es fundamental saber que no hay ninguna posibilidad de negociación si estamos ',

colocadas en el cautiverio patriarcal. Las cautivas no negocian. están sometidas . ¡
Estar cautiva es el resultado de ser construidas en el mundo patriarcal. Estamos en '.
el cautiverio y al mismo tiempo . estamos embelesadas por el cautiverio . Cautivadas :
por el cautiverio. Es en el terreno del amor donde mejor se expresa el encantamiento •
de las mujeres en torno a valores. preceptos y mitos que son patriarcales.
Una primera condición para poder negociar en el amor es que cada una de nosotras ; -'..
,
haga un compromiso consigo misma antes que con nadie. Ese es el primordial
:! ·~ .
~j ir • 3
·_. ,
compromiso de vida: un compromiso de vida conmigo misma. Cada una consigo ¡: . ,.!l.,,
misma. El compromiso vital de cada mujer consigo misma rompe el núcleo duro del ':; / 2 ;;¡
patriarcado, significa una ruptura profunda con el patriarcado. Y esto porque,
patriarcalmente. el compromiso de las mujeres ha sido siempre con los demás.
considerados por ellas siempre más importantes que ellas mismas.
:g
Cambiar de sujeto en el compromiso va eliminándole consenso al patriarcado. Y eso f
nos permite ir saliendo del cautiverio. Después ya podremos emprender el camino i!
para definirnos como negociadoras en el amor. Pero. antes de descautivamos no hay .:"
negociación . Si una está sujeta a las normas. deseos y voluntad de los otros, no ';
puede negociar. Cuando una asume un compromiso primordial consigo misma. \'
significa que se prioriza ante a los otros. Ser negociadora implica tener condición :f
para negociar. Y la primera condición es tener voz propia, deseos propios y anhelos /
propios. :
~;
•l:"'"
'
Enamorarse: una conmoción vital
R esulta de enorme importancia identificar las diferencias entre el enamoramiento y ,¡.
el amor. Para muchas mujeres, el ideal es mantenerse enamoradas siempre, conservar l· ;¡..,,. .
el estado de enamoramiento. La experiencia del enamoramiento es uno de los más Jt , ; ~ : t
importantes mitos del amor y hacer eterno el enamoramiento es una de las fantasías :'. ) 40 "
• ,.i:.~
más recurrentes de las mujeres.
Es fantasía porque el enamoramiento es finito, temporal, tiene un inicio, un proceso :;

y un final. Concluye. ¿ Y después del enamoramiento, qué? O todo se acaba o
.•• ' ' ...,·'
t ;••.,
••
desemboca en una buena amistad o en una mala amistad o en una relación \ ',i,r, • .
:1 • • ' •••
cualquiera o puede ser que los dos procedan a internarse en el amor, que es otra Y
cosa distinta del enamoramiento. A veces el enamoramiento conduce al amor, pero ¡. •
no siempre, realidad que provoca una gran desilusión en muchas personas . También :~!'
es un mito que el enamoramiento sea un estado perfecto. !f¡¡
;¡
H
73 !b
Es más bien un estado de crispación y de tensión extraordinaria, por decir lo menos.

... .
Y es también. hay que reconocerlo. un conjunto de experiencias muy gratas. Por
. eso, los poetas y las poetisas han hablado tan bellamente de esta experiencia .
"'" '
1:~;,t
'" "' El enamoramiento es una experiencia de conmoción extraordinaria por otra persona.
Esto es lo que la caracteriza: una conmoción que a veces alcanza grados integrales.
Toda la persona queda conmovida: corporalmente. subjetivamente. en su manera de
vivir, en sus otras relaciones. Todo queda tocado por la conmoción que nos produce el
encuentro con ese otro ser que nos conmueve.
Una experiencia fascinante

E sta conmoción produce un ansia, un hambre de la otra persona. En términos
inconscientes, es un deseo de fusión: deseo fundirme con el otro ser y que el otro
ser se funda conmigo. El enamoramiento produce una pérdida parcial del yo, del
sentido del mí misma, que se manifiesta de muchísimas maneras. La pérdida se
siente como algo positivo porque el goce está precisamente en la pérdida de límites.
en esa pérdida de los poquitos límites que a las mujeres nos quedan, si es que
tenemos alguno... Lograr tener una vivencia de pérdida de límites que sea legítima
social y culturalmente y que esté muy valorada por los demás es para las mujeres un
estado maravilloso.
s"•
?.tt, ..
•..
¿Qué parte del yo se pierde? Se pierde todo lo que nos aleja del ser amado. A veces
,.
se pierde el interés en el trabajo. que hasta el día anterior era muy grande. O se pierde
el entusiasmo por una causa política o el deseo de ocuparte de tu casa. Lo único que
quieres es salir corriendo a encontrarte con el ser amado. Todo lo que te aleja del otro
pierde interés y todo lo que te acerca adquiere interés. En M éxico, muchas mujeres se
han vuelto aficionadas a los toros. al fútbol y hasta al boxeo. porque a su amor
le gustan el boxeo, el fútbol y los toros. Porque enamorarse es buscar la misma - • 1
sintonía. Una sintonía que es erotizante y sensual y que llega a ser también intelectual
y afectiva.
A la par de la pérdida del yo, y cuando el enamoramiento es recíproco. se

experimenta una magnificación del yo. El yo se pierde y se encuentra al mismo
tiempo. Experimentamos un yo exagerado. una vivencia de gran aprecio por una
.,,1, misma. Los afectos positivos hacia una misma y de autovaloración de una misma se
:t.. •
:¡¡- despliegan. El enamoramiento siempre está ligado al alza de la autoestima.

';' Enamorarse y que se enamoren de ellas es. especialmente para las mujeres. una
t fuente esencial de valoración social y personal.
"
74
En el enamoramiento el yo resplandece. Hasta brillan más los ojos. la piel y el pelo. ;;

Enamorarse tiene efectos corporales. Porque el enamoramiento es erotismo, es una :i
experiencia erótica en acto. El enamoramiento es una experiencia de vida, es una } J
exaltación de la vida. Y de la sensualidad. Cuando nos enamoramos, se abren todos :¡ t1ú:'J}-':c'"-'",,:
los sentidos y miramos de otra forma y escuchamos de otra forma, y nos encanta la :~
¡(•¡fé¡,;,\8\':," ~-,:,~
música. y somos capaces de apreciar una pintura en la que nunca nos habíamos ••· -c·'c:i,,i,:,;e .•,.":--\
fijado ... Todos los sentidos se abren al goce, al disfrute, al placer. Por eso. ! Íll!k.l.
encontrarnos con alguien que nos conmueva hasta enamorarnos es una experiencia ~
tan fascinante.
El enamoramiento en los hombres , ,d :'•,c •
L as dimensiones gozosas, vitalizadoras y maravillosas del enamoramiento no f ¡,¡,,~:--,~-"'.i,_v.;,;••."·,"',_f ~,:•<

_','¡'I:,_
1i
deben ocultarnos su otra dimensión: el enamoramiento se orienta socialmente a J

mantener a las mujeres como seres adheridas a los hombres. Éste es el aspecto :• ~
más perverso de esta relación única entre las personas. El primer drama del :: [,- ,,a • • '.,ai. --.,_"•·-
enamoramiento es que termina. Pero nunca termina igual para las mujeres que para • 1ry~_
los hombres. En un tipo de mujeres tradicionales nunca termina.
·, ·::,¡¡¡;¡
'
Y nunca puede transitar hacia el amor. En esta forma de enamorarse se refleja una '/
impotencia amorosa, que es fuente de gran infelicidad. Mantenerse permanente- i¡_
mente enamorada impide evolucionar al amor. En nuestras sociedades, donde el :~ • ."
patriarcado no ha muerto, los hombres. como sujetos amorosos, han sido construidos :i
de tal forma que para ellos el enamoramiento se acaba, pronto tiene un fin. Y se acaba ', ; '
un día concreto y a las cuatro de la tarde. El minuto anterior todo era pasión ;~
encendida y en el minuto que sigue la pasión se apagó. ¿Qué sucede? Que en la mayor ., ·:i .
.,..
parte de los hombres el enamoramiento es una experiencia que se hace insostenible y ! .

el yo se cierra y todo termina. Esta reacción es producto de la configuración subjetiva }
'
de género, de la conformación de la identidad masculina y, desde luego, del lugar de :'
supremacía y privilegio que los hombres tienen en las relaciones amorosas. 'rn
;~
¿Qué causa este contraste, construido culturalmente, de mujeres siempre enamoradas ,?i_"
y de hombres que se desenamoran tan fácilmente? Millones de mujeres deseando esa ;.
pérdida del yo, con anhelo de fusión eterna, con una parte del yo perdida en un otro ;
-~
que colocan en el centro de su subjetividad, relacionadas con millones de hombres que ¡r-·
terminaron ese proceso hace mucho. Esta relación es funcional al sistema patriarcal y +~
permite mantener la dependencia amorosa de las mujeres.
Hombres enamorados, mujeres enamoradas

E n las mujeres, el enamoramiento clásico tiene como consecuencia que el amado t ,.
queda instalado en el centro de la propia subjetividad como sujeto del amor. lo que ¡
quiere decir como sujeto de la vida. Por eso tantas autoras han hablado de las J· . --
mujeres como "seres habitadas", como "seres colonizadas". '/:
il
75 "
Si el ser amado queda colocado en el centro de la vida. ¿dónde queda lo que queda
del yo? Queda en un rinconcito de la propia subjetividad. El amor nos vuelve marginales
a nuestro propio ser y a nuestra subjetividad. La prioridad la tiene el otro. nuestro
sentido de la vida queda ligado rotundamente al otro. haga lo que haga. nos ame o no
nos ame. esté presente o se haya ido hace cuarenta años a comprar cigarros ...
Abundan las historias de mujeres que durante años. durante toda una vida. siguen
esperar-ido al hombre que se fue. viven velando el fantasma del hombre que un día
instalaron en el centro de su vida. Aunque ya no esté con ellas siguen fundidas con él.
En el enamoramiento existen diferencias de género. Quien tiene la supremacía en el

enamoramiento -sea el hombre o la mujer-. quien tiene mayores poderes vitales.
mayor rango. más bienes. más prestigio, más fama. más aprobación social.
quien tiene los poderes sociales de su lado. lo que vive al enamorarse es
fundamentalmente su propia exaltación. En el amor. más que estar fascinado por la
otra persona. quien domina está fascinado por sí mismo. La persona amada no es
más que un espejo para mirarse y sentirse extraordinario. En algunas corrientes
sicológicas. esta experiencia se ha vinculado con el narcisismo.
Enamoradas: marginadas de sí mismas;

Enamorados: fascinados por sí mismos
S ocialmente. culturalmente el enamoramiento ha sido construido para dar poder
a los hombres. Los hombres aguantan dos o tres días de pérdida del yo. una
semanita. un mes. pero muy pronto los hombres enamorados -construidos como
protagonistas de su vida y del mundo- sienten la necesidad de salirse de ese
éxtasis. de hacer algo para sí mismos. El enamoramiento se vuelve en ellos potencia
de autoestima. Es notable cómo los hombres. al enamorarse. mejoran siempre algo en
sus vidas: resuelven un conflicto que no habían resuelto, terminan un estudio que no
habían terminado, emprenden un negocio nuevo, deciden emigrar realizando el sueño
de irse a trabajar a otro país... Mejoran porque el eros del enamoramiento los
beneficia. Y los beneficios que obtienen marcan una diferencia de género muy
profunda en torno a quién tiene la supremacía en el enamoramiento.
Para quien está en condiciones de supeditación y debilidad. sometida al seguimiento

de la otra persona. el eros del enamoramiento actúa movilizándola hacia la fusión con
el otro. La perspectiva de género nos muestra que en la mayoría de las mujeres el
enamoramiento lo que hace es provocar la dádiva. Dar. dar, dar. Lo que busca la
.,., . -~· mujer enamorada en subordinación es el beneficio y el mejoramiento del otro. que el
.1; .. ~¡(: ·-:: ~¡.·i~\~:--T otro esté bien para que la ame. Es una dá~iva funcional: te doy par~ que me ames .
. ,"t!. . ·-~~:-~•:":.
·'>.·· •
'·
•: • .
y te doy porque no tengo. y porque solo necesito tenerte a t1. Culturalmente
,\O··· - '· estructurados. a la tercera tarde del enamoramiento ya le estamos haciendo al
i: hombre una riquísima ensalada. a la siguiente tarde ya es pasta con salsa. a la
i cuarta es pollo ...
76
Dra. Marcela I...agarde
D~spués es un regalito. después "si qu_ieres yo te cui,do a tus hijos esta tarde_". Y :; .·""'~~'L~j~,
as,: te doy, te hago, te doy. Esta actitud se acentua porque estamos social y -i~ ;~l\i~1;iEiíit1h\;
culturalmente en subordinación, y porqu~ hemos aprendido a relacionarnos dando .f Iil)f)i~-- "
cuidados. atenciones, apoyo solidario. Esa es la construcción de género de las :~ /
mujeres: ser educadas para apoyar solidariamente el desarrollo de los demás. • ••••
./· •••... -,
:~K •
IN\
t:[[
La dádiva voraz, la disposición al sacrificio -~ :• '~
D esde una perspectiva de género, el problema es que esta forma de :

enamoramiento reproduce desigualdades que existen en la sociedad entre quienes .
tienen supremacía y quienes no la tienen. Reproduce desigualdades y genera '
desigualdades, que atentan sobre todo contra quien está en subordinación. Más ,: :
: ....
~
das. menos intercambias: ésta es la regla de oro si en la relación estás subordinada. [!!
fusionada. Das y das y la otra persona más y más se retira . Y como esta reacción :;4
.,
no la entendemos, nos produce choques constantes entre los anhelos de amor que ¡¡,
tenemos. basados en los mitos. y la realidad que vivimos. Muchas mujeres dicen: •:
"No entiendo. cada vez le doy más y nada, ya no sé qué hacer, ya me hice la cirugía, :-
ya aprendí a cocinar. ya no salgo de mi casa ... " Das todo lo que quiere el otro. Y das t
cada vez más. porque el ansia de dádivas es voraz.
.,
Otra clave del enamoramiento ideológicamente construido para las mujeres es creer ¡,
que enamorarse exige sacrificarse. que el enamoramiento pasa por el autosacrificio. !;
Existe una ética sacrificial del amor en las mujeres que tiene como resultado que quien "¡
tiene la supremacía en la relación se desarrolla y usa el eros para sí, y que quien no -\¡
tiene la supremacía en la relación se sacrifica para afianzar la relación . La desigualdad
es cruel.
Nadie llega al amor en el vacío

L a subordinación. la dádiva y el sacrifico los viven las mujeres en la falsa }
creencia de que ellos están tan enamorados como ellas. La construcción ideológica ·¡1 : .. _
nos hace creer que como ambas personas están en una relación de enamoramiento ( .:,;,;.~r.:,r 1
están colocadas en igualdad de condiciones. Esa igualdad es falsa. :l· ·-:¡~
. ,,,:.
¡; · ·
, '
:· .
~~
,;}:: :;:,,,.,. !·, ;
r: ' ?,-.:~.,;::ti
Porque cada quien llega a la relación amorosa con toda su condición humana en el ,t ·M~~~''·
estado en que su condición humana está en el momento del encuentro. En su libro :,,;,
La polít ica sexual. considerado emblemático del feminismo en la segunda mitad del {.
siglo XX en Estados Unidos. dice Kate M illet, la gran feminista norteamericana: l: :'
-~
Nadie llega al coito en el vacío. Nadie. Cada quien llega al amor siendo quien es . Y ¡
''
ahí se posiciona. ~-
. .' '\
",~-
:i
,>
No estamos en condiciones de igualdad con los hombres. En términos generales. la -~
mayoría de las mujeres estamos en condiciones de subordinación y de inferioridad. f.
Aunque creamos que estamos en condiciones de igualdad. ¡'
77
,,
'
Aunque seamos mujeres poderosas -y lo somos muchas de nosotras porque

tenemos poderes personales. habilidades. capacidades. ocupamos un lugar en el
mundo-. estamos en desigualdad social, económica. jurídica y política ante ellos.
Esta desigualdad genérica nos marca a todas. aunque naturalmente de manera
diferente a cada una. Pero ninguna está exenta de la desigualdad social de género.
Ninguna.
Clase social, raza, edad, educación, belleza

S i además de pertenecer a un género subordinado, tenemos características de clase
de relativa desigualdad en relación con la persona con la que nos emparejamos, habrá
más desigualdad. En la moral antigua. se buscaba que en la pareja la mujer perteneciera
a un estrato social algo inferior al estrato del hombre. Se consideraba un valor que los
hombres tuvieran mejor posición económica que las mujeres. Y se argumentaba la
proveeduría masculina: como ellos iban a ser los proveedores, necesitaban tener un
nivel económico superior. Lo que se buscaba realmente era asegurar la desigualdad
económica de la mujer en la pareja. En la actualidad, ya hay mujeres que tienen mucha
mejor condición económica que sus parejas. pero permanecen supeditadas por la
condición de subordinación que han aprendido.
Si además de pertenecer a un género en desigualdad. perteneces a un grupo racial

estigmatizado o considerado inferior, y tu pareja es un hombre de un grupo o
condición racial que tiene supremacía, aumenta la desigualdad. En nuestros países.
r~E,.. que son tan racistas. cuenta no sólo la raza, sino las mismas tonalidades de la piel,
·-¡{.,.el color de los ojos y el tipo de pelo. Todo esto influye en la pareja ya constituida y
;m • también en la elección de la pareja.
Influye también la edad. Tanto en la antigüedad como en la actualidad se fomenta que

las mujeres sean de menos edad que los hombres. Esto asegura la dominación en
nombre de la experiencia de vida. La inexperiencia vital de las mujeres se valora porque
asegura el liderazgo interno en la pareja. En el sistema patriarcal son los hombres
quienes lideran las parejas, aunque las mujeres reciban a veces autoridades delegadas
por ellos.
En la desigualdad influye también la educación, la formación, la escolarización. la

~,cl,. capacitación, la especialización. y todo lo que tiene que ver con la formación ilustrada.
•',....
/ Ciertos modelos de pareja han buscado que las mujeres sean menos educadas que
.:: los hombres. Y durante generaciones las reglas de conyugalidad establecían parejas
T de hombres con educación y de mujeres sin educación. de hombres con carreras
.,. !: universitarias con mujeres con carreras técnicas o secretariales. de hombres titulados
:\ con mujeres no tituladas.
78
1
Dra. l\1arcela Lagarde
La belleza también juega a la hora de la desigualdad. Por eso, se oyen con tanta
frecuencia expresiones como éstas: " No importa que sea ignorante o que no tenga
dinero si es bonita". A la hora de consolidar la desigualdad, de reproducirla y de _/t
generarla se combinan muchos factores. Y en la selección de nuestra pareja hemos ;¡r
pasado o pasamos por estos perversísimos criterios de clase social, raza, edad, ¡,.
educación o belleza, que son tan tradicionales y tan patriarcales, tan poco .• ;·lT.
'5,,,.,.,
relacionados con los anhelos profundos que con el paso del tiempo vamos H "
descubriendo al preguntarnos lo que queremos de nuestra pareja. '
'
¿De qué nos enamoramos?

T ambién nos enamoramos porque se da una cierta química. Y es una realidad ¡ •
comprobable que las feromonas se alborotan. Sin embargo, el enamoramiento no es .¡; ·
espontáneo. Es explicable y muy simplemente: en un momento determinado de ·¡¡
nuestra vida encontramos a alguien que encaja en las representaciones simbólicas \¡ ,.
que hemos aprendido. O sucede que ese alguien está allí en el momento justo en !Lf•n-.,~ .. t•1 ·~
que necesitamos, por carencia, encontrarnos con otra persona. O el momento de j f'; ••• ·''
nuestra vida en el que estamos nos permite reconocer en ese alguien los atributos .¡ :-:·~•"·· ..,~, :~: •lf:,
que identificamos como merecedores de amor. ·, :, ~,¡ .~·:-,;r,~~\I
. • ;~ -~{l!
Mientras más confundamos estereotipos formales aprendidos con valores personales, ¡; ·f ,•'.'~¡~~j:~I
menos capacidad tendremos de identificar las cualidades reales de las personas. ( ''llil¡;¡,:, ·
Seguiremos el estereotipo y después de un tiempo más o menos largo descubriremos :¡ ,
"t
-.::•··. •:x ,'-.
1!
que nada tenía que ver con lo que queríamos. Hay quien se enamora del carro de un
hombre, porque lleva años soñando que le encantaría enamorarse de un hombre con un
carro magnífico. Hay quien se enamora de un hombre porque se parece al hombre
Marlboro ...
'I·
:1
Y hay quien se enamora de alguien que luzca tan macho como Arnold ¡¡
.,
Schwartzenegger en sus películas ... El colmq es que nos han enseñado a admirar en :. • '<•·•'·
los hombres sus atributos machistas. Y han hecho que nos enamoremos de esos ijl
atributos. Cantidad de mujeres se enamoran de hombres porque discuten muy bien 'i¡¡
y siempre ganan . "Me gusta porque hace polvo a quien se le pone enfrente" . ¿De :,
·'
qué nos enamoramos? Me parece importante que revisemos los atributos que ~
••
consideramos amables y que nos atraen en los hombres, porque muy a menudo son :!'.,
atributos que nos pueden conducir a nosotras mismas a situaciones lamentables. ;:
Por muchos factores, el enamoramiento, además de ser un estado de !.·1
transfiguración, es un estado de distorsión de la realidad que puede resultar j
peligroso. Cuando estamos enamoradas, los pequeñitos parecen gigantes y los ·¡
ordinarios parecen extraordinarios. Hay un conjunto de procesos mentales y !,
corporales en los que se magnifican unas cosas y se minimizan otras. Por eso, lo J
"
mejor que nos puede pasar es desenamorarnos. ;i
.;:: •
79
Claves feministas para la negociación en el an1o r
Desenamorarse:
recuperar el sentido de la realidad
e uando nos des-enamoramos, lo primero que aparecen son los defectos que
negamos durante el enamoramiento. Esos defectos ya no aparecen chiquitos y
reducidos, sino magnificados, se vuelven gigantes . La persona adorada se vuelve
detestable, quien era reconocido y valorado ya no vale la pena. Le damos totalmente
la vuelta a la tortilla.
De esta lucidez no debemos hacer una tragedia. Una clave muy importante para salir
del enamoramiento, y para poder iniciar el amor y negociar en las relaciones de amor,
es tener capacidad de humor. Sin humor no llegamos ni a la esquina. Humor en el
sentido de eliminar de nuestras vidas el romanticismo trágico y de introducir un
análisis que nos permita de vez en cuando reírnos a carcajadas de las necedades
que el amor nos ha hecho ir haciendo por la vida.
Es fundamental ubicar la cantidad de problemas a los que nos conduce el estado del
enamoramiento. Si yo le dijera a cualquier enamorada: lo que más te deseo es que
salgas del enamoramiento para que ingreses al amor, se molestaría. Y no debía
molestarse. Una condición importante para el amor es poder recuperar el principio de
realidad . Necesitamos recuperar el sentido de realidad, el sentido del yo misma, que
es lo que perdemos en el enamoramiento al fundirnos con la persona amada.
Recuperar el cuerpo y el tiempo

:: e ómo se recupera el sentido del yo misma? No se trata de una tarea filosófica
sino de actitudes muy prácticas. Hay que recuperar el propio cuerpo. En el
enamoramiento el cuerpo está en el centro, porque todo es eros. Para muchas
mujeres esto significa descuido de sí mismas. En el enamoramiento todo son
excesos: se duerme poco, se come mal o se come de todo y con voracidad, se vive
de prisa y en tensión. Hay mujeres que pierden muelas, otras se enferman del
estómago, otras agarran gripes terribles... Y es que bajan las defensas y se
desatiende la salud. Millones de embarazos en este mundo se deben a la pérdida del
sentido de cuidado del propio cuerpo. Dar atención a la salud del cuerpo es
; - .•.: .·i:~. ~- ~:.
. "
.:::.
recuperar el sentido de la realidad.
~ r
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•1·•~:.·
;'·'· .•,;-..~ ...
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~j¡j ;i i_;. • ' " • ::fJ:; Recuperar el sentido de nosotras mismas significa también recuperar el tiempo. Al
lfrf\ ••~ijfü_ cesar el enamoramiento, hay mujeres que dicen : voy a descansar, voy a dormir, ya
lJ!ii11[t\ .;i\!!i: :W no voy a correr enloquecida. Tener sentido del propio tiempo es una clave para el
81~;, q,¡;¡t:•k_ ' amor. Mi tiempo y tu _tiempo: esta ~iferenciación _sólo aparece cuan~o apar~ce el
~.;r .. • • ,;;¡:\w.'fi·· ~
·• •• ♦ ,On ,,,
amor. En el enamoramiento no hay m1 tiempo y tu tiempo, no hay sentido del tiempo
• ··" ,.. propio.
80
Dra. Marcela l.,agarde
Muchísimas mujeres enamoradas derrochan su tiempo en espera del otro. Esperar ,.

que llegue, que te hable. que te diga, que te dé. Esperar. Y en la espera el tiempo se
paraliza . Incluso mujeres muy ocupadas y muy activas derrochan su tiempo sin
medida con quienes aman. Y cuando están enamoradas su tiempo no vale nada, \l: :
porque lo único que les importa es llenar el tiempo con la persona amada. Recuperar r" ,
mi tiempo y reconocer su tiempo es fundamental para transitar a otro estado .:,
,.
distinto, que ya no es el de la distorsión, el de la tensión, el de la exageración. ·• •
De la persona fantástica
a la persona de carne y hueso
E I amor sucede cuando superamos la fantasía de convertir a la otra persona en ; • .. '···
un ser extraordinario. Y también cuando salimos de la fantasía de sentirnos nosotras t.,
mismas extraordinarias. también distorsionadas por el enamoramiento. Todas
•! •
L ..
1
nosotras tenemos fantasías sobre nosotras mismas. El proceso de autoconocimiento : . ,,,,:, """
.1
conduce a saber diferenciar entre las fantasías sobre mí misma y la persona que ! ~• ..
. ··,l··· .,..-- ~
puedo ser. Esto no es posible durante el enamoramiento. Es claro que quien sale de ;
:·
_;J:t~ c.
,, ,~r·· ",.i.:.:•qw
f~
un enamoramiento vive un dolor, un duelo, una gran tristeza. A veces vive grandes ' • ':;l/ ••· ;¡¡'
: • ,:•!tt~ '. :;
dudas: me equivoqué de persona. no es tan extraordinaria. tiene defectos. •i

.,
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Hay que aguantar el golpe. Tenemos que ser capaces de aguantar la desilusión que ·: ::
.....'•'../'
' .
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..
significa el fin de la fantasía del enamoramiento. Al aguantar la pérdida del ser '.
fantástico, ganamos a cambio a una persona de carne y hueso. Realmente, ganamos
a dos: nos ganamos a nosotras mismas y ganamos a la otra persona. Un buen duelo ,
de desilusión de las fantasías ayuda mucho a transitar del enamoramiento al amor, a ,'
pasar de una conmoción distorsionadora a una emoción realista por otra persona y por ;
·1
una misma. El amor surge siempre de un duelo, de una pérdida. De la pérdida de las ¡;
fantasías. Siempre sucede así. .\
··,~ ..
Dolor y sufrimiento son distintos t:.. ,::!.
-.. !.
.,.,.
T enemos que aprender a no sufrir. Aprender a condolernos para no sufrir. No es i /!::;;:

lo mismo sufrir que saber vivir el dolor -eso es condolerse-. Si no aprendemos a : • '~? ..
~ :; ,. •!·.~: 1
condolernos sufriremos mucho. Esa es una clave para el amor: decidirse a dejar de :\ •
sufrir. Dejar de sufrir es una decisión propia. Esto no significa que no haya cosas que :¡ .,
nos dañen, que nos lastimen, que nos duelan. Pero vivir el dolor, evita vivir con ::
sufrimiento. Es importante detenernos en el tema del sufrimiento. Y no porque seamos ;.
románticas, sino porque sufrimos. Tenemos que entender que el dolor es un proceso ;;
difícil. pero vivible, y que lo que tenemos que evitar es el sufrimiento. La diferencia J
entre sufrimiento y dolor es filosófica y también sicológica. Lo primero es entender ::
.!
que el dolor es algo inevitable, pero que el sufrimiento es evitable. :;
81
Claves feministas para la negociación en el a,nor
Somos seres humanas, vulnerables a muchas cosas: a las enfermedades, a la

muerte. a las pérdidas, a los cambios . Todas estas realidades nos producen dolor.
En nuestra vida hemos vivido dolores, vivimos dolores y viviremos dolores. No
podemos evitarlo. El sufrimiento sí podemos evitarlo. El sufrimiento se produce
cuando el dolor no termina, cuando el dolor permanece y queda fijo. El sufrimiento
es un dolor extendido en el tiempo. También el sufrimiento es un dolor no
elaborado: la causa del dolor ya ha desaparecido pero no hemos logrado elaborar
ese dolor. No elaborarlo quiere decir que aún vivimos las manifestaciones del dolor,
que no hemos aprendido del dolor.
También el sufrimiento es una suma de dolores: superponemos un dolor sobre el

otro, sin elaborarlos . Entonces, el dolor se fosiliza y se convierte en sufrimiento. Hay
sufrimiento cuando un dolor del pasado está activo en el presente. Hay sufrimiento
cuando un dolor actual te remite a todos los dolores sin elaborar acumulados a lo
largo de la vida. Cuando esto sucede. no sólo te duele el dolor concreto y puntual
de hoy, sino que te duele lo de hace un año. lo de hace cinco, te duele la vida. Eso
es sufrir.
En la cultura latinoamericana sufrir es considerado una virtud femenina. Y se oye

decir: "Qué buena mujer es. cómo sufre". Pero no queremos mujeres sufrientes,
sino mujeres felices. En la propuesta de transformación subjetiva de las mujeres un
elemento importante es decirle no al sufrimiento. no a la cultura romántica. no a la
tragedia. No queremos sufrir, no nos interesa. Como postura intelectual. Y también
como una posición ética, porque decirle no al sufrimiento es una posición ética.
Después de decirle no al sufrimiento, tenemos que elaborar el dolor no elaborado.
¿Qué significa esto? Que podemos mirar ya de frente el dolor del pasado. Que
... podemos ponerle nombre a ese dolor y decir: me pasó esto. sucedió aquello. esto
;,•
se llama así.
'.Í(
,........¡·.
:~!ti.
Que podemos comprender por qué nos sucedió lo que sucedió, que podemos
~
.. .
-·
-~¡.·
tl:.. entenderlo aunque no estemos de acuerdo. y que podemos explicar sus causas. En
1;;
este proceso de elaboración del dolor, y para que el dolor no se convierta en

sufrimiento, tendremos que renunciar a la lealtad que le tenemos a la que fuimos en
el momento del dolor. Cuando podemos hacer todo esto. podemos reparar el daño
que nos hizo el dolor, podemos curar la herida, en vez de andar con la llaga abierta.
'
~
Cuando elaboramos el dolor podemos cuidarnos con cariño y ternura a nosotras
mismas. Así se elimina el sufrimiento. con amor propio. Me pasó algo terrible, lo
..ii: elaboro, lo lloro, me enojo ... Y un día termino de llorar.
Un día termina el dolor y ya estamos en otro lugar y ya no sufrimos. Aquel dolor queda
' en el recuerdo y no está activo en el presente. Después, vendrán otros dolores, pero
tal vez ya no más sufrimientos, porque ya aprendimos.
82
. ..
;u;,.:;;;:.;::;
:ls 1
~
Dra. Marcela Lagarde \
Descargar a la pareja de responsabilidades

D ejemos el sufrimiento y volvamos al amor. A la pareja. En la cultura t radicional.
la pareja ha sido idealizada con mitos poderosísimos. ha sido tocada con su sello por ff .
las más diversas ideologías.Cada una de nosotras tenemos nuestra propia mítica l·
sobre la pareja como relación. como institución. como dimensión de la vida. Hay para
quienes la pareja es central en el sentido de su vida. hay para quienes no es tan
cent ral. Hay quienes depositan su realización personal en la pareja. en lo que hagan en
pareja. Hay quienes no pueden pensarse a sí mismas sin pareja. quienes no se
imaginan en el mundo sin pareja. Y hay quienes van por el mundo sin pareja y nunca
se imaginarían emparejadas.
Una clave para el amor es descargar a la pareja de la responsabilidad de ser el 1¡¡

espacio primordial de realización del sentido de la vida. Hacer simplemente esto :'
sería ya una revolución importantísima en la vida de muchísimas mujeres. Porque el :~
anhelo de muchísimas mujeres es el contrario: ir cargando cada vez más a la pareja ¡ .. : '
de nuevos sentidos. Hay parejas que empezaron por amistad. luego vino el ~
enamoramiento. luego el amor, luego viene el trabajo compartido. luego viene la ::
-~
sociedad económica ... Muchas parejas son sociedades económicas. estructuras if
económicas de la sociedad. _¡i
El problema es que no somos muchas las mujeres que tenemos la mentalidad que se '¡.
requiere para emparejar económicamente desde una perspectiva de género que .i! •
sea moderna. Porque no tenemos conciencia de ser socias. Para emparejar :¡;
económicamente necesitamos asumimos como socias. Con contratos, con firmas y :~,
'
con sellos. sin eso de que "yo te prometo y tú me crees". El primer principio para el ;''
amor es "no te creo" . Porque creer está en el rango de la fe. y para que haya amor se ;¡
requiere sustancia, realidades concretas. Creer es seguir enamoradas. Si asumimos .~
nuevas tareas en nuestra pareja. necesitamos colocarlas en un terreno que nos ¡:
favorezca mutuamente sin supremacías y sin generar desigualdades. Esto nos exige t,
Y.
revisar todas las facetas de la relación de pareja para ver si establecen o reproducen ¡;
desigualdades, y para ver como podríamos eliminar esas desigualdades.
83
Hacia la n .·
en
' <
La conciencia de tener el derecho

de tener derechos
iii}~
,.,ijt: e lara Coria, . sicoanalista feminista argentina, una de nuestras entrañables, dice
que es preciso que las mujeres tengamos una determinada conciencia para poder
•· _f¡j¡ negociar en las relaciones de amor y de pareja . Y sostiene que necesitamos
~¡ colocarnos en una conciencia moderna como personas con derechos. Es algo en lo
•'i que han insistido muchas feministas: asumir ese concepto que hemos construido las
~: mujeres modernas en el mundo: la ciudadanía. Asumir nuestra ciudadanía. Cuaiquiera
.. !;.. diría que el amor y la ciudadanía no tienen nada que ver. Pero desde una perspectiva de
' " género feminista tienen todo que ver. En el mundo actual. poder transitar a relaciones
".'~f;,
C~;,'.,C.>,~
de pareja diferentes, sobre todo satisfactorias para las mujeres, pasa necesariamente
;jt¡i-¡f.. :tí
• '·•;,:·;i.J,1,J{ ,¡¡¡a
·•:Jm~<(?J\:~1;J:l por tener la conciencia de tener el derecho de tener derechos .
h'/\;.,i/;;
-:,::?
:<tCJ:tF
'.;·:~~:~:!~;:,.
Muchas mujeres no tenemos esta conciencia de manera integral. La tenemos para
•• ;<.'>: ::'.'. •:· unas cosas, no para otras. Porque las ideologías circulantes sustraen el amor de la
ciudadanía, sustraen la vida privada del ámbito de los derechos, y sustraen lo que
>> ' :.•

t ocurre tras las puertas de la casa de la vigencia del respeto a los derechos humanos.
:i<,<-•-•·••-··•
~f :t: >;
K •,;.•is, "
;;;;m"
.,.,.
. '
Hoy hablamos de los derechos humanos de las mujeres. La construcción de un
, . ,,.::;'.'.",!,.
""'1•- '"Ñ. .•
•
proceso de cambio pasa, en todas nosotras, por ir asumiendo la condición social de
.
l?S'/
,/ .
t+Ht,i•;•••fffü•:
..........
••
ser personas con derechos. Esto exige la clara conciencia de que, aunque no se nos
,, ,.,,,,vi hayan reconocido jurídicamente los derechos, tenemos que autoconcedérnoslos. De
ff> ✓;'
(,' hecho, eso es exactamente lo que han venido haciendo los movimientos de mujeres,
.•·,. '
las feministas y muchas mujeres individuales y anónimas en sus vidas personales .
,.:~ ;,,,,:,.
'
,',', /
i,;•·•·
)
' . t'
2!\c:;,:~,.,-,i,
"~· Un anhelo instalado en la conciencia femenina
~~'- ,;
4
'
,i"~~¡
-t~:-·
¡~:,
[
E I anhelo de tener derechos está ya instalado en la conciencia de muchas mu¡·eres
':~~J;!
•fr'••• _._:,
j: contemporáneas.
' •'
Esta conciencia se expresa en el lenguaje, especialmente en
''i!lti,. Tmomentos de conflicto. Muchas decimos : "¡No tienes derecho a hacerme esto!, ¡No
¡,,e> ;u ::
l; • • :¡' tienes derecho a no hacer esto!" O decimos: "¡Yo tengo derecho!" Esto significa
¡.;," •
•• ¡ii que la conciencia de la ciudadanía ha ido permeando a millones de mujeres. Hace tan
' *"!:
'l ·¡~;!¡ sólo unos años nada de esto existía. A las mujeres, sobre todo a las más
ilt
,¡, tradicionales, no se les ocurría pensar que tenían derechos.
r .:.,::•;
86
'
Dra. Marcela Lagarde '\
.; :: i
La conciencia de tener derechos ha sido progresiva conforme las mujeres nos )~. .
modernizamos. Y conforme nos mantenemos tradicionales, nosotras mismas /Í~,J,_ m
sustraemos zonas de nuestra vida a los derechos que tenemos. Especialmente, ·,¡f¡i
. ; :!i
sustraemos la zona del amor y la de las relaciones de pareja. Algunas mujeres no '} ;;•
nos creemos que los asuntos del amor y de la pareja tengan que ver con derechos. ;[:
"
Y algunas luchamos por nuestros derechos en muchas áreas, pero no luchamos por ::
los derechos en el terreno del amor. A pesar de que queremos cambiar el mundo, ji
no lo queremos cambiar ni en el amor ni en la pareja.
Pero somos también muchas las contemporáneas afanadas en construir derechos .

'
también en el amor y en la pareja. Queremos que aquel beneficio que se me ocurre a .. . ..... ~
mí en la sala de mi casa y con mis amigas se convierta en posibilidad de una mejor vida :1,! ••• <•~···•/i..r/~~ ...
reconocida jurídicamente para todas las mujeres. Este tránsito de mujeres tradicionales .~¡µ,, •
sin derechos o de mujeres modernas pero antinstitucionales a mujeres modernas que %~!)\ •l' .•
• :-· • • ..
queremos marcar a la sociedad y al Estado con derechos específicos para todas las !!- _;
.! .
::
mujeres, también en el terreno del amor, es una experiencia que vivimos a diario.
~
::..1 .
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•¡, ..
: ·: _.. _;· ~-~--~ .
Conciencia de ciudadanía } --;:t;:
."\1!:-.---
.!I _..
'.. 1 •
L a primera clave para negociar en el amor es tener conciencia de ciudadanía. Esta i!¡ :;(:.•. ~-·-•,· •
conciencia consiste en estar convencidas de que tenemos el derecho a tener derechos :¡ 'illi~1:•::-,:-· -:,,.. /l
y de que estos derechos deben ser respetados por las demás personas.Hay que !· >'\>..
entender la ciudadanía no sólo como conciencia, sino como autoidentidad. Tenemos que :)- -:::-~ -~fu. ,;~
hacer esa distinción, porque una cosa es que yo tenga la conciencia de tener derechos ;¡ '.;"·::/:·.::. ,/;~j
y otra cosa es que internalice los derechos en mi modo de ser, en mi autoidentidad. Mis :1:,, , .:?'.".. _·_· '·:_ .,:•·;-;;f!l¡
derechos no dependen únicamente de que la sociedad, el Estado o las personas )¡fü • ..
concretas me los reconozcan, sino de que yo instale mis derechos en mi propia vida. [I'
Esta autoinstalación representa un cambio notable en la conciencia y es un t'
importante aporte de la cultura feminista de nuestro tiempo. Hoy sabemos -y lo sabe- :(
mos porque así ha pasado en la historia- que antes de que la sociedad asuma ;_
valores. demandas o propuestas de las mujeres, las mujeres mismas las hemos ''
realizado en nuestras vidas. Al hacerlo. hemos sido disidentes. Después, hemos
tratado de convertir esa disidencia en normalidad. Y después, en legalidad y en
valores culturales .
Instalarnos nuestra ciudadanía

E n cualquier aventura. búsqueda o plan de vida que tengamos. sobre todo en el \i ·-~
:::! '.'..,
amor, resulta clave que yo me instale mi ciudadanía. Instalar mi ciudadanía implica varias )t :?!
.• ,t
condiciones. La primera, asumir que la protagonista de mi vida soy yo. Si no asumo eso. }_ ;
no sólo no puedo negociar, sino que seré conducida por quien protagonice mi vida:
pareja, hijos o hijas, organizaciones, quien sea.
87
Claves feministas para la negociació n en el a1nor
Asumir el protagonismo en la propia vida nos permite autoconferirnos la condición

de ciudadanas. Y mi primer derecho como ciudadana. el primer derecho que tengo
•el"' " \, que instalar en mi vida y que preservar todos los días de mi vida es ése: protagonizar
:¡.·;~ ,_:! ;
:f~tli~J ff mi vida. Es un derecho moderno, feminista. Una segunda condición al instalarme mis
¡li' . f-~: !; derechos en mi vida, es decidir que no espero a que nadie me reconozca los
; !>.> • >·· A ~rti df,'\ I;
;;@• <·H-~,:;;;1] • • ;;¡;·,;;
"•;,.-~:-x •~a<••t
J
:' ,:•· derechos, no espero a que nadie me los dé. Me los otorgo yo. Nadie puede darme
,; mis derechos. En la sociedad. tenemos que irlos construyendo. pero en mi
¡\jt~¡~~:;li\\l■ll
,, . 11( .;ii;~~lí' · ,/'
subjetividad sólo yo puedo otorgarme mis derechos. Y es al vivirlos que . los
~; ~I4-~;: ~- derechos se otorgan en la propia subjetividad . No se trata de tener la mentalidad•de
• "'41,11?·, , • ••• ;1• que tengo derechos y después vivir una vida sin derechos, eso no se vale.
11111! ··• •• f"·
/!
,,
ii: Una tercera condición es poder instalar en mi existencia todo aquello que está en mi
~ ;j'
subjetividad de ciudadana con derechos. Y esto se realiza solamente en la vida
/" cot idiana. Para hacer esto necesito saber qué derechos humanos tengo vigentes
~I;
' 1!!¡_ hoy. En muchos talleres pregunto a las mujeres si saben cuáles son los derechos
;¡¡_ humanos de las mujeres y muchas no los saben. Me parece fundamental
,!'.. conocerlos, para después saber cómo se hace para vivir el sentido pleno de esos
• -r . t derechos humanos.
~-~ ••"
'
Protagonistas con derecho al amor

P ara poder negociar me tengo que autoconcebir como parte de un pacto . O,
como dice Celia Amorós, me tengo que otorgar la condición de pactante. En el amor.
, "'!' las mujeres tradicionales se conciben como las agraciadas. las favorecidas. las
.'. ifllt. ·. :,;·,· '\i elegidas, las que se sacaron la lotería, todo eso que decimos cuando encontramos
' . ·y•··;w#i ~ • .i una pareja o nos enamoramos de alguien. y experimentamos el sentimiento de que
1;14it •• ·· •J' no merecemos tanto. de que alguien maravilloso nos ha hecho el favor.
• "':::, _• G;.t
'.i
!l
. Este sentimiento hay que irlo eliminando de la vida. Ser protagonista de la vida
::t' significa entender que tengo derecho al amor. Es un derecho humano el derecho al
. ,: ,.'.1¡...
_.,(,.
amor. Y amor con su apellido feminista : tengo derecho al amor no enajenante. a un
~~F:
-~~ . •r amor que no me haga ajena del sentido de mi vida. que no me expropie de mí misma.
;1¡~);
t;·: ;
.... Tengo derecho a un amor que me beneficie.

{j:
lfü ..
;~:~{;) . '\. Asumirnos como sujetas de pactos y de derechos en relación al amor supone dejar
1•·:,"', ·,,. ,: de pensar que nos eligieron entre millones y empezar a decir: yo he elegido. No es
\: suerte, no estamos en el reino de la magia y de la fantasía. sino en el mundo de los
...• f hechos concretos y del esfuerzo por la vida. en el reino de la realidad y de la
:¡. inteligencia para vivir la realidad. Este cambio de enfoque significa un cambio de
,,.,.-,·; } ;¡¡/.: 1
. illt( valores. Significa que cada una se valora a sí misma y no se coloca en condiciones
... ·• ,ir· "T:: de inferioridad amorosa, sino en condiciones de ser sujeta del amor. Así como en la
'· ~---~";~:. teoría feminista hablamos de ser sujetas de la historia, y en la teoría jurídica feminista
.!J!!I hablamos de ser sujetas del derecho.
-i!í!(
..,.:¡,.r.,,
~N::
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! ;f,¡!: 88
(i
..·.;::hi
··;·. 1
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}:::Jr::.· .
Dra. Marcela Lagarde •• """"1·--··J •
JJJ!fff.tl'
,l~fl · ·
t,ií:l!!m.m
~ ·'fi,ifg'íll\l
,Si~~~ '
En la teoría política feminista hablamos de ser sujetas de la política, y en la teoría ,:!~~ ·.
lingüística feminista hablamos de ser sujetas del discurso, de la palabra y de la voz, :]:íl¡
)i 1
desde el análisis del amor decimos que nos estamos construyendo como sujetas del :W.
amor, y esto significa ser protagonistas con derechos amatorios.
Tener historia propia,

llevar contabilidad en la pareja
' ,..
E I cambio radical es dejar de ser objetos del amor, objetos del deseo, objetos del~~-·
erotismo y pasar a ser sujetas del amor. Este giro feminista representa una de lasf~
grandes revoluciones del siglo XX. Construir la ciudadanía de las mujeres comot •. ,:j~t~i::: ~~->- •u..'
experiencia de vida es la marca del feminismo del siglo XX. En la sexualidad ciudadanía, h, -· -.- •• ••••• •• " •
en el amor ciudadanía, en la práctica política ciudadanía. Y desde luego, en la i~~·t * ·~ •
autoidentidad ciudadanía. ¿Qué soy? Ciudadana. ¿Quién soy? Soy la ciudadana Fulana 'i!W. ".J.»···'"·: ..• ....
de Tal. con mi propia historia. 1¡ ;,;"'·
..,.
Para poder negociar tengo que tener historia. Una historia personal. que me W•
permita explicarme cómo es que he llegado a ser la que soy, que me permita :: •• , ·, .'"
:!· ,: ·\ • •
• • -•"- •• , ,aj ~.
reconocer mis procesos de vida, mis capacidades, mis habilidades. para ponerlas en
juego siempre. sobre todo en las relaciones de pareja . Muchas mujeres todavía t '
anhelan que el amor no tenga que pensarse. ¿Por qué complicarnos tanto si el amor ~·
tiene que ser espontáneo? Eso es una fantasía. ¿Por qué vamos a poner de ':: ~;01'.(' ,,: •;; ••
vacaciones nuestra inteligencia y nuestro análisis para vivir el amor, si es en el amor ¡:
cuando más necesitamos de inteligencia para sentir mejor? "
;;,:a;~,:,<;_,
~ffl
'./{!
• - • •·•······.i·i'·· .•r·::-·><•
Tenemos que tener como una geografía de la parei·a: saber dónde están las ~ 'l
~~H,:l!f\ .. .;.;:¡¡:
',, ,, • ·t[r,~"Si\'illí,:i¡·P-l"'!l!i
desigualdades, dónde cada quien es quien es y como es. Tenemos que llevar como E¡¡1, •• "::¡Jli,14¡¡¡;,c;:;•"f-. 1j
'"f" •
el libro de contabilidad de la pareja: saber qué aporta cada quién a la relación , qué '::)¡u
sustrae cada quien de la relación. cómo se aprovecha cada quien en la relación. en ·,m.
qu~ .ª?usa cada quien. en qué se beneficia cada quie~ . Todos_estos son criterios~~ i ..~ ~ ; , . J
anahs1s que debemos tener en cuenta . En la educac1on trad1c1onal no se nos enseno ¡ .'.¡~~.¡;,,_, '¡.¿ ··~
a incluir en el amor la lógica del beneficio. Para muchas. emparejarnos era sacarse la ¡. ;ji~¡.:':: .
lotería. Pero cuando entramos en la lógica del beneficio de qué aporta cada quien. ! ..
::::1!'1t:t'•ili!ll!!' ~-
estamos entrando en el terreno moderno, en el terreno del pacto. Esto supone aceptar '.r.~~;.:=:[~~¡f;]:l[i;: :t
que existen desigualdades en los costos, las ganancias, los beneficios. los aportes. ,¡¡
:m·' f~~é!t
•1
rr)) t?t~
·:~;;i, ',.. 0
;.
Supone conocer estas desigualdades. entenderlas y tratar de superarlas. ::!!Jl •~; . -~~:;,1;;,, .,
..-'~" ', .~.
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+·· :í!é' "'JlillUI" ....
;1 •
"'!JI·.
-
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...... .
Un inventario y una radiografía económica ;!i '
::p
E n una relación de pareja no sólo hay beneficios y ganancias. también hay :i

pérdidas. Tenemos que conocerlas, entenderlas. Toda relación implica una pérdida . m;
Ya lo decía Simone de Beauvoir: una parte de la libertad se pierde en el amor. Y tal ;r
vez se gana si se potencian otras libertades. Necesitamos ponderar qué perdemos
,
y que ganamos.
89
Claves feministas para la negociación en el a1nor
Tenemos que hacer el inventario de cualidades, de recursos, de bienes materiales y

simbólicos de nuestra pareja. Y saber claramente cómo se da el intercambio. Una
cosa es qué se aporta a la pareja, y otra es cómo se intercambia lo que se aporta.
i
\ill< Hay quien le puede dar a su pareja prestigio, que es un bien simbólico. Pero puede
¡
.;';;;~,&j:.. ser que no haya un intercambio interno de ese prestigio con otro valor. Hay quien
: ti . ,,,~, *~t-11' l
puede tener una posición social importante, y eso se vuelve un atributo de la
!\). ,, ;;+\ ;0;[ ,,'. pareja, pero puede ser que internamente no haya ningún intercambio entre la
>jll Il !~IJJ . · posición social y otro valor. Necesitamos diferenciar los aportes a la pareja del
ij .
íf
'"~m·'~llf
. .. ·~1
,¡ intercambio entre los emparejados.
"
tt.~ ... : •. • ~v.
tJiv.~~
.,, · - ~ ~.. ;J;:,..-
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' !'i
1¡;
• ~ • ji- Necesitamos hacer también una radiografía económica de las personas que se
~,r
~ .¡¡¡. :;:
emparejan. C lara Coria tiene un lindo libro sobre las negociaciones nuestras de cada
,W día. Y tiene otro, que les recomiendo, sobre el dinero en la pareja. El texto sirve para
·iil1 una re-educación feminista de primera clase. Ella sostiene, como muchas otras
·i¡¡¡¡¡: autoras contemporáneas. que una de las cosas más importantes a tener en cuenta
~!¡: en las parejas actuales es el conjunto de bienes y de recursos económicos que tiene
cada quien, o que aporta cada quien, o que generan juntos. y cómo se distribuyen
...: %. esos recursos y bienes. Cuando hacemos investigaciones con perspectiva de
• J: género en comunidades y en barrios. siempre debemos analizar cómo se generan y
tj¡ distribuyen los recursos en las parejas y en las familias.
'
Amor, sexo y dinero

E I dinero permite el acceso a bienes, recursos y oportunidades. Y es también un
símbolo. El dinero simboliza el poder, la supremacía. Y la ausencia de dinero simboliza
la pobreza . Los problemas de dinero en las parejas son problemas de dinero y también
son problemas de poder. Expresan la relación de poder que hay entre ellos: quién tiene
el poder y a quién le falta el poder. También los problemas de dinero son un reflejo de
todos los otros problemas de una pareja. Cuando escuchen: "A nosotros nos va de
maravilla, sólo tenemos problemas de dinero", desconfíen. No puede ser. En el dinero
se simboliza todo .
. _.....
:;: ,,
C;8o, a(!:;
El dinero simboliza el amor. Simboliza la supremacía, el prestigio. el rango. El dinero
~---1. >
-~ .r
'
~ •~tr
,. .. ,.
.,:.;;
!~;,;
es un recurso de intercambio. Si una rastrea cómo intercambian el dinero las
. í!IJiii parejas, puede descubrir qué les pasa en otros terrenos. Porque existe una relación
• ~~;· más o menos directa entre amor, sexo y dinero. Amor, sexo y dinero establecen
•' J. relaciones de poder. El uso, la falta o el intercambio de dinero refleja las igualdades
••
. . ............ ;\ •~~ o las desigualdades que viven las parejas. Por eso se dan tantos conflictos por el
\ -~r- 1t ~1:
1
dinero en la~ parejas. ~ist~-una relación muy estrecha entre la vivencia económica
•fa¡¡- ·'· ( de las pare¡as y su s1tuac1on amorosa. Muchas veces se da un grave desgaste
Ú~ • t amoroso por una falta de adecuación económica.
•• • ¡j: Si queremos impactar positivamente en la afectividad de una pareja tenemos que
•¡¡¡: transformar las relaciones económicas que se dan en su interior.
90
,:~;,t:;~-
'ni,!lbT-
,::::;. '
Dra. Marce la Lagarde ,fii'·'i·, • •
.IT~
)~ii . .
,.m
El reto de la independencia económica ::k
:~:.:.,.. ~
.
·.·..~
,F·,·<,cC'•<>'
L
.i,vt~
1•
as mujeres contemporáneas hemos descubierto que para poder pactar ¡fí''. ,,,:c~- ~ .,;;· "1
económicamente necesitamos tener independencia económica. Mejor aún, autonomía . ':!~f;f. .. :l~ ' ·•
,l
económica. Si a la desigualdad estructural sumamos dependencia vital, habrá j .,
problemas económicos. Si a la dependencia vital sumamos el autoritarismo, tendremos ·; 1 '~~~ *
abuso. castigos económicos. Muchas parejas viven permanentes conflictos por ,.
castigos económicos. ¿Es posible negociar si se es dependiente económicamente? Es ,
posible pretenderlo, pero entraremos a esa negociación en condiciones muy'
desfavorables. La dependencia impide la paridad. A lo mejor puedes lograr que la
persona de la que dependes sea muy amable, muy consecuente, comparta mucho y,
no abuse. Habrá escucha, comprensión y generosidad, pero eso no es una·
negociación. '
•. ·."· l'í
Entrar con dependencia económica a una relación amorosa es entrar con desventaja. ·,¡ . '
Un barco que zarpa así no llega a buen puerto. La dependencia económica puede ser ·u.
un lastre y un peso terrible aún para el mejor amor. Al principio del enamoramiento ,¼ .• ,..
todo el mundo dice: "No importa, contigo pan y cebolla", pero cuando le tienes que :; ~"
pedir a tu pareja dinero para ir a comprar tus toallas sanitarias, ¡tu autoestima está J¡.. · -. ··
en el suelo! La dependencia económica provoca conflictos muy graves, y nos t >.
1:i_
coloca en situaciones de riesgo. Y la dependencia económica es una situación :~ *'~ .... ,

riesgosa. '¡ ~¡;~01, •.'...
. .
-
También se da la situación de quien ha sido independiente y deja de serlo al ;
~t .
emparejarse. Pierde entonces un pilar de autoidentidad y de autoestima. También J ..:i;•t,
¡•
hay muchas mujeres a las que les da muchísimo miedo ser independientes;
económicamente. Sobre este asunto no podemos dudar: debemos construir;;
nuestra independencia económica. Y para ello. tratar de tomar decisiones adecuadas ]LJ
y no dejar pasar las oportunidades. Más importante es la independencia económica H~.
si tenemos criaturas. Porque una cosa es que nosotras "por amor" nos adaptemos :;!!(
., '
a la dependencia económica, y otra meter a nuestros hijos y a nuestras hijas en eso. ,:.,
y someterlos a broncas económicas. :·
.
Las criaturas tienen que saber que tienen una fuente de apoyo directo, que es suya, ~
que no está en discusión. Es un derecho de las niñas y de los niños que nosotras hl,
tenemos la responsabilidad de garantizarles. ;~
.~.
:; ::
;,
Ser independiente económicamente es una forma de estar en el mundo, una forma i:,
de vida . Los amores en los que hay menos deudas son los mejores . Estás con esa J
persona porque la quieres, y no porque dependes de ella, porque le debes o porque \
te apoyó en un momento. Mientras menos ruido económico le metamos al amor, :j' f
más amor puede ser. ':!1
.::-
·: '
¡, ,,'f:/;¡~¿'.'.
91
Claves feministas para la negociación en el arn or
El ita cate de cada u na

~- ; _.
,, , P ara poder negociar en el amor tenemos que ser propietarias. Una no puede
:! ·M~ ij;~:·,;,;:~· J; negociar si no tiene un piso de negociación. Esto tienen que tenerlo muy en cuenta
~• ♦ ♦~EEE J
.~:;;:, .. .~!\f. / quienes fueron educadas con ideologías anti-propiedad . Necesitamos tener
f~~~liü:;t,r~
1
~ propiedades. bienes. recursos personales. No bienes_ colecti~os. sino bienes
:.:;!;;
•'11'~~4i\i1?· *~¡¡jl i personales. Que nos amparen, que los sintamos como un piso propio.
;,; ll!~,,~~~¡
'ir ,. "t;;·r.
. •·;,;F.~
-• ,¡¡:m
ltacate es una palabra que se usa mucho en Me'xico para dar nombre a las
T propiedades básicas de una persona. El itacate es un bultito que las mujeres
"'
-'F campesinas llevan en el rebozo, y en el que acomodan sus tortillas, su pozol, su
·'
{ malacate. su dinero. Llevan comida y provisiones , las cosas fundamentales y

básicas para sus viajes. para su vida. Tenemos que definir cuál es nuestro itacate de
mujeres modernas. afirmadas y ciudadanas. cuál es el itacate con el que
transitaremos por la vida. Además de tener en él un facsímil de los derechos
humanos de las mujeres para leerlo de vez en cuando y que no se nos olvide.
~,-,// ,¡. necesitamos en ese itacate dinero propio, de uso personal, que no esté en discusión
>\iiiJ!·,_,;;;;~f r- con nadie. Necesitamos tener un cajón que nadie abra, una ropa que nadie use más
+,!;t>
......,....,
que yo y que no se la preste a nadie. Tenemos que tener un tiempo propio, un
·~ 111: tiempo nuestro que no compartimos con nadie. Tenemos que construirle límites a
".¡~v,¡;
todos nuestros bienes, recursos y propiedades personales.

,,·
En teoría de género a todo esto le llamamos vías para el empoderamiento de las

:~i mujeres. Para amar, las mujeres no podemos ser las carenciadas, necesitamos estar
1
• 1:ffl.: empoderadas . Y además. queremos estar empoderadas . Para el amor necesitamos
r tener poderes práct icos, recursos y conocimientos.

Y necesitamos tener vida privada. La vida privada es la vida íntima. Hoy se trabaja
mucho la intimidad, como un espacio de vida que a veces compartimos. pero a veces
no y que debemos de tener la posibilidad y la capacidad de cerrar cuando queramos.
.
,~e
. . Incondicionales de nosotras mismas
tit .j,
·$,. ,_ ..., 3 ¡ r
T
-i~il:
oda esta propu_esta supone ~acer acciones afir~ativas en fa~or de n?sotras
mismas. Las acciones af1rmat1vas son un conJunto de polit1cas d1ng1das
1
:111,.,,.;(~11J:i1t,· \ exclusivamente a favor de las mujeres. Han sido una de las expresiones más firmes
•)~i-~[f . ,:' del feminismo del siglo XX. Con las acciones afirmativas decimos: "Nada de
J
· -~t;ffü _, derechos para todo el pueblo, en el pueblo primero vamos nosotras. Nada de
~\¡•¡Ir:-- -¡' recursos para todos los desposeídos, primero vamos nosotras las desposeídas."
C Las acciones afirmativas priorizan a quienes están en desventaja, y en las
desigualdades de género, nos priorizan a nosotras.
92
!!!ir.!
Dra. Matcela Lagarde '\•
...".¡
':iif¡
"I
Y después de pnonzarnos. debemos establecer el otro principio del feminismo :m_.
actual: la equidad. Para negociar en el amor necesitamos también ser equitativas. Y ;-¡¡;
esto significa actuar con criterios de justicia, hacer justas las relaciones. Siendo i!- ··-~-- . ~
equitativas superaremos esa contradicción brutal que vivimos las mujeres ¡¡¡ ·· ~llik.: {ji~ •·,.,
" .. • •• 1\
contemporáneas y sincréticas, que clamamos por la justicia para todo el mundo, :

pero reproducimos la injusticia contra nosot ras . O somos injustas con otras
!_
..
personas.
Entre los valores para construir el amor es fundamental la justicia. Es en esa búsqueda~
'
de justicia donde tienen sentido las acciones afirmativas a favor de nosotras. Porque ser·
justas no es lo mismo que ser parejas. Ser justas es ser disparejas. buscando acortar"
'
la brecha de desigualdad que nos desfavorece. Acortarla en todo: en la economía, en el~
uso del tiempo, en la atención a los demás. Tenemos que ser disparejas y no suponer\~,,
que estamos en condiciones de igualdad, porque no lo estamos. Tenemos que eliminar '/f:.
•¡~ ·¡
brechas y apoyarnos a nosotras mismas en la relación de pareja. Estar siempre a ¡¡ )jL:ii;;·

•• .1
favor nuestro, no dudar entre yo y nuestra pareja. Siempre a favor nuestro. +'
·r- ·•iá!
:)
:;
~!!
:ha
La única incondicionalidad a la que realmente podemos aspirar en la vida no está en ·:

~
ftíi,-···
: ,..i,
el amor de nadie. Nadie nos va a amar incondicionalmente. Las únicas que podemos .}
ser nuestras incondicionales somos nosotras mismas. No podemos seguir a la vieja ;?
usanza del amor tradicional esperando la incondicionalidad de alguien. Eso es una :
pura fantasía y mantenerla acentúa nuestras desventajas.
•
No esperemos incondicionalidad, •• .
busquemos confianza
.'·;('~
/"l
.t
• '.!: 1 •
' '
D e nadie podemos esperar incondicionalidad. pero sí podemos esperar confianza ;;!j¡; ·-

·:i.
de muchos y de muchas. Cito ahora a otra escritora feminista maravillosa. a la ,r
.,
española Elena Simón, que en su libro La democracia vital plantea que cuando !'
hayamos hecho todo para poder estar en condiciones de negociar -empoderarnos. ser i~
ciudadanas, asumir una conciencia de protagonismo-, podremos establecer relaciones •
de confianza. No de incondicionalidad. Sólo de confianza. No una confianza que se
establece un día y dura para el resto de la vida, sino una confianza siempre a prueba, VI
a la que se le tiene que ir poniendo plazos. No se puede vivir en una evaluación /!· ;,'i,_
permanente de la confianza, pero sí debemos vivir buscando manifestaciones ¡~

cotidianas de confiabilidad. :,· ¡,;,. ••
Las muestras ,cotidianas de confiabilidad son imprescindibles al negociar en el amor.

:1
'H
¡~ ,;
•*•
lz~
Una de las claves feministas más importantes para el amor es no suponer que !íl ~:"',
confiamos, no pretender que la confianza es eterna, sino saber. como parte del pacto -¡;; '"- •t,h,
;, ,l,tt;
de amor, que cada quien necesita recibir muestras de confiabilidad. Son necesarias. _!/
::1
•
•,r.
porque las personas t enemos muchos miedos, porque existen muchas :~ .•.;.;;
_;.m
desigualdades. y porque tenemos que ir viviendo una ética distinta. ;,
93
Claves fe1ninistas para la negociación en el an1or
Las feministas de la Librería de Mujeres de Milán trabajan mucho el tema de la

confianza. Y cuando hablan de la confianza entre mujeres le dan el nombre de
r;,;f.];,;¡¡ ~; traducimos al :spañol hablando de la necesidad de afidarnos. _Esta_ confianza ~o e~

• ,. 7 "-· J una ceguera magica. Confiamos porque hacemos un pacto: yo se que te doy y se que
' • ). recibo de ti. porque el amor es un intercambio. Yo sé qué espero de mí y sé qué puedo
.,~. esperar de ti. En el affidamento y en la confianza en la relación de pareja se requiere
.,..nJ de muestras y señales que deben ser permanentes .
•,,. fl · r
~·~~ "'~;¡
; .•;;: A muchas mujeres nos han engañado contándonos cuentos. haciéndonos promesas,
'
mi!!, ~i' dándonos palabras, palabras de amor que contradicen el desamor que vivimos. Las
~n•
. · lfü historias de amor y desamor están plagadas en nuestra cultura de "promesas de
~ amor". Prometemos y queremos que nos prometan. Y mucha gente abusiva sabe
,· ! .
5
• ~[ perfectamente que les basta una promesa para salirse de un conflicto sin cambiar ni
·~¡',. mover nada y seguir haciendo lo mismo. El pensamiento mágico de las mujeres
'
¡¡_ facilita esta conducta abusiva.
' ;.
~ \
El amor en el tiempo: que gane el presente

A
demás de la confianza es necesario entender la temporalidad de todas las
relaciones amorosas. Mientras más eternas se crean, más vulnerables serán. Éste
. es también un principio de negociación. Las relaciones pueden durar días. meses .
. j¡, años. O toda la vida. Pero deben ser consideradas siempre como finitas y
'::! temporales y no como relaciones eternas que compramos hasta el fin de la vida.
,m:
,!1r
'
.,,,:'
~-
·~•:·
''
.,,,·
;').~~
Este giro en la visión del tiempo del amor ayuda a concretarlo en hechos. El amor es
.•• ,a,.,
iw·
,· .. "
para aquí y ahora. El presente es el tiempo más importante que necesitamos
configurar en las relaciones de pareja. Muchas parejas viven del pasado: en su vida
.
·.: '
diaria está mucho más presente lo que fueron que lo que son. Otras parejas viven
•..¡
"" mucho del futuro: "Ahora que superemos este conflicto. ahora que nos saquemos
la lotería, ahora que se componga este asunto. ahora que te divorcies. ahora que te
decidas a quererme ... " Esperando siempre algo que va a suceder en el futuro. Pero
ese futuro es fantástico y resulta funcional para negar la frustración del presente.
Nos inventamos qué será en el futuro para no aceptar lo que es en el presente. Lo
" ..•,, . que nos molesta y lo que nos falta lo confiamos a un futuro siempre inaccesible. El
. :-:~. : • . 1
_'., {;i. '; futuro es el tiempo que no existe más que en nuest ra imaginación.
:y .••
,t • • ;:;
. •
.
,; B' . f Una clave de negociación muy importante para las parejas es la transformación del
• !S,: ••
, ~ ~~·~ ,:¡
tiempo pasado. presente y futuro para que gane el presente. Menos nostalgia y más
✓""f' ;:,,/· t actualidad. Menos utopía y más topía. Alarguemos el presente. Hagamos del
_, ""l.:.>t,'•\·
. .:"",:<,··' ·t presente un espacio de realización denso. El tiempo se hace denso y se extiende

:~«N"~ :..~; cuando tiene contenidos ricos. En el amor. el presente. lo vivible hoy, en esta época .
•:m l
JJ;~1 en este tiempo. en este período, debe tener cada vez más fuerza.
94
Podemos imaginarnos qué nos gustaría hacer en un mes. en un año, en cinco años.
Pero imaginarlo no como fuga, sino como plan, como una meta a la que le vamos ¡
sumando algo todos los días para que suceda. Ver la vida como un proceso y no I:.
como una sucesión de acontecimientos mágicos es fundamental para las :
negociaciones de pareja . '
,.
- .• :e······•.•• iL • ·ot·
,~:-: \ . . ~~- ;
'."'.;':• •. ; ••• '. ..4',._-.·.._,..
.
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>+&r}.;W - -~
Una agenda mínima para el amor ·
;t<:::•:·
:.-·•:.;:.:.~-.._;~~¾.>·~~~-
1
¿
:; -; .'7 Y:i '$:':'C dü !'JO> :'f.¡c' ,
.:::~,.;,:;;'.:i:iúM¾'3<'.""♦.{h~
¿
·::.:;.,;;,. """? m':. _ ... tt~
E lena Simón enseña que. para negociar, las mujeres necesitamos hacer tres\:¡¡, 1;~)ff "ic"•,,,._ 1
pactos: el pacto intrasíquico con nosotras mismas. El pacto intragenérico entre las ·::ii!C
' ... 11 '
mujeres. Y el pacto intergenérico con los hombres. :¡¡: ...,.,

. '.1 ...
El pa~to intrasíquico e_~ un pac~o interno_ con una _misma. ~A qué_ ~e com~rometo ,;,:~ ~i~l-;·"
conmigo en esta relac1on? ¿Que es lo m1n1mo posible y que lo max1mo posible que • •,
pido a mi pareja? Es como si cada una tuviera su agenda mínima para el amor. En esa :¡~
agenda está lo que negociamos y lo que es innegociable, ni con esta persona ni con { 'f, f
.:! ' '
ninguna que se aparezca. '·.•,' ""1
.:· ,. '·*.·' •• -
• <i r _'
".'.,_
Desde este mínimo empieza mi negociación y a partir de ahí puedo avanzar. Negociar ', "· ·•r.j,• •
implica siempre avanzar, pero no avanzar totalmente. Significa avanzar aprendiendo a j,
articular intereses no siempre coincidentes. ¡;
Y ya sabemos que en las parejas lo que prevalecen son los intereses no i
coincidentes. Hay que saber esto para luego saber cómo hacer para articularlos y ;;
p~ra que no entorpezcan la relación_- El pa~to intrasíquico no se le consulta a nadie. :¡~)./
S1podemos pensarlo con otras muieres. s1 es que formamos parte de un grupo de •:¡¡~
autoconciencia feminista. Allí sí podemos discutir. analizar, hasta construir nuestra di ' º• "'"
agenda mínima. Las mujeres nos ayudamos a pensar colectivamente. A pensar. pero ,f
a nadie le pidamos consejo ni le demos consejo a nadie. Aunque no es una ¡" •
prohibición. sí es un derecho el no consultar a nadie la agenda mínima personal. !ª
.
..
•·••••·•·-·
''}W~ .~
--------,...
..•
'' .
••• '
i~-""0'
Mucho menos se le consulta esa agenda mínima a la persona con la que vamos a
pactar el amor. Muchas mujeres caemos en ese error todos los días. Y el sicologismo \,i .·.
funcionalista que se transmite a través de las revistas "para mujeres" se orienta a que ,i~
las mujeres lo consulten todo con su pareja. Esas revistas transmiten la ideología de .if::
que amarse es "decírselo todo". No, las cosas personales no se consultan, no se ;¡·-
'~
ponen a discusión. no son objeto de juicio de la otra persona, menos cuando sabemos f ~
que estamos en desigualdad. Porque es en ese consultarlo todo donde se construye / , ". """!'··
supremacía íntima sobre los reductos del alma. Y es en esos reductos donde nadie _\;; ....,..,,,.,,
puede entrar. Nadie. El yo es lo que no se negocia, lo que no está en venta, lo que no ii,
se regala, lo que no se da. Siempre se tiene que preservar para ser yo misma. ff
95
Claves fe1ninistas para la negociación en el amor
i;· Y porque es un acto de enorme arrogancia pretender que podemos comprender los
l T
~J,_¡¡,. recovecos íntimos de otra persona, necesitamos también reconocer en nuestra

" pareja sus reductos del alma. asumir que nuestra pareja también tiene un yo
~r>
!' •• ' ' .
... •• :, irreductible. Y tenemos que renunciar a nuestra disposición de invadir ese yo .

J:,;;,'.4>
.~ ... ,
~~· '.~,
~ : • 1:
'
·1 ..
f.o \ ; / .·•·•· },c'\,@i

El valioso recurso de la terapia
i~fal!;~?•lí \.
~ '~"pf;' f~ · .. ·i ¡( U na clave para negociar bien en el amor es tener una buena terapia. Las terapias
1
~"' :·:,·r· ¡¡;r,:. ,.~i; nos pueden ayudar mucho. Una buena terapia es un recurso de vida. En la terapia sí
·- •~l
podemos consultar qué hacer para negociar mejor en el amor. para compartir
,¡i,
\/L
analíticamente nuestros problemas. En la terapia compartimos con personas que no
.. están involucradas en nuestros conflictos y que no van a hacer uso de nuestras
intimidades. La terapia tiene un sentido de proceso y nos coloca en un camino de
autoafirmación muy importante. La terapia es un derecho humano de las mujeres. En
la Cumbre Mundial de Viena logramos aprobar que la salud mental es un derecho
,. . humano para las mujeres. Una salud mental a la moderna. asistida. apoyada.
tHü .s. .
!l)!Illit;Jt~tf,fi'!f!!,.~-tf 1¡¡ atendida profesionalmente. No como la atención a una enfermedad, sino como el
;f
~-1?i:.¡{ .;~; derecho a disponer de un recurso para vivir, para enfrentar mejor la vida, para tener
• • ... •• ' más conocimiento del mundo y de nosotras mismas.
'• .,
: /2:· ~¡¡ . •••
.,.~!C~.
";"- • >.'$.i='.i;:~,
,.....:r~~p,4:
. ,, ..•.
;:%:,~
.: . .¡H
Í·
: :i:!,i'.'(\á
Necesitamos terapeutas feministas
;''::f™ '".t:
y terapias alternativas
H ablemos un poco más extensamente de las terapias. Las terapias también han
sido espacios de dominación patriarcal. Porque durante muchísimos años la sicología
ha sido machista y patriarcal. Gran parte de las teorías feministas del siglo XX se han
dedicado a hacer la crítica de las teorías sicológicas sobre la sexualidad, sobre la
subjetividad y sobre el inconsciente.
Uno de los campos más fértiles de creación de teoría feminista ha sido el de la

sicología y el del sicoanálisis. Hoy existe un debate muy fuerte sobre nuevos
enfoques sicológicos con una perspectiva de género. Pero, aún antes de que se
hablara de perspectiva de género, existía ya el sicoanálisis feminista y la sicología
'~f¡fflf}:¡;. '\ feminista y diversas terapias feministas.
· • •,•. ':;~fü r~,'
• • i:!i•
't Necesitamos terapeutas

¡ ¡•
•;~j~ ·-· •. ·: feministas. Pero. mientras no las tengamos en la cantidad

• \,.,{ necesaria, debemos tener autonomía en la terapia que tenemos a nuestro alcance.
mBasta de esas situaciones en que las mujeres salen derrotadas de las terapias de
• pareja y de familia. No nos sirven. Y no nos sirven porque abundan las corrientes de la
sicología que no han hecho una crítica de las relaciones de poder en la familia y en la
pareja. Y hacer esta crítica es necesario para que la terapia sea en verdad alternativa.
96
.:U!Hil' • em
.::iH;JPt·
Dra. Marcela Lagarde 'fi!mlii)fi•
*
.• f.
A ninguna mujer que no haya hecho un proceso terapéutico sola, le conviene entrarle
a un proceso terapéutico de pareja en el que la alianza del terapeuta o de la terapeuta }1f
:i!ll,
no es con ella. Porque puede ser objeto de una gran manipulación. Debemos ser muy ,,. '
selectivas. Necesitamos terapias con autonomía, y necesitamos elegir terapeutas que. ':i'· ·.· IB:tWi'::Y.«•
por lo menos. no sean misóginos. ::
Creadoras del mundo, inventoras de cambios

1 gual con la salud . Tampoco podemos ir con médicos o médicas que no respetan ~
nuestro cuerpo y nuestra sexualidad. Ni podemos ir con un abogado misógino a que * -~:)ii:ii;)m,;;; ·~
nos divorcie. Necesitamos el enfoque de género en todos los profesionales. ; , ,;~¡¡¡¡¡¡f~;if~
Necesitamos también odontól~gas co~ enfoque de ~énero, ¡que defiendan nuestras ,, . . :,.{( ·: •• :'''<;
muelas hasta el final! La c1udadan1a de las mu¡eres necesita que todas las 'i, • ··• •
':ir:= •
profesiones tengan un enfoque de género. :;.¡! '
..
•,l¡fil
:¡;¡!
. ,, ', -~·
'::1
:¡
. ' .•
Esta es una clave política muy importante. Porque para poder construir su } ¡~! .,,
auton~mía. millones_ de muje~es en todo el .n:iundo necesitan equipos de
•• </r·'~
J
-. - : ••, i
ll,~•\ffi1r•r·· ,._.. :l
profesionales. academ1cos e intelectuales. poht1cos, diputados y senadores \ !lli '¡¡¡.~ "'
feministas. Sabiendo mientras esto se realiza que gran parte de los cambios ; "~¡'- - ·• f''
:· ··:·::·, '
necesarios dependen de nuestra decisión, de nuestra voluntad. de nuestras i: .; 1 . .•••
iniciativas. Por eso somos creadoras del mundo. Porque cuando muchas cosas que :;' : ..,·,..,:.
.• : _.~ • ·u·:
. ..
hemos necesitado n~ estaban hemos tenido. q~e inve~ta:las y las hemos inventado. ·:¡ :~:Ji~~~~·~
N, confesores n, 1nqu1s1dores ,¡ __ :;:;):

., ,,
" " '·.' ..
1
/
:
.
.l .:::.h1:,. t~
L a persona amada no debe ser nunca nuestro terapeuta. A veces no solamente ;¡ ·::;::~ll~)~:i!líi . 11
queremos en la persona amada a un terapeuta sino a un confesor. La persona amada \/' .' ' ' ,, •~fi'"•~
no es un confesor o una confesora. no tiene la autoridad para enjuiciarnos. Y una clave ;~ft11
para la negociación es que nunca nuestra integridad esté en entredicho. Nunca. Porque :l~~
nosotras mismas no nos ponemos en entredicho y porque no le estamos pidiendo a l¡í . !i'lí/í'ltic il-B±
5
nadie que juzgue nuestras acciones. / "Ni11w
.'
Las confesiones, como las promesas. son elementos de la vida amorosa tradicional. :í
Mientras menos nos confesemos seremos más libres: ahí tienen una ecuación ]•·
maravillosa. Si la asumimos, quiere decir que vamos viviendo la vida sin culpa. Ni )t. ·.
estamos atrapadas en la inquisición ni colocamos a nadie en el papel de inquisidor. ;¡l!Ji
Nadie tiene ese derecho ni esa investidura ni esa autoridad . Tampoco nadie ti~ne el :[í!''
conocimiento. Eso de "te conozco como la palma de mi mano" no es cierto. Esa es •ií,,.
una falsedad ideológica que enturbia la posibilidad de vivir el amor de nuevas :ffl
maneras. No permitirnos ser enjuiciadas es una pieza del pacto intrasíquico -;:~
necesario para poder negociar el amor. Y otra pieza en la que tantas feministas han ¡\
insistido: no pedir permiso. No pedimos permiso porque nadie tiene la autoridad para f
permitirnos nada. La única persona que puede autorizarme algo soy yo misma. '
¡¡,
iJ,
.ll ,
97
rr Ji·
. ¡::.
Claves fe1nínistas para la n egociación en el a mor
Ser nosotras nuestra propia autoridad

- .- } ._ n;
....r,:~ •:·
; ~,,,_;;:ilí~~. ·~ Quiero citar a la gran feminista italiana Luisa Muraro, en su maravilloso texto El orden
•·:;,i-i ;l)J;jil" '. simbólico de la madre. Y a Luce lrigaray, feminista francesa. Ellas dos han hecho un arte
h.:'-,'!'~ {
teórico d~~ pensar. Lle~an m~c~os años _tr~bajando en un~ ética feminist_~· en la
. r ~ ,i\Jlll · ; construcc1on de alternativas obJet1vas y subJet1vas para las muieres. Su reflex1on parte
¡,o\,. m:ilil\!I;
:j, de que si no vamos a pedir permiso, Si no vamos a guiarnos por las normas
~r:.:. ((i,í.!"f ,¡: convencionales. entonces. ¿cómo vamos a hacer? Este tema lo han trabajado
..... "< '.
~ ~~~t ;¡¡¡¡ llamándole la construcción de la autoridad femenina.

'. '"
.
_,
. . • •*•fe~:,
~;,.
•~m No se refieren a la autoridad de todas las mujeres, tampoco a la autoridad de

}]!
cualquier tipo de muj~r. Ellas hablan de la autoridad de las mujeres que estamos a
;, 1!;1'.~rJ: favor de las mujeres. Ese es el único requisito. Estas dos feministas trabajan el tema
" "'cllílJ!I!!: de cómo lograr la autonomía subjetiva de las mujeres.
-~ ·~t•:;;.,
·:~~,\., rr■~~m
. e1,., •:I Se plantean que cada mujer necesita construir su propia autoridad interna. debe ser
llh
•tíP\tf±míih ; su propia autoridad. Dicen ellas que nosotras debemos tener internamente el peso
. mrlrr,ll+lilllllll1 { moral para creernos a nosotras mismas. y que esta autoridad personal interna sólo
-·,;-- ::tf•'~\ f
la conseguiremos si vamos estableciendo nuestros propios juicios. definiendo
.:;··· • ni: nuestros valores y afirmando nuestra autoestima. Son tres elementos básicos para
./ ··•:fi-~f, • J
tener autoridad interna y para no buscarla fuera, en otras personas.
En la construcción de la identidad de las mujeres la cultura patriarcal expropia a las

• \, mujeres su propia autoridad para depositar esa autoridad en instituciones o en
: !:
::¡ personas que tengan supremacía sobre ellas. Así, para las mujeres la autoridad
siempre es externa. Es por eso que tantas mujeres dudamos de nuestra opinión , de
•• nuestro juicio, de nuestras interpretaciones y siempre estamos preguntándonos:
"¿ Y yo no estaré equivocada?" Vivimos con una duda permanente sobre nuestra
autoridad personal.
Negociar lo mínimo, negociar lo común

·;;:
'"
E
A . . . •~;•
.. J:tr~ ,, •. _-;
~-•r: ·~:afü· I feminismo actual da mucha importancia a reflexionar, a pensar y a teorizar sobre
... r·
;_
., ..•••
•,-~ '
... ... ,:1:;•,:
. el valor de construir la autoridad interna, la autoridad personal. Y resalta la relevancia

. ,.,·,;1-··
:\f:' 'L: •:f,
¡;' i,
.,.• de construir la autoridad colectiva de las mujeres sabias, que son las mujeres que
,;/¡: •
."/f{
. .·.·-:-:-:-:-:-·-·
. : } •. ¡
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.
~-,.·.·-:-:
•
• ;. "':.:
iL están a favor de las mujeres, las feministas. Esta construcción implica autorizar el
.·n:. feminismo, autorizar los valores que impulsemos, autorizar que se vale imaginar un
i !::
'
mundo distinto, autorizar que cada una pueda tomar su vida en sus manos.
' •
:"."''"
y- .•.♦
. ,
. . :·_;·; Esta es otra clave para la negociación: tomar la propia vida en las manos. Eso
significa la autonomía personal. Autonomía, autoestima, autoafirmación,
autoinstalación ... ¿Por qué tanto "auto", por qué tanto yo? Porque mientras más yo
haya, menos tendremos que negociar. Menos dependeremos de los demás, menos
estaremos en las manos de los demás. Una clave de una buena negociación es
·I)r' reducirla al mínimo.
i¡i:
,¡:;-
¡:..
98
.·:::P."',
Dra. ~4arcela Lagarde ;f/(
l!ifl
A veces pensamos en grandes negociaciones. Pero lo mejor es que en la pareja ',!¡j:
quede lo mínimo por negociar. Pero aun cuando quede lo mínimo. no es lo mismo :ir
negociar empoderadas, autoafirmadas, autoconfiriéndonos derechos. que poniendo en i:1; ..
manos del otro o de la otra nuestros derechos, sentidos y nuestras oportunidades. •íl ;~~¡,· · ,. ·:;~:-"t;,,,.
' ;~~ .. :;:• • ~i'
¿Qué debe ser la materia de la negociación? Lo común. Debemos preguntarnos qué ...
es lo común en la pareja, en qué cosas es preciso decidir conjuntamente y en qué • :• . 1, .
cosas no es preciso. Si tomamos nuestras decisiones y nos autoafirmamos, es claro, •• ''.1' • •• •
que tendremos pocas cosas que decidir en conjunto. Sin embargo, serán : 1 :· • • •
probablemente importantísimas cosas. Sólo que entonces esas cosas\
importantísimas no estarán empañadas por nimiedades ni por decisiones menores. •
Los compromisos de la negociación

L as cosas importantísimas que debemos negociar requieren de decisiones de •" . :1
compromiso. Y requiere de compromiso el tomar esas decisiones. Cuando ¡·

negociamos las cosas importantísimas. hay que entender que ambas partes deben / ;:
resultar beneficiadas. ¡ •
Ambas partes. Y un mínimo código ético es que no se vale el sacrificio de nadie. No \ 1.

es que ya yo no me quiero sacrificar y te pido que tú te sacrifiques. No se vale el ¡/ .~ ,.,,tt'''i'.¡
sacrificio, no se valen las deudas vitales. Ni te debo ni me debes, somos una ¡ ! .
1 - st:T'.
sociedad. O sea. que si hoy terminara nuestra relación. terminaríamos con cuentas : ht-.' •.{ ·,., (r
clarísimas. cada cual se podría ir en paz porque cada día hacemos "corte de caja". i mw~.
Ca~a día. De la misma ma~era ~ue cada día cada una tiene que hacer balance y ¡ lj~r~-~
decirse: estoy en paz conmigo misma. ¡ . :¡¡:
.,.: :.... ,,,
l
:i!ímt
t ;--''
Otra clave muy importante es aprender a enfrentar los conflictos. Porque aún '/ :1 ,.,•.:,i.,~,!/ltfl~.,;.,
cuando logremos una buena negociación en el amor eso no significa que no :!l
tendremos conflictos. Lo que pasa es que si no procedemos como hemos dicho ;W
tendremos muchos más conflictos y serán más difíciles. Pero tenemos que aceptar 'ji ir
que siempre tendremos conflictos. Como siempre tendremos dificultades para vivir, .'. ._;:
carencias, dolores. pérdidas. Siempre estarán con nosotras. • •
Y si después de hacer un buen pacto, se rompe el pacto, tenemos que aceptarlo,

aceptar que se acabó. Un pacto entre dos que reconocen su libertad implica que
cada quien debe reconocer que ha acabado el pacto. si es que así ha ocurrido. Antes
de romper. debemos de analizar bien la situación para tomar nuestras decisiones. ¡¡;"
sabiendo que nunca debemos tomarlas cuando estamos en crisis, en mitad del !!!
conflicto. Esto lo recomiendan todas las sicólogas. todas las chamanas: no se toman :/-
decisiones en momentos de crisis. Las decisiones se toman cuando nos hemos ;!¡
serenado. Lo que sí podemos hacer en la crisis es ir construyendo las condiciones ]l'. ' .
para tomar decisiones. '!;H! .=~:
•
:! •
99
Claves feministas para la n egociación en el an1or
Una mujer moderna del siglo XXI tiene que tener una visión realista de las relaciones.
Y toda relación, aún la más maravillosa. implica conflictos y rupturas. Ser realista
significa reconocer que en toda relación hay diferentes intereses encontrados.
Pero si nos guiamos por el principio de justicia y por el principio de equidad, podremos
definir qué intereses y su realización dañan o afectan u obstaculizan a la pareja en lo
común, y a cada persona en lo individual.
No ponernos en riesgo, salir de la violencia

U n principio fundamental para enfrentar los conflictos es la estética del conflicto.
A lo largo de todo el siglo XX el feminismo ha construido una estética del conflicto.
Esta estética implica que las mujeres tomemos la decisión de no estar dispuestas a
vivir conflictos violentos. Tomar esta decisión implica ser capaces de identificar los
riesgos. Debemos decidir no ponernos en riesgo y actuar en consecuencia: no
,. i¡¡ buscar los riesgos y salirnos de los riesgos en los que estemos. Cuando decidimos
: ¡¡ no ponernos en riesgo, decidimos no ponernos en situación de ser violentadas. Y
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por lo tanto, y aquí entra la estética, nuestros lenguajes no deben ser nunca ni
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.; groseros ni violentos. Pueden ser muy firmes y no ser violentos ni groseros.
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• las relaciones tradicionales, modernas o antiguas, a las mujeres se nos somete con
••. J ~:'. -
violencia. Es un método que entra a funcionar automáticamente para frenar nuestra
rebeldía. La violencia estuvo, está o estará instalada en la vida de todas las mujeres
como consecuencia de la cultura patriarcal.
Poder negociar implica salir del territorio de la violencia. Conocemos la gama de

todos los t ipos de violencia que se ejercen contra nosotras, no vamos a citarlos.
Desde el chantaje, cualquier forma de violencia debe ser para nosotras inadmisible.
Quien está en violencia no negocia, está eliminada como pactante. Admit ir esto y
sacar las consecuencias es una decisión ética fundamental en el pacto intrasíquico.
Ni traicionables ni traidoras
100
....
Dra. ll~arcela Laga rde '
Una de las claves feministas en la negociación es establecer con claridad que \

nosotras no somos traicionables y tampoco somos traidoras. Se trata de una clave ·;¡¡
ética no sólo en una relación de amor, sino en una relación de amistad, de familia, de .:•¡ '
trabajo, y en la participación social y política. • Ji i .

•~; .'~¡_ :..•
:: .~;=: :· ·,
·:1 -'';'lt; .:• :.t
No admitir ser ni traicionables ni traidoras implica entrar en mejores condiciones en i :'fii¡,-P ,;i; _·,,¡; \Ji1i
}f:..;; ..,,
cualquier negociación . Si a una negociación las mujeres entramos temerosas de haber !• . .'.:,,h,><;'
sido traicionadas, ya no hay negociación . Y si vamos a negociar, cómo aceptar que, ) :_.jf'.;. ".:;.· 'i•~·
fuimos traicionadas, no estaremos negociando nada. ' ". • ••. • •
Los triángulos y sus riesgos ·, '.; ~'

.
. ..;;: • :···
A quí cabe hablar del tema de los triángulos. Vale empezar diciendo que en toda :__ .J±i_,::;;~:;;;!~;,¡¡¡:~;·:
relación de amor siempre hay triángulo. Porque aunque haya sólo dos personas, ; •"
siempre existe al menos otra que vive en el imaginario de alguna de ellas. Ya en la °;'- ,,, ,.,,
realidad, hay que admitir que la mayoría de los triángulos amorosos está basada en :i J
una desigualdad . Alguien en el triángulo no conoce del triángulo y esto coloca en /' ;
condiciones de desigualdad a todos. Y convierte en una norma de la relación el 1,: ]r :. ')
engaño. Quien entra a un t riángulo en el que una de las piezas desconoce lo que está : ¡, ..;tt'.'ít ·; ·~ _.,'.1.. ··,
pasando está aceptando ser engañada y, a su vez, está engañando a una congénere. i/.:: -'L ':'"
-= . • ..
_
Y no podemos olvidar cuán fundamental es el affidamento y la sororidad , elementos /· ( : _,~:-~:,1~~
de una ética distinta ent re las mujeres. 1( -~,,..:· ••• ,·
'.t •-',\ :.< . ,>·
.! ;.-. }':,'.'· 1' ' .:,;!
•. ·: ,"" :J: '
Las mujeres tenemos que ponerle un alto a los triángulos. No podemos ser i T';¡i,
cómplices de la destrucción de otras mujeres, no podemos ser vehículo del i !!;/;/µ,":,.
machismo de los hombres, no podemos ser constructoras de supremacía sexual de ~ ' .·i¡;~/W4i~".;
ningún. tip~; Y en los triángulo.s siempre hay elementos de suprema?ía y de!;_ r:/1fi~li.Ñ/J1:',1
subord1nac1on . Una ocupa el pnmer lugar y otra el segundo. Una esta en una :/!;, ··' ,,. ,·!!,,"
i
posición ventajosa en un momento y en otro momento puede caer en desgracia. '"
Los triángulos pueden ser vividos con una gran pasión y pueden llevar a goces inten- f
sos, pero son relaciones basadas en Injusticias, que producen grandes lastimaduras y : : ·::·
conducen a celos enormes . Resultan funcionales al orden patriarcal que fomenta la ; :;i..
1 "
poligamia. Y aun en triángulos entre mujeres, alguien tiene siempre la supremacía y eso ! ;".:
siempre genera situaciones injustas.
,.
Si traicionamos a otra mujer, nos traicionamos ,;¡¡
"!
•: i
•.!¡
t"1 ;:,i,·.
1i.
H ay una relación directa entre triángulos y falta de poderes de las mujeres. Y una
-'·' !::.!:·
relación directa entre triángulos y sobrepoderes de los hombres. Y si no avanzamos

en el enriquecimiento, en el empoderamiento y en la autoafirmación de las mujeres, los )i ,i,.i:·,.
.•. .... u.:,
triángulos van a proliferar cada vez más. Y los cuadrángulos y los poliedros y toda una ::t ~}.
constelación de relaciones injustas.
101
Los triángulos tienen mucho futuro. Si no aceleramos el establecimiento de una ética

amorosa diferente, de una ética sexual distinta, la batalla de la simulación ganará.
" '' ..•. . .
Los triángulos implican simulación, implican exclusión. Y si nosotras no avanzamos
<
r:.
,
) ? g .. > •.
.. ;·•·•·•·•·•·•·•·•··········•·•····, ......~
en hacer la vida confiable y éticamente transparente. los triángulos se prodigarán.
;: ·•;.:.:.\<<·''.: ,~,-.~
,, • • '~:"~·.1
Porque cada vez más mujeres irán quedando en condiciones de ser "triangulables".
Los triángulos benefician mayoritariamente a los hombres. Y los hombres requieren

cada vez de más mujeres para beneficiarse. Porque el número de mujeres que tienen
es una de las condiciones sociales que los prestigia. Y porque cada vez los hombres
obtienen más recursos a través de las mujeres. Y cada vez más y en ciertos ámbitos
los hombres aumentan su impunidad. Sólo por estas condicionantes sociales se puede
prever que en el futuro los triángulos incrementen su número.
Si nosotras no estamos de acuerdo con estas condicionantes sociales de las que

sacan ventaja los hombres, tenemos que construir una gran sororidad entre nosotras,
una ética de apoyo entre las mujeres, una ética de no traición, de no exclusión, una
ética en la que antes que cualquier amor del mundo esté mi respeto por otra mujer.
..
Si así pensáramos y actuáramos, el patriarcado se acaba. Porque el patriarcado se
il
,, . ,i:~, .m' ¡: sostiene en una ideología que hace que las mujeres valoremos por encima de todo
,,,
1
;~~1:+: º la relación de amor con un hombre -aunque no tenga ni mucho futuro ni mucho
, ;~[ti/1{¡··,:,. presente- y no la relación de respeto con nuestra congéneres y nuestra propia
ft!,\J • . .
.......
autoestima de género. Hay que estar claras: una mujer que traiciona a otra mujer se
·.·•·•·•·•·•·•·•·•·•·•·•·•·•·•·•·•·•·•·•·•·~•·······
Y,:'.\ti;;;¡,¡¡á;fi¾..
' . ·: ..;:;i¡ill~N ?,;~'\, está traicionando a sí misma, está traicionando una parte de sí, esa parte que la hace
' • .:,·: '?; i~ ;; '.r:":;¿::
participe de un género subordinado y en desventaja desde hace miles de años.
Una desgastante gimnasia afectiva

H ay todo t ipo de triángulos. Cuando todos saben, pero no se ven. Hay otros con
la triangulación de cuerpo presente. Hay otros. Creo que en todos las relaciones se
complican muchísimo. Si con una persona no podemos, ya con tres o con cuatro ...
Lo menos que podemos decir es que la gimnasia afectiva que hay que hacer en los
.,..,..,, .. triángulos puede ser bastante desgastante.
"'?iii .•
¡fu
•~::'
. s:jJ
1r.
,.. ..
,n.;u~:
!(: ...
Aun en los triángulos en los que los tres saben y nadie está traicionando a nadie,
tl_ /.cir(,_.,_,
''\ siempre existe jerarquía, supremacía. Si entre dos hay jerarquía, entre tres hay
·,~,;\;,;;,~ ·,: tri-jerarquía. Los triángulos complican al extremo las relaciones. En casi todos ellos
·;~jrr;;c' .. ,i\ es fácil descubrir el sello de la omnipotencia y la voracidad de personas que no
• i:%411' ': aceptan que tienen límites incluso para desarrollar bien una sola relación. En casi
,
!: todos los triángulos se hace patente la voracidad masculina, que siempre quiere
,
tener más y más mujeres.
102
·•i.ili¡11l
. ·::mfHJ 1
Dra. Marcela Lagarde i/////fi/

'.: :1•
':¡,.
Durante el siglo XX ha habido muchos intentos de romper el encierro de las parejas ',l
tratando de abrirlas a otros amores. Son búsquedas loables. Un ejemplo son las ,i ~~
llamadas parejas abiertas, asumiendo que hay una pareja con un contrato por un '\!"' .,t4'"· ~-•' ;\ 7
tiempo determinado y otras relaciones eventuales que son válidas y conocidas. \{ _:,~}f.·_. :-::tfü ' t
.:. <: ◊~- ~
•• i·.
'.4_~ ~
'~]f·,·, .. ~
'
.·-· >
,¡.. .~ .•• .::·'"'
•. •·-1'"'
'ff:X::. •• •
: .• :?~''•~,;./
En todos estos casos hay que contar con complicaciones y con implicaciones. Al '. ~,' ;,~
principio, puedes pensar que lo manejas fácilmente y al rato ya estás enamorada y la • • : 0;
otra persona no te quiere como quieres y quiere más a la otra y la atiende más y a una:
le da más tiempo y a otra más recursos. Hay muchos relatos escritos de mujeres y de_
~~--
.-.~)i-
-•~- --~
h
hombres que han vivido relaciones de este tipo, con interesantísimos pros y con _ .
º'l.! ·-~~
.,,-¡,''4
·* ♦: r,..
•
Oó;r,,, ~••• •
;~.i~'-~ ...,. ;,:'¡;
tremendos contras. "?.'.l: > •¿,$,'t°'fof:;,

;t,';,i - ºV'o;*fl>;i
:füll.Al][l; (,0; \j,;'o
:1~~~~ ""~,
1
•• ''.~~-i);~t -'idtt
El triángulo Sartre-Beauvoir-el pintor
H ay un triángulo muy famoso, el que vivieron Simone de Beauvoir, Jean Paul .
!• e
Sartre y un pintor norteamericano. La historia de este triángulo la relata Simone de / ,'

,~ ~
Beauvoir en una obra extraordinaria, autobiográfica, La fuerza de las cosas. Se la \ i

1 ;?. ' . :..• ; •. ; ·. . •. •
recomiendo. Simone de Beauvoir estaba en búsqueda del amor libre, de relaciones i \.·. ',j'll'."••.:,...
.. ::, :\ - . ••
no institucionales y en libertad. Y Sartre y ella decidieron , los dos. tener otras ,,¡ i \.
relaciones además de mantener su pareja. Naturalmente, el que tuvo más relaciones ¡Ji /ht..J.: ;;,."- 1ifü
fuera de la pareja fue Sartre. Ella tuvo una, que relata en este libro, con un pintor. La :1 . \ ~ " ' - .• ..,_"'·
vivió con fascinación . Con él hizo un viaje a Estados Unidos. Fue una de las primeras : ••· '::. •
personas que hizo un vuelo trasatlántico. Voló con su amor a conocer los Estados !;
Unidos. Y como su amor era bohemio, artista , de barrios bajos lumpenizados. pudo !
: ·,· ·-: :¡f::f :r.:· .
también conocer con él ese mundo, tan distinto al suyo. "t" •.•/~'i.[[~-:.:\/
;:;~1?,r,cfia?~¡:J 1<!·;:z; • ,'!\
.
•::,,
~,,;,
•: :,;1,.~¡:~,;.:r:,
. . ·• ... : H
!11
• : 1:
Con esta relación, Simone de Beauvoir ganó un montón de cosas, un amor m:r
:~:¡ .
apasionado. conocer otro mundo. renovarse físicamente, vivir cosas extraordinarias ) ·;:
que no hubiera vivido. La dote con que él llego a esa relación era aquel mundo que ;" ~;Pii"/,.
él conocía y ella no, y los dos lo compartieron. En Estados Unidos los dos vivieron ·: , \ ;/
·~ .·a: • ;.:i:.. •
con artistas. con los músicos de aquella época extraordinaria del jazz. También en ;_ :i.lill:" -,~f
ese viaje de pasión, Simone de Beauvoir se dio a conocer en los Estados Unidos ':,;·,~, "',
dando siete conferencias magistrales, que son el fundamento del feminismo de los
años 60.
El fin del triángulo y el desafío de los celos

e ómo terminó esto, qué pasó? El pintor sabía de la relación de ella con Sartre. . ...
Porque Sartre era inocultable. Y Sartre sabía del pintor. Simone de Beauvoir estaba :¡¡;. ~+-..
encantada. pero el pintor sólo aguantó siete meses siendo el amante, y a los siete
meses dijo: Basta. porque entre tú y yo está siempre Sartre, siempre hablas de
Sartre, y te preguntan y te hacen entrevistas sobre Sartre ...
103
n • ..
Claves feministas para la n egociació n en el amor
Al final, el pintor se cansó de los dos. se sentía un pegoste entre esa pareja, se sabía
secundario a la relación central. que eran ellos dos. Ella también extrañaba mucho a
' . '
;
Sartre, y le escribía y le contaba a su querido amigo, como le decía a Sartre, todo lo
:,·' .• ,,;T .. •
' ...,
!jZ,~,;:
., '
-~--~!'.'
. .. • que hacían los dos. Están publicadas las cartas íntimas de Simone de Beauvoir a
;: .
' '
'
Sartre, en las que le relata todos los conflictos de su búsqueda.
• .!'. ,;:~~.•
También Sartre tuvo un amor con una amiga. Y Simone de Beauvoir, aquella mujer
f' ';;. j¿~_'¡jli.:f '
f
..
.
"'; ✓~fil"\{:
A,.,,, .•.• , ..
:-,,.,:·:,,•-¡
brillante, la gran intelectual, la gran feminista de la época, sufrió unos celos terribles.
¡ <... :
r Iba a un café de París y tenía que aguantarse a la amante de Sartre conversando
" :
?'~
. 1
amorosamente con Sartre, los dos sentados frente ella y ella obligándose a pensar:
'
No pasa nada, qué tiene de malo compartir con ella al amor de mi vida. somos
.. liberadas, etcétera, etcétera. Como muchas mujeres emancipadas y revolucionarias .
ella tuvo que simular que no tenía celos. Porque la moral patriarcal le exige a las
mujeres emancipadas que no sientan celos. En La fuerza de las cosas, Simone de
Beauvoir nos narra su dolor, nos cuenta cómo después de estar en aquel café de
París mirando a Sartre con su amante, tenía crisis profundas y lloraba y lloraba horas
enteras, ella, una mujer que nunca fue vista llorando en público.
Esta pareja se metió en un desafío tremendo. Estaban inventándose algo nuevo

como pioneros públicos, estaban liderando un proceso. Ella nos contó el enorme
costo que había tenido para ella esta innovación. Y también nos contó cómo tuvo
ella, sobre todo ella más que Sartre, que echarle después de aquellas experiencias
audaces muchas ganas a su pareja con Sartre para que subsistiera.
En conclusión, Simone de Beauvoir se benefició muchísimo de la relación con el

pintor, aprendió muchas cosas de la vida y de sí misma. Y nos enseñó muchas cosas
a las demás, cosas que a lo mejor no hubiéramos conocido ni sabido si ella no nos
las hubiera contado. Es un ejemplo. Son formas nuevas de vida. Saquen ustedes sus
conclusiones. No se trata de hacer un análisis de este tipo de relaciones con
moralina, sino de hacerlo con principios éticos de justicia y de equidad.
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..
.,
:;.::
Algo sobre la monogamia
• :O/' •
'.v. ' Yi •.. . •
-•':'.1
1
!,.;;,, • : iW •
'
.,, i~. L
- ..
o mejor es la monogamia? Voy a recordar lo que decía mi más grande maestra
,/1. de etnología, una sueca maravillosa: Lo más conveniente son las monogamias
••• sucesivas. No hablaba inspirada por ninguna ideología moral, sino por la sabiduría de
conocer las reales dificultades que existen para poder manejar las relaciones
• humanas . Y también por ética: porque las relaciones compartidas son generalmente
muy injustas.
No se trata de reivindicar la monogamia, sino de reivindicar relaciones de respeto y

confiables, que es otra cosa. Tal vez llegue el día en que teniendo menos trabajo y más
tiempo libre podamos tener relaciones múltiples y respetuosas con muchos seres
equiparables. Mientras llega ese día, no podemos dejar de tener en cuenta qué
limitado es hoy nuestro tiempo y nuestros recursos de vida.
104
•; i
Dra. Marcela Lagarde ':l,,,s
::! .
;t.; '
Y cada nueva relación en la vida, aunque sea sólo un conocimiento. más si es una '.¡\'
amistad y más si es un amor, implica mucho tiempo, un gran esfuerzo de vida. Antes ::,
;11
de hacer una nueva amistad, siempre me pregunto si puedo sustentarla. Porque yo no ./

tengo una capacidad ilimitada de responder a lo que para mí es atender con cariño y ? r . ,
con amistad a una persona. Mucho menos si se trata de una relación de amor o de :, .~-. •• • • .
•. ·:r. • • • . : ... J~,·
• ; • ••••• i.;... ' •
una pas1on. • . ·=. • ~-- ·,r:!'- • • : •

•·T:
•' .•••... . ,. .:
:
• 1t
;•~·
••
~
• • #P. '
~-
•
Algo sobre la maternidad ·:·:,:/· :-'= __. •••¡...••

L a maternidad y la paternidad son dos experiencias de la sexualidad y de las
relaciones familiares que también tratamos de modificar las feministas. No hee.T,•,;,
profundizado en estos temas porque nuestro taller no estaba centrado en esto. Una_
cosa sí hemos de tener siempre clara: mientras vamos transformando las relaciones de '1!·
pareja. me parece fundamental que cada mujer entienda y asuma que cada hijo que "'!¡p
tiene. lo tiene sola. Que traerlo al mundo es un compromiso personal de vida. Que no \'1 •
se vale el tenerle hijos a los hombres. O el tenerle hijos a una mujer, si la relación es ,:: ..
entre mujeres. No se vale. Y hay muchas historias en que se pretende que esto sí ".
se valga.
.:· •t
:1i
...' .,il: ...1
La maternidad es un compromiso personal de vJda entre nosotras y las criaturas. los./, :;, ' .':· "· •
seres humanos más entrañables de este mundo. Para las feministas. la maternidad \ t
es algo muy serio, nos coloca ante un compromiso ético para toda la vida y para '¡ ·-:·\i'. :-••
todos los días de la vida. Naturalmente. queremos modificar la maternidad en ; ,:;,;.~.;"'
cautiverio. la maternidad esclavizante. la maternidad en la que eres sierva de tus j, .:>.~~~:·:..
hijos y de tus hijas . Y estamos tratando de modificarlo. \ -<:!;:. •
Algo sobre la paternidad

Y qué pasa con la paternidad? También estamos afanadas intentando modificar la
paternidad de los hombres. de forma que también exprese para ellos un compromiso
ji
¡¡ .,;:• w. .
,¡ . •1·• .. :
personal para toda la vida y para todos los días de la vida. Lamentablemente, ·:. -~!iw. ;.:.'¡.::-'~
vivimos en sociedades patriarcales y muchos cambios hacia la modernidad han I¡ ;.:m~l!l;ié!~:_ :·
significado la profundización en la irresponsabilidad de los hombres. Muchas formas \ ·,.... _0,:,.,(1/:
de paternidad forman parte del actual paquete de impunidad que protege a los mrr •~•-.. •
hombres y del que se benefician. Como :)arte de un proyecto democrático de t
mundo. de sociedad, de vida cotidiana. es preciso que responsabilicemos a los )'..1,. ¡,~
.
hombres de sus paternidades. Y si para eso tenemos que cambiar leyes, códigos :¡¡:~,,
penales, la cultura. los valores. lo haremos. Como tantas otras cosas, este cambio ;¡ ::
también depende de nosotras. Porque mientras nosotras seamos madres que .¡¡'. ¡1
asumimos todas las responsabilidades. estamos contribuyendo a que haya padres '.}::1 • ...
que no ·asuman ninguna. Mientras nosotras no exijamos a los hombres una \ i' ---.;E-;
paternidad que sea un compromiso ético. jurídico, económico y amoroso, '\¡¡ :
seguiremos alentando paternidades muy ausentes y muy irresponsables. :Ji,
• •
105
Claves feministas para la negociación en el an1or
-u Un pacto contra los padres irresponsables
.\ • ~ .J :; En la cultura patriarcal. muchos hombres se separan de las mujeres y también de los

'-:.;; . • ;: hijos. Hacen un paquete único. un gineco-grupo. No solamente sienten hostilidad hacia
~-~ ,:i;f.>•m. , . !i' la mujer sino hacia los hijos de esa mujer. En situaciones así. nosotras estamos para
''t·• ~r1>J queremos

1 muchísimo y porque no queremos padres irresponsables. Cuando las
• .,,:
~;_,,.,; • .. 1¡¡ mujeres hagamos un repudio social a los hombres abandonadores, a los padres
•• •• ~M W
... ausentes, cambiarán muchas cosas en este mundo. Pero nuestra tolerancia es
Oi!} increíble, nuestra aceptación de hombres que han abandonado a sus hijos es tan
• !ff grande que contribuimos a acrecentar la ya grande impunidad de los hombres.
Hay todavía muchas mujeres que aman a hombres que no atienden a sus hijos, que
incluso han dañado a sus hijas o a sus hijos, y no los cuestionan. Tenemos que
modificar esta concepción y empezar a exigirle a los hombres expresiones de un
compromiso vital para que sean sujetos de nuestro amor.
Es necesario un gran pacto entre nosotras para repudiar a los hombres que son
incapaces de responsabilizarse de sus propios hijos. Un pacto así es un poder que
las mujeres tenemos que construir colectivamente. Tenemos que poner estos temas
en nuestra agenda política. en el centro de las discusiones culturales y políticas de
nuestro mundo. Desgraciadamente. quienes hoy reivindican con más fuerza
compromisos paternales y de familia son la gente tradicional y de derecha. Y quienes
queremos construir mundos de respeto y dignidad nos quedamos en silencio.
Otra manera de ser hombres y de ser padres

M uy pronto veremos crecer el repudio social a este tipo de personajes.
Necesitamos evidenciarlos. ser firmes. ir a los tribunales. hacer justicia, necesitamos
que se reparen los daños que estos hombres ocasionan . Esta actitud forma parte de
la lógica ética del feminismo.
Forma también parte de esta ética reconocer y apoyar las paternidades buena onda.
Porque hay muchos hombres que son padres magníficos. Necesitamos señalar que
existen. procurar que se vean, conocerlos. y que ellos también asuman el
compromiso de socializar sus formas de paternidad.
Nos re-educamos todos los días. vamos a talleres, a cursos, a seminarios, nos
organizamos. estamos con un compromiso de vida intensísimo. Pero ¿y los hombres?
Ausentes. siempre ausentes. Cada vez más, necesitamos que los hombres se
drganicen para plantearle a la sociedad y a los otros hombres que hay o tras maneras
de ser hombre, que hay otras maneras de ser padres.
106
Dra. Marcela Lagarde --¡
..
Una recomendación:
los grupos de autoconciencia feminista
~ "'
i
N o me gusta hacer recomendaciones. Pero como ya estamos acabarTdo, t
.-<!
permítanme sólo una. Me parece un recurso de vida muy importante para nosotras i .
el integrarnos a un grupo de autoconciencia feminista. A lo largo del siglo XX, los .
grupos de autoconciencia feminista han probado ser un espacio fundamental para ·· \f
el desarrollo de las mujeres. Estos grupos no tienen ni nombre ni bandera. Noj

desfilan, no van a manifestaciones. No tienen programa ni plataforma política. No
son grupos instrumentales para hacer otras cosas. Su condición es ésa: la
autonconciencia feminista. No son grupos ni para hacer caridad ni para la !·
\♦
autocomplacencia. El compromiso es apoyarse para enfrentar la vida, para :;,,

. : '.! ••
desarrollarse, para madurar feministamente. -";"
:!! '
·:• t
• .·t
1~p
Son grupos de vida, grupos de mujeres que están dispuestas a apoyarse, a pensar :
juntas, a innovar. a darse su amistad para así poder ir encontrando cómo acomodar J
las cosas que se nos desacomodan en esta contradicción que vivimos entre :: ,~fi"
tradición y modernidad. Las mujeres necesitamos tener siempre un espacio para \-' ' ;· :tr~~
.· ·,~ ···~- ~·
ha~la: y para escucharn~s con comodidad y lib~rtad. Por eso. mientr~s más :¡; Xít'.,
ch1qu1to sea el grupo, meJor. No son grupos de amigas. Los grupos de amigas se ,· . • • tu~. :<1'
•
hacen por afinidad, porque te quieres y te encuentras. Pero puedes tener grupos de . ,_,_,_ /'il ~• ~
amigas durante años y eso no te mueve nunca tu piso ni te hace moverte de lugar. :, ~ .. /
Muchos grupos de amigas son grupos de consolación. donde nadie trata de cambiar. [ ."
·"·~ · : , .)t.... ,b; •
' ., ,~/,::: •!i* ~::~~
;:,❖: ,;r;:t:.:""S* =:, •;kAf
En el grupo de autoconciencia las mujeres se disponen a darse recursos. a:: • " · · •• • · ,
••••
• •-i:;c!\. • ,...::i\0:r\""""'>/t
❖:~:lh <
,!'
intercambiar ~laves para cambi~r, para avanzar _en la vida en libertad. A vece~ lees, {i:it • ❖• ••*.Jf®%k 3
·:tr:tJOU >Dt,
a veces escnbes. a veces platicas. a veces discutes una novela o vas al cine, al :¡~¡¡¡¡
;;f
teatro o a un concierto. Te reúnes para pensar, para dudar, para reflexionar en esas ií;
cosas que nos conmueven tanto. Es un grupo de acompañamiento, un grupo }
pedagógico. de fortalecimiento de la libertad. Este acompañamiento nos es l
necesario. A diario se nos mueven muchas cosas y no podemos quedarnos sólo '~
• 'l
movidas. Necesitamos asumir con mucha responsabilidad lo que se nos ha movido. •

reflexionar. planificar, llorar lo que no hemos llorado. descargarnos de lo que nos if .)~
pesa. crear condiciones para algo nuevo. Debemos de juntarnos, de asociarnos para :il, ,,
ff'@
)tfrt
H~
reflexionar sobre las cosas personales que nos preocupan entrañablemente. -¡ ¡¡_¡. e;;/
', J.; ,
¡[e
;;ij
Yo no podría vivir sin un grupo de éstos. En mi grupo de ahora empezamos en 1986 y :;''.
somos cinco. Todas somos antropólogas y feministas y sobre todo, somos amigas. j:
Antes. tuve otro grupo que me duró ocho años. Y tuve otro antes. Ayuda, fortalece. no ;~!,
te sientes sola. no estás sola. Casi diría que puedes negociar mejor en la pareja si
simbólicamente estás apoyada por tu grupo y cuentas con su fortaleza. Cuando las
mujeres dejamos de estar aisladas, nos fortalecemos. nos potenciamos.
.
107 .,"
:!
t,.
··'1
•
Hablar, compartir, apoyarnos, acompañarnos

~¡;;;'it. • '.' ~iltl ;: E n los grupos de autoconciencia feminista se trata de hablar, pero no de hablar
'.~fl, :; ir. ·.¡ . ~ intelectualmente, sino afectivam~nte .. son grupos de con:ianza, grupos de pacto. Para
, . . . . Ji f que funcione un grupo de este tipo, tiene que haber confianza, y no porque la esperas
• • .· le interesa lo que ah1 se discute. Hay que cuidar nuestra 1nformac1on. Se trata de
• ..• ,1~1111,¡!J ..
'~*
. f grupos donde es fundamental que cada quien dé muestras de confiabilidad. No son
"'\ ><>• : • J.¡,
¡,. • ·•· ·,:'* .,

~,. .i".'.:· ., .. ,.'~~!·
grupos para regodearnos en la misma visión de las cosas que ya teníamos. Son grupos
•., ........, ··"r 1~;, de estudio: analizas, discutes otras perspectivas. Existe una experiencia muy bonita de
¡ un grupo de éstos, relatada por tres mujeres portuguesas. que se hacen llamar "las
ii' Marías". las tres Marías. Escribieron un libro maravilloso: Las nuevas cartas
'"H•
r:;; portuguesas. Y lo escribieron como tarea de su grupo.
Ellas eran tres mujeres que durante la Revolución de los Claveles en Portugal
~ , üll:@i@ • -el tránsito a la democracia después de la terrible dictadura de Salazar. muy
~I ·•parecida a la de Franco en España- vieron cómo se les movía el mundo, el piso. todo.
~t(J
1
~,,- ;, ¡ En esta época emergió la nueva ola del feminismo en Portugal. En medio de la
~/I:Jjj:f1;¡, \ efervescencia de este proceso político . en medio de reuniones y discusiones. ellas
,·:,,i;r' • ·;;•. • . decidieron que les interesaba hablar de su vida. de ellas mismas. Y empezaron a
. •· reunirse a comer una vez a la semana.
Pronto se dieron cuenta de que lo que discutían era interesante y sintieron ganas de
que no se perdiera. Decidieron entonces seguirse reuniendo para comer, pero se
comprometieron a escribir una carta cada una a las otras dos para leerla juntas
durante la comida. Y no había comida, si no había cartas. El libro recoge el
epistolario de estas tres mujeres revisándolo todo: la relación con la madre, la
sexualidad, el amor, los triángulos. los celos, la política, las ideologías. la fe.
..
La metodología de este grupo fue escribir. A las que les guste escribir, se pueden
reunir en un grupo así. O tros grupos se reúnen a debatir un tema. Por ejemplo, los
celos. Entonces. una estudia a una autora que trabaja los celos, otra lee una novela.
.. otra relata su experiencia. Y así van entrándole a distintos temas, no sólo a los ya
.,
...
t; : ;
vividos, sino a temas nuevos. Siempre sumando recursos. Siempre son parte del
,m:
ii:L análisis del grupo los eventos que cada una vive y quiere compartir con todas. Y si
¡~¡:
,,,~
'•:.,:¡::'
,1 •.•
... no quieres llevar ningún tema propio, aportas sólo tu presencia. En estos grupos no
:i
se pasa lista. no hay acta. tampoco hay tareas.
'
Insolidaridad entre mujeres,
competencia por los hombres
N ecesitamos muchos de estos grupos. Estamos aún muy aisladas. ¿Por qué, a
pesar de compartir experiencias tan parecidas, tan similares. de tanto dolor. las
mujeres nos apoyamos tan poco entre nosotras? Es fácil y complejo explicar la razón.
' 108
• :1
'U'
Dra. Marcela Lagarde :)j"íl¡
:;?
:fü,
La insolidaridad entre las mujeres es una construcción patriarcal. No nos la hemos ·¡¡11~.
...,
inventado nosotras. Ahí no tenemos autoría. Esta insolidaridad forma parte de las :¡fü .
•¡ .·*'·..'*.·. *i
relaciones sociales en las que estamos inmersas. y así como qecimos que en el :¡1
patriarcado hay relaciones de dominación de los ho~bres sobre las ~ujeres, también : ¡.
tenemos que reconocer que hay relaciones de hostilidad entre las muieres. . .... ,.>
n:·, •::~~-1igl
. ill;;f";l(l~i-}f!;)]f
.• ,:>:;r,e1:•~····
· ..:;_·=· '.:\)~ltlijfü:..~1;;.
'·• •"" !l.'f:l-""'':
::♦\~·· !~~!e~;
' •• ·~·'··•••••i/i/... ,,",
:♦ii,:\;<:/:::::.>·.
Estas relaciones de rivalidad y de hostilidad han sido socialmente construidas. Por la ,

subordinación colectiva, por la supremacía de los hombres. y también porque uno de,
los mecanismos de reproducción de las relaciones patriarcales es la competencia·
entre las mujeres. El principio básico de la hostilidad es el de la competencia. que al é+ •¡*-:
lo largo del patriarcado ha sido una competencia de género siempre sexual, Sin } 1itlt:~i:Ji~~~ ··•,t•· ·JI,. ',,, • • • •
capacidad de elegir ni de decidir, las mujeres" estamos siempre compitiendo por los ;: , ('.'ti'; !;;::~·,: ;_~
•;m
hombres, por un hombre. .;¡¡¡ '
'.'.!,.•.! ,,;
.. ·s;•:·.;:·"•·.··
·m ·=~~i ......•
También competimos por un lugar en el mundo. Hay muy poco lugar en el mundo para '); :i"'• '1':l !l l lil~; • • •;.t ,r..:.{Ú } y•;
las mujeres. El lugar para las mujeres es el más restringido de los que existen en el .J :~¾~Ji ·&~~';i!l1~~
! •·.:. •• •\·· /·•)◊;.
mundo. Las mujeres vivimos en un auténtico ghetto. Y cuando alguien vive así compite T !;- /il"
por un espacio muy limitado. Competimos por los bienes, porque la mayoría de las ¡~ ;;.. :;:· : .iil
mujeres casi no tienen bienes. Competimos por los recursos, por las oportunidades. :~•, .111
1
Competimos laboralmente. Las mujeres concentramos todas las competencias ~ "
sociales, sumadas a las competencias de género. Esta competencia despiadada y ~
continua ha generado mucha insolidaridad entre nosotras . •
Una nueva ética entre las mujeres

N o le conviene al patriarcado la solidaridad entre las mujeres. La solidaridad entre ;¡¡~,,
nosotras nos la hemos inventado nosotras. Y ésa sí tiene autoría feminista. Hemos :;in . ·"Júímli:w,,,
SI.do las fem·1n·1stas las que nos hemos planteado como un problem!:I cruc·1al el _·,·~... i.··íi •1..··..•., .;;;cf,,;; 1;,m : :;¡¡¡"',
,,¡.;•:~/ t t~ •.. ,.,... -,e
enfrentar la ·1nso11·dar·1dad entre las mui·eres. Y ponerle remed·10. Este es un .·.".~ . . • ;:,);!iff'i>t
• •••:r,,;::; ;:;:e •
..,* Itvr;g,q\ :
Planteamiento muy reciente. ·~• :.t ;;-/~!(';::;
:•
·•·•·•·:¡1•:
-·•··•··'"
.,
J::::i,1i1•
•. t=w.i'r'
,,:;.:;· \ "n,;'..j
. ,,,, ..... :-, ,); .
.i......., • ·~-
.,,-,·~
La sororidad es el gran aporte del feminismo a la cultura contemporánea, a la cult ura ~-- '.':'\i'.'.:;;;~;ji}I
del nuevo siglo. La sororidad es la última de las grandes pautas del feminismo, que i!t. ·: • • ~Hlii. • •
hoy ya empieza a ser retomada por grupos, movimientos y colectivos que se _J¡ft,.~. -~~{il,f,
plantean establecer una nueva ética entre las mujeres. ,
' .:
En esta nueva ética entre las mujeres no hemos eliminado las causas de
competencia. Sin embargo. y a pesar de que subsisten esas causas, por voluntad y
la
\""•
.
.lfi:
::f ~/:.~.. •. ..
por libertad, decidimos no competir más entre nosotras . Y esta decisión es una
innovación en la cultura y en la convivencia. Y tiene un principio posible, realizable, 'fü1 • ...•·
•,,,
sencillo: para poder crear la sororidad entre las mujeres, basta que por un tiempo. -:¡¡.
por unos años. hasta que se vaya generalizando por todas partes. hasta que ya se )\;
m. .
.. ''.)
nos vuelva costumbre, nos comprometamos a dejar de ser misóginas. Nada más, i? . ¡.;~
!rs• ...
basta eso. ~~:l¡lll~
'.~:f-'tijffi
·:M"'**'*
:g:l .
109 :1-m-s
'!!'1
:!mi~:J•.W.i~· ~- '
·1 ....
'·\ti,·;:.i~~ ir·
Cada mujer se compromete a eliminar su propia misoginia. No sólo se compromete

a señalar cuán insolidarias somos, sino a revisar cuán insolidaria es ella y a construir
-~ I! ' la sororidad. Nosotras somos como las albañilas de la vida: nos hemos dado
.~: ~-- ·;:,.:!~- ~
'.¡ cuenta del problema, ¡pues a cambiar eso, a transformar la vida! Aun sin hacer algo
i,;íiW ~ ·. } a favor de esta nueva ética, basta simplemente con no ser misóginas. Sólo con eso
t
[,it'.-~~ ~¡,:,: '· ya se eliminarían una gran cantidad de injusticias de género y muchísimos daños. La
l
1=~·.;g ~- propuesta p~ra e_s~a etapa es solamente ésa: una ética en pro de la sororidad y para
IJ ••••¡ll l,f ;.; } el1m1nar la m1sog1n1a.
i •
;!!}(~\' .. t ~-
,;r.'ljj
Esta ética se acompaña de una estética, la estética de un buen trato entre nosotras.
De tal manera que vayamos eliminando los malos tratos, la hostilidad, la violencia
-~
:1 .
entre nosotras. Si le pedimos al mundo que respete a las mujeres, asumimos que
,5, somos nosotras las primeras en respetarlas.
' f,¡¡
p;.
Todo esto es posible
::c~.fi~•).,. T enemos mucho que hacer. ¡Sincréticas del mundo, uníos! Hay que reconocer
• "'·'"',·"º·•· · ,; que la mayor parte de las mujeres de nuestro mundo somos la mezcla de lo que fue
1
¡
f y ya no es con lo que está siendo y será. Somos sincréticas. Todas. Es una
condición de las mujeres contemporáneas por la enormidad de cambios que hemos
vivido y seguimos viviendo.
Están bajo nuestros pies las placas tectónicas del terremoto que hemos vivido y que
vivimos. Por eso sentimos la escisión de género. Nos sentimos partidas. Y estamos
., partidas . Necesitamos sacar un hilito, una agujita, un dedal y cosernos finito .
'\- Necesitamos integrarnos internamente, asumir todo lo que somos, dejar de mirar
. ~- .~i unas zonas de nosotras para atender otras .
• r ~,;
n;
;fh
~t::n Por eso es tan importante entrarle a un proceso de autoconciencia, para ir
i:·
11
identificando qué somos, dónde estamos. para descubrir cómo manejamos cada
zona de nuestra vida. En un proceso de autoconciencia hacemos un recorrido de
''.ic >'
inventario. Hacer este repaso nos ayudará a integrarnos y a dejar de sentir temor
> '
cuando se nos sigan moviendo bajo los pies las placas tectónicas.
:it~, • Nos ayudará mucho también saber que estos cambios de los que hablamos no nos
¡ t~· • convocan a vivir una utopía. Las utop~s nos sirven para atrevernos a pensar un
~ ,M mundo diferente.
• i >
r •
Pero lo que planteamos, lo que hemos planteado estos dos días son cosas
realizables en la vida cotidiana, son avances posibles en la vida de cada una.
>
11
•• ' Que nos aliente saber que no hay modelos ni hay plazos. ni hay un tiempo fijado para
. .;;...
' '
llegar a la meta. Sólo nos toca caminar.
~f.'
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La red invisible. Pautas vinculadas al género en las relaciones familiares, Paidós,
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Edición a cargo de: María López Vigil

Para la reproducción total o parcial del contenido de esta edición.

1: Amor e identidad femenina • • • • • • • • • • • • • • • • • • • • • . 11

2: El amor en la cultura occidental • • • • • • • • • • • • • • • • • . .23

3: El amor a partir de la era burguesa . . .. . . .. . .... .. .43

4: Para deconstruir el amor como subordinación y dominio 67

Descargar a la pareja de responsabilidades ..... .. .. .. .............83 .. .. ~ \

Instalarnos nuestra ciudadanía ................. . . . .......... . .... 87 WI

Tener historia propia, llevar contabilidad en la pareja ..... . . . .. . .......89 ..,·

Necesitamos terapeutas feministas y terapias alternativas ..............96 : ,I,

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w.•·•· dr?iW:n,, ,¡,,¡4l ,Y "!ll'q;

Nicaragua, Axunica de 'Lügo, Galicia.y Grupo de Amigas,de Madrid,

Mujeres y hombres aman , y lo hacen de maneras diferentes. con la creencia en la

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_ Amor espiritual, amor carnal: eros, ágape, filía

Dra. lvlarcela Lagarde

El mundo griego: la perfección, la atracción .;

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