Como Hablar y Saludar
Como Hablar y Saludar
Como Hablar y Saludar
o Hablar con seguridad, Expón tus opiniones con convicción. Antes de hablar, debes
asegurarte de creer en realidad en lo que dices, sin importar que sea que el nuevo
álbum de Maluma es estupendo o que la creciente brecha de desigualdad en los
Estados Unidos debe ser la primera preocupación del gobierno. Al expresar una idea,
no debes sonar arrogante, sino como alguien quien realmente cree en lo que dice (en
vez de como alguien que espera cambiar a las demás personas para conseguir su
validación y aprobación).
Todo está en la manera en que lo dices. Si comienzas una oración diciendo "No creo
que…" o "Pero, tal vez…", entonces nada de lo que puedas decir después sonará de
manera tan contundente como lo hubiese sido si apenas lo hubieras dicho.
o Haz contacto visual. Por un lado, hacerlo es de buena educación para las demás
personas. Además, el contacto visual ayudará a las demás personas a escuchar tus
opiniones con cuidado. Busca unos pocos rostros amigables en los que puedas
concentrarte, de esta manera, incrementarás tu confianza mientras hables y
comuniques tu mensaje, incluso con mayor claridad. En cambio, no te verás seguro si
miras al suelo y, si miras hacia otro lugar mientras estés hablando, es posible que las
personas piensen que estás distraído o buscando algo mejor que hacer. Mira a los ojos
a las personas mientras les hables. Para lograr mantener tu equilibrio, puedes desviar
tu mirada por uno o dos segundos, pero, en general, recuerda mantenerte concentrado
en los ojos de las personas a las que les hables.
Si notas que alguna persona luce confundida o preocupada mientras estés hablando,
es posible que incluso pienses si estás siendo o no lo bastante claro. Sin embargo, no
deberías permitir que una persona confundida te desvíe de tu camino.
Si hablas con un grupo numeroso de personas y en el que realmente sea difícil hacer
contacto visual, concéntrate en mirar únicamente a un grupo pequeño de personas del
público.
o ¡Elógiate todos los días! Esto hará que incrementes tu propia confianza, la cual es
importante al hablar. Si tienes más confianza, las personas tomarán tus opiniones de
manera más seria. No debes pensar que eres perfecto para poder elogiarte con
sinceridad, sino sentirte como la persona asombrosa que eres. Recuerda todas las
cosas grandes que has logrado y por las que has trabajado tan duramente. Mírate
frente a un espejo y di al menos tres cosas acerca de ti o haz una lista con todas las
cosas grandes que te hacen ser quien eres.
Si no puedes pensar en alguna cosa por la que querrías elogiarte, entonces necesitarás
trabajar en incrementar tu confianza. Desarrolla tu autoestima concentrándote en algo
en la que seas bueno, enfrentando tus defectos y pasando tiempo con las personas
que en realidad se preocupan por ti y que te hacen sentir bien contigo mismo.
o Utiliza el método rápido para poder hablar mejor. Es probable que a veces debas
hablar en público como parte de tu papel. Aunque esto pueda parecer intimidante, los
beneficios de poder hablar bien pesan más que cualquier temor que sientas. Para
convertirte en un mejor orador, recuerda estos métodos (se les ha mantenido cortos de
manera intencional, para hacerlos fáciles de recordar):
o Planifica adecuadamente.
§ Practica.
§ Interactúa con tu público.
§ Préstale atención al lenguaje corporal.
§ Piensa y habla de forma positiva.
§ Enfrenta tus nervios.
§ Observa las grabaciones de tus discursos. Esto te ayudará a mejorar cada vez
más.
o Conoce el lugar. Llega temprano, camina alrededor del área en la que vas a hablar y
practica utilizando el micrófono y cualquier otra ayuda visual. Sin duda, conocer a lo
que vas a enfrentarte, tener un sentido de dónde vas a estar parado, de cómo va a lucir
el público y de cómo vas a sentirte al moverte mientras hables son cosas que podrán
aliviar tus nervios. Es mucho mejor saber qué es a lo que vas a enfrentarte que llevarte
una gran sorpresa y un golpe a tu confianza el día del gran evento.
Si realmente deseas conocer el lugar, también puedes ir un día antes de tu ponencia
para tener una idea de cómo luce.
o Visualiza tu éxito. Visualízate dando tu discurso. Imagínate hablando con una voz
fuerte, clara y segura. Visualiza a tu público aplaudiéndote, esto aumentará tu
confianza. Cierra tus ojos e imagina la versión más confiada y bienhablada de ti mismo
frente a tu público, deslumbrándolo con tus palabras. Por otro lado, si estás nervioso
por tener que hablar en un entorno social más pequeño, imagínate cautivando a tu
pequeño grupo de amigos con tus palabras. Imaginar el escenario que quieres recrear
puede ayudarte mucho a lograr el éxito
De esta manera, cuando sea tu gran momento, recuerda lo que has visualizado, ¿cómo
puedes llegar allí?
o Conoce a tu público. Conocer a quiénes les hablas puede ayudarte mucho a hablar
con confianza. Si vas a dirigirte a un público numeroso, es importante saber de dónde
vienen, cuáles son sus edades y conocimientos generales sobre tu tema. Esto podrá
ayudarte a elaborar tu discurso como corresponde. Si vas a hablar con un puñado de
personas, conocer tanto como sea posible acerca de ellas (sus creencias políticas,
sentidos del humor, etc.) podrá ayudarte a decir las cosas correctas (y evitar decir las
incorrectas).
Una de las razones por las que las personas se ponen nerviosas mientras hablan es
porque no les agradan los desconocidos. Por esto, debes reunir tanta información como
sea posible acerca de tu público.
Método
• Haz contacto visual. Al hacer contacto con los ojos, demuestras que estás sumergido en
la interacción. El contacto visual es una forma de conectarse con otro ser humano para
demostrarle que tiene toda tu atención. Cuando haces contacto visual, demuestras que
estás abierto al diálogo y te interesa la otra persona. Si no te sientes cómodo mirando a
alguien directamente a los ojos, debes mirar justo entre sus cejas. La persona no notará la
diferencia. Si te encuentras en medio de un grupo, debes hacer contacto visual
periódicamente con los que te rodean.
• Sonríe. Es importante que mantengas una sonrisa sincera y radiante cuando conoces a
una persona nueva. Debes mostrarte genuinamente contento de conocer a la otra persona
y compartir una experiencia positiva que te ayude a sonreír de manera sincera. Además,
debes utilizar la parte superior de tu rostro para crear una sonrisa más genuina y menos
prefabricada.
• Utiliza el lenguaje corporal apropiado. Tu lenguaje corporal debe comunicar que te
sientes seguro y en paz. Párate con la cabeza erguida y la espalda recta. Ten cuidado de
no encorvarte. Refleja el lenguaje corporal de las personas que se encuentran a tu
alrededor. Además, debes reflejar el ritmo de la conversión y el tono de las voces de los
que te rodean para compenetrarte mejor.
Presentarse con una persona
• Di tu nombre. Si te presentas de manera formal, debes decir lo siguiente: "Hola, mi
nombre es (nombre y apellido)". Si lo haces de manera informal, debes decir lo siguiente:
“Hola, me llamo (nombre)”. Inmediatamente después de haber mencionado tu nombre,
debes preguntarle a la otra persona cómo se llama:"¿Cuál es tu nombre?". Debes hacerlo
en un tono agradable. Una vez que la otra persona te responda, repite su nombre
diciendo: "Es un gusto conocerte, Pedro" o "Encantado de conocerte, Carolina". Repetir el
nombre de la persona te ayudará a recordarla y le aportará a la presentación un toque más
personal.
• Ofrece un apretón de manos u otro saludo culturalmente apropiado. En la mayoría de
las culturas, las personas acompañan el saludo con alguna forma de contacto físico. En
los Estados Unidos, a menudo se ofrece un apretón de manos. Asegúrate de que tu
apretón de manos sea breve y no sea demasiado blando (que parezca que no estás
interesado) ni demasiado fuerte (que parezca que vas a romperle la mano a la otra
persona). Conoce las diferentes formalidades de cada cultura. Por ejemplo, en China se
considera grosero apretar las manos con firmeza. A menudo, es más apropiado saludar
con un abrazo, en especial si te acaban de presentar al amigo de un amigo o a un
pariente. Los abrazos muestran una mayor apertura que un apretón de manos. Las
mujeres con más frecuencia que los varones prefieren un abrazo en vez de un apretón de
manos. En muchas culturas, es apropiado saludar con un beso. Por ejemplo, en América
del Sur, debes saludar a las mujeres con un beso en la mejilla; pero en Francia, debes
hacerlo con un beso en cada mejilla. Si no estás seguro de cuál es el saludo apropiado,
debes seguir el ejemplo de la otra persona u observar cómo se saludan las personas a tu
alrededor.
• Formula preguntas. Es importante que muestres interés en la otra persona. Pregúntale
de dónde es, qué hace para ganarse la vida o háblale sobre algún interés que puedan
tener en común. Pregúntale qué es lo que más le gusta hacer y qué es lo que más le
apasiona en la vida. Demuéstrale que estás realmente interesado en lo que tiene que
decirte. Puedes hablar un poco sobre tu vida con el fin de entablar una conversación y
compartir un poco de ti mismo. Una buena estrategia es decirle a la otra persona dónde
trabajas o comentarle que te gusta escalar montañas para dar lugar a más temas de
conversación. No aproveches la oportunidad para hablar solo de ti mismo. Quedarás como
un egoísta poco interesante.
• Termina la conversación. Debes poner fin a la conversación reafirmándole a la otra
persona que fue un gusto haberla conocido. Si la interacción es formal, puedes decir lo
siguiente: "Señora Castro, ha sido un verdadero placer conocerla. Espero que podamos
conversar nuevamente muy pronto". Si tu conversación es informal, puedes decir lo
siguiente: "Fue un gusto conocerte, Harold. Espero que nos veamos pronto".