El Mensaje Del Primer Ángel
El Mensaje Del Primer Ángel
El Mensaje Del Primer Ángel
“OTRO ÁNGEL”
El mensaje del primer ángel comienza con la frase “Vi volar por
en medio del cielo a otro ángel…”. Aunque aparentemente se
trata de mensajeros celestiales entregando estos mensajes
especiales, históricamente se ha reconocido que la
responsabilidad de predicarlos es de los seres humanos. [1] La
palabra griega ἄγγελος, “ángel” significa “mensajero”, “enviado”,
y por lo tanto, aunque se usa primordialmente en el Nuevo
Testamento para identificar a los agentes divinos (cf. Mat 1:20,
24; 2:13, 19; 4:11; 28:2, 5; Hech 5:19; 2 Tes 1:7; 1 Tim 5:21; etc.),
también puede ser utilizada para designar a seres humanos
enviados por Dios (cf. Mat 11:10 “mensajero”; Luc 7:24; 9:52
“mensajeros”; Stg 2:25 “mensajeros”).
EL EVANGELIO ETERNO
EL TEMOR A DIOS
“DADLE GLORIA”
En suma, el mensaje del primer ángel nos lleva aún más allá del
temor reverente a Dios: nos lleva a reconocer nuestra completa
dependencia de Él, y la enorme deuda que tenemos de hacer de
cada obra nuestra un enorme homenaje al Señor que nos ha
dado todo. Debemos recibir esa gloria y reflejarla como acto de
gratitud mediante la fe que obra por el amor.
CUMPLIMIENTO HISTÓRICO-ESCATOLÓGICO
Sin embargo debemos hacer notar que los mensajes de los tres
ángeles son sucesivos, pero no excluyentes. El segundo ángel
no anula ni calla al primero, sino que se le suma. Por lo tanto, en
nuestros días, cuando aún no se consuma el mensaje del tercer
ángel, el primero aún sigue sonando. El mensaje del inicio del
juicio investigador, el llamado a la adoración del Dios Creador,
al retorno de sus siervos a la observancia de los mandamientos
y a la fe de Jesús, es nuestra verdad presente aún. Es la base
para anunciar los mensajes de los ángeles siguientes. Sigue
siendo el evangelio eterno. Por eso el final de Apocalipsis 10 es
el mensaje del primer ángel: profetizar “otra vez sobre muchos
pueblos, naciones, lenguas y reyes”.
Marán atha.
REFERENCIAS
1. Ellen White. ¡Maranata! El Señor viene, 9 de Enero: “La predicación del Evangelio no
ha sido encargada a los ángeles, sino a los hombres. En la dirección de esta obra se han
empleado ángeles santos y ellos tienen a su cargo los grandes movimientos para la
salvación de los hombres; pero la proclamación misma del Evangelio es llevada a cabo
por los siervos de Cristo en la tierra”. ↩︎