Location via proxy:   [ UP ]  
[Report a bug]   [Manage cookies]                

Corona de Adviento en Familia

Descargar como pdf o txt
Descargar como pdf o txt
Está en la página 1de 6

CORONA

DE ADVIENTO

CELEBRACIÓN EN FAMILIA

12 1
LA CORONA DE ADVIENTO Navidad, la liturgia hace que volvamos hacia ellos los ojos,
para entender su misterio y protagonismo.
La palabra “Adviento” viene del latín adventus y María, la Virgen, está en la cima de la expectación. Nadie
significa advenimiento. Es el tiempo propicio para ha vivido un Adviento de nueve meses como ella. Porque era
convertirse, suscitar esperanza y anunciar la liberación sencilla como la luz, clara como el agua, pura como la nieve
salvadora de Dios. Es tiempo, además, de vigilancia ante lo y dócil como una esclava, concibió en su seno a la Palabra.
que esperamos, que es el retorno de Cristo en la plenitud de Cuando nada parece haber cambiado por las colinas de
su reino. Por ello, en el adviento se habla de “dos venidas”, Galilea, María sabe que ha cambiado todo, que Jesús viene.
la histórica en la encarnación por medio de María (navidad)
y la escatológica al final de los tiempos (parusía). Es la joven madre que aprende a amar a su hijo sintiéndolo
Una costumbre significativa y de gran ayuda para crecer dentro de sí. Lleva a Jesús para darlo al mundo, que
vivir este tiempo es “la corona de adviento”, que es el primer lo sigue esperando sin saberlo, porque la mayor parte de los
anuncio de Navidad. hombres no le conocen todavía. En el amor de la Madre se
manifiesta la ternura humana del Hijo. Solamente se puede
La corona de adviento encuentra sus raíces en las esperar a Jesús cerca de María. Jesús está ya donde está
costumbres pre-cristianas de los germanos germánicas. ella.
Durante el frío y la oscuridad de diciembre, colectaban
coronas de ramas verdes y encendían fuegos como señal de Para celebrar la Navidad, hay que agruparse alrededor de
esperanza en la venida de la primavera. Pero la corona de la Virgen. Ella, que no tenía recovecos ni trasfondos oscuros
adviento no representa una concesión al paganismo sino, al de pecado, porque era inmaculada, callada y
contrario, es un ejemplo de la cristianización de la cultura. Lo silenciosamente siempre nos entrega al Hijo.
viejo ahora toma un nuevo y pleno contenido en Cristo, Él
vino para hacer nuevas todas las cosas. III.– Encendido de la Vela
La corona de adviento encierra una serie de Al tiempo que se inicia la oración se enciende la cuarta vela.
simbolismos.
La forma circular Guía: La presencia del Señor Jesús entre nosotros nos llena
El círculo no tiene principio ni fin. Es señal del amor de de gozo y alegría. Es la Madre quien nos lo hace cercano,
Dios que es eterno, sin principio y sin fin, y también de quien permite que esa Luz llegue a nosotros e ilumine nuestra
nuestro amor a Dios y al prójimo que nunca debe de vida. En compañía de Santa María encendamos la última
terminar. vela de nuestra corona de Adviento.
Las ramas verdes IV.– Ritos Conclusivos
Verde es el color de esperanza y vida. Dios quiere
que esperemos su gracia, el perdón de los pecados y la Guía: Alegres porque pronto nacerá nuestro Redentor,
gloria eterna al final de nuestras vidas. El anhelo más cantamos: Padre Nuestro...
importante en nuestras vidas debe ser llegar a una unión más Guía: El Señor nos bendiga, nos guarde de todo mal y nos
estrecha con Dios, nuestro Padre. lleve a la vida eterna.
Las velas Todos: Amén.
Nos hacen pensar en la obscuridad provocada por el Se entona un canto propio de Adviento.

2 11
CUARTO DOMINGO (Del Anuncio) pecado que ciega al hombre y lo aleja de Dios. Después de
Se entona un canto propio de Adviento. La primera, segunda y la primera caída del hombre, Dios fue dando poco a poco
tercera vela deberán estar encendidas. una esperanza de salvación que iluminó todo el universo
como las velas la corona. Así como las tinieblas se disipan con
I.– Ritos Iniciales cada vela que encendemos, los siglos se fueron iluminando
con la cada vez más cercana llegada de Cristo a nuestro
Guía: En el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo. mundo. Son cuatro velas las que se ponen en la corona y se
Guía: Reconozcamos sinceramente nuestros pecados (silencio) prenden de una en una, durante los cuatro domingos de
adviento al hacer la oración en familia. (Hay algunas coronas
Todos: Yo confieso ante Dios todopoderoso…..
que tienen cinco velas, la última la encienden en Navidad).
Guía: Dios todopoderoso tenga misericordia de nosotros,
perdone nuestros pecados y nos lleve a la vida eterna. ESQUEMA DE ORACIÓN AL ENCENDER
LAS VELAS DE LA CORONA DE ADVIENTO
II.– Liturgia de la Palabra
Si no se puede llevar la corona a la Iglesia para que
Leer el Evangelio según San Mateo 1, 18-24 el Sacerdote la bendiga, se puede hacer la bendición en
familia con la siguiente oración:
Cristo vino al mundo de la siguiente manera: Estando María,
su madre, desposada con José, y antes de que vivieran Señor Dios, bendice con tu poder nuestra corona de adviento
juntos, sucedió que ella, por obra del Espíritu Santo, estaba para que, al encenderla, despierte en nosotros el deseo de
esperando un hijo. José, su esposo, que era hombre justo, no esperar la venida de Cristo practicando las buenas obras, y
queriendo ponerla en evidencia, pensó dejarla en secreto. para que así, cuando Él llegue, Seamos admitidos al Reino de
los Cielos. Te lo pedimos por Cristo nuestro Señor.
Mientras pensaba en estas cosas, un ángel del Señor le dijo Todos: Amén.
en sueños: "José, hijo de David, no dudes en recibir en tu casa
a María, tu esposa, porque ella ha concebido por obra del PRIMER DOMINGO (De la Espera)
Espíritu Santo. Dará a luz un hijo y tú le pondrás el nombre
de Jesús, porque él salvará a su pueblo de sus pecados". Se entona un canto propio de Adviento.

Todo esto sucedió para que se cumpliera lo que había dicho I.– Ritos Iniciales
el Señor por boca del profeta Isaías: He aquí que la virgen
concebirá y dará a luz un hijo, a quien pondrán el nombre Guía: En el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo.
de Emmanuel, que quiere decir Dios-con-nosotros. Cuando Guía: Reconozcamos ante Dios que somos pecadores. (silencio)
José despertó de aquel sueño, hizo lo que le había mandado
el ángel del Señor y recibió a su esposa. Todos: Yo confieso ante Dios todopoderoso...
(Breve Pausa para meditar) II.– Liturgia de la Palabra
Guía: Adviento María y José son la primera pequeña Iglesia, Leer el Evangelio según San Mateo 24, 37-44
que da a luz al primer hijo del Reino de los cielos. Por eso, en
este cuarto domingo de Adviento, cuando casi tocamos ya la En aquel tiempo, Jesús dijo a sus discípulos: «Así como sucedió
en tiempos de Noé, así también sucederá cuando venga el
10 3
Hijo de hombre. Antes del diluvio, la gente comía, bebía y se La respuesta de Jesús es convincente. Le explica las señales
cansaba, hasta el día en que Noé entró en el arca. Y cuando del Reino, como anunciaron los profetas. Ya han empezado a
menos lo esperaban, sobrevino el diluvio y se llevó a todos. cumplirse. Pero de otra manera a como espera Juan: el Reino
Lo mismo sucederá cuando venga el Hijo del hombre. es una semilla pequeña, un fermento escondido. El Mesías
Entonces, de dos hombres que están en el campo, uno será actúa desde dentro.
llevado y el otro será dejado; de dos mujeres que estén
juntas moliendo trigo, una será tomada y la otra dejada. Esta respuesta fue un rayo de luz en la noche de Juan. El
estaba acostumbrado a interpretar los signos desde el seno
Velen pues, y estén preparados, porque no saben qué día va de su madre o en el Jordán. Sentía enseguida la presencia
a venir su Señor. Tengan por cierto que si un padre de de lo divino. Jesús hará de él cumplido elogio. Y lo mejor que
familia supiera a qué hora va a venir el ladrón, estaría hizo fue callar a tiempo, para que hablara la Palabra.
vigilando y no dejaría que se le metiera por un boquete en
Y no extrañarse que también nosotros podamos dudar sobre
su casa. También ustedes estén preparados, porque a la
la presencia de Dios en nuestra vida o de Cristo en la Iglesia.
hora que menos lo piensen, vendrá el Hijo del hombre».
Habrá que orar, dialogar y estar atentos a los signos.
(Breve Pausa para meditar)
III.– Encendido de la Vela
Guía: Caminamos irreversiblemente hacia el encuentro
definitivo con Cristo en la eternidad. No sabemos el día ni la Al tiempo que se inicia la oración se enciende la tercer vela.
hora. Solo la fe vigilante y la fidelidad permanente pueden Guía: En las tinieblas se encendió una luz, en el desierto
hacer nuestras vidas dignas de salvación eterna. La realidad clamó una voz. Se anuncia la buena noticia: ¡El Señor va a
cotidiana con su monotonía exasperante nos adormece. A llegar! ¡Preparen sus caminos, porque ya se acerca! Adornen
nuestro alrededor hay acontecimientos difíciles: guerras, su alma como una novia se engalana el día de su boda. ¡Ya
violencias, injusticias, etc. A todo nos acostumbramos. Existe llega el mensajero!. Juan Bautista no es la luz, sino el que nos
quien responde y quien se calla, quien se esfuerza y quien se anuncia la luz.
abandona. San Juan Crisóstomo llama aquí a la vigilancia Cuando encendemos esta tercer vela, cada uno de
esperanzada: nosotros quiere ser antorcha tuya para que brilles, llama
para que calientes. ¡Ven, Señor, a salvarnos, envuélvenos en
“En medio de la oscuridad no puedes distinguir al amigo del
tu luz, enciéndenos en tu amor!
enemigo. No distinguimos de noche los metales preciosos de
las meras piedras. Del mismo modo, el avaro y el licencioso
IV.– Ritos Conclusivos
no distinguen la verdad y el valor de la virtud”.
Guía: Llenos de Alegría por ser Hijos de Dios, cantamos:
III.– Encendido de la Vela Padre Nuestro...
Al tiempo que se inicia la oración se enciende la primer vela.
Guía: El Señor nos bendiga, nos guarde de todo mal y nos
Guía: Encendemos, Señor, esta luz, como aquel que enciende lleve a la vida eterna.
su lámpara para salir, en la noche, al encuentro del amigo Todos: Amén.
que ya viene. En esta primera semana de Adviento queremos
levantarnos para esperarte preparados, para recibirte con Se entona un canto propio de Adviento.
alegría. Muchas sombras nos envuelven. Muchos halagos nos

4 9
Todos: Señor, ten piedad. adormecen. Queremos estar despiertos y vigilantes, porque
Guía: Dios todopoderoso tenga misericordia de nosotros, tú traes la luz más clara, la paz más profunda y la alegría
perdone nuestros pecados y nos lleve a la vida eterna. más verdadera. ¡Ven, Señor Jesús! ¡Ven, Señor Jesús!
Todos: Amén.
IV.– Ritos Conclusivos
II.– Liturgia de la Palabra Guía: Unidos en una sola voz digamos: Padre Nuestro...
Leer el Evangelio según San Mateo 11, 2-11 Guía: El Señor nos bendiga, nos guarde de todo mal y nos
lleve a la vida eterna.
En aquel tiempo, Juan se encontraba en la cárcel, y habiendo Todos: Amén.
oído hablar de las obras de Cristo, le mandó preguntar por Se entona un canto propio de Adviento.
medio de dos discípulos: «¿Eres tú el que ha de venir o
tenemos que esperar a otro?». SEGUNDO DOMINGO (De la Conversión)
Jesús les respondió: «Vayan a contar a Juan lo que están Se entona un canto propio de Adviento. La primera vela deberá
viendo y oyendo: los ciegos ven, los cojos andan, los leprosos estar encendida.
quedan limpios de la lepra, los sordos oyen, los muertos
resucitan y a los pobres se les anuncia el Evangelio. Dichoso I.– Ritos Iniciales
aquel que no se sienta defraudado por mí». Guía: Dios mío, ven en mi auxilio.
Cuando se fueron los discípulos, Jesús se puso a hablar a la Todos: Señor, date prisa en socorrerme.
gente acerca de Juan: «¿Qué fueron ustedes a ver en el Gloria al Padre y al Hijo y al Espíritu Santo como era en el
desierto? ¿Una caña sacudida por el viento? No. Pues principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén.
entonces, ¿qué fueron a ver? ¿A un hombre lujosamente Guía: Reconozcamos sinceramente nuestros pecados (silencio)
vestido? No, ya que los que visten con lujo habitan en los Guía: Señor, ten misericordia de nosotros.
palacios. ¿A qué fueron, pues? ¿A ver a un profeta? Sí, yo se
lo aseguro; y a uno que es todavía más que profeta. Porque Todos: Porque hemos pecado contra ti.
de él está escrito: He aquí que yo envío a mi mensajero para Guía: Muéstranos, Señor , tu misericordia.
que vaya delante de ti y te prepare el camino. Yo les Todos: Y danos tu salvación.
aseguro que no ha surgido entre los hijos de una mujer
ninguno más grande que Juan el Bautista. Sin embargo, el II.– Liturgia de la Palabra
más pequeño en el Reino de los cielos, es todavía más
grande que él». Leer el Evangelio según San Mateo 3, 1-12
(Breve Pausa para meditar)
En aquel tiempo, comenzó Juan el Bautista a predicar en el
Guía: Juan, el gran profeta, estando en la cárcel, entró en desierto de Judea, diciendo: «Arrepiéntanse, porque el Reino
crisis, como si también se pusiera nervioso. ¿Qué pasa con el de los cielos está cerca». Juan es aquel de quien el profeta
Mesías? ¿Será el que yo bauticé en el Jordán? Pero no Isaías hablaba, cuando dijo: ‘Una voz clama en el desierto:
parece dar señales. Todo sigue igual. No hay Preparen el camino del Señor, enderecen sus senderos’.
manifestaciones gloriosas, ni castigos ejemplares. Ni siquiera
mueve un dedo para sacarme de la cárcel. Juan usaba una túnica de pelo de camello, ceñida con un
8 5
cinturón de cuero, y se alimentaba de saltamontes y de miel III.– Encendido de la Vela
silvestre. Acudían a oírlo los habitantes de Jerusalén, de toda
Judea y de toda la región cercana al Jordán; confesaban sus Al tiempo que se inicia la oración se enciende la segunda vela.
pecados y él los bautizaba en el río.
Guía: Los profetas mantenían encendida la esperanza de
Al ver que muchos fariseos y saduceos iban a que los Israel. Nosotros, como un símbolo, encendemos estas dos
bautizara, les dijo: «Raza de víboras, ¿quién les ha dicho que velas. El viejo tronco está rebrotando se estremece porque
podrán escapar al castigo que les aguarda? Hagan ver con Dios se ha sembrado en nuestra carne.
obras su arrepentimiento y no se hagan ilusiones pensando
que tienen por padre a Abraham, porque yo les aseguro que Que cada uno de nosotros, Señor, te abra su vida para que
hasta de estas piedras puede Dios sacar hijos de Abraham. brotes, para que florezcas, para que nazcas y mantengas en
nuestro corazón encendida la esperanza. ¡Ven pronto, Señor!
Ya el hacha está puesta a la raíz de los árboles, y todo ¡Ven, Salvador!
árbol que no dé fruto, será cortado y arrojado al fuego».
IV.– Ritos Conclusivos
Yo los bautizo con agua, en señal de que ustedes se han
arrepentido; pero el que viene después de mí, es más fuerte Guia: Como Hijos que somos de Dios, Cantemos la oración
que yo, y yo ni siquiera soy digno de quitarle las sandalias. que el mismo Cristo nos enseñó: Padre Nuestro...
Él los bautizará en el Espíritu Santo y su fuego. Él tiene el Guía: El Señor nos bendiga, nos guarde de todo mal y nos
bieldo en su mano para separar el trigo de la paja. lleve a la vida eterna.
Guardará el trigo en su granero y quemará la paja en un Todos: Amén.
fuego que no se extingue».
(Breve Pausa para meditar) Se entona un canto propio de Adviento.

Guía: A una presencia de Cristo más intensa en nosotros solo TERCER DOMINGO (De la Acogida, Gaudete)
es posible llegar por una renovación radical de nuestro ser Se entona un canto propio de Adviento. La primera y segunda
interior y de nuestra conducta exterior. Comenta San Agustín: vela deberán estar encendidas.
“Reciba, pues, cada uno con prudencia las amonestaciones
del preceptor, para no desaprovechar el tiempo de la I.– Ritos Iniciales
misericordia del Salvador que se otorga en esta época de
Guía: En el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo.
perdón para el género humano. Al hombre se le perdona
para que se convierta y no haya nadie a quien condenar. Guía: Reconozcamos sinceramente nuestros pecados (silencio)
Dios verá cuándo ha de llegar el fin del mundo; ahora, por Guía: Tú que has sido enviado a sanar los corazones
de pronto, es el tiempo de la fe” (Sermón 109, 1). afligidos:
Todos: Señor, ten piedad.
La conversión supone que nos hemos desviado. Hemos de
cambiar de actitud, de mentalidad. Testigos de la necesidad Guía: Tú que has venido a llamar a los pecadores:
que todo hombre tiene de Cristo, nuestra conducta ha de ser Todos: Cristo, ten piedad.
tal que vaya abriendo los corazones al misterio de Cristo Guía: Tú que estás sentado a la derecha del Padre
Salvador. para interceder por nosotros:

6 7

También podría gustarte